Huertos Sociales Ecologicos Andalucia 2014

7/25/2019 Huertos Sociales Ecologicos Andalucia 2014

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Edita: Junta de Andaluca.Consejera de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural

Publica: Servicio de Publicaciones y Divulgacin.Direccin Facultativa: D.G. de Calidad. Industrias Agroalimentarias y ProduccinEcolgica.

Autor: Ral Puente Asuero.Fotografas: Ral Puente Asuero.Foto de portada: Huertos del Parque de Miraflores (Sevilla).Coleccin: Agricultura.Serie: Guas Prcticas.Depsito Legal: SE 2582-2013I.S.B.N.: 978-84-695-9609-8

Puente Asuero, Ral

Gua para la creacin de huertos sociales ecolgicos en Andaluca.-- Sevilla :

Consejera de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, 2013.80 p. : il. col. ; 21cm.-- (Agricultura. Guas prcticas.)

D. L.: SE-1460/2014I.S.B.N.: 978-84-695-9609-8

ndice: Plan de participacin; Proyecto tcnico de los huertos sociales ecolgi-cos; Ordenanzas y reglamentos de uso; Gestin y coordinacin de los huertossociales ecolgicos; Plan de comunicacin; Programa formativo.

Agricultura. -- Agricultura ecolgica. -- Horticultura. -- Participacin ciudadana. --Tcnicas de cultivo. -- Andaluca

631.115.73:631.147(460.35)


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Consejera de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural

GUA PARA LA CREACIN DEHUERTOS SOCIALES ECOLGICOS

EN ANDALUCA


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NDICE DE LA GUA

JUSTIFICACIN ......................................................................... 7

OBJETIVOS................................................................................ 11

ESTRUCTURA ............................................................................ 15

1. PLAN DE PARTICIPACIN ........................................................... 18

2. PROYECTO TCNICO DE LOS HUERTOS SOCIALES ECOLGICOS ..... 23

2.A. ASPECTOS GENERALES................................................. 23

1. Finalidad de los huertos ..................................................... 23

2. Destinatarios de los huertos .............................................. 27

3. Organizacin de las parcelas ............................................. 29

4. Requisitos de acceso ........................................................ 30

5. Calificacin urbanstica del suelo ........................................ 31

6. Eleccin de la localizacin ................................................. 32

7. Propiedad del suelo .......................................................... 34

8. Diseo de parcelas .......................................................... 35

9. Tamao de las parcelas ..................................................... 38

2.B. ASPECTOS TCNICOS ................................................... 38

1. Evaluacin y mejora del suelo ............................................ 38

2. Agua y riego de los huertos ............................................... 39

3. Luz solar .......................................................................... 44

4. Incidencia del aire ............................................................. 455. Infraestructuras y equipamiento necesario ......................... 46

3. ORDENANZAS Y REGLAMENTOS DE USO.................................... 58

4.GESTIN Y COORDINACIN DE LOS HUERTOS SOCIALESECOLOGICOS .............................................................................. 63

5. PLAN DE COMUNICACIN .......................................................... 65

6. PROGRAMA FORMATIVO ............................................................. 67


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Gua para la creacin de huertos sociales ecolgicos en Andaluca

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ANEXOS ................................................................................71

ANEXO 1. MODELO DE SOLICITUD Y SORTEO PARA LAADJUDICACIN DE PARCELAS ................................................... 74

ANEXO 2. Ejemplos de Ordenanzas Municipales ............................ 76

BIBLIOGRAFA Y NORMATIVA ................................................77


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Justificacin


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JUSTIFICACIN DE LA GUA

La publicacin denominada Gua para la creacin de huertos sociales ecol-gicos en Andaluca se encuadra dentro de las actuaciones del proyecto Tran-shabitat con la finalidad de alcanzar en los territorios elegibles los objetivos

que signifiquen la generacin de un desarrollo endgeno socio-econmico yagropecuario sostenible, concretamente en la Accin 4.2 sobre Plan de de-sarrollo sostenible de la apicultura, la agricultura y la pesca. Est financiadopor el fondo FEDER a travs del Programa POCTEFEX -Programa Operativode Cooperacin Transfronterizo de Fronteras Exteriores de la UE-, afectandoa un espacio de la Red Natura 2000 y Hbitats de Inters Comn Andaluca-Marruecos con zonas de actuacin y reas de influencia que incluyen a lasocho provincias de la Comunidad Autnoma de Andaluca y a regiones delNorte de Marruecos.

En los ltimos aos se ha producido la aparicin de huertos sociales en algu-nas ciudades y pueblos de Andaluca. En la mayora de los casos la iniciativaciudadana ha sido la promotora de la creacin de dichos espacios agrcolas,con ejemplos destacables como los huertos del Parque Moret (Huelva), de laChana (Granada), del Parque de la Asomadilla (Crdoba), del Parque de SanJernimo y del Parque de Miraflores (Sevilla), con reconocimientos de carc-ter nacional e internacional.

Los huertos sociales tienen mltiples beneficios para los ciudadanos/as, sien-

do de destacar aquellos:

de tipo social, mejorando la calidad de vida, las relaciones intergenera-cionales, la alimentacin saludable, la salud fsica y psicolgica;

de tipo econmico y sobre el empleo, mejorando la renta familiar denumerosas familias, propiciando el ahorro y el consumo de productoslocales;

de tipo ambiental, favoreciendo la creacin de espacios verdes y difun-diendo la agricultura ecolgica y

de tipo urbanstico, regenerando espacios baldos y poniendo en valorsolares en desuso y suelos abandonados de la actividad agrcola.

En estos momentos, tras el xito social de los huertos ya existentes, se estproduciendo un alud de propuestas en las agendas polticas de ayuntamientosdiputaciones y administracin autonmica.La idea y la voluntad de crear huer-tos sociales se est implantando en la mayora de los 771 municipios de nues-tra comunidad autnoma, ya que suponen una opcin viable para mejorar lasustentabilidad social, econmica, territorial y ambiental de dichos municipios.


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Sin embargo, gran parte de estos ayuntamientos no disponen de la expe-riencia o desconocen qu pautas es preciso seguir para poner en marchaunos huertos sociales en su municipio. La idea de que saber de campo essuficiente para crear unos huertos sociales es errnea, ya que es preciso

manejar, entre otros, conocimientos de tipo legal, social, ambiental y urbans-tico, para que dicho proyecto de huertos sociales sea un xito, tanto para lapropia administracin pblica como para los ciudadanos/as.

Actualmente, los ayuntamientos que desean poner en marcha unos huertossociales estn acudiendo de manera dispersa a mancomunidades, Diputa-ciones, GDRs, distintas consejeras (Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural;Educacin, Cultura y Deporte; Medio Ambiente y Ordenacin del Territorio;Fomento y Vivienda, etc.) esperando recibir una orientacin que en la mayora

de los casos es parcial o ineficaz.

Esto est provocando una continua dispersin de esfuerzos y una gran con-fusin tanto en los Ayuntamientos como en las administraciones provincialesy autonmicas. Dado que en Andaluca se concentran algunos de los mejoresy ms antiguos ejemplos de Espaa, desde la Junta de Andaluca existe lavoluntad de colaborar de una manera organizada en la creacin y gestin delos huertos sociales en Andaluca.

Esta voluntad y compromiso de la Junta de Andaluca tambin trata de con-seguir que los huertos sociales en Andaluca desarrollen tcnicas de cultivoecolgicas, fomentando as el consumo de productos de calidad natural, pro-mocionando conductas de respeto hacia la biodiversidad y animando a unaalimentacin saludable a nios, jvenes y adultos.

A travs del proyecto Transhabitat Asistencia tcnica para el diseo y ejecu-cin de huertos sociales ecolgicos en Andaluca, as como con las futurasactuaciones al respecto, la Consejera de Agricultura, Pesca y Desarrollo Ru-

ral intenta dar respuesta a las necesidades e inquietudes de los andalucesy andaluzas en esta temtica, caminando hacia una red de huertos socialesecolgicos en Andaluca en un futuro no muy lejano.

En este periodo de grave crisis econmica, en el que es preciso poner enmarcha ideas imaginativas que potencien la multifuncionalidad de los pueblosy ciudades, este proyecto para la creacin de Huertos Sociales Ecolgicosen Andaluca puede convertirse en un referente a nivel nacional y situar a An-daluca a la vanguardia en la apuesta por este tipo de espacios con mltiplesbeneficios sociales, ambientales y econmicos.


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Objetivos


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OBJETIVOS DE LA GUA

La presente Gua tiene como objetivo general contribuir a la creacin de huer-tos sociales ecolgicos por parte de los Ayuntamientos, pero tambin por

entidades locales, asociaciones ciudadanas y cualquier entidad pblica y pri-vada interesada en la temtica, siguiendo para ello una serie de pasos quefaciliten que dichos huertos se desarrollen con xito.

Figura 1.Vista de Sevilla desde los huertos del P. Miraflores.

Junto a ello, se pretenden conseguir adems los siguientes objetivos espe-cficos:

Desarrollar experiencias de agricultura ecolgica, favoreciendo la ad-quisicin de conocimientos, valores y tcnicas para la autoproduccinde alimentos por parte de los ciudadanos y ciudadanas, contribuyendoas a la soberana alimentaria.


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Fomentar la utilizacin ptima de los recursos locales y naturales.

Fomentar la relacin y comunicacin entre los vecinos, adoptando ac-titudes de colaboracin y solidaridad.

Motivar la integracin entre las distintas generaciones y colectivossociales.

Mejorar la salud de los ciudadanos/as a travs del ejercicio fsico y laalimentacin saludable.

Favorecer el acceso de colectivos desfavorecidos a alimentos frescosy de calidad.

Garantizar la igualdad de oportunidades y el acceso igualitario a loshuertos sociales ecolgicos de hombres y mujeres.


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Estructura


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ESTRUCTURA DE LA GUA

La presente Gua se organiza en seis grandes bloques que detallan todos los

pasos a seguir en la creacin de unos huertos sociales ecolgicos en Anda-luca por parte de los ayuntamientos, las entidades locales, las asociacionesciudadanas y cualquier entidad pblica o privada interesada.

En primer lugar, se detallan qu circunstancias deben producirse en el muni-cipio para comenzar un proyecto de huertos sociales y ecolgicos, as comoel papel que deben tener los vecinos y vecinas del municipio, organizados atravs de la participacin ciudadana.

En segundo lugar, se concentra el bloque principal de la Gua en donde seespecifica el proyecto completo que debe realizarse para la creacin de unoshuertos. Frecuentemente, se comete el error de considerar que unos huertossociales ecolgicos se crean nicamente parcelando un terreno y repartin-dolo entre los vecinos y vecinas. Para superar esta simplificacin y contem-plar los huertos sociales ecolgicos como un proyecto ms amplio, en estebloque se detallan todos aquellos aspectos a tener en cuenta previamentecomo la localizacin, la calificacin urbanstica del suelo, los destinatarios,el tamao de las parcelas, las infraestructuras y equipamientos necesarios,etc., as como las posibles dificultades que pueden surgir en la creacin y

gestin posterior de los huertos.

En tercer lugar, se destaca la importancia de contar con unas OrdenanzasMunicipales, o en su defecto, un reglamento interno de uso y gestin, en don-de se resuman los derechos y deberes principales que deben regir el ptimodesarrollo de los huertos.

En cuarto lugar, se destaca el papel que juegan los distintos agentes socialesen la gestin de los huertos sociales ecolgicos, asumiendo el rol que corres-

ponde en cada caso a los Ayuntamientos y asociaciones ciudadanas.


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En quinto lugar, se hace especial hincapi en desarrollar un plan de comuni-cacin que explique tanto a los vecinos/as que se convierten en hortelanos/as como al resto de vecinos/as del municipio los objetivos a lograr con laimplantacin de unos huertos sociales ecolgicos en el municipio. Para ello,

se destacan los diferentes cauces de comunicacin existentes as como losmensajes bsicos que expliquen los beneficios sociales, ambientales, territo-riales, etc., que tienen los huertos para el municipio.

En sexto lugar, se realizan aportaciones tendentes a considerar los huertos so-ciales ecolgicos como un espacio educativo tanto para los vecinos/hortelanoscomo para el resto de los ciudadanos y ciudadanas del municipio. Los huertossociales ecolgicos, ms all de la produccin de alimentos, pueden convertirseen espacios de intercambio intergeneracional, transmisin de saberes populares,conocimiento de la cultura de la tierra y del ciclo del agua...

Por ltimo, se aaden diversos anexos con informacin complementaria sobrecmo elaborar un sorteo de parcelas y ejemplos de ordenanzas municipales.

1. PLAN DE PARTICIPACIN

La participacin ciudadana es una de las claves estratgicas para el xito delos huertos sociales ecolgicos.La necesidad de abordar un proceso de par-ticipacin social para la organizacin y gestin de unos huertos parte de laidea de que los ciudadanos/as son los autnticos conocedores y receptoresdirectos de dichos huertos, por lo que se hace necesario el establecimiento deun vnculo de comunicacin fluida entre la propia administracin local y stos.

La participacin de la ciudadana tiene que ser considerada desde el mismoinicio del proceso de creacin de los huertos sociales ecolgicos. De ahque se tenga en cuenta como un requisito previo necesario para acometer

con xito dichos proyectos.Adems, el proceso participativo tiene que estarpresente durante todas las fases de desarrollo, actuar como vector de trans-misin de los contenidos propuestos y conseguir los objetivos acordados queson de su responsabilidad. Las actuaciones y objetivos propuestos son elelemento fundamental de consenso en el proceso de participacin, reflejandolas inquietudes de la poblacin, al tiempo que provoca un cambio positivo deactitud hacia los huertos sociales ecolgicos.

Sin embargo, articular mecanismos de participacin ciudadana constituyeuno de los mayores retos que se plantean en la actualidad.


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Estructura

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Al hablar de participacin ciudadana en los huertos sociales ecolgicos debe-mos partir de un conjunto de criterios o principios orientadores:

a) Voluntariedad. Debe tratarse de un ejercicio totalmente voluntario.

b) Universalidad. Ha de garantizarse en igualdad de condiciones paratodos los/as ciudadanos/as.

c) Transparencia. Originada en la rendicin de cuentas continua entretodos los actores del proceso de creacin de los huertos socialesecolgicos.

d) Equidad.Asegura la participacin de los grupos ms vulnerables, atravs de los instrumentos polticos y jurdicos necesarios, en condicio-nes de igualdad respecto a los dems actores y sectores interesados.

e) Pluralidad.

Ha de garantizar la presencia de los ms diversos puntosde vista, mediante la implicacin de todos los grupos o ciudadanos/asinteresados.

f) Solidaridad. Habr de estar orientada hacia el bienestar comn, porencima de intereses partidistas, sectoriales y/o particulares.

Principales agentes sociales implicados:

Responsables polticos y tcnicos de la administracin pblica.Su participacin es imprescindible y debe jugar un papel ejemplarizante.Asimismo, poseen las herramientas e instrumentos legales para garanti-zar la equidad, pluralidad y solidaridad en el proyecto de huertos.

Asociaciones ciudadanas y ONGs.La sociedad civil organizada tie-ne un importante rol para facilitar un amplio dilogo. Las asociacionesciudadanas pueden facilitar y canalizar ms fcilmente la opinin denumerosos vecinos y vecinas que de manera individual no conocen, nopueden o no quieren participar.

Ciudadana. Como individuos interesados en cuestiones sociales,ambientales, de salud y de calidad de vida en el municipio.

Comunidad cientfica. La participacin y cooperacin entre la co-munidad cientfica, como las Universidades, y los polticos, tcnicosy ciudadanos/as, facilita el desarrollo e integracin de los huertossociales ecolgicos.

Medios de comunicacin.Con su participacin (TV, radio, prensa,internet, etc.) contribuyen en dar a conocer a la ciudadana el proyectode huertos sociales ecolgicos, facilitando la aportacin de ideas ymejorando la participacin.


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Una vez que el ayuntamiento manifiesta su voluntad de crear unos huertossociales ecolgicos, se deber constituir un grupo de trabajo o comisinformado por los agentes sociales interesados. Este tendr como finalidad,entre otras, proponer ideas, colaborar con el ayuntamiento, contribuir a su

explicacin a la ciudadana y liderar la puesta en marcha de los huertos.

Si existen dificultades para la creacin de un grupo de trabajo o comisin,puede optarse por unas modalidades complementarias de participa-cin, entre las que cabe contemplar:

a)Estudios de Opinin.Pueden realizarse en forma de encuestas, bienpara reflejar las ideas de la ciudadana, bien para conocer recomenda-ciones tiles sobre cmo afrontar la creacin de los huertos por parte

del ayuntamiento.b)Consultas a sectores especficos.El Ayuntamiento promotor delproceso establece reuniones y contactos con colectivos interesados,bien para proporcionarles la informacin ms bsica y relevante, bienpara obtener sus ideas y puntos de vista, facilitndose as la planifica-cin de las fases siguientes del proceso de participacin.

c)Certmenes de Ideas.Se trata de convocatorias en las que personas(fsicas o jurdicas) presentan proyectos o ideas para abordar la crea-cin o gestin posterior de los huertos sociales ecolgicos. Esta frmu-

la suele denominarse con los trminos concurso o premio, ya quegeneralmente se ofrecen recompensas a quienes presentan las ideas oproyectos ms destacados.

d)Recepcin permanente de consultas y sugerencias. Para quela recepcin de cuestiones sea continua pueden habilitarse canalesque garanticen un flujo continuo de informacin, como pueden ser eltelfono, correo electrnico o buzones de sugerencias. Esto le da alproceso una gran flexibilidad y amplitud, lo que permite a su vez queparticipen muchos colectivos y sobre todo personas individuales, queno podran hacerlo a travs de otros medios ms convencionales.

e)Periodos de informacin y alegaciones.Intervalos de tiempo en quese informa a los colectivos interesados sobre el proyecto de creacinde los huertos sociales ecolgicos, durante el cual pueden presentarsealegaciones a ste. Este tipo de instrumentos participativos suelen es-tar amparados por una legislacin especfica que expone detalladamen-te los plazos para la presentacin de las alegaciones, as como para laresolucin administrativa adoptada, en su caso.

f) Seminarios odebates abiertos.Reuniones abiertas a la ciudada-

na para abordar, entre otros aspectos: la creacin, organizacin y


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gestin de los huertos. Entre sus participantes habrn de estar re-presentados los colectivos y/o personas interesadas, necesitndosegeneralmente la figura de un moderador que reparta equitativamentelas intervenciones de todos los presentes.

g)Consultas populares.En esta modalidad de participacin se some-ten al voto de los ciudadanos/as las diferentes alternativas planteadasen torno al proyecto de creacin y gestin de los huertos sociales eco-lgicos. Con esta herramienta se recoge la opinin de la mayora dela ciudadana, por lo que las decisiones tomadas a su amparo (aunquepuede tratarse de mecanismos no vinculantes) gozan de la mximalegitimidad.

h) Iniciativas de voluntariado.Se basan en una participacin construc-tiva de individuos y colectivos a travs de su accin directa, y est ca-racterizada por la inexistencia de prestaciones econmicas a cambiode la colaboracin.

Se podra aadir una ltima modalidad de participacin, que se gestara antesde la creacin de los huertos, pero que se plasmara durante la gestin deestos, una vez creados:

Acuerdos de colaboracin para la gestin. Los representantes de

los diversos sectores y colectivos interesados asumen derechos yresponsabilidades especficas para el desarrollo de la iniciativa y laconsecucin de los objetivos por sta planteada. Esto tiene la ventajade que cada una de las partes es consciente de los compromisos yresponsabilidades adquiridas por cada uno de los participantes.

Esta modalidad de participacin ya funciona en los huertos existentes en An-daluca y deriva en la formalizacin de una asociacin de hortelanos y hortela-nas que acuerdan con el ayuntamiento formulas de co-gestin de los huertossociales ecolgicos.

Posibles dificultades en la creacin y gestin de los huertos

En algunas ocasiones, aun cuando el ayuntamiento o la administracin pblicaen general muestra la voluntad de promover y articular la participacin de losvecinos en la creacin y gestin posterior de los huertos, lo cierto es que,por diversas cuestiones, los mecanismos que se articulan o los resultadosobtenidos no surten el efecto pretendido.


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Estas son las principales dificultades que se pueden encontrar:

Desconocimiento e incertidumbre sobre la participacin.Puede en-

tenderse que un proyecto de huertos no necesita participacin ciu-dadana alguna, simplemente conocimientos desde el punto de vistaagrcola. Se dedican muchos esfuerzos, entre otros, a la localizacin,las infraestructuras y el acceso del agua, siendo necesario organizarcorrectamente la participacin de los ciudadanos/as que posterior-mente van a convivir en este espacio pblico.

Resistencia de los representantes polticos, tcnicos y/o funcionarios.Inquietud ante un nuevo proyecto del que an se tiene poca experiencia yes difcil conocer las reacciones de los ciudadanos/as.

Exceso de burocracia administrativa. El proceso de creacin o ges-tin de los huertos puede simplificarse o complicarse hasta el puntode desanimar a los ciudadanos/as ante los numerosos tramites a de-sarrollar.

Monopolio o limitacin de la participacin. En las asociaciones ogrupos ciudadanos pueden existir lderes que monopolizan o capita-lizan la participacin impidiendo o limitando la participacin de otrosciudadanos/as. De igual manera, determinados grupos que pueden

considerarse mejor capacitados pueden minusvalorar o reducir la par-ticipacin de otros grupos sociales.

Manipulacin por intereses particulares. En algunas ocasiones, indivi-duos o grupos pueden limitar la participacin de otros individuos o gru-pos bajo intereses particulares de tipo personal, poltico, econmico,etc. Incluso pueden darse movimientos que tiendan a la privatizacinunilateral y permanente de las parcelas, entrando en conflicto con laadministracin pblica responsable de los terrenos.

Baja credibilidad de la participacin. Debido a experiencias frustra-das con anterioridad en otras cuestiones municipales, la ciudadanapuede mostrarse escptica o incrdula acerca de la fiabilidad en lacreacin de un nuevo proyecto.

Inexistencia de partidas especifcas. Ms all de inversiones previaspara las infraestructuras, no suelen contemplarse partidas presu-puestarias para un coordinador, gestor o dinamizador de la partici-pacin.


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2. PROYECTO TCNICO DE LOS HUERTOS SOCIALESECOLGICOS

2.A. ASPECTOS GENERALES1. Finalidad de los huertos

En funcin de la finalidad a la que se destinan podemos distinguir diversostipos de huertos: huertos de subsistencia, huertos comerciales, huertos deocio, huertos sociales, huertos educativos, huertos cientficos y otras nume-rosas definiciones. La diferencia viene dada en funcin de la poca histrica,del contexto socio-territorial en el que surgen o de la finalidad primordial quese quiere acentuar en la denominacin.

En numerosas ocasiones las definiciones se entremezclan y se denominan demanera diferente segn el municipio, comarca o regin en la que surgen loshuertos. Igualmente, en unos mismos huertos pueden darse varias finalidadesde manera paralela y complementaria (ocio, social, educativo, etc.). Esta Guase dirige principalmente hacia lo que denominamos huertos sociales si bienpuede ser til tambin para otras modalidades de huertos.

Existen tres grandes grupos:

Huertos Sociales

Huertos Comerciales

Huertos Educativos

Tipos de Huertos

segn la finalidad

principal

Sociales

Comerciales

Educativos

Subsistencia

Ocio

Teraputicos

Escolares

Cientficos

Figura 2. Huertos segn la finalidad.


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Huertos Sociales

Dentro de la denominacin social podran entenderse multitud de aspectos, cir-cunstancias y significados. Se entiende que todos los tipos de huertos, tambin

los destinados principalmente a la comercializacin, realizan una labor social.

Huertos de Subsistencia:Huertos de subsistencia han existido tradi-cionalmente en todos los pueblos y ciudades del mundo, como unamanera de obtencin de alimentos frescos y con un carcter de au-tosuficiencia y soberana alimentaria. Los productos hortcolas recogi-dos se dedican al autoconsumo propio de la familia o al entorno msinmediato. En caso de excedentes, en muchas ocasiones, se comer-cializan dichos productos de manera formal o informal.

En el mundo occidental, fundamentalmente Europa y Norteamrica,surgen numerosos huertos de subsistencia durante las crisis econ-micas graves y durante las dos Guerras Mundiales, en un intento deautoabastecerse de alimentos dado que los canales de distribucinde productos primarios desde el medio rural al medio urbano se venfuertemente afectados.

En los ltimos decenios los huertos de subsistencia prcticamentehaban desaparecido del mundo occidental desarrollado, transfor-mndose en la mayora de los casos en huertos de otro tipo, ocio,sociales, educativos, etc. En economas menos desarrolladas o conproblemas de abastecimiento alimentario siguen existiendo y apare-ciendo huertos de subsistencia. Estos huertos se plantean como es-trategias de desarrollo socioeconmico que ofrecen una alternativams a los programas gubernamentales de carcter asistencial. Ade-ms de proporcionar y garantizar el abastecimiento de productosalimenticios frescos y de calidad, generan fuentes de ingresos com-plementarios a los sectores de la poblacin ms desfavorecidos.

Sin embargo, desde 2008, en Espaa y Andaluca, han proliferadolos huertos de subsistencia como respuesta a la crisis econmicay el crecimiento del desempleo en el conjunto del pas. Numerosasfamilias, organizaciones ciudadanas y ayuntamientos estn poniendoen marcha pequeos huertos para compensar la escasez de ingresosy la falta de acceso a alimentos de primera necesidad.

Huertos de ocio:son aquellos dedicados principalmente al empleo deltiempo libre, la diversin o la recreacin. Tambin se les conoce comohuertos recreacionales, huertos vacacionales.


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Figura 3. Huertos de Ocio en Cabra (Crdoba)

Huertos teraputicos: Son aquellos que estn organizados o gestio-nados mediante un programa de intervencin o asistencia social. Nu-merosas asociaciones con fines sociales y/o asistenciales utilizan loshuertos como recurso como, por ejemplo, asociaciones de personascon minusvala psquica, asociaciones contra la drogadiccin, etc.

Huertos Educativos

Huertos escolares:son aquellos que estn destinados a la ensean-za de las prcticas agrcolas y las cuestiones medioambientales,utilizando como recurso de referencia el huerto. En los huertos edu-cativos podemos a su vez diferenciar entre aquellos que realizaneducacin formal y aquellos que realizan educacin no formal. Deeste modo, los huertos que nos encontramos en el interior de loscolegios o centros de formacin realizaran educacin formal y loshuertos que nos encontramos en el resto de la ciudad realizaraneducacin no formal. A esta categora se le suele asociar el con-cepto de huertos escolares, pero no se debe interpretar que estdirigido nicamente a nios, ya que puede haber huertos escolarespara personas mayores en un centro de educacin para adultos.


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Figura 4. Grupo de los huertos escolares del P. Miraflores (Sevilla).

Huertos cientfcos:son aquellos que estn destinados a la investigacinagrcola y/o medioambiental y que cuentan con un programa cientficoy de investigacin establecido. Por ejemplo, en los terrenos anexos a laE.T.S.I.A. (Escuela Tcnica Superior de Ingeniera Agronmica) de Sevillase han venido desarrollando desde su creacin numerosas investigacio-nes de tipo cientfico acerca de productos agrcolas, tcnicas de cultivo,

lucha contra plagas y enfermedades de las plantas, etc.

Huertos comerciales

Dado el creciente inters por los alimentos locales de tipo ecolgico, existennumerosas experiencias de huertos con la finalidad de comerciar con losproductos desde un punto de vista empresarial en el entorno ms inmediatodel huerto. Los productos hortcolas recogidos se comercializan a mayor o

menor escala dependiendo del tamao y produccin del huerto, siguiendo loscauces legales vigentes (administrativos, sanitarios, fiscales, etc).


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2. Destinatarios de los huertos

Es preciso tener claro a priori quienes van a ser los destinatarios de loshuertos. Existen mltiples opciones de enfocar los huertos en un grupo de-

terminado de la poblacin (edad, situacin laboral, etc.) pero se recomiendaque puesto que los huertos son espacios multiproducto, tambin deben serespacios multisociales, es decir, de igual manera que se cultivan numerosasespecies de hortalizas y verduras (lechugas, tomates, pimientos, etc.) espreciso contar con diferentes tipos de personas (adultos, nios/as, asocia-ciones, hombres y mujeres, trabajadores y desempleados, etc). La riquezasocial de los huertos contribuir al xito de los mismos.

Los huertos podemos clasificarlos en funcin de la edad de la poblacin que

cultiva el huerto o a la que est dirigido.

Edad

Tercera edad

Adultos

Jvenes

Nios

Figura 5. Huertos segn la edad.

Esta categora no se debe confundir con la situacin laboral de los adultos.Existen huertos que se diferencian de otros nicamente por el criterio dela edad. De este modo, encontramos huertos dedicados exclusivamente apersonas de la tercera edad, huertos para adultos, huertos para jvenes y

huertos exclusivamente para nios. Los huertos destinados a los nios se lesdenomina genricamente huertos educativos o huertos escolares. Estoshuertos estn vinculados a un programa educativo promovido bien por cen-tros escolares o bien por asociaciones ciudadanas, pero en cualquier caso,tienen una finalidad didctica o pedaggica.

Junto a esto destacan los huertos destinados a jvenes. Existen numerososejemplos de huertos para jvenes en situacin de exclusin social, en trata-miento contra la drogadiccin, en barrios marginales, etc.


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Figura 6. Cartel de los huertos de Fuentes de Andaluca (Sevilla).

En funcin de lasituacin laboralde la poblacin que cultiva dichos huertoso hacia los que van dirigidos, se pueden establecer varias categoras:

Situacin

Laboral

Activos

Jubilados

Ocupados

Desempleados

Figura 7. Huertos segn la situacin laboral.

Huertos para personas activas.Son personas adultas que se encuentran

en edad laboral. Podemos diferenciar aquellos huertos que se dedicana personas activas ocupadas y personas activas desempleadas, los co-mnmente conocidos como huertos para parados.

Huertos para jubilados. Son personas adultas que no se encuentranen activo laboralmente.


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Figura 8. Jubilados en los Huertos de La Luisiana (Sevilla).

Aunque la mayora de las veces son personas mayores de 65 aos que ya sehan jubilado, tambin podemos encontrar otro tipo de huertos cultivados porpersonas que no llegan a la edad de jubilacin pero que tienen una jubilacinanticipada por enfermedad, regulacin de empleo, etc. En este sentido, hayque destacar que se tiende a considerar como igual tercera edad y jubilacinpero, si bien la mayora de las personas de la 3 edad estn jubiladas, no

todos los jubilados pertenecen a la 3 edad.

Normalmente se tiende a identificar a los huertos con un solo grupo depoblacin, personas adultas, mayores de 65 aos, ya jubiladas, realidadque aun siendo amplia, no es nica ni definitoria. Por ello, no es lo mismohablar de huertos para jubilados que de huertos para personas mayores(3 edad), ya que se hace referencia en unos a la situacin laboral y enotros a la edad.

3. Organizacin de las parcelas

Existen muchas denominaciones terminolgicas para hacer referencia a la or-ganizacin interna del trabajo en cada parcela de los huertos sociales ecol-gicos. Se ha optado por realizar una diferenciacin entre huertos individuales/familiares y huertos colectivos/comunitarios, entendiendo que:

Huertos individuales o familiares:Son aquellas parcelas trabajadasnicamente por una persona o una sola familia.


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Huertos colectivos/comunitarios:Son aquellas parcelas cultivadas porun grupo de personas. El nmero de personas que deben pertenecer algrupo ir en funcin del tamao de la propia parcela. Se recomienda unmnimo de 4 personas para parcelas de menos de 100 m y un mximo

de 12 personas si la parcela supera los 100 m.

Organizacin

de las parcelas

Individuales/Familiares

Colectivas/Comunitarias

Figura 9. Huertos segn la organizacin de las parcelas.

4. Requisitos de acceso

Muchos Ayuntamientos en Andaluca exigen un empadronamiento en el muni-cipio con una antigedad de al menos un ao, entendiendo que es un serviciopblico que el Ayuntamiento pone a disposicin de sus vecinos/as.

Algunos Ayuntamientos tambin exigen un certificado mdico de aptitud fsicapara desarrollar las tareas agrcolas del huerto.

En numerosas ocasiones se establecen prioridades de determinadas cues-tiones sociales o laborales, como por ejemplo, personas en situacin dedesempleo, personas jubiladas, etc. De este modo, se pueden establecerdiferencias entre:

Caso 1. Desempleados de larga duracin que habiendo cotizado, noreciben ningn tipo de prestacin o que hayan agotado las presta-

ciones por desempleo. Caso 2. Personas con discapacidad igual o superior al 33%. Caso 3. Familias con un bajo nivel de rentas. Caso 4. Familias numerosas.

Asimismo, es preciso establecer si se reservan parcelas para grupos de aso-ciaciones, colegios pblicos, etc. Es posible realizar discriminaciones positi-vas para aquellos grupos que el Ayuntamiento quiera favorecer a travs de la

utilizacin de porcentajes (%).


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En este sentido, es preciso recomendar que siempre es preferible unos huer-tos de carcter diverso que unos huertos sociales con un solo perfil de ciu-dadano, es decir, lo ideal es que en los huertos haya parcelas destinadas atodos los grupos sociales y todas las situaciones laborales: parcelas para

desempleados, parcelas para jubilados, parcelas para trabajadores, parcelaspara escolares, parcelas para asociaciones, etc. Esto enriquecer la parti-cipacin y facilitar la integracin de todos los colectivos en la vida de loshuertos y el municipio en general.

5. Calificacin urbanstica del suelo

Antes de la creacin de los huertos sociales ecolgicos es preciso conocer laclasificacin y calificacin urbanstica del suelo que dispone el ayuntamiento,

a fin de localizar los huertos en un suelo que no suponga una alteracin de loprescrito en el PGOU. Existen diferentes calificaciones del suelo, pero se harecogido a continuacin las ms comunes y generales que se pueden encon-trar en Andaluca en cuanto a la calificacin urbanstica:

Uso residencial. Aquellos huertos que se sitan en suelos destinadosa uso residencial. Normalmente ocupan espacios intersticiales ane-xos a edificios de uso residencial. Es esta tipologa no solo tendrancabida los huertos tradicionales, realizados en la superficie, sino que

tambin se incluiran algunos de los huertos realizados en los nuevosespacios (tejados/azoteas, terrazas, macetas y verticales).

Actividades productivas.Aquellos huertos que se instalan en suelosdestinados a la realizacin de actividades productivas. Seran huertosque se instalan dentro de grandes instalaciones fabriles y que sirvencomo un complemento ldico ms de las empresas. Pero la mayora delos ejemplos se encuentran situados en espacios industriales en desu-so y/o abandonados, a la espera de una recalificacin de dicho suelo.

Terciario. Aquellos huertos que se sitan en espacios destinados aactividades de servicios (hoteles, oficinas, comercios, etc.). Seranaquellos huertos que se sitan ocupando espacios dentro de com-plejos hoteleros, en centros comerciales e incluso aquellos situadosen los tejados/azoteas de edificios de oficinas.

Dotacional. En el uso dotacional se pueden encontrar huertos en:

Espacios Libres. Aquellos huertos situados en zonas verdes, plazaspblicas, etc.


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Social. Aquellos huertos situados en complejos hospitalarios, cen-tros sociales, etc.

Educativo. Aquellos huertos situados en colegios, universidades ycualquier otro tipo de instalacin educativa.

Deportivo. Aquellos huertos que se instalan en zonas y complejosdeportivos, etc.

Transportes e infraestructuras viarias. Aquellos huertos situadosen medianas de carreteras, rotondas, intersticios viarios y delferrocarril, etc.

Calificacin

Urbanstica

Uso Residencial

Actividadesproductivas

Terciario

Dotacional

Uso Social

Espacios Libres

Educativo

Deportivo

Transportes

Figura 10. Huertos segn la calificacin urbanstica.

Para evitar problemas o dificultades legales de tipo urbanstico, se recomien-da localizar los huertos en suelo de uso dotacional, bien espacios libres (zo-nas verdes, plazas pblicas), bien social (centros cvicos, etc.) o educativos(en el interior de colegios, institutos o universidades pudiendo ser incorpora-dos al curriculum docente). En todo caso, los servicios jurdicos y urbansti-

cos del ayuntamiento debern aconsejar acerca de la idoneidad y legalidadde la eleccin de una parcela pblica.

6. Eleccin de la localizacin

Lo ideal para la localizacin de unos huertos es que estn en el interior dela ciudad o en un entorno prximoa la misma y, por ende, a los ciudada-nos/as. La cercana al ncleo urbano disminuye los desplazamientos mo-torizados, ahorra energa y minimiza los costes en transporte de materia-les, agua, etc. Asimismo, unos huertos sociales no deben estar pensados


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solo en el ciudadano-hortelano, sino tambin en el resto de ciudadanos/as que pueden encontrar en el huerto una nueva zona verde por la quepasear, interactuar con las plantas, aprender cuestiones relacionadas conla naturaleza, etc.

Figura 11. Huertos de Utrera (Sevilla).

Otro aspecto importante en la localizacin, es conocer lahistoria de ese sue-lo y el entornoque lo rodea, tanto si se sita en el interior del ncleo de pobla-cin como si se sita en el entorno periurbano. Lo ms recomendable, es quelos huertos se localicen sobre antiguas huertas o huertos preexistentes.Esto nos garantiza que la historia de ese suelo sea propicia y favorable paracontinuar la actividad agrcola. Si no se dispone de un espacio sobre antiguashuertas, es preciso conocer el uso anterior de dicho suelo, si ha tenido usoresidencial, industrial, de infraestructuras, etc. Incluso es aconsejable reali-zar un anlisis previo del suelo efectuado por un laboratorio acreditado quegarantice la salubridad y elimine la posibilidad de contaminacin de dicho

suelo. En caso de contaminacin del suelo, se desaconseja su instalacin oes preciso realizar tareas de limpieza, recuperacin y regeneracin del sueloque nos permita realizar un aprovechamiento agrcola exitoso.

En caso de que los huertos se localicen en el exterior del ncleo urbano, espreciso conocer el entorno que rodea dichos huertos. Si los huertos estnrodeados por otros cultivos de agricultura convencional, se recomienda lautilizacin de setos que protejan los huertos o directamente buscar otro en-torno, donde la agricultura ecolgica sea predominante.


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Figura 12. Huertos de Palma del Ro (Crdoba).

7. Propiedad del suelo

Lo ms lgico es que si los huertos sociales estn promovidos por la iniciativapblica o por la iniciativa vecinal, el emplazamiento elegido sea un espaciode propiedad pblica.

La utilizacin de una parcela privada, mediante un arrendamiento, tiene elinconveniente de la limitacin temporal al estar en manos del propietario ladecisin de renovar o continuar con la actividad hortcola en su propiedad.Puede darse el caso de que el suelo cambie de uso urbanstico o que elpropietario tenga una oferta econmica superior para dicha parcela y decidacambiar la actividad hasta el momento realizada. De este modo, las infraes-tructuras y los equipamientos no podran ser estables o definitivos. Asimismo,en el caso de que sea preciso buscar un nuevo emplazamiento y trasladartodo el equipamiento que se haya dispuesto, el ayuntamiento o los ciudada-

nos/as debern realizar una nueva inversin econmica.


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Figura 13. Huertos de Ronda (Mlaga).

8. Diseo de parcelas

Normalmente, los huertos suelen tener una disposicin cuadrangular o rec-tangular siguiendo un plano ortogonal o en damero. De la misma manera queen el plano de una ciudad esta disposicin exige prever donde se instalaranlas infraestructuras bsicas (agua, electricidad), comunicaciones (caminos,entradas, salidas), espacios libres (zonas comunes y de reunin para los hor-telanos/as), equipamientos (semillero, invernadero, casetas, compostera, etc.).

A la hora de disear el parcelario de las parcelas se tiende a cometer el error debasarse en el criterio de la productividad frente al criterio social, es decir, insertarel mayor nmero de parcelas posible en el menor espacio posible. Ello provocaque en muchas ocasiones no existan espacios comunes o se priorice la produc-cin de hortalizas a modo de factora agroindustrial frente a la creacin de unespacio pblico para todas las edades que fomente la convivencia, la relaciones

sociales, el ocio, la educacin y el contacto con la naturaleza.

Algunas recomendaciones para el diseo podran ser:

El trazado cuadrangular o rectangular debe prever la creacin de unespacio libre en el centro, a modo de plaza, gora o foro que favore-cera el contacto entre los diferentes hortelanos/as y grupos.

Debe contemplarse la creacin de un camino perimetral que circundela totalidad de las parcelas por varios motivos:


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Es un espacio pblico que recibir visitas de escolares o grupos deciudadanos/as y un camino perimetral permite mejor accesibilidad ymayor visibilidad al conjunto de las parcelas. Un itinerario o un reco-rrido lineal que acaba en una valla no es aconsejable al tener que dar

marcha atrs al final del itinerario, interrumpiendo el paso de otros queaun no han finalizado dicho itinerario.

Figura 14. Grupo de visita en los huertos de Los Barrios (Cdiz).

Evitar zonas de parcelas en fondo de saco. Algunas parcelas quetienen uno de sus lados junto a una valla o incluso dos lados (ha-ciendo esquina) se convierten en lugares donde depositar desechosvegetales, electrodomsticos en desuso, mobiliario personal (sillas,sillones...). Estas zonas ocultan adems, cierta vista desde el exteriorhacia el interior del huerto. Un huerto social en un espacio pblicodebe cuidar con exquisitez la calidad visual, la imagen y el paisaje, porlo que se recomienda que todas las parcelas tengan fachadas y no

traseras.El camino perimetral adems proporciona la posibilidad de poner setos vivos(aromticas) en todo el borde exterior de las parcelas mejorando as el agro-sistema de los huertos.


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Figura 15. Plano de parcelas de Fuentes de Andaluca. Fuente: Excmo.Ayuntamiento de Fuentes de Andaluca.

Figura 16. Plano de parcelas de Arjona (Jan).Fuente: Excmo. Ayuntamiento de Arjona.

Si el espacio elegido lo permite, junto al diseo cuadrangular o rectangular sepuede optar por un diseo radiocntrico en el que los caminos y las parcelasconfluyan en un espacio comn en el centro rodeado todo ello a su vez porcaminos que circunvalan dichas parcelas.


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Junto a lo anterior, hay que prever la creacin o construccin de parce-las o mesas de cultivo adaptadas a personas con movilidad reducida. Espreciso, pues, reservar un espacio acondicionado para dichas parcelas omesas de cultivo.

9. Tamao de las parcelas

Como se seal previamente en el apartado de la Participacin Ciudadana,antes de iniciar el proyecto de creacin de los huertos sociales ecolgicoses preferible mantener reuniones con los agentes sociales interesados, crearuna comisin o grupo de trabajo o hacer un sondeo de la demanda de partici-pantes y en funcin de los resultados obtenidos crear ms o menos parcelasajustando su tamao. Las experiencias existentes en Andaluca presentan una

amplia horquilla de tamaos, desde 30 m2hasta 150 m2 aproximadamente.Se puede considerar que unos 70-80 m2/parcela podra ser una buena di-mensin para un buen aprovechamiento de la tierra sin que esto suponga unesfuerzo excesivo que termine por suponer una carga o una obligacin msque una actividad recreativa o ldica para toda la familia.

En caso de que el ayuntamiento solo disponga de terrenos pequeos, lasparcelas podran reducirse para ajustarlas a la demanda. Para salvar el impe-dimento de la escasez de un terreno grande, una opcin interesante es crear

varios espacios pequeos repartidos por el municipio en vez de un gran espa-cio con parcelas grandes. Esta alternativa es muy interesante, ya que se creauna red de diferentes huertos que ofrecen diferentes opciones a la ciudadanay aproximan an ms los huertos sociales ecolgicos a la vida diaria de losvecinos y vecinas del municipio.

2.B. ASPECTOS TCNICOS

1. Evaluacin y mejora del suelo

Es importante conocer la calidad del suelo del futuro emplazamiento del huer-to, ya que es un factor decisivo para el xito de los cultivos. Casi todos losterrenos pueden ser aptos para el cultivo de hortalizas, verduras y legumbres,pero no todos debern recibir las mismas enmiendas ni las mismas prcticaspara hacer de l un lugar frtil y equilibrado.


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Figura 17. Futuros terrenos de los huertos de Alcal La Real (Jan).

Es recomendable acudir a un laboratorio de anlisis de suelos acreditado y contarcon especialistas que ayuden y orienten en las mejores prcticas a seguir.

No obstante, se intentar como norma general, mediante la aportacin demateria orgnica:

Mejorar la estructura del suelo y evitar la erosin.

Incrementar la biodiversidad de la fauna y la flora.

Mejorar la capacidad de retencin y circulacin de nutrientes y agua.

2. Agua y riego de los huertos

El agua es un elemento indispensable para el buen funcionamiento de loshuertos.

Origen del agua:

Es preciso evitar la utilizacin de agua potabilizada destinada al consumo hu-mano dado que siempre es preferible priorizar dicha agua para las personas.Adems, la potabilizacin del agua requiere una serie de procesos, como lacaptacin, canalizacin, tratamiento y distribucin, entre otros, que suponen:


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costes energticos. costes econmicos en la construccin de infraestructuras. costes medioambientales indirectos derivados de dichos procesos.

costes econmicos para el Ayuntamiento ya que habr que incorporarese consumo de agua a la factura municipal.

Por ello, se recomienda el uso de agua que no ha sido tratada con procesosde potabilizacin. Normalmente, el origen de este agua es subterrneo, atravs de sistemas de captacin como pozos o manantiales que afloran a lasuperficie. Para la utilizacin de este agua tambin deben tenerse en cuentaalgunos aspectos:

En primer lugar, es preciso realizar las gestiones administrativas co-rrespondientes con la Confederacin Hidrogrfica correspondiente(Guadalquivir, Guadiana, Sur, Segura) o con la administracin compe-tente en la materia. En cualquier caso descartando la utilizacin de po-zos ilegales y la extraccin irresponsable del agua. Una buena opcinpara los ayuntamientos es utilizar los pozos y las canalizaciones deagua que ya utiliza para el riego de los parques y jardines municipales.

En segundo lugar, hay que realizar un anlisis previo del agua que seva a utilizar para el riego de los huertos a fin de evaluar su calidad

agronmica y evitar algn tipo de contaminacin de la misma. Asimis-mo, es aconsejable el anlisis peridico del agua para garantizar queconserva sus propiedades y no existe ningn tipo de contaminacin(parsitos o microbios patgenos) que pudiera suponer un riesgo parala salud de las personas. De igual manera, es til realizar anlisis delagua para valorar la salinidad de la misma ya que esta puede variar yafectar a los cultivos hortcolas. En todo caso, es recomendable con-tar con especialistas que ayuden y orienten en las mejores prcticasa seguir.

Existen varios tipos de riegopara los huertos sociales ecolgicos. Los msutilizados son:

Superfcial o de gravedad.

Es el conocido como riego tradicional, que consiste en regar por en-charcamiento la superficie de la tierra. Si la superficie es amplia, elagua se desplaza cubrindola total o parcialmente, conducida sola-mente por la diferencia de cota entre un punto y otro debido de la

fuerza de gravedad.


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Figura 18. Riego tradicional en parcela de Cazalla de la Sierra (Sevilla).

Figura 19. Riego tradicional en parcela del P. Miraflores (Sevilla).

Presurizacin

Aspersin. El agua se aplica sobre la planta y la superficie del sueloen forma de lluvia muy fina, mojando una zona determinada.

Goteo. Es uno de los sistemas de riego localizado ms utilizado enla actualidad. El agua circula a presin por la instalacin hasta llegara los goteros, en los que se pierde presin y velocidad, saliendogota a gota.


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Figura 20. Riego por goteo en huertos recin creados de Antequera (Mlaga).

La eleccin de un tipo de riego u otro se regir en funcin de diferentesfactores como la disponibilidad de agua, los medios tcnicos disponibles, losmedios econmicos, la antigedad del huerto y la tradicin, la concienciacinecolgica del ciudadano/a, etc.

En una regin como Andaluca, bajo un clima mediterrneo (aunque con ma-

tices locales) caracterizado por periodos de sequas cclicas, es necesariocontemplar al agua como un recurso escaso y valioso por lo que hay quefomentar su ahorro y correcta utilizacin. Una hectrea de huertos necesitaaproximadamente 5mm de agua por da, lo que equivale a 5 litros por m; esosignifica en promedio unos 50.000 litros por da.

Se recomienda, pues, la utilizacin de riego por goteoya que es el sistemams efectivo (95 %) para el ahorro de agua y el aporte adecuado a las plantas.

Esta recomendacin del riego por goteo no implica que se descarte comple-tamente el riego tradicional si se realiza de manera correcta (70 % de eficien-cia) ya que es preciso contemplar otros aspectosde tipo social relacionadoscon el riego (goteo vs tradicional):

El riego tradicional implica tanto la aceptacin de unas responsabili-dades con el huerto como una mayor vinculacin del ser humano conlas plantas. El riego por goteo localizado puede ser til para grandesextensiones o para agricultores profesionales, que no disponen de


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mucho tiempo para realizar el riego. En unos huertos sociales eco-lgicos, el riego por goteo localizado puede suponer la ausenciaprolongada del huerto por los ciudadanos/as. El riego tradicionalobliga al ciudadano/a a estar presente en los huertos cada 3-4 das

como mximo. Adems, supone un ejercicio mental considerable altener que organizar tanto el tiempo (horas, das, semanas, estacio-nes) como el espacio (lomos, bancales, tipos de plantas, etc.). Cadaestacin, lomo o planta necesita un aporte de agua diferenciado loque exige un cierto clculo mental que puede ser beneficioso parapersonas mayores o con problemas psicolgicos.

El momento de riego no debe contemplarse exclusivamente como elaporte de agua a las plantas, sino que es un momento de encuentroen el que se intercambian impresiones, experiencias, ancdotas o

consejos.

Aun cuando se instalan eficientes sistemas de riego por goteo localiza-do, los hortelanos/as tienden a utilizar algunas mangueras o regade-ras. En la mayora de los casos se debe a una tradicin heredada y acierta desconfianza hacia el sistema de riego por goteo. Por ello, serlabor de los responsables tcnicos y/o del Ayuntamiento realizar unacontinua labor pedaggica de demostracin de las virtudes y efectospositivos que proporciona este tipo de riego.

Figura 21. Riego en los huertos de la Campana (Sevilla).


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3. Luz solar

Conocer la incidencia de los rayos solares tambin es un factor importante ala hora de elegir la localizacin del huerto. Para la horticultura lo ideal es la luz

directa del sol, pudindose jugar con la orientacin de las parcelas para que laluz llegue en el mejor ngulo posible. Para ello, se aconseja que la disposicinde las parcelas y de las hileras de cultivos sea norte - sur.

Figura 22. Huertos de la Hacienda San Antonio (Sevilla).

Es preciso valorar la cantidad de radiacin solar que llega a lo largo del da,teniendo en cuenta el amanecer, cenit y ocaso del sol. Asimismo, conocer ladiferencia de cantidad y ngulo de la luz solar que llega entre las estacionesde invierno, primavera/otoo y verano.

Figura 23. Incidencia solar segn pocas del ao. Fuente: www.maslibertad.net


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Respecto a la sombra, hay que tener en cuenta la existencia de rboles gran-des en las inmediaciones del terreno o los edificios de gran altura que pudie-ran proyectar su sombra hacia los huertos. Los terrenos parcialmente som-breados o completamente sombreados pueden proporcionar menos cosecha

y ms facilidades para la existencia de enfermedades de las plantas.

En todo caso, la sombra condiciona pero no impide el desarrollo de unoshuertos sociales ecolgicos. Es preciso conocer que existen hortalizas quesoportan mejor la sombra como las de hoja verde, por ejemplo lechuga, es-pinaca, col rizada, col, etc. Asimismo, hierbas como el perejil, la menta o elcilantro pueden crecen con sombra parcial sin dificultades.

4. Incidencia del aire

La cantidad, calidad del aire y la direccin del viento tambin son importantespara la localizacin de los huertos sociales ecolgicos. La ubicacin del huer-to debe tener en cuenta una circulacin del aire correcta para minimizar losriesgos por contaminantes atmosfricos o episodios de alta ventosidad quepudieran destruir los cultivos.

Figura 24. Huertos de El Coronil (Sevilla).

Es preciso elegir terrenos bien aireados pero no excesivamente expuestos afuertes corrientes de viento. Si nos encontramos en un terreno montaoso estil conocer si los huertos se sitan a barlovento o sotavento. En un espacioabierto como una llanura, es til la instalacin de setos vivos o paravientosdada la mayor incidencia del aire.


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En una zona densamente poblada o con trfico denso en las inmediacioneses recomendable conocer la calidad del aire mediante la realizacin de anli-sis efectuados por laboratorios acreditados. Los anlisis nos pueden ofrecerinformacin para evaluar patrones diurnos / nocturnos o patrones con una

componente temporal de corto, medio o largo plazo.

Es difcil establecer los valores mnimos de contaminacin que afectan a lasplantas, ya que varan mucho segn las especies y la constitucin de cadaespecie, pero, en todo caso, se desaconseja la localizacin de los huertossociales ecolgicos en zonas de alta contaminacin atmosfrica por la inci-dencia que ello puede tener en la salud de las personas:

De manera directa, al respirar constantemente un aire contaminado.

De manera indirecta, al consumir productos hortcolas que puedancontener altas concentraciones de metales pesados.

5. Infraestructuras y equipamiento necesario

Accesos

los huertos deben disponer de una o varias entradas amplias por la que pue-dan acceder vehculos grandes como un tractor, camin o turismo, ya que se

realizarn descargas de tierra, material de construccin, abonos, etc.

Hay que hacer hincapi en que el acceso a los huertos deber ser universal,es decir, al ser un espacio pblico, similar a una plaza o jardn, estar permi-tido el acceso al recinto de huertos (por los caminos habilitados, nunca porel terreno cultivado) a todos los ciudadanos/as, independientemente de sucondicin de hortelanos/as o vecinos/as del municipio. En la puerta principalse recomienda la instalacin de paneles informativos explicando:

el proyecto(iniciativa, objetivos, patrocinadores, logos, etc.

las normas bsicas de convivencia, como el acceso universal, librey gratuito, las sanciones por vandalismo o robo, etc.

el horario de apertura. Se recomienda que los huertos sociales ecol-gicos tengan el mismo horario de apertura que otros espacios pbli-cos del municipio como un jardn o parque que disponga de vallado.La apertura del recinto se podr realizar a travs del personal propioo delegando estas funciones en algunos responsables de los huertos.


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el contacto telefnico y por correo electrnicodel Ayuntamiento y dealgn responsable del huerto.

Figura 25. Cartel en los huertos de Doa Menca (Crdoba).

Caminos

En el apartado de Diseo de parcelas ya se han expuesto algunos criterios

respecto a la organizacin de los caminos. Estos deben dividirse entre cami-nos principales y caminos secundarios:

Caminos principales.- Como mnimo se dispondrn tres caminos.Dos caminos que se crucen de manera perpendicular si el parce-lario es cuadrangular, dejando la zona de cruce como zona de usocomn, reunin, etc. Y un camino perimetral, junto a la valla protec-tora que circunvale todos los caminos. Se recomienda que estoscaminos tengan una anchura mnima de 3 metros.

Caminos secundarios.-Recorrern las parcelas, separando unas deotras o varios grupos de parcelas de otras, segn se disponga enel diseo.

En todo caso, es preciso recordar criterios de accesibilidad para personascon movilidad reducida, por lo que se recomienda que la anchura de los cami-nos secundarios sea como mnimo de 1,5 m. De igual manera, se recomiendapara el firme la utilizacin de tierra compactada (albero por ejemplo), grava opavimento de zahorra artificial compactada.


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Figura 26. Huertos del Parque de San Jernimo (Sevilla).

Red de riego

En el apartado de Agua y Riego se ha abordado ampliamente esta cuestin.Es necesario calcular previamente la capacidad de fuente de agua que dis-ponen los huertos y las necesidades de riego que van a tener los mismos.

En todo caso, de manera general se deber tener en cuenta el resultado delos anlisis del suelo y agua, las condiciones climticas, la dotacin y las ne-cesidades de agua tanto del conjunto de la finca destinada a huertos como anivel individualizado de cada parcela. En todo caso, es conveniente encargara un especialista en la materia el diseo de la red de riego y el conjunto deinstalaciones hidrulicas necesarias.

Instalacin elctrica

En la localizacin de los huertos hay que considerar la existencia de algunalnea elctrica ya que ser necesario, como mnimo:

Lnea trifsica de alimentacin de la bomba de agua y alimentacinde electrovlvulas de la red de riego (hay diversas electrovlvulasque no requieren de alimentacin elctrica por lo que si no hay ne-cesidad de bombeo de agua, la fuente de electricidad no es nece-saria). Construccin de arquetas de registro e instalacin del cuadrosecundario de la bomba.


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Instalacin de alumbrado de la zona de la caseta (si es compartida)e invernadero mediante circuitos bajo tubo e instalacin de focoshalgenos.

Una opcin muy recomendable es apostar por la instalacin de diversas pla-cas solares o pequeos molinos elicos como fuentes de energa, adaptandosu tamao y colocacin al espacio disponible, sin alterar el paisaje de loshuertos o del entorno.

Si se instala algn alumbrado exterior, este se recomienda para el caminoperimetral o la zona comn de ocio, dejando el interior de las parcelas sinluz. Hay que recordar que las actividades en un huerto se realizan durante elda siendo innecesaria por ello la iluminacin de las parcelas por la noche.

Asimismo, se contribuye a no aumentar la contaminacin lumnica de esteespacio o del entorno.

Cerramiento

Si los huertos se sitan en el interior de algn espacio pblico de mayor ex-tensin como un parque, no ser necesario el cerramiento o vallado exteriorde los mismos. nicamente se puede incorporar algn vallado de madera debaja altura que seale la presencia de los huertos.

Figura 27.Valla en parcela de los huertos de Almensilla (Sevilla).


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Si los huertos se sitan en un terreno aislado, es conveniente la instalacinde un cerramiento exterior que proteja de acciones vandlicas o robos enlos huertos. Existen muchos tipos y modalidades de vallado por lo que sepodr decidir cual le conviene ms segn su presupuesto, fiabilidad, etc. En

todo caso, se recomienda instalar un vallado que permita la circulacin delaire hacia las parcelas as como la perspectiva visual de los huertos desde elexterior. Los muros de ladrillo o mampostera no se recomiendan por impedirel paso del aire y la visualizacin desde el exterior. Se debe optar igualmentepor integrar el cerramiento, procurando no distorsionar en el paisaje.

Figura 28.Valla perimetral en los huertos de la Chana (Granada).

Para separar o sealar las parcelas, se recomienda la utilizacin de algnelemento rgido como un bordillo o hilera de ladrillos fijos en el suelo. Conello, se evita que se puedan desplazar con el paso del tiempo, ampliando odisminuyendo las parcelas algunos hortelanos/as de manera unilateral. Ladivisin utilizando estacas y cuerdas, genera futuros conflictos de tipo terri-

torial por movimientos de lindes, estrechamiento de caminos principales ysecundarios, etc.

Junto a ese bordillo fijo, se recomienda la separacin de las parcelas utilizan-do setos vivos o alguna valla de madera de baja altura. De este modo, seseala claramente cual es la superficie de cada parcela facilitando al mismotiempo el contacto social entre los hortelanos/as, al no tener que superarvallados de gran altura.


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Setos vivos

Los setos son estructuras vegetales donde rboles, arbustos e hierbasforman un pequeo ecosistema. Pueden ser restos de bosque o fruto de

plantaciones. A pesar de los muchos efectos positivos de los setos, en ml-tiples ocasiones estos han sido olvidados por la agricultura convencional.

Se recomienda su utilizacin ya que, frente a un muro o una alambrada, unseto mejora el paisaje de los huertos embelleciendo este espacio pblico.

El seto debe estar constituido principalmente por especies autctonas.En la regin mediterrnea encontramos multitud de arbustos, matorralesy plantas aromticas idneos para utilizar, como romero, tomillo, organo,salvia, lavanda, etc.

Figura 29. Hilera de setos en los huertos del P. Miraflores (Sevilla).

A grandes rasgos, el seto permite una mejora microclimtica, optimizando

las condiciones y el rendimiento de los cultivos (ms humedad, ms poli-nizacin). Tambin acta evitando la erosin, reduciendo la escorrentasuperficial, facilitando la infiltracin y la formacin de reservas de agua,ayudando a consolidar mrgenes e incluso actan creando una barrera queprotege, en cierta manera, de la deriva qumica de otras parcelas cercanas.

Se puede destacar por ltimo que el seto, adems, nos va a permitir mejorarla biodiversidad del huerto, sirviendo de refugio para la fauna auxiliar que nosva ayudar a controlar las plagas.


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Casetas para los hortelanos/as

Los hortelanos/as van a necesitar algn espacio para guardar las distintasherramientas. Si no se prev la construccin o instalacin de algn tipo de

casetilla o habitculo, los propios ciudadanos/as van a construirlas o insta-larlas de diferentes maneras utilizando diversos materiales. Estos habitcu-los son objetos de bricolaje que aprovechan restos y desechos de maderas,chapas o ladrillos. En ocasiones, el resultado es bastante aceptable siendoen cambio desastroso en otras, por lo que la imagen y el paisaje de loshuertos puede verse fuertemente daado al tener casetillas o habitculosde escasa o nula calidad.

Existen varias frmulas, siendo las ms comunes son:

Arcones anclados en el suelo.Pueden ser de diversos materiales(ladrillo, mampostera, acero, etc.).

Conjunto de caas (Tipis indios).Las caas se disponen en ver-tical desde el suelo, cerrndose en su lmite superior y dejando unaabertura en la base para acceder a las herramientas y materiales. Tie-ne la ventaja de que distorsionan poco el paisaje, pero hay que teneren cuenta que es preciso incorporar algn material impermeable en elinterior para que no se moje lo almacenado en el interior. Asimismo,

hay que recordar que la mejor opcin para obtener caas, es su ad-quisicin en tiendas especializadas.

Figura 30. Tipi indio en los huertos del P. Miraflores (Sevilla).


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Casetas individuales en el interior de los huertos. Suelen ser de pe-quea dimensin (2 m2 mximo). Algunas veces se recubren de hiedrau otras plantas trepadoras para camuflarlas entre los huertos.

Figura 31. Caseta en los huertos de Conil de la Frontera (Cdiz).

Casetas individuales en el exterior de los huertos.Se dispo-nen tantas casetas como parcelas existen, asignando una a cadaparcela. Pueden ser de diversos materiales de construccin comomadera, ladrillo o mampostera, intentando respetar el estilo arqui-tectnico y el equilibrio paisajstico de la zona.

Figura 32. Casetas en los huertos de Villamartn (Cdiz).


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Casetas colectivas en el exterior de los huertos.Puede construirseo instalarse un solo edificio de gran dimensin, en el que distribuir inter-namente taquillas para cada parcela o simples banquetas con una perchaen la pared con el nombre o nmero de parcela. Una versin de esta

frmula seria la utilizacin de contenedores de mercancas reutilizados yadaptados para este uso.

Figura 33. Huertos de El Coronil (Sevilla).

Figura 34. Huertos de San Juan de Aznalfarache (Sevilla).


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Semilleros / invernaderos

Es recomendable la construccin de un invernadero en el que los hortela-nos/as puedan proveerse de plantones de manera fcil y econmica. Existen

muchos tipos de invernaderos (planos o tipo parral, tipo raspa, asimtricos,capilla, doble capilla, tipo tnel o semicilndrico, de cristal) por lo que elAyuntamiento decidir cul es el idneo en funcin de su presupuesto, ne-cesidades, etc. En cuanto a las dimensiones del mismo, este deber estaradaptado al nmero de parcelas a las que tiene que surtir de plantones.

Para el suelo del invernadero se recomienda, por ejemplo, un firme de piedra ma-chacada de 20 cm de espesor medio compactado al 95 % proctor y pavimentocontinuo de hormign, mediante solera de 15cm de espesor de hormign HM20y malla electrosoldada tipo B500S, con adiccin de cuarzo y fratasada.

El sistema de riego ms adecuado en el invernadero es el de microaspersin,pero tambin se puede utilizar la regadera.

El cultivo en semilleros e invernaderos precisa el conocimiento de cuestionescomo la luz, temperatura, calefaccin, ventilacin, humedad, abonado, por loque se recomienda que sea llevado a cabo por profesionales especializadosu hortelanos/as con experiencia en la materia.

El invernadero es tambin un espacio ideal para cuestiones pedaggicas congrupos de nios/as, por lo que habr que adaptar el tamao y la altura de lossemilleros, facilitar el acceso, consolidar el firme, etc.

Figura 35. Invernadero en los huertos de El Zambudio (Baena - Crdoba).


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Zona para residuos

Es preciso diferenciar entre residuos vegetales compostables y otros resi-duos (envases, papel, etc.) que pueden ser recogidos de manera selectiva.

Compostera

La compostera es el lugar fsico donde los hortelanos/as podrn depositarlos restos vegetales. El Ayuntamiento puede disponer de un espacio comnpara todos o instalar pequeas composteras en cada parcela. Existen mu-chos modelos de composteras, que se pueden construir incluso reciclandomateriales. En todo caso, es importante que las composteras en cada parce-la tengan las siguientes caractersticas:

- Huecos laterales o sistema de ventilacin para permitir la en-trada de oxgeno.

- Apertura y cierre superior por la que introducir los restosvegetales.

- Base de la compostera en contacto con la tierra, para permitirla entrada de aire y acceso de los organismos que habitan enel suelo y se encargan de la descomposicin de los materiales.

- Disponibilidad de una fuente de agua cercana para poder hu-medecer el compost cuando sea preciso.

Figura 36. Compostera en los huertos de Doa Menca (Crdoba).


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La correcta elaboracin del compost exige ciertos conocimientos tcnicospara controlar la temperatura, humedad, madurez, calidad del compost, etc.,por lo que se recomienda contar con profesionales especializados que pue-dan asesorar a los hortelanos/as. Igualmente, la compostera se presenta

como un espacio pedaggico idneo donde transmitir conocimientos prcti-cos acerca de la naturaleza, el reciclaje, el ciclo de la vida, etc.

Recogida selectiva

El Ayuntamiento debe situar en las proximidades de los huertos, diferentescontenedores de recogida selectiva e insistir a los hortelanos/as en el usocorrecto de los mismos, depositando todos aquellos envases, papel/cartn yvidrios que ya no necesitan.

Otros equipamientos

Zona de Ocio

Los huertos sociales ecolgicos deben ser espacios atractivos para el ocioy el reposo, no solo de los hortelanos/as, sino de todos los ciudadanos/asdel municipio. Por ello, es aconsejable facilitar la estancia de los vecinos yvecinas instalando bancos, fuentes y dems mobiliario urbano que facilite lapermanencia de dichos vecinos.

Si existe espacio, tambin puede instalarse una zona de juegos infantiles paraque los ms pequeos se familiaricen con el paisaje de huertos mientras lospadres, madres y abuelos/as realizan sus tareas en el huerto o simplementedescansan en la zona de ocio.

Figura 37. Zona de juegos infantiles junto a los huertos de la Chana (Granada).


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3. ORDENANZAS Y REGLAMENTOS DE USO

Los huertos sociales ecolgicos necesitan unas normas, reglamentos u orde-nanzas para poder organizarse y gestionarse de manera que satisfaga las ne-

cesidades, libertades, derechos y obligaciones de todos los actores socialesimplicados (administracin pblica, tcnicos, ciudadana, etc.).

Es preciso recordar que la inexistencia de unas Ordenanzas Municipales o deun Reglamento interno de uso y gestin es el principal motivo de conflicto enlos huertos sociales ya existentes.

Las dificultades con las plantas pueden solucionarse con procedimientos tc-nicos (lucha contra plagas, rotaciones, etc.), pero la mayora de los proble-

mas en los huertos proceden de las relaciones sociales entre las personas ycolectivos y estos con el ayuntamiento, teniendo estos problemas solucionesbastante ms complejas. Entre los problemas ms destacables destacan lasdisputas por lindes entre parcelas, ocupacin de caminos y zonas comunes,los robos internos y externos, la permanencia indefinida o el intento de here-dar parcelas, la indefinicin de competencias en tareas a realizar bien por loshortelanos/as, bien por el ayuntamiento (reparaciones de infraestructuras,apertura y cierre, sanciones, etc.).

La presencia y el uso por parte de los ciudadanos/as de un suelo pblico, deunas instalaciones pblicas o de un equipamiento pblico, debe ser reguladacon el fin de enmarcar claramente los derechos y obligaciones tanto de lapropia administracin pblica como de los ciudadanos/as. Al igual que ya serealiza en el uso y gestin de otros equipamientos y servicios municipalescomo las instalaciones deportivas, los huertos sociales ecolgicos debencontar con una Ordenanza Municipal o un Reglamento de Uso que garanticecuestiones como la igualdad en el acceso, la transparencia, el carcter p-blico y no privativo de los espacios, el uso correcto de abonos, la correctagestin de los residuos vegetales, etc.

Las ordenanzas municipales (o los reglamentos de uso) deben adaptarse ala realidad de cada municipio y deben realizarse de manera conjunta entre di-ferentes especialistas o tcnicos en temas agrcolas, urbansticos, sociales,medioambientales y legales. La participacin de tcnicos de distintas discipli-nas se presenta como la mejor opcin ya que los huertos sociales ecolgicosno son proyectos nicamente agrcolas, sino que las cuestiones sociales sonigual de importantes que las agrcolas.


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Una vez redactada la Ordenanza Municipal, los departamentos jurdicos y le-gales del Ayuntamiento deben supervisar dicha ordenanza para que se ajustey no sea contradictoria con la legislacin autonmica y/o estatal.

Cada Ayuntamiento decidir si realiza una ordenanza con un alto nivel dedetalle o una ordenanza de tipo genrico. En caso de una ordenanza de tipogenrico, se deber desarrollar posteriormente un reglamento de uso internopara intentar cubrir todas las eventualidades que puedan darse en el desarro-llo diario de la convivencia entre los ciudadanos/as en los huertos.

En cualquier caso, por lo general, las ordenanzas municipales deben tener encuenta las siguientes cuestiones:

a) Exposicin de Motivos

Se explicar la motivacin que ha impulsado al Ayuntamiento a la crea-cin de unos huertos sociales ecolgicos, as como los objetivos quese pretenden cumplir con dichos huertos. De igual manera, se descri-birn los huertos proyectados, su localizacin, dimensiones, titulari-dad del suelo, etc.

b) Procedimiento de Adjudicacin

Se especificarn cuales son los requisitos para ser adjudicatario de unaparcela en los huertos, qu documentacin se debe aportar, el plazo y lugar

donde presentarla. Asimismo se describir el sistema de adjudicacin delAyuntamiento, normalmente con la realizacin de un sorteo pblico. Se de-terminar la documentacin que deber firmar el ciudadano/a (un contrato).

Figura 38. Sorteo de parcelas en Cazalla de la Sierra.


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Los ayuntamientos o asociaciones ciudadanas, pueden establecer prio-ridades en determinadas cuestiones sociales o laborales, por ejemplo,personas en situacin de desempleo, personas jubiladas, etc. Este aspec-to se trat en el anterior apartado sobre Requisitos de acceso de esta

Gua. Se recuerda en este punto la idoneidad de conseguir unos huertoslos ms diversos posible desde el punto de vista humano, incorporandoal mximo de colectivos, grupos, edades y situaciones laborales que par-ticipan en la vida de un municipio.

c) Derechos y Obligaciones

Se deber determinar cules son los compromisos adquiridos por elAyuntamiento y el papel que ste va a desempear en los huertos. Asi-mismo, se debern sealar los derechos y los deberes que tienen losciudadanos/as como adjudicatarios de unos huertos sociales ecolgicos.

d) Condiciones de la cesin de la parcela

Se especificar el tiempo de cesin de la parcela y las posibles prrrogasque pudieran otorgarse (por aos agrcolas preferentemente). Tambinlas tareas a realizar por el Ayuntamiento en la entrega de las parcelas y lastareas a realizar por los ciudadanos/as al trmino del tiempo de cesin,sealando que deber quedar limpia y en perfecto estado de uso.

Se determinaran las circunstancias que impliquen el fin previo de la cesin

de la parcela como el empadronamiento en otro municipio, la renuncia obaja voluntaria, la defuncin o el incumplimiento de las ordenanzas o regla-mento interno. La enajenacin de la parcela a travs de su venta, alquiler oherencia se prohibirn de manera expresa.

e) Estado y mantenimiento de las parcelas

Es preciso especificar las dimensiones e infraestructuras previas en lasparcelas antes de su cesin a los ciudadanos/as, sealando los metroscuadrados disponibles, la estructura y forma de cada parcela, la localiza-cin de los caminos externos, las bocas de riego, etc.

Una vez sealadas las dimensiones e infraestructuras de la parcela hayque determinar la imposibilidad de su modificacin o transformacin fsi-ca, tales como la ampliacin del terreno, divisin o particin entre otrosciudadanos/as, nuevas obras de canalizacin del agua, construccin dechozas, almacenes, cerramientos o muros, etc.

Debe explicitarse claramente la imposibilidad de los hortelanos/as derealizar inversiones costosas de carcter permanente en los huertos,ya que, en caso de perder la condicin de hortelano/a, dicha inversin

no se podr reintegrar.


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f) Condiciones de uso agrcola

En las ordenanzas o reglamento debe indicarse que los huertos estndestinados preferentemente al cultivo de hortalizas y verduras, pudin-dose combinar con plantas aromticas. Debe especificarse claramenteel permiso o el impedimento de plantar rboles, como rboles frutales,en las parcelas o, si se habilita un lugar especfico para dichos rboles.Se recomienda la habilitacin de un espacio especfico para rbolesfrutales o la limitacin a uno o dos rboles frutales en cada parcela.

Es conveniente recomendar asimismo la utilizacin de variedades desemillas autctonas para contribuir al mantenimiento del patrimonionatural y por su mejor adaptacin a las condiciones bioclimticas decada regin o comarca.

De igual manera, debe sealarse la obligatoriedad de la prctica deagricultura ecolgica,en este contexto, entendiendo que es benefi-cioso tanto para los seres humanos a travs de la alimentacin de pro-ductos frescos y saludables, como para el ecosistema que componenlos animales y plantas asociados al huerto.

Figura 39. Calabaza en los huertos de Gelves (Sevilla).

Es necesario precisar, que est prohibida la plantacin de cualquierplanta psicotrpica o prohibida por la legislacin vigente. Hay que fijarnormas acerca de la utilizacin de productos fitosanitarios y acercadel uso y gestin de los abonos, haciendo hincapi en los diferentestipos de abonos verdes y orgnicos. Asimismo es interesante recogerrecomendaciones acerca de cmo luchar contra las plagas y enfer-

medades de las plantas a travs de procedimientos como el uso derepelentes, barreras fsicas o insecticidas naturales.


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g) Organizacin de los Huertos

En este apartado hay que fijar cules sern los rganos de representa-cin de los ciudadanos-hortelanos, la organizacin interna, los gruposde trabajo, etc. Se explicarn las funciones de los representantes, lasresponsabilidades adquiridas y la capacidad de toma de decisiones.

Igualmente habr que sealar los procedimientos de democracia inter-na, la periodicidad de las asambleas o reuniones, las relaciones conel Ayuntamiento, etc.

h) Rgimen disciplinario

El ayuntamiento deber sealar el procedimiento para realizar inspeccio-nes de las parcelas, la posibilidad de realizar anlisis de tierra y agua yel departamento, seccin o equipo encargado de ello.

Se especificarn tanto las infracciones de tipo agrcola que se puedencometer tales como la modificacin de las parcelas, la construccin deestructuras, el uso de fertilizantes o pesticidas no autorizados, etc., ascomo las infracciones de convivencia entre los ciudadanos/as (insultos,altercados, robos, etc.).

Posteriormente, el ayuntamiento regir las sanciones previstas quepueden variar de manera gradual desde leves a graves as como elprocedimiento sancionador que el ayuntamiento pondra en marcha

llegado el caso de tener que aplicar una sancin.i) Organizacin de actividades complementarias

Se pueden incluir algunas normas acerca de la organizacin de activida-des ldicas y la colaboracin con otros colectivos del municipio, organiza-ciones sociales, organizaciones agrarias, colegios y universidades, etc.

Para conseguir que las Ordenanzas Municipales sean aceptadas portodos los ciudadanos y ciudadanas es preciso su aprobacin previa porel Pleno Municipal, intentando alcanzar el mximo de consenso posible.

Con posterioridad, el Ayuntamiento debe llevar a cabo un plan de co-municacin y sensibilizacin donde se explique la Ordenanza y el fun-cionamiento general de los huertos.

Esto acercar a los ciudadanos/as a los huertos y facilitar su integra-cin en la vida cotidiana de la ciudad o pueblo.


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4. GESTIN Y COORDINACIN DE LOS HUERTOSSOCIALES ECOLOGICOS

En funcin de la gestin podemos diferenciar: huertos que son gestionados directamente por el ayuntamiento u otra

administracin pblica como las Diputaciones, el gobierno regional, etc.

huertos gestionados de manera directa por asociaciones ciudadanas.

huertos gestionados de manera conjunta entre el ayuntamiento y lasasociaciones ciudadanas. Esta frmula es la ms frecuente, otorgan-do una constante retroalimentacin de los derechos y obligacionestanto de la administracin como de los ciudadanos/as.

Gestin

Administracin Pblica

Asociaciones Ciudadanas

Co-Gestin

Figura 40. Huertos segn la gestin.

Para un buen funcionamiento y una correcta gestin de los huertos socialesecolgicos, es preciso disponer de mecanismos y recursos humanos tantoen el Ayuntamiento como en las asociaciones ciudadanas que sean capacesde afrontar las dificultades de gestin de manera exitosa.

Estos mecanismos y recursos humanos debe

Huertos Sociales Ecologicos Andalucia 2014

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