JORGE TURNER

RAIZ, HISTORIA YPERSPECTIVAS

DEL MOVIMIENTOOBRERO

PANAMEÑO

EDITORIAL SIGNOSMéxico, D.F.,1982

Colección PORTOBELO, 2Serie Temas y Conflictos

Investigación realizada por encargo del instituto de InvestigacionesSociales de la UNAM, Edición auto-rizada por Siglo XXI Editores, S .A.Este trabajo formará parte de va-rios volúmenes que publicarádicha editorial sobre el movimien-to obrero en cada uno de los paíseslatinoamericanos .

Siglo XXI Editores, S .A.

Primera edición : Editorial SignosAbril de 1982

ISBN 968-486-001-3

Editorial SignosE. Jaramillo Levi, EditorErmita-Iztapalapa 2570Frac. Colonial-TatapalapaCalle Antonio Gutiérrez 8109270 México D.F .

Portada de Carlos PalominoImpreso en México

Indice

Pág.

1 Explicación previa 1

2 Premisas, periodización, propósito

5

3 Los orígenes, entre el ferrocarril ylos canales

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4 Los trabajadores en el cuasi protectorado .Aparece la oligarquía (1903)

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5 Las dos grandes huelgas inquilinarias(1925-1932)

35

6 Sindicalismo legal, Constitución de 1946

45

7 Auge obrero y campesino .Bananeros y cañeros

59

8 Crecimiento cuantitativo, Expectativa porlos mineros del cobre

67

Bibliografía

87

A dos personas queridas, muertas enmi ausencia, durante mi destierro :

A mi padre Domingo, el hombre de lasfundaciones: fundador y líder del Sind icato General de Trabajadores dePanamá, y fundador y primer secretario general del Partido Comunistade Panamá .

A mi tío Jorge, un herrero bondadoso yf orzudoI

que en un país socialista hubiera sido un ingeniero mecánico

coruscante .

1

Explicación previaDe este trabajo, resultado de la invitación que afines de noviembre de 1977 me formuló el doctorPablo González Casanova, a nombre del Instit

uto de Investigaciones Sociales de la UNAM,para redactar la parte correspondiente a mi paísde una Historia del Movimiento Obrero en AméricaLatina, hube de hacer dos versiones.La primera la terminé de preparar cerca de la

fecha en que los diferentes especialistas fuimosconvocados en el Centro Vacacional de Oaxte

pec, en diciembre de 1978, para discutir nues-tros respectivos puntos de vista .La segunda y definitiva la escribí, aprove-

chando los imponderables que impidieron laedición de los trabajos dentro de las fechas pre-vistas, luego de un viaje que hice a San José deCosta Rica con motivo de circunstancias relacio-nadas con mi solidaridad hacia el pueblo nica-ragüense.

1

Esta segunda versión, que irá a la imprenta, sebeneficia con la oportunidad de nuevas reflex

iones que me permitió el doctor Daniel Camacho, entoncesrector del Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad de Costa

Rica hoy secretario general de FLACSO. En elmes de abril de 1979, Camacho me invitó a par-ticipar, junto a otros intelectuales de la región,entre los que estaban dos jóvenes y talentosospaisanos míos, Iván Quintero y Andrés Achong,en un seminario sobre El Movimiento Obrero enCentroamérica en los Últimos 50 Años, celebradoen el CEDAL, en Santa Bárbara de Heredia .Pero además, mi exégesis primigenia se ha

visto enriquecida con nuevos libros sobre lasorganizaciones panameñas de trabajadores apa-recidos en el ínterin, los que me dejan traslucirlas promisorias inquietudes actuales de jóvenesestudiosos y que quizá son un reflejo del renacerdel movimiento obrero nacional . Entre éstos esobligado mencionar, de modo especial, al quelleva por título Las Luchas obreras en Panamá(1850-1978), del equipo del CELA de este país,escrito por Marco a . Gandásegui Jr., AlejandroSaavedra, Andrés Achong e Iván Quintero ; y ellibro Movimiento Obrero Panameño (1914b1921),de Hernando Franco Muñoz .Aunque tales escritos no dan énfasis a las

preocupaciones prácticas inmediatas del militante obrerista, existe en ellos una proyección

muy clara y muy justa de la secularidad del mo-vimiento proletario en Panamá .El resto de las fuentes son las mismas de mi

primera versión . A los libros que aparecen en labibliografía, al final de este trabajo, y que incluy

e un folleto de la Federación Sindical de Trabajadores de la República de Panamá, debo

añadir mis propios apuntes, llevados a cabo detiempo atrás; los apuntes que heredé de mi pa-dre y los informes obtenidos en conversacionescon Hugo Victor, Domingo Barría, Pablo Corde-

z

ro y Calixto Bristán.Este empeño de seguir trabajando el tema no

es sólo preocupación por disminuir los erroresque mi trabajo pudiera contener. Tiene tambiénsu origen en el propósito de corresponder al meritorio y grandioso denuedo de Pablo GonzálezCasanova. La dimensión de la obra a la que mehabía invitado a participar como investigador,dispuesta para publicarse en gruesos volúmen

es, salta a la vista si se la compara simplementecon aquel libro del chileno Moisés Poblete Tronc

oso, Movimiento Obrero en Latinoamérica,editado por primera vez por el Fondo de Cultura

Económica en la década del 40, de unas doscientas y pico de páginas, dos de las cuales están

dedicadas a Panamá, y que en su tiempo mepareció tan meritorio.González Casanova, entre otros méritos, es una

especie de Diderot latinoamericano de hogaño .El sabe mejor que nadie la imposibilidad deencerrar en diversos tomos, por nutridos quesean, la explicación condensada de todo el arte yla ciencia desarrollados por la humanidad hastanuestros días. Pero, sin embargo, cuenta con unaconcepción enciclopédica de los grandes temas,que lo han llevado a idear, planear y coordinarambiciosos trabajos de incalculable importancia en América Latina

. Una de las investigaciones más recientes, dirigidas por él, con la

colaboración de veintisiete especialistas, intitu-lada La Clase Obrera en la Historia de México,constará de 17 volúmenes .Mi preocupación central ha sido la de prepa-

rar un resumen que, al lado de los otros queintegrarán la Historia del Movimiento Obrero enAmérica Latina, contribuya como quiere Gonz

ález Casanova, a dar una dilatada visión de conjunto de lo que es la presencia proletaria en

nuestro subcontinente, y al mismo tiempo le seaútil, por separado, a los sindicalistas panameños.

3

En este estudio puse el cariño que siento haciala clase obrera de mi patria, a la que me integrédesde muy joven, y hacia quienes se esforzaronen darle estructura. He tratado de mantenersiempre la objetividad, buscando observar altrabajador panameño en un contexto histórica-mente discernible y no en idealizaciones abst ractas emanadas de la teoría, sabiendo además

que las clases no son meros efectos pasivos de lasociedad. La idea es extraer conclusiones, pordesfavorables que sean, para señalar tareas quecontribuyan a que los trabajadores se conviert

an de agentes de la producción, en agentes de la historia.

En las líneas que siguen procuro mencionar,hasta donde obtuve información, a los hom-bres que se destacaran en las distintas etapaspor las que ha atravesado la lucha del proleta-riado panameño. De éstos, unos claudicaron,otros se retiraron fatigados y otros se mantu-vieron hasta el fin, pero todos, sin excepción,hicieron su aporte en un momento dado .

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2Premisas,Periodización,Propósito

La investigación se sustenta en ciertas ideasguías y en el propósito práctico de que sea deutilidad a los sindicalistas panameños en unaspecto muy concreto, lo cual determina el ámb ito temporal, el enfoque, la estructura, la

periodización y las conclusiones de la misma,La idea fundamental primera, atañe a las raí-

ces. Una diáfana explicación de lo que ha sido yes el movimiento obrero panameño y de sus hitosmás importantes, exige tener en mentes, comopunto de partida, la circunstancia del surgi

miento del capitalismo en el mundo y los condicionamientos nacionales que se recortan con

motivo del fenómeno .El capitalismo se consolidó en el orbe por

primera vez a partir de la Revolución Industrialinglesa en el siglo XVIII (cuando se inventaronlos telares mecanizados y la máquina de vapor),desbrozada ésta por la guerra civil que encabezóOliverio Cromwell en el siglo anterior .

5

Al capitalismo inglés siguió el afianzamientodel capitalismo en Francia, como sistema gen

eral, luego de ocurrida la revolución burguesade 1789; historia sangrienta en la que los obrerospelearon durante décadas en las barricadas .Entre los primeros países capitalistas figuratambién Estados Unidos de Norteamérica .

El fenómeno capitalista naciente en diversospaíses del mundo tiene expresiones haciaafuera. Y la formación en América Latina de losprimeros conglomerados apreciables de obrer os, frecuentemente tienen que ver con lasconstrucciones de líneas férreas que patrocinanempresas extranjeras o con instalaciones por-tuarias o con explotaciones mineras . Decirtrabajadores mineros equivale a referirse a losque laboraron desde el siglo XIX en términos deexplotación capitalista, y no a aquellos embrio-nes proletarios expoliados terriblemente en lasminas de la época colonial, bajo relaciones soc

iales de producción basadas en la esclavitud.(1)En los países donde los primeros proletarios

surgieron como una prolongación de la activi-dad capitalista foránea, el momento de suaspiración es el punto de arranque de la hístoríadel movimiento obrero nacional .

Panamá no se distingue de otros países lati noamericanos en lo referente a las ramas en

donde surgen los primeros núcleos obreros. EnPanamá los primeros proletarios son, sucesivam

ente, los que construyen el ferrocarril transísmico norteamericano, los que trabajan en la

(1) A este respecto, Agustín Cueva, sin negar la conexiónevidente de las formaciones esclavistas o feudales de América Latina con el desarrollo del capitalismo a escala mun-

dial, señala certeramente que "el período colonial se carac-teriza por un bajísimo nivel de desarrollo de las fuerzasproductivas y por relaciones sociales de producción basadasen la esclavitud y la servidumbre" . El Desarrollo del Capitalis

mo en América Latina, Editorial Siglo XXI, México 1977, pág.15).

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habilitación de puertos y los que excavan parahacer realidad el canal francés .Pero la diferencia entre el ferrocarril que se

construye en Panamá y los que se construyen enotros países de América Latina, estriba en que elferrocarril transísmico no se hace para sacarlasriquezas panameñas al extranjero, sino parareforzar el valor estratégico del lugar, puesfacilita el traslado a las metrópolis de los pro-ductos de otros países de nuestro subcontin ente.

A la cintura ístmica centroamericana en general, carente de grandes explotaciones mine-

ras, se le concedió en el siglo pasado, depreferencia, un valor estratégico. No obstante,es Panamá el punto centroamericano donde secrean los instrumentos y la infraestructura parael aprovechamiento en concreto de la favorableposición geográfica .Desde que se tuvo una idea más precisa del

mapa mundial, tras el descubrimiento del Mardel Sur u Océano Pacífico por Vasco Núñez deBalboa, se inicia el uso de la ventajosa ubicacióngeográfica de Panamá. Y con el advenimientodel capitalismo en el mundo, el país no se articula con la economía mundial a base de algúnmonoproducto, como sucede en el siglo pasadocon el café de la también centroamericana CostaRica, sino en función de su servicio de puenteeconómico .La nación empezó a tener una clase obrera en

la fecha en que el capitalismo le asignó prefe-rentemente al país un papel geográfico muypreciso en la división internacional del trabajo,que empieza a cumplir con el ferrocarril y luegocontinúa cumpliéndolo con el canal . En virtudde este fenómeno, la clase obrera inicial senutrió de trabajadores inmigrantes, y no, comosucedió en otros países, de campesinos expuls ados de sus tierras por la voracidad de los

latifundistas o de artesanos empobrecidos .

El ferrocarril sirvió, como después el canal,para acortar las distancias marítimas y favore-cer las transacciones del comercio internacio-nal; para reducir el costo de transporte de lasmercancías y el periodo de rotación del capital .La condición que el capitalismo le impone a

Panamá desde muy temprano, de país de tránsito, da lugar a lo que puede llamarse el viciode

origen del proletariado panameño .Este vicio de origen hace posible que la clase

obrera, surgida para construir los intrumentos yla infraestructura que facilitará la utilizaciónuniversal del recurso geográfico y no la explotac

ión económica del país, desapareciera al término de las obras.

De modo que, por tal razón, el movimientoobrero panameño tiene la peculiaridad de seruno de los más viejos y, al mismo tiempo, uno delos más jóvenes del continente . Es de los másviejos porque su nacimiento se sitúa en 1850-1855, cuando se construyó uno de los primerosferrocarriles del mundo, el ferrocarril transism

ico, o sea, anterior a la aparición de la claseobrera chilena, surgida con la explotación de losfundos mineros, y que figura entre los proletar

iados nacionales de mayor antigüedad y combatividad de América Latina. Es uno de los más

jóvenes porque la organización y primera acciónde huelga de los trabajadores del banano enPanamá, hasta estos momentos el principal pro-ducto de exportación del país, apenas data delaño de 1960. Es decir, más de un cuarto de siglodespués de la gran huelga bananera de 1934 enCosta Rica, el país vecino .

Pero no sólo están tomados en cuenta, paraorganizar este trabajo, los hechos que atañen ala aparición planetaria del orden económico ysocial, distinto con respecto a épocas anteriores,que se llama capitalismo y su singular proyección sobre Panamá . La genealogía del movi

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miento obrero panameño exige asimismo, apesar de las dificultades inherentes al manejosimultáneo de planos, que a lo largo de la explicación histórica se formulen por lo menos algu nas referencias básicas a un marco social más

amplio, para una mejor comprensión y caracte-rización de las épocas . La historia obrera es lahistoria de las luchas de "los de abajo", pero nose puede abordar el tema como si los proletariospanameños se desenvolvieran en el vacío, y nojunto y frente a otras clases integradas dentro deun sistema social nacional que a su vez se inte-gra en un conjunto regional y mundial .

En cuanto a la periodización, tras la exposición sobre los trabajadores que construyeron el

ferrocarril transísmico y sobre los que laboraron en la construcción del canal francés y del

canal norteamericano, resultó ineludible la re-ferencia a los obreros a partir del surgimientode la República mediatizada, luego de la sepa-ración de Colombia . En esta época se consolidala oligarquía y Panamá añade a su función geo-gráfica su situación de país agroexportador, conla explotación del plátano por la United FruitCompany, explotación que se hace en forma deenclave, como antes se hicieran la cons-trucción del ferrocarril y los canales . En estasfechas aparecen también los primeros gremiosfuera de los enclaves .

Después fue necesario incluir en esta historia,en capítulo especial, las dos grandes huelgas

inquilinarias de 1925 y 1932. La historia delmovimiento obrero panameño debe enfocarsedialécticamente como la historia de la claseobrera en marcha, que tiene como recurso fun-damental la huelga. Esto quiere decir que en elseñalamiento de los hitos de la reseña debentomarse en cuenta igualmente las grandes huel-gas, particularmente si indican el inicio de una

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etapa de flujo en la lucha de los obreros, o unaruptura, o un punto de viraje ideológico, o uncambio en el estilo y en los métodos de trabajo . Ylos movimientos inquilinarios de 1925 y 1932 nosólo tienen las características apuntadas, sinoque revelaron formas inéditas de lucha, de granimaginación, aleccionadoras para las jornadasde hoy.

Por razones evidentes se incluye también laetapa calificada como de Sindicalismo Legal, enla que el crecimiento obrero, por la evolucióneconómica del país y las obras que se constru-yeron en la Zona del Canal durante la SegundaGuerra Mundial, imponen en Panamá movilizac

iones que conducen a la regulación jurídicasobre la forma de prestación del trabajo . En estaépoca se estableció el derecho de asociaciónsindical y de coalición sindical y se aceptóla organización obrera como un elemento norm

al en la vida de la nación. Concomitantementecon el crecimiento de la clase obrera despuntómás claramente durante la segunda conflagrac

ión una incipiente burguesía nacional.

A continuación se hace referencia a una épocade auge especial en la lucha de los obreros ycampesinos, cuando los bananeros, por fin, seorganizan, y los cañeros se activan, para conc

luir con los trabajadores de la actualidad(1980) en que sus organizaciones se han multi-plicado por las reformas al Código Laboral. Ennuestros días, Panamá, además de país canaleroy agroexportador, está a punto de convertirse

en mineroexportador con la próxima explotac ión de sus yacimientos de cobre.

El propósito práctico de este trabajo va algomás allá de la sencilla reseña de la raíz y lahistoria del movimiento obrero en Panamá . Enél se insiste, al final, en algunas realidades

lo

inherentes a la acción deformadora del imperia-lismo sobre el país para llamar la atención de lossindicalistas en lo que hace a la necesidad defijarse metas organizativas inmediatas que cont

ribuyan a superar los factores adversos que tienen ante sí el proletariado, a fin de que éste

pueda cumplir con sus intereses de clase .Pero si bien este trabajo tiene metas prácticas,

reconoce que deja pendiente, por otro lado, aunque haga algunas referencias a los partidos, la

exposición en detalle de la provisión ideológicacon que las mediaciones políticas abastecen a laclase obrera panameña y la investigación, paso apaso, de los nexos entre unas y otra, así como lorelativo al propio dinamismo generador de ideo-logía de los trabajadores.

La finalidad del estudio se constriñe, buscando objetivos prácticos, a remarcar cuál es el

tipo predominante de los trabajadores paname-ños ; a señalar la baja concentración obrera enlas empresas ; a la necesidad fundamental deorganizar a los desorganizados, sobre todo en losenclaves, dada la baja tasa de afiliación sind

ical; a postular métodos para la unidad obrera,y a formular una exhortación para que los prole

tarios enlacen sus intereses con otros sectorespopulares con objeto de sacar adelante sus proy ectos.

Son factores exógenos los que han impuesto sudistorsión a Panamá, pero siempre a través defuerzas internas, y es en el interior del paísdonde primeramente debe darse la batalla, sinmenoscabo de que el combate también se libreen el plano internacional . El vínculo de unión delos obreros debe ser la conciencia de que constibtuyen un sector diferenciado, que tiene frente así, en las relaciones de producción, a la clasecapitalista, y en disposición a luchar por inte-

Il

reses económicos comunes y solidarios . Pero suconciencia debe ir más allá y compenetrarse dela necesidad de la acción común con otros secto-res de oprimidos, y todos juntos convertirse enuna potente y consecuente fuerza de lucha por lasoberanía del país (la gran bandera de unificación obrera y popular debe ser la lucha porcompletar la independencia nacional), proban-do que sus intereses están amalgamados y sonlos mismos que los verdaderos e intrínsecosintereses de la nación.

Tal vez es la exigencia lógica para variar losrumbos de un país como Panamá, que aún sigueocupado por contingentes militares extranjeros,urgido de crear una fuerza que tenga perspectiv

as frente a la magnitud de las fuerzas que reta, yen donde una política acertada no debe conce-birse sólo como el arte de lo posible, sino pen-sarse como el arte de hacer posible lo queparece imposible .

u

3Los orígenes, entre elferrocarril y los canalesLa clase obrera aparece en Panamá en el siglopasado, antes que en el resto de Colombia, conquien el país estaba políticamente integrado enesa época, y que en muchas otras naciones latin oamericanas. Pero sus comienzos no derivan

de una formación económico social en el país enla que predomine el modo de producción capita-lista sobre otros modos de producción secundar

ios, formando la matriz de donde emergerían lanueva clase y sus rebeldías .

Subrayamos: en Panamá los primeros obrerosno brotan de la naturaleza interna del régimeneconómico nacional . Surgieron antes de que sedieran los procesos inherentes al desarrollocapitalista interno y que deberían determinar laaparición de la burguesía y de los trabajadoreslibres para contratarse y carentes de instrumen-tos propios de producción.

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Estos primeros e insólitos obreros, sobrepues-tos en una realidad económica distinta en suconjunto a la de la actividad en que ellos tuv ieron que desempeñarse, llegaron en su granmayoría del extranjero . EL fundamento de talfenómeno obedeció a que el capitalismo, sindesentenderse totalmente de las posibilidadesagrícolas o mineras en Panamá, diseñó alpaís como el paso o puente de comunicaciónpara el saqueo de otras naciones e inclusivecomo el vehículo integrador del espacio políticonorteamericano. La función que le asignan aPanamá provoca que, en 1869, se firme entreColombia y Estados Unidos de Norteamérica unprotocolo del Tratado Mallarino-Bidlack, el cualautoriza el desembarco de tropas en Panamá,cuando fuera necesario, para garantizar laneutralidad y el mantenimiento permanente dellibre tránsito por el Istmo . Efectuada laautorización anterior, Panamá sufrió múltiplesintervenciones durante el siglo pasado .

La concepción capitalista de utilizar a Panamá como país de tránsito está imbricada con una

tradición que se incubó prácticamente desde eldescubrimiento del Mar del Sur u Océano Pací-fico por Vasco Núñez de Balboa. La posiciónestratégica de Panamá está subrayada por lacintura de tierra más estrecha del continente .Sólo muy lejos en el mapa se puede encontrar unsímil geográfico con el de la cintura panameña :el del pequeño tapón de tierra por donde hoycorre el canal de Suez y que durante muchotiempo se interpuso entre el Mar Rojo y elMediterráneo, impidiendo la comunicaciónMarítima entre las grandes masas que sonAfrica, Asia y Europa .Desde 1513, año en que Núñez de Balboa des-

cubrió por Panamá el Océano Pacífico, Carlos Vcomisionó a Pascual de Andagoya para que ex1 4

plorase el istmo en busca de la ruta más apropiada para constituir una vía acuática. Aunque

en aquel entonces no se llegó a construir elcanal, de principios del siglo XVI hasta la pri-mera mitad del siglo XVIII, se trasladaron a Es-paña, utilizando la vía de Panamá, ante todo, lasriquezas extraídas de las regiones latinoameri-canas ubicadas en el litoral del Pacífico, demodo especial los metales provenientes de lasminas peruanas, con lo que los barcos se evitab

an un viaje larguísimo por el cabo de Hornos.

En el período colonial los galeones dejabanlos bienes en el Pacífico panameño, de donde setrasladaban al Atlántico en parte aprovechandoel curso del río Chagres, en parte internándosepor la selva, a lomo de mula o sobre los hombrosde los esclavos, para ser recogidos allí por otrosbarcos. En la ruta a España las islas antillanaseran escala casi obligada.

En Panamá se celebraban en aquellas épocaslas famosas ferias de Portobelo . Sevilla inter-cambiaba mercancías con las colonias y los ga-leones fondeaban impacientes en los maresnacionales listos para la transportación . Duran-te las ferias se llevaba a cabo una abiertacompraventa de esclavos que convirtió aPanamá en centro de distribución de negrospara el resto de América. Desde entonces se in-tegró al panameño indígena su vertiente afri-cana, ensanchada y renovada más adelante conlas grandes migraciones de antillanos que sedesempeñaron en los trabajos canaleros .

En el siglo XVIII la navegación por Panamá sedesplazó a la ruta del Cabo de Hornos a causa dela intensa piratería en el Caribe y de los éxitosde los comerciantes de Buenos Aires . Los comer-ciantes ubicados en el centro de Panamá y quelucraban con las actividades del tránsito deser-

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tan y se marchan a otras tierras . Pero la actividad intermarina de Panamá resurge en el sigloXIX.

A lo largo de la prolongada época colonial,Panamá, con poca población y sin una mineríade envergadura, no llegó a significarse por susriquezas propias. Los negros no llegaron a serabsorbidos en grandes plantaciones, y más biense hicieron cimarrones y rebeldes, asimilados ala práctica de una agricultura de autosubsistenc

ia. La carne y los productos alimenticios quelos pueblos del interior vendían a la zona detránsito llegaron a tener relativa importancia .La caña de azúcar, el cultivo más importante dela época colonial, a veces resultó insuficientepara el consumo local. Otros cultivos eran elmaíz, arroz, yuca y ñame .

En 1821 Panamá se independiza de España y seune a la Gran Colombia, integrada además porNueva Granada, Venezuela y Ecuador, bajo laadvocación del Libertador Simón Bolívar, pres

idente de la entidad. En 1830 Venezuela y Ecuador se separan, pero Panamá permanece unida a

Colombia durante 82 años influidos, primero,por los intereses que se ventilan en Londres, y,más tarde, en Washington .

Panamá no deja de cumplir durante este tiem-po de integración a Colombia su misión de enla-zar el comercio internacional . La forma deacarreo de mercancías a través del istmo es alprincipio igual a la empleada en la Colonia. Perocon motivo del descubrimiento de oro en Cali-fornia el sistema varía . El hallazgo orienta elcomercio mundial en una nueva dirección. Lasviejas ciudades europeas del comercio mundialson sustituidas en su importancia por NuevaYork y San Francisco,

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En el interior de Estados Unidos de Norteamérica se inicia un vasto desplazamiento

humano sobre el extenso territorio, hacia eloeste. ¿Cómo hacerlo más expedito? Entre otrosrecursos se piensa en el tránsito por la vía panameña. Ya no a lomo de mula, como en la Colonia,aunque tampoco por un canal, como desde hacetiempo se ha ideado .

Capitalistas de Estados Unidos logran la concesión y construyen un ferrocarril transísmico

por Panamá para que traslade rápidamente deuna costa a otra a bienes y personas. Para Norte-américa quien utilizando el istmo envió a losbancos che Nueva York el oro de California, la víaférrea ístmica fue un factor básico en su integra

ción nacional; para Panamá, significó el comienzo de la oprobiosa dominación norteamericana.

Las magnas obras para hacer realidad el ferrocarril transísmico concentraron por primeravez en la nación una mano de obra asalariada engran escala. Son estos trabajadores los que, la-borando en un medio inhóspito y selvático yabrasados por el ardiente sol tropical, bajo con-diciones que nada tienen que envidiarle a losobreros de la época de la revolución industrialinglesa, descritos por Marx en el Capítulo VIIIdel primer tomo de El Capital, hacen sentir lasprimeras protestas proletarias sobre el suelopatrio.

Así tenemos que la concentración obrera inicial en Panamá, propiciada para aprovechar la

ventajosa posición geográfica de la región, seprodujo en el año de 1850,14 años antes de queMarx constituyera en Londres la Asociación In-ternacional de Trabajadores o Primera Internacional. Ello ocurrió con motivo de la concesiónhecha a la empresa Panamá Rail Road Company,más cara jurídica de la Pacific Mail, para que

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construyera y explotara en el Istmo un ferrocarril transismico, que llegó a ser el quinto quese construyó en el mundo y anterior al primerferrocarril transcontinental en Norteamérica,que data de 1869 .

Con los trabajos para la construcción delferrocarril se introduce un nuevo modo funda-mental de producción en el territorio colomb

iano, se desarrollan las fuerzas productivas yse establece una relación asalariada de granmagnitud en la ruta de tránsito .

Luego, cuando se concibió que la función geo-gráfica asignada a Panamá se realizaba máscabalmente a través de un canal interoceánicoque de un ferrocarril transismico y se dispus ieron a construirlo, aparecieron nuevasconcentraciones obreras, que opacaron a lasexistentes con el ferrocarril. A partir del año1880, con motivo de las actividades para hacer enPanamá un canal francés, miles de miles de .obreros trabajan en la obra. Lo mismo ocurredesde 1904, con la construcción del canal norte-americano .

La importancia de las obras emprendidas durante la construcción del ferrocarril, del canalfrancés y del canal norteamericano, rompióabruptamente las costumbres de la aldeana Pan

amá de aquel entonces. La población, de estructura predominantemente rural y precapitalista, no pudo satisfacer al principio, sino en

grado ínfimo, las demandas de asalariados queexigían estos trabajos . El peso de las laboresefectuadas recayó sobre las espaldas de traba-jadores llegados desde distintos confines delmundo que volcaron en nuestra tierra su esfuer

zo constructivo y su grito de protesta, enlazándose históricamente con los negros cimarrones

provenientes del Africa, en la época de la con-quista española, y que en Panamá derramaron

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su sangre insurrecta .

Según Mack, la construcción del ferrocarril(1850-1855), que coincide en Panamá con la abol ición de las leyes que consagraban relacionesde producción basadas en el trabajó esclavo,llegó a reunir cerca de 7,000 obreros procedent

es de Europa, Asia y del área del Caribe.(2)Constituye lugar común afirmar que los traba-jadores que hicieron el ferrocarril se desen-volvieron en condiciones tan difíciles, consumi-dos por el trabajo, la malaria y el vómito negro,que murieron a razón de uno por cada traviesaque necesitó la vía férrea . Es mentira. El ferró-carril consumió 74,000 traviesas . La cifra que daLemaitre es de 293 muertos . (3)

Navas consigna que treinta años más tarde, en1880, cuando se verifica la segunda inmigraciónobrera, con los trabajos dirigidos por los fran-ceses para abrir un canal, llegó a haber contrat ados hasta 19,000 obreros.(4)

En la tercera ola obrera, durante las obras quellevan a cabo los norteamericanos para abrir uncanal, ante el fracasó de los franceses, y que seprolonga de 1904 a 1914, se ocupan en las mismasmas de 40,000 trabajadores . (5)

En los tres casos, la reglamentación sobre lascondiciones de prestación del trabajó quedó su-jeta al arbitrio de las empresas constructoras, yprácticamente para nada interviene la jurisdicción nacional. Se sabe que el salarió se cóm-

(2) Gerstle Mack, La Tierra Dividida, Panamá, Editorial Universitaria,1971,ler.tomo, pá g , 173 .(3) Eduardo Lemaitre, Panamá y su separación de ColombiaBogotá, Editorial Kelly, 1971, página 75.(4) Luis Navas, El Movimiento Obrero en Panamá (1880b1914)Panamá, Editorial Universitaria, 1974, página 61 .(5) Gerstle Mack, op . cit . . tomo II, pág . 305 .

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putaba a veces a destajo y a veces por día y quelas jornadas eran normalmente de doce horas .Sin embargo, muy poco se ha llegado a conocersobre las formas concretas de la organizaciónobrera de aquel entonces .

Los constructores del ferrocarril llevaron acabo importantes huelgas. Una en demanda deaumentos de salarios, otra para impedir la rebaja de salarios y en una ocasión fue descarril ado un tren en el que viajaban esquiroles y

militares, con el resultado de un número impreciso de heridos. Asimismo, los obreros hicieron

movimientos en 1895, durante la etapa de la com-pañía francesa y obligaron a ésta a elevar mode-radamente los salarios. En 1905, en el períodonorteamericano, a pesar de las medidas castrens

es adoptadas por el general George W. Davis,gobernador de la recién creada Zona del Canal,negando trabajo a los obreros que pudieran seranarquistas, trabajadores provenientes de lasAntillas escenificaron una violenta protesta porel retraso en el pago del salario . Y dos años des-pués, en 1907, dos mil trabajadores españoles selanzaron a una sangrienta huelga pidiendo au-mento de salarios .

Esta poderosa clase obrera que . surgió en elescenario panameño prematuramente y sin te-ner como su contrapartida una burguesía nacio-nal con perfil preciso, estaba condenada a desap arecer. No estaba integrada en un proceso

que producía y reproducía indefinidamente elmismo régimen de capital . Ocupada en laboresde construcción, ya de un ferrocarril o de uncanal, declinó en cuanto llegaron a su términolas obras que le fueron encomendadas. Miles delos trabajadores contratados para hacer realidad la función de tránsito asignada a Panamá

regresaron a sus lugares de origen o fueron des-tinados a otras partes como trabajadores migra

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torios internacionalizados. De los que quedaron, unos se reabsorbieron en el funcionab

miento y mantenimiento de las instalacionesconcluidas; otros, involucionaron hacia la vidacampesina y el cultivo de una parcela de tierra .

Con estos primitivos trabajadores, particular-mente en lo referente a los trabajadores europ

eos, se trasladó a Panamá la semilla de la consciencia clasista y del anarcosindicalismo, la

doctrina revolucionaria de la época. La semillafructicó en el espíritu de los movimientos pioner

os de los asalariados panameños en las primeras décadas del siglo XX, al tiempo que alertó en

su contra, desde temprano, a las fuerzas reaccio-narias .

22

4Los trabajadores en elcuasi protectorado .Aparece la oligarquía

En el año de 1903, recién iniciado el siglo XX,Panamá se separa de Colombia, bajo la ambi-ciosa acometida de Teodoro Roosevelt. En estaépoca el mundo ha empezado a regirse por lasasociaciones monopólicas que controlan losmercados mundiales . Apenas el imperialismologra convertir al Caribe en un mar yanqui, selanza a la tarea de hacer realidad un canal interoceánico para constituirse en "el portero de losmares" .

Al fracasar en sus gestiones cerca de Colombia, promueve la separación panameña. Nace unestado nacional sui géneris, un cuasi protectorado, pero Estados Unidos de Norteamérica aseg ura la construcción del canal anhelado, el estab

lecimiento de bases militares y la conformación de un enclave colonial : la zona canalera .

23

El enclave colonial de la zona canalera es simultáneo al enclave agrícola y neocolonial queforma en Panamá la United Fruit Company . Osea que, la República de Panamá irrumpe en elnuevo siglo lastrada por dos enclaves.Según nos informa Ricord, al constituirse la

Republica ya Colombia había hecho concesiones, años antes, para la explotación del banano

panameño destinado a la exportación. Pero lasnuevas autoridades convalidaron lo hecho porColombia e incluso permitieron, por medio deleyes inauditas, que la United Fruit explotara elbanano en forma de enclave, con facultades paratener un ferrocarril y un puerto propios . (6)

El enclave bananero determinó la concentración de una gran cantidad de obreros agrícolas,

los que no pudieron realmente constituir unmovimiento, ni organizarse sindicalmente, sinomucho tiempo después, en virtud de la terriblevigilancia y represión que ejercía la company.

Ambos enclaves no tuvieron de momento nin-guna irradiación en el contorno económico soc

ial ni desencadenaron fuerzas que propiciarancambios en otras áreas de la estructura nacio-nal .

En el resto del país, durante los años que si-guieron a la separación de Colombia, había unbajísimo nivel de desarrollo de las fuerzas pro-ductivas. El capital comercial, "forma antedi-luviana del capital', como lo llama Marx (7) seenseñoreaba en Panamá, en un medio atrasado,siendo incapaz, por sí mismo, de impulsar la

(6) Dr. Humberto Ricord, Una Batalla contra el ColonialismoPanamá, Editorial Universitaria .1974, págs.11 y siguientes.(7) Carlos Marx, El Capital, Fondo de Cultura Económica deMéxico, 1972, tomo III, capitulo XXXVI, pág . 555 .

2 4

transición hacia el modo de producción capita

listaLo! propósitos de acumulación y enriquecimiento de los comerciantes panameños se cifra-

ron en la intermediación con el capital extranjero y en el acaparamiento de tierras y la construcc ión de viviendas, es decir, adquirieron el

comportamiento de una auténtica oligarquía .

Con la fundación de la República de Panamá,los comerciantes, que habían empezado a desen-volverse en el centro del país desde el surgi-miento del mercado mundial, se afianzan comoel grupo hegemónico nacional . En el pasado sehablan conducido como un corro regional, sinverdadero ámbito nacional . El leve y quebradizosentimiento nacionalista que apareció en ellossólo cobijaba sus deleznables intereses y no fuesuficiente para que actuaran basados en sí mis-mos dispuestos a ser el núcleo de un estadonacional independiente, superando el síndromeque los inferiorizaba. Pero realizada la separ ación panameña de Colombia, en condiciones

tan desventajosas para el país, se dispusieron asacar provecho . Desde el principio discutieroncon el imperialismo los aspectos que los perjud

icaban del Tratado de 1903, que habían firmado, buscando ampliar la pequeña participación

de socios que les fue concedida en la explotación de la función geográfica del Istmo, y, en lo

interno, procedieron con voracidad suma. Setransmutan definitivamente en una oligarquíaal hacer de sus fuentes principales de capita-lización: la adjudicación de baldíos, el acapar amiento de tierras y la edificación en gran

escala de una vivienda improvisada de maderapara alquilar a los obreros al servicio de la cons

trucción del canal norteamericano. El vínculode negocios que los va agrupando se refuerzacon el vínculo de la sangre a través de los matrimonios entre sí .

25

Los asalariados de los establecimientoscomerciales que van surgiendo no se expresanvisible y directamente conforme a sus intereses .En medio de todo se mantenía un archipiélagode regiones inconexas . Los obreros agrícolas delenclave frutero están aislados y próximos a lafrontera con Costa Rica, Los trabajadores delenclave colonial zoneíta, por su parte, en dondese daba la mayor concentración de fuerza detrabajo , se dedican en forma exclusiva, al fina-lizara primera década del nuevo siglo, a trab ajar febrilmente para concluir las obras del

canal, lográndolo en 1914, a principios de laPrimera Guerra Mundial .

Conforme a datos aportados por Ricord, lostrabajadores norteamericanos que laboran enel canal, favorecidos por un sistema racista Ydiscriminatorio que viola el principio de "a trab ajo igual, salario igual", se organizan en 1910en el Panama Canal Metal Trades Council. Lostrabajadores antillanos y negros, a su vez, queconstituían el 75 por ciento de los obreros contratados, se refugiaron en logias, iglesias y sociedades mutuales como la Colour Progresive Asso ciation, y la West Indian Protective League

(1910), que tenía su órgano de prensa, TheWorkman. (8)

Las primitivas asociaciones de trabajadoresen Panamá, fuera del enclave zoneíta y del enc lave bananero, también tuvieron un carácterdefinitivamente mutualista . Los obreros necesitados se ayudaban los unos a los otros. La mutual

se encargaba de la asistencia médica en casode enfermedad, constituía fondos para casos deaccidentes, y cubría los gastos del sepelio, y unaayuda para la viuda y los huérfanos en caso de

(8) Dr. Humberto Ricord . Lecciones de Derecho Laboral Pana-meño, edición mimeografiada, Panamá, 1975, pág. 106.2 6

muerte del trabajador. Conforme a apuntes ela-borados por la Federación Sindical de Traba-jadores de Panamá entre las primeras asociacio-nes figura la Asociación de Panaderos y Dulcebros, fundada en 1906 y la Unión de Choferes,fundada en 1912 . A estas asociaciones siguieron,

entre otras, la Unión de Carpinteros la Sociedad de Tipógrafos y la Unión de Trabajadoresdel Muelle de las Ramplas. En 1916 hubo en laciudad de Panamá una huelga de conductores detranvías . (9)

En 1919 se funda la Sociedad Hijos del Tra-bajo, que preside Nicolás E. Casís V .

En estos tiempos las relaciones laborales eranreguladas como un "arrendamiento de servic

ios" y el Código Administrativo facultaba a lapolicía, en su artículo 1069, para que, ante una"huelga abusiva", procediera como si se tratarade "sedición, motín o asonada" .

La coyunda fabricada con el tratado suscritoentre Estados Unidos y Panamá a raíz de la sepa-ración fue brutal. No sólo el imperialismo cons-truyó su canal, instaló sus bases y se considerócon derechos sobre una zona territorial

. Adem ás, se concedieron derechos a Norteaméricapara usar u ocupar posteriormente otras tierrasy aguas que a su juicio le parecieran necesariaspara el mejor funcionamiento del canal

. Asímis mo, el convenio se hizo a perpetuidad. Por élEstados Unidos garantiza la independencia dePanamá y puede intervenir en el Istmo "para elmantenimiento del orden público" en caso deque fuera alterado .

Para refrendar el derecho de intervención es .

19) FSTRP, Historia del Movimiento Obrero en Panamá, folletoimpreso en mimeógrafo, Panamá, 1977, pág, 3 .

2 7

Unidostatuído en el Tratado de 1903, los "próceres"panameños consagran en el artículo 136 de la

idos mérica podrá intervenir, estabados ncualquier punto de la República de Panamá,para restablecer la paz pública y el orden constitucional, si hubiera sido turbado, en el caso deque por virtud de tratado público aquella naciónasumiere, o hubiese asumido, la obligación degarantizar la independencia y soberanía de laRepública" . (10)Por otro lado, el primer gobierno de la nueva

República, presidido por Manuel Amador Guerrero, lleva a cabo con Estados Unidos, en junio

de 1904, un convenio por el cual se le otorgacurso legal en el país al dólar norteamericano,es decir, se incorpora directamente a Panamá alsistema monetario del imperialismo, situaciónque prevalece hasta el presente .

La Constitución panameña de 1904 manifiesta,en su artículo 29, la preocupación capitalista dedar libertad a las personas "para ejercer cualq uier oficio u ocupación honesta".(11)Pero, enesta misma época, aparecen por primera vez,establecidos en forma de disposiciones, los pre-juicios ideológicos del Estado recién consti-tuido. El artículo 5 de la Ley 72 de 11 de junio de1904, sobre Inmigración en General, prohibe lainmigración de anarquistas .(12)Los gobiernos iniciales de la República son

conservadores hasta el triunfo definitivo del

(10) Documentos Fundamentales para la Historia de la NaciónPanameña. "Constitución de 1904 de la República de Pana-má", Panamá, Edición de la Junta Nacional del Cincuentenario, 1953, pág

. 15.9 .(11) Op . Cit . . pág . 129 .(12) Ver Navas . op . cit . . pág . 73 .

28

liberalismo en 1912. La oligarquía que apareceal realizarse la separación no tiene una sola ex-presión política, sino que milita indistintamen-te con liberales y conservadores, aunque loscómplices panameños del imperialismo en elTratado de 1903 fueron de filiación conserva-dora. En 1912 llega al solio presidencial eldoctor Belisario Porras (período de gobierno :1912-1924). A partir del ascenso de Porras, el con-servatismo queda liquidado históricamentecomo corriente política en el país . En lo subse-cuente se disputarán el poder distintas faccio-nes liberales . El cambio político no fue medularporque habiendo tenido los liberales un ideariodiferenciado del de los conservadores, en cier-tas coyunturas, es poleados por necesidadesprácticas, los liberales se condujeron como con-servadores y los conservadores como liberales .

En los primeros años de la República, el ejér-cito norteamericano supervisó directamente laselecciones de 1908,1912 y 1918 y, en virtud de lasautorizaciones concedidas en el Tratado de 1903y en el artículo 136 de la Constitución Nacional,interviene en otras oportunidades . En 1918, des-pués de supervisar las elecciones, el ejércitoinvade la provincia de Chiriquí, y se queda allídos años, prote giendo los latifundios del nor-teamericano William Gerald Chase. En el mismoaño de 1918 se sucede otra intervención cuandouna enorme manifestación popular ataja losPropósitos imperialistas de anexarse la isla de

para fortificarla y apedrea al generalísimo norteamericano John J . Pershing, héroe dela Primera Guerra Mundial, durante su visita aPanamá. Otro tanto ocurre en 1912, a raíz de laguerra tico panameña. Con las protestas popula-res, en medio de las humillaciones sufridas, elespíritu nacional se desarrolla .

La primera ley del trabajo en Panamá fue la

29

Ley 6 del 29 de enero de 1914, aprobada bajo laadministración del doctor Belisario Porras, enla que se estableció la jornada de ocho horasdiarias para obreros y empleados del comercio .En Estados Unidos se había promulgado desde1906 una ley referente a las ocho horas, pero erainaplicable a los trabajadores extranjeros en elcanal . (13)

Las intenciones del doctor Porras de vincularel Partido Liberal con los obreros que surgían,fueron evidentes cuando patrocinó la fundaciónde la Federación Obrera de la República en1921, la primera coalición de organizaciones detrabajadores del país, "amarilla" por su orien-tación, pero en la que militaron al principioincluso los dirigentes más progresistas de laépoca.

En febrero de 1920, un año antes de la funda-ción de la Federación Obrera, hubo en la Zonadel Canal una importante huelga por aumentode salarios, dirigida por el maestro barbadienseWilliam Preston Stoute, que fue reprimida porlas autoridades norteamericanas y aislada de lasolidaridad de los trabajadores panameños conel pretexto de que era un movimiento de extran-jeros,

Las primeras actividades de la FederaciónObrera, que logró en 1923 la creación de unaOficina del Trabajo adscrita a la Secretaría deFomento y Obras Públicas, se vieron reforzadaspronto por el apoyo exterior.

En 1881 se había constituido en Estados Unidos la Federación de Trades Unions que en 1886se convirtió en la Federación Norteamericana

(13) Ver Gerstle Mack, La Tierra Dividida, tomo II, Panamá,Editorial Universitaria, 1971, pág. 302,30

;i ¡¡de, indieai noneamermano . amiga pe nal del Preelderne Wnodron wilson .uJUomperc,quüneJereidinfluencia ohreInprin~emenalieid ..denlrmrnspaname-

io ., en la epoca en que iniciaba u prolongada actividad gremial .

3 1

del Trabajo (AFL), que representaba a los oficios y que tenía poco interés en la organizaciónsindical por industrias. Esta central sindical,afiliada a la Federación Internacional de Amsterdam, fundada en 1913, estuvo dirigida porSamuel Gompers, de 1886 a 1924 . (14)

Correspondió a la AFL, partidaria de la luchapor reivindicaciones económicas de los obrerospero adversaria de los pronunciamientos polí-ticos y de las ideas socialistas, patrocinar, juntocon la CROM mexicana, dirigida por Luis N .Morones, la iniciativa de formación de la pri-mera central sindical de este continente, laCOPA, la cual se constituyó en Laredo, en 1918 .0)

Al cuarto congreso de la COPA, reunido enMéxico, asistió ya un representante de la Fede-ración Obrera de la República de Panamá . (16)Más tarde, en su ocaso, en 1924, Gompers visitóPanamá fue recibido en audiencia especial porel presiente Porras y todo su gabinete .

Pero las más caudalosas agitaciones obrerasdel país estallaron desvinculadas completa-mente de los asalariados liberales y de suscorreligionarios internacionales . Ellas se pre-sentan en 1925 y 1932 bajo la modalidad de movi-mientos inquilinarios y contaron con dirigentesmás radicales. (* )

(14) Ver Rubens iscaro, Historia del Movimiento Sindical Inter-nacional, México, Ediciones de Cultura Popular, 1976, págs .129 y 130 .(15) Víctor Alba, Historia del movimiento Obrero en AméricaLatina, México, Libreros mexicanos unidos, 1964, págs . 459 ysiguientes.(16) Victor Alba, op . cit., pág. 461 .(*) Para los estudiosos de las luchas obreras es sabido queeste tipo de movimientos se presentó también en otros paf-

32

Estas dos grandes tempestades sociales fue-ron estimuladas, en la esfera internacional, porla Revolución Mexicana y por las profundasesperanzas que concitó la revolución bolchevi-que, nacida de la fragua de la primera guerramundial interimperialista de 1914-1918 . En elmovimiento de 1932 influyeron adicionalmentelas luchas del general Augusto César Sandino enNicaragua .

En lo interior, las causas primordiales de losestallidos obedecieron a razones muy claras . En1925, sobre la pobreza secular del país, persistíael incremento de la desocupación motivada porla terminación de las obras del canal y resultabasumamente gravosa para los trabajadores laexistencia de una vivienda estrecha, incómoda ycara. Los ingredientes del componente huel-hguístico de 1932 son parecidos, pero a ellosabría que añadir los estragos que provocó en

Panamá el "crash" mundial de aquellas fechas .En 1925, el motor ideológico del movimiento fueanarquista; en 1932, en cambio, la orientaciónfue marxista .

ses latinoamericanos. En la capital mexicana, por ejemplo,hubo huelgas por el no pago de rentas desde 1922. En elpuerto de Veracruz, las huelgas inquilinarias dirigidas porel sastre anarquista Herón Proal revistieron especial viru

lencia. En ellas participaron heroicamente las "hermanasprostitutas", a quienes se había impuesto la obligación depagar por sus cuartos una renta más alta que las demáspersonas, anticipándose militantemente a las falenas queayudaron más tarde al general Sandino en Nicaragua a obte-ner las primeras armas con que se enfrentó al invasor norte-americano. (N. del A .)

33

5Las dos grandes huelgasinquilinariasX1925-1932)En el año de 1924 se constituyó el SindicatoGeneral de Trabajadores, el cual llegó a tenermiles de miembros inscritos y cotizantes . Suslíderes principales fueron anarcosindicalistas,opuestos a la creación de partidos políticos ypartidarios de la acción directa . Entre los ex-tranjeros que auspiciaron su fundación estabanlos hermanos José María y Martín Blásquez dePedro, españoles anarquistas ; Sara Gratz, polaca, anarquista ; los peruanos desterrados desrégimen dictatorial de Leguía, Esteban M

. Pav letich, que más tarde se incorporó a la guerrillasandinista

; Luis Francisco Bustamante y Nicolás Terreros, socialistas, yes colombiano CarlosManuel Céspedes, también socialista . Entre lospanameños era numeroso y variado ideológica-menteDiógenes de la Rosa, Elíseo Echevez, EugenioCossani, Samuel Casís, Rogelio Cortés, ManuelL. Rodríguez y Julia Palau de Gómez .

35

Una vez constituido el Sindicato General deTrabajadores, formaron dentro de él un departamento especial

: la Liga de Inquilinos y Subsistencias, que tenía a su cargo la lucha por resol-

ver el problema de la vivienda . Correspondió aLa Liga, antes de la existencia de los partidosproletarios en Panamá, dirigir la huelgainquilinaria de 1925, haciendo las veces, almismo tiempo, de central obrera y de organiza-ción política .

El planteamiento de huelga inquilinaria permitió vertebrar, en un solo movimiento, bajo laconsigna de "no pago de alquileres", a los obre-ros ocupados, a los obreros desocupados y alpueblo en general de las ciudades de Panamá yColón .

E movimiento se inició a raíz de la promulgación de la Ley 29 de 1925 que disponía gravar

a propiedad urbana en un cinco por mil sobre elvalor catastral de la propiedad en vez del im-puesto del dos por ciento sobre la renta brutaprobable anual . (17)

Para hacer recaer el peso del nuevo impuestosobre la masa de inquilinos pobres, los casaten ientes elevaron el precio del alquiler de sus

barracones de madera construidos fundamen-talmente desde el auge de trabajo propiciadopor la construcción del canal . La respuestaobrera al aumento de los alquileres fue la huel-ga de "no pago" .

El movimiento llegó a paralizar las dos ciu-dades terminales del canal, Panamá y Colón, y,alarmado el Presidente de aquel entonces, Ro-dolfo Chiari, pidió la intervención estaduni-

(17) Ver Alexander Cuevas, El movimient o Inquilinario de1925. Ediciones de la Revista Tareas, 1973, pág . 20,36

dense. Las tropas norteamericanas entraron aPanamá y sofocaron la lucha. Con esta huelgasurgen los primeros mártires obreros de la etaparepublicana. Ellos son Marciano Mirones, Ferd ín Jaén, Lorenzo Brown y Emilio Olivardía,muertos a bala por la represión panameña, yDamián Cabrera y Julio Camarena, asesinado abayonetazos por el ejército yanqui . En cuantoa los extranjeros participantes, todos fuerondesterrados .

El 30 de octubre de ese año, Horacio Alfaro,secretario de Relaciones Exteriores y primerpresidente fundador de la Cámara de Comercioe Industrias de Panamá, expresó al gobernadorde la Zona del Canal su "agradecimiento por lacooperación eficaz prestada por las fuerzas mi-litares de los Estados Unidos para mantener elorden en la ciudad de Panamá, durante los dis-turbios ocurridos en el presente mes" . (18)

Del movimiento inquilinario de 1925 se pasa alde 1932. La crepitación social de esta última fe-cha se sirve de la experiencia de los cuadros quepromovió la fiesta del 25 . Uno de los más promi-nentes, el dirigente obrero panameño, EliseoEchevez, concurre a uno de los congresos delProfintern o Internacional Sindical Roja, constituida en Moscú en el año de 1921, ante la inoper ancia de la Federación Sindical de Amsterdam

y ante la necesidad de organizar firmemente alos trabajadores en sindicatos de industria y noen simples grupos.

En 1926, la agitación obrera, secuela de la de1925, tiene el mérito de presionar para que elproyecto de convención negociado con Estados

(18) Citado por Ricaurte Soler, en Panamá: Nación y Oligar-quía (1925-1975), Panamá, Ediciones de la revista Tareas .

pág. 33 .

37

Unidos, conocido con el nombre de Alfaro Kellog, y que no resolvía sino agravaba la situación

de protectorado en que se encontraba el paísdesde 1903, sea rechazado por la Asamblea Na-cional. La responsabilidad de esta lucha descan-só de nueva cuenta sobre el Sindicato Generalde Trabajadores y también sobre Acción Comu-nal, grupo de la pequeña burguesía, fundado en1923, que empezaba a cuestionar el monopoliodel poner político de la oligarquía .

Dos acontecimientos cardinales para la orientación del movimiento inquilinario de 1932 sonla fundación, el 4 de abril de 1930, del PartidoComunista, y, en septiembre del mismo año, aun-que

Socialista. En el caso de Panamá, después,dife-rencia

del

de otros países, el Partido Comunista nosalió de una escisión del Partido Socialista . Entérminos estrictos, lo antecede . Algunos de losiniciadores del movimiento comunista en Pana-má militaron previamente en dos organizacio-nes de vida efímera: la Liga Antiimperialista,concebida como una entidad de frente único, y elPartido Laborista, que envió a Eugenio Cossaniya Jacinto Chacón como sus representantes a laPrimera Conferencia Comunista Latinoameri-cana, celebrada en Buenos Aires, en junio de1929. Pero la forja principal de los primeros mi-litantes comunistas fue el movimiento inquilin ario del 25. A juicio de Rubén Darío Souza,

actual secretario general del Partido del Pueblode Panamá (Comunista), el Partido Socialistasurgió en Panamá "para evitar que las masas seencauzaran hacia el Partido Comunista", (19)

Los fundadores principales del comunismo enPanamá fueron Domingo H. Turner, Cristóbal

(19) Rubén Darío Souza, Por el camino de la Liberación Nacio nal, Panamá, abril de 1975, pág . 4 .

38

Segundo, Eugenio Cossani, Eduardo Guevara,Eliseo Echevez, Jorge Brower y Jacinto Chacón,y se escogió al primero de los citados como se-cretario general del partido que se formó . Lossocialistas, por su parte, seleccionaron como sudirigente máximo al doctor Demetrio Porras. Sufigura de mayor militancia fue José Brower, y alo largo del tiempo destacó Diógenes de la Rosacomo su cerebro más lúcido .

Esta es la época en que en Panamá se empiezaa hablar por primera vez y con gran entusiasmodel marxismo como la doctrina del proletariado,pero las inquietudes están limitadas por las es-casas y deficientes publicaciones que llegan alpaís .

El Partido Comunista, desde su fundación, tra-tó de sustentarse en la clase obrera, y siguió conun gran fervor, al pie de la letra, la tesis sectariade "clase contra clase" erradicada definitiva-mente de los partidos latinoamericanos con elVII Congreso de la Internacional Comunista en1935 .

El Partido Socialista, en cambio, estableció ensu programa original otro objetivo : "realizaruna revolución agraria pequeño burguesa ycampesina y no una revolución proletaria sinproletarios" . (20)

Sin embargo, el carácter de diputado entoncesdel doctor Demetrio Porras, en una acción quegiró alrededor de la necesidad de elaborar unaley justa para los inquilinos, le dio una impor

tante participación a los primeros simpatizantessocialistas, alado de los comunistas, en el movi-miento de 1932.

(20) Ricaurte Soler, op . cit., pág. 37.

3 9

La gran crisis mundial causó estragos en Pana-má. El Estado panameño, aún inexperto, llegó acarecer de fondos incluso para pagar a sus em-pleados públicos. Estableció el sistema de pa-gar parte de los sueldos en forma de bonos . Ladesocupación creció a su tope . La capacidad delos asalariados de cubrir sus compromisos conlos caseros era mínima. Entonces, desespera-dos, reorganizaron la Liga de Inquilinos y Sub-sistencias, con comités en cada barrio de la capi-tal. El 2 de julio de 1932 se dirigieron a la Asocia-ción de Propietarios y pidieron una rebaja delcanon de arrendamiento de las viviendas en un

50% y la suspensión de los lanzamientos y desahucios en contra de los enfermos y desocupados,fijando un plazo para que se accediera a suspeticiones. Al no aceptarse sus solicitudes, el 30de agosto declararon la "huelga de no pago" .Juntas, reuniones conciliatorias presididas porel gobierno, etc. Finalmente el gobierno acordósuspender las garantías individuales para que-brar la huelga al tiempo que prohibió lanzar alos enfermos y desocupados hasta que se reunie-ra la Asamblea Nacional en septiembre y pu-diera legislar al respecto .

Ante la represión, los huelguistas pusieron enpráctica la resistencia pasiva, pero durante lasreuniones de la Asamblea Nacional hubo gran-des manifestaciones. Los diputados progresis

tas elaboraron algunos proyectos de ley favorables a los inquilinos, mas el saldo fue a favor de

los casatenientes . Los diputados reaccionariosconstituyeron mayoría y reiteraron la suspen-sión de las garantías individuales y aprobaronun proyecto muy distinto del que deseaban losinquilinos. Por último, se promulgó la Ley Nú-mero 18 de 15 de noviembre de 1932 que, lejos deestablecer una rebaja de los alquileres, estatuyóuna moratoria en el pago de una parte del canonde arrendamiento y estableció una Junta Tripar-40

tita de Inquilinato .

Este segundo movimiento inquilinario se salvó de las violentas campañas calumniosas queen tales casos desatan las empresas periodís-ticas porque junto con él, como actividad com-plementaria, se llevó a cabo una original huelgade voceadores de periódicos, dirigida por PabloCordero, entonces secretario general de la LigaJuvenil Comunista y por el incansable activistasindical Nazario Crespo. Los voceadores además de plantear reivindicaciones relacionadascon el aumento en la cantidad que se les dabapor cada ejemplar de periódico vendido, exigie-ron a la prensa, triunfando en su demanda, queno publicara nada contra el movimiento inquilin ario.

El movimiento inquilinario del 32 transcurriódespués del primer levantamiento armado en lahistoria de la República, a cargo de Acción Co-munal, el 2 de enero de 1931 . Las autoridadesgubernamentales emergidas de la rebelióncomunalista no tenían antipatía a los inquilinos,Pero ante las presiones de que fueron objeto sedefinieron a favor de la oligarquía, quien consi-deró que lo que estaba en juego era el respeto ala propiedad privada, esencia misma del régi-men capitalista . A lo largo de esta ,jornada, elpueblo de la ciudad de Panamá satisfizo su nece-sidad de alimentos en la "olla común" queimplantaron los organizadores del Inquilinatoen cada barriada popular y nutrieron su espíritucantando por las calles La Internacional .

En Panamá ocurrió en ese tiempo lo contrariodel esquema marxista típico de las clases "en sí"Y "para sí'. Había en el país una fuerte concien-cia y el movimiento inquilinario actuaba "parasí", como escuela de socialismo, aunque su huel-ga careció de tintes insurreccionales, pero la

41

clase obrera industrial, sin haberse configuradoaún, no existía siquiera "en sí" . Se había creado

una conciencia social elemental y precoz montada sobre un cuerpo social embrionario .

Como asunto interesante debe agregarse quelos inquilinos lograron, para evitar represaliasen contra de sus dirigentes, que en la Ley de 15de noviembre de 1932 se prohibiera "negar al-quiler alas personas so pretexto detener niñosen su familia, por razón de su color, raza o credopolítico o religioso". (21)

La etapa que sigue del movimiento obrero pa-nameño es la del sindicalismo legal, que apare-ce al concluir la Segunda Guerra Mundial, peromucha agua habría de correr bajo los puentespara llegar allí .

(21) Armando Muñoz Pinzón, La Huelga Inquilinaria de 1932,Pmá . Editorial Universitaria, 1974,pág.70.,43

6Sindicalismo legal,Constitución de 1946

El movimiento sindical panameño estructuradoen una forma moderna, reconocido por el poderpúblico y susceptible de contar con personeríajurídica, se inaugura con el Código de Trabajode 1948, amamantado por la Constitución de1946.

Lenin, en su obra ¿Qué hacer?, sostiene que laclase obrera normalmente no trasciende los lí-mites de la conciencia sindical y que la concien-cia socialista le llega casi siempre desde afuera,

adeduda que Lenin tiene razón .Está fue-

ra

antes de que los trabajadores logren laconciencia socialista, por medios que se originan fuera de sí mismos, y que luchen por consti-tuir un sistema sin explotadores, es necesarioque previamente tengan muy presente que forman una entidad aparte y enfrentada a la bur-

45

individuossocial, sólo cuentan con fuerza de trabajo

.

En la época del mutualismo panameño existe,entre quienes se unen para ayudarse, la ideasencilla de que los trabajadores forman un cuer-po social con intereses específicos. Durante lashuelgas inquilinarias hay inclusive una captación política popular por encima de la baseeconómica, cuya continuidad rompió la represión que siguió . Pero en esta época, que puedellamarse de Sindicalismo Lega los obreros rec onstatan, dado el reconocimiento que hace el

Estado en los términos de las leyes promulga-das, su identidad y los derechos que tienen aplantear luchas colectivas para conseguir mejo-res condiciones de venta de su fuerza de trabajo .

En Panamá, dicho de otro modo, la identidadproletaria

delola actitud en

s obreros (paso inicial aunque dis-tante aún de la voluntad de crear un orden socialnuevo en el que se reorganice la sociedad racio-nalmente mediante el control socialista de laproducción), fue facilitada e incrementada porla legislación obrera de 1948, que reconoció elderecho de los trabajadores a formar sindicatos .

Para que se iniciara esta etapa de las luchasobreras fue necesario que el movimiento se en-sanchara y tuviera un peso determinado quepresionase en el sentido de una legislación a sufavor y que, además, aparecieran adecuadascondiciones políticas nacionales e internacio-nales. Hubo un largo trecho que recorrer parallegar de las dos grandes huelgas inquilinariasal primer código panameño del trabajo .

En 1936, ha ,jo el gobierno en Estados Unidos deFranklin Delano Roosevelt y, en Panamá, deldoctor Harmodio Arias Madrid, se modificó el

46

Tratado de 1903 . El sistema militar de la víainteroceánica, el enclave colonial y la administra-

ción extranjera del canal se mantuvieron . Encambio se eliminaron del convenio original lareferencia a la garantía de Norteamérica en elmantenimiento de la independencia de Panamáy el derecho de aquélla a intervenir en el paíscuando se encontrara alterado el orden público .

Asimismo, se declaró cancelada la obligaciónde Panamá, contraída a perpetuidad, de cedernuevas tierras, para los fines del canal, si así lodemandaba Estados Unidos . En este mismo añode 1936 el mundo entró en guerra . La segundaconflagración mundial empezó en España y pocodespués abarcó a todo el orbe. Con el ataquejaponés a Pearl Harbor en 1941, fue clara lavulnerabilidad del canal ante la eventualidadde una acción del Mikado . Los trabajos que sellevaron a cabo en Panamá durante los años deconflicto, para construir un tercer juego de es-clusas y reforzar las defensas del canal, con-centraron una fuerza de trabajo tan grande en lanación más de 40,000 obreros, que sólo tieneparalelo con lo ocurrido durante la etapa de laconstrucción de la vía interoceánica . La diferen-cia consistió en que, a pesar de que si bien enesta oportunidad se importaron muchos obre-ros, como la vez anterior, por otro lado, miles ymiles de panameños también se integraron a lasnuevas oras. En los años de la guerra, los obre-ros panameños y otros latinoamericanos que la-boran en la Zona del Canal resienten el tratodiscriminatorio en su contra . Cada vez que tie-nen oportunidad, protestan enérgicamente con-tra la discriminación en favor de los trabajado-res norteamericanos y que se traduce en elincumplimiento del principio de "a trabajoigual, salario igual". Dirigentes panameños co-munistas tratan de lograr la solidaridad delresto del proletariado para estas protestas . Pero

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la coordinación es muy difícil puesto que Pana-má no tiene jurisdicción en el ámbito zoneíta. DeEstados Unidos llegan en 1948 los dirigentes dela CIO, Joseph Sachs y Max Brodaky, para organizar a los trabajadores discriminados, pero sonperseguidos por las autoridades zoneítas y elultimo es expulsado del país. Sólo después quese eliminan de la CIO, en 1949, en el Congresode Cleveland, a sus diez sindicatos industrialesmás combativos, que agrupan a un millón demiembros, y que se consuma la fusión reaccio-naria de la AFL-CIO, sellada en 1955, es que sepermite alampparode etacolor" enlosllama-os Local 900 y Local 907.

El mal llamado régimen populista que se ins-taura en Panamá en el año de 1940 jefaturadopor el doctor Arnulfo Arias, para nada ayuda alaorganización obrera. Los arnulfistas hacen supropia

a136 deConstitución y eliminan de ella el artí-

p Magna de 1903, que autori-zaba la intervención norteamericana . Ponen atono los postulados constitucionales con lasmodificaciones que el Tratado de 1936 introdujoal Tratado de 1903 . Asimismo, buscando una am-plia base de sustentación política en la pequeñaburguesía, nacionalizan el comercio al por me-nor, hasta entonces en manos de los chinos, y loponen en manos de panameños. Pero son indife-rentes por completo a la tarea de estimular laorganización de la clase asalariada .

No sólo hubo durante la época de la guerrauna gran población laboral en la zona canalera,sino que durante este período e inclusive unpoco antes, se manifestó cierto desarrollo eco-nómico en el resto de la nación, que inició elbrote de una burguesía industrial incipiente,con características distintas de la oligarquíahistórica que se afianzó a raíz de que Panamá y

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Colombia se separaron . Estos años cubren en elpaís un período de inversiones panameños enmuebles, producción azucarera, cemento, cerve-za, calzado, etc ., en el que se acrecentó la fuerzade trabajo .

La postguerra esperanzó a la humanidad . Enla mente de los pueblos colonizados estabanpresentes, hasta que el discurso de WinstonChurchill en Fulton, Arizona, lanzando la "guerra fría", abatió estas esperanzas, las promesasdel período bélico antifascista . La Carta delAtlántico, Teherán, los discursos de FranklinDelano Roosevelt, habían hecho surgir la fe enmillones de seres humanos .

Por otro lado, la Confederación de Trabajado-res de América Latina (CTAL), fondada en Méxi-co desde el año de 1938, ayudó efectivamente apropiciar en Panamá, como lo hizo en otros paí-ses, la vigencia de una legislación laboral y laformación de centrales sindicales de nuevo tipo .A pesar de la contemporización de la CTAL en elperíodo bélico con las tiranías latinoamericanas, en el propósito de atraerlas a la lucha globalcontra la amenaza nazifascista, esta etapa deidilio acostumbró a los patronos y a los gobiernos del subcontinente a aceptar como rasgo nor-mal de la sociedad el funcionamiento de lossindicatos . (22)

C22) Antonio García Moreno afirma que bajo los auspicios deTAL se formaron en América Latina las centrales sindica-

les si ¡entes: Confederación de Trabajadores de Nicara-gua, Federación Sindical de Trabajadores de Panamá, Con-federación de Trabajadores de Guatemala, Confederaciónde Traba' adores del Ecuador, Confederación de Trabaja-dores del Perú, Unión General de Trabajadores delUruguay, Confederación de Trabajadores del Brasil y Confederación de Trabajadores de Venezuela. (AGM, en revista

de El Gallo lustrado, "Importancia e influencia de la CTAL yde la FSM", México, 27 de abril de 1980, pág . 5).

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La atmósfera de libertades en los años de laguerra y el período inmediatamente siguiente,debido en buena parte a que EU y la URSS estaban en el mismo campo militar, además de darpaso a la promulgación de la legislación obrerapermite que un nuevo partido político, el FrentePatriótico, surgido luego de la realización delPrimer Congreso Nacional de la Juventud, cele-brado en febrero de 1945, entre a disputarle elpoder a los partidos tradicionales y al arnul

fismo que se constituyan organizaciones estudiantiles y de maestros y profesores que robus-

tecen las luchas populares .

El historiador César de León se refiere a esteperíodo en los términos siguientes : "El clima delibertades democráticas que se produjo enPanamá de 1941 a 1946 permitió la expresiónenérgica y pprolongada de los sectores progresistas y revolucionarios . El movimiento popularcobró nuevo vigor, y aparecieron organizacionesgremiales, sindicales y estudiantiles que . amplían y profundizan la lucha contra la obgarquia. Citemos a título de ejemplos, los siguientes

acontecimientos: aparición de la Federación deEstudiantes de Panamá (FEP), fundación de laFederación Sindical de Trabajadores de laRepública de Panamá, estructuración de la Aso-ciación de Profesores, del Magisterio Panameñounido, etcétera" . (23)

No es sino hasta la Constituyente encargadade redactar la Carta Magna de 1946 cuando se daforma a la idea de sentar las bases legales paraorganizar el movimiento obrero. Correspondió alos diputados del Partido Liberal Renovador,del Partido Liberal Demócrata y del Partido So-

(23) César de León, Casa de las Amdricas, "La Gran Revoluciónde Octubre y Panamá", La Habana, número 105, noviembre-diciembre de 1977, pág. 23 .

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cialista (apoyados por el Partido Comunista, quepara entonces habla cambiado su nombre por elde Partido del Pueblo), aprobar los aspectos fun

damentales en este sentido. En otras palabras,las mismas fuerzas esenciales que durante laguerra formaron el Frente Popular .

Con su promoción de "frentes populares", porlas necesidades bélicas, los comunistas latino-americanos habían superado el antiguo secta-rismo condensado en la consigna de "clasecontra clase", pero más tarde cayeron en el otroextremo al incurrir en la desviación oportunistaconocida como "browderismo", y cuya responsabilidad se atribuyó al norteamericano EarlBrowder. Concibieron falsamente la posibilidadde un mundo de postguerra sin crisis económi-cas, con un desarrollo pacífico de los pueblosatrasados mediante el apoyo financiero norte-americano y la paulatina eliminación de losantagonismos sociales. Esta errónea apreciación hacía innecesarios los destacamentospolíticos comunistas . Y por lo tanto en Panamáse disolvió el Partido Comunista en septiembrede 1943. Tres meses después se reorganizó bajoel nombre de Partido del Pueblo, con un carácter ecléctico. No obstante que la influenciabrowderista sólo fue desterrada del Partido delPueblo a partir del congreso realizado en 1951,los comunistas panamenos participaron activa-mente en la organización del sindicalismo legalen el país .

El 14 de agosto de 1945, coincidiendo casi conla vigencia de la Constitución de 1946 y pocosaños antes de la promulgación del Código delTrabajo, se fundó la Federación Sindical de Trabajadores de la República de Panamá (FSTRP),de orientación comunista, que se afilió a la Con-federación de Trabajadores de América Latina(CTAL) y más tarde a la Federación Sindical

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Mundial (FSM). La formación de la FSTRP estuvo precedida por un Comité Provisional deOrganización Sindical, integrado, entre otros,Por D.H. Turner, Diógenes de la Rosa, EliseoEchévez, Celso Nicolás Solano, Hugo Víctor,Luis Restrepo, Juan Nieto, Santos Meza, JulioGuerra, Tomás Dionisio Araúz y Eligio Crespo .En representación de este Comité Provisional,Hugo Víctor asistió a la IV Reunión del Consejode la CTAL, realizada en febrero-marzo de 1944,en Montevideo, Uruguay.

A pesar de los esfuerzos de sus orientadores,los sindicatos que integraron la FSTRP en susinicios estaban organizados principalmente abase de oficios; mecánicos, albañiles, electricistas, zapateros, sastres, enfermeras y muebler os. Entre los fundadores de la FSTRP figuran

Luis Avila, su primer secretario general ; Domin-go. Barría, Angel Gómez, Juan Nieto, EusebioQuirós, Martín Niño, Nemesio López Zapata,José de la Rosa, Juan de Dios Herrera, ArístidesWilson, Cristóbal Cerrud, Luis Alejandro Cué-llar, Restituto Mudarra y Ruth Pérez de Peré . Elveterano dirigente inquilinario, Martín Niño, al-bañil, constituye en esta fundación el vínculoindividual entre el pasado obrerista y ese pre-sente que se ofrecía promisor. La FSTRP impulsó, desde sus inicios, algunas huelgas, entreotras una de sastres .

Entre la fecha de la Constitución de 1946 y ladel primer Código del Trabajo hubo un aconteci

miento decisivo en la historia panameña. En elaño de 1947 tuvo lugar el rechazo al ConvenioFilós Hynes . Bajo el manto de la colaboración alesfuerzo de guerra contra el nazifascismo, el gobierno panameño había accedido a que EU esta

bleciera en el territorio nacional, fuera de lajurisdicción zoneíta, más de 100 bases militares .Conforme al acuerdo suscrito ; las bases debían52

ser desocupadas al término de la Segunda Gue-rra Mundial. Pero ésta concluyó y las bases semantuvieron. Y todavía peor: por el ConvenioFilós Hynes se establecía una prórroga legal deesta ocupación. Los estudiantes, organizadosbajo las banderas de la Federación de Estudian-tes de Panamá (desde esta época el estudiantadose consagró como la principal fuerza patrióticanacional), y la clase obrera, desde fuera de sussindicatos; maestros, profesores y, en general, elpueblo panameño, en grandiosas movilizacio-nes, lograron, con su presión, en el histórico añocitado, que los diputados rechazaran el Conve-nio Filós-Hynes, y el ejército norteamericanotuvo que abandonar las bases que ocupaban a lolargo y ancho del país . Esta fecha es sumamenteimportante en los anales de la historia paname-ña porque durante ella se detuvo uno de los in-tentos de absorción imperialista más serios encontra de Panamá y porque las luchas fueronlibradas fundamentalmente en un bloque defuerzas populares, destacando la solidaridadobrero-estudiantil .

La Constitución de 1946 es la primera Consti-tución panameña que incluye, ademas de suparte dogmática y su parte orgánica,

relacionadas con el trabajo y el régimenagrario. El código laboral, en desarrollo de nor-mas constitucionales creó un sistema jurídicoque barrió con los deficientes artículos sobre lamateria que se encontraban dispersos en elCódigo Civil y el Código Administrativo.

El Código del Trabajo de 1948 se basa, en buena parte, en el código laboral de Costa Rica y en

la Ley Federal del Trabajo de México . Las dis-tintas clases de sindicatos que autoriza el Códi-go (sindicatos mixtos, de oficios, de empresa eindustriales) permite, por lo menos en el papel,la agrupación de trabajadores de distintos gra-

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dos en el desempeño económico : desde los quelaboran en regiones muy atrasadas, y con activi-dades dispersas o los que se unen por una mis-ma especialidad artesanal, con grandes rezagosmutualistas, hasta obreros que se activan en empresas capitalistas modernas o en ramas indus-triales completas .

Con el sindicalismo legal que auspicia el Có-digo del Trabajo se promueve la conversión demuchas sociedades mutualistas, que databan deprincipios de siglo, en sindicatos modernos,aunque mayoritariamente organizados por ofi-cios. Los apuntes sobre la Historia del MovimientoObrero, elaborados por la Federación Sindicalde Trabajadores de la República de Panamá(FSTRP), dicen al respecto : "Así se inició latransformación de las sociedades mutualistasde trabajadores en sindicatos obreros, recor-dando, entre otros, que la antigua Sociedad deTipógrafos se transformó en un poderoso sindicato; que la Sociedad de Automedontes se convirtió en el Sindicato de Choferes y Anexos dePanamá, y que la Unión de Panaderos, Dulcerosy Confiteros se transmutó en el Sindicato de Pa-naderos Dulceros" . (24)

Al mismo tiempo aparecen sindicatos como elde la Cervecería Nacional, de Marinos, de Em-pleados de Comercio, el de Periodistas y des-puntan los primeros intentos de organización delos trabajadores bananeros que tienen como za-padores a José del Carmen Tunón, a DomingoBarría, a Angel Gómez y a Marta Matamoros .

Creada en alguna medida la conciencia de quelos obreros tienen una identidad, favorecida por-el Código del Trabajo, la FSTRP pudo convocaren la capital, en junio de 1950, a una grandiosa

(24) FSTRP, Op. Cit., pág. 5.

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concentración de más de 50,000 personas, paramanifestarse por algo que interesaba a toda laclase: la lucha contra el alza exhorbitante de losprecios de los artículos de primera necesidad yde los alquileres y contra la desocupación. Re-sultado de esta movilización fue la Ley de Con-trol de Precios y una nueva ley sobre inquili-nato.

Con el sindicalismo legal, el ascenso estudiantil= la organización de los maestros y la forma cion de la Federación Sindical de Trabajadores

de la República de Panamá aparecen tambiéngrupos que se les oponen. En el terreno obrerose constituye, en 1956, la Confederación de Trabajadores de la República de Panamá (CTRP), lacual se afilia a la ORIT y es ayudada económicamente por la AFL-CIO. Inclusive durante laprimera presidencia de Perón es sensible la influencia peronista en algunos sindicatos panameños .En 1952 asciende a la primera magistratura

del país el coronel José Antonio Remón Cantera,sustentado en la "Coalición Patriótica Nacio-nal", integrada a base de tradicionales y contra-dictorias formaciones políticas, permaneciendofuera de esta fusión el Partido Liberal histórico .Es el primer militar que llega a la presidenciade Panama. Entre el macartismo externo y lasnecesidades oligárquicas internas de detenerlaactividad sindical y juvenil hacen que el remon ismo se constituya bajo un signo represivo y

anticomunista. Durante su gobierno se gestionaun nuevo tratado con EU, el "Remón-Eisenhower", que culmina más adelante con algunasreivindicaciones que favorecen a la burguesíapanameña. Aprovechando una prolongada huel-ga de educadores, en 1952, el gobierno desatauna ola represiva . En 1953 se promulga una leyanticomunista. Los movimientos sindicales y ju-

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La CT11_diriaida ¡mr el Iiemeia .In Vlrmtr Lamlrvdn Toledano . eonlriboyó • i mVUl.a rno~aLlenmnm la organuncmn —di—] en Panamá Y 4mériea Latina.

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veniles decaen y se desorganizan. En 1955 Remón es asesinado, La bala mortal no alteró las

estructuras económico sociales de Panamá,pero agudizó la pugna entre los intereses con-flictivos que existían en el seno del gobierno,suspendio la amenaza de dictadura y trajo con-secuencias políticas incalculables .

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