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Material de difusin interna sobre temtica

terica de 1972 FAU

Para entender lo que pasa (la coyuntura) hay que poder pensar

correctamente. Pensar correctamente significa ordenar y tratar

adecuadamente los datos que se producen, en montn, sobre la

realidad.

Pensar correctamente es condicin indispensable para analizar

correctamente lo que sucede en un pas en un momento dado de la

historia de ese pas o de cualquier otro. Eso exige instrumentos. Esos

instrumentos son los conceptos. Para pensar con coherencia se

requiere un conjunto de conceptos coherentemente articulados entre

s. Se exige un sistema de conceptos, una teora.

Sin teora se corre el riesgo de pensar cada problema slo en

particular, aisladamente, a partir de puntos de vista que pueden ser

diferentes en cada caso. O en base a subjetividad, plpitos, embalajes,

etc.

El partido ha podido evitar graves errores porque se ha pensado a

partir de conceptos que tienen un grado importante de coherencia. Ha

cometido tambin errores graves por insuficiente desarrollo de su

pensamiento terico como organizacin.

Para proponer un programa hay que conocer la realidad econmica,

poltica, ideolgica de nuestro pas. Lo mismo para formular una lnea

poltica suficientemente clara y concreta. Si se conoce poco y mal no

habr programa y slo podr haber una lnea muy general, muy difcil

de concretar en cada lugar en que el partido trabaje. Si no hay lnea

clara y concreta no hay prctica poltica eficaz. La voluntad poltica del

partido corre entonces el riesgo de diluirse. El voluntarismo se

convierte en hacer con buena voluntad lo que va saliendo. Pero no se

incide de modo determinado sobre los acontecimientos, en base a suprevisin aproximada. Se es determinado por ellos y ante ellos se

acta espontneamente.

Sin lnea para el trabajo terico una organizacin, por grande que sea,

es zarandeada por circunstancias que ella no condiciona ni

comprende. La lnea poltica presupone un programa, o sea las metas

que se quieren alcanzar en cada etapa. El programa indica qu fuerzas

son favorables, cules son los enemigos y quines son los aliados slotransitoriamente. Pero para saber eso hay que conocer profundamente

la realidad del pas. Por eso adquirir ahora ese conocimiento es la

tarea prioritaria. Y para conocer se necesita teora.

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El partido necesita un esquema claro para poder pensar

coherentemente el pas y la regin y las luchas del movimiento obrero

internacional a travs de la historia. Precisamos tener un casillero

eficaz para ordenar y jerarquizar la masa creciente de datos referentes

a nuestra realidad econmica, poltica e ideolgica. Precisamos tener

un mtodo para tratar esos datos. Para ver cules son los msimportantes, cules se precisan primero y cules despus. Para poder

as administrar correctamente nuestras fuerzas disponibles para este

frente de trabajo. Un esquema conceptual que permita vincular unas

cosas con otras segn un orden sistemtico, coherente y que nos sirva

para lo que queremos hacer como militancia del partido. Que nos

acerque ejemplos de como trabajar con esos esquemas conceptuales

otros que actan en otras realidades.

Pero el trabajo de conocer nuestro pas lo tenemos que hacer nosotros

porque nadie lo va a hacer por nosotros.

Aqu no vamos a inventar esquemas tericos a partir de cero. No

vamos a crear una nueva teora en todos sus trminos. Ello es as

porque el atraso general del medio y de sus instituciones

especializadas y nuestra escasa disponibilidad para emprender esa

tarea.Entonces tenemos que tomar la teora tal como se va elaborando,

analizndola crticamente. No podemos aceptar cualquier teora a ojos

cerrados, sin crtica, como si fuera un dogma.

Queremos realizar una transformacin total en nuestro pas y no

vamos a adoptar para pensar las teora que han creado los burgueses.

Con concepciones burguesas vamos a pensar como quieren que

pensemos los burgueses.

Queremos estudiar y pensar el Uruguay y la regin como

revolucionarios. Entonces entre los elementos que incluyen las

diferentes tendencias de la corriente socialista, vamos a tomar

siempre elementos de los que mejor nos sirvan para eso: para pensar y

analizar revolucionariamente al pas, la regin u otras regiones y

experiencias.

No vamos a adoptar una teora para ponernos un cartelito de moda.

Para vivir repitiendo citas que otros dijeron en otros lados, en otro

tiempo, a propsito de otras situaciones y problemas. La teora no espara eso. Para eso la usan los charlatanes.

La teora es un instrumento, una herramienta, sirve para hacer un

trabajo. Sirve para producir el conocimiento que necesitamos

producir. Lo primero que nos interesa conocer es nuestro pas. Si no

nos sirve para producir nuevos conocimientos tiles a la prctica

poltica la teora no sirve para nada, se convierte en mero tema de

charla inconducente, de estril polmica ideologizante.

El que compra un gran torno moderno y en lugar de tornear se pasa

hablando del torno, hace un mal papel, es un charlatn. Lo mismo el

que pudiendo tener un torno y usarlo prefiere tornear a mano,

porque as se haca antes

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Algunas diferencias entre teora e ideologa

Cabe puntualizar algunas diferencias entre lo que habitualmente se

llama teora e ideologa.

La teora apunta a la elaboracin de instrumentos conceptuales para

pensar rigurosamente y conocer profundamente la realidad concreta.

Es en este sentido que puede hablarse de teora como equivalente a

ciencia.

La ideologa, en cambio, consta de elementos de naturaleza no

cientfica, que contribuyen a dinamizar la accin motivndola en base

a circunstancias que (aunque tienen que ver con las condiciones

objetivas) no derivan en sentido estricto de ellas. La ideologa est

condicionada por las condiciones objetivas aunque no determinada

mecnicamente por ellas.

El anlisis profundo y riguroso de una situacin concreta, en sus

trminos reales, rigurosos, objetivos, ser as un anlisis terico de

carcter lo ms cientfico que sea posible. La expresin de

motivaciones, la propuesta de objetivos, de aspiraciones, de metas

ideales, eso pertenece al campo de la ideologa.

La teora precisa, circunstancia, las condicionantes de la accin

poltica, la ideologa la motiva, la impulsa, configurndola en sus

metas ideales y su estilo.

Entre teora e ideologa existe una vinculacin estrecha, ya que las

propuestas de la segunda se funden y apoyan en las conclusiones del

anlisis terico. Una ideologa ser tanto ms eficaz como motor de la

accin poltica cuando ms firmemente se apoye en las adquisiciones

de la teora.

Los alcances del trabajo terico

El trabajo terico es siempre un trabajo que se sustenta y se basa en

los procesos reales, en lo que sucede en la realidad histrica, en lo que

pasa. Sin embargo, como trabajo se sita enteramente en el campo del

pensamiento: no hay conceptos que sean ms reales que otros

conceptos.

Al respecto cabe puntualizar dos proposiciones bsicas:

1) La distincin entre la realidad existente, concreta, entre los

procesos reales, histricos, y por otra parte los procesos del

pensamiento, apuntados al conocimiento y comprensin de aquella

realidad. Es necesario, para decirlo en otros trminos, afirmar la

diferencia entre el ser y el pensamiento, entre la realidad tal como es y

el conocimiento que sobre ella se puede tener.

2) La primaca del ser sobre el pensamiento, de la realidad sobre el

conocimiento. Dicho de otra manera, importa ms, pesa ms como

determinante del curso de los acontecimientos lo que pasa en la

realidad que lo que sobre esos hechos se pueda pensar o conocer.

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A partir de estas afirmaciones bsicas cabe realizar ciertas

puntualizaciones para precisar los alcances del trabajo terico, o sea el

esfuerzo de conocimiento guiado por propsitos de conocimiento

riguroso, cientfico.

El trabajo terico es siempre realizado a partir de una materia prima

determinada. No parte de lo real concreto, de la realidad propiamente

dicha, sino que parte de informaciones, de datos y nociones sobre esa

realidad. Este material primario es tratado, en el proceso de trabajo

terico, por medio de ciertos tiles conceptuales, de ciertos

instrumentos de pensamiento. El producto de este tratamiento es el

conocimiento.

Dicho en otros trminos. Slo existen, propiamente hablando, objetos

reales, concretos y singulares (situaciones histricas determinadas, ensociedades determinadas, en momentos determinados). El proceso de

pensamiento terico tiene por fin conocerlos.

A veces el trabajo de conocimiento apunta hacia objetos abstractos

que no existen en la realidad, que slo existen en el

pensamiento pero que son instrumentos indispensables,

condicin previa para poder conocer los objetos reales (por

ejemplo el concepto de clase social, etc.), En el proceso deproduccin del conocimiento por lo tanto, se trasforma la

materia prima (percepcin superficial de la realidad) en un

producto (conocimiento riguroso, cientfico de ella).

El trmino conocimiento cientfico cabe precisarlo en lo que tiene

que ver con la realidad social. Aplicado a esta realidad alude a su

comprensin en trminos rigurosos, lo ms aproximado posible a la

realidad tal como ella es.

Queda dicho con esto que el proceso de conocimiento de la realidad

social, como el de toda realidad objeto de estudio, es susceptible de

una profundizacin terica infinita. As como la fsica, la qumica y

otras ciencias pueden profundizar infinitamente en el conocimiento de

las realidades que constituyen sus respectivos objetos de estudio, la

ciencia social puede profundizar indefinidamente el conocimiento de

la realidad social. De ah que sea inadecuado esperar un conocimiento

acabado de la realidad social para comenzar a actuar sobre ella

tratando de transformarla. No menos inadecuado es intentartransformarla sin conocerla a fondo.

El conocimiento riguroso, cientfico, de la realidad local, de nuestra

formacin social, slo se logra trabajando sobre informaciones, datos

estadsticas, etc. por medio de los instrumentos conceptuales ms

abstractos que proporciona y constituyen la teora. A travs de la

prctica terica se busca la produccin de esos instrumentos

conceptuales, cada vez ms precisos y ms concretos, que conduzcanal conocimiento de la realidad especfica de nuestro medio.

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Solamente a partir de una comprensin terica adecuada, o sea

profunda, cientfica, pueden desarrollarse elementos ideolgicos

(aspiraciones, valores, ideales, etc.) que constituyen medios adecuados

para la transformacin de dicha realidad social con coherencia de

principios y eficacia en la prctica poltica.

La prctica poltica y el conocimiento de la realidad

Una prctica poltica eficaz exige, por lo tanto, el conocimiento de la

realidad (teora) la postulacin armnica con ella de valores objetivos

de transformacin (ideologa) y medios polticos concretos para

lograrla (prctica poltica). Los tres elementos se funden en una

unidad dialctica que constituye un esfuerzo por la transformacin

social que el partido postula.

Se pregunta: Debemos esperar a un acabado desarrollo terico para

comenzar a actuar? No. El desarrollo terico no es un problema

acadmico, no parte de cero. Se fundamenta, se motiva y se desarrolla

a partir de la existencia de valores ideolgicos, de una prctica

poltica. Ms o menos ciertos, ms o menos errneos, estos elementos

existen histricamente antes que la teora y motivaron su desarrollo.

La lucha de clases existi mucho antes de su conceptualizacin terica.

La lucha de los explotados no esper a la elaboracin del trabajo

terico que diera razn de ella para desencadenarse. Su ser, su

existencia, fue anterior a su conocimiento, al anlisis terico de su

existencia.

Por eso, a partir de esta comprobacin bsica es que surge como

fundamental y prioritario el actuar, la prctica poltica. Solamente a

partir de ella, en su existencia concreta, en las condiciones

comprobadas de su desarrollo puede llegar a elaborarse un

pensamiento terico til. Que no sea gratuita acumulacin de

postulaciones abstractas con ms o menos coherencia y lgica interna,pero sin coherencia con el desarrollo de los procesos reales. Para

teorizar con eficacia es imprescindible actuar.

Podemos prescindir de la teora en aras de urgencias prcticas? No.

Puede existir, lo dijimos, una prctica poltica fundada slo en

criterios ideolgicos, o sea no fundada, o insuficientemente fundada

en adecuados anlisis tericos. Ello es lo habitual en nuestro medio.

Nadie podr sostener que existe, en la realidad nuestra y an regionalamericana, un anlisis terico adecuado, una comprensin conceptual

suficiente, ni mucho menos. Esta comprobacin es extensible, por otra

parte, al conjunto de la realidad. La teora se halla en una etapa slo

inicial de desarrollo. Sin embargo desde hace muchos decenios se

combate, se lucha. Esta comprobacin no debe conducir al desdn de

la importancia fundamental del trabajo terico

A la pregunta formulada antes cabe responder entonces: lo prioritarioes la prctica, pero la condicin de eficacia de sta radica en el

conocimiento lo ms riguroso posible de la realidad.

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En una realidad como la nuestra, la formacin social de nuestro pas,

el desarrollo terico tiene que partir, como en todas partes, de un

conjunto de conceptos tericos eficaces, operando sobre una masa lo

ms amplia posible de datos, que constituya la materia prima de la

prctica terica.

Los datos por s solos, tomados aisladamente, sin un tratamiento

conceptual adecuado, no dan razn de la realidad. Simplemente

adornan y disimulan las ideologas a cuyo servicio se funcionalizan

aquellos datos.

Los conceptos abstractos, en s mismos, sin encajar en una base

informativa adecuada, no aportan tampoco conocimiento de las

realidades.

El trabajo en el campo terico que se desarrolla en nuestro pas flucta

habitualmente entre ambos extremos errneos.