01 clase, unidad UNO

Unidad 01: la filosofía y el arte musical Objetivos:

Verificar en la relación arte- discurso del arte sus mutuas influencias. Comprender en la relación música- filosofía en el mundo antiguo.

Contenidos:

Tipologías de teorías del arte. “Narrativas maestras” y sus efectos en la práctica artística. Mito y filosofía de lo bello en el mundo heleno. La música en los poemas homéricos. El concepto de armonía. Diferencias en la concepción mimética platónica y aristotélica. Nietzsche o la voluntad de poder.

BIBLIOGRAFIA OBLIGATORIA

CAUQUELIN LAS TEORÍAS DEL ARTE. 

I ¿QUE SE ENTIENDE POR "TEORÍAS DEL ARTE"? , II TIPOLOGÍA DE LAS ACCIONES POSIBLES (PÁGINAS 5 A 13). 

PRIMERA PARTE. LAS TEORÍAS DE FUNDACIÓN I :LAS TEORÍAS AMBIENTALES: PUNTO 1.(PLATON)  (PAGINAS 13 A 25)

Y PUNTO 4. (NIETZCHE Y SCHOPENHAUER)(PÁGINAS 34 A 39) LAS II.TEORÍAS CONMINATIVAS. 1. ARISTÓTELES (PÁGINAS 43 A 55).

 

FUBINI ENRICO LA ESTÉTICA MUSICAL DESDE LA ANTIGUEDAD HASTA EL SIGLO XX

1. DESDE HOMERO HASTA LOS PITAGÓRICOS  (PÁGINAS 41 A 54).

2. PLATON, ARISTÓTELES Y LA CRISIS DEL PITAGORISMO (PÁGINAS 65 A 82).

OLIVERAS ELENA ESTÉTICA. LA CUESTIÓN DEL ARTE. Buenos Aires, Ariel, 2005.CAPÍTULO VI. Nietzsche y la vitalidad del arte. (PÁGINAS 239 a 256).

¿Historia o Estética del arte?Entre la Historia del arte musical y la Filosofía y Estética de la Música, se tiende una línea divisoria que siempre se tiene que estar redefiniendo, aun cuando sabemos que entre ellas hay un lugar común, esto es, el arte.

El arte, lo vamos a entender en toda su historicidad como un concepto, como una categoría, por lo cual preferimos decir que el territorio común de ambas disciplinas humanísticas son los objetos, obras, acciones, no- acciones, en fin, lo que se considere “artístico” o lo que los hombres “han llamado, llaman o llamarán arte”.

El pensamiento o acción reflexiva de ambas disciplinas parten, entonces, de aquel territorio compartido, y para comenzar, trato de delimitar el ámbito disciplinar, considerando ciertos aspectos desde la perspectiva del objeto y campo de estudio que a cada una de estas disciplinas les compete.

El objeto de estudio de la Historia del arte del arte en general, es el arte como obra (producto acabado o en proceso, acorde a ciertas reglas o en contra de ciertas reglas).

Por su parte, la Estética se define en sentido extenso como una rama de la filosofía que estudia conceptos relativos a la “belleza” y al “arte”. Baumgarten en sus obras Meditaciones y Aesthetica, hacia 1750 y 1758, respectivamente, da origen al término y funda esta tarea reflexiva como una disciplina filosófica y científica de lo bello y del arte. El nombre Estética significa, precisamente, doctrina del conocimiento sensitivo, es decir de las cosas percibidas (aistheta), en oposición a los hechos del entendimiento (noeta).

Entonces, para la Historia-del-arte, el arte en sí mismo es una práctica a veces sujeta a reglas, mientras que la Estética es reflexión sobre esa práctica y sus obras.

La Estética ¿tiene pretensiones de objetividad, es una ciencia normativa? (ver tipologías de las teorías sobre el arte de Cauquelin).

¿O la Estética es sólo opinión de los involucrados en la obra, los espectadores, los afectados en su sensibilidad por las obras de arte? (ver tipologías de las teorías sobre el arte de Cauquelin).

En definitiva, cuando la Estética aspira a producir un conocimiento objetivo, a construir un objeto teórico correspondiente (a la belleza o al arte) y hace que sus conceptos y proposiciones al respecto (sobre la belleza o el arte), se articulen lógicamente configuraría un sistema, entonces la Estética sería una ciencia no apriorística. Explica esos valores, no lo instituye o prescribe; no los propone ni dicta normas para su realización (ver tipologías de las teorías sobre el arte de Cauquelin).

Los términos “belleza” y “arte” que son tan afines a la Estética no se inauguran con Baumgarten, pues no es difícil comprobar que la reflexión sobre éstos estaba ya encarnada en el pensamiento occidental desde la antigüedad y su significado se fue manteniendo o modificando en el transcurso de los siglos. El término Estética refiere a dos concepciones básicas, producto de la reflexión (filosófica). Estética como Filosofía de la belleza y Estética como Filosofía del arte, distinciones que luego retomaremos en la Unidad 02.

Resumiendo, entre la Historia del arte y la Estética hay una especie de unión SILENTE, lo que les separa es que a la estética le atañe el carácter conceptual y general, mas no la temporalidad en sí misma que permite ubicar, caracterizar o distinguir en el tiempo a la obra de arte, tarea de la historia del arte.

El objeto artístico o fenómeno artístico cristaliza experiencias del pasado, y las comunica de forma ambigua y polivalente a nuestro presente. Es decir, la obra es un hecho histórico entre otros hechos históricos, pero con características muy particulares, y el historiador del arte debe hacerle las preguntas (con método o metodologías) para poder reconstruir las circunstancias que a ella le atañen (sociales, políticas, religiosas, económicas, tecnológicas, etc.).

El método o las metodologías para historiar y analizar los objetos artísticos nos muestran los heterogéneos modos de la significación de la obra de arte: formalista, iconológico, psicológico, sociológico o semiótico. Creemos que estos modos interpretativos, por muy exhaustivos que pretendan ser, nunca agotan los problemas ni llegan a abarcar la totalidad de los aspectos concernientes y derivados de las manifestaciones artísticas, sólo las explican desde un determinado aspecto.

¿Qué sucede cuando pasamos de la Historia del arte y de la Estética al ámbito de enjuiciamiento y valoración de las manifestaciones artísticas? : estamos en los dominios de la Crítica del arte (ver tipologías de las teorías sobre el arte de Cauquelin).

¿Cuándo nace la crítica del arte?: a partir de los comentarios de los Salones de Diderot (entre 1759 y 1781) y lo hace en el seno de una sociedad interesada en los salones de pintura, con el apoyo de la difusión de la prensa y con el incremento de una clientela interesada en el consumo de las obras. Los discursos de la Crítica del arte son textos públicos desde su nacimiento como disciplina.

Unidad 01: la filosofía y el arte musical

Objetivos: conocer la dimensión pragmática de las teorías del arte. comprender en la relación música- metafísica en el mundo antiguo.

Contenidos:Tipologías de teorías del arte. “Narrativas maestras” y sus efectos en la práctica artística. Mito y filosofía de lo bello en el mundo heleno. La música en el mundo heleno. Categorías ontológicas y arte: lo Bueno, Verdadero y Bello. La música en la educación. Apolíneo y dionisíaco: crítica nietzscheana.

LO QUE HACEN LAS TEORÍAS: TIPOLOGÍAS Y GRANDES NARRATIVAS

A menudo surge la pregunta “¿Para qué sirve la teoría si las obras de arte hablan por sí mismas a la sensibilidad, si las obras de arte se “sienten”?”.

Esta pregunta no deja de remitir a una teoría: la teoría de la intuición directa de lo bello y de la sensibilidad artística universal. Respondemos con una categoría estética, históricamente situada: pertenece a una estética metafísica y especulativa.

Podríamos haber respondido desde otra estética, materialista, por ejemplo, diciendo desde la estética marxista-leninista (a pesar de que Marx no sistematizó su pensamiento estético en una Filosofía del arte) se puede inferir, a partir de algunos de sus escritos, que define la base objetiva de la aprehensión estética del mundo como actividad creadora del ser humano orientada prácticamente hacia un determinado fin: la transformación de la naturaleza y de la sociedad. De nuevo, estamos respondiendo con otra categoría estética, que exige la necesidad de generalizar los bienes humanos, entre ellos el Arte a toda la humanidad en su totalidad para el cumplimiento de sus fines.( VER EXCURSUS)..

En otros casos, las teorías estéticas a veces contribuyen al descrédito de sí mismas o al arte: algunas clasifican al arte como baratija de la existencia, un adorno encargada de aportar un poco de fantasía a nuestra vida sojuzgada por lo funcional. Otras veces ha querido imponer reglas a priori para juzgar lo bello o lo feo, lo armonioso o lo carente de gracia, lo decoroso o lo inconveniente. Esto fue siempre la tentación de los academicismos formalistas.

Casi siempre, la Estética, ha sido discreta con lo que se hacía sobre arte, sobre todo si era novedoso. Propensa a no pronunciarse sobre las cosas “demasiado

nuevas”, prudencia que se remonta a sus orígenes: ni Kant ni Hegel hablaron de los grandes artistas de su época, cosa que resulta curiosa.

Y por siempre la Filosofía primero y luego la Estética, fue la gestora y heredera del agobio de la historicidad y ambigüedad fundamental de arte, por de ser éste una actividad que a veces usa materiales, técnicas con cierta eficacia productiva en el “saber hacer” del trabajo creativo y artesanal, o, en épocas más recientes, hacia finales de la década del 60, la “idea” es la obra de arte (en el arte conceptual y en el post-conceptual, la idea es primera por sobre la realización material de la obra y el mismo proceso puede ser expuesto para mostrar el origen y desarrollo de la idea inicial) o también en los nuevos paradigmas de lo extremo.

Deseo precisar que siempre, en todas las épocas, la obra de arte es desde la producción, un objeto de pensamiento y siempre, también, un objeto para el pensamiento (lo que decimos del arte).

Tanto el “saber hacer” que priorizaba el objeto estético, veremos que mimético (la primera narrativa maestra, según Danto) teorizado desde la Antigüedad, subsistente luego y de lleno en el arte que se extiende desde el 1400, la época del renacimiento, hasta el 1880, aproximadamente (cuando el arte hace un giro hacia la función metalingüística, es decir, su preocupación está ahora en sus propios procedimientos), como el arte conceptual y post- conceptual que prioriza “la idea” y más acá, el arte contemporáneo manifestándose con estéticas del silencio o de lo extremo, todo el arte es pensado en su producción como en su interpretación .

Así, el poder de una teoría, tanto desde la producción como desde la Filosofía de la Belleza, o de la Filosofía del arte, es el de construir su objeto. En el caso de las teorías, y apartando las que hacen los propios artistas, por ahora, tenemos que su relación con las obras de arte son las que justifican su existencia, y es esta relación misma teórica. Las teorías tienen categorías que son los predicados más generales atribuidos a la realidad, en nuestro caso a la realidad del arte y a toda su problemática asociada.

¿Qué es una categoría? En filosofía, una categoría es una de las nociones más abstractas y generales por las cuales las entidades son reconocidas, diferenciadas y clasificadas. Mediante las categorías, se pretende una clasificación jerárquica de las entidades del mundo. Entidades muy parecidas y con características comunes formarán una categoría, y a su vez varias categorías con características afines formarán una categoría superior.

El primero en utilizar este término fue Aristóteles (384- 322 AC) en su Teoría de la sustancia. La sustancia es la forma privilegiada del ser, es decir, como aquello que no se da en un sujeto sino que es ello mismo sujeto. Del ser,

además, se puede hablar de otros modos ["El ser en sí tiene tantas acepciones como categorías hay, porque tantas cuantas se distingan otras tantas son la significaciones dadas al ser." (Metafísica, libro V, 7)]. Las otras formas de ser se dan necesariamente en la sustancia y Aristóteles las llama accidentes: accidente se dice de lo que se encuentra en un ser y puede afirmarse con verdad, pero que no es, sin embargo, ni necesario ni ordinario"... "El accidente se produce, existe, pero no tiene la causa en sí mismo, y sólo existe en virtud de otra cosa. (Aristóteles, Metafísica, libro V, 30). En la medida en que todas las formas de ser accidental remiten a la unidad de la sustancia, la unidad del ser queda garantizada: el ser se entiende de muchas maneras, pero estos diferentes sentidos se refieren a una sola cosa, a una misma naturaleza, no habiendo entre ellos sólo comunidad de nombre. La sustancia es el individuo concreto y particular, lo que ordinariamente llamamos "cosas"1 u "objetos", es decir, esta mesa, este caballo, ["Así el objeto de todas las indagaciones pasadas y presentes; la pregunta que eternamente se formula: ¿qué es el ser?, viene a reducirse esta: ¿qué es la sustancia?". (Metafísica, libro VII, 1)], adquiere las características de la experiencia (concreto, particular) aunque, como veremos más adelante, sin perder por ello la referencia a lo universal, a la esencia. Resumiendo, podemos decir que para Aristóteles las categorías son un "ser en otro" que no tiene existencia independiente sino sólo apoyado sobre el "ser en sí" (sustancia, individuos) y que nos permiten distinguir un sujeto u otro

Si la Estética es una disciplina filosófica, deberá tener un objeto propio de estudio, responderá a causas, fundamentos: buscará el ser (lo que hace que los entes sean) en la sustancia, en el ente sensible que es el arte.

En Kant (1724- 1804), formula en su Analítica Transcendental que parte de la "Crítica de la Razón Pura" en la que estudia el entendimiento para averiguar el modo en que esta facultad cognoscitiva participa en el conocimiento sintético a priori. Trata de los elementos del conocimiento puro del entendimiento y de los principios sin los cuales ningún objeto puede ser pensado. Una teoría sistemática de las categorías como conceptos puros del entendimiento, es decir conceptos fundamentales mediante los cuales se hace posible el conocimiento de la realidad fenoménica. Dicha realidad primera se nos presenta a nuestros sentidos como un material caótico y bruto. Debe ser ordenado en secuencias temporales y en esquemas espaciales (tiempo y espacio) para llegar a ser percibidos o apercibidos2. Dichos conceptos no se

1 «Cosa» es cualquier parte del mundo material con existencia hasta cierto punto independiente y estable. La cosa se caracteriza por la totalidad de propiedades a través de las cuales está ligada a las otras cosas y entra en interacción con ellas. «cosa para nosotros», designa las cosas como se revelan al hombre en el proceso de la cognición. 2 Apercepción (del latín: «ad»: hacia; «perceptio»: percepción). Dependencia en que toda nueva percepción se encuentra respecto a la anterior experiencia de la vida del individuo y del estado psíquico del mismo en el momento en que se produce la

refieren a la cosa en sí3, puesto que de ella no podemos conocer (racionalmente) nada, sino a lo fenoménico: la categoría en Kant, entonces, es una función del pensamiento.

Recapitulando, para Kant las categorías son las formas puras del entendimiento (conceptos), el elemento a priori del conocimiento que permite la síntesis de los datos sensibles. aunque no tienen origen empírico, las categorías y los principios puros del entendimiento sólo pueden tener un uso empírico: pueden utilizarse para conceptualizar o comprender el material que se da a la sensibilidad , pero no para conceptualizar o comprender lo que está más allá de la experiencia empírica o percepción (como cuando digo “Dios es uno” o “Dios es la causa de la existencia de las cosas”). La sustancia en Kant es una categoría que reúne los datos empíricos de forma, tamaño, movimiento, etc.

Señalo esto a modo introductorio, para ver el desplazamiento de las categorías, tal como las concibe Aristóteles, como reflejo de las propiedades generales de los fenómenos objetivos y con fundamento metafísico, al modo como las concibe Kant, como funciones del pensamiento, que no contienen nada empírico, sino que son las condiciones para una experiencia posible. La importancia de las categorías es capital para el pensamiento kantiano, son el sostén de todo el edificio conceptual estructurado en la Crítica.

Tipologías de las teorías del arteHay teorías especulativas, fundadoras y otras que son de acompañamiento: es un discurso cuyos efectos posibles nos permite visualizarlo en el campo del arte.

Fundar un dominio, categorizar, ejercen acciones que podemos reunir según sus tipologías.

percepción. El término fue introducido por Leibniz, quien entendía la apercepción como vinculada a la autoconciencia (a diferencia de la percepción). Apercepción trascendental. Término de Kant; significa conciencia apriorística, es decir, anterior a toda experiencia, inicial, pura e invariable, condición de la unidad del mundo de los fenómenos, que recibe de ella sus formas y leyes. Al entender de Kant, la unidad de la apercepción trascendental es condición del lazo que existe entre las representaciones del hombre, y de la conservación y reproducción de las mismas. Kant consideraba que la base de tal unión radicaba en la identidad del «Yo», es decir, en el hecho de que en toda representación se incluye la tesis «Yo pienso». Basándose en este aspecto idealista del kantismo, Fichte fundó su sistema de idealismo subjetivo. Diccionario soviético de filosofía. Ediciones Pueblos Unidos, Montevideo 19653 En Kant, la «cosa en sí» designa también las esencias sobrenaturales, incognoscibles, inaccesibles a la experiencia: Dios, la libertad, etc. El materialismo dialéctico, que parte de la posibilidad de llegar al conocimiento completo de las cosas, ve el conocimiento como un proceso en virtud del cual la «cosa en sí» se transforma en «cosa para nosotros» sobre la base de la práctica.

Fundación La actividad fundadora del arte, reinó en el mundo heleno y dio inicio a la ciencia, la sabiduría y el arte, y se llama filosofía. Pero el arte es un pensamiento que todavía no es autónomo, sino que los filósofos siembran semillas de teorías, tonalidades en un contexto en el que el arte y lo bello, verdadero y bueno se van a anudar: son horizontes fundadores ambientales, con actividad fundadora.

También hay otras teorías fundadoras fuertes, en el sentido que plantean reglas de acción, o principios por los cuales se dará un juicio adecuado sobre el arte y lo bello, y también señala aquello que no h de ser arte. Son discursos prescriptivos como el de Aristóteles, Kant o Adorno: las llamaremos conminativas y tienen también un carácter fundacional.

AcompañamientoSi las fundaciones son indispensables, a veces el arte escapa al torrente fundacional, creando otros cauces que se alimentan de sistemas ya constituidos y discurren intentando dar al espectador herramientas conceptuales para dilucidar procesos artísticos, edificar sistemas de lectura, etc. Semiótica, psicoanálisis, hermenéutica, fenomenología, historia aportan su cauce teórico sobre las prácticas, y modelan la práctica misma.

EnvolvimientosTambién hay afiladas herramientas teóricas en distintas disciplina (lenguaje y realidad, modos de representación, usos de la imagen o de la música, o antropología corporal, relaciones intencionales, negación y negatividad, regímenes escópicos, etc.), así como la construcción de universos de sentido desde la política o la sociología o la filosofía o el sicoanálisis que inevitablemente “resonarán” en el mundo del arte. También existe la doxa teorizante del público, un rumor de fondo que habilita espacios de consagración para el arte, o los niega. Dice Cauquelin que no hay que considerarlo un borrador común de “gustos y colores” subjetivado al punto de no poder debatirse, no es el revés del logos teorizante y razonable, sino que es un mundo de la vida, preexistente o pretexto para que se manifiesten las creencias, las analogías, los imaginarios o incluso un contexto que acompaña a la obra de arte, que le da un “sitio”, y, agrego, muy importante para el establecimiento de consensos de problemáticas que mantienen vivo al arte.

Todas estas tipologías fundadoras (ambientales o conminativas), de acompañamiento o de envolvimiento, hacen que seamos cautelosos al referirnos al concepto de arte. En general se tiende a creer que determinados objetos, portadores de la Belleza y sin ninguna función utilitaria, pertenecen de modo natural a la clase de objetos artísticos.

Ahora sabemos que lo “que los hombres han llamado arte, llaman arte o llamarán arte”, el discurso del arte, es una construcción, una operación de recorte de la realidad, recorte categorial de un determinado momento histórico, tecnológico, religioso y social.