Jose de San MartinJose de San Martin

Nació en Yapeyu (hoy San Martin) Argentina el 25 de febrero de 1778. Fue un militar argentino cuyas campañas libertadoras

fueron determinantes para las independencias de Argentina, Chile y Perú.

Realizo su carrera militar en España. Donde también aprendió castellano, latín, francés, alemán, baile, dibujo, poética, esgrima, retórica, matemática, historia y geografía.

San Martin desde Argentina, emancipada desde el año 1810, viene desde el sur del continente con su ejercito de los andes. Sistemático y decidido cruzo

la cordillera de los andes y su ejercito tomo chile y declaro su independencia tras las batallas de Maipú y Chacabuco, consolidando el

triunfo rebelde y su permanencia en la nuevas naciones. El Ejercito Unido del Sur sigue imparable hacia Lima, mientras el ejercito Español huye en

desbandada .

DICEN QUE SAN MARTIN VIENE POR EL SUR

“Los pobladores en Lima, afines a la corona Española, manifestaban - ¿es cierto que ese demonio de San Martin

ha capturado varios barcos de su Majestad y los ha incorporado a una flota naval que viene hacia acá? !Estamos aterrados ! ¿se imaginan? ¡ que dios nos

favorezca!- Ay pero están tan cerca. He oído que después de

Valparaíso, la meta de San Martin es el Callao y luego Lima”.

CONFORME AVANZABAN LOS EJERCITOS DE BOLIVAR Y SAN MARTIN, EL AFECTO A LA CAUSA EMANCIPADORA AUMENTABA

- ¡ No, mi negra vamos a terminar libres!- ¡ No, mi negra vamos a terminar libres!

“Sueños , no mas que sueños – pensaba San Martin en Pisco, poco antes de iniciar su avance sobre Lima- Nunca podremos unir a lo diverso. Tiene tantas arista estos pueblos que pinchan y destrozan cualquier noción. Cada poblado, provincia o capitanía tiene su caudillo, cada caudillo su ambición, cada ambición su precio . Sin contar a los indios a quienes tres siglos de burros de carga les ha marcado el alma. O los negros lacerados en sus cadenas y arrancados de sus bosques. Después está amalgama del mestizo, cargado con su cruz de no saber quien es ni donde están sus orígenes. Sueños, no mas que sueños, pero no mentimos en esto y habrá que seguir soñando.”

En España, los liberales han impuesto a Fernando VII la constitución de 1812. le recriminan En España, los liberales han impuesto a Fernando VII la constitución de 1812. le recriminan las miles de vidas que ha costado mantener las colonias de ultramar; amen de los grandes las miles de vidas que ha costado mantener las colonias de ultramar; amen de los grandes gastos realizados sin otro resultado que cada vez sean mas los alzados. En un intento por gastos realizados sin otro resultado que cada vez sean mas los alzados. En un intento por apaciguar los ánimos americanos el Rey ofrece igualdad de derechos para las colonias y apaciguar los ánimos americanos el Rey ofrece igualdad de derechos para las colonias y tratarlas como provincias de España; propone una paz conciliada pero tanto Bolívar como San tratarlas como provincias de España; propone una paz conciliada pero tanto Bolívar como San Martin la rechazan. La rueda de la revolución emancipadora viene en línea recta, nadie podrá Martin la rechazan. La rueda de la revolución emancipadora viene en línea recta, nadie podrá pararla ni desviarla. Esa rueda recorrerá todos los confines de la “patria grande”. pararla ni desviarla. Esa rueda recorrerá todos los confines de la “patria grande”.

Era 28 de Julio, Lima era la capital de una nueva republica.

“-esta no será mas la capital de los pizarros, sino la de un nuevo país donde “-esta no será mas la capital de los pizarros, sino la de un nuevo país donde reine la paz y la justicia” reine la paz y la justicia” dijo San Martin al dirigirse a miles de limeños dijo San Martin al dirigirse a miles de limeños absortos y esperanzados, pero en el fondo de si y con el dolor de tantos absortos y esperanzados, pero en el fondo de si y con el dolor de tantos

años de lucha, sabia que no. No era aun el tiempo de la paz y la justicia. años de lucha, sabia que no. No era aun el tiempo de la paz y la justicia.

Lo aclamaron protector del Perú y acepto provisionalmente hasta que se eligiese un Congreso.

Presto atención a los criollos ricos que venían unos, a pedir canonjías en nombre de la cooperación que habían dado a la causa; otros a exigir se revisen las recientes leyes declaradas. “la de vientres libres y la libertad para los negros que hubiesen peleado por la independencia” los tenia inquietos.“ la abolición del servicio personal de los indígenas en Mitas, Encomiendas, Obrajes y Repartimientos” era una amenaza aun mas seria. -¿acaso no se han dado cuenta que el mundo cambio, que tanto muerto y tanta pena no es para conserven sus privilegios y abusos? ¿o el que no me he dado cuenta soy yo? Pensaba el General San Martin. – aquí las únicas que se merecen mi atención son la limeñas, que se jugaron, no esta sarta de oportunistas lameculos virreinales.

San Martin puso la banda en el pecho de cada una de las ochenta y tantas mujeres que habían prestado su auxilio y servicio a la causa de la Libertad.

José de San Martin recto en sus principios, estoico, responsable de los José de San Martin recto en sus principios, estoico, responsable de los deberes de su destino, consideraba que había cumplido. deberes de su destino, consideraba que había cumplido.

Bolívar, no solo veía posible unir los dos grandes ejércitos, sino también las nuevas naciones y formar la Gran Republica Panamericana o los Estados Unidos del

Sur. Su reunión con San Martin era pues, en esos momentos, el asunto geopolítico y estratégico mas

importante

José de San Martin: -Esta patria está descontrolada, no hay forma de sujetarla solo un loco como Bolívar podrá continuar en este quilombo. El con su fogosidad a flor de piel, él con su palabra encendida, con su sonrisa rápida…. Con su destino cargado a cuestas y a descenso. No, tampoco él podrá amarrarla, pero aun no lo sabe. Ahí le dejo la Republica platónica que nos inventamos. Estoy harto de guerras, de lisonjas, de política. Esta América grande no es mas que una niña obligada a ramera.

Cansado y decepcionado José de San Martin había renunciado al protectorado y estaba en la Argentina

preparando su auto destierro a Europa.

Extraña a su familia y a su tierra

En marzo de 1848, al estallar la revolución de ese año en París, se traslada a la ciudad costera de Boulogne, estableciéndose en una habitación alquilada. Allí falleció a la edad de 72 años, a las tres de la tarde del 17 de agosto de 1850, en compañía de su hija Mercedes. Según cuenta la leyenda, el reloj de la casa dejó de funcionar a esa hora y aún sigue marcando las 3 en punto.

José de San Martin vivió una época de tenciones y conflictos,

que busco subvertir el orden señorial establecido.

Cesar Oswaldo Mendoza Leon Codigo: 20042155043

Texto: Manuela Saenz. Una historia mal dicha.L.E.B.E.C.S.

Universidad Distrital Francisco Jose de Caldas