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/ffi\

i.1icr.'ttc's

'

DisLrilrrlcitrrle

s

W

lli.*rpr¡i¡1i¡-3$,

.A.

de

C.V.

11IóPANICAó

F.

ENGELS

El papeldet rabai

en

a

transforrm&ci

SeE

finsxao

mhombr

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O

llclicic¡nes

I)isf"ribuciones

ispánicas,

.A.

de C.V.

Av.

lliclalgo

No.

't?-B

--

Colonia

del Carmen

Deleg.

Coyoacán

-

04100 üéxico,D.F.

ifelófc¡nc¡s

44-47'28

y

549-5?-81

tsuN968,-6149-r2{

Impreso

en

los

talle¡es

gráficos

de

Premiá

editora

de l ibrc¡s.

.a.

'f lahuapan, Pue.

lmpreso

y

hecho

en }Iéxico

Ilrinüed and made in Mexico

El

trrbajo c¡

la fue¡tc

dc

toda

riqueza,

afi¡man

los

espc-

ciali¡ta¡ cu Bcouo¡oIa

polltica.

Lo el,

cn cfecto,

a la

par

éuc

l¿ naturalc¿¡,

guc

lc

proyüe

dc lo¡ matcrialcr

quc

-él

cón-

vicrte

cn

riqucza.

Pero cl trabaio

cc

mucbl¡imb

má¡

quc

cro. E6 la

co:nüción

bá¡ica

y

fuñdamcnt¿l

.dc

toda

la

vfda

humana.

Y lo cl cn tal

gradb quc,

haata

cicrto

puuto,

dcbc-

mos

decir

<nre

el trabaio ha

crcado

al

nrooio

hombrc.

Hrcc mucho¡ ccstéuarcr dc ¡niie¡ de'añor, cn uaa época,

aún

no e¡iablccida

defiuitivamcntc,

dc

aquel

pcr{odé

dcl

clcrarrollo dc la Ticrra rpc

lor

gcólogor

dénominan tcrcia-

rio, probablcmentc

a finc¡

dc

c*c

pcllodo,

vivla

co algrln

lugar

dc la zona

tropical

-$¡Lfu

co r¡n extcoco

continclntc

hoy denparccido

cn lar

profundidadcc

dcl Océano Indico-

una

rara

dc mono¡

antropomorfo¡ extraordinariamentc

dcra-

rrollada. Darwin

nor

hi d¿do una

de¡cripción aproximada

dc

csior aatep¿rador

nucstro¡.

Ehtaban toialmcnti

cubiertoc

{t ?do, .tcpfal

barba,

orcju puntiagudar,

vivla¡¡ cn

lo¡

arbotc

y

¡orEab¡ur

naDada .

Er dc ¡uponer que como corsecücncia, anüc todo, dc ru

g-éuero

dc

vidq

por

cl

quc

laa manos, aI

trcpar, tcnlan

quc

dercmpeñar

funcioaca

di¡tinta¡

a la¡ dc lor

piea,

cgto¡

mono¡

¡e

fuc¡on

act¡tumbra¡do

a

prcrcindir

dc élla¡ al

camirar

por

el

ruclo

y

cmpüs¡o¡r

a

sloptar ml¡

y

¡¡d¡

rrna

po¡ición

€rccte.

Fuc

il

pelro.

thcüiw

pba

cl *&lrrto

¿sl

ñono

al

hambrE,

-

Todsa

lol

mono¡

rntropomorfoa

quc

ryi¡tcn hoy dla

puc-

dcn

pcrrusccff

ctr

lrofición

crccte-

y

$rmiq¿r

a¡rcyán?totc

1-765

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únicamente

en sus

pies;

pcro lo

haccn sólo en

ca¡o,

dc

ci-

trema

necesidad

y,- adcmás, con

suma torpeza.-

Caminan

habitualmente

en actitud

scmicrccta,

y

su marcha

incluyc

el

uso de las

manos.

La mayoría dc

cstos

monol aPoyan

en

el suelo

los nudillos

y,

cncqgicndo

las

picrnas,

hacen

avan'

zar el

cuerpo

por entre sus

largos brazot, como

un cojo

que

canrina con

muletas.

En

gcncral, aun

hoy

podemor obcervar

entre

los monos

todas laiforrnas

dc

traniiCiórr cntrc

la

mar-

cha a cuatro

patzu y

la marcha

en

posición crccta.

Pero

para

ninguno de cllos esta última ha pasado dc ser uo recurso

circunstancial,

Y

puesto que

la

posición

erecta

habfa

{c

ser

Para

nue¡-

tros

peludos antepasados

rimcro

una norma,-y

lucgo,

u-na

necesidad,

de

aquí sc dcsprendc

que

Por

aquel

cntonccr

-lar

¡nanos cnían

que

cjccutar

funcione¡

cada vez

más

variadar.

lncluso entre lbs

mbnos

cxistc

ya

cierta divi¡ión dc

funcio-

nes

entre

los

pics y

las

manos. Como

hemoc

¡eñalado

má¡

arriba, duranti l¿

tr:epa

as

manos

so¡¡

utilizadas

dc

di¡tinta

mancra

quc

los

piesf

Lau

maoos sirvcn

fundamcntalmcntc

pata

tccóger

y'

lostener los

alimcntos,

como lo haccn.

ya

ileurros m-amífiros inferiorcs con sut patas dclantera¡. Cier-

toi monos se

avudan dc

las mano$

para

con¡truir

nido¡

en

los

árboles;

y

aigunos, como

el chimpancé,

icgqn a-co-n¡t¡uir

tejadillos entrc

Ias ramas,

para dcfcndcrtc

dc

las

inclemcn-

cias del ticmpo.

La.mano lcc

sirvc

para cmpuñar

Sarotc '

con

los

que

sc

deficndcn

dc

sul

cnemigol, o

Para

bombar-

dear a éitos

con frutos

y picdras.

Cuando

¡e

cucuentran

en

la cautividad,

realizan con

las manos

variar operacioncr

rcn-

cillas

que

copian dc

los hombrcs.

Pcro

aquí

cs

precisarncntc

donde

e vc iuán

grandc

es a

distancia

quc

scpara

¿ no

dcr-

arrollada

mano di

los monos, incluso

li dt lol

antropoidcr

superiorcs,dc la ¡nano dcl hombre, pcrfcccionada-por

cl

tra-

bajo

durante

ccntenares e

miles de años. El númcro y-la

diqposición

gcncral

de los

huesos

y

de los

mú¡culos

son

lot

miimos

cn

."i *oRo

y cn cl hombrc,

pcro Ia mano-

del

ralvajc

más

primitivo es cipaz dc ejccutar-ccntenarc¡

e-opcracioT

tr.r

qu.

no

pueden'rcr

rcalizadas

por

la

mano de

ningrh

*ono. Ni uná sola mano

simicsca

a-hecho

amás

un cuchillo

dc

picdra, por

tosco

que

fucse.

Por cso, as opcracioncs,

Para

las

que nuertroc

aatcp$e;

dos fucron

adapündo

poco

a

poco

lus

rna¡¡ot

durantc

lo¡

muchos

milcs di

años quc

dura'cl

pcrfodo

dc

tran¡ición

del

mono al

hombre,

sólo

pudieron

Eer, en un

principio,

opera-

ciones sumamcntc

scncillas.

Los

salvajee

más primitivus,

incluso aquéllos

en

los

quc puedc prcsumirsc

cl retorno

a

un

csta{o

más

próximo

a la

animalidad, con

una

degenera-

ción flsica simultánca, son,

sin embargo, muy

superiores a

aquellos sercs

del

período

dc

transición.

Antcs

dc

quc

cl

primer

troeo

dc sflcx

hubiese

siclo

convertido cn

cuchillo

por

la mano del hombre,

dcbié haber

pasado

un período

de tiempo tan largo

que,

en cornparación con

é1, el

período

histórico conocido por nosotros resulta insignificante. Pero

se

había dado

ya

el

paso

dccisivo:

l,a

nano

se

hiza libre

y

podla

adquirir ahora

cada ve¿

más de¡treza

y

habilidad;

y

esta

mayor flcxibilidad adquirida

se transnritía

por

herencia

¡1

se acrecíadc

geocracién

cn

generación.

Ventos, pues, que

la

mano no cs

sólo el

órgano

del

tra-

bajo: er tamüén

producto

dc

él.Urúcarnentc

por

el

trabajo,

por

la

adSptación a nu€vas

y,

nuevas

opcraciones,

por

la

transmisión hcreditaria

dcl

perfcccionamiento

especial así

adquirido por

los músculos,

os

ligamentos

y,

en

un período

más largo,

también por los

huesos,

y

pqr

la aplicación siem-

prc

r€novada dc cstas

habilidadcs heredadas a operacionesnuevas y cada vez más complcjas, ha si do cómo la mano del

hombre

ha

alcanzado csc

grado

de

pcrfccción que

la

ha

hecho

capaz

de

dar

vida,

como

por

artc

dc

magia,

a los

cuadros de Rafacl,

a las estatuas dc

Thorvaldscn

y

a la

música

dc

Paganini.

Pcro

l¿

mano rio cra algo

con existcncia

propia

e

indepcn-

diente.

Era

únicamcntc un miembrc¡

dc

un organismo

cntero

y

sumamentc omplcjo.

Y

lo

quc

beneficiaba

la nrano

benc-

ficiaba también

a

todo el cuerpo servido

por

ella;

y

lo bene-

ficiaba cn

dos

aspectos.

Primeramente, en

virtud dc

la

lcy

que

Darwin

llamó

dc la correlacién del crecimiento. Segrln csta ley, ciertas for-

ma¡ de las distinta¡

partes

dc

los scres

orgánicos siemprc

crtán

ligadas a detcr;ninada¡ formas de

otras

partes, gue

aparcnterneotc

no

tienen

ninguna

relación

con

las

prinrcras"

Asf, todos

lo¡ animales

quc

porecn

glóbulos

rojos sin núcleo

y

cuyo

occipital

está articulado

con

Ia

primera

vértcbra

po r

mcdio de

dos

cóndilos,

poscen,

sin' excepción,

glándulas

mamarias

para

la

alimentación

dc

ous crlas.

Así

también,

la

pczuña

hendida

de

cic¡tos

¡namlferos

va ligada

por

regla

general

a la

prcsencia

tlc un cstómago

multilocullr adáp-

I

I

I

i

I

i

r

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tado

a Ia

rumia.

Las modificacloncs

cxpcrimcntadar

por

ciertas

formas

provocan cambios en

la forma

dc

otras

pl4ca

del

organismo,

sin

que

c¡tcmos etr

condicioncs dc

uplicar

tal

con--crión.

Los

gator

totalmentc

l¡lancos

y

dc

ojoa azuler

son

siempre

o casi icmprc

so¡dos.

El

pcrfeccionaroicnto

gra-

dual dc

Ia mano

del

hombrc

y

la

adaptación concomitlntc

dc los

pies

a

la

nrhrcha

en

posición

crccta. rcpe-rcuüeron

indudablcmentc,

en

virtud dc

dicha

correlación, sobre

otras

partes

dcl organismo.

Sin

gmbargo, csba

lcción

aun

-tstá

tan

i¡oco

estudiaiia quc aquí no podimos más quc señalarla en

términos

gencrales.

Mu.hé'

más imporüaotc

c¡ la

rcaccióu dirccta

-posi 'I9

dc demo¡trar-

del

dcsarrollo

dc

la mano ¡obrc

el

rcsto

dcl

organismo.

Como

ya

hcmos

dicho, nuc¡tror

anteparador

siñicscos

eran

animalcs

socialcr;

evidcntcmentc,

tlo

cl3

posible

buscar cl

oriEcli

dcl

hombre, cl

más ¡ocial

dc

ios

animales, eD

unos-¿tütepasador

nmediatog

no

¡ocialc¡.

C;" ."dt

tró.ro

pto.g..to,

il

dominio

sobrc la

baturalcea'

quc

comenzara

poi

ef dc¡arrollo

dc

la mano,

fo-n.gl$gbFjs,

iba ampliando ios

horizor¡tc¡

dcl hombrc,

haciéndolc

dqscu-

brir cdñstaniementcen los cbictoc dc la naturalcza nuevas

propiedadcs

hasta

entoncesdesconocidas..

or

otra

partc, el

icsirrólló

del trabajo,

al multiplicar

los

casos dc

ayuda

mutua

y

de actividad

conjunta,

y

al qrostrar

así las

venlajas

dc

c¡ti

actividad coniunla

para

cada

individuo,

tenía

que

contribuir

forzosamenic

a airupar

aun

más

a

los

micmbros'

de

la

sociedad.

En resu¡nen,los'hombrcs

cn

formación

l[gga-

ron

a un

Dunto

en

que

luvieron

necesid.ad"de

ecirse

alga

los

unos a-los otro¡.

La

ncccsidad

crcó cl órgano:

la

laringe

poco

desarrollada

dcl mono

$c fue transf ormando,

enta

pero

Íirmemente, mediante

modulaciones

quc producían

a

tu

vcz moclulaciones nás perfcctas,micntras los órganos de la

boca

aprcndlan poco a

poco

4

pronunciar

ui soaido

articu-

por

comp-lcto

cuando

el

animal

ha ¡ido

domesticado

por

cl

hombrc.

El

contacto

co¡ el

hombrc

ha

dcsarrollado

en.io.rro

y

en

el

qabi{lo

un

oldo tln

¡cn¡ible

al

lcuguajc

arlicrüadó, quc

estos.a¡rimales

uedcn,

dcutro_del

mardo

üe

ju¡

rcprcsenüacio-

ner,

llcgar

a comprender

cualquicr

idioma.

Adci¡á¡.

pucdcn

Uegar a adquirir

sentinlient-oq

dccconocidos

antcc

poi

cllos,

como_

oo

tl

apcgo

al hombre,

el sentimiento

dc-cratitud,

ctc.'Quien'conoeca

bicn

a

cctos animales,

diflcilmcnlc

podrá

escapar-

la-convicción

dc

quc,

cn muchos casor,esta'inca-pacidad ¡Je hablar er cxpcrirncntada r¡á¡rr¿

por'cllos

como

un

dcfccto. Dergraciadamente,

ertc.

dcfccto

no-

icnc rcmcclio.

pucs

sur órganos

vobafc¡

sc

hallan

dcmasiado ccpecializadoi

F

i.l:"til4r0_a;-aiti*fi,4p..

in

.erybargg,

uandó

e¡istc un

órgano

apropiado,.eeta

Pcapacidad

pucde

rer

rupcrada

dcn-

tro

de ciertos

lfmitc¡.

Lor-órganog-bucalcs

dc-lac

avcs

se

diatiuguen

en

form4

radical'd-c

los

dcl

hombrc,

y.

sin tm-

bargo,'la"í'avc¡

rpn

lor rlnico¡ animalcs

que pucdcn

aDrcn-

dcr

a hablar;

y

cl

ave

de voz más

rcpulrivi,

cl-loro,

cs li

que

mejor

habla.

Y no

re nlrr objctc

diéiéndonos

quc

el loro no

entiende

lo

quc

dicc.

Claro

-cstá

que por

cl iolo

custo

dc

hablar y poi ¡ociabilidad con los' hoñbrcs eI lor-o pucdc

estal rcpitiendo

hoia¡

y

horas

todo.,¡u

yocabulario.

-Pcro,

db¡tro^'dcT"mdrób

dc riú rtpresentariionc¡, pucde

también

llegar

a

comprcoder

lo

que

dicc.

Enscñad a

ün loro

a decir

palabrotas,

de

modo

quc

lleguc a tcner

una idca

de su

significación

(una

de li¡ dirtiaccionc¡

favoritas

de

los mari-

ncros que

r€grcsan dc las

zonas

cálida.a),

veréir muy

pronto

que

en cuanto

Io

irritáig bacc uso

de

csa¡

palabrotas

on la

misma

corrección que

cualquicr

vcrdulcra- dc Berlln.

Y

lo

mismo

ofi¡rre con

la

peticién

de

colosina .

Primero cl trabaib,

lucro

y

ion

él

la

palabra

articulada.

fuclon lob-dos-cstlniülói piiniipaleg baio'cuya influcniia ci

éerebrb'dCl

mono

il

fui tiansformanto

rii,dualmcnte

.én

Leribr'o'liúmano,

qué,

a

perar

dc todá su-similifüd,'1o

su"-

peri

qoirsidcrablemente

n

tamaño

y

'cn

pcrfccciónl

'Y

mcdida

quc

Ec desarmllaba

el cercbroi'de¡arrollában¡c tan¡-

bien

sus:instrumentos

más

inmcdiato¡: loc

órganor

dc

Io¡

scntidos.

De la ¡nisma manera

quc

cl

desarrollo

gradual

del

lengrrajc

va nece¡ariamcntc

acompañado dcl

corrcspondicn-

tc

perfeccionamicnto

dcl órgano dcl ofdo,

a.rf también

cl

desarrollo

general

del

cercbro

va ligado

al

perfeccionamicn-

to de todos

los órganos

dc loc scntidog. La vista

dcl

águila

;i;;;;;;ación

con

lo¡ anirnalcs

nos

¡Duestrs

qúc

csta

cxplicación-del

origcn

del

lcuguaje_a

partir del-trabajo

y

con

cl

trabajo es la

única acc-rtadu.

1o

Poco

que

los

anima-

lco, incluso los már

dcsarrollados,

ticnch

qut

comutricars€

los-uoos

a los stros

puedc

ocr

transmitido''sin'cl"'tdn'iurso

lado rls otro,

\i

de la

r¡alabra

artkuláda.

Ningún

animal en cstarlo

salvajc

. . oi"r i . . np. i , , i i ¡ rÁn r¡nr

qr- incanacidad

de hablar o dc

e

sie;tc

periudicado por

su-incapacidad

-de

bablar

o

comorendei il tcncuaii

humano. Pero

la sTtuación

can

I

,

i

I

I

i'

1

comprcndci

l lcnguajl

humano.

Pcro la

iiiA¡ciórl.cambia

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cúny--d-e

.irgu¡ro,

ada

vez

miyóies,

cácciónáron'a

ü

fiz

sobre l

trabajo

y

la

palabra,estimulando

ás

y,

má¡s.st¡

tiene

mucho más

alcance

quc

la dcl

hombre,

pero

el ojo

hunrano

percibe

en las

cosasmuchos más

detallcs

quc

cl ojo

del

ásuih,

El

.perro

tiene

un

olfato

mucho

mfu fino

que

cl

hombic,

per.o

no

putdc

captar ni

la centésima.parte

de

.los

olorcs

qul

sirvcn

á éste

de signos

para

difcrcnciar cosas

dis-

tintas. Y

el sentido

del

tacto,

que

cl

mono

Posce

a duras

pena$

en

la forma

más tosca

y piimitiva, se

hl

,ide

desarro-

ilando

únicamente

con

el

desárrollo

dc

la

propia

mano dcl

hombre,

a través del

trabajo.

El desarrollodel cerebroy de los scntidos.a-.¡¡r-s-ervicio,

I a

cJc¡iéñIÉ

c

a;¡

dea- a

t ¿

b

n

c

é

n

.ci¡r,

fapáZillá

-d

e*á]o:

Fác

-

cec

dc

proporcionar

alirncnto,

cl crcci¡ricnto

de

la

pobla-

ción

ridic¡ca

fue

ya

irnporiblc; en

cl

mejor dc

lo¡ caso¡

cI

nrimcro

de

lu¡

animalc¡

podfa

mantencrsc al

mi¡mo

nivcl.

Pcro

todo¡

los

aoimales

ion u¡o¡

grandcr

derpilfarradorcs

de

¿limcntoc;

adcmár,

con frccucocia

dertruycn

cn

gcrmeo

la

uueva

ccncración

dc rc¡crva¡ alimcnticia¡.

A üfcrcncia

dcl

cazado:r,

cl

lobo

no respcta la cabra

monté¡

quc

habrfa

de

proporcionarlc

cabrito¡

al año riguicntc;

la¡ cabra¡

dc

Grccia,

que

dcvoran

lor

jóvcncr

arbu¡to¡ a¡tc¡

dc

quc

puc-

dan desarrollanc, han dcjado de¡¡uda¡ toda¡ la¡ monta-

ñas

dcl

pals.

BEta

"cxplotación

rapaz" llcvada

a cabo

por

lo¡

animil'e¡

dcrcmpeñá

un

gratr

papel

cn

Ia

traocformación

cradual

dc

las

crpccicc, al

ubligarlar

a

adaptarrc

a u¡¡or

álimcntos

quc

no

-¡on

lo¡

habitualcs

para

clla¡, con

lo

quc

cambia

la

iompo¡ición

qulmica

dc sd Bantrc

y

rc

modifica

Dooo

a

poco

toda

la

cou¡titución

ffsica del

auimal;

la^r ccpc-

iic¡

vaiiiaaa¡

desaparecsr.

No

cabc

duda

dc

quc

c¡ta

cx-

plot¿cióniapaz

dcbla

llcvar a

la raza

dc

mono¡

guc Eulrc-

iaba

coa

vcñtaja

a todar

la¡

dcmá¡ cn

intcligcncia

y

capa-

cidad de

adaptáción

a

utilirar

eu la

alimcstación

,¡a ¡firnGrro

cada vez malor de nueva¡ plantas y cada ve¿ mác partg

come¡tible¡

dc

é¡tas,

cn

una

palabra, dcbfa llcvar

a

quc

la

alimcntación,

cada

vcz

más

variada,

aportase

al

organismo

nuevar

y

nueya¡¡

rubotancias,

las

cualc¡

crcaban

las

co¡dicio-

nes

quf;ricas para

la

transformación

dc

estos

monos

cn lcrc¡¡

humáuos.

Peio todo

c¡to

no cra

trabajo

cn

cl

verdadcro

i.rt¡¿o

de la

palabra.

El

trabajo

comici¡za

con

la clabora-

ción

dc

ir¡¡tru¡i¡coto¡.

¿Y

qué ¡on los

instrumcntoE

¡ná¡

anti-

suos,

¡i

it¡zcamo¡

por-

loí restos

quc

nos han

llegado

dcl

Éomütc

irch'i¡tóricó.

por

cl

séncro

dc

vida

dc

los

pucblor

más antiiuo$

qr¡c

rcgiitra

la Littoria,

a¡f como

por

cl

dc lo¡

salvaics áctuali¡ mái primitivo¡? Son instrumcato¡ dc cazay

de

páca:

lor

primcroi

utilizadoc

también

como

¡rnn¡¡l'

Pcro

la éazav la

pi¡ca

Euponc¡¡cl

tránsito

dc

la

alimcntación

cr-

clusivamcnte-

vccetal-

a la

alimcntpción

mixta,

lo

quc

rigni-

fica un ooeto

pioo

dc

¡uma importaocia

cn Ia

trar¡¡forma-

ción

dcl

Áooo'co

hombrc,

EI

cinsumo

dc

carn¿

ofrcció

al

orranismo,

cn forma

ca¡i acabada,

'los

ingrcdicntcl

más

cginciales

para

tu

mctaboli¡mo.

Con cllo

acortó

cl

procc.so

dc

la diccitión

v

otro¡

procc$os

dc

la vida vcgctativa

del

organirmi

(c¡

dclir,

los

pioccror análogor

a

los

dc la vida

ric

los- vegctalir), ahoirandó

arf

ücmpo,

materiales

y

estfmulos

11

J.i

*on" Jste

dcsarrollo

no ccsa

ni micho

menos'

sino

tilre

continúa,

en distinto

grado y

en

diStintas

dirtccicines

crltre

los distintos

pueblos

y

en

las difercntes

épocas,

nterrun¡pi-

do inclusoa

veces

por

regresiones

c carácter

ocal o

ttm-

porat,p.ro

a"urrranio

cn

Ju conjunto

a

granddi paicis,'consi-

ierablirnentc

mpulsado

y, a la vez;orientado*en

n sentldo

¡nás ireciso

po,

un

nuevb

elemento

quc surgc

con- a

ad¡i'ri-

ción

el lrombreacabado:a socie.da{,,

"

'

Seguramcnte

ubieron

de

pasar

ccntenares

e

miles

de

¿ños

que

en

la

historia

de

Tierra

tienen

menos

mFor-

tancia

qie

un

segundo

en la vida

de un

hombre*-

antes

de

que

Ía

sociedaá

umana

surgiesc

e aqucllas

manadas

de

n,orio,

qu. trcpaban

por los árboles.

Pero,

al fin

y

al

cabo,

sureió. Y

qué

cs

lo

que

volvemos

a encontrar

como

stgno

disi intiv-o

nirc

la manada

de monos

y

la

sociedad

umana?

Oi;;

;; il trabajo.

La n¡anada

de m'onos

e

contentaba

con

devorar

os

alimintos

de

un área

que dcterminaban

as

con-

dicionc¡seosráficas

la

resistencia

e

las

manadas

ecinas'

l 'rasladáÉasi de un lugar a otro y cntablaba h¡chas co n

otras

manada$

Para

coñquistar

nuevas

zonas

de

alimcnta-

ción:

pero

era

incapaz

de

extracr

de

estas

onas

más

de

lo

,ru.

ju

naturaleza

Éuenamente

e ofrccía,

si exceptuamos

a

ricción nconsciente

e

la

manada,

al

abonar

el

suelo

cor¡

sü s

excrementos.

uando

ueron

ocupadas

odas

as zonas

capa-

-l

s, Wlf iam' lhomson,

aulo¡ idad

dc pr imcr

ordcn

cn

ta

matcr i i '

,alculó- 'quc

i iu

t i .bido

transcurr ir

poco

^át.de

c ien

.mil lo¡et

dc

añot

clcsdrcl 'momcnto

cn

quc la Tier la

sc

cnfr ió

lo ¡uf lcicntc

Para

quc cf¡

cl la

pudirran vivir

las

i lantas

y

los anirnalcs"

Nota

dt

En$b.)

r0

3

il

li

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Dara eue ¡rudiera

manifestarsc

activamentc

la

vida

propia-

inentc'animal.

Y cuanto

más

se

aicjaba

cl

hornbre

en for-

;;;i¿"

del

reino

vegetal,

más

sc

elevaba

s-obre

os

animales'

bi lu

^it-"

manerá

que el

hábito

a la

alimentación

rnixta

.oit"i.ti,¡,

il

gato y al

icrro

salvajcs

cn-

servidores

del

hom-

brc,

así

tamb"iéo

ét

¡¿6ito

a

combi¡rar

a

carne

con

la dieta

".u.tut

contribuyó

pocierosamente dar

fuerza

ff¡ica

e

in-

diie"¿.".¡a

al

hoÁb.e

cn

formacién'

Pero

doudc

¡ná¡ se

"ránifc¡té

Ia

influencia

dc la dieta

clrnea

fue

en el

cerebro,

quc recibió así cn mucha mayg.rcantidad quc antes as sub¡-

thncias

nccesarias

para su

álimentación

-

y

dcrarrollo'

con

lo

que

su

pcrfccciónamiento

fue

haciéndósc

mayor

y más

rá¡riio dc

gcneración

cn

gcneración'

Dcbemos

reconocir

*v

petdonétt

os señores

vJgetarianos-

que no

há sido

si¡r

cl 'cónsumo

de

la carne

como

el

hombre ha llegado

a

ser

bombrc:

y

cl

hecho

de

que,

cn

una u otra

época

de

Ia

historia' áe

todos los

pücblos

conocidos,

cl emplco

dc

la carrtc en

la

alimentáción

haya llcvado

al

canibalismo

(aun

cn el

siglo

X, los

antcpasados

dc

los

berlineses,

io¡ velctabos o-vilzes,

solían

dcvorar

a

sur¡

progenitorcs)

es

Lrna cucstión qtrc no ticne hoy Para nosotros la menor

importancia.

'El

con¡umo

de

carne cn

la alimentación

rignificó

dos

nucvo¡ravances

dc importancia

dccisiva:

cl

uso dcl

fuego

y

la

domesticación

c

animalcs.

El

primero

rcdujo

aun

má¡ el

Droccro c

la

disestión.

va

que pcrmitla

llcvar a

la

boca comi-

ia,

.o-o

ci dijé-ramor,'árcdio

igerida;

cl

rcgun4o

multiPlicó

la¡ rc¡er"¿as e

carne,

pues

ahora, a

la

par

con la

caza, otre-

cf¿

una

nucva

fuentc

bata

obtencrla

en

fonna más

regular

.y

proporciónó,

con

la-lcchc

y

rur.icrivadol,

ua

nucvo

ali-

'mento,

quc

cn

cuanto a

composición cra

Por

lo

menos

dcl

rnismo vilot qu. la carnc. Ail, pues, c¡toi do¡ adclantos se

convirticron dircctamente

para

el

hombrc

cn nu€vog

me-

dios de emancipación.

No

irodemos

dctcneraoe

aquf

a exa-

misar

cn

dctallc

sus consccucncia¡

ndircctas,

a

pcrar

de

toda la importancia

que

hayan

podido tcncr

para

cl desa-

rrollo

dcl

hombre

y

de la

socicdad,

pucr

tal cxa¡nen

no8

apartarfa

demasiadode

nucstro

tcma.

'

El

l¡ombrc,

quc

hibfa aprcndido

a

com€r todo

lo comcs-

tibil.'aprcndió

támbién. de

ia misma

manera, a

vivir

cn cual-

,üüi;i'ttiñá:"SJ-Jii.ilió

por-tódá

la"iüpirficic

habit¡blc

de

la Ticrra,

¡icndo

cl único animal ,"p*

de

haccrlci

por

t2

il.'r*.iül¡u[-á;-¿¡tqTión

én

mlsmo

8e

olvcr8ulcauil

y

Pc¡¡EL ¡vucva

--

D-:--.:--;-

-i

ccneracién

extc¡diéndosc

cada

Yc¡

a nucva

act¡Y¡caocE'

\

il-.;;;l"l*i¿.¡a

vino

a

Eumarsc.

a.agricultura'

y

;á";;,í"

iin¡i"áo

y

cl

tcjido'

-cl-

trabajo

dc

los

-",tu1,1:

la alfareríav la rru".gi.ió*-Ál'ládo

del'courcrcio

.de

los

oficios

aoarécicron, inalmente, las a¡tet y lal ctcncra¡;qc

ffilidí;;ji;;-6;;;ñer'v

lor

Estalios'

c

dcearrolla-

ñ:i

üer-

l;l;

PJlii;;,

i

óo"

clros

l

rerlcjq

antá¡tict¡

dc

la¡

cosas

huúranas

en

cl

ccrcbro

del

ho¡nbrc:

la

rclrglon.

fiant.

t to¿"t

estar

crcacion€lr

que

se.

lanifcstaban

cn

Prr-

mcr término

"o-o

prodoitot d.f

ccrcbro

y

parccfan

domi-

"ii

t"t

¡ocicdadcr

f,umanáu,

las

produccionc¡

má¡

modclta

¿i'ri

-i"o,-aucdaton'tLgidas

i

rcgundo-plano'

""P

-{'

cuanto

quc'ú

una

fa¡c

rnuy

tempraPa

4cl

dctarrouo

o

ü;;"á; t*t A.-plt: i;

t"

fa

fa¡r¡ilia

primitiva)'

la

cabczequc pl¿nifiábtcl trabajo cra

ya ca;pu-o'e

oDlrgar

"

-aooi

aitina¡

a realizar cl trabaio

-Proycq ¿qq

por

,ctr?'

El

rápido

frogrcro

dc.la

civilización

fue

atr¡burdo

clcluÜr-

r"rr,.it"

a

a

ábc"a,

al-ác¡atrollo

y

a la

actividad

dd

ccrc-

bro.

L"l

hombrc¡

rc

acoatumbrarotr

crplicar

rur.

¡ctgt

Por

¡u

ptnsamicntó;'en

úgar'

dc

buccar'etta

-cr'pt1919¡9T,.93.

9

nccbidadc¡

(rcflciadáí,

naturaluentct

9

11

cabcaa

dcl

nom-

ffi:fi;

JtHüru;ñül;ilt*).

^l"t

ruc

cómo,

on.cl

;;ril;hli=iñ-p",

i*i¡ó

d¡a

cénLcpción

dcalbta

dcl

;;;;';;.-ü

iáÁíü¿"

iiicrcbro

dc

1o¡

hombrcq

obrc

ü;;.Uü

d;*p;;t"¡ón-clel

¡nundo

antiguo,

quc toda-

13

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8/11/2019 F. Engels - El Papel del Trabajo en la Transformacion del Mono en Hombre..pdf

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vía lo

¡isue

dominando

asta

l

punto.dc

que

r¡cluso

l'r1'ür¡Ji,i'd;"ü'**;"la

darwinidna

már

afega{qc

al

3a;

iüiiit*o

son

aún

incapaccs

dc

formar¡c

usa

idea

dara

l.'it.i'i.r-áiisd

¿"i

li-¡i.,

Pues

c8a

Tit-"

influcr¡cia

'tliiigül'

r

J'''ifii¡¿-.

"'

;-P;b'i

-úc-p'a"ao

aquf

orcl

trabajo.

Los animales,

como

ya

hcmo¡

i¡dicado

dc

pasada

también

modifican

con

5u

actiiidad

la

natu¡alcza

cxterror'.aunquc

no ." cl

mismo

grado.

que cl

,hombrc;

y

Ítut

moÜl¡cacro-

;;t;";";;;-p"or clloi en cl medio ambicute rcpcrcutcn'

co¡no

he¡nos

urr,o,

.r,

sus

originadorcs,

-

modificándolo¡-

a

]J.'lr.'il;

;;il"ü"-;da

ücurrc

n'forma

iclada'

a'

da fenómcno

afccta

a

otro

y Q8'

a

-6u

vcz,

inllucncraüo

Por

éstc:ve¡gcncra lmcnteelo lv idode-estcmovrmrentoy,oc

.rii'iát.*J.ión

universal

lo

quc

impidc

a

nue¡tros

naturalts-

ff;;;;íbi;.o"-.roti¿ü

iJ.*"i

má's

impler'

Ya

hc"lor

vistó

cómo

las

cabra¡

han

impedido-

a

rcpoblaclÓo

d€

lot

bosqucs

cn

Grecia;

cn

Santa

Elena,

las

cabrar.y

los

ceroot

descmbarcados

po-r

los

primeros

navcgantes

llegadot

a

.ta

isla cxtcrmina¡on

casi

por complcto

la

Ycgetaclon

alll,trrt-

tente. con Io quc prepararon cl sudo Para quc puürcran

multíplicar¡c

üs

plintas

llevada¡

más

tardc-

Ixlr-

otros

na-

;;;;t* ;

;loniiadores.

Pcro

la

influencia

duradera

dc

los

;;?;;i;;

"oui"-lu

"uturaleza

quc

los

rodca

cs

**P 11:

mente

involuntaria

y

constituyc,

or

lo

qu€

a

lo3

,an¡T¡alec

se rcficrc.

ün

hecho

accidental.

Pcro

cuanto

mác

lo-E

hoT-

;;J.;';i.ü;

d;'i;';;ñilis,

*ás

adsuicrc

u

influcncia

sobrc

Ia

náturalcza

el

caráctcr

dc

una

acción

rntcDclooat

y

ri"r¡f¡*ái

cuvo

fin

.t-iottut

objctivos

proyectador

dc

an-

i**urto.

Los

animalcs

dcstrozan

la-

vcgctación

dc

un

¡u-gar

;il;;;;";enta

de

l"

Á;.

haccn'

Los-hombrcs:

glt

tl-big'

cuando dcstruyen la vegctación--lohaccn con cl lrn dc url-

i;;;;

*p.rii.i"

quc-heda

librc

para

scmbrar

cercalcr'

"i"it",

"rU[fl,

o-.rlii""r'la

vid,

conscicr¡te-s

e-que

a

cosccha

i,rc ubtcnran

supcrará

varias veces

o

¡embrado

por cuot'

l' I

liombrc

tñslada

dc

un

país a

otro

plantas

útilcs.

y

¡rn¡malcg

domésticos,

modificando

así

la

flora

y

Ia

fauna

de contlben-

;;-;;i;;;;.

M¿t

u'i";

tar

plantac

I

los

animalcs'-.cultiva-

¡; ;;¿ii* v

criadl¡

-ésto's

por nicdio

dc,

procedimicntor

artif icialcs,

súf

en

tales

modificacioncs

-

bajo

.la

lnllucr¡cla

de

la mano

del

hombrc

quc se

vuelvcn

irreconoctblcl'

H;;

d;;"á¡u

"o

-Lu"-

ti¿o'

hallados

aún

io¡

antcpasadoc

I4

silvestres

dc

nuestros

cultivos

cerc4listas'

Aun

no

ha

-ii"

liit.lü

la cucstién

Jt

saber

cuál

es

el

animal

c¡r'c

ha

áJo-

á;g*"

a

nuestros

Perros

actuales,

lan

distintos

unos

de otros.

o

a

las

n.t*t'.i

razas

de

caballos'

también

tan

numerosas.

"-'p"t

l":¿emás,

de

suyo

se

comprendc

qr¡e no

ter¡emos

a

i"t*t¡¿"

¿"

*tát

a

toi

animaleJ

a

facultad

dc

actuar

en

il;*;';i";tif¡."it,

¿.

"n

-¡nodo

prcmeditado'

Por

-cl

con-

;;;il. I;;;il dlu"irü¿i

cxisti

cn

sermen

ondequiera

;;;';i ptoioplut.i" -la

albúmina

viv.a-

exista

v

rcaccrone'

es decir,

realicc

¿.t.rnii,,uáos

movi¡niento'' u"tótt sean os

más

simr¡les,

.n

..rpu.ti;-;

"-&ñinados

cslímulos

del

il;t i";: 't;ü

t.".. ioti

se

produce,

no.digamos

yu

9?

l1

tf :

ir.ü';;ñ;a

sino

incluso

cuando-

aún.

no

hay

célula

d.c

ffiil;;'.i""1.

al

u.to-meüante

l

cual

as

planras

nsectí-

voras se

apoderan

de-

su

Presa

aParecc

ambién'

hasta

.cicr-

io"o'rltui,-íoñ"'""

".t"

pünificaáo'

aunqu.c

sc realice

de

un

;"á;";i"il."t.

i".o"tiiente'

La

faculiád

de

realizar

actos

ii"tilui.i'7;i";iii;ñ

se

desarroll¡

en

los

animalcs

n

correspondencra

on

ei-detarrotlo

del

sistema

nervioso'-

ffi;til;';;

ü;

*u*ri.tot

un

nivel

bastante

clcvado'

b;iIai." Á'rii" iáir"." ái la eorra.puede bscrvarsc iem-

í*

ii'i'"ilu¡ili¿.¿"*"

qutettu

utiiiza

su

perfecto

conoci-

ilil;;;l-

i.;ñ

para

&ultarse

sus.P.'i:q"i1::3:.".v,11

bian

qu.

cond.e

y

sabe

aProvechar

odas

as

ventaJa$

el

#;;i-

;;'á.tp1tt*i*.

-

bntre

nut¡tro'i

animalcs

d-omésti-

ü

.ñ.fi;

üüA;ü;;

srado

más

alto

de

dcsarrollo

gra-

cias

a

su

"orruruana,u'

o""el

hornbrc',pueden

bservarsc

¿il't¡"

".t"t

de

astucil,

iquiparablis

a

los

de

los

niños'

-pucs

ilTffi;;;;fá;;;;"iü

áel

ernbrión

humano

en

cl

claus-

tro

materno

c$

una';;t;itió"

abrcviada

de

toda

la

hislc-

ili

ü;t"ll"-iñitt"tg"üo

a

través

dc

rñilloncs

dc

años

;;;.;t,* *t.potuiot-3ii-tti"o ani.m1l, p-artir 1:l^*:

n*;

i:,r'tlg' jff ;;",liifi

'r:f

i,llx"::':ff':

il:;

;$;;t;;;

át'ttputodo*,

cn.

todo

caso

dc

los

menos

rcmotos.

ero

ni

u"

l"io'.lil-pti,"iii.uao

de-

ingún

aniu¡al

ü;;ft;

i*pti*it

.ii-t"

"itütottt"

cl

sello

de

su

volun-

i"al5li"

.t

tiémbre

a

podido

acerlo'

*ffi

u'*wi-,+mqHl

5

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8/11/2019 F. Engels - El Papel del Trabajo en la Transformacion del Mono en Hombre..pdf

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naturaleza

y

la

obliga

así

a

servi¡l

e'

la.domina'

Y ésta

es '

;"¿i;;

i'nstancia,-la

álf.r.tt.ia

ciencial

que

é:iistc*cntrc

;i

il;ü.'y

ü*-

¿it¿s

auimalcs'

difercncia

que'

una

vc-z

-¿r,-"ii".

á scr

cfecto

del

trabajo"'

,

"'-Si"."t¡"rgo'

no

ttot

dt¡t*oS-llcvar

del

,cntusiasmo

ntc

Ias

victorias

det

hombrc

sobic

la

naturalcza'

Dcspués

de

cada

una

de

estas

ictorias,

u

-Jitoiáf

t"a

toma

t

t:igiY.i':j,t^1

i,.

";;"d

;,"i-i*

ptí-ttas

con¡¡€cucncias

c

cstas

Ytctor¡¿u¡

;"'H;;.iitu*

pó,

ttoiottot,

Pcro

c¡r

::-ry"do

v

en

tercer

lugar apareccnunas .o*ituto"i* muy distintas' imprevirtas

y que,

a

mcnuclo'

u"u'tun

iut

primcrai',L-o¡

hombres

que

en

fu:';:,ü#i;;-ó;;i;;'ilio

Mc"o'

v.

otras

rcsiones

aleban

lcs

bosgucs

ur"

o.ott"ti-;;t;;;-J;

Íabor'

ni

riquiera

,P?|ii

imaginarsc

uc'

at

..'i-ittot

con

los

booques

os

centros

de

acumulación

r.r","f'a'J'it¡-t¿u¿'

csfaban

scntando

ac

ba¡c¡

dc

la

actual

u,'dl'11

esas

icrras'

I'os

italianos

dc

los

iG;'

il;;;i;;;".t;-l"t

lutttot

mcridionalcs

os

bosquer

dc

pinos,

conscrvactos

on

tattto

cclo

cn

las

ladcras

scptcri-

trionales,

Do

tcnlan

,d;;

d;q;;

con

cllo-

destrulan

as

ral.

cc¡

dc

la

industria

lechcra

e-n

su

rcgión;

y' inucho

t111:

*dfi ;;.;;ñ;;;aip'ocede' asl' déjaban a mavorpartc

dcl

año

$tn

ag'ua

sus'fucntes

dc

moritlFa'

cou

lo.quc les

;;.itá.;

;l-il.su.

ir-piij"áo

dc.las

lluvias'

vomitar

con

ffii;';ui;ñ;i"

';

ío;;;;i;'

sobrc.la

planicic'

os

sue

iiffidic;il.i

.tñi"o

¿t

ia

patata-en

Europa

no

sabían

uc

ü'iffi

t-ubé*"|"

i"tiitt".?iiu"¿iu"

ala-vez

a

cscrofulo-

;;:

A;i

i-ti¿u

puto,-lJt

bcchos

nos

recuerdan

quc

nues'

iiü

á""ii"'¡"-robr.'lu

naturalcza

o_

e

parece

n

nada

al do-

iltt*;;;

-

cooquittatti;

to¡tc

tt

Pycblo

con'quis

ado',

quc

i"'it

J-¿"*inio

hc

iiguien

situado-

ucra

de

la

naturaleza'

;i,oil;

"átóltot,

por ñucstra

carne'

nr¡cstra

saogre

y nues-

tro cercbro,Pcrtcnecenos la naturalcza'noge¡rconiramog

;

J;;;;;

v'todo

,,uJJl'o

J*oi"io

sobrc

Jla

consiste r'¡quc,

l"¿i?"iü.lí

á.

i"t

ái*¿t

seres'

somos

capaces

le

conocer

;;i-.y*

tec

aplicarlas

decuadamente'.

--

En

efccto,

uou

cii-ufr.;J.-o8

a.comprcnder

mejor.las

wJii'ü

ilü;i;

v;

tooottt

tanto

loi

cfcctog

nmqdig-

l;í-;o;;1;.á*.tutíti*

remotas

de.nuestrd

ntromisión

ca

cl

curso

natural

d;;;;;;ti;'

foblc

tod¡¡

dcspués

lc

loa

grandca

progrtuo,-

ost;Aát

to

cstc

siglo

por

las

Cien-

*;Jffi"

al

margcn:

Ennobtccimicnto".lV'

de

la

Edit')

16

cias

Naturalcs'

no

hallamos

en

c$nclicioncs

' r

pr€v€r'

y'

ffi

ü''o,

¡;

controlar

cada

vca

mejor

las

rcr¡¡otas

consc-

cucnciag

atu¡arcr

""'Lo""iiof

ac-tos

Cn

la

producción,

-por

io"'á.fitTiJü

*¿t

totricntes'

Y

¡uanto

má¡

sca

csto

una

;;"lT¡;á;

ho

hóml¡to

-n¡

sólo

scnt¡rán

dc

Tucvo

v

cn

crc-

ffii;;";ü

tu

u"i¿o¿-"*

la

naturalcza.'

ino

la

-comprcn-

ffiil

trá";;

*¿"-üi""i.uiuli

¡crá.c¡a

dca

absurda

.anti-

ili"i"i-t'rá'ütttoit

;;i;;i

cspíritu

la

materia'

l'hom-

#;;-i"-;.ü;;"i

.rá-i

v

cl

cuerpo'

dta

quc

cmpicza'a

;if"d#;;;'-Ñ6;;;ú ác la.ücáadcncia

dc

la

anti-

rüedad

clásica

V

qu.

o¿qui*

iu máximodcscnvolvimicnto

én

ct

crisüanitmo'

"",f"rl.-i-l-*

tido

prccisor

nilcs

dc

añol.

para

qoc el

hom-

urr'"ñl"ii*-

*

.i.*o

grado

a

.Pr.cYc.r

as

rcmotae

consc-

il";í;;ñ;ñ

dc

sui

actor

dirigido¡.

a

la

producción'

-:,iño=-¿t

te

co¡tó

aprcndcr

a

calcular

-las

rcmotas

cougc-

ñü;;c¡i¡;n"

;;;;;mos

actos'

Ya

hcmos

hablado

;t;b,;;;

ia

patita-v

dc

aus

co¡uccucncias

n

cuanto

a

la

difusión

1"

u

.,.ioiioJi'

ptto

¿qué.importancia'puede

;il;il;*f"lot¡t.Jlr,pttuá"

to"

ioi

c{c.cto1

uc.sobrc

as

ffi;itcñ# i;;¡; á. lL

*"'"'

dÍl

pueblo

dc

paíscs

cnte-

ff il-ffi d;t r; r¡¿'"iiTt -¡;-1 ;i.i" dc los frab ad-o^r:f

a

rimpler

patatas,

oo

ii

hi*Urc

quc

sc

cxtendió

cn.

8{7

oor

lrlanda

"

.o*a.o""ia

de

una'cnf.crmedad

c .estc

u-

ffiJi;;;';

ü;;-;ü-'"-b;

a

un

millón

v

o-blig{

a emi-

it"i-"riJ"¿1t

et

océano

a-otros

do¡

milloncs

dc

irlandcses

:;; ;';til;i^¡."

iitt*ivamcntc

o

Íasi

cxclusivarncntc

il"*lJ;'i'-ütuolo

ñ;;;bqq

aprendicron

a destilar

cl

f"#;iX''iq;;;:.'i;'

3*''io

*n:u1

qr'rc

abÍan

crcado

una

de

la¡

armas

ptt"tip"fo

tol

eL*

labria

dc

¡cr

cxtcrmi-

#e"-i"

;"ül-.i¿"'

l"¿iü*na

dcl

-iontinente

americano'

aun

desconocido "qu.i-"""ü"t"t'-

y

cuando

Colón

dcscubrió

más ardeAmérica, " ;;bi; q;lt ¿ la.t'cz dabanucvavida

;'il

&i;"'iúA--e¿;;*;ida'dcsdc.

hacla

mucho

ticmpo

;" d;;p"Jl.oto¡i'lu^s*--¡**t

¿t-l-l- t+tu

dc

ncgros'

Lor

homt¡ret

uc

€n

rol

riglos

XViI

y

XVIII

trabajaron

Para

'#;ü*';ói;;

;;

;;P"t,

no

sospbchaban,q

c

cstaban

rc

ao-

do

un

instr¡Ercnto

i;'h;btf"-d-e

rcvolúcionar'

már

quc

nintrún

otro,

las

.o"áit"io""t

-tociátes

cn,

odo

cl

mundo'

y

liiiillliui.'üái"-E"iopu,

al

conccntrar

a

riq-ucz1

n

mar¡oE

lü"til"it-li*i.t.l

;;ffir

dc

toda

propicdad

a

la

inmcnsa

il"ñ,i*lil

tu

óur;.ir'ii'l

T"ü'l;-¿;

iroiorcio*ar

p imcro

L7

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dominio

social

y

político

a-la

burgucsía.y

provocar-de-spués

i;l;;ñ

áL

.lut'*s'cttrc

la

burgucr'ia

v

cl-pioletariado,

lucha

;;;-t¡i;

puedc

terminar

con

eI derrocamiento

e

Ia

burgue-

r-ti

"

l"

iboli.iót

de

todos

los

antagon-i¡mos

e

clasc'

fero

t"^ú¡i"

iqul,

uptot.chando

una

expc-riencia

arga,

y a

vc-

..r'*-".t,

iónfróntando

y

analizandó

19:

materiales

proP'or,-

cionados'por

la

historia,

vam.os.

prendiendo

Poto,

o-ltt::

conoccr

lis

consecuencias

ociales

ndircctas

y mal.

r€motas

á. nuestrosactosen la producción, o que nos Pcrmlte exten-

J*,

ir*Ui¿"

a estas

consccuencias

uestro

dominio

y nuestro

control,

 

Si" embargo,

para

llevar

a cabo

este con-trol

se

requiere

"f*J"*át--q"?-'Jt

simplc

conocimiento'

Flacc

falta

una

r.?"lt.ii"

".iu-.

-it^"tfé.-t

Por

compleio

el

modo

d9

;ililid;

..ú.;i;

i';;t"

h"i

día

v,

con

é1,

l

orden

ocial

itttii:;,

los

modos

de

producción.que.han

exis(rdo

¡a-sta

l

or.r."i.

,¿ü

ü"t.oU*

Jl cfecto

útil'del

trabajo

e¡r

su

forma

";;i l ;;.;i ;.

i"*.¿i"ü'-Ño-t'ui iu"

el

menór

caso

de

la s

.sosecucncias emotasnque sólo aPar€cen

más

tarde

y. cuyo

;;;ü;;-;;;ifiesta

'iniéamentc.giacias

a un

Proceso

de

¡e;

i.ii.i¿" ;';;;;i;.i¿;-li"á''li

ra

primitiva

propiedad

i"Á"""f

áe

la

tierra

corréspondía,

or

un.lado,

un.

estado

;;'¡;;ilú;-de

los

tror"urés

n

cl

luc

el

horizontc

c

éstos

ü;;ü'iilt;J";-;".;i;

si"cral'

a'las

cosas

más

rrmedia'

tas,

y

Presuponru,

oi

ottü

l"do,

cierto

excedente

c

tierras

librcs,

qucolrecta

t.tt"

-"igtn'Par,a

neutralizar

os

posibles

;;rdtid;,

adversos

e

csta

Jconomía

rimitiva.

Al

agotarse

;i";;;;;t.

¿.

ti"ti^'t

-lt6ist'

tomtn'E

la

decadencia

le

a

ñ"ptil;';;."t"1.

To¿ts

las

forma¡

más

elev¿clas'de

ro-

ducción u" u,n,.ro,i-dd;¡;

ctndujeron,

Ia

división

dc

la

población . clases iiii*"i.r y, por. anto,al antagonismo

;;#"ü;';i;' it

-áo*i"""tes.

v

las

óprimidas;

er.o

on

cllo'

i;;';;;.*t

¿i

l"t

ciuses

é*ittantes

se

convirtieron

en

el

;i;#il;;oputtot

de

Ia

producción'

n.cuanto

ésta

no

se

limitaba

a

mantener-iitt'g"t.;al

Ia

mlsera

existencia

lc

i;;";;;;d;r.

oo"it-"tio

iralla

su

.expresión

ás

acabada

;r".í;I;;i,

¿i

p*¿-tttion-iipitalist"

ouc nrevalecc

ov

;,

i;

i;';;;;

o..iá."i"1'-tos

Jpitit¡tar'

individuales'

ue

dominan

a

proouctlii'i'tf

t^-¡io'

sólo-pgq{en

cuparse

e

i;;iliñ-J'*¿,

in,"t¿ítta

de

sus

actos'

Más

aún;

incluso

esta

nisma

rt'l'dud':P;;tttá"io

se

trata

de

la

utilidad

de

18

l¿ mercancía

producida

o cambiada-

PasaPor

complcto

a

segundo

plano, apareciendo

omo único incentivo

la

ganan-

cia obtenida

en a

venta.

.+

La ciencia

social

de

la burguesía,

la

Economía

politica

clásica,

ólo

se

ocupa

prefcrcntemenie

e

aquellas.

onsecuen-

cias

sociales

que constituyen

cl

qbjetivo

inmediato de

los

actos realizadospor los hombres en la producción y el cam-

bio. Esto

corresponde

plenamente-

l régimen

social cuya.

ex-

prcsión

teórica

es esá

ciencia.

Por cuanto

los capital istas

^producen

o cambian.con

el únlco

fin de

obtener beneficios'

inmediatos,

sólo

pueden

ser icnidos

en cuenta,

primera-

mente,

los

resultádos

más

próximos

y

rnás

inmediatos,

Cuando

un

industrial o

un eomcrciantc

vende la

mercancia

producida

o

comprada

por

él

y

obtiene

a

gananciahabitual,

ie

da

por

satisfelho

y

no le

intercsa Io

más

mínimo

lo

quc

pueda'ocurrir

después

on

esa mcrcancía

y

su

comprador.

isuat

ocurrc

con

lás

consecuencias

aturalcs

de esas

mismas

aicic,nes. uando en Cr¡ba os plantadoresespañcles uerna-

ban

los

bosques

n las

laderas

de

las montaiias

para obtener

con

Ia ccniáa

un

aboao

qtre

sólo les

alcanzaba

Para

ferti l i-

zat

una

Reneración

e

cafetos

de

aito rendimicnttl,

¡poco

cs

importabá

que

las l luvias

torrenciales

e

los trópicos

¡arrie-

reá.lu

.apa'vcgetal

del

suelo,

privada de

la

protección

d*os

árboles,

y

no

dejasen

ras

sí más

quc rocas

desnudas

uo n

el

actual-modo

dc

producción,

y por-lo

que

rcspecta

anto

a

las

consecuencias

aturales

como

a

las consecuenctas

octa-

les

lde

los

actos

realieados

por

los

hombres,

-lo

que interesa

preferente¡ncntc

on sólo

lós

primcros

rcsultados,

os

rtás

ialpablcs. Y lucgo hastase n¡inifiesta extrañcza le que las

loniecue¡rcias

ei¡otas

de las

acciones

que

Perseguían

so s

fines

resulten

ser

muv

distintas

y,

en

la

nrayoría

de

los

ca -

sos,

hasta

diametralm'entc

puesta$;

c

que

la armonía

entre

la

oferta

y

la

demanda

se-convierta

cn

su

antípoda,

como

nos lo cieÁuestra

el

curso de

cada

uno

dc

esos

ciclos

indus-

trialcs dc dicz

años,

y

como

ha

podido convcnccrsc

c

cllo

Alemania

que

con

el'"crac"

ha

vivido

un

pcqucño

preludio

dc cllo; dc

quc

la

propicdad

privada basada

cn

el trabajo

de uno'mi¡m'o sc

conviirta

ncicsariamcntc,

al

desarrollarse,

en la

detposcsión

de

los

trabajadores

de

toda

propiedad'

19

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rllientra$

toda

la

riqueza

se

conccntra

mir

y r¡ás

tn

ruanos

;;

ñ;

q;"

no

irabaján;

dc

quc

('

'

")+

s

Aqui

lc

inlcrrumpt

cl

¡¡¡¡nurcrito'

20

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