I love Travel N4 rutas por Asia

visitar: http://www.teresamarcos.es

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Ilustracción por Javier Muñoz http://www.javimunoz.com/

Dirección y redacción: Juan Pedraz Araujo [email protected]ón y dirección de arte: Teresa Marcos Ruiz [email protected]ón: [email protected] y contenidos: [email protected]

Myspace: http://www.myspace.com/revistailovetravelblogspot: http://revistailovetravel.blogspot.com/ youtube:http://www.youtube.com/user/revistailovetravelpágina facebook:http://www.facebook.com/pages/ILoveTraveles/72151907411

sumario:

el test del viajero: Joel 4

introducción: Asia 7

Asia:

Diario de ruta por laos 8Old Delhi 16 Ruta Delhi - Benarés 20Diario de ruta por Filipinas 26Tahilandia en 15 días 32 rincones del mundo:Alsacia 38L´île d´ Yeu 39 Marruecos 40Nueva Zelanda 42

ecoturismo:Bird Watching 46

cuando viajar no es tan fácil:VIH / sida 48

agenda musical:Festival Actual, Logroño 50León, Rewiew Festival Purple Weekend 52

i love 2.0 54

Diseño portada: Teresa Marcos http://www.teresamarcos.es

Damos las gracias por haber colaborado con nosotros a Joel, Javier Muñoz, Olivia Carreño, Cristina Montero, Carmen Pérez del Olmo, Ana B. Muñoz, Alberto Vargas, Blanca de Ugarte, Noelia Calzada, Hector Arenós, Tamara García, Victor Álvarez, Majo G. Polanco.Ilovetravel no se hace responsable de las opiniones de nuestros colaboradores.

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017EN ELTRAYECTO MADRID BAR-CELONA PREFIERO IR EN (AVE O AVIÓN)….. POR QUÉ|Avión, es más cómodo, suele ser más barato y tardas menos en llegar.|

018MI BOLSA DE ASEO OCUPA ……. DE MI MALETA.|Es un neceser, lo llevo en mi mochila siempre|

019LAS REVISTAS DE LAS COMPAÑIAS AÉREAS ME PARECEN|entretenidas, pero con poco contenido|

020CREO QUE LAS COMPAÑIAS DE BAJO COSTE SON|necesarias, siempre ayudan cuando tienes que hacer un viaje relámpago|

021LO QUE MÁS ME GUSTA DE LOS HOTELES|la pensión completa|

022CON LA PERSONA QUE MÁS ME GUSTA VIAJAR ES|mi pareja|

023SI TUS CANCIONES VIAJARAN A DONDE TE LLEVARIAN A|me llevarían a grandes recintos donde poder cantarlas.|

024EN LOS DUTY FREE NO PUEDO RESISTIRME POR|una revista de moda (Tendencias)|

025CREO QUE LA GENTE CUANDO SE VA DE VACACIONES DEBERÍA|hacer una planificación previa del viaje que se va a hacer|

026LO QUE NO ENTIENDO DE LOS EMPLEADOS DEL SECTOR TUR-ISTICO ES|que tengan que trabajar los domingos.|

027EN LOS RESTAURANTES ODIOnunca odio, disfruto del momento de salir a comer fuera.|

028MI PROXIMAS VACACIONES SERÁN A|Boston|

029UN VIAJE QUE NO REPETIRIA JAMÁS|Malta

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las mejores rutas por

asia

En nuestro número 1 estuvimos en el país más desarrollado del continente asiático, para nuestra cuarta revista hemos reunido una serie de relatos y experiencias via-jeras por diferentes países de Asía. Laos, La India, Filipinas y Tailandia, son destinos con atractivos turísticos incuestionables, la cultura, los colores, y el arraigo a la tierra por o sin obligación centran nuestra atención en el mes de Enero.

Como siempre hemos descubierto pequeños rincones del mundo verdaderamente atractivos, a la largo y ancho del globo terráqueo.

No podía faltar una sección dedicada al Ecoturismo, en concreto al “birdwatching”, una corriente que tiene muchos adeptos en Europa y que está tomando mucha fuerza en nuestro país gracias a la situación Geográfica en la que se encuentra, y la cantidad de aves que nos visitan año tras año.

Nos hemos interesado por aquellas personas con viven con VIH/sida, y con todas las trabas que pueden encontrar en sus desplazamientos por el mundo.

Además nos hemos ido de festival a León, hemos dado una vuelva por la agenda cultural del “actual” de Logroño, y hemos navegado por las web más interesantes del momento.

I love Travel os desea un feliz 2010 y nos vemos en marzo. 7

las mejores rutas por

asia

Texto y fotos: Olivia Carreño

LAOS, EN SU DÍA LA TIERRA DEL MILLÓN DE ELEFANTES, HOY, LA DE LA TRANQUILIDAD

A pesar de no tener salida al mar, Laos es uno de los destinos con más encanto del sudeste asiático. Ofrece una sensacional belleza natural - imagínate en medio de un paisaje de montañas envueltas en la bruma, rodeadas de frondosa vegetación y valles atravesados por ríos que son verdaderas arterias de transporte; combinado el fascinante ambiente de la cultura budista laosiana, sus gentes relajadas y sonrientes, su ritmo tranquilo, sus maravillosos templos. Además del interés cultural que representan sus más de 49 grupos étnicos reconocidos oficialmente. Laos abrió sus fronteras al turismo en 1990 y en la última década ha sido testigo de una “ex-plosión” de negocios con el objetivo de acomodar y satisfacer a este turismo emergente. El país está cambiando rápido, pero quedan rincones para viajeros que están dispuestos a olvidar los lujos del turismo más clásico. Nosotros hemos decidido “patearnos” el norte de Laos, entrando por la frontera de Tay Trang, la más septentrional de las entradas desde Vietnam, recorremos las provincias de Phongsali, Luang Nam Tha and Udomxai, hasta llegar a la encantadora Luang Prabang, antigua capital del reino Lao-siano. El norte de Laos ofrece excelentes oportunidades de excursiones/trekking independientes. Una industria naciente y unas infraestructuras en desarrollo, hacen que el viaje y en particular, los desplazamientos, exijan un cierto esfuerzo, pero el viaje es infinitamente gratificante.

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diario de ruta por el norte de laos

Sa Pa - Dien Bien Phu - Muang Khoua (Laos)Llegamos a Laos procedentes de Dien Bien Phu, una pequeña ciudad situada en el noroeste de Vietnam, dispuestos a recorrer el único paso oficial entre los dos países en esa zona. Cogemos el único autobús que enlaza de Dien Bien Phu en Vietnam con Muang Khoua en Laos que sale a las 5 de la mañana, y sin protestar: solo hay 3 por semana, esta-mos contentos que salga precisamente hoy. 90 km. Separan las dos ciudades, pero nos avanzan que nos esperan 9h de autobús, no sabemos qué nos encon-traremos por el camino. A la media hora de dejar la estación de Dien Bien Phu, parada en el mercado para llenar la vaca del autobús de sacos de mercancías – arroz, fruta y verdura. A las 7, salida definitiva hacia la frontera, trayecto amenizado por un estilo de karaoke con videos de música laosiana, para ir metiéndonos en el ambiente - al par de horas deja de funcionar por los baches de la carretera que se convertirá en pista al pasar la frontera. Vamos subiendo hacia la sierra en la que se sitúa la frontera Tay Trang, abierta hace solo unos meses a los extranjeros, donde hacemos los trámites del visado de Laos sin problemas y muy rápido. Entramos en Laos, estamos en lo alto de la sierra y el paisaje es maravilloso. Atrás dejamos el bullicioso, animado y com-ercial Vietnam, nos recibe un tranquilo, relajado y remoto Laos. Después de 4 h para recorrer 40 km. Por la pista de tierra en la que se ha convertido la carretera internacional - atravesando poblados polvorientos llenos de niños que juegan en medio de la carretera con una rueda y un palo, cer-dos, gallinas, perros y casas de madera sobre pilares – ponemos pie a las 2 de la tarde en la pequeña ciudad de Muang Khua, a las orillas del rio Nam Ou. Uhm… ya es la hora de comer. Primera parada en un restaurante con terraza sobre el rio y primer contacto con los negocios laosianos: 1h para servir 4 platos, hemos dejado el ritmo acelerado de Vietnam, eso si todo está buenísimo, servido con la más grande de las sonrisas y por la 1ª vez en un mes respiramos tranquilidad!

Nam Ou River - Muang Ngoi village - UdomxaiNos hubiera gustado explorar un poco más los alrededores de la ciudad de Muang Khoua a la que hemos llegado ayer al mediodía desde Vietnam, pero el banco está cerrado “por vacaciones” y no saben cuándo van a abrir. Con unos cuantos dólares en le bolsillo decidimos coger una barca para recorrer el rio Nam Ou en busca de un cajero. El rio Nam Ou une la région de Phongsali con Luang Prabang, esta región en el noreste de Laos esta todavía sin explotar turísticamente por falta de infraestructuras, el rio es la arteria de conexión con el resto del país y a la vez, la mejor forma de visitarla. Nosotros cogemos una barca en Muang Khoua hacia el sur, pensando llegar hasta Nong Kiaow y probar suerte en el banco de alli... pero la barca se para en Muang Ngoi para ir al lavabo y en 5 minutos cambiamos la ruta: nos quedamos aquí un par de días convencidos por la tranquilidad que se respira (estiraremos los dólares que tenemos en el bolsillo).Las 4 horas de bajada por el rio Nam Ou desde Muang Khoua hasta Muang Ngoi se nos hacen muy amenas porque, además de una maravilla de paisajes, el ambiente en la barca es muy divertido. Decidimos alquilar la barca entera para el grupo de 8 turistas con los que nos hemos juntado y antes de “zarpar” ya nos han liado, los supuestos padre y madre del capitán están ya montados en la barca (el vinculo familiar es la excusa psi-cológica, así no podemos decir que se bajen... aunque no hacen falta mentiras, hay sitio de sobra). A medida que vamos bajando, va apareciendo gente en las orillas del rio haciendo señales al capitán para que se pare y los recoja, los primeros una pareja con un par de gallinas en un cesto - inciso para recordar que he-mos alquilado la barca entera para nosotros - asi es que el capitan nos mira preguntándonos “¿qué hago?”, nos miramos todos, hay sitio, “venga, que suban”... y estamos perdidos. Poco a poco, vamos parando a las orillas de todas las aldeas donde va apareciendo la gente y en Muang Ngoi acabe contando unos 35 entre bebes, crios y mayores, digo unos 35 porque los niños se movían y los bebes iban atados a las espaldas de madres, padres y hermanos y no llegaba a contar todo el mundo. En fin, divertido y sobretodo lucrativo para el capitán que se embolsa además de nuestro alquiler, unos cuantos kips laosianos por cada paisano que iba subiendo.

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La tranquilidad, el ambiente y los paisajes de Muang Ngoi nos cautivan nada más llegar. Pasamos un par de días tranquilos reponiéndonos de la carrera que hemos hecho en el norte de Vietnam para ver todo lo que queríamos y llegar a tiempo a la frontera el 5/01, día en el que se acababa nuestro visado. Por fin tengo tiempo para abrir la guía de Laos y empezar a imaginar el recorrido por el siguiente país de nuestro itinerario.De Muang Ngoi, recordaremos:- las maravillosas puestas de sol desde la terracita del bungalow, una belleza rela-jante ver desaparecer el sol entre las montanas y su reflejo en el rio Nam Ou- ver como “celebran” el funeral de una de las abuelas del pueblo que ha fallecido el día que llegamos, casi una fiesta, medio pueblo comiendo en las mesas que han instalado a la puerta de la casa y por la noche, todos mirando la tele que han puesto en la entrada... además de ver cómo le fabrican el ataúd en menos de 2 horas, allí en medio de la calle, decorado con papel de aluminio de colores.- tener electricidad de 6 a 9h, y ducha de agua fría.

Louang NamthaNo hay mucho que hacer en la ciudad de Louang Namtha en sí, en realidad la mayoría de la gente que llega hasta esta ciudad lo hace con el objetivo de organizar un trekking por el parque nacional de “Nam Ha”., así es que hemos hecho como la mayoría...Hay trekkings orientados “a descubrir la naturaleza del parque nacional “ y otros orientados más bien a acercarte al día a día de algunas de las “minorías étnicas” que siguen viviendo en el parque. Habiendo visitado la selva en Borneo y otros grandes parques nacionales, nos decantamos por el segundo y nos apuntamos con la agencia “Green Discovery” a una excursión que llaman “The Akha Experience”, un trekking que sale desde Muang Sing, un pueblo 40 km. al norte de Luang Namtha y a tan solo 8km. de China, y recorre 8 pueblos de la minoría Akha dispersos por las montanas durante 3 días... pero los detalles del trekking os los contamos más adelante...El caso es que al final nos hemos quedado 3 días en Luang Nantha, esperando a que nos juntáramos un grupito de 5 o 6 para hacer esta excursión. Y a pesar de no haber gran cosa que hacer, los días han pasado volando, como siempre. Un día hemos alquilado una moto y hemos ido por los pueblos de alrededor de Luang Namtha. Otro, hemos aprovechado que por fin había internet para consultar Internet, etc. Algunas de las cosas curiosas que nos han pasado estos días:- celebraban una fiesta de las etnias de Laos y hemos tenido la suerte de llegar al recinto ferial justo cuando empezaba el desfile: más de 35 parejas de etnias diferentes ataviados con los trajes típicos de sus minorías - toda una lección cultural de colores, tejidos y adornos que nos ha dejado con la boca abierta, y yo sin poder sacar ni una foto decente... que rabia!- hemos conocido a una gallega y un burgalés que han venido 2 meses a Laos y están recorriendo el país en bici, muy sim-paticones estos paisanos y con mucho coraje, conociendo las montanas que hay en el norte!- no hemos podido ducharnos con agua caliente en un hotel de 30 US (el del primer día) y hemos tenido una habitación preciosa con una ducha deliciosa y en la habitación por solo 8 US (El Zuela`s para el que le interese, un encanto)- los pueblos de las minorías de alrededor de Luang Namtha son polvorientos, con casas de madera elevadas, con el ganado viviendo debajo de la casa, cuanto más alejados de la ciudad, más pobres... pero sus gentes nos han recibido con una gran sonrisa y los niños han salido a la carretera corriendo a saludarnos repitiendo sin parar - hello, hello, hello... nos sentimos Felipe y Leticia, saludando a un lado y a otro desde la moto. Los Laosianos aquí son encantadores, como en las otras zonas del norte de las que venimos, que gusto!- pero el internet es super lento... sobre todo por la tarde, cuan-do todos los mochileros se conectan con el mundo exterior!- y sigue haciendo un frio que pela... sigo saliendo cada noche con la manta polar en una bolsa y me enrollo con ella en el restaurante para cenar (ande yo caliente, y ríase la gente)Y así, tranquilamente, han pasado estos 3 días y nos hemos juntado os grupito de 7 para hacer el trekking “Akha Experi-ence” en el norte...

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12th Jan 2009 - 15th Jan 2009“Akha Experience” en Muang SingCompartiremos experiencias estos días, somos un grupo de 9 y una buena mezcla: 2 esta-dounidenses, 2 irlandesas, 1 china, 1 suizo y 1 española, mas 2 guías laosianos (uno de ellos de la tribu Akha). Hay muy buen entendimiento y el ambiente es muy agradable para explorar y conocer la cultura Akha.

Durante el trekking, andamos unas 6 horas al día, ya que nos paramos a visitar a lo largo del recorrido por las montañas entre China y Laos una docena de poblados Akha, descubriendo paisajes preciosos y sobre todo un pueblo y un estilo de vida completamente diferente al nuestro. La 1ª comida en el trekking “Akha Experience” es ya una experiencia: “Menu Akha : búfalo seco, sticky rice y cacahuetes” . Llevábamos andando 4 horas y llegamos al punto de encuen-tro a la hora de comer muertos de hambre. Nos esperábamos unos bocatas fríos y nos llevamos una sorpresa al ver que nos esperaban una pareja de la minoría Akha con la comida ya lista: empezamos a salivar al ver la presentación de la

comida. Pero nos hemos alegrado demasiado pronto, el búfalo era seco (tipo cecina) pero es-taba durísimo, las verduras realmente picantes y el sticky rice frio... nos salvaron los caca-huetes (que acompañan toda comida Akha) y unas piezas de fruta que andaban rodando por la mochila. Vamos bajando por los montes, acercándonos al primer poblado Akha. Delante de mí, va la señora Akha que nos ha preparado la comida, con chanclas y sus típicas mochilas-cesto de mimbre, las mujeres Akha y sus cestos son inseparables. Nosotros con nuestras botas de montaña y el último modelo de mochila con 10 cremalleras y correas cada una con una fun-ción especial: qué contraste en la manera de cubrir necesidades entre nuestras sociedades.

Nos quedamos a dormir en albergues que denominan “eco-lodge” a las afueras de los poblados. Gracias a los paneles solares nos podemos dar una ducha calentita y tenemos todavía para un par de bombillas hasta las

11 de la noche. La cena la preparamos a la lumbre, hecha sobre una piedra en medio del albergue. Las mujeres Akha del poblado nos vienen a preparar la cena al albergue, vesti-das con sus trajes Akha típicos, menu Akha de nuevo para la cena : búfalo (esta vez gui-sado, sigue tan duro como el del mediodía), sticky rice y cacahuetes” . Después de cenar, dos sorpresas: -Fiesta: los niños del pueblo han subido hasta nuestro albergue para cantar canciones típicas de su cultura para nosotros, cada una de ellas con una coreografía especial, ¡son un encanto!-Akha SPA: la gran sorpresa nos la dan a última hora. Cuando estábamos muertos de sueño y de cansancio - entre las 7 horas de caminata y después de haber “probado” casi 1 litro de lao-lao (aguardiente de arroz): llega la hora del masaje. El pueblo Akha es un especialista de los masajes, cada noche las mamas hacen masajes a sus maridos y a los niños, forma parte de su medicina tradicio-

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nal... Las mujeres tienen una fuerza tremenda en los dedos y te van presionando en puntos concretos por todo el cuerpo, es un masaje tónico pero muy agradable, dormimos como bebes...

Las casas típica de los poblados Akha son de madera y sobre pilares, con el tejado de paja y un gran porche donde pasan la mayoría del tiempo. En ellas viven varias generaciones, abuelos, padres e hijos. Como no tienen agua corriente en las casas, lavan la ropa, las verduras, se duchan todos en la fuente del pueblo. Una de las actividades cotidianas de las mujeres Akha antes era ocuparse de los teji-dos, desde hilar hasta tejer en telares, todo a mano. Sus trajes los cosen sólo con telas artesanas... Hoy en día todavía se ocupan de estas tareas, aunque solo cuando no tienen trabajo en el campo.

Estamos a muy pocos kilómetros de la fron-tera china, las montañas que vamos viendo al fondo pertenecen ya a la provincia china de Yunnan. En esta zona de Laos están defore-stando muchos de los montes para plantar árboles de caucho y vender posteriormente el caucho a fábricas chinas, un paisaje un tanto desolador y una pena a largo plazo. Lamenta-blemente ellos sólo ven el corto plazo, tienen trabajo y un puñado de kips suficientes para dar de comer a la familia.

Todos - abuelas, mamás, papás y herma-nos pequeños- llevan a los que no saben andar todavía colgados en la espalda con un simple pañuelo y tapaditos con una toalla o manta. Me sigue impresionando el cariño y el cuidado que tienen los hermanos mayores con los pequeñitos... todo el día con ellos a cuestas, ocupándose de ellos mientras los padres están trabajando en el campo. Desde los patios de los colegios hasta en los monasterios, nos llama la atención unas redes como de volley ball. Son para jugar al Kataw, una especie de volley-ball donde solo se toca la pelota (que es de mimbre y muy ligera), con los pies. Es, sin duda, el deporte nacional. En los patios de los colegios vemos también muchos niños haciendo rodar un neumático con un palo... ¿quién necesita la ultima Play Station para pasar un buen rato?

Luang PrabangDe Luang Namtha a Louang Prabang, sólo 300 km de distancia, 11 horas: salvando los obstáculos naturales (montañas) y técnicos (el motor hizo varios amagos de dejarnos tirados, pero aguanto hasta el final). Con una breve parada para comer de 30 minutos, tiempo justo para unos “fried noodles”. Llegamos por fin a Luang Prabang, son las 10 de la noche, hay que buscar un hotelito – bastante fácil, la ciudad está lamentablemente “plagada” de hoteles y casas de huéspedes.

La ciudad de Luang Prabang nos ha hechizado. Louang Prabang: la colonial, la misteriosa, la romántica, la tranquila, la de la realeza, la cálida... y los días van pasando...

Pasearse por su casco antiguo es una gozada, en cada calle se entremezclan los tejados rojos y empinados de los templos y la arquitectura de estilo colonial Francesa-Indochina, además del recinto del palacio real. En la calle Sisavang Vong, el eje principal del casco antiguo, muchas de las casas de la época colonial han sido reconvertidas en hoteles, pastelerías, spas y

tiendas. Uno de los hoteles más emblemáti-cos es el boutique-hotel “Les 3 Nagas” que ocupa una preciosa mansión colonial. Un ambiente que te envuelve y te envía a la “belle epoque” de la ciudad. Si tienes la suerte de poder reservar una habitación en Les 3 Nagas, pedid que os vayan a recoger al aeropuerto en el Mercedes de época (nosotros únicamente sacamos la foto).

Además, en Luang Prabang no hay práctica-mente coches (están prohibidos en el casco antiguo). Para desplazarse todo el mundo utiliza los tuk-tuks de 3 ruedas - suelen ser mo-tos a las que le han añadido el carrito con los asientos. Y como siempre, hay que negociar los precios.

Hay más de 30 templos Budistas Therava-das, pero sin duda el más impresionante es el templo de Wat Xieng Thong, the Golden City Monastery, una joya. Además de ser uno de los más ricos en historia de Laos por haber sobrevivido a guerras, fuegos y restauraciones.

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Entramos por la puerta secundaria sobre las 4 de la tarde (con un calor aplastante al que ya no estamos acostumbrados) y enfrente nos en-contramos con la Capilla Roja, decorada con espejos multicolores que representan escenas de la vida diaria. El Sim o capilla principal del templo es la joya del recinto. Su tejado, de varias alas curvadas, van solapándose unas encima de otras hasta llegar casi hasta el suelo. Una obra “digna de admiración”.

Otra de las visitas obligadas es al Palacio Real, en el centro de la ciudad. La monarquía Laosi-ana era bastante “humilde” comparada con la tailandesa o los emperadores vietnamitas, pero tuvieron todos los lujos de la época – están expuestos coches, vajillas, prensa de la época, TV, regalos diplomáticos, etc. El templo de Haw Kham, que está en el recinto del Palacio Real, acaba de ser renovado y el resplandor de sus decoraciones en oro deslumbra a la luz del día.

Los atardeceres en Luang Prabang son míticos, admirar la puesta de sol sobre el rio Mekong desde lo alto del monte sagrado Phon Si o al borde del rio desde el templo Wat Pha Bang es algo que no te puedes perder. Y una vez que el sol se ha acostado sobre el rio Me-kong, el “Night Market” o mercado nocturno es el centro de animación. Ocupa gran parte de la calle Sisavang Vong y puedes encontrar toda la artesanía local: un sinfín de artículos que podrás comprar directamente por los artesa-nos de la región.

Y si ya has hecho el tour de la ciudad de Luang Prabang, hay muchas excursiones de un día por los alrededores que merecen más que la pena: -Una de las excursiones más populares de Luang Prabang es la visita a las cuevas Pak Ou, que se suele hacer a primera hora de la mañana para poder admirar el amanecer desde el rio Mekong. Salimos en barca hacia las cuevas desde Louang Prabang subiendo el Mekong, el trayecto dura 2h y hace un frio terrible. La bruma cubre el rio y no podemos casi ver las orillas, pero al ir llegando a la entrada de las cuevas el sol consigue disipar la bruma y nos descubre un entorno precioso. Esta visita más que bonita es interesante por lo curioso de las cuevas: con el tiempo, se han ido acumulando más de 6.000 Budas, viejos Budas estropeados y desfigurados que los fieles han ido trayendo porque ya no pueden venerarlos en los templos en ese estado.

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Además las cuevas están justo enfrente de la confluencia del rio Nam Ou - el que habíamos navegado desde Muang Khoua hasta Muang Ngoi - con el rio Mekong, y las colinas en la confluencia son preciosas.

A la vuelta, parada en el pueblo Ban Xang Hai, aunque todo el mundo lo conoce como Whiskey Village, porque la fabricación de Lao-lao (licor de arroz) es muy importante.Durante el paseo en barca de vuelta al muelle, también podemos vemos como las mujeres van muy pronto a ocuparse de los huertos – los huertos se suceden de manera casi in-intermi-tente a ambas orillas del Mekong hasta Luang Prabang como alfombras verdes que mueren en el rio Mekong.

-Otra interesantísima visita en los alrededores de Luang Prabang (y que no hay que perderse) es la visita a uno de los talleres de seda de la zona, la seda laosiana está convirtiéndose en todo un referente en este mercado. Nosotros visitamos el taller de la asociación Mulberries (http://www.mulberries.org/) donde trabajan mujeres de la zona. Pasamos media tarde en buena compañía y muy bien atendidos: pudi-mos ver el hilado a mano, los tintes naturales y el trabajo en los telares. Y por supuesto, decidimos comprar unos cuantos regalos, unos pañuelos de seda natural preciosos, un éxito seguro!

-Un pequeño puente de bambú sobre el rio Nam Khan une el centro de Luang Prabang con el pueblo de Ban Sang Khong , donde trabajan el papel natural. Paneles de lienzos de papel natural decorado con hojas y flores secándose al sol en cada puerta del pueblecito.

-También pasamos un día muy divertido en un campo de elefantes, el “Camp XL” , un campo que apoya un proyecto de ayuda a elefantes. Cuando sabes que Laos era conocido como “la tierra del millón de elefantes” cómo perdérselo? Pasamos media mañana dando un paseo a lomos de una Sra. Elefanta de 60 años, incluso atravesamos un rio con ella, eso si acompaña-dos por su mahout (cuidador) personal. Además las Tad Se Waterfalls están a un paso – en barca – y puedes darte un baño muy refrescante.

Han pasado 10 días desde que llegamos a Luang Pragang y tenemos que salir rumbo al sur, pero podríamos quedarnos otros 10, es una ciudad maravillosa.

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Ya has tomado la decisión. Lleva-bas varios años pensándolo, pero en el último momento siempre surgía un destino mejor: más cercano, más económico, más “accesible”. Sin embargo, con la bajada de precios en los billetes de avión de los últimos años, y teniendo en cuenta el bajo coste de vida del país, poco a poco las excusas se habían agotado. Ahora, no hay vuelta atrás. Te has decidido: vas a viajar a India.

Tienes el pasaporte, el visado y el billete; ya sólo te queda… mentalizarte. Tu avión aterriza en Delhi, y si bien todo el subcon-tinente indio supone un choque cultural muy fuerte con respecto a cualquier cosa que hayas podido ver hasta la fecha, la capital del país multiplica cualquiera de estas sensaciones por diez. La con-taminación, el ruido, el tráfico y las grandes aglomeraciones, pueden incluso ser “demasiado” y echar para atrás a aquellos que en algún momento se hubiesen planteado conocerla.

No obstante, quien esté dis-puesto a darle una oportunidad, a no tomarla como simple lugar de paso antes de adentrarse en el estado de Rajasthan, o de comenzar a recorrer el Ganges, se encontrará, no sólo con el enorme abanico de posibilidades y atractivos que reúne dentro de si la propia ciudad, sino también con que, digerida poco a poco, la ciudad de Delhi llega a entrar tan bien como su propia comida, hasta que ya no seamos nosotros, sino nuestro propio cuerpo, quien nos pida cada vez más.

Para mi primer acercamiento a la capital india, establecí, ya antes de la partida, contacto con uno de los 13 millones de habitantes que oficialmente pueblan sus calles. Buscaba algo que una agencia no pudiese darme, una visión más cálida de una ciudad que no sólo es capital de uno de los países más grandes y poblados del mundo, sino también el hogar de

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Delhi

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a

Texto y fotos: Carmen Pérez del Olmo Teira

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muchas personas; algo que la may-oría de nosotros parecemos olvidar cuando viajamos a estas grandes metrópolis y nos limitamos a ver los cuatro monumentos de turno.

A mi anfitrión la idea le pareció estupenda, y no sólo me acogió en su apartamento como a una her-mana durante los cinco días que permanecí allí, sino que no dejó de hablarme de sus costumbres, sus tradiciones y su vida; desde los as-pectos más generales y conocidos, como pueden ser sus rituales de nacimiento y muerte, hasta curiosi-dades aparentemente irrelevantes, como qué estaciones de metro suelen estar más frecuentadas, a qué hora y por qué, detalles que al fin y al cabo configuran el perfil de una ciudad y el carácter de sus habitantes.

El territorio escogido para nuestra primera inmersión en la ciudad fue Old Delhi. El casco antiguo de la capital no otorga las mismas concesiones que pueda conceder su parte más moderna: aquí no hay grandes edificios gubernamentales, ni tiendas de marca. La vieja Delhi supone dejar atrás todo nuestro mundo conocido, para adentrarnos en un laberinto de olores, colores y sabores, que pueden llegar a bloquear nuestros sentidos más de una vez, si no somos capaces de administrar tal cantidad de estímulos.

Nuestro recorrido comenzó en el Fuerte Rojo, una fortaleza del siglo XVII, mandada construir por orden de Shah Jahan, el emperador mongol que también fuera artífice del Taj Mahal. La majestuosidad de los edificios que aún se conservan y la opulencia de sus salas nos ayudarán a hacernos una idea de la época de auge de esta civilización.

Una vez terminada esta visita, nos sentimos preparados para adentrarnos en las callejuelas de la vieja Delhi, o Shahjahanabad, como era conocida en un principio. Justo enfrente del Fuerte comienza la arteria principal que recorre este

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gran barrio: la calle de Chandni Chowk, a menudo embotellada a causa de los cientos de coches, motos, rickshaw, carros, vacas y personas que, al mismo tiempo, tratan de hacerse un sitio en la calzada. Sin duda, uno de los momentos más sorprendentes de mi viaje fue al reparar en que, sobre el ruido de los cláxones y los gritos de los vendedores de chai, todavía se escucha el canto de los pájaros.

Si no vais con demasiada prisa y podéis permitiros un par de horas para callejear a vuestro antojo, no tardaréis en daros cuenta de que, dentro de ese aparente caos, reina un orden claramente estab-lecido. Os encontraréis rodeados de cestos llenos de cacahuetes y dátiles, pimienta y jengibre: es el famoso mercado de las especias; un poco más ad-elante, girando una calle aquí y otra allá, un barrio repleto de librerías, y en cuyas aceras se amonto-nan los tomos que no se podrían leer en toda una vida. Y siempre, miréis donde miréis, sijs, parsis, hindúes, musulmanes…conviviendo en perfecta armonía. Seguid a estos últimos, probablemente se dirijan a Jama Masjid, la mezquita más grande de India, construida muy cerca del Fuerte Rojo.

Pero, sin duda, si algo ha hecho famosa Old Delhi es su comida. Personas de cualquier clase social,

casta o condición, vienen desde todos los puntos de la ciudad únicamente a por el almuerzo, la cena, o un simple aperitivo. Carros de manzanas, cacahuetes y plátanos se suceden a los puestos de dulces, katcho-ris, o las conocidas samosas, buñuelos triangulares fritos, rellenos de carne o verduras, y generalmente muy especiados.

Si se trata de vuestra primera vez en India, tened cuidado: la comida es deliciosa, pero no apta para estómagos delicados. Tal vez sea mejor comenzar con algo suave, como sus económicos y populares thalis (menús consistentes en arroz, dhal –lente-jas-, verduras, yogurt y chapati -tortas de harina sin levadura-, entre otras cosas), donde podremos variar el nivel de picante a nuestro gusto, hasta que nos sintamos preparados para probar algo más fuerte.

Justo al contrario de lo que hemos hecho con la ciudad. Si hemos sido capaces de sobrevivir a nue-stro primer día en la vieja Delhi, donde se encuentra concentrado lo mejor, pero también lo peor de este país, el resto de la ciudad será coser y cantar. No sería raro, incluso, que tras esta experiencia la parte moderna nos resultase demasiado descafeinada y no tardásemos en volver a Chandni Chowk a por un garam masala, admitiendo así que, las emociones fuertes, como el curry bien condimentado, al final enganchan.

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Texto y fotos: Ana B. Muñoz

Nuestra ruta nos mostrará la India más auténtica para los bolsillos más pequeños, se trata de descubrir los encantos reales de la India. Partiendo de Delhi, una ciudad cosmopolita y abierta hasta el nacimiento del Ganges en pleno Himalaya, seguiremos después este mítico río hasta la ciudad sagrada de Benarés

NUEVA DELHI

Llegamos a Nueva Delhi donde pasaremos en la zona de Paharganj unos días para ver sus encantos: el mercado, las tiendas de antigüedades, etc., y es la zona por donde paran los turistas, se puede encontrar lo más auténtico de la India a menor precio.los alojamientos que se pueden encontrar por la zona no ofrecen ningún tipo de lujo pero son económicos y la comida de los restaurantes está adaptada al gusto occiden-tal, y es segura.Es una ciudad de contrastes, pese a su aspecto tiene un metro muy moderno y limpio que no tiene que envidiar a ningún metro europeo.

Es la ciudad más cosmopolita junto con Bombay y podemos visitar los mercados de móviles y cámaras de fotos, pudiendo encontrar auténticas gangas.

En estos mismos hoteles venden los billetes de transporte para diferentes puntos del país y para nuestro próximo destino, Rishikesh.

ruta

Delhi-

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2_RISHIKESH

A partir de aquí nuestros viajes los compartiremos principalmente con nativos de la zona en coches o jeep y son la forma más rápida y barata para disfrutar de las hermosas vistas y sufrir con las tortuosas car-reteras que ascienden lentamente por las montañas prehimalayas.

3_UTTARKASHI

La siguiente parada Uttarkashi situado a 155km de Rishikesh, ambos pueblos pre-himalaya situados a la rivera del Ganges y parada obligada por sus hermosos parajes, donde encontra-remos la vida de una aldea india que no se deja contaminar por el turismo occidental. Existen diferentes ashrams y dharamsalas (albergues para per-egrinos) donde por unos pocos euros encontraremos un alojamiento austero pero limpio.

4_GANGOTRI

Desde allí nos dirigiremos a Gangotri último pueblo antes de comenzar nuestra expedición al glaciar de Gaumukh, llamado la boca de la vaca, nacimiento del Ganges situado a unos 4000 m de altura.

Recordad que si no queremos sufrir el mal de altura, es recomendable pasar unas no-ches en Gangotri, visitar su templo y disfru-tar de la mezcla de alpinistas occidentales y peregrinos hindúes venidos de todas las partes del país. La comida allí suele tener sus limitaciones y básicamente su dieta es vegetariana.

El trekking es un camino en el que encon-traremos ciertas dificultades para un no iniciado pero fácilmente superables, puede hacerse en varias etapas, pernoctando en los diferentes albergues que encontramos a nuestro paso. Si queremos subir al glaciar necesitaremos llevar crampones y bastones para no resbalar ya que el camino asciende por el glaciar hasta el campamento base situado en las faldas de los picos más altos 7800m.

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Allí disfru-taremos de

las vistas más impre-

sionantes y bellas del

Himalaya indio.

himalaya

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RISHIKESH

La vuelta pasa por los mismos pueblos, una vez que llegue-mos a Rishikesh podremos disfrutar de unas clases de yoga o masajes ayurveda que se ofrecen en la zona, esto es a elección, ya que esta “ciudad” es considerada la capital del yoga y es famosa por haber recibido a los Beatles en los años 60 siendo estos los que inauguran el turismo a la India. Por lo que el misticismo depende de los euros que quieras gastar.

BENARÉS

De Rishikesh a Benarés existe una combinación de autobús hasta Haridwar donde cogeremos un tren hasta Benarés.

Benarés o Varanasi ciudad de más de 2000 años enamora a cualquiera que se deja llevar por su pequeñas calles y sus ghats

donde podremos observar las pujas (oraciones), en el mismo sitio donde se bañan o lavan la ropa y a pocos metros de sus

ghats crematorios. Es imprescindible detenerse en esta ciudad unos días y dejarse impregnar por su cotidianeidad y sus gentes, donde además se percibe el sentido místico de una forma espe-cial y real y pudiendo pasear tranquilamente sin el acoso de los

vendedores hacia los turistas que se padecen en otras zonas de la India como por ejemplo el Rajastán.

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Texto y fotos: Olivia Careño

Norte de Luzón, descubriendo las otras caras de Filipinas

7107 islas componen el archipiélago filipino. No sorprende que la mayoría de los turistas lleguen hasta este ale-jado país buscando infinitas playas de arena blanca, remotas islas tropicales y deslumbrantes fondos submarinos de categoría internacional. Pero Filipinas es mucho más: volcanes, parques naturales, ríos subterráneos, etnias y poblados tribales, mezcla de influencias extranjeras y fusión de culturas (china, japonesa, española, es-tadounidense,…). En Filipinas se mezcla Oriente con Occidente, lo tradicional con lo moderno, y lo mundano con lo extraordinario. Otro rasgo distintivo es que es el único país cristiano de Asia. Se puede escoger entre infinidad de destinos y cada uno con sus propias peculiaridades. Nosotros nos hemos propuesto explorar el norte de la isla de Luzón para descubrir precisamente ese lado menos conocido del país, que combina historia colonial, etnias y naturaleza. Luzón es la isla más grande e importante del país. El norte de la isla está vertebrado de norte a sur por la Gran Cordillera Central, cordillera que actúa como barrera natural para el via-jero, muy pocas carreteras penetran el norte de Luzón y las que lo hacen, están en malas condiciones. Planeamos un circuito por el norte de la isla con Manila como punto de salida y llegada.

diario de ruta por filipinas

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diario de ruta por filipinas

Primera parada: Vigan, la cuidad más española de FilipinasVigan es la villa colonial española mejor conservada en Asia, mérito que le ha valido para sumarse a la lista de ciu-dades Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. Para nosotros ha sido una delicia pasearnos por sus calles empe-dradas, admirar su arquitectura donde se mezcla el diseño de los edificios filipinos y las técnicas de construcción y plani-ficación europea de la época colonial y por supuesto, deleitarnos con los platos típicos vigueños, que tienen la mayoría un toque español. Llegamos después de un viaje desde Manila interminable, más de 10 horas con paradas en cada pueblo - pero con rec-ompensa nada más bajarnos del autobus las preciosas vistas de la Plaza Salcedo, cruzar la Plaza Burgos y dirigirnos hacia la casona colonial donde se encontraba el hotelito GranPa, donde al final nos hospedamos. La cereza en el pastel, la cena en el restaurante Felisa enfrente del hotel: carne a la brasa y “pula-pula”, unas albóndigas de berenjenas deliciosas,... To-davía tenemos fuerzas para ir a estirar las piernas por las calles empedradas alrede-dor del hotel: vemos iluminadas de noche

la casa Caridad, la funeraria L. Boquiran situada en una casa colonial preciosa - con una calesa aparcada delante que utilizan como coche fúnebre , la catedral San Pablo de estilo Barroco anti-terremotos - estilo que hasta hoy desconocíamos, con pare-des muy anchas, enormes contrafuertes en el exterior y el campanario separado de la iglesia, para evitar que en caso de terremoto se derrumbe encima de ella, el histórico Restaurante Casa Leona, el Arzo-bispado de Nueva Segovia (como se llamó la región en su día),... Y es que todo en el casco antiguo de Vigan tiene aire español. La estancia en Vigan promete, pero ahora nos vamos destrozados a la cama.Al día siguiente, después de desayunar como es debido el típico longsilog” vigueño - que no es ni más ni menos que huevos fritos con longaniza y por supuesto arroz, (no olvidemos que estamos en Asia), nos dirigimos a la oficina de turismo situada en la calle Crisologo, la más bonita y mejor conservada del casco antiguo de Vigan. La oficina de turismo nos decepciona: está atendida por un “segurata” que se ocupa más de su perro San Bernardo que de los turistas (el chucho se está muriendo de calor, debemos estar a 35°C) , y nos

despacha con un triste folleto sobre las visitas que no hay que perderse sin más explicaciones. Nos fiamos de nuestra intuición y nos paseamos por las calles del casco antiguo, llegamos a la casa Syquia, una magnifica casa solariega, perfectamente renovada ya que en su día fue residencia del 6º presidente de Filipinas, el Sr. Elpidio Quirino. La planta baja está llena de suvenires personales de la época presidencial - fotos de la visita a España del Presidente Quirino con su hija Vicky (que hizo las veces de 1ª dama porque su madre fue asesinada por los japoneses en la invasión filipina en la 2a Guerra Mundial) fueron recibi-dos por el Generalísimo en Madrid, y un sin fin de fotos y regalos que recibió el Presidente... La primera planta guarda todo el sabor de antaño, en lo que llaman en tagalog (idioma nacional) “el salón” parece como si estuvieran organizando una recepción oficial para esta misma noche: la mesa puesta con las mejores vajilla, cubertería y cristalería; en la “la sala” encontramos retratos de la familia, sillones de madera y mesitas, que invitan a sentarse y pasar la mañana allí, al fresco.

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Una curiosidad de las casas coloniales de Vigan son las celosías. Todas las ca-sas tienen galerías con grandes celosías - grandes ventanas correderas con el enrejado de madera y la parte central de conchas casi transparentes.Por la tarde tenemos que abandonar las visitas para ocuparnos de otra cosa menos interesante pero necesaria: el tema económico. Sacar dinero en los cajeros fili-pinos es toda una aventura. La mayoría de bancos limita el importe que puedes sacar en una operación a 4.000 Pesos filipinos, que es menos de 60 euros; otros bancos ni aceptan las tarjetas Visa extranjeras... Recorremos más de media docena de bancos en Vigan - en todos tienen un par de seguratas con metrallletas en la puerta que imponen respeto y un cartel que dice “depositen aquí sus armas antes de entrar”. Por fin encontramos el MetroBank que no solo acepta nuestra tarjeta sino que nos deja sacar hasta 10.000 pesos, queda fichado para todas las futuras disposiciones de efectivo que necesitemos.Al final de la tarde, y para olvidar el calor y el stress que hemos pasado en los bancos, nos montamos en una de las calesas que nos llevan ofreciendo todo el día - Do you want a tour in “Calesa”, Madam?. Recor-remos el casco antiguo y nos damos un paseíto por otra zona de gran interés: el Museo Padre Burgos, el Ayuntamiento, todos ellos edificios de la época colonial.Acabamos el día en el Restaurante Casa Leona, situado en una de las casas so-lariegas más bonitas del centro de Vigan. Ocasión ideal para probar otro plato típico de la zona: el “Bagnet”, tocino de panceta hecho a la barbacoa, uhm… La visita a Vigan, a pesar de estar alejado de los circuitos turísticos más clásicos de Filipinas, ha sido muy emocionante.

Hacia La Cordillera, pasando por Baguio y BontocDejamos la provincia de Illicos Sur, donde se encuentra Vigan, para dirigirnos hacia la región de la Cordillera, concretamente al pueblecito de Sagada, en el interior de la isla de Luzón. Geográficamente la Cordillera linda con Illicos Sur, pero en la realidad filipina eso significa una vuelta de casi 300km. porque la carretera Cervantes que une las dos provincias esta de obras actualmente.En el periplo, tenemos que cambiar de bus

en Baguio, la ciudad más grande del norte de Luzón, aunque no nos parece nada atractiva. Una vez en Baguio, cogemos el autobús hacia Bontoc, cerca de Sagada, donde tendremos que quedarnos a dormir y coger el 1er jeep-ney de la mañana para Sagada.En total, un viajecito de 15 horas de autobús. Hemos empezado, a nivel del mar, en Vigan a las 6:30 de la mañana y llegamos a Bontoc, a 1.800 m de altitud, a las 9 de la noche y habiendo pasado por el puerto de montaña más alto de la red de carreteras Filipinas a 2.250 m. La parte positiva, la temperatura de Vigan a Bontoc ha bajado considerablemente, por fin podemos dormir de un tirón y sin ventilador.

2ª parada: Sagada, poblado de ritu-ales paganosSagada, un pequeño pueblo encallado y per-dido en el corazón de la región de La Cordil-lera, en el norte de la isla de Luzón. Una de las pocas zonas donde el sermón de los evan-gelistas españoles no consiguió entrar y las tribus “Kankanaey” siguen realizando rituales paganos...El lugar más curioso de Sagada son sus acantilados en el Valle del Eco, aunque no es especial por las formaciones naturales, sino porque es donde se encuentra el cementerio. Se trata de un “cementerio colgante” al que llegamos atravesando altos acantilados de

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piedra caliza y un bosque de pinos que no se caen cuesta abajo de milagro, y contemplamos asombrados los ataúdes colocados en la pared de roca, sujetos por barras de hierro. Para rizar el rizo de lo curioso, observamos que cuelgan junto al ataúd las sillas en las que han sentado a los muertos antes de amortajarlos. Nos cuentan que la tradición local obligaba a que cada persona se fabricara su propio ataúd y a su muerte era llevado dentro de él al acantilado, con la intención de que el alma de la persona muerta pueda disfrutar de la naturaleza en compañía de los espíritus que moran en los bosques.Para tranquilizarnos, nos explican que se trata de una costumbre milenaria, que hoy en día

esta prácticamente en desuso ya que los muertos son sepultados bajo tierra - salvo excepción del día de todos los muertos, el 1 de noviembre, en el que siguen colgando algún ataúd.Pero los miembros de la tribu Igorots –la tribu de la zona, que significa “gente de las montañas”-tienen otras costumbres ancestrales que siguen celeb-rando hoy, como los rituales en los que sacrifican cerdos y gallinas para pedir al dios del arroz que les ayude con la cosecha. En nuestra visita tuvimos oportunidad de ver la riera de sangre, el cerdo despedazado, a los hombres Igorot ataviados con su tradicional taparrabos - y “bastante animados” por cierto - los cantes y danzas habían acabado…

3a parada: Banaue y Batad: “The Stairs to Heaven” (“escaleras del paraíso”)Sus habitantes las proclaman la Octava Maravilla del Mundo y pertenecen al Patri-monio Mundial de la Humanidad. Nosotros solo podemos añadir que es un lugar espe-cial, impactante y espectacular. Las terrazas de arroz de la región de Banaue tienen 2000 años de antigüedad y fueron talladas en las montañas por los Ifugao - o “los negritos”, como los llamaron los conquistadores españoles - con un mínimo de equipo y en gran medida a mano, por eso explican, con orgullo, que es la obra de ingeniería mas importante hecha por el pueblo filipino, sin influencia extranjera, y todavía en uso. En los interminables tramos de escaleras, los Ifugao siguen cosechando el arroz al modo de sus antepasados gracias a un sistema de regadío a base de tuberías de bambú por los cuales discurren riachuelos canalizados a través de las terrazas.Llegamos a Banuae desde Bontoc en jeep-ney por una pista que están transformando en carretera - eternas obras, como en mu-chos otros sitios de los que hemos visitado en Filipinas. Benditos jeepneys y benditos motores, son todo un icono filipino y sin duda los reyes de las carreteras y caminos. Hoy no habríamos pasado la 1a cuesta en un bus normal! El paisaje que va desfilando ante nosotros nos anticipa lo que nos espera en la región de Banaue. Además, como vamos solos en el jeepney - sin clientes locales - Miguel, el conductor, se va parando en algunos miradores para que podamos admirar el paisaje y sacar alguna foto.Nos hospedamos en el Sanofe Lodge, donde la propietaria dirige el negocio a toque de pito desde una sillita al fondo de la entrada – en un plis, nos pone al tanto de las actividades y excursiones en los alrededores, queremos hacer un trekking que incluya el pueblecito de Batad, pero hay muchas opciones... después de media tarde estudiando las posibilidades, nos decidimos por un trekking de 2 dias, durmiendo en Batad y sin guía...Salimos al día siguiente, salimos empa-quetados en el tricycle de Henry hacia la famosa “jonction”, o cruce: 1h para recorrer un tramo de 11 km. de pista, sin gran interés porque hay mucho tráfico. Primera parada: el pueblecito de Banga-an, maravillosas vistas

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de las terrazas desde el mirador que domina el valle. Lo negativo: el pueblo de Banga-an está bastante explotado turísticamente porque el acceso es mucho más sencillo que el de Batad (20 min. de escaleras en vez de 3h). De Banga-an nos quedamos con la imagen de una viejecilla, arrugada, a la que solo le que-dan pellejo y huesos, que está completamente encorvada de haber pasado toda su vida doblada ocupándose de los campos de arroz, y pensamos que seguro que los niños que juegan hoy por las calles del pueblo tendrán un futuro mas fácil... La otra cara de la moneda son las terrazas, de las que se teme por su futuroya que las nuevas generaciones se están volcando en el turismo y muy pocos deciden dedicarse a trabajarlas y mantenerlas.En la “jonction” nos despedimos “hasta maña-na” de Heny y empezamos la caminata hasta el pueblecito de Batad. Después de 3 horas de “subidita” y de “bajada, bajada y más bajada” llegamos a Batad. Se “nos aparece” detrás de una curva la oficina de turismo, es una taquilla en la que damos una donación para el mantenimiento de las terrazas. Justo detrás de la taquilla, el espectáculo: el pueblo de Batad encajado como un pequeño escenario en el centro de este monumental anfiteatro de ar-rozales en terraza. Pasamos la tarde como las cabras montesas, subiendo y bajando arrozales en terraza, desde un mirador al otro, parándonos, admirando el paisaje, sacando fotos y repitiéndonos a cada parada que el espectáculo que tenemos ante nuestros ojos es sin duda una de las maravil-las del mundo. Tenemos que confesar que, después de pasar 7 meses en Asia, admi-rando arrozales en terraza, veníamos un poco “escépticos” con las terrazas de Banaue... pero al final, han sobrepasado con creces las expectativas. También hay que mencionar que las cabañas aborígenes de la tribu Ifugao son realmente curiosas. En la entrada, las escaleras de madera cuelgan de 2 serpientes de madera e impiden el paso a casa si no hay nadie y varias calaveras de animales encima de la puerta hacen huir a los malos espíritus; las 4 paredes son de madera y están talladas con motivos del cultivo del arroz para favorecer la cosecha y Bulol, el dios del arroz, aparece en un sitio de honor, al lado de la puerta. Bulol es la divinidad

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más venerada en la región de Banaue por las bondades de su arroz y sus figuras talladas en madera son uno de los iconos de la artesanía local.Guardamos un recuerdo muy especial del “Viewhill Inn” y desde aquí recomiendo que, si algún día os dejáis caer por estos parajes, os alojéis allí. Es una casa de huéspedes muy modesta y básica, pero las vistas desde su comedor son las mejores y nos trataron como de la familia... Por la tarde, calentaron agua para una ducha templadita - ducha manual, por supuesto. Después, llegó Josefina para darnos un masaje, que nos dejo como nuevos. Al día siguiente, la Sra. Marua, la patrona del “Viewhill Inn”, nos prestó sus trajes típicos de Ifugao y nos vestimos con los atuendos tradicionales para preparar una sorpresa fotográfica a unos amigos (parece ser que las fotos han causado furor en casa). No tuvimos palabras para agradárselo...Después de admirar varias docenas de veces el valle de Batad para asegurarnos que quedaba grabado en nuestra memoria, salimos hacia Cambulo, un pueblecito al que final nunca llegamos porque las obras de la carretera que están construyendo creaban desprendimientos de roca y tierra y encon-tramos el paso un poco arriesgado... aunque los del pueblo tienen que pasar todos los días si quieren comunicarse con el resto del mundo. Esperamos durante 2h el jeepney que nos llevaría de vuelta a la jonction y la pista principal hacia Banaue, aunque no porque no fuéramos caminando acababa ahí la aventura. El jeepney que enlaza Cambulo con el mundo pasa por unos caminos que ni el rallye Paris-Dakar... otra vez nos sorprendieron la destreza del conductor y la potencia del motor para sacarnos de “terrenos pantanosos” - en uno de los puntos críticos hasta tuvieron que sacar pico y pala y ponerse a allanar el terreno para pasar... De hecho, en temporada de lluvias, el pueblo queda incomunicado, y viendo el “caminito” no me extraña.Después de 2 días muy emocionantes llenos de encuentros, admiración por la obra humana y cansancio, llegamos a Banaue: una ducha, una cena y a montarnos en el bus de noche que nos llevara - con una temperatura polar, les encanta el aire acondicionado - hasta Ma-nila, donde llegamos a las 5 de la mañana.... listos para ir al hotel y meternos en la cama.

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Texto y fotos: Cristina Montero

Tailandia es un país de grandes dimensiones, por lo que recor-rerlo puede llevarnos bastante más tiempo del que tengamos para disfrutarlo, así que una buena recomendación es plani-ficar los días en packs de 3 o 4 para disfrutar de cada zona a la que se decida viajar y dejar un par de días de sobra para por si decidimos quedarnos 1 días más en un sitio que nos gustó o si decidimos a mitad de camino que queremos cambiar de ruta. La ventaja es que, aún siendo el turista más despistado del mundo podrás viajar sin perd-erte, ya que hay muchos medios de transporte para sacarnos de un sitio, tanto en autobús, tren, avión (muy recomendado para grandes distancias) o el coche particular de un paisano autóc-tono que por un módico precio estará encantado de llevarnos al fin del mundo. La gente thai está más que acostumbrada a los turistas y en las zonas en las que no lo están tanto (por ejemplo la región de Isan, es una zona bastante poco turística en la que disfrutar de la gente, la comida, las costumbres y

los paisajes más auténticos de Tailandia) también estará dispuesta a ayudarte, por eso es mundialmente conocido por ser el País de las Sonrisas. Son personas muy hospitalarias y respetuosas y será una de las cosas que más agradable haga el viaje. Por eso es bastante importante conocer ciertas costumbres y normas de edu-cación básicas, como ir tapado en los templos, saludar y son-reír siempre que os atiendan en algún sitio y estar pendiente de descalzaros siempre que sea necesario, porque incluso en muchos comercios la gente también se descalza para entrar.

En nuestro viaje la guía Lonely Planet fue de bastante ayuda sobre todo para localizar sitios donde dormir y medios de transporte cuando nos movi-mos de un sitio a otro y la ruta fué susceptible de cambio en 3 o 4 ocasiones. Hay países en los que improvisar puede darnos problemas, pero Tai-landia no es uno de ellos. Aún

tailandia

en 15 días

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así hacer un pequeño planning de las cosas que más nos interesa ver será un buen punto de partida, y aquí va un ejemplo para 15 días:

La primera noche la pasaría en Bangkok tranquilamente, un buen sitio es el http://www.starryplace.com, está bastante céntrico y muy bien comunicado con el aeropuerto. Es un buen barrio thai de clase media y hay mil sitios para comer. Lo bueno de la zona es que no hay demasiados ex-tranjeros y para los que quieran ir empapán-dose del lugar está bien pasar la tarde en el barrio comiendo algo o disfrutando de

un masaje tailandés. Por ejemplo a unos 50m del Starry Place, en la esquina de Rangnam Road y Ratchaprarop, hay un sitio de masajes estupendo para recuperarse del viaje, uno thai tradicional de los de semillas para empezar a disfrutar por un más que módico precio (unos 300 Bth que son como 6 euros aprox). Al lado hay una marisquería muy popular donde se cena de muerte.Si os apetece salir del barrio, por la noche te puedes dejar caer por Kaoshan Road (es una calle para guiris mochileros muy mítica para tomar unas cervezas). Si se prefiere ver cómo disfruta la gente de Bangkok mejor ir al RCA, para ambas opciones hará falta ir en taxi.

KRABI Y KO PHI PHI : 5 días y 4 noches en Krabi y Ko phi phi (+1 noche en Bangkok a la vuelta)Mejor volar en el primer avión hasta Krabi desde Bangkok y según la hora, pasar ese día viendo la isla y por la tarde coger un barco de popa larga a Railay (a Hat Rai Leh West). Entre Railay y Ao Nang hay un montón de playas y acantilados muy boni-tos. Para dormir cualquiera de los sitios que recomienda la Lonely estará bien, pero www.railaybayresort.com es increíble, y está en la mejor playa, Hat Rai Leh West. Desde allí se puede coger un ferri a Ko phi phi otro par de noches para disfrutar de un día a la isla de la película de “La playa” (

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organizan excursiones en todos lados), y otro a bucear. Para volver, ferri a Krabi de vuelta y a Bangkok. Depende de a qué hora se llegue compensa quedarse a dormir en Bangkok y seguir viajando al día siguiente. Un consejo seria ir a pasar al menos una noche en el www.baiyokehotel.com, un impresionante rascacielos de 84 plantas en el centro de la capital para disfrutar de las vistas nocturnas de la ciudad y cenar en su restaurante, y si no se duerme allí, al menos merece la pena tomar un cocktel en el Pub de música en directo que hay en la última planta.

Pack2: KANCHANABURI Y AYUTTHAYA: 3 días y 2 noches en Kanchanaburi primero y luego otros 2 días y 1 noche en Ayutthaya, la antigua capital de Tailandia que sorprende por la cantidad de templos y ruinas que hay por toda la ciudad.Desde Bangkok en tren prontito desde Bangkok Noi Train Station en Thonburi hacia Kanchanaburi. El tren es muy cutre pero merece la pena el viaje. Una vez llegas a Kanchanaburi hay que ir por la carretera en dirección al puente. Hay bastante distancia entre la estación y el puente, tal vez 1,5km, pero no hay perdida porque solo hay una car-retera y casi llegando al puente esta la Bam-

boo House, un sitio genial. Hau un cartelito en la carretera y bajando un camino en dirección al rio te la encuentras. El tfno y el mapa vienen en la Lonely, y se aconseja reservar para poder tener un bungalow encima del rio, muy chulo, tranquilo y barato. Una vez allí se puede ir paseando a ver el puente esa misma tarde y aprovechar para contratar las excursiones desde la recepción, como la ruta del Ferrocaril de la Muerte, trekking con elefantes o ver las cascadas del Erawan. Al siguiente se puede ir a primera hora al Tem-plo del tigre a pasar el día. Hay que llamar por teléfono el día que se llega a Kanchanaburi y pedir la visita larga, para aprovechar el día desde por la mañana y tomar el té con los cachorros,

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aunque normalmente en los hoteles suelen ofrecer la visita corta. La visita acaba a las 5 de la tarde más o menos, así que hay tiempo para ir a la estación de autobuses de Kanchanaburi y coger uno en dirección a Suphanburi y de ahí coger otro a Ayutthaya. (Advertencia: en todos los hoteles hay contratación de furgonetas para ir a Ayutthaya. No lo hagas. Te meten en una monovolumen petada de gente que pasa por Bangkok. En autobús tardas lo mismo pero ves más sitios).El tuk tuk es el medio de transporte más común de Tailandia para cortas distancias, mucho más que los taxis, y en Ayutthaya no será distinto, sin embargo con total seguridad el conductor que te lleve al sitio donde te alojes se ofrecerá para hacerte el tour a todos los templos al día siguiente por unos 1000 Bth, (siempre te intentan cobrar más pero ese es un precio más que razonable), y es una buena manera de ver la ciudad, porque hay muchísimos templos y están a grandes distancias por lo que será como tener un chofer para todo el día, además, la mayoría de las veces es el propio conductor el que te cuenta parte de la historia de cada templo. El día siguiente se puede emplear en coger un tren a Lopburi, la Ciudad de los monos. Merece la pena pasar parte del día allí viendo los dos templos que hay llenos de monos y por la tarde volver a Bangkok.

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Pack3 BANGKOK: 3 días y 2 noches. El primer día en Bangkok se puede emplear en ir a los templos, El Gran Palacio y visitar el mercado de amuletos. Esta todo al lado y se puede ir paseando. La etiqueta en los templos es en todos la misma, se deben tapar hombros y rodillas y llevar pantalones largos. En algunos de ellos si no tienes con qué taparte ellos te lo prestan. (Advertencia: es posible que desde las 15 a las 18h ningún taxi te quiera llevar desde la zona de los templos a tu hotel a causa del tráfico. De ser así pedidles que os lleve a la estación de Skytrain más cercana, será en ocasiones, y especialmente si está lloviendo, la única manera efectiva de moverse por la ciudad.Por la tarde noche se puede dar un paseo por Patpong, el barrio rojo de Bangkok, donde hay un mercado nocturno y un montón de Bares-espectáculo de gogo´s donde te ofrecerán entrar a ver el famoso espectáculo de la “pelota de Ping pon”…), pero es bastante curiosa la mezcla de familias de guiris paseando entre todo aquel vicioso berenjenal.Otro día se puede emplear en ver, a primera hora el Wat Saket, un templo muy bonito que hay en un monte en el centro de Bang-kok. Después se puede ir hasta China Town para callejear, perderse por allí y comer algo. Esta cerca del Wat Saket y se puede ir andando siguiendo uno de los canales.Por la tarde por ejemplo de compras el centro comercial MBK y el Siam que es la parada de Skytrain está todo lleno de tiendas. Por la noche si te quedan fuerza puedes coger un taxi e ir a ver Soi Cowboy (para ver a que se refiere la gente con lo de la ciudad del pecado) y luego salir por los locales cool de Sukhumvit, como el Q bar (parada de metro “Nana”).Los sábados abre el mercado de chatuchack, por lo que está genial si lo haces conincidir con tu último día de viaje, por que así no tienes que ir todo e viaje cargando con las compras. El mercado es enorme y venden absolutamente de todo, y a pesar de que cuando entras entre los puestos temes perderte entre el caos, en realidad está todo dispuesto por zonas, y para los que no sean capaces de orientarse, mejor coger un mapa de los que dan en la entrada. Está en la parada de Skytrain de “Mochit”.

Si haces cuentas de los días veras que he dejado unas 2 noches sin cubrir. Mi consejo es que si estáis a gusto en algún lado te quedes, por ejemplo una noche más en alguna isla como Ko yao, otra isla cercana a Ko phi phi muy bonita, pasar allí una noche, y luego ir a Phuket a coger el avion a Bangkok en lugar de a Krabi, o pasar un día más en Bangkok e ir a ver un combate de muay thai, el deporte nacional, al estadio Lumpini, o emplearlos en adentrarse en el nordeste tailandés después de visitar Ayutthaya hacia la provincia de Nakhon Ratchasima que cuenta con abundan-tes restos históricos de la época Angkor y una

importante industria de la seda. De hecho algunas de las mejores sedas de Tailandia proceden de Pak Thong Chai, a 30 km de Khorat y desde allí seguir hacia Buriram, “La Ciudad de la felicidad”, en cuya provincia se encuentra el Prasat Hin Khao Phanom Rung, un hermoso templo construido en la cima de un volcán extinto, de estilo jemer y el más grande y menos restaurado de toda Tailan-dia. Se encuentra algo apartado de las rutas turísticas pero su visita merece la pena…En fin, las opciones son infinitas y por eso es un viaje que garantiza segundas y terceras partes...

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Texto y fotos: Alberto Vargas (http://www.destinosatumedida.com)

Hay destinos que se rodean de un encanto especial según la época del año en que son visitados. La Alsacia, una pequeña provincia francesa bañada por el río Rin, frontera natu-ral con la vecina Alemania, se llena de magia llegando cada año la Navidad.No tan conocida como otros destinos navide-ños como Laponia, la Alsacia, desde finales de noviembre hasta finales de diciembre, es la descripción del paisaje descrito en cuentos de Papa Nöel y que de niños (y no tan niños) hemos tenido en nuestra imaginación alguna vez: casas abuhardilladas de diferentes colores pastel, enormes pinos adornados con diversos adornos y luces, guirnaldas decorando las puertas de las casas, música de villancicos salida de no se sabe muy bien donde y si se tiene un poco de suerte, todo este escenario cubierto por una pequeña capa blanca de una reciente nevada que hace que olvidemos el espíritu comercial que ha ido adoptando la Navidad para volver a ser niños.

Aunque se disponga de pocos días, merece la pena recorrer toda la provincia, ya que su extensión no es excesivamente grande. Si se dispone de vehiculo propio o de alquiler, la

mejor opción para desplazarse, se puede fijar un único lugar de alojamiento y moverse libre-mente regresando en el mismo día al punto de partida.

Estrasburgo, referencia en el panorama político europeo por ser sede del parlamento de la Unión Europea, es la capital alsaciana y un buen punto de referencia para iniciar el recorrido. Famosa por su catedral y su casco antiguo rodeado de canales, queda iluminada todas las tardes por las miles de bombillas de su transitado y famoso Marché de Noël o mercado de Navidad que se lleva celebrando desde la Edad Media. Al norte, alejándonos de las alborotadas calles de Estrasburgo, se encuentran cercanos pueblos como Hoffen, Seebach o Hunspach clasificado en muchas guías como uno de los pueblos más bellos de Francia.

Rumbo hacia el sur, no debemos pasar por alto los pueblos de Obernai y Barr para pos-teriormente, camino de Sélestat, desviar un poco nuestro itinerario para visitar el Castillo de Haut-Kœnigsbourg, bien conservado y que en un día claro nos permitirá ver la gran extensión de viñedos que hacen que estas tierras sean conocidas en todo el mundo por sus diferentes vinos.

Colmar, en el centro de la provincia, es una de las localidades más visitadas. Disfrutar de la multitud de puestos de su mercado navideño, donde destacan las artesanales decoraciones de las bolas de navidad y las miniaturas de casas existentes en el propio municipio, permite resumir lo que se vive durante este tiempo en cualquiera de los pueblos alsacianos.

En los alrededores de Colmar, se aglutinan diversas poblaciones con un encanto especial, siendo difícil poder destacar una sola por encima de otras. Recomendamos Ribeauville, Eguisheim, Kaysersberg y Riquevir aunque perderse por cualquiera de ellas merece la pena.

También es buen momento para visi-tar esta región la primavera donde sus balcones se adornan de geranios que decoran sus calles y los viñedos colorean de verde el paisaje, pero la experiencia de pasear entre las casas iluminadas y el olor a leña quemada saliendo de las chime-neas rodeado por un ambiente navideño recreado a partir de un cuento lo record-arás, año tras año, cuando lleguen estas fechas.

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Texto y fotos: Blanca de Ugarte

unas vacaciones de ensueño

Llegar hasta allí fue una auténtica odisea. Utiliza-mos todos los medios de transporte disponibles para salir de la gran ciudad y encontrar la paz: avión, autobús, tren, barco y coche. Seis horas de viaje merecieron la pena para llegar al paraíso: l´île d´Yeu.

En esta pequeñísima isla francesa se convirtieron en realidad las vacaciones de nuestros sueños. En sus nueve kilómetros de largo y cuatro de ancho encontramos todos los pequeños plac-eres del verano ideal. Disfrutamos de una vida relajante y saludable en uno de los rincones más encantadores del Atántico.

Allí el sol calienta y broncea, pero sin asfixiar; en sus playas, grandes y pequeñas, con espacio suficiente para todos, uno consigue un verdadero relax después de un año de intenso trabajo. Y como la película, en una isla donde los coches son prácticamente inexistentes, la bicicleta se convirtió en nuestra compañera de un verano de lectura, amigos, sol, comida sana y naturaleza.

L´ île d´ Yeu tiene dos caras: la que mira al conti-nente y la llamada “salvaje”. La costa continental invita a pasear con largas playas de arena fina mientras que, las calas de la “sauvage” trans-miten la tranquilidad ideal para leer, por ejemplo, una novela del libanés Amin Maalouf, autor que precisamente escribe en Yeu todos sus libros.

L´île d´ Yeu

Son “playas-bibliotecas” en las que reina de forma natural el silencio.Los baños en Yeu son inolvidables. El agua del Atlántico es ideal para convertir la ansiedad en entusiasmo y para acabar con los nudos musculares acumulados durante invierno. Nos sentíamos más sanos que nunca cuando, a primera hora de la mañana, nos sumábamos a los adictos a la isla que acuden a la playa más cercana de su casa para nadar durante media hora antes de desayunar. ¡Qué sensación de ligereza y frescor!De regreso a casa para disfrutar de un buen café, ni siquiera sufríamos con el pedaleo de la bicicleta pues apenas encontramos empinadas cuestas y caminos incómodos. Gracias a que los isleños y los veraneantes se niegan a intro-ducir más coches en la isla, los paseos en bici son tranquilos y poco arriesgados. Además de un sano y gratificante ejercicio físico, propor-cionan aires de libertad mientras contemplá-bamos la belleza de la variada costa de la isla.Junto a los paseos cerca del mar, Yeu nos invitó también a adentrarnos en su pequeño interior. Disfrutamos en un picnic a la sombra de los pinos de un delicioso surtido de quesos franceses con un rosado como maridaje.Hacer la compra es un placer. En los puestos del mercado del puerto se ofertan productos ecológicos, tomates con sabor, pescado fresco y flores salvajes. Allí todo es fotografiable: las contras azules que decoran los exteriores de las típicas casas de la isla, el musgo de las rocas, los girasoles,

las puestas de sol sobre sus acantilado, la pes-cadería del mercado, el puerto y sus barcos, las bicicletas, el mar…El esfuerzo para llegar hasta allí merece la pena. Situada al sur de Nantes, es preciso desplazarse hasta el puerto de Fromantine, que se encuentra una hora de la ciudad, para coger el barco. Desde París, hay un TGV directo hasta la estación de Nantes donde espera un autobús que se dirige a Fromantine y puede reservarse junto al billete de tren.Se puede llegar en coche hasta Fromentine y aparcarlo en uno de los numerosos parkings y garajes que los cuidan durante los meses de vacaciones. Vacaciones en ensueño y relax en las que incluso te ofrecen a la llegada al puerto recoger las maletas y llevarlas al hotel donde la bici nos espera para disfrutar de una experiencia única y privilegiada.

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marruecosTexto y fotos: Noelia Calzada

Comenzaban nuestra semana de vacaciones y no tenía-mos ningún plan, el lunes, se presentaba aburrido delante del ordenador. Entramos en nuestro correo y vimos uno de esos mail que nunca abrimos, con publicidad de una compañía de bajo coste con las que solemos volar habitualmente. La sorpresa fue que podíamos salir al día siguiente de viaje a Marrakech por una tarifa realmente baja. Sin pensarlo compramos los billetes y hicimos nues-tras sencillas maletas en tiempo récord.

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Aterrizamos en Marrakech ciudad caótica donde las haya, sobre todo en los Zocos, que es como se conocen los mercados en Marruecos, el más impresionante es el Zoco de Semmarin, lleno de puestos donde puedes encontrar desde alimen-tos, hasta dentaduras postizas de segunda mano.

Marrakech cuenta con más de 300 mezquitas, pero también embellecen la ciudad los jardines de Agdal y de la Menara. El Palacio Real es una de los monumentos mejor conservados de la ciudad, que además ha sido embellecido dinastía tras dinastía.

La plaza Jamaa el Fna, esta declarada patrimonio oral de la humanidad por la UNESCO, donde se venden frutas y zumos, hay contadores de cuentos, juegos y mujeres que se pintan con henna (tinte natural), es un verdadero espectáculo viviente.

En nuestra estancia de cinco días, callejeamos Marrakech de arriba abajo, nos empapamos de sus olores, de sus espléndidos colores, y sobretodo de su riqueza cultural, pero aún así tuvimos tiempo de huir del bullicio de la ciudad, y pasear por las montañas del Atlas, contratando un taxista en el centro de Marrakech. Visitamos Ourika, y las siete cascadas, que merece más la pena el paseo por la montaña que las cascadas en si mismas.

Tras estos días de turistas por un país tan cer-cano geográficamente, y tan distantes en otros aspectos de la vida social, regresamos a España, con verdaderas ganas de volver a Marruecos pero esta vez por un periodo más largo.

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Texto y fotos: Hector Arenós http://hectorarenos.blogspot.com/

Tras “El Señor de los anillos”, Nueva Zelanda se ha dado a conocer al mundo por sus fantásticos paisajes, un paraíso para los amantes de la naturaleza donde se pueden encontrar lagos, montañas nevadas, fiordos, géisers, ríos, cascadas, vol-canes, etc, además de animales como ballenas, delfines, pingüinos, focas, leones marinos, albatros o el autóctono Kiwi.

Lamentablemente, hay dos zonas preciosas que los turistas no suelen visitar, bien por falta de tiempo, bien por desconocimiento, y eso es lo que os voy a presentar.

En la Isla Norte nos encontraremos con el volcán más activo de Nueva Zelanda, The White Island, una isla-volcán a 43 kilómetros de la costa que nos recuerda a Marte o la Luna y a la que se puede llegar por barco (jornada completa entre visita y trayectos) o en helicóptero (media jornada).Visitar la White Island tiene sus riesgos, y por eso es por lo que sólo puedes ir allá con guías acreditados. El volcán está más activo que nunca, y todo puede acontecer. La isla fue explotada como mina de sulfuro hasta 1914 cuando, durante una erupción, murieron todos los mineros que había en la Isla, los recuerdos de aquella época todavía siguen visibles en las ruinas de la mina.Pocas cosas que hacemos en nuestra vida, pueden ser comparadas a quedarse en el borde de un cráter en llena actividad. Tiene días que el cráter está más tiñoso, y en otros más angelical. El hecho es que la actividad no para, y con ella nos sentimos diminutos ante las fuerzas de la naturaleza. El olor de azufre es pesado, y la columna de vapor que emana del cráter principal (son 3 cráteres) puede llegar a la 10.000 m. de altura. Fumarolas y fisuras en las paredes laterales, ex-pelen gases con gran presión, siendo que en algunos puntos, azufre es expelido junto. Al cristalizar, el azufre se hace de un tono amarillo de los más bonitos que se pueda imaginar. El colorido y el paisaje dentro del cráter, son al mismo tiempo desoladoras y fascinantes, algo totalmente lunar.

nueva zelandaisla norte e isla sur

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Ya en la Isla Sur, conviene explorar the Catlins, en la costa Suroeste de la isla. Es una zona bastante despoblada (unos 1200 habitantes) y donde todavía quedan muchas carreteras por asfaltar. El área de The Catlins cubre un total de 1900 km² teniendo una forma casi triangular, extendiéndose hasta 50 km hacia el interior de la Isla y sobre un total de 90 km de costa.Existen varios puntos de interés en este rincón de Nueva Zelanda entre los que destacaremos:

- Cascadas de Pura Kaunui, se accede a ellas caminando unos 10 min. por un bosque de hayas y otros árboles de hoja ancha.

- Cascadas de McLean, las vemos tras un paseo de 1 hora (i/v) a través de un bosque de helechos. Esta cascada está en el río Tautuku y tiene una caída de 22 m.

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- Nugget Point, un cabo con vistas a pináculos ondulados (grandes rocas) en el mar, donde se alza un faro de 1869. La zona acoge colonias de focas, leones marinos, alcatraces pingüi-nos…

- La cueva de Catedral, accesible sólo con marea baja y que se alcanza tras un paseo de 1 hora i/v a través de un bosque a lo largo de la playa. La entrada de la cueva más grande es de 30 m. de altura.

- Porpoise y Curio Bay, bahías situadas una junto a la otra, siendo en esta segunda donde nos encontramos con restos fosilizados de hace 160 millones de años de un bosque jurásico. Es fácil encontrarse con delfines nadando cerca.

- Waipapa Point, escenario del peor desastre naval del país, ya que murieron 131 personas tras chocar un barco con un arrecife oculto. Hoy existe un faro junto al que viven una colo-nia de leones marinos.

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turismo ornitológico: el arte de la observación de aves

Texto y fotos: Octavio Infantes

La estratégica situación de la península Ibérica, paso vital en las rutas migratorias entre Europa occidental y África, junto con una gran diversidad de ecosistemas y hábitats, de momento, bien conservados, hacen de nuestro país uno de los princi-pales destinos del ornitoturismo dentro de Europa. La posibilidad de observar más de cuatrocientas especies de aves, entre reproductoras, invernantes y de paso, así como la existencia de numerosos ende-mismos en las Islas Canarias, no pasa de-sapercibido para la cada vez mayor legión de ornitólogos españoles y extranjeros. Por supuesto, también ayuda el hecho de que las aves sea un grupo de animales fácil de observar en libertad en la naturaleza, muchas de ellas con comportamientos muy atractivos y bastantes confiados hacia el ser humano.

Y son precisamente estos ornitólogos o aficionados a la observación de las aves los que en su ansia de nuevas y excep-cionales observaciones también requieren unas comodidades que hagan disfrutar por completo de su afición. Estas comodi-dades no son otras que una oferta hotelera amplia y diversa y unos servicios públicos acordes con las necesidades para el desar-rollo de esta actividad, como pueden ser observatorios para la observación de las aves o centros interpretativos de la zona. Todos estos condicionantes son agrupados por el término Turismo ornitológico.

A estas alturas, a nadie se le escapa que este tipo de turismo está en auge pero también aún se encuentra en pleno desarrollo. Por este motivo, nos encontramos ante la delicada situación de que se realice una planificación adecuada para que los propios recursos que lo permiten, que son las aves, no se vean perjudicadas. Muchas de las aves que atraen a los observadores se encuentran con prob-lemas de conservación, estando algunas de ellas bajo específicos proyectos para intentar paliar dichos problemas.

Precisamente debido al auge de este tur-ismo, se ha despertado el interés de nuevas iniciativas empresariales privadas dirigidas específicamente a este sector. De esta forma, las empresas que ofrecen este turismo con servicios de guía, especialistas, casas rurales, etc…, han comenzado a consolidarse debido al aumento de la demanda de sus servicios. El Birdwatching puede suponer una fuente de ingresos extra a la zona donde se realiza con mayor intensidad debido a la concentración del recurso. A la vez se produce una percep-ción positiva en las poblaciones locales en torno a la conservación de la naturaleza y de las aves y sus hábitats en particular. Además, aunque aún este tipo de turismo tan especí-fico está en crecimiento está bien considerado como reclamo para generar empleo en el medio rural.

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De esta forma han surgido diferentes empresas privadas dedicadas a facilitar y desarrollar la actividad. Estas empresas deben ser conscientes de la necesidad de que por encima de todo la conservación de las aves debe prevalecer sobre los in-tereses económicos. Así, hace unos años, se creó la Asociación Profesional Espa-ñola de Guías de Observación de Aves (APGOA), que pretende ser un organismo representativo de un colectivo profesional que sea la portavoz ante las diferentes administraciones con el objetivo de la regulación de la actividad. Esta asociación ha desarrollado un código ético que deben seguir todos sus miembros.

Por supuesto las administraciones no son ajenas al atractivo del turismo ornitológico por lo que han comenzado diferentes iniciativas para atraer hasta los lugares más privilegiados a la legión de ornitólogos deseosos del disfrute de esta actividad. Las administraciones han empezado por organizar proyectos como por ejemplo el que desarrolla la Junta de Castilla y León junto con 14 grupos de acción local Leader + y Predercal conocido como TRINO (Turismo Rural de Interior y Ornitología). El objetivo de este programa es promocionar el potencial ornitológico de la región prin-cipalmente en el extranjero haciendo un uso sostenible de la avifauna como recurso para el desarrollo rural.

Otras comunidades autónomas van más allá y se decantan por la organización de ferias ornitológicas como es el caso de la Junta de Extremadura que organiza de forma anual la FIO (Feria Internacional de Ornitología). Este tipo de ferias tienen un precedente y modelo a seguir en el país considerado como la cuna de la ornitología, Inglaterra. En este país se celebra desde 1989 la popular British BirdWatching Fair en la reserva de Rutland Waters. Es visitada por miles de personas y los fondos que se recaudan en esta feria se destinan a proyec-tos de conservación desarrollados por ONG como BirdLife International.

Los principales destinos para la obser-vación de las aves en España son Andalucía (Doñana y área del Estrecho de Gibraltar), Extremadura (principalmente el Parque Nacional de Monfragüe), Pirineos, Islas Baleares y Picos de Europa. La gran may-oría de las estancias se producen durante la primavera y con una media de 4 noches. El mayor número de visitantes procede de Gran Bretaña, Estados Unidos, Canadá, los países escandinavos, Holanda y Suiza. Y entre las especies más solicitadas para su observación se encuentran el treparriscos, la malvasía cabeciblanca, la carraca, el morito o el halcón de Eleonora. También se demanda la observación de comportamien-tos como la migración por el estrecho de Gibraltar.

SEO/BirdLife, representante de BirdLife International en España, considera que el turismo ornitológico puede suponer una herramienta muy eficaz que contribuya al desarrollo rural pero siempre atentos a que se lleve a cabo una planificación de tal man-era que no se genere ningún problema de conservación en forma de molestias a las especies amenazadas. Esta ONG promo-ciona el turismo ornitológico con iniciativas a escala local destacando la reserva de Riet Vell en el Delta del Ebro, donde con sus programas de voluntariado, cultivo de arroz ecológico y promoción de visitas dem-uestra que la conservación puede generar una fuente de ingresos en las economías locales. Otra reserva de SEO/BirdLife es El Planerón, ubicada en los Llanos de Belchite (Zaragoza). Allí se ha construido un centro de interpretación de las estepas y se fomenta el cultivo ecológico de trigo. Este centro supera la cifra de los 5000 visitantes anuales.

Más información:

http://www.seo.orghttp://www.elplaneron.orghttp://www.rietvell.org

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El mundo tiende hacia la libertad de movimientos de las personas a la hora de viajar y traspasar fron-teras. La ciudadanía española lo sabe muy bien, ya que desde el año 1986 formamos parte de la Unión Europea y nuestra libertad de movimiento se amplia día tras día con la anexión de más países a dicha Unión. Igualmente, para viajar a otros países que están fuera de este acuerdo, a la mayor parte de las personas les es suficiente con un visado de mayor o menor facilidad de obtención.

Pero actualmente, las personas que viven con VIH se encuentran en situaciones de vulnerabilidad de-bido a la legislación y las normativas de los países a los que desean viajar, bien sea por ocio, o por cuestiones de trabajo.

Viajar es una de las necesidades del mundo desarrollado en el siglo XX, y sobre todo en este comienzo del siglo XXI, donde el transporte se ha convertido en un bien accesible a la gran parte de la población, y donde el viaje es uno de los medidores de la calidad de vida de las personas. Para las PVVS (personas que viven con VIH/sida), los viajes van asociados con frecuencia a un alto grado de incertidumbre, puesto que las normativas de entrada y residencia difieren de un país a otro.

En el año 1999 la oficina central de Deutsche AIDS-Hife, comenzó un estudio sobre requisitos de viaje y estancia prolongada de las PVVS, realizando un cuestionario a las embajadas extranjeras en Ale-mania, y las embajadas alemanas en el extranjero, obteniendo respuesta de 140 países de los 193 consultados. Posteriormente se completaría la in-formación con otras fuentes como: AIDS info Docu Switzerland, web del Departamento de Estado de Estados Unidos, Publicaciones de ONUSIDA y de la OMS, Información y comentarios de las ONG de cada país, informes periodísticos, boletines de prensa, etc.

Utilizando las fuentes citadas se ha conseguido in-crementar a 170 el número de países que abarca la investigación de la Deutsche AIDS-Hife, careciendo aún de información de 23 países.

Con estos datos, la Coordinadora Estatal de VIH/sida, CESIDA, con la colaboración de la FELGTB y

la Federación Internacional de LGBTI, ha editado en español la Guía de consulta �Normativa de viaje y residencia para personas con VIH/sida�, que está subvencionada por el Ministerio de Sani-dad y Política Social a través del Plan Nacional sobre el sida.

Esta Guía, que se puede descargar en su página web http://www.cesida.org, señala que de los 170 países de los que se dispone de datos, hay 106 de los que se sabe que tienen condiciones especiales de entrada para las personas que viven con VIH/sida, o que -debido a informaciones contradicto-rias- no se puede descartar que las haya.De estos 106 países, 90 exigen hacerse la prueba del VIH. Esto significa que el 62% de los países tienen normas que discriminan a las personas VIH positivas.

Entre las normativas sobre la entrada y salida, hay que diferenciar entre aquellas que se aplican a turistas, es decir, personas que se desplazan a un lugar fuera de su lugar de residencia por un periodo entre 30-90 días, y aquellas que perma-necen un periodo prolongado fuera de su lugar de residencia habitual. La buena noticia es que para estancias de turista, rara vez suponen un pro-blema, incluso cuando se trata de personas con VIH/sida. Sin embargo, para estancias prolonga-das, como pueden ser estudios, trabajo, etc., se necesita un permiso de residencia.

Por regla general, los requisitos de entrada para las personas que viven con VIH/sida se aplican cuando se va a permanecer en un país durante más de un mes. La presentación de la prueba del VIH se solicita junto con el permiso de residencia, depen-diendo de la duración de la estancia. En la mayoría de los casos, si el resultado es “VIH+”, se niega el permiso de entrada. Una vez que se ha cruzado la frontera, las autoridades podrían expulsar como personas extranjeras no deseadas.

Los países que expulsan a los extranjeros que dan positivo en la prueba del VIH son: Brunei, Cuba, Iraq, Corea del Norte, China, Corea del Sur, Kuwait, Libia, Malasia, Taiwán y Tailandia

En algunos países de Asia y Oriente Medio, hay personas que mientras esperaban a ser deportados a sus países de origen, han muerto mientras esta-ban retenidas sin tener acceso a un tratamiento.

En la actualidad son 13 los países que niegan completamente la entrada a personas que viven con VIH. Estos países son: Armenia, Brunei, Iraq, Qatar, Corea del Sur, Libia, Moldavia, Omán, Federación Rusa, Arabia Saudí, Sudán y China, que podría levantar próximamente la prohibición de entrada de cara a la Expo Shangai, que se celebra el año que viene. En esta lista están también los Estados Unidos de América, aunque saldrá de ella el año que viene, según ha anunciado el presidente Barack Obama.

VIH/sida

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cuando viajar no es tan fácil

Hasta donde llega el alcance real del problema.

Hoy en día no se conoce el alcance real de la normativa que se aplica a las personas que viven con VIH/sida. No existe ninguna organización ni sistema que recoja los casos pertinentes de forma global y realice informes. El alcance real de las normativas es todavía más incierto debido a que no se aplican las leyes existentes, o única-mente las aplican algún personal funcionario.

El número estimado de personas que viven con VIH/sida ronda los 33,4 millones en el mundo. En el año 2000 hubo aproximadamente 698 millones de llegadas y salidas internacionales en todo el planeta. Hay aproximadamente 191 millones de personas que trabajan y viven fuera de su país de origen.

A la vista del gran número de países con requi-sitos de entrada que discriminan a las personas VIH+, la Deutsche AIDS-Hife e.V sigue con su empeño de recopilar datos exhaustivos, para demostrar que las personas que viven con VIH/sida están en desventaja y sufren discriminación a nivel global.

Una pesada carga para las personas con VIH/sida

Para adquirir un visado de residencia en mu-chos países del mundo las administraciones incluyen preguntas sobre el estado general de la salud, por ejemplo ¿Padece alguna enfer-medad infecciosa?. En el caso de las personas seropositivas que viajan y no respondan con franqueza, se enfrentan a tener que ocultar los medicamentos y a tener que dar la impresión al funcionariado de que están perfectamente sanas. Si se opta por decir la verdad, se debe tener en cuenta que podrían negarle la entrada.

Es frecuente que a la hora de solicitar un visado, o en la frontera, se exija un certificado médico. En ocasiones ocurre que los recono-cimientos son realizados por personal sanitario contratado por las embajadas de los países de destino, y tan sólo aquellas personas que se sometan a estas normas pueden optar por acceder al país seleccionado.

Sucede habitualmente que muchos países piden a las personas extranjeras que se sometan a un chequeo rutinario, que puede incluir la realización de la prueba del VIH, y por supuesto es la persona interesada la que debe pagar dichos procedimientos, que en países como Austria puede ascen-der a 500€, lo cual ya supone de por sí una discriminación hacia las personas que es-tán más desfavorecidas económicamente.

Cuando son organismos los que se encar-gan de contratar personal laboral extranje-ro, se realizan más controles. En el sector sanitario es imprescindible que la prueba del VIH sea negativa para que te inviten a una entrevista. Además hay otras instan-cias, como empleadores de las universida-des, donde se suele insistir abiertamente en la prueba del VIH como requisito indis-pensable para conseguir un empleo o para acceder a una beca de estudios.

Pocos, pero también hay ejemplos positi-vos.

Hay algunos países que en los últimos años han moderado o han dejado de aplicar normativas. Activistas Canadienses sobre VIH consiguieron un cambio en los requisitos de entrada para los visados de corto plazo, con motivo de la preparación de la Conferencia Mundial sobre Sida de Toronto, en 2006. En el futuro, que las per-sonas con VIH/sida puedan participar en la conferencia será un criterio fundamental para que la realización de dichas conferen-cias en países que no restringen el derecho a la movilidad de personas que viven con VIH/sida mediante requisitos de entrada discriminatorios.

El ejemplo de Canadá debe servir de ánimo para dar respuesta al estigma y la discriminación que afecta a las personas que viven con VIH/sida y que constituye la base de las legislaciones discriminatorias de este tipo.

Consejos para viajar con el VIH

Informarse de la normativa aplicable respecto a la entrada de personas que viven con VIH en el país de destino, tanto para estancias como turista, como para estancias de residencia.Para la entrada en países con normativa ambigua o restrictiva, mientras que no se sepa que existe seropositividad, no habrá problemas graves para el turista. No obstante, si se sospecha que alguien es VIH positivo, o si las autoridades tienen razones concretas para creer que es así, se le podría negar la entrada (esto sucede actualmente en China y en Estados Unidos, aunque todo parece indi-car que habrá cambios en estas normativas a partir de 2010). Para evitar problemas, se recomienda no exhibir símbolos como el lazo rojo u otros distintivos cuando se entra a esos países.En el caso de personas que toman medicación para el VIH, esta necesidad de discreción crea un ver-dadero problema puesto que tienen que llevar los medicamentos con ellos. Se recomienda guardar las medicinas en otros recipientes.Según las circunstancias, merece la pena llevar consigo un certificado en inglés que señale que el paciente necesita esos medicamentos y que han sido recetados por personal médico especializado.Otro aspecto a tener en cuenta es el de los requisitos de vacunación de algunos países. Para las personas con VIH/sida, algunas de estas vacunas no plantean problemas, mientras que para otras presentan riesgos para la salud, como por ejemplo la de la fiebre amarilla, por lo que se recomienda tratar dichos temas previamente con su especialista o con un centro de vacunación.

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cuando viajar no es tan fácil

Comienza un nuevo año y, sin demora ni tregua al cuerpo, comienza también la temporada de festivales: del 2 al 6 de enero se celebra en Logroño el festi-val Actual 2010. Y con este van veinte ediciones, casi nada. ‘Actual, Escenario de Culturas Contemporáneas’ se celebró por primera vez en 1991 y ofreció un ciclo de poética musical, proyecciones de cine, talleres de radio, exposiciones y mesas redondas sobre cine, vanguar-dia, censura, literatura y moda. Y por supuesto música, la gran vertebradora de este festival.

‘Actual’ dará comienzo el día 2 con la actuación del acróbata francés Denis Josselin, paseando entre las torres de la concatedral de la capital riojana. Si te gusta el cine en versión original estás de enhorabuena, el festival programa once largometrajes de estreno entre los que destacan ‘La cinta blanca’ de Michael Hanenke, la ganadora de la Espiga de Oro de la Seminci, ‘Honeymoons’, y las celebradas ‘Welcome’ y ‘Soul kitchen’. Se mantendrán las cuatro secciones que forman la estructura cinematográfica del festival: el Cine del Bretón, el Maratón de Cine, las Mañanas de Cine y el Panora-ma de Cortos.

Con el motivo del 20 aniversario, ‘Actual’ edita su primer libro, “La semana de Kammamuri”, que será presentado por su autor, Bernardo Sánchez. Se trata de un relato basado el entierro que el faquir Kammamuri protagonizó durante 9 días, sin alimentos ni agua en un local de Lo-groño en 1940. La historia también cuenta cómo el más famoso escalador de torres de la época ascendió en esa misma se-mana a las torres de la iglesia colegial de Santa María de La Redonda.

Los conciertos que cada día se celebran en el Palacio de los Deportes vienen con una novedad: los Trasnoches, una sesión de dj para poder alargar la noche un poquito más. Se mantiene el Café Cantante, en el Café Bretón, donde poder asistir a conciertos intimistas en un bar con solera. Y la Matiné, conciertos de lo más granado del indie patrio en La Gota de Leche, muy cerca de la calle Laurel, sin lugar a dudas la más famosa de Lo-groño por aglutinar los mejores bares de pinchos de la capital riojana.

Texto: Tamara García

agenda musical“Actual”

logroño

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Como recién teletrasportada desde cualquier tugurio norteam-ericano de los años 50, la irlandesa Imelda May se está haciendo un hueco a golpe de cadera y tupé en la ola revival. Su disco “Love Tatoo” contiene rockabilly, blues y jazz y sus directos son reforzados por, aparte de su imponente presencia, un bodhram, el pandero irlandés usado en las percusiones. http://www.myspace.com/imeldamay1Domingo 3 de enero. Palacio de los deportes. 21´30 horas.

Los platos fuertes

El sexteto de Brighton The Go! Team, lleva varios años haciendo de la algarabía, los samples y la mezcla de guitarras y hip hop su seña de identidad. Su vocalista, Ninja, es un auténtico terremoto en directo. http://www.myspace.com/thegoteamDomingo 3 de enero. Palacio de los deportes. 21´30 horas.

Run DMC fue un grupo de hip hop neoyorkino muy popular en los años 80 por samplear sonidos rockeros Tan popular que la ciudad bautizó una calle del barrio de Queens con su nombre. El grupo desapareció después de que uno de sus componentes, Jan Master Jay, fuera asesinado a tiros. Pero estamos de enhorabuena, su MC Darryl McDaniels ha regresado a los escenarios.www.myspace.com/dmcLunes 4 de enero. Palacio de los deportes. 21´30 horas.

Bigott, alter ego del Zaragozano Borja Laudo, editó durante el pasado 2009 su tercer disco, “Fin”. Otra entrega de folk psicodélico en la que incluso hay un homenaje en forma de canción -“Algora Campeón”- a su prematuramente desaparecido amigo Sergio Algora, componente de El Niño Gusano.http://www.myspace.com/myspacebigottMartes 5 de enero. Matiné de La Gota de Leche. 12´30 horas.

Tan solo un cuarto de siglo tiene el nuevo rey del soul. Eli “Paperboy” Reed, un robusto chico con cara de bueno de Massachussets, ha sido comparado con dos grandes de la historia del R&B: Otis Redding y Sam Cooke. Dicen de él que es la gran esperanza blanca de la música negra.http://www.myspace.com/elipaperboyreedMartes 5 de enero. Palacio de los deportes. 21´30 horas.

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TURISMO FESTIVALERO

León: la ciudad regia coge ritmo.

Texto: Víctor Álvarez Fotos: Majo G. Polanco

En pocas ciudades es visible con una claridad tan meridiana cómo la música puede llegar a cambiar la fisonomía de una ciudad. Durante sus cinco días de duración, el festival Purple Weekend otorga un nuevo pulso a las calles de León, que fluyen con savia renovada, ebullente de música , cultura, juventud y veteranía. Una estética de ayer que sigue viva y como un aliciente más, nos invita a disfrutar de los tesoros de esta regia ciudad, ya de por si encantadora.La siempre vital capital leonesa se ha converti-do, por derecho propio, en un foco que atrae cada año a miles de turistas, ávidos de disfrutar de su impresionante patrimonio histórico cuajado de irrepetibles arquitecturas, su vida cultural construida en torno a museos, música, tradiciones, gastronomía, y -cómo no- el ambi-ente de sus callejuelas: festivo y animado tanto de día como de noche.Sin embargo, durante el mes de diciembre, la ciudad ofrece algo más que hace que la visita se convierta en una experiencia totalmente diferente. Miles de jóvenes y no tan jóvenes, venidos de todas partes de Europa (10.000

según los organizadores), invaden las calles de León, inundándolas con parkas, camisas ental-ladas, corbatas estrechas, vestidos baby-doll y una marea de scooters. Se trata de los Mods, movimiento subcultural surgido en la Inglaterra de finales de los años 50, pero que -a pesar de lo que pueda parecer- sigue muy vivo hoy en día. La prueba es que pasear durante esos días en León, es sumergirte de lleno en la mítica película Quadrophenia, rodeado de una oleada de mods que como cada año, y ya son vein-tiuno, han acudido fielmente a disfrutar de sus manifestaciones culturales propias y a gozar de las que la ciudad ofrece. Esta edición del Purple Weekend se ha desar-rollado en seis espacios leoneses distintos lo que unido a la variedad de horarios de las actividades programadas, ha posibilitado a los asistentes poder vivir el festival tanto de día como de noche. De este modo, además de con las veinte actuaciones musicales en directo, el movimiento mod ha estado presente en la con-centración Scooter Run, las sesiones nocturnas de Dj’s y una ‘Feria del disco y mercadillo de ropa’, instalada al pie de los conciertos prin-cipales que hizo las delicias de los presentes gracias a los vinilos de coleccionista, la música

de discográficas independientes, las publicaciones y fanzines del movimiento, la ropa vintage y todo tipo de objetos rep-resentativos del estilo de vida de los años cincuenta, sesenta y setenta. Asimismo y con motivo del festival se han realizado en la ciudad dos exposiciones. La primera de ellas ‘50 años de Motown: El sonido de la joven América en España’, sirvió de contra-punto a la presentación del libro homón-imo sobre esta importante discográfica, mientras que con ‘I’m one. 21st Century Mods’ se hizo un recorrido a la pervivencia en nuestro siglo de la subcultura Mod en diversos lugares del mundo.

Imprescindibles

Y es que la mezcla de música y actividades culturales, es algo muy característico de este festival. No en vano, parte de las actuaciones se han desarrollado en espacios como el Musac (Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León), que con más de medio millón de visitantes se ha convertido en uno de los referentes internacionales en Arte Contemporáneo

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gracias al desarrollo de proyectos artís-ticos y exposiciones a todos los niveles, pero siempre con una concepción amplia-mente experimental. Este ha sido el punto de partida para descubrir la ciudad para los festivaleros más madrugadores, que tras los conciertos matutinos celebrados aquí partían a conocer el resto de lugares imprescindibles de la ciudad.Uno de ellos, sin duda, es su Catedral. Este esplendoroso edificio gótico que se comenzó a construir en pleno siglo XIII destaca, además de por su imponente arquitectura, por el conjunto de 125 vid-rieras policromadas de origen medieval, considerado uno de los mejores del mundo en su género. Precisamente, en el marco de su restauración se está desarrollando el proyecto cultural ‘El sueño de la luz’, que permite el acceso a una plataforma situada a catorce metros de altura, desde la que el visitante puede acceder a perspectivas inéditas del templo y sus vidrieras. La visita, que también incluye el claustro de la Catedral, es comentada por guías del máximo nivel que no decepcionarán a los más curiosos.

Otro de los puntos imprescindibles es la basílica de San Isidoro, construcción regia y jacobea que supone una de las más al-tas cotas del arte románico español, pues aquí confluyen en delicada expresión la arquitectura, la escultura y la pintura. Ésta última destaca especialmente en el Panteón de los Reyes de León, que es considerada la ‘Capilla Sixtina del Románico’. La visita, realizada con guías, incluye el acceso a un museo donde se guardan auténticas joyas del arte mueble románico: beatos, tallas, eboraria, cálices, tejidos…Otros espectaculares edificios salpican el centro de la ciudad: el antiguo convento de San Marcos (convertido hoy en un lujoso Parador desbordante de historia), el Palacio de los Guzmanes, la casa Botines –diseñada por Antoni Gaudí-, el Palacio del Conde Luna… Una lista interminable que a buen seguro preparará nuestro án-imo y nuestro estómago para solazarnos en el archiconocido Barrio Húmedo.Por Barrio Húmedo se conoce a la zona que rodea la Plaza Mayor, la Plaza de San Martín o de las Tiendas y la Plaza del

Grano. Aquí el paisaje urbano, caracter-izado por su trazado medieval, se llena de bares, cafés y mesones que hacen de este distrito el templo del «tapeo» y escaparate de las especialidades gastronómicas de la provincia. De este modo se ha convertido en el espacio más típico de la ciudad, en el que poder alternar -y comer- hasta altas horas de la madrugada. Aquí los vinos del Bierzo o los de las Tierras de León, elaborado con la variedad Prieto Picudo -autén-ticamente leonesa-, acompañan una gastronomía muy energética centrada en el embutido –especialmente la morcilla leonesa, aunque también cuentan con gran predicamento la cecina, el chorizo y el botillo típico del Bierzo-, o platos de mayor consistencia como el cocido Maragato, truchas, legumbres, verduras y carnes, que en forma de tapas se sir-ven gratuitamente junto a las bebidas y a buen seguro nos prepararan para seguir disfrutando a continuación de la ani-madísima vida nocturna de esta capital, especialmente durante las noches Mod del Purple Weekend.

En memoria de Leonor García y Piedad Isla.

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I love Travel N4 rutas por Asia

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