LA MANDRAGORA Nº 3 - AÑO 7 #77

El sueño de la razón produce monstruos

La Mandragoradel «LEÓN FELIPE»

Año VII ~ Nº 3 (Diciembre, 2006) [#77]http://centros5.pntic.mec.es/ies.leon.felipe2/mandrago/index.html

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~~~~~~~~~~~~~~~~ Revista de información, debate y creatividad ~~~~~~~~~~~~~

Pág. 1I. E. S. León Felipe – Benavente

La Mandr agora Año V I I ~ Nº 3 ~ D ic i embre / 2006 [ # 7 7 ]

Pág. 2 http://centros5.pntic.mec.es/ies.leon.felipe2 I. E. S. León Felipe – Benavente

Pág.1 ~ PORTADA

Fosforescencias, por José Guerrero

2 ~ LA VIDALa vida como proyecto, por Ángela Pardal

López

3 ~ CREACIÓN LITERARIAEsperando la primavera, por Laura Martínez

Pintado

4 y 5~ LIBROS + Libros = + Libres

6 y 7~ B.M.M. y LEYENDA B.M.M. / La leyenda del Lago de Sanabria

8 y 9 ~ DIBUJO, GRAFFITI, POESÍApor Carmen Cadierno, VitiM, Mario Benedetti,

The RyL

10 y 11 ~ CREACIÓN LITERARIAMi círculo perfecto (Cap. 2), por Camino Rivera

12 y 13 ~ FRIEDRICH NIETZSCHEDos textos, un hombre, por Salustiano Fdez.

14 y 15 ~ CINE, RELATO, GRAFFITIEstrenos de Cine / Muñecas de porcelana, por

Mystic Lady / Graffiti, por Pilar Mielgo

16 y 17 ~ CREACIÓN LITERARIAVidas cruzadas (Capítulo 3), por Marta Hernando

18 y 19~ JUEGO DE MESA, ÁFRICAMagic (un juego de mesa) por Reaper / Astérix

en Somalia (II), por M.A.F.

20 y 21~ DIARIO Y DIBUJOSDiario de una aburrida, Anónimo / Dibujos por

Paula Rodríguez y Soraya Pedrero

22 ~ DESDE EL DEL -Heavy Metal: Europe y Saratoga, por Iván

García-II Olimpiada Filosófica de Castilla y León

23 ~ AGENDA, FELICITACIÓN, HUMOR...Humor, por Quino / Agenda de actividades

extraescolares / Felicitación: Dibujo de Watanabe, texto de E. de Andrade, traducción de Ángel Campos, selección y realización de Salustiano Fdez.

24 ~ CONTRAPORTADADibujo, por Pilar Mielgo

SUMARIO

Las opiniones publicadas en La Mandrágora son exclusivamente de sus respectivos autores

LA VIDA...

REVISTA LA MANDRÁGORA DEL «LEÓN FELIPE»

DIRECCIÓN: Salustiano Fernández

REDACCIÓN/COLABORADORES: Estela Astorga, Sara Blanco, Cristina Cabero, Carmen

Cadierno, María Cadierno, Isidro García, Iván García,

Marite García, Emilio Grande, Marta Hernando, Ubaldo

Hidalgo, Lady of the Artic, Hellen de León, Emperatriz

Losada, Laura Martínez Pintado, Tomás-Néstor Martínez,

Pilar Mielgo, Soraya Pedrero, Beatriz Rabanales, Camino

Rivera, Ester Rodero, Marta Rodero, Paula Rodríguez, Ana

Sánchez, Miguel Ángel Sanz, Nuria Vizán...

IMPRIME: Gráficas CUBICHI

EDITA: I.E.S. León Felipe Avda. Federico Silva, 46 49600 BENAVENTE (Zamora)

COLABORA:

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Nuevo sistema solar

La vida es un camino lleno de preguntas, pero un camino que todos seguimos, en una di-rección o en otra, siempre ha-cia adelante; es el camino en el que la opción de ir para atrás no existe, puede que la de rectifi-car, pero no la de cambiar lo que has hecho.

Durante estos años nos plan-teamos elegir el camino, el que nos lleve a la felicidad, a la segu-ridad, a lo que en definitiva va a ser nuestra vida.

Nos convencen para que reflexio-nemos sobre el futuro, es im-portante tener las cosas claras y hacerlas bien para no querer volver hacia atrás.

Es importante concienciarnos de que vivimos en un planeta duro, rápido y ajetreado en el que hay que luchar y conseguir salir adelante por uno mismo, y esa lucha sólo se gana con es-fuerzo.

Toda la vida es un esfuerzo,

desde que das tu primer respiro sin ayuda del cordón que te une a tu madre, hasta el último que haces cuando mueres.

Todo un esfuerzo que mere-ce la pena realizar, porque si no lo hicieras, ¿qué sentido tendría la vida?; alcanzar metas sin es-fuerzo no daría satisfacción.

Por eso ahora que estamos a tiempo, pensamos en qué hacer con nuestra vida: unos estudia-rán y trabajarán en ello, otros

estudiarán pero no consegui-rán ese trabajo soñado, otros d i rectamente

no estudiarán, pero todos ten-dremos que mirar siempre hacia adelante e intentar conseguir lo que queremos, lo que desde ahora estamos intentando con-seguir.

ÁNGELA PARDAL LÓPEZ1º A BACH.

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LA VIDA COMO PROYECTO

Nos convencen para que reflexionemos sobre el

futuro.

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Año V I I ~ Nº 3 ~ D ic i embre / 2006 [ # 7 7 ] La Mandr agora

Lloraba mi alma, en la azotea, don-de los colores malvas y anaranjados

se mezclaban tiñendo mi alma; entre sábanas blancas, tendidas al sol, espe-rando la primavera.

Lloraba mi alma, en la azotea, donde los alacranes consumían mis sueños y mis alas luchaban por escapar de sus celdas; entre húmedas sábanas blan-cas, tendidas al sol, esperando la pri-mavera.

Lloraba mi alma, en la azotea, don-de mi marchita infancia gritaba des-esperada por salir de las cloacas que la encerraban; entre mudas sábanas blancas, tendidas al sol, esperando la primavera.

Añoraba el sublime asilo que me pro-porcionaba aquella azotea, hervidero de sentimientos, de esperanzas. Refu-gio en el que esperaba a mi primavera, me hacían falta tus manos, me alimen-taba de tus besos y tus labios eran el abismo al que imploraba, te esperaba. Pasaba mis días observando la inmen-sidad del cielo de sinuosos colores que seducían a mis sentidos, olfateando el implacable incienso, veneno de tus la-bios. Fragancias que invadían mi cama cual puñaladas.

Te desterré de mis sueños, de mis días

y de mi tiempo. Exploré nuevas esta-ciones y conquisté al invierno, cálida nieve arropaba mi corazón de hojalata, pero en mi amargo inconsciente, aún recordaba el acijado color de tus ojos y el candor de tu mirada. Mi esfuerzo fue en vano y en la bruma de la noche se perdió el invierno ahuyentado por el eco de tus voces.

Volví a la azotea, a consumir, en vano, las sombras de tus besos, a liberarme del estigma que me provocaron tus la-bios y a adorar la belleza del verano. Le supliqué que me amara, que borra-ra de mi mente las húmedas sábanas blancas. Bandeja de plata, renació mi infancia. El mar inundaba mi cuerpo de ilusiones, germinó en mí la semilla de sus cabellos y sacié mis ansias de vuelo y de compartir mi infancia. Rojizas fa-rolas despertaron en mí recuerdos y re-gresé a mi azotea a calcinar tus besos.

Temblaba mi pecho anhelando tus viejos abrazos y el bailar desnudos al son de los pájaros. Sentí que me aho-gaba en las turbias aguas de mi mar

de lágrimas e inundé mis zapatos y las ro-sas del parque. Se-guí tus huellas hasta las cumbres de las montañas, busqué entre las tinieblas de las tumbas tu alien-to, acosé a los peces para encontrar tu te-cho, pregunté a los lobos por la luna de marzo, e interrogué a las amapolas por tu veneno blanco.

Fallé en mi búsqueda, regresé a mi azotea, escenario de mi de-

mencia y una leve brisa acunó mi llanto. Llegó el otoño que se consumía entre hojas secas por besar mis labios. Des-tellos de luz desprendían sus pupilas y sus elegantes manos me conquistaron. Caí en sus brazos que me arroparon, llegó el consuelo y fundimos nuestras almas en un huracán de abrazos. Ar-dieron las hojas secas y con ellas nues-tros fracasos. Se abrieron mis alas y el jardín de mis recuerdos se desvaneció en el tiempo, las palpitaciones hacían correr mi sangre con ferocidad por todo mi cuerpo, una tromba de sentimientos bombardeaba mi corazón de hojalata. La magia recorría mis huesos. Meta-morfosis que conquistó la esencia de mi ser, inevitable debilidad ante la fuer-za del alba otoñal. Seré la cariátide que sostenga su cuerpo y anidaré en la bri-sa y en el murmullo de los ríos, siempre vigía del pensamiento de mi petrificada azotea, siempre atenta a sus delirios. Y en el valle de las ánimas quedará tu recuerdo, en el olor del incienso y en el color del ocaso.

Lloraba mi azotea, paraíso perdido don-de los colores malvas y anaranjados se mezclan tiñendo su alma; entre sába-nas blancas, tendidas al sol, esperando su primavera.

Lloraba mi azotea, paraíso perdido donde la condena de su esclavitud le envuelve; entre húmedas sábanas blancas, tendidas al sol, esperando su primavera.

Lloraba mi azotea, paraíso perdido, la-guna Estigia de mis sueños donde un día, el barquero Caronte, la encontrará entre mudas sábanas blancas, tendidas al sol, esperando su primavera.

(PARA TODOS AQUELLOS QUE SUE-ÑAN DESPIERTOS, PORQUE TODA LA VIDA ES SUEÑO Y LOS SUEÑOS, SUEÑOS SON…)

LAURA MARTÍNEZ PINTADO(2º de Bachillerato)

◊◊◊

ESPERANDO LA PRIMAVERA. . .CREACIÓN LITERARIA

Rojizas farolas despertaron en mí recuerdos y regresé a mi azotea a calcinar tus besos.



◄ CUENTOSAutores: VARIOS AUTORES.Título: Una hoja de otoño en el parabrisasHuerga & Fierro Editores, Madrid 2002, 140 págs., 11 €

Quince narradores bien conocidos han escrito un cuento con el mismo título. La idea, sugerida por Medardo Fraile y adoptada con alacridad por Angelina

Lamelas, coordinadora y partícipe también de esta antología, ha dado lugar a quince historias diferentes, todas ellas a partir del título Una hoja de otoño en el parabrisas.

La personalidad de cada uno de los autores se refleja en su estilo y en la idea distinta que les incita esa hoja otoñal y, todo ello, confiere al libro una variedad calidoscópica

inusitada y original. Los autores son, por orden alfabético: José Javier Aleixandre, Teresa Barbero, Fernando Benzo, Andrés Berlanga, Ezequías Blanco, Pedro Enríquez, Medardo Fraile, José Antonio Fúster, Angelina Lamelas, Alfonso

Martínez Mena, Carlos Murciano, Luis María Murciano, Teresa Núñez, Meliano Peraile y Vicente Soto.

“Los cuentos reunidos aquí, con la excepción de tres, fueron negociados –si hablando de cuentos no es risible usar este vocablo– por Angelina que, por vivir la literatura y por vivir en Madrid,

está en contacto con escritores que, desgraciadamente, no conozco o que sólo veo una vez al año. Quizás uno de los alicientes de este libro sea la inclusión en él de dos escritores jóvenes,

galgos de casta o astillas de buen palo, Luis María Murciano y José Antonio Fúster. Por lo demás, el lector será consciente de haber leído y haber oído hablar de todos, o muchos de los

otros, que con los más jóvenes han demostrado su camaradería y generosidad en esta empresa bastante caprichosa”. MEDARDO FRAILE ■

LITERATURA JUVENIL ►Autora: LAURA GALLEGO GARCÍATítulo: Memorias de Idhún. Panteón

Editorial S.M, Madrid 2006

ARGUMENTO: Tras la última batalla contra Ashran y los sheks, muchas cosas parecen haber cambiado en Idhún. Sin embargo, los Oráculos hablan de nuevo, y sus voces no son, ni mucho menos, tranquilizadoras. Algo está a punto de suceder, algo que puede cambiar para siempre el destino de dos mundos... algo que, tal vez, ni siquiera los héroes de la profecía sean capaces de afrontar...

Memorias de Idhún. Panteón es la tercera y última parte de la serie de Memorias de Idhún. Los dos primeros libros de esta trilogía son La Resistencia y Tríada.

Su autora, Laura Gallego, ha dicho: «Panteón es el título que finalmente he elegido, porque es el que más me gusta, y revisando la historia creo que es el que más se ajusta al contenido del libro. Cuando hablo de “Panteón”, sin embargo, no me refiero a una tumba, sino al otro significado del término: “panteón” es una palabra que viene del griego y que se refiere al “conjunto de dioses de una religión o cultura”. Dado que los dioses juegan un papel muy importante en este tercer libro, me pareció la mejor opción, y la palabra que mejor resumía el contenido de este volumen.La magia no era suficiente».

Así comienza el primer capítulo: «Se había dado cuenta muchos días atrás, pero simplemente no había querido creerlo. Por pura obstinación había seguido su marcha hacia el norte, siempre hacia el norte, aun cuando ni todos los hechizos térmicos eran ya capaces de mantener su cuerpo caliente, aun cuando hacía ya días que su montura había caído sobre la nieve, abatida por el frío y la inanición.

Pero él había continuado su viaje, cojeando, ajeno a todo esto, sin ser apenas consciente de lo que sucedía a su alrededor. Sabía que estaba ya muy cerca, lo intuía. Los conjuros localizadores no podían equivocarse». ■



Con la colaboración de la Librería «Alfonso» de Benavente, esta sección reseña libros.

EL DE AQUÍ ►Autor: JOSÉ MARÍA HUERGA CARRACEDO

Título: La cara por lavarEditorial Sociedad de Nuevos Autores, Madrid 2006, 362 págs.

SINOPSIS DE “LA CARA POR LAVAR”

Jaime vive en el Buenos Aires de después del corralito, en un ambiente triste y lleno de problemas. A él, como a todos, le afectan los problemas. Pero a él le

afectan tanto que están empezando a complicarle la existencia por eso un día se vie-ne a España ayudado por el amigo de un amigo que tiene un amigo en la embajada de España. En Buenos Aires deja su negocio, vendido a un millonario, y a todas las

personas que conforman su vida: clientes, amigos y ella, una rubia.

Al llegar a España tiene que buscarse la vida y, por circunstancias del destino, acaba sirviendo en la barra de un club de mujeres de vida alegre. Allí conoce a

Magda, una prostituta diferente al resto. Jaime se queda prendado de ella y perderá el trabajo por dignificar la vida de Magda. Juntos se escapan en busca, de nuevo,

de un futuro siempre complicado. Uno de los mejores clientes de Magda le hace un hueco a Jaime en una red de tráfico de pastillas y él acepta sólo con tal de conse-

guir dinero. Pero una discusión le lleva de nuevo a un bar dónde al principio no fue bien recibido por ser sudamericano. El dueño de ese bar, con el que Jaime lleva

una extraña relación, le acaba aceptando como su nuevo camarero, lo que Jaime siempre quiso.

El trabajo le gusta y le va pillando el punto a su nueva vida pero él quiere más. Quiere recuperar su vida en Buenos Aires, en un local muy diferente al actual. Luis,

su jefe, es un señor de una cierta edad y la salud le empieza a pasar factura por la vida llevada, una vida ajetreada y llena de excesos. Por eso le cede los galones del negocio a Jaime, que comenzará a obsesionarse con el éxito del local y dejando de lado a Mireia, la chica que le salvó cuándo él se estaba perdiendo en su nueva vida

y con la que tiene una relación estable pero irregular.

Al final todo explota y Jaime acaba descubriendo qué se encierra detrás de cada uno de sus mejores clientes y amigos, descubriéndoles sus máscaras.

“La cara por lavar” es la visión de una España casi actual desde el punto de vista de alguien foráneo, siempre retocado por un narrador español. ■

José María Huerga Carracedo



B.M.M.: Brujas, Magos y Muggles

HOLA A TODOS LOS QUE SIEMPRE HAN LEÍDO «B.M.M.». HOY OS QUE-REMOS INFORMAR QUE NOS VAMOS A RENOVAR; VAMOS A INTENTAR SER MUCHO MEJOR QUE EL AÑO PASADO.

TAMBIÉN QUEREMOS DECIR A LOS DE 1º, QUÉ ES «B.M.M.»: ES UN PE-QUEÑO GRUPO DE GENTE QUE INFOR-MA AL INSTITUTO DE COSAS RELACIO-NADAS CON LA MAGIA.

AQUÍ PODÉIS ESCRIBIR VOSOTROS TAMBIÉN, O SI PREFERÍS PODÉIS HA-CER DIBUJOS O PREGUNTAS QUE NO-SOTROS INTENTAREMOS RESPONDER.

TEST¿Tienes poderes?

1) Si tuvieras que elegir uno de estos animales, ¿con cuál te quedarías?

A-Un gato (me gusta su aire misterioso).B-La lechuza (como Harry Potter).C-Un perro pastor alemán (el mejor amigo de una persona).

2) ¿Sueles recordar lo que has soñado por las noches?

A-¡Siempre!B-Sólo cuando es algo que parece muy real.C-Nunca.

3) ¿Con qué situación sueñas más a menudo?

A-Que vuelo.B-Que caigo desde lo alto, aunque no me pasa nada.C-Con amigos, peña que conozco.

4) ¿Tienes un amuleto para sentirte más seguro-a?

A-¿Sólo uno? Varios y hechos por mí.B- Sí y cuando lo llevo me siento seguro-a.C-No creo en eso.

5) ¿Sabes el significado de la palabra poltergeist?

A-Fenómenos extraños.B-Creo que son fantasmas.C-El malo de una película.

6) Si alguna vez pierdes una cosa...A-Pienso dónde la dejé cerrando los ojos.B-Busco hasta que la encuentro.C-La doy por perdida.

7) Imagina, ¿qué harías si te aparece un espíritu?

A-Hbalar con él.B-Huir.C-No creo en fantasmas.

8) ¿Has tenido un presentimiento?A-Muchas veces.B-Sí, pero creo que es mi imaginación.C-No.

9) ¿Sabes de qué va una persona aun-que te la acaben de presentar?A-Sí.B-A veces.C-No.

10) ¿Suele pasarte que cuando vas a un sitio por primera vez te parece que ya has estado allí antes?A-Sí.B-Un par de veces.C-No.

MAYORÍA DE A:Sexto sentido. Una especie de intuición que nunca llegamos a desarrollar. ¡Pues tú tienes para dar y regalar!

MAYORÍA DE B:Aprendiz de brujo. Tu lado racional si-gue imponiéndose a ese instinto tuyo que a veces te deja alucinado-a.

MAYORÍA DE C:Cuentos chinos. Para ti el único fantas-ma es el chulito de la piscina y te ríes de esas cosas.

SaLuT.


Año V I I ~ Nº 3 ~ D ic i embre / 2006 [ # 7 7 ] La Mandr agoraLEYENDA

LA LEYENDA DEL LAGO DE SANABRIAHace muchos años, en el lu-

gar que hoy ocupa el Lago de Sanabria existía un pueblo lla-mado Valverde de Lucerna, rodea-do de tierras fértiles y producti-vas, la gente del lugar era egoísta, y de actitud poco solidaria y caritativa.

La noche previa a la fiesta de San Juan, una noche lluviosa con truenos y relámpagos, una sombra se mueve lentamente en dirección al pueblo, el re-lámpago ilumina su vieja capa de lino, se apoya en un bastón del que cuelgan dos conchas, es alto, de barba larga y abundante cabello. Calado hasta los huesos llama a la puerta de una casa.

-¿Quién llama a estas horas? −le contestan des-de el interior.

-Un peregrino que busca refu-gio y alimento para pasar la noche −contesta.

-¿Eres un peregrino?... Pues continúa tu camino

El hombre sigue caminando y tropieza por tres veces cayendo y volviéndose a levantar, insiste en otra de las casas, negándose el in-quilino a abrir su casa y darle cobijo.

En la ultima casa lo intenta de nuevo.

-¡Por favor dejadme entrar!

-Déjanos en paz y vete por donde has ve-nido.

Cansado, hambrien-to y aterido de frío decide abandonar el pueblo; a la salida del pueblo en un altozano ve un horno de leña, donde se encontraban unas mujeres cocien-do pan, les pregunta si puede entrar, a lo que ellas acceden. Una vez que se hubo seca-do al calor del horno, las mujeres hacen un

pequeño panecillo para dárselo, lo introducen en el horno y cuando intentan sacarlo comprueban que ha crecido tanto que no pueden sacarlo por la boca del horno. Van

probando con trozos cada vez más pequeños hasta que finalmente uno sale y se lo dan al misterioso peregrino. Este dirigiéndose a las mujeres les dijo:

-Gracias por socorrerme, real-mente sólo vosotras sois dignas de ser salvadas en este pueblo, seguid en el horno y no salgáis esta noche. Voy a castigar a este

pueblo, que no se acuerda cuando están con el estomago lleno y ca-lentándose a la lumbre de los que pasan hambre y frío.

El hombre se despide de las mu-jeres recordándo-les que se queden en el horno; una vez que ha llegado a las afueras del pueblo pronuncia esta frase: “Aquí clavo mi bastón, aquí brote un gar-gallón”.

En el lugar don-de clava el bastón empieza a brotar un gran caudal de agua. A las pocas horas el pueblo de Valverde de Lucer-na queda totalmen-te inundado.

Al día siguiente, el sol ilumina el valle, un gran lago cubre lo que antes era el pueblo, solamente una pequeña isla en el lugar donde estaba el horno de leña sobresale del agua. Días más tarde un vecino con la ayuda de una pareja de bueyes ‘Redondo’ y ‘Bragado’ intenta sacar del fondo del lago las dos campanas de la

iglesia, consi-gue sacar una pero la otra permanece en el fondo del lago.

El día de San Juan (24 de Junio), las personas que son caritativas y generosas, se dice que oyen el tañido de la campana que reposa en el fondo del lago.

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Popular



DIBUJO, GRAFFITIH

echo por Carm

en C

adierno

Hecho por V

itiM



¿Qué les queda por probar a los jóvenes?Qué les queda por probar a los jóvenes en este mundo de paciencia y asco? Sólo graffiti? rock? escepticismo? también les queda no decir amén no dejar que les maten el amor recuperar el habla y la utopía ser jóvenes sin prisa y con memoria situarse en una historia que es la suya no convertirse en viejos prematuros qué les queda por probar a los jóvenes en este mundo de rutina y ruina? cocaína? cerveza? barras bravas? les queda respirar/ abrir los ojos descubrir las raíces del horror inventar paz así sea a ponchazos entenderse con la naturaleza y con la lluvia y los relámpagos y con el sentimiento y con la muerte esa loca de atar y desatar qué les queda por probar a los jóvenes en este mundo de consumo y humo? vértigo? asaltos? discotecas? también les queda discutir con dios tanto si existe como si no existe tender manos que ayudan/ abrir puertas entre el corazón propio y el ajeno sobre todo les queda hacer futuro a pesar de los ruines del pasado y los sabios granujas del presente.

MARIO BENEDETTI

Poesía Difua-NachBy ThE RyL

Comienzos... lo que motivó el comienzo fue que las vidas que presencio no merecen el silencio, fue porque el hip-hop apareció del amor entre poesía y ritmo y por las aguas de ese río mi vida fluyó, o fue porque en el gusto por competir no hay lugar para el cansancio, qué sé yo... pero sucedió, pasé de ser anónimo a ser casi famoso bajo mínimos y acaso eso os conmovió? porque al parecer mi mano en contacto con un micrófono me convirtió en pirómano y París ardió.

Adiós París adiós, adiós mc’s adiós,

Que usted vaya con dios y si baja por esas calles será mejor que le acompañen uno o dos.

Ay, señor qué pesada es esta espada que desenvaino con sudor, la soledad del príncipe sin reino, la soledad del hombre sin calor.

Será porque ya no me peino, ni me preparo, ni visto raro ni uso perfumes caros cuando salgo en busca de amor, soy el mismo chico educado que con un rap vulgar suena en tu radio cada día, y que desde el extrarradio ha conquistado a la más alta burguesía. Pero ¿qué falla?

Soy yo en esa pantalla, soy yo en esa cola del paro, comparo mi vida con la tirada de un dado y sale cero y cero y cero yo sólo espero ser más certero, salir de este agujero en el que estoy atrapado, soñador: aún duermo con Peter Pan a mi lado, preguntándome si alguien ahí afuera entenderá a un tipo tan complicado.

Pero una extraña fuerza me persigue, me dice tú simplemente vive, tú simplemente escribe,

decide en tiempo récord y olvida el rencor. Y recuerda lo que el viejo dijo: hijo, en lo que sea, pero sé el mejor.

Tres regalos

Espero

no voy

a marc

harme

no voy

a aleja

rme

sin an

tes deci

r

que lloro

que sufro

al mirar

te

tan ce

rca en

mis manos

sin poder d

ecir.

Porque y

a creo

merecer

te

porque y

a logré p

onerte

en mi alma tu

más gran

de altar

.

Ay pero

quiéreme.

Sólo bast

a una s

onrisa

para hace

rte tre

s regalo

s

son el

cielo,

la luna y

el mar.

Yo que s

oñé

con ten

er una re

ina

que mandara

en mis a

dentros.

Ya no te

ngo que b

uscarla

porque e

n ti todo lo

encuentro

.

Ya nom

ás dime q

ue sí.

Sólo bast

a una s

onrisa

para hace

rte tre

s regalo

s:

son el

cielo,

la luna y

el mar.

Guicho Cisneros

Enviados por Camino Rivera

Carmen Cadierno



CREACIÓN LITERARIA

por Camino Rivera

Tras el hola, un largo silencio, no necesitamos nada más, los dos sabíamos quién era el otro, el silencio fueron nuestras palabras de presenta-

ción, y después de eso todo retumba en mi mente como un eco profundo. ¡Ramón! ¡Ramón! ¡Ramón! Una y otra vez sólo existía esa palabra, hasta que Ana me sacó de ese mundo, no pude hacer otra cosa más que volver a la realidad. Con sonrisa idiota, como más tarde la describi-ría Ana, le conté lo que me había ocurrido. Ana no pudo parar de reír, era la historia más ridícula que jamás nos había pasado, creo que aún piensa que todo fue un sue-ño, una fantasía de niña enamorada. Pero… todo era muy cierto.

Pasaron los días y Ramón y yo nos fuimos cono-ciendo por mensa-jes, llamadas, mes-senger, en fin horas y horas pensando el uno en el otro. Era como si nos cono-ciéramos de toda la vida, y eso nos ha-cía sentirnos mági-cos. Prácticamente nos lo contábamos todo, manteníamos todos los días lar-gas charlas sobre nosotros, nuestros amigos, y nuestra familia.

Fue pasan-do el tiempo y poco a poco cada uno conocía los secretos del otro, por la voz que ponía al teléfono, por los iconos que ponían en el messenger… Se hicieron inseparables.

¡Llegó el día! No me lo podía creer, llego el día en el que nos encontraríamos cara a cara. Creo que esa noche apenas pude dormir, el viaje de nuevo al pueblo se hizo eterno. Qué le voy a hacer, me sentía como un niño en su primer día de colegio, por fin llegamos al pueblo, besos por aquí, abrazos por allá, en fin, momentos fami-liares que ocurren siempre con la misma monotonía.

Por fin los dos cara a cara, un temeroso beso en la mejilla, y su dulce sonrisa, ese hoyito que le salía en la

comisura de la boca, esos dientes blancos cual perlas pu-lidas, sus ojos hipnotizadores que no pude dejar de mirar ni un solo instante. A él le pasó lo mismo, parecíamos dos estatuas, el uno parado frente al otro durante largo tiempo, no había nada que decir; ya todo lo decían nues-tras miradas; de repente Ramón decidió dar un paseo, fuimos andando lentamente el uno al lado del otro en ri-guroso silencio, Ramón iba dando patadas a una piedre-cilla, después de una rato andando me cogió la mano, su mano era cálida, agarraba con firmeza, con pulso firme, decidido, nunca una mano me había aportado tanta fuer-

za, vigor, respeto, in-tensidad, sinceridad… Fue el mejor verano de mi vida. Piscina, fiestas, Ramón, Desa-yunos, Ramón, Comi-das, Ramón, Cenas, Ramón, Besos, Ra-món, Magia, Ramón, Comidas, Ramón, en resumen, Ramón, Ra-món, Ramón, Ramón, Ramón, Ramón, Ra-món a todas horas. A nadie le pareció mal nuestra relación, sus amigos eran geniales, les gustaba reírse, di-vertirse, jugar al ba-loncesto, tardes en-teras jugando al billar hasta que bajaba el sol lo suficiente para creerse Pau Gasol frente a las canchas del polideportivo. Era un mundo perfecto,

en ese momento pensé que mi círculo daba vueltas per-fectas, y cada vuelta me hacía más y más feliz.

Los meses pasaban lentamente mientras estábamos juntos. Pasó el primero, pasó el segundo, y el adiós esta-ba a punto de llegar salvo que sólo uno de los dos sabía cómo sería ese adiós y no quería pensar en él.

Estuvimos comprando ropa toda la tarde, Ramón se compró un traje oscuro perfecto para la boda de su her-mana, y yo como no me decidía por nada en especial compré tres modelos distintos. Ahora lo pienso y me da la risa, ni siquiera llegué a estrenar ninguno de esos tra-

MI CÍRCULO PERFECTO

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Capítulo 2


Año V I I ~ Nº 3 ~ D ic i embre / 2006 [ # 7 7 ] La Mandr agoraCREACIÓN LITERARIA

jes, es más, allí están olvidados en el armario, en un rincón al que ni siquiera me atrevo a mirar por miedo a recordar viejos tiempos.

Esto es lo que hay, mi vida en un círculo perfecto, un viaje perfecto, sin fin, como el que se llevó a Ramón.

No se puede burlar al destino, no podemos retroce-der en el tiempo y cam-biarlo todo, no podemos olvidar lo que ocurre en estos días, pero ya está, ves otra vez el círculo perfecto. Ramón ya sabía su final antes de cono-cerme, aunque no sabía el tiempo a ciencia cier-ta, tenía una enfermedad difícil de curar, una enfer-medad que poco a poco me lo iba arrebatando, ¿qué podía hacer?, no entiendo por qué un día la vida me lo da todo, y al siguiente me lo arre-bata como si fuera una pequeña pluma de las manos.

Ramón decidió luchar a su manera, no someterse a tratamientos inútiles que le hicieran agonizar durante demasiados días, firmó todo tipo de papeles para que no lo tuvieran conectado a ninguna máquina y, luego, ese mismo día, se atrevió a pedir mi número de teléfono, ya no tenía nada que perder, en ese momento todo estaba perdido, sólo podría ganar, pudimos ganar los dos, la vida nos dio la opción del amor, un amor como no había en la faz de la tierra. Una vida que va evolucionando día tras día como las tristes palabras que definen nuestra vida.

Cuando todo acabó y, des-pués de algunas semanas, recibí un visita, era Manuel, me traía un sobre cerrado con una carta de Ramón, dos lágrimas rodaron por mis mejillas como el primer día que descubrí que iba a perder a Ramón.

Hola, mi niña: ¿Qué estás haciendo? Yo seguro que estoy bien, si

tú tienes esta nota en la mano es que todo se acabó. ¡Lo siento! Siento no haberte dicho nada, y de apurar

los días al máximo sin que tú lo supieras, sólo Manuel sabía lo que pasaba en realidad, con él hablaba horas y horas y se enfadaba conmigo cada vez que no quería decirte lo que me ocurría. ¡Oh, Dios mío! qué idiota fui, si te lo hubiera dicho… acabas de irte del hospital y casi no tengo fuerza para agarrar el bolígrafo, eres fuerte y valiente, estos tres meses han sido lo mejor

de mi vida, y espero que también de la tuya. Con-serva los maravillosos recuerdos, esos días en los que paseábamos co-gidos de la mano, el día que te pedí el número de teléfono…

Pero sabes, mi niña, te voy a pedir un pequeño favor: no tengas miedo a crear nuevos recuerdos, y gracias, gracias por ha-cerme pasar los mejores momentos.

Te querré siempre. Ramón.

Junto con la carta es-taba la primera foto que nos sacamos juntos, y una piedrecilla, era la piedrecilla del día que nos conocimos, aquella a la que Ramón estuvo dando patadas largo rato hasta que se decidió a cogerme la mano.

Me abracé a Manuel llorando, lo había perdido, era parte de mi viaje, ahora lo sé, pero ojalá no se hubiera cerra-do el círculo y Ramón siguiera a mi lado.

Lo echaré de menos eter-namente, soñaré con él cada noche, día, semana, mes, año, la vida eterna porque me dio la opción de vivir un amor dulce y apasionado, breve pero inten-so, y el amargo final no entur-biará la evolución de:

¡MI CÍRCULO PERFECTO!

Probablemente me esperará en las estrellas; los dos estaremos unidos en algún lugar del espacio entre ese caos irreparable que es el infinito; los dos conseguire-mos unirnos y formar una gran estrella que dé luz a la vida de todas esas personas que como nosotros deci-dieron formar parte de un círculo perfecto.

< FIN de ‘Mi círculo perfecto’ >

∆∆∆

>>>



Un mezquino comedor de una pen-sión de seis francos al día, en un

hotel de los Alpes o junto a la ribera de Liguria. Huéspedes indiferentes, la mayor parte de las veces algu-nas señoras viejas en small talk, es decir, en menuda conversación. La campana ha llamado ya a comer. Entra un hombre de espaldas car-gadas, de silueta imprecisa; su paso es incierto, porque Nietzsche, que tiene seis séptimas de ciego, anda casi tanteando, como si saliese de una caverna. Su traje es oscuro y cuidadosamente aseado, oscuro es también su rostro y su cabello cas-taño va revuelto, como agitado por el oleaje; oscuros son igualmente sus ojos, que se ven a través de unos cristales gruesos, extraordina-riamente gruesos. Suavemente, casi con timidez se aproxima; a su alrede-dor nota un silencio anormal. Parece un hombre que vive en las sombras, más allá de la sociedad, más allá de la conversación y que está siempre temeroso de todo lo que sea ruido o hasta sonido; saluda a los demás huéspedes con cortesía y distinción y, cortésmente, se le devuelve el saludo. Se aproxima a la mesa con paso incierto de miope, va probando los alimentos con precaución propia de un enfermo del estómago, no sea que algún guiso esté excesivamente sazonado o que el té sea demasiado fuerte, pues cualquier cosa de ésas irritaría su vientre delicado y si éste enferma, sus nervios se excitan tu-multuosamente. Ni un vaso de vino ni un vaso de cerveza, nada de al-cohol, nada de café, ningún cigarro, ningún cigarrillo; nada estimulante; sólo una comida sobria y una con-versación de cortesía en voz baja, con el vecino de mesa (como habla-ría alguien que ha perdido el hábito de conversar) tiene miedo a que le pregunten demasiado.

Después se retira a su habitación mez-quina, pobre, fría. La mesa está colmada de papeles, notas, escri-tos, pruebas, pero ni una flor, ni un adorno; algún libro y apenas, y muy raras veces, alguna carta. Allá en un rincón, un pesado cofre de madera,

toda su fortuna: dos camisas, un traje, libros y manuscritos. Sobre un estante, muchas botellitas, frascos y medicinas con qué combatir sus do-lores de cabeza que le tienen loco durante horas y más horas, para luchar con los calambres del estó-mago, los vómitos, para vencer su pereza intestinal y, sobre todo, para combatir con cloral y veronal su te-rrible insomnio. Un horrible arsenal de venenos y de drogas, que es la única ayuda que puede encontrar en el vacío de un cuarto extranjero, donde no le es posible hallar otro reposo que el obtenido por un sue-ño corto, artifìcial, forzado. Envuelto en una capa y en una bufanda de lana (pues la chimenea hace humo, pero no da calor), con sus dedos ateridos, sus gruesos lentes tocan-do casi el papel, escribe rápidamen-te, durante horas enteras, palabras que sus mismos ojos no pueden luego descifrar. Durante horas está allá sentado escribiendo hasta que sus ojos le arden y lagrimean; una de las pocas felicidades de su vida es que alguien, apiadado de él, se ofrezca para escribir un rato, para ayudarle. Si hace buen día, el eterno solitario sale a dar un paseo, siem-pre solo con sus pensamientos. Na-die le saluda jamás, nadie le para jamás. El tiempo malo, la nieve, la lluvia, todo eso que él odia tanto, le retiene prisionero en su cuarto, nunca abandona su habitación para buscar la compañía de otros, para buscar otras personas. Por la noche, un par de pastelillos, una tacita de té flojo y en seguida otra vez la so-ledad eterna con sus pensamientos. Horas enteras vela junto a la lámpa-ra macilenta y humosa sin que sus nervios, siempre tensos, se aflojen de cansancio. Después echa mano del cloral u otro hipnótico cualquie-ra, y así, a la fuerza, se duerme, se duerme como las demás personas, como las personas que no piensan ni son perseguidas por el demonio.

stefan zweigImagen de Nietzsche

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F. NIETZSCHEUn texto sobre Nietzsche

(1844-1900) del escritor

austriaco Stefan Zweig

nos presenta el lado más

“humano, demasiado

humano” del filósofo

alemán. El otro texto,

del propio Nietzsche,

extraído de su libro

‘Así habló Zaratustra’,

nos muestra el aspecto

sobrehumano/

enigmático/poético/

profético de su

pensamiento.

Entre ambos queda

circunscrita la figura de

quien, según su propia

expresión, filosofó a

martillazos.

Selección de textos:

Salustiano Fernández

Nietzsche en 1882

Nietzsche en 1867



F. NIETZSCHE

F. Nietzsche, por Edward Munch

Demasiado me había adentrado yo volando en el futuro: un estreme-

cimiento de horror se apoderó de mí. Y cuando miré en torno mío vi que el tiempo era mi único contemporáneo.

Entonces huí hacia atrás, hacia el ho-gar -y cada vez más aprisa: así llegué a vosotros, hombres del presente, y al país de la cultura.

Por vez primera llevaba yo conmigo unos ojos para veros, y grandes de-seos: en verdad, con anhelo en el co-razón llegué.

Mas ¿qué me ocurrió? A pesar de mi angustia - ¡tuve que echarme a reír! ¡Nunca habían visto mis ojos algo tan abigarrado!

Yo reía y reía mientras el pie aún me temblaba, así como el corazón: «¡Esta es sin duda la patria de todos los tarros de colores!» -dije.

...¡Y con cincuenta espejos a vuestro

alrededor, que halagaban el juego de vuestros colores y lo reproducían! ¡En verdad, no podríais llevar mejor másca-ra, hombres del presente, que vuestro propio rostro! ¡Quién podría reconoce-ros!

Emborronados con los signos del pa-sado, los cuales estaban a su vez em-

badurnados con otros signos: ¡así os habéis escondido bien de todos los in-térpretes de signos!

...Todas las épocas y todos los pueblos

miran abigarradamente desde vuestros velos; todas las costumbres y todas las creencias hablan abigarradamente des-de vuestros gestos.

Quien os quitase velos y aderezos y colores y gestos: todavía tendría bas-tante para espantar a los pájaros con el resto.

En verdad, yo mismo soy el pájaro es-pantado que una vez os vio desnudos y sin colores; y me escapé volando de allí cuando el armazón me hizo señas amorosas.

¡Preferiría ser jornalero en el submun-do y entre las sombras del pasado! - ¡más gruesos y rellenos que vosotros son ciertamente los habitantes del sub-mundo!

¡Esto, sí, esto es amargura para mis entrañas, el no soportaros ni desnudos ni vestidos a vosotros los hombres del presente!

Todas las cosas siniestras del futuro, y todas las que alguna vez espantaron a pájaros extraviados, más confortables son, en verdad, y más familiares que

vuestra «realidad».Pues habláis así:

«Nosotros somos enteramente reales, y ajenos a la fe y a la superstición»: así hincháis el pecho ¡ay, aunque ni siquiera tenéis pechos!

...Refutaciones am-

bulantes sois de la fe misma, y una dislocación de todos los pensamientos. Indignos de fe: ¡así os llamo yo a voso-tros, reales!

...Estériles sois: por

eso os falta a vo-sotros la fe. Pero el que tuvo que crear, ése tuvo siempre también sus sue-ños proféticos y

sus signos estelares -¡y creía en la fe!-Puertas entreabiertas sois vosotros,

junto a las cuales aguardan sepulture-ros. Y ésta es vuestra realidad: «Todo es digno de perecer».

¡Ay, cómo aparecéis ante mí, estériles, con qué costillas tan flacas! Y algunos de vosotros se han dado sin duda cuen-ta de ello.

Y dijeron: «¿Es que un dios nos ha sustraído secretamente algo mientras dormíamos? ¡En verdad, bastante para formarse con ello una mujer!

Asombrosa es la pobreza de nuestras costillas!», así han hablado ya algunos de los hombres del presente.

¡Sí, risa me causáis, hombres del pre-sente!, ¡y especialmente cuando os asombráis de vosotros mismos!

¡Y ay de mí si no pudiera yo reírme de vuestro asombro y tuviera que tra-garme todas las repugnantes cosas de vuestras escudillas!

Pero quiero tomaros a la ligera, pues yo tengo que llevar cosas pesadas; ¡y qué me importa el que escarabajos y gusanos voladores se posen sobre mi carga!

¡En verdad, no por ello me ha de pe-sar más! Y no de vosotros, hombres del presente, debe llegarme a mí la gran fatiga.

¡Ay, a dónde debo ascender yo toda-vía con mi anhelo! Desde todas las altas montañas busco con la vista el país de mis padres y de mis madres.

Pero no he encontrado hogar en nin-gún sitio: un nómada soy yo en todas las ciudades, y una despedida junto a todas las puertas.

Ajenos me son, y una burla, los hom-bres del presente, hacia quienes no hace mucho me empujaba el corazón; y desterrado estoy del país de mis padres y de mis madres.

Por ello amo yo ya tan sólo el país de mis hijos, el no descubierto, en el mar remoto: que lo busquen incesantemen-te ordeno yo a mis velas.

En mis hijos quiero reparar el ser hijo de mis padres: ¡y en todo futuro - este presente!

Así habló Zaratustra.

F. NIETZSCHE, Así habló Zaratustra, 2ª Parte, “Del país de la cultura”.

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ESTRENOS DE

GAL

Infiltrados


Año V I I ~ Nº 3 ~ D ic i embre / 2006 [ # 7 7 ] La Mandr agoraRELATO, GRAFFITI

Silenciosa mañana otoñal que baña el viento con brumas y hojas doradas, paseo entre sus delirios y res-piro hondo y fuerte.

Camino hacia una meta aunque en realidad no sé cuál es, mientras me dirijo a ella estoy descalza, sin-tiendo la humedad en mis pies.

Los vientos fríos agrietan mis labios y balancean mi blanco vestido pero yo sigo al frente, relajada, sé que la meta está muy cerca.

Todo se encontraba cubierto de nieve y en las nubes se dibujaba una dulce melodía de violines, los cuervos las rodeaban.

Cansada del camino decidí echar-me sobre el fondo blanco y observé durante décadas esas esponjosas nubes.

Cuando creí que estaba des-cansada me superpuse y seguí mi camino pero en su mitad encontré una vieja mansión escondida entre árboles frondosos y negruzcos.

Las maderas de sus paredes ha-blaban y el suelo parecía resque-brajarse cuando lo rozaba ligera-mente.

Unas extrañas escaleras encendieron mi curiosidad, llevaban hacia un viejo y soleado desván.

Entre cajas enormes llenas de libros y viejos recuer-dos encontré un precioso baúl polvoriento. Se escondía de algo, quizás de mí.

Lo abrí, de allí salieron muñecas de porcelana que bailaban, tiovivos en miniatura que se escapaban de la casa, salían del desván con danzas delicadas que se enlazaban con el paisaje nevado de la zona. Las nubes empezaron a tocar sus violines y las ventiscas nos ro-dearon a esos extraños personajes y a mí.

Cuando terminó lo que yo creí un cataclismo, las muñecas de por-celana y los tiovivos yacieron en el prado nevado, estaba asustada, creí que yo también perecería.

Me levanté y cambié mi vista, allí estabas tú, abrazándome, inundán-dome en tranquilidad... el trayecto había terminado... mi meta eras tú.

Por Mystic Lady, con mucho cariño para Sabrina...

MUÑECAS DE PORCELANA

Hecho por Pilar Mielgo



CREACIÓN LITERARIA

VIDAS CRUZ

ADAS

por M

arta

Her

nand

o

Capí

tulo

3

sigue >>>

Sentían el amor dentro de su alma, pero

las voces de pecado asolaban sus oídos.

El gran día del estreno se acercaba, Marc y Edith es-taban todo el día juntos

con la excusa de preparar la ópe-ra, pero en realidad simplemen-te querían verse. Se escondían y besaban tras el piano, aquellos encuentros eran maravillosos, ya no podían vivir el uno sin el otro. Querían casarse y vivir juntos, se prometerían después del estreno de la ópera para que las monjas no pusieran ningún impedimento al triunfo de Edith en el mundo de la música.

Era el día del gran estreno, aque-lla noche no pudo dormir, ensayó toda la mañana y aunque toda su energía estaba depositada en el espectáculo no pudo evitar recor-dar a su hermano. Se pasó toda la tarde con el juguete de éste en-tre sus manos. Hoy Marc tardaba un poco, ella estaba impaciente, pasaba el juguetito entre sus dedos haciéndolo girar. Se en-contraba sentada en una de las ventanas con vidrieras; el sol del verano se cola-ba reflejando figuras de pavos reales y flores en el suelo de la sala. Se sentía culpable, todo el tiempo que ha-bía estado allí no había dedicado ni un solo día a buscar a Fede-ric. Ahora le echa-ba de menos y sabía que algo le faltaba dentro. Mientras esperaba, Margaret y Drusilla pasaron a verla; Dru-silla, tan cariñosa como siempre, le dio un gran abrazo. Margaret se encontraba junto a la puerta, cautelosa, tramando algo. Edith no sabía por qué, pero desde que descubrió los furtivos encuentros entre ella y Marc no era la mis-

ma. Se oyó llamar a la puerta, por fin había llegado Marc. Margaret y Drusilla se fueron de la sala para dejarles solos. Mientras, Edith se-guía jugando como lo había he-cho toda la tarde. Marc entró en la sala con paso firme irradiando alegría por cada poro de su piel; Edith estaba iluminada por los brillantes colores de la vidriera que dulcificaban su delicado rostro.

-Oh, qué hermosa estás, necesitaba verte -dijo Marc.

-Hola vida mía -res-pondió Edith entre lá-grimas.

-¿Qué te pasa?, ¿por qué lloras? -preguntó Marc.

-Nada, son t o n t e r í a s mías. Echo mucho de menos a mi her-mano F e -

d e -r i c

y me s i e n t o

muy cul-pable por

no haberle buscado.-No te pre-

ocupes, ahora debes concentrar-

te en el estreno. Te prometo que yo le

encontraré. A mí tam-bién me gustaría encon-

trar a mi familia, ¿sabes? Anoche tuve un sueño,

aparecía una casita perdida en las montañas, dentro de

éstas se encontraba una niña que observaba con dulzura desde la ventana mientras jugaba con un juguetito de madera –comentó Marc.

-¿Un juguete de madera has dicho? -preguntó Edith atemoriza-da, la voz le temblaba mucho y los

ojos querían salir al exterior.-Sí, de madera. Era una especie

de… no sé, no lo recuerdo bien. Tenía una especie de… pájaro creo recordar. Pero, ¿eso qué importa? -prosiguió Marc.

-Sí importa y mucho, ¿no sería éste el juguete de tu sueño? -

dijo Edith aún más asusta-da.

-¡¡Sí!! ¿De dón-de lo has sa-

cado? Es alucinante

¿cómo pue-des tener tú

eso? -dijo Marc muy sorprendido,

aunque pronto em-pezó a asustarse.-Pues es una expli-

cación muy sencilla, ¿te acuerdas de la niña de

la ventana? Pues era yo, y éste es el único recuerdo

de mi desaparecido hermano Federic. Por tanto… -Edith no

pudo acabar la frase.-Somos hermanos -dijo Marc

desencajado.-Sí Federic, sí, ahora compren-

do por qué me daban tranquilidad tus ojos -prosiguió Edith.

-Esto que me dices me deja sin palabras, ven y abrázame herma-na -dijo Marc.

Los dos hermanos se abraza-ron, ahora sus corazones estaban tranquilos. Pero había algo más dentro de ellos, no podían borrar lo que había sucedido. Aquellos dos jóvenes se amaban con locura pero su amor estaba condenado por la moral, deberían tomar una decisión que les marcaría para

siempre. Enseguida se dieron cuenta de lo que querían hacer, la pasión que sentían el uno por el otro era más fuerte que cualquier lazo sanguíneo. Se produjo un si-lencio sepulcral, ninguno de los

Se encontraba sentada en una de las ventanas

con vidrieras; el sol del verano se colaba reflejando figuras de

pavos reales y flores en el suelo de la sala.


Año V I I ~ Nº 3 ~ D ic i embre / 2006 [ # 7 7 ] La Mandr agoraCREACIÓN LITERARIA

dos se atrevía a decir nada. Sen-tían el amor dentro de su alma, pero las voces de pecado asola-ban sus oídos. Sólo había una sa-lida si querían seguir amándose, deberían actuar igual que hasta ahora, nadie podría descubrir su oscuro secreto. Ya sabían que sus almas estaban condenadas al in-fierno para siempre. No pudieron resistir el impulso y se sumergie-ron en un gran beso. Las puer-tas de la sala se abrieron de repente, tras ellas apareció la Madre Violet roja de cólera y gritando desesperada: ”¡Incesto, incesto, tenemos a Satán entre nosotros, ¿por qué nos castigas así Dios?, ¿Qué hemos hecho? ¡El fin del mundo, el fin del mundo!” Tras ella se en-contraba Margaret con una sonrisa perversa en los labios. Edith intentó pedir disculpas pero nada podria arreglar aquello. La Madre, avisada por Margaret había escucha-do toda la conversación, sabía su gran secreto. Al oír los gritos acudieron todas las monjas y mu-chas niñas curiosas les siguieron. La Madre Vio-let gritó aun más furiosa: ”Váyanse todas ahora mismo, no hay nada que ver aquí, a sus cuartos, señoritas, y ustedes tam-bién hermanas.”

Escondida tras una co-lumna del pasillo, Drusi-lla observaba la escena aterrorizada y confundi-da. Los gritos la hacían estremecerse y no entendía por qué la Madre Violet trataba así de mal a su pobre amiga. ¿Acaso era culpable de amar?

-Esto es intolerable, no pien-so soportar estos pecados en mi propia casa. ¿No les da vergüen-za? Dios está en todas partes y todo lo ve. Ustedes los jóvenes siempre haciendo lo que no de-ben, claro, es más bonito apar-tarse del camino de Dios y caer en las redes de Satán. Ya lo han

logrado, están condenados para toda la eternidad. Encima tienen la desfachatez de mentir, a mí y al Señor mismo -refunfuñó la Madre Violet.

Los jóvenes intentaron expli-carse, pero era imposible. La Ma-dre Violet no estaba dispuesta a ceder, aquel problema no le in-fluía solo a ella sino que le influía también a Dios.

-Ya sé lo que voy a hacer -se dijo-. El Señor es bueno y miseri-cordioso y sé que os perdonará si renunciáis al pecado y por tanto a vuestro amor, deberéis cumplir penitencia y vuestra alma estará salvada.

-¡Nunca! -gritó Marc-. La amo con toda mi alma, hemos pasado muchos años separados, éramos dos desconocidos y si nos hemos enamorado es porque era nues-tro destino.

-No mancille el nombre del

amor, señor Harrison, el único amor verdadero es el del Señor, ningún pecado justifica lo que dice -respondió enfadada la Ma-dre Violet-. No hay más que ha-blar, señor Harrison, ahora mis-mo avisaré a su padre y él verá lo que hace con usted, espero que escarmiente y que le castigue de modo que aprenda lo que puede y no puede hacer; si conozco bien a su padre, y creo que lo conoz-

co, le apartará a usted de eso que tanto le gusta, la música. En cuanto a usted, seño-rita Edith, creo que lo mejor sería que pudie-ra enmendar su peca-do y continuar por el camino del señor en el convento de Sta Clara. Allí sabrán qué hacer con usted -sentenció la Madre Violet.

-¡¡No, por favor!!... esto es injusto -grita-ban ambos.

La madre Violet hizo un gesto con la cabeza y Margaret sa-lió corriendo hacia la puerta. A los pocos segundos aparecieron cuatro hombres fuer-tes. Mientras, Drusi-lla observaba con los ojos desorbitados. Los hombres entraron en la sala y sostuvieron a los dos amantes. Marc intentó luchar contra ellos pero no pudo, le amarraron con fuerza y se lo llevaron arras-trando por el suelo

del colegio. Edith lloraba y gri-taba con amargura: ”¡Te quiero, mi vida, te quiero, no descansa-ré hasta besar tus labios! ¡Fortu-na, maldita golfa que me robas lo que me da la vida! ¿No puedo vivir tranquila? Estoy condenada a la desgracia?”

-Sí y cállate ya, esa es la volun-tad del Señor y tienes que acep-tarla -gritó la Madre Violet.

Los otros dos hombres tiraron

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sigue >>>



JUEGO DE MESA

de la muchacha, mientras ésta grita-ba, lloraba y daba patadas. Las monjas no pudieron retener a las jóvenes que observaban la terrible escena. Entre la multitud se oyó un grito desgarrador, era Drusilla, aquel grito era más que un grito, era la manifestación externa de la rotura de su corazón, ahora es-taba reviviendo de nuevo la muerte de su hermana, era algo más grande de lo que podía soportar. Sufrió una crisis de ansiedad. Edith no supo nada más de ella, aquellos hombres ya la sacaban del colegio, ahora se dirigía hacia su condena, hacia el convento en el que pasaría el resto de su vida.

Ahora, cuando Edith contaba ya con 40 años, se encontraba en la habita-ción en la que había estado recluida durante 18 años, observando las mis-mas paredes vacías, el mismo camas-tro con el juguete entre sus dedos como aquella tarde de junio, esperan-do quizás ver aparecer a su amado o a la muerte. Todas las esperanzas se ha-bían agotado al igual que su juventud, sus amigas y de todo lo que había sido su vida. Sólo había una cosa que aún la mantenía viva, sabía que aquello no acababa en esa celda y esperaba con ansias la muerte porque allí volvería a estar con Marc, no sabía si en el cielo o en el infierno, aunque no le importa-ba demasiado ya que estarían juntos. Desde que estaba allí no recibía apenas noticias del mundo exterior, la última noticia que tenía de sus compañeras es que Margaret acabó sustituyendo a la Madre Violet en su cargo y de que su querida Drusilla había fallecido de pena, sola, encerrada en su habitación al poco tiempo de que Edith abando-nara el colegio.

Edith permanecería encerrada allí durante dos años más, la dulce muerte vino a buscarla una tarde de primave-ra. Por fin estarían juntos, su amor era mas fuerte que la sangre, más fuerte que ningún Dios, el amor que ellos se tenían era eterno.

> FIN DE ‘VIDAS CRUZADAS’ <

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Todas las esperanzas se habían agotado al igual que

su juventud.

Hablemos de juegos de mesa: de rol, Warhammer. Yu-gi-oh, Magic... Yo os quería hablar de Magic, un juego de cartas que lleva desde 1993 y ¡sigue vendiendo!

En el juego interpretas el papel de un mago (de ahí el nombre, Magic) y con tu baraja (Biblioteca) puedes invocar conjuros, criaturas, instantáneos... El objetivo del juego es reducir de 20 a 0 las vidas de tu oponente, antes de que él (o ella) haga lo mismo contra ti.

Hay seis tipos de cartas: Tierra, Encantamiento, Instantáneo, Conjuro, Artefacto y Criatura.

Y 5 colores: Negro, Rojo, Azul, Verde y Blanco.Os puedo decir lo que representan los colores:

-Negro: la oscuridad.-Rojo: el poder del fuego.-Azul: el poder del agua.-Verde: la vida.

la luz.También puedes hacer combinaciones de colores.

Para terminar, mando un saludo a: Saúl, Guille (Willy), Álvaro (The Ryl), Álvaro (Arri), Dany, Jose (Steve), Javi, Gonzalo, Jorge, David y Adri.P.D.: A los que he nombrado: cuando queráis echamos una partida, OK?

Me despido con unas frases:-Cuando la mujer sabia terminó de pintar de negro todas las

hojas del libro, cogió el pincel blanco y volvió a comenzar.

-Cuando perdéis todo vuestro tiempo aprendiendo las reglas, luego no tenéis tiempo de romperlas.

-”Olvidad lo que nunca se supo”.

por José Luis Barrera


Año V I I ~ Nº 3 ~ D ic i embre / 2006 [ # 7 7 ] La Mandr agoraNUESTRO HOMBRE EN ÁFRICA

ASTÉRIX EN SOMALIANuestro corresponsal en África ya no está en la República Democrática del Congo. De sus trabajos en aquel inmenso país dejó constancia en La

Mandrágora del curso pasado: ver números 4 y 5. Ahora el Congo está más tranquilo, y nuestro hombre de acción –y pasión– se ha ido a Somalia, un auténtico avispero, a echar allí sus generosas manos de ayuda, manos sin fronteras. Esta es la segunda entrega de su relato.

La megafonía de la mezquita de al lado te despierta a las cuatro y media de la mañana. Tocan los maitines. Esta-

mos en Ramadán, y a partir de esta hora no se puede comer ni beber hasta que se ponga el sol. Lo de comer pase, pero todo el día sin beber en este erial tiene tela. Ayer aguanté seis horas sin agua y fue heroico. El pinche de cocina se descojonaba de mí. Para desquitar-me le puse a jugar a la playstation, a un jue-go de baile en donde tienes que pisar flechas sobre una alfombra que está conectada a la consola. Lo tengo grabado en vídeo. Impaga-ble documento gráfico, digo. El hombre sólo habla somalí y un poco de italiano, y conseguir comunicarte con él más allá del bona sera o el grace / prego es todo un triunfo. Pero qué garbo le echa bailando. Cuentan que de joven estuvo con las tropas italianas; seguramente será una leyenda urbana, pero tiene más gra-cia si te lo crees.

En un país en donde la esperanza de vida no llega a los 50, pasarte quince años sin esta-do es demasiado tiempo. Más de un tercio de la población no ha conocido otra cosa que la guerra, y en las ciudades no hay muchas alter-nativas a coger un arma. Los más viejos están hasta los cojones de tanto señor de la guerra, tanto reino de taifas y tanta gaita. Así, en los últimos meses ha empezado a crecer en Moga-discio el apoyo popular a los Tribunales Islámi-cos, un movimiento político-religioso (con sus milicias armadas, como todo hijo de vecino) que al menos impone cierto orden haciendo aplicar la ley islámica. Dura lex, sed lex.

Mientras, la comunidad internacional, ajena al movimiento islamista, tuvo la genial idea de apoyar la creación artificial de un parlamento y un gobierno formados por un batiburrillo de señores de la guerra: cogieron a los más malos de la clase y los hicieron parlamentarios para que no hiciesen ruido. Salió elegido presidente un cacique de currículo especialmente carnice-ro, un tal Abdillahi Yusuf cuyo único mérito es ser aliado de Etiopía (y de EEUU en su cruzada antiterrorista) Ganó porque fue el que más vo-tos compró. Pero es un rey sin trono que nun-ca se ha atrevido a entrar en Mogadiscio. Los propios miembros de su gabinete, cada uno con sus propias milicias, alimentan el no-esta-do (y el no-gobierno) para no hacer peligrar su poder. Hasta ahora el “presidente” no controla más que Baidoa, una ciudad al sur del país, cercana a la frontera de Etiopía.

Por cierto, los americanos no aprenden. ¿Cómo se puede ser tan pésimo analista? Se empeñan en creer que los enemigos de sus

enemigos son sus amigos, y así les luce el pelo. Son como la NBA en el último mundial de Japón: son los más poderosos, los más rá-pidos, los más fuertes, etc. pero son incapaces de jugar en equipo, ni de saber quién es el rival, ni de enterarse de qué va el partido. La Unión Europea, otra que tal baila, también está en su línea habitual, sabiendo lo que no quiere (que esto se convierta en un nuevo Irak) pero sin saber lo que quiere. Como siempre, ingle-ses, franceses, italianos y alemanes tirando cada uno por su lado. Del resto de la UE, nada, salvo alguna excepción escandinava.

En los últimos meses, ante la sorpresa de propios y extraños, los Tribunales Islámicos se han hecho con el poder en todo Mogadiscio. Es la primera vez desde 1991 que la ciudad está controlada por un único gobernador (en los úl-timos tres lustros Mogadiscio ha sido una ficha del trivial, con varios señores de la guerra con-trolando un quesito cada uno) La mejoría para la población es evidente con la unificación.

Pero los islamistas no se han parado ahí; en tres meses más se han extendido por casi todo el centro y sur del país, derrotando o ha-ciendo huir a los señores feudales de la zona y conquistando, entre otras ciudades, la mía, Jowhar. Esto fue a principios de este verano.

En estos momentos tienen sitiado al gobier-no de Yusuf en Baidoa. Éste se mantiene con ayuda del ejército etíope, que ha entrado de extranjis en el país (oficialmente lo niega todo) Hace un par de días se produjeron los prime-ros enfrentamientos entre los islamistas y la alianza formada por los etíopes, las milicias de Yusuf y otros señores de la guerra de la zona. Los “aliados” lanzaron el primer ataque y se acercaron a Jowhar, pero en cuestión de horas los islamistas contraatacaron y los devolvieron a su redil.

No creo que este ataque fallido fuera un mal cálculo de los etíopes, sino más bien una provocación. Etiopía busca la autorización de la comunidad internacional para un despliegue a lo grande de tropas etíopes y ugandesas bajo el paraguas de la Unión Africana, con la excu-sa de apoyar al gobierno “legítimo” de Yusuf. Para ello intenta pintar a los islamistas como peligrosos terroristas: los tacha de fundamen-talistas violentos y pro-AlQaeda a los que hay que aniquilar.

Por su parte, los Tribunales Islámicos ne-cesitan a su vez el reconocimiento internacio-nal, e intentan exportar su cara más amable, moderada y dialogante. En realidad, dentro de los islamistas hay de todo: jihadistas pirados, intelectuales moderados, oportunistas, cha-queteros, nacionalistas, fundamentalistas pa-

cíficos,... Está claro que cuanto más se polarice y se internacionalice el conflicto, menos peso tendrán los más moderados y más poder ad-quirirán los violentos, y esto es precisamente lo que busca provocar Etiopía. • (continuará)

Fdo: M.A.F.

II



...me pego de sopetón con una panda de chiflados que bajan las escaleras a toda pastilla a las órdenes del Capitán Dani (“Al turrón”) e incitados por la posibilidad de conocer a Takesi (Teresa). ¡Jesús, lo que ‘Humor Amarillo’ hace a la gente!

Saliese yo a la calle y me reuniese con mis amigas, cuando mi abuelilla gritase por el telefonillo: “¡Niña, compra pan!” Y contestásele yo: “Sí, abuelilla, bye”. (¡Jo, qué cansi-na!). Riéndose mis amigas de mí, ponemos camino hacia el camino (no sé si me entiendes: todos los profes dicen que el estudio es el camino hacia el trabajo) comentando lo que hiciésemos ayer tarde:

–¿Saliste con “Acelgas”? –preguntase yo.–No. Estaba con “Tudi-Ton” –contestase ella.–Pues yo estuve con Pinki-Güinki –pa’ que se pique.Minutos después... llegase yo a clase y encontráseme

con un pandemónium magistral. Resultóse que “Pachi Pe-lusa” (un profe) no había llegado aún y por tanto no había clase. Enfadase esto a unos y alegrase a otros.

–¡Qué bien!–¡Con lo a gusto que se estaría en la cama...!Empezase el día con buen pie, volviese a la rutina esco-

lar y encontrase la tranquilidad. Seis horas después volvería el caos y los gritos (my brother is loco) y esta paz “bendita” desaparecería. Pero ahora estoy en mi momento. ¡Este es mi lugar en el mundo: mi clase! ¡Parezco una loca!

FIN

P.D.: Ha sido un placer aburrirles con mi vida.

DIARIO DE... ¡UNA ABURRIDA!Anónimo


Año V I I ~ Nº 3 ~ D ic i embre / 2006 [ # 7 7 ] La Mandr agoraDIBUJO

Hecho por Soraya Pedrero



DESDE EL OJO DEL TRIÁNGULO

Si eres estudiante de bachillerato, te gusta escribir y te interesan los Derechos Humanos… ¡Ésta es tu oportunidad! Participa en la II Olimpiada Filosófica de Castilla León presentando un breve ensayo en el que expreses tu punto de vista particular sobre esta impor-tante cuestión.

La penetrante mirada de la Filosofía se ha dirigido este año a la decisiva encrucijada en que se encuentra el mundo actual. Por una parte, parece incuestionable la necesidad de buscar unos valores ético-cívicos bá-sicos que nos permitan convivir en la sociedad, valores que identificamos con los Derechos Humanos. Al mis-mo tiempo, la resistencia de ciertos grupos o culturas a asumirlos como valores propios así como la negación práctica que sufren por parte de las mismas naciones que pretenden ser sus representantes los ponen en peligro. Si aún no has perdido la esperanza de que el mundo pueda acercarse algún día a una época de paz y justicia, por difícil que esto sea, y tienes algo que de-cir al respecto acepta el reto de un papel en blanco y expón tus ideas sobre esta decisiva cuestión.

Redacta un ensayo de cuatro páginas de extensión escritas con el siguiente formato: Times new roman, 12 puntos, margen izquierdo y derecho de 3 cm., margen superior e inferior de 2,5 cm., espacio interlineal 1,5 líneas. Entrega el ensayo a cualquiera de los profeso-res del Departamento de Filosofía antes del final de la primera evaluación en un sobre grande sin cerrar, fir-mado con seudónimo, y en el interior del sobre grande un sobre pequeño cerrado que contenga los siguientes datos: seudónimo y nombre real del alumno al que co-rresponde, curso, centro, dirección personal, teléfono de contacto, dirección de correo electrónico (si se po-see) y nombre del profesor de filosofía que le imparte clase.

Los profesores del Departamento de Filosofía corre-girán los ensayos entregados conforme a unos criterios de evaluación que se harán públicos en los tablones de anuncios del centro. Tales criterios recogerán lo que tradicionalmente ha venido constituyendo la práctica filosófica: utilización adecuada de los conceptos, ar-gumentación clara y correcta, relevancia de las ideas utilizadas o de los autores citados… Serán selecciona-dos como máximo dos ejercicios, que serán enviados al Departamento de Filosofía de la Universidad de Sa-lamanca con el 12 de enero como fecha límite, donde se seleccionarán los 18 mejores ensayos de entre los recibidos para la final, que tendrá lugar un día aún por determinar de los meses de marzo o abril (en torno a Semana Santa).- JESÚS VÉLEZ

EUROPE TIENE NUEVO DISCO

Bueno, ahí va la noticia buena y es que este grupazo, porque hay que llamarlo así, ha sa-

cado recientemente nuevo disco. Un disco titula-do Secret Society. La inmensa mayoría conoce a este grupo por la excepcional canción que sacó en los ochenta, sí, sí, estoy hablando de The Fi-nal Countdown. Estoy seguro de que sabéis qué canción es. Pues he de decir que todo aquel que en este nuevo disco espere encontrar aquel estilo de los ochenta en Europe, se va a llevar una sor-

presa ya que Europe desde entonces ha cambiado su estilo, un estilo al que estos ‘genios’ han conseguido dar modernidad. Tenían ya un disco del 2004 que ha pasado un tanto… inadvertido, pero quizá Secret Society sea una especie de renovación. Este nuevo trabajo contiene canciones muy buenas y preciosas, canciones tan buenas como Always The Pretenders e incluso canciones como Let The Children Play, en la que utilizan un coro de niños. También es cosa extraña escuchar al cantante Joey Tempest cantando en una tesitura un tanto digamos baja. Si yo recomiendo siempre los discos, este lo superrecomiendo a todos, a los metaleros y a los que no, este grupo sueco nunca defrauda.

por Iván García

La Mandrágora del ‘León Felipe’ está disponible en internet en la página del Instituto:

http://centros5.pntic.mec.es/ies.leon.felipe2/

AVISO PARA LOS INTERESADOS EN PARTICIPAR EN LA

II OLIMPIADA FILOSÓFICA DE CASTILLA LEÓN

Esta vez, lamentablemente, tengo dos noticias, una buena y otra

mala.

SARATOGA, ROTA POR EL MOMENTO

Y ahí va la mala noticia: hace poco el grupo español Saratoga comunicó en su página

web oficial que dos de sus miembros dejaban el grupo, el guitarrista Jerónimo Ramiro y el excepcional vocalista Leo Jiménez. Una noticia terrible, y seguro que todos los fans que se han enterado y los que se enterarán al leer esto se llevarán un gran chasco como me lo llevé yo, por-que un servidor es gran fan de Saratoga. Pero los miembros fieles que quedaron Niko y Andy dentro de lo que cabe nos han tranquilizado al decirnos que van a continuar, que este no es el fin de Saratoga y que se necesitará tiempo para buscar nueva gente. Jerónimo, para los fans Jero, explicó que este plan estaba ya en su mente desde principios de año y que se lo había comunicado al resto de la banda, las razones que dio es que lleva mucho tiempo en la banda, 15 años, y esto debe de suponer agotamiento, pero hemos de respetar la deci-sión de Jero y desearle buena suerte en sus futuros proyectos. Leo comunicó que este trabajo seguido de tantas giras y su dedicación total en la banda estos últimos años le han agotado y necesita dar un parón, parón por el cual, según dijo, sus compañeros no pueden esperar y abandona. Hay que decir que Leo ha sido un cantante fantástico al que todos los fans le deseamos mucha suerte y podremos escuchar en su grupo paralelo Stravaganzza, del que el mismo Leo dijo que no tenía nada que ver en su marcha de Saratoga. En fin, un palo muy grande, pero suerte a Leo y Jero.

NOTICIAS BREVES:-Warcry es dvd de oro del ultimo dvd que sacó, Directo a la Luz y tiene nuevo disco, La Quinta

esencia, del que hablaré.-Hammerfall, cabreados por la piratería.-Rammstein saca una edición recopilatoria llamada Volkerball, bueno, en realidad una edición

dividida en tres para todo tipo de bolsillos. Una edicion estándar, una especial y una limitada, a gusto del consumidor y estos dentro de poco tambien tienen nuevo disco.

-La edición coleccionista platinum de Heroes del silencio, ya a la venta.-Paul Stanley de Kiss ha sacado un disco en solitario titulado Live To Win, otro del que hay que

hablar.-Slipknot, tratados de saboteadores, de esto sí que hablaré en el próximo, es importante.

(dedicado a alguien a quien quiero mucho)


Año V I I ~ Nº 3 ~ D ic i embre / 2006 [ # 7 7 ] La Mandr agoraAGENDA, FELICITACIÓN...

DICIEMBRE:−> Día 1: Día Mundial de la lucha contra el SIDA.−> Día 6: Día de la Constitución Española.

−> Día 10: Día Mundial de los Derechos Humanos. Nota: Los murales que conmemoran estas celebraciones habrán

sido realizados por alumnos de 3º y 4º de ESO y 1º de Ba-chillerato.

−> Días: del 11 al 22: Exposición en el vestíbulo del Instituto de las tarje-tas seleccionadas y premiadas correspondientes al IX CONCURSO DE TARJETAS DE NAVIDAD.

AYUDA HUMANITARIA PARA LOS NIÑOS DEL SÁHARA: Podéis entregar alimentos no perecederos (azúcar, aceite, legumbres, pasta, arroz...) durante los meses de noviembre y diciembre, en el Dpto. de Extraescolares a la hora del recreo.

CONVOCATORIA DE LA XXXI edición del CONCURSO LITERA-RIO ‘LEÓN FELIPE’.

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ENERO (2007):−> Día 11: Viaje del Dpto. de Francés a Valladolid, con alumnos de 3º y

4º de ESO.

−> Día (por determinar): Entrega de los PREMIOS DEL IX CONCURSO DE TARJETAS DE NAVIDAD.

−> Día 30: Día escolar de la No Violencia y la Paz.

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► Faz uma chave, mesmo pequena, / entra na casa. / Consente na doçura, tem dó / da matéria dos sonhos e das aves.// Invoca o fogo, a claridade, a m

úsica / dos f ancos. /Não digas pedra, diz janela. / Não sejas como a sombra. // Diz homen, diz criança, diz estrela. / Repete as sílabas / o

nde

a lu

z é fe

liz e

se d

emor

a. //

Vol

ta a

diz

er: h

omem

, mul

her,

cria

nça.

/ O

nde

a beleza é mais nova. ●► Haz una llave, aunque sea pequeña, / entra en la casa. / Permite la dulzura, ten piedad / de la

materia

de lo

s sueñ

os y d

e las aves. // In

voca

el fueg

o, la cla

ridad, la

música

/ de los f ancos. / Ni digas piedra, di ventana. / No seas como la sombra. // Di hombre. di niño, di estrella./ Repite las sílabas / d

onde

la luz

es fel

iz y

se

dem

ora

. //

Vuel

ve a

dec

ir:

hom

bre

, m

uje

r, n

iño./

Donde

la belleza es más nueva.●

Dibujo: Sadao Watanabe // Poema: Eugénio de Andrade / / Traducción: Ángel Campos Pámpano

SACRIFÍCATE–Y… ¿qué?–Pues eso, que a veces hay cosas. Cosas bue-

nas. Cosas malas. O simplemente cosas. Cosas que suceden, cosas que no; cosas que siempre espera-mos que sucedan y que en una parte de nosotros ya han sucedido de un modo u otro. Son cosas que queremos recordar y tarde o temprano olvidamos; cosas que queremos olvidar y nunca lo consegui-mos, por lo que las tapamos con otras cosas. Siem-pre hay cosas. Siempre y en todas partes. No im-porta dónde, al fin y al cabo… son cosas.

También hay cosas que te hacen perder la pa-ciencia (el grifo abierto inútilmente), la esperanza (enésima negativa), la fe (desengaños no creíbles), el aliento (el beso bajo las sábanas), la respiración, la razón (todo lo que viene después) e, incluso, hay cosas que te hacen perder la cabeza. Estas últimas tienen los ojos azules y nombre de…

…¿por qué me miras así?–¿No se lo dirás?–Aún no quiere saberlo…

ACUARIO


Pág. 24I. E. S. León Felipe – Benavente

En la orilla, un mism

o viento agita el blando sueño tropical de la palmera y la firm

e vigilia polar de la bufanda. Amarillo-calor y negro-frío conviven en la escena: el día que se va y la noche que ya llega.

Extrañamente ajeno a todo, rem

anso de paz ¿por cuánto tiempo?, el barquito ha puesto rum

bo al sol. Y las gaviotas parecen, a la luz del crepúsculo, oscuras cejas que le hubieran salido al aire.El-del-fin

Hecho por Pilar Mielgo Sánchez

LA MANDRAGORA Nº 3 - AÑO 7 #77

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