Instituto Tecnológico Superior de Misantla

Ingeniería Industrial 601 “B”

Administración del MantenimientoM.C. Moisés Fuentes Rodríguez

Estudio de caso: Volkswagen

P r e s e n t a

Víctor Manuel Lambert Ochoa

Misantla, Ver. A 18 de Abril, 2013

¿Qué es la Volkswagen?

La Volkswagen (VW) es una empresa automotriz alemana, una de las más influyentes de todo

el mundo y de mayor trascendencia a lo largo de la historia. La VW, si bien el día de hoy es una

marca de renombre, como toda empresa tuvo sus altibajos de los cuales ha salido adelante con

empeño e inteligencia. VW, ha sufrido diferentes cambios a lo largo de su historia, al fabricar

automóviles debe de estar siempre a la vanguardia, con innovaciones tanto en sus productos

como en su administración siendo la segunda una de sus fuentes de crecimiento más potentes.

VW ha ido expandiendo su mercado para satisfacer a la diferente gama de clientes, desde su

clásico “escarabajo” hasta el lujoso Bentley.

Volkswagen nace gracias al brillante ingeniero Ferdinand Porshe, nombrado como el ingeniero

automotriz del siglo, grande entre los grandes, motivado por el mismo Hitler a crear un auto

para el pueblo (de ahí el nombre Volks-wagen), cuya idea original con el tiempo se ha borrado

aunque ha dado paso a innovaciones impresionantes. Una de las estrategias que más ha

rendido frutos es expandirse en el mercado adquiriendo compañías como Audi, SEAT, Bentley,

Bugatti, Skoda, Lamborghini, haciéndolas crecer o ayudándole a generar componentes que se

adhieran a la línea de producción del grupo VW. Si bien hoy en día es una de las empresas

más poderosas en todo el mundo esto no fue siempre así, hubo momentos en los que estuvo a

punto de la quiebra, azotada por factores como pésimas administraciones, pérdida de clientes y

el más grave: la segunda guerra mundial.

VW: Cambiando la historia automotriz

Como ya he mencionado antes, fue Ferdinand Porshe quien en 1934 creara un auto pequeño,

eficaz y barato (su mejor característica), que le hacía saber a la clase media-baja que podían

tener su propio vehículo, ya que en aquella época sólo la alta sociedad tenía esa posibilidad.

Gracias a estas cualidades y al creciente mercado que tenía el hermoso escarabajo empezó a

verse real la idea de ser una empresa de clase mundial, lo que llevó a la VW a instalar

armadoras en Brasil e Irlanda en 1950 y en nuestro país en el año de 1964. Uno de los

momentos donde el dulce se torno amargo fue en el año de 1970 debido a la recesión, año en

el cual era más fácil venderle un refrigerador a un esquimal que un auto a un alemán.

Fue el año de 1990 donde se vio claro que la empresa estaba en declive, pero también

encontró la luz al final del túnel. Dicha luz tiene nombre: Piëch. Piëch fue extensamente

reconocido en la industria como una mente maestra quien había logrado exitosamente

reposicionar a la Audi como una empresa líder en tecnología, la pregunta que se hacían todas

los medios de comunicación era si tendría la capacidad de reposicionar a la pobre empresa

Volkswagen dentro del mercado internacional con el sinfín de problemas que debía encarar.

Cierta revista alemana reportó: “La VW está en crisis. Sus ventas son negativas, su sistema de

contabilidad es enredado y los costos fijos se están incrementando más rápido que las ventas”.

Todo esto nos lleva a la idea obvia: la empresa esta arruinada.

A pesar de todo, Piëch nunca perdió la fe en la empresa que le dio alegrías en su pasado con

la Audi a lo que respondió: “Nosotros no hicimos nuestra tarea y tenemos que ponernos al día

en un tiempo record”. Esto fue una bocanada de aire para una empresa en crisis, que 8 años

después de la llegada de su salvador (2001) logró obtener las mejores ganancias de la

empresa en toda su historia.

Resurgiendo como ave fénix

El plan de recuperación que estableció Piëch se basaba en muchos puntos, desde evitar costos

de inversión hasta una de las más importantes: racionar la producción de diferentes modelos.

Algo que he tenido el gusto de leer de los inicios de la VW, es precisamente sobre modelos. Su

fundador, Ferdinand Porshe, detestaba la idea de sacar anualmente un auto al mercado, ya

que en realidad era el mismo auto con ligeros cambios estéticos y un aumento considerable en

el precio. Él tenía la respetable idea de crear un auto confiable, económico y de calidad que el

cliente disfrutara y adoptara como parte de su estilo de vida. Porshe dijo que prefería producir

un solo modelo de auto en toda su vida (en este caso sería el famoso escarabajo) que engañar

a los clientes con mercadotecnia barata. Esta idea fue en parte retomada por Piëch ya que se

dio cuenta de que producir una amplia gama de autos si bien no era mala idea, en el momento

crítico en el que se encontraba la empresa podría incurrir en costos de desarrollo, algo que no

se podían permitir.

Así, después de un arduo trabajo de años, el grupo Volkswagen logró incluso mejorar su

nombre en mercado internacional de la mano de Piëch, generando ventas millonarias alrededor

del globo, olvidándose de aquella mala racha que había ya quedado en el pasado.

¿Qué le espera a la Volkswagen?

Actualmente, el mercado automotriz se ha vuelto extremadamente competitivo. Esto exige a

cualquier compañía una fuerte dedicación en su innovación tecnológica, si bien Piëch estaba

totalmente comprometido con este rubro, ahora todo depende del actual presidente Martin

Winterkorn. Desarrollar autos que satisfagan las necesidades de los usuarios es imprescindible

para continuar con el éxito de esta gran empresa, aunque suene difícil superar los records de

ventas que VW ha tenido en el pasado, el éxito depende a sobremanera de superar cada día

las metas puestas y la mayor competencia somos nosotros mismos.

Valdrá la pena esperar que hará Winterkorn en los años venideros con la empresa y si el

nombramiento como “Man of the year” otorgado por la revista Top Gear fue merecido.

Opiniones

En lo que respecta a la administración de la empresa, han ocurrido errores garrafales a lo largo

de su historia. Bien dicen que quien no la conoce está condenado a repetirla. Algo que deben

tener muy en cuenta los altos mandos del grupo Volkswagen es que la mayoría del éxito de la

empresa ha sido gracias a la producción en el extranjero, incluso mucha de la tecnología usada

actualmente fue desarrollada por personas no propiamente alemanas. Aún así, es bien

conocido que el apoyo a los ingenieros externos es reducido y los puestos disponibles son

limitados. Considerar esto como racismo es posiblemente cierto, lo mejor que se podría hacer

es respetar las ideas de cualquier ingeniero, obrero o cliente y desarrollar autos que se adapten

a nuestro estilo de vida, que no es el mismo que el de 1937 (fundación), ni 1993 ni 2001.

Una de las cosas que debe tener en cuenta la VW es que lo bueno nunca pasa de moda, en lo

personal he considerado a lo largo del tiempo que he estudiado a esta empresa que se han

olvidado de lo que buscaba su creador: un auto para el pueblo (aún estando en su nombre).

Actualmente adquirir un auto nuevo de esta empresa es sólo posible para la clase media-alta, o

corriendo riesgos al adquirirlo a pagos. Lo mejor que podrían hacer es volver a los inicios, crear

un auto económico, que cualquier persona pueda adquirir, que llene las expectativas básicas

de los clientes y sea seguro. Retomar eso que logró hace ya 76 años con el escarabajo, lo que

llevó a la empresa a ser un fuerte competidor mundial y ser el piloto de la economía alemana y

de muchas regiones en el mundo.