La Cuaresma (cuarentena): Significado Espiritual del n 40Quiero aprovechar, que nos encontramos transitando por tiempo cuaresmal para acercarnos al significado espiritual que encierra este evento csmico.Como en otras ocasiones, analizaremos el enfoque que nos aporta el saber popular, para ello consultaremos la fuente Wikipedia, y como no puede ser menos, buscaremos el sentido espiritual y esotrico, para lo cual, citaremos las enseanzas escritas por Kabaleb. Igualmente, haremos valer el conocimiento que nos aporta la numerologa, as como el Tarot, para descifrar el significado esotrico del n 40.

Enseguida el Espritu le empuj hacia el desierto.13Permaneci en l cuarenta das, tentado por Satans, y moraba entre las fieras, pero los ngeles le servan (Marcos1, 12-13).

Nos relata la crnica sagrada que despus de recibir el bautizo, Jess, ya con la personalidad crsticaincorporada, fue transportado por el espritu al desierto y sometido a las tentaciones del Diablo. Pas all cuarenta das ayunando y, nos dice Marcos, estaba con las bestias salvajes.En el lenguaje simblico, las bestias salvajes son nuestros instintos y bajas pasiones.

El trabajo de purificacin dur cuarenta das, justo los que dura la Cuaresma. Los estudiantes de angeologa saben que cuarenta son los das regidos por cada uno de los nueve coros de ngeles (ya que cada ngel tiene cinco grados de regencia en el zodaco y hay ocho ngeles por coro (5*8=40)), y que el periodo cuaresmal que va de veinte grados de Acuario a treinta de Piscis, est regido por el coro de ngeles de Yesod, especializado en los trabajos de purificacin del cuerpo vital, purificacin indispensable para actuar conscientemente en los mundos de arriba y para recibir el mensaje divino que todos los aos se desprende del signo de Aries cuando el sol transita por l a partir del 21 de marzo.

Cuarenta das de ayuno dejan el cuerpo limpio, transmutan integralmente la personalidad y permiten al individuo renacer, cualesquiera que hayan sido los errores que haya podido cometer. Es difcil que una enfermedad subsista despus de cuarenta das de ayuno y de ellos sale el Hombre Nuevo.

Qu es la Cuaresma?

La Cuaresma: del latn: quadragsima, Cuadragsimo da (antes de la pascua) es el perodo del tiempo litrgico (calendario cristiano) destinado por la Iglesia catlica, la Iglesia catlica ortodoxa y la Iglesia anglicana, adems de ciertas Iglesias evanglicas, aunque con inicios y duraciones distintas, para la preparacin de la fiesta de Pascua.

Oficialmente,la Cuaresmacomienza elmircoles de Cenizay termina justo antes de la "Misa dela Cenadel Seor" en la tarde delJueves Santos.La duracin de cuarenta das proviene de varias referenciasbblicasy simboliza la prueba de Jess al vivir durante 40 das en el desierto previos a su misin pblica. Tambin simbolizan los 40 das que dur el diluvio, adems de los 40 aos de la marcha del pueblo israelita por el desierto y los 400 aos que dur la estancia de los judos en Egipto.A lo largo del tiempo de Cuaresma, los cristianos son llamados a reforzar sufemediante diversos actos de penitencia y reflexin.La Cuaresmatiene cinco domingos ms elDomingo de Ramos(seis en total), en cuyas lecturas los temas de la conversin, el pecado, la penitencia y el perdn, son dominantes. No es un tiempo triste, sino ms bien meditativo y recogido. Es, por excelencia, el tiempo de conversin y penitencia del ao litrgico. Por eso, en la misa catlica no se canta el Gloria al final del acto penitencial (excepto el jueves santo, en la misa de la cena del Seor), ni el Aleluya antes del evangelio. El color litrgico asociado a este perodo es elmorado, asociado al duelo, la penitencia y el sacrificio a excepcin del cuarto domingo que se usa el colorrosay elDomingo de Ramosen el que se usa el colorrojoreferido ala Pasindel Seor.

Son exactamente cuarenta los das que van delMircoles de CenizaalSbado Santo, sin contar los domingos.

La Pascuatiene mucha relacin con el calendario agrcola y el tiempo de renovacin de la tierra. Para calcular su celebracin se toman en cuenta elsoly la luna(sol de primavera y luna llena). En ese sentido, se debe buscar el primer domingo posterior a la primera luna llena de primavera septentrional (Hemisferio Norte). Una vez encontradala Pascua, son contados cuarenta das atrs para fijar el primer da de la cuaresma, es decir, el correspondiente al llamado "mircoles de ceniza" (los domingos, segn se explica arriba, no son tomados en cuenta para hacer este clculo).

La prctica dela Cuaresmadata del siglo IV, cuando se da la tendencia para constituirla en tiempo de penitencia y de renovacin para todala Iglesia, con la prctica delayunoy de laabstinencia. Conservada con bastante vigor, al menos en un principio, en las iglesias de oriente, la prcticapenitencialdela Cuaresmaha sido cada vez ms aligerada en occidente, pero debe observarse un espritu penitencial y de conversin.

Segn San Len,la Cuaresmaes un retiro colectivo de cuarenta das, durante los cualesla Iglesia, proponiendo a sus fieles el ejemplo de Cristo en su retiro al desierto, se prepara para la celebracin de las solemnidades pascuales con la purificacin del corazn y una prctica perfecta de la vida cristiana (Esta definicin es deducida del anlisis del sermn 42).

Se trataba, por tanto, de un tiempo, introducido por la imitacin de Cristo y de Moiss, en el que la comunidad cristiana se esforzaba en realizar una profunda renovacin interior. El Catecismo dela Iglesia Catlicaretoma esta idea y la expresa de la siguiente manera: La Iglesiase une todos los aos, durante los cuarenta das dela Gran Cuaresma, al Misterio de Jess en el desierto.

El Mircoles de Ceniza, el anterior al primer domingo de Cuaresma, se realiza el gesto simblico de la imposicin de ceniza en la frente de los fieles catlicos. La ceniza representa la destruccin de los errores del ao anterior al ser stos quemados. Mientras el sacerdote impone la ceniza dice una de estas dos expresiones: "Arrepintete y cree en el evangelio" (Mc 1,15) o "Acurdate de que eres polvo y al polvo has de volver" (Gn 3,19)

El Mircoles de Ceniza es el primer da dela Cuaresmaen los calendarios litrgicos catlico, protestante y anglicano. Se celebra cuarenta das antes del inicio de Semana Santa, es decir, del Domingo de Ramos. La ceniza es elaborada o extrada de los Ramos benditos dela SemanaSantaanterior, es decir, los del Domingo de Ramos, estos se incineran y de ah salela SantaCeniza.Este da ocurre en diferente fecha cada ao, de acuerdo con la fecha mvil de Pascua. Puede acontecer entre el 4 de febrero y el 10 de marzo.

Por qu mircoles?Cuando en el siglo IV, se fij la duracin de laCuaresmaen 40 das, sta comenzaba 6 semanas antes dela Pascua(Para calcular la fecha dela Pascuase usaba elComputus), en domingo, el llamado domingo de "cuadragsima". Pero en los siglos VI-VII cobr gran importancia el ayuno como prctica cuaresmal. Y aqu surgi un inconveniente: desde los orgenes nunca se ayun en da domingo por ser "da de fiesta", la celebracin del da del Seor. Entonces, se movi el comienzo dela Cuaresmaal mircoles previo al primer sbado del mes.

Este da, que es para los catlicos da de ayuno y abstinencia, igual que elViernes Santo,se realiza la imposicin de la ceniza a los fieles que asisten amisa. Estas cenizas se elaboran a partir de la quema de los ramos delDomingo de Ramosdel ao anterior, y son bendecidas y colocadas sobre la cabeza de los fieles como signo de la caducidad de la condicin humana; como signo penitencial, ya usado desde elAntiguo Testamento; y como signo de conversin, que debe ser la nota dominante durante todala Cuaresma.

40 das de purificacin y la tentacin.

El ayuno de Jess tuvo lugar en el desierto que representa esa tierra sin cultivar que une la personalidad sagrada a la profana, que va del mundo estructurado y material a la regin dela Graciay del Amor. Es una tierra que debe ser cultivada; ese desierto debe convertirse en un camino de rosas. Ello significa, para el discpulo, que esos cuarenta das de ayuno deben transcurrir en un lugar desde el que pueda vivir intensamente la vida espiritual.Esto debe consistir en asimilar los programas de que son portadores los rostros anglicos, en primer lugar los correspondientes a los ocho ngeles lunares, cuyo domicilio zodiacal se encuentra situado entre los veinte grados de Acuario y treinta grados de Piscis; en segundo lugar los programas de los cuarenta ltimos rostros que rigen, a razn de uno por da y que se inician con Yehuiah, el n 33, primero de los ngeles Potencias de Gueburah.

Los cuarenta das de ayuno no deben transformarse en un tiempo muerto, sino en un periodo muy activo, en el que el alma humana pasa revista a toda su existencia y procede a una reconsideracin profunda de s misma. Para que el Hombre Nuevo pueda nacer, es preciso que sea elaborado, que el discpulo facilite un trabajo, sin perder de vista que es la divinidad interna, la que llevamos dentro, la que trabaja, y slo cuando sta se ha movido, la divinidad externa produce las circunstancias que ayudarn la primera a realizar su propsito.

Si el aspirante a los ayunos no dispone de soledad para realizarlos, si tiene que practicarlos en el ajetreo de la vida mundana, con deberes sociales y familiares que cumplir, es mejor que no realice la prueba. Siempre puede entrenarse ayunando ciertos das, como el corredor de fondo, cuando se prepara para la gran prueba. Esta misma preparacin le acercar al objetivo, es decir, crear las circunstancias que le permitirn un da realizar su transmutacin.

Al final de su ayuno, Jess recibe la visita del tentador que lo somete a tres tentaciones, una para el cuerpo fsico, otra para el cuerpo de deseos y la tercera para el mental. La primera se refera al hambre. Despus de cuarenta das sin comer, el tentador sugiri al espritu de Jess que convirtiera las piedras en pan; es decir, que utilizara sus poderes espirituales para alterar el orden natural en su propio provecho.Esta es una prueba que un da u otro ha de presentarse al discpulo: la utilizacin de sus poderes en su provecho personal. Esa voz interna ser acompaada de todas las sutilezas requeridas, a fin de que el discpulo considere justificadas sus proposiciones. Le dir que para cumplir su misin bien es preciso que se alimente, es decir, que exija de aquellos a quienes destina sus enseanzas, el dinero necesario para vivir, para organizar la enseanza y difundirla lo ms ampliamente posible. Muchos son los que han cedido a ese tipo de sugerencias y venden hoy sus conocimientos con la excusa, profanamente vlida, de que tienen que vivir.

La segunda tentacin se refiere a su naturaleza emotiva. El tentador lo transporta a lo alto de la torre del templo de Jerusaln y lo invita a que se arroje de ella, asegurndole que los ngeles acudiran para sostenerle. Es decir, lo estaba invitando a que hiciera una demostracin pblica de sus poderes, a fin de que quedara patente para todo el mundo que l era un ser fuera de serie y le prestaran obediencia, no por una doctrina y por una actitud coherente con ella, sino por el fenmeno que haban observado.Esa tentacin tambin la sufrir el discpulo y son tambin numerosos los que han sucumbido a ella. Muchos son, en la fauna espiritualista, los que se llaman maestros o profesores, porque dicen haber sido contactados por los extraterrestres, o recibido una misin de un santo, dela Virgeno del mismo Cristo, o an pretenden ser su reencarnacin o la de personajes ilustrsimos. Otros fan su maestra en otro tipo de fenmenos: afirman fabricar oro o lo fabrican realmente, tuercen cucharas, proclaman sus visitas a otros planetas, y un largo, etctera. Todos ellos han cedido a la tentacin de adquirir un prestigio mundano a base de producir fenmenos ante las multitudes asombradas. La autntica espiritualidad no se manifiesta de esta forma, sino mediante una vida discreta y una obra til a los dems.

La tercera tentacin va dirigida al cuerpo mental. El tentador transporta a Jess a una montaa muy elevada, desde la cual pueden verse todos los reinos del mundo y se los ofrece si acepta adorarlo, es decir, si adopta los mtodos de accin de Satn y no los de Cristo.sta es la prueba del orgullo, del envanecimiento que todo discpulo deber pasar. El conocimiento asla, aparta al adepto del mundo y son muchos los que buscan la alta montaa que ponga tierra por medio entre ellos y los habitantes del valle, buscando un saber cada vez ms intenso, escalando as una montaa ms y ms elevada, en lugar de transmitir sus conocimientos a los que viven a niveles inferiores (en comprensin) al suyo. Muchas grandes almas se han perdido en esa montaa desde la cual Satn ofrece todos los reinos del mundo, y tambin Max Heindel, en unas notas biogrficas, refiere cmo los hermanos mayores dela Rosacruzprobaron a un candidato a sus enseanzas, pidindole a cambio que las guardara secretas, a lo cual ese candidato accedi, quedando as automticamente descalificado.

Muchos conocedores de la alta ciencia se reservan informacin, porque piensan que si la transmiten, los dems sabran tanto como ellos o, peor an, siembran sus escritos de errores con la pretensin de que los autnticos adeptos los descubran. Lo importante para ellos es que los que viven en el valle permanezcan en l para poder vivir solos en la montaa. Bien dijo Juan que haba venido a preparar el camino del Seor y allanar sus senderos. Allanar los senderos ha de ser un trabajo constante del discpulo, y no crear montaas que lo separen de los dems por un abismo de conocimientos intiles.

Por otra parte, muchos son los que viven mentalmente en la montaa, pero arrastrando un cuerpo emocional que no ha podido escalarla. Con los pensamientos en lo alto y los deseos en el valle, cuando los unos tratan de alcanzar a los otros, ven que el camino les conduce inevitablemente al jardn de las muchachas en flor que el mago Klingsor ha plantado en las ltimas rampas del sendero que lleva al castillo de Monsalvat, tal como nos refiere la leyenda de Parsifal, y en ese jardn naufragan todas sus pretensiones, y all se quedan humillados y confusos.

La aparicin del tentador representa un episodio que todo candidato debe ineludiblemente vivir. En efecto, al elevarse hacia los mundos superiores, el aspirante entra en contacto consciente con el Mundo del Deseo, iniciando esa relacin, como es natural, por las zonas ms bajas de dicho mundo, o sea aqullas en las que residen los Luciferianos. Se encontrar entonces a su merced y se ver asaltado por ellos y rodeado de su solicitud, siendo objeto de su pretensin de instruirlo. Esos anfitriones harn lo posible para que el husped se quede a residir all, para que no suba ms arriba y le harn ver todas las ventajas que ofrece su mundo. Los Luciferianos atacan siempre al candidato por su vertiente ms dbil, presentndole las pruebas en las que ms fcilmente puede sucumbir.

Habiendo superado las pruebas de Satn, nos dice el texto sagrado, ste se retir y aparecieron los ngeles para servirle. Este episodio de la vida de Jess nos refiere el siguiente paso. Si en el camino de ascenso a los mundos espirituales debemos efectuar un trnsito obligatorio por las regiones inferiores del Mundo del Deseo, si sabemos no detenernos all, el prximo paso nos conducir a las regiones superiores de dicho mundo, donde residen los ngeles, y all nos encontraremos ya en seguridad. Jess tuvo que vivir todos estos episodios, porque ste es el itinerario obligado para aquellos que emprenden el camino que va de lo humano a lo divino, o sea de la naturaleza de Jess a la de Cristo.

Referencias del n 40

El nmero cuarenta en la mayora de los casos parece ser usado por Dios para representar un periodo de prueba o juicio.

Cuarenta das: Gn. 7.4: Porque pasados an siete das, yo har llover sobre la tierra cuarenta das y cuarenta noches; y raer de sobre la faz de la tierra a todo ser viviente que hice. Gn. 7.12: y hubo lluvia sobre la tierra cuarenta das y cuarenta noches. Gn. 7.17: Y fue el diluvio cuarenta das sobre la tierra; y las aguas crecieron, y alzaron el arca, y se elev sobre la tierra. Gn. 8.6: Sucedi que al cabo de cuarenta das abri No la ventana del arca que haba hecho. Gn. 50.3: Y le cumplieron cuarenta das, porque as cumplan los das de los embalsamados, y lo lloraron los egipcios setenta das. Ex. 24.18: Y entr Moiss en medio de la nube, y subi al monte; y estuvo Moiss en el monte cuarenta das y cuarenta noches. Ex. 34.28: Y l estuvo all con Jehov cuarenta das y cuarenta noches; no comi pan, ni bebi agua; y escribi en tablas las palabras del pacto, los diez mandamientos. Deut. 9.9: Cuando yo sub al monte para recibir las tablas de piedra, las tablas del pacto que Jehov hizo con vosotros, estuve entonces en el monte cuarenta das y cuarenta noches, sin comer pan ni beber agua. Deut. 9.11: Sucedi al fin de los cuarenta das y cuarenta noches, que Jehov me dio las dos tablas de piedra, las tablas del pacto. Deut. 9.18: Y me postr delante de Jehov como antes, cuarenta das y cuarenta noches; no com pan ni beb agua, a causa de todo vuestro pecado que habais cometido haciendo el mal ante los ojos de Jehov para enojarlo. Deut. 9.25: Me postr, pues, delante de Jehov; cuarenta das y cuarenta noches estuve postrado, porque Jehov dijo que os haba de destruir. Deut. 10.10: Y yo estuve en el monte como los primeros das, cuarenta das y cuarenta noches; y Jehov tambin me escuch esta vez, y no quiso Jehov destruirte. Mat. 4.2: Y despus de haber ayunado cuarenta das y cuarenta noches, tuvo hambre. Mar. 1.13: Y estuvo all en el desierto cuarenta das, y era tentado por Satans, y estaba con las fieras; y los ngeles le servan. Luc. 4.2: Jess, lleno del Espritu Santo, volvi del Jordn, y fue llevado por el Espritu al desierto por cuarenta das, y era tentado por el diablo. Y no comi nada en aquellos das, pasados los cuales, tuvo hambre. Hech. 1.3: a quienes tambin, despus de haber padecido, se present vivo con muchas pruebas indubitables, aparecindoseles durante cuarenta das y hablndoles acerca del reino de Dios.

Cuarenta aos: Ex. 16.35: As comieron los hijos de Israel man cuarenta aos, hasta que llegaron a tierra habitada; man comieron hasta que llegaron a los lmites de la tierra de Canan. Nm. 14.33: Y vuestros hijos andarn pastoreando en el desierto cuarenta aos, y ellos llevarn vuestras rebeldas, hasta que vuestros cuerpos sean consumidos en el desierto. Nm. 32.13: Y la ira de Jehov se encendi contra Israel, y los hizo andar errantes cuarenta aos por el desierto, hasta que fue acabada toda aquella generacin que haba hecho mal delante de Jehov. Deut. 8.2: Y te acordars de todo el camino por donde te ha trado Jehov tu Dios estos cuarenta aos en el desierto, para afligirte, para probarte, para saber lo que haba en tu corazn, si habas de guardar o no sus mandamientos. Deut. 29.5: Y yo os he trado cuarenta aos en el desierto; vuestros vestidos no se han envejecido sobre vosotros, ni vuestro calzado se ha envejecido sobre vuestro pie. Jos. 5.6: Porque los hijos de Israel anduvieron por el desierto cuarenta aos, hasta que todos los hombres de guerra que haban salido de Egipto fueron consumidos, por cuanto no obedecieron a la voz de Jehov; por lo cual Jehov les jur que no les dejara ver la tierra de la cual Jehov haba jurado a sus padres que nos la dara, tierra que fluye leche y miel. 2Sam. 5.4: Era David de treinta aos cuando comenz a reinar, y rein cuarenta aos. 1Rey. 2.11: Los das que rein David sobre Israel fueron cuarenta aos; siete aos rein en Hebrn, y treinta y tres aos rein en Jerusaln. 1Rey. 11.42: Los das que Salomn rein en Jerusaln sobre todo Israel fueron cuarenta aos. Neh. 9.21: Los sustentaste cuarenta aos en el desierto; de ninguna cosa tuvieron necesidad; sus vestidos no se envejecieron, ni se hincharon sus pies. Sal 95.10: Cuarenta aos estuve disgustado con la nacin,y dije: Pueblo es que divaga de corazn,y no han conocido mis caminos. Hech. 7.30: Pasados cuarenta aos, un ngel se le apareci en el desierto del monte Sina, en la llama de fuego de una zarza. Hech. 7.36: Este los sac, habiendo hecho prodigios y seales en tierra de Egipto, y en el Mar Rojo, y en el desierto por cuarenta aos. Hech. 7.42: Y Dios se apart, y los entreg a que rindiesen culto al ejrcito del cielo; como est escrito en el libro de los profetas:Acaso me ofrecisteis vctimas y sacrificios en el desierto por cuarenta aos, casa de Israel? Hech. 13.18: Y por un tiempo como de cuarenta aos los soport en el desierto. Heb. 3.9: Donde me tentaron vuestros padres; me probaron, y vieron mis obras cuarenta aos. Heb. 3.17: Y con quines estuvo l disgustado cuarenta aos? No fue con los que pecaron, cuyos cuerpos cayeron en el desierto.

Isaac tena 40 aos de edad cuando contrajo matrimonio con Rebeca (Gn. 25:20).Esa tena 40 aos de edad cuando contrajo matrimonio con Judit (Gn. 26:34).Las basas de plata estuvieron en grupos de 40 (Ex. 26:19 & 21).

En Egipto los Faraones eran enterrados 40 das despus de su muerte, ese tiempo estaba consagrado a la preparacin del difunto para el "Viaje", el alma necesitaba 40 das para la separarse definitivamente de los 3 componentes del ser: cuerpo, alma, espritu.

Segn San Agustn, el nmero 40 representa la perfeccin: "Las Leyes fueron dadas en 10 mandamientos, estos han sido predicados en el mundo entero, (en su poca estaba compuesto de 4 partes): Oriente, Occidente, Medioda y aquiln, (10x4=40).

Durante 40 das Buda ayun antes de comenzar su apostolado.

En el Islam el nmero 40 tambin es importante: 40 compaeros. 40 perfectos. El Universo esta sostenido por 40 pilares. 40 columnas soportan la cpula dela Mezquitade Omar en Jerusaln. Enla Edad Media, los musulmanes se depilaban las axilas cada 40 das. En la lengua Persa y Turca al gusano "mil patas" lo llaman "40 patas". No olvidemos el cuento de "Ali Baba y los 40 ladrones".

Visin dela Numerologa

En el nmero 40 se dan cita dos claves ocultas en la que se asienta las enseanzas cabalistas: El Sagrado Nombre de Jehov: Yod-He-Vav-He. El rbol Cabalstico.

El Rostro Divino de Jehov nos revela las 4 fases de todo proceso creador:

1.Iniciar.2.Interiorizar.3.Exteriorizar.4.Materializar.

Cada una de esas fases est relacionada con los 4 vehculos con los que est dotado el ser humano:

1.Cuerpo Mental.2.Cuerpo de Deseos.3.Cuerpo Vital o Etrico.4.Cuerpo Fsico.

El rbol Cabalstico, es el esquema donde se recogen los 10 Centros de Conciencia, llamados Sfiras, representando el Gran Cuerpo Divino. El Trabajo Espiritual del ser humano es tomar consciencia de cada uno de esos Centros, lo que nos llevar a la condicin de Ser Dioses Creadores.

1.Kether (Voluntad)2.Hochmah (Amor)3.Binah (Inteligencia Activa-Ley)4.Hesed (Poder-Abundancia Paradisiaca)5.Gueburah (Justicia-Rigor)6.Tiphereth (Armona-Consciencia)7.Netzah (Belleza)8.Hod (Razn)9.Yesod (Fundamento-Cristalizacin)10.Malkuth (Materializacin)

Cuando unimos el nmero 4, o lo que es lo mismo, cuando utilizamos todos nuestros vehculos en armona y utilizamos las Energas Espirituales de cada uno de los 10 Sfiras, obtenemos el nmero 40, lo que nos aproxima a la idea de que estamos capacitados para emprender una labor creadora, o lo que es lo mismo, llevar al terreno prctico la sabidura adquirida.

Visin del Tarot

La Letra Hebreaque representa al n 40 es el Mem y el Arcano del Tarot, esla Muerte.La regencia astrolgica es Capricornio.Causalmente, el nacimiento de Jess, se produce bajo la regencia de ese mismo signo. Capricornio es la puerta de entrada al Elemento Tierra, donde la conciencia se oscurece, corriendo el riesgo de perder su conexin con la personalidad espiritual.El mundo del Mem y el de Capricornio, nos pone a prueba en la medida que nos invita a actuar de acuerdo a las Leyes Divinas. Es el momento inicitico en el que el discpulo debe construir una realidad que sea conforme a las leyes del amor.El Arcano dela Muerte, encierra ese significado de muerte de lo espiritual, pues nos encontramos en el punto ms alejado de nuestro origen.Con el 40, seremos tentados, al igual como lo fue Jess, por las voces del ego, cuya conciencia se basa en la falsa creencia de la separacin y la divisin.Se hace necesario, una labor purificadora, que como hemos visto, nos lleva a ayunar para quedar limpio y as, poder afrontar la ms dura de las travesas espirituales.

La vida de Jess, nos narra el itinerario que ha de recorrer el alma humana para alcanzar el Reino de los Cielos, la puerta de entrada a su verdadero Hogar. El escenario del Mem, el terrenal, nos permite tomar consciencia de nuestro potencial creador. La clave, tal y como nos la ha enseado el Maestro, es no quedar apegados a dicho mundo, el cual, es perecedero y transitorio, pues la evolucin nos invita a continuar nuestro camino y seguir conquistando nuevos Planos de Consciencia.