Un fin de semana muy corto.

Recuerdo que era viernes en la tarde… tenia una gran tarea, para el lunes.

Mi maleta estaba igual a como la había dejado cuando llegue, lo único que se encontraba a la vista era la tarea que trate de hacer pero no lo logre.

Así que pensé…

Tengo tiempo, yo la hago mañana…

Con lo que no conté, era que el sábado era día de salir a caminar. …

Yo hago la tarea mas

tarde…….todavía hay tiempo.

Y de compartir con los demás…

¡Ya que!…Me toco hacer la

tarea mañana….

Pero el domingo es igual…Solo hay tiempo para la familia.

Llego la noche del domingo, decidí descansar y al día siguiente madrugar para hacerle frente al trabajo. Eso si tenía que estar bien madrugadita pues la clase era en la mañana.

Al despertar note que el despertador no había timbrado, observe el reloj y me di cuenta que era tardísimo, no tenia tiempo de hacer la tarea y además llegaría tarde a clase, no podía faltar pues ese día sacarían una nota muy importante…

¡Ay, no!

¿Hará su tarea?¿Hará su tarea?

¿Alcanzara Ana María a llegar a la universidad?¿Alcanzara Ana María a llegar a la universidad?

Decidí alistarme rápido, y salir corriendo a la universidad…. Al llegar note que el salón estaba cerrado y decidí abrir la puerta al entrar, el salón se convirtió en un bosque oscuro y tenebroso……..

Todo era una pesadilla, me desperté a la hora justa para hacer la tarea, llegue puntual a la universidad y me fue bien en la clase.

Decidí levantarme y alistarme rápido, pero al salir… mi mama me llamo..

Je, je, je, me salvo un festivo.

Ana, ¿a donde vas hoy lunes festivo y

tan temprano?.

Así que me devolví y de una vez realice la tarea…Y el resto de día me acosté a dormir tranquila.

Elaborado por;

Ana María Castellanos Rincón.

L.E.A. / V Semestre.