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Boletín nº 192 Boletín nº 192 Boletín nº 192 AgostoAgostoAgosto---septiembre 2018 septiembre 2018 septiembre 2018

Formación

El Papa Francisco invita a ser “memoriosos”, esto libra a las personas de la tentación de los “mesianismos” y de “creerme yo el Mesías”. En otras palabras, de creerme el centro del mundo y amargarse cuando se descubre que no es así. “Esta tentación se combate de muchos modos, pero también con la risa”, y con una “conciencia alegre”, dijo en un discurso a los sacer-dotes y consagrados de Perú (20.01.2018).

Aprender a reírse de uno mismo

Así, el Papa propone: “Un lindo test espiritual es preguntarnos por la capacidad que tenemos de reírnos de nosotros mismos. De los demás es fácil reírse, ¿no es cierto? Sacarse el cuero, reírse, pero de nosotros mismos no es fácil”. “Aprender a reírse de uno mismo nos da la capacidad espi-ritual de estar delante del Señor con los propios límites, errores y pecados, pero también acier-tos, y con la alegría de saber que Él está a nuestro lado”, nos sostiene.

La risa salva de creernos el ombligo del mundo

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El Papa indica que la risa nos ayuda a salir de nosotros mismos y a tener el panorama de las co-sas más claras: “La risa nos salva del neopelagianismo “autorreferencial y prometeico de quie-nes, en el fondo, sólo confían en sus propias fuerzas y se sienten superiores a otros.

Reír con los demás, no de los demás

Asimismo, el Papa corrige a aquellos que consideran ‘buen humor’, al límite de la molestia o la persecución, reírse de los defectos de los demás hasta ridiculizarlos en público. “¡Reíte, rían en comunidad y no de la comunidad o de los otros. Cuidémonos de esa gente tan, pero tan impor-tante que, en la vida, se han olvidado de sonreír”.

Medicina para el buen humor

El Pontífice propone la medicina para el buen humor: “Si, padre, ¿pero usted no tiene un reme-dio, algo (para el buen humor)…? Tengo dos pastillas que ayudan mucho: una hablá con Jesús, con la Virgen en la oración. La segunda pastilla la podés hacer varias veces al día si necesitás, si no, una sola basta: mírate al espejo, mírate al espejo. Y ¿ese soy yo?, ¿esa soy yo? Y eso te hace reír. Y esto no es narcisismo, sino, al contrario, es lo contrario, el espejo acá sirve como cura”.

Reír para crear comunión

El Papa también insta a salir de la fragmentación y el aislamiento pregonando alegría; esto no significa uniformidad y pensar siempre igual que los demás. “Se nos pide ser artífices de comu-nión y de unidad; que no es lo mismo que pensar todos igual, hacer todos lo mismo”. San Juan Bosco decía que el verdadero signo de santidad es estar siempre alegres, incluso enfrentando las diferencias con los demás. Francisco añade: “Y esta alegría nos abre a los demás, esa alegría no para guardarla sino transmitirla. En el mundo fragmentado que nos toca vivir y que nos em-puja a aislarnos, somos desafiados a ser artífices y profetas de comunidad. Ustedes saben, nadie se salva solo. Y en esto me gustaría ser claro”.

La alegría está dentro y se ve

“La alegría no está en las cosas, se encuentra en nosotros”, dijo Wilhelm Richard Wagner, com-positor, director de orquesta, poeta, ensayista, dramaturgo y teórico musical alemán del Ro-manticismo. Francisco está de acuerdo, pues en varias ocasiones ha invitado a los feligreses en sus homilías en Santa Marta o en sus discursos por el mundo a encontrar la felicidad a través del sano realismo que está detrás de una sonrisa o, mejor, de reír de nosotros mismos y con los de-más. “No podemos ser pastores con cara de vinagre, quejosos ni, lo que es peor, pastores abu-rridos“, dijo en la homilía de Jueves Santo en la tradicional misa crismal de 2015. El cardiólogo a sus pacientes aconseja ‘cero estrés’, tomarse la vida con algo de ligereza. Francisco es un médi-co para el alma. Es decir, hacen bien a la salud, el optimismo, el buen humor, la ironía, los bue-nos momentos recordando nuestros propios errores. El escritor inglés William Shakespeare apuntó: “El sabio no se sienta para lamentarse, sino que se pone, alegremente, a la tarea de re-parar el daño”. Incluso ahora, los expertos en bullying recomiendan a la infancia y a la juventud una sana auto befa de los propios defectos, además para tener la mente lúcida cuando haya ataques gratuitos que buscan ofuscar los propios méritos y virtudes.

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Prot: 13/18

Madrid, 11 de septiembre de 2018

Queridas hermanas y hermanos:

Desde hace varios días nos hemos sentido sorprendidos y afectados, como cristianos y religiosos, por una campaña orquestada por algunos miembros de la Iglesia contra el Papa Francisco.

Para todos nosotros, su persona, y el modo de realizar la misión encomendada por el Señor, ha supuesto un aire fresco de renovación e impulso en la tarea de construir la única Iglesia de Jesucristo, para ser cada día más una Iglesia fraterna, servidora de los pequeños y los pobres, anunciadora y testigo del Evangelio de la Alegría y la Misericordia.

Los religiosos experimentamos “agradecimiento por su servicio a la Iglesia y a la humanidad, por sus gestos y pala-bras, que se transforman en llamada para los consagrados, en invitación a vivir enraizados en el Señor y ser hombres y mujeres agradecidos, apasionados, llenos de esperanza; hombres y mujeres que con su vida son testigos de la alegría evangélica” 1 Desde la elección del Papa Francisco como Pastor de la Iglesia de Roma, los religiosos y religiosas hemos orado por su persona y por la fecundidad de su trabajo, hemos pedido al Dios bueno que le siga acompa-ñando y asistiendo y hemos valorado profundamente su compromiso inequívoco en favor de los pobres, los “preferidos de Dios” con palabras y hechos, su compromiso eficaz y lúcido en contra de cualquier tipo de abuso sobre las personas (sexual, trata, trabajo infantil, etc.) y sobre el cuidado de la Tierra.

Queremos poner de manifiesto públicamente nuestro apoyo al papa Francisco. Un apoyo que nunca hemos dejado de expresar pero que, acaso en este momento, nos sentimos obligados, por sentido eclesial y por cari-ño hacia su persona, a subrayar públicamente.

En nuestras Asambleas Generales ha sido notorio en palabras de los Presidentes, trasmitidas al Sr. Nuncio que nos ha acompañado en las mismas como representante del Papa, nuestro respeto y gratitud por la labor desarrollada por el Papa Francisco.

Hacemos nuestras también las palabras del Presidente de la Conferencia Episcopal Española, cuando afirma:

“Santo Padre, no está solo; la Iglesia pide por Vd. como en otro tiempo por Pedro. Pedimos al Señor que continúe sosteniendo a Vd. en las luchas diarias por el Evangelio, que le otorgue su paz y la capacidad para de-cir a los cansados una palabra de aliento2”.

Seguimos orando por el Papa Francisco en estos momentos donde algunos quieren sembrar dudas sobre su persona y su trabajo y pedimos al Espíritu que le siga iluminando en su servicio abnegado y evangélico.

1 Palabras de la Presidenta de la CONFER, Hna. María del Rosario Ríos, ODN, dirigidas a la XXIII Asamblea General el 15 no-viembre de 2016. 2 Palabras de D. Ricardo Blázquez en la carta enviada al Papa Francisco. 26.8.2018

María del Rosario Ríos, odn Presidenta de la CONFER

Antonio Díaz Sariego, op

Vicepresidente de la Confer

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En la audiencia general del 8 de agosto, de este año, dedicada a la idolatría,

el Papa Francisco recuerda que reconocer la propia debilidad es la condi-

ción para abrirse a Dios y para rechazar a los ídolos de nuestro corazón.

El Aula Pablo VI repleta de fieles llegados de los cinco continentes, fue el escenario de la segunda audiencia general del Papa Francisco, después de la pausa de verano del mes de julio, en la que el Pontífice continuó su catequesis sobre el primer mandamiento del Decálogo, profundizando sobre la idolatría, con la escena bíblica del becerro de oro, que representa el ídolo por excelencia.

El desierto hace nacer ansiedades e idolatría

El Santo Padre inicia su catequesis invitando a los siete mil fieles presentes a detenerse en el contexto en el cual se desarrolla este episodio del libro del Éxodo, y se pregunta: ¿Qué es el desierto? “El desierto – afirma – es el lugar en el que reinan la precariedad y la falta de seguridad” donde no hay nada, “faltan el agua, la comida y el amparo”. Y ésta – evidencia el Papa – “es una imagen de la vida humana, cuya condición es incierta y no posee garantías inviolables”. Esta inseguridad genera en el hombre “ansiedades prima-rias”, como el comer y beber. Francisco explica que la naturaleza humana, para escapar de la precariedad, de la preca-riedad del desierto, busca una religión ‘casera’: “si Dios no se deja ver, nos hacemos un dios a medida” - afirma - y pone en evidencia que “frente al ídolo no hay riesgo de una llamada a salir de la propia seguridad, porque los ídolos tienen boca y no hablan”. “Entendemos entonces – precisa el Papa - que el ídolo es un pretexto para ponerse en el centro de la realidad, en adoración de la obra de las propias manos".

Las tentaciones de todos los tiempos

La necesidad de un ídolo lleva a Aarón a crear un becerro - entonces símbolo de fecundi-dad, abundancia, energía y fuerza - hecho de oro y, por lo tanto, representación por ex-celencia de la riqueza. “Estos son los grandes ídolos: el éxito, el poder y el dinero ¡Son las tentaciones de siem-pre!” advierte Francisco. “Esto es el becerro de oro: el símbolo de todos los deseos que dan la ilusión de libertad y que, en cambio, esclavizan, porque el ídolo siempre esclavi-za”. "La gran obra de Dios - subraya el Papa - es quitar la idolatría de nuestros corazones". El Obispo de Roma explica a continuación que “todo nace de la incapacidad de confiar sobre todo en Dios, de poner nuestra seguridad en Él, de dejar que Él sea el que dé ver-dadera profundidad a los deseos de nuestros corazones”. Y advierte que esto "también

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apoya la debilidad, la incertidumbre y la precariedad”. La referencia a Dios – agrega el Papa – nos hace fuertes en la debilidad, en la incerteza y también en la precariedad” porque “sin la primacía de Dios caemos fácilmente en la idolatría y nos contentamos con miserables garantías”.

La debilidad, condición para abrirse a Dios

Sin embargo, aceptar a Jesús que "se hizo pobre por nosotros" es reconocer que "la pro-pia debilidad no es la desgracia de la vida humana, sino la condición para abrirse a quien es verdaderamente fuerte": “La salvación de Dios entra por la puerta de la debilidad” asegura el Santo Padre, sub-rayando que es “por su propia insuficiencia que el hombre se abre a la paternidad de Dios”. Y agrega: “La libertad del hombre nace en el dejar que el verdadero Dios sea el único Señor. Esto nos permite aceptar nuestra propia fragilidad y rechazar los ídolos de nuestros corazones”.

Cristo es la fuente de nuevas fuerzas

Mirar al Crucificado, para nosotros los cristianos, es reconocer que en Él "débil, des-preciado y despojado de todas las posesiones" está el verdadero rostro de Dios, "la glo-ria del amor y no la del engaño resplandeciente": “Nuestra sanación viene de Aquel que se hizo pobre, que acogió el fracaso, que llevó al límite nuestra precariedad para llenarla de amor y fuerza. Él viene a revelarnos la pater-nidad de Dios; en Cristo nuestra fragilidad ya no es una maldición, sino un lugar de en-cuentro con el Padre y la fuente de nuevas fuerzas desde lo alto”, afirma el Papa.

Santa Teresa de la Cruz, mártir del pueblo judío y cristiano

Al término de la audiencia general, el Papa Francisco recordó la memoria litúrgica de Santo Domingo de Guzmán y la fiesta, 9 de agosto, de Santa Teresa Benedicta de la Cruz, que fue Edith Stein, co-patrona de Europa. "Mártir, mujer de coherencia, mujer que busca a Dios con honestidad, con amor – dijo Francisco – y mujer mártir de su pueblo judío y cristiano”. Y con la esperanza de que Ella, Patrona de Europa, ore y cus-todie a Europa desde el cielo. “¡Y que Dios los bendiga a todos!”

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Felices quienes han descubierto que bendecir es bien-decir, pensar-bien, desear-el-bien.

Felices quienes guardan sus maldiciones solo para las situaciones de pecado, de dolor, de opresión, de muerte injusta.

Felices quienes desean a los caminantes, por el hermoso y duro viaje de la vi-da, que la Divinidad les proteja y que vuelvan transformados en nuevas personas.

Felices quienes han sido bendecidos con la contemplación del rostro de Jesús en las personas más débiles y marginadas.

Felices quienes bendicen no con palabras sino con hechos concretos, llevando con sus acciones la paz a cualquier lugar donde vayan.

Felices quienes bendicen mostrando siempre compasión y misericordia, vi-viendo la cercanía y la ternura, comunicando alegría y esperanza.

Felices quienes se sienten bendecidos por la mirada del buen Padre y Ma-dre Dios, por acoger todo lo que le dice al corazón, por comunicarlo después con audacia y humildad.

Felices quienes bendicen repartiendo a su alrededor comprensión, solidari-dad, amistad, sinceridad, buscando sin cesar que los demás sean más felices.

Miguel Ángel Blesa

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PARA ANIMARNOS

EN EL CAMINO

PARA FORTALECER

NUESTRO SENTIDO DE

PERTENENCIA

PARA FORTALECER

NUESTRO CAMINAR

PARA RECORDAR

EL AMOR PRIMERO

PARA VIVENCIAR EL

CAMINO RECORRIDO

PARA ESCUCHAR

Un momento muy entrañable, durante el encuentro de Profundización de la

Vida Consagrada Josefina, llevado a cabo en Bogotá, fue compartir la carta

que cada una de las Hermanas que participaron escribió a la Congregación,

a cada josefina. Compartimos parte de estos escritos y les hacemos llegar,

con sencillez, nuestro cariño y deseo grande de que en todas crezca y se

fortalezca la vocación josefina y el deseo profundo de dejar huellas del Ca-

risma allí, a donde hemos sido enviadas.

Queridas Hermanas:

El día 18 de julio, nos reunimos en Bogotá un grupo de hermanas, ‘’de mediana edad’’, convocadas desde

nuestros lugares –Angola, Argentina, Guatemala, México y Paraguay-, para hacer un alto en nuestras acti-

vidades, dedicando estos días a compartir la experiencia vocacional josefina.

A lo largo de estos días, nos hemos enriquecido al calor de lo que cada una ha compartido de su vida, de su

andadura en lugares y circunstancias concretas. Hemos disfrutado la escucha serena de lo que cada una de

nosotras, luego de veinte o treinta y pico de años de camino josefino, tiene para expresar como tesoro vo-

cacional… Profundizar algunos aspectos de nuestra realidad humana, retomar nuestro Principio y Funda-

mento vocacional, acercarnos con cariño al camino de cada una, ha sido una experiencia refundante en

este momento de nuestra vida. Y en este compartir sencillo, de hermanas, nos damos cuenta, una vez más,

que tenemos tantas cosas en común…que lo bueno crece, y los escollos y dificultades propias del camino,

se atenúan…¡NO CAMINAMOS EN SOLITARIO!

Hemos tenido también la gracia de retomar nuestra historia congregacional, profundizar en la vida del p.

Butiñá y en lo fundamental de este proyecto que soñó y que tanto le costó… hemos releído, comentado,

orado, la primera etapa fundacional, los orígenes y los primeros pasos de aquel grupo de mujeres, josefinas

de corazón, aún sin tenerlo tan claro para expresarlo…Nos hemos acercado a la vida de M. Bonifacia, escu-

chando el testimonio de una SSJ… hemos hecho memoria de la fuerza y empuje del Carisma que llevó a

tantas hermanas a cruzar el océano y hacer presente el Taller en nuestros países…Uruguay, México, Argen-

tina, Brasil, Colombia, Guatemala, Paraguay…Angola...

Hemos terminado este encuentro… queremos darles una buena noticia: el evangelio de Nazaret sigue

vivo, presente y actuante en cada lugar donde vive y trabaja una josefina, Sierva o Hija! Es verdad que

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somos pocas, es verdad que las nuevas vocaciones no llegan, es también cierto que nuestras fuerzas dismi-

nuyen y las circunstancias nos limitan. Pero…acabamos de palpar las pobrezas de los primeros tiempos…,

acabamos de comprobar que nada es obstáculo para Dios, si encuentra oídos atentos y corazones buenos.

Más aún, tenemos la certeza de que se ha valido de nuestras miserias humanas para que terminemos pro-

clamando que Él es el protagonista de esta obra sencilla y que hoy cuenta con nuestras fuerzas. El p. Butiñá

luchó por sus josefinas ‘’contra viento y marea’’, las primeras hermanas, entre luces y sombras, siguieron el

proyecto convencidas de que era fuente de vida para ellas y para los pobres del mundo del trabajo…, otras

tantas siguieron sus pasos…, nosotras y ustedes estamos en el camino…, a veces difícil y cuesta arriba…, pe-

ro siempre en esperanza si tenemos claro el sentido.

Gracias a todas por la fidelidad, por no ‘’cejar’’ hasta conseguir la perfección hermanando la oración con

el trabajo. ¡GRACIAS! porque podemos ayudarnos unas a otras a CREER que ES POSIBLE hacer vida el CARIS-

MA… que ES POSIBLE SEGUIR SIRVIENDO, CONTENTA, EN EL TALLER…

Silvia González

Querida Hermana Hija de San José:

Te invito a tomar un poco de tu tiempo para leer y reflexionar esta carta que quiero compartir conti-

go.

Hoy, despues de varios años de vivencia (experiencia) en el Taller, doy gracias al Señor por tantas

hermanas conocidas o anónimas que han hecho de su vida, allí donde han sido enviadas, y

especialmente en el trabajo, una tierra mas amable y fraterna.

Doy gracias por el P. Butiná, por su vida, por su testimonio, por su celo apostolico. Hoy,

parafraseando unas de sus palabras, de nuevo ha despertado en mí, y posiblemente en cada una de

ustedes, los resortes vocacionales un tanto somnolientos: «Estoy dispuesta a entregarme del todo a

Jesús y a no negarle nada por costoso que sea».

Tenemos todas, no importa la edad, en lo mas hondo de nuestros

corazones, el deseo de santidad, es decir, de predicación viva del

Evangelio de Nazaret. Sé una apasionada por Jesús y su Reino. Te

invito, como te decía al comienzo, a leer esta carta. ¡Ojalá! Que,

desde el momento que lo hagas, puedas reflexionar y renovar

internamente en tu corazón la llamada a la vocación josefina.

El Espiritu hoy sigue guiandonos, dejemos que haga su trabajo en

nosotras; abrámonos generosamente a su gracia para que también

aquellos que están a nuestro lado descubran en JESÚS de NAZARET el

camino para avanzar y, juntos, con nuestras capacidades y saberes

humanicemos el trabajo sencillo, bajo el cuidado de nuestros buenos

padres: José y María.

Janeth Monroy

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Querida Hermana Josefina:

Quiero compartir contigo algo de nuestro ENCUENTRO en Colombia, donde hemos podido comprobar, evi-

denciar, tener certezas y confirmaciones; todo ello ha permitido fortalecer nuestra confianza en la opción

tomada y en la búsqueda de la voluntad de Dios.

El Espíritu Santo, que ha sido nuestro compañero, nos ha facilitado afirmar, que la opción que hicimos ha-

ce algunos años, fue y sigue estando colmada de amor; que nuestras horas de trabajo contemplativo, en

nuestros lugares de trabajo encarnado, sigue latiendo, sigue vivo y presente en los lugares donde cada jose-

fina, hoy, seguimos entregando la vida.

Me he vuelto a sentir invitada a vivir la vida como don, y a agradecer su dimensión de gratuidad, siendo co-

creadora, responsable de mí misma, en libertad, reconociendo la dignidad de los demás que, igualmente,

son llamados con las mismas posibilidades. Me he preguntado muchas veces, durante mi caminar, ¿es Jesús

Artesano de Nazaret mi DON gratuito, y le he respondido y agradecido, ese DON? Me he preguntado, tam-

bién, ¿Soy yo un don gratuito para los demás?

El ENCUENTRO me (nos) ha permitido crecer más, descubrirnos más; ha significado no solo reconocernos y

amar más nuestra vida, sino también que amamos la vida del otro y nos solidarizamos, reconociendo que

la opción hecha hace algunos años, nos comprueba que hemos seguido tejiendo en el TELAR JOSEFINO, y

somos, nuevamente, llamadas a vivir la contemplación en medio de los desafíos actuales de Mundo Traba-

jador Pobres especialmente de la mujer. Vivir hoy el Carisma es vivir con el Dios de Jesús de Nazaret, Padre

y Madre que nos hace hermanos, construyendo entre nosotros un mundo más humano, fraterno, solidario,

descubriendo a Dios, en lo cotidiano de la vida…

El Encuentro ha sido una experiencia cargada de muchas emociones, por ello me sigo invitando a mante-

ner vivo el ENCUENTRO, desde un compromiso personal, pero también, invitando a cada una de ustedes

a “hacer de nuestro lugar de trabajo, una prenda de amor y un tributo de alabanza”, compartiendo lo que

somos y tenemos en beneficio del Mundo del Trabajo y haciendo juntas lo que solas no podemos.

Un saludo fraterno para cada una.

Amparo Medina

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Querida Congregación:

Ingresé a ti un poco tarde pero con la gran certeza y convicción de que tu Carisma y Espiritualidad eran lo que

yo quería vivir. Quizá he tenido momentos o tiempos de desilusión por la dureza del trayecto y las contradiccio-

nes que, “según yo”, encuentro, pero esto hoy lo veo como parte del moldeo del yo.

La certeza y convicción siguen intactas, lo bueno que Dios me ha dado a través de ti es mucho, empezando por

mis hermanas y luego el trabajo con la mujer pobre, y sentir que, Jesús Obrero que nos convocó, viaja y está

siempre en medio de nosotras.

Querida Congregación, te vemos disminuida, pareciera que el futuro es muy incierto; a quienes te formamos se

nos acaban las fuerzas y nos desalentamos muchas veces, pero cuando, como en este tiempo de encuentro,

nos detenemos a ver la vida que has sembrado, se renueva la esperanza de que nazcan los renuevos.

Nosotras somos de Dios, lo mismo que el Carisma y todos los proyectos congregacionales, por eso, en sus ma-

nos, nos colocamos para que Él actúe a través de cada una, de cada comunidad, porque bien sabemos que a Él

le encanta hacer surgir la vida donde parece que hay esterilidad o sequedad. Hoy, que removemos las cenizas,

vemos que las brasas están vivas y rojas. Con esta certeza yo me enfilo al lado de mis hermanas para hacer lo

que nos toca aquí y ahora.

Te amo querida Congregación.

Bertha Gil

Oración, Trabajo, Comunidad!

Querida Congregación:

¡Gracias por acogerme!

¿Hoy somos pocas?... Hoy somos invitadas, de nuevo, al amor primero, como semilla pequeña,

sin grandezas, sin brillo… Invitadas a Nazaret del mundo de hoy; a hacer comunidad con las

Hermanas que el Señor escogió para mí; a hermanar la oración con el trabajo para que Cristo

sea alabado…

Soy invitada, sí, pero no sola, sino con mis Hermanas, con mis compañeros de trabajo, con

otros laicos, niños, jóvenes…, en la rutina del día a día, con mi pobreza…

Nuestra Congregación tiene mucha vida. ¡Somos mujeres de buena voluntad!

Miramos el futuro con esperanza…, en lo pequeño, con los pequeños, trabajando con amor…

¡Gracias Hermanas María Eugenia y Ana Romero!

Lúcia Helena Pereira

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Quiero agradece a Dios, a la Congregación y a mi comunidad por la oportunidad que me brindaron para

participar en este encuentro que realizamos en Bogotá, Colombia, donde hemos retomado en muestras ma-

nos la historia personal y congregacional. nuestro caminar diario por el mundo donde se encuentra sembra-

do el Carisma que recibió nuestro fundador y quienes han seguido sus pasos, nuestras primeras hermanas.

La tarea es ardua. El camino hay que seguir construyéndolo. A veces, es necesario detenerse para contem-

plar lo recorrido, rezarlo y retomarlo, seguir adelante luchando por alcanzar la santidad, a la que el padre

Butiñá tanto nos anima.

Quiero agradecer a quienes nos han acompañado. A Hna. María Eugenia y Ana Romero muchas gracias.

Elena Sosa

¿Cómo te pagare señor todo el bien que me has hecho?

Gracias Señor, Dios de la vida, por todas las cosas buenas que nos has regalado cada día en este encuentro .

Escucho, una vez más esta pregunta: ¿”Estas contenta de servir al SEÑOR Jesús en el Taller”, en medio del

mundo trabajador pobre, especialmente con la mujer trabajadora? SÍ, y ahora he encontrado mucha riqueza en

mi Congregación, vale la pena seguir apostando la vida. Buscando y encontrando la Perla preciosa por la cual se

hace lo que sea por ser felices en el trabajo de cada día. Con las personas cercanas, Hermanas de comunidad,

con ánimo y poniendo todo lo que esta de nuestra parte. Así como lo hizo el Padre Butiñá. Siendo esperanza

desde las pequeñas cosas de la vida.

Me ha enriquecido el encuentro con las hermanas de otros países como África, Brasil, Paraguay, Argentina, Mé-

xico, Colombia, Guatemala con diferentes realidades pero siguiendo al mismo Jesús de Nazaret. Los Ejercicios

Espirituales han sido muy ricos junto con los ratos de oración personal y comunitaria, me animan a continuar en

este camino.

También agradezco la presencia de Hna. Milagros, Sierva de san José, quien nos compartió su experiencia de la

vida diaria a la luz del Carisma.

Todo me invita a vivir con mucha esperanza. Retomar los orígenes de nuestra congregación, una gran riqueza.

También lo es ver cómo nacieron nuestras comunidades y recordar a nuestro querido Padre Butiñá y a nuestras

hermanas que siempre dijeron sí y estuvieron atentas a la voz de Dios.

Gracias a Dios, a la Congregación, al Consejo sobre todo a Ana Romero y a María Eugenia que nos han acompa-

ñado en este tiempo. A todas las invito a caminar con mucha ESPERANZA Y ALEGRÍA. DANDO VIDA A CADA

UNA DE NUESTRAS COMUNIDADES COMO CONGREGACION QUE SOMOS.

Guadalupe Hernández

Visitando a la Virgen de

Chiquinquirá junto con la

Comunidad de Bogotá.

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Querida Congregación

Gracias por la invitación a este Encuentro de Renovación Josefina. Compartir, escucharnos y orar, juntas,

la realidad que cada una vive en su entorno y comunidad nos ha fortalecido y reanimado para el diario

caminar.

Qué importante y necesario es hacer un alto como este, para ver dónde voy, cómo estoy o cómo estamos

y saber qué hacer, cómo ayudar etc.

También hemos tenido la oportunidad de profundizar de todo lo rico que tiene nuestra Congregación. No

hay que perder el IDEAL. Jesús de Nazaret va delante, nos guía y nos conduce... Y como nos recuerdan los

Documentos Capitulares: “UNA CONGREGACION APASIONADA POR JESUCRISTO, TIENE FUTURO SE RE-

VITALIZA, NO SÓLO NI PRINCIPALMENTE POR EL NÚMERO SINO POR EL VIGOR DE LA ENTREGA…”

Gracias Queridas Hnas. por permitir vivir esta gran experiencia...Me encomiendo a Dios y pido su Gracia

de anunciarlo en el taller.

Laura Reyes

Querida Congregación :

Experimento este espacio de encuentro como un impulso de vida. Hemos visto con realismo

nuestra vida de luces y sombras: las hemos rezado, las hemos reflexionado delante de Jesús de

Nazaret, abiertas a la propuesta de hacer nueva nuestra entrega a Ti, en esta Familia Josefina,

con lo que somos y tenemos.

La riqueza del CARISMA me ilusiona, me impulsa a una respuesta renovada donde Dios me ha

puesto. La generosidad en nuestras misiones y tareas nos impulsa, nos anima. El corazón se en-

sancha por tanta VIDA que hay en nuestras comunidades. Nos mueve la certeza de que Jesús de

Nazaret, camina con nosotros, nos ha convocado. La luz del TALLER ESTA ENCENDIDA EN MU-

CHOS LUGARES.

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Vamos con ilusión, siguiendo con alegría lo que Dios tiene soñado para cada una. Corazón inquie-

to, manos tendidas, pies prestos e inquietos para salir a dar respuesta, ojos abiertos, claros, y oí-

dos atentos. Caminamos con Esperanza porque tu Amor es grande por nosotras.

¡GRACIAS!, SEÑOR.

Felipa María Fernández

Algunas de las puertas que queremos abrir

A la Comunidad de Bogotá, MUCHAS GRACIAS por la acogida, el servicio, el cariño, los detalles. Nos

hemos alegrado de compartir estos días con ustedes en tierras colombianas.

Foto del recuerdo con Milagros Rojo, ssj

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Durante los días que la Madre General, Mª Mendía Ajona, estuvo en Bogotá, aprovechó para visitar el Cole-

gio Gimnasio Corazón de María, GIRAZOMA, cuya titularidad se transfirió en el año 2013 a la Sra. Carmenza

Rodríguez de Boyacá, antigua alumna del Colegio, y se le alquiló al inmueble del que sigue siendo propieta-

ria la Congregación.

El colegio sigue educando en los valores de Nazaret y continuando la obra que, hace 59 años, comenzaron

las Hermanas. La visita se realizó la mañana del día 13 de agosto y todo el colegio se vistió de gala para reci-

bir a Mª Mendía Ajona, como representante de la Congregación Hijas de San José, acompañada por la Con-

sejera General, Mª Remedios Jiménez, y la superiora de la Comunidad de Bogotá, Fabiana Ramírez, y para

participar en la Eucaristía a la que asistieron todos los alumnos y profesores.

Después les obsequiaron con un sencillo festival, unos discursos y una poesía dedicada a San José. A conti-

nuación, la directora les hizo un recorrido por las distintas partes del colegio para que comprobaran todas

las mejoras e inversiones que se habían realizado en el Centro en estos años que lo ha tenido en alquiler.

Quedamos muy agradecidas por la acogida, detalles y gestos de reconocimiento que nos expresaron.

Os hacemos llegar la poesía que recitó una alumna de tercer curso.

ORACIÓN A SAN JOSÉ DEDICADA A LA SUPERIORA GENERAL Mª MENDÍA AJONA

San José, ruego a Jesús que venga a mi corazón y lo inflame de caridad.

San José, ruego a Jesús que venga a mi inteligencia y la ilumine.

San José, ruego a Jesús que venga a mi voluntad y la fortalezca.

San José, ruego a Jesús que venga a mis pensamientos y los purifique.

San José, ruego a Jesús que venga a mis afectos y los ordene

San José, ruego a Jesús que venga a mis acciones y las bendiga.

San José, haz que Jesús me done su santo amor.

San José, haz que Jesús me done la imitación de sus virtudes.

San José, haz que Jesús me done la verdadera humildad de espíritu.

San José, haz que Jesús me done la dulzura de carácter.

San José, haz que Jesús me done un corazón puro y caritativo.

San José, yo me pongo en tus manos, acéptame y socórreme.

San José, yo te pido por las Hermanas de la Congregación Hijas de San José,

pero muy especialmente por la Hermana Mendi Ajona,

Superiora general de la Congregación,

para que la ilumine, la cuide, la proteja de todo mal y peligro

y, sobre todo, para que lleve en su corazón a todos los estudiantes

del Gimnasio del Corazón de María.

Gracias por visitarnos.

VISITA AL COLEGIO GIRAZOMAVISITA AL COLEGIO GIRAZOMAVISITA AL COLEGIO GIRAZOMA (Gimnasio Corazón de María)

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Hna. Mª Zulma Carrera visita la comunidad de Burzaco del 1 al 13 de agosto.

Hna. Ana Romero visita la comunidad de Bañolas el 30 de agosto.

Hna. Mª Remedios Jiménez visita la comunidad de Calella el día 7 de septiembre.

Información de la Curia General

Destinos: Hna. Guadalupe Guarneros de la comunidad de Laredo Tejas U.S.A. a la comunidad de Re-servas Territoriales -Nuevo Laredo- (México). Hna. M ª Pilar Cuevas de la comunidad de Bogotá (Colombia) a la de Pedro Mª Anaya –Nuevo Laredo- (México). Hna. Dolores Carmona a la comunidad de Damiel. Hna. Joaquina Núñez a la comunidad de Coslada.

La Superiora General de las Religiosas Hijas de San José

tiene el agrado de invitarle, a usted y a su familia, a la presentación del libro:

España, Cataluña y su gente en la obra de Francisco Butiñá, 1834-1886.

Participará D. José Andrés-Gallego, autor de la obra, profesor de investigación del CSIC y del

CCHS.

El acto tendrá lugar el día 13 de septiembre, a las 19:00 horas en Girona, Plaça LLedoners, 6.

El Dr. D. Joaquim Nadal, exalcalde de Girona, presentará al autor de la obra.

Muchas gracias por su asistencia

Con motivo de la presentación del primer tomo de la Historia de la Congregación, M. General,

Mª Mendía Ajona, ha invitado a diversas personalidades, familiares del P. Butiñá, amigos… con

la presente tarjeta:

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Información de las comunidades

Saludos cordiales a toda la familia Josefi-na.

Les quiero compartir un poco la experiencia vivida en la JNJ (Jornada Nacional de los Jóvenes) en Came-rún, que se celebró en Garoua, del 17 al 22 de julio del 2018.

Después de un año viviendo en Camerún, tuve la dicha de parti-cipar de esta jornada que, de verdad, para mí fue una experien-cia tan llena de sor-presas, de gracias y de bendición. Tan llena de sorpresas, pues pensaba que ya cono-cía África y, al salir y compartir la vida por

estos pueblos, me di cuenta que no conocía nada, todo era nuevo y sorprendente. Pues lo desconocido me descolocaba.

Doy gracias por la posibilidad de compartir con los jóvenes, saber lo que piensan y com-partir su sentir. Hicimos un viaje largo, sufrido. Pasamos de todo, pero no hay mejor re-compensa que la vida compartida desde el corazón alegre de los jóvenes, tan llenos de ilusiones y agradecidos con mi presencia, pues se sentían acompañados. Es una bendi-ción, pues cada experiencia me hace crecer y descubrir nuevas capacidades y recibir lo mejor de las personas.

Releyendo las palabras del Papa Francisco que dirige a los Jóvenes, haciendo referencia a la preparación de la Jornada Mundial de la Juventud que se llevará a cabo en Panamá, el tema de la Jornada fue ¡No tengas miedo, María, pues Dios te ha concedido su gracia! ¡María la joven de Nazaret que Dios escogió como Madre de su Hijo. Ella camina con no-

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sotros en dirección al Sínodo y la Jornada Mundial de la Juventud. (Sacada del Vaticano el 11 de febrero del 2018 del VI domingo ordinario. En Memoria de Nuestra Señora de Lour-des.)

Durante la JNJ en Garoua se llevaron a cabo distintas actividades:

marcha juvenil noche cultural adoración y rezo del Rosario.

Conferencias sobre varios temas, entre ellos:

La protección de la casa común y reforestación. La historia de la evangelización del Norte de Camerún. Justo donde nos encontrába-

mos reunidos. Conferencia sobre La educación ciudadana y sensibilización sobre VIH (sida), reali-

dad fuerte que esta golpeando la mujer Joven de África. Jóvenes Católicos llamados al compromiso con la política. María como modelo de vocación y seguimiento para los jóvenes.

Todas estas conferencias fueron impartidas por laicos, religiosos y obispos.

Fue una riqueza para mí y para los Jóvenes que participamos, ya que nos han ampliado el conocimiento y sen-sibilidad con rela-ción a la realidad.

Quedo agradecida por tan grande rega-lo que Dios y la con-gregación me han concedido.

Veo que es imposi-ble plasmar en este papel la experiencia vivida. Solo puedo decir que ha sido una experiencia donde Dios se me ha dado a conocer desde la realidad sencilla y dura de este pueblo Afri-cano.

Gracias, Señor.

Clementina Huinac fsj

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¿Qué se plantea la comunidad si un día recibe una correo de la Delegación de Migraciones pi-

diendo voluntarios para pasar la noche con un grupo de subsaharianos?

Sabemos que se han pedido loca-

les… pero este correo no llega a las

comunidades, sino a otras instan-

cias. Nosotras, al recibir el correo

sobre la necesidad de personal,

nos lo planteamos en la comuni-

dad y todas sin pensarlo nos ofre-

cimos para ello.

¿Que cuáles son nuestros senti-

mientos? La necesidad de aportar

nuestra pequeña gota de agua, en

este inmenso lago de la solidari-

dad. Sabemos, como dice Eduardo Galeano, que son cosas pequeñas, que no acaban con la po-

breza… Y, desde esta llamada a la solidaridad y al servicio, estamos viviendo nuestro ofreci-

miento.

Nos entran dudas, incertidumbres, todo aquello que parece nos quiere disuadir para rea-

lizar este servicio. Sin embargo, cuando lo realizas, te das cuenta de todo lo que te aportan los

que llegan cruzando el Estrecho en patera.

Cuando pasas la noche con ellos y les miras a los pies, te viene a la mente, pero sobre to-

do al corazón, los caminos andados, los países recorridos sin más bagaje que el dolor de tener

que salir de tu tierra, de arriesgar la vida sin saber si llegarás a destino seguro… Ver unos ojos

que han visto mucho horror, palizas, abandonos, vuelta a su país, etc. te sobrecoge. ¡Cuánto

dolor! Palizas, maltratos, hambre, miedo…

Pasar con ellos la noche es reconocer que Dios está en ellos, por la paz que transmiten, el

trato humano tan delicado, la sonrisa que ofrecen, a pesar de toda la carga emocional, dura y

sangrante que traen. Muerte de los seres queridos por ébola, palizas al cruzar los propios paí-

ses africanos, diabetes, etc. En nuestro corazón han quedado sus rostros, sus miradas y, con

ellos, nos presentamos al Señor.

Guinea Conakry, Camerún y Costa de Marfil, están presentes en este pequeño grupo al

que atendemos los VOLUNTARIOS DE EMERGENCIA y al que las Hermanas de la comunidad,

acompañamos algunas noches.

Hna. Vicenta Carrascosa cuenta que una noche le tocó pasarla con el grupo de refugiados

en la parroquia Ntra. Sra. de Europa. Llegó a las 20:30hs, casi al mismo tiempo que otro volun-

tario. Nos esperaba ya la encargada del Secretariado de Migraciones. Los jóvenes esta-

ban acabando de ducharse. Pronto, a las 21:30hs compartimos cena con ellos. Se les

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veía cansados, pero agradecidos. La cena la preparó un matrimonio joven, que se quedó tam-

bién a cenar con nosotros. Como al día siguiente era domingo y no tenían actividades, estuvimos

hasta las 11:00hs tocando y bailando con un grupo, pues otros se fueron a la cama enseguida.

Es una experiencia que te deja huella, cada rostro tiene una historia de sufrimiento pero

están llenos de esperanza. Tienen ganas de comunicar lo que llevan dentro y agradecen cada

gesto que se hace para que estén bien. Quedé sorprendida también de la gente que colabora,

pues me tocó con cuatro jóvenes que me dejaron con la seguridad de que Dios está y se mani-

fiesta a través de ellos en estos momentos de generosidad.

A Hna. Engracia, le asignaron las noches del 1 y 5 de agosto.

Es interesante, ampliar esta comunicación, transcribiendo algunos párrafos del sencillo Regla-

mento que la Mesa por la Hospitalidad nos facilita:

“A LOS ACOMPAÑANTES DURANTE LA NOCHE. Ante todo, mil gracias por dedicar la noche a pro-

longar el cariño de nuestro buen Dios, que vela a los hermanos que vienen cansados, doloridos y

humillados por mil circunstancias. La Iglesia de Madrid se siente orgullosa de contar con perso-

nas como tú, que hacen visible el “fui extranjero y me acogisteis”.

Como acompañante durante la noche (en la gran mayoría de las noches, seréis al menos dos), tu

MISIÓN es sencilla, pero muy importante:

Tu estar es ACOMPAÑAMIENTO. Estás ahí desde la cercanía, sin obligar a nadie, pero ofreciendo

tu escucha, tu ayuda, tu sonrisa, o, sin más –ni menos-, tu presencia gratuita. El asesoramiento

especializado lo facilitan entidades expertas en el tema. Las personas alojadas ya tienen acom-

pañamiento completo durante el día.

Queremos procurar a las personas acogidas la máxima calidad y calidez, aunque somos conscien-

tes de que se trata de una solución de emergencia, que posibilita cenar, dormir y descansar y

desayuno del día siguiente por unos pocos días.

A la vez, te encargas de que todo transcurra con normalidad. Eres GARANTÍA de que, ante cual-

quier cosa, los/as alojados/as no están solos: si alguien se pone enfermo, si alguien no respeta el

descanso y sueño de todos (también el tuyo), si hay cualquier pequeño inconveniente en el local…

La persona o personas acompañantes sois la autoridad de la Mesa por la Hospitalidad en el es-

pacio habilitado de emergencia. No os lo va a discutir nadie, y si alguien lo hiciera, conviene de-

jarlo bien claro.

…Y si tienes que contactar con médicos, policía o quien sea, recuerda que actúas en nombre de la

Archidiócesis de Madrid señalando que estás en un espacio de acogida… (en la Parroquia donde

os toque porque van rotando según los meses que éstas se hayan comprometido, Virgen de las

Angustias, Ntra. Sra. De Europa, La Paz…)”.

Estas personas durante el día son acogidas por SERCADE (Servicio Capuchino para el

Desarrollo) y El Centro Social Capuchinos Medinaceli, Programme Afrique.

A su vez, SERCADE trabaja en red con otras Instituciones, entre ellas Las Apostólicas del

Corazón de Jesús, el Centro “Luz Casanova” donde estos jóvenes reciben clases de español por

las mañanas y comen, junto a un centenar de personas, en este Comedor Social. La atención

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completa y otras actividades las realiza SERCADE.

Coincidimos en valorar la riqueza, a nivel personal y de comunidad, de este sencillo servi-

cio, dando respuesta a las muchas llamadas que el Señor nos está haciendo desde la diáspora

constante de hermanos pidiendo ayuda-asilo, el cementerio tan cruel del Mediterráneo, la insis-

tencia y ejemplo del Papa Francisco, la entrada masiva de hermanos en nuestro país…

Ha sido ocasión también, de conocer a muchos voluntarios, familias abiertas al compromi-

so y, sobre todo, jóvenes inquietos en su vida cristiana al servicio y la entrega a los hermanos.

Desde esta respuesta y la experiencia tan rica, palpamos nuestra concreta dificultad: el no

poder comunicarnos con ellos como quisiéramos… ¡Qué importante es saber francés e inglés co-

rrectamente! Esto lo han suplido jóvenes como Elena, Cristina, Paloma, Fátima…con su presencia

alegre y servicial en estrecha amistad con el grupo y donde ellos han podido comunicarse abierta-

mente.

Damos gracias al Señor por todo lo aprendido y vivido.

Hermanas de la Comunidad de Vallecas (El Pozo) Madrid

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José León Malagón

Exalcalde de Zagra 29 de julio de 2018

A/A de la comunidad de Religiosas Hijas de San José , hermanas Carmen (superiora) Carmona y Joaquina

de la comunidad de Zagra.

Mis apreciadas y queridas hermanas: Enterado de la inesperada noticia de vuestra marcha del pueblo que me vio nace, me apresuro a poneros las presentes lí-neas, haciendo mía aquella letra de la canción “Algo se muere en el alma cuando un amigo se va”.

Realmente me alegra el haberos conocido pero me entristece vuestra ida. Debéis sentiros satisfechas y orgullosas de la magnífica labor que habéis realizado durante más de 30 años en esta Parroquia. Sin la menor duda habéis dejado, con vuestra manera de ser y proceder, una huella imborrable difícil de olvidar. Va-ya también mi recuerdo sincero para todas aquellas Superioras y hermanas que han pasado por vuestro pueblo, dejando un magnífico recuerdo, muy presente aún en nuestra memoria, por su generosa entrega y buen hacer en su diario quehacer en pro de la Parroquia de Zagra. Tenéis que saber que , tanto en nuestro pueblo como en Ventorros de San José y la Viña, hay muchísima gente que os quiere.

Espero que no me olvidéis y pidáis por mí en vuestras oraciones ante el Se-ñor.

Un fuerte abrazo.

Pepe León (Transcripción del original)

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O CENTRO SOCIAL PADRE BUTINHÁ “

PASTORAL DA MULHER “, acaba de celebrar os

25 anos de fundação. Nós que fazemos parte

desta família, preparamos uma singela e bonita

festa.

Convidamos todas as pessoas que

fizeram parte, desde 1993, a fundação, até os

dias atuais. O ambiente foi composto com balões

nas cores da Bandeira da Congregação Josefina,

fotos da equipe atual e as colaboradoras. Tam-

bém o quadro da linha do tempo, portfólios de

todas as comemorações e alguns trabalhos ma-

nuais. Lindo ver as pessoas revendo o túnel do

tempo. Iniciamos com a Celebração da palavra

com os conteúdos de Nazaré, a espiritualidade

do Padre Butinhá. Depois um pouco da história

da fundação, com a biografia e homenagem à

fundadora Irmã Antônia Machado Garcia. Acha-

vam-se presentes pessoas de todas as gestões;

inclusive a primeira presidente e cinco compo-

nentes da fundação. Terminada a Celebração nos

dirigimos à sala para descerrar a placa simbólica,

justa homenagem, a qual traduz:

O CENTRO SOCIAL PADRE BUTINHÁ,

PASTORAL DA MULHER, AGRADECE AS RELIGIO-

SAS FILHAS DE SÃO JOSÉ, PELA INICIATIVA DA

FUNDAÇÃO DA ENTIDADE E VOLUNTÁRIOS PELO

APOIO. Também colocamos a foto da fundado-

ra, Ir. Antônia, da primeira presidente Fátima

Evânia e a presidente atual, Lourdes Militani.

Não podia faltar a confraternização:

Chá, café, biscoitos variados e um lindo bolo de

aniversário. Como diria Butinyà: “ÂNIMO E ADI-

ANTE!”

Todos levaram um marcador de livro

com a seguinte mensagem: MULHER FIBRA DO

El CENTRO SOCIAL PADRE BUTINHÁ,

‘PASTORAL DE LA MUJER’, celebra los 25 años de

fundación. Nosotros que somos parte de esta fami-

lia hicimos una sencilla y bonita fiesta.

Invitamos a todas las personas que toma-

ron parte, desde 1993 de la fundación, hasta nues-

tros días. El ambiente se amenizó con balones, con

los colores de la bandera de la Congregación Josefi-

na, fotos del equipo actual y colaboradoras; tam-

bién con el cuadro de la línea del tiempo, portfolios

de todas las conmemoraciones y algunos trabajos

manuales. Lindo, mirar a las personas revisando el

túnel del tiempo. Empezamos con la Celebración de

la Palabra, con contenidos de Nazaret y de la espiri-

tualidad del Padre Butinyà. Después recordamos un

poco de la historia de la fundación, con reseña y ho-

menaje a la fundadora Hna. Antonia Machado Gar-

cía. Estaban presentes personas de todas las admi-

nistraciones, incluso la primera presidenta y cinco

miembros de la fundación. Al final de la Celebración

nos dirigimos a la sala para destapar la placa simbó-

lica, justo homenaje cuya leyenda dice:

EL CENTRO SOCIAL PADRE BUTINHÁ,

PASTORAL DE LA MUJER AGRADECE A LAS RELIGIO-

SAS HIJAS DE SAN JOSÉ, LA INICIATIVA DE LA FUN-

DACIÓN DE LA ENTIDAD Y VOLUNTARIOS DE APO-

YO.

También hemos puesto la foto de la fundado-

ra, Hna. Antonia, de la primera presidenta Fátima

Evânia y de la presidenta actual Lourdes Militani.

Terminamos el evento con una convivencia fraterna:

Té, café, galletas variadas y una Tarta.

Como diría Butinyà: “¡ÁNIMO y ADELANTE!”

Se entregó una tarjeta donde se leía el mensaje:

MUJER FIBRA DEL TEJIDO DE LA VIDA.

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TECIDO DA VIDA.

Aqui fica nossa gratidão a Deus,

pela existência da Pastoral da Mulher, em

Nepomuceno, cujo trabalho é não só pro-

mover a mulher, mas também ajudá-la a se

motivar e superar seus problemas pessoais,

familiares e profissionais; com cursos, pren-

das do lar e momentos de descontração.

Quase todas as voluntárias somos

sexagenárias e aposentadas. Então acostu-

mamos brincar assim: Evite a depressão,

pastoral da Mulher é a solução,” que ex-

pressa o convite a todos os que queiram dar

continuidade a esta brilhante obra.

Nepomuceno 10 de agosto de 2018. Marly Teresa Militani Carvalho

Nos queda la gratitud a Dios, por la existencia de la

Pastoral de la Mujer en Nepomuceno, cuyo trabajo

es, no solo la promoción de la mujer, sino también

ayudarla a superar sus problemas personales, fami-

liares y profesionales; con cursos, prendas domésti-

cas y momentos de relajación. Casi todas las volun-

tarias somos sexagenarias y jubiladas. Entonces

acostumbramos a bromear así: “Evite la depresión,

pastoral de la mujer la solución”, que expresa la

invitación , a todos los que quieran dar continuidad

a esta brillante obra.

Nepomuceno 10 de agosto de 2018.

Marly Teresa Militani Carvalho

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Medellín fue el origen y la cuna de la opción por los pobres (OP),

aunque, literalmente, la expresión no figuraba en el texto. De algu-

na manera, allí, en Medellín, en torno a la OP, comenzó toda la es-

piritualidad de la liberación (EL): la Iglesia de los pobres, la teología

de la liberación (TL), la cristología de la liberación... Allí «comenzó

todo». En materia de toma de conciencia, de movilización, y de

concientización eclesial popular, el Concilio Vaticano II, en realidad

en América Latina fue menos movilizador que la Conferencia de

Medellín. Han pasado 50 años, «toda una vida». Los que todavía estábamos jóvenes entonces y pu-

dimos tener un conocimiento suficiente de Medellín, hoy contamos con unos 70 años, y estamos en

la cumbre blanca privilegiada para dar el mejor testimonio sobre Medellín, y sobre la espiritualidad

de la OP, que fue su fruto más preciado. Ha sido una historia apasionante Toda reflexión teológica

auténtica no deja de tener una dimensión de autobiografía, y esta revisión de los «50 años de histo-

ria espiritual con la opción por los pobres» a cuestas no pretenderá ocultarlo.

Una espiritualidad que no ha dejado de ser desafiada a cambiar

Han pasado 50 años, decimos, intensos, que la EL y la TL los han vivido autoconstruyéndose laborio-

samente, confrontadas diariamente con la evolución constante del pensamiento con sus

«revoluciones científicas» o «cambio de paradigmas». Hagamos un recorrido de esta aventura inte-

lectual de transformación que estos 50 años han significado para la EL y TL.

El primer fundamento sobre el que se construyó –en la década de los 70– la espiritualidad de la op-

ción por los pobres fue el redescubrimiento del Jesús histórico. Nos parecía imposible descubrir có-

mo, incluso habiendo estudiado cristología en el seminario, podíamos ahora descubrir tantas cosas

y actitudes desconocidas de Jesús. La cristología, la teología y la vivencia espiritual, cambiaron radi-

calmente. Poco a poco nos fuimos despojando de aquel «Jesús, divino prisionero del sagrario», del

«Cristo Rey» tallado a imagen y semejanza del Júpiter del Panteón de Roma, o del «Jesús huésped

del alma», centro de nuestra oración habitual. Estas «imágenes» eran vividas tradicionalmente co-

mo verdaderos dogmas, pero todas ellas fueron palideciendo en nuestra espiritualidad, cuando apa-

reció ante nosotros el Jesús anunciador de la Utopía del Reino, aquel que recorrió los caminos pol-

vorientos de Palestina obsesionado por entusiasmar seguidores entregados a la Revolución del

Reino, de su Utopía; un Jesús militante, profundamente humano -tanto, que tan humano, sólo Dios

podía serlo–, antiimperialista, utópico, mesiánico...

Fue un proceso difícil y entusiasmante a la vez, una trasformación profunda de conciencia, a medida

que iba cambiando la imagen de Jesús en la Iglesia de base latinoamericana, es decir, a medida que

íbamos descubriendo el Jesús histórico. Fueron años decisivos, y es justo recordar y reconocer que

la razón de la trasformación que nos enamoró de la OP y de la TL y EL no fue otra que el Jesús histó-

rico, su re-descubrimiento, su seguimiento. El crecimiento y la difusión de la TL y EL no fue un pro-

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ceso teórico o mediático, editorial, por libros –que también–, sino profundamente religioso, de

seguimiento de Jesús, de búsqueda del mensaje genuino evangélico, dejando a un lado la espiri-

tualidad tradicional de una relación con Jesús de carácter netamente interiorista (una especie de

«amigo invisible»), espiritualista (experiencia de Dios a través de Jesús), desencarnada, de espal-

das al mundo, apolítica...

El paradigma de la ecología profunda («integral»)

Nos será imposible referirnos a todos los cambios de paradigma que se han dado y que lógicamen-

te han afectado al espíritu de Medellín, pero no podemos dejar de dar cabida al ecológico. La TL y

EL de Medellín, como toda la teología anterior, como toda la tradición cristiana prácticamente,

estaban de espaldas a la naturaleza. Con Medellín, impulsadas por el Concilio Vaticano II, la teolo-

gía y la espiritualidad dieron el gran cambio: dejar de mirar sólo a lo sobrenatural, como hasta en-

tonces había sido la costumbre, y pasar a ver el Reino de Dios anunciado por Jesús, aquí en la tie-

rra, y en primer lugar en los pobres, afectados por el mal social emblemático de la pobreza, y de la

pobreza en primer lugar económica. Sería más tarde cuando caería en la cuenta de la necesidad de

abrirse a otras formas de pobreza y opresión: la raza despreciada, la cultura marginada, el género

oprimido... surgiendo así, como hemos dicho, los llamados nuevos sujetos emergentes autores de

nuevas (ramas de) teología de la liberación: feminista, indígena, negra... Y fue también en esa co-

yuntura cuando se dio la apertura a la Ecología. El libro emblemático fue Grito de la Tierra, grito de

los pobres, queriendo expresar una razón para la inclusión de la ecología en la TL: la Tierra es el

gran pobre por cuya sanación debemos también luchar. La TL no ha tenido dificultad mayor en

aceptar la Tierra como una gran causa por la que luchar; aquí no ha habido problema. La acepta-

ción generalizada de la encíclica Laudato Sí es la prueba.

El paradigma de base de esa TL, con frecuencia, por más renovada que parezca, sigue siendo viejo:

es una TL teocéntrica, cristocéntrica y antropocéntrica. En esa tesitura, lo ecológico no es más que

un campo de acción más, «un apéndice», o un barniz que no ha afectado para nada a las estructu-

ras paradigmáticas. Adoptar el paradigma ecológico profundo implica recuperar nuestra verdadera

«historia sagrada» (la historia cósmica de los 13.730 millones de años, no quedarnos reducidos a

los 3.500 de la historia bíblica) abandonar el antropocentrismo, el bibliocentrismo (volver a «el

primer libro que escribió Dios», salir de nuestro encerramiento en «el segundo»), el teocentrismo

(incluso el mismo teísmo), lo cual, puede parecer a muchos demasiado fuerte: cambiar los para-

digmas teocéntricos y antropocéntricos milenarios vigentes en la Iglesia.

El paso a un paradigma ecológico profundo está en marcha, en construcción, pero hay que recono-

cer que en grupos muy minoritarios que han captado estas hondas. Ni siquiera el campo eclesial

de la teología lo deja entrever en sus publicaciones actuales. Pero no nos cabe duda de que la TL y

EL de Medellín, para quienes quieran «llegar hasta el final», tienen ahí el desafío de que otra TL y

EL son posibles, y quizá son las únicas que permitirán sobrepasar la crisis que viene.

José María VIGIL

Panamá,

Aportado por Hna. Clara Lagos Comunidad de Medellín (tomado en parte del artículo de José María Vigil)

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del grupo que participó en la Primera Pascua Juvenil de Hoyo 1978 y que este

año ha celebrado EL CUARENTA encuentro-convivencia DE AGOSTO en Hoyo de

Manzanares:

“Alegría, oración, amistad, servicio, comunicación de vida… en un clima de sincero deseo de

renovar nuestro SEGUIMIENTO a Jesús de Nazaret que, nos llamó “ayer”, en nuestros años jó-

venes y “hoy”, en la plenitud de nuestras vidas, sigue “eligiéndonos para que demos fruto y un

fruto que permanezca” (Jn 15,16). La llamada a la fidelidad por encima de otras propuestas

seductoras…

¡GRACIAS, Señor, por la oportunidad de reunirnos, por volver a

Hoyo y sentirnos como en CASA, rodeados de gente que

nos quiere; por salir cada día a nuestro encuentro, por

hacernos sentir que aquello que comenzamos con tanta

ILUSIÓN sigue presente en la REALIDAD DE NUESTRA VIDA.

Gracias, por las hermanas Josefinas que nos han permitido volver

a los orígenes después de 40 años. Gracias, por los cantos, la disponibili-

dad y el trabajo de quienes han preparado el encuentro; las miradas y las

risas, los abrazos y el llanto, la amistad, el vermut, la paella, la sangría, la

conversación para el trabajo, el calor, la piscina, las fotos…”

El lema queda plasmado en el árbol cuya raíz lo simbolizan con

HOYO (experiencia fuerte con el Señor)… las ramas como en-

cuentros de cada año en muy diversos lugares de nuestra península, y la copa del árbol: vuelve

HOYO, 2018 …, experiencia fuerte, renovando el SEGUIMIENTO DEL Señor Jesús.

El grupo se mueve con libertad en la participación en este ENCUENTRO-CONVICENCIA los días

ECOSECOSECOS

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señalados desde hace CUARENTA AÑOS, del 1 al 10 agosto: unos, todos los días; otros se incorpo-

ran lo que les permitía su trabajo o realidad familiar. En esta ocasión, aprovecharon el viernes por

la noche, el sábado y el domingo hasta después de comer.

Algunos, de los que no pudieron participar, se hicieron presentes enviando su “sentir” para com-

partir algo de sus vidas en relación con la experiencia del Señor vivida en HOYO. Los presentamos

al Señor en el momento fuerte: la Eucaristía del sábado 4 de agosto, el día de mayor participación

con niños y jóvenes.

Escribía Pili Botaya. –Barcelona-

“Se hace difícil intentar rebobinar tantos años de Pascuas y encuen-

tros. Para qué nos vamos a engañar… hace mucho de aquello, algu-

nas estamos ya un poco mayores y, aunque hagamos un esfuerzo de

objetividad, acabaremos haciendo una lectura de todo aquello desde

el aquí y ahora.

Cierro los ojos, por tanto, y me dejo llevar en el silencio… Resuenan

en mí canciones y música… mucha música… “Quédate conmigo esta

noche”… “Manos vacías”… “Ubi caritas et amor”… “Que tu Espíritu

Señor, abrase todo mi ser”… “Os doy un mandato nuevo…” “Hazme

instrumento de tu paz”…, guitarra a cuestas siempre y dejándonos

empapar cuando cantábamos, dejando salir voces, duos…

¡Puñeteros! Qué bien lo hacíais y cuánto me habéis hecho sentir.

¡Cuánta amistad explotó en nuestros encuentros, cuánta vida com-

partida, cuánto camino! ¡Bendito sea Dios que os puso en mi ca-

mino! Bendito también por vuestra música sonando y resonando a cada paso. Sencillamente, sin vosotros no

sería yo, sería otra y no me gustaría tanto.

Son muchos años y hemos perdido personas muy queridas, amigas, compañeras, maestras… Allí siguen a

nuestro lado, a la derecha del Padre… ¡Es la comunión de las santas!

Doy gracias a Dios por tanta vida compartida, por tantos amigos incondicionales, por tanta comunidad vivida

en nuestros encuentros. Allí donde estéis, hermanos y hermanas, seguid construyendo el Reino. Dios está con

nosotros… Lo buscamos durante años y acabamos descubriendo que estaba allí, tan cerca como el aire que

respiramos, tan cerca como nuestros cantos, tan cerca como los amaneceres de nuestras celebraciones pas-

cuales… Lo bajamos de las nubes, lo quitamos del retablo y lo grabamos dentro de nuestro corazón… Allí si-

gue Él, empeñado en nosotros y regalándonos cada día su amor… ¡Amén, Aleluya!

Tomi Forcano, desde Gran Canaria donde vive…

“HOYO y sus Pascuas consolidaron mi encuentro con Cristo vivo, normal y cercano que luego se encarnó en el

día a día en la comunidad de Cursillos de Cristiandad de Barcelona y Las Palmas, siempre en familia y traba-

jando por los jóvenes con Eulalia, mi esposa. Siempre buscando y propiciando un encuentro personal con Je-

sús que siempre tiene la cara de HOYO y su música, la de Kairoi, Luis Alfredo y todos los compás de la Pas-

cua con el “maravilloso Jesús es para mí” en cuatro idiomas… HOYO y sus hermanos estáis siempre en mi

corazón y espíritu. Sois el Cristo del hermano, el del dame para dar. El de las Josefinas: Hna. Isabel de Canet,

Hna. Morales de Manresa, la sonrisa culpable de la seducción inicial… y luego la acogida de Hna. Engracia y

todas las demás, que no las nombro por no olvidarme de ninguna, ni de ningún Marista, ni Salesiano, ni otros

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que nos ofrecieron su testimonio…, como dijo Eduardo Bonnin, “el Cristo de cada PERSONA ES LA PERSONA

DE Cristo”, Dios nos ama a cada uno por nuestro nombre y esa es la mejor noticia que debe ser vivida y

compartida por el mejor método que es la amistad y dirigida hacia lo mejor de cada uno, que es la capaci-

dad de ser persona. Jesús es el modelo…Como decimos en Cursillos ¡De Colores, y un gran abrazo en Cristo

a todos!.

Pepi Becerra.- Sanlúcar de Barrameda-

“¡Hola! Chicos, chicas quiero desearos que disfrutéis mucho en estos días. HOYO, aparentemente ha cam-

biado un poquito –igual que todos nosotros- pero es nuestro HOYO, nuestro lugar de salida… Como dice

Yoli: recuerdo cada lugar, cada momento, cada anécdota como si estuviera allí…

Yo tengo la suerte de asistir al Encuentro de Talleres que se celebra cada año por la fiesta de La Inmacula-

da…, la capilla lugar elegido para dar gracias a Dios por el primer encuentro. Luego veo el “magnolio”,

testimonio de los 25 años de PASCUA, en él os veo a cada uno de vosotros, a todos los que comenzamos

esta andadura en el seguimiento de Jesús, el Señor; veo hojas que crecen, lo comparo con nuestras vidas

que han crecido en la fe.

HOYO sigue acogiendo en colonias de verano y en Pascua con la misma ilusión que cuando veníamos noso-

tros; la amistad que nace en ellos es verdadera como la que nació y creció entre todos nosotros. El carisma

Josefino sigue vivo en ellos.

¡Cómo no deciros que frecuento mi rincón favorito donde está nuestra cruz! Esa cruz en la que Jesús murió,

donde hemos llorado al llevarla, donde nace nuestra fuerza para seguirle, en los buenos momentos y no

tan buenos: ÉL es el que nunca nos falla. Fue el lema de uno de aquellos años ¡JESUS, SALVA DÉJATE SAL-

VAR!

Que disfrutéis mucho, que sintáis que os quiero a cada uno. Como se dijo alguna vez allí: ´cada vez que mi-

ro al cielo estrellado sé que estamos unidos todos a pesar de los años y kilómetros´. Catad a la Virgen la

canción que tanto me gustaba oír a Yoli: “ME QUEDÉ SIN VOZ”.

El sábado, Hna. Mª Pilar Marquínez nos presentó aspectos de la santidad de Francisco Butiña,

completando la reflexión que tuvimos sobre la Espiritualidad de la Congregación Josefina. Algu-

nos “ecos”:

Angel Alcázar. –Valdepeñas-

“Este gran hombre, el P. Butiñá, vuestro Fundador, es ese tipo de personas que Dios pone en el mundo pa-

ra que otros podamos seguir caminando…, se puede asemejar perfectamente a Leonardo Da Vinci, Albert

Einstein, Copérnico...Dios los pone a nuestra disposición cuando estamos perdidos o yendo para otro lado.

Jesús de Nazaret es el que marcó el camino para encauzar nuestras vidas y mostrarnos el rostro compasivo

del Padre.

Ahora, en pleno siglo XXI, se está haciendo mucho hincapié en el tema de las mujeres y los jóvenes, y resul-

ta que esta lucha ya la empezó Francisco Butiñá hace 150 años, ¿era un adelantado a su tiempo, o no?

¿era un enviado de Dios, o no? ¿Cómo podría ver algo así? Ahora, parece que nos hemos dado cuenta de lo

que había que hacer. Eso solamente lo puede ver alguien especial como él. Está claro que es uno de los ele-

gidos de Dios para ayudarnos en nuestro camino hoy.

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Carmen García. –Yunquera de Henares, Guadalajara-

“Destacaría de Francisco Butiñá, entre otras facetas, su decisión y reflexionada de comprometerse con el

mundo obrero de su época y, más en concreto, con la clase trabajadora más desfavorecida: LAS MUJERES.

Dedicar su vida a dar esperanza, a manifestar que se puede ser cristiano y seguir a Jesús en el trabajo de ca-

da día.

Su mensaje sigue siendo muy actual. El mundo laboral es una parte importante de las personas y de los cris-

tianos. Pasamos muchas horas de nuestras vidas trabajando… Vivir cristianamente es llevar el mensaje de

Jesús a todos los lugares y aspectos de nuestras vidas”.

La oración del viernes por la noche la centramos en Juan 15, 12-17. Partiendo del canto “CRISTO

VIVE” DE 1978: Bienvenido, tú que llegas con ansia de vivir. Cristo joven nos reúne hoy, en su amor,

su palabra y su verdad. Iremos siempre con nuestra canción diciendo ¡Cristo Vive!, camina dentro

de quien tiene amor y llena de gozo y paz, etc…

Fue un gran rato, profundo, haciendo “eco” de todo el canto; un compartir con el Señor y los her-

manos la trayectoria de fe y vida en el seguimiento de Jesús –el Amigo- con sus luces y sombras…

“Él me eligió, no fui yo…, para que diera fruto y un fruto que dure”…ya no os llamo siervos, sino

amigos…” Tomando la vida en las manos, surgió, con María, la Madre Buena, el Magníficat perso-

nal: ACCIÓN DE GRACIAS AL SEÑOR por tanto como hemos recibido a lo largo de estos años, las

maravillas que Él hace en cada uno.

Para mí ha sido un REGALAZO del Señor el reencuentro con estos hermanos en estos dos

días que pude acompañarles. Y mi ORACIÓN sigue siendo ¡GRACIAS, SEÑOR, por estos grupos; por

el “ayer” y el “hoy” de cada uno, por sus familias, por sus ambientes, por su trabajo. Gracias, tam-

bién, por tantas Hermanas que plantaron en sus corazones semillas de fe y que Tú sigues regando.

Gracias por estos laicos comprometidos en lugares donde ya no estamos, como Valdepeñas, Ber-

meo, Porriño, Sanlúcar de Barrameda, Canet de Mar…

En aquellos años, como hoy, el Espíritu actúa y nos impulsa a seguir sembrando semillas del Caris-

ma en MISIÓN COMPARTIDA.

Engracia Sainz, fsj

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Actividades de Pastoral

Hola Familia Josefina, tenemos el gusto de escribir por pri-

mera vez, como grupo Taller de Nazaret. Somos de Que-

vedo, Ecuador. Tenemos un año de habernos conformado

como grupo Taller, así que estamos dando los primeros

pasos y sintiéndonos cada vez más parte de la Familia Jo-

sefina. Nos reunimos cada 15 días, los días miércoles por

la noche después de salir de nuestro trabajo. En nuestros

encuentros abrimos espacios para nuestra forma-

ción cristiana, reflexión de la Palabra, celebración

y revisión de vida. También vamos aprendiendo

cantos propios de la espiritualidad josefina como

es “Que Bien se es-

tá en Nazaret”,

“Déjanos entrar en

tu taller,” “En el Taller de Nazaret”, “José ferviente

esposo”. Con el apoyo de las Hermanas preparamos

los temas y nos vamos turnando en exponerlos. Al-

gunos temas que hemos reflexionado a lo largo de

este tiempo son: Vocaciones en la Iglesia-pueblo de

Dios, Identidad del Laico y del religioso al Servicio de la Iglesia, El servicio en los Ta-

lleres de Nazaret, Carismas y familias carismáticas, Carisma y Misión de la Congre-

gación, Seguir a Jesús en la vida cotidiana, Discernimiento, Revisión de vida, Jesús y

el dinero…

Poco a poco vamos conociendo la vida del P. Butiña y el por qué y para qué nació la

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Congregación de las Hijas de San José en la iglesia. Se nos ha he-

cho novedoso que el P. Butiña orientara la Congregación hacia el

mundo del trabajo, mundo del cual nosotros somos parte.

Hace un par de semanas tuvimos una grata visita, la de la M. Ge-

neral, Mª Mendía Ajona y Hna. Mª Remedios Jiménez. M. General

nos invitó a beber de la fuente de Nazaret, a

vivir los valores con los que creció Jesús junto

a María y José. Nos motivó a vivir la espiritualidad de Nazaret en

el grupo, en la familia, en el trabajo, y a compartirla con los

otros.

Después de escuchar un canto, vimos un video sobre la Misión

Compartida, a continuación, comparti-

mos lo que nos había llamado la aten-

ción y a qué nos está ayudando la experiencia de ser

miembro del Taller de Nazaret. Todos coincidimos que nos

está ayudando a ser mejores cristianos, a vivir la vida coti-

diana, familiar, con más sentido. Entre nosotros va cre-

ciendo el espíritu de familia, de solidaridad y amistad. Sa-

bemos que todavía nos queda un largo camino que andar

para llegar a ser reflejo de la Familia de Nazaret. Sin em-

bargo, caminamos con la esperanza de que Dios hará su obra en nosotros.

Laicos de Quevedo

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En el boletín anterior, explicábamos el tema y el hilo conductor que seguimos en la colonia y el campo

de trabajo de Hoyo de Manzanares. ¿Recordáis? “Gen Nazaret, descubre tus poderes y salva al mun-

do”. En estas páginas, transcribimos la experiencia de algunos de los participantes en la colonia, en el

Campo de trabajo y de algunos monitores. Os dejamos con sus palabras, con su manera de expresar-

se, agradeciendo lo vivido y, algunos, proyectándose hacia el futuro.

Otra colonia más. Hace tres años empecé en esta pequeña aventura, conocí a mis primeros amigos,

monitores... Pero, sobre todo, me conocí a mí misma. Antes de llegar, nadie, ni yo misma, apostaba

que volvería a ir... La primera vez que llegué a Hoyo noté un ambiente especial y no eran nervios. Es

algo distinto que no se puede explicar. En Hoyo siempre estás cantando, bailando, jugando y riéndote,

pero también hay tiempo para otras cosas. Era la hora del “desierto”, los monitores nos retaron a estar

varias horas reflexionando, pensando cómo te va la vida y cómo la estás aprovechando. Aquí fue cuan-

do me di cuenta de que necesitaba cambiar. Mis amigos de Hoyo me han ayudado, me han apoyado y

también han sabido llevarme por el buen camino, el camino de Dios. Cómo voy a echar de menos las

canciones, los juegos, esos reencuentros y esas despedidas. Pero la colonia no termina aquí. La colonia

ahora forma parte de mí y de mi día a día, sigo relacionándome con gente de otros lugares, me reúno

con mi familia de Nazaret, que ha hecho que yo sea así. Gracias a estos diez días he conocido a un mon-

tón de personas en las que puedo confiar.

Lucía Camarero, Zaragoza

Para mí esta colonia ha sido, sin duda, la mejor. He conocido y descubierto a un montón de personas

maravillosas. A algunas ya las conocía, pero no habíamos hablado demasiado, y esto es lo mágico que

tiene este campamento: la gente que participa, el modo en que te acogen, te escuchan y te apoyan. Los

vínculos que se crean son especiales porque las personas también son especiales. Ha sido mi última

colonia y la verdad que he intentado aprovecharla al máximo. Pero, sin duda, si se me presenta la opor-

tunidad de volver a Hoyo de Manzanares, aceptaré sin pensarlo. No se pueden dejar pasar oportunida-

des así, porque lo que allí se vive es único e irrepetible.

Ángel Ramírez, Villanueva de la Serena

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Este ha sido mi primer año y, a pesar de ello, la gente me acogió de maravilla. En Pascua fueron pocos

días, pero me llevé un recuerdo muy bueno de Hoyo y de toda su gente. Cuando nos volvimos a juntar en

colonias, la felicidad me invadía, las personas siempre están ahí para abrazarte cuando sea necesario,

para hacerte reír y llorar, para compartir cosas juntos. Son personas imprescindibles para mí, son fantás-

ticos y esto es lo mejor que me ha pasado en la vida. Allí siempre estamos bailando, saltando, cantando,

haciendo actividades y pasándolo bien; tan bien, que ni te das cuenta cuando llega la hora de irse. Hoyo

definitivamente es mágico. Quiero ir por muchos años más.

Paula Sansans, Zaragoza

Otro año más en Hoyo… Después de tres colonias y dos pascuas, puedo decir que no me canso de partici-

par. Al principio, me preguntaba si podría encajar bien con el grupo, si iba a hacer amigos y eso me hacía

estar un poco inseguro. Una vez que llegué, todas esas inquietudes se fueron y en el transcurso de la co-

lonia o de la Pascua, ya supe que volvería a la siguiente, ya no sólo por volver a ver a toda esa gente que

se convertirá en amigos para toda la vida, sino también por volver a sentir la magia de Hoyo. Cada año es

diferente y se vive todo de diferente manera. ¡Ojalá fuera eterno!

Una vez que empiezas los días de Colonia o Pascua, estás tan a gusto y te lo pasas de tal increíble forma,

que se te pasan volando y solo te queda aprovechar al máximo. Los monitores siempre están ahí para

cualquier cosa que necesites hablar, algún problema que tengas, para apoyarte etc... Las hermanas están

siempre para lo que necesites, son súper majas y siempre van a cuidarte y darte la bienvenida con una

sonrisa y, por último, con la gente, con los compañeros, te une un lazo tan fuerte que ojalá dure para

siempre.

Como conclusión, digo que quiero seguir yendo a Hoyo muchos años más, contando mi experiencia a

más personas, ya que cada vez somos más y es algo increíble cómo con personas de distintos lugares po-

demos encontrarnos de esta forma y estar un poquito más unidos pese a la distancia. Volver a Hoyo, pa-

ra mí, es como volver a mi segunda casa.

Lucía Navarro, Zaragoza

Siento que sin esto no hubiera podido llegar a descubrir lo importante que es la vida de esas personas

para mi vida. Siento que siendo tan pequeños descubrimos una cosa tan grande como el mismo univer-

so. La verdad es que esta es una experiencia de la cual no os vais a arrepentir jamás, de la cual vais a

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aprender muchísimas cosas y, sobre todo, vais a descubrir a personas que os van a cambiar la vida, que

os van a hacer ver lo que es una familia de verdad, que os van a enseñar la verdadera amistad, que os

van a guiar por el camino que tienes que coger para llegar a la felicidad. Este año yo era nueva, pero me

he dado cuenta de que conocer a las personas es mucho más valioso que nada. Puede que haya pasado

mucha vergüenza al principio, puede que no me haya hablado con todo el mundo, pero... ¿sabéis una

cosa? Por lo menos me he llevado un recuerdo genial, unas amistades que espero que duren por mu-

chos años más y, sobre todo, una nueva familia, porque eso es lo que es Hoyo, una FAMILIA, en la cual

puedes confiar sin ningún problema, ya que te van a tratar como si llevaras con ellos toda la vida, como

si de viejos amigos se tratara. Hoyo me ha enseñado muchos valores de todos los cuales se puede sacar

algo bueno; también me he podido conocer a mí misma y me ha ayudado a ser mejor y a valorar más

todo lo que tengo.

Si de verdad quieres tener una familia, no lo olvides, Hoyo te espera. Siento que todo esto ha sido posi-

ble gracias a la gente tan estupenda, amable, cariñosa y carismática.

Yasmín, Zaragoza

Mi experiencia se define con una sola palabra: INCREÍBLE. La verdad es que yo al principio tenía miedo

de ir ya que era nueva, solo conocía a los de mi colegio y soy muy tímida, pero desde el primer momen-

to en que pisé esa finca, ya venía todo el mundo a saludarme y me sentí muy acogida. También pensa-

ba: “Vaya… ahora todos los días reflexiones, me voy a aburrir un montón”. Pues todo lo contrario, me

encantaban. Ni te da tiempo a aburrirte, ni piensas en ningún momento en el móvil. Lo más bonito es

que conoces a gente de otras ciudades y pueblos, gente maravillosa que no se olvida nunca.

Ana Garzón, Jerez

El año pasado llegué a Hoyo con miedo de no hacer amigos, de no integrarme y de muchas cosas más,

pero desde el minuto “0” me sentí muy bien acogida por la gente, muy cómoda y me lo pasé genial. Re-

petí en Pascua y fue una experiencia fenomenal porque reflexioné y me di cuenta de muchas cosas. Oja-

lá que dure muchos años más, porque es una experiencia increíble que nunca olvidaré y, sobre todo, lo

mejor que me llevo de allí es la cantidad de personas geniales que he conocido.

Vicky, Jerez

Para empezar, Hoyo ha sido lo mejor que me ha ocurrido en la vida. Es como encontrar tu lugar en el

mundo, donde todos te reciben con los brazos abiertos. Da igual lo lejos que estemos, siempre estare-

mos unidos por este lugar, esta maravillosa finca que llamamos hogar. Muchas de las personas impor-

tantes en mi vida las he conocido allí. No se puede describir la experiencia que se vive en Hoyo. Hay que

vivirla, es algo increíble, que te llevarás para toda la vida y aunque la colonia se acabe siempre quedarán

esos momentos, esas risas, esos llantos en la memoria de cada uno de nosotros. En Hoyo maduras mu-

chísimo y te liberas de todo lo que hay fuera.

María, Jerez

¡Qué decir de Hoyo sino que es una de las mejores experiencias que existen! Nunca me arrepentiré de

haber dicho que sí cuando me propusieron ir por primera vez. Imaginaos lo bien que me lo pasé que

esta ha sido mi tercera. He conocido a personas increíbles, he reído, he llorado, he convivido con muchí-

simas personas y la verdad no cambiaría ninguno de estos días. Hoyo me ha enseñado a conocerme más

a mí misma, a Dios y a las personas. Así que animo a todos los jóvenes que puedan venir a Hoyo, que lo

hagan, que nunca se arrepentirán de esta aventura.

Jara, Zaragoza

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A mis amigos les diría que Hoyo es una experiencia inolvidable, en la que se hacen muchos amigos, se

conoce más a Jesús y se conoce más uno mismo. Hoyo ha cambiado mi forma de decir las cosas y de

relacionarme, me ha ayudado a tomar las decisiones, a tener una opinión objetiva y a descubrir más

a Jesús.

Eu- Zagra

Tres veces he ido ya a Hoyo, a dos Colonias y a una Pascua, y he de decir que ha sido mágico. Conoces

a gente de otros lugares de España, te haces amigos y compartes tus cosas con ellos. Pero

Hoyo no solo sirve para conocer a los demás, sino para conocerte a ti mismo también. Esas reflexio-

nes en los grupos por la mañana, para compartir nuestras cosas, sentimientos, opiniones… y ayudar-

nos entre nosotros. Los desiertos es lo mejor que hay en la finca para conocerte a uno mismo, cómo

eres en realidad, las obras que haces, recapacitar sobre tus actos. A mí, personalmente, me han ayu-

dado mucho los desiertos que he hecho y me han hecho crecer como persona.

¡Quién me iba a decir a mí que apuntándome a Nazaret en quinto de Primaria, acabaría así, viviendo

una de las mejores experiencias de mi vida y fortaleciendo mi fe en Dios! Gracias a todos por formar

parte de mí.

Arturo, Jerez

Después de muchos años disfrutando de las colonias en Hoyo, este ha sido mi primer año como mo-

nitora. Al principio, sentí mucho miedo. Quería hacerlo bien, pero no sabía cómo me iba a salir. Ese

miedo no perduró mucho tiempo ya que rápidamente me incorporé al equipo de monitores que me

acogieron con mucho cariño y, sobre todo, con mucha paciencia. Han sido días llenos de muchísimos

sentimientos, me he sentido acogida por los monitores y también por los chavales. Todo el cansancio

ha valido la pena, por ver las sonrisas de los niños después de cada actividad, de cada reflexión. Co-

mo monitora he aprendido muchísimo y me he llevado algo de cada uno. Todos me han enseñado

mucho, como que todo esfuerzo tiene su recompensa, que cada sonrisa significa una cosa… He reco-

nocido cuando una persona necesitaba un abrazo, me he superado… Espero haber conseguido ser

una buena monitora y tener un pedacito de mí en cada uno de vosotros.

No voy a olvidar esta experiencia como tampoco voy a olvidar mi primera Colonia, ni mi campo de

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trabajo… Son diferentes experiencias que me van formando como monitora Nazaret y también como

persona. Son experiencias que vale la pena vivir más de una vez porque el resultado compensa todas las

horas perdidas de sueño en esos nueve días; una experiencia que siempre he compartido con personas

maravillosas como las hermanas y los monitores que me han ayudado en todo lo que he necesitado y me

han apoyado en todas las dudas que tenía.

Espero ser capaz de volver a cumplir esta labor y cada año conseguir superarme un poco más, para ha-

cerlo un poquito mejor, hacerme más fuerte, más responsable, más generosa y, sobre todo, espero ser

capaz de ayudar a todos aquellos que tengan dudas, porque como monitora voy a estar para todos en

cualquier momento que lo necesitéis, porque esa es una de mis labores: ayudar en todo aquello que

pueda.

Durante todos estos años hay una persona que me ha ayudado a seguir siempre con una sonrisa y a le-

vantarme cuando me caigo. Ahora, tengo que darle las gracias a Jesús por todo lo que me ha ayudado

durante todos estos años, porque me ha llevado a estar donde estoy y porque me ha hecho ser una per-

sona mucho más madura.

Andrea, monitora de Zaragoza

Esta es ya mi cuarta experiencia como monitora en la colonia y como siempre, especial y única. Este año

estaba convencida de que sería así, no solo por la experiencia de otros años, sino porque lo necesitaba,

necesitaba vivir este encuentro. Encuentro con gente que hace que tu vida se llene de vida, encuentro

que te hace darte cuenta que no nadas sola a contra corriente, encuentro que se convierte en el impulso

que necesitas. Por eso, si tuviera que resumir esta experiencia con una palabra sería “gracias”. Gracias

por hacerme ver que estoy en el camino correcto, gracias por lo compartido, por haber tenido momento

de encuentro conmigo misma, con los demás y con Dios, gracias por haber disfrutado de gente maravi-

llosa llena de energía positiva que hacen que aprecies los pequeños detalles que tiene la vida; un abrazo,

una sonrisa, un beso o, incluso, una simple mirada.

Es increíble cómo año tras años te das cuenta de que cada generación de jóvenes viene pisando fuerte,

que son el futuro de algo muy grande y te das cuenta como ellos te dan muchas más lecciones y testimo-

nios que el que puedas aportar tú. Cómo un chico/a de 14-16 años puede llenarte tanto, cómo te puedes

sentir tan reflejada, cómo te puedes emocionar con sus reflexiones...

Hasta el punto de convertirnos en una gran familia, una familia especial que, a pesar de la distancia, nos

une un lazo mucho más fuerte: la fe, las ganas de compartir, ganas de vivir, ganas de luchar por cambiar

el mundo desde lo pequeño y desde la sencillez, es decir, que nos une eso que llamamos el espíritu de

Hoyo. Ese espíritu que no se apaga nunca, que puede tener una llama más viva o no, pero que nunca se

deja que se convierta en ceniza.

Por eso, y para terminar, doy gracias a todos aquellos que, con su constancia, esfuerzo y dedicación ha-

cen que sigamos sembrando este espíritu en los corazones de los demás.

Sara, monitora de Jerez

¡Qué difícil es resumir tanto vivido en tan pocas palabras! Es siempre un placer volver a casa, ha sido co-

mo revivir sentimientos de antaño. No tendría una palabra clara con la que expresar estos días que me

han llenado como persona. Vuelvo a casa lleno de vida y con ganas de seguir adelante en mi día a día. Es

un auténtico placer haber podido rodearme de un grandioso y auténtico grupo de chavales que me han

demostrado que la fe existe y que es importante luchar por ella, un grupo de monitores que me han

mostrado qué es la entrega y el compromiso y unas hermanas que se han dejado la piel en cada segundo

para que esto saliera adelante. Solo decir que mil GRACIAS por todos los que habéis hecho que esto haya

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sido posible. LO SIENTO por si, en algún momento, no he llegado a estar a la altura; os pido , POR FA-

VOR, que luchéis por esto y que difundáis todo lo vivido, ya que ahora es cuando empieza el verdadero

Hoyo...Y como ya dijeron, no hay que querer volver a Hoyo, ¡hay que sentir la necesidad de volver!

Jose Mari, monitor de Jerez

Estos días en el campo de trabajo han sido muy especiales. Vine sin expectativas, ya que no me apetecía

mucho y prefería ir a la Colonia antes que al Campo de trabajo. Realmente, el motivo para venir era vol-

ver a ver a mis amigos que participaban en la Colonia.

Cuando entré en la residencia de personas con discapacidades, tenía muchísimo miedo. No paraba de

mirar a todos los lados. Un señor me tomó de la mano para mostrarme cómo tocaba el piano. Fue mara-

villoso. Allí cantamos, bailamos, cocinamos, hicimos manualidades y escuchamos todo lo que nos conta-

ban los “chicos”, como así llaman a los residentes. Ha sido una experiencia muy gratificante, poder com-

partir mi tiempo, mi fe y mi alegría con ellos. Si tengo que elegir un momento en la residencia, me que-

do sin duda con el momento en que Zacarías, un hombre que va en silla de ruedas, me llevó de la mano

hacia el gimnasio y agarrándose a unas barras me mostró cómo caminaba. En la finca, también lo he pa-

sado muy bien con mis amigos. Hemos reído y compartido mucho. Estoy muy agradecida a mi grupo de

campo de trabajo porque, aunque hayamos sido muy pocos, me han aportado mucho.

Alicia Parodi, Jerez de la Frontera.

La verdad es que la idea de campo de trabajo, al principio, me asustaba, ya que no sabía lo que me iba a

encontrar. Era todo un reto, ya que todo era nuevo, nuevas didácticas, nuevas rutinas, nuevas experien-

cias… Sin embargo, me ha sorprendido. Ha sido una experiencia muy enriquecedora, sobre todo el po-

der sacar una sonrisa a los chicos/as de la residencia. Me ha encantado estar allí y me llevo a muchas

personas en el corazón. La gente ha sido muy simpática con nosotros. Tanto cuidadores como internos

me han enseñado muchísimas cosas, sobre todo, esas ganas de vivir que tienen. Es algo que me transmi-

te muchísima fe y esperanza por parte de ellos.

Aunque venía con pocas expectativas, ha sido una de las mejores experiencias de mi vida y espero vol-

ver allí.

Lucía Cirera, Jerez de la Frontera

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A pesar de ser completamente diferente a la Colonia, este Campo de trabajo me ha aportado una

gran experiencia. Ha sido increíble compartir con quien lo he compartido y estoy muy agradecido por

todo. Tras el cansancio y esfuerzo, debo decir que repetiría la experiencia. El hecho de colaborar co-

mo “premonitor” en colonia, ha sido también parte esencial. Solo me queda decir gracias a todas las

hermanas y monitores que lo han hecho posible.

Antonio Bernabé, Villanueva de la Serena

Sorpresa. Esta palabra lo resume todo. Compañeros, dinámicas, participantes de colonia. Actuar co-

mo premonitora… Nada pasó como yo me había imaginado en un primer momento. Desde el primer

día, cambiaron mis expectativas, primeramente bajas, al enterarme de que el resto de mi grupo tam-

poco tenía muy claro qué esperaba de esta nueva experiencia. Fue como poder compartir esa sensa-

ción de inseguridad y de incertidumbre.

Conforme fue pasando el tiempo, todo comenzó a mejorar. La unión como grupo fue casi instantá-

nea. Gracias por dejarme conoceros y por abriros a compartir de una forma tan real. Os habéis que-

dado con un pedacito de mi corazón.

Por otra parte, el haber actuado como “premonitores” me ha ayudado a entender mucho más a los

monitores, compartiendo sus agobios, y permaneciendo siempre, a pesar de todo, con una sonrisa.

Ellos nos aceptaron muy bien y muy abiertamente desde el principio.

Ahora, con respecto a la residencia, para mí ha significado muchísimo el volver y que algunos de los

residentes se acordaran de mí. También ha sido sensacional volver a encontrar la ilusión en sus caras

y sus infinitas ganas de participar. Siempre se aprende tanto de personas con discapacidad…

Solo me queda agradecer todo lo que he crecido y vivido estos días. No lo cambiaría por nada. Sin

vosotros, mis “rueditas” favoritas, nada hubiera sido tan inmejorable. Os quiero mucho, chicos. Gra-

cias por todo.

Patricia, Zaragoza

Un año más, una experiencia inolvidable. Ha sido mi segundo Campo de trabajo y no lo cambio por

nada. Ha sido muy distinto del anterior. Tenía muchas ganas de volver a la residencia y ver cómo es-

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taba la gente, volver a intentar alegrarles la mañana… Pero además, este año era especial, porque, por

las tardes, se nos pedía participar como premonitores en la colonia. Esto me hacía mucha ilusión, so-

bre todo porque llevo un año preparándome para ser monitora en Zaragoza. A pesar de venir desilu-

sionada por el hecho de que íbamos a ser pocos, me siento súper afortunada por haber vivido esta ex-

periencia. He podido conocer más a fondo a personas con las que apenas habíamos hablado y me llevo

gente increíble en mi corazón. Respecto a las reflexiones, como siempre en Hoyo, pasan cosas increí-

bles. Es un sitio mágico. He conseguido sacar todo lo que necesitaba. He conseguido aclarar algunas

dudas que tenía. Me he encontrado conmigo misma, algo que tanto necesitaba… Hacia los monitores,

no hay palabras suficientes para expresar toda mi gratitud por haberme hecho sentir como en casa,

por haberme hecho llorar de risa, por cada muestra de afecto.

Gracias a todos, una vez más, por seguir alimentando mi fe, por hacerme feliz y por hacer que la huella

que dejasteis la primera vez en mí, sea algo cada vez más grande.

Silvia, Zaragoza

ESTOS SON SOLO ALGUNOS DE LOS TESTIMONIOS QUE DEJA HOYO EN NUESTROS CORAZONES. NUN-

CA DEJÉIS DE BRILLAR, PORQUE SOIS LAS ESTRELLAS QUE EL SEÑOR PUSO PARA GUIARNOS HACIA SU

REINO. Damos las GRACIAS a Paqui, Ana, Laura, Demetrio, José Mari, Andrea, Sara, Bea, Alvaro, José...y

a todos los que nos habéis acompañado en estos maravillosos días y que habéis contribuido a que la

magia de Hoyo renazca.

Ismael, Pamplona

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ATREVETE A DAR EL SALTO. ATREVETE A DAR EL SALTO. ATREVETE A DAR EL SALTO.

DAR CON EL SENTID O DE TU VIDA DAR CON EL SENTID O DE TU VIDA DAR CON EL SENTID O DE TU VIDA

Con expresiones como estas, pasamos invitaciones a los diferentes grupos de las

parroquias donde llevamos a cabo la actividad de pastoral catequética. Como a la

Institución CEFA (Centro femenino de Antioquia), donde por 3 años consecutivos

hemos realizado jornadas vocacionales. De las más de 90 invitaciones entregadas en

esa institución solo asistieron dos señoritas, el resto fue de parroquias.

Esta actividad fue realizada el 5 de agosto 2018, en la Institución Técnica San José

Obrero de las Siervas de San José, en el barrio el Playón.

Con la participación de Siervas, e Hijas de San José y laicos josefinos de las dos

comunidades, vivimos La Jornada Vocacional, desde la Misión Compartida

JESÚS de Nazaret, San José y el Padre Butiña nos

guiaron en esta jornada. Tanto nosotras, como

cada joven, vivimos cada momento desde el inicio

con la dinámica ¿Qué cosas me impiden o me

distraen para encontrar sentido a mi vida’? Había

papeles en el piso con cosas materiales, y hasta

cuadros religiosos, pues había que comenzar a

desprenderse de lo material y hasta de las

creencias. Una imagen bella de una jovencita dice:

“pero mi fe en María no la dejo”. Claro, la fe no se

descarta, esa es la que nos sostiene y conduce

hacia Dios .

41

Los jóvenes se apropiaron de la

dinámica del tema y al final

expresaban su alegría en frases como:

“El sentido de la vida comienza por

potenciar la persona”. “Soy imagen y

semejanza de Dios”. “No renunciar a

mis metas, a mis sueños”. “No

permitas que nadie te diga no puedes”.

¡Si tienes un sueño realízalo!

Al final vino la lectura del Evangelio de

Mc 5,21-43, la “hemorroisa”. La reflexión se centró en que Jesús actúa sanando cuando es

tocado con fe. Muchos lo empujaban pero, solo una mujer se atrevió a tocarle, creyendo

que sólo con tocar, aunque fuera el borde del manto, sería curada”. También hubo un

momento de interiorización muy bello: entender que para Jesús no hay barreras, ni

discriminación, su sueño es instaurar el Reino donde el ser humano está por encima de

todo.

Concluimos recogiendo el deseo de volver a tener una

experiencia como esa. A los participantes les ayudó, caer en

la cuenta de que hay que seguir trabajando para ser mejor

persona, a trabajar por alcanzar metas y sueños, a romper

barreras, a no dejarse atrapar por las redes sociales .

Finalizamos dando gracias a Dios, porque es Él quien toma

la iniciativa.

Que esta semilla fructifique en vocaciones para el Carisma

Josefino. Amén.

Fabiola Ortiz laica e Hijas de San José

Niquía –Medellín- (Colombia)

13 /08 2018

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Q. E. P. D

Juana Cruz, hermana de Hna. Filomena de la co-

munidad de Villanueva de la Serena.

Mª Teresa Íñiguez, hermana de Hna. Casilda de la

comunidad de Tres Rios (Brasil).

Bernardo del Río e Hilario de la Hoya, cuñados de

Hna. Inés de la comunidad de San Sebastián.

Mª José Mendes, madre de Hna. Mª José de Sou-

za de la comunidad Tres Rios (Brasil).

Natividad Barrachina, madre de Hna. Luisa Mª

Lázaro de la comunidad de Zaragoza.

Ary Storino Anselmo, cuñado de Hna. Edivalda

Oliveira da Silva de la comunidad de Lubango

(Angola).

Mª Luisa Gutiérrez, cuñada de Hna. Carmen

Aguado de la comunidad de Logroño.

José de Cos hermano, de Hna. Josefa de la comu-

nidad de Torrelavega.