Historia de la Escuela N° 657

Pampa del InfiernoC H A C O

¿ Por qué se creó la Escuela N° 657, en el año 1960 ?

¿ Quiénes consiguieron la creación de la Escuela N° 657 ?

La iniciativa de la creación de la escuela la tuvieron tres personas: Don Alberto Melgratti, Don Fortunato Guzmán y Don José “Tito” Vittar. A parte de que todo el barrio veía la sentida necesidad de la creación de la unidad educativa.

Luego se fueron sumando a esta iniciativa varias personas como ser Apolonio Guzmán (padre de la primera docente), Don Alberto Esperguín y otros que veían el peligro de los trenes que estaban parados en las vías horas y horas ocacionando graves problemas.

Una vez dado el primer paso, vino una persona de Resistencia de la Dirección de Educación de apellido Peralta, que tenía muy buena

amistad con Don Vittar y colaboró mucho para la creación de la escuela.

Para que los vecinos se interesaran aún más por la creación se realizaron visitas domiciliarias a los vecinos levantando firmas. De esa manera se hizo como si hubiera sido una reunión. Al principio fue así; después hubo muchas reuniones; vinieron gente del Consejo General de Educación y lógicamente que hasta que se concretó hubo muchos cabildeos.

La primera reunión formal se llevó a cabo en el local de Don Alberto Melgratti con un grupo de vecinos y gente de Presidencia Roque Saenz Peña y Resistencia que tenían la gran inquietud y de ahí nace la iniciativa de formar la Comisión “Pro-edificio” quedando integrada por José Vittar, Alberto Melgratti, Isabel de Dorado, Alberto Esperguín, Apolonio Guzmán, Amanda Guzmán y otros. Pero luego las reuniones se hacían del Fortunato Guzmán por el hecho de que Don Vittar tenía en funcionamiento un aserradero muy grande, por lo tanto había mucho movimiento de ese lado y por ello era dificultoso concurrir allí. Ese fue el único motivo, pero cuando vinieron las autoridades de Consejo de Educación arribaron a la casa de Vittar directamente, porque fue él quien dijo que aportaría con las cosas necesarias para que la escuela funcione. Económicamente, fue quien puso el edificio y el material necesario para las aulas.

Cabe destacar que en esta primera reunión se decidió solicitar la creación de la escuela con la urgencia que el caso requería. Se insistió mucho sobre eso hasta que el Consejo de Educación envió a alguna autoridad para estudiar y sobre todo hacer la estadística de la cantidad de alumnos que podían concurrir.

También se realizó el pedido de un docente y lógicamente que la comunidad se comnprometía a aportar con los bie- nes materiales, pero se solicitaba que se designe los maestros que sean necesarios.

Estas tres personas mayores que se observan son Don José “Tito” Vittar, Martín Guzmán y Alberto Melgratti. Personas destacadas del medio de mucho carisma y que lograron muchas cosas para nuestra localidad.

Don Martín Guzmán cuenta que “a raíz de la situación de aquella chica, se agravó la situación de la que ya veían. A nosotros, nuestras madres iban y nos esperaban en la vía para hacernos cruzar porque el tren se ponía a lo largo del pueblo, entonces ocurría que algunos cruzaban por debajo del tren y algunos pasaban por arriba; pero cuando se pasaba por arriba había peligro de poner el pie en la collera del tren y que al moverse lo aplaste: pasando por debajo al moverse el tren se podía pegar un fuerte golpe. Entonces ese peligro del tren había que eliminarlo, había que hacer una ESCUELA de este lado, en el Barrio Sur”.

Por el año 1.960, Don Fortunato Guzmán que ya habitaba esta zona, Don Tito Vittar y Don Alberto Melgratti decidieron levantar firmas en el barrio para pedir la creación de la escuela.

La situación económica por la década del 60 era crítica, tanto es así que por el año 1.962 el pago del sueldo a la administración pública estaban atrasados un año y meses. Por lo tanto, no había recursos para crear la escuela.

Es por ello que Don Tito Vittar dijo “yo voy a poner el local y las cosas que sean necesarias como ser: pizarrones, algunos bancos y sillas para que se cree la escuela. Y así fue, Don Vittar montó un salón e hicieron bancos de madera en el aserradero de su propiedad, hicieron los pizarrones y el gobierno debía designó la docente. Así comienza a funcionar por el año 1.960 la Escuela N° 110.

La escuela comenzó a funcinar en ranchos de obrajes pertenecientes a Don Tito Vittar, una era de adobe (que existe todavía), otra de ladrillo y otra de maderas machimbradas de quebracho blanco, los techos eran de chapa de cinc y algunas tenían costaneras aserradas como cielorrasos, construídas por los mismos empleados. Dos aulas estaban juntas y otra separada con un patio muy chico, lo cual era demasiado incómodo.

La directora vivía en una habitación que tenía costaneras rústicas, techo de pasto, tierra y por último chapas. Después se hizo una

ampliación hacia el Sur con más comodidades y más patio, esto a fines de 1.960.

Al principio el edificio fue cedido en préstamo, gratuito y después la Directora tramitó un alquiler para que se le pague a Don Vittar. La idea surgió en una charla que mantuvieron Don Vittar con las amistades que tenía en el Conse- jo de Educación y Lotería Chaqueña. Consistía en un alquiler que se pagaba por meses (que no alcanzó a un año) y con ese dinero se compraba elementos necesarios para las aulas como ser: ventiladores, estufas, focos, etc. Pero ya habían pasado uno o dos años de su creación; inclusive la energía eléctrica se había conectado de la casa de Vittar porque ni eso se conseguía en aporte.

La limpieza esencialmente la hacían los maestros con sus alumnos. Los fines de semana venían los alumnos dirigidos por los maestros y lavaban los pisos para que aguante la limpieza durante la semana; pero eran los maestros los que se encargaban debido a que no había personal de limpieza durante el tiempo que funcionó en esta propiedad. Las veces que se decidía pintar la escuela, se reunían los maestros, alumnos y

vecinos los días domingos para realizarlo.

Este nuevo edificio estaba esencialmente construído con piso de ladrillo, paredes de ladrilo sin revoque, techo a dos aguas con chapas y canaletas de cinc y las aberturas eran precarias, construídas con tablas lisas que las hicieron los operarios de Don Vittar.Lo único que se procuraba es que esté limpio y pintado con cal para la desinfección de las paredes; no tenían cielorasos, era terrible estar en esas aulas en los días de calor. A raíz de eso se comenzó a gestionar la nueva escuela porque el ambiente no era el adecuado para que los alumnos puedan resitir cuatro horas de trabajo; otro problema muy serio que se manejo en la escuela era que contaba con un pequeño al- jibe y siempre faltaba agua. En ese entonces no había vendedores de agua como lo hay en la actualidad, de mane- ra que los vecinos con camiones de Vittar acarreaban agua en tambores para que beban los niños y cocentes.

Este edificio contaba con bancos de madera precarios y algunas mesas que ponían para escritorio del maestro y pizarrones. Luego alguien donó algunos armarios como para poder hacer funcionar el establecimiento siendo todo el mobiliario que tenía al comienzo la escuela.

Don Martín Guzmán recalca que “Vittar fue el puntal para la creación de la escuela económicamente y además tenía tenía ciertas influencias en el Estado Provincial porque a su casa venían el Presidente de Lotería Chaqueña, el Presidente del Banco y otros. Se reunían y a raíz de eso se pudo hacer posible la creación de la Es- cuela”.

Los 20 de junio era una fiesta tradicional, la idea fue de don Tito Vittar quien dijo “vamos a hacer una fiesta tradicional para que recaudemos buenos fondos como para palear los problemas más serios de la escuela”.

Don Vittar ponía personas y vehículos al servicio de la escuela para que vayan a cazar mulitas, matacos, guazunchos, osos y todo animal sivestre que encontraban para preparar comidas para la fiesta del 20 de junio.Esta fiesta se la hacía en el terreno que actualmente ocupa Don Martín Guzmán. Todavía existe el ranchito que funcionaba de bufet y también había un algarrobo muy grande que debajo de su sombra se bailaba durante todo el día y por la noche se hacía el acto escolar, en el mismo terreno.

Las comidas se preparaban con carne de animales del monte; empanadas, asados como charata a la parrilla y hasta carne de osos. Se hacían distintas comidas para diferenciar, es por ello que venía mucha gente de Saenz Peña para probar las variedades de comidas de animales silvestres.

Mucha gente del campo colaboraba con la escuela, como ser Don Ángel Cussigh que traía perdices que caza- ba con cimbras.

El baile empezaba a las nueve de la noche hasta las tres de la mañana porque hasta esa hora era el permiso que daba la policía.

La mayoría de las veces se hacía el baile con músicos locales. Algunos de ellos eran: Nieva, Luis Alegre, Sixto Lobos, Carlos Sena. También se traía de Saenz Peña a músicos y cantores, como ser el caso de Menoldo Díaz que colaboró viniendo muchas veces.

El baile empezaba aproximadamente a las 21 horas con danzas folclóricas preparadas por muchachos y chicas que tenían afinidades de estilos. Participan en los actos del 20 de junio bailando el pericón nacional y otras danzas.

En aquellos años se formó el primer conjunto folclórico de Pampa del Infierno y surgió por iniciativa de Don Martín Guzmán que al finalizar sus estudios y regresar al pueblo se preguntaba cómo era posible que no haya equipo de basquet, no haya música o conjuntos. Entonces lo habló a Don Lobos para que les enseñara música, pero este señor sólo sabía tocar la guitarra y se ofreció

gentilmente para enseñarles.

Un día viene un vendedor de bombos y llega a Vittar donde se organizaba las fiestas. Entonces Don Martín compra un bombo y el manual de instrucciones para aprender a golpear. Otros se entusiasmaron como Armando Esperguín, Carlos Guzmán (que tenía nociones de música porque había estudiado violín) y compraron guitarras.

Todas las noches practicaban y además se juntaban otros muchachos para tratar de aprender. Cuando el conjunto tomó forma, una noche apareció el señor Carlos Andión y empezó él a tocar el bombo, debido a que golpeaba mejor que Guzmán. Pero este señor tenía otra condición que era la locución y por lo tanto, pasó a ser animador del conjunto y a escribir las glosas para los distintos actos escolares. Este conunto se llamó Yastasumaj.

Cabe destacar que Vittar fue el primer hombre que trajo un disco folclórico a Pampa del Infierno y fue el disco de “Los Fronterizos” cuando recién se formaron y tenía algunos temas como la Zamba de Anta, la Zamba del pañuelo, entre otros. Se escuchaba en la casa de Fortunato Guzmán debido a que él poseía una vitrola. A este equi- po había que darle cuerda para cada disco y este era de unos treinta centímetros de diámetro y tenía solamente una canción, eran los llamados discos de pasta.

Primera Comisión CooperadoraPrimera Comisión Cooperadora

Presidente: José Jorge VittarVice – Presidente: Alberto Melgratti

Secretario: José MalickiPro – Secretario: Apolonio Guzmán

Tesorero: Benjamín VeraPro – Tesorero: Juan Díaz

Vocales: Pablo Alderici, Fortunato Guzmán, Sixto Lobo, Pedro González, Severiano Campos, Humberto Calis

La primera Asociación Cooperadora estuvo integrada de la siguiente manera:

A los vecinos no les interesaba figurar como miembros de la Asociación Cooperadora sino trabajar, estar siempre dispuestos a ayudar, eran un poco reacios a estar en las listas.

Tenían como objetivos mejorar las condiciones del Establecimiento; procurar y mantener la taza de mate cocido para los chicos y además, procurar por un nuevo edificio en mejores condicones.

La Cooperadora y la Escuela para recaudar fondos hacía una fiesta tradicinal el 20 de junio, pero además en los actos o celebraciones especiales, preparaba comidas o festivales bailables; se hacían festivales folclóricos y se acostumbraba a realizar teatro infantil con representaciones gauchescas.

Este es un balance presentado por la Cooperadora luego de una fiesta realizada a mediados de febrero de 1.960 con el fín de recaudar fondos para la creación de la primera escuela.

En la fotografía se puede observar a uno de los políticos más reconocidos de la Provincia del Chaco, Don Deolindo Felipe Bittel. Ocupó el cargo de Gobernador y se desempeñó en diferentes cargos nacionales.

Aquí se lo ve junto algunos amigos de Don Vittar en una jornada de caza en beneficiencia para la Cooperadora Escolar, demostrando su humildad sin discriminación alguna.

Se puede observar en la imagen la visita de personas que venían de la ciudad de Resistencia o Roque Saenz Peña como Don Deolindo F.Bittel, gente de Loteria Chaqueña, etc. para colaborar con los vecinos y miembros de la Coope- radora en los días que se internaban en los montes para cazar animales y luego preparar las famosas comidas de carne silvestre.

La señora Celia Guzmán nació en la localidad de Las Breñas (Chaco) y sus padres fueron Beatriz Barreras y Apolonio Guzmán. Inicia sus estudios primarios en la Escuela Nacional N° 111. Luego viaja a Presidencia Roque Saenz Peña donde comienza sus estudios secundarios en el Colegio Misericordia de carácter religioso. En aquellos años la carrera de magisterio abarcaba cinco años: tres años de teoría y luego dos años de orientación que equivale a práctica y residencias en la actualidad. Al recibirse en el año 1.955 regresó a Pampa del Infierno porque sus pa- dres continuaban viviendo allí.

Profesionalemente se incia en la Escuela N° 111 en 1.956 hasta 1.959. El Director de esta escuela era el Señor Diorio quien le comenta a la Sra. Celia que se abriría una nueva escuela y pensó en ella como para darle la posibilidad de hacerse cargo de ese establecimiento. Los padres no estaban muy de acuerdo debido a que estaba del otro lado de la vía y tendría que cruzar por entremedio de los vagones, además era lugar casi desértico, pero a pesar de ello aceptó el cargo.

En 1.960 se presentó a trabajar con un telegrama de su designación, en un edificio precario que pertenece a Don Vittar. A los pocos meses se sumó el Señor José Osvaldo Maffey como maestro.

En 1.961 contrae matrimonio con Libio Valenti con quien tuvo dos hijos: Mónica y Gerardo.

Luego su esposo es trasladado a Roque Saenz Peña y ella solicita también su traslado, pero fue ubicada en la Escuela N° 130 de Villa Sarmiento de Resistencia allá por 1.965.

Al egresar de la Escuela N° 110 queda como Directora del Establecimiento la docente Olga Valussi. Luego en 1.968 recién consigue su traslado a saenz Peña pero va como Directora Titular de una escuela.

Su trabajo continuó cumpliendo entre funciones directivas, de Supervisora y de Directora Regional. Logra su jubilación en julio de 1.985 y se arraigó definitivamente en Presidencia Roque Saenz Peña.

La escuela tenía como símbolos patrios a la bandera desde sus comienzos, que fue conseguida por la Coopera- dora y que al inicio estaba ubicada dentro de una de las habitaciones que daban hacia la calle. Luego, cuando se tras- ladaron al local más grande se hizo un mástil completo. El escudo no tenía al frente. Se acostumbraba para izar la bandera cantar la Marcha Mi Bandera antes de entrar a la escuela. Para los actos escolares se ponía un buen equipo de música y se cantaba el Himno Nacional.

Los vecinos ayudaban de distinta maneras. Algunos traían leñas en su carrito cuando hacía falta, otros como Doña Amanda Guzmán hacía el mate cocido sin cobrar nada, y además ponía las ollas porque la escuela no tenía nada y lo poco que se podía invertir lo hacían para comprar tizas, hojas, lápices, etc. porque eran muchas las necesidades que había en aquellos años.

Las edades de los niños variaban desde los seis hasta los catorce o quince años. Era común ingresar a los diez u once años a primer grado,y por lo tanto, terminaban a los dieciocho. Salían de la escuela y tenían que concurrir al servicio militar.

A pesar de la edad, la disciplina escolar era muy tenido en cuenta. Por ejemplo, los alumnos para entrar a al aula se formaban, tomaban distancia con su brazo derecho, luego de bajarlos se comenzaba a ver si los cordones de los calzados estaban desatados, o si tenían mal puesto alguna ropa y con ese detalle pasaban al aula, se paraban al lado del banco y esperaban que entre el maestro, luego este le daba la orden de sentarse y los alumnos agradecían con el “muchas gracias”.

Con el transcurrir de los meses aumentó la matrícula y aún más el año siguiente de la creación de la escuela sien- do insuficiente el espacio, y ya había problemas de inscripción debido a que todas las familias que vivían al Sur de las vías trataban de evitar el cruce y es por ello que mandaban a la Escuela Provincial N° 110.

Algunos alumnos que concurrieron en aquellos años eran de apellido Saganía, Rodriguez, González, Esperguín, Juárez, Morales y otros. (No se identifican en la foto).

Para la creación del nuevo edificio edificio se tuvo mucha colaboración del Señor Orcola que era el Presidente de Lotería Chaqueña; ellos tenían que hacer una donación grande para levantar la escuela, pero no pudieron hacerla y el gobierno de la provincia levantó por su cuenta el edificio de la nueva escuela. Este señor era amigo de Don Vittar y un día se reunieron en su casa; Orcola manifiesta que “no tiene sentido que Lotería haga la donación si el gobierno ya había decidido levantar el edificio” y Don Vittar valientemente le expresa: “No Orcola, total vos tienes resuelto hacer la donación para la escuela, si puedes, ¡hacela! entonces se hace más grande la escuela”. En esta conversación de amigos, Lotería resolvió donar el dinero y la escuela en vez de tener un local tuvo dos y bien amplios.

Los vecinos del barrio no querían que la escuela se haga en la cabecera del pueblo (extremo Este) sino en el centro, donde había unas quintas donde se pudo haber construído. A raíz de eso dio origen a un problema que hubo después. La Comisión procuraba por un terreno en el centro del pueblo porque la estación de trenes tenía una calle que iba al centro y ellos querían que la escuela esté en ese lugar. Cuando la Comisión se enteró que las autoridades educativas habían comprado el otro terreno ubicado en extremo Oeste del pueblo, estos se enojaron y renunciaron a la Cooperadora de la Escuela porque no se lo habían consultado y además que estaban por construir fuera del lugar que corres- pondía.

Melgratti, Alberto

Vittar, José

Guzmán, Martín

Guzmán, Celia

Dorado, Celina

Por la información y fotos brindada

Penida, Daniel

Gimenez, Juan

Vicente, Claudio

Por compaginación y edición

¿Qué cosas de mi identidad me argentinan?

El desarraigo social, la viveza criolla, la insatisfacción afectiva, la sentimentalidad, el culto al coraje, el miedo al ridículo, el desprecio a la ley, el culto a la amistad, el no te metás, el culto materno, la irracionalidad-pálpito, el mimetismo europeísta, la soledad y la tristeza...”

Pretendo en esta presentación dar a conocer una porción de la Historia, esa que ha perma- necido callada y un poco ocul-ta en el tiempo, a la espera de una mirada analítica y sincera que le diera voz propia. No hallaran una cronología de la creación de la Escuela N° 657 sino el reflejo del espíritu criollo a la hora de querer sa- tisfacer necesidades profundas como lo es la EDUCACIÓN. Este trabajo dedico a los hom- bres y mujeres de bien que educoalimentan a nuestros niños.

SergioSergio Luis Fernández, nacido en Avia Terai el 16 de febrero de 1.969 y de profesión Luis Fernández, nacido en Avia Terai el 16 de febrero de 1.969 y de profesión vocacional Maestro de Grado. Actualmente trabaja en E.E.G.B. N° 657 de Pampa del vocacional Maestro de Grado. Actualmente trabaja en E.E.G.B. N° 657 de Pampa del Infierno.Infierno.