La aventura del túnel

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C. P. Álvar Fáñez Grupos flexibles de Lengua Nivel 5º Vocabulario Estrambótica : sin sentido, alocada, extravagante. Chiribitas : chispas. Trepidar: temblar, agitarse, vibrar. Desintegraba: descomponía deshacía. Vaharada : golpe de calor. Fragor : ruido muy fuerte. Irguió : levantó. Ahíto : harto, cansado. Corroboró: confirmó, reconoció. Tanteando: buscando a tientas con el tacto. Plasmaba : dibujaba Estupor : asombro. Flanqueaba : estaba al lado. Pingajo: trozo de tela rota y sucia. Disgregada: desparramada, esparcida La aventura del túnel Tampoco Roque, el Moñigo, acertaría a explicarse en qué región de su cerebro se generó la idea estrambótica de esperar al rápido dentro del túnel con los calzones bajados. Otras veces habían aguantado en el túnel el paso del mixto o del tranvía interprovincial. Y Roque, el Moñigo, les exigió este nuevo experimento; aguardar al rápido dentro del túnel y hacer los tres, simultáneamente, de vientre, al paso del tren. El detalle que descuidaron fue el depósito de los calzones. De haber atado este cabo, nada se hubiera descubierto. El rápido entró en el túnel silbando, bufando, echando chiribitas, haciendo trepidar los montes y las piedras. Los tres rapaces estaban pálidos, en cuclillas, con los traseritos desnudos a medio metro de la vía. Daniel, el Mochuelo, sintió que el mundo se dislocaba bajo sus plantas, se desintegraba sin remedio y, mentalmente, se santiguó. La locomotora pasó bufando a su lado y una vaharada cálida de vapor les lamió el trasero. Retemblaron las paredes del túnel, que se llenó de unas resonancias férreas estruendosas. Por encima del fragor del hierro y la velocidad encajonada, llegó a su oído la advertencia del Moñigo, a su lado; -¡Agarraos a las rodillas! Se oyeron las risas sofocadas de los tres amigos al concluir de desfilar el tren. El Tiñoso se irguió y comenzó a toser ahíto de humo. Luego tosió el Mochuelo y, el último, el Moñigo. Jamás el Moñigo rompía a toser el primero, aunque tuviese ganas de hacerlo. Sobre estos extremos existía siempre una competencia inexpresada. Se reían aún cuando Roque, el Moñigo, dio la voz de alarma: - No están aquí los pantalones - dijo. Cedieron las risas instantáneamente. - Ahí tenían que estar - corroboró el Mochuelo, tanteando en la oscuridad. Los pantalones seguían sin aparecer. Tanteando llegaron a la boca del túnel. Tenían los traseros salpicados de carbonilla y el temor por haber extraviado los calzones plasmaba en sus rostros una graciosa expresión de estupor. Ninguno se atrevió a reír, sin embargo. El presentimiento de unos padres y un maestro airados e implacables no dejaba mucho lugar al alborozo. De improviso divisaron, cuatro metros por delante, en medio del senderillo que flanqueaba la vía, un pingajo informe y negruzco. Lo recogió Roque, el Moñigo, y los tres lo examinaron con detenimiento. Sólo Daniel, el Mochuelo, osó, al fin, hablar: - Es un trozo de mis pantalones - balbuceó con un hilo de voz. El resto de la ropa fue apareciendo, disgregada en minúsculos fragmentos, a lo largo del sendero. La onda de la velocidad había arrebatado las prendas, que el tren deshizo entre sus hierros como una fiera enfurecida. De no ser por este inesperado contratiempo nadie se hubiera enterado de la aventura Claro que, ni aun sopesando la diablura en toda su dimensión, se justificaba el castigo que les impuso don Moisés, el maestro. Fragmento : " El Camino " (Miguel Delibes )

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Vocabulario

Estrambótica : sin sentido, alocada, extravagante.Chiribitas : chispas.Trepidar: temblar, agitarse, vibrar.Desintegraba: descomponía deshacía.Vaharada : golpe de calor.Fragor : ruido muy fuerte.Irguió : levantó.Ahíto : harto, cansado.Corroboró: confirmó, reconoció.Tanteando: buscando a tientas con el tacto.Plasmaba : dibujabaEstupor : asombro.Flanqueaba : estaba al lado.Pingajo: trozo de tela rota y sucia.Disgregada: desparramada, esparcida

La aventura del túnel

Tampoco Roque, el Moñigo, acertaría a explicarse en qué región de su cerebro se generó la idea estrambótica de esperar al rápido dentro del túnel con los calzones bajados. Otras veces habían aguantado en el túnel el paso del mixto o del tranvía interprovincial. Y Roque, el Moñigo, les exigió este nuevo experimento; aguardar al rápido dentro del túnel y hacer los tres, simultáneamente, de vientre, al paso del tren.El detalle que descuidaron fue el depósito de los calzones. De haber atado este cabo, nada se hubiera descubierto. El rápido entró en el túnel silbando, bufando, echando chiribitas, haciendo trepidar los montes y las piedras. Los tres rapaces estaban pálidos, en cuclillas, con los traseritos desnudos a medio metro de la vía. Daniel, el Mochuelo, sintió que el mundo se dislocaba bajo sus plantas, se desintegraba sin remedio y, mentalmente, se santiguó. La locomotora pasó bufando a su lado y una vaharada cálida de vapor les lamió el trasero. Retemblaron las paredes del túnel, que se llenó de unas resonancias férreas estruendosas.Por encima del fragor del hierro y la velocidad encajonada, llegó a su oído la advertencia del Moñigo, a su lado;-¡Agarraos a las rodillas! Se oyeron las risas sofocadas de los tres amigos al concluir de desfilar el tren.

El Tiñoso se irguió y comenzó a toser ahíto de humo. Luego tosió el Mochuelo y, el último, el Moñigo. Jamás el Moñigo rompía a toser el primero, aunque tuviese ganas de hacerlo. Sobre estos extremos existía siempre una competencia inexpresada.Se reían aún cuando Roque, el Moñigo, dio la voz de alarma:- No están aquí los pantalones - dijo.Cedieron las risas instantáneamente.- Ahí tenían que estar - corroboró el Mochuelo, tanteando en la oscuridad.

Los pantalones seguían sin aparecer. Tanteando llegaron a la boca del túnel. Tenían los traseros  salpicados de carbonilla y el temor por haber extraviado los calzones plasmaba en sus rostros una graciosa expresión de estupor. Ninguno se atrevió a reír, sin embargo. El presentimiento de unos padres y un maestro airados e implacables no dejaba mucho lugar al alborozo.De improviso divisaron, cuatro metros por delante, en medio del senderillo que flanqueaba la vía,

un pingajo informe y negruzco. Lo recogió Roque, el Moñigo, y los tres lo examinaron con detenimiento. Sólo Daniel, el Mochuelo, osó, al fin, hablar:- Es un trozo de mis pantalones - balbuceó con un hilo de voz.El resto de la ropa fue apareciendo, disgregada en minúsculos fragmentos, a lo largo del sendero.

La onda de la velocidad había arrebatado las prendas, que el tren deshizo entre sus hierros como una fiera enfurecida.De no ser por este inesperado contratiempo nadie se hubiera enterado de la aventura Claro que, ni

aun sopesando la diablura en toda su dimensión, se justificaba el castigo que les impuso don Moisés, el maestro.

Fragmento : " El Camino " (Miguel Delibes )

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COMENTARIO DE TEXTO : “ La aventura del túnel”

Vocabulario

a) Escribe el significado que tienen en el texto las siguientes palabras:

Mixto - tranvía interprovincial - santiguó - retemblaron - encajonada - advertencia -

carbonilla.

b) Escribe una oración con cada una.

Retención

1.- ¿ Cuál era el nuevo experimento que se le ocurrió al Moñigo ?

2.- ¿ Qué detalle olvidaron al colocarse en el túnel ?

3.- ¿ Cómo entró el rápido en el túnel ?

4.- ¿ Qué sucedió después de pasar el rápido ?

Organización

5.- Escribe las siguientes acciones según suceden en el texto:

a) ¡Agarraos a las rodillas!

b) Roque, el Moñigo, les exigió este nuevo experimento.

c) Se justificaba el castigo que les impuso don Moisés.

d) No están aquí los pantalones.

e) El resto de la ropa fue apareciendo.

f) El rápido entró en el túnel silbando.

6.- Haz un breve resumen de la lectura.

7.- Explica brevemente cuál es la idea fundamental del texto.

Interpretación

8.- ¿ Cuál te parece que era el atractivo de la aventura ?

9.- ¿ Qué consecuencias se derivan de la aventura ?

10.- ¿ Qué riesgos tenía la aventura ?

Valoración (oralmente)

11.- El maestro les impuso un castigo, ¿ piensas que es correcto? . Explica tu respuesta.

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