Karl Marx: COMENTARIOS: MAYO – OCTUBRE 1850

Neue Rheinische Zeitung Revue (Traducción del texto en inglés publicado en versión digital en Marxist.org,

comparado y paginado con la versión original en alemán1,

realizado por el profesor Luis Millán)

[421]La actividad política de los últimos seis meses ha sido esencialmente diferente de aquella que los precedió. El partido revolucionario en todos lados ha sido sacado del terreno, y los victoriosos –las diversas fracciones de la burguesía en Francia, los varios príncipes en Alemania– se han reñido por los frutos de su triunfo. La pelea se ha llevado a cabo con gran ruido y alboroto; y parece inevitable el horizonte de una abierta ruptura, y que a tal decisión sólo puede llegarse por la fuerza de las armas. Aún las espadas están condenadas a permanecer en sus vainas, y la incertidumbre de la situación será objeto de repetidos acuerdos a la sombra de tratados de paz, mientras se desarrolla la actividad de los eternos nuevos preparativos para falsas guerras.

Permítasenos primeramente hacer una consideración sobre la básica realidad que subyace esta turbulencia superficial.

Los años de 1843–45 fueron de prosperidad industrial y comercial, necesaria consecuencia de la casi ininterrumpida depresión industrial de 1837–42. Como es siempre el caso, la prosperidad rápidamente impulsa a la especulación. La especulación regularmente ocurre en períodos donde la sobreproducción está en pleno apogeo. Ésta provee a la sobreproducción con salidas de mercado de carácter temporal, mientras que las verdaderas causas precipitan el desenlace de la crisis e incrementan su fuerza. La crisis misma rompe primero en el campo de la especulación; sólo después hace lo propio impactando la producción. Lo que aparece ante el observador superficial como la causa de la crisis no es la sobreproducción sino el exceso de especulación, pero esto es simplemente un sintoma de la sobreproducción. La consecuente interrupción de la producción no aparece como una consecuencia de su previa exuberancia sino simplemente como un revés causado por el colapso de la especulación. Sin embargo, no pudiendo en este momento esbozar una historia completa de la crisis post–1845, enumeraremos sólo los síntomas más significativos de dicha sobreproducción.

[422]En los años de prosperidad que corren de 1843 a 1845, la especulación fue concentrada principalmente en la construcción de ferrocarriles, la cual estuvo fundamentada en una demanda real, en cereales, como resultado del alza de precios de 1845 y la plaga de papas, en algodón, a continuación de la mala cosecha de 1846, y en el comercio con la India Oriental y China, donde siguió fuertemente pisando los talones a la apertura del mercado chino por Inglaterra2.

La extensión del sistema de ferrocarriles inglés ya había comenzado en 1844 pero no se completó sino hasta 1845. Tan sólo en ese año el número de proyectos presentados para la constitución de compañías ferroviarias ascendió a 1035. En Febrero de 1846, aún después que una cantidad incontable de dichos proyectos fueran abandonados, el dinero a ser depositado por el gobierno para los restantes ascendía a la enorme suma de £14 millones e inclusive en 1847 la suma total de las solicitudes de pago en Inglaterra superaron

1 Versión al alcance en la dirección http://www.mlwerke.de/me/me07/me07_421.htm , la traducción

seguirá esta paginación. 2 Un factor a considerar es la primera Guerra del Opio 1839–1842. [N.T.]

los 42 millones de libras de los cuales más de £36 millones fueron destinadas a ferrocarriles ingleses, y £5 millones y medio para compañías extranjeras. El apogeo de esta especulación fue durante el verano y el otoño de 1845. El precio de los productos y las acciones mantuvo un alza sostenida, y las ganancias de los especuladores pronto tragaron en su remolino a la totalidad de las clases sociales. Duques y condes compitieron con comerciantes y fabricantes por el lucrativo honor de sentarse a la cabeza de las juntas directivas de las diversas compañías; miembros de la Cámara de los Comunes, profesionales de la ley y el clero estaban también representados en gran número. Cualquiera que haya salvado un penique, cualquiera quien tuviera a su disposición el más infimo crédito, especulaba en acciones de ferrocarril. El número de publicaciones ferroviarias se incrementó de tres a veinte. Los grandes diarios con regularidad ganaban cada uno £14 mil por semana por anuncios y folletos vinculados al negocio ferroviario. No había suficientes ingenieros a la mano, y por lo tanto había que pagarles enormes salarios. Impresores, personal de litografía, encuadernadores, comerciantes de papel y otros, quienes fueron movilizados para producir folletos, planos, mapas, etc; fabricantes de muebles quienes equiparon la proliferación de oficinas de las incontables juntas de ferrocarril y consejos provisionales –todas pagando espléndidas sumas. Sobre la base de la actual extensión del sistema ferroviario inglés y continental y la especulación que lo acompañó, fue surguiéndo gradualmente en este período una superestructura de fraude reminiscencia de los tiempos de la Law and the South Sea Company

3. Cientos de compañías fueron promovidas sin el menor chance de éxito, compañías cuyos propios promotores nunca emprendieron una real ejecución de los proyectos, compañías cuya única razón de existencia era la obtención por el director de los fondos depositados y las fraudulentas ganancias obtenidas en la venta de acciones.

[423] En Octubre 18454 una reacción sobrevino, transformándose pronto en pánico total. Aún antes de Febrero 18465, cuando los depósitos debían ser pagados al gobierno, los proyectos más defectuosos habían ido a la bancarrota. En Abril 1846 el revés había comenzado a afectar el mercado continental de acciones; en París, Hamburgo, Frankfurt y Amsterdam se concretaron ventas compulsivas a precios considerablemente bajos, que resultaron en la quiebra de banqueros y corredores. La crisis del ferrocarril duró hasta entrado el otoño de 1848, prolongada por la sucesiva quiebra de los proyectos menos sólidos en la medida en que fueron gradualmente afectados por la presión general y al paso en que las solicitudes de pago fueron hechas. Esta crisis fue también agravada por desarrollos en otras áreas de especulación, en el comercio y la industria; los precios de las más antiguas y mejor establecidas acciones fueron gradualmente forzados a la baja, hasta que en Octubre 1848 alcanzaron su más bajo nivel.

En Agosto de 1845 la opinión pública se enfocó en la plaga de la papa, la cual apareció no sólo en Inglaterra e Irlanda sino también en el Continente –el primer síntoma de que las raíces de la sociedad existente estaban podridas. Al mismo tiempo fueron recibidos reportes que no dejaban lugar a dudas sobre las inmensas perdidas en la esperada cosecha de cereales. Esos dos factores tuvieron como consecuencia que el precio de los

3 John Law, economista y financista, fue una de las figuras clave asociada con la ‘burbuja del Mar del

Sur’ que estalló en 1720. 4 En la versión en inglés aparece el año 1848, tomamos las fechas de la versión alemana no sólo por ser

el idioma original, también por cuestión de coherencia. Aplicaremos el mismo criterio en las divergencias de fechas siguientes. [N.T.].

5 Versión en inglés: 1848. [N.T.].

cereales aumentara considerablemente en todos los mercados Europeos. En Irlanda estalló el hambre, obligando al Gobierno inglés a dar a la provincia un préstamo de £8 millones –exactamente £1 por cada irlandés. En Francia, donde la calamidad fue acrecentada por las inundaciones, las cuales causaron alrededor de £4 millones de gastos en daños, el efecto sobre la cosecha fue de la más extrema gravedad. No fue menos en Holanda y Bélgica. La pérdida de la cosecha de 1845 fue seguida por una peor en 1846, y la plaga de la papa apareció de nuevo también, aunque esta vez no fue generalizada. La especulación en cereales tuvo entonces una base real; floreció a un máximo desde la rica cosecha de 1842–1844 manteniéndose sostenidamente casi por el período completo. Desde 1845 hasta 1847 fue importado en Inglaterra más cereal que cualquier período anterior. El precio del cereal continuó en alza hasta la primavera de 1847, cuando, debido al cambio de los reportes y noticias desde varios países sobre las venideras cosechas, y debido a las medidas tomadas por varios gobiernos (la apertura de los puertos a la libre importación de cereales, etc.), un período de fluctuaciones comenzó. Finalmente en Mayo 1847 los precios alcanzaron su más alto punto. En este mes el precio promedio de un quarter de avena en Inglaterra alcanzó como máximo 102s. 6d.6 y en algunos días tan elevado como 115s. y 124s. Pero reportes mucho más favorables llegaron sobre [424] el clima y los cultivos en proceso; los precios cayeron, y a mediados de Julio el precio promedio se estancó en apenas 74s. Climas desfavorables movieron de nuevo los precios al alza, hasta que finalmente, a mediados de Agosto, se tuvo certeza de que la cosecha de 1847 produciría un rendimiento por encima del promedio. La caída de los precios no pudo desde ese entonces ser detenida; los suministros a Inglaterra se incrementaron más allá de toda espectativa, y para el 18 de Septiembre el precio promedio había caído a 49s. 6d. En el curso de 16 semanas, sin embargo, el precio promedio había variado a no menos de 53s.

Durante todo este período, no sólo continuó la crisis del ferrocarril sino que, en la cima de todo, la totalidad del sitema de crédito colapsó en el justo momento en el que los precios de los cereales estaban en su máximo, en Abril y Mayo 1847, y el mercado monetario estaba totalmente en ruinas. Los especuladores del cereal sin embargo se sostuvieron a través de la caída de precios hasta el 2 de Agosto. En ese día los Bancos alcanzaron su más baja tasa de descuento al 5 por ciento y, para todas las letras de cambio sobre más de dos meses, hasta un 6 por ciento. Inmediatamente una serie de las más espectaculares quiebras bancarias ocurrieron en el ámbito del intercambio comercial de cereales, encabezando tal fenómeno Mr Robinson, Presidente del Banco de Inglaterra. Solamente en Londrés, ocho grandes comerciantes de cereales fueron a la quiebra, la totalidad de sus pasivos alcanzó un monto de £1 1/2 millón. El intercambio provincial de cereales fue totalmente paralizado; quiebras se sucedieron una tras otra en una proporción similar, especialmente en Liverpool. Derrumbes correspondientes tomaron lugar tarde o temprano en todo el Continente en relación a la distancia desde Londrés. Sin embargo, para el 18 de Septiembre, cuando el precio de los cereales cayó a su punto más bajo, la crisis cerealera pudo considerarse finalizada en Inglaterra.

Atendamos ahora a la crisis comercial propiamente, la crisis monetaria. En los primeros cuatro meses de 1847 el estado general del comercio y la industria mantenían una apariencia satisfactoria, con la excepción de la producción de acero y la industria del

6 Esta expresión, asimilada históricamente del solidus romano por franceses, ingleses, catalanes, y

otros, se resuelve en una relación básica que expresa a las libras en sou (s) y denarios (d). En Inglaterra se mantendrá hasta 1971. [N.T.].

algodón. La producción de acero, dado el impulso enorme de la burbuja ferroviaria de 1845, sufrió proporcionalmente en la medida en que el exceso de suministros se contrajo. La industria del algodón, la principal rama de la industria para los mercados de la India del Este y China, ha venido sobreproduciendo para dichos mercados desde el temprano 1845, y tempranamente también una relativa recesión dio comienzo. La mala cosecha de algodón de 1846, la puja de los precios a la alza tanto para la materia prima como para los productos finales, y la consecuente reducción del consumo, todas ejercieron presión sobre la industria. En los primeros meses de 1847 la producción se redujo considerablemente a lo largo de Lancashire, y los trabajadores del algodón fueron golpeados por la crisis.

[425] El 15 de Abril de 1847 el Banco de Inglaterra alcanzó la más baja tasa de descuento para deudas de corto plazo a 5 por ciento, y estableció un límite al monto total de las facturas descontables independientemente del carácter de las casas de préstamo. Hizo también un anuncio de perentoriedad a sus clientes de, contraria a la práctica previa, no renovar anticipos no realizados, pero pudiendo exigir reembolsos. Dos días después la publicación de su balance semanal mostró que las reservas del departamento bancario habían caído a £2 millones y medio. El Banco había por lo tanto tomado las medidas anteriores para detener la fuga de oro de sus bóvedas y para reponer sus reservas de efectivo.

La fuga de oro y plata de las arcas del Banco tuvieron varias causas. El aumento del consumo y la considerable alza de precios de casi todos los artículos requirieron inyectar medios de circulación, particularmente oro y plata para el comercio al detal. Además, el continuo desembolso de instalaciones para la construccion de ferrocarriles, la cual sólo en Abril alcanzó el monto de £4.314.000 había conducido a una retirada masiva de depósitos del Banco. Esa parte del dinero solicitada la cual se orientó a la construcción foránea de ferrocarriles, fluyó directamente al exterior. El exceso considerable de importación de azúcar, café y otros productos coloniales (consumo y precios que fueron fustigados más aún como resultado de la especulación), de algodón (siguiendo a las compras especulativas hechas una vez claro que la cosecha sería escasa), y, en particular, de cereales (como resultado de las reiteradas cosechas fallidas), tenía que ser pagada en efectivo o lingotes, y de esta forma, también, una considerable cantidad de oro y plata salió al extranjero. Esta fuga de metales preciosos de Inglaterra, debe agregarse, continuó hasta el final de Agosto, a pesar de las medidas del Banco mencionadas arriba.

Las decisiones del Banco, y las noticias sobre el descenso de sus reservas, inmediatamente impulsaron presión en el mercado dinerario y el pánico a lo largo y ancho del comercio inglés sólo igualado en intensidad por el mismo de 1845. En la última semana de Abril y los primeros cuatro días de Mayo casi todas las transacciones de crédito fueron paralizadas. Sin embargo no ocurrieron quiebras significativas; las casas de cambio mantuvieron sus cabezas bajo el agua con los enormes pagos de intereses y la salida forzada de suministros, acciones del gobierno, etc. a precios por el piso. Una camada de firmas bien establecidas se salvó de esta manera durante el primer acto de la crisis sólo pavimentando el camino para su posterior colapso. Pero el hecho certero que el primer y más aterrador peligro había sido superado contribuyó al elevamiento de la confianza; luego del 5 de Mayo la presión sobre el mercado de dinero se desvaneció, y al término de Mayo la alarma había desaparecido.

[426] Pocos meses después, sin embargo, al principio de Agosto, las quiebras mencionadas se trasladaron al sector del comercio de cereales. Durando hasta Septiembre, fueron ásperamente superadas cuando la crisis comercial general estalló con fuerza

acumulada, particularmente en la India del Este, India del Oeste y el mercado de Mauritiana. La crisis estalló simultáneamente en Londres, Liverpool, Manchester y Glasgow. Durante septiembre veinte consorcios quebraron tan sólo en Londres, la totalidad de sus pasivos se calculaban entre £9 y £10 millones.

‘Hubo expatriaciones de dinastías comerciales en Inglaterra no menos impactantes que la caída de aquellas castas políticas de las que oímos mucho’ dijo Disraeli el 30 de Agosto 1848 en la Cámara de los Comunes.7

La epidemia de quiebras y bancarrotas en el mercado del Este de India tronó

incesantemente hasta el fin del año y fue condensada en los primeros meses de 1848 cuando llegaron noticias de la quiebra de los consorcios correspondientes en Calcuta, Bombay, Mardras y Mauricio.

Esta serie de bancarrotas, sin precedente en la historia del comercio, fueron causadas por la generalizada sobre-especulación y el resultante de la excesiva importanción de los productos coloniales. Los precios de estos productos, que fueron mantenidos artificialmente en un alto nivel por un largo período, cayeron un poco antes del pánico en Abril 1847, pero se mantuvieron sujetos a una caída general y sostenida sólo después de dicho pánico, cuando la totalidad del sistema de crédito sufrió un colápso y una casa comercial tras otra fue forzada a vender a escala masiva. Esta caída fue muy considerable, sobre todo desde Junio y Julio hasta Noviembre, donde hasta los consorcios y empresas más viejas y distinguidas se fueron a la ruina.

Las quiebras en Septiembre se limitaron exclusivamente a las casas comerciantes

verdaderas. El primero de Octubre el Banco alcanzó su más baja tasa de descuento para compromisos de corto plazo a un 5 y medio por ciento, y declaró al mismo tiempo que en adelante no haría más avances de ningún tipo contra las existencias gubernamentales. Los bancos de capital accionario y los banqueros privados ya no eran aptos para soportar la presión. El Banco Real de Liverpool, la Compañía Bancaria de Liverpool, el Banco de Gales del Norte y Sur, el Banco de la Unión de Capital Accionario y otros fueron arruinados, uno detrás del otro, en un corto período de algunos días. Al mismo tiempo declaraciones de insolvencia fueron introducidas por gran cantidad de pequeños banqueros privados a lo largo y ancho de las provincias inglesas.

Un número considerable de especuladores, corredores de bolsa, agentes de cobranza, agentes marítimos, negociadores del té y el algodón, fabricantes de acero, comerciantes de acero, hiladores, impresores de cálico, etc. en Liverpool, Manchester, Oldham, Halifax, Glasgow y dondequiera fueron a la quiebra a continuación de la interrupción general de pagos hecha por los bancos y que caracterizó el mes de Octubre. [427] De acuerdo con Mr Tooke8, esas quiebras no tuvieron precedente en la historia del comercio inglés, tanto en su magnitud como en el monto del capital involucrado, y la crisis excedió largamente a la de 1825. La crisis alcanzó su apogeo entre el 22 y el 25 de Octubre, cuando todas las transacciones comerciales alcanzaron un punto muerto. Una representación de la ciudad

7 Esta configuración de párrafos, y la totalidad del texto traducido, será fiel a la versión alemana. En la

inglesa, por ejemplo, este párrafo interno no se destaca. [N.T.] 8 Thomas Tooke, economista, fue el autor de A History of Prices, Londres, 1848, del cual Marx tomó

varios fragmentos, y bosquejó extensivamente para este resúmen.

introdujo una solicitud sobre la suspención del Acta Bancaria9 de 1844, la cual había sido el fruto de la sagacidad del fallecido Robert Peel. Con esta suspensión, la división del Banco de Inglaterra en dos departamentos totalmente independientes con reservas de efectivo separadas llegó a su fin; otros pocos días bajo el antiguo arreglo y el Departamento Bancario se hubiera visto forzado a la quiebra mientras £6 millones en oro permanecían en las arcas del Departamento de Emisión.

Ya en Octubre la crisis causó el primer revés en el Continente. Graves quiebras se sucedieron simultáneamente en Bruselas, Hamburgo, Bremen, Elberfeld, Genova, Livorno, Courtrai, St Petersburg, Lisboa y Venecia. Mientras la crisis se disipaba en Inglaterra, se incrementaba su intensidad en el Continente, afectando lugares hasta entonces intactos. Durante el peor período, la tasa de cambio fue favorable para Inglaterra, y desde Noviembre fueron atraídas importaciones de oro y plata, no sólo desde Rusia y el Continente, sino también desde América. El resultado inmediato fue la holgura del mercado dinerario en Inglaterra en contraste con la tensión monetaria en el resto del mundo comercial y el crecimiento de la crisis. Así el número de quiebras fuera de Inglaterra se elevó en Noviembre; igualmente importantes bancarrotas se sucedieron en New York, Rotterdam, Amsterdam, Le Havre10, Bayonne, Amberes, Mons, Triestre, Madrid y Estocolmo. En Diciembre la crisis estalló en Marsella y Algiers tomando vuelo severo en Alemania.

Llegamos ahora al punto en el que la Revolución de Febrero estalla en Francia. Si echamos un vistazo a la lista de quiebras que Mr D. M. Evans coloca como apéndice a su ‘Crisis Comerciales de 1847-8’ (Londres, 1848), conseguimos que en Inglaterra ni un sólo

consorcio de alguna importancia o relevancia fue arruinada como resultado de esta revolución. Las únicas quiebras conectadas con este proceso ocurrieron en relación a la actividad de corretaje de acciones, como resultado de las súbitas devaluaciones de las acciones gubernamentales en el Continente. Se dieron, por supuesto, similares situaciones de quiebra de corredores de acciones en Amsterdam, Hamburgo, etc. Las rentas consolidadas inglesas11 cayeron a 6 por ciento, mientras que antes de la revolución de Julio habían caído un 3 por ciento. Así, en lo concerniente a los corredoresde bolsa, la República de Febrero fue sólo el doble de peligrosa que la Monarquía de Julio12.

[428] El pánico que estalló en Paris depués de Febrero, y difundido a lo largo y ancho de todo el Continente junto a la revolución, fue muy parecido en su desenvolvimiento al pánico de Londres que sobrevino en Abril de 1847. El crédito desapareció repentinamente y las transacciones llegaron casi a un punto de estancamiento; en Paris, Bruselas y Amsterdam todos corrieron al Banco para cambiar sus notas por oro. En conjunto, sin embargo, pocas quiebras se produjeron fuera del campo de la venta de acciones y valores, y es de suma dificultad probar que tales pocos casos hayan sido consecuencia de la revolución de Febrero. La suspensión de los pagos ejecutada por los corredores de Paris, la más de las veces de foma temporal, estaban sólo parcialmente conectada con la venta de valores; algunas fueron sólo medidas de precaución, sin la intención de causar insolvencia, el resto pueden ser atribuídas a la trampa política, animada a poner en dificultades al

9 Ley de privilegios del Banco de Inglaterra sobre la banca privada. Impulsada por Robert Peel, primer

ministro del Reino Unido en los períodos 1834-1835 y 1841-1846. [N.T.] 10 Alta Normandía. [N.T.] 11 Bonos del gobierno inglés. [N.T.] 12 Denominación dada al período de Luis Felipe de Orleans.

Gobierno Provisional13 a cambio de consesiones y beneficios. En lo concerniente a la medida en que las quiebras bancarias y comerciales en otras partes del Continente fueron sucediendo es imposible determinar qué casos resultaron de la duración y gradual difusión de la crisis comercial, hasta qué punto la situación fue aprovechada por firmas poco sólidas para salidas prudenciales, y qué alcance de tales casos fueron el resultado de pérdidas causadas por la atmósfera de pánico de la revolución. De todos modos, es totalmente cierto que la crisis comercial contribuyó mucho más a la revolución de 1848 que la revolución a la crisis comercial. Entre Marzo y Mayo Inglaterra aprovechó ventajas directas de la revolución, que le aportaron a sus arcas grandes insumos de capital continental. A partir de este momento la crisis puede considerarse superada en Inglaterra; hubo una mejora en todas las ramas de negocios y el nuevo ciclo industrial inició con decididos pasos a la prosperidad. A que punto fue de insignificante el efecto de la revolución sobre el boom comercial e industrial en Inglaterra puede verse en el monto de fabricación de algodón que se alzó de 475 millones de libras en 1847 a 713 millones de libras en 1848.

En Inglaterra esta renovada prosperidad se desarrolló visiblemente durante 1848, 1849 y 1850. Para los ocho meses entre Enero y Agosto, las exportaciones totales de Inglaterra sumaron un monto de £31.633.214 en 1848; £39.263.322 en 1849 y £43.851.568 en 1850. Sumado a esta considerable mejoría, manifestándose en todas las ramas de negocios con la excepción de la producción de acero, se recolectaron ricas cosechas durante los tres años mencionados. El precio promedio del trigo en 1848–50 fue de 36s. por quarter en Inglaterra, 32s. en Francia. Este período de prosperidad se caracterizó por el hecho cierto de haber sido bloqueada la especulación en tres importantes rubros. La producción de ferrocarriles fue reducida al lento desarrollo de una normal rama de la industria, los cereales no ofrecían oportunidad debido a una serie de buenas cosechas, [429] y, como resultado de la revolución, las acciones del gobierno perdieron su carácter confiable sin el cual las grandes operaciones especulativas en valores no eran posibles. Durante cada período de prosperidad el capital se acumula. Por una parte el incremento de producción genera nuevo capital; por otra, el capital que está disponile pero inactivo durante la crisis es liberado de su inactividad y descargado al mercado. Con la ausencia de salidas especulativas este capital adicional fue forzado durante esos años a fluir en la industria real, incrementando así la producción mucho más rápidamente. El nivel de apariencia de este fenómeno en Inglaterra, en ausencia de alguien capaz de explicarlo, es demostrado por esta ingenua declaración publicada en el Economist del 19 de Octubre de 1850:

Es resaltante que la presente prosperidad difiere de recordados períodos pasados, en los cuales había alguna especulación de base encorajando esperanzas que estaban destinadas a no llevarse a cabo. En un momento fueron minas extrajeras, en otro más ferrocarriles de los que podían fabricarse en medio siglo. Aun cuando dichas especulaciones estaban bien fundadas, contemplaban la realización de ingresos, a partir del alza de los metales o creando nuevos beneficios, al cabo de un período considerable, y otorgando ganancias no inmediatas. Nuestra presente prosperidad en cambo está fundada en la producción de cosas inmediatamente útiles, con una entrada temprana al consumo apenas han sido puestos en el mercado, retornando a los productores una justa remuneración propicia para estimular más producción.

13 Gobierno instalado en Francia a la salida de Luis Felipe de Orleans. [N.T.]

La fabricación de algodón, la rama dominante de la industria, provee la más

impactante prueba del grado al cual la producción industrial se ha incrementado en 1848 y 1849. La cosecha de algodón norteamericana de 1849 produjo un mayor rendimiento que cualquier otro año anterior, llegando a un monto de 2 ¾ millones de sacos, o sobre los 1.200 millones de libras. La expansión de la industria del algodón ha mantenido el ritmo del incremento de importaciones a tal punto que a finales de 1849 las existencias estuvieron más bajas que nunca, aun después de las malas cosechas. En 1849 más de 775 millones de libras de algodón fueron hilados, en comparación a los 721 millones de libras en 1845, el año de mayor prosperidad hasta la fecha. La expansión de la industria del algodón es probada además por el alza en los precios (55 por centavo) resultando de la relativamente menor perdida en la cosecha de 1850. [430] El mismo progreso puede percibirse al menos en el total de las otras ramas, tales como el hilado, el tejido de seda, la pacotilla y el lino. Las exportaciones en esas industrias se han elevado tan considerablemente, particularmente en 1850, que han producido un gran incremento en el grueso de las exportaciones para los primeros ocho meses de este año (£12 millones sobre las cifras de exportación correspondientes al año 1848, £4 millones sobre las de 1849), aunque en 1850 las exportaciones de productos de algodón cayeron notablemente como resultado de la mala cosecha. A pesar del considerable incremento en los precios de la lana, que pueden haber sido causados por la especulación en 1849, pero que parecen haberse nivelado, la industria de la lana se ha expandido continuamente, y nuevos telares son puestos en operación. La exportación de tejidos de lino en 1844, el mayor antecedente, alcanzó el monto de 91 millones de yardas, a un valor sobre £2.800.000, mientras que en 1849 alcanzó 107 millones de yardas a un valor de £3.000.000.

Otra prueba del crecimiento de la industria inglesa es la continua alza del consumo de productos básicos coloniales, particularmente café, azucar y té, a precios cada vez más altos –al menos para los primeros dos artículos. Este incremento de consumo es un resultado directo tanto de la expansión de la industria; como de la excepcional situación comercial creada desde 1845 por las extraordinarias inversiones en ferrocarriles mantenidas hasta ser reducidas a su escala normal, y en cómo los bajos precios de cereales de los últimos años no han permitido ningún incremento en consumo en las áreas agrícolas.

En los últimos años la amplia expansión de la industria del algodón ha dado lugar a nuevos intentos de saturar los mercados de la India del Este y China. Pero la cantidad de viejas existencias que siguen esperando por una salida al mercado en esas áreas más temprano que tarde han causado obstáculos a tal intención. Al mismo tiempo, en vista del alza del consumo de materias primas y productos coloniales, se han hecho intentos de especular sobre tales mercancías, pero el freno súbito de esta tendencia fue puesto como consecuencia de un aumento temporal en las importaciones, y la memoria de las heridas sufridas en 1847, las cuales siguen frescas.

La prosperidad industrial será aun incrementada por la reciente apertura de las colonias holandesas, por el inminente establecimiento de rutas comerciales a través del Océano Pacífico (a lo cual regresaremos) y por la gran exhibición industrial de 1851. Esta exhibición fue anunciada por la Burguesía inglesa ya en 1849, con la más impresionante sangre fría, en el momento en que el Continente entero seguía ensoñada con la revolución. Para esta exposición ha convocado a una gran revisión a todos sus vasallos desde Francia hasta China, en la cual estos deben demostrar en qué han estado empleando su tiempo; y aun el omnipotente Zar de Rusia se ve obligado a ordenar sus asuntos para aparentar datos

engrosados ante tal revisión. Este gran congreso mundial [431] de productos y productores es un tanto diferente en su significancia del Congreso absolutista de Bregenz y Varsovia14, el cual causó a nuestros demócratas continentales de corta vista mucho bochorno; diferente es también del Congreso europeo democrático en el cual los diversos gobiernos provisionales en partibus infidelum

15 de manera repetitiva planearon la salvación del mundo. Esta exhibición es una prueba impactante del poder concentrado con el que la industria a larga escala está destruyendo en todas partes las barreras nacionales y difuminando progresivamente las peculiaridades locales de producción, junto con las características sociales y nacionales entre los diferentes pueblos. Mediante la puesta en escena los masivos recursos de la industria moderna en espacios reducidos, justo en el momento en que la moderna sociedad burguesa está siendo socavada por todos los flancos, se está también mostrando los materiales que han sido producidos, y que siguen produciéndose cada día en esos días turbulentos, para la construcción de la nueva sociedad. Con esta exhibición, la burguesía del mundo ha alzado en la moderna Roma su Panteón, donde, con orgullo y auto-satisfacción, exhibe los bienes que ha hecho por sí misma. Esto da por lo tanto una prueba práctica del hecho que la ‘impotencia y vejación del ciudadano’, sobre la que predican año tras año los Ideólogos alemanes, es tan sólo la fallida comprensión como impotencia del bien-educado para entender la dinámica moderna, y su propia vejación ante esa impotencia. El burgués celebra esto, su más grande festival, en el momento en el que el colapso de su orden social en todo su esplendor es inminente, un colapso que va a demostrar más enfáticamente que nunca como las fuerzas que ha creado han sobrepasado el ámbito de su control. En una futura exhibición la burguesía quizás no figurará más como la dueña de tales fuerzas productivas sino más bien como su cicerone16.

La pérdida de la cosecha de algodón ha estado difundiendo la alarma general entre la burguesía desde el comienzo del año, así como sucedió en 1845 y 1846 con la plaga de la papa. Esta alarma se ha incrementado considerablemente desde que se hizo claro que la cosecha de algodón de 1851, además, no sobrepasará a la de 1850. La pérdida, que podría considerarse insignificante en períodos tempranos, representa ahora una serísima amenaza a la actual expansión de la industria algodonera, y ya ha afectado a la producción de manera considerable. La burguesía, habiéndose apenas recuperado del impactante descubrimiento de que uno de los pilares centrales de su orden social –la papa– estaba en peligro, ahora observa como su segundo cimiento –el algodón– es amenazado. Solamente una moderada pérdida en la cosecha anual de algodón y la perspectiva futura de una segunda [432] ha sido suficiente para generar la excitación de una seria alarma en medio del regocijo por la prosperidad, unos años consecutivos en los que la cosecha de algodón fracase realmente está arrastrando a la totalidad de la sociedad civilizada a reducirse a un estado temporal de barbarie. La edad dorada y la era del acero hace tiempo que son historia; fue reservado al

14 La reunión de Bregenz 11-12 de Octubre 1850 entre los líderes de Austria, Bavaria y Wurtemberg

resultó en la firma del tratado del 12 de Octubre por el cual los tres estados acuerdan oponerse a los intentos de Prusia por ocupar la cabeza de la Confederación Germana. En la reunión de Varsovia del 28 de Octubre 1850 entre Nicolás I, Francis Joseph y el Conde Brandenburg, este último, como representante de Prusia, fue puesto bajo una presión considerable, y obligado a hacer concesiones con Austria.

15 ‘En la tierra de los infieles’: Una expresión preferida por Marx, tomada del título con que los obispos católicos señalaban a los territorios no cristianos donde no debían residir, aplicada aquí a los impotentes gobiernos-en-exílio formados luego de la derrota de las revoluciones de 1848, generalmente por demócratas refugiados.

16 Persona encargada de mostrar a los visitantes de una localidad las carácteristicas resaltantes. [N.T.]

siglo diecinueve, con su inteligencia, mercados mundiales y colosales fuentes productivas, abrirse al escenario de la edad del algodón. Simultáneamente, la Burguesía inglesa ha sentido con más fuerza que nunca el poder que los Estados Unidos ejercen al respecto, como resultado de su permanente monopolio sobre la producción algodonera. Inmediatamente se ha impuesto a sí misma la tarea de romper tal monopolio. No sólo en el este de la India, también en Natal la región norte de Australia y todos los lugares del mundo donde las condiciones climáticas favorecen el crecimiento del algodón, esto debe llevarse a cabo de cualquier manera. Al mismo tiempo, el sector de la Burguesía inglesa que ha prescindido amablemente de la fuerza negra ha hecho el siguiente descubrimiento “El hecho que la prosperidad de Manchester dependa de la trata de esclavos en Texas, Alabama y Louisiana es tan curioso como alarmante” (Economist, 21 de Septiembre 1850). Que la rama decisiva de la industria inglesa esté basada en la existencia de la esclavitud en los estados del sur de la Unión americana, que una revuelta de esclavos en esas áreas pueda arruinar en su totalidad el sistema de producción como existe actualmente es, por supuesto, un factor de depresión extremo para aquellas personas que gastaron £20 millones17 hace unos años en la emancipación del Negro en sus propias colonias. Sin embargo, este hecho lleva forzosamente a la única solución real de la cuestión esclavista, la cual ha sido recientemente de nuevo la causa de tan largo y violento debate en el Congreso americano. La producción americana de algodón está basada en trabajo esclavo. Tan pronto como la industria alcance el punto en el que no pueda tolerar más el monopolio de los Estados Unidos, el algodón será exitosamente producido en masa en otros países, y esto es casi imposible de lograrse en cualquier parte hoy excepto con trabajadores libres. Pero tan pronto como el trabajo libre de otros países pueda enviar suministros suficientes de algodón mucho más barato a la industria que el producido por el trabajo esclavo de los Estados Unidos, entonces la Esclavitud americana saltará en pedazos junto al monopolio y los esclavos serán emancipados, debido a que serán de por sí inútiles como esclavos. El trabajo asalariado será abolido en Europa de la misma manera, tan pronto se convierta no sólo en innecesario para la producción, sino de hecho en un obstáculo.

Si el nuevo ciclo de desarrollo industrial el cual comenzó en 1848 toma el mismo curso que aquél de 1843–47, la crisis romperá en 1852. [433] Como un síntoma que señala que el exceso de especulación que es causado por la sobreproducción, y que precede a cada crisis, no tardará mucho en llegar, podemos apuntar al hecho que la tasa de descuento del Banco de Inglaterra no ha remontado por encima del 3 por ciento en dos años. Pero cuando el Banco de Inglaterra mantiene sus tasas de interés bajas en tiempos de prosperidad, el resto del mercado de dinero debe forzosamente reducir sus tasas mucho más, de la misma forma que en tiempos de crisis cuando la Banca alza sus tasas considerablemente, el mercado de dinero debe alzar sus tasas por encima de ésta. El capital adicional que, como hemos visto antes, es descargado usualmente en el mercado de bonos en tiempos de prosperidad, es suficiente por sí mismo para forzar a la baja las tasas de interés, como resultado de las leyes de competencia; pero las tasas de interés son reducidas en una muy mayor proporción y alcance por la gigantesca expansión del crédito producido por la prosperidad generalizada, que hace descender la demanda de capital. En esos períodos un gobierno está en franca posición de reducir las tasas de interés de sus deudas financiadas, y

17 Esta fue la suma de dinero votada por el Parlamento en 1833 a ser pagada a los dueños de

plantaciones en compensación por la abolición de la esclavitud en las Indias Orientales y otras colonias británicas.

el terrateniente está en capacidad de renovar su hipoteca en términos más favorables. Los capitalistas con inversiones en préstamo de capital ven así sus ingresos reducidos en un tercio o más, al tiempo que los ingresos de otras clases se incrementan. Mientras más dura esta situación, más presionados están estos a buscar mejores y más rentables formas de invertir sus capitales. La sobreproducción hace emerger numerosos nuevos proyectos, y el éxito de unos pocos es suficiente para atraer a una gran masa de capital en la misma dirección, hasta que de forma gradual la burbuja se vuelve general. Pero, como hemos visto, la especulación tiene a este punto sólo dos salidas; el cultivo de algodón y las rutas del nuevo mercado mundial creadas por el desarrollo de California y Australia. Es evidente que en estos tiempos el alcance de la especulación tomará de lejos mayores dimensiones que cualquier otro período de prosperidad.

Echemos un vistazo a la situación en los distritos agrícolas de Inglaterra. La presión general producida por la derogación de las Leyes Cerealeras y las simultáneas ricas cosechas se ha vuelto aquí crónica, aunque se ha aliviado en alguna medida por el considerable incremento del consumo consecuencia de la prosperidad. Además, con bajos precios en cereales al menos los trabajadores agrícolas están en mejor posición, aunque tal mejoría en Inglaterra ha sido más limitada que en otros países, donde el parcelamiento de tierras es la regla. Bajo esas circunstancias la agitación de los Proteccionistas18 por la reimposición de las obligaciones cerealeras continúa en las áreas agrícolas, aunque menos estridente y abierta que antes. Es evidente que esta turbulencia se mantendrá en un nivel de poca significancia hasta tanto se mantenga la posición relativamente [434] tolerable de los trabajadores agrícolas. Pero tan pronto como la crisis estalle, con repercusión en las zonas de cultivo, la depresión agrícola de la tierra provocará considerables tensiones sociales. La crisis industrial y comercial coincidirá entonces con la crisis agrícola por primera vez, y en todos los aspectos que animan el conflicto entre la ciudad y el campo, productores manufactureros y terratenientes, los dos partidos serán apoyados por dos grandes ejércitos: los productores manufactureros por la masa de los trabajadores industriales, y los terratenientes por la masa de los trabajadores agrícolas.

Pogamos ahora nuestra atención en los Estado Unidos de América. La crisis de 1836, que arrancó allí primero y sacudió más violentamente, duró casi sin interrupción hasta 1842 e impulsó una completa trasformación del Sistema de crédito americano. El comercio de los Estados Unidos se recuperó de esto sobre bases más sólidas, si bien al comienzo de manera lenta, hasta un crecimiento significativo en el período de 1842 a 1845, también. El alza de precios y la revolución en Europa sólo trajo beneficios para América. De 1845 a 1847 se benefició enormemente de la exportación de granos y del alza del precio del algodón de 1846. En 1849 se produjo la mayor cosecha de algodón hasta la fecha, y en 1850 se hizo con $20 millones de la pérdida de la cosecha de algodón, que coincidió con el nuevo florecimento en la industria europea del algodón. Las revoluciones de 1848 causaron un flujo de gran escala de capitales europeos a los Estados Unidos, los cuales llegaron en parte con los inmigrantes mismos y en parte también atribuído a las inversiones europeas en Bonos del tesoro americano. Este incremento en la demanda para los bonos americanos ha forzado su precio al alza a tal punto que recientemente en Nueva York los especuladores se han aprovechado de la situación a un ritmo febril. Así, independientemente de las aseveraciones hechas en la prensa reaccionaria burguesa, seguimos sosteniendo que la

18 Cuando el partido Tory se dividió en 1846 sobre la derogación de las leyes cerealeras, el grupo más

numeroso adoptó el nombre ‘proteccionistas’.

única manera en que el Estado puede disfrutar de la confianza de nuestros capitalistas europeos es bajo la forma de la república burguesa. Hay sólo una forma de expresar la confianza burguesa en cualquier forma de Estado: su cotización en la bolsa de valores.

No obstante, la prosperidad de los Estados Unidos se incrementó mucho más por otras razones. El área populosa y activa, el mercado interno de la Unión norteamericana, se extendió con sorpresiva rapidez en dos direcciones. El incremento de la población, debido tanto a la reproducción interna de América y al permanente aumento de la inmigración, llevó al asentamiento estable de estados y territorios completos. Iowa y Wisconsin se tornaron comparativamente densos en población en unos pocos años, y hubo un significante incremento en inmigrantes en todos los estados [435] en la región del alto Missisippi. La explotación de las minas en Lago Superior y la creciente producción de granos en la amplitud del área alrededor de los Grandes Lagos impulsaron una explosión del comercio y navegación en este sistema interno de vías fluviales, que va a expandirse mucho más como resultado de una ley aprobada durante la última sesión del Congreso, mediante la cual el comercio con Canadá y Nueva Escocia ha sido ampliamente favorecido. Mientras los estados del noroeste han ganado una nueva importancia, Oregon ha sido colonizada en pocos años, Texas y Nuevo México anexados y California conquistada. El descubrimiento de las minas de oro de California ha sellado el tope de la prosperidad estadounidense. En el segundo número de esta revista –antes que cualquier otro periódico europeo– pondremos atención a la importancia de este descubrimiento y a las necesarias consecuencias para la totalidad del mercado mundial19. Esta importancia no reside en el incremento del suministro de oro aportado por las recién descubiertas minas, aunque este aumento en medios de cambio va a tener consecuencias en el comercio en general. Se ubica más bien en el impulso dado a la inversión en el mercado mundial por la riqueza mineral de California, en la actividad en la cual toda la costa oeste de América y la costa este de Asia se ha sumergido, en las nuevas salidas del mercado creadas en California y en todos los países afectados por California. Aún considerado en sí mismo el mercado de California es muy importante; hace un año había 100.000 personas allí; ahora hay al menos 300.000 personas, que están produciendo sólo oro, y quienes están intercambiando ese oro por los bienes básicos de subsistencia de los mercados foráneos. Pero el mercado californiano es en sí insignificante comparado a la sostenida expansión de todos los mercados en la costa del Pacífico, comparado con el impactante incremento en intercambio con Chile y Perú, el oeste de México y las Islas Sandwich, y comparado con el tráfico que sorporesivamente ha surgido entre Asia, Australia y California. Debido a California, rutas internacionales completamente nuevas se han hecho urgentes, rutas que inevitablemente temprano sobrepasarán a otras en importancia. La ruta de comercio principal hacia el Océano Pacífico –que ha sido justo ahora abierta realmente, y se transformará en la más importante ruta oceánica en el mundo– será, de ahora en adelante, llevada a través del Itsmo de Panamá. El establecimiento de vínculos cruzando el Itsmo por carreteras, ferrocarriles y canales es ahora el requerimiento más importante del mercado mundial y ha sido afrontado en algunos lugares. El ferrocarril desde Chagres a Panamá está ya construido. Una compañía norteamericana ha tenido contactos sobre la cuenca del río de San Juan del Norte con miras a conectar [436] los dos océanos, primero que todo una ruta terrestre y luego por un canal. Otras rutas –A través del Itsmo de Darien, la ruta de Atrato en Nueva Granada, a través del Itsmo de Tehuantepec– esta siendo discutida en periódicos Ingleses y estadounidenses. El

19 Ver ‘Review: January-February 1850’, arriba. [por traducir al español, N.T.].

desconocimiento del mundo civilizado sobre las condiciones de terreno en América Central, las cuales son ahora expuestas, hace imposible determinar cual ruta es la más ventajosa para el gran canal; de acuerdo a la poca información conseguida, la ruta de Atrato y la vía cruzando Panamá parecen ofrecer las mejores ventajas. La expansión acelerada de líneas de barcos de vapor se ha heho urgente, con el fin de conectarse con las líneas de comunicación a través del Itsmo. Barcos de vapor están ya navegando entre Southampton y Chagres20, Nueva York y Chagres, Valparaíso, Lima, Panamá, Acapulco y San Francisco; a pesar que esas pocas líneas, con su pequeño número de vapores, son en todo sentido inadecuadas. El incremento de líneas de vapor entre Europa y Chagres se hace cada día más urgente, y el creciente tráfico entre Asia, Australia y América requiere grandes y nuevas líneas de vapores desde Panamá y San Francisco a Cantón21, Singapur, Sydney, Nueva Zelanda y la parada más importante del Pacífico, las Islas Sandwich22. De todas las áreas del Pacífico Australia y Nueva Zelanda son las que se han expandido en mayor medida, como resultado del rápido progreso de la colonización y la influencia de California, y éstas no tienen en sus planes permanecer por más tiempo separadas del mundo civilizado por una travesía marítima de cuatro a seis meses de duración. La población total de la colonias australianas (con excepción de Nueva Zelanda) aumentó de 170.676 en 1839 a 333.764 en 1848; esto es, se incrementó en nueve años en un 95 ½ por ciento. La misma Inglaterra no puede dejar a esas colonias sin líneas de vapor que las vinculen; y el gobierno está llevando adelante las negociaciones por una ruta de conexión con zonas de las Indias Orientales en tierra firme. Ya sea que esta línea se concrete o no, la clara necesidad de una conexión a vapor con Amércia, y particularmente con California, donde 3.500 personas provenientes de Australia emigraron el año pasado, producirá por sí misma una solución. Podría decirse que el mundo se ha vuelto redondo desde que han surgido estas necesidades para la navegación global a vapor.

Esta inminente expansión en la navegación a vapor se incrementará mucho más por la apertura de las colonias holandesas ya mencionada y por el aumento de los vapores tornillo, con los cuales –como se ha vuelto cada vez más claro– emigrantes pueden ser transportados mucho más rápido, relativamente más barato y con más beneficio que con los barcos de vela. Aparte de los vapores tornillo que en este momento navegan desde Glasgow y Liverpool hacia Nueva York, [437] nuevas unidades están por incorporarse a ser empleadas en esta línea además de la creación de una nueva a ser establecida entre Rotterdam y Nueva York. Qué tan universal es la actual tendencia del capital de fluir mediante la navegación de vapor oceánica lo prueba el sostenido incremento en el número de vapores compitiendo entre Liverpool y Nueva York, el establecimiento de nuevas líneas desde Inglaterra hacia El Cabo y desde Nueva York hasta Le Havre, y toda una serie de proyectos similares que están siendo pregonados por toda Nueva York.

Con la inversión de capitales en navegación oceánica de vapor y la construcción de canales cruzando los Itsmos americanos el terreno ha sido preparado para el desarrollo

20 Inicialmente fue un asentamiento colonial en la cara caribeña de Panamá. Toma renovada

importancia como consecuencia de los descubrimientos de oro en California. [N.T.]. 21 Para la época uno de los puertos más importantes del mercado mundial. Ubicado al sur de China, fue

puerto de salida durante siglos anteriores, e inclusive el XIX, de la fuerza de trabajo que llegaría a los Estados Unidos, Perú, Cuba, entre otros, jugando un papel fundamental en la organización capitalista del trabajo. [N.T.].

22 Seguramente es referencia a las islas que en un futuro serán conocidas bajo la denominación de Archipiélago de Hawái, no deben confundirse con las Islas Sandwich del Sur. [N.T.].

excesivo de la especulación en dicha área. El centro de tal especulación es necesariamente Nueva York, el cual recibe la gran masa de oro Californiano. A la fecha ha tomado ya control del tráfico con California y en general lleva a cabo la misma función para el resto de América que Londres con el resto de Europa. Nueva York es ya el centro de la navegación a vapor transatlántica. Todos los vapores del Pacífico pertenecen a compañías de Nueva York, y casi todos los nuevos proyectos en esta rama de la industria comenzaron en Nueva York. La especulación en líneas extranjeras de vapores ha comenzado en estos mismos proyectos, y la Nicaragua Company, que fue lanzada en Nueva York, representa de manera similar el comienzo de la especulación en la zona de los canales del itsmo. La sobreespeculación se desarrollará pronto, y a pesar que el capital inglés está fluyendo en

masa en todas estas enpresas, a pesar que la Bolsa de Londres será inundada con todo tipo de proyectos similares, Nueva York seguirá constante al centro de la enorme burbuja, esta vez como en 1836, y será la primera en experimentar su colapso. Un sinnúmero de proyectos caerán en la ruina, pero igual que con el sistema inglés de ferrocarriles en 1845, al menos la salida de un sistema universal de navegación a vapor emergerá de tal sobre-especulación. No importa cuantas compañías vayan a bancarrota, los vapores –los cuales están duplicando el tráfico por el Atlántico, abriendo el Pacífico, conectando Australia, Nueva Zelanda, Singapur y China con América y reduciendo el viaje alrededor del mundo a cuatro meses23– subsistirán.

La prosperidad en Inglaterra y América temprano se hizo sentir en el continente europeo. Tan temprano como en el verano de 1849 las fábricas en Alemania, particularmente en la Provincia renana, se han atareado de nuevo, y desde el fin de 1849 se ha suscitado una generalizada reactivación de los negocios. Esta renovada prosperidad, la cual nuestra inocente burguesía alemana atribuye a la restauración de la estabilidad y el orden, está basada realmente sólo sobre la renovada prosperidad en Inglaterra y sobre el incremento en la demanda de productos industriales de los mercados de América y del trópico. En 1850 la [438] industria y el comercio se han recuperado mucho más. De igual manera que en Inglaterra, ha habido excedentes de capital de carácter temporal y una extraordinaria flexibilidad en el mercado de dinero, y los reportes de las ferias de otoño de Frankfurt y Leipzig han sido altamente satisfactorio para la burguesía participante. Los problemas en Schleswig-Holstein y el Electorado de Hesse24, las disputas a lo interno de la Unión Prusiana y las notas de amenazas intercambiadas entre Austria y Prusia no han podido detener el desarrollo de todos estos síntomas de la prosperidad hasta el momento,

23 Es muy interesante comparar la cantidad de datos en torno a dos grandes procesos especulativos

descritos involucrando los negocios de ferrocarriles y barcos de vapor, con la novela de Julio Verne La Vuelta

al Mundo en 80 Días. En el núcleo, tanto de la realidad del desarrollo del mercado mundial, como de la ficción, desarrollada en 1872, podemos intuir al mercado y el capital en desarrollo y expansión en pos de un objetivo histórico: llegar primero. [N.T.].

24 La primera guerra en Schleswig-Holstein cerró con el armisticio de Malmö (Agosto 1848); pero la guerra estalló de nuevo en Abril 1849, y duró hasta Julio. Prusia finalmente concluyó un tratado de paz con Dinamarca el 2 de Julio 1850 mediante el cual todas las tropas de Prusia iban a ser retiradas de los ducados; el ejército local de Schleswig-Holstein se esforzó en resistir la armada danesa, pero fue vencido en la Batalla de Idstedt (5 de Julio de 1850). En el Electorado de Hesse el conflicto rompió en Septiembre de 1850 entre el Electorado y su parlamento; el lectorado solicitó ayuda no de Prusia sino a Austria y la Dieta Federal. Dado que Hesse era un miembro de la Unión Erfurt, Frederick William respondió ocupando Kassel; esta fue la razón para el amenazador intercambio de notas entre Septiembre y Noviembre 1850. Sin embargo el asunto en su totalidad terminó con la completa sumisión de Prusia a los austríacos, la conocida humillación de Olmütz (29 de Noviembre 1850).

como hasta The Economist ha notado, con la burlona petulancia propia de un cockney2526(…)

Los mismos sintomas fueron observados en Francia desde 1849 y especialmente desde el comienzo de 1850. La industria de París estaba ocupada, y las fábricas de algodón de Rouen y Mulhouse properaron, si bien allí los altos precios de las materias primas, como en Inglaterra, actuaron como un efecto inhibitorio. El desarrollo de la prosperidad en Francia fue también impulsado de forma particular por la exhaustiva reforma de tarifas en España y por la reducción de impuestos de varios productos lujosos en México, en relación con estos dos mercados, la exportación de productos franceses se incrementó significativamente. El incremento de capitales en Francia señaló a un número de especuladores que la explotación de las minas de oro de California sirvió elegantemente como una excusa. Una cantidad de compañías surgieron para seducir con su baja cantidad de acciones y sus folletos con tonos socialistas directo al bolsillo de los pequeños burgueses y trabajadores juntos y salir corriendo. Una de esas compañías era inclusive patrocinada directamente por el gobierno. Las obligaciones de importación en Francia en los primeros nueve meses aportaron 63 millones de francos en 1848, 95 millones de francos en 1849, y 93 millones de francos en 1850. Tuvieron de ingresos en el mes de Septiembre 1850 por encima de un millón sobre el mismo monto del año 1849. Las exportaciones se incrementaron también en 1849 y más aún en 1850.

La prueba más impactante de la prosperidad restaurada es la reintroducción del efectivo del banco por la Ley del 6 de Agosto 185027. El 15 de Marzo 1848, el Banco había autorizado ajustar su efectivo. Sus notas en circulación, con la inclusión de bancos provinciales, en el momento era de 373 millones de francos (£14.92 millones). En 2 de Noviembre 1849 fue de 482 millones de francos esta circulación (£19,280,000); un incremento de £4,360,000, y el 2 de Septiembre 1850, 496 millones de francos (£19,840,000); un crecimiento de alrededor de £5 millones. No hubo proceso de depreciación de estas notas, y contrariamente, la creciente circulación de las notas fue acompañada por un estable incremento de acumulación de oro y plata en las bóvedas del Banco, así que [439] en el verano de 1850 el efectivo acumulado alcanzó aproximadamente £14 millones, una sorprendente suma en Francia. Que el Banco se haya puesto una condición, incrementar su condición y por tanto su capital operativo por 123 millones de francos (£5 millones) demuestra sorprendentemente cuan correcta nuestra aserción en una anterior edición que la aristocracia financiera durante la revolución, no sólo no cayó, sino que más bien se hizo más fuerte. Este resultado es mucho más obvio a través de la siguiente revisión superficial de la reciente legislación. El 10 de Junio 1847, el Banco fue autorizado

25 El término es muy equívoco, sin embargo, no sólo hace referencia a los nacidos en un específico

sector de Londres, sino también a un acento y dialecto distintivo. En el estilo de Marx podemos entenderlo como una ironía. [N.T.].

26 El pasaje omitido aquí forma parte de los primeros cinco parágrafos del capítulo IV de ‘Las Luchas

de Clases en Francia’. En este fragmento Marx desarrolla su análisis económico hasta una conclusión importantísima, ‘Mientras esta prosperidad general dure, permitiendo a las fuerzas productivas de la sociedad burguesa desarrollar sus capacidades máximas en el seno del sistema burgués, no podrá haber cuestionamientos sobre una real revolución. Tal revolución sólo es posible al momento en que dos factores entren en conflicto: las fuerzas productivas modernas y las formas de producción burguesas… Una nueva

revolución sólo es posible como el resultado de una nueva crisis; pero vendrá con mucha seguridad como la

crisis en sí.’. 27 El Banco de Francia elimina con esta ley una moneda de curso legal forzoso. Durante la Guerra

Franco-Prusiana se implementará de nuevo esta práctica. [N.T.]

a un puntaje de gastos de 200 francos con un gasto mínimo de 500 francos. Un decreto del 15 de Marzo 1848 estableció las notas del Banco de Francia para moneda legal y desestimó al mismo de la obligación de canjearlos por dinero en efectivo. Su emisión de billetes fue limitada a 350 millones de francos. Fue facultado además a emitir notas de 100 francos. Un decreto del 27 de Abril ordenó la fusión de los bancos departamentales con el Banco de Francia, un decreto del 2 de Mayo 1848 incrementó la emisión de notas a 452 millones de francos. Un decreto del 22 de Diciembre 1849 incrementó igualmente el máximo de notas emitidas a 525 millones de francos. Finalmente, como resultado del Acta del 6 de Agosto 1850, tuvo la capacidad de intercambio de las notas de devolución de dinero. Esos hechos, el continuo crecimiento en la circulación, la concentración de todo el crédito francés en las manos del banco y la acumulación de todo el oro y la plata francesa en las bóvedas del mismo, llevaron al señor Proudhom a la conclusión que el banco mudó su piel vieja de serpiente para metamorfosearse en un Volksbank

28 proudoniano. Él no tenía conocimiento siquiera de la restricción bancaria inglesa de 1797-1819, sólo tenía su paisaje a través del canal para conformarse, para comprender, en su concepción histórica de eventos desconectados sucediendo en las sociedades, estos hechos vistos como normales y ocurriendo sólo en Francia por primera vez. Se puede ver que los supuestos teóricos revolucionarios, bajo la dirección del Gobierno Provicional en París, fueron igualmente ignorantes de la naturaleza y los resultados de las medidas tomadas como hombres mismos de este gobierno provisional.

A pesar de la prosperidad industrial y comercial, que de forma recurrente disfrutó Francia, las grandes masas laborales, los 25 millones de campesinos, se hallaban en gran depresión. Las buenas cosechas de los años recientes empujaron el precio del grano en Francia, mucho menos que en Inglaterra, favoreciendo las ganancias de la usura y la creación [440] de impuestos de una manera nada menos que brillante. La historia de los últimos tres años, sin embargo, ha probado suficientemente que esta clase de la población no es capaz de ninguna iniciativa revolucionaria.

El período de crisis se desarrollo tardíamente en el continente comparado con Inglaterra, lo mismo pasó con el período de prosperidad. En Inglaterra se desplegó el proceso originalmente, siendo así el demiurgo del cosmos burgués.

En el seno de una prosperidad generalizada, en la cual las fuerzas productivas de la sociedad burguesa se desarrollan tan rápido como es posible junto a las relaciones burguesas, no puede hablarse de real revolución. Dicha revolución sólo es posible en períodos en los cuales ambos factores, las modernas fuerzas productivas y las formas burguesas de producción entran una en conflicto con otra. Los diversos conflictos que llevan a cabo los representantes de los distintos grupos del partido del orden continental y sus mutuos compromisos, lejos de llevar a nuevos procesos revolucionarios, los impiden, y esto, claro está, debido a que el fondo de las circunstancias en este momento, es esencialmente burgués. Una nueva revolución sólo será posible en el seno del

levantamiento de una nueva crisis. [441] Volvamos ahora a los eventos políticos de los últimos seis meses.

28 Banco del Pueblo. [N.T.]

En Inglaterra los periodos de bonanza económica son también períodos de prosperidad política para el Whigismo29 –encarnada acertadamente en la persona del hombre más pequeño del reino, Lord John Russell30. El ministerio llevó ante el Parlamento pequeñas y quisquillosas reformas las cuales sabía no tendrían éxito en su aprobación por la Cámara de los Lores, o que serían retiradas al final de las sesiones bajo el pretexto de falta de tiempo. Tal falta de tiempo es siempre inducida por el previo exceso de aburrimiento y disputa vacía, la cual el orador sólo finaliza lo más tarde posible, con la observación de ausencia de cuestionamiento por parte de la Cámara. En tales momentos la lucha entre libre cambistas31 y proteccionistas degenera en pura farsa. La mayoría de los libres cambistas está muy preocupada con la explotación material del libre comercio para tener tiempo o atención a la lucha por las lógicas y consecuencias políticas; enfrentados al boom en la industria urbana, los Proteccionistas recurren al ridículo, las lamentaciones y las amenazas. Las partes continúan el conflicto más que todo por la decencia misma, para no olvidar la existencia de su contraparte. Antes de la útima sesión la burguesía industrial causó un gran escándalo sobre la reforma financiera; en el Parlamento mismo esta se limitó a amonestaciones teóricas. Antes de la sesión, Mr Cobden repitió su declaración de guerra al Zar con motivo del préstamo a Rusia, y casi quedó corto en sarcasmos, amontonando suficiente sobre el gran pobre de St Petersburgo. Seis meses después se vió obligado a tomar parte en la escandalosa farsa de la Paz del Congreso32, cuyo único resultado fue que un indio Ojibway ofreció una pipa de la paz a Herr Jaup33 –para el tremendo horror de Herr Haynau34 en la plataforma– y que el Yankee estafador con templanza, Elihu Burrit35, fuera a Schlerwig-holstein y Copenhague con el fin de asegurar a los gobiernos interesados sus buenas intenciones. ¡Como si la guerra Schleswig-Holstein pudiera tomar un vuelco total en tanto que Herr van Gagern tomara parte en ella y Herr Venedey no!36

El gran asunto político de la sesión pasada fue de hecho el debate griego37. Todas las

fuerzas de la reacción absolutista en el Continente han formado coalición con los Tories38

29 En la versión en inglés Whiggery, en la alemana Whigtums. Grupo político inglés vinculado a

propietarios de tierra, burguesía financiera e industrial. A finales de la primera mitad del siglo XIX comenzarán a autoidentificarse como liberales. [N.T.].

30 Lord John Russell fue el lider del partido Whig, y Primer Ministro en 1846-1852 y 1865-1866. 31 La autoridad del libre cambio en la Cámara de los Comunes estaba compuesta tanto de Whigs y

Pellistas como del relativamente pequeño partido liderado por Cobden al que Marx describió como ‘libre cambistas par excellence’.

32 En Agosto de 1850 un congreso internacional de pacifistas reunido en Frankfurt del Meno. Al mismo asistieron prominentes libre-cambistas, filántropos, y Cuáqueros.

33 Heinrich Jaup fue el Primer Ministro liberal de Hesse-Darmstadt de 1848 a 1850, presidió el congreso de paz de Frankfurt.

34 Julius Jacob, Freiherr van Haynau fue el Mariscal de campo austríaco notable por su cruel represalia contra los hungaros luego de su derrota en 1849.

35 Elihu Burrit fue un burgués filántropo y pacifista americano, quien organizó el congreso de paz de frankfurt y muchos otros.

36 Marx esta presumiblemente haciéndo un señalamiento aquí a la exagerada idea de Venedy sobre su propia importancia.

37 Los debates de Junio 1850 sobre Grecia son conocidos en la historia inglesa como los debates de Don Pacífico, a raiz del asunto surgido en torno al manejo de Palmerstons sobre la exigencia de Don Pacífico a compensación por parte del gobierno griego por los daños causados a su casa por un movimiento anti-semita griego.

38 Factor político con presencia en el Parlamento Inglés de tendencia conservadora. [N.T.]

ingleses para derribar a Palmerston39. Luis Napoleón había inclusive retirado al embajador de Francia de Londres, tanto para favorecer al Zar Nicolás como al orgullo nacional francés. Toda la Asamblea Nacional francesa fanáticamente aplaudió esta audaz ruptura con la tradicional alianza inglesa. El incidente dio a Mr Palmerston la oportunidad para presentarse él mismo ante los Comunes como el campeón

40 de la libertad civil a lo largo de Europa; recibió la [442] mayoría de cuarenta y seis votos, y el resultado de la coalición, la cual fue tan estéril como tonta, fue la no renovación de la Ley de Extranjeros41.

Si en su exposición sobre Grecia y sus discursos en el Parlamento Palmerston confrontó a la reacción europea como un burgués liberal, el Pueblo inglés usó la presencia de Herr Haynau en Londres para dar una impactante demostración de su política exterior42.

Mientras el representante militar de Austria era perseguido por el pueblo por las calles de Londres, Prusia, personificada en su representante diplomático, sufrió una desgracia igualmente apropiada a su posición. Debe recordarse cómo la más ridícula figura en Inglaterra, el letrado hablador Lord Brougham, expulsó al letrado Bunsen de la galería de la Cámara de los Lores a cuenta de su falta de tacto y ofensivo comportamiento43 –con el acompañamiento general de risas de todas las damas presentes. Herr Bunsen, imbuido con el espíritu del gran poder que representa, calmadamente superó esta humillación. Él simplemente no abandonará el país, sin importar lo que le pase. Está vinculado a Inglaterra por medio de todos sus intereses privados; continuará explotando su ventaja diplomática con el fin de especular con la religión inglesa, encontrar un lugar para sus hijos en la Iglesia de Inglaterra y para sus hijas en alguno de los peldaños sociales de la aristocracia.

La muerte de Sir Robert Peel ha contribuído considerablemente a la acelerada desintegración de los partidos viejos. El partido que ha formado su principal apoyo desde 1845, los denominados Peelites, se han desintegrado posteriormente44. Desde su muerte el mismo Peel ha sido glorificado de la forma más exagerada por casi todos los partidos como el mayor estadista inglés. Una cosa al menos lo distingue de los ‘estadistas’ europeos –él no era un simple arribista. Más allá de esto, la cualidad de hombre de estado de este hijo de la burguesía quien alcanzó el liderazgo de la aristocracia consistió en identificar que hoy hay sólo una aristocracia: la burguesía. A la luz de esta creencia él continuamente empleó su liderazgo sobre la aristocracia terrateniente para arrancar concesiones a esta a favor de la burguesía. Esto se hizo evidente en la cuestión de la emancipación Católica y la reforma de la policía, mediante los cuales incrementó el poder político de la burguesía; en las Actas Bancarias de 1818 y 1844, las cuales fortalecieron a la aristocracia finaciera; en la reforma arancelaria de 1842 y en la legislación de libre cambio de 1846, con la cual la aristocracia fue nada menos que sacrificada a la burguesía industrial. El segundo pilar de soporte de la

39 El Vizconde Palmerston fue en su tiempo Secretario de Asuntos Extranjeros, siendo luego Primer

Ministro (1855-65). 40 En inglés en el original. 41 La Ley de Extranjeros, sancionada primeramente en 1?93 [sic. N.T.] y exporádicamente renovada,

ha otorgado el poder al gobierno para expulsar extranjeros a discreción. Durante la última mitad del siglo diecinueve el gobierno británico no hizo uso de este poder.

42 Haynau visitó Londres en Septiembre 1850, y fue reconocido por ciertos carreteros [draymen], quienes lo atacaron.

43 Henry, Lord Brougham fue un pasado Lord canciller wigh; Christian van Bunsen fue el embajador prusiano en Londres; las exactas circunstancias del incidente aludido no son claras.

44 Sir Robert Peel, lider del ala liberal del partido Tory, y primer ministro en 1834-35 y 1841-46, dividió su partido rechazando las Leyes Cerealeras en 1846 con apoyo Whig y Libre-cambista.

aristocracia, el ‘Duque del Hierro’, el héroe de Waterloo45, se mantuvo fielmente al lado del caballero del algodón Peel, un decepcionado Don Quijote. [443] Desde 1845 Peel ha sido tratado como un traidor por el partido Tory. Su poder sobre la Cámara de los Comunes estaba basado en la extraordinaria credibilidad de su elocuencia. Si uno lee sus más famosas intervenciones, se puede encontrar que consisten en una masiva acumulación de lugares comunes, hábilmente intercalados con una gran cantidad de data estadística. Casi todos los pueblos en Inglaterra quisieran levantar un monumento al hombre que derogó las leyes cerealeras. Un diario cartista ha señalado, refiriéndose a la policía entrenada por Peel en 1829: ‘¿Qué queremos con ese monumento a Peel? Todo oficial de policía en Inglaterra e Irlanda es un monumento vivo para Peel.’46

Los eventos más recientes apuntando a causar una controversia en Inglaterra es la promoción de Mr Wiseman al puesto de Cardenal Arzobispo de Westminster y la división de Inglaterra en trece diócesis católicas47. Este paso dado por el Vicario de Cristo, que ha sido una gran sorpresa para la Iglesia de Inglaterra, prueba una vez más las ilusiones a las que está sujeta la reacción europea; como si, después de las victorias que han obtenido al servicio de la burguesía, la restauración del completo orden feudal, absolutista, con todas sus atavíos y ropajes religiosos, es lo siguiente por concretarse. En Inglaterra el Catolicismo tiene sus pocos partidarios en los dos extremos de la sociedad, la aristocracia y el lumpenproletariado48. El lumpenproletariado, el populacho, que es irlandés o de antepasados irlandeses, es católico por tradición. La aristocracia condujo como una moda su coqueteo con el Puseyismo49 hasta que la conversión al catolicismo finalmente se hizo la moda50. Al tiempo que la aristocracia inglesa se vió forzada en el curso de su lucha contra el avance de la burguesía a hacer cada vez más alarde de las ideologías religiosas de su clase, los teólogos ortodoxos de la alta iglesia se vieron también forzados en su lucha contra los teólogos de los disidentes burgueses a reconocer más y más las consecuencias lógicas de sus rituales y dogmas semi-católicos. De hecho la conversión individual de reaccionarios anglicanos a la religión original, con su monopolio de gracia, incrementó inevitablemente su frecuencia. Este fenómeno insignificante produjo en las mentes del clero católico inglés las más optimistas esperanzas para la inminente conversión de toda Inglaterra. La nueva Bula papal la cual de nuevo trató a Inglaterra como una provincia romana, y fue hecha bajo la intención de dar nuevos ímpetus a esta tendencia hacia la conversión, está provocando ahora el efecto opuesto. Los Puseyitas51, repentinamente confrontados con su incursión medieval, están retrocediendo de horror, y el [444] Obispo puseyita de Londres sin perder un segundo ha emitido una declaración en la que se retracta de todos sus errores y declara una guerra a muerte contra el Papa. Toda la comedia es de mucho interes para la burguesía sólo en la medida en que la misma represente nuevas oportunidades para nuevos ataques a la alta iglesia y sus universidades. La comisión encargada de reportar el estado de las

45 EL Duque de Wellington se hizo político Tory, y fue Primer Ministro en 1825-30. 46 Del artículo titulado ‘El Monumento Peel’, publicado en Red Republican. 17 Agosto 1850. 47 El 29 de Septiembre 1850 el Papa reestableció la jerarquía católica romana en Inglaterra,

estableciendo un arzobispado y doce obispos. 48 En alemán en ambas versiones [lumpenproletariat]. [N.T.] 49 Tendencia de la Iglesia anglicana iniciada, entre otros, por Edward Bouverie Pusey (1800-1882).

[N.T.] 50 Despues de E.B. Pusey; el movimiento de Oxford como es ahora conocido. J.H. Newman, el lider

original de este Anglo-católico movimiento, fue convertido en Roma en 1845. 51 Seguidores del Puseyismo, ver nota 45.

universidades abrirá el escenario a furiosos debates en la próxima sesión. La masa del pueblo naturalmente no está interesada en esto, y ni está a favor o en contra del Cardenal Wiseman. Con la actual escasez de noticias los diarios se presentan dando la bienvenida a materiales para largos artículos y diatribas vehementes contra Pío IX. The Times inclusive exige que el gobierno deba incitar una insurrección en los Estados Papales y dar rienda suelta a Mazzini52 y los italianos refugiados contra el Papa para castigar su interferencia. El Globe, órgano de prensa de Palmerston, trazó un en extremo ingenioso paralelismo entre l bula papal y el último manifiesto de Mazzini53. El Papa, dice, pretende la supremacía espiritual sobre Inglaterra y nombra obispos in partibus infidelium

54. Aquí en Lodres un gobierno italiano se establece in partibus infidelium, encabezados por el anti-papa, Mr Mazzini. La primacía que Mr Mazzini no sólo pretende sino que en realidad ejerce en el Estado Papal es en este momento de naturaleza puramente espiritual. Como las bulas papales, el Manifiesto de Mazzini es de contenido puramente religioso. Ellos profesan una religión, hacen una apelación a la fé, llevan el lema: Dio ed il popolo, Dios y el pueblo. Nos preguntamos si hay alguna diferencia entre lo demandado por cada uno, de forma diferente –en contraste con el papa– Mr Mazzini al menos representa la religión de la mayoría del pueblo al que se dirige –porque difícilmente hay en Italia otra religión que la de Dio ed il

popolo. Más aun, Mazzini ha aprovechado esta oportunidad para dar un paso adelante. En Londres, junto a otros miembros del Comitée Nacional Italiano él ha logrado un préstamo de 10 millones de francos –aprobados por la Asamblea Constituyente de Roma55– en la forma de acciones de 100 francos cada una y, lo que es más, para el único propósito de comprar armas y materiales de guerra. No puede negarse que este préstamo tiene más oportunidades de éxito que el voluntariamente fallído préstamo del Gobierno de Austria en Lombardía56.

Inglaterra recientemente lanzó a Roma y Austria un duro golpe mediante el tratado de comercio con Piamonte-Cerdeña. Este tratado destruye los planes de Austria para una unión aduanera italiana y [445] asegura una considerable área para el comercio de Inglaterra y las políticas de su burguesía en el norte de Italia.

La antigua organización de los Cartistas está también en proceso de disolución. Aquellos petite bourgeois que aun permanecían en el partido, aliados con la aristocracia obrera, formaron una tendecia puramente democrática, cuyo programa se limita a la Carta

52 Sujeto vinculado a la unificación de Italia bajo el programa de la Giovine Italia [La joven Italia],

tuvo participación en las revueltas de 1848. Según Marx su programa buscaba la creación de una república de clase media. Leemos de Engels: Es necesario, reconocer que para los trabajadores italianos, el gran

agitador Mazzini, tiene un único consejo: aprender todo lo que se pueda (¡como si esto pudiera suceder sin

recursos!)..., intentar como sea posible formar cooperativas (¡que no cooperativas productivas!) y ¡¡confiar

en el futuro!! El texto citado, fragmento del escrito Das Auftreten Mazzinis gegen die Internationale, está originalmente en italiano, es escrito el 28 de julio de 1871, y traducido al alemán, desde donde se hace la presente traducción. Los números de página se refieren a Karl Marx / Friedrich Engels - Obras Públicas, (Carlos) Dietz Verlag, Berlín. Volumen 17, 5 Edición 1973, reimpresión de la primera Edición 1962, Berlín / RDA. p.392. Consultado el 6 de mayo de 2012 en: http://www.mlwerke.de/me/me17/me17_390.htm . [N.T.]

53 Guiseppe Mazzini fue el lider ideológico del movimiento nacionalista italiano. En 1849 estuvo a la cabeza del Gobierno Provisional de la República Romana, y subsecuentemente vivió en exilio en Inglaterra.

54 En la tierra de los infieles. 55 La Asamblea Constituyente Romana fue electa en Enero 1849. [El resto de la nota está alterado.

N.T.]. 56 El gobierno de Lombardía y Venecia solicitó un ‘préstamo voluntario’ en la primavera de 1850, que

se transformó en uno forzado al hacerse claro que los habitantes no deseaban suscribirlo.

del Pueblo y otras pocas reformas pequeño-burguesas57. La masa de trabajadores viviendo en verdaderas condiciones proletarias pertenece a la tendencia revolucionaria Cartista. A la cabeza del primer grupo está Feargus O’Connor; a la cabeza del segundo, Julian Harney y Ernest Jones. El viejo O’Connor, un escudero irlandés y supuesto descendiente de los viejos reyes de Munster, es, a pesar de sus ancestros y su punto de vista político, un representante genuino de la vieja Inglaterra. Es un conservador en esencia, y siente un profundo y bien fundado odio no sólo por el progreso industrial sino también por la revolución. Sus ideales son enteramente patriarcales y pequeño-burgués. Hace unidad en su persona de un inagotable número de contradicciones, que encuentran su plenitud y armonía en un cierto sentido común contundente58, el cual permite al mismo año tras año escribir sus interminables cartas en el Northern Star, cada carta siempre en abierto conflicto con las anteriores. Justo por esta razón O’Connor proclama ser el hombre más coherente en Gran Bretaña y de haber profetizado todo lo que ha pasado durante los últimos veinte años. Sus espaldas, su voz de trueno, su gran habilidad pugilistica, con la cual según él defendió el mercado de Nottingham contra 20.000 personas –todo esto es parte esencial de un representante de la vieja Inglaterra. Es claro que un hombre como O’Connor está obligado a ser un gran obstáculo para un movimiento revolucionario; pero tales personas presentan una funcion útil, en la que los varios viejos, arraigados prejuicios que encarnan y propagan desaparecen al desaparecer aquellas –resultando en que el movimiento, al librarse de estas personas, pueden liberarse a la vez de tales prejuicios de una vez por todas. O’Connor vendrá a pesar del movimiento; y justo por eso tendrá con más fuerza la pretención al título ‘martir por buena causa’, como Lamartine y Marrast.

El punto principal del conflicto entre las dos tendencias Cartistas es el asunto de la tierra. O’Connor y sus seguidores quieren usar la Carta para establecer a la clase trabajadora en pequeñas explotaciones, y eventualmente hacer de la propiedad vinculada a la pequeña explotación la forma universal en Inglaterra. [446] Es bien conocido como ha fallado en este intento de implantar los minifundos como forma de propiedad en corta escala por la vía de una compañía anónima. La tendencia de toda revolución burguesa de destruir la propiedad de la tierra a gran escala puede hacer ver momentáneamente esta división en minifundos como algo realmente revolucionario, aunque esto es regularmente acompañado por la infalible tendencia de la pequeña propiedad a concentrarse y encontrarse con el proceso de ruina económica bajo la forma de agricultura a gran escala. La tendencia Cartista revolucionaria opone a esta demanda por la división de la tierra la exigencia de la confiscación de toda la propiedad de la tierra. La tierra no debe ser repartida sino conservarse como propiedad nacional.

A pesar de esta división y la emergencia de demandas más extremas, los Cartistas, teniendo presentes las circunstancias bajo las cuales las Leyes Cerealeras fueron derogadas, sospechan aún que en la próxima crisis tendrán de nuevo que formar alianza con la burguesía industrial, los reformistas financieros59, y que tendrán que ayudarlos a vencer a

57 Los seis puntos de la People’s Charter [Carta del Pueblo] fueron sufragio [universal] masculino, la

boleta [sufragio secreto], igualdad en los distritos electorales [distritos divididos de forma equitativa], pago de M. P. [pago a los miembros del Parlamento para que personas sin recursos puedan servirle], abolición de las cualificaciones por propiedad [eliminación de criterios censitarios] y elecciones anuales parlamentarias.

58 En inglés en el original. 59 Esto es, la Asociación Nacional para la Reforma Parlamentaria y Financiera, fundada en 1849 por

Cobden y Bright. Este cuerpo trabajó sobre la base de la supuesta ‘Little Charter’ cuyas demandas incluían sufragio local, parlamentos trianuales y la boleta.

sus enemigos, forzando concesiones con ellos a cambio. Esta será ciertamente la posición de los Cartistas en la próxima crisis. El movimiento revolucionario presente en Inglaterra sólo podrá comenzar cuando el Cartismo gane, de igual forma que la batalla de junio60 en Francia fue posible sólo cuando la república triunfó…61

(…)62 En Alemania los eventos políticos de los últimos seis meses se sintetizan en el

espectáculo de Prusia engañando a los liberales y Austria Embaucando a Prusia. En 1849 la hegemonía de Prusia en Alemania parecía ser el problema, en 1850 era la

división de poder entre Austria y Prusia. En 1851 todo el cuestionamiento apunta a la forma en la cual Prusia se somete a Austria y retorna como un pecador arrepentido al seno de la completamente restaurada Dieta Federal. La ‘pequeña Alemania’ que el rey de Prusia esperaba obtener en compensación por su desafortunada procesión por Berlín el 21 de Marzo de 1848 se ha transformado a sí misma en la ‘pequeña Prusia’. Prusia ha tenido que soportar todas las humillaciones con paciencia, y ha desaparecido de entre las filas de las grandes potencias. La traidora estrechez de sus políticas ha reducido de nuevo a la nada el modesto sueño de la Unión63. Es atribuída falsamente a la Unión un carácter liberal y así se ha engañado a los sabios del partido de Gotha64 con la fantasmagórica constitucionalidad que nunca fue tomada en serio; a pesar de todo Prusia se ha vuelto tan burguesa como resultado de su desarrollo industrial, su permanente déficit y su deuda nacional que, retorciéndose y resitiéndose, cae cada vez más irremediablemente victima del consitucionalismo. Mientras los sabios de Gotha finalmente descubrieron como vergonzosamente Prusia se había ocupado de su dignidad y prudencia, mientras que incluso Gagern y Bruggeman finalmente dieron la espalda en noble indignación a un gobierno que ha desempeñado estos atrevidos juegos con la unidad y la libertad de la patria, Prusia estaba sintiendo no mucha alegría con los pollitos que se habían reunido bajo sus alas protectoras en la forma de los pequeños principes. Sólo en el momento de angustia e indefensión más absoluta tuvo que entregarse a las garras del águila Prusiana –garras ansiosas de anexión– y tuvieron que pagar un alto precio por el regreso de sus súbditos a su antigua obediencia al estado como resultado de la intervención, amenazas y demostraciones prusianas. El pago se consumó con opresivos tratados militares, caros acuartelamientos y la perspectiva futura de ser mediatizados por la Constitución de la Unión. Pero Prusia se aseguró de impulsarlos a

60 Insurrección de junio de 1848. Primera gran guerra civil de la historia entre proletarios y burgueses.

[N.T.] 61 El pasaje omitido aquí forma el volumen del Capítulo IV de la edición de Engels de ‘Las Luchas de

Clases en Francia’. 62 Finaliza la página 447 y hasta el primer párrafo de la página 456 no aparecen en el texto en inglés.

En proceso de traducción. [N.T.]. 63 La Unión de Tres Reinos (esto es, de Prusia, Sajonia, y Hanover) fue el primer fruto de la política de

Radowitz para unir Alemania bajo la dirección de Prusia en forma de federación (26 de Mayo 1849). Durante 1849 se extendió rápidamente hasta cubrir un total de 28 estados; sin embargo, en 1850 los estados más grandes comenzaron a desertar de Prusia, dejando a los estados más pequeños en la Unión Erfurt (Abril 1850), los cuales recibieron una constitución, pero disolveindose en su omento bajo la presión de Austria (Noviembre 1850).

64 El partido de Gotha fue fundado en Junio de 1849 por algunos miembros prominentes de la derecha monárquica en la Asamblea Nacional de Frankfurt (tales como Dahlmann, Bassermann, los corredores Gagernand Brügemann), luego que Federico Guillermo IV rechazara aceptar la corona alemana de la Asamblea. Su propósito fue la unión de Alemania sin Austria bajo una Prusia transformada en una monarquía constitucional.

salir de este nuevo predicamento [457]. Prusia había restaurado el imperio de las fuerzas de la reacción en todas partes y a medida que tales fuerzas eran reestablecidas más y más principes salían del lado de Prusia para lanzarse a sí mismos en los brazos de Austria. Ahora que pueden estos príncipes dominar de nuevo como lo habian hecho antes de Marzo, Austria absolutista estaba más cerca de la apariencia que de un poder cuya habilidad para ser absolutista no era más grande que su deseo por ser liberal. Más aun, la política de Austria no condujo a la mediatización de los estados pequeños sino, por el contrario, a su protección como componentes integrales de la Dieta Federal a la que trataba de hacer renacer. Así Prusia observó como Sajonia, que hace unos meses había sido salvada por las tropas prusianas, desertaba de su lado, como hicieron Hanover y el Electorado de Hesse. Ahora Baden seguía en la lista a pesar de su guarnición prusiana. Prusia puede ver con toda claridad a partir de los eventos en las regiones de Hesse65 que el apoyo a las fuerzas reaccionarias en Mecklenburg, Hamburgo y Dessau no era para su propio provecho sino para la ventaja de Austria. Así el fracasado Kaiser alemán se ha dado cuenta que está en realidad viviendo en la era de la perfidia. Pero a pesar que él debe ahora mantenerse al margen mientras su brazo derecho, la ‘Unión’, es arrebatada, el hecho es que dicho brazo se ha marchitado desde hace tiempo. Así Austria ha arrastrado ya al todo el sur de Alemania bajo su hegemonía y aun en el norte de Alemania los estados más importantes se oponen a Prusia.

Austria finalmente había hecho tales progresos que, apoyada por Rusia, era capáz de oponerse abiertamente a Prusia. Esto lo hizo sobre dos asuntos: Schleswig–Holstein y el Electorado de Hesse.

En Schleswig–Holstein la ‘espada de Alemania’66 había concluído una genuina paz al margen de Prusia67 y entregado sus aliados a las manos de una fuerza hostíl superior. Inglaterra, Rusia y Francia decidieron poner fin a la independencia de los ducados registrando esta intención en un tratado que Austria también firmó. Austria y los otros gobernantes, de acuerdo al tratado de Londres, argumentaron en la restaurada Dieta Federal por una intervención federal en Holstein a favor de Dinamarca. Mientras tanto Prusia ha tratado de continuar con su política dilatoria exhortando a las partes a someterse a una Corte Federal de arbitraje, la cual aun no está definida ni es existente y que ha sido rechazada por la mayoría de los mayores gobiernos. Ésta no ha alcanzado nada con tal maniobra que no sea levantar las sospechas del poder dominante sobre maquinaciones revolucionarias y recibir en consecuencia notas amenazantes, que pronto acabarán con sus deseos de una polìtica exterior “independiente”. El pueblo de Schleswig–Holstein tendrá pronto a su padre y soberano restaurado. Un pueblo que se permite a sí mismo ser

65 En inglés [the two Hesses] en Alemán [beiden Hessen] “las dos Hesses”. Se hace referencia a dos

sectores geográficos y culturales, el Estado de Hesse, cuya cuidad más importante es Frankfurt, y la llamada Hesse renana, o Hesse del Rin. [N.T.].

66 Una referencia al discurso de Fedrico Guillermo IV del 3 de Abril 1849 en réplica al ofrecimiento de la Asamblea Nacional Alemana de la corona imperial: ‘Si el escudo y la espada de Prusia son necesarios contra los enemigos externos e internos, no seré tomado por sorpresa’

67 Los prusianos fueron famosos por esta maniobra en el curso del siglo dieciocho sobre todo en los tiempos de los Guerras Napoleónicas.

gobernado por [458] Herr Beseler y Herr Reventlow68, a pesar de tener a toda la armada de su lado, muestra como aun necesitan del látigo danés para su elevación.

El movimiento en el Electorado de Hesse nos da un ejemplo inigualable de lo que un ‘levantamiento’ en un pequeño estado alemán puede traer como consecuencia. La virtuosa resistencia burguesa al estafador Hassenpflug69, ha producido todo lo que puede esperarse de tal espectáculo. La Cámara fue unánime, el pueblo también unánime, los funcionarios públicos y el ejército se pusieron al lado de los ciudadanos; todas las fuerzas opositoras fueron eliminadas, la exigencia ‘fuera el principe’ se había satisfecho de manera espontánea, el estafador Hassenpflug había desaparecido con la totalidad de sus ministros; todo se sucedió suavemente, todas las partes se mantuvieron justo dentro de los límites de la ley, todos los excesos fueron evitados y la oposición alcanzó la más fina victoria en los anales sin mover un dedo. Y ahora que la burguesía tenía todo el poder en sus manos, ahora que sus juntas coporativas no encontraron la más mínima resistencia, era que estaban más necesitadas. Justo en este momento, en lugar de Tropas electorales, tropas extranjeras se apostaban en sus fronteras, listas para entrar a poner un fin al espléndido espectáculo de poder burgués en venticuatro horas. Justo ahora la indefensión y la desgracia comienzan. Mientras al comienzo la burguesía no había sido capaz de retirarse, ahora no era capaz de avanzar. La resistencia a los impuestos del Electorado de Hesse probó de forma más impactante que cualquier otro evento como todos los enfrentamientos entre pequeños estados terminan en pura farsa. Sus únicos resultados son la intervención extranjera, y el conflicto sólo es llevado a término no sólo por la remoción del príncipe sino también de la constitución. Esto prueba lo ridículo de estas confrontaciones momentáneas, en las cuales la pequeña burguesía de los pequeños estados busca con lealtad patriótica salvar hasta el más mínimo logro pendiente de los días de Marzo de su inevitable destrucción.

En el Electorado de Hesse, en un estado de la Unión que tuvo que ser arrancado del abrazo de Prusia, Austria estuvo involucrada con su rival en directa confrontación. Fue Austria quien de alguna manera incitó al Electorado al ataque a su constitución y luego puso al mismo bajo la protección de la Dieta federal. Con el objeto de agregar peso a su relación de protección, para usar los asuntos en el Electorado de Hesse con el fin de quebrar la resistencia prusiana a la hegemonía de Austria, y ejercer coerción sobre Prusia para volver a unirla a la Dieta Federal, las tropas de Austria y del sur de Alemania han sido dispuestas en Franconia y Bohemia. Prusia también está mobilizando sus fuerzas. Los periódicos estan repletos de reportes de marchas y contramarchas de los cuerpos armados. Todo este alboroto no llevará a ninguna parte, de la misma manera que la disputa entre el Partido del Orden y Bonaparte. Ni el rey de Prusia ni el emperador de Austria son sus propios señores –sólo el Zar de Rusia lo es. A la voz de mandato del Zar la rebelde Prusia cederá el paso sin derramar ni una gota de sangre. Las partes se encontrarán pacíficamente en sus puestos de la Dieta Federal, sin interrupciones en sus mutuos celos mezquinos, en el conflicto con sus súbditos, o en su humillación a la supremacía rusa.

Pongamos ahora atención al país abstracto, la Nación Europea, la nación de los exilios. No haremos referencia a los grupos individuales de desterrados, los alemanes,

68 Wilhelm Beset fue la cabeza del Gobierno Provisional de Schleswig-Holstein instalado en Kiel en

1848, y diputado de centro derecha en Frankfurt; Graf Friedrich van Reventlow fue un prusiano noble reaccionario y miembro del Gobierno Provisional de Schleswig-Holstein.

69 Hans Daniel Hassenpflug fue partidario del gobierno despótico del Electorado de Hesse antes y después de 1848; fue Primer Ministro del electorado desde 1850 hasta 1855.

franceses, húngaros, etc; su haute politique70 se limita a una simple y pura chronique

scandaleuse71. Pero Europa y el pueblo como un todo se han dado recientemente un

gobierno provisional en la forma del Comité Europeo Central72, compuesto por Joseph Mazzini, Ledru-Rollin, Albert Darasz (el Polo)73 y – Arnold Ruge, quien modestamente justifica su presencia escribiendo ‘miembro de la Asamblea Nacional de Frankfurt’ junto a su firma. Aunque es imposible decir qué consenso democrático ha convocado a estos cuatro [p.21] evangélicos a sus funciones, su manifiesto sin duda contiene el credo de la gran masa de los exiliados y resume en forma acertada los logros intelectuales que esta masa adeuda a la reciente revolución.

El minifiesto comienza con una pomposa enumeración de las fortalezas de la democracia.

¿De qué adolece la democracia para el logro de su victoria?... Organización… Tenemos sectas pero no iglesias, incompletas y contradictorias filosofías pero no religión, ninguna creencia colectiva que pueda reunir a los creyentes bajo un único signo y armonizar sus trabajos… El día en que nos encontremos nosotros mismos unidos, marchando juntos bajo los ojos del bien que está entre nosotros… será la víspera de la lucha. Para ese día habremos contado nuestras fuerzas, sabremos quienes somos, seremos conscientes de nuestro poder74.

¿Por qué no ha sucedido aún la revolución? Porque la organización del poder revolucionario ha sido débil. Este es el primer decreto del gobierno provisional de los exiliados.

Este estado de hechos debe ser remediado por la organización de los creyentes y la fundación de una religión.

[460] Pero para lograr esto dos grandes obstáculos deben ser superados, dos grandes errores deben ser enmendados: la exageración de los derechos de la individualidad, la estrechez de mente de la exclusividad de la teoría… No debemos decir ‘yo’; debemos aprender a decir ‘nosotros’… aquellos que siguen tras sus susceptibilidades individuales rechazan hacer los pequeños sacrificios exigidos por la organización y disciplina y niegan la totalidad del cuerpo de creencias que ellos mismos predican, como un resultado de los hábitos del pasado… La exclusividad de la teoría es la negación de nuestro dogma básico. Aquel que dice, ‘He descubierto una verdad política’, y quien hace acto de aceptación de su sistema como condición de aceptación en el seno de una asociación fraternal, repudia al pueblo –el único interprete progresista de la ley del mundo– con la única

70 Alta política. Francés en el original alemán. [N.T.]. 71 Crónica escandalosa. Francés en el original alemán. [N.T.]. 72 El Comité Central de la Democracia Europea fue instalado en Junio 1850 en Londres por iniciativa

de Mazzini, pero sólo duró hasta Marzo 1852 debido a las diferencias ideológicas entre sus varios miembros. Su manifiesto, ‘To the Peoples’ [A los Pueblos], fue publicado en el jornal del Comité, Le Proscrit, el 6 de Agosto 1850. La itálica es de las anotaciones de Marx.

73 Albert Darasz tomó parte en los levantamientos de Polonia de 1830, y después de su derrota fue exiliado, tomando gran importancia como figura de varias organizaciones nacionalistas polacas desde el exilio. Alexandre Ledru-Rollin ha sido editor de La Reforme.

74 En la versión en inglés, los siguientes dos párrafos aparecen incluídos dentro del texto citado, mientras que en la versión alemana son dos párrafos que Marx emplea para conectar con el siguiente fragmento (tercer párrafo siguiente). Nos decidimos por la versión alemana. [N.T.].

intención de hacer valer su propio ego. Aquel que, por el aislado trabajo de su inteligencia, por poderoso que pueda ser, dice descubrir hoy una solución definitiva a los problemas que aquejan a las masas, quien se condena a sí mismo a errar por defecto, por soslayar una de las eternas fuentes de la verdad, la intuición colectiva de la naciente nación en acción75. La solución definitiva es el secreto de nuestra victoria… De lejos la mayor parte de nuestro sistema no es más que una disección de cuerpos, un descubrimiento de la maldad en el análisis de la muerte, incapaz de percibir o comprender la vida. La vida es el pueblo en movimiento, el instinto de las masas elevada a un extraordinario poder por el común contacto, por el profético sentimiento de las grandes cosas por ser realizadas, por la espontánea, repentina, eléctrica asociación en la calle. Es esta acción, excitando a lo máximo los latentes poderes de la esperanza, devoción, amor y entusiasmo que duermen hoy, revelando la unidad del hombre y su naturaleza, en el total vigor de su potencia. El saludo de un trabajador en uno de esos momentos históricos que dan inicio a una época que nos enseña más sobre la organización del futuro que lo que podemos aprender hoy por la fría y descorazonada labor de la razón o por el saber de los ilustrados muertos de los últimos dos milenios de la vieja sociedad.

Así, al final, todo este sinsentido altisonante argumenta desde una perspectiva filistea

y altamente vulgar que la revolución ha fallado debido a la celosa ambición de los líderes individuales, y debido también a la conflictiva opinión de los varios profesores populares.

Las luchas de las diferentes clases y fracciones de clases unas con otras, las cuales en su desarrollo a través de específicas fases es precisamente lo que constituye la revolución, son, para nuestro evangelista, sólo la infelíz consecuencia de sistemas divergentes. Sin embargo, los sistemas divergentes son en realidad el resultado de la existencia de luchas de clases. Se hace claro inclusive de aquí que el autor del manifiesto niega la existencia de la lucha de clases. Bajo el pretexto de luchar contra los doctrinarios dispensan toda la realidad de la situación, todas las [461] visiones partidistas. Ellos soslayan la especifidad de las clases para formular sus intereses y demandas en la cara de las otras clases. Esperan de las clases que olviden sus intereses conflictivos y se reconcilien bajo la bandera de algo vacío y descaradamente vago, lo cual, bajo el aspecto de reconciliación de los intereses de todas las partes, sólo concilia la dominación bajo un particular y sus intereses –el partido burgués. Luego de lo que esos caballeros debieron experimentar en Francia, Alemania e Italia durante los últimos dos años, no puede decirse que la hipocresía por medio de la cual ellos envuelven los intereses burgueses en la retórica lamartiana de la hermandad es inconsciente. Qué tanto el caballero sabe de “sistemas” esta a la vista, más aun, por el hecho que ellos imaginan cada uno de esos sistemas siendo simplemente un fragmento de la sabiduría compilada en el manifiesto, y por ser basada solamente en una de las frases retóricas reunidas allí: libertad, igualdad, etc. Sus nociones de organización social son altamente impactantes: un motín en la calle, un alboroto, un saludo de manos, ¡y eso es todo! Para ellos la revolución como un todo consiste simplemente en el derrumbamiento de

75 En la versión en inglés aparecen unas palabras incompletas; tomamos el texto –sólo del fragmento

problemático– de la versión alemana: Wer da behauptet, durch isolierte Arbeit seiner Intelligenz, so machtvoll sie sein mag, heutzutage eine definitive Lösung der Probleme zu entdecken, welche die Massen agitieren, der verurteilt sich selbst zum Irrtum durch Unvollständigkeit, indem er verzichtet auf eine der ewigen Quellen der Wahrheit, die Kollektivintuition des in der Handlung begriffenen Volks. Incorporamos el mismo subrayado.

los gobiernos existentes; una vez logrado esto, la “victoria” está conquistada. El movimiento, el desarrollo, la lucha llegan a un fin, y bajo la égida del entonces regente Comité Europeo Central la era dorada de la República Europea y el gobierno permanente del gorro de dormir76 puede comenzar. De la misma manera que ellos detestan el desarrollo y la lucha, estos caballeros odian el pensamiento, el pensamiento insensible –como si cualquier pensador, incluyendo a Hegel y Ricardo, nunca hubiese logrado tal nivel de insensibilidad con la cual esta bazofia melosa es vertida sobre las cabezas del público. La gente no está para preocuparse por el mañana, deben vaciar sus cabezas de ideas. Cuando el gran día de decidir llegue, serán electrificados por el simple contacto físico y el acertijo de futuro será resuelto por el pueblo mediante un milagro. Esta convocatoria de vacío-mental es un intento directo de estafar precisamente a aquellas clases que están más oprimidas. Un miembro del Comité Central Europeo pregunta,

Al decir esto ¿decimos que debemos marchar sin una bandera; decimos que queremos inscribir una negación a nuestra bandera? Tal sospecha no puede dirigirse a nosotros. Como hombres del pueblo, quienes hemos sido parte de la lucha por muchos años, no podemos considerar por un momento guiarlos a un futuro vacío.

Contrariamente, para probar la plenitud de su futuro estos caballeros presentan un

registro –digno del mismo Leporello77– de verdades eternas y logros para todo el curso de la historia. Este registro es presentado como el basamento común [462] de la ‘democracia’ en nuestra época y es resumido en el siguiente padrenuestro:

Creemos en el progresivo desarrollo de la habilidad humana y la fuerza hacia la ley moral que nos ha sido impuesta. Creemos en la asociación como el único medio para el logro de este fin. Creemos que la interpretación de esta ley moral y la ley del progreso puede ser confiada a cargo no de una casta o individuo, sino al pueblo, iluminado por la educación nacional, dirigida por aquellos de su seno cuya virtud y calidad de gente muestren a ser los mejores. Creemos en lo sagrado de ambas individualidad y sociedad, las cuales no pueden excluirse ni entrar en conflicto una con otra, sino armonizarse para el beneficio de todos por todos. Creemos en la libertad, sin la cual toda responsabilidad humana desaparece; en la igualdad, sin la cual la libertad es sólo una ilusión; en la hermandad, sin la cual la libertad y la igualdad serían medios sin un fin; en la asociación, sin la cual la hermandad sería un programa irrealizable; en la familia, comunidad,

estado y patria como esferas progresivas en las que el hombre debe sucesivamente crecer, en el conocimiento y la aplicación de la libertad, igualdad, hermandad y asociación. Creemos en la santidad del trabajo y en la propiedad que brota del trabajo como su símbolo y fruto; creemos en el deber de la sociedad de proveer los medios para el trabajo material a través del crédito y los medios para el trabajo mental por la vía de la educación… para resumir, creemos en una condición social que tiene a Dios y Su ley como su cúspide, y al pueblo como su base…

76 Del inglés nightcap y el alemán Nachtmütze, denotando, tanto la prenda de dormir que calienta la

cabeza en noches frías, como al trago, también nocturno, de contenido alcohólico. Seguramente Marx señala detrás de esta costumbre a específicos sectores políticos.

77 En la ópera de Mozart Don Juan, el sirviente del héroe y cronista de sus logros sexuales.

Asi: progreso – asociación – ley moral – libertad – igualdad – hermandad –

asociación – familia, comunidad, estado – santidad de la propiedad – crédito – educación – Dios y el pueblo – Dio e popolo. Estas frases figuran en todos los manifiestos de las revoluciones de 1848, desde la francesa hasta del principado de Valaquia, y es precisamente por tal razón que figura aquí como la base común de la nueva revolución. En ninguna de esas revoluciones fue la santidad de la propiedad, aquí santificada como el producto del trabajo, olvidada. Ochenta años antes de su tiempo Adam Smith supo mucho mejor que nuestros revolucionarios pioneros la exacta medida en la que la propiedad burguesa es ‘el fruto y símbolo del trabajo’. Así como para la concesión socialista que la sociedad debe garantizar a todos los medios materiales para el trabajo a través del crédito, todo fabricante está acostumbrado a dar a sus trabajadores el crédito por mucho más material del que puede procesar en una semana78. El sistema de crédito se ha extendido hoy en día en el mismo grado en que es compatible con la inviolabilidad de la propiedad, y el crédito es después de todo sólo una forma de la propiedad burguesa.

Resumiendo, este evangelio enseña un orden social en el cual Dios forma la cúspide y el pueblo –o, como es dicho luego, la humanidad [463] – la base. Esto es, ellos creen en la sociedad como ella existe, en la cual, como es bien conocido, Dios está en la cúspide y la turba en la base. A pesar del credo de Mazzini, Dios y el pueblo, Dio e popolo, pueden tener un significado en Italia, donde el Papa es igualado con Dios y el príncipe con el pueblo, es así un tanto exagerado ofrecer este plagio de Johannes Ronge79, el más insípido desperdicio del pseudo-iluminismo alemán, como la clave que resolverá el acertijo del siglo. Más aún, de qué manera tan fácil los miembros de esta escuela se acostumbran al pequeño sacrificio que la organización y la disciplina demandan, cuan voluntariamente renuncian a la estrecha exclusividad de la teoría es demostrado por nuestro amigo, Arnold Winkelried Ruge, quien, para delicia de Leo, ha sido esta vez capaz de reconocer la diferencia entre divinidad y humanidad80.

El manifiesto finaliza con las palabras:

Lo que se necesita es la constitución para la democracia europea, y la fundación de un presupuesto del pueblo o erario. Lo que se necesita es un ejército de iniciadores.

Con el fin de ser uno de los primeros iniciadores del presupuesto del pueblo, Ruge ha

recurrido a ‘de demokratische Jantjes van Amsterdam’81 –los cuidadanos demócratas de Amsterdam– para explicar a ellos su especial vocación y obligación de proveer dinero ¡Holanda esta en apuros!

Londres, 1 Noviembre 1850.

78 Esta es, por supuesto, una referencia irónica a la relación de trabajo capitalista. [N.T.] 79 Jhannes Ronge fue un religioso alemán, el fundador del movimiento ‘Alemania Católica’ de 1840,

quien hizo un intento de purga de superstición en la Iglesia Católica poniéndola en armonía con los tiempos modernos.

80 Una referencia a la controversia de Ruge con el historiador clericalista reaccionario Heinrich Leo a finales de 1830. Leo afirmaba en su panfleto Die Hegelingen (Haya, 1838) que los jóvenes hegelianos eran ateos debido a la imposibilidad de reconocer la diferencia entre humanidad y divinidad.

81 Jantjes: apodo para los holandeses.