GO travel & living - Edición 20

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El origen de los tiempos Un viaje al pasado para descubrir La Rioja en estado natural CARTAGENA Elegancia en el Caribe colombiano PUERTO NATALES Esa delicada belleza austral LITORAL Una aventura de la selva a los esteros SANTA CRUZ En la intimidad de El Calafate 9 771850 302002 00020 ISSN 18503020 Argentina $15 Chile $2400 Uruguay $90 USA U$S5

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Cuyo: un viaje al pasado para descubrir La Rioja en estado natural. Cartagena: elegancia en el Caribe colombiano. Puerto Natales: esa delicada belleza austral. Litoral: una aventura de la selva a los esteros. Santa Cruz: en la intimidad de El Calafate.

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El origen de los tiemposUn viaje al pasado para descubrir La Rioja en estado natural

CARTAGENA Elegancia en el Caribe colombiano

PUERTO NATALES Esa delicada belleza austral

LITORAL Una aventura de la selva a los esteros

SANTA CRUZ En la intimidad de El Calafate

9 771850 302002

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Chile $2400Uruguay $90USA U$S5

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Aunque muchos suelen tenerle miedo a los cambios, yo soy de las personas que consideran que los cam-

bios, las modificaciones, los retoques, las transformaciones, no sólo son buenas, sino que son necesarias.

Nuestra revista ya tiene 6 años en el mercado editorial y cuando irrumpió en el mismo, se caracterizó

por ser una propuesta absolutamente visual, con una tapa atípica y hasta atrevida para la mirada tra-

dicional. Mantenemos la esencia de esa identidad pero hoy, con un camino ya recorrido, presentamos

algunos cambios, sutiles, posiblemente imperceptibles para muchos, pero que a nuestro entender

siempre son fundamentales para ser fieles a este concepto de seguir evolucionando, sabiendo que

tenemos solo nuestras propias limitaciones como techo.

Para presentar esta edición renovada, empezamos por sumergimos en el Chile más austral, hasta lle-

gar a Puerto Natales,una pequeña aldea de mar, dueña al mismo tiempo de la simpleza de lo natural y

del atractivo de su elegante propuesta gourmet.

Casi simultáneamente, Marta, Daniela y Efraín se adentraron en un laberinto de creativos fenómenos

geológicos en la provincia de La Rioja, que entre sus formas guarda la historia del mundo y las huellas

de antiguas civilizaciones.

Por su parte, Esteban llegó hasta Cartagena de Indias. En la ciudad amurallada que refugia celosamen-

te relatos de Gabriel García Márquez, logró captar su esencia desandando el pasado que se escribe en

cada rincón de este paraíso del Caribe colombiano.

Tomás y Ariel, se lanzaron a recorrer un circuito desde las Cataratas del Iguazú a los Esteros del Iberá,

itinerario que suena obvio por lo breve y espectacular, pero que aún así se mantiene poco difundido.

Finalmente, acompañada por su mochila, Diana y su compañero salieron en búsqueda de nuevas

experiencias. Para ello volaron hasta El Calafate, un destino íntimo y versátil, capaz de proveer sensa-

ciones verdaderamente únicas, claro está, de la mano de los glaciares.

Un equipo en primera persona, con nombres propios como los de cada lugar, le agrega a nuestra

impronta una nueva mirada. O mejor, muchas nuevas miradas.

Martín RubinettiDirector Editorial

Tiempo de cambios

sTaFFdirección ediTorialMartín L. [email protected]

ediTorTomás [email protected]

co-ediToraDaniela [email protected]

arTeRicardo Luis Garcí[email protected]

redacTor especialEsteban Eliaszevich

consejo ediTorialLucila Fernández [email protected]

Javier María [email protected]

Carlos María Ferná[email protected]

comercializaciónJessica [email protected]

Marta [email protected]

Esteban [email protected]

rr.pp.Alfredo Luis [email protected]

conTacToLe Mot - Soluciones en Comunicación02972-410140 / [email protected]

[email protected]

colaboraron en esTe númeroDiana Serra, Efraín Dávila, Cristina Bozzoli, Ariel Mendieta, Ezequiel Pérez Gaullón, Betina Díaz Duckwen y Kiki Boccarelli.

FoTo de TapaParque Nacional Talampaya.Fotógrafo: Efraín Dávila.

oFicinas de conTacTo Go Travel & livinGCiudad Autónoma de Buenos Aires: Larrea 1026 3º B (C1117ABF) /15-6944-8762San Martín de los Andes: Av. San Martín 836 1º C (Q8370EJU) / 02972-410140Puerto Madryn: Apeleg 145 (U9120LNC) / 02965-15567655España: Emili Cabañes 23-25 3º 1a, 08302 Barcelona

WebsiTewww.revistago.com.ar

impresiónGráfica Pinter011-43811466 / [email protected]

disTribuciónCap. Federal: Vaccaro, Sánchez y Cía. S.A. - Moreno 794 9º Piso - CABAInterior: Bertrán SAC - Av. Vélez Sársfield 1950 - CABA

GO travel & living - Número 20 - Sep/Oct/Nov 2011Registro de la propiedad intelectual en trámite, expediente número 927244. Tanto los artículos periodísticos, las fotografías, la publicidad pagada y los anuncios son responsabilidad exclusiva de sus autores o representantes legales y no necesariamente reflejan las opiniones y juicios de la Editorial.

ISSN Nº 1850-3020

Propietario Alfredo Luis Coste

Desarrollado por

www.lemotsur.com.ar

ediTorial

Además de la tradicional distribución en kioscos, GO travel & living está presente en los principales cinco estrellas y hoteles boutique de la Argentina.A s i m i s m o , y e n f o r m a e x c l u s i v a , t o d a s l a s e d i c i o n e s p u e d e n v i s u a l i z a r s e o n l i n e e n e l p o r t a l w w w. e - g a l i c i a . c o m d e l B a n c o G a l i c i a .También se incluye en 1.500 puntos de distribución estratégicos de El Revistero y en 800 puntos de la Patagonia argentina a través de Travel Guía .

GO travel & living es miembro de

SALA VIP

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puerTo naTales En el Chile más austral, una pequeña aldea de mar sorprende con la simpleza de lo natural y con una sofisticada propuesta gourmet. Puerto Natales, en un pequeño rincón del continente, se ha ganado el reconocimiento del mundo.

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la riojaUn viaje a los recónditos paisajes riojanos permite adentrarse en la historia construida por creativos fenómenos geológicos, que aún guardan secretos de antiguas civilizaciones.

sumario nº20

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carTaGenaCartagena de Indias deslumbra con su diversidad cultural y su entorno privilegiado. El pasado de la ciudad amurallada y el carisma de las islas vecinas motivan esta expedición por el Caribe colombiano.

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liToralDueño de un atractivo singular, el circuito que permite enlazar las Cataratas del Iguazú con los Esteros del Iberá siembra ilusiones en el espíritu de viajeros en busca de aventuras con estilo.

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sanTa cruzCuando el sol primaveral tiñe la imponente belleza de los glaciares,El Calafate se ofrece como un destino íntimo y versátil, capaz de proveer experiencias verdaderamente únicas rodeadas de montañas y lagos.

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Web

La firma Unidad Editorial ha lanzado un sitio de referencia informativa para un exclusivo segmento de ejecutivos relacionado con el consumo de bienes y servicios de lujo.En www.fueradeserie.expansion.com se puede encontrar novedades del mundo de la moda, el ocio, la cultura, la tecnolo-gía, los viajes y lo último en tendencias. Incluye además entrevistas a reconocidas personalidades vinculadas a los negocios y otros ámbitos profesionales.

leisure GuideJ. Sutton Dabbah • Ed. KPL Media

Leisure Guide, la Guía Argenti-na de Turismo, es una nue -va fuente de consulta que invita a recorrer destinos como Buenos Aires, Litoral, Norte, Córdoba, Cuyo, Patagonia y la tradicional Ruta 40. Sus sec-ciones “Feel” con alternativas para disfrutar la cultura y tradición del país; “Experience”, op-ciones para vivir la naturaleza; “Live” con las zonas imperdibles de cada región; y “Taste”, que relata los circuitos de sabores gastronó-micos, muestran con excelentes fotografías las maravillas de Argentina.

sólo para enTendidoswww.fueradeserie.expansion.com

palabras como cuerpos

libros

GuÍas

periTo Francisco moreno el que pensó la paTaGoniaRoberto Hosne • Editorial Albatros

Este libro cuenta la historia de Francisco Pascacio Moreno, lla-mado “el Perito Moreno”, cuyo rol como educador y humanista fue indispensable para la definición de los límites con Chile del territorio patagónico, entre otras hazañas. Asimismo se opuso y denunció la apropiación de tierras públicas por parte de latifun-distas, elevó y extendió la educación a los sectores populares y trabajó por los derechos de los pueblos originarios. Un homenaje al hombre que fue aislado en su propio país y a quien se reivindi-ca por su aporte y su obra a través de la prosa de Roberto Hosne.

el cuaderno de maYaIsabel Allende • Editorial Sudamericana

La autora sorprende nuevamente con su personal estilo literario. En esta oportunidad, relata una historia en la piel de Maya Vidal, una joven californiana que decide refugiarse en una isla del Sur. Tras haber afrontado la muerte de su abuelo, Maya se ve invadida por la conmoción personal y se ve perseguida por el FBI y la CIA, razones por las cuales decide huir. Su refugio en Chiloé le deparará un encuentro encomendado en las notas de un cuaderno que lleva consigo, el cual le permitirá revelar un secreto familiar.

arGenTina - ruTa 40Luis Castelli • Editorial Genérico

Con una inmejorable calidad de textos y fotografías, este libro propone explorar de una manera integral el vínculo del viajero con el entorno. Esta invitación que efectúa Luis Castelli permite experimentar de una manera diferente la mítica travesía por la Ruta 40 Argentina y así construir una identificación recíproca entre esta ruta escénica y los atractivos pueblitos de alrededor, evocando un culto a las raíces y una nueva forma de descubrirlos.

recuerdos de un callejón sin salidaBanana Yoshimoto • Editorial Tusquets

Yoshimoto cuenta a través de cinco historias, el cuestionamiento acerca del sentido de la vida y la búsqueda de la plenitud, a partir de que cada uno de los personajes se ven atrapados en momentos de profunda tristeza. “La casa de los fantasmas”, “¡Mamaaa!”, “La luz que hay dentro de las personas”, “La felicidad de Tomo-Chan” y “Recuerdos de un callejón sin salida” son los relatos que permitirán al lector reflexionar acerca de la intensidad de las relaciones huma-nas y de la posibilidad de encontrar la felicidad más allá del dolor.

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los 3 eleGidos

superficies de placer

delTa lodGe

la becasinaSan Fernando - Buenos Aires - ArgentinaWeb: www.labecasina.comTeléfonos: (54 11) 4328-2687 / 4728-1253/1395E-mail: [email protected]

Sobre el Arroyo Las Cañas, en las Islas del Delta, se emplaza La Becasina. Este exclusivo lodge cinco estrellas cuenta con quince bungalows -suites rodeadas de vasta naturaleza y deck pri-vado-, que aseguran la intimidad de los huéspe-des. Asimismo cuenta con varias edificaciones interconectadas mediante pasarelas de madera, destinadas a espacios comunes, en donde se puede disfrutar de almuerzos al aire libre. Den-tro de la calidez de sus detalles se destaca el estilo ecológico, reflejado en su construcción, en la decoración de sus paredes, el mobiliario en caña y los colores en tonos blancos, beiges, naranjas y rojos, tanto en tapices como en cortinados. Todas las suites poseen calefacción central y aire acondicionado. Además, ofrece un variado programa de actividades que incluye desde masajes y sala de relax hasta paseos en bote, kayak y trekkings, para los amantes de la naturaleza. La Becasina cuenta con dos barras -una interior y otra exterior- cerca de la piscina sobre el deck principal, así como también dispo-ne de un cálido espacio para la degustación de exquisitas creaciones del chef.

El descanso y la belleza de los escenarios argentinos se combinan con el placer de una

perfecta escapada. Desde el Delta del río Paraná hasta los lagos y montañas de la Patagonia

Argentina, GO travel & living presenta sus tres elegidos.

HosTerÍa bouTique

blanca patagoniaEl Calafate - Santa Cruz - Patagonia ArgentinaWeb: www.blancapatagonia.comTeléfono: (54 2902) 493370E-mail: [email protected]

En la ciudad de El Calafate, custodiada por el Lago Argentino, Bahía Redonda e Isla Solitaria, se encuentra la hostería boutique Blanca Pata-gonia, cuidadosamente diseñada para brindar un inmejorable confort. Sus once habitaciones se complementan con la opción de cómodas cabañas, de una sofisticada decoración y cáli-da edificación, que ilustran el particular estilo sureño. En ambos casos, contemplan servicios de desayuno buffet, baño con hidromasaje, yacuzzi, bar, restaurante, mini gym y estacio-namiento privado. Asimismo cuentan con TV por cable, Wi-Fi, atención personalizada y recepción trilingüe. Este exclusivo alojamiento patagónico ofrece una variada gama de activi-dades al aire libre. Un amplio espacio deportivo aguarda en el predio de la hostería, como así también el asesoramiento para contratar pa-seos y excursiones a través de su propia agen-cia Patagonia Chic, que brinda la posibilidad de disfrutar del imponente Parque Nacional Los Glaciares, de navegaciones y trekkings por los distintos cerros, del turismo de estancias y el fly cast, entre otras múltiples alternativas.

HoTel

quijoteEl Calafate - Santa Cruz - Patagonia ArgentinaWeb: www.quijotehotel.com.arTeléfono: (54 2902) 491017E-mail: [email protected]

Si de descansar se trata, entonces es inevita-ble citar a uno de los refugios más legenda-rios y prestigiosos de El Calafate, Quijote Ho-tel. Ubicado en el corazón de la ciudad, esta exclusiva residencia promueve la comodidad que brinda su proximidad al centro comercial y a uno de los atractivos más destacados, como es el Lago Argentino. Esta edif icación ambientada como una antigua estancia brinda el confort de un moderno hotel de cuatro estrellas, en el que sus huéspedes encontrarán una amplia variedad de servicios y comodidades en sus 119 habitaciones totalmente equipadas con calefacción, mini bar, TV por cable y Wi-Fi. Cuenta además con cafetería-bar, servicio de lavandería, guardarropa, caja de seguridad, desayuno americano buffet y room service. El compromiso con la excelencia encuentra en este hotel con más de 30 años de trayec-toria un ambiente destacado por su atención personalizada, ubicado a pocos minutos del aeropuerto local y en uno de los sitios más privilegiados por sus vistas y entorno natural.

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una ventanahacia el mundo austral

Montañas, glaciares, cielos eternos y un inmenso mar ilustran las postales de

Puerto Natales. Aquí, no solo la naturaleza incita al descanso: un exclusivo

circuito gourmet conformado por pintorescos bares y restaurantes salpica

los callejones de esta pequeña ciudad. POR DANIELA STANISCIA

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cruzar la inmensa Cordille-ra de los Andes, descubrir un pequeño rincón a ori-llas del Canal de Señoriet y abrir la puerta hacia el

deslumbrante Parque Nacional Torres del Paine son acciones indisociables de esta pequeña ciudad de la región de Magallanes y Antártica Chilena que es Puerto Natales.Aquí, el viento no da respiro y un pin-toresco muelle de madera invita a con-templar un mar de aguas azul profundo y rebeldes olas. Desde la costa, se vis-lumbran algunos navíos encallados, que se exhiben como una postal indispensa-ble. Una rambla de adoquines, con faro-litos y rústicos bancos de madera, sirve de escenario para que parejas abrazadas caminen sin pensar en nada; o para que las familias observen a sus niños correr en total libertad; incluso para que los turistas deambulen fotografiando todo cuanto encuentran a su paso.Es entonces cuando la ansiedad por comenzar a recorrer esta maravillosa ciudad comienza a fluir, y entre hori-zontes lejanos que se unen con altísimas montañas, aguardamos al vehículo que nos guiará hasta el hotel, con el único objetivo de transitar una inolvidable experiencia austral.

Una ciudad boutiqueNuestro inconfundible acento argen-tino nos impide pasar desapercibidos

y, entre pregunta y pregunta, Carlos nos conduce hasta el hotel. Haciendo gala de nuestras cualidades “argentas”, consultamos si no podría ofrecernos una breve recorrida por el centro de la ciudad. Él asintió y, anotador en mano, comencé a preguntar acerca de la histo-ria local. Mientras pasábamos por la Plaza Artu-ro Prat, en cuyo entorno se ubican los edificios municipales y la Iglesia María

Auxiliadora, Carlos relataba que Puerto Natales fue fundada en el año 1911 por inmigrantes escoceses y alemanes que llegaron a la región para comercializar carne de cordero y lana hacia Europa. Desde la misma plaza se puede apreciar el Museo Histórico, un espacio dedi-cado a dar testimonio de la vida de las primeras comunidades australes y de la colonización, en el que se atesora una

importante colección de objetos y foto-grafías. Otro ícono que se impone es La Mano, una escultura urbana que viste a la costanera y que es una réplica de las que se encuentran en Punta del Este y en el Desierto de Atacama.   Mientras avanzábamos entre calles la-berínticas, me sorprendía la arquitectu-ra, que aún conserva la impronta inglesa de principios del siglo XX, y que a su vez se combina con armónicos detalles que denotan cierto estilo “boutique”, tanto en hoteles como en restaurantes. Luego del paseo, llegamos al hotel. Car-los nos despidió mientras nos ayudaba con el equipaje. Un edificio de prudente fachada nos recibió y unos metros más adelante, al atravesar el hall, una estruc-tura grandiosamente minimalista nos dejó perplejos.Allí nos recibió Branko, gerente de marketing del hotel. Tras una breve y cordial bienvenida, nos acompañó hasta nuestros respectivos cuartos. Cuando hablamos del hotel, hablamos del Indigo, alojamiento boutique con un estilo que recuerda al de los lodges nórdicos, por su arquitectura y diseño de vanguardia. Cuenta con 29 habitaciones, seis de ellas en suite, distribuidas alrede-dor de un espacio central. Uno de los detalles más sorprendentes es la vista desde los ventanales: un pai-saje de luces surrealistas, glaciares, fiordos y la infinita pampa austral.

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Más tarde, nos encontramos de nuevo con Branko para conversar. Amablemente nos invitó a compartir un aperitivo y nos contó acerca de los orígenes de este maravilloso hotel design. Parece ser que la inspiración de Sebatián Irarrázaval, quien fuera su mentor, surgió de las embarcaciones Navi-mag, un medio de transporte que sirve de contacto entre Puerto Natales y el exterior.La combinación de ma-teriales como pizarra, hierro, concreto y maderas nativas abre paso a amplios espacios que son conquis-tados por innumerables hilos de luz. Una mezcla de rampas, puentes y esca-leras permite circular por el interior del hotel, en cu-yos espacios se confunden cálidos colores en tejidos y maderas que coronan la decoración del lugar. En Indigo todo es de pri-mer nivel y los servicios de spa y gastronómico no son la excepción. En el sexto piso se ubica el spa, cuida-dosamente construido con maderas nativas. En este espacio, la distención y la meditación son las premisas básicas, que permitirán disfrutar de tres jacuzzis termales con vista al fiordo Buena Es-peranza y al glaciar Balmaceda, una sala de relax, sauna y dos salas de ma-saje con vista al Macizo Paine Grande.

El restaurante mantiene el mismo estilo minimalista, con amplios espacios lumi-nosos. Su oferta gastronómica se centra en los sabores regionales como el cordero magallánico y el ternero de las pampas australes. Y por supuesto en platos a base de pescados y mariscos frescos de la zona, como la centolla de los fiordos. Desde el Lounge Bar y al calor del fuego de la chi-

menea, se pueden observar las pintorescas casas de colores que dan vida al pueblo de Puerto Natales, mientras se degustan algunas de las quince variedades del tradi-cional “pisco sour”.

La tríada perfectaAl día siguiente nos recibió un cielo so-leado, aunque bastante nuboso. Luego

de un desayuno frugal, emprendimos el camino hacia nuestra primera travesía: el Parque Nacional Torres del Paine. Tras un trayecto de poco más de una hora y media, arribamos a esta área protegida de 242.000 hectáreas, reconocida como Reserva de Biósfera por la UNESCO. Los sentidos se regocijan ante la majes-tuosa presencia natural. Lagos, glacia-

res, praderas, cascadas, bosques y, por supuesto, las vedettes: la tríada de torres de granito que dan nombre al lugar. El menú de a lternat ivas para recorrer el parque va desde un circuito de trekking y campamento de una semana hasta expediciones con esca-las de dos o tres días. Por supuesto, y a los e f e c t o s d e o p t i m i -zar nuestra estadía en P uer to Nat a le s , nos decidimos por un tra-dicional paseo lacustre,

combinado con un trekking corto por senderos boscosos. Una pequeña embarcación nos esperó a orillas del Lago Grey, donde emprendimos el viaje hacia el corazón de los glaciares. Luego de unos minutos de navegación, un inmenso muro blanco apareció como obstáculo insalvable. La embar-cación tomó cierta distancia y detuvo

un cuidado minimalismo con reminiscencias nórdicas distingue el estilo

del acogedor Hotel Índigo.

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su motor. Allí nos sentamos frente al escenario para la función que comen-zaría apenas unos instantes después. En medio de tanta inmensidad y silencio, un indescriptible sonido se estrella contra las profundas aguas. Grandes masas del glaciar Balmaceda se des-prenden del ventisquero y viajan hasta la orilla de la playa de arenas volcánicas.Finalmente, emprendimos el regreso a tierra, para encarar una caminata que nos

permitiría continuar disfrutando de esta impactante reserva. El cielo pareció abrirse a nuestro paso y, de repente, las nubes des-aparecieron dejando un cálido sol como guía. Ya inmersos en un bosque de lengas, ñires y arrayanes vislumbramos unos pequeños saltos de agua, que nos condu-jeron luego hasta unas pequeñas cascadas. No resultó difícil observar alrededor especies como guanacos o zorros, así como también flamencos y cisnes que

descansan habitualmente en los espejos de agua que dejan los caudalosos ríos. Mucho más adelante, y a una altura considerable, encontramos un claro para descansar. Desde allí pudimos observar a varios cóndores que nos sobrevolaban. Luego de unos minutos, las nubes volvieron fervorosas, y con un cielo cerrado y tormentoso empren-dimos el retorno, con vistas a disfrutar de un descanso reparador en el hotel. Fo

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la inmensidad de los hielos se comprende al navegar las aguas

calmas del lago Grey.

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Festival para los sentidos Una sesión de masajes en el spa fue la receta necesaria para continuar con nuestro paseo. La noche llegaba y con ella la posibilidad de realizar una recorrida nocturna por otra de las rutas exclusivas de Puerto Natales, la gastronómica.Actualmente, esta pequeña ciudad de la Patagonia Chilena es reconocida internacionalmente como un polo culinario, que atrae a locales y extranjeros con paladares exigentes a reductos tan variados como pin-torescas pizzerías, tradicionales parrillas, restaurantes de especialidades de mar o cafés de estilo europeo. Una opción que llama a nuestros sentidos es un lugar de co-cina fusión africano-patagónica, una combinación de platos

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la maravillosa vista desde el spa forma parte de cualquier tratamiento que intente proveer placer y relax.

a base de cortes patagónicos, pesca-dos y sabores de frutas, creada por su propio dueño y chef, que seduce con un ambiente cálido y natural, decorado con máscaras talladas en madera. La carta es amplia, original y ecléctica. Luego de meditarlo unos instantes, nos rendimos ante unas costillas de cordero con salsa de menta y una ensalada de centolla con salsa de kiwi y berries. El final de la noche se acercaba, y luego de ca-minar unos metros, fuimos a por la degustación de un sabroso té en he-

bras, servido por Anne y Jeremy, en el único bar vegetariano de la ciudad.Este circuito de intensos sabores y múltiples opciones gourmet es imprescindible para terminar de descubrir la historia y los perso-najes de Puerto Natales, que se expresan no solo en la exigencia de sus platos y sus presentaciones, sino también en la calidad de vida de sus habitantes, lejos de los rui-dos y muy cerca de la naturaleza.Así, nuestro viaje fue llegando a su fin. Nos despedimos de Branko y

de todo el personal del hotel, agrade-ciendo la tan cómoda y confortable estadía que nos brindaron. Nue-vamente el coche recorrió la gran costanera para llevarnos hasta el aeropuerto. En lo personal, muchas son las cosas que me llevo de esta ciudad, mezcla de puerto y urbe, diversa en cada uno de los 20.000 habitantes que la pueblan. En fin, mucho más que las líneas para esta nota, me llevo la satisfacción de haber transitado uno de los luga-res más australes del mundo.

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Agua, tierra y aire se fusionan en una absoluta armonía para alcanzar la perfección del paisaje. El mismo que se conjuga con los sentidos para transmitir historias, aromas y personajes, y de esa manera logra una transportación al origen de la historia. Un pasaporte ideal que permite descubrir la región cuyana de Argentina.

Tierra deorígenes

P O R D A N I E L A S TA N I S C I A / F O T O S E F R A Í N D Á V I L A

la rioja

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el creciente afán por conocer una tierra que cuenta a cada paso la historia natural del mundo obli-

ga a viajar hasta la región de Cuyo. Allí, entre rarezas geológicas y rodeados de las huellas de antiguas culturas, apa-recen personajes cordiales y amistosos que sirven de guías para descubrir his-torias que se escabullen y que seducen a los viajeros en cada uno de los rincones de La Rioja.La diversidad que forma parte de los paisajes riojanos hace pensar que el t iempo es poco para conocer cada r incón. Desde el Parque Nacional Talampaya a Famatina y su históri-ca Mina La Mexicana, pasando por la Reserva Laguna Brava, solo por citar algunos, son innumerables los lugares que invitan a ser relevados.Y aunque el viaje debía ceñirse a un

plan, la travesía comenzó a mostrarse sorpresiva. Todo indicaba que la es-tadía estaría colmada de sensaciones y experiencias con tan solo subir al transfer rumbo a Coronel Felipe Vare-la, uno de los dieciocho departamentos que conforman La Rioja. Así comenzó el viaje.

Herencia precolombinaEl recorrido nace en el Circuito Valle del Bermejo donde Guillermo, guía en esta expedición, reunió al pequeño grupo de enviados especiales, perio-distas argentinos y extranjeros. El acceso al Parque Nacional Talampaya proponía un paseo en el Safari Aven-tura, un vehículo Overland 4x4 a bor-do del cual atravesaríamos el Cañón homónimo. Este parque, declarado en el año 2000 Patrimonio Natural

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Talampaya seduce con sus

formaciones únicas que cuentan la historia del

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de la Humanidad por la UNESCO, comprende unas 215.000 hectáreas entre las que conviven numerosas especies de flora y fauna autóctona.Ya en los caminos del intenso Cañón, la selecta ubicación en los asientos de la parte superior del camión permite apreciar los inalcanzables paredones de 150 metros de altura y las inigualables vistas, para termi-nar de deslumbrar al llegar a los llamados “Pizarrones” de Petroglífos. Guillermo cuenta que las formas de estas grandes

paredes de piedra fueron resultado de la erosión del viento y el agua, en las cuales se imprime el legado de antiguas civili-zaciones que bien pueden asociarse con primeros pobladores agroalfareros de la zona, y en las que se ven figuras geométri-cas, antropomorfasy zoomorfas.Cámara en mano, seguimos sin perder un solo detalle de los relatos de nuestro experimentado guía, mientras algunos metros más adelante aguardaba otra de las maravillas de este Parque, el Jardín

Botánico. Allí viven arbustos bajos de especies como algarrobos, chañares y molles. Este oasis verde deslumbra no solo por el contraste que produce su presencia en estas rojizas tierras, sino también por la acústica que brota de las inalcanzables paredes.En medio de un frondoso silencio, apenas interrumpido por los ecos de la naturaleza, se planteó una pequeña pausa en la excursión para disfrutar de un refrigerio entre tanta inmensi-

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dad, la que revela a cada paso secretos milenarios de la historia de la huma-nidad. Luego de charlas y anécdotas, emprendimos nuevamente el camino hacia la tercera estación.Entre tanto, múltiples esculturas ta-lladas por la naturaleza comienzan a hacerse visible. Estamos en presencia de una serie de figuras, quizás las más famosas del Parque Nacional Talampaya, que interceptan nuestra atención: el Rey Mago, La Catedral,

Las Torres y, finalmente, El Monje. El estadío que lleva al final de este paseo se denomina “Los Cajones”y hacia allí nos dirigimos, atravesando el cauce del río seco, unos 20 kilómetros en direc-ción al corazón del Parque Nacional. El tramo se transita bajo la atenta vigilan-cia de paredes de más de 80 metros de altura, entre las que se dibujan estrechos senderos que regalan sus colores, aro-mas naturales y diversos apostaderos de especies. Y tal como si fuera una

postal, se puede apreciar cómo un cón-dor andino sobrevuela a nuestro paso, regalando un indescriptible espectáculo en el desierto.Culminando el trayecto, Guillermo dio cuenta de las diversas alternativas para realizar este recorrido, así como también de las oportunidades para conocer otros sitios de gran atractivo cercanos a Talam-paya y parte de la misma Reserva, como por ejemplo la “Ciudad Perdida” -confor-mada por innumerables cauces de arroyos

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zorros, guanacos y vicuñas disfrutan el resguardo que les brinda la reserva laguna brava.

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temporarios y formaciones rocosas talla-das por la erosión- o el “Mogote Negro”, que es una formación de duras y negras rocas basálticas, desde cuya cima se obtie-ne una inmejorable visión panorámica de los llanos y sierras aledañas. Desde aquí, el Overland desanda el cami-no y abre paso a una cálida despedida. Refugio de vidaEl punto elegido para continuar el viaje fue la Reserva Laguna Brava. El día se pronunciaba soleado y agradable, con una temperatura por demás generosa. Cerca de las nueve de la mañana comenzó el recorrido, que atravesaría el pueblo de Vinchina, hasta desembocar en un puente sobre el río Bermejo. El camino continuó en ascenso, sinuoso y atractivo al mismo tiempo, siempre acompañado de grandes

montañas que resaltaban por su composi-ción de piedra arcillosa. De repente, otro lugar mostró su encan-to. Se trata de Alto Jaguel, un pequeño poblado de bajas casas de adobe. Una curiosa figura se presentó metros más adelante. Sobre la ladera de una de las montañas se esculpe “La Pirámide”, una formación provocada por la erosión. Desde allí se vislumbra la imponente Cordillera riojana, con sus nevadas cumbres. E inmediatamente, se percibe la cercanía a la Reserva Laguna Brava, una vez que se atraviesa la “Quebrada del Peñón”, donde se yerguen refugios circulares de piedra, cal y tierra que, según se cuenta, eran utilizados por los arrieros que transportaban ganado a Chile en épocas de la guerra del Pacífico contra Perú y Bolivia.

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En esta zona los vientos suelen ser in-tensos y un dato curioso es la leyenda que circula acerca del nombre de esta re-serva. La misma cuenta que su nombre obedece al carácter volátil que presenta, mostrándose en primer momento como un espejo límpido del cielo diáfano y, al instante, exhibe un escenario de remo-linos inexplicables, donde los rayos del sol hacen danzar a las partículas de sal.La Reserva Laguna Brava fue creada en el año 1980 para la preservación de especies como vicuñas y guanacos que se encontraban en peligro de extinción. La misma es, a su vez, la morada de

numerosos flamencos rosados y aves que sobrevuelan las azules aguas de la inmensa laguna, ubicada en el centro de la escena.El guardafauna que nos dio la bienve-nida propuso un paseo por una parte de los más de cuatro mil kilómetros cuadrados de extensión que posee la Reserva. En el comienzo del recorrido aparecieron pequeñas lagunas tempo-rales, producto de deshielos, adornadas por patos, chorlos, águilas moras, hal-cones, pumas y zorros colorados, que se encuentran protegidos de los cazadores furtivos. Luego surge la panorámica

naturales o humanas las formas del desierto proveen postales a cada paso.

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más buscada: una extensa playa de ori-llas blancas debido a la sal acumulada; esbeltos f lamencos que emergen de las aguas; y un valle de colores azules, verdes, naranjas y marrones. Luego de dejarnos invadir por la infinita calma del paisaje, retomamos el viaje, maravi-llados ante tal regalo de la naturaleza.

La MexicanaUn nuevo día anunciaba que el viaje es-taba llegando a su fin, razón por la cual agotaríamos las instancias del itinerario, cuyo hito central iba a ser la Mina La Mexicana, ubicada a solo 34 kilómetros de la ciudad de Chilecito o a 33 kilóme-tros de Famatina. Abordamos una camioneta 4x4 en Chi-lecito con Claudio como guía. Mientras conducía por los serpenteantes caminos, contó que esta ciudad es un polo vitiviní-cola que concentra el 75% de las bodegas riojanas. Cooperativa Vitivinícola y Cha-

ñarmuyo son los dos nombres a recordar. Con la promesa de degustar un buen manjar regional con un perfecto torrontés al regreso, emprendimos el camino hacia la misteriosa Mexicana.Al llegar, nos encontramos con una im-ponente obra de ingeniería de principios del siglo XX, que servía para transportar los minerales extraídos en la zona. Una pequeña vía ferroviaria unía los 35 kilóme-tros de extensión que estaban sembrados con doce estaciones comunicadas entre sí.La primera de ellas se encuentra a una al-tura de 1.075 m.s.n.m. Aquí se conformó el Museo Histórico Cable Carril, donde se puede apreciar una exposición de pie-zas y elementos vinculados a la vida de los mineros. La propuesta era dirigirnos directamente hacia el Cañón del Ocre, por un camino de huellas en ascenso. Cuando parecía que La Rioja había agota-do sus bellezas, nos encontramos en pre-sencia de “El Portezuelo Blanco” y “Los

Pesebres”, montañas que se destacan por su increíble tonalidad de colores aporta-dos por la oxidación de minerales, ceniza volcánica, yeso, ocre y azufre. Al llegar a los 2.600 m.s.n.m, en medio del Cañón, se descubre el río cuyos tonos dan nombre al lugar, que paciente y constante fue mode-lando estos inalcanzables paredones a lo largo de milenios.Luego llegó la pausa, en la que disfrutamos de un almuerzo regional en la “Cueva de Pérez”, antigua administración de la Mina La Mexicana. La visita continuaría hacia las demás estaciones. La última, y quizá la más impactante por la altura a la que se encuentra -4.600 m.s.n.m-, nos recibió con un imponente marco de colores rojizos y terrosos que se conjugaron con la presen-cia de un viento rebelde para complicar la tarea de retratar el momento. La precordi-llera nevada es el telón para el cierre de este nuevo día en La Rioja, y su compañía nos escolta durante el camino de regreso.

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sobrias pero ex-presivas, la arqui-tectura y la gastronomía condensan siglos de cultura.

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Al llegar la noche, y para hacer efectiva la promesa inicial, fuimos invitados al agasajo de despedida. Unos copones de au-téntico vino riojano nos daban la bienvenida. En su compañía, una rústica tabla de fiambres y quesos lucía en el centro de la cálida mesa, cuidadosamente preparada. Hubo lugar para las charlas, anécdotas y devoluciones sobre los paseos realizados.La agradable velada se vio seguida de unas irresistibles chuletas al sarmiento, una receta típica que difícilmente pueda encon-trarse fuera de esta provincia. Lo poco que pudimos averiguar (ya que forma parte de uno de los secretos más preciados) es que se trata de unas costillas de cordero untadas en aceite, a las que se deja quemar entre las brasas, para después retirar los restos de ceniza con un papel. Luego se colocan en la parrilla, se asan a ambos lados, se salan y se sirven. Finalmente, y luego de compartir esta comunión con los demás expedicionarios, regresamos al hotel. La mañana llegó y con ella la hora de tomar el vuelo que nos dejaría otra vez en la gran ciudad. Desde las alturas despedimos esas tierras riojanas, cul-toras de sabiduría y belleza, dueñas de una doble riqueza: la de sus paisajes y la de su gente.

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colombia

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“La Heróica” seduce con los símbolos de su rica historia, que se concentran en la ciudad fortificada y contrastan con las paradisíacas islas y playas que la completan. En un único destino hay mucho por descubrir, basta con decidirse a explorar todas las caras de este puerto legendario. P O R E S T E B A N E L I A S Z E V I C H

la belleza diversade cartagena de indias

caribe colombiano

justo cuando el avión está por aterri-zar se puede ver esa lonja de tierra enmarcada por lagunas marinas,

inaccesible y altiva, moderna y acoge-dora, que no es otra que Cartagena de Indias. Una ciudad de casi cinco siglos que trasciende como principal destino turístico colombiano no solo por su mo-numental legado histórico sino también por sus islas paradisíacas, por su noche interminable, por sus caras de Jano que aún sin conocerse entre sí no pueden separase. Porque la personalidad de este

destino se conforma al mismo tiempo y en idénticas dosis tanto por su casco vie-jo, que alberga museos, iglesias, plazas y parques, como por sus playas de arena blanca y su mar de aguas turquesa.Fundada en 1533 por Pedro de Heredia, fue uno de los puertos más importantes de América durante la colonia española. Y esto significa que toneladas de oro y plata descansaban aquí antes de partir a Europa. Lo que explica porqué el inefa-ble Francis Drake la tuviera entre ceja y ceja para concretar redituables ataques; y

porqué la corona de Castilla y Aragón se dedicó durante dos siglos a construir las murallas y fuertes que hoy la distinguen. También fue Cartagena el punto de ma-yor tráfico de esclavos africanos en la Sudamérica española. De allí que en sus calles se palpe aún hoy la fusión de tres vertientes humanas: la indígena, afincada en este territorio desde siempre; la blan-ca, venida de España; y la negra, traída esclavizada de África. La mixtura se expresa en una población predominan-temente mestiza y negra. Pero también

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en la diversidad musical que ofrecen sus ritmos variopintos, como la champeta (originaria de Cartagena), el vallenato, la delicada cumbia colombiana o la salsa, bandas sonoras de veladas inolvidables.Ambas, historia y diversidad cultural, se funden con una exclusiva oferta hotelera y gastronómica, poblada de deliciosos frutos de mar, de bares y restaurantes

sofisticados, de discotecas incansables y de un etcétera amplio, capaz de justificar la fama de este epicentro turístico que cultiva el alma de quien la visita.

La ciudad amuralladaCartagena de Indias, la capital del de-partamento de Bolívar, ubicada en el centro del litoral caribe, deleita a primera

vista y enamora cuando se la conoce. El ícono cartagenero es su sistema de for-tificaciones a cuyo abrigo aún sigue viva la ciudad vieja, una de las más pintorescas de América, declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por UNESCO en 1984. Los 11 kilómetros de murallas, baluartes, un castillo, fuertes, y todas las edificacio-nes coloniales y republicanas, iglesias y

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monumentos preservados con dedicación y buen gusto sirven de ejemplo para en-tender cómo era ese Nuevo Mundo que alumbró a Cartagena. Para vivir esa historia hay más de un modo: por medio de un romántico paseo en mateo; en Chiva, un micro pequeño y multicolor, animado por músicos to-cando en vivo; y también a pie, opción

que no solo ejercita sino que permite un contacto especial con la realidad. Es caminando que se sienten presencias como la de Gabriel García Márquez, de lazos muy fuertes con esta ciudad. Frente al Sofitel Santa Clara, elegantísi-mo hotel que supo ser polvorín hospital y convento, se respira el espíritu del libro “De amor y otros demonios”; pero

frente a la barra lustrosa de La Vitrola, el bar preferido de Gabo, se puede esperar su presencia lisa y llana, sin veleidades poéticas. La mesa que siempre lo espera se ubica en un rincón, mientras todo en el ambiente enamora con una estética de los años 30 en La Habana: muy Bogart. Estos son los pequeños recursos de Car-tagena para conmover al viajero.

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La recorrida debería iniciarse por la To-rre del Reloj, emblema de la ciudad, que oficia de entrada principal al perímetro fortificado, y a un tiempo remoto, que se goza en el presente. Pasando la Torre está la Plaza de los Coches, un triángulo presidido por la estatua de Pedro de He-redia, rodeado de soberbias edificaciones repletas de columnas y arcos, bajo los cuales antiguamente se comercializaban esclavos africanos. Un poco más lejos, el Portal de los Dulces hace honor a su nombre con una oferta de manjares caseros, y luego se ubica la ele-gante plaza de La Aduana, también seca y triangular, donde se levanta una estatua de Cristóbal Colón justo frente al antiguo asiento de la Real Aduana y la Alcaldía. Alrededor, como sucede en todo el casco, las casonas restauradas de estilo andaluz lucen aleros, floridos balcones (que com-piten entre sí cada año para ver cuál es el mejor), ventanales forjados en madera y coloridas fachadas que embriagan la vista a cada segundo. Es difícil decidir cuántas y cuáles cons-trucciones históricas visitar. Son muchas y cada una tiene su valía. En cualquier caso, nunca debería pasarse por alto el conjunto formado por la Casa del Premio Real, la excelsa Iglesia y Convento de San Pedro, erigida en el siglo XVII por los jesuitas y que guarda los restos de Pedro Claver, defensor y protector de los escla-vos. Desde la terraza del restaurante San Pedro, se ven a las familias pasar la tarde entre miles de palomas que regalan una postal tras otra. A pasos de allí se agrupa otro foco de inte-

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rés constituido por la Catedral, el arbola-do Parque Bolívar y el Palacio de la Inqui-sición. El templo se destaca por un altar de madera adornado con oro y por sus cúpulas que, al igual que las de San Pedro Claver, flotan en el firmamento. El parque muestra al libertador de a caballo vigilan-do a las parejas de enamorados, mientras los cocheros indiferentes alimentan a sus caballos y el resto de la gente, mucha gen-te, pasa la vida sin prisa. En una esquina el local de Colombian Mines Emerald reluce de un verde increíble, nacido de las minas de esmeraldas más grandes del mundo. El Palacio de la Inquisición, donde tuvo su sede principal el tribunal de penas del Santo Oficio español, muestra objetos de tortura utilizados en la época. En su interior, el Museo Histórico de Cartagena permite inmiscuirse en las memorias de esta fascinante ciudad.Desde allí se llega a la Plaza Santo Do-mingo donde brillan La Gorda Gertru-dis, escultura de Botero; el Claustro de Santo Domingo, la iglesia más antigua de Cartagena; y el Baluarte del mismo nombre, donde se consumen atardeceres violetas y mostazas que coronan un mar-co de ensueño.

Más allá de los baluartesEn un extremo de la ciudad vieja, junto a la Plaza de la Merced y entre los Ba-luartes de Santa Clara y Santa Catalina se encuentra el Cuartel de Las Bóvedas, o simplemente, Las Bóvedas. Antiguo refugio de pertrechos, víveres y tropas, hoy agrupa galerías de arte y almacenes de artesanía que ofrecen desde remeras

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de los tonos intensos de

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baratas para turistas hasta obras del nuevo arte colombiano que se cotizan en miles de dólares. Son más de 20 las bóvedas para explorar. La pausa recomendada es en el vecino Bar Etnia: elegante, relajado y con excelentes platos de cocina fusión. Para seguir absorbiendo la hermosura car-tagenera se puede llegar hasta el Castillo San Felipe de Barajas. Desde las Bóvedas, alcanza con parar un taxi para desandar el camino paralelo a las murallas. No hay que sorprenderse por la falta de reloj del taxi, aquí no se usan y el chofer cobrará lo mismo que cualquier otro de sus cole-gas sin que uno deba temer que le hayan aplicado una “tarifa para turistas”. El fastuoso Castillo construido en 1536 es la edificación militar española más grande del Nuevo Mundo, que seduce con su extensa entrada principal con una colorida vegetación, la plaza de armas, las garitas, un aljibe, inquietantes galerías subterrá-

neas, emplazamientos de artillería y hasta almacenes de pólvora.Desde sus atalayas, se aprecian las múl-tiples islas engarzadas por canales, a las que acarician las celestiales aguas del mar Caribe. A su lado, se prolonga la ciudad vieja en forma de corazón, acordonada por las lagunas del Cabrero, Chambacú y San Lázaro, así como también por la Ba-hía de las Ánimas, epicentro de la movida nocturna. Con kilómetros de murallas, baluartes y cañones apuntando, despren-de en uno de sus extremos, cual hilo de globo, una península estrecha, saturada por enormes rascacielos de entre veinte y cuarenta pisos, en la zona moderna de la urbe.Hasta aquí Cartagena muestra más de su perfil histórico que de su estirpe caribeña. Pero sin dudas son sus playas las que dan el balance perfecto al conjunto. Boca-grande, Castillo Grande y el Laguito son

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los barrios que invitan a disfrutar del sol y los hoteles. Los altísimos y delgados edificios con privilegiada vista a la Bahía de Cartagena y al mar dominan la escena en el área turística. Alojamientos de ca-denas internacionales o clásicos locales como Barlovento y Caribe; restauran-tes, casinos, discotecas y hasta algunos monumentos, como el Mirador de los Océanos. Como enlazando lo antiguo y lo moderno, aparece el barrio de Get-semaní, donde se gritó la independencia

un 11 de noviembre de 1811 y en el que habitaban los esclavos. Caminando sus callecitas, entre casas pintorescas, suele volverse un tanto difícil imaginar al ejér-cito español intentando la reconquista y sorprendido por numerosos patriotas que defendieron a ultranza la libertad alcanzada. Este episodio de la historia, remite a aquello de “ciudad heroica”, conferido por Simón Bolívar.En su arquitectura colonial, Getsemaní aglutina las atractivas iglesias San Ro-

que y Santísima Trinidad, y su plaza central, la inmaculada Iglesia de la Ter-cera Orden, el Parque Centenario y su obelisco. A pocos metros, el moderno Centro de Convenciones, donde se elige la Reina de la Belleza en un reconocido concurso de trascendencia nacional; el Paseo de los Mártires, coqueto boule-vard con fuentes y monumentos; y el Muelle de los Pegasos, concluyen este grato paseo, donde la historia y la cultu-ra son los máximos exponentes.

el mar caribe baña con igual suavidad las costas de las islas de ensueño y las fortalezas que resguardan a cartagena.

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Sensaciones junto al mar Las Islas del Rosario y Barú son en-claves perfectos para gozar su majes-tuosa naturaleza.A solo poco más de una hora por vía marítima, ofrecen exóticos y románticos paisajes distribuidos en 50 islas, 6 zonas de reserva ecológica y 18.000 hectáreas de parques marinos y submarinos. Las más frecuentadas son las del Parque Na-cional Natural Corales del Rosario. Este archipiélago agrupa más de una veintena de islas, en su mayoría privadas, que están rodeadas de las colecciones coralinas más hermosas de Latinoamérica. Su mayor atributo quizá sean sus aguas calmas, tur-quesas y transparentes. La Isla Grande es la mayor de las que componen el conjunto del Rosario, que también alberga lagunas internas, manglares, bosques húmedos y una frondosa vegetación poblada de gran variedad de fauna y flora. Aquí, las jornadas se viven en pleno con-tacto con la naturaleza, gozando de sus playas y degustando gastronomía exquisi-ta. El ceviche elaborado con pescados ape-nas capturados es una referencia ineludi-ble… y liviana. Porque un almuerzo típico incluye pez sierra frito, yuca, bananas y

papas fritas, arroz salteado con aceite de coco y manteca de ajo, todo regado con una cerveza lo más fresca posible. En esta zona es usual la práctica de buceo recreativo, que puede realizarse junto a expertos guías en medio de los arrecifes. En tierra, las caminatas surcan un entorno de una deslumbrante biodiversidad. Unos días allí regalan un relax incomparable, otra de las cualidades distintivas de Cartagena.También ofrece un edén la Isla de Barú, futuro polo de desarrollo turístico de Cartagena de Indias. Se puede llegar por tierra, cruzando el Canal del Di-que desde Pasacaballos (vía Mamonal), o por vía acuática atravesando la Bahía de Cartagena.Cuenta con hermosas playas de arenas blancas, aguas cristalinas y corales mul-ticolores que forman un entorno memo-rable. Todos estos dones hacen que sea un destino imperdible del continente y el mundo.Cartagena de Indias es la heroica, la que susurra historia desde sus paredes, pero también la que exhibe orgullosa su natu-raleza bellísima, la que se mantiene en el tiempo, conquistando el corazón de quien la visita.

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bajo el sol de el calafatesanTa cruz

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Esta pequeña villa aguarda la llegada de visitantes deseosos de explorar sus secretos más profundos. Paisajes inigualables, aire puro y, por supuesto, los glaciares son los componentes de la fórmula perfecta que el destino usa para seducir desde la intimidad de su primavera. POR DIANA SERRA

luego del paso de la nieve, los cálidos soles de la primavera comienzan a aparecer triunfantes en los cielos

patagónicos. Es ese momento en el que la región deja percibir libremente la inmensi-dad de sus paisajes. Cuando sus cerros, sus colores, su naturaleza, en fin su majestuosi-dad, abren paso a la aventura que, por cierto, nunca es menor en estas tierras.En la breve primavera patagónica, El Calafate recibe al viajero con una actitud más relajada, más íntima, como agradeciendo lo adecuado de la fecha: se palpa esa extraña y agradable sensación de saberse adelantado a un aluvión de turistas estivales, lo que genera una perfecta complicidad con el destino y su gente. Transi-tar las calles flanqueadas por pequeñas casas bajas de techos a dos aguas, calles por las que parecen andar solo sus habitantes; recorrer sus caminos entre árboles que retornan al verde mientras los últimos jirones del manto blanco

se resisten a partir; hasta lo más sencillo suele percibirse como un momento sublime.Asimismo, un sinfín de actividades aguarda al llegar, tanto para aquellos que viajan solos como para los que eligen hacerlo en pareja, en familia o con amigos. Trekkings, kayakismo, mountain bike, navegaciones, cabalgatas y fly fishing conforman solo algunas de las alterna-tivas para experimentar las maravillas de este destino, bajo el cálido sol de la Patagonia.

Monumentos de hieloAntes de que El Calafate fuera un destino turístico hecho y derecho, con un aeropuer-to pujante, varios hoteles por encima de las 4 estrellas y no menos restaurantes de los que da gusto recomendar, mucho antes, los glaciares ya eran un imán para viajeros de todo el mundo. Cuesta creer que no haya un arquitecto para tan majestuosa obra como es el Parque Nacional Los Glaciares, ubicado

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a solo 78 kilómetros de El Calafate. Ape-nas se ingresa al parque aparecen aquí y allá senderos que invitan a caminar entre bosques poblados de lengas, ñires y coi-hues; en las áreas más abiertas, a orillas del gran Lago Argentino, es posible observar choiques, cóndores y ostreros overos (que hasta la aclaración del guardaparque le parecen a uno simples gaviotas). Pero todo, incluso el lago, son aperitivos, simples entremeses para lo que viene des-pués, el plato fuerte si se permite la metáfora. El paseo predilecto es, qué duda cabe, tran-sitar las pasarelas para llegar hasta los mira-dores. Allí se obtiene una perfecta postal de la inmensidad transmitida por los cordones montañosos que abrazan el mágico mundo blanco, ese que resplandece ante la admira-ción de los visitantes, ese que deleita cuando aparece en escena el Glaciar Perito Moreno

(al que Moreno nunca conoció, por cierto). Hay cientos de formas de dar cuenta de su tamaño. Quizás una de las más eficaces sea imaginar una pared de hielo que tiene la al-tura del Obelisco y que se extiende a lo largo de toda la porteña Avenida 9 de Julio. Y eso solo sería el frente, porque hacia atrás, se ex-tiende por espacio de 30 kilómetros. Mucho más poética la descripción del más lírico entre los científicos y exploradores que anduvieron con Moreno. Dice Clemen-te Onelli en Trepando Los Andes (1904) que “doblando un pequeño cabo de roca granítica se presentaba el espectáculo más imponente del lago Argentino: el ventis-quero; algo así como una fachada de templo gótico enorme y de mil cúspides de mármol blanco; después, entre un estampido de cañones lejanos, se desprendían de la masa grandes trozos de hielo: las aguas parecían

humeantes, la montaña caída se sumergía y volvía después a la superficie para navegar lentamente hacia el Oriente”.Para sentir esa misma admiración, la cami-nata por las pasarelas frente a la mole helada es un primer paso, una aproximación se podría decir. Otra forma de conocerlo es a través de las navegaciones, que deparan una inolvidable experiencia. Se puede optar por diversos recorridos. Uno de los más tradi-cionales es el que parte del muelle Perito Moreno, a solo un kilómetro del mirador y, tras navegar por una hora, se aproxima hasta llegar frente a la pared norte del glaciar. Ahí se toma real dimensión de esos poco más de 60 metros de alto que tiene la parte del hielo que se mantiene sobre el agua. Asimismo, se puede emprender un reco-rrido diferente que parte de la Bahía “Bajo de las Sombras” para atravesar el Brazo

alojamientos diseñados con esmero y precisión estética convirtieron a esta antigua aldea patagónica en un destino sofisticado y romántico.

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Rico. En este caso, la navegación suele ser más extensa y la experiencia mucho más intensa. A bordo de la embarcación se puede apreciar el tránsito de los témpanos que se desprenden del glaciar Perito Moreno. Y esto, además de repetirlo el guía, lo com-prueba el pasajero cuando el barco detiene su marcha a la espera de que el glaciar dé su espectáculo más esperado: los maravillosos desprendimientos de grandes masas de hielo que golpean contra las aguas y provocan un sonido indescriptible. El Perito Moreno es la estrella por su caris-ma, por su ubicación y hasta por costumbre. Pero hay otros actores de lujo que podrían disputarle el cartel: nadie debería dejar de conocer el Upsala, ubicado sobre el brazo norte del Lago Argentino. Este se impone con su enorme tama-ño. Su frontis, más modesto, esconde en realidad la proxi-midad de un bello campo de hielo de 50 kilómetros de largo, que se aprecia aún más a medida que se avanza sobre el gran espejo de agua. Hay opciones para ir y volver en el día a cada glaciar, pero la experiencia indica que la mejor forma de pasear por este barrio helado es encarar un mini viaje de dos días, haciendo visitas a do-micilio. La salida se inicia en el puerto Punta Bandera, para luego dirigirse hacia el canal Upsala. Durante el trayecto los témpanos de hielo flotan aquí y allá, adornando las aguas. Una vez frente al glaciar homónimo será tiempo de disfrutar de un reconfortante almuerzo. Más tarde, la embarcación pon-drá proa hacia el glaciar Spegazzini, el más alto de todo el parque, con un frente que alcanza los 135 metros (para seguir con el mismo ejemplo, serían unos dos obeliscos, uno encima del otro). A los pies del gigante se disfrutan inolvidables atardeceres, en los que se puede vivir ese paisaje soñado, en el corazón del mundo blanco. Habrá en esta

excursión una noche fantástica en Punta Vacas, con cena campestre y un descanso poblado de estrellas como se ven pocas ve-ces. Son esos cielos que permiten entender de qué se habla cuando se menciona a la Vía Láctea. Al día siguiente, luego del desayuno y con el brillo del sol se emprende el regreso navegando el Canal de Los Témpanos, hasta llegar junto al glaciar Perito Moreno. Allí se produce una parada para luego seguir viaje nuevamente hasta Punta Bandera.Lejos de saturar, el hielo seduce y entonces aparecen esas ganas de ir más cerca, de cu-riosear en el corazón de los glaciares. Para lo cual existe el trekking sobre el hielo del Perito Moreno. Responsable de algunas de las mejores fotos del destino, es uno de los atractivos indispensables. Luego

de una caminata de veinte minutos so-bre la costa del lago, comienza la aventu-ra. Un entretenido ascenso de dos horas permite observar gr ietas , lagunas , sumideros y múl-tiples formaciones glaciológicas, ade-más del avistaje de flora y fauna que allí habitan. Estas carac-

terísticas se exhiben a lo largo de todo el recorrido para deleite de los aventureros que, sin respiro, las observan curiosamen-te, en compañía de los relatos de los guías de la excursión.

Naturaleza en su máxima expresiónSi se hace referencia a las actividades para realizar en El Calafate, no se puede dejar de mencionar la vinculación con la naturaleza y el aire libre, premisa número uno para la elección de este destino. Y sobre todo en esta época del año, en la que los rayos de sol comienzan a iluminar esta pequeña aldea patagónica, donde el paisaje no deja de sor-prender con su vegetación renaciente.Entre montañas las opciones son diversas. Las cabalgatas, por ejemplo, suelen ser un

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programa perfecto para disfrutar de un auténtico día de campo, o de un programa especial que incluye pernocte y hasta incluso una travesía de semana completa, para los amantes de los campamentos.Los recorridos dependen en general de la modalidad elegida por el visitante, pero en las típicas salidas, se atraviesan lugares como la Bahía Redonda y Punta Soberana, desde donde se obtiene una perfecta vista pano-rámica de toda la ciudad de El Calafate y el Lago Argentino. Otro de los atractivos que se llega a vislumbrar es la llamada “garganta del diablo”, inicio del brazo norte de dicho lago y por medio del cual se llega hasta el Glaciar Upsala.Pero entre todas, un clásico que siempre se impone es la salida al Cerro Frías. La excur-sión comienza a 11 kilómetros de la ciudad, atravesando una vega para tomar el faldeo del cerro. Aunque se puede hacer a pie o en 4x4, lo bueno de la cabalgata es que se siente

por un rato casi lo mismo que vivieron aque-llos grandes exploradores cuando relevaban la zona. Y desde la cima, las vistas de las Torres del Paine son impagables. Generalmente, y el cerro Frías no es la excepción, estos paseos se acompañan de almuerzos o meriendas regionales, según sea el caso, que permiten intercambiar inol-vidables experiencias con los lugareños que cortésmente agasajan a los recién llegados. También el circuito de estancias es uno de los favoritos por los turistas, deseosos de adentrarse en el mundo de las tradiciones. Generalmente, se ubican en las cercanías de la ciudad e incluyen un programa completo de hospedaje, gastronomía y actividades. Para los amantes del mundo silvestre, el avis-taje de aves suele ser uno de los imperdibles. Salidas de dos o tres horas a las cercanas laguna Nimez y Bahía Redonda suelen ser opciones tradicionales, y en caso de dis-poner de tiempo, se organizan salidas de

día completo hacia el Parque Nacional Los Glaciares. Las especies que se observan de-penden del sitio elegido, aunque en general se trata de flamencos, cauquenes, bandurrias y diversidad de patos.Las travesías 4x4 también forman parte de las alternativas al aire libre y en muchos ca-sos se vinculan con recorridos en mountain bike y trekkings. Tal es el caso de la visita al cerro Huyliche, con un ascenso en 4x4 y luego una caminata hasta llegar al refugio de montaña, donde se recibe a los visitantes con un almuerzo o merienda regional.Podríamos citar innumerables opciones para el regocijo en la estadía que concede El Calafate y aunque estas sean solo algunas de ellas, la propia experiencia determinará todo lo demás. Un perfecto equilibrio entre descanso y placer, en un marco de naturale-za inigualable, parece ser la receta justa para descubrir las maravillas que esconde este rincón de la Patagonia.

las pasarelas frente al glaciar moreno son el aperitivo perfecto para un menú pleno en opciones para vivir la belleza de los hielos.

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De las Cataratas del Iguazú a los Esteros del Iberá, ambientes originales y fascinantes atrapan al viajero con la exuberancia de sus paisajes y la riqueza de su fauna carismática e infinita. Unir estos rincones únicos es enamorarse un poco más de la Argentina. POR TOMÁS NATIELLO

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Hay en un vértice de Misiones un río que salta al vacío y en su caída llena el aire de nubes que no son tales;

un río que se exhibe amenazante, pero que recibe más visitas que cualquier otro sitio en la región. Muy cerca, hay en el corazón de Corrientes una tierra que no es tal; está ro-deada de la ilusión de una gran laguna que se muestra inabarcable pero es apenas profun-da; mienten, simulan, confunden las aguas y la tierra. Una vegetación tenaz, exuberante y diversa se entrelaza para soportar tales enga-ños, que no solo alcanzan a viajeros despre-venidos. Lobitos de río, yacarés, ciervos de los pantanos y carpinchos se han adaptado a lo largo de generaciones para reinar en este ecosistema especial e ilusorio. Los animales van de aquí para allá sobre los embalsados jurando que se trata de tierra tan firme c o m o c u a l q u i e r otra. Y sin embargo, son originales arcas de Noé que solo se enc uent ra n aqu í , navegando en los increíbles Esteros del Iberá. Sepa disculpar el lector la presencia de estos adjetivos, tan comunes en las notas de viajes. Nor-malmente tienen algo de exageración, pero cuando se habla de Iguazú o de Iberá los su-perlativos nunca sobran: increíbles, inabar-cables, fantásticos. Las Cataratas sorpren-den. Y captan la atención del mundo entero. Los esteros seducen. Y es extraño que no re-ciban tantos visitantes como sus vecinos em-blemáticos. Aunque quizás sea algo bueno ya que permite disfrutarlos con otra intimidad. Las aguas grandesEso es lo que significa Iguazú en mbyá gua-raní. Y son grandes no solo por el volumen de agua amenazante que se desploma en saltos como el San Martín, sino también por la ince-sante actividad que alimentan. El Parque Na-cional Iguazú y especialmente las Cataratas que le dan nombre son el principal atractivo

de Misiones y uno de los más importantes de Argentina. El parque, creado en 1937, cuenta con más de 67.000 hectáreas. Desde 1984 forma parte de la lista de Patrimonio Natural de la Humanidad de la Unesco. Pero lo que es más importante, en los últimos años y de la mano de una concesión de servicios, ha expe-rimentado un crecimiento en la calidad de sus propuestas más que saludable. El paseo por las pasarelas en las noches de luna llena es una propuesta fantástica; el tren ecológico, una manera de hacer más accesible el espectáculo natural; y los servicios de atención al viajero terminan de completar un combo más acorde con lo impresionante del paisaje.Pequeños lodges en medio de la selva, guías mbyá que se forman en una escuela pionera, grandes hoteles con casino y un free shop de

3.000 metros cuadra-dos hablan de una diversidad que se tras-lada de lo biológico a lo turístico. Concepto que se extiende por el breve territorio misionero de manera intensa. Desde Iguazú se puede comenzar un derrotero hacia el Sur en busca de nuevos horizontes. Con esca-las en parajes como El

Dorado, Montecarlo o Puerto Rico, la ruta 12 es la vía privilegiada para ponerse en marcha. Apenas 60 kilómetros antes de Posadas, la capital provincial, aparecen sitios como Santa Ana, donde las ruinas jesuíticas se destacan de inmediato. En el centro de interpretación se puede tener la suerte de que los anfitriones conviden unas tostadas untadas con algo difí-cil de identificar, que podrá ser dulce de rapa-dura, típica delicia misionera, elaborada a base de caña de azúcar. Descubrirlo sirve de excusa para ir hasta la base del cerro Santa Ana, donde la Familia De los Santos ya lleva tres genera-ciones extrayendo del áspero suelo productos que conjugan toda la dulzura de este paraje. El paseo no termina si no se explora el cerro, que antes de llegar a su cima de 332 metros sobre el nivel del mar, entrega un rincón fantástico

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como es el de la Ermita de la virgen, una inmensa gruta natural de roca basáltica que alberga un santuario.Solo unas dos horas de auto separan al viajero del punto central de este itinerario.

Cada cosa por su nombreIberá es un sistema de más de 1.300.000 hectáreas, la mitad de ellas de humeda-les, en el que conviven bañados, lagunas y esteros, que no son sinónimos. El bañado es una acumulación temporaria de agua poco profunda, que crece en épocas de lluvia y que luego se alimenta de fuentes subterráneas. Las lagunas no requieren mayor explicación; mientras que los esteros son depósitos de agua estancada que pueden tener hasta tres metros de profundidad y que están ro-deados de gran cantidad de vegetación acuática y pajonales. Sobre la superficie

de estos espejos tan distintos pueden aparecer (y de hecho lo hacen) los em-balsados, un entramado de vegetación flotante que conforma verdaderas islas. El tiempo hace que sobre las plantas se acumule tierra sobre la que se asienta otra vegetación mayor como laureles, ceibos, curupíes, totoras, pehuajós y espartillas que a su vez soportan a algu-nos cientos de especies de aves, además de otros animales. Estas formaciones exóticas definen a los Esteros del Iberá. Caminar sobre ellas es una de las activi-dades que el viajero está casi obligado a cumplimentar. Pescar, pasear en lancha, andar a caballo, sacar miles de fotos, des-cansar mirando el atardecer desde una hamaca paraguaya engrosan la lista de imperdibles. Está claro que todas y cual-quiera de ellas podría realizarse en otro lugar; nunca con los mismos resultados.

cruzar los esterosa caballo y con guías

locales es el mejor modo de vivir la naturaleza

a fondo.

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Ver para creer y entenderLos Esteros del Iberá ocupan el centro norte de Corrientes. Pero su punto neu-rálgico se ubica en la margen este de La Laguna Iberá, sobre la ruta provincial 41. Se trata de Colonia Carlos Pellegrini, que no es la ciudad más grande del sistema, pero si hubiera tal título sería su Capital Turística. Una vez allí, el primer paso

para tomar contacto con los esteros es visitar el centro de interpretación que se encuentra al borde de la laguna Iberá, a pasos de la colonia y al otro lado del puente (antiguo pedraplén) sobre el Paso Picada. Allí, los viajeros conocen a los guías que habitan la zona, quienes se convirtieron en custodios de la reserva brindando asesoramiento a los visitantes

y evitando la depredación. Alrededor de esta región tan singular hay debates ambientales varios, uno de ellos gira en torno a Douglas Tompkins, millonario norteamericano, ex montañista, creador de marcas como The North Face y Pata-gonia, ambientalista radical y uno de los nombres que se mencionan al hablar de extranjerización de la tierra.

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Quizás una buena manera de formarse una opinión pro-pia sobre el hombre y sus cosas sea visitar El Socorro o San Alonso, dos de las estancias turísticas que tiene en los Esteros. Son parte de las más de 200.000 hectáreas de su propiedad que, según reza el proyecto, serán donadas a la Argentina para que se conviertan en Parque Nacional, como ya se hizo en Monte León. Para ver en el lugar de qué se trata, qué mejor que aceptar la invitación a recorrer la región a caballo, encarando travesías de 3 ó 5 días de duración que permiten un contacto directo con los rincones más diversos de la reserva natural más grande del país. Nadar junto con el caballo para sortear aguas un poco más profundas es una experiencia inigualable. Por supuesto, estas salidas al campo ofrecen la oportunidad del avistaje de fauna a toda hora. Ac-tividad que merece un párrafo especial.Varios operadores turísticos ofrecen safaris nocturnos. En la noche la actividad es incesante y, en muchas ocasiones, la reacción de los animales frente al reflector es la inmovilidad. Para el visitante armado de una cámara de fotos el instante es mágico. Algo parecido puede ocurrir durante el día con algunas especies. Es fascinante la situación que se vive frente a un pequeño ciervo de los pantanos o a una corzuela. Estos animalitos bajos, de color marrón con matices pardos, tienen entre sus estrategias frente a las amenazas el quedarse quietos apostando a que no fueron vistos, a confundirse con el entor-no. Luego, cuando la posible amenaza hace el más mínimo ruido o movimiento, reaccionan con velocidad inusitada. Entonces, si uno se cruza con ellos y se mantiene expectante, es posible contemplarlos por largos minutos. Incluso es posible darse el lujo de observar (a distancia pru-dente) a los yacarés que de a ratos se tienden al sol para elevar su temperatura corporal. Ositos lavadores, lobos de crin, monos carayás o aulladores, gatos de los pajonales, zorros grises, zorrinos, hurones, comadrejas, liebres y vizcachas son parte de una lista interminable, en la que no faltan víbo-ras de cascabel o lagartos overos. Por eso cuando aparecen aquí frases trilladas del tipo espectáculo natural exuberante, no se exagera ni una pizca.

Diversión bajo las aguasEn el reino de las aguas y la biodiversidad no es extraño que la pesca ocupe un espacio importante. El sistema de Iberá incluye 60 lagunas de aguas claras en las que habitan dora-dos, sábalos, mojarras y pirañas. Galarza y Luna son dos de las más reconocidas y accesibles. Por ende, de las visitadas con mayor frecuencia. Pero el lugar de mejor pique de la re-gión es el límite sur-oeste del sistema, en las nacientes del río Corriente, así, sin ese en el final. Allí se pueden vivir duras batallas con el Salminus maxillosus, o más familiarmente Dorado, que es un salmónido muy apreciado por su com-

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batividad, su belleza y los portes que se lo-gran en sus capturas, a veces de hasta 10 ó 12 kilos. Está claro que, al igual que en los ríos y lagos de la Patagonia, aquí se pesca con mosca y la devolución es obligatoria. Dicen los que más saben que los embal-sados también son fundamentales para la pesca, porque debajo de ese entramado se ocultan los peces a la espera de sus presas. Allí los van a buscar los deportistas que castean en las orillas pobladas de juncos.

Es común ver que junto al dorado que picó hay cuatro, cinco o hasta diez ejemplares más curioseando, regalando sus reflejos amarillos y anaranjados. Esa suerte de acuario espontáneo también se disfruta practicando buceo. Sumergirse en la rique-za de la mayor reserva natural de Argentina completa así un círculo de alternativas para descubrir qué hay debajo de estas aguas bri-llantes; eso quiere decir iberá en guaraní y no parece estar equivocada la elección.

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Refugio alpino de lujo

Situado en Breuil- Cervinia, a los pies del Monte Cervino, a 2050 msnm y a unos 170 km del aeropuerto de Milán, sobresalen su entorno, junto a la hospitalidad y excelencia del servicio.El galardonado establecimiento dispone 38 habitaciones, decoradas de manera clásica y elegante, de las cuales 5 son suites, todas con balcón privado y vista de la vertiente sur del Monte Cervino. En esa montaña se encuentra la estación de esquí de Cervinia, que forma un único dominio esquiable con Valtournenche y con estación suiza de Zermatt, sumando entre todas más de 350 kilómetros de pista. El hotel cuenta además con bar, spa y beauty, sauna, baño turco, hidromasaje, gimnasio, y una piscina cubierta climatiza-da de aguas termales, ideales para el relax. También ofrece a sus huéspedes conexión a Internet Wi-Fi gratuita, y transfers sin cargo hasta la base del Monte Cervino, uno de los pocos que atraviesa la frontera ítalo-suiza.A todo ello, deben sumarse las bondades de su cocina, donde el restaurante “La Chande-lle” propone una cocina digna de los gour-mets más exigentes. Su menú consta de platos sencillos típicos de la cocina de montaña, preparados con productos frescos y de la máxima calidad. La carta de vinos, por su parte, ofrece las mejores

variedades del Valle de Aosta, del Piamonte, de la Toscana y de otras regiones de Italia. En Hotel Hermitage se disfrutan cada una de sus instalaciones, y la naturaleza alrededor, mediante actividades como esquí en invierno, o golf, tenis equitación,

caza, pesca, y rafting en época estival. Por todo ello, Hotel Hermitage es otro de los fantásticos destinos de Relais & Châteux, en todo el mundo, único en el mundo.

[email protected](005411) 4326-3861 /4328-4647

Las mejores playas del Caribe son las elegidas para la realización de la segunda edición de Aruba s in Style, un evento internacional que reúne diseñadores, celebridades y modelos del mundo, que presentarán las tendencias y no-vedades en materia de diseño e indumentaria. La isla se vestirá a la moda durante la semana del 3 al 6 de noviembre, con el apoyo del Go-bierno de Aruba y la Autoridad de Turismo de Aruba, patrocinadores junto con el Grupo de

Aruba Moda e IMG. Las actividades previstas incluirán una compra única en tiendas abiertas a todo el público durante el evento, y veladas exclusivas a las que se podrá acceder sólo por invitación. La intención es posicionar a Aruba como un destino turístico chic y sofisticado, ya que cuenta con hoteles y resorts de alta cali-dad, exclusivos restaurantes y posee un valor agregado, la calidez de su gente.

www.arubainstyle.com

Aruba se viste a la moda

marcando esTilo

Relais & Châteaux invita a disfrutar en Italia del mejor esquí, y de la tranquilidad del Valle de Aosta, en el Hotel Hermitage.

Novedades y tendencias en materia de diseño nutren la segunda edición de Aruba’s in Style, un evento internacional en el que se congregan modelos, diseñadores y celebridades para disfrutar del show, pero también de las mejores playas del Caribe.

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Detalles de alto nivel en Esquel

Rodeado de montañas nevadas y en el centro de Esquel, Las Bayas Hotel es una propuesta simple y lujosa al mismo tiempo. Sin estridencias, cuidando cada uno de los pequeños detalles que hacen la diferencia, este verdadero alojamiento boutique ofrece 10 amplias suites (1 Du-plex Suite, 3 Senior Suite, 6 Junior Suite) decoradas con estilo y delicadeza, ricas en luz natural y organizadas para ofrecer el máximo de funcionalidad. La misma idea guió la distribución en el lobby, un espacio indicado para relajarse y encontrarse con otros viajeros o con amigos; pero también para degustar desde un exquisito desa-yuno hasta las originales propuestas de cocina de autor regional que propone el restaurante de Las Bayas.La ubicación privilegiada del hotel y el asesoramiento permanente de su perso-nal ayudan a disfrutar, aún más, la extensa temporada de esquí del vecino Cerro La Hoya, que se prolonga hasta mediados del mes de octubre, combinando buen clima

y nieve de gran calidad. Asimismo, los pai-sajes inigualables del Parque Nacional Los Alerces y la histórica presencia del Viejo Expreso Patagónico, La Trochita, son excu-

sas excelentes para estirar la estadía en este hotel donde resulta sencillo sentirse como en el hogar, aún lejos de casa.

www.lasbayashotel.com

Las Bayas Hotel ofrece un espacio cálido, acogedor y enfocado en brindar servicios de excelencia.

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Distinción en el South Beach de Miami

El objetivo es implementar la comercializa-ción de las propiedades Green View Hotel, Lorraine Hotel, Ocean Reef Hotel, Riviere South Beach Hotel y Aqua Hotel en el ám-bito turístico de Argentina, a través de un selecto grupo de operadores. Cada uno de estos hoteles se distingue por alguna carac-terística especial; Green View, de 3 estrellas, posee un estilo Art Decó y 47 habitaciones, ubicado en una zona privilegiada frente al New World Symphony; Lorraine Hotel se levanta junto al mar y cuenta con 42 habita-ciones totalmente equipadas, e incluye ser-vicios de cafetería, minimercado, tienda de regalos, agencia de viajes, salón de belleza y restaurante. Continuando con la misma tóni-ca, Ocean Reef ofrece 36 cuartos y se ubica en la famosa avenida Collins, en la zona de bares y restaurantes, y a pocos metros del mar; mientras Riviere South Beach aporta a la oferta de alojamiento un estilo exclusivo con 21 habitaciones y un pequeño patio

tropical. Por último, Aqua Hotel, uno de los más prestigiosos de South Beach, permite un fácil acceso a la playa y es el favorito de aquellos que buscan vida nocturna en Mia-mi. Además ofrece 45 modernos cuartos con kitchenette y se convierte en galería durante

la feria anual Art Basel. Diferentes opciones en un mismo lugar, que permitirán vivir Mia-mi como la primera vez.

www.greenviewhotel.com | www.aquamiami.comwww.theoceanreef.com | www.rivierehotel.comwww.lorrainehotel.com

El reconocido Grupo Blue Road Hostels, que comprende cinco hoteles boutique en el área de South Beachde Miami, ha seleccionado a la firma UTG International Group Inc. como la empresa encargadade llevar adelante la comercialización, comunicación y RR.PP.

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Salta, la más linda

Entre las provincias del Norte Argentino, para los turistas Salta tie-ne bien ganado el título de “La Linda”. Un informe elaborado por la consultora Aresco para el Ministerio de Turismo de la Nación determinó que entre la población residente en el país que salió de vacaciones en algún momento entre el 15 de diciembre de 2010 y el 15 de marzo de 2011 (y que formó parte del proceso de decisión del destino turístico elegido) la provincia de Salta ocu-pó el 4º lugar en las preferencias a nivel nacional y el 1º cuando se analizan los números del Norte Argentino.Además, un importante porcentaje de los encuestados dijo que Salta es uno de los destinos que le gustaría conocer, ubicándo-se como el segundo entre las preferencias a nivel nacional. La elección de los participantes del estudio ha tenido que ver con la preferencia por el lugar, los precios, la calidad de atención, la disponibilidad de servicios y la habitualidad.

www.turismosalta.gov.ar

Un estudio encargado por el Ministerio de Turismo de la Nación determinó que es la provincia elegida por mayor cantidad de turistas a nivel regional y al cuarta a nivel nacional.

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El polo llegóa Chapelco

El escenario colmado de nieve del Cerro Chapelco fue el marco elegido para disputar la “Movistar Argentina Snow Cup”, un tra-dicional torneo de polo que se viene realizando en San Martín de los Andes desde hace algunos años. Este torneo es el único fuera del calendario europeo incluido oficialmente en el circui-to internacional del World Polo Tour (WPT) que se desarrolla en países como Suiza, Italia, Rusia y Francia. La apertura de la competencia por la Copa Aeropuertos Argentina 2000 fue entre los equipos Jaeger-LeCoultre y Provincia de Buenos Aires, para luego dar paso a la gran final por la Copa Movistar entre Movistar Polo Team y Nissan Polo Team. La estrella invitada fue el jugador actualmente rankeado número 1 del World Polo Tour, Juan Mar-tín Nero. El torneo se ubica en la categoría Snow Polo Tour junto al St. Moritz Polo World Cup on Snow, el Cortina D´ Ampezzo Gold Cup y el Club Snow Arena Polo World Cup Courchevel.

www.worldpolotour.com

El glamour del Snow Polo Tour volvió a brillar en San Martín de los Andes, donde se realizó la “Movistar Argentina Snow Cup”, una cita de nivel internacional que ya se ha convertido en un clásico para la región.

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GuÍa de servicios

Ubicado en el exclusivo barrio Al-tos del Sol de San Martín de los An-des y a solo 700 metros del centro de la ciudad, el apart Las Cumbres ofrece una completa estadía en medio de un maravilloso paisaje de montaña que depara excelen-tes vistas. Con una estructura de nobles materiales patagónicos, el complejo cuenta con 8 unidades íntegramente equipadas con cochera cubierta, TV con cable y DVD, deck con parrilla, Wi-Fi,

toilette y baño completo, habita-ciones completas con ropa blanca y deck con solarium. La propuesta consta de distintos tipos de caba-ñas, con vistas al cerro Chapelco y de estilo montaña, según los requerimientos de los visitantes. Cuenta además con ser vicios adicionales como contratación de excursiones, alquiler de autos y mountain bike, traslados, delivery de comidas, desayuno y servicio de lavandería.

APART & SUITES

LAS CUMBRESPirén 236 - San Martín de los Andes - NeuquénTeléfono: (02972) 422660 - 422661 / E-mail: [email protected]: www.lascumbresapart.com.ar

La ciudad de El Calafate es el es-cenario perfecto para la práctica de pesca deportiva debido a su amplia variedad de lagos y ríos. Es por ello que Calafatefishing comprende una de las mejores opciones al momento de contra-tar excursiones y salidas de pesca, debido a la experiencia y conoci-miento del lugar, del que forma parte desde siempre. La compa-ñía de guías especializados, per-mite la opción de realizar salidas

de medio día o de día completo. En el primer caso se trata de una excursión de 6 horas de duración con desayuno o merienda. El se-gundo caso abarca un total de 10 horas, y ofrece desayuno, almuer-zo y bebidas. Cualquiera sea la opción elegida, el servicio incluye traslados, guías expertos y equi-pos necesarios de spinning o fly cast. También se ofrecen salidas especiales con servicio completo con un mínimo de cuatro días.

SALIDAS DE PESCA

CALAFATE FISHINGAvenida del Libertador 1826 - El Calafate - Santa Cruz - ArgentinaTel.: (02902) 496545 - (02966) 15 621193 / E-mail: [email protected]: www.calafatefishing.com

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La calidez de una casa de montaña, la armonía de su cocina y el reposo de los vinos convierten a Reserva Merlot Restaurante & Sushi en un sitio único de San Martín de los An-des. Ubicado en pleno corazón de la villa neuquina, presenta un exclu-sivo salón con cava propia. Ofrece platos de alta cocina, logrando una fusión de gastronomía de autor, de la cordillera y del mundo. Su carta bilingüe -castellano-inglés- reúne cortes clásicos como ojo de bife y

bife de chorizo, carnes de caza, pas-tas artesanales, pescados y mariscos. También se suma a la propuesta el sushi con salmón rosado, trucha y otras variedades. Abierto durante todo el año, el espacio gastronómico deleita a los comensales en los horarios de almuerzo y cena y brinda comodi-dades como aire acondicionado, hogar a leña, cava, Wi-Fi, pago con tarjetas de crédito y atención con personal bilingüe.

RESTAURANTE

RESERVA MERLOTBelgrano 940 - San Martín de los Andes - NeuquénTeléfono: (02972) 428734E-mail: [email protected]

Con el encanto de las edificaciones propias de una aldea de montaña, esta hostería conserva las caracte-rísticas de su construcción inicial, allá por el año 1920, y que forma parte del Patrimonio Cultural de San Martín de los Andes. Actualmente, cuenta con un amplio servicio con dos habitaciones triples y siete do-bles, cuidadosamente decoradas y personalizadas cada una con un color diferente, sala de estar con TV, DVD y vista al jardín privado, parrilla,

estacionamiento cubierto, Wi-Fi y una exclusiva casa de té que permite degustar una inmensa variedad de manjares caseros, incluídos además en el desayuno buffet que ofrece a sus huéspedes. Recientemente se inauguró un salón de convenciones y la piscina para disfrutar del verano patagónico. Ubicada a pocas cua-dras del centro de la ciudad y a solo cien metros del lago Lácar, La Casa de Eugenia depara una inmejorable estadía, al pie de la Cordillera.

HOSTERÍA BOUTIQUE

LA CASA DE EUGENIACoronel Díaz 1186 - San Martín de los Andes - NeuquénTeléfono/Fax: (02972) 427206 / E-mail: informació[email protected]: www.lacasadeeugenia.com.ar

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GuÍa de servicios

Ubicado en el corazón de la Reser-va Natural que le da nombre, Ran-cho Iberá es un complejo diseñado para que los huéspedes disfruten de una estadía placentera en pleno contacto con la naturaleza. En su estructura cuenta con una cabaña con dos cuartos con baño priva-do, cocina totalmente equipada, living-comedor, garaje techado y parrilla, con capacidad para cinco personas. La otra unidad de Rancho Iberá es una posada con

capacidad para 21 huéspedes. El diseño es el de una antigua casa de campo, con amplia galería y sala de estar, al que se suman como-didades como piscina, solárium, TV satelital y servicio de Wi-Fi. Las habitaciones son de base doble y triple, todas con baño privado. El exclusivo servicio gastronomía se basa en la elaboración artesanal, tanto de platos de cocina regional como vegetariana, que se pueden acompañar de excelentes vinos.

POSADA - ECOTURISMO

RANCHO IBERACaraguatá y Aguará S/N - Colonia C. Pellegrini - Esteros del Iberá - CorrientesTeléfono: (03773) 422320 / (03773) 15412661-15412040-15400135E-mail: [email protected] / [email protected]

Jabirú Posada es una confortable residencia emplazada en torno a la belleza natural que proponen los Esteros del Iberá. Aquí se podrá disfrutar de una reconfortante estadía, en sus cuatro habitaciones, c o n c a p a c i d a d p a r a c u a t r o personas en cada una, totalmente equipadas y con baño privado. Su destacado Yacarú comedor propone además una amplia ofer ta gourmet, en la que se destacan platos como cordero y

asado criollo, entre otras comidas tradicionales y regionales . En cuanto a la carta de dulces, los postres, tortas y el clásico Lemon Pie completan la variedad de opciones. Asimismo, cuenta con su propia huerta orgánica de la que se extraen los alimentos para elaborar un menú natural. Si de disfrutar se trata, Jabirú brinda la opción de realizar actividades al aire libre, como cabalgatas, trekkings y paseos en lancha.

POSADA / COMEDOR

JABIRÚ / YACARÚCalle Yaguareté y Caraguatá - Iberá - CorrientesTeléfonos: (03773) 15413750 – 15419060 / E-mail: [email protected]: www.camaraturismoibera.com

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COMEDOR

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Con diez años en el mercado turístico correntino, Zoom Viajes propone una forma atractiva de recorrer lugares como Mercedes y Esteros del Iberá. A través de varios paquetes, que incluyen cab algatas p or los Pa lmares y la Colonia Carlos Pellegrini , trekkings, paseos lacustres, kayak, canotaje y paseos en carro, los visitantes podrán disfrutar de los atractivos turísticos que ofrece la vasta región litoraleña. Esta

agencia ofrece la posibilidad de contratar excursiones, traslados y reser vas tanto de ómnibus como de avión, que pueden ser combinadas junto a las diversas excursiones a modo de paquete. Asimismo, Zoom Viajes posee una unidad especí f ica , Iberá Spirit , que permite adentrarse exclusivamente en el mágico mundo de los Esteros del Iberá a t r avés d e d is t into t ip o d e actividades y paseos.

AGENCIA DE VIAJES Y TURISMO

ZOOM VIAJESJuan Pujol 865 - Mercedes - CorrientesTeléfono: (03773) 422320 / E-mail: [email protected]: www.iberaspirit.com.ar

Bajo el concepto de conservación y cuidado del medio ambiente, Irupé Lodge abre sus puertas al disfrute con una propuesta de turismo sustentable. Desde el año 2004, un staff especializado promueve entre los visitantes una nueva forma de descanso y relax a partir de proveer amenities biodegradables, y de detalles como la arquitectura que permite e l ingres o d e lu z natur a l ; e l autocultivo de frutas y verduras

que permite la elaboración de platos naturales y ar tesanales, entre otras modalidades. Irupé cuenta con habitaciones con baño privado y vista a la laguna, y una antesala con un fresco living y amplia biblioteca. En el caso de las superiores, cuentan con balcón privado y se emplazan entorno a la vegetación del parque. Posee además una piscina a orillas de la laguna y un restaurante donde degustar exquisitos platos.

LODGE

IRUPÉ LODGEColonia Carlos Pellegrini - Esteros del Iberá - Corrientes Teléfono: (3752) 438312 / (93773) 15 402193 / E-mail: [email protected]: www.ibera-argentina.com

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El exclusivo Havanna café deleita con sus tradicionales desayunos y meriendas, así como también con almuerzos o cenas que lo convierten en perfecto punto de encuentro. Ubicado en el centro de la ciudad de Corrientes, en el histórico edificio remodelado del Jo ckey Club, es te cá l ido espacio cuenta con una exquisita propuesta gastronómica y de servicios que lo posicionan como el sitio ideal para compartir con la

familia, en reuniones de negocios o entre amigos. Menúes ejecutivos, naturales y típicos, acompañados d e f r e s c o s j u g o s d e f r u t a s , gaseosas, cervezas y de una amplia gama de cafés, tanto de variedades tradicionales como especiales. Cálidamente ambientado, Havanna Café depara comodidad y confort para vivir momentos especiales, g a r a n t i z a n d o u n a a te n c i ó n personalizada por parte de su staff de profesionales.

CAFÉ BAR

HAVANNA CORRIENTESMendoza esquina H. Yrigoyen - Corrientes Capital - CorrientesTeléfono: (03783) - 230486E-mai: [email protected]

Murano ofrece un servicio de vanguardia en relax y belleza. E l es tab le c imiento combina técnicas de estética y salud al evaluar clínicamente a cada uno de sus pacientes para brindarles tratamientos adecuados a sus necesidades. Además de ser la primera empresa de Mendoza con sauna finlandés abovedado para sauna húmedo, dispone de un pulmón de relax al aire libre para realizar masajes descontracturantes.

El distinguido espacio cuenta con asesoramiento médico y nutricional e incluye propuestas en tratamientos faciales para todo tipo de cutis; tratamientos corporales con terapias como Dermopress Sequential, Termocel y Theramat, entre otras; y de estética corporal. Dentro del área de spa es posible disfrutar una variedad de masajes, hidromasaje, exfoliaciones, ducha escocesa, sauna, limpieza facial y belleza de pies y manos.

ESTÉTICA & SPA

MURANOPaso de los Patos 1197 - Dorrego - Guaymallén - MendozaTeléfono/Fax: (0261) 4319532 / E-mail: [email protected]: www.muranoestetica.com.ar