José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos...

35
José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena. La participación en la ciudad global: el 15M a escena. Resumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del ideal griego, la sociedad, atemorizada por las crisis y las utopías catastrofistas, se repliega hacia una marginación apolítica y hedonista en el sentido menos noble del término. Pero surgen nuevas formas periódicas de protesta popular: estallidos que van de la mano de las redes sociales, las cuales se benefician de su universalidad y del difícil control de las nuevas tecnologías; protestas cuya persistencia en el tiempo y eficacia como instrumentos de transformación son aún dudosas. El artículo analiza estas cuestiones y sugiere alguna línea de actuación. Abstract: Few governors wish conscient, critic and participatory citizens. Far from the ancient greek ideals, a society scared of crises and catastrophic utopias has stepped back towards an hedonist (in the most negative sense of the word) apolitical margination. But new ways of popular protests have arised. Social bursts supported on the social networks, which benefits 1

Transcript of José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos...

Page 1: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

Resumen:

Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y

participativa. Lejos del ideal griego, la sociedad, atemorizada por las crisis y

las utopías catastrofistas, se repliega hacia una marginación apolítica y

hedonista en el sentido menos noble del término. Pero surgen nuevas

formas periódicas de protesta popular: estallidos que van de la mano de las

redes sociales, las cuales se benefician de su universalidad y del difícil

control de las nuevas tecnologías; protestas cuya persistencia en el tiempo y

eficacia como instrumentos de transformación son aún dudosas. El artículo

analiza estas cuestiones y sugiere alguna línea de actuación.

 Abstract:

Few governors wish conscient, critic and participatory citizens. Far from

the ancient greek ideals, a society scared of crises and catastrophic utopias

has stepped back towards an hedonist (in the most negative sense of the

word) apolitical margination.  But new ways of popular protests have arised.

Social bursts supported on the social networks, which benefits from their

global nature and the difficulty of controlling the new technologies. These

protests are still of doubtful persistance and efficacy. This article addresses

these questions and also proposes how to proceed.

------------------------------

“Somos los únicos, en efecto, que consideramos al que no participa de estas cosas [la vida de la ciudad], no ya un tranquilo, sino un inútil [inepto, “idiotes”]”. Tucídides, Discurso fúnebre de Pericles (Historia de la guerra del Peloponeso).

1

Page 2: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

Ante este texto de Tucídides surge una pregunta inexorable: ¿cuántos de los

gobernantes actuales de nuestro mundo estarían de acuerdo

“emocionalmente” (es decir, desde su convicción más profunda) con esta

afirmación de Tucídides que es la esencia de la vieja democracia griega? No

me refiero a lo que digan, sino a lo que hagan y propicien con su actitud

profunda. Voltaire le decía en una ocasión a un adversario en una

conversación: no estoy de acuerdo con lo que dice usted, pero daría la vida

para que pudiera seguir diciéndolo. ¿Cuántos gobernantes dirían hoy algo

así? La mayor parte de ellos ¿no preferirán una población sumisa que no

plantee problemas? En Un mundo feliz, la novela de Aldous Huxley, y en

1984, la obra de Orwell, el lema insistentemente repetido por la

propaganda del régimen de turno es: “no piense, no lea, diviértase”. El viejo

Tucídides dice también: en la ciudad democrática, solo sus enemigos

necesitan reunirse en sociedades secretas para conspirar contra la ciudad.

El hecho es que Atenas nunca necesitó de una policía política como la tuvo

Esparta.

Este texto de entrada y esta pregunta me llevan a un recuerdo personal:

cuando sucedió el atentado contra las Torres Gemelas me sentí, como todo

el mundo, anonadado, angustiado, por la barbaridad del hecho y por las

circunstancias: era la primera vez que “el Imperio” se sentía agredido

dentro de sus propias fronteras y, aparte de la barbarie de la agresión, nos

daba miedo una exacerbación del unilateralismo de su política exterior, una

reacción virulenta a base de exabruptos frente a sus enemigos de “El Eje

del Mal” y un peligroso deterioro de la libertad a manos de una supuesta

seguridad.

2

Page 3: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

Por otro lado, la nueva forma de hacer la guerra no respetaba ni siquiera las

fronteras tradicionales de toda guerra: los frentes definidos: “los buenos” a

un lado, “los malos” a otro. Como afirmaba Frank Bohn (antes de Vietnam)1

en el «American Journal of Sociology», EEUU solo había perdido una

guerra, aquella en que medio país sucumbió a manos del otro medio: la

guerra civil de Secesión. Pero ahora la cosa cambiaba. La agresión la

tenían en casa. La angustia por aquel acontecimiento me dejó

momentáneamente paralizado pero brujuleando por Internet descubrí un

artículo de alguien que nunca me ha fallado: Noam Chomsky. El artículo se

titulaba “¿Por qué nos odian tanto?”, y hacía un comentario de otro artículo

así titulado publicado a raíz del atentado en The Wall Street Journal, con la

ventaja de estar elaborado por alguien no antiamericano, sino por los

defensores del corazón mismo de su sistema. La lectura de aquel artículo

tuvo una virtud psicoanalítica para mí: me hizo pasar de la angustia y el

miedo al cabreo y a las ganas de actuar. Esta actitud mía no por conocida y

familiar me resultó a mí mismo menos reveladora y me dio las claves de una

parte de los motivos para actuar y de la pertinente receta para controlar a

las poblaciones a base de inocularles el miedo paralizante.

Pocos años más tarde se hizo la película Syriana (2005), que es un ejemplo

espléndidamente construido acerca del choque de religiones, civilizaciones

y culturas, enumeradas por orden de universalidad decreciente: La historia

transcurre en un país petrolero del Golfo, donde el reformista príncipe

Nasir busca dar un giro a las viejas relaciones comerciales con los Estados

Unidos y sin llegar al objetivo que llevó a Ataturk a la construcción de un

Estado laico en Turquía, pretende hacer evolucionar el viejo aparato tribal y

feudal que sirve de estructura política a su país. Fracasa en el empeño y es 1 Recogido por Carlos María Ydígoras (1968).3

Page 4: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

asesinado, pero la película pone de relieve las contradicciones de la

convivencia entre culturas diversas en la interacción cotidiana dentro de un

país y entre distintos países. Es la polémica actual entre multiculturalismo e

interculturalismo. La cinta termina con un atentado suicida de alumnos de

una “madrasa” contra un petrolero occidental; obviamente, un trasunto del

atentado contra las Torres Gemelas, atentado que la película no pretende

justificar pero sí explicar, utilizando, además, los mismos argumentos que

según Chomsky utiliza alguien tan poco sospechoso de progresismo, ya

digo, como The Wall Street Journal.

Yo puse dicha película en clase a mis alumnas y alumnos de Ciencia,

Tecnología y Sociedad; al terminar se hizo un silencio espeso en clase,

propio de un bloqueo afectivo ante la dificultad de procesar un impacto así.

Me pareció una reacción muy similar a la que yo tuve ante el atentado de

las Torres y solo tuve que hacer con mis alumnos lo que yo había hecho

conmigo mismo: convertir el silencio paralizante y angustiado en un estado

de ánimo y de razón a partir de los argumentos que pude aportar en el

debate que siguió con el objetivo de liberarles de la parálisis y permitir que

las razones que surgieron en el debate posterior propiciaran la acción;

porque la reflexión sirve para eso: es la antesala de la acción.

Los años siguientes asistimos a un desalentador espectáculo de las grandes

potencias mundiales en el que la libertad se vio disminuida a manos de la

seguridad. Pero ¿cuál es el objetivo básico de la ciudad, la libertad o la

seguridad?

La tesis que defenderé en las líneas siguientes es que el derecho a la

participación, como la libertad, no se regala, se conquista, y se conquista

pese al deseo subconsciente y latente – a veces no tan subconsciente ni tan

4

Page 5: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

latente – de los poderes establecidos para coartar y perturbar en lo posible

la existencia de una ciudadanía concienciada y militante en defensa de sus

derechos, para lo cual no hay nada mejor que aterrorizarla con el

catastrofismo propio de las utopías de la derecha, según denuncia

Enzensberger (1984). Un pueblo que no lee, no piensa y el pueblo que no

piensa se deja aterrorizar por el miedo que las élites gobernantes inoculan

en los medios de información, y un pueblo aterrorizado es un pueblo

paralizado y castrado en lo único verdaderamente libre que tenemos, como

ya defendía Cicerón: el pensamiento. Y la secuela de un pensamiento libre

es la acción. Actuemos, pero no como algo que nos regalan, sino como algo

que conquistamos porque somos ciudadanos libres. Este es el marco

ineludible en el que se debe situar la aparición, como auténtico “brote

verde” de este movimiento del 15M, versión española de la eclosión insólita

de la rebelión surgida en la “orla mediterránea”, Egipto, Túnez y Libia

sobre todos.

El telón de fondo de esta eclosión popular es el desgaste del sistema político

en occidente y la falta de respuesta a los problemas del desarrollo

económico básico y de las libertades en los países menos subdesarrollados

del norte de África, además del exasperante espectáculo de unas “clases”

políticas especialmente ineptas, alejadas de los problemas comunes de los

pueblos y más preocupados de agenciarse pingües retiros, incapacitadas

también para limitar y controlar la invasión que los especuladores y los

organismos financieros está llevando a cabo en la vida económica de cada

país, propiciando una escandalosa “financiarización” de ese mundo

económico y una degradación de los llamados mercados que han mostrado

una escandalosa incapacidad para autorregularse y una no menos indecente

5

Page 6: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

capacidad para esquilmar los recursos económicos de los gobiernos bajo la

excusa de “sanear” a sus organismos administrativos: los bancos.

Estos son, en esencia, los elementos que han despertado la exasperación de

las capas más concienciadas de la población y han generado lo que los

gobiernos más temen: la protesta en la calle y la eclosión de la información

a través de elementos que no controlan: las redes sociales. Este virus

esperanzador de la protesta en la calle se está comenzando a inocular

lentamente en países lejanos como, por ejemplo, la sociedad

estadounidense.

------------------------------

Hay que aprovechar el momento de esta crisis económica para plantear

nuevas formas de desarrollo urbano, de control de los mercados, de libertad

en el acceso a la información, de participación en todos los aspectos de la

vida pública, de control de los recursos naturales, de saneamiento de la vida

pública a través de la denuncia de las situaciones propiciadas por una clase

política inepta y corrupta y una población castrada por la ignorancia y por

la falta de sentido ético y estético de la vida pública…

Pero debo comentar que esta crisis me parece (o, al menos, así lo deseo yo)

más bien que una mera crisis cíclica, el final de un modelo inspirado en la

ideología ilustrada de progreso que está dando al traste con las utopías

totalitarias y pseudo laicas, como señala John Gray (2008) y comienzan a

propiciar el realismo político de Maquiavelo y Hobbes que defiende el

propio Gray. Es la crisis de un modelo económico que denuncia de manera

fehaciente Perry Anderson (1996) cuando revela que con el nivel de vida de

USA los recursos de la Tierra dan para 2.500 millones de personas y ya

somos más de 7.000 millones.

6

Page 7: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

Fracasos sonados como el intento de acabar con el hambre en el mundo o el

reciente de Durban en su intento de revitalizar y actualizar el protocolo de

Kyoto, así como la creciente financiarización de la vida pública nos colocan

en una situación angustiosa a la que no parece verse salida ni en los

actuales países desarrollados con USA y Europa a la cabeza, ni en los países

islámicos, ni en las naciones denominadas “emergentes”, ni en países que

ya han emergido y compatibilizan modelos culturales tradicionales con

ideologías totalitarias y economías liberales como China, popurrí de difícil

digestión.

Las secuelas más graves de esta política paroxística dictada, sobre todo, por

la OMC (Organización Mundial de Comercio), el FMI (Fondo Monetario

Internacional) y el BM (Banco Mundial), basada en la ideología de progreso

y que inciden negativamente en las condiciones de posibilidad de la

participación en la vida de la ciudad son:

- La vigencia de El mito de la máquina que señala Mumford (2010) con

el triunfo de la herramienta sobre el resto de instituciones culturales que

propician valores, desvelando una asimetría histórica notable entre el

desarrollo de ideas, valores e instituciones políticas y culturales hasta el

siglo XVIII y el relevo de esta trayectoria por el dominio de la máquina2.

- La sociedad dual , es decir, la segregación social antítesis de la

cohesión social: los ricos, que cada vez son menos y cada vez más ricos y los

pobres, que cada vez son más y cada vez más pobres. En efecto, el siglo

XVIII inglés es testigo de un fenómeno hasta ese momento desconocido en

la historia: el de una revolución industrial que a la vez que incrementa la

riqueza de la nación multiplica el número de pobres e indigentes hasta unas

2 Recuérdese lo que afirma Fernand Braudel (1984) en su comparación de la época de Voltaire y la nuestra: la asimetría histórica entre el desarrollo de instituciones y valores de manera predominante hasta el siglo XVIII y el comienzo de la industrialización que Siegfried Giedión (1978) adjetiva como la época en que La mecanización toma el mando.7

Page 8: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

cifras difícilmente soportables. Esa dualización no ha cesado. Es más: así es

el panorama cotidiano de las ciudades modernas en estos dickensianos

Tiempos difíciles, lo cual no facilita nada el deseo ciudadano de compartir la

gestión de la cosa pública. Lo peor es que el instrumento creado por la

clase dominante para resolver el problema, la economía política, lejos de

resolverlo, lo agrava al someter toda la vida social a las demandas del

mercado.

- Ese imperio del mercado sobre la política que denuncian Coetzee,

Susan George, Naomi Klein, Vicenç Navarro y tantos otros, llevó a Polanyi

(1989) a avisar de que cuando el mercado domina sobre la política no tarda

en hacer su aparición el fascismo3.

Marx decía que la humanidad no se planteaba un problema que no pudiera

resolver. Lamentablemente no es cierto. Tenemos planteados muchos

problemas desde hace mucho tiempo, pero, sobre todo, tres: el hambre en

el mundo, la guerra y la depredación del medio ambiente, y no somos

capaces de resolverlos. Son reflejos, parece, de instintos más profundos de

nuestra especie, desvelados por Maquiavelo y Hobbes, más tarde por Marx

y Freud y ahora por Mumford (2010). El deseo de Marx es otra vez un deseo

voluntarista y omnipotente que no se compadece con la realidad que se

ofrece a una somera mirada a nuestro alrededor. La participación de la

ciudadanía en la cosa pública no puede ser posible sin una “re-politización”

de las masas. Trataremos de mostrarlo para explicar cómo una actitud

participativa en la vida de la ciudad es incompatible con una actitud

impasible ante la abusiva transformación del territorio y una lamentable

3 Polanyi afirmó que si bien tanto el mercado como el dinero y el comercio existieron en el pasado, éstos ocuparon un lugar social muy distinto al que ocupan en la actualidad. A partir de Polanyi, la discusión se centrará en descubrir el sitio de la economía en la sociedad; las relaciones de la economía con otras instituciones como las políticas, las religiosas, etc. Se confirma así la perpetua tentación de los instrumentos o medios a convertirse en fines. Parafraseando a McLuhan, “el instrumento es el mensaje”.8

Page 9: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

inacción ante la bochornosa corrupción ética y estética de la vida pública

española en particular y mundial en general.

----------------------

Pero ¿qué se puede hacer para favorecer la cohesión social? ¿Es necesario

recuperar los movimientos ciudadanos que nacieron impulsados por el

deseo de mejorar los barrios y la ciudad? ¿Qué papel pueden jugar en el

incremento de la comunicación y de la participación las nuevas tecnologías?

¿Cómo conseguir incrementar la participación y el compromiso de los

ciudadanos con los objetivos de la ciudad?

Me sirven de punto de partida tres ideas, aunque ninguna de ellas abona la

perspectiva de un incremento de participación de la ciudadanía.

1. Es difícil esperar un nivel satisfactorio de participación en la sociedad

en que vivimos: “Una sociedad basada únicamente en la posibilidad de votar

y de comprar aparatos de vídeo, que carece de Sittlichkeit [moralidad],

¿puede resultar estable a la larga?… ¿Qué sustancia moral ofrece el orden

político contemporáneo en Occidente? La reacción liberal más frecuente

hoy en día consiste en rechazar la pregunta por estar fuera de lugar”4.

2. En el siglo XVIII, estancadas en demasía las ideas y los valores, nace

el “imperativo tecnológico” de la mano de la ideología de progreso: “lo que

puede hacerse, debe hacerse”. Lo anuncia ya el lema de la Exposición

Universal de Chicago de 1933: “La ciencia descubre, la industria aplica, el

hombre se conforma” y lo concreta Siegfrid Giedion cuando afirma que “La

mecanización toma el mando”.

3. Claus Offe en una comunicación al Congreso nacional de sociología de

Frankfurt en 1968 (¡¡¡) citado por J. Habermas (1986) afirma: «La

disparidad en el desarrollo de los distintos ámbitos de la vida se hace visible 4 Perry Anderson (1996). 9

Page 10: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

sobre todo cuando se compara el nivel institucionalizado de hecho con el

nivel posible de desarrollo técnico y social: la desproporción entre los

modernísimos aparatos de producción y de defensa y el estancamiento en la

organización de los sistemas de intercambio, sanidad y educación es un

conocido ejemplo tanto de la disparidad en los distintos ámbitos de la vida

como de la contradicción entre la planificación y regulación racionales de la

política fiscal y financiera y la evolución salvaje de ciudades y regiones. A

estas contradicciones no se las puede interpretar ya adecuadamente como

antagonismos entre clases, pero sí como resultados del proceso de

revaluación privada del capital, dominante lo mismo antes que ahora y de

una relación de clases específicamente capitalista».

------------------------

Desde esta perspectiva, vayamos ahora con el papel de las nuevas

tecnologías de la información y la comunicación en el incremento de la

participación y el compromiso ciudadano.

Decía Claude Levi-Strauss que, por encima o por debajo de sus diferencias,

una canoa y un transatlántico sirven para navegar. En efecto, su estructura

y función son las mismas, con la evidente salvedad de la distinta

complejidad tecnológica de ambos. Solo varían (nada menos) los

instrumentos y los procedimientos que utilizan.

El mismo paralelismo podemos establecer entre las diversas tecnologías

que nuestra especie ha utilizado en sus intentos de codificación y

representación de la realidad, todos ellos con el único objeto de satisfacer

las necesidades de la comunicación humana, elemento clave de la propia

supervivencia. Desde el relato platónico de Fedro entre el dios Teut y el rey

Thamus en torno a si la escritura es buena para acumular información o es

10

Page 11: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

una enfermedad de la memoria, y con independencia del aspecto utilitario

que tuvo dicha invención, pues los escribanos necesitaban, por ejemplo,

saber escribir para certificar la naciente apropiación “capitalista” de la

tierra en la zona del Creciente Fértil o para planificar el funcionamiento de

la “megamáquina” (Mumford, 2010) para construir las pirámides, la

humanidad ha pasado de la escritura cuneiforme a las nuevas tecnologías

de la información y la comunicación a través de otros “paradigmas”

instrumentales como el papiro, el pergamino o el libro, todos ellos

variaciones, ya digo, en el tipo de códigos que hemos utilizado para la

representación y la comunicación.

Como en el caso de la escritura en la disputa platónica, también la aparición

de estas nuevas tecnologías de la información y la comunicación ha

supuesto la llegada a escena de sorprendentes polémicas sociales en torno

a la bondad o maldad de dichas tecnologías que ha dado lugar a ensayos

geniales como el que dedica Umberto Eco (1995) a las dos formas de

responder al desafío de dichas tecnologías: la actitud de los “apocalípticos”

– que nos advierten de la maldad intrínseca de los nuevos instrumentos y

que, como en el caso de la aparición de las calculadoras auguraban que

nuestra especie perdería la capacidad para sumar, restar, multiplicar y

dividir – y los “integrados” – que no perdían ripio a la hora de bautizar como

papanatas a los que manifestaban semejante miedo a las tecnologías -.

Si en el siglo XIX Marx dividía a la humanidad en dos clases, los poseedores

y los no poseedores de los medios de producción, hoy nuestra especie se

divide entre los que utilizan de manera habitual las nuevas tecnologías de la

información y la comunicación y los que no las utilizan, dejando para estos

últimos el papel de marginados porque quedan fuera del irresistible proceso

11

Page 12: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

de globalización, que, al margen de su bondad o maldad intrínseca o

coyuntural, debemos entender y procurar dominar so pena de sucumbir a

las supuestas bondades del “progreso”, ideología ilustrada en proceso de

crítica y re-bautizada con el inocuo nombre de “modernización” o el menos

neutral de “imperativo tecnológico”.

La marginación respecto de los canales de acceso a la información significa

un riesgo grave de exclusión social respecto de la participación. Primer

elemento que hay que tener en cuenta si queremos tener una población que

asuma la cosa pública como suya.

Evitar esa marginación de los no usuarios de las nuevas tecnologías de la

información y la comunicación, es decir, evitar eso que se ha dado en llamar

“brecha digital” es uno de los objetivos de proyectos tan loables como el de

Nicolás Negroponte, consistente en dotar de ordenadores de 100 dólares a

todos los niños africanos o inundarles de “tabletas” baratas para ir cerrando

la brecha aludida; la oportunidad y justicia de tal proyecto se vislumbra

cuando se constata el papel de estas nuevas tecnologías de la información y

la comunicación en procesos sociales desconocidos hasta ahora – el caso de

las rebeliones del norte de África -, que se extienden como un reguero de

pólvora por bastantes países del planeta y hacen concebir algún atisbo de

una ciudadanía más concienciada.

A los que ya “vamos viniendo a menos”, más que nada por cuestión de edad

- y solo por eso -, esta oleada de indignación, de oposición al “status quo”

de esta democracia aburrida y en trance de agotamiento, nos supone un

respiro, un hálito de posibilidades que ya creíamos desaparecidas bajo la

abrumadora bota de los mercados que, como oyó decir Coetzee a su madre

cuando era niño, por cada persona a la que premian trituran a cien.

12

Page 13: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

La esperanza no es una virtud laica, sino teleológica, y, por tanto, yo no la

poseo, pero sí tengo el ferviente deseo de que estos tsunamis de

indignación y protesta tengan alguna permanencia en el tiempo y, sobre

todo, si queda algo de inteligencia a los partidos políticos, se decidan a

escuchar a la ciudadanía e incluyan en sus programas electorales

reivindicaciones tan obvias muchas de ellas como las que, por ejemplo,

presentaron las asambleas del 15-M5 (al menos así lo deseo; lo de esperarlo

ya es otra cuestión, como digo). Si no sucede esto, el 15-M volverá a quedar

en la memoria como una ocasión en que, al igual que otras veces, siempre

que se va a hacer la revolución luego acaba no haciéndose; eso nos pasó en

el glorioso mayo del 68, del que solo nos queda el recuerdo de haber

contribuido a asustar un poco a los “biempensantes” y a eliminar de la

escena política al SEU, el sindicato falangista de estudiantes.

Solo en la segunda mitad del siglo XX hubo tres revoluciones tecnológicas:

la de la biotecnología, la de la energía nuclear y la de las nuevas tecnologías

de la información y la comunicación; en 50 años, más que en toda la

anterior historia de la humanidad. No tengo criterio para evaluar cuál es la

más importante en sí, pero probablemente la repercusión externa de la

revolución en la producción y acceso a la información haya sido la mayor.

Por extrapolación, cuando se habla de globalización o mundialización nos

estamos refiriendo a ella.

Por ejemplo, la revolución de Marshall McLuhan, inventor del término

“aldea global”, consistió en convertir el medio en fin: “el medio es el

mensaje”. Los movimientos sociales surgidos estos años pretenden

demostrar que hay otra revolución dentro de la revolución: “la ciudadanía

es el mensaje”. En efecto, dado que en estos movimientos sociales no ha 5 Velasco, P., 201113

Page 14: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

habido un gremio, por ejemplo, el de los periodistas, que lo dirija, ningún

gremio se beneficia; solo la ciudadanía; es un bello rescoldo de que la “an-

arjé”, es decir la anarquía, aún es posible.

Dentro de lo que Althusser llamaría la misma “problemática”, tendríamos

que mencionar dos nociones básicas traídas a colación por Manuel Castells.

La noción de “sociedad-red” y la de “significado”. Marx definía en una

primera acepción la ideología como forma errónea de conciencia, es decir,

como la legitimación de todas las falsificaciones de la realidad, ya que las

ideas que explican una época son las ideas de la clase dominante. Dicho de

otra manera, la clase dominante es la que produce el “significado” del

lenguaje que se utiliza. Ya lo decía Lewis Carroll por boca de Alicia: el que

habla manda, y las palabras dicen exactamente lo que quiere decir el que

manda. Y la revolución que pueden propiciar las redes sociales estribaría,

por ejemplo, en que se socializaría la producción del significado que dejaría

de estar en posesión de la clase dominante (por pensar lo imposible que no

quede).

La noción marxista de formación social y su correspondiente noción de

ideología como la interpretación de la realidad llevada a cabo por esa clase

dominante adquieren hoy sentido nuevo en la idea de sociedad-red en la

que vivimos, según cree Castells. Su tesis es, en mi opinión, una

actualización y adaptación de ese viejo concepto marxista de formación

social establecida sobre los modos de producción y las relaciones de

producción. Esta es la adaptación que hace Castells (2001):

“Las sociedades humanas están hechas de la interacción conflictiva entre seres humanos organizados dentro y en torno a una estructura social dada. Esta estructura social está formada por la interacción entre las relaciones de producción/consumo, las relaciones de experiencia y las relaciones de poder. El significado es constantemente producido y reproducido a través de la interacción

14

Page 15: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.simbólica de actores enmarcados por esta estructura social y que están al mismo tiempo actuando para cambiarla o para reproducirla. Denomino significado a la identificación simbólica de un actor del propósito de su acción. La consolidación del significado compartido por medio de la cristalización de prácticas en configuraciones espacio-temporales crea las culturas, o sea, sistemas de valores y creencias que informan códigos de comportamiento… El significado no se produce en el ámbito cultural: es el ámbito cultural el que se produce por la consolidación del significado. El significado resulta de la interacción simbólica de mentes que están ecológica y socialmente constreñidas y al mismo tiempo son biológica y culturalmente capaces de innovar. El significado es producido, reproducido y discutido en todos los estratos de la estructura social, tanto en la producción como en el consumo, en la experiencia y en el poder. Aquello que significa algo para alguien es definido por la interminable reconstrucción de los seres humanos, de las fuentes y los propósitos de sus acciones, siempre restringidas, pero nunca preescritas”.

Pongamos un ejemplo reciente: hasta las elecciones del 20-N en España, el

asesinato de una mujer a manos de su pareja merecía por parte del

gobierno la calificación de “violencia de género”; con el cambio de

gobierno, la primera interpretación de la nueva Ministra de Salud tras el

enésimo asesinato de una mujer a manos de su pareja mereció la

eufemística denominación de “violencia en el ámbito de la estructura

familiar”. No es lo mismo llamar a alguien “jodío cojo republicano” que

“glorioso caballero mutilado”.

Los movimientos sociales emergentes son, sobre todo, praxis sociales, es

decir, lejos de cualquier elucubración teórica, pretenden una

transformación radical de la realidad porque las utopías decimonónicas,

basadas en que la historia tiene un proyecto y camina hacia un fin se han

derrumbado con estrépito. Por eso cabe hacerse la siguiente pregunta.

¿Tiene la historia humana un proyecto?

La historia humana no tiene propósito alguno discernible a priori, pero a

posteriori, es decir, en la tarea propia de los historiadores, es posible

descubrir un tortuoso y doloroso hilo conductor, con multitud de “corsi e

ricorsi” que ya señalara Vico, en torno a los que yo creo los dos aspectos

15

Page 16: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

más relevantes de la trama humana: la lucha por la secularización y la lucha

por la igualdad.

Recalco lo de los “corsi e ricorsi”, o, como diría Lenin, dos pasos hacia

delante y uno hacia atrás, porque a simple vista los tiempos no son buenos;

estamos en tiempos de paso atrás y hay dos signos claros: la avalancha de

la derecha religiosa y los fundamentalismos, tal como ha sido puesto de

relieve por Susan George, Samuel Huntington, etc., y la primacía de los

mercados sobre la política, con el peligro que ya señalaba Polanyi.

En esta coyuntura adquiere relevancia la incipiente rebelión social, sin duda

una de las mejores noticias en este anodino y aterrador comienzo de siglo,

lo cual me lleva a resaltar, una vez más, la trivialidad y estupidez de uno de

los paradigmas de los “neocons” norteamericanos del jaez de Francis

Fukuyama: la historia, en efecto, no ha terminado; la historia no puede

terminar porque en la esencia misma de su etimología está el “discurrir”, el

transcurrir, el suceder, a veces vertiginosamente, de acontecimientos no

previstos.

Cuando se trata de anticipar acontecimientos que tienen como protagonista

a la especie humana el optimismo no está autorizado. El realismo político

explicado por Maquiavelo y Hobbes y actualizado por John Gray nos obliga

a ello. ¿Un somero ejemplo? Pues veamos: los anuncios de apoliticismo, de

“a-religiosidad”, dan al traste cuando los rebeldes libios anuncian ya su

república islamista. Claro que los europeos no podemos decir ni “mú”

cuando observamos la existencia de un “Estado Vaticano” anacrónico y

reaccionario; cuando contemplamos anonadados que la Constitución

europea no es capaz de prescindir, dicen, de las raíces cristianas, o cuando

asistimos perplejos y desanimados a la aprobación por Hungría de una

16

Page 17: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

Constitución teocrática digna del teocentrismo medieval del siglo XIII. No

es de extrañar el esperado y “des-esperado” anuncio del turco Erdogan de

renunciar a solicitar la integración en la Unión Europea. El cinismo

mostrado por la Unión Europea con el caso turco es proverbial.

¿Por qué las Nuevas tecnologías de la información y la comunicación son el

vehículo de la nueva protesta?.

Porque, entre otras cosas, la información se escapa a través de ellas al

control de los gobiernos y sus agencias de espionaje. Wikileaks fue uno de

los primeros clamorosos ejemplos, como antes lo habían sido “Los papeles

del Pentágono”.

En la lucha histórica por la liberación de las personas, el acceso a la

educación ha sido el instrumento privilegiado. Deberíamos concretar ese

acceso a la educación en la posibilidad de acceso a los códigos de

representación y comunicación que son el lenguaje y la escritura, a través

de su evolución histórica que hoy adquiere la forma de lo que se ha dado en

llamar nuevas tecnologías de la información y la comunicación.

Wittgenstein decía que nuestra inteligencia se extiende hasta donde se

extiende nuestro catálogo de palabras porque el pensamiento solo se

expresa a través de ellas. Por eso entendemos tan bien que la

discriminación comienza por el retraso en el acceso a la lecto-escritura y

por eso entendemos igualmente la perentoria necesidad de universalizar la

escolarización gratuita y obligatoria de la educación infantil entre el

momento de nacer y los tres años. Escolarizar obligatoriamente a partir de

los seis años ya es una penosa discriminación.

Se anuncian unos años en que instituciones del tipo de las redes sociales

serán objeto de análisis e interpretación, sobre todo porque parece que el

17

Page 18: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

modelo de democracia liberal y burguesa inaugurado a fines del siglo XVIII

está abocado a un agotamiento que requiere, especialmente, obviar dos

problemas radicales de nuestra sociedad hoy: la financiarización de la vida

social y política y la huida de los ciudadanos ante la idea de la participación

social.

Esta abstención del compromiso con la cosa pública, tan lejana de la

afirmación de Aristóteles de que el hombre solo se completa con su

actuación en la polis, merece el despectivo término que dedica Tucídides en

el discurso fúnebre de Pericles a personas como esas: el ciudadano que no

participaba en la cosa pública era un “inepto” (“idiotes”).

Dice Daniel Pennac (1995) que el verbo leer, como el verbo amar, no admite

el imperativo; o sale del corazón o no hay nada que hacer. Pues, en mi

opinión, al verbo participar le sucede lo mismo. Es decir, la Administración,

las autoridades públicas pueden, como diría Jovellanos, “remover estorbos”,

lo cual no es poco, porque todo poder público tiende a evitar el tener una

población activa que se rebulle, opina, protesta, etc., como señala

Habermas en Ciencia y Técnica como ideología, porque el que lee y cuenta

se entera y pregunta y protesta; y eso molesta. Digo, pues, que los poderes

públicos pueden remover estorbos; sin embargo, el hecho activo de la

participación depende del nivel de conciencia ético, estético y político de la

ciudadanía; pero la ciudadanía de la que hoy participamos tiene poco de

“cosmopolites”, de ciudadanía “completa”.

Hace años la aparición súbita de las ONGs hizo a muchos suponer que ahí

radicaba uno de los elementos de “refresco” de la vida pública. El fracaso

de la mayor parte de ellas, sobre todo porque incurren en un defecto

supremo, que escapan a todo intento de control social como el que afecta,

18

Page 19: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

de una manera más o menos imperfecta, a las instituciones sociales como

partidos y sindicatos – estos menos que aquellos -, les hizo manifestar su

incapacidad para ser ese refresco. No sabemos cuál será el futuro de estas

redes sociales, pero junto a la ingente cantidad de irrelevante información

que transmiten, se han convertido en el elemento clave en este despertar de

la conciencia crítica de una parte de las masas que a lo mejor se rebelan

ahora para no dejar mal a Ortega.

--------------------

Llega el momento de las difíciles propuestas.

Como acabo de afirmar, la participación de los ciudadanos no es objeto de

imperativo. Solo puede ser estimulada si los gobiernos eliminan los estorbos

que impiden el desarrollo de esa participación, y si los ciudadanos perciben

fehacientemente que los gobiernos se preocupan de satisfacer sus

necesidades, objetivo prioritario de toda política.

Es decir, el incentivo para la participación debe hacerse por la vía indirecta

del estímulo de la conciencia ciudadana a través de la educación, lo cual no

elimina las medidas positivas que las administraciones puedan tomar o las

que la propia ciudadanía se tome por su mano sustituyendo la incuria de

muchos de los poderes públicos. Nadie ha querido recordar estos días que

la calle no es de Fraga, es de todos. Además, si algo caracteriza y distingue

a la derecha de la 1zquierda es la política de impuestos y la política del

déficit presupuestario.

1. Hay que huir de la reducción de impuestos porque ellos son la

garantía de la posibilidad de redistribución de la riqueza y, por tanto, de la

cohesión social.

19

Page 20: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

2. Hay que combatir con todas las medidas pertinentes al alcance la

corrupción fiscal, la economía sumergida que supone, parece ser, un 20%

del PIB en España. Todo el dinero empleado en ello genera una rentabilidad

satisfactoria.

3. Consideremos ahora el caso concreto de una de las necesidades más

vitales de la persona: la educación. Lo primero que se me ocurre es la

necesidad de una especie de nuevos Pactos de la Moncloa (como los de

1978) con dos objetivos prioritarios: la inversión en educación y en I+D+I.

4. La primera medida debería ser la de establecer la educación infantil

de 0 a 3 años obligatoria y gratuita, porque el inicio de la discriminación lo

marca el retraso en el acceso a la socialización y a los códigos lingüísticos y

la segregación en este tramo de la educación alcanza niveles patológicos en

la Comunidad de Madrid, por ejemplo.

5. No debe identificarse todo déficit público como peligroso, sino solo

aquél dedicado al gasto corriente, no a la inversión…

Recortes, endeudamiento público y participación.

Dado que estos tres términos están en la base de la protesta social que

abanderan el 15M y movimientos similares (“no hay pan para tanto

chorizo”…), quiero dedicar unas líneas a la doctrina oficial que los gurús de

la economía ultraliberal pretenden hacer pasar por dogmas. Sobre todo,

quiero resaltar la falacia de que la crisis solo se cura con recortes (de los

servicios sociales, ¡claro!, no del fraude fiscal ni de los sueldos de los

consejeros de los bancos o de las pensiones de los diputados).

No hay país más conformista y castrado que un país aterrorizado por el

catastrofismo de las utopías de la derecha. Ya decía Hans Magnus

Enzensberger (1984) que todas las utopías de la derecha son catastrofistas

20

Page 21: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

y la supuesta utopía que hoy nos quiere vender la derecha es aterradora en

su simplicidad: hay que recortar, recortar, recortar… pero ¿qué hay que

recortar?: el salario mínimo, la entrada de nuevos dependientes en las

ayudas que prescribe la ley de Dependencia, los programas de atención a la

diversidad en la escuela pública, las subvenciones a ONGs sin afán de lucro

(aunque parezca mentira hay algunas)…

Pero ¿qué se gana recortando?: tener al pueblo amenazado, sojuzgado,

amedrentado, tranquilito y en casa. Es la mejor medida contra la

participación.

Me resultó revelador el artículo publicado hace unos meses por Josep

Borrell (2011). Afirma que con la excepción de Grecia, los países

actualmente en dificultad entraron en crisis por razones que poco o nada

tienen que ver con los déficits públicos. La causa del problema ha sido el

insostenible endeudamiento privado…

Sigue diciendo que la severa limitación del déficit, al estilo alemán, significa

renunciar a un instrumento que permite a la política económica actuar de

forma contra-cíclica. Se trata de una medida de un marcado carácter

ideológico y un corsé muy limitativo que reduce casi por completo la

posibilidad de hacer política fiscal… Hasta el Finantial Times reconoce que

hoy los problemas de España tienen que ver con su baja competitividad, su

débil crecimiento y la capitalización de su sistema financiero más que con el

déficit público…

A continuación entra Borrell en la forzada polémica acerca de si la deuda es

de “derechas o de izquierdas”: Aparte de consideraciones técnicas, ¿tiene

algo que ver la renuncia al déficit con posiciones de derecha o izquierda?

Hay que ver con qué furor de conversos se han lanzado algunos que se

21

Page 22: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

reclaman de la izquierda a proclamar que la medida no tiene carácter

ideológico o, peor aún, que la izquierda debe hacer suya la supresión del

déficit porque nada hay peor que endeudarse, el equilibrio es bueno per se,

etc…

Pero la clave parece estar según Borrell en que “Si no se pueden financiar

inversiones con deuda el gasto de inversión entrará en conflicto con el gasto

corriente, es decir, redistribución y servicios públicos, y éste tenderá a

reducirse... El déficit es instrumento que debe usarse con inteligencia y

mesura pero al que no se debería renunciar constitucionalmente…

Diabolizar indiscriminadamente todo endeudamiento público es

tradicionalmente una expresión del fundamentalismo económico que cree

que todo lo que hacen los gobiernos es malo y lo que hacen los mercados es

bueno”.

Son ideas que comparto y que, además, inciden en la actitud de los

ciudadanos hacia la participación. Mientras la cohesión social estimula

directamente a la participación porque le hace sentir al ciudadano, tanto al

que da como al que recibe, que no se está solo, la segregación social

estimula el aislamiento, el individualismo, la marginación, la insolidaridad.

Pondré solo un ejemplo directamente vivido por mí, uno más de los muchos

que proliferan estos días. Abundan los expedientes de regulación de empleo

no solo en las empresas comunes sino en bastantes de las ONGs que

resisten con dignidad el control público de su gasto y que gozan de

prestigio social por los servicios que rinden. En Proyecto Hombre de Madrid

está en crisis la escuela de alfabetización de adultos Vicente Aleixandre que

lleva funcionando dos años y comenzaba a dar buenos resultados

académicos, personales y sociales. Estaba atendida por cinco personas

22

Page 23: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

asalariadas de la propia organización y por unas doce personas de

voluntariado social entre las que me encuentro. En enero solo queda una

asalariada cuya continuidad a partir de junio está en entredicho, lo mismo

que el futuro de la escuela. Si la escuela cierra, doce voluntarios y

voluntarias tendremos que buscar otro ámbito donde satisfacer nuestro

deseo de colaboración y participación social. Todo eso si no denunciamos

vehementemente la estúpida política de la nueva alcaldesa de Madrid que

quiere echar sobre los hombros del voluntariado la responsabilidad de

seguir prestando servicios que hasta ahora llevaban a cabo asalariados del

Ayuntamiento de Madrid o de las Administraciones públicas. Lo cual

acarrea un efecto colateral que nos tendremos que plantear en serio: el

voluntariado no puede jugar el papel de esquirol social en la prestación de

servicios.

El caso aludido no es el único dentro de Proyecto Hombre, que ha sufrido

una reducción de plantilla del 33%. El sector de venta de coches de

superlujo, lo que llaman “de alta gama”, es el único tramo que está teniendo

incrementos del 60 % en estos años de crisis en que el sector de los coches

más baratos se reduce de año en año. ¿Quién compra esos coches? La

escandalosa conclusión es que los que padecen los recortes son los de

siempre. Creo recordar que en una de las múltiples crisis cíclicas del

capitalismo, Chumy Chumez en La Codorniz de los tiempos de Franco decía:

¡Cuando Rockefeller se apretó su cinturón de oro…!

Quiero terminar ya estas breves líneas. No es cierto que la ética es

individual y la política social. En contra de lo que se ha defendido muy

generalmente hasta ahora, la ética solo es individual en relación con que la

mayor parte de las actitudes éticas no se rigen por el código penal, pero la

23

Page 24: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

ética solo comienza, como dice Umberto Eco, siguiendo a Kant, cuando

entran en escena los demás. Como Marx y Freud (y en parte como

Aristóteles), defiendo que la persona se determina socialmente. Si la

persona solo es completa en el ámbito de la comunidad que habita, a la

ética le sucede lo propio. La ética solo lo es cuando es social y eso está muy

cerca de la política. La exclusión se produce cuando “los demás” se

convierten en “los otros”. Pues bien, si algo caracteriza nuestra época es

una brutal ausencia de ética y estética en la convivencia social, ausencia

solo salvada cuando se produce un cataclismo. La actitud social frente a la

naturaleza y el medio ambiente posee esa brutal ausencia de ética y

estética, avalada en muchos casos por la política. Me dan auténtico pavor,

por ejemplo, los tanteos de la opinión pública que se están haciendo para

modificar la Ley de costas…

Bibliografía

ANDERSON, P., Los fines de la Historia, Anagrama, Barcelona, 1996, pág.

103.

BORRELL, J., Ideología y déficit público, septiembre,2011

BRAUDEL, F., Civilización material, economía y capitalismo. Siglos XV-

XVIII, 3 tomos, Alianza, Madrid, 1984.

CASTELLS, M., “Materiales para una teoría preliminar sobre la sociedad de

redes”, en REVISTA DE EDUCACIÓN, Ministerio de Educación, Madrid,

2001, pág. 41-58.

ECO, U., Apocalípticos e integrados, Tusquets, Barcelona, 1995

ENZENSBERGER, H.M., Migajas políticas, Anagrama, Barcelona, 1984,

págs. 205-215.

GIEDIÓN, S. La mecanización toma el mando, Gustavo Gili, Barcelona,1978.

24

Page 25: José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global ...  · Web viewResumen: Pocos gobernantes quieren hoy una ciudadanía consciente, crítica y participativa. Lejos del

José Segovia Pérez. La participación en la ciudad global: el 15M a escena.

GRAY, J., Misa negra (La religión apocalíptica y la muerte de la utopía),

Paidós, Madrid 2008.

HABERMAS, J., Ciencia y técnica como ideología, Tecnos, Madrid, 1986,

pág.93

HESSEL, Stephane y SAMPEDRO, José Luis, Indignaos, Destino, 2011.

MAALUF, A., El desajuste del mundo, Alianza, Madrid,2009

MUMFORD, L., El mito de la máquina, Pepitas de Calabaza, Logroño, 2010

PENNAC, D., Como una novela, Anagrama, 4ª edición, Barcelona, 1995

POLANYI, K., La Gran transformación. La crítica del liberalismo económico,

La Piqueta, Madrid, 1989.

SAMPEDRO, J. L. y VV.AA, Reacciona, Aguilar, 2ª edición, Madrid, 2011.

VELASCO, P., No nos representan, Planeta, Madrid, 2011

YDÍGORAS, C. M., Los libertadores USAS, Arrayán, Madrid, 8ª edición,

1968

José Segovia.

Majadahonda, Febrero de 2012.

25