La industria química mexicana pierde entre 20 y 30 millones de dólares por robo de sus productos y el problema e1npeora año con año. POR MÓNICA CRUZ

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® La empresa importa el material de Estados Unidos, Canadá o China. Luego lo transporta a bodegas.

La empresa monta el material en tráileres y trenes, ya sea a granel o en sacos o cajas.

Asalto en carretera: los ladrones atacan al conductor del tráiler para tomar control del vehículo.

ILUSTRACIÓN: SKINPOP STUOIO

Ordeña: los ladrones succionan con bombas el material a granel y lo depositan en sus vehículos.

Robo a trenes: los ladrones descargan el material de los vagones cuando el tren está detenido.

El material termina en bodegas clandestinas para su venta en el mercado negro.

1 afondo

Algunas empresas dicen que dan compensaciones a sus clientes por el material robado.

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a bajar del vehículo", señala Apperti, quien declinó revelar detalles de los casos que ha registrado su aso­ciación por respeto a las políticas de confidencialidad de las empresas que representa.

Por la misma razón, la oficina en México de Dow Chemical, firma global con tres plantas en el país, de­clinó comentar para este reportaje. Expansión obtuvo la misma respuesta de Mexichem, una de las compa­ñías químicas más grandes de América Latina y la cuarta mexicana con más plantas y oficinas en el ex­tranjero. Grupo Alfa, consorcio propietario de Alpek, una de las principales empresas petroquímicas de México, negó hablar sobre el tema.

Las que sí aceptaron comentar aseguran que el problema no les afecta o les afecta muy poco. Empre­sas químicas, como BasfMexicana y Cydsa, informan que no registran robos porque sus productos, quími­cos para uso industrial, son muy especializados para la venta ilegal.

DuPont, compañía estadounidense que participa en sectores como el de energía, alimentos y bebidas, construcción y sustancias químicas, tiene 14 unida­des (oficinas y plantas) en el país. La empresa en Mé­xico registra menos de 10 casos de robos en carreteras al año, pero eso representa menos de 0.5% del núme­ro total de sus viajes, señala Juan Carlos Arámbula, jefe del departamento de Seguridad de DuPont en México y América Central.

Por políticas internas, la compañía no puede reve­lar el número exacto de casos de robo, indica Alejan­dra Gaucin, gerente de Asuntos Públicos de DuPont en México.

A pesar de la baja incidencia, desde 2005, DuPont implementa un programa contra robos, que incluye evaluaciones de seguridad de las rutas por donde via­jan los tráileres y el monitoreo de sus vehículos con GPS. Arámbula agrega que la compañía evita que los vehículos que transportan su mercancía viajen du­rante la noche, cuando son más vulnerables.

RESINAS, GASES Y NARCOS El puerto industrial de Altamira, Tamaulipas, concen­tra 30% de la producción privada de químicos y pe­troquímicos en México, de acuerdo con datos del Consejo Industrial del Sur de Tamaulipas. El estado es también el principal productor de resinas en el país, como el polipropileno y el PET, predilectos de los robaplásticos, explica Apperti, porque pueden transformarse en productos como pinturas, botellas, bolsas y juguetes.

Según registros de este consejo empresarial, en 2014, las petroquímicas de Altamira perdieron un poco más de 10 millones de dólares por robo de mate­riales, equivalente a 4,500 toneladas de plásticos. Aunque sólo representa 0.5% del total de resinas que se mueven en la zona, Apperti asegura que la inciden­cia se ha vuelto preocupante.

"Ha tenido ciclos. De repente ha sido muy inten­so, de repente baja, pero desde hace cuatro años ha

ILUSTRACIONES: SKINPOP STUDIO

ROBO DE MATERIALES 1 a1ónclo

ROBO AL TREN DEL POLÍMERO Las resinas de origen petroquímico son los materiales más codiciados por bandas criminales porque pueden transformarse en productos rentables.

POLIETILENO El plástico más popular del mundo por su estructura simple que permite moldearlo y

transformarlo fácilmente.

PRODUCTOS MÁS COMUNES

Bolsas

para

basura

Pipas de

agua o

tuberías

Cubetas

POLIPROPILENO PRODUCTOS MÁS COMUNES

Plástico versátiL más resistente al calor que polietileno. También se utiliza como fibra.

OTROS POLÍMEROS De usos más específicos por su flexibilidad. resistencia o alta densidad.

Contenedores

para

alimentos

. . . .

PRODUCTOS MÁS CO MUNES

Juguetes

Alfombras

Envases

para

cosméticos

Zapatos

(tipo Croes)

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estado estable y se ha vuelto recu­rrente", comenta.

"Es una situación terrible", excla­ma el directivo de una empresa de logística de resinas plásticas con una planta en Altamira que pidió no reve­lar su identidad. Él asegura que su compañía, con sede en Europa, ha registrado casos de robo desde que opera en México, hace casi 20 años, pero, año con año, incrementan.

mos, lo vendemos como desperdi­cio", comenta.

Ella asegura que no es la primera vez que la policía encuentra bodegas clandestinas de plásticos en Queréta­ro, pero dice que no sabe más del asunto. Su empresa tampoco hace muchas preguntas, agrega.

En su sitio web, la Asociación Na­cional de la Industria Química (ANIQ)

reconoce la existencia de un mercado En los últimos 12 meses, la compa­

ñía sufrió por lo menos 10 robos, se­ñala el directivo. "Tan sólo uno es capaz de distorsionar toda la cadena de operación", asegura.

Tamaulipas también registró el mayor número de tomas clandestinas en los duetos de Pemex el año pasado, 685. Tan sólo en Altamira se registra­ron 331, según un reporte de la empre­sa petrolera.

TONELADAS DE RESINAS ROBARON LOS CRIMINALES

DE LAS EMPRESAS DE ALTAMIRA EN 201LJ.

negro que se alimenta del robo de mercancía en las carreteras y en las vías ferroviarias, pero no menciona cómo funciona este negocio y quienes se benefician de él.

La asociación declinó comentar para este reportaje. Uno de sus miem­bros, DuPont México, también sabe que hay un negocio ilegal de produc­tos químicos, pero nada más, asegura Arámbula, el jefe de seguridad para México y América Central. " DuPont lleva todo un proceso de investiga­ción con el transportista y él realiza la denuncia correspondiente. Sin em-

Un representante del gobierno municipal que prefirió no revelar su nombre explica que los delitos que ocurren en el puerto industrial no son responsabilidad de la autoridad

TOMAS CLANDESTINAS DE DUCTOS REGISTRÓ PEMEX EN TAMAULIPAS EN 201LJ.

local, ya que es una jurisdicción fede-ral. Expansión buscó a la Policía Fede-ral, autoridad competente en casos de robo en el puerto o en carreteras, pero no obtuvo respuesta.

Estos casos podrán afectarle más a las empresas químicas y petroquímicas en Altamira que a otras, pero no quiere decir que los robos sólo sucedan en esa zona.

"Se da en cualquiera de las carreteras nacionales, sobre todo hacia la Ciudad de México, hacia el occi­dente, Guadalajara y el Bajío", comenta Apperti.

Los lugares de más incidencia, los métodos de robo y las cantidades se conocen, pero la industria petroquímica dice saber muy poco sobre la identidad o el negocio de los ladrones de plástico.

ORO BLANCO, MERCADO NEGRO La empleada de la gran empresa química dice que un año antes del asesinato del conductor en Guanajuato, el departamento legal de la compañía recibió una lla­mada de la Policía Federal. Los oficiales encontraron una bodega clandestina repleta de sacos y cajas con plásticos al lado de una carretera en el sureste de Querétaro, cerca de San Juan del Río. Entre bultos, los oficiales detectaron sacos blancos con polietileno marcados con el logo de la empresa donde ella labora. "¿Los quieren?", preguntaron.

La empresa los aceptó, pero una vez robados, esos 25 kilos de plástico pierden casi todo su valor en el mercado, explica la empleada. "No sabemos por dónde ha pasado o qué han hecho con él. Si lo vende-

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bargo, no se tienen detalles de las ave­riguaciones para conocer quién o quiénes cometieron el delito", escri-

bió Arámbula en un correo electrónico a Expansión. Luis Apperti, del consejo empresarial tamaulipe­

co, dice que, según sus indicadores, los ladrones de plástico no trabajan de manera aislada y no son unos cuantos. "Son parte de una red muy bien organizada que también tiene otros giros, como la ordeña y robo de combustibles", apunta.

Agrega que si su asociación tuviera más detalles del mercado negro de productos petroquímicos, los divulgaría. Pero hasta ahora sólo existen teorías. "No nos corresponde a los empresarios hacer labor de po­licía, ni investigador", comenta.

TOTAL CONFIDENCIALIDAD En el último Foro Nacional de la Industria Química, el presidente de la ANIQ, Alejandro Llavera, no ocultó que su industria sufre por la inseguridad.

"En algunas ciudades está llegando a niveles insos­tenibles, pone en riesgo la integridad de nuestro per­sonal e, incluso, la viabilidad de nuestras operacio­nes", dijo durante un discurso el también presidente del área de polipropileno de Alpek de Grupo Alfa.

Otra organización preocupada por esta situación es la Asociación Nacional de Industrial del Plástico (Anipac). "El tema del robo de materias primas en la industria es algo que a la Anipac le gustaría dar a co­nocer", comentó Javier Neyra, su enlace de prensa. Sin embargo, dijo que, por el momento, la asociación no dará entrevistas al respecto.

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En el foro de la ANIQ, su presi­dente también reveló que la in­dustria química pierde entre 20 y 30 millones de dólares al año por robo de mercancías.

Esta cifra no representa pérdi­das graves para la industria quírni­ca en México, al menos no se refle­ja en los reportes financieros de las principales empresas de este sector, indica Fernando Bolaños, analista de Monex. "No es corno que tengas un rubro en los repor­tes de pérdidas por robo o un in­cremento en los gastos de seguri­dad de sus materiales", comenta. "La magnitud no es suficiente­mente importante".

Los robos no sólo provocan pérdidas de ingresos. También elevan los costos de seguridad, ex­plica el directivo de una empresa de logística. Su compañía ha in­crementado estos costos en un 30% este año. "Ya no se puede ma­nejar a ciertas horas, ya no se puede operar en ciertas zonas, te­nernos que contratar escoltas", dice. " El problema es que el go­bierno no ha establecido progra­mas serios para proteger carrete­ras. Ellos son los únicos que pueden hacerlo".

La Secretaría de Gobernación, en sus índices de inseguridad, re-gistró 2,366 casos de robo de vehí-

Los Zetas, lnc. El caso de ordeña ilegal en Tamaulipas que escandalizó al mundo.

La crisis de las tomas

clandestinas de duetos de

Pemex en Tamaulipas se

convirtió en noticia interna­

cional en 2010. Pemex

demandó en Estados Unidos

a la alemana Basf, una de las

compañías químicas más

grandes del mundo. por

haber comprado condensado

de gas natural extraído

ilegalmente de su plataforma

de la Cuenca de Burgos, en

Tamaulipas.

Pemex alegaba que

iemb ·os del cártel de Los Zetas ordeñaban duetos de la .ona para tra "ic ·los a Texas. Basf argumentaba

que los vendedores del gas le

aseguraron que Pemex había

autorizado la compra. La

paraestatal lo negó

Un juez en Texas falló

en favor de Basf en 2014. Concluyó que. después de

pasar por una cadena de

vendedores, el origen ilegal

del producto se volvió

imperceptible para la

compañía.

"Las empresas no se atreven a decirle a las autoridades: 'Al cho­fer de la línea fulana lo golpea­ron', porque a lo mejor el dueño de la transportista no quiere de­nunciar", dice.

Algunas empresas denuncian, pero no dan seguimiento a los pro­cesos judiciales por temor, dice el directivo de una empresa de logís­tica bajo anonimato. " Es corno cualquier persona, uno la piensa dos veces antes de denunciar un delito, tienes que dar tus datos per­sonales y no sabes qué puede pasar. Es el huevo y la gallina, las autoridades nos piden que denun­ciemos, pero no es fácil", comenta.

El directivo dice que algunas empresas sólo denuncian para que las aseguradoras autoricen las primas. Pero otras ni siquiera están aseguradas contra este tipo de robos, dice la empleada de una de ellas, que ha registrado más de un caso de robo a sus productos. "Nos sale muy caro, preferirnos ofrecer créditos o pagarle a nues­tros clientes cuando se pierde el producto", comenta.

"¿Y EL PRODUCTO?" Había conocido al conductor del tráiler dos meses antes de que lo asesinaran. Éste le platicó de su vida corno rnigrante en Estados

culos de carga en carreteras el año pasado, 1,840 fue­ron con violencia. Los índices, basados en reportes de las agencias policiales a nivel nacional, muestran 349 casos menos de este tipo de robo en compara­ción con 2013.

Unidos: ahí aprendió a manejar tráileres. Le contó que tenía dos hijas y que una de ellas pronto termina­ría la licenciatura.

Sus jefes le han dicho que es de las pocas gerentes que hablaban a los conductores. "Así soy yo, no es parte del entrenamiento", asegura. Pero la Asociación Mexicana de Seguridad Priva­

da, Información, Rastreo e Inteligencia indica en su último reporte que el número de robos aumentó 30% en 2014 en comparación con el año anterior.

El gobierno sólo registra los incidentes que descu­bre o que la gente denuncia y en el caso de las empre­sas esto no siempre sucede. Apperti dice que su con­sejo industrial alienta a las compañías químicas a denunciar casos de robo de su mercancía a las autori­dades, pero sólo la mitad lo hace, señala.

Casi todas las empresas que no acuden a la policía están obedeciendo políticas internas o convenios de confidencialidad que firman con otras compañías, asegura Apperti.

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Tampoco es parte del entrenamiento preocuparse por ellos cuando sus vehículos desaparecen del radar, agrega. "Cuando aquí le digo a alguien que se perdió una autotolva, lo primero que preguntan es: '¿Y el producto?' Nunca '¿y el conductor?"'.

Pero ella sí preguntó por él esa mañana de marzo de 2013. La respuesta no era la que esperaba. Recuerda que no supo qué decir cuando recibió la noticia de su muer­te. "Sólo dije 'gracias' y colgué", dice. "Me quedé fría".

Ya no trabaja en el área de logística de esa gran em­presa química. Asegura que aquel incidente no fue lo que la convenció de transferirse a otro departamento, pero después de una pausa, murmura: "Es muy rudo".�