Hervieu-Léger, Danièle - 2004 - El Peregrino y El Convertido. La Religión en Movim

5/26/2018 Hervieu-L ger, Dani le - 2004 - El Peregrino y El Convertido. La Religi n en Mov...

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I 'L TIERVIEU LEGER

EL PEREGRXI{OY

EL CONVERTIDOLa religinenmovimiento

$ffiabEDIcroNEsDELHgr,F{rcorrxrco

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Primera dicin n rancs,999Prirnera dicinenespaiiol,2004

Seprohfue a reproduccin otal o parcialde estaobra,seacual fuereel medio,mecttico,otogrficooelectrnico, in el consentimientoor escritode ledltor.

,,u;;:;ii'fi",").,,,@ Flammarion.999D.R.@2OO4,INSTITUTOULTURALHELNICO,,C.Av,Revolucin500, .P.01020,xico, ,F.

ISBN968-886-030-1

Introduccin

Una par.bol.a,d.e a modemidad religi.osaUna universidadde verano organizadaen Andona hacealgunos aos, me dio la oporl.unidadde descubrir losencantos y los contrastes del Principado, ese Estadomiriaturaanidarjoen el coraznde los Firineos.Los vallesandonanos, n los que hay que penetrar pie dejando oscaminosocupados or el oleaje nintenumpidode turistas,abrigan aldeas encaramadas n la altura, en gran parteabandonadas, ero densamente obladas en el penltimosiglo. No se necesitamucha maginacinpat'a epresentarselo que poda ser la vida de sus habitantes en estascondiciones e aislamiento, obre odo durante os meses eun interminablenviernode moutaa. ltorabien,cadaun ade estasaldeases el estuchede una lnaravillosa glesia delromnico lombardo tan caracterstico e la regin. En elcentro de este universo,que permaneci iel a s mismodurante iglos, a iglesiaera el punto i jo, el lugardondeseconcentrabaa vidade la comunidad, ueahse reunfaparaorar, pero tambin para discutir asuntos colnunes. Lareligin estabaen el coraznde la existencia otidiana.Lascampanas rnarcaban el ritmo del tiempo. Las fiestasrel igiosasegulabanos ciclosde a vida de los ndividuosdel grupo. Ahora ya casi nadie sigue frecuentando stasiglesias,salvo para admirar as huellas culturalesde un



rnundodesvanecido.odavase celebra a ntisaaquo all,pero a intervalos cada vez ms largos. La animaciuepisdica e tal o cual lugar de culto, ms que reactivar,

, corrfit 'rnal desvanecimientoe la vida rel igiosa el puebloen tierrpos ormales. un la fiesta e a Virgende \4eritxellque, trasta os aos60, reuna a total iclad e la poblacinandorrana l f inaldel verano, a do perdiendo u capacidadde movilizacin. Todava se clestacael evento consoli;mnidad, omo conviensal U'atarsee un sit io mayorenla nemoria del pueblo audorrano, ero las familiasya noencuentran n eseda la ocasin e una reuninque, paralas generacionesrecedentes,onstitua n acontecinientosocialde primera mportancia. s cierto,este ugar atraealos aficionados l turismoverde,a los caminadores a losperegrinos e un nuevo gnero,al descubrimiento e lo saltos ugares spirituales irenaicos. in embargo, stonadatiene que ver con el fervor de las multitudes irmementeencuadradasor el clero , cuya magerr e conserva n unpequeomuseo nstaladoen los espacios el santuario.Ahora la verdadera ida se haceevidenteen otra parte,sinduda a un lado de las arterias ontami nadasor el f lujo delos automviles de los autobuses ue atraviesan l centrode ln ciudadde Andorra a Vella.El cambiodepanorarna nel fondo'deeste al lepirenaico scompleto: os almaceneslibresderimpuestosealternan on os bancos evorandoascasonas antiguas, incluidas las iglesias. Los turistas,ocupados sobre todo en realizar buenas compras, sedesbordansobre la calzaday atiborrancomo pueden susbolsas on cnrtoneso clganillos,erfumes alcoholclesgravados.as preocupacioneseligiosasparecen

conrrletamente usentesde este universo invasor delconsunro del intercarnbionercantil. , sin enrbargo... nose sorrrendel descubril ue rna atedral e crislal,de ttnafactura arquitectnicavaganrerlte i.rtr,rrista,evanla desdehacepoco tiempo una nmensa lechade vidr io por encilnade esta ntensa ctividad omercial.Sobre a explanada eledil icio,que im:resiona or sus dinrensiones,e apia unanunerosa multitud: farnilias,nios, venes, personas lsedad vnnzada.Es a religina que os rerine? o sepuede ludar ue est mpeada n estouna ormaparticularde piedad,nutr icla e creencias, apaz e suscitar rcticasritrales, sfuerzos scticos , inchso, xperienciasnditasde xtasis. l centlo "termoldico"que clehechoabliga la"catedral"de aceroy de cristal, on suspiscinas alientesfras, sus "baos egipcios",sus estanques irvientes,sussaunasy sus salas de ejercicio musculal,es en efecto, enalgn sentido, l lugar de un culto : culto del cuerpo,de laforma fsica,de Ia uventud ndefinidamentereservada, ela saludy del desarrollo ersonal, n el que se expresa lgode las expectativasy de las esperanzas e n uestroscontemporneos. s algo a lo que parecemuy ajeno elmun



modcrnidadcligiosa.En stapueden nscribirse, e formaejetnplar, os cuestionanientos las dudasde la sociologacontempornea de los hechos religiosos. Estasinterrogaciones uedenresurnilseas: cuando a presencidsocialde la "religin en el sentidopleno del trmino" seilnpone al observador



kt religin expulsuctaInrnecliatarrrentelespuse la SegundaGuerramunclial, linters sociolgicopor' la religin, inauguradopor elllamadodel den OabrielLe Bras en 193 "a un examendetallado y una explicacin histrica del esfado de lcatolicismo n Francia", ogrexpandirse nun conjunto etrabajos que se dedicabana observary medir la viclareligiosa e 40,000panoquias n Francia.El esfudio le asfornras georficay socialnente cli lerenciadas le laobservancia, talnbin e las relaciones ntl.ea prctica ola no-prctica) atl icay las pr.eferenciasolticasde loselectores,produjeron resultados de gran valor. Estostrabajossiguensiendo todava,n nruchosconceptos, l" lbudocle a barrica"mefodolgico n el quebebenalgunasde las investigacionesns recientessobre a conclicinrel ig iosade Francia.Este pr . imerestadio,correspondiexactamentel mrtlentoen que el catolicisrnorancs, onla fuerza le u .aigambreistr ica ecular, erobanrboleadopor lassacudidas ue marcabana entracrae Franciaen ramodernidad, evantabael acta, no sin sobresalto,delclerrumbamientoe la civi l izacin arroquial. a sociologfafrancesa e las rel igiones e constitua omosociologa lelcatolicismoen el preciso montentoen que se desvanecadefinitivarnenteel sueo de una sociedad catl ica,tenitorialmente nif icada n tornode suscampanarios clestrcle'o.

' la| vez no se deba slo al hechocleque Franciaeraentonces n pnfsmasivamenteatl icoel que a sociologfadel catol icismo,cupada nte odoen el anlisisefinado et 2

la pr'ctica ultual,haya conocidoah una brtLlna al, l lnstael punto de imponer sus problemticas, de nlodointempestivo lgunas eces los socilogos historiadoresqus se nteresabann las minorfasprotestante judfa, Si elcatol icisnofue asumiclo s como objeto central,el lo sedebe ambin que os socilogos odanmostrarhasta upunto estabasometidoa la corrosin neluctablecle unentorno clefinitivamente ecular'. n ef'ecto,al consagrar'oesencial e sus nvesti gacionesmpfricas la medicinde aprdida del catolicismo en una sociedad en plenanrodernizacin,os especialista slanceses e las rel igionesllegaron a imponer, sobre la sociologade entonces, alegitimidaddel estudiocientf icode la religin.Es ptecisorecordar ueen esapocaera aro maginalsea posibi l idadde hacer una sociologacientficade la religin de otraforma que la de esforzarse or "reducir" lo religioso alconjunto de sus cleterminaci onesociales.Este objetivocorresponda orientaciones erecladase una sociologaclsicade los fenmenoseligiosos, olocada ajo el doblepadrinazgo de lr{arx y Durkheim. Estaba de acuerdoigualmentecon el postuladoque dominaba entonceselpaisaje e la sociologa, egn l cual a sociedad uede ertratada omo un cuerpoorganizado partir de un centro,cuyas diferentes funciones se ajustan enlre s. En buenaparte, la actividad sociolgicase dedicabaa sealar osavances los retrasos e este sist ema ocial",consagradouna racionalizacincadavez ms extrema.Este movimientoimplicaba eabsorber isonanciasirracionales" resentes nel senode la vida social y, pol ' supuesto,a religin oratomada como la nrimera de entre ellas. Para rnuchos

I J

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irrvestigadores,r anrisis re a racionafizaci ttJeo sociarpasabapues, en primer lugar, por Ia elucidacin le la smodalidades e la expulsincle Ia rel igin fuera de las, sociedadesnodernas.AI hacer esto, inscribansu trabajolnismo dentro de la coherencia le un novimiento cl esecularizacin, imrlicaclo por la histor ia de lamodernizacin.La medicla del derruurbamientode lasprcticasreligiosasvenfa oportunautente confirmar y aconvalidar a probremticae Ia "l'educcin" ociolgica reIa religin, que s les ir.pona cono el nico accesocien{.fico osible.El estudiode los hechos eligiososseautenfificaba sociolgicamente dando a conocere'rpricanrente, part.irdel catolicismo ornaclo orno ormapor excelencia e la religin, a prdida eligiosade lasociedad nroderna. para dar prueba de la legitimidadcienf.fica e su inters or la religin, os nvestigadoresevean obiigados, de alguna manera, a confirmar sudesaparicin.De Ia "ret.igin erdcla,,a Io ,,religiosopor todaspartes,,El final de los aiios60 y el princiriode los 70 rnarcaron, nrelacinal perodopreccclente,n virajeclecisivo. odos osinvestigadoresocupados en er anrisis de los hechosroligiososomenzaron,partir,dese lonlento,revaluary a re-formularel rnodelode la incompatibiliclad de la ,exclusinmutuaque habfa egidohasta ntonces l anlisisde las relacionesentre la religin y la moclernidad.Estedesplazanrientoericono correspondaloa una revjsinintelectualque afectaraa la sociologade las religionesnicamente. a sociologa n su conjuntoestaba ntonces1 4

empeadaen un leplantearniento le la problemticade Iaracionalidad de lo social implicada por el rnodelofuncionalista otninante. a sociologlade las religiones evio irnplicadaen estosdebatesa travscle as revaluacionestericas ue le impona a avanzada c las investigacionesempricassobre [a qq4qlft_qd ]_ojigipsa,De los debatessobre la religin llamada "popular", entalladosdesde elprincipio de los aos70, hasta as investigaciotresecientessobre las cl'eenci as ontempoLneas,a sociologade lasreligiones ha abordado pt'ogresivarnente, n trminosnuevos, a cuestirin e las relaciones ntle as experienciaslel igiosas e los incl ividuos,as institucione s ociales e loreligioso y la modernidad.El regresocon fuerza de larel iginsobre a escena blicaen el corazn risuro e lassociedadescciclentales,usto dondese supona ue era n savanzada a privatizacinde lo religioso; la puesta enevidencia, t lavsde la explosinde nuevosmovimientossociales,de las implicaciones reyentes inculadasa lamovil izacin polt ica y cultural; la dispersin de lascreencias eveladaspor el ascensode las religiosidadesparalelas de l os nuev os movimientos eligi osos: odosestos enmenos atan n brecha a ideade unamodernidad"racionalmente esencantada",efinitivamente jena a lareligin,Bn el momentomismo en el que la modernidad,sacudidapor el primer choquepetrolerose vea forzadaarevisar su escatologa secular del progreso y delcrecilniento,se acentuaba a proliferacinde las creenciasen sociedadesue son tambin, or el hechode la rapiclezdel cambio en todos os dominios,sociedade.sor.netidas latensin e unaDermanentencertidumbre, l tnislno iempol 5

III

+ :lt+



que energa lnvivo inters ol las fornlasde religiosidadasociadas l individualisnro noderno, e abl.ael caminopara una nreva ecturade las relaciones ntre religin ypoltica, eutre ustitucioneseligiosas Estado.Al procedera un replanteamiento, la vez rericoIerrrpl' ico,el modelo inealde la secularizacin,ntendida {de maneranseparableonloproceso e reduccin acional Idel eslaciosocial de la religin y conlo proceso de \recluccin ndividualistade las opciones religiosas, a \sor:iologae as eligiones a sidocondLlcida reconsiderar ,\de rnanerams amplia su visin de la relacin de la irnodernidad on la religin.Ha coinenzado captaresta Irelacin bajo el. doble aspectode la disper.sin e las Icreencias, or una parte,y cle a desregtlacinnstitucional__de lo religioso, or la otra.Al mismo iempoquese deja lepensar la religin a travs del prisma exclusivo de l

desencantoacional,hay ms intersen los pr.ocesos e 'descomposicin de recoqposiein.dcascreerqia,sgug_19dg_gn-{et__9 -._do,n1liq._.-dqa verificacin y dc laexperimentacin,ino que encuentranu raznde ser en elJ'_"_._ ro{gt_l1s T 4 a,t_U "l 9n.ia subjetiva de Iosi rdividuos. e vuelvea descubrir ue estas reencias stn ,,inscritasen prcticas, n lenguajes, estos, utomatismosespontneos,ueconstituyen l "creer"contemporneo.l)Entorrcesuno se detiene en la singularir.lad e las,c,onstrrccionesreyentes individuales, en su carclermaleable, luido y disperso, l mismo tiempo que en lalgicn e osprstamosnuevasormaseaplicar.lose asque son objeto as grandes radicioneseligiosas istricas.1 6

A lravsde la tenltica el "renriendo"", e la "aproriacinfurtiva"' y de olros "collages", l.l lo se introduceproglesivamenten el caminode unadescripcin xtensivadel paisaje reyente e a rnodernidad.

Desde entonces e plante na crestin ecisivaqu e. est ejos ahorade ser resuelta:esposible reconocer apluraliclad la singularidad e las combinaciones lelcreer

en la moderridad in renuncia r ol el lo a volver nteligiblei el hecho religiosocomo tal? 'Iodas las respuestas esta

cLestineenfLentan,ajodiversasormas, on el problema. r'i l i cle a "definicin"de la religin.Peroes sauna cuestin.Yl-lu quees niposible freceruna espueslaor unavezy parasiempre.El socilogono tratacle aislardefinitivamenteaesencia e la religin.Retomacontinuamente l tlabajo deidentificaci n de construccin e su objeto a partir de lainagotablediversidadde los hechosque obselva.Ahorabien, si se emprendeel ca mino de la ex ploracinde la screencias ontempor'neas,e debe adrritir pronto q g_ -loreligioso no se define nicanienteLqlyq-s_q9_]os_objetos

., sociales las "religiones")en las que stese manif iesta emanera compacta y concentrad. o rei igioro ", unudimensin ransversal l-Fn-meno umano, ue opera,cl e, malreraactiva o latente,explcita o iniplcita, en todo elI "p"sot de la realidadsocial,culturaly psicolgica, egnJ/ modalidades ropiasa cada una cle as civi l izaciones n eli -

" Bricolagechapucelfa,pa0, aa),braconnagecazapescaurtiva)onfrmnuntoconcollage nasecuencialetrminoson oniclosentidoimilares.N.del .)1 1

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seno de las cuales uno se esfuerzapor identifical su 1irtesencia. Itrr dc los rasgos list int ivos e las sociedatlestnoclernasccidentaless,ptecisalncnte,ue esta limensitlreligiosase ha cristalizado rogresivamente,l hi lo de unrecort'ido histr'icode larga dulacin' en "institucionesreligiosas"especficas, iferenciadas,laratnente eparadasde otras instituciones polt icas, faniliares' sociales,culturaleso de oro tipo. La sociologada cuentade laslgicasy cle as modalidades e esta condensacit l"e loreligioso en "rel igiones" inst itucionalizadas,l mismotiempo que estudia os procesos el clescer.rsorrogresivo eldominio rJe as institucioneseligiosasen las sociedadesmodernas laicizadas/secularizadas'Las hcrramientasconceptr-ralese la sociologade las rel igioneshan sidoforjaclas, nte odo,para pennitir el inventario el anlisis,de los fuucionatnientosde esta "esfera religiosa"especial izada.staconfiguracin arlicular e lo religioso'comprencliclaespontneamente ortlo "la religin en elsentido ropiodel trmino", etnite asotras onfigutaciotresatestiguadasn el t iempoy el espacio, a sea haciaarriba)a la infanciade la humanidad, a sea (haciaabajo) a unprocesode degeneracinneluctable e lo religi clso' or ellado de las sociedades radicionales,a las que su carcLerinstitrcional indiferenciado opono tfpicanlen{,e lassocieclaclesnoderuas,a religinse cotrfunde otr a cultura,dih:yndose n el la. Por el lado de lassociedadese la altamodernidad, edifundeuna eligiosidacllotante travs elos "er,satz" de religiones (2), plidas copias de lasgrandiosasconstrucciones imblicas ofrecidas pot' lossi.slernaseligiosos ignosde estenollrbre. antoen un caso1B

\ cornoen otro, os socilogos csconoc en,i sepuedehablar: as,por cuidc los extrenos ayquc tornar a religin.Si sc- quiererl xpresaras cosasde maneramenos igera,se dirque,operatrdo partirde estaconfiguracin articular lc Io

r religiosoquees a de las"grandes eligiones", a sociologa, de las religiones sobre-valorael fruto de un procesohistrico clninenteurenteocalizadoen el tiernpo y en elespacio.Por estemismo hecho,expulsa uerade su campode aprehensinnmensos 'arnos e una realidad eligiosaque e l legaa ser,de recho,ninteligitlle.

Hacc lalgo t iempo que los antroplogo"s, losespecialistase las religiones ntiguas, an subrayado st epunto. Ellos lo h an hecho sealando on fuerzaque, ah donde ellos tralajan, o reiigiosoes algo "cornrletalrrerttedistinto"a la "religin" de la que tratan os socilogos. nestas ociedades,la rel iginestpor toclasrattes": ro estseparada el conjuntode las relaciones ocialesy de las

\., u prcticas ociales. os instrumentosle identificaci rt e lai, J especificidad e los fen nrenos eligiosos,elaboradosa\ ' \ . l: I ; I partirdel nodelo de la religin nstitucionalizadaue nosest , . { -1.-.' lfamiliar, son por ello inadecuados. s, en el universogriegoantiguo, a nocinde diosno rernite ningunode losatribu(os los queestapalnbLance efereneian eluniversode las religionesdiferenciadas, n las que "estasociada unaseriede otrasnociones ue e son ogrcarlas,lo sagrado, o sobrenatural,a fe, la Iglesia y su clero".Como Io ha subrayado on frccuencia . P. Vernant, osrnltinles dioses clel politefsmo slieso no porrf-l"oJ- F d - * - * _ ' r . ? - - L , - r n . F . _ - , - \ * _ _ : _ _caracteres ue definencomnmente Io divino. "Ellos nor",.----\',

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son rri eternos, ni perfectos, ni omniscientes, nitodopoderosos;o hancreadoal mundo;hannacidoen.lypor 1, ul'gienclool generacionesucesivas, ntedidaqueel universo,a partir cle as potencias llinrordiales om oCaos, Abismo y Gea, Tierra, se diferenciaba y seorganizaba;esiden n su seno.Su trascendencias relat iva;no v ale rns que por su relacin con la esferahunana.Como los hombres,pe'opor encimade ellos, os dioseslbrman palte integrante el coslnos". 3) Los hombresnornantienen on esfosdiosesninguna elacinpersonal, elordende unaexperiencia e comunicacin obrenatural:Seentra en lelacin con lo divino e n tantoque, e es efe decasa, n tantoque se es miembrode un denro, n tantoqu ese es mienrbro e unaciudad, n tantoquese esnragistrado,etc. Es siempre a travs de una funcin social como seestablecea relacin on o divino.La religin no est nierr el inte.rior del hombre, ni en una esfera de vidainterior particular, ni ms all del universo ...) La sfronteras de la religin no pueden pues ser fijadas conprecisin or relacin la vida socio-poltica."4)

Si estasconsicleracionese los antloplogos de loshistoriadoresde las religiones revisten una irnportanciaparticularpara los socilogos e la modernidad eligiosa,estose debea que ellosmismosse ven confrontados lartesregulacinnstitucional e lo rel igiosoen las sociedadeslnodernas. a "secularizacin" e estassociedades o seresume nicamente, omo se sabe ya desde ahora, alencogimiento e una esfera e ligiosa iferenciada, ambinclejasu narca en la diseminacin e los fenmenosde2.0

i.creencia,que confiere una inesperaclarerlinenciaa lafrmula aplicada clsicamente a las sociedades nonodernas:lo religiosoestpor todaspartes",Religioso ala carta" (5), religioso 'flotante",creencias relativas",nuevas laboraciones sincrticas:o religioso "callejero"del que un da hablaraJ. Sguy (6), de ahoraenadelaute st olccado,n su ndeterminacinspecff icn,nel centro de toda reflexin sobre lo religioso de lassociedadesnodemas. a act ral enovacin e los debatessobre a "definicir" ociolgica e la rel igin se inscribeprecisanrenten estacoyuntura e la invesligacin. Cmoidentificar el objeto religioso, ms al l de lasidentificaciones abiaso comunesde la religin que ha ullegado a ser inoperantes? al es el desafoal que estnenfrentadose ahoraen adelanfeodos os socilogos e lamodernidad eligiosa.Pero esta cuestin qtle se ve po rejemplocuandose tratade calificara las famosas sectas"que tanto perturbana la opinin- conciel'ne hora a todomundo:a. os ueces, los polticos a cadacittdadano.En el coraznde la "religin": el linaje creyenteSera muy presuntuosoempearseaqu en resoher estedilema mayor que se planteahoy a la sociedady a lasociologa e a modernidadeligiosa. l objetivoquepuedeperseguirseazonablementeo esel de decir a palabra inalsobreel devenirde la rel iein en la modernidad, s el de_\\ -destacar lgunas oherenci as xrlicativas arciales partirde un "hi lo rojo", qrependeenteramente.leun punto devista que se toma sobre a realidady que se le explicitacomo tal.Una eleccin e estegnero a ha sidopuesta n21



prcticaen una obra aparecida n 1993,bajo el l,lulo le InReligiortpour nt,nrci.re7), Yo propuseen[onces ornarr:ontcl lti lo rojo" este azo particulal e corrLinuicladue areligin establece siempre entre los creyentes de lasgeneracioues ucesivas.Decidl apegarme,para hablar de"religin", a las especificidades e un nrodo cle creer, sin prejuzgar lelcontenido e las creencias ueestn n uego. IContrariamentel puntode vistamscomn,que dentificacreencias eligiosaspor el hecho de que hacen eferenciaaun poder sobr:enatural,a una trascendenciao a unaexper:iencia ue sobrepasaas fronterasdel entendimientohutnano, esta aproxirnacin "de-substanLivada" e lareligin no privilegia a ningn contenidoparticular de lcreer.Por el contrario, artede a hiptesis e quecualquierr:reencia, in itnportar cuI,puedeconvertirseen objel,odeunacolclecin n forma eligiosa, esde l molnento n queoncuentra u egit imidad n la invocacin e Ia autolidad errna radicin.De nanera msprecisa,es estaconcrecinenforma'de creer a que, como tal, constituyeprolriarnenteareligin. "Conlo nuestros padres creyeron, as tambinc[eemos losotros..."Esta frmula, que puedeexpresarse nversiones ivelsas,da la clave del punto de vista que secJecicleomaraqusobre os hechos religiosos", i sesigueeste rocedimiento,endmitirdue 0es l hechoe creeren Dios" el que haceal hombre eligioso, s perfectamenteposible cLeelen Dios" de manera o religiosa, n nombrede la iluminacin urgidade una experiencia lstica,de lacet'tidumbre acidade una conternplaci nsttica de laconviccinoriginadaen un colnpromiso tico .La creenciase destaca omo "religiosa" desdeel momentoen que el22 , , , , r ,

creyente onepor delante a lgicade engendramientoue1oconduce holaa creer o ( luecl 'ee. i la invocacinormalde la continuidad e a Leligin s esencial toda religin"inst ituida, s porqueestacontinuidad errnite epresentarorganizar, esdeel momentoen que ha quedado olocadabajo el control de un podel que proclama a tnemoriaverdadera el grupo, a fil iacinque el creyenteeivindica.sta lo hace mierntrrode una comunidadespiritualquel 'ene los creyentes asados, resentes futuros,El linajecreyente funciona como referencia legitinradoraG]t. creencia. Es igualmenteun principio de iclentif icacinj social: interno, porque incorporaa los crel,entes una

i comunidad acla; xterno,porque os separa e los quc rt o pertenecen sta.Una "rel igin"es,elr estapclspectiva, nti disposit ivo deolgico, rctico ' simblico ror el cual esII constituido,nantenido, esarrollado contlolado l sentidoI incl ividual colectivode Ia pertenen-ciaun lina.je.reyentel particular.

Estaeleccin oloca,pues,en el ceutrodel estudiodelhecho religiosoel an lisis lc las modalidads"rp". in,segn as cualeseste hecho instituye, organiza,bigggilj-yrelrroduce una "cadpra rje la merroriacLevente".Lar-l-rq;;:^r' r. i: ;-;*."r-q:::/;rFF-.hiptesisrincipaluontraviesdn Religiortolt nrm,oirees que ningunasociedad, s estuviera sta nscritaen lainnrediatez ue caracteriza la modernidadms avanzada,puede, para exis tir corno tal, renunciar enteral.neutepreservar n hilo mninrode la continuidad,nscrito, "__Uuau olra forrna,en la referencia la "melnoriaautorizada" uees oda radicin. stahiptesis errnite uperara oposicinl z tI, - i. ' ' - t ' i l r ' , , ' , '

I.



clsicael l t re as sociedadesradic ionales,n las que " lareliginestpor todaspartes", las sociecladesodernas,en las que la tel igin se corlcentraen una esferaeslecializada,estinada or la lgicade a racionalizac inuna clesalaricinada vez ms tronunciada. a nrismao1'r'ece obre toclo la posibilidad de analizar lgunas elas nodalidades le a activacin, e la r.eactivacin,le ainvencin de a re-invencin e un maginarioeligiosodela continuidad,en nuestras ociedadeslamadas ,sDer-niodernas",8) .

El objet ivo Je ste ibro es etotnar saperspectiva ar atratar de aclarar la lnanera como estos fenmenosdere.,:911ios c | se i isc en--c-o qter4lr-q. J ". t f_^* *.:religic.rsoll final cJe sresiglo, y msparticuia.rnenten eipaisaje rqligioso francs. Este paisaje est, couro po rdoquier en Ias scciedadese Europa Occidental y deAmr'ica el Norte,marcado or a dispersinndividualistadel creer, por la clisyuncin e las cr.eencias de laspertenencias onfesionales por la diversificacin e lastrayectorias recorridas por "creyentes errantes". Estapulverizacin e las identidadeseligiosasndividuales oimplica el eclipsamiento, incluso a desaparicininal detoda 1b'rnade vida l'eligiosa cornunitaria.Muy por elcontrario,mientrasos aparatos e las grandesnstitucionesreligiosasparecen cada vez lnenos cai)acesde regular lavida de fieles que reivindican u autonoma omo sujetos

cleyentes, e asistea una eflorescenciae grupos edesycomunidads,n Bl sen0de las cuRlcsos nrl ividuosir itercanbiany validan mutuamentesus experiencias24

espirituales.as ormas e esledesplieguesociativo,uesemanifiestaanto n el interior on loenel exteriol e asgrandes confesiones eligiosas,son extl 'enradatnentvariadas. De la red mvil que no requiere de sus miembrosningunapertenenqiaormal, y sirrplemente segura azosmfnimosentreellos a travsde un foll eto o de un boletn,lasta a cornunidadntensiva ue egula a vida cotidiana lelos adeptos astaen susmenores elalles: e dan todas asfonnas de organ izacin e manel'nms o menosestahledurable. a gestin e estas ormas nclitas renrvadas eagrupamientosspirituales lantea problemas temibles alas instituciones eligiosas cuando surgen de su seno.Tarnbin plantea nterrogaciones l roder pblico, rocoequipadopara tratarestos enmenos le salendel cuadrojuidico habitual de las relaciones ntre el Estado y la sIglesias.Si la cnlificacinmisma de buennmerode estosgruposes ncierta es ealmente e ' l 'el igin"de Io que setrata?), l controlde as prcticas lternativasue nspiran oes todavanrs,puestoque la libertad de cleencia siguesiendoun principio ntangible.

Desregulacine las dentid adeseligiosas liistricas" ,ploliferacin cle los nuevos movimientos espir i tunles,incertidumbresurdicasy polt icas e la gestin rblica elo religios o: odos os pases ccidentalesebenhacer renteahoraa estosproblemasmovilizando os recursosurdicosy culturales ue a historia es proporcioua. n Francia, staredistribucin e la situacin eligiosanterviene n un pasque eseubror0sin nquietucl,ue a legadoser npfsmulfi-cultural y multi-religioso. Las identidades25



conlunitat'iasue se pt'egouan n nollrbre e la democraciaen este contexto cuitulal y social nue\o Lransfonna.nadefinicinmisma cle la iclenticladacional, con ella elcorrjunt.oc lasrclaciones e o religioso, e lo polt icoy clelo ntodel'no al conto se han esLabil izacloislricarnente,desdehace clos siglos. Para conrprerlrJero que en estalnutacin sten uego,debe ecordarseue a construcciude la identidad rancesa, part ir de la Revolucin, eposasobre la idea de que la ciudadana ebe trascencleraspeltenencias omunitarias, definir,m.s ll cle odos osparticularisrnos,n "nosotros" acional on el quecadaun opueda ideutificarse.Esta construccin e identicJad st ahora sontetidaa una transfornlacin ue la trastorna ntodassusdimensiones:eligiosa, ultural, ocialy poltica.Sobreel terreno eligioso,el hechomayor o constituyeadiversificacin el paisajeque se estoperanclo, l mismoernpoque siguendistendindoseos azossocio_religiosostej idospor el catol icisrno urante iglos.Es ciertoque lasminoras eligiosas ntiguasuda y protestante)an ugadosiernpreun papel extrelnadamententportanteen la vidanacional. Pero es evidentementea pr.esencia e unacomunidad musulmana lumerosa,y que manifiestadernaneracada vez ms clara su identidadpropia, a qu evuelve a irnpulsarelr tnninoscompletalnente uevos acuestinde la relacinentreestas ealidades ornunitariasdiversasy la identidad rancesa, onstruicta esde hacesiglosbajoel signode a asimilacin e asminoras.

Cmo pensar, a la vez, el movimiento de lacliseminacinnclividualistae ascreencias estos ro."ro, i2 6 \

lnultiformesde reconrposicirn de ruultiplicacin e lasidentidadeseligiosas omunitari as, uc se dan en sentidocontrario a la tradicin poltica nacional Cmocomprender, l nlismo tiempo, cl procesohistricode lasecularizacin e las sociedadesnodernas ,el despliegtrede una religiosidadndividual,nrvil y rnodulable, lue cl alugar a fonras inditasde sociabilicla d eligiosa?Estascuestionesstn n el horizonte e este ilro. Para ratarderesponderlas, abra que consultal' a diversidad de Iasinvestigaciones ue se ocupan de fonna profunda de larnultiplicacin e las creencias, e las lgicas or.nplejasela fonnacinde las dentidadesocio-religiosasn situacinde desregulacinnstitucional el creer,del problerna e latransn.risineligiosay del dc la leligin de las .jvencsgeneraciones, tambin de la nueva situacin de lasrelaciones el Estadoy de los grr,rposeligiosos.Por laluerza de las cosas,evocarde lnaneramuy rpida estostrabajos empricos que alimentan,ro amiba, la reflexinaqu presentada. o habrque extraarse or la aterrcinparticular torgada l catolicismo, uu cuandose consulterrigualnrentendagaciones ue vcrsan sobre otros terrenosreiigiosos. De todos modos, el proyecto no es el dcproporcionaruna desclipcincornpletade las tendenciasque estnoperando n el paisaje eligiosocontenrporneo,ni siquiera in-ritndosel casode Francia. nlecontentar,rursmodestaente, on proponcr al.qgqlsnocionesqu cpuedenservil para organizar su estu



indagacin, stas hemamientasevelarnal usarlas simerpcenerconservadas,erfeccionadas,tiiizadas n otlosterrenos ,porel contario, esechaclas.

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La religin fi'agrnentadaReflexionesprevias sobre a modernidad religiosa

Ques a modernidad?Paraaclarar as relaciones ntre a modernidady la religin,es indispensable olver un momento sobre la teorfa de la"secularizacinPue durante argo tiempo lia dorninado areflexin sobre el devenir religioso de las sociedadesoccidentales.Cules son los rasgos especficos de lamodernidadque explican que su desarrollohaya estadoconstantementesociadoal eclipsamientosocial y culturalde la religin? Tres elementos aparecen aqu comodeterminantes:

f frllg.tl cqacterstica-de la .modernidad es la. depglt-=P9l il?ller 9n todos os mbitos e la accin,aracionalidad, es decir, el imperativo de la adaptacincoherentede los medios al fin que se persigue.Sobre elplano de las relaciones sociales, eso significa que losindividuos no deberan, en principio, apoyar su estatutosocial ms que sobre Ia nica base de su competencia,adquiridapor la educaciny la formacin, y no la de suherenciao de sus atributospersonales.En el mbito de la6xplloaclnel mundo de loo fcnmenostur10sociales psquicos,a racionalidadodernaxigeque29

,ir;: -: 4 - -



todos os enunciados xplicati vos esrondan los crieriosprecisos del pensamientocientffico, Evidentetnentq lassociedadesmodernasestn ejos de realizarperfectamenteeste deal.As, la ciencia,de a que se espera ue disipe asignorancias eneradoras e creencias de comportamientos"irracionales", acesurgir a[ mislno iempo nterrogaciottesnueras, ienrpresusceptibles e constituir nuevos ocos cleirracionalidad. Los economistas han ilttegradoproglesivan'renten susanlisis a dirnensin irracional"de.los comrortamientos e los agenteseconmicos.Por otl'aparte, las sociedades siguen siendo ineluctablelnenteafectadas or conflictosentredivet'sos iposde racionalidacl,Ello no impide que hayanhechode esta acionalidad,ontodo y ser altamente problemtica, stt emblema y suhorizonte: a ideasegn a cual el de sarrollo e la cienciade la tcnica s una condicindel progreso del desarrolloglobalsiguesiendoen ellasuna idea fuerza, nclusoen lahora de la crtica de las ilusiones del cientisno y delposit ivismo.La racionalidadest lejos de inrponerse ntodos os registros e la vida socialy de el lo estamos, nmuchosaspectos,ms conscientesue nunca.No por el lodeja de ser la referenciarnovilizadorade las sociedadesmodernas.

A travs de este sueo de un mundo enteramenteracionalizadopor la accin de los hotnbres, e expl'esauntipo particuiar e relacin on el mundo,que se resume luna afirmacin fundamental: la de la autononrfa delindividuo-sujeto, capaz e "hacell l ir,urrdo n el que vivey de construirpor s misnto os significad.osue dan un30

s9r1ti{g.1surropia xistencia. a supuesta posicinentr.esociedades radiciollales ue viven bajo el clominiodecreencias irraciollales"y sociecladesacionalesmoclernaslevela rpidarnente u inconsistencia, na vez quc seexarnina n poconts



ecormico Io clornsticoe disocian; l arte, a ciencia,amolal, la cultura constituyen tl 'os antos egistros n losclue os hornbres jercensus capacidadesreacloras.'Cadauna de estasesferas e actividad unciona egnuna regladel juego que le es propia: a lgicade lo rolticono seconfunde on la de la economa con la de la ciencia;elrnbito Jea nroralno est egidopor. as nisrnaseglas r.reel del arte.Es cierto, mltiples elaciones interfetenciasponen en contactoa estosnibitosdifer.entes, su propiaautc)nomao es nrsque relativa.Se sabe ueel desan.ollclde Ia cienciadepencle n parte de la economa, qrie asorientacionese la economa stn igadas lo poltico,y ala inversa.No obstante, a clistincin e estosclif 'erentesregistros cle actividad constituye un pr-incipio cl efuncionanrientoe la sociedad n su conjunto, un datoclela vidade cadauno de ellos.En su ealiz.acinistrica, st adiferenciacin e las inst i tuciones s el resultadode rnalarga rayectoria, arcada or. onflictos retrocesos,uyasetapas ritrno ianvariado egn os pases. eroaparece ntodaspartes onro nseparable lelproceso or.el cualse "raconstitrido progresivarlente la autonoma del ordenIernroral,emancipndose e la tutela de la tradicinrelisiosa.

De las sociedades laicizadas"Para designar ste procesode emancipacin,e habla de,"lSicrzacin" de las sociedadesmodernas.Decir que la j

j sociedad ntera e laiciza mplicaque a vida socialya no. est, lo est adn ezmenos,onstida,0ogasictadas_i, I por una institucineligiosa. a religindeja de. J

proporcionar los individuos a Ios gnrllosel coniuntodeIas referencias, le las normas, de los valores y de lossfmbolos ue es pennitendar un sentidoa su vida y n susexperiencias. n la modernidad,a tradicin eligiosaya noconstituyeun ccligode sentidoque se impone a todos,Ello signif icaque las sociedadeslamadas ladicionalesvivan bajo el clominioabsolutode la relig in, y que lasnormas eligiosas e rnpotran n ellasde manera ompleta?Cieltamente o: los trabajosde los antroplogos de loshistoriadores dernuestran, por el contl'ario, que lassociedadestadicionales pre-nrodernas asansu tiernpocontemporizando on la ley lel igiosaque se surone e beregirlas.Este "juego con el cdigo" conforma a dinmicade a tradicin su capacidad ara lansfomrarsen el cnrsodel tierripo. 2) Lo que es especficamentemoderno" no esel hecho de "toma y deja" qr.reos hombresaplican a la

igin: lo es que la pretensin e la religin de regir lasociedad ntera de gobemar oda a vida de odo ndividuo

ha tornado legtima, nclusoa los oi os de los creyerites****'*. . :-**.;,. *.,..*.-*,...'--..,...-..-,ms convencidos ms ieles.En las sociedades odernas,creenciay la participacin eligiosasson "asignatura

optativa": son asuntos privados que dependen de laconciencia ndividual, que ninguna nstitucin eligiosaopoltica puede imponer a alguien. A la inve rsa, lapertenencia eligiosade un indjviduo y sus creencias opodran onstitui n notivovlidoparaexcluirlode la vidasocial,profesional poltica,en la medidaen que sfas ocuestionenas reglasde derechoque rigen el ejerciciodeestasiferentesctividndes,sts istincinc os fmbitosse nySle en a s.epry1ci;;;;'-it.: f:{,6q" 'la i

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eslcla privada,que es Ia piedraarrgular e la concepcin- . - = - : . - - - . - * +rnodcrnae a poliica.En su Restuesral;';iitii;i':;rl;.l "itiit,:oiitt?'kantesrablecan r,nculo irecto ntre-ei. e-sc*aasror'-v-.-r-ps.*e e-p9r.'-btii-l-u]ili-dllnr-qcolrrosujetoy salede su lninora Jeedad.y colocaba areligin y la enseartza e los sacerdotes el lado de laesfera rivada,De un ado estel Estado el conjunto e asregias ormales ue e comesponden;el otro, el individuoy sus "l ibeltades".Esla separacin el Estadopoltico ycie la vicla privada no se encuentrams que en lostlernltos modelnos; eurite, o alriba,a Ia separacin ntreer su,l . -Qe-lsbJ-elel'l :-E 9,o_l_cl"l"ji::]i""d,1_-: :l"*1",o:"l :nil:^o:Esta larga {.rayectolia e la "salida de la religin"

signif icaque, en las sociedadesmodernas, el igin ymodelnidad .se excluyerr urutuamente, ue ngurosamen[enada ienen quver unaconotra?Las cosas onmuchom scomp cadas d e hecho. 1qg I .p_gf-udoj.a..dS_lasocied_d_es=i9-":1.':P-::" -:P:.1,,i-s-"J1s"""(-"--s:lsi-.ge- .+s,ae-a-d-s--e.1parl.e,us epresentacionesel mundo susprincipiose* 1 - - - - -accinde su propio mantillo religioso.Al esforzarse orcomprender orqu ciertos enmenos ulturales, ue ha nIlegado seruniversales,an enidosu origenen Occidentey no en otrascivilizaciones,an ricasy sabias or lo rnenos(como ndia, Chinao el mundorabe), l socilogo lenlnMnx Weber ha sido llevado a construirsu cuadl.o le asafinidades lectivas ue las creenciaseligiosasmantienencon los llincipiosde accinen el mundo, particularment econ eI etlns econmicode lasdiferentes ociedades. e este

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cnadro, se retiene sobre todo la cletrre obra [n ticaprotestattfe , el.espru d.el capi.ta[istno, n la que Weberrone el acento sobre el vnculo entre el puritonismoprotestantey una rnanera de actual' racionalluenteen ellnundo,correspondicnte l estilo de la actividad econuricacapital ista,3) As, a brsquedaisternticae la gananciala clisciplina del tlabajo que caracterizanal capitalismooccidentalhan encontradoun apoyo espiritual avorableenla inscripcinde la accin en cl mundo, resultanteellanisma de una concepcin tcolgica particular de lasalvacin de la gracia.Pero rnsall de la relacinentreprotestantism o capitalisrno, o que se plantea es elproblemamsvastode las relaciones lltre os rasgos e la'ng4.p-rqigsd.thligg-l911_figf."'*g"*"i""t"lJx"*"'tio"ha animado muchas reflexiones filosficas, histr'icasysociolgicas, que se refiercn particulartnente a lacontribucin del judasmo y del cristianislno a laelnergencia e Ia nocinde autonom?aue caracteriza larnodernidad. l judasmo, l colocar a nocinde a AlianzarB,.gl""-i:I::l-:rl*:*.*"[::9:::i:.P:_::.:1":'pueblo, planteael principio de la autonoma e la histolia. . . . - . " ' - - ' . _ . . * . . . . , . . . - . * * . ' . . .humanai l pucblo,segn e muestte iel o no a la Alianza,ti.n"'liT." sus:iiinl t bieCioiiii-il-;viiirl rl lohistoria elpueblo e srael,alcomo a Biblia a esccnifica,es a de as uchas de as ribulacionesueacompaanafide,lidad Dios o a su rechazo. a Alianzano tendraningn entido i nose econocieracada node osque aconcluyenna apacidadfectivaara ceptal'susrminos,esdecir,para ornprometersen un sentido enotro.Losprofetas stn h,a todo o largodel trayecto,ara 'ecordar

J J



al rueblcl,entado or la infidelidad,as n-rplicacioriese sueleccin, pero sus conntinaciones onen en evidenciaprecisamentea capacicladue el nr ismo iene cleoiienlar',de manera autnoma, u xopia historia,Asociada a Iarepresentacin e un Dios socio de los hombresen laAlianza, esta capacidacl repara de manera decisiva lacorrcepcinmoderna de la autonoma.El cristianismo

""-:S::g:.::gn:::.'rp1 :*i::"r::l'g-3"il:y*-t"l*unanicladentela y ya no slo al luebloelegido: en lo\.. .,u,r.",*.,."'.u*,,. --=frsuc.i,1,t,l-.TyF p,"l.,la_lq:fldlll o pol.el reglrqzodepen-ele,.e,.a"songietpia,.de,ada ndir4iduo.ncltsosi laIplesia es considelada omo institucin nediad ora ntre iDiosy los hombres,a sal--v.acinelsonalme-ntelieciclacadauno clepende. ln-ion-u.ri;"";; .;;;"i,ri"ii El

- . " - . - - * . . _ . " . _ . . _ - , : r - - - * * - - r l " - - . - - ' { * * - * - - - - - _ .f g,gesiansnio,ariicularmente ir ru u.r, ion oTuliit, uempujaclo asta l extremo a lgicade a universalizacinde la individualizacin de la Alianza, ,.-l.edg.9i_ry"_doraclicalnrenteodos os intermediariosinstituciones,itos,-.-.-=-.----_-\_.sitnfosntercesores,tc.)queocultan' lOueesten uegoenesteenclenh'oaraa caradecisivo nt leun hombredotadode unacapacidad utnoma e elecciny un Dios que leproirone elegir a favor de o contra l mismo, Estaconcepcineligiosa e una e personal sunapiezamaestradel universo de retresentacionesel que ha emergidoprogresivamentea figura moderna del individuo, sujetoautnomo ue gobierna upropiavida,

La paradoja religiosade las sociedades ecularesl,n arnbigtiedade las sociedadesccidcntalesespecto lareliginse debe a que el movilientode emancipacinon3 6

plena capacidad e orientarpor s nismasu clestino, la'n: _a.r,.,:r_.,- , ,d, ' ,_"".*."-*- . -"_ -_. ;:l j ,-'i':l1l-::l-"i"1--ll: - ly.i"-".,,1::.:"1.-.Islrr"-"9: lq:,,.representacioneseligiosas que han pelmitido a esta" . . , . Y . . r { . ' . - . - . . . . i . , . , " ' , , - - . - } ' - '4 r - ' ' r ' ' :+ { - + ' . . r ' i 'sociedad ensarse s misma olnoautnoma,

relacin al universo religioso tradicional, que las haconstituido ornosociedadesseculares",ienesu origen,enpartesolarnenteero esunapafte mpol'tnnte,n el ntanti l loreligioso judo y clistiano de sus crlt ulas. I-a'tecularizacin" cle as sociedadesmoclernas o se reiiire,'pues, n el pr99-9q9".{".e.,-y_ip*il."cacial..,.y.,ulqulnlg lt

f ,_ :q : i 4 i' ^religin con el que cornnmentee a confunde.Corribina,

"" "*, . , _ -a ' t"de nraneraompleja,a prdida e dominio le os grandesf , r , . ' . ' , i . n ? 'd ' a l5ip,"1,_e'1l13::felgiS'"sgs""t9,919..J1r,":e-

occidentales, precisamentea cle as sociecladesnropeas,se ha constrnido ristricamente oble los eqc-gll ,ol d9.1p.,",reg,t,'il;;;;ffi;;"d;l^'ni,,l,J";;;;;", ra reoshornbresque la hacen,al afirmar que el mundo de l osholnbres s rnmunclo or hacer, hacerpor el los solos, anodernidad ha l'oto radicalmente con todas - la s

Jd it&*eFrepresentac lonese un oes tgn lod lv i l to que se rea l l za en la| \4 , t s + ' - 4 r E o_" |+ * j - . J - 4 ' - - " * ' - J : hlStria e modo neluctable. a afirmacin e a antononradel honbre y de su raznha estado sociada, partir de laIlustracin, on la emancipacin le a religin.Los pasesanglosajones an viviclo esta enrancipacin travsde larrivatizacin e la religin, orm almente epnradn e Io qu eest en juego en la vida pblica,En Francia,donde las

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huellasdel cornbatede la Repblicacolrtra el AntiguoRgimenhansidoplofundas duraderas,sta i[:eracin asido frecuentemente otnprendida omo un proceso deeliminacirr le a religin, asociada l oscurantisrno alrechazo e a democracia oltica'

. . /A \\-PeroLsegunda roposicii)gl nodoque ha tenido a\-:___j_:_-*__*, #.....-+-..^- --.mocl rnidad de pensar .Ia,..lU :ll l. g g9 .9llll 11:$#9,.qg{tjlore la visin religiosa de la que se ha arrancadopa-t'a,,.,"" . . . i ' "_-,*-- 'colqUl$,tar. u-.ggtgl-gm?. n las sociedadesmodetiras,clurauteargo iempose ha pensadoa historia secular"deacuerdo on el mode lo del advenirnientoel Reino: se hacolocado, n el horizonte e un progreso ientfico tcnicocada vez ms alejado, a recapitulacin onrpletade lahistol ia hulnana y el currrplinriento otal de la spoteucialidades uuranas n el mbito naterial,en el delconocimiento e, incluso, en el rnbito moral' Lasrepresentaciones iberales det desarrollo econmicoilimitado, as colno la concepcinnarxista e la sociedadcomunista lel uturo,no danel mismocontenido la visinde un mundo etr el que podran leinar definitivamente aprosperidadeconmicay la armonasocial.Pero tienenenconn el estar orientadas pol' una concepcin del"9.J rpli$J9..g19.-."d"c--"1a.-."[isto1,Lu" presenta mltiples\afinidadeson las representacionesudasy cristianaselhnalde os iemros.a visin eligiosael Reino e Diospor venir' (la "escatoloa") y la otra, moderna, e lahistoria,ienenelacionesuenlatcallanto a continuidadcomo a ruptura e a tnodernidadonel universoudoycristianoelque ale.3 8

'|''''-derceraprorosicin:,5i Ia visirr gt'arrrliosale lahistoria del pLogt'esoe ha pulverizerdo n el culso de ulrsiglo XX traurnatizado rot las guen'as, las catstrofeseconuricasy Ias experiencias t.otalitarias, u.. fj: gl .Jg,:valores fundadoresde la lnoclernidad la razn, elconocimiento, el pt'ogreso, etc. Sacan su capacidadilZAi;i'"4;i-ffh"i'q,l" o ", posible signarle.sl ini l"es plecisos. El curnplirniento total no puecleser, desdeel punto de.vista de la nlodernidad lnisnra, rni, ' rs ue unhori zon e que s en pre se a eja. L.g:-:9,-.*9*_""r_-ll9j-gll.+Svive,n n un estado eunarlentee anticipacin:sto es-",.--"".+'r' ".--',-'verclad n el rnbitode la ciencia,err el quc cada nuevodescubrirniento'racesurgir rns cuestionesnuevasqu erequieleu n esfuerzoedoblado e conocirnienl "o;s vcrdadtambinen la econorna, n la que el increnlento le losbienesproducidosy cle los nediosde produccinhacesurgir continuameoteuevasnecesidades,tc.La dinrnica"utpica" de la modernidad e sitapor colnpletoen es{avaloracin e la in novacirr, sta nisnra-ligay'aun esradopennanente e insaciabil idad.{f" GauchetTlabla estepropsitode "el inrpelativo



colaboracin. elo estamoclerniclade e-apropia el sueorle currplirniertto el que efa portador-aa utopa eligiosa,proyectantlo plometiendo, ajo fbrmas ecularesiversas,un t.rundoleabundatlcia de paz pol f in realizado.,',.,..',..-'....,..\\

r.; 'uarta roposici ;\ a parado.ia e la modernidad, - ' - t ' - "1obedece ist spiracin tl ica, ontintlanrerteeabiertamecliclalueos conocilll ientos las cnicas edesal'rollanun ritmo acelerado.5) Es necesario loducir siemprems,conocersiemprems, con'rttnicar iemrl'ensy siemprerns piclo.Esta lgica de anticipacin rea,-enq-\-cp,.:+Zp-"de una cultLrLa\iTeiri'a*Aiiiijti"'p"o. o racionalicladcientficri-" tcnica, t" "::pu:i: :i9_11tt9"...:tl-o_v"1iloPllapri lCiiiesrii?rfhar:iisue esta acionalidad escotnponeo::'"'::T'-:"i:

Es por medio del imaginario,en efecto, como losno'"tlif li;;'i *i?i-dit' l'u.i' - ."iiiijri riiii-dri..L.nruclootidianoordinario, on susapremios srts utinas,yESta-aspiracin'a'la"abolicin'de't-oiJis"lfs"5.i'iiJdA1'ye' 'tdilf"lftiiiied' cie1amodernitld tjl dej?6-iiiir'I"-pasod las conquistas ue realiza.La oposicinentre ascohtaiciijnijsdll " 'p.int" v el horizonte de t ncunrplimiento ttturo crea, en el corazn mismo de lamoclernidacl,.un'esrjiolli'el"gn el que sedesarrollan, IL* ' - . : * ' ' . - . , * . , " ' . - , . ' .1 ' ' . ' . " . fu, " . .l legaclol caso, uevasormas e eligiosidaduepermitenIsuperar esra r"ilT;''-";p"io.ifrr'"'-""."^t de lo /"Baglado" npr:opiacionesenovadase las radicioneselas religionesiistricas. sta ensincreyente" e unamodernidadafenazada ntre la ambicin de una4 0

racionalizacin el lunclo tal cual es y la aspiracin u emuevehacia tn firturo sieniprenuevo, puedeexpresarse nel lenguaje ecular e l progreso del desarlollo.Tal es elcasoen los periodos e expansin de clecirniento ue sontambin os de la emergencia e lo que a vecesse hallarrado "religiones seculares": religiones polfticas,

r k : - * , , - . :qdy *d r * * , r d js .- ' - " , " , " " . : ' . ' ' .re l lgrones e la cienciay de la tcnica, e l ig iones e la

rroduccin, tc. Fue el casode la fiebre de la revolucin4it;rtrx(iJi@t44industrial, n el siglo XIX, o el de los aos60, dr"rranteos"Golden Sixties", en los que la expansineconrnica eOccidente areca l le se desplegarain tener in. Pero,alsecretar su propia r"rtopamotri", l3-Ag9.g:nidEd_.nIp"dlp9tarbjgr - rp",qn.y, r.s_o-.p,.,in s*i d Unhrcf_Ll-a d nm ca cle su" :1 9."iq1,19.*vc...ell.q...e-scre-p"r'linmsi1fi ' p'p.ig'i isis,este fecto evaco ocial cultural rorlucicloorelcarnbio. i

/ . - * - , -e r - : * r vr.:- E9iY,*,i-+"p"g-.m.o-"-l)3,_,ameazi por los I ul v luos yr por los srupos.En ciertoi"-'ili?iir3''*t rit;;t' pr-oiiiiltiSi"ii3'ffiol queesramosrravesando,uede arseuna inadecuacin uradera ntre a utopamodernay este

I espacioque el procesode cambio ha dejado vaco. Esracrisis cultural se ve acompaada a menudo pordesequilibrios conmicos,ociales, ol t icosms o menosprofundos, ms o menos estrucfurales. arnbin puedeanticiparlos: al fie el caso,en Francia,en Mayo del 68 ,cuando a prosperidad onstruida n los aos60 a n no erapuesta en duda pol la cr isis econmica naugurada,alprincipiode los aos70, por el pritnerchoqne etrolero.Enf estos peliodos de disturbios, Ios sistemas religiososi tradicionales, formiclables reservorios cle la protesta

-s.imblicaontl 'ael no-sentido, eencuelttran, ajo nuevas4 l



fouras, un gran poder de atraccin obre os individuosysobre a sociedad.

Se ha hatrladoen fbrlna tnuy inadecuada e "regresodelo rel igioso" o de "revanchade Dios" para designar, nbloque, el desarrollo actual de ios nuevos rrovimientosespidtuales,el ascensode las corrientescarismticas,elrenacimicnlo e las pelegrinaciones, incluso,el xito delibrera cls los l ibros de inspiracinesotrica Lejos devincularse on el universo eligiosode las sociedades elpasado, estos fentllerlos,por el contrario,malliff.estanel..-':carcter lra



cliferentes ases,el paisaje. el igioso occit lentalol'r 'ecerasgossuficienten-lentetoniogneos afaqtle la rlocincle"rnodernicladeligiosa" enga fectivamentetlsentido'

"oristranos su nlanera". a creencia u(oclefiniclaJe stosfieles de urr gnero nuevo se aleja en efecto,sustancialnente,e la creencia l l teranaoficial. La urayorparte del tiempo, hablan de Dios como de unA ,,fuerzasuperior" e "impersonal", y formulan su aclhesinalcl' istianismoesencialmente omo Ia aceptacincle unconjunlode valoresmorales. 6) En Blgica,pasen el rueIa institucineclesisticasiempre presente n numerosossectol'es e la vida socialprolhna escuelas, niversiclar jes,instituciones leocio, hospitales, tc.)ha cl ispuestorlrantelargo iernpode una uertevisibi l idad, e notan guallnentemll, iples ignosdel pnsode una "l-el iginnstitricla" un a"religin recompuesta". os individuos hacen valel sr,rlibertad leeleccin, reteniendo adauno as prcLicas la screencias ue e convienen".7) Los signif icaclosaclos orlos interesaclos estas creencias a estas prcticasseapartan recuentementee la definicindoctrinal.stas onseleccionadas, odificaclas con fi.ecuencia ibrementecombiladas on temas omadoscle otras r.eligiones deconienles de tensamiento e gner.omstico o esotr.ico,As, por ejemplo,segn os datosproporcionaclosn 1990por la encuesta uropea obre os valores, n belgaclecaclaocho declara creer en la reencarnacin. stos rnltiplesremiendos enturbian la frontera entre catlicos y nocatlicos , msaun,entre os que se declaran eligiososlos que no lo son. Una investigacinealjzadaen Suizaconfi lmaesfas enclencias.l mismo iempo,muesfa que a

diversificacin e los sistemasndiviclualesiesignif icadonosignificaupulverizacinurn simple,n nzn e sfluerte resenciae una doblecLll tura ristiara,]rotesrante45

La descripcinle stanodernidadeligiosaeorganlzaa paftir de una calaoter'sticaayor',que es"J.9*19l},cl9.p-qi+,ise erala la, nrlv cl +li"r,,1gi*, yj-h."S"qbj.elivzaei*"$*.Jl" ,r._,_, , . , . , . , ,1": , : . ; "r+; li*Erue., f i i ' rF tcreniaseligiosas,odasasencuestasonfirmantle ste 'id;'iiiintliiio'"o"t,lu\a vezsobreas onnas le aexper iencia,e la expresin de la sociabi l idadel ig iosa', Esta endencia a quedaclorlal'cadalescleace argo ieurpoen la distorsin enfte las creencias lr-egonadas lasn.,ictlisaulitdii;i;"q:' ii iiirt,'?ii?ii7t"ia s'' . i-,r.eu.Y'r ",.,c,r.--j.u^ e".,",, '""",, ' ;" t* -r * -**"-En tocl l as eligionesexi en ""t9'y."9-11 :,.:,-i:,'Hii- i: 11fS:'stos blman incluso,en Europa'el grueso e las tropasde

, ios que se declaran "catlicos" o "protestantes"a..F9i rlesacoplamientoe la creencia de a ptctica onstituye lI ._.,_:" -_" .primel i;iilo i"""'ij6ilitarnignigp-L.pe-U.tl.."i9...-leti I -*-.-."=,.,'*,-.",,'",','"'"'"""rs-'"' rnstttuctones uarolanas le las reglasde la fe. Pero el' as'i'CtO'tires'clecisivode'esta""clesiegtli"a-pi'esobLetodoenr**'[9.:*:9*"9y9.*:"'-..:l"9:p.:r]"l:.:*.1:9..'ri9-1.,:"1..,9.""rEmenclar-" u propio sistema creyente, fi.el -Slg--tp..'g-

{ : . . - " ' - , , , . " " . J , . ^ , ,refinCi"ri ipa.-4%. .t-".s:lsoi,in lJgigi1lT::lj:vada. it"-'Jo1" fennreno aparece de marlerap-ilt icularmente egibleen los pases los que se collsideracorno os ms secularizadosn Europa,a saber, os pasesescandinavos.n Suecia, or ejernplo, n donde a pr'cticareligi0saefectivaes nferioral 5o/o,9Voe los ndiviclnosedeclaran cristians ractiantes"y 26k e defineneomo"rro ct'istianos". ero 63o/,t e designan s mismoscouro44



catl ica, n a sociedad elvtica.8) Sea o que uerede losmatices on que hay que precisara idea,que ha llegadoaser muy comrn, de una completa al.olnizacinde lossistemasde sentido producidospol ' los individuos,estarurtura de las creencias ortodoxas que acompaira a ladisolucin el vnculoestablc conttolado nlrecreenciasprcticasobligatolias es una tendencia pica del paisajereligiosocontemporlleo. a.cteencia o clesaparece,ufreuna desmultiplica cin se diversifica, [ mislno iernpoquese proclucenisuras,con mayor o menorprofundidadsegnlospases, n os dislositivo sesu llarco nstitucional.

El paisaje eligioso fiancs arnbinse encuentl'a ltplofunda evolucin,malcado de maneracreciente or laindividualizacin, l relativismo y eI pragmatismo.Lacuestin el otro lnndopierde mportancia favor de unacrecientepreocupacinpor el devenir de cada uno en elmufido presente.Las creenciasse expresande un lnodoprobabilista"bien puede er,pero to estoy eguro") cadavez ulenos conforme con los dogmas de las gtandesreliginnes, (9) Parece que se instala una especie detolerancia ranquila acia as creertciase los dems.Segnla eucuesta obre os valoresde los europeos,ealizada n1981,slo el l4olodel total de los fianceses onsidet'abanque existe una sola religin verdaclera, ientrasque treintaaosantes, egnun sondeo el IFOP de 1952,517o e losbautizados n la religincatl ica stilnaban ue "la religincatl icaes a nicaverdadera".10) En 1990, a fluidezclelas creencias e acenta odava ms. Lo atestiguan asrespuestas Ia cuestin "culde assiguientes piniones e46

aproxilna tsa lo que ustedcree?; xisteun Dios personal(20Vo);existe una esreciede esper.anz.a de fuerza vital(32V0); o s qu pensar 25Vo); o piensoque existaalgoconto un espritu,un Dios o una fuerza vital (1620);sinrespuesta7To).Mientras que. a creenciaen el alma siguesiendo eievada (50Vo), a creenciaen el pecaclo 40ok)aparece claramente disociada de la nocin cle unacorrdenacinutura.La creenciaen el infierno cay a 16%oen 1990, nientras que la creencia e.n el paraso, msgratificante, s atestiguadaor el 30Vo e las espuestas.acreencia en la resurreccincle los muertos llega al Z7Vo,mientras ue el 247ode las personasn(.errogadaseclarancreeren Ia reencarnacin.o carece e inters otarque el34Vc,e os catlicos uedeclaran reel en un Dios per,sonalafinllan creer tambilren la reetcarnacin, ientrasQueel62Vosiguenprofesando u creenciaen Ia resurreccin e losmuertos.l l)

Por detalladosque sean, Ia rnayorade las veces lo,ssondeos e lirnitan a in(errogara los inclividuos obre acreencia ueotorgan no a lasproposicionesoctrinales lelas grandes religiones, y nts especficamente loselementos el credo crist iano,Desde este punto de vista,sot:re todo cuando se r.epitenelt varias ocasiones, anindicaciones preciosas sobre el decaimiento de laconformidad nstitucional e las creencias. ero es neceSarioir ns lejos para medir la arnplitud de los remienclosefectuadosa partir de los elementos olnaclosdel ddgrnaoficial de las grandes eligiones.La observacinde laimbricacinde las creencias enidasde otr-as artesv clel

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ftrnclo r ist ianoabreclehechounanLlevauestin, ue es acle a naturaleza le esta"confusin".Cuandose hablade"reencarnacin", se ratade la sustitucin e una palabrapor otra, sobteel fondo de la pttlverizacin e una cultntacristiana elemental que afecta a los misnros creyentescatl icos? El estudiante que deseaba discutir Ia"r'eencarnacinristiana" urantq asJornadas undiales ela Juventud celebraclas n Pars en torllo al Papa, en elverano e 199': se nclLain dudaen este ipode casos.-arefereuciaa lrreeucarnacin;permiteeforlnular, de unmodo realista, a oscura nocin de "resuueccin", alrepresentar a vida despus de la muerte conto tna"revitalizacin", n regreso la vidapt'imera? biensirvepara reinterpretarlaconfirindole un cierto grado deplausibilidad expet'imental ", testiguadaot los relatosdeaquellos ue han reglesado e las ronteras e la rnrerte,as hacerlams aceptable n ttn entornoculturalmarcadopor la ciencia?La reencarnaciti s rensada omo una,retribucin e la vida levada recedentemente,bien como"nueva oportunidad" que se da en este mundo a trnindivrduoque habra alladoen hacer as buenas leccionesen su vida anterior?O ms bien, seesten presencia emanifestaciones de un reencarnaciottisnio r isLialtoteolgicatnenteonstruido?Conversacionesostenidas ol.lI lersonas atlicas ue declarabanreerenla reencarnacinclemuestlan ue todas estasposibi l idades e dan en larealidad. Pelnriten apreciar,al mismo tiempo, toda laclistanciantrecstncreencia la problenticae lareencarnacinprueba s ue nuevporthidad'r)nelhincluis;mo el budismo.Comprendemos ien que no son4B

nuevas n sl nrisuras stas ritlt iples e-itltel'pretac ionesueOccidente e da cle a sLlcesine lasexistenciassamsra),que son, segn a tradicin hinduistay budista,un ma ldololosoen el que se inscribeel encarcelamientounrano.En el siglo XVI[, Lessing ya haba elaboracloun aconcepcin osit ivade la reencarnacin,ouro n'rediodelque el li ornbre isponerara onpletar,hasta l infinito, su ssaberes y sus experiencias. .as corrientes esotricas,espir i t istas, eosficasy antroposficasque ms halrcontribuido a popularizar esta creencia en Occiclente,iguahnente e Ilau abiertovas de accesodecididamenteoptimistas,que podran volver compatible a idea de iareencarnacinol una visin de la histor iaorientacla aciael cumplirniento umano. a novedad esideno solamenteen a difusinmasiva e a creencia n a t'eencarnacin,uet r**-*"-r,-.r-.rr1-*,\+__d,.ai hasta entoncesslo llegaba a franjas intelectudli ,- ' i ino

;1 sobre odo en la diversidad e las conibil lacionesl'eyentesi f .

Hervieu-Léger, Danièle - 2004 - El Peregrino y El Convertido. La Religión en Movim

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