Filosofía Griega y Medieval

download Filosofía Griega y Medieval

of 7

description

resumen

Transcript of Filosofía Griega y Medieval

FILOSOFA GRIEGA Y MEDIEVAL

PREGUNTA N1. FILOSOFA GRIEGACules fueron los problemas filosficos en el mundo antiguo y qu soluciones les dieron los filsofos de esta poca?

Vamos a hacer esta pregunta atendiendo a una clasificacin que tenga en cuenta el desarrollo de los distintos problemas a los que se enfrentaron los filsofos griegos. As, pues, podemos hablar de los siguientes problemas: 1. Problemas cosmolgicos.2. Problemas ontolgicos.3. Problemas epistemolgicos.4. Problemas antropolgicos y dentro de stos:a. problemas ticos.b. problemas polticos.1. Problemas cosmolgicos. Debido a una serie de circunstancias geogrficas, sociales y polticas la filosofa aparece en Grecia hacia el ao VI a.C. y el objeto de la reflexin filosfica ser la physis o naturaleza, entendida sta como una realidad ordenada que posee un orden dinmico y que es racional frente a lo catico y cambiante que nos ofrecen nuestros sentidos. La forma de enfrentarse a dicho problema fue preguntndose por el arj o principio y origen de todas las cosas. Las distintas respuestas a este problema las podemos agrupar en: teoras monistas que son aquellas que proponen una sustancia originaria como origen de todo (Los milesios: Tales, Anaxmenes, Anaximandro; Herclito y Parmnides); teoras dualistas, que proponen dos sustancias originarias (Pitgoras); y las teoras pluralistas que afirman la pluralidad de sustancias como origen (Empdocles, Anaxgoras y Demcrito).2. Problemas ontolgicos. Es un momento decisivo en el devenir de la filosofa cuando la filosofa comienza a ocuparse de la physis no ya desde el punto de vista natural; ahora con Parmnides la filosofa da un paso ms hacia la abstraccin y el ser se estudia desde el punto de vista de en cuanto que es, sin considerar ninguna propiedad fsica ni sensible. Por eso la filosofa deviene en ONTOLOGA. ste separ lo que percibimos por los sentidos (pluralidad y movimiento) de lo que se capta por la razn que ser la nica realidad verdadera. Estos problemas planteados sern heredados por Platn y Aristteles; mientras que para Platn el ser reunir todas las caractersticas de Parmnides y estar separada y fuera del mundo sensible, Aristteles hablar de las distintas formas de decir el ser pero siempre haciendo referencia a la sustancia, objeto de estudio de la filosofa aristotlica, y, por lo tanto, al individuo concreto.3. Problemas epistemolgicos. Desde el principio se plantea la cuestin de cmo conocer la naturaleza porque una cosa es lo que aparece a nuestros sentidos que es cambiante, mutable y en continuo devenir, y, otra cosa, lo que est ms all de los sentidos y que se capta por la razn. Es Parmnides el que comienza advirtiendo que existen dos caminos de investigacin, el de la razn y el de los sentidos, y que solo el camino de la razn nos puede llevar al conocimiento del ser estableciendo as las condiciones del conocimiento cientfico y estableciendo como mtodo la investigacin racional. A partir de la reflexin de Parmnides los problemas epistemolgicos toman especial relevancia ya que se enfrentar la postura idealista de Platn (las ideas son el fundamento y objeto del conocimiento cientfico y verdadero) a la postura realista y empirista de Aristteles (las el conocimiento comienza por lo sensible y todas las ideas proceden de lo sensible y singular); tambin aparecen diferentes formas del pensar que van desde la retrica de los sofistas, pasando por la dialctica platnica para acabar con la lgica aristotlica.4. Problemas antropolgicos. Tienen su origen en la segunda mitad del siglo V a.C. y son producto de una poca de esplendor en Atenas seguida de una poca de decadencia; es por eso, por lo que los temas relacionados con el ser humano, la educacin, la tica y la poltica pasan a tomar protagonismo en la reflexin filosfica. Vamos a dividir estos problemas en dos:a. Problemas ticos. Se pueden resumir en el debate provocado por los sofistas entre naturaleza y nomos, es decir, entre lo natural, no cambiante, y lo convencional y cambiante, o entre la ley natural y la ley positiva. Dicho debate se encarn en el enfrentamiento entre los sofistas, defensores de la convencionalidad de las leyes ticas y morales (relativismo, ad hoc), y Scrates, defensor de la necesidad de buscar y conocer el concepto como condicin de la moralidad identificando el saber con la virtud (intelectualismo moral). Platn sigue el camino de su maestro Scrates y considera que la virtud es el camino para llevarnos al bien; la virtud se convierte en el centro de reflexin de la filosofa de Platn siendo considerada sta como armona entre las distintas partes del alma. La postura de Aristteles, ms realista, se plantea la cuestin de definir la felicidad como fin absoluto pero alejndose de la utopa platnica al hablar de una felicidad alcanzable y realizable por el hombre.b. Problemas polticos. Antes hemos dicho que fueron los sofistas los responsables del giro antropolgico y ahora hacemos hincapi en los problemas polticos que se derivan de la aparicin de stos. La postura sofista chocar con la de Scrates, Platn y Aristteles, puesto que para los sofistas el hombre es social no por naturaleza (como afirmarn Platn y Aristteles) sino por convencin y, por lo tanto, resultado de un pacto; por eso a la hora de legitimar el poder unos (los sofistas) apostarn por la fuerza y otros (Platn y Aristteles) por la naturaleza. Para Platn y desde su propuestas poltica utpica, plantear un estado ideal, que sea continuacin de la naturaleza humano, en el que la virtud fundamental sea la justicia y el modo de alcanzar ese ideal ser mediante un proyecto educativo de todas las clases sociales que componen el estado; Aristteles, por su parte, plantea un modelo ms realista y conservador de estado fundamentado en una visin ms organicista de la naturaleza. Ms tarde, hacia el siglo III, el poder poltico va a pasar a manos de Macedonia en detrimento de la polis de Atenas, comenzando as un periodo que se llamar el PERIODO HELENSTICO de la filosofa.

PREGUNTA N1: FILOSOFA MEDIEVAL. Presenta una visin panormica de la historia de la filosofa desde Agustn de Hipona a la crisis de la Escolstica medieval.

Dos son los problemas que nos servirn de hilo conductor para desarrollar el panorama filosfico de la Edad Media: 1. el problema de la relacin entre la razn y la fe y, 2. el problema de los universales.

1. La relacin entre razn y fe, filosofa y teologa. El problema de la filosofa medieval es que el cristianismo no es una filosofa sino una doctrina de salvacin que ha sido revelada por Dios pero que contiene afirmaciones de las que la filosofa desde sus comienzos viene pronuncindose (inmortalidad o no del alma, sentido del hombre, existencia de Dios, etc); la cuestin est en que mientras que la filosofa usa la razn para justificar sus afirmaciones, el cristianismo se fundamenta en la palabra de Dios revelada a las hombres por boca de sus profetas. El caso es que cuando aparece el cristianismo sus afirmaciones convivan con otras (unas veces similares, otras dispares) provenientes de sistemas filosficos helenistas que ocupaban el lugar principal en el panorama intelectual. Es entonces cuando comienza a plantearse el problema de la relacin entre la razn y la fe, o entre filosofa y teologa: necesita el creyente, pues, de la actividad filosfica o es la filosofa incompatible con la fe? La fe destruye el esfuerzo intelectual o se puede integrar ste a la fe?

Bien es verdad que, desde el principio, la mayor parte de los que se enfrentaron al problema valoraron positivamente el esfuerzo filosfico, manteniendo que gracias a l se pueden alcanzar verdades integrables en la visin religiosa. As los Padres de la Iglesia de la escuela de Alejandra utilizan sin problema alguno la filosofa helenstica de la poca para volcar en ella el mensaje revelado (por ejemplo, Clemente de Alejandra). Cierto es, tambin, que hay quienes piensan en la radical oposicin entre la filosofa y la creencia religiosa y defienden, pues, que el creyente debe abandonar el uso de la razn y limitarse exclusivamente a creer tal como defenda Tertuliano (s. II) ya que Platn y Aristteles son los padres de las herejas; lo que mejor define la postura de Tertuliano es su famoso Credo quia absurdum est (postura fidesta = creo porque es absurdo).

Pero es en el siglo IV-V cuando aparece el primer autor que expone con profundidad el tema, S. Agustn (354-430), realizando as la primera gran sntesis del pensamiento cristiano. Este autor no trata tanto de marcar las fronteras entre razn y fe, cuanto de insistir en que las dos tienen como misin esclarecer la verdad nica que es la verdad revelada; el itinerario que marca es: 1. la razn ayuda al hombre a alcanzar la fe; 2. la fe orienta e ilumina a la razn y 3. la razn contribuye al esclarecimiento de los contenidos de la fe=COMPRENDE PARA CREER, CREE PARA COMPRENDER.

Hay que esperar a los siglos XI y XII, poca de la llamada PRIMERA ESCOLSTICA, para enfrentarse de nuevo al problema de la relacin entre razn y fe (hasta entonces se aceptaba sin mayor problema la postura de S. Agustn). Aparecen las posturas de los dialcticos y los antidialcticos: los primeros (Pedro Abelardo, Berengario de Tours) defendan la importancia de la razn (que haba sido puesta en el hombre por Dios) para descubrir la verdad y cualquier cuestin teolgica deba ser sometida al anlisis racional; los segundos, los Antidialcticos (S. Pedro Damin) afirmaban que para la salvacin solo sirve la fe y, ante bien, la razn es camino de perdicin. Quien tercia en esta polmica es S. Anselmo de Canterbury (1033-1109) y reitera el concepto de sabidura cristiana agustiniana y defendi la unin entre la verdad de la razn filosfica y verdad de la fe revelada, pero en el sentido de subordinacin incondicionada de la ltima a la primera: sin fe no hay verdadero conocimiento = creo para poder entender.

Pero hay un acontecimiento que condiciona el devenir de esta disputa y es el conocimiento del aristotelismo rabe ya que nada puede seguir siendo igual. Es con el pensamiento de Averroes y su teora de la doble verdad cuando se demuestra que la razn es una facultad capaz, por s sola, de proporcionar una visin unitaria del universo y, en este caso, incompatible con la fe; esto hace que los pensadores cristianos se vieran en la necesidad de separar, de distinguir la filosofa de la teologa aunque despus traten de armonizarlas.

Llegamos al s. XIII, al APOGEO DE LA ESCOLSTICA, con la figura que realiza la segunda sntesis ms importante del pensamiento cristiano: Sto. Toms. Para ste, la filosofa y la teologa son ciencias distintas con objetos, mtodos y criterios diferentes y que cada una, en su campo, son autnomas y autosuficientes. Pero en los asuntos en que pueden coincidir razn y fe tiene que haber armona ya que Dios que ha dotado al hombre razn no puede hacer que se contradiga con lo revelado; as, pues, la relacin entre razn y fe es: por un lado, la razn ayuda a la fe y, por otro, la fe ayuda a la razn.

En el s. XIV, la CRISIS DE LA ESCOLSTICA, de la mano del franciscano Guillermo de Ockham y debido a su defensa de lo individual y de la intuicin sensible, la razn y la fe se separan por ser dos planos absolutamente diferentes y asimtricos.

2. El problema de los universales.

Es otro de los problemas fundamentales de la Edad Media y para entenderlo tenemos que tener en mente que la cuestin parte de un autor llamado Boecio (s. VI) que al comentar las obras de Platn y de Aristteles (se conoca los Primeros Analticos, obra de lgica de Aristteles) plantea la cuestin de si las ideas universales existen solo en la mente que las piensa o son realmente subsistentes por s mismas, con existencia independiente de los sujetos?[footnoteRef:1] [1: Es importante que al plantear el problema digamos que nos estamos jugando la posibilidad del conocimiento mismo, dado que para conocer, pensar, necesitamos de esos conceptos universales.]

En la primera escolstica, s. XI, las posturas van desde el realismo que mantiene que los universales no solo existen en la mente del sujeto sino en la realidad (Guillermo de Champeaux, 1170-1121), hasta el extremo opuesto de Roscelino de Compigne (1050-1120) que defiende que en la realidad solo existen individuos, y en stos no hay nada universal y por eso denomina a los universales flatus vocis (palabras vacas, ya que no hay humanidad (universal) sino solo seres humanos (individuos)).

En el s. XIII, durante el apogeo de la escolstica, Sto. Toms afirmar que los universales solo existen en la mente humana, pero su fundamento son las cosas, en concreto, la forma (concepto aristotlico) de las mismas, que es, entre otras cosas, principio de universalidad.

Con la crisis de la escolstica en el s. XIV y de la mano de Ockham, los universales no sern esencias que existan en la realidad ni en otro mundo, sino que sern trminos conceptuales, nombres que se ponen en, que ocupan el lugar de las cosas singulares. Los universales, pues, no son ms que propiedades que poseen los trminos y que consiste en hacer las veces de un objeto. La universalidad, entonces, queda reducida a una propiedad que poseen los trminos y que consiste en hacer las veces de un objeto cuando ste ha sido conocido confusamente. Es claro que la postura de Ockham se deduce de su epistemologa basada en que el nico conocimiento es el conocimiento intuitivo (no es sentido cartesiano ni racionalista, sino como entendido como empirista) que prepara el camino a la aparicin de la filosofa moderna.