FUNDAMENTOS PARA UNA IGLESIA SALUDABLE XI

BASADO EN 1 DE CORINTIOS.

RECONOCIENDO LA IGUALDAD DE LOS CREYENTES IV

“no comparar a los ministros”

• Combatir la división era muy importante para Pablo. Recomendó que para fomentar la unidad: Poner los ojos en la Cruz. Conocer la verdadera sabiduría. Reconocer la igualdad entre los creyentes.

Explicó las características de un ministro. Resaltó las necesidades de la iglesia. Indicó que nadie tiene de que jactarse.

• En los versículos del 6-13 enseña a no comparar ni juzgar a los ministros.

• El hombre que no conoce a Dios se mide, se juzga, se gloria, y se enorgullecen de sus logros y dones.

• Como la iglesia de Corinto aún no era madura, se juzgaban entre ellos por su dones, y a los predicadores también.

• Los corintios eran orgullosos y jactanciosos.

• La causa de sus divisiones básicamente fue el orgullo, algunos se identificaban con Pablo, otros de Apolos y otros de Cefas.

• Estaban orgullosos de su sabiduría humana, y también de sus dirigentes.

• Ese orgullo mundano y carnal causó serias divisiones.*

4:6 Pero esto, hermanos, lo he presentado como ejemplo en mí y en Apolos por amor de vosotros, para que en nosotros aprendáis a no pensar más de lo que está escrito, no sea que por causa de uno, os envanezcáis unos contra otros. 7 Porque ¿quién te distingue? ¿o qué tienes que no hayas recibido? Y si lo recibiste, ¿por qué te glorías como si no lo hubieras recibido? 8 Ya estáis saciados, ya estáis ricos, sin nosotros reináis. ¡Y ojalá reinaseis, para que nosotros reinásemos también juntamente con vosotros

1 Cor. 4:6-8

1 Cor. 4:9-10

4:9 Porque según pienso, Dios nos ha exhibido a nosotros los apóstoles como postreros, como a sentenciados a muerte; pues hemos llegado a ser espectáculo al mundo, a los ángeles y a los hombres. 10 Nosotros somos insensatos por amor de Cristo, mas vosotros prudentes en Cristo; nosotros débiles, mas vosotros fuertes; vosotros honorables, mas nosotros despreciados.

1 Cor. 4:11-13

4:11 Hasta esta hora padecemos hambre, tenemos sed, estamos desnudos, somos abofeteados, y no tenemos morada fija. 12 Nos fatigamos trabajando con nuestras propias manos; nos maldicen, y bendecimos; padecemos persecución, y la soportamos. 13 Nos difaman, y rogamos; hemos venido a ser hasta ahora como la escoria del mundo, el desecho de todos.

EL TEMA DE HOY:NO COMPARAR A LOS MINISTROS

1.- EL EJEMPLO DE PABLO Y APOLOS

• Pablo había utilizado tres ilustraciones: La de los agricultores (3:6-9). Yo Planté, Apolos

regó. El crecimiento lo dio Dios. La de los constructores (3:10-15). Yo puse el

fundamento otro edifica encima.

La de los siervos-mayordomos (4:1-5).

Servidores de Cristo. Sub-remeros, los esclavos que iban en la barriga del barco que sirven al señor y capitán del barco.

Administradores. Esclavos que supervisaban la propiedad de su amo y señor.

• Pablo había aplicado esas figuras para si mismo y para Apolos para enseñar a los creyentes que no deben ser orgullosos ni arrogantes.

• Ellos sabían quienes eran y conocían su vocación. Eran siervos fieles y mansos, no orgullosos. Eran administradores confiables y sumisos, no arrogantes.

• LOS DE LA IGLESIA DE CORINTO DEBERIAN APRENDER DOS LECCIONES :

① A LOS MINISTROS, LOS CREYENTES NO DEBEN COMPARARLOS NI JUZGARLOS NI ELEVARLOS POR ENCIMA DE LO QUE DICEN LAS ESCRITURAS.

• Las Escrituras dicen que los fieles siervos de Dios deben recibir honor y respeto apropiados:

Debemos tenerlos en mucha estima y amor por causa de su obra. (1Ts. 5:12)

Que “Sean tenidos por dignos de doble honor”, (1Tm. 5:17)

• Deben ser honrados solamente dentro de los límites de las Escrituras. Se convierte en exaltación cuando pensamos y actuamos más de lo que está escrito.

• Algunas personas en la iglesia de Corinto estaban juzgando a algunos ministros como los mejores servidores de Dios y más capaces que otros.

• Las comparaciones dan inicio a la formación de grupos, generando después rivalidades, terminando dividiendo a la iglesia.

• Estaban juzgando y elevando a ciertos hombres por encima de otros.*

• Lo que estaban haciendo era provocar divisiones en la iglesia.

② LOS CREYENTES NO DEBEN “ENSOBERBECERSE” UNOS CONTRA LOS OTROS.

• Un creyente puede verse más identificado por la predicación y la vida de un ministro en particular. Esto puede ser comprensible.

• Es pecado cuando se comienza a pensar que ningún otro puede predicar o enseñar como su ministro preferido.

• Las personas que elevan a un ministro por encima de otros se “envanecen”.

Creen que han recibido verdades que otros no recibieron.

Creen que son capaces de clasificar a los servidores de Dios y juzgarlos por sus dones como oradores, maestros y ministros..

• Envanecer es inflar. El que juzgar a los ministros está inflado. No significa nada para Dios.

• Cuando la gratitud y la lealtad a los ministros están contaminadas por el “orgullo” y el “engreimiento”, la iglesia queda fracturada y debilitada.

• Lo que Dios quiere que sea un medio de unidad, Satanás lo convierte en un medio de división.

• Los corintios habían cruzado la línea y hoy en cualquier momento puede pasar lo mismo en las iglesias.

2.- TODAS LAS BENDICIONES PROCEDEN DE DIOS, NO REPRESENTAN MOTIVO DE

ORGULLO

• El Apóstol formula tres preguntas con el propósito de estimular a los corintios a reflexionar sobre la gracia de Dios en sus vidas.

• Quería que se dieran cuenta que todos los dones espirituales que se jactaban son dones que proceden del amor y la misericordia de Dios

• Quería enseñar que Dios no nos da lo que nuestras infidelidades y rebeliones merecen; sino bendiciones que que no merecemos.*

① ¿QUIEN TE DISTINGUE?

• ¿Por qué piensas que estás por encima de los demás creyentes?.

• ¿Qué te hace pensar que tu tienes suficiente conocimiento y crecimiento para juzgar a los ministros de Dios?.

• ¿Qué te hace pensar que tu grupo es mejor que el de los demás?.

• ¿Que te da derecho de creer que recibiste más que otros porque porque lo escuchaste de tu ministro preferido?.

• ¿Qué te te hace pensar que eres más espiritual que otros?

• ESTAS HECHO DEL MISMO MATERIAL QUE LOS DEMAS Y HAS SIDO REDIMIDO POR EL MISMO SEÑOR. NO ERES MEJOR. NO TIENES DE QUE GLORIARTE. SOLO TE DISTINGUE TU ORGULLO.

② ¿O QUE TIENES QUE NO HAYAS RECIBIDO?

• ¿Cuál es tu don espiritual? ¿Lo creaste tú o te fue dado por Dios?

• ¿Eres maduro? ¿Te ganaste la madurez o Dios por su gracia te cultivo?

• ¿Tienes entendimiento espiritual?.¿Proviene de Dios o tu lo obraste?

• ¿A los ministros? ¿Los escogiste tú o los escogió Dios?

• ¿Los dones de los ministros? ¿Se los diste tú o les fueron dados por Dios?

• ¿Qué tienes o posees que no hayas recibido? ¿Vida? ¿Cuerpo?¿Una mente? ¿Un espíritu? ¿La capacidad de pensar, obrar, jugar y vivir? Etc.

• NO TENDRIAMOS NADA SI EL SEÑOR NO LOS LO HUBIERA DADO. SOLO TU ORGULLO TE HACE PENSAR QUE QUE LO CONSEGUISTE TU.

③ ¿POR QUÉ TE GLORIAS COMO SI NO LO HUBIERAS RECIBIDO?

• Ahora que recuerdas que todo lo que posees es porque Dios te lo ha dado ¿Por qué te jactas como si fueses merecedor de ellas o que las hubieses creado?

• ¿Por qué te comportas como si fueses superior a otros creyentes?

• ¿Por qué te haces pasar por Señor como si tuvieras el derecho de ocupar el lugar de Dios y juzgar a sus ministros y a su pueblo?

• TODA LA BASE PARA TU ENGREIMIENTO NO ES OTRA COSA QUE UNA FABRICACIÓN DE TU PROPIO ORGULLO. NADA ES MAS ENGAÑOSO QUE EL ORGULLO. ESTAMOS INCLINADOS A CREER CASI TODO ACERCA DE NOSOTROS MISMOS SI ES FAVORABLE.

3.- EL PECADO DE ORGULLO EN LOS CORINTIOS

• La abundancia de bendiciones materiales y espirituales que recibieron los llevó a una apreciación equivocada de quienes eran.

• En vez de humillarse se inflaron de orgullo y llegaron a considerarse superiores a otros.

• Se comportaban como si la vida de cada uno de ellos fuera plena, completamente llena y saciada..

• Actuaban como si fuesen maduros y perfectos, y como si tuvieran el derecho de enjuiciar al pueblo de Dios.

• Creían que no les faltaba nada, don, experiencia, conocimiento, entendimiento espiritual.

• Actuaban como si estuviesen reinando como reyes en la iglesia de Dios.

• Pablo los confronta y les dice que ¡Ojalá! fuera el tiempo de la coronación para todos ellos.

• Si estarían en el milenio, habría verdadera gloria, el Señor haría partícipes a todos.

• Y estarían de verdad reinando con Cristo, y con Pablo y Apolos.

• Esa no era la realidad. Los creyentes aun no estaban gobernando, por tanto no tenían ninguna razón para gloriarse.

4.- Los verdaderos ministros son exhibidos como postreros,

• Pablo dice que los verdaderos ministros son exhibidos como postreros.

• Exhibir significa ser visto o expuesto. Ilustra a los gladiadores condenados cuando se les llevaba a la arena. *

• En el gran desfile romano al que se refiere Pablo, él y los otros apóstoles van los últimos como un gran final. Como sentenciados a muerte

• Pablo se consideraba como uno de los cautivos, sentenciados a muerte.

• La vida de un verdadero discípulo es una vida de servicio, y la vida de servicio es una vida de humildad, una vida que intimida tanto al mundo que lo pone en peligro de muerte. .

• En el milenio los apóstoles reinarán con Cristo. Cuando ministraban en la tierra eran un espectáculo al mundo, a los ángeles y a los hombres.

• Los ridiculizaron, los escupieron, los encarcelaron, los azotaron, se burlaron de ellos, y , los trataron como delincuentes. Ellos eran entonces los últimos, pero en el reino venidero de Cristo serán los primeros.

4.- Los verdaderos ministros sirven sin importar el costo.

• En el mundo aún piensan que el evangelio es locura y que sus ministros son insensatos.

• Muchos quieren gloria, honor, reconocimiento mundano. Por que aman la sabiduría humana. Piensan que los predicadores son charlatanes.

• Lo cierto es que el verdadero ministro de Dios aguanta ser considerado insensato por amor a Cristo.

• Los apóstoles no solo eran espectáculo e insensatos, sino que también sufrieron por amor de Cristo:

En ocasiones no tenían comida ni agua.

Eran abofeteados y golpeados. No tenían casa.

La iglesia a veces no les remuneraba. Habían trabajos seculares.

Se les recriminaba y vilipendiaba, pero ellos bendecían.

Eran perseguidos, pero lo sufrían.

Se les difamaba o calumniaba, pero ellos rogaban o exhortaban y le hacían frente a la conducta calumniadora con bondad.

Se les tomaba por el desecho (rechazo, residuo, la basura) y la escoria del mundo.

• Si cada uno de nosotros predicara, enseñara y viviera seriamente la Palabra de Dios, el mundo se sentiría ofendido.

• El mundo se resiste a estar bajo la luz de esa verdad. Por eso perseguirán, y destruirán a todos los que la promueven y vivan el evangelio.

• No somos escoria ni basura a los ojos de Dios, pero somos siervos y mayordomos. Por eso no debemos jactarnos de nada, ni ante el mundo ni ante Dios.

• Por eso el Señor desea que sus siervos tengan un espíritu humilde y obediente que les proporcionará recompensa y gloria.