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La HbvriAd d« Impío ni* DO tiert maJ limlieí qut «1 reipeio a la vida prlrad*, i la moral j a la paz publica — Art 7 ° da la CcnaMtudón ~ *

Periódico indeDeDdleótácde. combaten

Director: RICARDO {FLORES MAGON W-JI ^kii erTa

Je Te de Redacción:

J u a n Sarabia . AÑO I —ai ÉPOCA '

' Oficinas; 107 NorwChannlng Ave-

SAINT LOUIS, MO., B Í U . A:-^Octu6re i de ia< ,

Kntered a» oecond-cIaMH matter, rebrttary tj, I905» • • the post Bce nt Balut I**»ula), 5fo. under itie Actor Conarrcnn of March S, I87V

¡SOLIDARIDAD! 1 Scimos fuertes por h unión.

*4J

En el Man'ifieito i ia Nación expedido por la Junta Organiza dora del Partido Liberal Mexica­no, se estudíala situación p r e ­sente del país y be proponen los med 103 para combatir de modo provechoso á la Dictad u ra que ha creado semejante ¡situación. JPcro por extenso que sea el Manifiesto, no podta desarrollar con la ampli­tud á que se prestau todos los puntos que contiene. Nos pro­ponemos, pues, para me-jor ilus­trar el criterio de nuestros con­ciudadanos, ampliar en sucesivos artículos las ideas del Manifiesto, hasta dejarlas completamente claras } fundadas.

Lo que primero debemos tra­tar es lo que se refiere á la limón de los liberales, j a que esa Unión tiene que ser la base de todo tra­bajo provechoso en el futuro. De­bemos combatir con fuerza y ele­mentos que correspondan a los elementos y fuerzas de nuestro enemigo, debemos corregir esa desigualdad espantosa que ha ca­racterizado la lucha entre opri­midos y opresores, debemos po­nernos al mismo uivél de la Dic­tadura y no permanecer deba­tiéndonos* inútilmente bajo sus garras. Miremos como se ha hecho poderosa la tiranía,.y sír-Vano^el}<^e énae iáni i pai;-*¿(or¿ talécernbs.

La fuerza de la tiranía está constituida por la solida'ndad de los opresores, solidaridad fatídi­ca, que se ha impuesto férrea­mente sobre nuestra desunión y nuestra apatía. Los tiranos se ayudan y se sostienen unos á otros, con decidido empeño No se ha dado el caso de que á algún scr-vidor-dc la Dictadura le falte el apoyo de los demás ,Cuántos funcionarios lian delinquido, han hecho rugir en torno de ellos el oleaje de la cólera popular, han sido maldecidos y acusados,} han salido llecos de la tempestad que los rodeaba, gracias al apoyo decidido de sus cómplices, los o tros funcionarios1 ¡Próspero Ca-buantzi, acusado con pruebas, de violar las Leyes de Reforma, fué absuelto por la Cámara servül 1 Bernardo Reyes, el odjoso asesi­no del 2 de Abril, cuyos prodito­rios crímenes se probaron hasta la saciedad, /u¿ también, acusado y también fué absuelto-por la misma Cámara envilecida! Si los vecinos de un pueblo se quejan de que un cacique roba y asesina, esa queja es despreciada pdr los superiores del cacique, que lo sos­tienen sistemáticamente. Ni pa­ra el más vil gendarme hay res­ponsabilidades en nuestra desdi­chada Patria, los más insignifi­cantes esbirros tienen impunidad para cometer los más brutales excesos. ..

Los opresores se unen para el mal. ¿Por qué no unirnos noso­tros para el bien? Los opresores se protegen y se sostiene invaria­blemente, cuando alguno de ellos vacila, perseguido por las justas indignaciones del pueblo, cien manos de cómplices se tienden hacia él y lo levantan. Y noso­tros, ¿qué hacemos cuando un lu­chador liberal vacila 6 cae al gol pe inicuo de la Dictadura? "Mira­mos el tíecho, lo .lamentamos qui­zá,' pero no;nos lanzamos i soste­ner al herido, campeón, no tende­mos nuestro brazo aLcorréligio-nario, al'b'érmano qué'lucha por ideales que vanamente proclama­mos como nuestros. r} '""' » í S Estamos desunidos, y por nues-tra'desunión *somo«Méb¡les;« Por millares se'cuecítanMo^íliberales ñó7confórm1eVfc«n*él>actual*'ésta^ dOjdé'cósás'yí'añlíelantes;» dé'lun cambioJÍwlíticoTj»roM"m'alo\é» -ue eso» descontento» ae sruaraen _ú!dis,rustoMrntrorde|¡p.*Buros de an hogar \ en te t de unirse 'entre si . haier alvo e i tv tnv j«or

realizar sus anhelos, esperen con apacible tranquilidad que la liber­tad de la Patria se realice por sí sola, Y esa resignación musul­mana, esa apatía, esa inactividad para trabajar poi la Patria, aun­que se comprende Ja necesidad de ese trabajo, puede ser nuestra muerte. No tendrá sola esa re­dención que soñamos, sin esfor­zarnos por aproximarla, el sol de la Libertad, si no lo encendemos nosotros mismos, no brillará so­bre nuestras cabezas de malos ciudadanos, pero en cambio, po drá \enir la invasión, la agresión extranjera, no sola, pero sí atraí­da por nuestro inaiasmo antipa­triótica, que nos presentará co­mo presa fácil á la codicia de los fuertes que nos acechan Y en nosotros puede cumplirse esta sentenciosa frase de Vargas Vila los pueblos que se duermen en la abyección, despiertan en la con­quista.

La Junta Organizadora del Par­tido Liberal Mexicano, da la voz de alerta y llama á. los patriotas á la unión y á la organización, á for­talecerse de modo efectivo contra el despotismo > á luchar eficaz, y provechosamente .por el pronto res­tablecimiento de la Democracia en México. Teniendo Lcn cuenta la Jin¡i^.7liia;%aL'¿aOá,úei,an\igúa£i-.cr~. ganizaciones^públicas, que han si­do brutalmente destruidas por la tiranía, propone esta vez la consti­tución de sociedades secretas, eu los términos sencillos que se explican en las Resoluciones Cuando un número considerable de ciudadanos se hayan afiliado al Partido y cum­plan con las expresadas Resolucio­nes, se tendrá fuerza suficiente pa­ra resistir á la fuerza de la Dicta -dura y habrá entre los liberales esa potente solidaridad que ahora nos taita, y con la que liaremos menos desigual, menos difícil y más fruc­tífera la lucha contra los opresores

La IV de las resoluciones referi­das, sintetiza el ideal de solidari­dad que debemos empeñarnos por ver realizado Ayudará ios que luchan, sostener á los que por sus ideas sufren persecuciones ó despo­jos, estar siempre dispuestos á ten­der la mano fraternal á las vícti­mas del despotismo eso es lo que no hemos hecho y debemos hacer los liberales; eso es lo que se pro— pone,reallzarvla Junta con el auxi­lio de los buenos correligionarios.

Con l,i contribución mensual y voluntaría de las personas y agru­paciones que ingresen al Partido Liberal que se reorganiza, se crea­rá un fondo destinado al fomento de la oposición'cn todos sentidos. ¡Y qué mejor manera de alentar á los luchadores Hiérales, que dándoles la seguridad de no estar solos, de no quedar abandonados cuando la tiranía se ensañe en ellos, de reci­bir la ayuda de sus hermanos cuan­do el despotismo pretenda aplastar­los' i Cuántos patriotas ansiosos de combatir, permanecerán en deses­perante inacción por falta de ele­mentos para enfrentarse con la po­derosa. Dictadura! [Cuántos otros estarían ya en la brecha si no los detuviera la amarga consideración de su aislamiento, si no se pregun­taran qué sería de sus familias des­amparadas cuando ellos, arrojados á la cárcel ó"despojados de*sus bie­nes, no pudieran 'ya sostenerlas! Y entré los que ocupan puestos públi­cos, ¿serán todos malvados por na­turaleza, ó hibráj algunos hombres honrados, aunque débiles, que^sólo por necesidad sirven'á l í opresión? Debemos averiguarlo parajio con­denar sin j oStidaV' j Incitemos 'ájílos fnndónarioífp6blicos';á|qúe ,cúm-plan,'con"suideb¿r,'_á«.'que<deso¡gan cdns¡gñas,'iáqne « conduzcan í con

•ülrÉVUperset u<H6t£ del déapot s mo no <ui abcudoaem^en la n. -

' « serla ni los dejemos'á merced de los T r g k n n ~ñ\ Aara odios salvajes de la tiranía quel'l I . O U d d Ql U B I C " nuestro Partido, fiel á su programa de solidaridad entre los hombres honrados, los acoja en, su seno y los ayude. Cuando nuestra timón se cumpla, cuando la. Fraternidad sea un hecho entre nosotros, podre­mos decir que nuestra causa' ha lie gado á los dinteles de la', Víctor ia? Por la Unión y la Fraternidad sere­mos fuertes, y por la fuerza sere­mos temibles. Es lo que neceslta-c mos para vencer á la Dictadura.

Si hoy, pocos y débiles, inermes y dispersos, hacemos ya temblar á los déspotas cobardes, con el solo poder de nuestra Justicia y nuestro Derecho, ¿cómo,- no hemos de po­nerlos en1 fuga cuando hayamos ci cado fuerza para nuestra Justicia y organización para nuestro Dere­cho?

Tenemos fe cu el pueblo mexi­cano Sabemos que no se perderá estérilmente el llamamiento á la Unión que se le ha hecho, y confia­mos en que muy pronto comenzará á tomar forma en la práctica lo pro­puesto en las Resoluciones de lá Junta Organizadora del Partido Liberal Mexicano. Entonces co­menzarán á brillar en el horizonte ensombrecido de la Patria los pri- meros fulgores de una alba reden­tora, y podrán dar al viento los o* prinudos la primera nota de su cpl nicio triunfal

Excelente Oportunidad.

Hft ,chiJe viajar. • f r * - * , * ' , - . . , ^La.enorme emigración de me­xicanos á esta''Repúbhca, alarmó á la Dictadura que tiene interés en qué no disminuya el número ,de sus esclavos y se propuso im­pedirla. - " , •', ' ¿••'Intrigó cerca del Gobierno de Washington hasta"lograr exigie­ra p o s e e r l o 00, oro, á'los mexi-óanosjqué" desearen cruzar la fronter.t,del Norte. ,* Tai-disposición está en vigor y se aplica con '"rigorismo inusi-itdrtOí'v.-u i-f1*' 19" "- -«•>-' Í J t o s mexicanos* pobres, á quie­nes la miseria los obligue á aban­donar la* Patria en busca de tra-.baio, están vedados de internar­se á este p'aís en caso de que no tengan-la cantidad fijada por la ley de inmigración. Tienen que permanecer en territorio mexi­cano, aunque el hambre los tor­ture; tienen que continuar siendo ^víctimas de la escasez de trabajó ó cíe lo's misérrimos salarios que causan la ruma' y la desespera-•tipn demuestras clases trabaja­doras? " . - i • * , ¡Los Inspectores de inmigración

ejercen extremada vigilancia y [procuran por cuantos medios les esíposible, impedir que se evada él'cumplimiento de las leves so-1

jbre la\matena. / „ , • , ., Kerp.no solo los .que -emigran

Administrador:

Enrique Flores Macón

RíJOLÜCJqES XICÍOO.

—;. *"' .,<

en giro de Remita usted co^sSobreAfeesta York, ó en billetes de Banco,** orden de S . Bustamante, la can... dad de $i IO oo moneda americana^ y se le enviará por Express, li­bre de gastos, una máquina de es; cnbir «OLIVER,» ó una SMITH PREMIER último modelo.

Ágesela Csmerclal. ' .

P. O. BOX- SB4. St. Lóala, Ha

Para referencias dirigirse al Sr. Ricardo Flores Marón.

Ui)a a r U de Qopoi).

El Padre Gopón, uno de los jefes más distinguidos del moví" miento revolucionario en Rusia, ha dirigido al Czar la siguiente' carta

"A Nicolás^ Romano//,^ antiguo.! Czar y ascsiiúFáctual det imperio di -Rusia:

Lleno de ingenua fe en tí," considerándote como padre de tu pueblo, yo marchaba hacia tí pacíficamente, acompañado de los hijos de tu pueblo. Tu* debías saberlo, tu lo sabías. La sangre inocente de los obreros, de sus mujeres, y de sus hijos, separará de hoy en adelante para siempre al pueblo ruso y á tí, su asesino.

T u no podrás encadenar la ola popular, furiosamente hinchada, por ningún modo, ni aún por la promesa de los Estados Genera­les.

"Las bombas y la dinamita, el terror colectivo, el terror indivi­dual y la insurrección popular, esperan tu caída y la de los ase­sinos del pueblo. Yo lo digo y esto sucederá. Ríos de sangre, como en ninguna otra parte, se verterán por causa tuya. La mis­ma Rusia perecerá quizás. Trata de comprenderlo de una vez por, todas y recuérdalo siempre' * i "Renuncia, pues, pronto con toda tu familia-ai trono,dé Rusia' y comparece delante del Tribunal del pueblo4rnso. ;„Ten piedad *de tus' hijos 5í ten¡p¡edadí'deílos pal;

del ImperiO'loh, tu;jiuevofre-

'¿Los mexicanos radicados.en es? ^aJslyque.'hagaá^nnifviaieta

. _, .es scr£"í;mp03ibl<í4irei , »ar al lugar de su residencia en la frontera no pueden pre­

sentar $50.00 oro Igual cosa sucede con quienes

tengan familia en este país é in­tenten visitarla, sin traer consi­go la cantidad mencionada

El periódico "Naco Budget" refiere que últimamente, un me­xicano, de Cananea, Sonora, se dirigía á Douglas, Ariz., á visi-táY a su hermano Al llegar á ¡Naco, punto fronterizo, se le exi­gió que presentara el dinero que llevaba. No tenía un centavo y había ya comprado el boleto has­ta el termino de su viaje. Confia­ba en que su hermano le propor­cionaría los fondos suficientes para el regreso

Los empleados del Gobierno Americano le notificaron que no podía atravesar la línea divisoria. El mexicano perdió el valor del boleto.de su pasaje y hubiera quedado ahaudonado, sin recur­sos y en lugar extraño, si .no se compadece de su suerte el Super­intendente del Ferrocarril de Cananca y le permite que, sin costo alguno, regreseá su hogar.

A lo arbitrario y absurdo de esa ley privativa del derecho de libre tránsito, afíádase que no se le ha dado la publicidad debida: la mayor parte de nuestros com­patriotas ignora que existe. , En todos los actos de la Dicta­dura se nota el desprecio que siente por sus gobernados. Arre­gla con el Gobierno de Washing­ton la expedición de una ley aten-tatoria^contra el Derecho y se abstiene de darla á conocer am­pliamente, para poder así causar el mayor número de perjuicios.

El odio que profesa al pueblo que oprime y explota, la hace co­meter toda clase de violaciones y atentados.

-•Este,terrible documento; >tvr3. i3t\ci4/tj

J\ié

«rodando en n - i to los ios dia­rio» de buropa

La Reforma Social.

1.—Sa constituye la Junta Orgsni-isdora dal Partido Liberal Mexicano, oon el personal que lüacribe eilasRe-•oluclonei. La Junta exlatirá públi­camente y'reiidirá en un pala extran­jero para ettar & «alvo, halla donde es posible, de los atentados del-Go­bierno de Móilco Trabajará por la reorganización del Partido Liberal j con^lqs.élemontoa que los .eorrellgló' narioi le proporcionen, luchará por todos los medios, contra la Dictadu­ra de Porfirio Díaz. REGENERA­CIÓN será el órgano ollcial de la Jun­ta.

II.—Loa ciudadanos mexicanos que •aten de sánenlo con laa ideaa del Ma-nifieato expedido, y publicado on RE­GENERACIÓN y anhelen la libertad de la Patria, constituirán en laa pobla­ciones en_que residan, agrupaciones secretas que estarán en comunicación con esta Junta. Se aconseja á los co­rreligionarios que en dichas agrupa­ciones prescindan de Inútiles formali­dades. Lo único que se pide es que los ciudadano* liberales" de cada pobla­ción se reúnan de tiempo en tiempo pa­ra" tratar de los asuntos políticos del país "y' mantengan correspondencia con esta Junta, ya para comunicarle noticias políticas, ya para proponer­le proyectos, 6 ya, simplemente, para «Hiservar con'ella las relaciones es-JaMwldiSKyje encarece'» los corréll-típniír^.qijeSconsUtuyanlunlones lo mis numerosa» posible, peroísl!,en*aK guía s^arles^óI6*fcSpün -íliídedand* de nuestras ideas, que DO- por„ su ais­lamiento dejo de dirigirse i nosotros.

III —Los grupos ó ctudadanoa que secunden la presente excitativa, lo co­municarán i. eata Junta, que Inscribi­rá aua nombres entre loa miembros del Partido que ae reorganiza Esos grupos y ciudadanoa enviarán men-sualmente í la Junta, según los recur-

sos y.voluntad de cada uno,* una c o n \ tribución que ae invertirá en los g i s" los que requiérale! cumplimiento'de la cláusula siguionte: " "f >

IV-::lJa Junta,(aparte de susi trabajos proplos^procurará el fomentóle 'puv* bllcacitorie¡ opo'slcionlitas_en,-Móxieo",?'' distribuirá,fondos entre loa luchado-* rea libbralea'que se'(enóuVnKn^en'jaí ' pobrera,.sostendrá á •fos'que la Dic-~ tuiura encarcele y despoje; y si se dan casos de quo.un funcionarlo público. pierda su posición por haber cumplido con su deber, también lo ayudará. "' Anhelamos hacer efectiva i» solidari­dad entre los libéralos y para ello con­tamos con el apoyo erlcaí de nuestros correligionarios, . V.—,La Junta guardará absoluto' socreto sobre loa nombres de los s-deptos! No comunicará entro si á las distintas agrupaciones 6 personas a-ílliadas, sino hasta convencoise de que son verdaderamente leales á la causa, Pero ai slgOo miembro del Partido no desea'en ningún oaso ser comunicado con los demás, se servirá declararlo y la Junta respotaráau vo­luntad. - ,

Reforma, L¡berU<i y Jujtici.. u S ,o0

Loul, ,n'n, , , Í0-' u - S, A , Septlem-'.' bre 28 ue 1905. . - * •. t •,

Presidente, Jiicordo Flora JTooón.—V'*'* VloeprCBidenteV/uoaSoroiiia.—Secro;J

»™™W^T>"7u«^»rM¿j|(Món;==]er, Voóar^Pró/^i^acf»iB<"i^^%v^ cal, jVínuie! Sarabiá.—3er Vocal, Ro-salto Bustamante

NOTA.—Se suplica á los periódicos liberales que estón do acuerdo con es-tss resoluciones, so sirvan manifes­tarlo así á la Junta, > si es poslblo, publicarlas de un modo permanente para que lleguen á conocimiento del mayor número posible de personas.

A nuestros Corresponsales, Subscriptor*? y A?fntes.

Suplicamoa^á nuestroi estimados corres po til A] ei se ilrvan perdonar que por eata ve? DO publiquemos, sui im­portante! noticlai, puei eo \irtud de ocupar el Manifiesto bailante eipacto, no quedó lino mu> reducido para no­ticias

Igualmente suplicamos a todas las personas que nos han escrito y que no hayn.n recibido conteitación, se sirvan perdonarnos. Ya nos ponemos á des-pachar(Iacorreipond«Doíá*que, con los últimos trastornos que hemos sufrido, se nos ha rezagado demasiado,

A nuestros Agentes les suplicamos: nos den las direcciones de sus res pee- '•. tivos abonados para enviarles el pe­riódico directamente, Ó bien que noi Indiquen el medio seguro de hacer llegar i sus manos loa paquetes que acostumbramos enriarles

\ todos suplicamos nos ayuden con los recursos pecuniarios necesarios para poder continuar la lucha desi­gual contra el despotismo de Porfirio Díaz.

Veanso las condiciones.

David Cerna abofeteado. •

Tenía que suceder. Los oposi­cionistas de Monclova estaban can­sados de las baladronadas de David Cerna y se esperaba de un momen­to á otro que el lacayo de Miguel Cárdenas fuera castigado.

Acaba de recibir su castigo con beneplácito de la sociedad, Acos­tumbrado á difamar, nada-lo dete­nía, hasta que el Sr Don Leopoldo Zainbrano, bonorablc caballero de la sociedad de Monclova, lo abofe­teó virilmente humillándolo. Hace pocos días el pueblo presenció re­gocijado los inflamados labios del eunuco, donde llevaba las huellas de los justicieros golpes que le apli­có el Sr. Zambrano.

No serán los últimos golpes que reciba David Cerna. Desde que in­gresó á las filas cardenistas, ha de­generado como mujeizuela ebria y es de presumir que machos saliva­zos y muchos bofetones se le espe­ran á su rostro empecinado. • '

, 'Este Importante diarlo libre-pansa-dor que se publica'en El Paso,',Xexa* bajo la dirección del conooldo* perio­dista Dr* Lauro A¿u\tre,_ofr<!cef reeraí lar el .primer tomo de ÜLaa Memorias deD. Sebaitlín'^á quien 1* pague a-delanisdojiD ano de subscripción; y iTqulen'le anticipe» yalor~de ,un s*y mestre. le~hb(equlári'$',El .Verdadero Porflrio;DIas.'i>5í^.i'iÍ^s,4Í-.JV«-.*-^; )|JLOS precios de Subscripción deas* enérgico dlarlofeocesgredo i oomba-'HrlaDletaduraVaonlos^slguleítas: "a ^ ^ s e D ^ ' i n ^ ^ ^ l T n h O o r a

' Dlrereloa p> etal P (> Ho» 123 E Paos, Ttiaa

>'- ^ f t ^ t í " ) ? 1 * " f " ' ? ! * • , d e '? T«ní» tde»ytículOT americanos,» ' í$

precio» reducidos;pudiendo^^enviarlosiVualqJuierrpTnlto-'de^aonae? se soliciten.? , ; ; .> -, -*-•;. . • ¿iVyíT , ^ « f i S s * j 8 ÍC&*"- ' í'-" -. ^ - ,'i X" " " ^ w K | á » J ? 'SjtotAntes j l e comprar artículo» en cualquiera otraSípíríeí«ffi •^í;it^.^K--+.'ífSf* }r''->t'\tt -h •"•Jv4sV.»í«'!j&!?r-- ,-*?

HBS pedido» í Roaallo Bustamanle P 0~B»a ', W ^ t i i

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Se reciben eo.comisión artículos iijexluwi Pwt* nf«vr«nelM tlMclrM ál Sr..aio4irtto rimam¡2J¡2í

KMIMJuritu „ . , , . Üú

a^^Sl

GircjA (Doréijo; (Del ibro «Los Divinos y r l o s . Humanos."»).

H e n o s aquí en lo m á s ' ' e s p e s o de la s o m b r a ' .

García. Moreno e s el h o r r i b l e pá j a ro de la noche

P a r a p e r s e g u i r á e s t e t i r a n o b u h o hay q u e b a j a r coa él h a s t a el fondo del a b i s m a , s igu iéndolo

. e n su voleleu ve r t i g inoso en l a s t in ieblas .

L a p royecc ión d e la n g u r a de e s t e déspo ta c n : l a h i s t o r i a e s p e ­queña, y de fo rme : es r e p u g n a n t e como una l a r v a , y v e n e n o s a como n a a víbora.

L a h i s to r ia de su t rág ica , dic­t a d u r a no t iene u n r a y o de luz! P r o d i g ó la m u e r t e y. la s o m b r a , a s e s i n ó por mi l la res , azotó á s u s g e n e r a l e s , resuc i tó el t o r m e n t o de las p r i s i o n e s , m a t ó la . ' iuven-tud en las plazas, y pasó en la s o m b r a b landiendo el puña l con una e x t r a ñ a mirada, de loco y la e s p a n t o s a c rue ldad de u n j a n á t i co,

F u e un jesuf ta feroz, un n e u r ó ­tico poseído del odio m i s ardien» te al p r o g r e s o humano .

No Urna la a u s t e r i d a d de Fran­cia. ; ¿i la aLtura in te lectual de Tíiiñe?.. e sos o t r o s dos t í r anos j e ­s u í t a s de Amér i ca .

E r a un d e s p r e c i a b l e y o b s c u r o soñado r de c r ímenes .

A q u e l dé spo t a fue un a r c a í s m o político, un e x t r a ñ o ea es t e siglo (el X I X ) , una especie de fraile loco, escapado de su celda, y io cado del mis t i c i smo de la des t ruc ­ción, m u y d i g n o de ga lopar al 1?.-do de S a n t o Domingo da Guzmán en las c r u z a d a s a íb igenses

13s el t ipo ideal del t i rano faná­tico.

Y o no sé s i se r í a t o n s u r a d o , pe ro m e r e c i ó ser lo ,

E s la figura m á s s o m b r í a m e n t e odiosa de la h i s t o r i a aLÜencada . Tnn pérfido e r a y tari malo , que han p r e t e n d i d o d e s p u é s canoni­zarlo. Bien merece s e r notabili­dad de a lmanaque .

Mezcla confusa de s a c r i s t á n y leguleyo, f r a g u a b a s u s a s e s i n a t o s en los c l a u s t r o s , y los e j e c u t a b a en n o m b r e de Dios y de la ley,

Su fama e s e n t e r a m e n t e con­ventual , y los h i m n n g á mi nom­bre son sa lmodias c a n t a d a s e a s u

^_floor por c u r a s y~monaguillos._ v

L a h u m a n i d a d no le debe s ino a t r a s o , U g r mas y s a n g r e uo p u e d e t e n e r * pa ra c-I^sino a n a t e ­m a s

L a Ig les ia p o d r á l e v a n t a r l e al g ú n d ía a l t a r e s , y c o l o c a r l o c u t r e s u s ídolos; la l iber tad uo le a lzará n u n c a m o n u m e n t o s , á no s e r q u e le l e v a n t a r a una e s t a t u a como la q u e el Conde de M a i s t r c deseaba a l z a r a Yo l t a i r c por ¡a mano del \

Su tosca y d e s g r a c i a d a p e r s o ­nal idad no forma al lado de e s o s t i r anos b r i l l an tes por el valor 6 por el talento, y q u e d e s l u m h r a n

borot&do el 5Ucio\pl tmajc , her ido por acue l l a s ¿Lia p o d e r o s a s y en-LüUtcs el águila s e l evan taba Be­r m a , m a j e s t u o s a , ' imponen te y se a e a o a h a s t a p e r d e r s e e n t r e las b r u m a s del pal ido^boiizui i le

Y pd^abdcbd. ¿grulla p r o s e r ta , j .o r A n e r i r a y E n ropa , Llevando en s u s -Jas como g i r o n e s de la s o m b r a con que acababa c e lu cha" , l lenando de au ;u t i s 1 f in n^ el espitLÍJ > n i i i tdr r lo al mi n l ó el i r a r - i r l o de aque pueb lo , c ru ­cificado, s e c u e s t r a d o y mut i lado cn.plcr.o s ig lo X I X

J a m á s t . r aau a lgui iofué tan 1i l a m e n t e flagelarlo en \ i d a p o r el lá t igo de iin estílo;tan~yiril.

L a musa t r iunfa l de Esch i lo pers igu iendo a J e r g e a a l e n a d u has ta eu brazos-dé ' s u s conci 'b rías y fie s n s eunucos , , tuvo ape ñ a s acen tos s e m e j a n t e s

Jül a lma del Ecuador" se reíLIE£Í& en Mon a vo p i e s l á ulolc e s c e d u , condensac ión dé todos los a n a t e m a s , y vengándose a s í de ese t i r ano , condensac ión de ' odas las ma ldades

MOIJ tal vu 're unió el perho cáus ticu'ilc'Jn. venal , la elocuencia de Marco TuJ io , _v la canden te coa cisión, de Tác i to i en e se haz de a^oLes con e ci al íutitigíj t a r du-i imen te ai s á t i r o j e s u í t a , que la azotaina se oía en toda. ' . 'América, como s e o y e en un circo el chas -q u J o del lá t igo "le un doma cu de f ieras

Vic to r .Hugo y Juan M o n t a l r o bao s ido los dos mas g r a n d e s ia d ignados de e s t e s ig lo: nadie ha s u p e r a d o s u s soberb ios acen tos

Sus due los enn Bonapnrte 3r

|Ga rc ín Moreno , r e s p e c t i v a m e n t e , s o n las dos m á s bel las epopeyas de la p luma con t ra el c e t r o , del ta lento c o n t r a hi iniquidad

r n Mate r i a ve rá s iempre , en medio de fu lgu rac iones - t e r r ib l e s , p a s a r la s o m b r a de aquel los dos t i r anos fugi tLut j , j . t r s u g u i d o s por aquel los dos : : genios indigna dos ; y en v a n ó l o s r e p r o b o s t r a t a r i u de ocul tar las f r en te s , 3i s i c m p r e ' h a n de ' ma rcá r se l a s Jas e s t í o <is ¿idiente»» de los f ~ W y i , y Iris p r r í o d o s fu lguran tes de e' Cofmcjtcf ia.

Ln ] jistic Í. vene « d ñn

m*xnMma&ammammMBRSm Wk£Wm^áBS^SMB3^ "MLfl lEBLl , Urano í a í e l i í a t r ' a j c s a r á > l « baster!, v n

n a ^ c o i n b ¿ l ía ' i r iuevo* Mazxeppa; ¿~l e t e r n a m e n t e d e s ^ r r a c o , y escu j ^ _ ^ ^ ^ %h v*7xi*i9

^ h i n d o c h m o aull ido1 . formidable J Kl bandolero M a n u e l 'AJarcou? e n t o r n o s u y o l a s e t e r n a s "maldifi que e s t u v o a p u n t o de^ef^á jus t i - , c íones á su n o m b r e ! * " \J s ¡ciadu e n . e l 'Bs tado /d fe More los

"** * J 'Mf 1 V A R G A S VÍLA ' ¡ qu e hoy o p r i m e po-*el t i o b e r n a - •»* * "- *• Mdor F r a n c i s c o L e y va,, en t i empo» ' « - , y 3

% |d«l i l u s t r e L e r d o d e ' T e j d d a , él

Í D J D 1 ' twodo le ro A la r con, dec imos go -

t$ ^ ^ t;JiÉd. hu> d é l a p r iva rúa del ' A u t ó -

F x ^ ^ c i s c o C A B R E R A U R I B E , V I e r n t a Día?, que ha p r o c u r a d o co-MAKCOS R O D K J G U H ? , de Drizaba l o c a r e n los p r i n n o a l c s pues tos V e r , ( w M , o p i o SAPLBN, de Ch de su Admimsi rac iu i i , á los a i n * huahua , y A^CBL V E G A , d c M é s i ffuos s a l l eddores que encaparon á co D F . , son cuatro bribones que , la. sa ludab le pe r secuc ión de los se han robado el dineru de R K O F - , Gobiernos h o n r a d o s . N E R A C I O X jf , T i r a n í a y Robo 1 e s ei l emacou

FjTíin Agentes, recibieron el pe j que gob ie rna AJarLuj el TCil. do Tiócico dura r te mucao tiempo > de Me reíos Pin la i m y o r í » de jos no pagaron. Tenemos eso en cono- p u c h o s del E s t a d o , los -\ c a n o s cimien'o de los Directores de pn- es tán otlig"ados á p r e s t a r ¡scrti-b iLdüjues para que no se dejen cíos g r a t u i t o s á los cae qtiLs p o r t ima-por esos pillos an día cadd, m e s 6 r a r i i t r e s

§ t t ¡ seuidLiLs, amena7ando las a u t e n -da r l e s rnn e n \ i a r a l i j c r c i t c al que h a g a Ja m e n o r oajcciúu. L a s consignaciones AÍ E j í r t - i t o son ia nota di di ia en la «satrapía de A -lai-LVui.' Por . robar á los ' cu idada i o * , oor a t rope l lor a s u s hijas o esposas c sólo por sa lvarse l e la p resenc ia a c u s a d o r a de Iris l i nm. L)Lca h>>nradn-i} las a í to r idades hacen, (fía por día, infinidad de c o n s i g m c i c n e s a r b i t r a r i a s a E ¿ re to . L a L e ) de Sui tru*. d i e

que el c o i t i u r e n t e ( e s a n a r e que pi ü[Jt)r(irjne un E s t a d o , d e b e es t a r en relación con el n u m e r o " de R e p r e s e n t a n t e s que .mande; e Congreso de la Uníóq; Mnrélos

£1 Pueblo debe re­chazar el Níquel.

ü l Gob erno por ucdlu de" si dcspres jg iacu órgano KEI Impar u a l * se n uestra muy empeñoso por liarp- creer que la moneda de TIL que1 e&ta sictico recibida hasta L,UU regocijo poi yarLc del pnebló. .'Par* cumpieud »r que falla i la verdad f«:e pohre p » l t l , basta recordar 1es gritos que contra ln emisión de di el a moreda d ó el pueblo Id mxhe ccl I<Í de Si-iAieinhre, f»n la ciudad

7vapribre propaganda que ac sus irnos Jace e / i ifc!tE*-Imfaiv.ial > > J t o r r educe otru l e ^ j l u d o q ie rs?, y íii e J ípe lo por hacer creer que el pit-»hln í-sta contentísimo por el beneficie- que se le ha hecho dándole la moneda de níquel, resul ta huía

E l pueblo debe uegnrse á .;• recibir esa moneda ron la que .se le . hace víctima J e j r -obacíuicD, semejac-t3 al que *>u zió en la epoca del manco González..

Porfirismo 'cok-traprsducs&té.

L i c i a 3 de ^ept iemb ' -e tu\ fo luíjar en Mérirla, Y u c , una ma nifestacióü an t i mol m i s t a , q u e s e vi ó s u m a m e n t e concu r r i da y c_ue' :1cb'e h a b e r c a n s a d o muy;• nial e-fec tuen el bil ioso esc lav i s ta Ule gnrin Molina. L o s man i fe s t an te s nc o b s e r v a r o n a i n e m b a r g o u n 1

pafa, prAteg-idosy a leccionados por la D i c t a d u r a , q u e , e s en la q u e re­s ide el mal v e r d a d e r a tienta P a ­t r i a ! ' y ^ " ? ^ * ¿

(»? * — • — » > » " *

nttítflcatiMesHUtirlcií ^ ' ' por Fintuj IghslB áNim,

" ' E l Eg-oUmoNurle-Amerlcano du-ráete lo Laterv*BCÍ6O Frasee*». '

Rfifutic 6a d« grrandci «rrores ver tidoa i>or el Hln i i im Mmrltc&l j lo* D pulados Buloes y F r l u J Soto

frecio cel Efcmplkr 9 3 00 Para pcdMuadh [glroe al Sr T*Pé~

rez Fornindoe, Admlnlitrador de "El 0(ilmi]lo,"lKñblico.?! r-Soo'. lldofouao W 9.'—MDXICÍO, 1). F -

L a Sübetbia del piieblu U n t o , titimpc r r m p r mida, estal la en i c o n d j e t a q u e t r a s p a s a r a los una ca t á s t ro f e violenta m t t s í ua r cadns por la *w-

L n ( i a , a sa l i r de su oalacio ' o s m a n i f e s t a n t e s BC &H. el tjranD ac hal ló í - c n t c á f r en te f , r , b l n t l c s p o r h r i s t a s

D E L I R I O ^ PIPAPP. ^El p> bre Dídapp marcha de rldícu

lo en ridículo í la rasa de S«lnd ^ . Después dé bat i re l Tceorff de ía aa

dantü'ebifladari dirigiendo i au/Vno IÍIÍHOÍ talento elogios deacontlccra-dos, tía caído ea la m&uf» de creerse uo pot*niado muuídeo QUÍ cuent» con numerosos deudo TÉS

Dice eo «lie estrafalarios oscrito» que un diario ds la Ciudad de Mé-xlco la debe cantidades fabulosas y qaa el Cobernadoi-de Jalisco le. debo tam­bién 85OO0.CC

Do seg-uro quola. primera deuca so­to es frato do la enfermedad cerebral que suíreDidapp; la sepuncia Ul .ver proviene de algunas a lab io ta i icml sas QUQ dirigió & Ahumada y quacsto ae niega &. pajar, con si d arafido que oifeces do valor la» adulaclcnea pro­digadas por n i eaagonatío

viene un ¡solo R e p r e s e n t a n t e , pero ¡"]_Iniel ? demeaie que llava «n ÍU ima-d i soldados e n una relación mu> jliiacldu un rolcán de dsllrloa j alu supe r io r ¡ rinselonea ,Ah , pero mi* laf«lis ie

É l año pasado se eapjdiu una ría si un relámpaso de lucidez rasga-Ley de C a p i t a u ó n í i i m p tes to per- ra ladeQsasoraaneriCarfflladB eu BU soual con el p i e t e i t o de r e c a b a r 1

r e c u r s o s pa ra el t o m e n t o de la I n s ' r u c c i á n Publ ica , y decimos pre tex to , p o r q u e ao ¡se buscó; P1

beneficio r ea l de la" Ins t rucc ión Se hab ló de ella para e n c u b r i r de a lgún modo y h a c e r m e n o s pesa­d a el pueblo la n j e \ a uarga n_uc se a r r o j a b a s o b r e 'I E l impuesto

cráneo y to hiciera comprender ol porvenir que le sapera: las tótricas «»1E.B dol munícoraio T «1 despiadado chicólo del loquero.

con loa con jurados del puculo , í u e í o s e a n de \ c r d a d , s m u r o viu br i Ln itl^d tj nut un r e l ámpa- c e d i d a po ít lca L a s oposic on ts

q^ue ucom¡ let m han cre ído b iemprc za- ' l l l f a f l u ando al D ic t ado r se aál-

tuvo u n miedo cerval , tendió laa manos Supl ican te , cayó de rodi­l las i m p l o r a n d o p e r d ó n , l loro pi d tendo la *>ida, y él q u e n u c a la habia t cn ido ( osó h a b l a r de píe­

los puüblus LOC el e spcc t r i ru lp ldad l . ^ L o s conjui«idu^ de s u s victoria» ó el brillo de su [fueron implacables , y el dé spo t a

tí* go s o b r e su cabeza, y s in i ió la hoja i r ía del puñal de la ven- I Q11*1 "«uJanJo al JJ ic tador sc : aa l -^enza papula r le e n t r a b a en el LO- / a ° d c c i e r tos peí gros v se ¿s-tazcu c u c a n cont ra cieito:» Atropellot;

Al v e r s e f r en te á la m u e r t e , j V Ü0J" s c s i g u e c r e y e n d o lo mis-aque l m a t a d o r , que t a n t o la ha- m ü auníjiie Hay razones a b r u m a Lia p rod igado d e s d e su palac o, | do ras p a r a c ree r todo lo con t ra

p e m o : no, es vuíjrnr puer i l y Frailesca.

La fauUbí¿L m i s s o u a d o i a no podrá, embel lecer lo nunca ; la le­y e n d a heroica nada t e n d r á que hace r con 61: s u s c r í m e n e s , rom perían el molde dc cua lqu ie r poe­ma; p e r t e n e c e á las n a r r a c i o n e s m p d r o s a s , á l a s t r a d i c i o n e s ltí g u o r e s , a la t raged ia h i s tó r ica .

L a gloria no t i ene noticia dc su n o m b r e .

Su esua i ! losa Labezade Medusa apa rece ea la h i s to r ia amer i cana , gui l lot inada por 'MOC.U.1VG, y ce c e r r a d a en la jaula de h i e r ro dc bii e'^pautuaii Jialcc.iCd'

¿Ciiíil fiiíS su h i s to r ia? t

A y u d a d o per los jesu tas a sa l t 5 el poder, ,acop;ot6 el d e r e c h o , ma­tó la l i be r t ad , e n t e r r ó vivocl pue­blo del Ecuador , clavó s o b r e ese s e p u l c r o u n a negra, c ruz , y en n-no de los brazos de ella p legó s u s a las y clavó sus g a r r a s e s t e in­m u n d o ouho 3 c u e d ó allí ceu t i -uela du la m u e r t e , ' amenazan te. _ fijo mi r i n d o el hnrÍTnníe, que es ­t a b a s i e m p r e ooscuro , i luminado t j n t c r r a l o s ' p o r las l lamos fluc t u a n t c s del P i c h i n c h a ! . .

Ti? \ e ¿ e n cuando e i i u . d e y me­d roso , p r e s t a b a oírlo a t en to ¿ u n i n m e n s o ru ido q u e venía p e r t u r b a a d o a q u e l s i lenc io , a^g-o form

l^A.^ d a b l e <iuc Javanzaba en. medio dc '- l i j so ledad, haciéndolo- e s t reTie -*"<3er ;érala ven. y el p e n s a m i e n t o

^ j d c Juan^'M.onta.lvo que* pasaban ^ a o b r e ' a q u e l pueblo d o r m i d o , ver-

^ b o ¿enrayo, t empes tad* de ideas 1

"l í ffc "duclo^tan-ítrág-ico y tan

pequeña , ! mur ió como había vivido, ahogan dose en s a n g r e .

No aupo ni mor i r ; cayó couuu un cobaí de .

> Í T A , ÍÓ mor ibundo ol puñal hc-n c i t a , : o n o Hipp ia3 , ni s c cu br i6 m a j e s t u o s a m e n t e como Cc*-sa - , ni se SOLTI¿ COU desden cu-uuu el b c a r n 6 s , n i t r a t ó de poner la manó eri su . con t r a r i o , como G u s t a v o de Suecia: sólo, alcapzó á m o r i r l lo rando c i m p l o r a n d o la vida como la co r t e sana aquella q j i * i ihtm?lM LII el ~aralsn* Pté-(ffíiff yiotfiejiagtíis (fatio, señor ver­dugo,

Dc ¿1 s q u e puede decirse que en su caída es dcidcí- wnvze b'en sti miscratlcnalitraUzn, fila térurr-da. rl fdó'c de iñ. /ttbu* rpt¿ se rom ptójunfv al tabeniáciifo de! 'enpit

r o l£n V o a t e r r c } , una ma n i fes tac ión •aut i - ree lecc iohis ta , d J i i que j i n f r i s t a , fué c i s p e r s a da á halaros

l£n la época actual las oposi­c iones l levan su condenación . en sí m i s m a s y nu e s vale q u e adu leu ül Dic t ador . El a s t u t o t i rano rom p r e n d e que no son s inceros esos p a r t i d a r i o s de ocasión que toman su n o m b r e pdia s a lva r se d e los pe l ig ros de hacer política, 3 urden? r u » se les t r a t e como si f u e r a n independ ien te s .

Ea la tnahi fcs tac ióu de que ve c i ó o s h-ibui idu los. epns i r nn s u a sc c o i i i r e t a r n r S 1an2ar vivas A la !So-Ree ecc ó n y a l Dic tadcr , c u e es el qLe m á s ha no n ado ese p n n e pío r c p j b l i c a o c , p e - o por cao escapa un Á las vengan-ida b i u - a t s dei feroz Alo ina T n «s h o r a s de spués d é l a n - s n -tes t ac ión , e -a a p r e h e n d i d o el Lie Manue l McncseSi P r e s i d e n t e d" la "Lnióo . Po,Juldr Anl i - r ee lec -uu[ l i s t a '

El p r e t e x t o p a r a encarcelar al

tL o p - n d u c - o s e s lo ib i tan tes , pe ro la I n s t r u c c i ó n s iguió t a n . nial a t end ida come s i empre , cuu.' uu p r o r c ^ o r a c o iiicp-u t~a1irionil s tai que d e s m n o c e p o r completo los modernos ade lan tos pcchigó g icos

UJs ;3=5tumb,*e q u e b b P n . s i -dente» MunÍLipi Ies t e l n s p u e h l o s i m p u l s a n á los vec i ro s cuo ta s a r b i t r a r i a s y c ap r i chosas , d i zq jc par*Ll ice .ebrac i5n dc las ü e s U s cívicas. Con el s i s t e m a dr. la fuer-*~ ^c reúnen buenas sumas ; se

' t c u a r t a part«',-on. una íics-„ i a r a m p ona y e1 r e s t o s e q u e -a en los bolsil lct ce las autori­

dades E s i n paLi iu I'-iru <;; ge ncn*.

; T á o t r a s veces h e m o s hablado dc que el i n s p e c t o r c e las F u e i -zas del Es tado ^ u e e s Ucnníiuo del G o b e r u a d u i , explo ta escanda-' u s a m e i t r i on sti ptics'-o Hs.y i n Rfiglameuto para el v e s t u a r i o y Equ ipo J.c las F u c - z a s dc SL¡ÍU Hdad y Tolicía dei Ewlado de Mo-: elus p n i ti» AS s n s d i 3 p c s i c n nes son burtada& por Jul io Al ir con. A los so ldados no les ' da el G o b i c n o s u vcs tua~ o v eqm J J , s ino que ellus lu pagan , -de jando de su sue ldo . . ?5es . diarios, iül In spec to r maneja lof fondos que s e l o rman con cate depósi to y se roba la m a y o r p a i t e dee l los P'-e vlcue el IÍCÍÍ r m o n t o que se dé a cada soldado una. l ib re ta en r

j . O e l o b í t J t h 1 M Í ^ . - ' > ' • .

; *»»«>«riP}joa.i.to i -_ - ; ; , „ „ r l

. • . . . P c r a n m u n . . " . I f ^ m góld *

e Per G njuiiilis "' "^i. jo

.D l rec tu i . y Propietario * I C J I » » FLORES.: MACÓN.

CONDICIONES: V n t G C N E R A L I O l l *

•ibjdM S« publica Ua - numero ntl to vi» aneó tanUvM on

anlbf.Eilidc» Unid» ¿el Nonsrdi t i caniarM EH-ti sa laTíipúbltí* U«xle«na.

[-01 pt^citti* ntitcHtJblfin KUIVOITIS HtM En IOS batarfoi Unltfet 4*1 Harta pet on aiciaj

Irt,p*cuídfftanttío—; r-J 1. t9erc. Por un año, pago icfeantafo 2. 03 ero

En; la fuptak* Mtxfeant por oa t«m»»tr» pa[a*¿cWnl»Jtf" "••" ' • - •" S 4. 80ptali Perui »Sc, M(Oad«LuiUdo S. GO i

-, El cUnfe ¿m *i*mpUn» ni* p*r» leí AcaAiai - En la ReDflbllea Mtsdcam,— i H.OOptan

En b i Eíiado Unlils del Nort*— 3. DO ote. Uu trivial éa dlrura yiu¿én hw^rw por Giro

Posul Irtenuclontl. tor Exprcw,'••[» BUIMM «W Biieoií en Tfcrta-M Pos a>et

Laaawpftdaaa «M« rccikaa RCCCNCVB-

CIDN »e aervlraa manáarpaiar rflracla*

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Frim ífvUt asunto diritfirBc al Director.

NATA—N« SE SERVIRÁ NINKIIN OEUI DO SI NO VICNC ALOMPSNADO VE £11 VALOR

La guerra del Vaqoi es un negocio.

LO <f UE HAY OUC PREDICAR

Durantt1. el pasado mes de iScp l í embre , los a sa l tos dados por los yaqu i s fueron en n ú m e r o uiayur q ic oti aa • ccs . Va ¿\ p e r s o n a s fueron ascs iuüdas ; pe ro no es el l iscs inato l o q u e con m á s a r d o r prac t can los yaquis, s ino t- i u bo, s o b r e todo, de víveres . Ln v da e r r a n t e á que los h.i condena­do U i r ] u v i r w de njcatro~<So bierno, no les p c r n i i l c ' a r b i t r a r -se r e c u r s o s por o t r e s medios qUL no scón loa del robo y l;i violen­cia. Mui^hus JIILU s, " a n s r d o s de la aaarosn vida del rebelde , han rmscado refugio en las negocia­c iones m i n e r a s ó agrícolas , peni ya h e m o s visto q u e á e sos indios t r a b a j a d o r e s lo^ p e r s i g u e tenaz­mente Rafael Izábal, matándolos . c cns ip i á rd? loQ al Ei¿rc i to , 6 en­t regándose los á Ruiuúu Corra l p a r a que esLe ncy r i ' r o los venda íi los csclavisras yuca tecos , P o r esa razóu, los yaquis no se aomc t e n ' y pref ieren ' Ion riesgos d é l a rebeldía á se r cobardeuiente. as^ 5¡nados por Izaba 1 6 vendidos por Ramón Cnrral

A d e m á s , es tá probado q u e el Gobie rno t i ene empeño en que )<i -ampaí ía del yaquí un t e r m i n e

As

*^fc

ty fbf j i i ^ e ^ c l . d e a q u e l ^ d c a í w l d ^ a o u i -i r ' y j aqner i a l e i i to índ i^nadn^e l

íaqtteLbuhoTjc-afli iel la.aírail i ls

E l f - í j u i U ^ b a i a b a a m c i u z a i i t r ^S^slSHS£r(j^Bl3dí¿l8g»lt|

lacitfeí» h'íátasliicerlí'Ban pobíe

v ^ ¿ ^ r o n b V - d i i i ' d Ó I e a l c > k r ó s '

Íré^r ' f |Mj , i r i i i i i l r r u y i l i pir«r ¡•ero'rau i l f n |aijH irrita a

d¿ su cabeza safio un nido de raimas Sr Meneseb se buscó resucitau-B e l a cabeza de G a r d a Moreno I do un a s u n t o judicial en que RP

óh) salió«ÍU a lma c rne l , con los fio envue l to di^bo ^eñor hace a-colores dei miedo

Mis enemigos están en ei tteber de maixrrfUi porque si rte, ?0S'CA.'crrti he, decía e1 de spu la .

Mi pluma ia val/, dijo Monta! \ o al s a s e r el d r a m a de Qui to .

E s t a s dos ' r a s e s sin t e tizan la t r aged n, y pa recen a r r a n c a d a s a l o s l a b . o s d e , d o s p e r s o n a j e s dc E u r í p i d e s - ¿ ^ p ¿"*¡

^i ]¿iplnníavrte "Mon^al ío^corio él h i p e r b ó l i c a m e n t e Io,Fdijo( m a t ó á Ga rc í a M o r e n o , t amoien Io^íu-m o i t a l u ó i c b n d e u a n d n l o á la m á s e s p a n t o s a de l a s in i t tbr ta l idadeg: la_d*l oprobio ^ \ ' ^ Í - < ^ ' ^ M i e n t r a s ^ a e hable, la lenirua

t i l v o ^ l M ^ e l f l é r á c i o n e a S f u l u r a s a p r e n d e r á n ' e n í a q u d l o s s a p o s t r o -'feí s u b í i m e í ^ ' o d í i r ^ l a f V o t n b r í * ngnra¿de¡G»fcí¿ UoreJM conde nIdÓ a t¿nt|lrÍBte aupcrvÍ veñua por er poder dc * uuirvrrnilii'

luv , a sun to en q u e recayó un fa l l o e j e c u i o n c de sobreseimiento. Qu^en r emov ió e s t e fenecí du ne­gocio, í u c A r t u r o Cast i l la Ri raa , P r c a den t e dt. Ia l e g i s l a t u r a c e Y u z a t á n , ó sea e1 j e fe de los eu nucos de Molina.

Nad ie podrá d u d a r de -JLC el e n c a r c e l a m i e n t o de l S r Nfeneses s c debeá . C J U W I pol í t icas al he­cho d e que el c i tado a b o g a d o pre­sidió la manifestación anti-moli-n i s t a Y lo t r i s t e e s que c<e n n * d a d a n o s u f i a tal vejación s in un an teceden te ^qneya^jra J a pena Tr á la cArcel poí^ gritar mueras r

¿ P o r f i r i o P í i z v á M o l i n a ^ e r a ' acep tab le , p e r o , c a t a r a n " una bar* toliaa^deapuÉM^lé^Iágzar v ivas ; al D í c u d o r , «ft 'cosa"' q u e no atiene n o m b r e

j a m a s , porque de esa campaña que s e ¡e i r á anotando s u depó&i- saca v e n t a j a s fabulosas Desde t o d c 2 5 c s d í a n o s y los g a s t o s luego s c sos t i ene en pie de grue-que de ¿1 se hagan para e q u i p a d o r r a un cue rpo dc EJCTCHU cuyas y ves t i r lo de e s t e modn e] c c l d i - plotao en &u j j u y u r p a r t e son su> do p o d r a s i e m p r e s i b e r s i tiene pues t a s , y eso r inde gananc ia s alg"ún fondo á su favor y á cuáuto pno rmes í nues t ro s verdug-03, y asciende, y podrá reclacnarlocudD* como e s necesar io que haya ya-

^ qu i s alze.dos pa ra just i f icar los

rían aun d a n d o m u e r t e é s u s ofi. cía es y s u s jefeís. Mj jum \m hemet hnhlado di. las r l - c iu i í t an cías CSDCLI.IILS en q j e s i c a c u e n t ía n u e s t r o E jé rc i to . E l soldado r s s e i r p i e j n a " i c l imi de h V-rocidad dc loa caciques q i iecpr i inen rd pueblu» ( a r i q u e s que para \CLgai encoré*, personales , para

tisTacíi lí.iStrrdos a p e t i t o , í s.1 rplen-en c pa-*a dc shac^ i s e de p e r s o n a s húiiiiidus que vigilan su a malos netos, envían a los c íu-

¡ diidanos á los cuar te les , E s o s isnldndos, indudablemente. , nn [ t ienen ningún amor á una c a r r e ­ra que nc siguen por propia i n s -oi Auiú i, j b u s c í n JC o p o r t u n -

¡ dad do escapar r.uu cnipleaniJo l i * olencía

Por las rabones que de jamos cxp ic&Ua i u e \ p h c i , que esid LILI rio en la capital del E s t a d o dc Sonorn, Hcrmosi l lo , Una fuer te ¡ruarnición, los y a q u i s se n l revan á llcfrar á los suburb ios para pro l e c ü e d e fuereis ce soo jando dc t i l i s -í os que los pescco . En S e p t e m b - c s c d x r o n Casos de a-baltc efectuados por int. irni'i-cantcs parí das te y s c ü s í u n a

f Deber ían Í ^ f ^ - W ^ -con vence r ae ¡aa^opo*

s i c i o o c s ' p o r f i n s t a a d e r q u e - e í r # | Sul taViadtirei^adhMion^dUcffiá1-¿ e n ; « l ? Á á \ ó r r a t a ^ d e b > > í w céTseJindependient*R^partff íqüfi B u a n i c n G e i o a tuv ie ran V q u i e r a a lguna razón de aer V>a l¿un í r i -

do lo desee i i s t o i « *-i fiare abo r¡¿'' uí CLiinple Julio" Ala rcón con ras i n inguna de las diec s ie te fraccioncb <el Ar t i cu lo 14 que t ra t a del F o n d o oara Yessluarir y m a r c i a de a d m i n i s t r a r l o Tu,io Alaiv.6i nn lo nd-r> m s t r a , sc le rnhT Recoce a los soldados loa 20,08 pero no les CE 'oda*? las p r e n d a s oe ropa qac n a ca el líe g lamento , ni d t a c ilídad o r c \ e nhla; .nn rennCira la i a d u m e n t a r í a dc su g e n t e en los plazos decre ta des y no la equipa con todo loque d ispone el R e j d a n e u t o , duuque«f le t o b r a lodo lo que no le da "A lonCa.hr*? P r i m e r o s de Caballería no les°da cabezada y r i endas áz c e r d a ni espue las y r ea l a , LUJIO lo m a n d a ja f i ac . V I de Ar l 2o; k los. G u a r d a s nn I r s f ' a ' camisade ealicol, calzoncillos de manta , f re­no con r i e n d a s dc ce rca , e s p u c -' a s , r ea ta , morral , s u d a d e r o , cua r ­t a y ¿ t i l e s parrt 1¿1 mpia r o m o lo manda ln *fmc I X d e P m s m o Ar t í cu lo . E n suma , cas i con nin-g a n a de lafi d isposic iones del Re -glatneatc> ,cumple„Julio7Ala r í"ó*n

pues al cnnipl iera con ellaa^nopo d r í a comete r J a s pilladas 'quenco-i ¿ele./:' .^í¿ ;C 3 * ^ T% ' .^ .La s i tuac ión de l^Es iado de Mo

rekis b á j a l a U r a n i a J d e l j b a n d i d o jAlarcónfVs^es 'pa^VoVa,^

4e?la S c D u b l i c a ^ E I leWá'de^Alaf* con' T i r a n í a > Robo! noL«a e a -

gi*5tos d c l a ciiuipaña, s e obliga ¿ l ú a indios pacíficos á q u e sc re­belen, pers iguiéndolos tenazmen­te cu los l uga re s en que t rabajan El indio, pa ra no perecer , tiime que ibuudu i ia r las h ibores , y to-ii i r u m i r r a i cua quiera 3 lan 7-rsí1 á los m o n t e s , prefiriendo vender su vida & precio dc sai jr-e a c a e como u a r n c o hajn !ds g a r r a s dc l i aba 1 y s u s cóm plícc«

He ahí ? s ra?oneB por l a s q u e la campaña del yaqui a m a s leí -mína, a p e s a r de e n c o n t r a r l e en Sonora un g r u e s o n i p«-po de E jé r ­c i to r>:i<í p a r t i d a s de yaqu i s son iisig^ríf c a n t e s La pa r t i da dc ya-qu s c o m p u e s t a del m<i>or n ú ­m e r o dc hombres que se h i visto, uu ha pasado de ríen indios T o d a s las demás p a r t i d a s constan de d iez , ; qu ince ó,. treinta h o u b rea , g e n e r a l m e n t e . " • •>

"" A los y a q u i s ^ n u ne lea pe r s i -gLe por dos r azones , . a l endo una i e ellas la q u e de j a m e s apunta -d a ; e r d e e e o d c l ' G o b t c r n o d e q u e no^ te rmínc j a m á s la ^Lauípafia pa ra 'poder exp lo t a r con uñ cue r ­po de Ejerc i to en pie de g u e r r a , - 1 " ' ' ' ' ' r\< * •

lio. ~ "' La población dc Souúia -esia

al arma da por la frecunncín de los asal tos dc las cilios cos í q le es tií [jrijjinando el paro de negocia­ciones de relativa importancia , y en genern l , loa negocios, decae r *-ioih emente íl _jn«-ecncicia ce h lumci i t a l i l e si tuación

I/os sonorenses dclicn pcrdci toda e c p c * n ¿ a dc nejo a i , i i t n -t raü cont inúe opi•¡niii'iiflonoa la Dictadura de/PorfirioDÍA2. Noeor lo^^aqui^. Inq íe Dcabiooa c ruina del Es tado , s ino la codicia insa­ciable de I0.1 q u e uos gobiernan

Ki,03 *aquis sc h. 11 lei 'nntat 'o eu l a s por mil j u s t o s motivos, >

IÍH al Gobierno t ra idor que obtie­ne h ie ro de la sangre d e r r a m a d a , ;í quien debemos condenar y cor-t ra quien debemos luchar

Yernos ron pena que muchos periódicos que su ocupan de la campaña del yaqui , t ienen para 2sa "i^a victima d t la r a p a r dad dc DJcatii^s prohor l>"*s , rnald „Loiíes I remet id i s c 112 -e su Han injri'slis, ) no saben ped r ot ra c:>b¿ que la. debtruce ón tut/ií de o s í i d i o a poi )A¡> faeiz-as1 d t l G c -bierno,' IIay! rquc s e r jus tos ; "si la dLL tLd hnittil cc lyaqt .1 s e d e b e 4 Ifl bruta l idad dc la' ( irania, la des­t rucción d c ' c s t a es lu que hay q u e ' p r e d i c a i , i n o s e r que p o -cícc(o ' 'dé"la"t i rania la moral ha ya claudicado, y sea de r igor po" ese motK'O, que las p e r a s se a-p l i q t t n á las v c l imas de los a-tropc.los v n o á 'os q i iea t ropel lan . Pci . i i la c i s t r u c c i ó ñ de 03 ya quis es ped r e í cas t igo de las víct imas y los l au re l e s p a u los verdugos.

L a ni 5i£n de \A prenda que pi de t i eYtprrninio de los y a q u i s e s ' i n f a m e El p - n c i p a l obje to del per iódico debería s e r la de­fensa del opr imido, del rajado del que no pnede ' m o v e r l e y tie nc'al Luello las g a r r a s ' que ,op r i ­m e n ; *E1 «xtermmiotJle*Ia t ira­nía es le que la prenjs&dcbe p r e -

líns'.pc.rs'cjHim^V <*-JP m

y la'otra. J (M)rque^slélldo^IoB'»ol dades^qne i n t e g r a n n u t o t i ó E¡ir-ciló.jforiiícríSijiie e s p i r a n ; «ola-, mtnté ."una"nf»rtqn¡dadfpar«4e»- -

capar d t l ciTart«l;t^i >e ptrsifrtiic-r» 4 loi .yaq ¡ ^ « l i W h o j r V ' á c J i

c l u a n o <<« t i ; ea el d e t t o d i w lo* ' c ióa de <«rt iernTqae3buk¡era«]f£ * • - " — — or i adna a r - d « b a n d a

ñ á l q u c n o t r i í ü a ? ? ! c a . / p t i t d e ccoocn(af€ ü a ' C i m t h S l ' d í l S f * R S a a U o Í B S Í

UBMB««?J?JiO.?BOX.fjHl^^rf & P M a ^ M ' Í « i w ^ ^ d i r i | l n e 7 2 i ^

í" ; ." í SSBSB*

«f*h-ST" .¿a '-REGENERACIÓN' r¿> ¡S"C£

U Junta Üe¡ P&rtido Liberal ÍDexicino,"

Estado? Unidos. & lo; mexic&no; residentes en

COMPATRIOTAS:

A los que estáis ausentes de la Patria nos dirijimos esta vez, con la esperanza de que nuestras pa­labras tendrán una acogida fra­ternal. Somos vuestros herma­nos; por nuestras arterias corre la misma sangre que á vosotros anima, y como vosotros, también, lejos de la Patria, suspiramos por aquel cielo espléndido á cuya luz se mecieron nuestros prime­ros años. Confiamos en que el a-mor á la Patria no ha "muerto en vosotros; confiamos en que cuan­do el dolor se prende á vuestros corazones,, quisierais con el pen­samiento tener al alcance de vues­tras manos el regazo de la Pa­tria querida para reclinarla fren­te abrumada por las grandes penas.

Y si amáis á la Patria, debéis sentir sus dolores. Está encade­nada; sobre sus espaldas que de­berían estar cargadas de laure­les, cae el látigo del Déspota. Sus s ienes que deberían estar som­breadas por las palmas triunfa­les de s u s hijos, soportan la°co-rona del martirio, y contristada y doliente, reclama de sus buenos hijos un esfuerzo para libertarse de las garras que despcdazan'stis carnes.

Sois mexicanos; lleváis en la memoria mil tradiciones heroicas de nuestra raza, tan abnegada, tan valerosa, tan altiva, y es ne­cesario no traicionar la tradición; es necesario que nuestros des­cendientes se sientan orgullosos de ser nuestros hijos y no escon­dan su origen como si fuera una afrenta. Para conseguir eso, es preciso que nos unamos para com­batir la tiranía que impera en nuestra Patria.

En el MANIFIESTO que hemos expedido, damos los medios que consideramos oportunos para lo­grar la unión de todos los que deseen la libertad de la Patria, y en REGENERACIÓN comienzan á aparecer de un modo perma­nente las Resoluciones que esta Junta ha tomado para provocar la unión de los mexicanos que amen la libertad. Leed con atención e-sas Resoluciones, y si, como nos­otros, creéis que es conveniente la unión para que se fortalezca el partido de la libertad, guníos sin perdida de tiempo agrupándoos en clubs que estén en comunica­ción directa con la Junta para la observancia d é l a s Resolucio­nes.

De ese modo se logrará for­mar una confederación compacta de clubs l iberales que tengan por

"El Colmillo Publico." %v >**

mira la libertad de la'Patria. En los lugares donde sea imposible la formación de algún club, por­que no haya el número compe­tente de compatriotas, si hay si­quiera dos buenos mexicanos, deben unirse, pensar en,la Patria ausente, comunicarse sus . impre-siones políticas y sociales, y, es­tar en comunicación con esta Junta para los efectos de las Re­soluciones. Si en algún lugar .no hay más que un compatriota, y está de acuerdo con las Resolu­ciones, debe comu'nicarse con la Junta.

COMPATRIOTAS: Os ofrecemos los medios para

llegar á ser fuertes y libres. Os ofrecemos los medios para que, cuando cada uno de vosotros re­grese á la Patria, vaya á estre­char las manos de hermanos feli­ces por la libertad. Muchos de vosotros habéis abandonado la tierra natal huyendo de persecu­ciones injustas; muchos de voso­tros habéis franqueado la fronte­ra para escapar de la leva, de la ronda, del maltrato brutal de los señores feudales; muchos de vosotros, hombres dignos y labo­riosos, os conquistasteis por vues­tra altivez plausible la inquina de los caciques y tuvisteis que refu­giaros en esta nación para no ser víctimas de un atentado; ¡Ab; lo sabemos muy bien: la tiranía for­ma la miseria, el caciquismo, la desventura del pueblo mexicano, hasta obligarlo á emigrar en bus­ca del pau que le niega, y en bus­ca, también, de menos injusticia!

A todos vosotros nos dirigimos: á los que han buscado en esta na­ción un refugio para escapar á la miseria y á la muerte propagadas por el mal Gobierno que oprime á nuestra Patria, y á los que en busca solamente de fortuna han venido á este país, pues todos sois mexicanos, todos debéis amar á la Patria ausente y todos debéis abrigar en vuestros pechos anhe­los de redención para el pueblo que al otro lado del Bravo gime bajo el peso de todas las tiranías.

Esperamos que nuestra voz se­rá oída por vosotros y que con nosotros trabajaréis por la liber­tad de la Patria oprimida;

REFORMA, LIBERTAD Y; JUSTICIA.

" S t r L o u i s ; M0.7-Octubre^, del 1905.

Presidonte, JUcardo Flores Magón,— Vicepresidente, Juan Sarabla.—Secre­tario. Antoni» / . TliíaTTeíii,—Tesore­ro, Enrique Flores Magón.— ler. Vo­cal, Prof. Librado lucera,—2"? Vocal, Manuel Sarabia.—3er. Vocal, liosalio Bustamante.

Es el mejor semanario independien^ te de caricaturas, que trata con abso-, luta imparcialidad los asuntos poli ti > eos de México.'' " - '

Recomendamos á los liberales esta importante publicación, que por su vi­rilidad y acierto se ha colocado entré las primeras de la' prensa indepen­diente. £1 precio de subscripción, de­masiado bajo para el mérito del perió; dico, es como sigue:

Por un semestre $ 3.29. J Toda correspondencia deberá diri-'

gtrse al Administrador, Sr. Federico" Pérez Fernández. San IldefonsoN"? í: México, D. F

Los favoritos de Pankhurst

*t%Bm*^xei&*&#0gp>

El Pueblo y los Extranjeros.

i»

Venganzas de un Cacique. El deshonrado Alcalde 1' de Te-

huantepec, Francisco .losé Cano, con­siderando que le es imposible refutar los justísimos cargos que hornos for­mulado en su contra, ha recurrido ft indignos procedimientos para desfo­gar su cólera y sus anhelos do ven­ganza.

Siéndole imposible causarnos dallo, se conforma con perseguir & las per­sonas que soapeha que están en corres­pondencia con nosotros. * r

So lo antojó creer que las noticias que hemos publicado acerca ,do los desmanes que comete, fueron'.envla-das por el Sr. Eariquo N. Jiménez r acusó & este Señor do Injurias ante el Juez de 1* Instancia, Lie. Pedro Ca-macho. •• • ' 1 •• -í

Para fundar su torpe querella, so­bornó á tres desdichados y les acon­sejó lo qne hablan do declarar ,en el Juzgado, 4 Qn de probar la responsa­bilidad del acusado. ' El Juez Camacho, desde luego, com­

prendió que carecía de fundamento la acusación y en vez de desecharla por Improcedente, se inhibió de conocer de ella y la pasó al Alcalde 2-í'Ma-nuel Guzmán. Camacho no cumplió con su deber: era de su obligación de­clarar que no procedía la demanda for­mulada por Cano y evitar así, que al Injustamente perseguido Sr. Jiménez, se le hiciera, más tarde, objeto de in­justicias y arbitrariedades.

En efecto, si hubiera Jueces honra­dos en México, no prosperarla lator

•- pe acusación de Cano. _, , ^ Aun en el caso de que fuera nuestro

- informante el Sr. Jiménez, que no lo es, y de que se hubiera cometido el delito de prensa denunciado} l»b5»8

, debería dar cabida á la acusación de -, Cano en los Juzgados de Tehuante-

*»,*•" pee. El delito se habría cometido en ¿í^eata ciudad, donde "Se publlci?eí*pV ""' ?riódico, 'y aquí eratdonde,hebría *de

i promoverse el juicio respectivo. '¡En varios amparos ventilados-en la

Suprema Corte de Justicia^deiMexlco, motivo de asuntos^aemejantesial nosíocupa; ese tribunal hardecla-) qn* I M acusaciones contra1 del I

tos de prensa, deben presentarse on la población donde so edite el periódico denunciado.

Eso lo sabe Camacho y no por ig­norancia, sí maliciosamente, se negó á hacer completa justicia en el pre­sente caso.

El odioso Francisco José Cano, no logrará con sus ruines procedimientos acallar la censura honrada que mere­cen su venalidad y su despotismo: continuaremos exhibiéndolo; con ma­yor vehemencia denunciaremos sus abusos para que la opinión justiciera lo repudie y escarnezca su nombre.

Con bastante pena hemos leído las injurias que en su periódico "El Grito del Pueblo," dirige el Sr. Jesús Z. Moreno al Sr. Lau­ro Aguirre, Director de "La Re­forma Social," ambos periodistas de El Paso, T e x . •

El Sr. Moreno se creyó ofendi­do en un párrafo que apareció en el número 9-4 de "La Reforma Social'" y dirigió epítetos san­grientos al Sr. Aguirre, quien o-brando con extremada prudencia se limitó á reproducir el suelto en que s e le insultaba, y á pedir que se le dijera* dónde" se había ocupado desfavorablemente del Director de "El Grito del Pue­blo.-'-'

La contestación no se hizo e s ­perar: el Sr. Moreno publicó lue­go tremendos artículos contra el Sr. Aguirre, que había adoptado una actitud conciliadora.'

El Sr. Aguirre e s un periodis­ta digno que desde hace muchos años ha consagrado s u s esfuer­zos á- la causa de ja libertad: no merece los ataques de*que~ha sido objeto. -,;••<' i

í;íc,'* ^XK <-"»'> ' - Deploramos quVelrSr.'^Moreno

s e hayadéjado dómínaríesta; vez por la veHemencja^de^sns'* pasio¿ nes.y, hacemos Totdsi,pprq'u¿ He-" gucja.tener.una reconciliación de-; corosa concón compañero?det lu-, cha.

Pankhurst es incapaz de dictar una disposición acertada: todos sus actos adolecen de inaudita torpeza.

Últimamente comisionó al abo-gadete Daniel Aguilar para que viajara por Europa y Estados U-nidos, estudiando los métodos educativos y los s i s temas'de or ­ganización escolar."

Su designación no pudo s:r más desacertada. Daniel Aguilaft) no es ni siquiera un iniciado en cuestiones pedagógicas y por lo mismo nada comprenderá de ló que observe en los centros dé educación que va á recorrer. Su viaje será simplemente de recreo é infructuosos los gastos queero-gurelrEsta\loíTTMr:¡>-í*,"'^''->-',i''<'^":"i

Aguilar á más de ser inepto para la comisión q u e s é l e hacon^ ferido, tiene en su vida pública manchas indelebles que lo inhai bilitan para desempeñar puestos oficiales. Durante ocho años tuvo á su cargo el Juzgado de Distrito': su estancia allí marca una "época de concusiones y sobornos escan­dalosos. Vendió á la justicia co­mo á vil mercadería; fué un ex¿ plotador sagaz y desvergonzado que en ventas de fallos y. combr-naciones infames, pudo ganarse una fortuna de$25000.00 ó . . . $30 000.00.

Hoy, en vez de marchar al pre­sidio entre las aclamaciones de la honradez, va á Europa y Esta­dos Unidos á derrochar el dinero del pueblo.

Goza de gran influencia cerca de Pankhurst y á eso. se debe que no sólo pueda obtener canon-j gías para él, sino también par" los miembros de su familia t.T odiados en"Zácatecás"porqút unos pulpos insaciables qne á , sombra de Morfín Chavez, Aré-chiga y Pankhurst, han explotado los puestos públicos sin asomo de pudor.

Daniel Aguilar tiene colocado á su padre en la Administración General del Timbre, á#su herma­no Alberto en la Tesorería , á un tío en la Jefatura de Pinos y á un sobrino como comisionado ó ins­pector de minas;toda la * ventu­rosa familia de zaragates gozan­do del favoritismo de un gobier­no inmoral. '

Pankhurst ha hecho eméritos para concitarse la animadversión general: sus escandalosos sa­queos al Erario y su afán de in­tegrar el personal de la Admi­nistración con personas indignas, han creado á su alrededor una densa atmósfera de desprestigio.

El pueblo lo odia cordialmcnte corno lo demostróídurahte las úl­timas fiestas de la"Patria,.con las estrú'endosás'manife'sta'ciónes de descontento y con los ¡mueras! en­tusiastas que lanzó contra su mal­decido opresor.

La oposición que ya se; organi­zaren Zacatecas, digna y valerosa, nos hace concebir esperanzas res­pecto á un próximo triunfo de la democracia.

Probable es que los zacateca-; nos no permitan en las venideras elecciones, que la Dictadura los ultraje y les arrebate s u s dere­chos, como se los arrebató pérfi -damente á los nobles y viriles hi­jos de Coahuila.

La tiranía, como una barca vie­ja, comienza á hacer agua por to­das partes, y resultan vanos todos los esfuerzos por mantenerla á flo­te para siempre. El mal está en ella misma y tendrá que hundirse llevándose al abismo toda su tripu­lación maldita. \ ' Las cárceles han perdido su ho­rrendo prestigio y ya no infunden pavor: encolerizan. Ya la ley fu­ga no "escupe su hielo sobre multi­tudes medrosas: indigna. Los) ciu­dadanos comienzan á levantar las frentes por tanto tiempo humilla­das, y todo anuncia que el fin de la tiranía está próximo, y que sobre las cabezas de los protervos se cier­ne, pronta á caer,- la venganza po­pular.

Los últimos acontecimientos re­velan que la tiranía ha perdido to­da su influencia en el ánimo del pueblo y que éste está cansado de ella. La digna actitud de Coahui­la frente á la tiranía,;es reveladora de supremos esfuerzos futuros.

Hay, además, .otras -circunstan-. ciás reveladoras de que el actual estado de cosas,vmarcha directa' menté á su fin. El pueblo lanzó mueras á Porfirio Díaz las noches del 15 y 16 de Septiembre en di­versas partes de la; República. Es que los ajados laureles del Tirano han perdido su brillo á fuerza de enlodarse 'y%.'él^úetílp^púdo des­lumhrarse a lgúñdíáxon la vistosa fáfiula^én que yió' moverse al bis-trión, desvanecido el engaño, á la" admiración ha sucedido la cólera y el deseo viril de la represalia.

En la ciudad de México, el pue­blo recorrió las calles lanzando m^uerasá Porfirio Díaz y al níquel; en Zacatecas, Pankhurst y Porfi­rio Díaz fueron estrepitosamente maldecidos; en'Parral,ja multitud desahogó sus justas cóleras lanzan-doVmueras á los.tiranos y á los yan-kéés que explotan al pueblo. En ésta última ciudad, las demostra­ciones del pueblo contra los extran­jeros tienen una gran significación. El pueblo en masa recorrió las ca­lles tratando de incendiar los esta­blecimientos de los norteamerica­nos y con piedras y bastones des­truyeron los cristales de las resi­dencias'de los anglosajones. Las banderas americanas fueron arro-

ias al suelo y gritos de "mueran ~>rkees" atronaban el espacio, .¿anos periódicos han~ cjueridó

.aducir los escándalos de Parral, cómo efecto del alcohol ó simple­mente del odio de raza, pero, en verdad, los acontecimientos de Pa­rral tienen más honda significación.

El pueblo mexicano no odia al extranjero. Pocos pueblos habrá en la tierra que sean tan hospitalarios como el nuestro, tan comedido con los extraños, tan generoso para re­cibir con los brazos abiertos á to­dos los que llaman á su puerta y compartir con ellos su pau. N o es, pues, el odio al extranjero, desco­nocido entre nosotros, lo que hizo que el pueblo arrancara con cólera en la ciudad de Parral las bande­ras de los norteamericanos, y hay, por lo mismo, que buscar otras causas.

La' protección desmedida que im­parte Porfirio Díaz á los norteame­ricanos, protección. que siempre se hace en perjuicio de los intereses de los mexicanos y en una forma que se confunde con la abyecta su­misión'délpérro' hacia?*'su amo, es vista por el pueblo con notable des­agrado. Los mexicanos estimamos á los extranjeros y les damos la mano para levantarlos cuando mí­seros solicitan nuestra ayuda, p e -

Un libro excelente, El libro denominado "Memorias de

D. Sebastián Lerdo de Tejada," es el monumento más grandioso que la Ll-leratura'Nacional ha levantado para Inmortalizar los crímenes del tirano Porfirio Díaz y para mantener siem­pre despierto, el odio que la Repúbli­ca debe profesar ¿ ese liberticida exe-' crable que en tropel salvaje <pasó so bre las Instituciones democráticas de nuestro país, como las hordas de Ala* rico, devastando toda grandeza y es-' carneciendo toda virtud.It " , ,it:-':

Quién1 tenga interés en conocer:! fondo la personalidad ;moral del ac­tual Dictador de México,'-puede remi­tir, en g 1ro-postal internacional' un peso oro ó su 'equivalente en íplata", al Sr. FrauoiscOjde P,' González, $ San Diego, Texas,' /.obtendrá por esa can­tidad el primer-tomo.deti'L'as Memb-i

rlss.de D.^Seba8tlán,?'¿y'la7suscrlp-clon*;;del ^semanario ','1-»^Libertad54 desdeja fecha en que seshsga el.pedir do',-¿íslempr«!que no sea'despué»'del'30 de Obíubi-^pííóximn*ühi,taíel1íimBÍ6!

dt Diciembre d«19C«

ro nos desagrada sobremanera que el Dictador por cobardía, ^ por con­veniencia personal, ó por simple traición, se humille ante los norte­americanos y les conceda todo lo que'piden'con perjuicio de la na­ción. Y no es eso todo. Como una consecuencia del servilismo del Go­bierno para los yankees, estos pi ­san nuestra tierra como país de conquista y se sueñan ante la pu­silanimidad de un Gobierno cobar­de, como los señores feudales del rebaño mexicano al que tienen el derecho de explotar, de maltratar, de menospreciar y de escupir.

Diariamente se registran en nues­tra Patria escenas desagradables provocadas por la petulancia de los yankees que hay en ella. El traba­jador mexicano es villanamente explotado por esos negreros, y, con frecuencia, maltratados. Es inútil qué.él mexicano ofendido recurra á las autoridades en demanda de cas­tigo para los conquistadores: las autoridades siguen la política del Dictador, de incondicional servilis­mo para el yankee, y lo ordinario es que, después de ser humillado el mexicano por el extranjero enso­berbecido, sea fuerte é injustamen­te castigado por las autoridades abyectas.

Y ao solamente el trabajador que d a s u trabajo al explotador yankee sufre lá'insolencia de esos señores de horca y cuchillo. El público mismo, el que con su dinero hace progresar las industrias de los ex­tranjeros, y el qué por la sencilla razón de no ser un asalariado de los yankees, debería merecer todo género de atenciones por parte de ellos, sufre en su dignidad por la altanería insoportable de esa gente perniciosa al país. En los ferroca­rriles, en las oficinas, en todas par­tes donde el yankee explota, el'pú-blico es tratado con insolente des­precio por esos burdos traficantes que pudieran ser decentes si el Go­bierno no fuera su lacayo. Los a-busos que las empresas yankees co­meten en perjuicio del; público son notorios para que merezcan ser re­latados, Pocos mexicanos habrán dejado de resentidos en grande ó en pequeña escala. Y esos abusos no tienen remedio. Las quejas del público siempre quedan sepultadas bajo una gruesa capa de polvo en los estantes de^Jas ^ficInas_públU c a s . ••' • ' , " ? ; : • • " T ; / ' ' ; . '~"~~' '

Una situación así, en que el pue­blo se ve constantemente humilla­do por los yankees que explotan nuestras riquezas, dio por resulta­do las demostraciones hostiles de la multitud las noches del 15 y 16 de Septiembre en Hidalgo del Pa­rral. Culpar al pueblo de esas de­mostraciones, es imbécil. Los ren­cores que con sus actos han ido a-cumulando los norteamericanos en el corazón del pueblo, encontraron las noches referidas una oportuni­dad para demostrarlos, y así fué. No siempre puede el pueblo hacer el papel de oveja; suele convertirse en león, y eso es lo que olvidan los que lo ultrajan.

La tiranía que bajo mil formas sufre el pueblo mexicano, ha pro­ducido los últimos acontecimientos. El edificio del despotismo comien­za á crujir por todas partes, y e s inútil que el Dictador oponga una barrera de feroces agentes fiscales á la entrada de nuestro periódico á la nación. La verdad se ha abierto paso, y á su soplo, las bayonetas qne sostienen el deteriorado edifi­cio serán barridas como plumas al soplo de la indignación popular.

tantos,hechos quepruebanque loi'go bernantesde la "actualidad; són^enemf del-bienapúblicó.|5García,M.fpor"a\1 mentar,, su súeldo^élde sus favoritos!,, y procurarse"dinero^para^defrpeharM, en sus crápulas,-asquerosas, expidió'íg'ríS la estúpida Ley de'Bacienda que pre-''V»|* cipilójá Campeche en la ruina.'¿Aseara Cano,7 eL Digno Sucesor de Aquel; brK< bón, se"encontró con la Ley y -con' la . ruina, y no'euprimió la primera ñire-, medió.la«segunda; juzgó bueno lo he-, cho por su antecesor,, y mantiene < la Insoportable situación: El y sus eu­nucos, qne son los mismos'de García M., siguen saqueando el Erarlo Pu­blico, mientras el pueblo agoniza en la miseria.

Hemos sostenido que la peor do las consecuencias de 1 a Dictadura de Por­firio,Díaz, ha sido y es la miseria pú-. blica, y al ocuparnos de los distintos Estados de la República, hemos ido comprobando nuestro aserto. A nues­tras múltiples y. abrumadoras pruo-bas, agregamos lo: que queda dicho de Campeche, y esperamos que el pue­blo mexicano, á medida que so con­vence de su Injusto infortunio, se Irá decidiendo á sacudirse virilmente la tiranía que ló roba y lo asesina.

LÍL JritíL. Josefa Gumrfc. da clases de Taquigrafía por correo bajo las condiciones siguientes: 1 clase á la semana...$ 8.00 al mes. 2 ,, ,, , , . . . . 10.00 ,,

Pago'ádelantado y timbres de co-irespondencia por cuenta del intere­sado.—-'Calle de la Cadena N9 3, iut. 6.

México, D. F.

Notas de Coahuila.

Una Ley Criminal. eie

-Las malas obras del nunca bien maldecido Luis García M. han durado roas que él- El'pueblo de Campeche sufre todavía las consecuencias de la pésima Administración de- aquel fu­nesto sátrapa, que vivió en el vicio y la maldad. 'García M. puso en vigor una Ley

de Hacienda que está causando la rui­na dé Campeche'. Esa ley aumentó de un golpe las contribuciones en 190.000. al a no, y no pora ue, ese aumento de ingresos se necesitara para cubrir verdadederas necesidades,! sino sólo para poder los primeros; función arios subirse el mal-ganado sueldo, y para ampliar hasta lo Infinito la flexible y misteriosa Partida de Gastos Extra­ordinarios; en resumen,.para llenarse los" bolsillos los explotadores del/ Es-Udoíy'^ " ? ^ • - Í ' . / Í . ^ -," ' 5 7 ^ ; |r Desde la expedlclón/de e»á Ley criminal, él comercio ba decaído no­tablemente', en particul áf al ''comercio de*'segundo>y ..tercerC. orden1, pues laa casas *"!uertes, blen ~ por£en amistad con el.Gobiernb que las?ejrimei;de ;la contribución, bien.porXcapiUl con-¡Idérable, pueden resisUr^á^U brutal extorsión. ;El.comercIo|s«|parjadica »a^erdad,pero1mii¡perialcioijinfr*

Í" andaos mercancía«;io¿qn«^»LFiioo

*^r«%arga de'contribuclóa^ y •ltcoD-:

snmldór esferi ^iñnenfel qii« lo?'p«i ga todo: f' •* '' v -'* ""* -" "r"' "'/

El comerciante en pequeño no puede acudir al recurso de encarecer sus ar­tículos, porque siendo á la vez consu­midor de las grandes casas, ya com­pra los efectos con el recargo . á que dá origen la excesiva contribución, y tendría que venderlos él á un. precio exborbitánte que nadie le pagaría. Se ve, pues, obligado á cerrar su mo­desto establecimiento.

Al estúpido Gobernador actual de Campeche, Aznar Cano, le ha llama­do la atención qne desaparezcan tan­tos comercios chicos, y ha mandado vigilar todos los establecimientos que se han cerrado, pues teme que en ellos •• sigan haciendo ventas clandestina­mente. Si realmente se entregaran al clandeatlnaje los comerciantes arrui­nados por la Ley de Hacienda, sería absurdo hacerles el menor reproche. Ellos tenían su establecimiento públi­camente y trabajaban con'toda honra-dea; pero.la lev imbécil de que habla­mos, al quererle* arrebatar.todas sus ganancias, les cerró el camino de los negocios riégales y los,ob)lg ,óíi em­plear medios que se'conslderán'Ilíci­tos para buscarse la rlda^No'habfan de morirse' de hambre esos ciudadanos extorsionados; no era fácil que de un mbménto^i otro .cambiaran t de. profe-alén ó.denegocio;* de alguna'manera habían'de sostenerse; a* les pusieron trab'aaodioeas para ejercer el eomer^ elo l*gal,\y;;*ra natural.Tr inevitable, que recurrieran al oomercio/clañdee-Uñó^Coí;«ito7elF;pdblIoo^eri;;Umí bien •riívatdadero; perjudlóado¡f puei' loe comerelantee'clandestinos, a«!ha-rAn pagar.earoa^lot peligroa 4,que ae üpoi"

Incesantemente estamos recibien­do noticias de los graves abusos que en las últimas elecciones verifi­cadas en Coahuila, cometieron los esbirros de la Dictadurn para lograr el triunfo de la candidatura oficial.

En el número anterior, publica­mos una extensa relación de las ve­jaciones que sufrió el partido inde­pendiente y aun la materia no se agota: nuevas informaciones nos llegan en cada correo, denunciando los diferentes medios de presión que ejerció la Tiranía para ahogar la libertad del sufragio.

El civismo fué batido por la barbarie; pero el fracaso sufrido no debe ser motivo de desaliento para los defensores de la democracia. No significa que la Dictadura es ar­mipotente ni'que el pueblo carece de fuerzas para debelar á sus opre­sores. Significa sí, que los medios empleados hasta;hoy son ineficaces para luchar con un enemigo que carece de escrúpulos y de vergüen­za., • i,',i •.,, l' ... El .fanático respeto. con .que, nos ---sometemos'á los Poderes que vio­lan la Ley, es la causa principal de que aun estemos sujetos á un régi­men de gobierno que no tolerarían ni las tribus de beduinos que vagan en los desiertos de Arabia.

La Dictadura no es un Gobierno legal, puesto que desconoce la Cons­titución y se impone por medio de la violencia y el crimen. Sin em­bargo, le profesamos sumisión in­condicional y le ayudamos con nues­tra debilidad á deshonrar á la Pa­tria.

Nuestra tolerancia, uuestra falta de virilidad, elaboró el desastre de Coahuila.

Si los coahuilenses no hubieran manifestado sus propósitos de su­frir toda clase de humillaciones an­tes que alterar el orden, quizá la Dictadura los hubiera respetado.

La Dictadura es pérfida y cobar­de: se mantuvo respetuosa ante el pueblo de Coahuila, mientras éste sostuvo una actitud amenazadora; pero lo atropello villanamente des­pués deque hizo pública su resolu­ción de no rebelarse, aunque se le hiciera víctima de los ultrajes más sangrientos.

Tras esa declaración, se registra­ron mil atropellos de los que algu­nos conocen ya nuestros lectores y otros relatamos en seguida.

- - w Lo'que dejamos apuntado as ano da

, SALTILLO.-r-La legión de gen­darmes secretos que mandó á esta el chacal de Nuevo León para in­fundir pavor en el ánimo del pue­blo, los días de la Patria, 15 y 16 de Septiembre y el; de las elecciones, paseaban por las calles y paseos públicos, divulgando la consigna que tenían de asesinar á los oposi­cionistas y sembrando el pánico, con sus aparatosos preparativos bélicos, entre las mujeres y los timoratos.

—En una.de las casillas electora­les se presentó antes de las 9 de la mañana, el distinguido caballero

rD. Benito Abell y correctamente o-freció su concurso á los allí reuni­dos/ todos empleados del,Gobierno* para instalar la asamblea electoral. Se le contestó cínicamente que^des-de el día anterior habían sido'de-. m signados los ind¡viduos~qúe;!de6íaníü'*í;S W< integrarla. »E1 SV. .Abell . p r o t e s t ó ^ f ^ t ^

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contrajesa^violación á la*Ley7y^, ese motivo.rvarios esbirros se « r r o 1 ^ ]'arbn\sobre él,jloregistrafon.-íhasta "**!

convencerseíque no portába^ningü^ na arma y.en seguida lo|golpearon miserablementei*y J lo ^condujeron"

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\ í l ' sas délos Turícionariós;6 empleados ;^?pfiCÍáÍéS.;.f--. '}}:\'/^-p>:.- -:*:-¿¿¿, .ígV •b:||;:i-i|El ;Sn .Si lvino!; lM García| fué - ^acuísado de .que remitía noticias á ¿;V?los periódicos independientes y por 3 Seso s e l e cpndujp;á la Penitenciaría V >?y se le tuvo seis d ías ;en-;calabpzo¿ 'Ven el departamento def«tapados» y

r Idiez en las galeras de presos sujetos á procesó por delitos criminales; -

- —-El Sr. Pablo López de Lafa es perseguido furiosamente porque se le cree corresponsal de R E G E N E ­RACIÓN. El Sr. López, sóloVnos ha escrito con motivo de asuntos comerciales relativos á su Agencia de Publicaciones y por lo mismo, son infundadas las sospechas que de él se tienen é infames los proce­dimientos que se siguen en su con­tra.

M O N C L O V A — A los Comisa­rios nombrados conforme á la Ley, se les obligó á renunciar antes de las elecciones y fueron sustituidos por serviles que merecen la confian­za de las autoridades, Í

Arbitrariamente se redujo á la mitad el número de casillas y hasta el día de la elección se supo donde quedaban instaladas.

Fueron suprimidos en los padro­nes muchos de los ciudadanos inde­pendientes, en pleno ejercicio de sus derechos, y no se repartió ni li­na tercera parte de las cédulas elec­torales que se necesitaban.

Patrullas de la Policía y Acorda­da, recorrían las calles de la pobla­ción haciendo alarde de fuerza y de cinismo.

En las puertas de las casillas, había apostados gendarmes que te­nían cousigna de obedecer en todo á los Presidentes de las Mesa?.

Antes de las 9 de la mañana, se le envió un telegrama al Dictador, comunicándole la instalación de u-na Mesa en la casa del eunuco Luis González y Rodríguez.

Mateo de León y Ochoa no pudo completar el número de individuos que habían de formar la Mesa de que fué Presidente y Comisario á la vez,

En otra casilla figuró de Presi­dente uu criminal que está procesa­do y que goza de libertad bajo fian­za.

Las personas más caracterizadas! que en los ranchos vecinos trabaja­ban en favor del Lie. Fuentes, fue­ron llamadas por la autoridad y de­tenidas mientras se verificaban las elecciones.

A pesar de las infracciones anota­das, todos los ciudadanos de Mon-clova, cou excepción de los emplea-

•- dos-dcV Gobierno, votaron en favor de la candidatura oposicionista.

Conforme á derecho, el cardenis-mo sufrió aplastante derrota; aun­que con gran escándalo afírmelo contrario Cerna, el infeliz Cenia á quien los puños justicieros d e l S r . Leopoldo ¿ambrano le enrojecieron el rostro, su rostro de meretriz que jamás ,se ha encendido al calor de la vergüenza.

T O R R E Ó N . — L o s cardeuistas se posesionaron de las asambleas e-lectorales, antes de la hora regla­mentaria y sin que precediera elec­ción de los ciudadanos. Se come­tieron tremendos abusos: casillas hubo en que públicamente se rom­pieron las cédulas independientes. | En cambio, los gendarmes y sus es­posas estaban facultados para de­positar su voto en favor del des­prestigiado Gobernador actual.

Eu la casilla que estuvo á cargo del policía secreto. Francisco Ro­dríguez León, se presentaron en hora oportuna varios oposicionistas

á ^ m a £ í » s e « ó n g fuerónjrechazad osjj injuriádós'porí del cardénismo, improperios tán?sóe^s^flue|todos los allí reunidos creyeron encona trarse en presencia de la más disoj-í Juta fiupila deXuisi Navarro:; (^ VVTodas^lás casillas^,estaban^ escol­tadas p^ígendarniés que ejercían de yerdügostparáíobligar á los ti­moratos á firmaren^favor de ¡Cár­denas: Los lácayosque integraban 1 as; Asa m bleás electoral es,- calza -ban boletas .con nombres supues­tos." :':::^'::í 'ífVVV/^í. '• \ \ r" ',.

C. P p R F I R i p Í í b l A Z . - ? P o c o s días antas de las felecciohesí f fué reducido á prisión el V Sr. José Ser­na, Secretario del Club anti-reelec-clonista ''General Balcón," por el delito de haber soportado con re­signación los ultrajes de que "lo hizo víctima el rufián Valeriano Valdés, Reseñador Municipal.

A pesar de que el Sr. Serna fué ofendido sin motivo alguno, se le redujo á prisión>y permaneció en la cárcel una noche, sujeto á humi­llaciones sangrientas.

R O S A L E S . - ^ Como dijimos en el número anterior, fueron condu­cidos á C. Porfirio Díaz, por orden del bandido Fructuoso García, los independientes Sres. - Antonio Vi-llarreal, Ireueo Bermea, Mauricio Uruñuela y Marcial Vela.

Salieron de Rosales en uu carro; pero.poco después se l e s obligó á caminar á pie. Durante la travesía se les trató cruelmente.

GIGEDO.^—En las inmediacio­nes de una casilla, esperaba que fue­ra abierta una gran multitud que se proponía votar en favor del Lie. Frumencio Fuentes. El jefe de la Acordada se acercó al grupo, apre­hendió á los Sres. Antonio Santos, Aniceto Balderas, Manuel Veliz y Basilio Hernández y ordenó á los demás ciudadanos que se retiraran.

SAN FELIPE.—Durante varios días antes de que se celebraran las elecciones, se podía ver en la casa municipal, trabajar afanosamente á los empleados de Gobierno, en cal­zar con nombres supuestos la candi­datura oficial.

El día de las elecciones, los esbi­rros del Gobierno se apostaron en las boca-calles que daban acceso á los lugares en que se instalaron las casillas é impidieron el tránsito á los ciudadanos que deseaban votar en favor del Lie. Fuentes.

F U E N T E S . — L o s más caracte­rizados miembros de la oposición fueron conducidos á C. Porfirio Díaz. El cacique Fructuoso Gar­cía los llenó de improperios, llevan­do su avilantez hasta llamarlos bandidos.

Brutalmente se impidió á los ciudadanos ejercer sus derechos.

La Dictadura ha demostrado u-na vez más que está dispuesta á no ceder en su política de opresión. N o arriará la bandera del despo­tismo, mientras el pueblo no *se la dispute y se la arrebate virilmente.

Es uecesario laborar porque la conciencia nacional se compenetre de esta verdad tremenda.

El problema.de nuestra emanci­pación cada día se hace más difícil de solucionar y se presenta con ca­racteres más trágicos; pero no de­bemos declinar nuestros derechos ante temores indignos ni ante la dificultad de destruir resistencias que parecen invencibles.

Organicémonos formidablemen­te los que sintamos amor por la Pa­tria y preparémonos para combatir con éxito á los enemigos de nues­tras libertades.

Digno Empleado de Díaz. U vul£&rid&d de nuestro; Tir&oos.

Para conocer á nuestros gober­nantes hay que 'penetrar á sus cu­biles aunque tengamos que tapar­nos las narices. N o podremos dar­nos cuenta de la corrupción oficial si no arrancamos con mano enérgi­ca ese velo'que la mogigatería ha echado piadosamente sobre las lla­gas de nuestros mandatarios, para que el pueblo no deje de admirar­los.-

Ya hemos hablado de la preten­dida virlttd de Miguel Cárdenas. Lo hemos visto abusando de su

el nuestro, se hicieron para esos hombres las penitenciarías y los manicomios.

A Porfirio Díaz, naturalmente, debemos la vergüenza de estar oprimidos por tiranos disolutos que imprimen en toda6 las funciones de la administración las huellas de sus vicios. Los mexicanos estamos acostumbrados á ver que los fun­cionarios no cumplen con la ley, pero somos perezosos para llegar hasta la causa del abuso, hasta el origen (le la arbitrariedad. Noe

puesto de Gobernador para dar sa- conformamos con lamentar que ss

«T-.

sisfacción á placeres mezquinos que roban la tranquilidad á las fa­milias y dan á la sociedad un ejem­plo peligroso de inmoralidad. E-Gral. Francisco Cañedo,_ Goberna­dor de Sinaloa, padece laifieb're'el rótica qué hace delinquir áN. Miguel

;Oárdenasl--ElraKior„«áno,íel amor que,bendice la' humanidad porqué

-porí'élexlst'ely en éU'fundisú etér-: nff1existwia:'erjíla tierrales "¿Les-f MffiraliMdó'.po^holmbres" qué 'no ^ s e ^ b ^ p o r ^ u é ^ r a i s r ó o del£desti{ ^riolocupán%prómiriebte^ItigárÍ,é"n

nuestra^dpKmida PÍfrU. ¿Sonaos f?. » , los inclinados! al f deli-

_^_ agobiarTcon m peso;!cuando en , --'--« íSuizi^íeno«^civiliz*doí-q«ei i

nos opnma, pero .no buscamos los móviles de; esa opresión. ¡Ah; si sospechásemos siquiera lo que em­puja á" los.; gobernantes á oprimir, la vergüenza que ello nos produje­ra nos rAría reaccionar - virilmente pafa^desembarazarnos^de los tira­nuelos que deshonran á;-la Patria!

Nuestros gobernantes—lo heñios dicho muchas" veces^úó, están a fe­rrados "al v'poder"?por-" la, t pasión ;de mando. I^ 'hja^ossob;s i empreó-didsos; peíobíyTÍriosque son más odiósbsJque^ótrosílHay^tiranos qué lo son únicamente portel deseo en-fermuo de.hacerque suspersonali-d¿d descuelle ^bre i l od i s la sdé ' sü nacióp^y,esoa; s o n f menos ¿odiosos

_ a er impunemente7;meter»lósfde^ dos^enílps bolsilibsíde liwfjaudácia--nb^^.lísiempreji escüdados1|pprisu investidura oficial, éjerwJlajhiiÍMO^ ralidad enf sus;fbrmas másflrepug nantes'ppr mezcláilas cpjnJlas|Tun-ciónes administratiyas.íSy{^íS|vJS¡í: í í N o éstamtisjni siquiera|goberna dós¿ pdrjtiranbis í viriles^'; ^Estamos gobernados por traficantés¿|por ju­díos sórdidos qué dejanjlyerílas^u-ñas rapaces :én í^tódas susf^ispqsi-ciones. Nuestra^tiraníáírio;es laHi-rauíá gloriosa?d¿l Napoleón"*!,ni j a corrupción deInuestros |^bernan-tesVés la ;d orada corfu pción ?de jos CésaresJf Soportamos unaJ tiranía gris¿:hedionda, malditaj<sinVuñ:ras­g o d e belleza; sin nada delicado; tiranía absurda de mercacbifles y de histriones qué nos cubren de lo­do y nos asfixian con. su podre­dumbre.

Francisco Cañedo, el Goberna­dor de Sinaloa, es un digno em­pleado de Poifirio Díaz. A nada e-levado aspira. Su ideal es el de* los cerdos: tener suficiente lodo para empaparse. Vamos á ver cómo mezcla las funciones con sus bajos apetitos.

Hace pocos días dos individuos golpearon brutalmente en Culiacán á un tal Benjamín y lo hirieron gravemente. Pero como, uno de los ueridores es sobrino de una aman­te de Francisco Cañedo y el otrp.es hermano de una criada del Lie. Heriberto Zazueta, Sccrelario de Gobierno, aunque el delito era' de la competencia del Juez HdeL Ramo, Criminal, el Prefecto Escobar .fué el que falló en el asunto,, aplicando á uno de los heridores una peque­ña multa, y al otro, uuos cuantos dias de arresto. El hecho es común en Sinaloa. Los criminales que de algún modo están ligados con los tiranos, pueden cometer cualquier crimen con la más perfecta impu­nidad.

Hace algún tiempo que un indi­viduo llamado Juan Sáucliez, her­mano de la misma amante de Ca­ñedo, asesinó alevosamente- á'iun pobre viejecito. El asesina nú/si­quiera intentó ponerse á salvo. ¡Contaba con que su cuñado tenis que salvarlo! En efecto, su paren­tesco con el sátrapa lo rodeó de im­punidad y hoy hace alarde de ser rufián.

Cañedo es todo en el Estado. To­dos los empleados públicos son,vi­les instrumentos de él, pues Cañe­do es Gobernador, es Congreso-' i Prefecto, es l Juez y Magis f Tesorero y" Recaudador^ ~-' quita á todos los empleados,., antojo, y se entromete hasta ei^ A más nimio, pues él ordena bástala disposición en que deben colocarse los muebles en las oficinas. El Re­caudador de Rentas dé Culiacán puede dar fe á este respecto.

El Palacio de Gobierno está man­chado por la perversidad del tira­no. Como Emilio Pimeutel, Cañe­do ha escogido el local donde de­ben despacharse los asuntos públi­cos, para celebrar sus orgías. En los negocios judiciales deberían in­tervenir únicamente los jueces, pe­ro no sucede así. Cañedo puede salvar de la cárcel á los delincuen­tes, siempre que pueda afianzar-u­nas monedas ó manchar la honra de alguna pobre mujer. Y eso ocu­rre en el Palacio de Gobierno á donde acuden las mujeres que tie­nen interés en salvar á- algún reo. Las madres llevan á sus hijas para que las pierda el tirano, ya para salvar de alguna pena á algún'deu­do, ó paraiipb.ten.er ,un_puñado/de dinero ó evitarse algún daño por parte del ogro. Algunas infelices han sido de tan corta edad, que hasta los mismos lacayos de Cañe­do se han sentido horrorizados.

Una mujer que vive en el Pala­cio de Gobierno y que es esposa de un criminal á quien Cañedo sacó de la cárcel para darle el empleo de portero de Palacio, es quien ha referido tan asquerosas historias que revelan la falta de sentido mo­ral de Cañedo y confirman' lo" que asentamos: que nuestros gobernan­tes aspiran ai poder para perpe­trar impunemente sus crímenes. Y por eso los denunciamos, por,, eso penetramos á los cubiles donde se agazapan para violar la ley y para aDusar de sus puestos sembrando la inmoralidad y el crimen.'

Nunca habrá señado la más per­versa imaginación lo que nuestros gobernantes practican amparados por la impunidad. La justicia'ha perdido su imperio en nuestra in­fortunada Patria, y las caúsasrcri-minales se resuelven á. favor denlos delincuentes si pueden dar. dinero ó tienen en su familia algunaj'po-bre mujer cuyos encantos séarfca: paces de.inclinar elfiel de la balan­za 'del lado del crimen. Una admi­nistración afí es la quesoportamos; ríes preciso queVV bayamosiperdldo toda noción de dignidad para'con j tinúar sorx)rtándola'sin,aue'no«1ar?.

para^üé;se;^téngaVüna ideai|deílps 'motivos*qué/tienéunuéstrbs^goberVÍ íaúlésVparaí violarVlaíléylyídes^ hourará;Vla naciónX-1 'V... VifeV¡;v"i|:-j:

interesantes, ^-r;Juan! Pedro Didapp, el escupi­

do defensor ¡del;ladrónV Cándénas; tiene la a ti n gencia de esta m par u na hecedad en cada una dé las lineas qué garrapatea én el papasal reyis-ta "El Pueblo:" Últimamente pro­pone al Gobierno que exija á los individuos de la clase pobre;; de México, el uso del pantalón, y no pantalón cualquiera, sino pantalón limpió. Didapp quiere que los Re­glamentos de Policía haganVun prodigio, como sería el de transfor­mar en gente limpia y bien indu-mentada á parias infelices que no tienen que comer. En las condi­ciones de miseria eii que vive hoy nuestro pueblo, "agobiado por la ti­ranía y por mil explotaciones infa­mes, no hay derecho para exigirle limpieza y buen vestir. Antes que combatir la suciedad y la falta de pantalón, sedebé combatir la mise­ria pública, que origina esos defec­tos. La miseria hace olvidarla higiene, y esto debió saberlo Di dapp prácticamente en los aciagos tiempos en que era uu calderetero desarrapado. Si tanto preocupa á Didapp la medida,, de que habla­mos, ¿por'.qú'é^ó.propotie q'úe 'sé regalen pantalones !á los pobresj y se instituyan para ellos baños pú­blicos, como se hace en este país?

dae l fostró'y s iñqúe nuestros pac ño«fsetcrisperf"de^cólera.v*SSi!/*í: ^ íi Mucho, hay5 que, decir facercáfde

la tiranía de.C«ñedo:,pero hay.Un-tolodo 1h ay;t .nt i inmiindi¿iaitau¿ tememoi «^ue .r:á ¿ o ^ r o í « « • :

Tal cosa podría hacerse perfecta menté si no hubiera gobeiuantes tan ladrones como Cárdenas y si el dinero del pueblo no se gastara eu subvencionar bellacos como Di­dapp.

—En Thurber, Tex . , resultaron muy animadas las fiestas del i6 de Septiembre, aunque solo se"* prepa­raron en tres días. En los discur­sos que se pronunciaron campearon ideas liberales, y todos los oradores se mostrárou independientes con respecto á la Dictadura que oprime á la Patria. Las fiestas terminaron con un gran baile la noche del 17.

—En School, Tex . , se solemnizó dignamente el Aniversario de nues­tra Independencia/figurando como oradores los caracterizados liberales Sres. Encarnación Peña, Francisco Quiroz y Ventura Buentello, y los

'venes Enrique Buentello y Este-....•,Zamora. El sexo femenino

prestó valioso contingente en esta fiesta patriótica, distinguiéndose las Sritas. Higinia y Gumesiuda Vázquez. Nuestro correligionario el Sr. Eustorgio Buentello, fué el Presidente de la Junta Patriótica, á la que felicitamos por el éxito al­canzado.

—En Huauchinango, Pue., el Je­fe Político del Distrito colocó el 16 de Septiembre la primera piedra de los pedestales para las estatuas que se piensa erigir á Hidalgo y Juárez. No es, sin embargo, un fin patrió­tico el que guía á dicho Jefe Polí­tico. Desde luego choca que ese funcionario haya impuesto cuotas á los vecinos para la erección de las estatuas, en vez de dejar que cada uno contribuyera según su vo­luntad y recursos. Tanto celo pa­triótico.en un opresor de la Patria,' da qué sospechar. Se tiene por se­guro quéeste Jefe Político es un imitador deVEnrique Creel que lu -eró. cotí "el prétéxtO;de levantar una 'e'Matuá^áTIíaálgoy aTíorá'tráfá de lucrar en mayor escala con la erec- ¡ ción dénnmonumentoá Juárez.

—En el mismo Distrito de Huau­chinango, Pue. , hay vcintilrís pue­blos, y solamente SIETE Escuelas. En esto debería fijarse el paltiota Jefe Político, que levanta estata-tuas á los héroes extorsionando á los vecinos. El patriotismo verda­dero consiste en procurar el bien de la Patria, y ningún bien mayor que el de difundir el saber y la verdad entre las masas populares. ¿Por qué no hace es.to el funcionario pobla­no? Porque la Escuela mataría el despotismo y haría caer á todos los bribones que hoy explotan los pues­tos públicos. Mejor que Escuelas, levantan los opresores estatuas á los héroes, por dos motivos: por lu­crar con esas obras, y por engañar al pueblo fingiendo un patriotismo que no sienten.

—De Minas 'Nuevas á Parral, Chih., llevaron los frailes un santo en escandalosa procesión, formada por cerca de trescientas ovejas del rebaño clerical. N o es extraña ver violaciones tan flagrantes á las Leyes deEéforma bajo la Dictadu­ra clerical de Díaz; y en un Estado cuyo Gobernador-, Constitucional estuvo á puntode" ser cura. - *£, r í- —El bandolero Obispo Gavilán, a no impedírselo sutaracter sagra' da, hubiera llegado á ser nieto polí­tico del Gobernador Luis Terrazas. Pero no' püdiéndojcasarse Gavilán con la rijeta**de Terrazas úndoéstafünl marido encontrarlo •en Salazar había entrado

queíencontió álg; que nofesperábanse'rehuíó enérgi raménteS áv semejante|árrVglo;;no pbstaútéVlós dfrécirr.iéntps brillan^ tés que la;familia Terrazas le':hizó pata "quese casara con la'ii iétadel Gobernador. El asúuto se yulgáí-rizó y se hizo ;tan> escandaloso, que los interesados para, tei minarlo, de ún golpe, optaron por mandar á ü n convento á la nieta de referencia. Sirva esto de lección á los muchos funcionarios clericales que nos o-primen y que están en riesgo de la­mentar un caso parecido, y sirva de enseñanza á todos los católicos que, idiotizados por el fanatismo, entre­gan sus familias á la lujuria bestial dé los ensotanados. •."•;—Enrique C. Creel, el otro pul­po chihuahüense. ha anunciado su próxima visita á Parral, y el Jefe-Político de este lugar, el tahúr Ro­dolfo Valles, se prepara á festejar ásu amo. Sabe qué no contará con él concurso del pueblo,' que odia á sus tiranos, y se ha dirigido á las Colonias Extranjeras, pidiéndoles su dinero y su presencia, para cele­brar la llegada del pulpo. ¿No sen­tirá vergüenza el ladrón Creel al verse festejado por los extranjeros y maldecido por los mexicanos? ¿En qué otro país severa ese espectácu­lo inconcebible de que los extran­jeros honren á los gobernantes mientras los nacionales los despre­cian?

.—El Coronel Manuel Carrión y Rubio, aseguró, al rectificar lo que de él dijimos en un principio, que sus trabajos masónicos en San;Luis Potosí eran enteramente indepen­dientes y no tenían ninguna ten­dencia oficial. -Ahora se nos hace notar que la Logia del Sr. Carrión y Rubio está constituida por ele­mento militar y oficial, 3' que en el Artículo 9 de sus Estatutos, se exi­ge á todos los miembros una pro­testa de sumisión incondicional al actual Gobierno.

Sería de lamentarse que esto fue­ra verdad. Mientras no haya in­dependencia en las agrupaciones de cualquier carácter que sean, mien­tras haya el prurito de someterse absolutamente ala Dictadura, no se podía llegar nada de provecho, á

—Víctima de un accidente des­graciado talleció en Tenosique, Tabasco, el dia 7 del mes próxi­mo pasado, nuestro estimado co-

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rreligionario Sr. Antonio V. Mo­reno.' * ; *

Fué uu entusiasta partidario de la causa liberal y aun en los úl­timos años de su vida, anciano ya, permaneció fiel á su partido y se enorgullecía de hacer públicas las ideas que profesaba.

Descanse en paz el digno ciu­dadano.

—Nuestro correligionario el Casimiro Regalado, Presidente

Sr. e de

la Sociedad Liberal «Benito Juá­rez y Sebastián Lerdo de Tejada,» pronunció el 15 de Septiembre en Waco, Tex. , una alocución nos ha enviado y sentimos blicar por falta de espacio.

Nos concretamos decir que el Sr. Regalado es un complejo libe­ral é independiente, y que sus palabras en el día de la Patria es­tuvieron de acuerdo con las con­vicciones que siempre ha sostenido

que no pu-

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