POR CATALINA OYARZÚN AGUIRRE Y ALEJANDRA SARMIENTO ÁLVAREZ.

“Incomodidades en la colación”

•Materialidad de la fuente de la colación.

Muchas veces nos ha pasado que al calentar el almuerzo, sin retirar la tapa plástica, ésta se contrae de tal manera que no se puede remover y es casi imposible quitarla para disfrutar de nuestra colación.

•Terminaciones del material en el que trasladamos nuestra colación.

Los loncheros tienen sus terminaciones (costuras finales) muy débiles, por lo que terminan rompiéndose fácilmente.

•Costo de las colaciones.

Los precios son muy altos para lo poco que alimentan ciertas costosas colaciones (más lo son en los quioscos de los colegios).

•Envase del yogurt.

Este tipo de la colación posee un envase muy débil y con un poco de presión puede terminar reventándose, quebrándose, abriéndose, etc.

•Aporte calórico y nutricional.

La comida que se vende fuera del establecimiento no es sana.

•Poco espacio en los termos.

Algunos termos disponen de poco espacio para la comida, alcanzando menos de la porción adecuada que uno debería consumir.

•La colación de los colegios.

Ciertas veces la comida que dan los colegios llega en mal estado.

•La manipulación de la colación en los establecimientos.

Como por ejemplo, la mala cocción de algunos alimentos. Este problema puede producir intoxicación.

•Descomposición de la colación por cambio de temperatura.

Los alimentos son expuestos a cambios bruscos de temperatura.

•Espacio físico para almorzar.

El espacio que se dispone para comer es pequeño o insuficiente, lo que resulta ser incómodo.

•El tiempo para almorzar.

Se reduce el tiempo para almorzar, ya que los comedores deben ser compartidos entre muchos estudiantes.

•La comida no es del gusto del estudiante.

Si el almuerzo de los estudiantes no es de su agrado, optan por no comerlo o botarlo.

•Pre-almuerzo.

Previo al almuerzo el alumnado ya ha consumido colaciones, en la mayoría de los casos, ricas en azúcares, grasas, carbohidratos, etc.

•Falta de higiene en manipuladoras.

Existe una falta de higiene en quienes manipulan el almuerzo en establecimientos.

•No resistencia de algunos alimentos.

La manzana, cuando cae al piso, queda con golpes. La zona dañada no sabe igual.

•”Salpicadura ácida”.

Al cortar el limón saltan las gotas de su jugo a los ojos.

•Tipo de comida.

Al comer pescado, a parte de quedar uno con mal aliento (que sequita al lavarse los dientes), en la mesa u ambiente donde se come queda el olor de este.

•Mal horario de colación.

Hay establecimientos en los que algunos cursos tienen el horario de almuerzo justo antes de la hora de Educación Física.

•El almorzar sin la familia.

Es imposible comer junto a la familia en un establecimiento, por lo que se produce un aislamiento del alumno respecto a su familia.