PROPUESTA PARA LA TRANSFORMACION DEL DISTRITO DE PANAMA del candidato a Alcalde MIGUEL ANTONIO BERNAL

Someto a ustedes, mis conciudadanos del Distrito de Panamá, de sus 21 corregimientos con sus comunidades, las bases de mi propuesta como CANDIDATO a ALCALDE del DISTRITO de Panamá para el 2009 – 2014.

Soy un hombre público, la gran mayoría de ustedes me conoce, sino personalmente, porque me han escuchado o tienen referencias a través de otros. Buenas o malas o indiferentes pero saben quien soy, que pienso y como actúo. No se trata de un desconocido, improvisado ni indolente con los problemas que todos sufrimos.

Les presento a consideración lo que quiero hacer junto a ustedes. Como un AlcaldePrevisorDe consulta y participaciónIncluyenteEjecutorObligado con la transformación del DistritoProactivo y no un simple observador

Soy el candidato a Alcalde independiente. Mi postulación por un partido político no está sujeta a compromisos ni atadura alguna. Es consecuencia del sistema electoral excluyente que a los panameños nos ha sido impuesto coartando el derecho constitucional a la libre postulación.

La transformación de nuestro Distrito, requiere que elijamos Alcalde y representantes cuyos intereses respondan exclusivamente a la atención de problemas y necesidades de sus comunidades y habitantes. Seguiremos perdiendo si votamos por aquellos que deben responder al Ejecutivo y al partido que los eligió. Seamos conscientes de ello al momento de votar. Les invito y llamo a que rompamos con el modelo de administración municipal invisible, indiferente, de hacer nada, clientelista, de corrupción.

No soy ni mago, ni el salvador. Pero no duden en que si cumplo lo que me propongo y en lo que me comprometo.

MIGUEL ANTONIO BERNAL VILLALAZ NO ES HOMBRE DE DOBLE DISCURSO. TENGAMOS UNA ALCALDIA PARA TODOS

A lo largo de los últimos 30 años he estado vinculado al quehacer político nacional. En ello he recurrido exclusivamente a la palabra para mis constantes observaciones con respecto a temas cruciales de la vida nacional. Nunca ha creído ni convocado a las soluciones violentas o fuera de las estructuras democráticas de la sociedad. Soy de altas convicciones democráticas, persistente e incansable defensor y luchador por alcanzarla y perfeccionarla. De la verdadera democracia que

conserva como componente principal la participación de la población en las decisiones y, en la ejecución y gestión de éstas.

Los progresos de la democracia no se pueden medir exclusivamente por el derecho a elegir y ser elegido y por los resultados electorales. Hoy en día en el mundo que nos toca vivir, la democracia tiene que ser sobre todo participativa y cada vez más a favor del ciudadano, y no enmarcada exclusivamente en criterios electorales, que es lo que lleva a la equivocación de algunas personas sobre todo en el terreno de los partidos políticos, al considerar que ellos son los únicos vehículos de expresión y los únicos portaestandartes, para que en Panamá exista una democracia.

El pueblo panameño siempre pidió, de una manera u otra, durante el período dictatorial, democracia, justicia y libertad. Esas eran las voces que siempre permanecieron como una protesta constante, aunque muchas veces no afloraba, por razones harto conocidas. Después de la invasión yo creo que ese clamor continúa y el panameño sigue pidiendo democracia, justicia y libertad, pero ya dentro de un contexto, en el cual, podríamos decir que, el progreso se da sobre todo en que ahora el panameño tiene un mayor y mejor conocimiento de lo que está sucediendo a su alrededor.

La experiencia adquirida a través de nuestra participación activa y directa en la discusión y elaboración del documento VISIÓN 20/20 (firmado por los representantes de los sectores organizados de la sociedad panameña en mayo de 1998), constituyó el punto de partida para nuestra decisión de presentar nuestra candidatura a la alcaldía capitalina en 1999, animados por el propósito de poder llevar a la práctica del nivel municipal, los contenidos aprobados en el citado documento con apego a nuestros principios y convicciones de lucha por la democracia. En esas elecciones obtuvimos 101 mil votos, quedando en segundo lugar y superando a la entonces alcaldesa Mayín Correa.

En aquella ocasión como candidato independiente a la Alcaldía de Panamá, aspire por la libre postulación que consagra la Constitución Política de Panamá y el Código Electoral vigente al momento. Pero el Tribunal Electoral recurrió a todas las argucias logrando impedirla. Fue entonces que el partido panameñista, la Señora Mireya Moscoso me ofreció la postulación de su partido, cosa que acepté, cosa que yo reconozco y reconocí públicamente en su momento. Mi postulación fue consignada y respaldada por varios de los partidos integrantes de la alianza de oposición, sin compromisos ni renuncia a mi condición de candidato independiente.

Bajo circunstancias no sólo invariables sino por el contrario agudizadas por las restricciones introducidas por la convicción exclusivista electoral para los partidos políticos que habita en la mente de los magistrados del Tribunal Electoral, la dirección del Partido Liberal y en especial de su presidente Joaquín Franco III me ofrecen la postulación a Alcalde para el Distrito de Panamá, sin condiciones ni compromisos, admitiendo la condición de candidato independiente. Allí están las diversas declaraciones del Doctor Franco y la resolución de postulación que dictan los liberales. Igual ofrecimiento han hecho a otros aspirantes a diputados y representantes. Por su parte, el Partido Unión Patriótica, por decisión unánime de su Junta Directiva y luego por votación secreta de su Comisión Política Nacional y por unanimidad de su Directorio Nacional, aprueban también, sin compromisos ni requisitos, mi postulación a Alcalde para el Distrito de Panamá. Las declaraciones y escritos de los principales dirigentes de Unión Patriótica corroboran, especialmente a través de su presidente José Raúl Mulino, la voluntad de autonomía de esta agrupación política de postular a un candidato independiente de oposición, como este servidor. Ojalá esto de hoy y de 1998 contribuya a liberar nuestra “democracia secuestrada” , golpeando en la mentalidad y procederes de los magistrados electorales y de muchos políticos, tanto dirigentes como militantes de los respectivos partidos. Ella es una vía que posibilita la ampliación y

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perfeccionamiento de la democracia panameña en camino a su forma superior: la democracia participativa.

Miguel Antonio Bernal Villalaz concurre por una segunda vez a los comicios electorales del 3 de mayo de 2009 como CANDIDATO INDEPENDIENTE postulado por el Partido Liberal y por el Partido Unión Patriótica.

El mismo Bernal o Miguel Antonio, como prefieran. Sin ataduras y con mayores compromisos con mis connacionales, con la democracia con participación, con la justicia y la libertad, por la ciudad y contra la pobreza, por una ciudad en la que sintamos satisfacción por vivir; solamente. La situación encontrada y descrita resultante del ejercicio académico en que participamos y queda reflejada en la VISION NACIONAL 2020, ya referenciada, transcurridos dos periodos presidenciales de partidos diferentes, tenemos que afirmar que ha variado exageradamente poco y en la mayoría de los problemas encontrados las soluciones han sido ninguna. Vale refrescar la memoria en que pese al esfuerzo continuado con posterioridad, para procurar los cambios constitucionales que el país reclama, estos fueron burlados por los arreglos del gobiernos saliente y el entrante que propiciaron y lograron burlarlas aspiraciones nacionales con sus reformas constitucionales de 2004 a través del antidemocrático método de las dos asambleas del Legislativo.

A pesar de que todos los partidos políticos consignaron con su firma la VISION y las metas y objetivos operacionales de cada una de ellas el esfuerzo ha quedado como otro documento de archivo y tal vez de biblioteca. Autodeterminación, institucionalidad democrática, desarrollo económico, ética y equidad, sostenibilidad. Esos fueron los grandes temas bajo los que se abordaron la situación, problemas y vías para atenderlos. De hacer tan sólo un sencillo ejercicio de reflexión comparativa al 2009, encontraremos que sólo tendríamos que cambiar el 2020 por el 2030 y emprender el accionar que manteniendo el sistema partidocrático vigente al final tendremos resultados en nada diferentes y, muy por el contrario, agravados por el acontecer mundial que nos viene acosando. Al planeta le esperan unos años muy difíciles. El mundo vive la convulsión de una crisis alimentaria, una crisis energética, una crisis del medio ambiente y de una crisis económica y financiera.

Con relación a la crisis económica-financiera el 8 de diciembre de 2008 Dominique Strauss-Kahn, director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), expresó: “El 2009 será un año duro, nosotros en el FMI vemos las posibilidades de salir de la crisis a finales de 2009 o a principios de 2010”.

Contrario a tal apreciación la mayoría de los mas connotados economistas mundiales han planteado que “no hay perspectivas válidas para pronosticar su duración tampoco formulaciones concretas del que hacer y como para enfrentarla con éxito”. Strauss-Kahn agrego afirmó que “no hay posibilidad que ningún país, en ninguna parte del mundo, pueda escapar de esa crisis”. Añadió que las consecuencias de la crisis pueden ser especialmente “duras” para las personas de bajos ingresos. Considera que los precios de los productos alimenticios continuarán aumentando en los próximos meses.

La economía estadounidense y de los países de Europa sigue debilitándose al avanzar el 2009. China ha comenzado a tomar medidas dado que su inserción en el comercio mundial no la eximirá

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de los efectos. La globalización neoliberal del libertinaje del mercado y la especulación ha iniciado a cobrarnos con consecuencias insospechadas.

La crisis económica ya está afectando a América Latina: a los países centroamericanos en disminución de remesas, el alza de precios de la canasta básica y en la disminución de las exportaciones; a los sudamericanos en la disminución de los precios de bienes de producción estratégicos, como el petróleo y el cobre, además de los anteriores.

La Organización Internacional del Trabajo-OIT ha señalado en reciente informe que en la región el desempleo urbano en el 2009 entre 1.5 y 2.4 millones. Con ello el número de desocupados lo calculan de 17.2 a 18.1 millones.

Señala también la OIT en su informe que: “La tendencia a una menor generación de empleo se intensificaría en 2009, ya que en respuesta a la crisis financiera es probable que muchas empresas reduzcan sus costos operacionales y de mano de obra, e incluso difieran sus inversiones, Al mismo tiempo se proyecta una mayor participación laboral, como resultado de una incorporación de mano de obra secundaria, a consecuencia de una reducción de ingresos familiares por la pérdida de empleo de los jefes de hogar”, Otro hecho de incidencia en el incremento del desempleo será: “la interrupción del flujo migratorio al mercado laboral de los países desarrollados y el retorno de migrantes lo que presionarían aún más los mercados laborales, sobre todo en el segmento de mano de obra no calificada y de bajos ingresos”..

En Panamá, el sector de la construcción comenzó a verse afectado por la crisis económica mundial. Según la Cámara Panameña de la Construcción (CAPAC) aumentó a 15 meses el tiempo necesario para poder vender una vivienda. Michael Fernández, director económico de la CAPAC, declaró: “Es el indicador más alto de los dos últimos años. En 2007, la media era de 10 meses”.

En septiembre, el valor de los permisos de construcción aprobados para el distrito de Panamá disminuyó un 41.6% con relación a septiembre de 2007, o sea, casi la mitad. Con relación a cuando.

En reciente evento nacional, el economista Marco Fernández, de INDESA, la reputada y habitual consultora de referencia gubernamental y empresarial expresó que no es cierto que Panamá “está mejor posicionada para enfrentar la crisis”, que según sus predicciones durará dos años.

¿Cuántos desempleados habrá en la capital el Distrito de Panamá cuando la crisis nos afecte con toda su fuerza? La clase media y los pobres no tienen los ahorros necesarios para protegerse de la crisis. Es por ello que se requieren activas políticas públicas de protección en donde colaboren las empresas y la sociedad, no sólo por una cuestión de justicia sino para evitar la inseguridad.

Según el PNUD, el 76 por ciento de la población panameña no participa en organizaciones que buscan las soluciones a los problemas socio-económicos que los aquejan.

El Informe Nacional de Desarrollo Humano 2007- 2008 confirma que las fallas en el desempeño y la baja utilidad de las instituciones fortalecen el ‘juega vivo’, el clientelismo y la corrupción. El 81 por ciento de los encuestados afirma que se inscriben en un partido político para “obtener beneficios personales” o “un empleo”, en tanto, un 6.3 por ciento lo hace para seguir sus ideales.

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Todo ello son algunas referencias del diagnóstico o visual de Panamá en el contexto nacional. Pero en lo que el Distrito de Panamá retiene un alto porcentaje de esas realidades y afectaciones puesto que es en el que esta concentrada mas de la mitad de la población y es centro y corazón de la economía. Todos nosotros conocemos por vivencia propia estas y otras verdades.

Por ello, vamos a trabajar por lograr una ciudadanía en la que primen los valores cívicos y morales, mediante una estrategia participativa y coordinada de acciones preventivas sostenibles y con una alta participación de la comunidad.

Más que nunca antes, es necesario adoptar estrategias preventivas y de no sólo de control, para cambiar la vida en las comunidades y los barrios.

Como somos juristas comprometidos con Panamá, la Alcaldía estimulará la convivencia social, con un alto respeto por la Ley, las personas y lo público. Propugnaremos la equidad y la cohesión, la convivencia y el bienestar, la proximidad al ciudadano y al territorio, el diálogo y la paz, el progreso y las oportunidades como valores colectivos para todos sin exclusiones.

Vamos a trabajar para que los grandes temas del Forum Universal de las Culturas de 2004 -paz, convivencia y sostenibilidad-, sean una realidad en la Ciudad de Panamá. Vamos a trabajar para promover una cultura de la solidaridad.

Para ello llevamos a la consideración de los conciudadanos del Distrito de Panamá nuestra Propuesta de Gestión para la Transformación del Distrito de Panamá, al que esperamos sus observaciones y podamos así incorporarlas a partir del 1 de julio de 2009 una vez electo Alcalde.

Juntos tenemos que iniciar el proceso de rescatar la autonomía municipal lo que exige la desconcentración y la descentralización todo lo que corresponde como responsabilidad a los municipios.

PROBLEMAS DEL DISTRITO: La urgencia de la Planificación y la intervención como necesidad para las soluciones.

Consideramos que los principales problemas que tiene la Ciudad de Panamá son:

La inseguridad ciudadana.

Altos precios de la canasta básica.

El desastre del transporte público.

La deficiente recogida de basura.

Un sistema educativo mal pensado y peor ejecutado.

Un ineficiente sistema de salud.

La corrupción y la ausencia de transparencia y rendición de cuentas.

La infraestructura inadecuada y mal utilizada.

Un suelo mal distribuido.

La contaminación ambiental, incluyendo la auditiva y la visual (vallas y anuncios por todas partes).

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Los cables aéreos.

La insuficiencia de aceras, árboles, parques y otros espacios públicos.

Ausencia de áreas deportivas y culturales.

El incumplimiento de las leyes y los reglamentos.

La falta de nomenclatura.

La no conservación de edificaciones de valor histórico.

La atención de muchos de estos problemas y de otros, por disposición jurídica han sido excluidos de la competencia de los municipios. Además, los Alcaldes, en su mayoría a efecto de no generalizar, han sido ciegos y mudos observadores procediendo al igual que Pilatos. De acuerdo a nuestro modelo administrativo el Organo Ejecutivo nacional concentra en sus facultades y atribuciones la competencia por la prestación de los servicios público de educación y salud. Los proyectos viales tanto de construcción como de mantenimiento y reparación los decide de por si el ministerio de Obras Públicas. Es inexistente en nuestra tradición histórica siquiera la consulta y la supervisión con y por las autoridades municipales. Mas grave aún es el que responsabilidades por esencia de los municipios le han sido secuestradas por instituciones nacionales; ese es el caso del agua, el transporte, el tránsito y circulación vial, el urbanismo y como algo incompresible hasta los permisos y licencias para el establecimiento de negocios comerciales y la explotación de recursos naturales..

Por ello tendremos desde el inicio y con persistencia que emprender la tarea de luchar para erradicar la concepción centralista y lograr que se nos de participación en las decisiones de las instituciones nacionales en lo que respecte a nuestro distrito. Mientras que junto al resto de los municipio y ciudadanos logramos una real ley de descentralización de los gobiernos locales.

Daremos vigencia plena a la atribución que nos señala la Constitución Política de la República de Panamá en el artículo 243, numeral 4:

“Promover el progreso de la comunidad municipal y velar por el cumplimiento de los deberes de sus funcionarios públicos.”

Vamos a insistir en nuestra participación en todos y cada uno de los proyectos y acciones que las instituciones nacionales emprendan en el Distrito de Panamá.

La injustificable realidad de que a nivel nacional nuestro país adolezca de la ausencia de objetivos y, metas nacionales y sectoriales. El que la planificación sea función, proceso e instrumental inexistente en la gestión del Estado es la razón de que los recursos públicos no estén destinados a lo que el país y su población requiere sino a los intereses de cada gobierno, de los intereses partidarios y de los sectores económicos que mueven que los sostienen y a quienes representan.

Esta situación se repite en las administraciones distritales, en lo provincial ni referirse porque son meramente decorativas en su carácter legal y en la práctica.

Esto hay que corregirlo. Las faltas nacionales no tienen que ser así por condición aleatoria, es decir que una condiciona la otra. Podemos planificar en el municipio aunque no ocurra así en el gobierno nacional.

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La planificación municipal nos permitirá diagnosticar, identificar, ponderar las necesidades y problemas de las comunidades. A la vez que dará sustentación y solidez a que intervengamos en las decisiones de los ministerios y demás entidades nacionales.

Ha llegado el momento de que seamos serios y actores en la transformación hacia una administración municipal, con calidad y criterios científicos

Las enormes carencias en alimentación, educación, salud, transporte público, seguridad, etc., provocan el descontento y el aumento en la cantidad de quejas que diariamente expresan los ciudadanos, que sólo son medianamente atendidas cuando cierran las calles.

La equidad, además de ser ética, es el instrumento más formidable para aumentar las capacidades productivas de una sociedad, y crear cohesión social y gobernabilidad. Así lo demuestran las economías más exitosas. Noruega, Finlandia y Suecia les brindan a sus ciudadanos la posibilidad de ser becados hasta terminar la Universidad. Corea y Taiwán hicieron grandes inversiones en educación. La prioridad de Japón al terminar la guerra, fue construir un sistema universal de protección a la salud.

Para lograr el desarrollo socioeconómico, debemos comenzar por descubrir todo el potencial productivo que tenemos. En una ciudad, ese potencial radica básicamente en la ciudadanía y sus organizaciones. Vamos a trabajar para obtener una ciudad más eficiente, más eficaz y más participativa. Desde la Alcaldía, lo haremos.

Somos la capital de un país con grandes potencialidades turísticas, por lo que vamos a trabajar por lograr brindarle la debida atención al visitante, la cual además de la hospitalidad tradicional del panameño, incluirá variados servicios culturales y seguridad.

El 8 de septiembre de 2000, reunidos en Nueva York, 189 estados miembros de las Naciones Unidas y con la presencia de 147 de sus jefes de Estado o Gobierno, fue formulada la Declaración del Milenio, que sintetiza el compromiso de las naciones firmantes de cumplir los Objetivos de Desarrollo del Milenio para reducir la pobreza, mejorar los niveles de salud y educación, promover la paz, los Derechos Humanos, la igualdad de género y la sostenibilidad ambiental, todo con metas claras a evaluar en el año 2015.

Nos sentimos comprometidos con esos objetivos, los cuales adecuaremos a las condiciones de nuestra ciudad. Sabemos que al adoptar compromisos mediante objetivos, estrategias y fechas de cumplimiento, fijamos indicadores que le permitirán al ciudadano juzgar nuestro desempeño. Así lo queremos.

Sentimos pasión por obtener los objetivos dentro de la legalidad que garantice la estabilidad, con honradez y transparencia; tendremos firmeza en la búsqueda de la equidad social en armonía con la ley, la ética y la moral.

Vamos a trabajar para lograr las infraestructuras que nos permitan crecer económicamente y desarrollarnos socialmente, mejorar el bienestar de los ciudadanos, satisfacer sus necesidades educativas, culturales y recreativas, y mejorar las condiciones medioambientales.

Transformaremos la capital en una ciudad pujante, participativa e inclusiva, con una gestión social enfocada a las clases menos favorecidas e impulsando el desarrollo sostenible y adecuando el

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acceso de la inversión privada con la transparencia y eficiencia de un ente territorial efectivo, que proteja a los sectores más vulnerables de la comunidad.

Vamos a trabajar con enfoque multidisciplinario e interdisciplinario, o sea, se realizará con la cooperación de varias disciplinas. La ciudad es una forma social y espacial, por lo que es imposible estudiarla a partir de una sola perspectiva; es necesaria la contribución de varias disciplinas para llegar a comprender los diferentes aspectos de la realidad urbana, por lo que formaremos equipos multidisciplinarios.

Por ejemplo, el urbanismo es la planificación, desarrollo, reforma y ampliación de los edificios y espacios de las ciudades; el urbanismo propone esquemas de posibles transformaciones del espacio existente; la práctica del urbanismo consiste en pensar la ciudad como un espacio urbano para ordenarlo, modificarlo. Por su parte, la sociología trata de la estructura y funcionamiento de las sociedades humanas; para un sociólogo, la ciudad es el lugar donde los seres humanos viven, trabajan, crían a sus hijos e interactúan con otras personas; esos seres humanos se distribuyen geográfica, demográfica, económica, política y culturalmente, formando un sistema social. Mientras que la sociología aporta conocimientos sobre el sistema social, el urbanismo sintetiza los datos, tomando en cuenta los elementos humanos, geográficos, técnicos, políticos, financieros y legales, y elabora proyectos de ordenamiento realizables.

Vamos a trabajar porque el ciudadano recupere la confianza en sus autoridades. Vamos a trabajar por una ciudad donde no haya ciudadanos de primera y segunda categoría, si no que todos dispongan de servicios de calidad en cuanto a salud pública, educación, transporte y servicios básicos.

La población de Ciudad de Panamá, liderada por la nueva administración municipal, implementará estrategias que: reduzcan el índice de pobreza; recupere y conserve los patrimonios cultural, urbanístico y los aspectos estéticos; logre un desarrollo sostenible; utilice adecuadamente nuestro potencial; le brinde al ciudadano oportunidades de plena realización como ser humano; y afiance el sentido de pertenencia y compromiso en la búsqueda de una sociedad más justa.

Vamos a trabajar por una ciudad donde todos los ciudadanos puedan disponer de servicios básicos como agua potable y alcantarillado, a pesar de que eso no compete directamente al Municipio.

Estamos convencidos que cuando lleguemos a la Alcaldía con el apoyo ciudadano, ¡lo haremos!

Consideraciones éticas deben centrar la discusión sobre qué ciudad queremos. No es compatible la eficiencia de un centro bancario con el lavado de dinero, ni el empleo digno con el empleo informal, ni la hospitalidad de una población con la prostitución.

La ciudad que queremos, es una ciudad incluyente, bonita, alegre y digna. Concebimos la Ciudad de Panamá como la oportunidad de demostrarnos como panameños, que podemos lograr la ciudad que queremos.

En toda gestión pública que esté en manos del miembro de un partido político hay injerencia partidista. Con nosotros, será la primera vez que la capital de Panamá se administrará sin ese entremetimiento, por lo que seremos un ALCALDE DE VERDAD, un ALCALDE PARA TODOS.

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Objetivos, principios y estrategias

Objetivos: 1. Garantizar la seguridad ciudadana de los habitantes y visitantes de la Ciudad de Panamá.

2. Lograr la mayor participación ciudadana en la toma de decisiones del Concejo Municipal.

3. Alcanzar una ciudad incluyente que le permita al ciudadano sentirse sujeto activo en su planificación, construcción y disfrute.

4. Promover la concertación en las cuestiones sociales, económicas y urbanísticas.

5. Reorganizar la Alcaldía, en forma tal que la gestión municipal se adecue a las necesidades del ciudadano .y de las comunidades que integran el distrito.

6. Actualizar, sistematizar y divulgar las disposiciones municipales, para asegurar su conocimiento cabal, garantizando que los funcionarios las conozcan y cumplan, para evitar la impunidad en cualquier acto de corrupción que pudiese presentarse.

7. Establecer los adecuados sistemas informáticos, que permitan una gestión administrativa rápida y una fiscalización eficaz.

8. Capacitar y especializar al personal municipal, con el fin de asegurar el servicio que se merece la comunidad.

9. Actualizar y sistematizar el Catastro Municipal, como fuente de generación y administración del ingreso municipal.

10.Racionalizar y sanear las finanzas municipales, en beneficio del ciudadano.

11.Tratar de impedir legalmente que se incrementen las tasas que se cobran por los servicios de aseo, acueducto y alcantarillado.

12.Tratar de impedir legalmente que se cobren las tasas de valorización por la cinta coimera. En nuestra gestión como Alcalde nos guiaremos por los siguientes principios:

Ética y moral.

Transparencia y honestidad.

Equidad.

Liderazgo.

Eficiencia.

Trascendencia.

Sentido de pertenencia y compromiso social.

En nuestra gestión como Alcalde aplicaremos las siguientes estrategias: La solidaridad, entendida como una política pública de lucha por la equidad social y de

compromiso con la población más vulnerable.

La elaboración de un Plan Municipal de Convivencia y Seguridad Ciudadana, siguiendo los lineamientos aprobados por la Comisión de Estado por la Justicia.

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La constitución del Consejo Municipal de Seguridad Ciudadana, compuesto por el Alcalde, el Director de la Policía Municipal, un delegado del director de la Policía Nacional, un delegado de la dirección provincial del MEDUCA y un representante por cada organización de la sociedad civil relacionada con la prevención y atención de la violencia y el crimen.

La capacitación de los recursos humanos de la Alcaldía, brindándole la formación teórica y los conocimientos prácticos que permitan lograr un desempeño municipal eficiente, ante los retos que presenta la adquisición de las nuevas competencias.

La reactivación económica, mediante el desarrollo de proyectos productivos.

La responsabilidad medio ambiental y la recuperación de nuestro entorno urbano.

El fomento de un municipio abierto, participativo, tolerante y plural, identificado con sus ancestros y con los elementos de modernidad que marcan la sociedad del conocimiento.

La ejecución de una administración efectiva, que trabaje por resultados, con recursos humanos capaces de actuar oportunamente ante los requerimientos de la comunidad.

La creación de alianzas estratégicas con la empresa privada, en la búsqueda del desarrollo de la capital.

La estimulación a la creación y desarrollo de micro y pequeñas empresas.

La promoción de actividades culturales y deportivas, para lo cual crearemos dependencias municipales que fomentarán estas actividades en todos los barrios.

Seguridad ciudadana

La seguridad ciudadana abarca lo relacionado con la violencia, la criminalidad y la accidentalidad vial, así como el quehacer de las diversas instituciones relacionadas con su promoción y protección.

La seguridad tiene dos dimensiones fundamentales: los hechos y el sentimiento de seguridad. Ambos están unidos, pero su relación no siempre es directamente proporcional. De los primeros -las faltas, delitos y accidentalidad- podemos ser responsables, víctimas, testigos, aparecer en los medios de comunicación, en las estadísticas, etc. Mientras que el sentimiento de seguridad es un producto cultural, donde interviene el pasado, el presente y el futuro de cada persona. Dependiendo de los resultados de esa mezcla, cada cual percibe el grado de seguridad de su vida.

La teoría de ‘La ventana rota’ (1997) se debe a los criminólogos James Q.Wilson y George Kelling; ellos argumentan que el crimen es el resultado inevitable del desorden. Si una ventana está rota y no se repara, la gente que la ve va a pensar que a nadie le importa.

Para poder comenzar a solucionar el problema de la inseguridad, es necesario implementar una política de promoción del empleo formal que permita mayores niveles de inversión y desarrollo socioeconómico. También es imprescindible acabar con el desorden constructivo existente en la capital.

Es necesario planificar para transformar el distrito capital, evitando que la Alcaldía vaya a la zaga y enfrente con eficacia problemas como el de la urbanización desordenada, que está controlada por grandes empresarios de la construcción, que genera graves daños medioambientales, como los ocasionados durante la última década por la pésima gestión municipal de la cúpula del PRD.

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Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la brecha creciente de ingresos incide en más delincuencia. Tanto los ciudadanos residentes en la capital como los visitantes, sufren por la inseguridad que reina en las calles y residencias, donde los asaltos, secuestros ‘express’ y asesinatos son cada vez más frecuentes.

Para poder comenzar a solucionar el problema de la inseguridad, es necesario implementar una política de promoción del empleo formal que permita mayores niveles de inversión y desarrollo socioeconómico. También es imprescindible acabar con el desorden constructivo existente en la capital.

Es necesario:

Tener una adecuada infraestructura, para facilitar el acceso, las comunicaciones y los servicios básicos.

Modernizar las instituciones relacionadas con la actividad municipal, que permitan la agilización de los trámites.

Combatir la corrupción y eliminar la discrecionalidad.

Garantizar niveles adecuados de salud.

Formar recursos humanos calificados, que permitan aumentar la productividad, lo cual es particularmente complejo, dado el déficit educativo existente en Panamá.

La inseguridad ciudadana es una de las mayores preocupaciones de los habitantes de la capital y de sus visitantes. Los grandes avances logrados durante los últimos años en Bogotá, Quito y Guayaquil en seguridad ciudadana gracias al accionar de sus autoridades locales, demuestran que la seguridad ciudadana en la Ciudad de Panamá tiene que ser una responsabilidad de su Alcalde -en representación del Estado y en coordinación con el Presidente-, ya que al tener jurisdicción sobre un territorio determinado, puede intervenir con más elementos de juicio y más rápidamente sobre las causas de la inseguridad, siguiendo unas líneas generales de acción, entre ellas, los lineamientos aprobados por la Comisión de Estado por la Justicia.

Estableceremos un modelo integral de seguridad ciudadana que priorice la prevención de la violencia y la delincuencia. La seguridad ciudadana se relaciona con los otros ejes temáticos de nuestra propuesta: transporte, educación, salud y medio ambiente.

No es posible analizar la seguridad ciudadana sin investigar las causas y consecuencias de la criminalidad:

a. La pobreza, el analfabetismo y la desigualdad en la asistencia social.

b. El maltrato, la violencia intrafamiliar y los hogares sin la presencia del padre.

c. El consumo de drogas, los vicios y la degradación moral.

d. El alto costo de la vida que no se justifica por la inflación internacional.

e. El insuficiente espacio público.

f. La ausencia de instalaciones deportivas y culturales.

g. La impunidad de los delincuentes de ‘cuello blanco’ y la corrupción en la Policía Nacional y el Órgano Judicial.

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h. El desconocimiento de las leyes y los derechos del ciudadano por parte de la Policía Nacional, la Policía Municipal y el Corregidor.

i. La mora judicial y las fallas en la administración de justicia.

j. La ausencia o el incorrecto funcionamiento del Juez de Paz, el Corregidor y la Policía Municipal.

k. El surgimiento de las bandas criminales.

Durante décadas, nuestros gobernantes no se han preocupado por encaminar a nuestra juventud por el camino del bien, ni le han brindado una ruta adecuada para utilizar su tiempo libre, apartándola de las pandillas. No podemos olvidarnos de una vieja frase que dice: “El ocio es la madre de todos los vicios”. Consideramos que entre las mejores vías que existen para combatir la delincuencia están la educación, la cultura y el deporte.

Sin descuidar las funciones de control de las actividades delincuenciales mediante el cumplimiento de la ley, ejecutaremos proyectos y programas orientados a la prevención de la delincuencia y al mejoramiento de la convivencia ciudadana. Por ejemplo, crearemos: Instituto Municipal de Educación y Cultura: Se dedicará a la capacitación de los recursos humanos que trabajan en el municipio y al fomento de la cultura, para lo cual se fundarán bibliotecas y la Escuela Municipal de Música, Danza y Artes Plásticas. Esta escuela permitirá que la población residente en la capital, ocupe su tiempo libre en su superación; además, se utilizará para que pueda trabajarse a través de la música, sobre la inadaptación social de los adolescentes y jóvenes que den señales de incipiente violencia, como se ha hecho en otros países.

Instituto Municipal de Deportes, Educación Física, Recreación y Turismo: Será una entidad dedicada a la promoción y realización de estas actividades para los residentes en la capital. Se priorizarán las actividades dirigidas a los infantes que todavía no van a la escuela, los ancianos y las personas discapacitadas. Como construiremos parques y áreas deportivas en distintos puntos de la ciudad: 24 de diciembre, Tocumen, Alcalde Díaz, Chorrillo, Chilibre y otras zonas, durante el verano se realizarán programas especiales para toda la población.

En la República de Panamá existe una centralización del manejo de la seguridad ciudadana de acuerdo a la doctrina de la Seguridad Nacional, proveniente de la época de la Guerra Fría. Bajo esta concepción, no se considera la participación de los gobiernos locales y de la comunidad como estamentos importantes para enfrentar los problemas de seguridad ciudadana, problemas que tienen causas y consecuencias locales.

En otros países, los esfuerzos por institucionalizar la temática de seguridad ciudadana han logrado importantes resultados en la disminución de la mayoría de los delitos, principalmente, en la reducción de los homicidios.

En Colombia, durante muchos años primó una visión que priorizó el uso legítimo de las armas para la solución violenta de los conflictos y las respuestas coercitivas frente a estos problemas, dejando a un lado las acciones preventivas e integrales. En vez de eliminarse la inseguridad ciudadana, creció la violencia y la delincuencia.

Durante la década del 90, las ciudades de Medellín (1991), Cali (1992) y Bogotá (1995) abordaron el tema de manera integral y obtuvieron importantes disminuciones de la violencia y la delincuencia.

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En Bogotá, los logros más importantes han sido la reducción de la violencia homicida, que pasó de una tasa de 80 homicidios por cada 100 mil habitantes en 1993 a 18 en el año 2006; los demás delitos se redujeron en más de un 40% entre 1998 y 2005.

Estos resultados evidencian los beneficios de una política que desde la civilidad retoma los territorios, permitiendo que se recupere la confianza de los ciudadanos en las instituciones y autoridades que cumplen su función en el marco del Estado de Derecho.

La experiencia de Medellín y Bogotá demuestra que hasta en los problemas más complicados -como el conflicto armado-, se requiere de la participación de las autoridades locales, en coordinación con las nacionales; en el tema de seguridad ciudadana es fundamental el liderazgo del alcalde para que los logros sean sostenibles y se institucionalice el manejo de la seguridad como una política pública local.

Es necesario señalar que la trasformación arquitectónica de Quito y Guayaquil, con la recuperación del espacio público para sus ciudadanos y visitantes, ha contribuido a la seguridad ciudadana y la convivencia en esas ciudades. Por ello, haremos cumplir las ordenanzas que garantizan el espacio público.

Guayaquil, ubicada sobre el Río Guayas, trasformó la ribera del río -era un botadero de basuras-, en el gran Malecón 2000, ampliando la oferta de espacio público para los ciudadanos. Barrios en las partes altas de la ciudad, donde la Policía no podía subir, ahora tienen accesos peatonales que mejoraron la vida a sus habitantes, la seguridad y el flujo turístico.

La Alcaldía de Panamá participará en la evaluación de la seguridad ciudadana y formulará la política local de protección, seguridad y convivencia ciudadana. Es necesario que parejas de policías patrullen los barrios durante las 24 horas, para evitar que las calles sean controladas por grupos al margen de la ley. Es imprescindible que se dediquen menos policías a tareas administrativas, para poder maximizar el número de policías en las calles.

El Alcalde es la primera autoridad de policía del Municipio, por lo que la Policía Nacional deberá cumplir con prontitud y diligencia las órdenes que le imparta el alcalde a través de su director. Trabajaremos para que la Policía Nacional y la Policía Municipal actúen mancomunadamente para responder rápidamente al llamado del ciudadano. También se elaborará y ejecutará el plan de protección de la población en riesgo.

Dado que sin información detallada de los actos de violencia y delincuencia es muy difícil realizar análisis, evaluar las acciones y tomar las decisiones que permitan enfrentar los problemas de seguridad de la Ciudad de Panamá, se diseñará y ejecutará un Sistema de Información de Violencia y Delincuencia, con la información que suministren la Policía Nacional, la Policía Municipal, el Instituto de Medicina Legal y la sociedad civil.

El Consejo Municipal de Seguridad Ciudadana -compuesto por el alcalde, el Director de la Policía Municipal, un delegado del Director de la Policía Nacional, un representante de la Dirección provincial del MEDUCA, un delegado de la Dirección provincial del MINSA y un representante por cada organización de la sociedad civil relacionada con la prevención y atención de la violencia y el crimen-, elaborará el Plan Municipal de Convivencia y Seguridad Ciudadana, el cual contribuirá a la formulación de políticas de protección, seguridad y convivencia ciudadana y a la definición de

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normas de coordinación de la municipalidad con la Policía Nacional y otros organismos responsables.

Consideramos que el Plan Municipal de Convivencia y Seguridad Ciudadana deberá orientarse a fortalecer la cultura ciudadana y a tratar de evitar o resolver de manera pacífica y concertada, los conflictos, creando espacios interinstitucionales de justicia cercana al ciudadano que ejecuten y promuevan los mecanismos alternativos de resolución de conflictos y que fortalezcan la convivencia ciudadana, para lo cual propondremos la realización de los siguientes programas:

Mejoramiento de la convivencia y la eliminación de las zonas rojas . Se procederá a la recuperación de los espacios públicos que se siguen perdiendo a pasos agigantados, que permita garantizar la interacción social y mejorar la estética urbana. A partir de la ‘teoría de la ventana rota’, se trabajará en la recuperación de espacios críticos en materia de seguridad y convivencia, para lo cual -con el apoyo de la Policía Municipal, la Policía Nacional y la comunidad-, definiremos y aplicaremos planes y acciones que permitan mejorar la seguridad, mediante la reinserción social de la mayoría de los ciudadanos que habitan esas zonas y el fortalecimiento de los lazos que vinculan a los ciudadanos con su entorno comunitario.

Zonas protegidas. Solicitaremos el apoyo de la Cámara de Comercio, la Policía Nacional y la comunidad organizada para definir las áreas con mayor presencia ciudadana, con el objetivo de aumentar la vigilancia en ellas. Este programa será un modelo de gestión de seguridad del espacio público inspirado en el esquema de ‘equipos de barrio’ que, en España, utiliza la Policía Comunitaria. Funcionará todos los días de 6 de la mañana a 8 de la noche en las zonas de la ciudad en las que se registra una mayor actividad comercial, educativa, recreativa y una alta concentración de población, por lo que necesita una atención especial por parte de la Policía Nacional y la Policía Municipal.

Participación comunitaria. Sin una activa participación ciudadana no es posible que funcione plan alguno sobre seguridad. Por ello, crearemos las Escuelas de Seguridad Ciudadana, donde se capacitará a los líderes comunitarios para que con el apoyo de sus comunidades trabajen de manera coordinada con las autoridades en la prevención de la violencia y la delincuencia.

Apoyo a los ‘Vecinos Vigilantes’. Vamos a revivir esta organización de carácter comunitario, agrupando a los vecinos por cuadra. Propondremos que además de su antigua función de avisar sobre un posible delito, se apoyen unos a otros para enfrentar el miedo, la apatía, la indiferencia y la falta de solidaridad frente a la acción de las personas violentas y los delincuentes.

Armas por trabajo. Analizaremos con la empresa privada la posibilidad de otorgar una plaza de trabajo a aquel desempleado que entregue un arma de fuego.

Desarme. Con la colaboración de las Iglesias, desarrollaremos una campaña para que el ciudadano comprenda que para resolver los conflictos no se deben utilizar armas, que es posible vivir sin que sea necesario que esté armado, por lo que es menor el riesgo de agredir o ser agredido con armas de fuego. También procederemos a la incautación y decomiso de armas ilegales, las que serán fundidas. Propondremos que se sancione ejemplarmente a los que facilitan armas a los delincuentes.

Justicia en la comunidad. Contempla la realización de programas de justicia alternativa, como la solución pacífica de conflictos entre vecinos y en el interior de los hogares.

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Justicia en las escuelas. Se atenderán a los estudiantes que muestren señales de incipiente violencia.

Atención a grupos vulnerables. Se atenderán los ciudadanos involucrados en asuntos de violencia y consumo de drogas.

Apoyo al ciudadano en la obtención de justicia. Se creará un mecanismo eficiente para la recepción y tratamiento de las denuncias por violaciones a Derechos Humanos y por extralimitación de funciones. Se orientará al ciudadano sobre los servicios que prestan la Defensoría del Pueblo, Procuraduría de la Nación y el Instituto de Medicina Legal.

Atención a las víctimas del crimen. Se crearán oficinas que oriente al ciudadano que resulte víctima de un crimen.

Fortalecimiento de la Policía Municipal. Además de facilitarle el equipamiento necesario, se promoverán actividades encaminadas a fortalecer la capacidad del policía municipal en el manejo cotidiano de los problemas urbanos. Las principales temáticas serán: valores cívicos, derechos humanos, derechos y deberes del policía, derecho internacional humanitario, seguridad y convivencia ciudadana, abuso sexual, atención a menores, policía comunitaria, estandarización de procedimientos, manejo de la escena del delito, inglés e informática.

Reinserción social de ex reclusos. En otros países, esta política ha permitido reducir la violencia y la delincuencia. Nos proponemos evitar que el ex recluso vuelva a delinquir, para lo cual es necesario fortalecer su autoestima y reinsertarlo en la sociedad.

También nos comprometemos a:

Combatir la delincuencia a nivel de corregimiento con el apoyo de la comunidad, la Policía y los representantes.

Mejorar la calidad del personal de la Policía Municipal, a través de una adecuada selección y capacitación.

Trabajar para que los integrantes de la Policía Municipal tengan una adecuada calidad de vida, y el otorgamiento de incentivos.

Aplicar la ley, para que retorne la tranquilidad a cualquier lugar dónde se atente contra la tranquilidad ciudadana.(v.gr. Calle Uruguay)

Transporte

En Bogotá, otro logro importante fue la reducción de las muertes en accidentes de tránsito, que pasaron de 1,387 muertes en 1995 a 598 en el año 2003, es decir disminuyó de 24.3 muertes por cada 100 mil habitantes en 1995 a 6.6 en el año 2002.

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En Panamá, la forma irresponsable de conducir es la principal causa de los accidentes de tránsito, con la consabida cuota de muertos y heridos, incidiendo en la inseguridad ciudadana. Pero no es la única.

La vialidad no sólo está compuesta por calles y avenidas, sino también por aceras, pasos elevados, puentes y estacionamientos. El tránsito de las personas de un lugar a otro, ya sea para comprar unos víveres en la tiendita de la esquina, pasear a sus mascotas en el parque, llevar a los niños a la escuela o transportarse de su hogar en las afueras a su lugar de trabajo y viceversa, necesita de una serie de infraestructuras viales, que permiten una mejor calidad de vida para todos: peatones, ciclistas, motorizados, transporte público, etc.

Es por ello que consciente de lo vital que son las infraestructuras en una ciudad, se va a retomar las funciones del Municipio en materia de línea de construcción de los nuevos edificios, para que existan aceras en todas las calles de la ciudad, vías para los que usan bicicletas, líneas de seguridad para acceder a las paradas de transporte público, lugares especiales de estacionamiento y otros.

Además, aunque la capital tiene una infraestructura vial que apenas ha variado en los últimos años, todos los años se incorporan unos 30 mil vehículos a la circulación. Si a esto se le adiciona la ausencia de nomenclatura y la forma incorrecta en que están situadas las paradas, es lógico que cada vez sean más los tranques diarios. Las medidas que tomaremos en la Alcaldía con relación a esto son:

Establecer horarios para la circulación de vehículos pesados, para evitar que coincida con las horas en que la mayor parte de la población se desplaza por las calles y avenidas.

Trasladar las paradas de autobuses del inicio de la cuadra para el final de la misma, de forma tal que cuando estén recogiendo pasajeros no interrumpan el tránsito de los vehículos que utilizan las vías perpendiculares.

Controlar que los transportistas cumplan con las normas de seguridad y calidad.

Realizar de forma eficiente el cobro de las sanciones y multas.

Ordenar conjuntamente con la Autoridad del Tránsito y Transporte Terrestre, la circulación vehicular incluyendo las motos y bicicletas como medios de transporte alternativos.

Crear conjuntamente con la Autoridad del Tránsito y Transporte Terrestre, una red de ciclovías que incluyan las urbanizaciones en las áreas residenciales que circundan el área central de la ciudad y que se conecten con las zonas más transitadas por los ciclistas.

Establecer una red de líneas de seguridad para atravesar las calles y avenidas, y concienciar a la población en el uso de ellas igual que el de los pasos elevados.

Analizar con la Autoridad del Transporte Terrestre y el MINSA, la factibilidad de que los buses utilicen otros combustibles, que no incrementen el gasto y eviten la emisión de monóxido de carbono.

Fiscalizar que los buses cumplan con las medidas de seguridad reconocidas internacionalmente.

Vigilar que los nuevos buses cumplan con los requerimientos imprescindibles para transportar a personas minusválidas.

Coadyuvar a la creación de un sistema de transporte digno para los ciudadanos.

Impulsar el análisis de los estudios existentes sobre el sistema de transporte.

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Fundar una empresa municipal de transporte.

Organizar conjuntamente con la Autoridad del Tránsito y Transporte Terrestre, el sistema de rutas internas mientras se establecen los colectores locales del nuevo sistema de transporte masivo.

Crear un programa permanente de educación vial, que comprenda:a) Poner en conocimiento del escolar los diferentes elementos del tráfico, las señales y su

significado.

b) Ayudar a los escolares a desarrollar conductas seguras como peatones y como conductores de bicicletas y ciclomotores.

c) Conocer las normas básicas de circulación así como los permisos y documentación necesarios.

d) Prevenir sobre las repercusiones del consumo de alcohol y otras drogas en la conducción.

Aunque el candidato Martín Torrijos prometió que iba a resolver el grave problema del transporte público y que durante su Administración se han producido dos trágicos accidentes, ha demostrado que no lo va a solucionar. Tragedias como la de los accidentes del transporte público y del envenenamiento masivo con dietilenglicol, pueden repetirse en cualquier momento.

También Impediremos que la ruta del Carnaval afecte la tranquilidad ciudadana.

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Educación, cultura, deportes y recreación

En 1997, a Pedro Ravela, consultor de la UNESCO, le entregaron el plan decenal para mejorar la calidad de la educación panameña. Han pasado 11 años y la situación no ha cambiado, declaró el consultor de la UNESCO. Nuestros niños pasan a tercer grado sin saber leer y no logran un desempeño adecuado en los grados superiores en matemáticas y ciencias.

Según el último ranking mundial, ni una universidad de Panamá se encuentra ubicada entre las primeras cuatro mil. La mejor ubicada es la Universidad Tecnológica de Panamá (UTP), que ocupa el lugar número 4,134. Somos superados ampliamente, por universidades de Costa Rica, Guatemala y El Salvador. Mientras que en otros países las universidades son centros de debate, la mayor parte de nuestra comunidad académica permanece callada, haciéndose cómplice del colapso del sistema educativo panameño. Es imprescindible reformar íntegramente nuestro sistema educativo, el cual tiene que comenzar por despolitizarse.

Hace una década, los partidos políticos se comprometieron en impulsar la descentralización de recursos y competencias públicas a favor de los gobiernos locales, mediante el Pacto por la Descentralización y el Desarrollo Local (1999). Pero como todavía los diputados no han aprobado el proyecto de ley de la descentralización, la educación sigue en manos del MEDUCA y la salud en manos del MINSA, por lo que la Alcaldía poco puede hacer al respecto.

En esta propuesta sólo podemos exponer lo que la Ley nos permite en cuanto a educación y salud.

Nos proponemos proporcionar servicios de cuidado y protección a los niños que viven en condiciones de vulnerabilidad en la capital, a través de la provisión de un hogar seguro, alimentación, educación y atención medica, que les permita vivir dignamente.

Con anterioridad hablamos sobre el Instituto Municipal de Educación y Cultura y el Instituto Municipal de Deportes, Educación Física, Recreación y Turismo. Ampliaremos un poco más.

El Instituto Municipal de Educación y Cultura se dedicará a la capacitación de los recursos humanos que trabajan en el municipio. Vamos a trabajar para que el ciudadano sea atendido correctamente, por lo que prepararemos a los trabajadores de la Alcaldía con los conocimientos necesarios para ello.

La Escuela Municipal de Música, Danza y Artes Plásticas será un centro de enseñanza de música, danza y artes plásticas para infantes, jóvenes y ancianos. La enseñanza en esta escuela será para todos que lo deseen, no se limita a los especialmente dotados.

Cada alumno tendrá libertad para organizar su programa de estudio, que no estará condicionado por planes de estudio ni por la obtención de título alguno. La única obligación que tendrán los alumnos de música y danza será su disposición a participar en algún conjunto o agrupación: banda, orquesta, grupo de danza, etc., guardando un comportamiento correcto.

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El fomento de la práctica musical y de danza en grupos, la formación de orquestas, grupos diversos, etc. identificará a la Escuela Municipal de Música, Danza y Artes Plásticas, que tendrá dos objetivos fundamentales:

1. Lograr que los infantes y jóvenes residentes en la capital provenientes de los sectores económicos más vulnerables -donde las historias de violencia física y/o emocional, así como la incursión en la delincuencia, son tema cotidiano-, tengan un lugar donde formarse culturalmente.

2. Garantizar que los ancianos residentes en la capital tengan un lugar donde formarse culturalmente.

En nuestro recorrido por los 21 corregimientos hemos observado la falta de espacios públicos, lugares donde sus habitantes -de manera cómoda y segura-, puedan practicar deportes, desarrollar diversas actividades culturales y sociales. No tenemos la menor duda que la ausencia de este tipo de lugares, es una de las variables que contribuyen a la descomposición de las familias; es el anticuerpo ausente que evita que la delincuencia y las pandillas se desarrollen como lo han venido haciendo hasta ahora.

Nuestra capital tiene más de un millón de habitantes, pero solamente tiene 14 gimnasios o complejos deportivos, de los cuales tres están en Parque Lefevre. Corregimientos como Tocumen, 24 de Diciembre, San Martín, Chilibre, Bella Vista, por ejemplo, no cuentan con espacios deportivos públicos. Esta situación requiere que la nueva administración actúe con prontitud y la colaboración de la ciudadanía.

Nos comprometemos con los habitantes de la capital, en desarrollar planes y programas para el deporte y el entretenimiento. Este tipo de actividades incluye a todos; los jóvenes son parte vital y serán los grandes beneficiados de los proyectos que llevaremos adelante.

Un ejemplo curioso: desde hace unos años se ha puesto muy de moda montar patinetas o ‘skateboarding’; ocurre que este deporte no tradicional se ha hecho muy popular, pero nuestros jóvenes no tienen dónde practicarlo. Usted los puede ver en las aceras de los centros comerciales de noche o en terrenos donde existe algún piso que les permita hacer sus piruetas. Para ellos, por ejemplo, proponemos que la alcaldía construya o invierta en la creación de centros de patinaje, donde puedan estar seguros y disfrutar de su actividad.

Deportes tradicionales, como el fútbol, el baloncesto o el béisbol, no han recibido el apoyo que deben. Solamente se han remodelado las canchas existentes, pero no se ha creado ninguna otra. En corregimientos como Las Mañanitas, la comunidad tiene que inventar canchas de fútbol en terrenos llenos de baches, que parecen sucursales de la luna.

Durante la administración de Miguel Antonio Bernal, con la participación de la sociedad civil, promoveremos permanente y decididamente, la construcción de estas canchas, de la mano con la comunidad y con la empresa privada. También buscaremos cómo regular las construcciones para que cumplan con la creación de espacios públicos dignos y que su capacidad no se vea limitada con los años.

Al final de nuestra gestión, la capital contará con muchas más piscinas municipales, canchas deportivas, gimnasios y centros culturales donde todas y todos tengamos una mejor calidad de vida.

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La ancianidad no es sinónimo de enfermedad; determinados problemas pueden ser superados con la adecuada prevención, tratamiento y aprendizaje. Por lo tanto, los problemas básicos de la tercera edad se están reorientando y se considera que son más de tipo social que exclusivamente físicos, sin negar su importancia en edades más avanzadas.

El adecuado tratamiento al envejecimiento de la población residente en la capital es un tema al cual le daremos la mayor atención desde la alcaldía. Este grupo etáreo puede aportar mucho a nuestra sociedad, transmitiendo sus conocimientos y experiencias, y sirviendo como un importante puente de comunicación entre generaciones.

Para combatir exitosamente el inevitable deterioro de las facultades con la edad, existen experiencias de otros países que demuestran que se puede retrasar el deterioro intelectual, siendo lo más importante proporcionarles actividades de aprendizaje a los adultos mayores y propiciarles un entorno estimulante.

Como la plena dignidad de las personas será el objetivo fundamental de nuestra gestión, vamos a integrar a los adultos mayores en todas las áreas del quehacer municipal.

Son innumerables las posibilidades educativas, de salud y conformación de redes sociales de apoyo que brinda la recreación; la recreación terapéutica y deportiva, la recreación comunitaria, se concretan en programas y servicios que pueden contribuir al mantenimiento y mejoramiento de la calidad de vida de los adultos mayores.

La recreación en el Municipio tendrá específicamente contemplada en su estrategia a los adultos mayores. Contribuirá a que a partir de convenios de cooperación y alianzas estratégicas, nos fortalezcamos institucionalmente con la perspectiva de ofrecer más y mejores servicios a las personas de la tercera edad de diferentes condiciones físicas y mentales.

Los objetivos específicos de la alcaldía con relación a los adultos mayores serán:

1. Fomentar la participación e integración social de los adultos mayores.

2. Incentivar la formación de recursos humanos en el área.

3. Crear acciones y programas de prevención.

4. Fortalecer la responsabilidad intergeneracional en la familia y la comunidad.

5. Fomentar el uso adecuado y creativo del tiempo libre, mediante las actividades culturales, de educación física, recreativas y turísticas.

A través del Instituto Municipal de Deportes, Educación Física, Recreación y Turismo, lo haremos.

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Salud y alimentación

La alimentación es una de las necesidades básicas de la vida y un derecho inalienable de todas las personas. También es un aprendizaje que se desarrolla desde los primeros momentos en la vida del ser humano. El acto de comer es mucho más que alimentarse: es un momento de comunicación, transmisión de tradiciones y cultura y, muchas veces, de transmisión de afecto y enriquecimiento de los vínculos humanos.

Las posibilidades alimentarias de una persona, una familia o una comunidad no se limitan a la disponibilidad de dinero o de mercancías. Se relacionan con el modo en que se aprovechan y utilizan los propios recursos y capacidades. Es importante considerar y atender estos aspectos en conjunto, al analizar si la comunidad satisface adecuadamente sus necesidades alimentarias o si se desea organizar algún tipo de apoyo en ese sentido.

Alimentarse no es lo mismo que comer. Cuando hablamos de alimentación, nos referimos a ciertos elementos necesarios para vivir y mantener la salud, que ingresan al organismo. La nutrición es el proceso mediante el cual el cuerpo aprovecha y utiliza los alimentos ingeridos. Para estar bien nutridos no sólo es necesario comer, sino recibir una alimentación adecuada, equilibrada y completa. Por eso, la desnutrición aguda no es la única forma de deficiencia nutricional -ni la más común en nuestro país-, es muy frecuente la malnutrición. Por ejemplo, un niño puede no verse flaco y tener problemas serios de nutrición, por falta de algunos elementos esenciales para el organismo, como el hierro.

El retardo en el crecimiento físico, el deficiente desarrollo mental, la baja productividad, los altos índices de morbilidad y mortalidad infantil, el incremento de la obesidad, la diabetes y las enfermedades cardiovasculares son algunas de las consecuencias de la mala nutrición de la población.

Los cuatro problemas principales de la inseguridad alimentaria nutricional son:

1. Disponibilidad alimentaria insuficiente o inestable.

2. Baja capacidad adquisitiva de las familias.

3. Comportamiento alimentario inadecuado.

4. Condiciones sanitarias insuficientes.

Las causas fundamentales de estos problemas están directamente relacionados con la inseguridad alimentaria nutricional en que viven algunos estratos de la población, que a su vez está determinada por:

Limitaciones en la disponibilidad y el acceso a los alimentos.

La educación y la cultura alimentaria nutricional de la población

Las condiciones sanitarias en las cuales se desarrollan.

¿Qué sucede si un niño se alimenta mal? Se retrasa su crecimiento: su peso y talla son menores a los normales para su edad. Disminuyen las defensas del organismo: se enferma con frecuencia y tarda más tiempo en reponerse. Tiene bajo rendimiento escolar. Aprende con dificultad y presenta problemas de atención y concentración, así como poca retención en la memoria; este hecho podrá influir en su capacidad para trabajar cuando sea adulto y tendrá una baja productividad laboral.

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¿Qué sucede si un adulto se alimenta mal? Es bajo su rendimiento en el estudio y en el trabajo, lo cual influye en su situación laboral y en su remuneración. Esto puede generar un círculo vicioso de inseguridad alimentaria nutricional. También tendrá un mayor riesgo de padecer enfermedades, lo cual podrá afectarle en sus ingresos. Además, podrán ser mayores los gastos en tratamientos médicos para él y para el sistema de salud, ya sea privado o público.

Por lo tanto, la educación alimentaria nutricional es un componente esencial cuando se plantean acciones orientadas a mejorar la nutrición y la salud de una población. Esta educación se concibe como un accionar dinámico y participativo con las personas, para desarrollar su capacidad de identificar los propios problemas, sus posibles causas y soluciones, y actuar en consecuencia de acuerdo con sus pautas culturales, necesidades individuales y disponibilidad de recursos de cada lugar. El fin último de la educación alimentaria nutricional es mejorar el estado nutricional personal, familiar y de la comunidad, con un espíritu de autorresponsabilidad, autocuidado y autonomía.

Los servicios de saneamiento ambiental juegan un papel predominante en la utilización biológica de los alimentos, por ser éstos determinantes en la prevalencia de enfermedades infecciosas en la población, especialmente en los grupos más vulnerables, como la población infantil de los barrios marginales de la capital.

De esta manera, la morbilidad y las condiciones deficientes de saneamiento ambiental impiden que los alimentos se aprovechen adecuadamente, afectando a la condición nutricional de la población. El acceso al agua potable para consumo humano, el manejo de las aguas negras, las condiciones de vivienda dignas, entre otras, son contempladas como intervenciones de seguridad alimentaria nutricional en cuanto que de lograrse, permiten romper el ciclo infección-desnutrición.

Es por ello que las acciones de seguridad alimentaria nutricional buscan alianzas estratégicas con actores claves del desarrollo, especialmente en el nivel local, para lograr dichos beneficios sociales. Esta visión integrada del medio ambiente sostenible en proyectos de seguridad alimentaria nutricional debe emanar de la propia política del país, la cual debe fomentar acciones sobre medio ambiente para abordar estas problemáticas.

La persistencia de la pobreza y el agravamiento de la situación alimentaria nutricional, especialmente en las zonas rurales y en las urbano marginales, ha provocado que los gobiernos prioricen los temas relacionados con la pobreza, la desnutrición y el hambre. A nivel internacional, los gobiernos adquirieron compromisos en la Cumbre Mundial de la Alimentación realizada en 1995, en la Cumbre del Milenio efectuada en 2000, así como en la Cumbre Mundial de la Alimentación realizada en 2002.

En diciembre de 2002, en la XXII Cumbre de Jefes de Estado y de Gobiernos de Centroamérica celebrada en San José, Costa Rica, se establecieron el ‘Marco estratégico para hacer frente a la inseguridad alimentaría y nutricional, asociada a las condiciones de sequía y cambio climático’ y un ‘Plan de Acción Agrícola’, con el fin de prevenir y mitigar las consecuencias de las sequías y mejorar la seguridad alimentaría de los grupos más vulnerables.

El 13 de julio de 2008, al finalizar la X Conferencia Iberoamericana de Ministros de Salud, que se realizó en San Salvador, El Salvador, los ministros acordaron la creación de mecanismos de promoción y vigilancia en seguridad alimentaria nutricional, para prevenir la crisis alimentaria en los adolescentes y jóvenes de Iberoamérica. A la Conferencia asistieron en calidad de invitados especiales, delegados del Programa Regional de Seguridad Alimentaria y Nutricional para Centroamérica (PRESANCA) y del Instituto de Nutrición de Centroamérica y Panamá (INCAP)

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Los conferencistas llamaron la atención sobre el impacto que tiene el constante aumento de los precios de los alimentos a nivel mundial, lo que da como resultado la crisis alimentaria en algunos países iberoamericanos.

En 2008, la desesperación por no tener un bocado para llevarse a la boca provocó saqueos y robo de cereales en campos, bodegas y supermercados, en diversos países; también caos, pillaje e incendios. Las protestas contra el alza en el precio de los alimentos se sucedieron una tras otra. Comenzó en México con la guerra de la tortilla en enero de 2007. Siguió Italia con la huelga del espagueti, nueve meses más tarde.

Robert Zoellick, presidente del Banco Mundial, dijo que la crisis alimentaria podría desestabilizar a 3 países de América: Haití, Venezuela y Panamá.

Según Merilio Morell, representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO): más de 800 mil panameños están en el nivel de subnutrición (padecen hambre); unos 70 mil niños menores de cinco años padecen de una mala nutrición (carencia de nutrientes). La desnutrición crónica es un indicio de que no ha habido un desarrollo normal y es allí, en donde se puede enfrentar el futuro de una población que será excluida, discriminada, discapacitada y condenada a la pobreza, alertó Morell.

El sociólogo Raúl Leis R. escribió el 30 de abril de 2008: “La pobreza de decenas de miles de personas se incrementa y se agrava en Panamá con afloración de una crisis global de alimentos, que no tiene visos de parar sino más bien de incrementarse”.

El hambre es la peor consecuencia de la pobreza. Con hambre no hay salud, ni capacidad de aprendizaje, ni productividad laboral, ni rendimiento deportivo, ni convivencia pacífica. Sólo siete comidas separan a la civilización de la anarquía: al séptimo ayuno, las personas harán lo que sea para alimentar a sus hijos. El hambre es una mala consejera, que pudiera convertirse en la gota que desborda el vaso, provocando una explosión social. El equipo de campaña de Miguel Antonio Bernal está elaborando un programa que le permita a la alcaldía contribuir a atenuar los efectos de la crisis alimentaria.

La escasez de pan fue el detonante de la Revolución Francesa, que acabó con la monarquía y las vidas de Luis XVI y su esposa María Antonieta, que fueron guillotinados. La soberanía alimentaria debiera ser la preocupación fundamental de Panamá. Los poderes económico y político debieran promoverla, si quieren evitar que les ocurra algo similar a lo que les sucedió a los monarcas franceses.

El hambre de muchos se debe al enriquecimiento desmedido de pocos. Casi todas las empresas que conforman la cadena mundial de alimentos están obteniendo gigantescas ganancias, que no tienen nada que ver con algún producto nuevo que estén ofreciendo.

El 26 de septiembre de 2008 el director gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn, expresó: “Aunque los precios de los alimentos y los combustibles están por debajo de los máximos recientes, desafortunadamente se mantienen muy por encima de los niveles que existían cuando comenzó la escalada”.

Según la Contraloría General de la República de Panamá, el incremento en el índice de precios al consumidor (IPC) ha sido la tónica durante la administración Torrijos. Entre agosto de 2003 y

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agosto de 2008, la Canasta Básica de Alimentos se incrementó un 38.5% (de B/ 189.89 a B/ 263.01); el Índice de Precios al Consumidor Nacional Urbano se incrementó un 22.6% entre septiembre de 2003 y septiembre de 2008, aumentando el renglón alimentos un 39.8%.

Para millares de familias de bajos ingresos es imposible compensar estas pérdidas de poder adquisitivo, teniendo que sacrificar el consumo de alimentos, propiciando así el riesgo creciente de una transición nutricional involutiva, que continuará mutando la alimentación hacia más comida chatarra y dietas menos balanceada.

Los más afectados por la transición nutricional serán los párvulos, que ya arrastran un déficit alimenticio estructural-cultural. Los menores de 5 años registran un 20.6% de desnutrición crónica. Estos indicadores aumentan a 39.5% entre los extremadamente pobres y a 57.9% entre los extremadamente pobres indígenas.

Se estima que ocurrirá una crisis sanitaria, con los mayores riesgos sobre los infantes, por el peligro derivado de la baja de las defensas contra las enfermedades, provocada por una histórica alimentación deficitaria y por la transición nutricional señalada.

Sin embargo, Panamá es un país con un Producto Interno Bruto per cápita de 9,255 dólares anuales, cercano al rango de 11 mil 400, que marcan los países de ingresos altos.

Cuando el PRD está en el poder, aumenta la desigualdad, como lo demuestran estudios realizados por el Banco Mundial (Deininger y Squire, 2004), y la Base de Datos Socioeconómicos de América Latina y el Caribe (2006), que puede ver en el sitio de la Universidad de las Naciones Unidas (UNU–Wider): http://62.237.131.23/wiid/wiid.htm.

Economist Intelligence Unit (La Jornada, 29 de abril de 2008) expresa: “de 58 países cuyas reacciones son seguidas por el Banco Mundial, 48 han impuesto controles, subsidios al consumidor, restricciones a la exportación o aranceles inferiores”.

En Panamá, las compañías productoras de alimentos y los supermercados son reacios a bajar los precios, cuando disminuye el costo de las materias primas, el combustible y la electricidad. El precio del barril de petróleo en julio de 2008 era de 148 dólares, en enero estaba rondando los 40 dólares; esta drástica reducción en el precio del petróleo no se ha visto reflejada en una disminución de los precios minoristas, lo cual demuestra la especulación salvaje de los agentes económicos que operan en Panamá. Aplican la ley de San Garabato: vender caro y comprar barato.

La mayoría de los consumidores no esperamos ver una caída de los precios proporcional a la disminución en los precios de las materias primas. La mayoría de los consumidores ni tan siquiera conocen algo del mercado agropecuario como para saber cuándo deberían bajar los precios de los alimentos.

Dada la crisis económica que sufriremos próximamente, es necesario implementar una estrategia integral de asistencia social alimentaria, que permita garantizar la seguridad alimentaria de infantes, mujeres embarazadas o en lactancia y ancianos.

Bernardo Kliksberg -uno de los principales expertos en la lucha contra la pobreza y asesor principal del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en América Latina y el Caribe-, expresó: “la difundida tendencia a medir la pobreza considerando pobres a quienes ganan

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menos de 2 dólares diarios, es muy cuestionable. En todos los países de la región la línea de pobreza está muy por encima de esa cifra”.

¿Cuántos pobres hay realmente en la capital? ¿Cuántos pobres habrá cuando la crisis económica nos afecte con toda su fuerza? Sin embargo, el gobierno de Martín Torrijos en vez de tomar las medidas necesarias para cuando llegue ese momento, continúa negando o minimizando los efectos de la crisis económica en Panamá, que es el segundo país con peor distribución de la riqueza en la región más desigual del mundo.

El programa que Miguel Antonio Bernal propone, ‘Ciudad de Panamá sin hambre’, se compone de:

1. Atención a menores de cinco años en riesgo, no escolarizados.

2. Asistencia alimentaria a familias desamparadas.

3. Asistencia alimentaria a personas vulnerables.

4. Construcción de mercados de abastos en 24 de Diciembre, Juan Díaz, Chilibre y otras zonas de la capital.

5. Apoyar y desarrollar los circuitos de comercialización directos entre productores y consumidores, para garantizar precios remuneradores a los agricultores y asequibles a los consumidores:

Construcción de mercados de mariscos y pescados en Juan Díaz y otros lugares de la capital.

Apoyo irrestricto a todas las organizaciones que realicen ferias libres, con el objetivo de disminuir el costo de la canasta básica.

Promoveremos el consumo de productos nacionales.

El Municipio será el promotor y regulador en materia de abastecimiento alimentario. Como promotor, construyendo la infraestructura necesaria para el acopio y venta de los productos del agro y el mar, como forma de estimular la competencia, además de estimular la agricultura y la pesca. Como regulador, vigilando la calidad y el estado de los productos que se expenden para proteger la salud de los consumidores, y aplicando las sanciones que establece la ley.

No es un secreto para nadie que el Mercado de Abastos no cumple con los requerimientos mínimos para la labor que debe desarrollar. En nuestras periódicas visitas hemos comprobado el deterioro de su infraestructura, la insalubridad y la inseguridad reinante. Las aguas negras corren por todos lados y los ratones muerden las frutas y legumbres en la noche, con la consabida pérdida. En la época de lluvia los locales se inundan y muchos de los productos se dañan. Por las noches, los ladrones se cuelan por el techo para robar.

Como hemos señalado anteriormente, el Mercado de Abastos requiere de una modernización y transformación que beneficie a todos los sectores. Los productos se están perdiendo y el pueblo panameño no los puede consumir.

El Mercado de Abastos se inauguró en 1984 con el objetivo de que los agricultores pudieran ofrecer sus productos a un precio más económico que beneficiase a los consumidores particulares, al no existir los intermediarios. Sin embargo, actualmente los principales clientes son las empresas poseedoras de restaurantes y/o hoteles.

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El Municipio de Panamá tiene entre sus responsabilidades la administración de los mercados de: Marisco, Abastos, Buhonerías y Artesanías, El Chorrillo, Público de San Felipe y el Centro Municipal de Artesanías.

Le solicitamos al lector que nos escriba a bernalalcalde2009@gmail.com y nos haga el favor de decirnos: si ha sentido el incremento de los precios de los bienes de primera necesidad y se ha visto obligado a cambiar sus hábitos de vida; ¿cómo ha enfrentado los aumentos de precios?; ¿qué % del ingreso familiar lo gasta en alimentos?; ¿cuántas veces a la semana come carne, pescado, frutas y vegetales?; ¿cuántas veces al día sus hijos toman leche?; y cómo la Alcaldía puede contribuir a atenuar los efectos de la crisis alimentaria.

Nuestro Plan de Salud es el instrumento de planificación y programación del sistema sanitario de la capital de Panamá. En él se recogen la valoración de las necesidades de salud de la población capitalina, los objetivos básicos de salud y las prioridades de política sanitaria. El marco de referencia utilizado para la elaboración del mismo, contempla las principales estrategias que emanan de los organismos supranacionales, especialmente del documento de Salud para Todos en el siglo XXI, de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

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En nuestra gestión, el municipio capitalino buscará contribuir a mejorar el nivel de salud de la población de la capital y disminuir las brechas de inequidad a través de la acción coordinada con participación ciudadana, sobre los determinantes sociales que generan estas inequidades. Para esto se propone un trabajo de:

1. Desarrollo de conocimiento y apoyo político.

2. Medición y monitoreo de inequidad en salud y la responsabilidad compartida con la ciudadanía.

3. Respuestas concretas que podemos desarrollar desde la Alcaldía, dentro del sector salud.

El objetivo general que nos motiva es el de promover la equidad y la calidad en la salud de la población capitalina. Acompañado, claro está, de objetivos específicos, tales como:

1. Disminuir las desigualdades en salud, por la vía de otorgar mayor protección social y acceso universal a la atención de salud de los capitalinos.

2. Promover una alimentación saludable adaptada a todos los grupos de edad, género y estados de salud.

3. Realizar educación para la salud sobre promoción de hábitos higiénico-dietéticos saludables.

4. Promover hábitos saludables de alimentación, actividad y ejercicio físico en todas las comunidades de la comuna capitalina.

5. Priorizar la prevención y el control del sobrepeso y la obesidad en la infancia y adolescencia.

6. Intervenir adecuadamente ante el sobrepeso y la obesidad, adaptando estrategias a cada grupo poblacional.

7. Ampliar la intervención educativa desde los equipos de atención primaria dirigidos a personas con patologías prevalentes relacionadas con la dieta y el anciano frágil o de alto riesgo.

8. Fomentar la incorporación de la valoración nutricional en las actuaciones de los equipos de salud y dirigidas a colectivos más sensibles.

9. Prevenir los problemas de salud de alta prevalencia relacionados con prácticas alimentarias incorrectas.

Medio ambiente y urbanismo

El debate generado durante décadas, debido a la degradación del medio ambiente, fue colocado en la arena internacional con la formulación en 1987, del Informe Brundtland, titulado Nuestro Futuro Común. Este documento introdujo el concepto de desarrollo sustentable, para designar al desarrollo que permite satisfacer las necesidades humanas, sin hipotecar los recursos para que las próximas generaciones puedan satisfacer las suyas.

Posteriormente, en la Conferencia de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo, celebrada en 1992 en Río de Janeiro, se aprobó la Agenda 21, que exhorta a los gobiernos a proponer políticas y programas para tener un equilibrio duradero entre consumo, población y capacidad de sustento de la tierra.

Se pone así de manifiesto que sólo basándose en la explotación racional de los recursos naturales, es posible lograr el desarrollo económico.

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Objetivos:

1- Recuperar y mantener el patrimonio natural de Panamá: Incorporar consideraciones ambientales en las decisiones y actividades del Municipio,

para la paulatina transformación del sistema productivo/destructivo en un modelo que no deteriore el patrimonio natural.

Generar una masa crítica, técnica y científica, que fortalezca la capacidad del Municipio para fiscalizar los proyectos que garanticen un desarrollo sostenible.

Sensibilizar a la sociedad sobre la importancia de los recursos naturales.

Generar un sano orgullo sobre la riqueza botánica de la capital, que convierta a la sociedad civil en custodio de la naturaleza.

Promover en el área capitalina la conservación de la cuenca hidrográfica del Canal.

Ejecutar un plan de reforestación y formación en el uso adecuado de los bosques.

Estimular la expansión y manejo de la superficie de rastrojos y bosques secundarios.

Mejorar el uso de los suelos.

2- Rescatar el hábitat urbano Impulsar el establecimiento de un sistema de aguas servidas en todas las

comunidades capitalinas.

Establecer políticas municipales de manejo de desechos sólidos, que incluya el reciclaje de la basura.

Recuperar los ríos, quebradas y playas existentes en el Municipio.

Rescatar la bahía y las áreas costeras.

Recuperar el malecón de la avenida Balboa.

Incorporar aspectos económicos a la evaluación ambiental, bajo el principio de la responsabilidad económica de quienes ocasionen el deterioro ambiental en la capital.

Utilizar mecanismos de mercado y el uso de los derechos de propiedad en la solución de los problemas ambientales.

Fiscalizar y defender la sostenibilidad ambiental, reclamando la participación de las autoridades y dependencias del Municipio en los proyectos y decisiones que correspondan al Gobierno y a la Administración Pública Nacional.

Construir y reparar aceras.

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3- Fiscalizar que los servicios de aseo y ornato público, agua potable, alcantarillado y alumbrado público se brinden con la calidad adecuada.

Aseo y ornato público: El programa de aseo y ornato público debe diseñarse en función de las características de cada barrio. Además de la eliminación de los desechos (barrido, recogida, almacenamiento y disposición final), debe implementarse una política de educación, que le enseñe al ciudadano a seleccionar y acondicionar la basura en su hogar, para evitar su acumulación y facilitar su eliminación y/o reciclaje, mediante campañas permanentes de educación, utilizando los medios de comunicación y los centros escolares y sanitarios.

Hay que tener presente que higiene es salud y que limpia es la persona que no ensucia, que limpiar es relativamente fácil, pero mantenerlo limpio es lo difícil. Por lo tanto, el programa debe elaborarse teniendo en cuenta los siguientes aspectos:

Barrido y recolección (instalación de papeleros, basureros públicos y contenedores para el reciclaje).

Acarreo (vehículos recolectores compactadores y vehículos convencionales: triciclos, carretillas, etc).

Disposición final (tratamiento de botaderos y rellenos sanitarios).

Vigilancia y sanciones por infracciones de las normas de limpieza.

El servicio de aseo y ornato público puede tercerizarse, siempre y cuando sea en beneficio de micros y pequeñas empresas nacionales, que garanticen reducir los costos, sin disminuir la calidad del servicio que se merece el ciudadano.

Agua potable: El Municipio debe fiscalizar que a todas las comunidades se les realice el abastecimiento constante de agua, con la calidad necesaria para el consumo humano, o sea, que sea potable.

En aquellos lugares donde inicialmente, no se pueda garantizar el suministro de agua que debe garantizar el acueducto a todas las comunidades, el Municipio promoverá su abastecimiento por medios adecuados como los camiones cisternas, controlando que no se cobre por este servicio.

En estos casos, el Municipio difundirá los medios adecuados para hacer consumible el agua: hervido, uso de filtros o pastillas.

Para poder lograr todo lo anterior, el Municipio promoverá que la dirección municipal del IDAAN tenga en cuenta:

Fuentes de abastecimiento.

Redes de distribución y conexiones domiciliarias.

Servicios públicos de abastecimiento de agua mediante camiones cisternas.

Reducción de pérdidas por el uso eficaz de la medición y el cobro del agua realmente consumida.

Alumbrado público: La privatización de los servicios de generación y distribución de electricidad no exime al Municipio de su responsabilidad de garantizar que todos los barrios cuenten con el

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adecuado alumbrado público, que además, es una forma de proteger al ciudadano de la inseguridad que reina en la capital.

El programa debe contener acciones destinadas a:

Priorizar los barrios en peores condiciones, garantizando los recursos necesarios para que se dote de alumbrado público donde se carezca de él.

Organizar a los ‘Vecinos vigilantes’, para que avisen al Municipio cuando se produzca alguna deficiencia en el servicio, como puede ser luminarias encendidas durante el día o apagadas durante la noche.

4- Promover el reordenamiento territorial de la capital.

Es necesario planificar para transformar el distrito capital, evitando que la alcaldía vaya a la zaga y enfrente con eficacia problemas como el de la urbanización desordenada, que está controlada por los grandes empresarios de la construcción, que genera graves daños medioambientales, como los ocasionados durante la última década por la pésima gestión municipal del PRD.

Es imprescindible cambiar las concepciones irracionales que se vienen utilizando en la capital, para realizar las construcciones de viviendas, que están produciendo afectaciones al medio ambiente y, por ende, a la calidad de vida del ciudadano. Es necesario aplicar una limitación de altura en la avenida Balboa, San Francisco, Bethania y El Cangrejo.

Hay que pensar en la unidad vecinal como el módulo urbano básico, la cual reúne a un número de habitantes en torno a la escuela primaria y los comercios a los que se va diariamente.

Entre dos unidades vecinales se debe construir una casa comunal, un ‘club’, donde se reúnan los vecinos y puedan organizar una fiesta o una función teatral, con talleres para escultura, cerámica, pintura o lo que ellos decidan hacer. Y una zona para realizar deportes. Debe convertirse en un verdadero centro social con una pequeña cafetería. Todo esto favorece los encuentros y crea un sentido de comunidad que tiende a evitar uno de los problemas de las grandes ciudades, la falta de comunicación.

Estas unidades vecinales deben tener vías circundantes y parques localizados a distancias peatonales. El alcalde de Medellín destaca la importancia de los parques y espacios públicos para la transformación de la sociedad.

Además, la concreción de un proceso de integración articulada entre la capital y los municipios urbanos vecinos –ciudades dormitorios para muchos ciudadanos-, constituye una condición sine quanon para su desarrollo socioeconómico.

Se trata en primer término, de definir la ciudad que queremos. Tenemos que recuperar el tiempo perdido. Tenemos que pensar en un modelo de ciudad que sea capaz de revitalizar la disfunción urbana que padecemos. Eso sólo será posible con la participación de todos. Les solicitamos a ecologistas, arquitectos, urbanistas y a todos los ciudadanos preocupados por recuperar nuestra ciudad, a que nos den su opinión al respecto.

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En medio ambiente y urbanismo nos comprometemos a:

Hacer las gestiones pertinentes para adherir la Alcaldía al Pacto Mundial de las Naciones Unidas, para lo cual dejaremos constancia escrita de la política que vamos a ejecutar en cuanto a Derechos Humanos, derechos laborales, medio ambiente y lucha contra la corrupción.

Impedir que se extiendan permisos de construcción que afecten la calidad de vida, siguiendo las normas internacionales vigentes.

Promover mecanismos de alianza estratégica entre las universidades, el sector productivo, las organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, para incentivar la investigación y alternativas no contaminantes.

Crear una comisión ad honorem para la conservación del medio ambiente.

Analizar con las organizaciones ecologistas cómo realizar el mejor control del uso y ocupación del suelo.

Coordinar con el sector privado y las organizaciones ecologistas la creación y mantenimiento del espacio público en la ciudad.

Promover el mantenimiento y construcción de espacios públicos.

Incorporar consideraciones ambientales en las decisiones y actividades del municipio capitalino, para la paulatina transformación del sistema productivo/destructivo en un modelo que no deteriore el patrimonio natural.

Generar una masa crítica, técnica y científica, que fortalezca la capacidad del Municipio para fiscalizar los proyectos que garanticen un desarrollo sostenible.

Fortalecer las acciones de control y sanción del incumplimiento de las normas ambientales.

Sensibilizar a la sociedad sobre la importancia de los recursos naturales.

Generar un sano orgullo sobre la riqueza botánica de la capital, que convierta a la sociedad civil en custodio de la naturaleza.

Promover en el área capitalina la conservación de la cuenca hidrográfica del Canal.

Ejecutar un plan de reforestación y formación en el uso adecuado de los bosques. Desarrollaremos la campaña ‘Un árbol por alumno’.

Estimular la expansión y manejo de la superficie de rastrojos y bosques secundarios.

Mejorar el uso de los suelos.

Recuperar y construir parques.

Impulsar el establecimiento de un sistema de aguas servidas en todas las comunidades capitalinas.

Establecer políticas municipales de manejo de desechos sólidos, que incluya el reciclaje de la basura.

Recuperar los ríos, quebradas y playas existentes en el Municipio.

Fiscalizar que se rescaten la bahía y las áreas costeras.

Incorporar aspectos económicos a la evaluación ambiental, bajo el principio de la responsabilidad económica de quienes ocasionen el deterioro ambiental en la capital.

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Fiscalizar y defender la sostenibilidad ambiental, reclamando la participación de las autoridades y dependencias del Municipio en los proyectos y decisiones que correspondan al Gobierno y a la Administración Pública Nacional.

Construir y reparar las aceras de todos los corregimientos.

Fiscalizar que los servicios de aseo y ornato público, agua potable, alcantarillado y alumbrado público se brinden con la calidad adecuada.

Impulsar estrategias para el manejo de residuos peligrosos: baterías, fármacos, plaguicidas, etc.

Fomentar campañas de reciclaje, valorización y disposición de residuos sólidos.

Promover las prácticas de eficiencia energética (protocolos de ahorro y mejor uso)

Mantener en buenas condiciones técnicas el equipamiento de DIMAUD.

Garantizar que la prestación del servicio de aseo se haga con calidad.

Lavar semanalmente los parques y las plazas públicas.

Implementar la campaña ‘Basura por comida’.

Eliminar los depósitos de basura improvisados.

Incentivar la participación de grupos vulnerables para el desarrollo de iniciativas productivas orientadas al aprovechamiento de los residuos sólidos.

Instalar ‘tinacos’ en todos los corregimientos.

Hacer las gestiones pertinentes que permitan realizar alianzas estratégicas con los sectores productivo y comercial, para facilitar un sistema de clasificación y presentación de residuos sólidos.

Educar a la ciudadanía, para que comprenda el daño que le causa a la sociedad cuando se lanza un papel, una lata o una botella a la calle; cuando se estaciona un vehículo en forma inadecuada. Pero también vamos a aplicar la ley, para castigar a los infractores. Por ejemplo, en Vía Argentina, en frente del parque Andrés Bello, hay rampas para facilitar el acceso a personas discapacitadas, sin embargo, estacionan vehículos que impiden que esas personas puedan utilizar las rampas. Esto no quedará en la impunidad.

Impedir que se expidan permisos a centros de recreación que atenten contra la comunidad.

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Finanzas, participación ciudadana y transparencia

Nuestra gestión estará dirigida a sanear las finanzas municipales, comenzando por disminuir los gastos innecesarios y aumentar los ingresos.

Disminuir los gastos innecesarios Iniciar la generalización de la Intranet corporativa, lo cual permitirá reducir el consumo de

papel y aumentar la eficiencia.

Utilizar 10% de papel reciclado en fotocopiadoras, impresoras y fax.

Utilizar 50% de papel reciclado en papel de escritura y los materiales de oficina de vida corta (libretas, ‘blocs’, agendas, etc.), así como los impresos de uso cotidiano (tarjetas, sobres, carpetas de expedientes, etc.)

Eliminar la publicidad innecesaria.

Aumentar los ingresos Actualizar y sistematizar el Catastro Municipal, como fuente de generación y administración

del ingreso municipal.

Reestructurar las fuentes de ingreso del Municipio, en beneficio de los sectores más desfavorecidos, para lo cual se propondrá cambiar la estructura impositiva.

Incentivar la creación de micro y pequeñas empresas, con lo cual aumentarán los ingresos municipales. Se llevarán a cabo acciones orientadas a estimular la legalización de las micros y pequeñas empresas.

Hacer las gestiones pertinentes para que los bancos amplíen los recursos y líneas de crédito que permita crear micros y pequeñas empresas.

Iniciar los estudios de la estructura impositiva con el objetivo de beneficiar a las micros y pequeñas empresas.

Promover la cultura tributaria.

Fortalecer los mecanismos para el control de la evasión fiscal.

Hacer las gestiones necesarias para crear alianzas estratégicas con la empresa privada, en la búsqueda del desarrollo sostenible de la capital.

Propiciar la participación de la empresa privada en la construcción de viviendas de interés social.

Atraer inversiones de empresarios reconocidos por su compromiso con el desarrollo sostenible, inversiones que estarán dirigidas a lograr que nuestra capital tenga la mejor calidad de vida en la región.

Desarrollar fuentes alternativas de ingreso como el ecoturismo. Panamá es la única ciudad en el mundo que cuenta con bosques, como el Parque Metropolitano.

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Participación ciudadana y transparencia Fortalecer la participación ciudadana. Los proyectos de Acuerdo lo podrán proponer todos

los ciudadanos y las organizaciones sociales, además de los concejales y el alcalde.

Convocar a un cabildo abierto en cada corregimiento, cuando el alcalde objete un proyecto. El cabildo será el que decidirá.

Convocar a un cabildo abierto en cada corregimiento, cuando el Concejo no apruebe un proyecto presentado por el alcalde.

Promover la transmisión regular de las sesiones del Concejo Municipal en los medios de comunicación del Estado.

Acercar la Alcaldía al concepto de gobierno transparente y en línea. Se podrá ver en Internet las sesiones del Concejo en tiempo real (cuando se está realizando).

Publicar en Internet y en los periódicos los proyectos de Acuerdo.

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