L es invitamos a leer la Tercera Edición de la Revista

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Digital “ ”.

Esta edición la hemos dedicado de manera especial a la

patrona de nuestra institución SANTA MARIANA DE

JESÚS.

L

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8. ACRÓSTICO

9. TEXTO

ARGUMENTATIVO

10. TEXTO ARG. - EJEMPLO

11. CRÓNICA DE SANTA

MARIANA DE JESÚS

12. CRONICA

CONTINUACION

13. CRONICA FINAL

14. EDITORIAL

CUENTO DE SANTA

MARIANITA

CUENTO SANTA

MARIANITA -

CONTINUACION

TEXTO INSTRUCTIVO

MARIANITA

TEXTO INSTRUCTIVO

MARIANITA -

EJEMPLO

4.

5.

6.

7.

Índice de Contenidos

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H

ace muchos años en la

Ciudad de Quito el 31 de

octubre de 1618 nació una

hermosa niña llamada Mariana

de Jesús Paredes y Flores.

Cuando la niña tenía cuatro

años quedó huérfana y estuvo

al cuidado de su hermana,

desde muy pequeña mostró

gran inclinación hacia la pie-

dad y caridad con los más po-

bres.

Después de su primera comunión Marianita hizo voto de

perpetua castidad al que luego juntó los de pobreza y obe-

diencia.

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Ya en la adolescencia

oraba en su casa,

realizó un horario se-

manal de penitencias

y ayuno, salía sólo

para ir a la iglesia en

las mañanas.

Durante el día Marianita oraba, meditaba, leía libros religio-

sos, cantaba y realizaba trabajos manuales.

En aquel tiempo de pronto comenzaron a producirse terribles

terremotos y epidemias, entonces Marianita elevó sus plega-

rias al cielo y dijo: Dios te ofrezco mi vida para que cesen, al

salir del templo empezó a sentirse enferma y las catástrofes

que cobraron muchas vidas y destruyeron casas cesaron, por

esta razón se la conoce como Heroína de la Patria.

Luego de ofrecer su vida

Marianita enfermó y su

sangre la depositaban en

el jardín de la casa y en

ese lugar floreció una be-

lla azucena. Santa Maria-

nita falleció el 26 de ma-

yo de 1645. 5

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Un texto instructivo es aquel que presenta las instrucciones para

organizar un juego, para armar un artefacto, para hacer un expe-

rimento, etc. Es un tipo de texto que, por lo general, circula en el

entorno inmediato de los niños y es de amplia circulación social.

Estos textos habitualmente tienen dos partes: por un lado, una lista

de materiales a usar (ingredientes en las recetas, lista de piezas si

lo que se va a armar es un artefacto, lista de elementos si las ins-

trucciones contienen las reglas de un juego), y por otro, el desa-

rrollo de las instrucciones.

La lista de material contiene sustantivos concretos acompañados

de adjetivos numerales. Por ejemplo: un dado; un tablero; cuatro

pares de fichas de diferentes colores; etc.

Las instrucciones se organizan con oraciones dirigidas a un recep-

tor (segunda persona gramatical) y con verbos en modo impera-

tivo. Por ejemplo: reparta cuatro fichas del mismo color a cada

participante; mezcle los ingredientes. En ocasiones las estructuras

son oraciones de infinitivo. Por ejemplo: repartir cuatro fichas del

mismo color a cada participante.

Fuente: López, C. (s/f) Textos instructivos. http://

www.anep.edu. uy/prolee/index.php/glosario/193-textos-

instructivos

Aquí te dejamos un ejemplo de receta con su estructura:

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Textos instructivos

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Coloca todos los ingredientes en tú

mochila y mézclalos con amor.

Añade el ejemplo de Santa Marianita a

tu preparación.

Agrega un poco de fe y oración.

Sigue estos pasos con dedicación y un

excelente estudiante Marianita logra-

rás ser.

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Receta para ser un buen estudiante

Marianita

Ingredientes:

1 kilo de responsabilidad

1 vaso de concentración

7 rebanadas de motivación

1 manojo de metas

1 lata de compromiso

Una taza de amor

Ejemplo de dedicación de

Santa Marianita al gusto

Un poco de fe y oración

Preparación:

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Acróstico de

Santa Mariana

de Jesús

L Sangre Quiteña al servicio de Dios

Amorosa con los niños

Nunca diste la espalda al necesitado.

Tan tierna y delicada como una azucena

Auténtica y fiel a sus convicciones.

Mostraste valentía y sencillez

Amada por ser la heroína de la patria

Risueña siempre alegre

Intenso amor a Dios

Armas paz con tu sonrisa

Nada se compara con tu belleza

Amor hecho persona.

Elaborado por:

Eliana Cunuhay 6 “C”

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Llegada la cuaresma del año

1645, la ciudad de Riobamba es

semidestruída por el terremoto y

en Quito se vive un clima de te-

rror, porque las frecuentes sacudi-

das telúricas hacen presagiar un

desastre.

La ciudadanía es atacada por fie-

bre maligna de difteria y saram-

pión que producen sufrimientos y

muertes.

La población consciente de la si-

tuación y de sus debilidades mo-

rales, no encuentra otro remedio

que confiar en la misericordia de

Dios.

Durante varios domingos en la

Iglesia de la Compañía, predica el

padre Alonso de Rojas. En el ser-

món del cuarto Domingo el padre

se dirige a Cristo presente en la

Eucarística y en un impulso de ge-

nerosidad que conmueve al los

presentes, ofrece su vida por la

salvación de la ciudad.

Mariana después de haber escu-

chado las palabras del padre Ro-

jas en voz alta de manera que

muchos presentes la pueden es-

cuchar, se ofrece en holocausto a

Dios en lugar de su confesor cuya

vida ella considera más útil para

el bien de las almas que la suya

propia.

“Yo por imitar a mi esposo y amar a los prójimos como cristo

los amó os ofrezco oh Dios des- de luego y al momento mi vida porque cesen en 12

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Quito vuestros enojos, se

templen vuestro rigor y libréis a

mis paisanos hermanos míos

muy queridos del azote que des-

cargáis con la peste y la ruina

que se teme por los temblores”.

Regresando a su casa Mariana cae

inmediatamente en cama, víctima

de una misteriosa enfermedad que

la llevará a la tumba en dos meses.

La peste y el contagio como por

milagro tanto que en los días de

pascua ya no se registró ni un solo

caso de epidemia.

Mariana de Jesús a la edad de 26

años muere serenamente en la paz

del Señor el 26 de Mayo de 1645.

El 9 de julio de 1950, el Papa Pío

XXII la declaró Santa de la Iglesia

Universal, proponiéndola a los fie-

les, especialmente a la juventud

como modelo de solidaridad con

el pueblo.

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Me siento como el escritor cuencano Miguel Moreno Ordóñez cuando tra-

bajaba en su obra literaria “sábados de mayo “o tal vez, quizá también

como Juan León Mera ensayista, novelista ambateño cuando daba sus

últimas pinceladas literarias en su devocionario llamado “El mes de María”

inspirándose en la pureza y santidad de la Santísima Virgen. Mi fantasía

me abandona y el alma se me desmorona al mirar por la ventana el caos

sumado con el desasosiego que vivimos en esta pandemia donde debe-

mos ser más empáticos con el prójimo y romper en mil pedazos todo el

egoísmo y falta de solidaridad para con los demás. Me refugio en “Mi Ro-

sa del Guayas” la beata Mercedes Molina, que proviniendo del seno de

una familia acaudalada, enseñó a ser caritativos con los demás, los más

desposeídos e impulsó un hito en la educación nacional al crear el primer

instituto de educación para las mujeres tomando con inspiración el dulce

modelo de Santa Marianita de Jesús la “Azucena de Quito” que con mucha

penitencia, flagelación y austeridad emprendió un camino sin retorno pa-

seando por los senderos de las penurias hasta encontrarse en paz celes-

tial con nuestro amado Jesús.

Me miro en el espejo y casi en mi mayoría de edad decido destruir mi zo-

na de confort e imitar a estas mujeres, ejemplo de santidad, pureza y

desprendimiento, para comprender

el verdadero significado de la pala-

bra santidad en nuestros tiempos de

youtubers, videos juegos, adic-

ciones. Está desvencijada para

nuestra juventud actual la palabra

“modelo”, en tanto deseo que noso-

tros los jóvenes tomemos ese ideal

que comenzaron esas que nos han

abierto el sendero de paz, educa-

ción, empatía y solidaridad. etc. Pa-

ra ser fieles ejemplos y testimonio

vivo que con nuestro amado Jesucristo nos podemos transformar para

dar un sacudón axiológico en la praxis y no solamente estar anclados en

meras palabras. Gracias por leer mi editorial, su editorial.

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