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Cienc. Tecnol. Mar, 24: 7-21, 2001 FORMAS DEPOSICIONALES SUBMARINAS EN EL PERFIL LONGITUDINAL DEL ESTRECHO DE MAGALLANES, CHILE SUBMARINE DEPOSITIONAL LANDFORMS IN THE PROFILE ALONG THE STRAIT OF MAGELLAN, CHILE JOSÉ F. ARAYA-VERGARA Departamento de Geografía Universidad de Chile Casilla 3387, Santiago, Chile Recepción: 29 de noviembre de 1999 – Versión corregida aceptada: 8 de septiembre de 2000 RESUMEN Se estudia los rasgos submarinos del estrecho, en relación con los efectos de la Última Glaciación, en sus fases máximas finales y como contribución a la teoría de la morfogénesis glacio-marina. La observación se hizo principalmente en registros de ecosonda de alta resolución. El perfil longitudinal del estrecho puede ser dividido en tres secciones. La sección occidental muestra formas profundas interpretadas como bancos morrénicos y explanadas de outwash marino. Las secciones central y orien- tal, desarrolladas sobre lóbulos de piedmont, contienen sólo morrenas subaéreas. Partiendo desde el límite de la fase glacial principal, el área interna incluye explanadas de línea de varadura y de transgre- sión; en cambio la externa sustenta explanadas proglaciales de transgresión. Esta distribución es con- sistente con el campo de la glaciación previamente conocido. Los bancos morrénicos encontrados en la sección occidental, permiten extender el conocimiento del campo de la glaciación hacia el Pacífico, reconociendo una fase morfogenética —Upright-Xaultegua— probablemente homóloga a algunas de las encontradas hacia el Atlántico. La deriva glacial debe haber operado simultáneamente hacia el Atlántico y hacia el Pacífico, a partir de una paleodivisoria ubicada en la parte más estrecha del estrecho de Magallanes. Palabras claves: Estrecho de Magallanes, diamicton masivo, banco morrénico, outwash marino, línea de varadura, explanada submarina, transgresión. ABSTRACT The submarine features of the Strait of Magellan are studied, in their relationships with the field of the Last Glaciation and the derived theory. The observation was carried out by means of high resolution echosounder records. The profile of the Strait can be divided into three sections. The western section shows deep forms which are interpreted as morainal banks and esplanades of marine outwash. The central and eastern sections, developed among piedmont lobes, contain only subaerial moraines. Starting from the limit of the principal glacial phase, the inner area contains submarine grounding line and transgression esplanades; in exchange, the outer one shows proglacial and transgression esplanades. This distribution agrees with the formerly known glaciation field. The morainal banks of the western section make possible the knowledge of the glaciation field toward the Pacific Ocean and the reconnaissance of a possible morphogenetic phase of Upright-Xaultegua, which is thougth to be homologous to one of those found toward the Atlantic Ocean. The glacial drift must have operated simultaneusly toward the Pacific and Atlantic oceans, starting from a paleodivide located on the most narrow part of the Strait of Magellan. Key words: Strait of Magellan, massive diamicton, morainal bank, marine outwash, grounding line, submarine esplanade, transgression. 7

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Cienc. Tecnol. Mar, 24: 7-21, 2001

FORMAS DEPOSICIONALES SUBMARINAS EN EL PERFIL LONGITUDINALDEL ESTRECHO DE MAGALLANES, CHILE

SUBMARINE DEPOSITIONAL LANDFORMS IN THE PROFILE ALONGTHE STRAIT OF MAGELLAN, CHILE

JOSÉ F. ARAYA-VERGARA

Departamento de GeografíaUniversidad de Chile

Casilla 3387, Santiago, Chile

Recepción: 29 de noviembre de 1999 – Versión corregida aceptada: 8 de septiembre de 2000

RESUMEN

Se estudia los rasgos submarinos del estrecho, en relación con los efectos de la Última Glaciación,en sus fases máximas finales y como contribución a la teoría de la morfogénesis glacio-marina. Laobservación se hizo principalmente en registros de ecosonda de alta resolución. El perfil longitudinaldel estrecho puede ser dividido en tres secciones. La sección occidental muestra formas profundasinterpretadas como bancos morrénicos y explanadas de outwash marino. Las secciones central y orien-tal, desarrolladas sobre lóbulos de piedmont, contienen sólo morrenas subaéreas. Partiendo desde ellímite de la fase glacial principal, el área interna incluye explanadas de línea de varadura y de transgre-

sión; en cambio la externa sustenta explanadas proglaciales de transgresión. Esta distribución es con-sistente con el campo de la glaciación previamente conocido. Los bancos morrénicos encontrados en lasección occidental, permiten extender el conocimiento del campo de la glaciación hacia el Pacífico,reconociendo una fase morfogenética —Upright-Xaultegua— probablemente homóloga a algunas de lasencontradas hacia el Atlántico. La deriva glacial debe haber operado simultáneamente hacia el Atlánticoy hacia el Pacífico, a partir de una paleodivisoria ubicada en la parte más estrecha del estrecho deMagallanes.

Palabras claves: Estrecho de Magallanes, diamicton masivo, banco morrénico, outwash marino, línea de varadura,

explanada submarina, transgresión.

ABSTRACT

The submarine features of the Strait of Magellan are studied, in their relationships with the fieldof the Last Glaciation and the derived theory. The observation was carried out by means of high resolutionechosounder records. The profile of the Strait can be divided into three sections. The western sectionshows deep forms which are interpreted as morainal banks and esplanades of marine outwash. Thecentral and eastern sections, developed among piedmont lobes, contain only subaerial moraines. Startingfrom the limit of the principal glacial phase, the inner area contains submarine grounding line and

transgression esplanades; in exchange, the outer one shows proglacial and transgression esplanades.This distribution agrees with the formerly known glaciation field. The morainal banks of the westernsection make possible the knowledge of the glaciation field toward the Pacific Ocean and thereconnaissance of a possible morphogenetic phase of Upright-Xaultegua, which is thougth to behomologous to one of those found toward the Atlantic Ocean. The glacial drift must have operatedsimultaneusly toward the Pacific and Atlantic oceans, starting from a paleodivide located on the mostnarrow part of the Strait of Magellan.

Key words: Strait of Magellan, massive diamicton, morainal bank, marine outwash, grounding line, submarine

esplanade, transgression.

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INTRODUCCIÓN

Las formas submarinas de la región de Ma-gallanes se reparten en dos dominios: el andinoal W, con fiordos y canales angostos, y el depiedmont al E, con bahías en forma de lóbulos.Para el estrecho de Magallanes, esta diferenciase da a partir de isla Dawson (Fig. 1). Per-filessubmarinos de sísmica de reflexión (Brambati yColantoni, 1991), indican que la deformación delas rocas del basamento es cada vez menor des-de la isla Dawson hacia el este, habiendo unacobertura de depósitos detríticos, cuyas faciessuperficiales gradan generalmente desde fangoarenoso en los fondos profundos de la parte occi-dental a arena gravosa en los fondos someros dela par te oriental (Brambati et al., 1991).Geomorfológica y geocronológicamente, los últi-mos máximos de la Última Glaciación en la parteoriental del estrecho están documentados en Se-gunda Angostura, a partir de la observación deformas subaéreas (Caldenius, 1932; Marangunic,1974; Porter, 1989, en Clapperton et al., 1995;Prieto y Winslow, 1992; Clapperton et al., 1995).Para la parte occidental, con las profundidadesmáximas, dos cores del R/V “Polar Duke”,correlacionados con otros cuatro de la región, in-

Fig. 1: Mapa de ubicación y de aspectos paleogeográficos. 1=Paleodivisoria de hielos; 2=Fase glacial

de Segunda Angostura; 3=Reavance glacial; 4=Reavance glacial; 5=Canal de outwash; 15 y

17=core “Polar Duke”; C=Casquete de hielo remanente de la paleodivisoria.

Fig. 1: Map of location and of paleogeographical aspects. 1=Ice paleodivide; 2 = Glacial phase of Segunda

Angostura; 3=Glacial readvance; 4=Glacial readvance; 5=Outwash channel; 15 y 17=“Polar Duke”

core; C=Remnant ice cap of the paleodivide.

dican que el límite C14 entre el Pleistoceno y elHoloceno está registrado dentro de los primerosmetros del espesor total de los sedimentos defondo (Leventer et al., 1995). De los trabajos dePrieto y Winslow (1992) y Clapperton et al. (1995)se desprende que, desde Segunda Angosturahacia el E, la sección correspondiente del estre-cho debe haber estado eustáticamente emergidadurante los últimos máximos glaciales, lo que esconsistente con el modelo glacioisostático deClark y Bloom (1979) para la costa patagónicaoriental. Complementariamente, las observacio-nes de Araya-Vergara (1978) en el sector de ca-nal Beagle y bahía Nassau sugieren operaciónglacial terrestre en piedmont y marina en fiordosy canales durante los estadios de la ÚltimaGlaciación. Aún más, el estudio de las profundi-dades entre Segunda y Primera Angosturas per-mitió a Clapperton et al. (1995) dibujar un canalde outwash —submarino en el presente— proba-blemente relacionado con la fase de degla-ciaciónpost Segunda Angostura, puesto que está dise-ñado también en la parte interna de ésta (Fig. 1).

Hasta ahora, se desconoce la relación entrelos fenómenos relatados y los rasgos geomor-fológicos submarinos de la región. El estrecho de

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1990), lo que permitió trabajar considerando la re-lación directa entre densidad del material e impe-dancia y su efecto en los rasgos acústicos (AmericanSociety of Civil Engineers, 1998).

La terminología usada en la descripción y aná-lisis de rasgos acústicos se basa en la clasifica-ción de caracteres acústicos de Damuth (1978),complementada por Pratson y Laine (1989). Susbases son: grado de precisión de los ecos, ausen-cia o presencia de rugosidad del fondo, ausencia opresencia de reflectores de subfondo, grado de “pro-longación” de la señal de retorno y observación derasgos hiperbólicos. Para las estructuras de con-junto, se usó la clasificación de estilos estra-tigráficos de Syvitski et al. (1987, en Syvitski, 1989).Para calibrar la interpretación genética, se usó ob-servaciones recopiladas por Damuth (1978),Embley y Langseth (1977), Karl (1989), Uchupi et

al. (1996) y Araya-Vergara (1997 y 1998) entreotros. Ellas indican que el efecto de las complica-ciones de reflectividad en el carácter del eco —porcambio de velocidad del buque, control de ampli-tud del instrumento o cambio en la longitud de pul-so— puede ponderarse mediante un seguimientoregional de las estructuras que caracterizan las cla-ses y tipos acústicos. La escala del registro origi-nal permite aplicar esto incluso a las estructurasde detalle (Mars y Vriesendorp, 1994), teniendo encuenta el nivel de resolución de los ecos precisos(distinct echoes de Damuth, 1978), variable entre1 y 3 m, según la exageración de la escala vertical.Para resaltar los reflectores, fotos de registros fue-ron digitalizadas por scanner y procesadas con losprogramas Microsoft Photo Editor y Corel PhotoPaint, con ajustes de contraste, brillo, correcciónGama, transformación a negativo y selección deescenas ampliadas.

Como guías para la interpretación mor fo-genética de las estructuras acústicas de aguas pro-fundas fueron considerados los siguientes mode-los: de zonación de la sedimentación superficial(McClennen, 1989), alternativo de Lagerlund paraglaciación Weichseliana sobre un paisaje submari-no (Erlingsson, 1990), de flujo glacial entre am-bientes terrestre y marino (Anderson, 1993), delengua fría bajo una cavidad subglacial marina(Anderson, 1993), de efectos de ice shelf en dife-rentes estados (Anderson, 1993), morfoclimáticode facies (Anderson, 1993) y los referenciados porAraya-Vergara (1998). Para aguas someras se revi-só modelos de sedimentación glaciolacustre dis-cutidos por Brodzikowski (1993) y el de superposi-ción reológica de Hicock y Fuller (1995), sobre ras-gos atribuidos al ambiente de grounding line.

Magallanes es especialmente importante para acer-carse a este conocimiento, porque reune en unasola gran forma rasgos de las vertientes pacífica yatlántica. Por lo tanto, el propósito del presentetrabajo es hacer un seguimiento de las formas depo-sicionales submarinas del estrecho, en función desu emplazamiento, su relación con referenciasmorfogenéticas subaéreas y su génesis.

MATERIALES Y MÉTODOS

Los perfiles longitudinales fueron obtenidosdurante el crucero Cimar-Fiordo 3, a bordo delAGOR “Vidal Gormaz”, a partir de registros delecosonda de alta resolución Edo Western, mode-lo 248 E, que operó en frecuencia de 3,5 kHz, enel modo de perfilador de subfondo. Sus escalasfueron calculadas a partir de las coordenadas GPSanotadas en el registro y las distancias correspon-dientes medidas en la carta náutica 1 : 500.000.Así, resultaron exageraciones verticales diferen-tes para cada sección de registro, razón por laque cada imagen está acompañada de una esca-la gráfica de pendientes, normalizadas en altanes(Araya-Vergara, 1998). Los perfiles representanaproximadamente una transección por la líneamedia del estrecho, salvo excepciones (Figs. 3, 7y 9). Se estima que las formas cortadas son rela-tivamente representativas de cada sección, debi-do al efecto de represa en el relleno del fondo o ala acción del hielo dragante en piedmont. Estosfactores permiten tener en cuenta la influenciade rasgos accidentales o accesorios en la inter-pretación.

El conocimiento directo de los materiales, enfunción de la forma del fondo, sólo fue posible parasedimentos superficiales, pero no de subfondo, de-rivado de los resultados de Brambati et al. (1991).De los dos cores con penetración de algo más de 8m logrados en el crucero del R/V “Polar Duke”(Leventer et al., 1995), el tomado a la mayor pro-fundidad de la parte occidental (1.140 m) da un16,77% de arena, en un ambiente esencialmentefangoso (Ishman y Martínez, 1995), lo que es coin-cidente con los resultados de Brambati et al. (1991)para las zonas profundas. Estos cores fueron apro-vechados como referencia geocronológica de laedad de la morfogénesis. En tanto, la informaciónmorfoestructural se extrajo esencialmente con mé-todos acústicos. Por su operación en baja frecuen-cia, el transductor de 3,5 kHz puede penetrar des-de decenas de metros en subtratos fangosos blan-dos hasta pocos metros en arenas (Carlson, 1989);entrega una resolución vertical inversa-mente pro-porcional a la longitud de pulso (Grant y Schreiber,

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Los perfiles fueron organizados, determinan-do como lugar de origen paso Tortuoso y penínsu-la Ulloa, donde debe haber estado la divisoria dehielos durante la Última Glaciación. Ésta fue tra-zada siguiendo las más altas cumbres que sus-tentan casquetes de hielo remanentes (Fig. 1);coincide aproximadamente con la dibujada porCaldenius (1932). Se asume que desde ella elhielo avanzó en sentidos opuestos W y E. Paraorientar la relación entre morfogénesis y profun-didad, se midió, graficó y correlacionó por míni-mos cuadrados el espesor acústicamente visiblede los sedimentos, en función de la profundidaden fondos de cubeta. Considerando que en losfondos someros de los lóbulos de la parte orien-tal hay un eco superficial único, impreciso y pro-longado, se estableció el espesor midiendo la pro-longación acústica, asumiendo que el material desubfondo infrayacente es acústicamente transpa-rente.

RESULTADOS

Relación profundidad v/s espesor de sedimentos

Existe relación directa entre profundidad yespesor visible de los sedimentos modernos so-bre el basamento en la Región de Magallanes(Fig. 2), distribuyéndose la dispersión en tres agru-paciones: grandes canales, fiordos y lóbulos depiedmont. Aplicando esta distribución al estrecho

de Magallanes (Fig. 1), las categorías de la Fig. 2coinciden respectivamente con las siguientes sec-ciones de esta forma: a) Sección occidental, entreboca Occidental y paso Tortuoso, b) Sección cen-tral, entre paso Tortuoso y paso Ancho y c) Sec-ción oriental, entre paso Ancho y boca Oriental. Sepresentará en seguida perfiles de estas tres sec-ciones, para las cuales el origen esencial es pasoTor tuoso, por asumirse ser el lugar de lapaleodivisoria de hielos.

Sección occidental (Boca Occidental a paso Tor-

tuoso, Figs. 1, 2 y 3)

En esta sección, el fondo de la cuenca eselevado en la parte proximal (hacia paso Tortuo-so), muy profundo en la central y muy elevado enla distal. Esta distribución batimétrica es funda-mentalmente la del basamento acústico, desta-cado por un eco preciso, fuerte y con diferentesgrados de prolongación, que muestra cubetas de-primidas separadas por umbrales (Figs. 4, 5 y6). En el fondo de ellas se da claramente la rela-ción directa entre profundidad y espesor visiblede los sedimentos que sobreyacen al basamen-to. En las partes proximal y distal las formasson erosionales, mientras que en la central lasmás relevantes son deposicionales. Las primerasestán representadas por cubetas y umbrales en laparte proximal y por una explanada rocosa muyelevada en la parte distal. Las segundas forman

un grupo variado, de elevaciones relativasdistintas con respecto al basamento(recuadros en el per fil de la Fig. 3) y quepasan a ser descritas directamente de losregistros (Figs. 4, 5 y 6).

En la cubeta más profunda, indicadapor el recuadro mayor del perfil (Fig. 3), lasuperficie del basamento baja a profundi-dades superiores a los 1.200 m (Fig. 4a).Sobre ella, las formas que acumulan ma-yor masa tienen elevaciones relativas en-tre 100 y 600 m y bases entre 1 y 6 km,aproximadamente. Están indicadas porecos hiperbólicos imprecisos, irregularesy traslapados, cuya superposición desubfondo es observable a partir de mediaelevación de la forma. Aplicando la escalade pendientes, se trata de colinas suaves,cuyas cimas se elevan hasta profundida-des de 500 a 350 m, aproximadamente,dependiendo generalmente de la profundi-dad de su base. Reduciendo computacio-nalmente la exageración vertical de la es-cala al 33% (Fig. 4b), sus vertientes apare-

Fig. 2: Grandes canales = seccion occidental del estrecho de

Magallanes; fiordos = profundidades equivalentes a la

sección central; lóbulos de piedmont = sección oriental.

Fig. 2: Big channels = western section of the Strait of Magellan;

fiordos = equivalent dephs for the central section;

piedmont lobes = eastern section.

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Fig. 3: Sección occidental delestrecho de Magalla-nes. BA = basamentoacústico; DM (rellenonegro) = diamictonmasivo; ER = explanadade represamiento; DR =manto; 15 y 17 = cores“Polar Duke”; rectán-gulo grande = ver Fig.4; recuadro A = ver Fig.5; recuadro B = ver Fig.6.

Fig. 3: Western section of theStrait of Magellan. BA= acoustic basement;DM (black filling) =massive diamicton; ER= ponding esplanade;DR = drape; 15 and 17“Polar Duke” cores; bigrectangle = see Fig. 4;inset A = see Fig. 5;inset B = see Fig. 6.

Fig. 4a: Recuadro grande en elperfil de Fig. 3. Lasabreviaciones son lasmismas.

Fig. 4a: Big inset of the profilein Fig. 3. The sameabreviations.

Fig. 4b: Fig. 4a vista al 33% de la exageración vertical original. DM = diamicton masivo; ER = explanada de represamiento;VMS = vertiente multisecuencial; SCv = secuencia convexa.

Fig. 4b: Fig. 4a at a 33% of the original vertical exaggeration. DM = massive diamicton; ER = ponding esplanade; VMS =multisequential slope; SCv = convex sequence.

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cen como formas multisecuenciales. Susconvexidades son partes de hipérbola aflorante, queencierran una masa acústicamente incoherente. Poresto, las secuencias deben representar paquetes desedimentos granulométri-camente heterogéneos (ode diamicton masivo) depositados sucesivamenteen el fondo. La suma de estos depósitos puede lla-marse proceso de acreción de la colina. Las depre-siones entre estas colinas son terrenos sensible-mente planos, representados por ecos precisos yagudos (distinc and sharp de Damuth, 1978 yPratson y Laine, 1989), con reflectores paralelos ycontinuos de subfondo. Éstos indican la existenciade capas laminadas, en potencias totales visiblesde hasta unos 100 m. El contacto entre el diamictonmasivo de las colinas y las capas laminadas de lasdepresiones se da mediante un engranamiento desubfondo, que debe ser interpretado comointerestratificación en lenguas de diamicton en lamodalidad descrita por Araya-Vergara (1998). El de-talle de estos rasgos se verá a través de partes deregistro delimitadas en los recuadros A y B del per-fil de la Fig. 3.

Para el recuadro A (Fig. 5), dos colinas dediamicton masivo delimitan una depresión sensi-blemente plana, cuyo subfondo muestra reflecto-res paralelos hasta una potencia visible aproxima-da de 90 a 100 m. Considerando que cada capaestá compuesta de una unidad transparente infe-rior y de un reflector preciso y agudo superior, secuenta alrededor de 17 capas, con espesor fre-cuente de 5 a 6 m por capa, donde la unidad trans-parente es más espesa que la superficie reflectoraprecisa. El fundamento para reunir en una sola capauna unidad transparente y una superficie reflectorafue expuesto por Araya-Vergara (1998), a partir dela estructura del contacto entre diamicton masivoy capas laminadas mediante lenguas de diamicton.Los sedimentos más finos —cuyo cuerpo es den-so y de alta impedancia acústica— se destacansiempre en la parte superior de la capa, debido asu depositación tardía. El conjunto de capas estácubierto por un manto (drape) de un espesor simi-lar al más frecuente en las capas. En él, dos super-ficies reflectoras fuertes y precisas delimitan a unmaterial transparente, conformando la capageométricamente más perfecta. Por su estructura,parece haberse formado del mismo modo que lasotras capas. Dos formas, una subterránea y otrasemisubterránea, interrumpen la continuidad de lascapas laminadas; están representadas por ecosimprecisos hiperbolados (indistinc echoes deDamuth, 1978), prolongados a semiprolongados.Su material superficial debe ser indudablementefino, por tener el mismo tono acústico que las uni-

dades laminadas reflectoras. La incoherencia acús-tica de su estructura interna las indica como acu-mulaciones de diamicton masivo con mayor pro-porción de matriz fina hacia la superficie. Especial-mente en la forma más central y verdaderamentesubterránea, el contacto con las capas laminadases por interestratificación mediante lenguas dediamicton. Pero las capas laminadas están defor-madas hacia la superficie independientemente desus relaciones con el diamicton masivo desubfondo. Esto es evidenciado por la deformacióndel manto, que presenta abombamiento proximaljunto al borde oriental de la depresión y abomba-miento central doble o bisecuen-cial, hacia su cen-tro. El primero está contrabalan-ceado por un hun-dimiento proximal del manto o flexura por hundi-miento, suprayacida por diamicton masivo de lavertiente de la colina del borde. Esto indica queestas deformaciones se deben a compresiones

Fig. 5: Recuadro A del perfil de Fig. 3. Mismas abreviaciones.Se agrega: TT = lengua de diamicton; AC =abombamiento central; AP = abombamiento proximal;FH = flexura de hundimiento.

Fig. 5: Inset A of profile in Fig. 3. The same abreviations.Other added: TT = diamicton tongue; AC = centralbending; AP = proximal bending; FH = sinking flexure.

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verticales y laterales, activadas por operación delos bordes de diamicton masivo, que delimitan ladepresión. Esta operación es tardía, porque susproductos son estratigráficamente posteriores almanto.

Los rasgos descritos para este fondo de de-presión deben ser relacionados de inmediato conel contenido del core 15 del R/V “Polar Duke”,extraído en las inmediaciones del corte del regis-tro (Fig. 5). El material es esencialmente fino, pre-dominando el fango, con sólo un 16.8% de arena,concentrada en una unidad decimétricavolcanoclástica hacia los 3 m y otra con fangoentre 7 y 9 m en subfondo. La columna tiene eda-des no corregidas de 5.6 hasta 9.6 Ka C14, aproxi-madamente (Leventer et al., 1995 e Ishman yMartínez, 1995). Entre la edad de la parte supe-rior y la de la inferior hay dos cifras aberrantes deacuerdo con su posición estratigráfica aparente,lo que —a pesar de la falta de corrección— pue-de estar en relación con las deformaciones su-perficiales relatadas, que pueden haberdisturbado la posición original de algunas capas.En todo caso, se evidencia que la última activi-dad del diamicton masivo de vertientes sobre elmanto y su deformación son fenómenos poste-riores a la edad más joven de las capas.

El recuadro B de la Fig. 3 es analizado me-diante una forma homóloga de las inmediaciones,que contiene más elementos analizables (Fig. 6).Ésta representa un tipo de cubetas menos pro-fundo (por los 600 m), con bordes de vertientesde basamento, individualizado por eco fuerte, peroprolongado. En los rellanos puede verse ecos in-coherentes propios del diamicton masivo, cubier-tos por un manto de ecos precisos. Hacia abajoaparecen estructuras hiperboladas imprecisas quecamuflan el basamento. Ciertos rasgos de trasla-po de hipérbolas sugieren la existencia de movi-mientos en masa. El fondo de la cubeta es unaexplanada con un eco superficial preciso, agudoy con reflectores paralelos de subfondo intermi-tentes. Estos representan capas laminadas conuna potencia total visible de alrededor de 80 m,que agrupa 17 o 18 capas, de espesor frecuenteentre 4 y 5 m cada una e individualizadas con elmismo criterio que para la Fig. 5. A pesar de laprecisión de sus ecos, la mayor parte de estassuperficies reflectoras es tenue. La coincidenciade tenuidad e intermitencia no parece deberse asimples defectos del registro acústico, ya que enotras cubetas de profundidad homologable el ca-rácter acústico de las capas laminadas es simi-lar, contrastando con el eco fuerte del basamen-

to inmediato. Por consiguiente, la diferencia dedensidad e impedancia entre superficies reflectorasy unidades transparentes, debe ser menor y másdiscontinua que en cubetas muy profundas, comola de la Fig. 5. El contacto entre el fondo plano y lavertiente se da mediante una concavidad basal queafecta tanto al manto como a las capas superioresde subfondo. Esto sugiere que la formación de lascapas laminadas está relacionada con la dinámicade las vertientes. Para apreciar el fenómeno hayque considerar el siguiente encadenamiento de ras-gos: vertiente arriba hay rasgos de movimientosen masa; hacia la base, sedimentos remoldeadospor deslizamiento y, sobre la concavidad basal mis-ma, punta de compresión de deslizamiento, eviden-ciada por micropliegues del manto. La forma de laconcavidad basal está alterada en abombamientoproximal no sólo para el manto, sino además paraalgunas capas de subfondo, lo que indica que la

Fig. 6: Forma equivalente a la del recuadro B del perfil deFig. 3 (inmediaciones). Mismas abreviaciones. Seagrega: MM = movimiento en masa; SRS = sedimentoremoldeado por deslizamiento; SCT = punta decompresión de deslizamiento.

Fig. 6: Feature which is equivalent that of inset B in Fig. 3(environs). The same abreviations. Other added: MM= mass movement; SRS = slide remolded sediment;SCT = slide compression toe.

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deformación ha acompañado rítmicamen-te a la se-

dimentación de cada capa. El proceso debe ha-

berse repetido hasta edades posteriores a la sedi-

mentación del manto.

Relacionando estos rasgos con el contenido

del core 17 del R/V “Polar Duke”, extraído en las

inmediaciones del corte del registro (Fig. 6), se

observa en aquel, de la superficie a la base: 4,4

m de fango, 1,6 m en que se agregan clastos y

arena, y 2 m de fango; las edades no corregidas

de la columna van de 1 a 10 Ka C14, aproximada-

mente (Leventer et al., 1995; Ishman y Martínez,

1995). La edad de los sedimentos aumenta pro-

gresivamente con la profundidad, no habiendo —

aparentemente— indicaciones de disturbación

estratigráfica, como en el caso del core 15. Te-

niendo en cuenta el largo del core y el espesor

del manto, similar al del resto de las capas sub-

yacente, parece cierto que la deformación de

aquel debe ser posterior a un lapso de tiempo

que debe estar entre 7 y 1 Ka A.P., de acuerdo

con el detalle de las fechas del core v/s la pro-

fundidad del subfondo (Leventer et al., 1995).

Fig. 7: Sección central del

estrecho. Mismas abre-

viaciones que en otras

figuras. Recuadro A del

perfil corresponde a Fig.

8a.

Fig, 7: Central section of the

Strait. The same abre-

viations than other

figures. Inset A in the

profile is shown in Fig. 8a.

Se aprecia que los cores apenas representan

dos capas del conjunto descrito, por lo que se pue-

de admitir que el resto de las capas de subfondo

debe tener edades superiores a 10 Ka.

Sección central: Paso Inglés a paso Ancho (Figs.

7 y 8)

Desde el sector de la paleodivisoria de hie-

los asumida (Paso Inglés), hasta paso Ancho (al-

tura de bahía Catalina), el per fil de esta sección

muestra las partes proximal y distal elevadas,

en tanto que la parte media es más profunda.

Esta distribución está dada por la mor fología del

basamento acústico, que se destaca por ecos

fuer tes pero prolongados, contenidos en una

macrohiperbolación irregular en las par tes

proximal y media, hasta paso del Hambre, repre-

sentando una sucesión de cubetas y umbrales

rocosos. Esto es característico del sector de cam-

bio de dirección del estrecho, frente a paso

Froward y seno Magdalena. En cambio, en la par-

te distal, la superficie reflectora que representa

el basamento muestra una plataforma de aguas

someras, hacia bahía Catalina. También se da en

esta sección la relación directa

ent re profundidad y espe-

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Fig. 8a: Recuadro A del perfil de la Fig. 7. Mismas abreviaciones.Fig. 8a: Inset A in the profile of Fig. 7. The same abreviations.

Fig. 8b: Detalle de Fig. 8a.. Mismas abreviaciones. Se agrega: CC = cobertura compleja.Fig. 8b: Detail of Fig. 8a. The same abreviations. Added: CC = complex cover.

sor de los sedimentos. Los espesores mayoresaparecen en las cubetas más profundas, pero co-rresponden sólo a los casos intermedios de la distri-bución general (Fig. 2). Las formas erosionales do-minan el perfil. Las deposicionales sólo se encuen-tran en la sección más profunda, concentradas en elrecuadro A indicado en el perfil de la Fig. 7, quepasa analizarse.

Entre paso del Hambre y paso Ancho se pro-duce el cambio morfológico del basamento, queindica el paso de la parte media a la distal (Fig.8a). El eco fuerte y prolongado a semiprolongadoque destaca al basamento indica las dos cubetasmás profundas separadas por una zona de umbra-les. En la parte norte, de profundidades inferioresa los 80 ó 100 m, sólo se ve el eco propio delbasamento acústico. En cambio, hacia el S, en pro-fundidades mayores, aparece sobreyaciéndolo di-rectamente una unidad relativamente espesa y sen-siblemente transparente. La sobreyace una super-ficie reflectora precisa, aguda y contínua de

subfondo. Ésta, a su vez, está sellada por una capaconstituida de una unidad transparente inferior yun eco superior preciso y agudo. El detalle de es-tas cubetas profundas se ve en la Fig. 8b. Las uni-dades representadas por el conjunto acústico quesobreyace al basamento son claramente más es-pesas en la parte más profunda de las cubetas. Elmaterial transparente inferior tiene 6 a 10 m deespesor, frente a 3 a 6 de la capa superficial. Porsu aspecto, la unidad sedimentaria inferior debecorresponder a dismicton masivo y la superior, aun manto. El conjunto se adapta a la forma de lacubeta presentándose como pliegues suaves defondo en paso Ancho. En cambio, en la cubeta delS (paso del Hambre) hay deformación por plieguesde cobertura, lo que se deduce porque las ondasde plegamiento no son paralelas a la superficie delbasamento y debido a la continuidad estratigráficaentre la capa superficial de fondo y la de la vertien-te sur. Esto indica que debe tratarse de deforma-ciones relacionadas con punta de compresión dedeslizamiento.

Revista Ciencia y Tecnología del Mar, Vol. 24 - 200116

Fig.10: Registro cor respon-

diente al recuadro A de

Fig. 9. BA =basamento

acústico.

Fig. 10: Record across the inset

A of Fig. 9. BA = acous-

tic basement.

Sección oriental: Paso Ancho a boca Oriental

(Figs. 9 a 13)

Entre paso Ancho y la boca oriental (Fig. 9),el estrecho está constituido por tres lóbulos ytoma la dirección aproximada W-E a partir de Se-gunda Angostura. Observando los registros co-rrespondientes a los recuadros A a D (Figs. 10a13), se ve el paso desde las profundidades me-dias de paso Ancho a las elevadas (aguas some-ras) a partir de Bahía Catalina, condición que se

mantiene hasta la boca Oriental, conformando laagrupación de menores profundidades (Fig. 2).Acústicamente, los registros forman dos catego-rías separadas por Segunda Angostura: con ba-samento acústico visible al S (Lóbulo deBrunswick) y sin basamento acústico visible al E(lóbulos Kimiri Aike y de Bahía Posesión).

El registro del rectágulo A (Fig. 10) ilustra laprimera categoría; muestra un eco impreciso perofuerte, prolongado a semi prolongado, sin reflec-

tores de subfondo, carac-terizando el basamentoacústico. El terreno esprácticamente plano. Lasegunda categoría semuestra en los registrosde los rectángulos B, C yD (Figs. 11 a 13); empiezaa manifestarse en la mis-ma Segunda Angostura. Enel rectángulo B (Fig. 11) elfondo es plano, con algu-nos accidentes menores.El eco es impreciso, inter-mitente y prolongado; sinreflectores de subfondo.Los trazos son relativa-mente tenues. Se trata,por lo tanto, de materialpoco denso y de impedan-cia media, de 5 a 6 m deespesor, sobreyaciendo a

Fig. 9: Sección oriental del Estrecho. Recua-dros A, B, C y D indican ubicación de

los registros de las Figs. 10 a 13.

Fig. 9: Eastern section of the Strait. Insets A, B, C and D indicate the location of

the records of the Figs. 10 to 13.

Formas Deposicionales Submarinas 17

otro transparente, ligero, de baja impedancia y deespesor desconocido. Esta distribución acústicaes similar para los rectángulos C y D, pero enestos se observa más rugosidad del fondo. En C(Fig. 12), Primera Angostura muestra un fondorugoso. Su material superficial se adapta bien ala topografía del subfondo transparente. Apareceuna sucesión de elevaciones y talwegs, probable-

Fig. 12: Registro correspondiente al recuadro C de Fig. 9. Misma abreviación que en Fig. 11.

Fig. 12: Record across the inset C of Fig. 9. The same abreviation than Fig. 11.

Fig.11: Registro correspondiente al recuadro B de Fig. 9. CM = co-bertura marina; EGL-EOW = posibles

materiales proglaciales.

Fig. 11: Record across the inset B in Fig. 9. CM = marine cover; EGL-EOW = probable proglacial mate-rials.

mente relacionados con el canal de out-wash di-bujado por Clapperton et al. (1995). En D (Fig.13 a y b) continúa la rugosidad del fondo, menorque en Primera Angostura. Este rasgo desapare-ce a partir de punta Catalina, siendo reemplazadopor un fondo plano y suave, pero siempre expresa-do por ecos imprecisos, intermitentes y prolonga-dos, sin reflectores de subfondo.

Fig. 13a: Registro correspondiente al recuadro D de Fig. 9. Misma abreviación que en Fig. 11.

Fig. 13a: Record across the inset D in Fig. 9. The same abreviation than Fig. 11.

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DISCUSIÓN

Comparación entre las secciones media y oriental

Hay que destacar la posición de estas seccio-nes con respecto a Segunda Angostura, que indicael límite oriental del campo de la Última Glaciaciónen sus últimos máximos (Caldenius, 1932;Marangunic, 1974; Prieto y Winslow, 1992;Clapperton et al., 1995). En otras palabras, en lafase de Segunda Angostura la sección media —apartir de la paleodivisoria— operaba en dominioinfraglacial, mientras la sección distal—de la an-gostura hacia el Atlántico— lo hacía en dominioproglacial.

En la sección media el hielo debe haber ope-rado varado (en régimen de grounding line) en lamayor parte de su extensión, en vista su probableespesor deducido de los trabajos recién citados,aún considerando el efecto glacioisostático. Sólolas cubetas más profundas pueden haber conteni-do cuerpos líquidos. Pero las formas deposicionalesdescritas en ellas carecen de rasgos de operaciónglacial directa, aún bajo la influencia del reavancehasta paso del Hambre (4 en la Fig. 1), deducidode las observaciones costeras de Clapperton et

al. (1995). Tratándose de trampas más profundasque en el resto de la sección, esas acumulacionespueden corresponder a residuos de diamicton ma-sivo adaptados a los accidentes del basamento ysellados por una capa construida en condicionessubacuáticas de aguas tranquilas. Ésta aparececomo manto (drape), formado probablemente apartir de plumas turbias de terminales glaciales enambiente mareal (overflow e interflow deducidospor Lemmen, 1990, en el Ártico). Este modeladoparece corresponder a una acción combinada en-tre deglaciación y transgresión, por lo que el mantopuede ser interpretado como unidad marina.

A partir de Segunda Angostura, la sección orien-tal o lobular se divide en dos partes desde el punto

de vista de sus caracteres morfoacús-ticos: el ló-bulo de Brunswick al S y los otros lóbulos al NE y E.En el primero, la plataforma rocosa de aguas muysomeras que aparece frente a bahía Catalina, sinsedimentos suprayacentes acústicamentedetectables, representa necesariamente una líneade varadura (grounding line) que operó durante laglaciación. En los segundos, el material transpa-rente de subfondo, de potencia desconocida, debeser interpretado como proglacial, en vista de suposición con respecto a las morrenas de SegundaAngostura y de su condición emergida durante lasfases glaciales correspondientes (Prieto y Winslow,1992; Clapperton et al., 1995). El aspecto acci-dentado del fondo en Primera Angostura pareceestar en concordancia con el canal de outwash de-ducido por Clapperton et al. (1995). El cuerposedimentario reflector que cubre el material trans-parente de subfondo, notablemente más fino queéste, puede ser interpretado como depósito mari-no de cobertura, al producirse la transgresión des-de el Atlántico. Por esto, es probable que contengarasgos de conglomerado basal, sugeridos por ladiscontinuidad de la densidad e impedancia del ma-terial, lo que indica cier ta heterogeneidadgranulométrica. Esto es consistente con la abun-dancia de arena gravosa hallada por Brambati yColantoni (1991) en estos fondos lobulares deaguas someras.

En consecuencia, la explanada del fondo delestrecho en estas secciones puede diferenciarsegeomor fológicamente a par tir del sistemamorrénico de Segunda Angostura. Hacia el NE y Ede ésta, se propone indicarla como explanada

proglacial de transgresión, por corresponder aoutwash subaéreo de la fase glacial de SegundaAngostura, llegando a ser submarina por transgre-sión. Hacia el S de la angostura (Lóbulo deBrunswick), se propone la denominación de expla-

nada de línea de varadura (grounding line) y de trans-

gresión, por ser infraglacial de contacto directo conhielo varado (ice-contact) durante la fase de Segun-

Fig. 13b: Continuación del registro de Fig. 13a.

Fig. 13b: Continuation of the record of Fig. 13a.

Formas Deposicionales Submarinas 19

da Angostura, llegando a ser submarina por trans-gresión.

Significado de la sección occidental

El contraste geomorfológico mayor entre esteperfil y los de las secciones media y oriental se daen las formas deposicionales del fondo y el ordende profundidades en que se desarrollan. Las gran-des formas deposicionales de las mayores profun-didades del primero faltan en los segundos. Den-tro de estas grandes formas, los fondos de lasdepresiones conformados por multicapas lamina-das e interestratificadas con el diamicton masivode las colinas, corresponden a explanadas derepresamiento, como las reconocidas en PatagoniaCentral y del Norte por Araya-Vergara (1997 y 1998).La interestra-tificación mediante lenguas dediamicton significa que las multicapas han sido for-madas a expensas del diamicton de las colinas.Las edades de las capas superficiales de la expla-nada y su correlación con las de otros cores dePatagonia (Leventer et al., 1995), indican que lasmulticapas deben haberse formado tanto en elPleistoceno Superior como en el Holoceno. Entreambas edades el proceso de transferencia de masade las colinas al cuerpo de la explanada parecehaber sido ininterrumpido, porque no hay eviden-cia clara de diastemas en las capas cercanas allímite de penetración del core, donde aparecenedades límites entre el Pleistoceno Reciente y elHoloceno. Por lo tanto, las colinas de diamictonmasivo deben haberse formado durante la ÚltimaGlaciación y la formación de las capas laminadasde la explanada de represamiento tiene que habercomenzado entonces y continuado en el Holoceno.El glaciar del estrecho y sus afluentes, drenandodesde la paleodivisoria hacia el Pacífico, deben ha-ber flotado sobre estas grandes profundidades, queglacioeustáticamente tienen que haber sido mari-nas, aún aplicando los efectos glacio-isostáticosque se derivan del modelo de Clark y Bloom (1979).Según éste, puede predecirse emersiones coste-ras glacioisostáticas postglaciales entre 17 y 31m para el extremo austral de Sudamérica. Esto in-dica que la depresión del nivel del mar en la faseglacial de Segunda Angostura debe haber sidomenor que en regiones no glaciales en la ÚltimaGlaciación, manteniédose las grandes profundida-des parecidas a las del presente.

Consecuentemente, las colinas de diamictonmasivo, como formas primarias, pueden inter-pretarse como formadas en medio subacuático encondiciones subglaciales bajo un ice shelf. Su con-servación sólo se explica por la permanencia en

medio subacuático profundo, desde el PleistocenoSuperior hasta el Holoceno y el Presente. El proce-so de construcción de las colinas de diamicton ysu relación con las formación de la explanada derepresamiento fue especificado por Araya-Vergara(1998), en un modelo de construcción polifásicade las colinas —por paquetes de sedimentos—que van alimentando sincrónicamente las capaslaminadas de la explanada de represamiento. Encuanto al origen del material, las observacionessobre aporte de till desde ice shelf al fondo sub-marino han sido hechas en el dominio terminal.Experiencias de Barrett y Hambrey (1992) y deDowdeswell et al. (1994) sugieren que una parteimportante del diamicton masivo del fondo derivadel proceso de balseo (rafting) por icebergs. Pocaatención ha sido puesta a otros procesosdeposicionales derivados de la operación de ice

shelf. Un modelo de Powell y Molnia (1989), a par-tir de observaciones en Alaska, especifica que—para frentes glaciales de ambiente mareal—pueden contribuir a la entrega de diamicton masi-vo la simple separación de un témpano (calve) y ladescarga local (dumping) mediante lluvias de ro-cas, de granos y flujos de material fino. Exploracio-nes con sumergible de control remoto (Liu y Powell,1996) han permitido representar estructuras defusión desde la base del ice shelf en las inmedia-ciones del terminal. Allí, los bordes de la base fa-vorecen el proceso de descarga hacia el fondo. Laconcentración del diamicton masivo en grandes co-linas entre el golfo Xaultegua y bahía Upright en elestrecho no admite una influencia fundamental delbalseo, sino de las descargas en los dominios ter-minal y subglacial del ice shelf, a condición de es-tacionamiento glacial por un lapso de tiempo im-portante. Conjuntamente, la existencia de mantoen la superficie de la explanada y en algunos rella-nos de las colinas de diamicton masivo, pareceobedecer a deposición tardía desde plumas turbias(overflow e interflow) generadas en margen glacialen medio mareal, como las deducidas por Lemmen(1990) en el Ártico canadiense. Finalmente, en latransferencia de masa desde las colinas dediamicton masivo a las explanadas derepresamiento, las tasas de sedimentación sonparecidas en los dos grandes órdenes de profundi-dades en que el fenómeno se observa, a juzgarpor la similitud de espesor de las capas y el espe-sor de ellas. La diferencia acústica anotada enestas estructuras, parece deberse a diferenciasde régimen deposicional, traducidas en mayorturbulencia para las cubetas ménos profundas(500 a 600 m) y un régimen de aguas más tran-quilas (más rítmico) para las más profundas (másde 1.000 m).

Revista Ciencia y Tecnología del Mar, Vol. 24 - 200120

Por lo tanto, las colinas de diamicton masivode esta sección pueden ser interpretadas comobancos morrénicos y las explanadas derepresamiento, como explanadas de outwash ma-

rino, usando la terminología propuesta por Powelly Molnia (1989) y Anderson (1993).

CONCLUSIONES

El perfil longitudinal del estrecho de Magalla-nes es altamente asimétrico a par tir de lapaleodivisoria de hielos asumida para la ÚltimaGlaciación. La asimetría refleja el campo de estaedad glacial —especialmente en la fase de Segun-da Angostura— y la distribución de las profundida-des del basamento, como factor pregla-cial. Am-bos factores condicionan la fuerte diferencia entrelas secciones occidental y centro-oriental.

Desde el punto de vista de la morfogénesisglacial, la sección occidental se carateriza porquelas morrenas constituyen bancos submarinos, mien-tras que en las secciones central y oriental(piedmont) ellas son subaéreas. En el área delpiedmont, la base de la subdivisión del perfil enlas secciones central y oriental es la presencia oausencia de operación glacial directa durante lafase de Segunda Angostura.

Los bancos morrénicos y explanadas deoutwash encontrados en la sección occidental delestrecho, permiten ampliar el conocimiento delcampo de la glaciación hacia el Pacífico. El impor-tante grupo de estos bancos morrénicos en el sec-tor de golfo Xaultegua y bahía Upright puede repre-sentar una fase, provisoriamente llamadaXaultegua-Upright. Queda por establecer el gradode equivalencia de esta fase con alguna de las in-dicadas por Clapperton et al. (1995) en las seccio-nes central u oriental.

En cualquier caso, parece ser que ambos pul-sos (hacia el Pacífico y el Atlántico) tuvieron su cen-tro de dispersión en una divisoria situada en elsector de paso Tortuoso, desde donde operó laderiva glacial sobre las formas del estrecho.

AGRADECIMIENTOS

El autor agradece al Comité Oceanográfico Na-cional, a su Secretario Ejecutivo Comandante Ale-jandro Cabezas, a su personal de Secretaría y alpersonal del AGOR “Vidal Gormaz” el haber puestoa su disposición el material analizado.

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