¿CÓMO VIVIR VIDAS DE FE?Habacuc 1.1-4,13-14; 3.17-19.

INTRODUCCIÓN.LA PALABRA DE DIOS SE ENCUENTRA EN EL LIBRO DE HABACUC… HOY

ANALIZAREMOS ALGUNAS COSAS DE ESTE LIBRO.Quiero despertar su imaginación, quiero que me acompañe a un viaje, vamos a un

cuarto amplio y espacioso, pintado de lindos colores, ¡Vaya conmigo a ese viaje! No se quede acá.

Cuando miramos este cuarto, vemos al medio un televisor grande y bonito, y frente a él, un sofá muy cómodo. Tomamos el control remoto y nos da curiosidad por saber que están dando en la TV, prendemos la tele y nos acomodamos en el sofá. Mientras hacemos zapping, o sea, nos divertimos cambiando de un canal a otro, nos llama la atención un canal que esta dando su noticiario central – LAS NOTICIAS DEL MOMENTO. Pensamos, “voy a dejar un rato las noticias para informarme un poco”.

Cuando comienzan a leer los titulares, comenzamos a inquietarnos al saber que todas las noticias son catastróficas: “En Japón hubo un Tsunami que mato a 100.000 personas”, “En India chocaron 2 trenes repletos de personas y murieron 800 personas”, “En Irak hubo un nuevo atentado suicida y murieron 50 civiles inocentes”. Vemos noticias de GUERRAS, MUERTE, HAMBRE, DESTRUCCIÓN, INJUSTICIA, CRIMENES, VIOLACIONES, ESTAFAS, ROBOS Y CATASTROFES NATURALES.

Nos quedamos atónitos cuando vemos como una mujer al borde de la histeria grita: “¡Donde esta Dios que no nos ayudo y dejo que viniera el Tsunami”. Se nos desgarra el corazón cuando vemos a una familia sufriendo la muerte de su hija pequeñita, por un asesino y violador, los padres piden justicia, los vecinos quieren linchar al delincuente, pero solo se le da libertad bajo fianza por falta de meritos. “¡Es injusto!” Protestamos nosotros, “Si me hubiera pasada a mi, mataría a ese tipo”.

QUE LE PARECE ESTE NOTICIARIO. Creo que en estos momentos usted estará pensado, pero esto es algo bien real, no tiene nada de fantasía, todos los días lo veo en las noticias,

¡ASÍ ESTA EL MUNDO AHORA! ¿Cierto?.Ahora, si vamos al mundo del profeta Habacuc, las cosas no han cambiado nada. Si

Habacuc se sentara en ese sofá, y comenzará a ver las noticias de su tiempo, las cosas no distarían mucho de nuestra realidad. “Noticia de ultimo minuto, encuestas dicen que Jehová es el Dios menos popular de Israel, Baal, Asera y Milcom llevan la delantera”.

Veríamos en esas noticias MUERTE, DESTRUCCION, CRIMENES, INJUSTICIAS, IDOLATRIA, FORNICACIÓN Y CORAZONES ALEJADOS DEL DIOS VIVO.

Todo esto ha ocurrido y ocurre ahora, y tristemente lo digo, seguirá ocurriendo en este mundo.

El problema es que la gente al ver tanta maldad, al ver tanto pecado, comienza a dudar, comienza a cuestionar, “Si Dios existe, porque permite que suframos”, “Si Dios es bueno, porque no me ayudó en mi problema”. Vemos a la gente sin rumbo, sin esperanza, angustiados y afligidos por los problemas que vemos en el mundo, que nosotros mismos creamos, pero igual queremos pedirle explicaciones al Creador. Y Habacuc también paso por un periodo de duda y confusión muy grande, a pesar de tener fe en Jehová Dios, igual cayo en esa desesperanza, pensaba que Dios los había abandonado.

I. LAS DUDAS DE HABACUC – HABACUC 1.1-4,13-14.

Escuche al profeta de Dios, “La profecía que vio el profeta Habacuc. ¿HASTA CUÁNDO, OH JEHOVÁ, clamaré, y no oirás; y daré voces a ti a causa de la violencia, y no salvarás? ¿POR QUÉ ME HACES VER INIQUIDAD, y haces que vea molestia? Destrucción y violencia están delante de mí, y pleito y contienda se levantan. Por lo cual la ley es debilitada, y el juicio no sale según la verdad; por cuanto el impío asedia al justo, por eso sale torcida la justicia”… “Muy limpio eres de ojos para ver el mal, ni puedes ver el agravio; ¿POR QUÉ VES A LOS MENOSPRECIADORES, Y CALLAS cuando destruye el impío al más justo que él, y haces que sean los hombres como los peces del mar, como reptiles que no tienen quien los gobierne?”

¿Por qué nos has desamparado Señor? ¿Por qué no acudes a nuestro llamado Jehová? Si eres justo y misericordioso ¿Porque dejas que los hombres se hagan daño y contiendan entre si? ¿Dónde esta tu justicia Dios? ¿Realmente tú estas al mando en este mundo, gobiernas los destinos de este mundo? Esas eran las preguntas de este hombre de Dios.

Esas son las preguntas que también hoy, se hace la gente, ¿PORQUE SUFRIMOS? ¿PORQUE TANTO DOLOR? La gente se siente desesperada, atrapada en un mundo que cada día se vuelve más malo, en donde cada día es más inseguro salir a la calle, donde los niños no pueden jugar tranquilamente, y muchos se preguntan, ¿Quién es culpable de todo esto? “¡DIOS!” Él nos creó, él es el culpable de todo, él debería ayudarnos” Así piensan muchos hoy en día. Ha sentido alguna vez esas dudas, ha llegado alguna vez a ese nivel de desesperanza e indefensión.

Habacuc paso por esa etapa, miraba a su alrededor y veía como sus hermanos eran violentos y se hacían daño, como la gente iba en pos de dioses paganos, veía con estupor como sus vecinos se destruían unos a otros… y el se cuestionaba, ¿Qué estas haciendo Dios que no viene a ayudarnos? ¿Por qué Dios permite todo esto? ¿Por qué Dios no viene a ayudarnos?

La fe y esperanza de este profeta de Dios estaban totalmente destruidas, no veía salida a este problema, solo veía como sus hermanos iban camino a la destrucción por el pecado y la corrupción de este mundo.

II. ¿POR QUÉ DIOS PERMITE QUE SUFRAMOS?Si hay una pregunta, que muchas veces he escuchado y que es causante de mucha

incredulidad y desconfianza en la gente del mundo es: ¿POR QUÉ DIOS PERMITE QUE SUFRAMOS? ¿PORQUÉ NO IMPIDE LAS INJUSTICIAS DEL MUNDO? ¿SI DIOS ES TAN BUENO Y JUSTO, PORQUE DEJA QUE SUFRAMOS? ¡SE HA HECHO ESTA PREGUNTA, ALGUNA VEZ! ¿Ha encontrado respuesta para ello? Según mi entendimiento, hay varios motivos por los cuales Dios permite que suframos, quiero solo mencionar algunos para que nos queden claros.

A. CUANDO UTILIZAMOS DE MALA MANERA NUESTRO LIBRE ALBERDRIO: CUANDO PECAMOS O NOS DESCUIDAMOS.

Todos nosotros tenemos la capacidad de elegir nuestras acciones y pensamientos, Dios no impide que podamos hacer daño a alguien, como tampoco puede impedir que pequemos. Por lo mismo, muchas veces nosotros padecemos porque las consecuencias de nuestras decisiones hacen que suframos. Como una MADRE que muere de cáncer al pulmón después de toda una vida de fumar, su familia sufre, sus hijos lloran, pero la culpa no es de Dios, fue culpa de esa mujer que no cuido su cuerpo como Dios quería que lo cuidará.

Piense en una persona que se contagia de SIDA o de una enfermedad venérea, ¿Tendrá la culpa Dios? Cuando sabemos que esa enfermedad la adquirió por estas fornicando, teniendo relaciones sexuales de forma ilícita.

Pedro lo dice de la siguiente manera: “Así que, ninguno de vosotros padezca como homicida, o ladrón, o malhechor, o por entremeterse en lo ajeno” (1 Pedro 4.15). ¡NOSOTROS PAGAMOS LAS CONSECUENCIAS DE NUESTRAS ACCIONES!

B. POR LOS PECADOS DE OTRAS PERSONAS.También nosotros sufrimos muchas veces por los pecados o descuidos de otras

personas, piense en el caso de Urías, el esposo de Betsabé, él era un valeroso soldado de Israel, honrado y decidido, pero tuvo que pagar las consecuencias de la lascivia de David, murió por orden del Rey, para poder quedarse con su esposa (2 Samuel 11).

Piense en la madre que sufre cuando le nace un hijo con retraso o alguna enfermedad mental, ¿Fue culpa de Dios acaso? Si esta madre, fumo, bebió alcohol, consumió drogas y nunca se cuido de manera adecuada su embarazo. Como lo dice el dicho, “Pagan justos por pecadores”, y Dios no puede hacer nada por impedirlo, el respeta el libre albedrío que tenemos.

C. POR LAS LEYES NATURALES DE ESTE MUNDO.Por ejemplo, si me lanzo de un edificio de 20 pisos lo más probable es que muera

instantáneamente, pero ¿Porqué? Porque existe una Ley de la Gravedad, y si nosotros la violamos sufriremos las consecuencias.

Este mundo esta gobernado por leyes y fuerzas naturales que no pueden obviarse, por ejemplo, si viene un huracán y todos evacuan y yo no busco refugio, lo más probable es que muera. Ahora también si voy en un avión y este se viene a tierra por una turbulencia, Dios no puede detener el avión en el cielo y sacar a sus hijos y después dejar que caiga el avión a tierra con los demás pasajeros. ¿SERIA ESO JUSTO? ¿PENSARIAMOS QUE DIOS ES BUENO Y NO HACE ACEPCION DE PERSONAS?

Jesús lo dijo una vez: “Vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos” (Mateo 5.45). Así como Dios hace llover sobre buenos y malos, nos bendice, así también cuando vienen las catástrofes naturales, él no puede hacer nada para impedirlo, porque violaría las reglas que él mismo estableció sobre este universo, seria injusto.

D. DIOS ALGUNAS VECES, PERMITE QUE EL ENEMIGO, SATANAS NOS HAGA DAÑO.Algunas veces, como en el caso de Job, o el apóstol Pedro, vemos como Satanás tiene permiso para poder hacer daño, probar o tentar a las personas, y hay viene el sufrimiento (Job 1-2; Santiago 1.12, 13; Lucas 22.31-32). Dios le da esa pequeña libertad, limitada, para hacernos daño.

III. PENSANDO EN TODO ESTO… SABIENDO QUE VAMOS A SUFRIR, ¿CÓMO PODEMOS VIVIR VIDAS DE FE?

¿CÓMO PODEMOS CONFIAR Y TENER ESPERANZA ENTONCES? ¿CÓMO PODEMOS SER VERDADERAMENTE FELICES A PESAR DE LOS PROBLEMAS DE ESTA VIDA?

* Primero que todo, debemos entender que el sufrimiento es parte de la vida, Pedro lo dijo: “Amados, no os sorprendáis del fuego de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña os aconteciese” (1 Pedro 4.15)

* Segundo, aprenda a ser feliz con lo que tiene y Dios le ha dado, aprenda a contentarse cualquiera sea su situación (Filipenses 4.11-12).

* Tercero, muchas veces el sufrimiento es beneficioso para nosotros, porque podemos madurar más en nuestra vida espiritual, el salmista lo dijo: “Antes que fuera yo humillado, descarriado andaba; Mas ahora guardo tu palabra… Bueno me es haber sido humillado, para que aprenda tus estatutos” (Salmo 119.67, 71).

* Y por último, confié que Dios le ama y nunca pero nunca le va a desamparar: “No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia… Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo” (Isaías 41.10, 13).

¡HAY TIENE LA CLAVE PARA LA FELICIDAD EN ESTA VIDA LLENA DE PROBLEMAS! RECUERDE ESTO HERMANOS(AS): “LO QUE TENEMOS CON EL SEÑOR ES MAS GRANDE QUE LO QUE PODEMOS TENER EN ESTE MUNDO”

CONCLUSIÓN.Cuando Habacuc entendió todas estas grandes verdades, su corazón nunca más

dudo, atrás quedaron esos razonamientos y preguntas acusatorias contra Dios. Y al final de su libro expresa en grandes y emotivas palabras donde verdaderamente debe tener puesta la confianza un Hijo de Dios: “Aunque la higuera no florezca, Ni en las vides haya frutos, Aunque falte el producto del olivo, Y los labrados no den mantenimiento, Y las ovejas sean quitadas de la majada, Y no haya vacas en los corrales; Con todo, yo me alegraré en Jehová, Y me gozaré en el Dios de mi salvación. Jehová el Señor es mi fortaleza, El cual hace mis pies como de ciervas, Y en mis alturas me hace andar” (Habacuc 3.17-19).

¿EN QUÉ BASA SU FELICIDAD HERMANO(A)? ¿EN LO MATERIAL O EN LO QUE TIENE CON DIOS, EN LO ESPIRITUAL?

Mire donde estaba ahora puesta la confianza y esperanza de este profeta, ¡NO ESTABA PUESTA NI EN LOS FRUTOS, NI EN LOS LABRADOS, TAMPOCO EN LAS OVEJAS O VACAS! ÉL SABIA QUE TODO ESO ¡PUEDE FALLARNOS O FALTARNOS ALGUNA VEZ! Nunca más estuvo en las circunstancias que le rodearon, nunca más estuvieron en su estabilidad económica o laboral, nunca más pensó que si sufría Dios se había olvidado de él.

Habacuc decía aunque no tenga nada, ni dinero, ni comida, aunque pierda toda mi familia y pierda todo lo que tengo, no esta todo perdido, no hay motivo para perder la esperanza, podemos encontrar el gozo y felicidad con el Señor.

¿QUIERE SER FELIZ HERMANO(A)? Si quiere ser feliz, deje aun lado los problemas, ya no más de quejas y cuestionamientos a Dios, comience a mirar lo que Dios ha hecho por usted ahora, lo que tiene con el Señor y no este pensando tanto en lo que podría tener, sea feliz con lo que tiene, encuentre su fortaleza en el Señor, él podrá hacerle verdaderamente feliz, porque si él no lo puede hacer, dudo que algo en este mundo pueda hacerlo.