Expresiones culturales entrevistas

1

Click here to load reader

Transcript of Expresiones culturales entrevistas

Page 1: Expresiones culturales entrevistas

Debo aclarar que el siguiente fragmento es el resultado de tres entrevistas

realizadas a tres personas, bajo tres preguntas claves. La primera, ¿Cómo era antes su pueblo?, la segunda, ¿Cómo era la gente?, y por último, ¿Qué ha

cambiado?

Concluí de manera parcial que existe una idea de directa sobre lo negativo de la joven que hoy está en el pueblo; por el respeto, el trabajo y las buenas maneras

como los entrevistados decían. Hace más de 30 años en la comunidad de Puerto López, departamento de Bolívar. No había energía eléctrica, motocicletas o algo

semejantes, era una comunidad apartada que no superaba los 300 habitantes, la mayoría de ellos con vínculos de Sangre, y la única escuela que tenían solo ofrecía educación hasta 5to de primaria.

Era más sencillo vivir, me comentaba con nostalgia Manuel Téllez, entrevistado, y quizás uno de los personajes más jocosos del pueblo, cuando se recuerda que a

sus 79 años tuvo 36 hijos y hoy, más de cuatro decenas de nietos. Se pasaba trabajo como todo decía, pero no había tanto problema como hay ahora.

A esta comunidad le afecto la violencia, la pobreza y quizás la mala fortuna de no

contar con acueducto o por lo menos un puesto de salud. Han cambiado muchas cosas, pero otras tantas aún se resisten, seguramente porque el quehacer

campesino sigue estando presente.

Entre los estereotipos que se mantienen, se pudo constatar que: el sombrero sigue estando presente en toda ocasión, la bigamia y otras formas de relación

afectiva sigue en plena vigencia, como también existe un notorio consentimiento de las mujeres que ya son madres.

Otros elementos como la gastronomía siguen muy latentes, el ponche (catibara o chigüiro) o el galápago (tortuga de rio), siguen haciendo parte del menú familiar, pero cuentan los entrevistados, que esto va para mal, ya no hay tantos peces

como antes en los ríos cercanos, los jóvenes poco amor le toman al trabajo del campo y, aunque ya se cuenta con una escuela de secundaria, los jóvenes no les

es llamativa la educación.

Es difícil entender los cambios me cuenta Omaira Chacón, continua diciéndome, es mejor vivirlo y hasta no darse cuenta de ellos.