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En 2013 llegó al trono de Pedro un papa latinoamericano que viene con un impulso reformador y a involucrarse en la esfera internacional como mediador, sin dejar de acercarse con la mayor sencillez a enfermos, pobres, niños y hasta animales. Los tres artículos se centran en el trabajo político que se realiza desde el Vaticano: Genaro Zalpa nos expone la importancia de los Tratados de Letrán y el gran poder simbólico de los papas, que les ha permitido actuar en la esfera políti- ca, y proporciona ejemplos de intervenciones de Juan Pablo II y Francisco en asuntos internacionales. Por su parte Gustavo Ricardo Gallegos escribe sobre la labor que ha realizado el papa Francisco en asuntos internacionales de gran envergadura, como la reunión con las autoridades del pueblo palestino y el judío, el papel que jugó en el acercamiento y diálogo que tuvieron Cuba y Estados Unidos; y plantea que tiene un asunto pendiente con respecto al Estado Islámico (ISIS). Finalmente quien suscribe estas líneas aborda el tema de la celebración de un concilio ecuménico en el corto plazo, porque es parte de las señales que está enviando el papa Francisco. Por último agradecemos a La Jornada Aguascalientes, el espacio que nos ha otorgado para la publicación del suplemento Jesús Terán, espacio que esperamos siga consolidándose. Hablar del Papado, los Estados Pontificios y el Vaticano implica un doble abordaje que ha sido parte de su historia, por un lado la religión (Católica Romana) y por el otro la política, es decir, los papas han atendido asuntos espirituales y asuntos terrenales. Desde el Concilio de Nicea celebrado en el año 325 y que fue convocado por el emperador de Roma, Constantino I el Grande, se dio la unión entre la religión y la política. Y en ciertos periodos de la historia se ha tenido demasiado poder político. En el siglo XX y lo que va del XXI, el Vaticano fue y es un actor relevante en la escena internacional, sabe jugar en los terrenos de la política; ejemplos sobran. Por otro lado, es una institución de larga vida, es una institución de 2000 años que ha sorteado tiempos de crisis, de cismas, de reforma, de secularización. Ha sido testigo de cambios de orden mundial, de cambios de épocas, y ha man- tenido largas tradiciones. JESÚS TERÁN AURORA TERÁN FUENTES Suplemento sobre Estudios Internacionales para La Jornada Aguascalientes Marzo 2015 Coordinadores: Aurora Terán Fuentes Soren Héctor de Velasco Galván Diseño: Alejandro Márquez Díaz del Castillo No. 24 Basílica y plaza de San Pedro, Ciudad Vaticano http://www.antoniohernandez.es/Arte/imagenes/Temario/WEBS%20REPASO/060.html Editorial 0DUWtQ /XGLQ ÈYLOD *DUFtD

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Suplemento .de La Jornada Aguascalientes

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En 2013 llegó al trono de Pedro un papa latinoamericano que viene con un impulso reformador y a involucrarse en la esfera internacional como mediador, sin dejar de acercarse con la mayor sencillez a enfermos, pobres, niños y hasta animales. Los tres artículos se centran en el trabajo político que se realiza desde el Vaticano: Genaro Zalpa nos expone la importancia de los Tratados de Letrán y el gran poder simbólico de los papas, que les ha permitido actuar en la esfera políti-ca, y proporciona ejemplos de intervenciones de Juan Pablo II y Francisco en asuntos internacionales. Por su parte Gustavo Ricardo Gallegos escribe sobre la labor que ha realizado el papa Francisco en asuntos internacionales de gran envergadura, como la reunión con las autoridades del pueblo palestino y el judío, el papel que jugó en el acercamiento y diálogo que tuvieron Cuba y Estados Unidos; y plantea que tiene un asunto pendiente con respecto al Estado Islámico (ISIS). Finalmente quien suscribe estas líneas aborda el tema de la celebración de un concilio ecuménico en el corto plazo, porque es parte de las señales que está enviando el papa Francisco. Por último agradecemos a La Jornada Aguascalientes, el espacio que nos ha otorgado para la publicación del suplemento Jesús Terán, espacio que esperamos siga consolidándose.

Hablar del Papado, los Estados Pontificios y el Vaticano implica un doble abordaje que ha sido parte de su historia, por un lado la religión (Católica Romana) y por el otro la política, es decir, los papas han atendido asuntos espirituales y asuntos terrenales. Desde el Concilio de Nicea celebrado en el año 325 y que fue convocado por el emperador de Roma, Constantino I el Grande, se dio la unión entre la religión y la política. Y en ciertos periodos de la historia se ha tenido demasiado poder político. En el siglo XX y lo que va del XXI, el Vaticano fue y es un actor relevante en la escena internacional, sabe jugar en los terrenos de la política; ejemplos sobran. Por otro lado, es una institución de larga vida, es una institución de 2000 años que ha sorteado tiempos de crisis, de cismas, de reforma, de secularización. Ha sido testigo de cambios de orden mundial, de cambios de épocas, y ha man-tenido largas tradiciones.

JESÚSTERÁN

AURORA TERÁN FUENTES

Suplemento sobre Estudios Internacionales para La Jornada Aguascalientes

Marzo 2015

Coordinadores: Aurora Terán Fuentes Soren Héctor de Velasco GalvánDiseño: Alejandro Márquez Díaz del Castillo

No. 24

Basílica y plaza de San Pedro, Ciudad Vaticanohttp://www.antoniohernandez.es/Arte/imagenes/Temario/WEBS%20REPASO/060.html

Editorial

Martín Ludin Ávila García

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¿Cuántas divisiones

papas sobre todos los católicos de cualquier nacionalidad, y su soberanía política sobre un estado: la Ciudad del Vaticano. De esta manera los papas, sin tener divisiones militares, son un estado miembro de las Naciones Unidas y de muchas otras organizaciones inter-nacionales, y ejercen a la vez un gran poder simbólico internacional que no se explica únicamente por su soberanía sobre el Estado Vaticano, y que les ha permitido intervenir en la política mundial. Stalin no se imaginaba el papel que iba a jugar Juan Pablo II en la caída de los regímenes socialistas. En 1981 el papa recibió en el Vaticano a Lech Wallesa, dirigente del sindicato Solidaridad, apoyando con ese gesto la lucha contra el régimen comunista de Polonia, y en 1989 recibió a Michael Gorvachov, dos años antes de que desapareciera la Unión Soviética. El mismo papa, alineado con la administración norteamericana, regañó públicamente a los sacerdotes que se habían incorporado al gobierno sandinista en Nicaragua. Menos conocidas son las mediaciones papales en el conflicto de los misiles en Cuba en los años sesenta (Juan XXIII) y los esfuerzos sin resultados por evitar la invasión a Irak. Más recientemente, el papa Francisco llamó a una jornada de ayuno y oraciones por la paz en el Medio Oriente, oponiéndose a una intervención militar en Siria, y el presidente Barak Obama reconoció públicamente su papel de mediador en el proceso de restablecimiento de las relaciones entre los Estados Unidos y Cuba. Finalmente, no hay que olvidar el peso de las palabras del papa Francisco en un documento privado acerca de que se debe evitar la mexi-canización de Argentina. El papa no tiene divisiones, pero eso pesó mucho en la imagen internacional de nuestro país.

Se cuenta que en mayo de 1935, Stalin le hizo la pregunta del título de este artículo al ministro de asuntos exteriores francés, Pierre Laval, cuando, al adver-tirle sobre el peligro que representaba el armamentismo de Alemania, le aconsejó que disminuyera las presiones sobre los católicos rusos para ganarse el apoyo del entonces pontífice romano, Pío XI. En ese tiempo el papa solamente disponía, como ahora, del pequeño ejército de los guardias suizos, por lo que Estado Vaticano no tenía un peso militar en el que apoyarse para influir en la política mundial. Pero disponer de un ejército no ha sido necesario para que los papas ejerzan una influencia, a veces determinante, sobre la política internacional. Desde el siglo VIII, con base en un texto falso llamado La donación de Constan-tino, se argumentó que este emperador había regalado a los papas el dominio sobre el Imperio de Occidente y el derecho a detentar el gobierno sobre una región que llegaría a conocerse como los Estados Pontificios hasta que, en 1870, el rey Víctor Manuel II conquistó esos territorios en nombre el reino de Italia, reduciendo los estados pontificios a lo que hoy es la Ciudad del Vaticano. Como protesta por ese hecho, por mucho tiempo los papas se consideraron prisioneros y se recluyeron en la Ciudad del Vaticano, hasta que en 1929 se firmaron los tratados de Letrán que le dieron al Vaticano el estatuto especial que hoy detenta y que le da a la Iglesia Católica un peso particular en la política mundial. Para entenderlo son particularmente importantes dos artículos de esos tratados, el segundo y el tercero. El artículo segundo dice: “El gobierno italiano reconoce la soberanía de la Santa Sede en el plano internacional como un atributo inherente a su naturaleza, en conformidad con su tradición y con las exigencias de su misión en el mundo”. El tercero: “Italia reconoce a la Santa Sede la propiedad plena, el poder exclusivo y absoluto y la jurisdicción soberana sobre el Vaticano como está actualmente constituido, con todas sus dependencias y dotaciones, creándose la Ciudad del Vaticano”. Se reconoció así la soberanía espiritual de los

GENARO ZALPADoctor en SociologíaUniversidad Autónoma de Aguascalientes

tiene el papa?

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Firma de los Tratados de Letrán en 1929

Juan Pablo II con Lech Walesa, líder del Sindicato Solidaridad de Polonia

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papas sobre todos los católicos de cualquier nacionalidad, y su soberanía política sobre un estado: la Ciudad del Vaticano. De esta manera los papas, sin tener divisiones militares, son un estado miembro de las Naciones Unidas y de muchas otras organizaciones inter-nacionales, y ejercen a la vez un gran poder simbólico internacional que no se explica únicamente por su soberanía sobre el Estado Vaticano, y que les ha permitido intervenir en la política mundial. Stalin no se imaginaba el papel que iba a jugar Juan Pablo II en la caída de los regímenes socialistas. En 1981 el papa recibió en el Vaticano a Lech Wallesa, dirigente del sindicato Solidaridad, apoyando con ese gesto la lucha contra el régimen comunista de Polonia, y en 1989 recibió a Michael Gorvachov, dos años antes de que desapareciera la Unión Soviética. El mismo papa, alineado con la administración norteamericana, regañó públicamente a los sacerdotes que se habían incorporado al gobierno sandinista en Nicaragua. Menos conocidas son las mediaciones papales en el conflicto de los misiles en Cuba en los años sesenta (Juan XXIII) y los esfuerzos sin resultados por evitar la invasión a Irak. Más recientemente, el papa Francisco llamó a una jornada de ayuno y oraciones por la paz en el Medio Oriente, oponiéndose a una intervención militar en Siria, y el presidente Barak Obama reconoció públicamente su papel de mediador en el proceso de restablecimiento de las relaciones entre los Estados Unidos y Cuba. Finalmente, no hay que olvidar el peso de las palabras del papa Francisco en un documento privado acerca de que se debe evitar la mexi-canización de Argentina. El papa no tiene divisiones, pero eso pesó mucho en la imagen internacional de nuestro país.

Se cuenta que en mayo de 1935, Stalin le hizo la pregunta del título de este artículo al ministro de asuntos exteriores francés, Pierre Laval, cuando, al adver-tirle sobre el peligro que representaba el armamentismo de Alemania, le aconsejó que disminuyera las presiones sobre los católicos rusos para ganarse el apoyo del entonces pontífice romano, Pío XI. En ese tiempo el papa solamente disponía, como ahora, del pequeño ejército de los guardias suizos, por lo que Estado Vaticano no tenía un peso militar en el que apoyarse para influir en la política mundial. Pero disponer de un ejército no ha sido necesario para que los papas ejerzan una influencia, a veces determinante, sobre la política internacional. Desde el siglo VIII, con base en un texto falso llamado La donación de Constan-tino, se argumentó que este emperador había regalado a los papas el dominio sobre el Imperio de Occidente y el derecho a detentar el gobierno sobre una región que llegaría a conocerse como los Estados Pontificios hasta que, en 1870, el rey Víctor Manuel II conquistó esos territorios en nombre el reino de Italia, reduciendo los estados pontificios a lo que hoy es la Ciudad del Vaticano. Como protesta por ese hecho, por mucho tiempo los papas se consideraron prisioneros y se recluyeron en la Ciudad del Vaticano, hasta que en 1929 se firmaron los tratados de Letrán que le dieron al Vaticano el estatuto especial que hoy detenta y que le da a la Iglesia Católica un peso particular en la política mundial. Para entenderlo son particularmente importantes dos artículos de esos tratados, el segundo y el tercero. El artículo segundo dice: “El gobierno italiano reconoce la soberanía de la Santa Sede en el plano internacional como un atributo inherente a su naturaleza, en conformidad con su tradición y con las exigencias de su misión en el mundo”. El tercero: “Italia reconoce a la Santa Sede la propiedad plena, el poder exclusivo y absoluto y la jurisdicción soberana sobre el Vaticano como está actualmente constituido, con todas sus dependencias y dotaciones, creándose la Ciudad del Vaticano”. Se reconoció así la soberanía espiritual de los

GENARO ZALPADoctor en SociologíaUniversidad Autónoma de Aguascalientes

tiene el papa?

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Firma de los Tratados de Letrán en 1929

Juan Pablo II con Lech Walesa, líder del Sindicato Solidaridad de Polonia

Ciudad del Vaticano 11 de febrero de 2013- El entonces Papa de la Iglesia Católica, Benedicto XVI, renuncia al papado justificando esta decisión por motivos de salud; esta acción dejó desconcertado al mundo entero, pues parecía ser que salía un Papa derrotado, que tuvo que lidiar con las secuelas del reinado de su antecesor, Juan Pablo II, sin embargo para algunos analistas esto era una situación de estrategia, ya que toda la investigación a fondo encargada a la curia por orden del Papa Alemán la entregaría únicamente a su sucesor esperando así, que alguien más joven y con mayor energía pudiera emprender los cambios esperados para la iglesia y así reducir los constantes ataques hacia ésta. El proceso anterior abrió paso al pontífice actual, Francisco, que fue buscado por los cardenales según diría él en su presentación “casi al final del mundo”. Jorge Mario Bergoglio no ha dado preferencias a su origen geográfico como se especuló en un inicio, ya que viene de una zona que cuenta con la mayor cantidad de católicos en el mundo (Latinoamérica), es decir es un Papa que ve por el mundo, que determina su agenda y que es cumplida por la curia, aunque algunos sectores de ésta lo hagan a regañadientes. “La gran autoridad moral del Papa viene de la atención popular que tiene. Esto no es fruto de poderes o propaganda, es fruto de su carisma. Los líderes mundiales no pueden ser indiferentes al hecho que el Papa se manifiesta como un personaje al cual los pueblos miran con esperanza, con confianza, como una persona creíble”, advirtió Federico Lombardi, portavoz vaticano. Lo anterior es conclusión de la participación activa en el escenario internacional por parte del Papa Argentino, como ejemplo su primera partici-pación diplomática apenas seis meses después del inicio de su papado, logró prácticamente evitar una inminente invasión militar a Siria, inmersa entonces en un sangriento conflicto interno. Un segundo momento de gran repercusión a nivel mundial fue el acercamiento que logró entre los presidentes de Israel y Palestina en junio del 2014 en los jardines vaticanos, este hecho fue visto con gran esperanza en el mundo, pues los representantes de dos pueblos en constante conflicto habían sido citados por Francisco y estos respondieron a su invitación, a la cual asistió también el Patriarca Ortodoxo de Constantinopla, Bartolomé I. Los cuatro líderes plantaron un árbol sembrando así la semilla de la esperanza en la solución del conflicto entre palestinos e israelitas.

GUSTAVO RICARDO GALLEGOS MACÍASLicenciado en Relaciones InternacionalesPresidente de la Asociación de Raquetbol del Estado de Aguascalientes

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El tercer gran momento de Bergoglio fue la mediación para el restableci-miento de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba dado en diciembre del año pasado, a la que ambos presidentes dieron el reconocimiento al pontífice de que fue su intervención directa la que llevó al éxito este descongelamiento en las relaciones. Por todo lo anterior podemos observar que El Vaticano está retomando su lugar de ente neutral en los conflictos internacionales, es por esto que Francis-co fue recibido y escuchado en foros internacionales como el Parlamento Europeo, el Consejo de Europa y la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). Esa es la razón por la cual será el primer Papa en pronunciar un discurso en el parlamento estadounidense, en septiembre de 2015, además de dirigir un mensaje ante el pleno de la ONU en Nueva York. El actual Papa no es ajeno a la situación de los demás países alrededor del mundo, por ejemplo, en Venezuela, a donde el pontífice envió a una persona que ayudó a calmar los ánimos violentos. En Colombia, en donde se ha involu-crado en el proceso de negociaciones entre el gobierno y la guerrilla para concre-tar la paz. En China, en donde le escribió una carta personal al presidente Xi Jinping por la cual le extendió una invitación al Vaticano. En México, en donde se solidarizó con los familiares de los 43 estudiantes desaparecidos y con la llamada de atención al gobierno mexicano al nombrar cardenal a Alberto Suárez Inda, Arzobispo de Morelia y gran denunciante de la violencia que vive en dicha zona de México. Parece ser que su próxima prueba de fuego será combatir la brutalidad del Estado Islámico, ya que el embajador papal ante la ONU dijo que “era nece-saria una coalición coordinada y bien planeada a fin de hacer todo lo necesario para llegar a un entendimiento político sin el uso de la fuerza, pero si eso no fuera posible, entonces será necesario recurrir al uso de la fuerza”. Sigamos de cerca el movimiento que hará Francisco para resolver el conflicto de ISIS y las dos reformas que están marcando su papado: reforma a la curia y a las finanzas vaticanas. Que con esto se “(…) está rodeando por lobos”, como llamaría L’Osservatore Romano al Papa emérito Benedicto. Francisco un Papa de corte social y simpatizante de la Teología de la Liberación.

Papa plantando un árbol con los líderes de los pueblos palestino y judío, y el patriarca de la iglesia ortodoxahttp://www.argnoticias.com/images/olivo.jpg

Nueva diplomacia vaticana3

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La iglesia católica transitó al siglo XXI, con su líder el papa Juan Pablo II, que tenía una salud muy deteriorada, murió prácticamente recién estrenado el mile-nio, en 2005, inmediatamente el Vaticano apelando a sus grandes tradiciones organizó el cónclave para elegir a un nuevo papa, que se anunció con el famoso humo blanco. Después de una serie de rituales en el interior del Vaticano, se anunció y salió Benedicto XVI, de origen germano. Durante su papado se habla-ba de la necesidad de convocar a un concilio, para discutir el cómo abordar y enfrentar el siglo XXI, se hablaba de la necesidad de una reforma profunda al interior de la iglesia católica y del Vaticano; para algunos analistas se vivían tiempos de crisis y de anacronismo, además de un Vaticano que se había encerra-do en sí mismo. No pasó mucho tiempo cuando se dio una noticia que ocasionó un gran impacto ante la opinión pública internacional, hacía 598 años que no pasaba algo así en el Vaticano: el papa renunciaba. Lo que ocasionó que nuevamente se reunieran los cardenales en un cónclave en el año 2013. Fue electo el cardenal argentino jesuita Jorge Mario Bergoglio, que tomó el nombre de Francisco, e inmediatamente envió el mensaje de que su papado iba a ser cercano a la gente, y comenzó por romper protocolos y prácticas, como el no usar los tradicionales zapatos rojos. Dio y da un mensaje de humildad y cercanía, sin embargo, ha demostrado que en las grandes esferas políticas se sabe mover muy bien. Con el gran capital político que tiene, así como su carisma, el papa latinoamericano tiene una gran influencia en la esfera internacional. ¿Y qué pasa al interior del Vaticano? Aires reformistas, se respira un próximo concilio. Es evidente que el papa está jugando muy bien al ajedrez político, por ejemplo, viene una nueva generación de cardenales, está cambiando piezas; nombró a veinte cardenales, quince menores de 80 años, por lo tanto electores (posibilidad para elegir al futuro papa), y cinco eméritos. El mensaje es claro: renovación, una iglesia cercana a la gente, menos política y más pastoral. Solamente un cardenal viene de la Curia Romana. Representan un mosaico diverso (14 nacionalidades distintas). Por lo tanto, se puede interpretar como una generación que anuncia cambios y que comparte la imagen de la iglesia que tiene el papa. Por otro lado, el papa Francisco representa una oportunidad para la Teología de la Liberación, misma que surgió del Concilio Vaticano II, no

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AURORA TERÁN FUENTESDoctora en HistoriaUniversidad Pedagógica Nacional

obstante, fue cuestionada por la cúpula del Vaticano, por considerarla demasiado comprometida con el pueblo, con los pobres, demasiado de “izquierda". Es una teología cristiana que se definió desde América Latina. Ahora desde el centro, desde Roma, desde el Vaticano, con Francisco se mira hacia ella. Francisco tiene 78 años, ya inició un proceso de transformación, que conllevaría a la convocatoria y celebración de un concilio, tal vez lo que él inicie, lo terminen otros, es la razón de mover piezas estratégicas. Además no es asunto menor la organización de un concilio. El último concilio ecuménico fue el Vaticano II, convocado en 1959, iniciado en 1962 y clausurado en 1965, involu-cró a dos papas: Juan XXIII y Pablo VI. Es decir, hace poco más de medio siglo que se reunieron las autoridades de la iglesia católica para discutir asuntos doctri-nales y disciplinares. En medio siglo, se dieron movimientos de lucha por los derechos civiles, la liberación sexual, el hombre llegó a la luna, vino el fin de la Guerra Fría, la revolución informática y la globalización, no obstante, persisten los conflictos bélicos, la violencia, la pobreza, la desigualdad, el deterioro del medio ambiente, etcétera, ante este escenario ¿cuál es el papel de la iglesia católi-ca y su líder, así como el del Vaticano y su Jefe de Estado? Francisco para muchos representa una oportunidad para realizar un concilio, en donde se aborden temas como celibato, participación de la mujer, prácticas democráticas, divorcio, compromiso social y otros tópicos que han sido polémicos para la iglesia, pero que se tienen que discutir a la luz del siglo XXI, donde una palabra clave es “renovación”.

Direcciones electrónicas de contacto:Aurora Terán [email protected]

Soren Héctor de Velasco Galvá[email protected]

Aires de concilio

Concilio Vaticano II https://pebesen.files.wordpress.-com/2013/12/concilio-vatica-no-ii-1962-1965-congregacao-geral.jpg