MI CONFRONTACION CON LA DOCENCIA

Mi primera experiencia y amor por ser docente se dio en mi primer trabajo en la

escuela particular Primaria Vasco de Quiroga, teniendo a mi cargo el 2° año, el

cual resulto una experiencia gratificante. Esta experiencia se enriqueció con mis

prácticas profesionales en CENDIS y Guarderías lo que despertó aun más mi

interés y cariño por dicha práctica.

El ser docente no es una profesión fácil, es una gran responsabilidad, ya que

estamos trabajando con seres humanos no estamos con algún objeto o

materiales, sino con seres humano, si no tienes el amor y el compromiso por el

trabajo que realizas, puedes echar a perder su formación y sobre todo su

educación.

Dicha profesión me ha resultado gratificante, considero que mi trabajo se ve

reflejado en el aprendizaje de los niños, no me ha sido fácil el conocer y aprender

la forma de trabajo de nivel preescolar puesto que mi Lic., es diferente y sobre

todo la línea especifica, sin embargo, me he dado a la tarea de investigar con mis

compañeras, directivos la forma de realizar el trabajo.

Como lo he mencionado anteriormente en alguna de mis participaciones entre el

“deber ser” y el “ser” hay una gran brecha, dentro del perfil del docente y todo lo

que se supone que debe ser un egresado en su rama; sin embargo, las cosas

suelen ser diferentes, nadie nos dice con exactitud los pasos a seguir, es la

experiencia y la formación permanente la que nos brindará elementos para diseñar

estrategias que enriquezcan tu trabajo como docente.

Aun me falta mucho por aprender y actualizándome, tengo toda la disposición de

hacer las cosas las ganas de poder lograr ese aprendizaje significativo en mis

alumnos.