Insatisfacción escolar

3

Click here to load reader

Transcript of Insatisfacción escolar

Page 1: Insatisfacción escolar

Insatisfacción escolar. La escuela desbordada

El sistema educativo de los países desarrollados y en vías de desarrollo aborda reformas en las cuales se reconocen patrones y rasgos similares a pesar de que pretenden ser soluciones a problemáticas muy diferentes.

A pesar de la puesta en marcha de dichas reformas y de que el discurso de política educativa se centra en los conceptos de calidad eficiencia y equidad, la mayoría de las escuelas siguen estancadas en rutinas, estructuras y programas de épocas pasadas, fortaleciendo el aprendizaje academicista y disciplinar de conocimientos fragmentados que denotan su incapacidad para facilitar el desarrollo de ciudadanos y ciudadanas autónomos que respondan con agilidad y eficacia a las exigencias y retos de la era de la información, el cambio permanente, la información y la incertidumbre.

Lo anterior se utiliza para justificar la política neoliberal educativa que fomenta la descentralización y competitividad entre las instituciones como estrategia para incrementar la productividad de las escuelas en términos de rendimiento académico y cuyo fin es tratar a la educación como mercancía en el escenario competitivo del libre mercado. Sin embrago, las escuelas adentradas en esta política no cumplen su función ya que incrementan la desigualdad de origen de los alumnos y centran su objetivo en la consecución del beneficio tangible a costa de los valores educativos de desarrollo autónomo de las capacidades de pensamiento, sentimiento y actuación.

Existen indicadores del deficiente funcionamiento del sistema actual escolar: el elevado índice de fracaso y abandono de la escuela, es decir, los jóvenes no concluyen la etapa obligatoria o no continúan ningún tipo de estudio después de ella. En él se agrupan diferentes significados como la insuficiente formación de las capacidades requeridas por la sociedad, el absentismo y abandono prematuro sin titulaciones básicas, las repeticiones de cursos que provoca en los estudiantes problemas relacionados con su autoestima; la desigualdad respecto a las oportunidades educativas debido a que el profesorado y la sociedad no ven clases sociales, minorías étnicas o diferencias de género y se considera que las diferencias se deben a distintas capacidades, actitudes, expectativas y grados de motivación individuales que son responsabilidad del individuo; la irrelevancia del conocimiento estudiado y aprendido, la escuela tiene dificultades paras el desarrollo del conocimiento aplicado, del conocimiento crítico, de las capacidades creativas precisamente el conocimiento que organiza los modos de sentir, pensar y actuar de los ciudadanos, así como para ayudar a la gestión educativa de las emociones, actitudes y valores .

Se considera que la escuela se resiste al cambio radical debido a que, por un lado, desde la revolución industrial se ha privilegiado a la ciencia, la lógica y el reduccionismo sobre la intuición, el holismo y la creatividad. Sin embrago, en la era digital ya no tiene sentido la disociación ni la jerarquización disciplinar; y por el otro, debido a que la permanencia del modelo escolar de la época industrial cuyo objetivo era preparar a los ciudadanos para los trabajos mecánicos de montaje de las industrias dentro de una organización piramidal donde unos pocos piensan y la gran mayoría ejecuta de forma fiel, homogénea, uniforme y disciplinadamente.

Por tanto Gatto afirma que lo que enseña la escuela es confuso, de posición, indiferente, dependiente emocional e intelectual, uniforme y con ausencia de identidad. La escuela considera que el primer criterio de éxito en la disciplina y el control. Los estudiantes aprenden a reproducir mecánicamente estrategias lineales de un conocimiento encasillado, fragmentado y estandarizado.

Page 2: Insatisfacción escolar

La fragmentación provoca descontextualización ya es difícil encontrar el auténtico significado de lo aprendido y más aún, su sentido en y para la vida real.

La escuela ha credo un currículum demasiado extenso pero poco profundo, es decir, ha dado mayor importancia a la cantidad sobre la relevancia, profundidad y calidad. Lo que provoca que los estudiantes olviden con facilidad lo aprendido por su escasa relevancia y utilidad.

Existe una brecha entre lo que se aprende y lo que se necesita porque en la escuela convencional se dedica muy poco tiempo a pensar, indagar y recrear. La importancia en la época actual es que el ciudadano descubra que la actividad es la verdadera condición del aprendizaje, que no basta con memorizar sino que es necesario indagar, descubrir, aplicar, recrear, tomar decisiones sobre qué y cómo aprender.

Por lo tanto la escuela no debe ser uniforme, no puede haber un solo currículum para todos. La escuela debe enseñar todo lo que cada uno está interesado por aprender. Las fallas de origen no se compensan con la aplicación de un currículo único y una pedagogía uniforme, es necesario crear oportunidades equivalentes y adaptadas a las peculiaridades que singularizan a cada sujeto.

Es imperativo cambiar la visión de que: “La escuela como institución es absolutamente irreformable porque a su modo, sigue siendo un éxito rotundo, ya que hace de forma eficaz aquello para lo que fue diseñada: ser el componente formativo de una economía de producción en masa dirigida por una élite reducida de privilegiados”; y ver que la misión de la escuela es ayudar al desarrollo de las capacidades, competencias o cualidades humanas fundamentales que requiere el ciudadano contemporáneo para vivir de manera satisfactoria en los complejos contextos de la era de la información.

PEDRO HERNANDEZ FLORES