La Modulación Diatónica

15
Modulación diatónica (andándonos por las ramas) 1º Armonía Profesor: Fernando Augusto Andreo Antón

Transcript of La Modulación Diatónica

Page 1: La Modulación Diatónica

Modulación diatónica(andándonos por las ramas)

1º ArmoníaProfesor: Fernando Augusto Andreo Antón

Page 2: La Modulación Diatónica

1. Fundamentos

La modulación diatónica se basa en utilizar como medio principal de transición entre una tonalidad y otra, un acorde (o varios) “pivote” que pertenece a ambas tonalidades, desarrollando, evidentemente, un papel diferente en cada una.Por naturaleza es el método más suave de realizar el cambio y quizá por ello, el tipo de modulación más común.

Page 3: La Modulación Diatónica

2. MetodologíaPor lo general, lo que suele hacerse para aplicar (o reconocer) este tipo de modulación en la práctica armónica, requiriendo apenas un mínimo de práctica, es calcular las posibilidades de forma mental, según el caso concreto que se nos presente. Esto generalmente funciona bien y suele estar directamente relacionado con la veteranía del realizador.Lo que proponemos aquí es hacer uso de los árboles armónicos, es decir, de los esquemas de las tonalidades, para comparándolos, obtener un resultado sistemático y exhaustivo. De la comparación deduciremos una serie de posibilidades –acordes- que clasificaremos en función de las cualidades de modulación que les atribuyamos –más abrupta, más fuerte, etc.-.De esta forma no escogeremos de manera casual o arbitraria, la manera de modular, sino tras haber barajado todo el índice de posibilidades que teníamos, haberlas estudiado y actuando en consecuencia a lo que expresiva y estructuralmente creíamos más conveniente para ese punto del discurso armónico.

Page 4: La Modulación Diatónica

2.1 Aplicación a un caso prácticoEl ejemplo que vamos a analizar sería las posibilidades de modulación diatónica desde un modo menor (sol m) a su relativo mayor (Si b M). Un caso muy frecuente, bastante útil y que nos permitirá observar también una catalogación bastante completa de acordes pivote.Esta catalogación, derivada del concepto de árbol y, por tanto, de su visión bipartita de la tonalidad, se estipula en cuatro apartados:1)Una Dominante que es también Dominante en la tonalidad destino (D1 = D2).2)Una No Dominante que es Dominante en la tonalidad destino (ST1= D2).3)Una Dominante en la tonalidad original que es No Dominante en la de destino (D1 = ST2).4)Una No Dominante en la tonalidad original que sigue siendo No Dominante en la tonalidad destino (ST1 = ST2).Veremos, a continuación, cada apartado, según sus atributos, en el ejemplo concreto, pero antes repasemos los árboles tonales de sol m y Si b M.

Page 5: La Modulación Diatónica

Siendo los árboles tonales los siguientes:

Sol m

Sib M

Page 6: La Modulación Diatónica

2.2 Dominante1 = Dominante2

Para poder hablar de un cambio de tonalidad, lo imprescindible es establecer el diálogo

Dominante – Tónicaen esa tonalidad; de esta forma, si el paso es a través de la reinterpretación de un acorde de Dominante en otro, será un proceso rápido y fácil de entender, puesto que el acorde conservará su grado de tensión en ambas lecturas.Este tipo de modulación es el más suave, el que menos costará al oído, pero también, el que menos definirá el cambio de tonalidad, ya que es posible que, si no se reafirma, la nueva tónica apenas se entienda como un enlace roto de la Tonalidad precedente.

Page 7: La Modulación Diatónica

Comparamos pues los árboles de Dominante de sol m a Si b M:Dominante Sol m

Dominante Si b M

Lo primero que debemos tener en cuenta es que, para poder establecer cualquier comparación que implique un árbol de Dominante cualesquiera, requerirá la presencia en el otro árbol de comparación, de su sensible. En este caso, las Dominantes de ambas Tonalidades deben estar presentes, respectivamente en el otro árbol. Dado que el fa # no está en el árbol de Dominante de Si b M, no podemos desarrollar este apartado.

Page 8: La Modulación Diatónica

2.3 subdominante-tónica1 = Dominante2

Este tipo de modulación diatónica es también muy rápida, y algo más determinante que la anterior, si bien, dependiendo del caso concreto, podría requerir de una reafirmación de la tonalidad destino, para su verdadero asentimiento. Según se trate de un grado que esté más o menos presente en la tonalidad de partida, podrá entenderse como un punto de inflexión más o menos claro.

Page 9: La Modulación Diatónica

Comparamos pues el árbol de Subdominante-Tónica de Sol m y el de Dominante de Si b M:

sub – tón Sol m

Dominante Si b M

Nuevamente, hemos de empezar buscando la sensible del árbol de Dominante en el otro.Después, con las notas comunes, nos damos cuenta de que podemos formar:

Sol m iidis iidis7

=SibM viidis 7ª de sensible

Page 10: La Modulación Diatónica

2. 4 Dominante1 = Subdominante-Tónica2

Éste es un método más definitivo, en tanto que más elaborado y menos suave, de definir una tonalidad nueva. Como decíamos antes, tras este acorde pivote, No Dominante de la nueva tonalidad, debe haber una progresión Dominante - Tónica para completar la transición. Por lo tanto este es un proceso más largo que los dos anteriores ya que requiere tres acordes. Para hacer el paso más suave, se podría hacer uso de alguna de las Dominantes del nuevo tono que servían como acordes pivote en los anteriores dos apartados, de forma que habría dos acordes pivote.

Page 11: La Modulación Diatónica

Comparemos pues los árboles que corresponden

Dominante Sol m

Sub – Tón Si b M

Primero buscamos la sensible en el otro árbol. Como no aparece ningún fa # en el árbol de Subdominante-Tónica de Si b M, este apartado quedará vacío, ya que no se puede formar ningún acorde pivote que pueda ser Dominante de Sol m.

Page 12: La Modulación Diatónica

2.5 subdominante-tónica1 = Subdominante-Tónica2

Este apartado suele ser el más abundante ya que no posee condiciones restrictivas (como los otros tres que implican dominantes). Dentro de esta categoría se dan los casos de modulación más definidos y por tanto, más rotundos. Como en el caso anterior, dependerá de qué acordes son los implicados y qué papel desempeñan a lo largo de la composición, el que sea más o menos impredecible la modulación, según se usen acordes menos o más destacados de la tonalidad de partida. Y de la misma forma que antes, si se utilizara después una Dominante del nuevo tono que fuera un acorde existente en el tono anterior, sería más accesible el tránsito.

Page 13: La Modulación Diatónica

Observamos los árboles y sus notas comunes.

sub – tón Sol m

Sub – Tón Si b M

Por lo tanto los posibles acordes pivote serían:Sol miv* IV<* VI* vidis* i =Si b M ii* DD* IV* Dddis* vi

(Nota: el uso de minúsculas/mayúsculas indica acorde menor/mayor; < indica uso de la escala melódica, dis que es un tríada disminuido y el * que podrían llevar una séptima y seguirían siendo acorde común.)

Page 14: La Modulación Diatónica

2.6 Acopio e interpretación de resultados 1) D1 = D2 2) st1 = D2 3)D1 = ST2 4)st1 = ST2

Solm No hay. No hay.

SibM No hay. No hay.

Normalmente en un ejercicio hay varios puntos en los que se puede establecer la transición, según las condiciones de ese punto habría que escoger uno u otro apartado, y uno u otro acorde. Por ejemplo, si el punto escogido, tuviera que ser en una nota concreta (algo poco frecuente) tendríamos que eliminar todos los acordes (o incluso apartados) inviables por carecer de esa nota.

En cualquier caso, debemos recordar que debemos tomar el acorde en función de la tonalidad destino, es decir, con las notas tendenciales y movimientos propios en ese ámbito.

Page 15: La Modulación Diatónica

3. Consideraciones finalesComo hemos podido ver, aunque el proceso de trabajo con los árboles puede parecer algo lento estando poco familiarizado con ellos, es un método muy fructífero que con algo de práctica resultará incluso sencillo. Por otra parte, en esta explicación hemos trabajado apenas con los acordes diatónicos propios de los modos Mayor y menor; hemos de tener en cuenta el ingente aumento de posibilidades que se producirá tan pronto como consideremos también los acordes cromáticos y los árboles crezcan abundantemente. Entonces –y aún sin llegar a las posibilidades de la enharmonía- sí que podrá valorarse en su medida la fertilidad de este modo de análisis y organización de las posibilidades modulatorias.