Jesús y el méndigo
Transcript of Jesús y el méndigo
JESÚS Y EL MÉNDIGO
Marchaba el buen Jesús por un camino,en sus largas jornadas por el mundo,y era entrada la noche, cuando vinoa posarse a sus pies un vagabundo,
que le dijo con jubilo y llanto.
“Eres Jesús, el Nazareno. ¡Cuánto te he buscado Señor,
Para que hagas un grandísimo bien!”Y abriéndose el manto le mostró
el cuerpo lleno de llagas.
“De pueblo en pueblo voy para que veanmis úlceras sangrientas… y mitiguen su ardor,
pero los hombres me apedrean ylos canes rabiosos me persiguen”.
“Ten piedad de mis llagas miserables,tú que llevas el bien por donde caminas,
tócalas con tus manos admirablesQue convierten en rosas las espinas!...”
Así dijo el méndigo con tristezay Cristo entonces de ternura lleno,puso un beso de paz en su cabezay le hizo descansar sobre su seno,diciéndole: “Por todas tus querellayo mezclaré mis lágrimas contigo”,Y lloró tantas… que lo baño en ellasY al mirar sus andrajos el méndigo
¡los halló salpicados de estrellas…”!