¿Fue Gagarin El Primer Cosmonauta Que Viajo Al Espacio R-006 Nº090 - Mas Alla de La Ciencia -...

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El astronauta soviético Yuri Gagarin pasó a la historia como el primer ser humano que viajó al espacio, inaugurando una nueYa era para Ia Humanidad. Pero, ¿fue realmente el primero? flatos aparecidos recientemente apuntan la posibilidad de que no fuera así, de que fuera otro soviético -que murió y de ahí el silencio oficial sobre el caso- quien lo lograse. Víctor Arenas nos lo cuenta. A falta poco. El teniente Valentin Vasilievich Bon- darenko empieza a sen- tirse peor de lo que jamás hubiera imaginado. Son casi diez dí- as de completo aislamiento, ence- rrado, enterrado en vida en una cá- mara hermética insonorizada. Pero éste es el trabajo de los cosmonau- tas cuando no están en el espacio: entrenarse y aprender. Valentin es un buen hombre, un magnífico piloto de pruebas y un candidato discipli- nado y entregado al programa. Su país, la Unión Soviética, se prepara para realizar la mayor haza- ña concebida por el hombre. Esta- mos a 23 de Marzo de 1961. En unas tres semanas el primer vehí- culo tripulado hollará el espacio y hará realidad el sueño imposible. La única incógnita es saber quién su- bi:,á a bordo del vehículo y quién, por tanto, se apoderará de la gloria imperecedera. Bondarenko sabe ya que no será el afortunado moftal que consiga la gesta. Elegido en 1960 como candi- 34 dato a cosmonauta, ha quedado fuera del selecto grupo de seis hombres que se prepararan para la misión. A pesar de todo, su compromiso con el proyecto no ha pasado desapercibido por sus superiores. Quizá tenga una oportunidad futura. Mientras, ayudará en lo que pueda. Y esto es precisamente lo que el joven nacido en 1937 está haciendo ahora: encerrado en esta cáma- ra de aislamiento, ayuda a los médicos a averiguar cómo se comporta el ser humano bajo ciertas condiciones ambientales. Bondarenko no sólo se encuentra casi incomunicado; además, la at- mósfera que respira se encuentra muy enrlquecida con oxígeno (hasta el 50 por ciento). Asívivirán, en par- te, los cosmonautas que viajen al espacio, y lo harán porque para aho- rrar peso es necesarlo reducir la pre- sión del aire de la cabina, lo que, a su vez, obliga a aumentar el porcen- taje de oxígeno para que la mezcla sea respirable. Y el silencio... Ningún sonido penetra desde el exterior -tal y co- mo ocurrirá en órbita alrededor de la Tierra- y es preciso aprender a resistir la presión psicológica sub- yacente. LA CÁMAHA TdOHTAL A pesar de no haber sido seleccio- nado, Valentin está siguiendo el mis- mo entrenamiento que sus compañe- ros. Hoy es su último día en la cámara,la hora de realizar algunas pruebas médicas para ver cuál es su estado físico y anímico.

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TEMARIO

Transcript of ¿Fue Gagarin El Primer Cosmonauta Que Viajo Al Espacio R-006 Nº090 - Mas Alla de La Ciencia -...

El astronauta soviéticoYuri Gagarin pasó a lahistoria como el primerser humano que viajó

al espacio, inaugurandouna nueYa era para Ia

Humanidad. Pero, ¿fuerealmente el primero?

flatos aparecidosrecientemente apuntan

la posibilidad de queno fuera así, de quefuera otro soviético

-que murió y de ahí elsilencio oficial sobre elcaso- quien lo lograse.

Víctor Arenasnos lo cuenta.

A falta poco. El tenienteValentin Vasilievich Bon-darenko empieza a sen-tirse peor de lo que jamás

hubiera imaginado. Son casi diez dí-as de completo aislamiento, ence-rrado, enterrado en vida en una cá-mara hermética insonorizada. Peroéste es el trabajo de los cosmonau-tas cuando no están en el espacio:entrenarse y aprender. Valentin esun buen hombre, un magnífico pilotode pruebas y un candidato discipli-nado y entregado al programa.

Su país, la Unión Soviética, seprepara para realizar la mayor haza-ña concebida por el hombre. Esta-mos a 23 de Marzo de 1961. Enunas tres semanas el primer vehí-culo tripulado hollará el espacio yhará realidad el sueño imposible. Laúnica incógnita es saber quién su-bi:,á a bordo del vehículo y quién,por tanto, se apoderará de la gloriaimperecedera.

Bondarenko sabe ya que no seráel afortunado moftal que consiga lagesta. Elegido en 1960 como candi-

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dato a cosmonauta, ha quedadofuera del selecto grupo de seishombres que se prepararan parala misión. A pesar de todo, sucompromiso con el proyecto noha pasado desapercibido porsus superiores. Quizá tenga unaoportunidad futura. Mientras,ayudará en lo que pueda. Y estoes precisamente lo que el jovennacido en 1937 está haciendoahora: encerrado en esta cáma-ra de aislamiento, ayuda a losmédicos a averiguar cómo secomporta el ser humano bajociertas condiciones ambientales.

Bondarenko no sólo se encuentracasi incomunicado; además, la at-mósfera que respira se encuentramuy enrlquecida con oxígeno (hastael 50 por ciento). Asívivirán, en par-te, los cosmonautas que viajen alespacio, y lo harán porque para aho-rrar peso es necesarlo reducir la pre-sión del aire de la cabina, lo que, asu vez, obliga a aumentar el porcen-taje de oxígeno para que la mezclasea respirable.

Y el silencio... Ningún sonidopenetra desde el exterior -tal y co-

mo ocurrirá en órbita alrededor dela Tierra- y es preciso aprender aresistir la presión psicológica sub-yacente.

LA CÁMAHA TdOHTAL

A pesar de no haber sido seleccio-nado, Valentin está siguiendo el mis-mo entrenamiento que sus compañe-ros. Hoy es su último día en lacámara,la hora de realizar algunaspruebas médicas para ver cuál es suestado físico y anímico.

i1W

ffiffiffiUnos minutos más tarde, la Pe-

queña tortura autoinfligida'finaliza.Bondarenko recibe la orden de extra-er los sensores que se hallan pega-dos a sus manos y muñecas. Nobasta sólo con retirarlos, sino quehay que limpiar también la superficiede la piel con alcohol. Empapando al-godón, el futuro cosmonauta realizala operación con ciefta impaciencia.Entonces, sin mirar, tira los hÚmedosy suaves pedazos hacia atrás.

En la estrecha estancia, éstos caenmuy cerca, pero antes hacen contac-to con el anillo incandescente de laestufa que mantiene el recinto a unatemperatura preprogramada. La lla-marada es inmediata. En una atmós-fera borracha de oxígeno, los algodo-nes arden como antorchas mientrasBondarenko intenta apagarlos. No leparece necesario dar la alarma. Massu excesivo celo se convierte prontoen una mala idea: su propio traje seinflama por la proximidad.

Fuera, el doctor de guardia acabapor apercibirse del incendio, quequema con virulencia todo Io quesea combustible. Cuando el médicoreacciona, intenta abrir la puefta delrecinto. No obstante, la operación esmás complicada de lo que pudierasuponerse. Con la cámara a menorpresión hay que proceder primero aigualar ambas atmósferas; de lo con-trario, el sujeto podría morir. La ma-niobra, finalmente, dura algunos mi-

nutos, los más largos de la vida deBondarenko. Cuando éste es final-mente extraído de la cámara morlal,todavía se halla consciente. Lo bas-tante como para no cesar de rePetir:"Ha sido culpa mía, nadie tiene quepagar por mf'. Ocho horas de inter-venciones en la mesa del cirujano noson suficientes. Las quemaduras,que cubren todo su cuerpo, le sitúanen un estado de shock del que ya nose recuperará. Fallece, dolorosamen-te, a las tres de la tarde.

Su muede, sin embargo, no le se-rá comunicada a sus compañeros.Ante la cercanía del lanzamiento delVostok-1, una noticia así sería de-vastadora para la moral del gruPo.Los detalles de su muede permane-cerán secretos durante 25 años,hasta que el periódico lzvestia, enAbril de 1986, los desvele finalmentealaluz pública.

¿LA Pffi§MffiffiA ilSUffiffiTffi?

No fue la única muerte. En Occi-dente se había conocido dos añosantes -en 1984- una historia similar,a raíz de la publicación del libroDoctor ruso, en el que su autor, unmédico emigrante soviético llamado

Balo xtas línea.so eI Sputnik-2, e* cuyointerior viajó at espacio el primer ser vi*o dela Tienq la perrila I'aifut, u quim pademas

ver m lafotografio- En ta página antetior,Yuri Gagari*, primerbombre que salió aI

es¡tado -en el interior del Vostak-I-,cápsuÍa que

podemos verjunto a

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Vladimir Golyakhovsky, contaba al-gunas de sus experiencias en su lar-ga carrera dentro y fuera del régi-men comunista. Una de ellas, porcierto, sospechosamente similar a lodivulgado por lzvestia en 1986.

Según Golyakhovsky, una inciertanoche de Octubre de 1960 fue recla-mado como cirujano-traumatÓlogojefe del hospital de Botkin para asis-tir a un herido grave que llegó en unaambulancia militar. Tras el primerexamen, el doctor apreció que noquedaba sobre él ni un solo centíme-tro cuadrado de piel (a excepción dela de las plantas de los pies), ni ca-bellos en su cabeza, ni siquiera ojosen su rostro. Todo ello había ardidoyigorosamente momentos antes. Pe-ro, sorprendentemente, el hombre vi-vía y pedía un calmante para el dolor.Golyakhovsky, que no encontraba unlugar donde colocarle una inyecciónintravenosa de morfina, acabó Porponérsela en uno de los pies.

Fue entonces cuando se le informóde la naturaleza de lo ocurrido. El jo-ven provenía del lnstituto de lnvestiga-ción Espacial y había sufrido un acci-dente durante un exPerimento, unahora antes. Los oficiales que lo acom-pañaron hasta el hospital dijeron quesu nombre era Sergeyev y que sepreparaba para el primer viaje espa-cial. La cámara en la que ocurrió todoera un modelo funcional de las cápsu-las que, pocas semanas más tarde, seiban a usar para enviarle al espacio.

Se hizo lo imposible Por salvarle.Golyakhovsky le administró drogas"secretas" traídas ex profeso de otrolugar del país, lo que parece ser co-laboró a que sobreviviera otras 16horas. Pero el "milagro" se acabópronto y eljoven murió.

Lo sorprendente de esta historia,en cualquier caso, es que -segúnGolyakhovsky- la dirección del pro-yecto asignó a otro joven oficial alhospital para responder a las llama-das telefónicas que, sin duda, se re-cibirían. Golyakhovsky hablÓ con éltras el fallecimiento y explica que, desus afirmaciones, se desprendía quese había tratado de un accidente"estúpido". Según el oficial -¡que re-sultó ser nada menos que Gagarin!-,Sergeyev estaba al final de unaprueba de tres días en el interior desu modelo de nave esPacial cuando,al intentar calentar su cena en unpequeño horno eléctrico, no se diocuenta de la presencia de un trozode trapo que hacía contacto con el

anillo. Cuando éste se Puso al rojo,el trapo se inflamó y ni siquiera elextintor de emergencia pudo acabarcon el subsiguiente incendio de I.a

cabina, cuyo aire -enriquecido con

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A la izquierda de Iapáginq an Sputntk-Z

corc un perrito en suinterior; a su

derecha, una tápsufaVostok instalaels en

el cohetg u taileredw, uno de losasienÍos de eyeccióniruytaladas en ellu

§n Iapúginasiguimtq en el

ceutro, a laizquiercl«, Yuri

{}agarin dirigíéndosea la rampa de

lanzamianto eneompañía de Titov;a su derechu, coheteSoyuz, dos de cuyas

navec vie¡onahoñodo su ascensodurante las primeras

fas* dc lanzamimto.Debajo, a la

izquierdq un eoheteR-7 con wtc cápsulaVostolg a su derecha,primer plano de los

motordí

oxígeno-, generó una ¡mpresionantellamarada de miles de grados detemperatura que abrasó al cosmo-nauta. La apertura de la puerta de lacámara, incluido el bombeo de aire,que precisaba más de media hora,hizo que aquel infodunado soviéticoestuviera ardiendo todo ese tiempo.

¿DOS VERSTONES PARA UNMISMCI ACCIDENTE?

Ahora bien, el hecho de que amboscasos se refirieran a algo que ocurrióantes del vuelo de Gagarin en el yos-tok-l, ha hecho especular a ciertosespecialistas sobre la posibilidad deque ambas historias -si es que nofueron la misma- se tratasen en reali-dad del resumen de un episodio In-ventado para encubrir un accidenteespacial-no en tierra- de los cosmo-nautas sovléticos, caso que luegoaparecería en los años ochenta defor-mado por el paso del tiempo y elopoftunismo de quienes lo contaron.

Sin embargo, la verdad es queaunque tanto la versión de lzvestiacomo la del doctor emigrado se pare-cen mucho, no son iguales. Difieren

en el nombre del quemado, en la du-ración del experimento, en la fechadel suceso y en otros detalles, comoel período de supervivencia. Además,es fácil descubrir que Bondarenko síexistió y que, casi con total seguridad,murió en tierra durante unas pruebas.

Ahora bien, sí cabe preguntarsecómo Gagarin, que tres semanasdespués iba a convertirse en el ma-yor héroe de la historia de la UniónSoviética comunista, pudo ser asig-nado a la tarea de velar por la suertede su compañero. Una explicaciónpuede ser que Bondarenko sí estabaen el grupo de los seis seiecciona-dos para volar en las Vostok, queestaba destinado a ser el primerhombre en el espacio y que Gagarinera en realidad el "primer reserva" ypor eso le habría asistido en sus últi-mos momentos, convirtiéndose asíen su digno sucesor. Claro que tam-bién cabe preguntarse si Bondaren-ko fue realmente el primer muerlo dela carrera espacial por pade soviétl-ca o si, por el contrario, no habríahabido otro accidente anterior y quehubiera sido igualmente ocultadohasta el presente.

TECNOLOGIA INFERNAL

Antes de proseguir, debemos re-cordar que en esta temprana épocade la carrera espacial todo estabaregido por la competición y el presti-gio, y que se trataba de una carreracontra el tiempo y la adversidad, unapugna por el liderazgo en el Cosmosque reflejase ante la opinión públicamundial la verdadera preponderan-cia militar, económica, ideológica ytecnológica de cada superpotencianuclear ante la otra en Ia llamadaGuerra Fría.

Carrera que se había iniciado conel Sputnik-l, es decir, en la órbita te-rrestre y con los satélites artificialesautomáticos, y que continuó con elSputnik-2 y la perrita Laika a bordo-primer ser vivo terrestre en salir alespacio-, quedando claro que laURSS soñaba con llevar algún día aun hombre al espacio. Los nortea-mericanos, por supuesto, no podíanpermitir tal cosa y crearon la NASA(una agencia civil específica para laexploración espacial), planificandotoda una verdadera pléyade de pro-gramas de todo tipo, incluyendo losvuelos tripulados, enmarcados en elProyecto Mercury, a los que debíanseguir los viajes a la Luna, entoncesalgo casi impensable.

La URSS, por supuesto, tenía lasmismas intenciones: ser los prime-ros en llevar un hombre al espaciopara demostrar que el comunismoera superior al capitalismo.

Y, sin embargo, la verdad es quela tecnología que debía de servir pa-ra mantener con vida a un ser vivo

en el espacio estaba a años luz de lade cualquier satélite artificial. Por-que, en primer lugar, la cápsula teníaque ser capaz de volver a Ia Tierra; y,en segundo, debía proporcionar a suocupante todo lo necesario para susupervivencia hasta ese momento.

El caso es que la dirección del pro-grama ruso acabó eligiendo un diseñoque estaba ya desarrollando para susfuturos satélites espía: una cápsula lla-

mada Zenit, capaz de soportar el ro-zamiento atmosférico y llegar al suelointacta para que sus valiosos conteni-dos -información fotográfica de lasdefensas nodeamericanas, por ejem-plo- fuesen recuperados. Y pensaronque si vaciaban el vehículo de cáma-ras y teleobjetivos, habría suficienteespacio en su interior para un hombre.Y dicho y hecho. La Zenit pasó así adenominarse Vostok, llevándose susvuelos de prueba a cabo bajo la eti-quefa Korabl. El primero -el Sputnik-4- selanzó el 15 de Mayo de 1960. Yla cápsula, lanzada por un misil inter-continental R-7, alcanzó el espacio;sin embargo, al regresar se incineródebido a un fallo en el sistema deguiado. Claro que el siguiente vuelo+l 23 de Julio de 1960- aún fue peor,ya que elcohete explosionó 20 segun-dos después del despegue, matandoa los inquilinos del vehículo: dos pe-rros llamados Chaika y Lisichka.

El éxito, sin embargo, sonreiría alos rusos a continuación: el Sputnik-5 rodeó la Tierra y fue recuperado el19 de Agosto con los perros Belka yStre/ka a bordo. Después, el Spuf-nik-6 volvió afallar al morir sus hués-pedes durante la reentrada, el 1 deDiciembre. Tres semanas despuésotro cohete, llevando esta vez unaVostok, no consiguió alcanzar el es-pacio, aunque parece que los dosperros que viajaban en ella consi-

guieron aterrizar. En cuanto a las dosúltimas cápsulas -Sputnik-9 y 10-dieron con éxito una órbita alrededorde la Tierra en Marzo de 1961, apro-bándose definitivamente el diseño.

Como el lector podrá comprobar,el ritmo de pruebas y su númeropuede considerarse alocado, peroes que los norteamericanos estabanponiendo a punto su Mercury y tení-an posibilidades de ser los primerosen enviar un hombre al espacio. Nodebe, pues, extrañar que algunas delas misiones fallaran y que el vuelode Gagarin fuese casi un arriesgadointento a ciegas, de la misma formaque el primer vuelo del Mercury fueanunciado varias veces como inmi-nente, aunque después se retrasararepetidamente.

§I. PELIüRܧO VIAJE DEGAGARIN

Por fin, el Vostok-l, con Yuri Ga-garin "a los mandos", pariió el 12 deOctubre. Claro que esta expresiónno es apropiada. Porque durante supeligroso periplo, el cosmonautanunca pudo controlar la nave: supresencia formaba parte sólo de lamaquinaria propagandista de laURSS y actuó más como un coneji-llo de indias que como piloto.

De hecho, los ingenieros automa-tizaron todos los procesos (lanza-

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NUI.oJLlJzl

miento, operación orbital y regreso).Nadie sabía qué le ocurriría a un serhumano al llegar al espacio y poreso los mandos del vehículo fueronsellados, a fin de que Gagarin no pu-diese manipularlos en el caso deque se volviera loco (posibilidadnunca descartada). Si se hubiesedeclarado una emergencia, Ias ins-trucciones para liberar los citadosmandos fueron escritas en un sobrecerrado que, a su vez, fue ocultadoen el interior de la nave. De este mo-do, Gagarin poco pudo hacer másque experimentar múltiples sensa-ciones y mirar por el ojo de buey,disfrutando de un paisaje nunca an-tes contemplado por ojos humanos.

El regreso también resultaría muypeligroso. Nadie estaba seguro deque la cápsula fuese capaz de ate-rrizar lo bastante suavemente comopara no matar a su inquilino. Poreso, el cosmonauta viajó atado auna silla equipada con un pequeñocohete. A poca altura sobre la su-perficie de Ia Tierra, se abrió una es-

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Yuri Gagarin se convirtióen un auténtico héroe paratodo el pueblo soviético;junto a estas líneas, elmonunxento que, en suhonor, se edificó atMoscít Hoy sabemos queprobablemmte no llegóhasta la superficie de laTierra con su cápsula, sinoque se lanzó m paracaídaspoco antes, cotno recogealegóricamente el dibuj osuperior. Arribq a laderech4 el cosmonautaPomarov -en la imagen"junto a Gagarin-, primeravíctima soviéticaofi ci alm ente reconocidaEn la página siguientq ala izquierda, Gagarin mlas calles de Moscú, yanombrado héroe de laaRSS; a la derecha, grupode siete astronaatúJelegídos ut EE. UU. parael Proyecto M*cury, queoriginó las prisassoviéticas en lacanreta espacial.

cotilla y Gagarin salió disparado porel orificio, tocando el suelo gracias asu propio paracaídas personal.

La gesta estaba hecha, pero has-ta su consumación las autoridadesrusas no la anunciaron al mundo. ln-cluso entonces, nada mencionaronde que Gagarin abandonó la navecomo medida de precaución, ya quelas leyes de la Federación Astronáu-tica lnternacional estipulaban que,para dar validez a un récord espacialtripulado, el cosmonauta debía pisartierra en el interior de su nave.

Hoy día nadie duda de lo que hizoGagarin y de la importancia casi le-gendaria de su empresa, acrecenta-da tras su trágica muer.te en un acci*dente de aviación. Pero en aquellaépoca la URSS no estaba dispuestaa dejar escapar tamaña primicia porun simple "detalle" de forma. Pero,para nosotros, la cuestión que seplantea ahora es si, con arreglo a lasnormas entonces establecidas, pue-de decirse que fue realmente Gagarinelprimero.

Durante los primeros años de sudesarrollo -entre 1956 y 1961-, el co-hete/misil R-7, utilizado para lanzarlos primeros satélites añificiales y lasprimeras sondas lunares, no era pre-c¡samente un modelo de fiabilidad,ya que su porcentaje de aciertos fueinferior al 50 por ciento. Asíque em-barcar a un hombre en semejantemáquina debió resultar un ejerciciode fe (o de interés político) considera-ble. Por otro lado, no sólo el cohetedebía funcionar bien, sino que ade-más la cápsula tenía que hacer lomismo.

Y, si nos fijamos en el listado delanzamientos de las cápsulasKorabl, nos daremos cuenta de quesi bien éstos se sucedieron muy rá-pidamente, existe una importantepausa entre Agosto de 1960 y Di-ciembre del mismo año (más aún sipensamos que antes y después losvuelos transcurrieron con una ca-dencia de uno por mes o más). Yello resulta todavía más extraño sitenemos en cuenta que la paraliza-ción ocurrió justo después del pri-mer éxito total del Sputnik-S.

Pues bien: la hipótesis actualmen-te barajada es que, tras aquel vuelo,sí se efectuó otro (se piensa que enOctubre, con motivo del aniversariode la Revolución soviética), peroacabó en desastre, quizá en la pro-pia rampa de lanzamiento o a bajaaltura. Y que si el hecho fue oculta-do es porque la cápsula habría lleva-do al primer cosmonauta de la histo-ria y sólo su fracaso obligó asilenciar todo lo relacionado con é1.

Ahora bien, eso no quiere decir queel tripulante muriese necesariamenteya que, dependiendo de la fase en laque se produjese el accidente, exis-tía la posibilidad de que pudiese es-capar mediante su sillón eyector.Por otra pañe, la misión del 1 de Di-ciembre (que sí se sabe con certezaque tuvo lugar) llegó al espacio... pe-ro la cápsula y sus contenidos sequemaron en la atmósfera durante el

§éLO §O§pECHAS

regreso. La versión oficial es, tam-bién, que en ella viajaba un perro,aunque la verdad quizá no se sepanunca.

Ahora bien, aceptando que enuna -o en ambas- de esas misio-nes, los soviéticos hubiesen lanza-do un hombre al espacio, ¿de quiénse trató? ¿Tal vez de Bondarenko?Difícilmente, puesto que el incendioen el que se vio implicado ocurriócerca de Moscú y las naves Vostokse lanzaban desde Baikonur, a mu-chos miles de kilómetros de distan-cia. ¿Quién, entonces?

Llegados a este punto hay quedecir que durante mucho tiempo lasautoridades rusas estuvieron distri-buyendo en Occidente una fotogra-fía del primitivo grupo de cosmo-nautas rusos, posando junto a unode los padres de la astronáutica:Sergei Korolev. Sin embargo, deforma sorprendente, apareció másadelante otra versión de la mismafotografía... en la que los soviéticos¡habían borrado de ella a uno de loscosmonautas que aParecían origi-nalmente! Cieftamente las razonesde ese hecho no están claras, peroa nadie puede extrañar que se es-pecule sobre tan "súbita desapari-

ción" y que algunos entiendan queaquel cosmonauta que fue "borra-do" de la foto habría muerto en unade las dos misiones "fantasmas"subsiguientes a la del Sputnik-í y,por tanto, hubiera sido la primeravíctima -anónima- de la carrera es-pacial. Y quién sabe si el primerhombre en haber salido al espacio.

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Lo que sí es evidente es que enesta fase de la carrera espacial nose admitía fallo de ningún tiPo Yque, si éste ocurría, no era hechopúblico. Y la verdad, no deja de lla-mar la atención que, tras la conside-rable cantidad de fracasos de todotipo, Gagarin tuviese la inmensasuerte de salir bien librado a la pri-mera oportunidad... Sobre todocuando se examinan de cerca las

deplorables condiciones tecnológi-cas, tanto de la cápsula como delcohete.

En definitiva, la era anterior a Ga-garin forma parte de la época másoscura de la Guerra Fría, por lo queno es de extrañar que, en caso dehaber ocurrido algo nefasto para laimagen del inmaculado proyecto es-pacial ruso, ello se hubiese ocultadobajo un fuerte secreto de Estado.Las cosas, sin embargo, han cam-biado y actualmente no transcurreun sólo año sin que los archivos exsoviéticos nos sorprendan con algu-na interesante revelación. Y si algomacabro ocurrió antes de Gagarin,acabaremos por saberlo. Mientras,nos conformaremos con dejar cons-tancia de las considerables posibili-dades de que ello sucediera. *

Texto y fotos: YíCTOR ARANA§

HEIKI . cEilrfio DE Lt z §unlrÁ

DIHECfOR:ALIAI{ZAñEIKI

- Pr€sidente de la- Maéstro de He¡k¡- Usui / T¡betano /- l¡astér en P.N.L." lnstrilclof de

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28 ¡coNTAGTO!Es indudable. Medios de comunicación que habitual-mente no se ocupan de !a presencia de OVNIs en nues-tros cielos dedican portadas enteras a! asunto y la tele-visión refleia ese interés en series de éxito como Expe-diente X al tiempo que los extraterrestres regresan alcine con Iargometraies espectaculares como lndepen-dence Day. ¿Qué ocurre? ¿Es una mera casualidad queeste interés de los medios coincida con un espectacularincremento de la actividad OVNI? Un artículo de JavierSierra.

¿FUE-GAGARIN EL PRIMER ASTRONAUTA QUEVIAJO AL ESPACIO?El astronauta soviético Yuri Gagarin pasó a la historiacomo el primer ser humano que viajó al espacio, inau-gurando una nueva era para la Humanidad. Pero, ¿fuerealmente el primero? Datos aparecidos recientementeapuntan la posibilidad de que otro soviético -que murió,y de ahí el silencio oficial sobre el caso- lo hubieseIogrado antes. Víctor Arenas nos lo cuenta.

¿MENTALISTA?: NO. MENTIROSO YMENTECATOHace unas semanas la manager de un popular ilusionistaargentino, Ricardo Schiariti, llamó a nuestra publicaciónpara proponer que se hiciera una enüevista a su represen-tado, afirmando que era un excepcional paragnosta' Nues-tro compañero Manuel Carballal aceptó comprobarlo,deiándole en evidencia al constatar que sus supuestospodercs eran simples trucos de ilusionismo.

¿ourÉNEs soN Los RoSAGRUGES?A lo largo de la historia han sido muchas las organiza-ciones que, con un marcado carácter hermético, hanpretendido ofrecer respuestas a los misterios insonda-bles de la vida y de la muerte, del universo material y delmundo trascendente, siendo una de las más importan-tes, al menos por su influencia en las sociedades de losúltimos siglos, !a Orden Rosacruz. Pero, ¿cuándo ydónde nació? ¿Quiénes la integran? ¿Cuántos son?¿Qué influencia tienen? ¿Guáles son sus obietivos? ¿Enqué creen? Carmen Quintana nos desvela algunas deesas interrogantes.

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56 ¿ouÉ PAsó EN TUNGUSKA? ¿EXPLOSIONóUNA BOMBA ATOMICA, CAYO UNMETEOR¡TO O SE UTILIZO EL ffRAYO DE LAMUERTE''?En la madrugada del 30 de Junio de 1908 un objetodesconocido irrumpía el silencioso trayecto del ríoTunguska, en plena tundra siberiana, estallando y pro-vocando un impresionante destello de luz y una tor-menta magnética. Mientras, en Estados Unidos, elprolífico inventor Nikola Tesla investigaba Ia fórmulade un potente transmisor de energía que bautizó como"Íayo de Ia muerte". ¿Tuvo algo que ver, tal comoapunta nuestro compañero Robert Goodman, el expe-rimento del visionario científico con el suceso de Tun-guska?

VIAJE AL PAíS DE LOS MUERTOS VIVIENTESA los occidentales el término vudú nos hace pensaren muñecos atravesados por alfileres, muertos quesalen de sus tumbas y magia negra. Pero todos estostópicos esconden una realidad mucho más profundaque hace del vudú una de las religiones más fascinan-tes del mundo. Manuel Carballal y Miguel Blanco via-jaron hasta el corazón de Haití para descubrir lo quehay de verdad y de mentira en este extraordinarioculto afroamericano.

EL MISTERIO DE LOS ÍfGOHETES FANTASMA"Hace ahora cincuenta años un misterio conmocionótoda Suecia: centenares de objetos voladores no identi-ficados, de todas las formas y tamaños, se deiaron veren su espacio aéreo, Los dossiers sobre los vuelos deaquellos "cohetes fantasma" acaban de ver la luz ynuestro corresponsal Carlos Medina ha tenido acceso,en exclusiva, a ellos

LLEVAR UNA GEMA INAPROPIADA PUEDEHACERNOS ENFERMARMucha gente no lo sabe, pero el color, tamaño y clasede las gemas que llevamos puede influir positiva o nega-tivamente en nuestra salud. Robert Goodman entrevistóa uno de los mayores expertos de! mundo en gemotera-pia, el doctor A. K. Bhattacharya, quien nos habla de loslogros y posibilidades de esta disciplina.

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BRUNO CARDEÑOSA JUA}IMANZAI\¡ERA e §qB¡l A HEHAi.IZ

JTIAN RAÁÁO{ FLEflIESGBEGORIO NIAI{.Hf,N.HEEC,AMAFITíN,

ARSENIO MOSOUEDAMONISERRAT CASEHO.LAURA MARíNEZ

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Printed in Spain - Agosto de 19S6 - D. L.: M.3.482-1989.

LOS EXTRATERRESTRES Y LOS YANQUISE la misma manera que al hombre occidental determinadas ins-tituciones relig¡osas le han hecho cre€r que el ser humano fuecreado "a imagen y semejanza de Dio.s" -representado éstepreferentemente, por supuesto, como hombre, de raza blanca yojos claros- y gue, por tanto, no €be duda alguna de que es el

"Rey de la Creación" 4or lo gue todas las demás "criaturas" (posibles ex-traterrestres incluidos, claro) están sometidas a él-, son demasiados los re-presentantes cualif¡cados de la cultura yanqui que t¡enen por costumbreextrapolar sus prop¡as creencias y formas culturales exportándolas con lam¡sma tranquilidad e impunidad con que exportan sus hamburguesas decame de perro. Buena muestra de ello, en Io que se refiere a la vida extrate-rrestre y al tema OVNI en general, es su obsesión por ver refle¡ados en todoalienígena que aparece en sus películas las cualidades Gon las que en real¡-dad se adornan ellos mismos. Tanto Ia reciente "lndependence Day", queacaba de estrenarse con enorme éx¡to en todo el mundo, como otras mu-chas cintas similares rodadas anter¡ormente, lo demuestran. Y así, en todasellas los extraterrestres nos son presentados como seres muy inteligen-tes... pero horriblemente feos, inmorales, fríos, calculadores y con un ca-rácter sanguinario que les hace estar s¡empre dispuestos a la utilización dela violencia -incluido el asesinato- para consegu¡r sus fines de control y ex-pans¡ón. Claro que cualqu¡er ps¡cólogo sabe que ese retrato, en el fondo,no hace sino reflejar los temores y m¡edos que caracterizan al norteamer¡-cano med¡o, habitante de un país que se ha significado demasiado a menu-do, durante sus dos siglos de existencia Gomo nación, por la xenofobia -losnorteamericanos son, al fin y al cabo, descendientes de los mayores geno-cidas de Ia historia a costa de Ios pueblos indios-, el desprec¡o a todo loextranjero -act¡tud que causa, s¡empre, el desconocimiento y la ignoran-cia-, la sobrevaloración de lo propio -en un rasgo que de legítimo orgullopasó pronto a convert¡rse en soberbia-, el egocentrismo {ue les ha lleva-do a ser el pueblo más ¡gnorante del planeta en Io que a conocimiento delmundo exterior a su prop¡o país se ref¡er*, la prepotencia -que les lleva aintentar dictar a todos Ios demás pueblos de la Tierra (y a los no terrestressi un día se terc¡a, por supuesto) cómo tienen que vivir, de qué manera ves-tirse, cómo regir sus act¡v¡dades, en qué tienen que creer o qué debencomprar,..-, la violencia -presente sin excepción en todas sus man¡festa-ciones culturales, especialmente constatable a través de buena parte desus películas en c¡ne y televisión-, la inmoralidad pública -a nadie se le es-capa que Ia falta de ética es una constante en la política y en buena partede la sociedad norteamericana, lo que ha sido denunciado por muchos desus propios compatr¡otas hasta la saciedad en un ejercicio de justificableautocrítica- y, cómo no, la demagog¡a -en tanto que a la vez.que intentanpresentar a los demás como paradigmas de todo lo que de negativo puedehaber en el ser humano, ellos se revisten con todos los atributos que ¡esfaltan. Y es que estos héroes de película, que en.las últimas décadas hanmanipulado la historia a su antojo falsificándola mil y rrna veces para que seajuste a sus fines de propaganda exterior, pretenden ahora con esta nuevapelícula que el 4 de Julio deje de ser el Día de la lndependencia norteamer¡-cana para pasar a transformarse -€n tanto ellos, "los buenos,,, se convier-ten en nuestros salvadores, Iibrándonos de los horribles y malísimos extra-terrestres-, en el Día de la lndependenc¡a de toda la Tierra.

La verdad, pobres de nosotros como esa idea germ¡ne en el mundo.Y pobres extraterrestres, tan feos y malvados ellos, Como para venir undía de visita al planeta, vamos.

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R-006MASALLA

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Pertenece a: Víctor Fco. Carrasco FerradaInvestigador OVNI

En Scníbd me encuentras en/comoVictor Francisco Carrasco Ferrada,en VICUFO, en VICTOR o VICUFO2

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