España en el mundo

Geografía 2º Bachillerato

IES Alonso de Madrigal

Las desigualdades espaciales del mundo

En el mundo actual existen grandes desigualdades entre diferentes territorios, que suelen simplificarse en dos bloques: países desarrollados y subdesarrollados. Los países desarrollados se sitúan, en su mayoría, en la zona templada del hemisferio norte, por lo que reciben la denominación de Norte (América del Norte, Europa, la CEI y Japón, más Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica, del hemisferio sur). Los países subdesarrollados, llamados también el Sur, son los países de América Latina, el sur de Asia y África.

Los países desarrollados han registrado desde la Primera Revolución Industrial un movimiento expansivo, basado en la explotación de los recursos naturales y humanos, en el control de la tecnología dominante y en el dominio de los intercambios mundiales. Todo ello ha producido un incremento constante en la riqueza y en el bienestar social.Por el contrario los países subdesarrollados han sido desde el siglo XV colonias de los países desarrollados, que impusieron una economía basada en la exportación de materias primas e importación de productos manufacturados. Esta situación se acentuó con la Revolución Industrial y continuó después de la descolonización y se ha consolidado con la actual globalización.

Países desarrollados Países subdesarrollados

Economía

basada en las actividades industriales y de servicios más avanzadas y relacionadas con la innovación tecnológica. Las actividades agrarias tienen poco peso. La renta por habitante es elevada.

mayor peso de la actividades agrarias y menor peso de la industria y servicios. Dentro de cada sector hay fuertes diferencias entre sistemas tradicionales y modernos. Baja renta por habitante.

Población

crecimiento muy reducido por las bajas tasas de natalidad y mortalidad. Fuerte envejecimiento de la población. Elevada inmigración procedente de las zonas más pobres.

crecimiento natural elevado desde mediados del siglo XX por la reducción de la mortalidad y el mantenimiento de una alta natalidad, que ha comenzado a bajar a partir de los 80. Población muy joven. Emigración.

Urbanización

alta: el crecimiento de las ciudades fue parejo al crecimiento económico y en la actualidad la mayor parte de la población vive en ellas, ocupando cada vez mayor espacio.

muy rápida por el crecimiento vegetativo y el éxodo rural, creando extensas periferias urbanas sin las infraestructuras básicas, que contrastan con el centro urbano, donde se concentran las zonas de negocios y residencias de las clases altas.

Países desarrollados Países subdesarrollados

Territorio

Desequilibrios territoriales internos por la tendencia de las actividades económicas más dinámicas a instalarse en un reducido número de espacios. Estas desigualdades tienden a paliarse con políticas de desarrollo regional y local

Profundos desequilibrios territoriales, sin que haya políticas efectivas para remediarlos.

PolíticaLa situación política se caracteriza por una tradición democrática consolidada y por la paz social.

Escasa tradición democrática y frecuencia de regímenes autoritarios

Nivel de vidaAlto nivel de vida que se refleja en el “Estado del bienestar”

Fuerte contraste entre una minoría enriquecida y una mayoría que no tiene cubiertas las necesidades básicas. Bajo nivel de vida.

Los grandes espacios regionales del mundo

Además de estas denominaciones (Norte-Sur, Desarrollo-Subdesarrollo) se utiliza también la de Centro-Periferia, asignándose el término Centro a los espacios centrales dominantes y con capacidad de decisión y Periferia a los espacios periféricos dependientes.

Los espacios centrales son los países de la tríada (Estados Unidos, Unión Europea y Japón), que concentran las actividades de mayor rango relacionadas con la tecnología.

Los espacios periféricos incluyen semiperiferias y periferias. Las semiperiferias son espacios próximos a las grandes potencias que constituyen su área de influencia inmediata (para Estados Unidos lo son los países de América, para la UE el resto de los países de Europa, Rusia y algunas ex colonias africanas; para Japón los países asiáticos y del Pacífico). Las semiperiferias combinan rasgos atrasados y de modernidad que originan fuertes desequilibrios internos; junto a actividades tradicionales reciben industrias difundidas desde los centros y fabrican generalmente artículos de consumo.

Las periferias son principalmente los países del África subsahariana; carecen casi completamente de tecnología y basan su economía en actividades agrarias tradicionales, artesanía elemental y algunos servicios.

El significado espacial de la globalización

El proceso de globalización o mundialización es la creciente interdependencia de los espacios geográficos del planeta en todos los ámbitos: actividad económica, relaciones políticas, sociales y culturales, y las cuestiones medioambientales. Se trata de un proceso multidimensional, en el que están implicados cada vez más territorios del mundo.

Los factores que han favorecido la globalización son:

La mejora de los transportes: facilitan el traslado de mercancías y personas a escala mundial.

El progreso de las comunicaciones: facilita la interrelación de todo tipo a escala planetaria, lo que reduce la influencia de la distancia física y el mundo se convierte en una “aldea global”.La generalización del sistema

capitalista, basado en la propiedad privada, la libre competencia y el objetivo de alcanzar los máximos beneficios.

Extensión de la ideología neoliberal, que hace desaparecer las barreras comerciales y facilita los intercambios mundiales.

La actuación de las empresas multinacionales y de las organizaciones internacionales (OMC, FMI, BM, ONU).

La producción tiende a organizarse a escala mundial, ya que las nuevas tecnologías permiten dividir el proceso de fabricación en fases y localizar cada una de ellas en los espacios más ventajosos; las multinacionales localizan sus filiales en los espacios que ofrecen más ventajas en recursos naturales, mano de obra o mercado de consumo. Las empresas optan por deslocalizar su actividad para incrementar sus beneficios.

El intercambio de mercancías, capitales (inversiones), servicios, información y tecnología se extienden por todo el mundo por la eliminación de las barreras comerciales y el desarrollo del transporte y comunicaciones. Por su parte el consumo tiende a uniformizarse en todo el planeta, pues las grandes empresas difunden determinados gustos y comportamientos a través de la publicidad y de los medios de comunicación.

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Consecuencias de la globalización:

Economíaincrementa las posibilidades de comercio y negocio para las empresas; favorece a las multinacionales en detrimento de las empresas nacionales y pequeñas empresas.

Política

difunde libertades, derechos de la mujer y la democracia; limita la autonomía de los países, que se ven condicionados por instituciones supranacionales y el poder de las multinacionales. Genera inestabilidad en determinadas áreas en las que se imponen gobiernos extremistas.

Sociedad

incrementa el nivel de vida y empleo, pero amenaza las condiciones de trabajo (flexibilidad, inestabilidad, reducción salarial). Difunde avances médicos y sanitarios, pero también problemas como el sida y las redes de delincuencia internacional

Culturadifunde la ciencia, tecnología y cultura, pero provoca la pérdida de la identidad cultural al imponer los valores del mundo occidental.

Medioambiente

facilita la toma de conciencia y los acuerdos internacionales sobre aprovechamiento sostenible de los recursos y problemas medioambientales (efecto invernadero, capa de ozono, deforestación, cambio climático), pero produce un gran impacto ecológico al promover un modelo económico basado en el crecimiento ilimitado de la producción y del consumo.

Internacionalincrementa la integración mundial, pero promueve una división internacional del trabajo que acrecienta las desigualdades entre territorios.

Posición relativa de España en las áreas socioeconómicas y geopolíticas mundiales.

En la actualidad España es una potencia intermedia; ocupa el puesto número 50 por su superficie y el 27 por su población; el idioma español lo hablan más de 400 millones de personas.

Su peso económico viene señalado por su 9ª posición mundial por el PIB en 2008, por la presencia de multinacionales en España, el incremento del comercio y las relaciones financieras con el exterior y el alto grado de liberalización de su economía, frente al intervencionismo de épocas anteriores.

Por el lado negativo hay que señalar la insuficiente internacionalización de las empresas españolas, el déficit del comercio exterior de mercancías y la tecnología, las escasas inversiones en el exterior y la fuerte dependencia energética.

Presencia de multinacionales en España y China

En cuanto a su participación en las instituciones internacionales, España como país desarrollado y dentro de la UE, pertenece a las principales organizaciones tanto políticas (ONU), como económicas (FAO, BM, FMI, OMC), sociales (OIT, OMS), culturales (UNESCO) y militares (OTAN).

La ayuda oficial al desarrollo (AOD) prestada por España se encuentra por debajo de la media de los países donantes (0,37% del PIB en 2007 frente al 0,45%) y muy alejada del objetivo del 0,7%. En su mayoría es una ayuda ligada, mediante créditos FAD, que exigen la adquisición de bienes y servicios españoles por el país receptor. Sus destinatarios no son los países más atrasados, lo que a veces encubre un movimiento de expansión de las empresas españolas.

La situación geoestratégica de la Península, entre dos mares y dos continentes, ha condicionado las líneas geopolíticas prioritarias de España, que se han dirigido hacia Europa, el Mediterráneo y el norte de África y mantiene importantes lazos históricos con Iberoamérica.

El IDH (Índice de Desarrollo Humano) elaborado por la ONU se calcula teniendo en cuenta tres indicadores: el PIB por cabeza, la esperanza de vida y las tasas de alfabetización y matriculación en enseñanzas primaria, secundaria y superior. Cada país recibe una puntuación entre 0 y 1 que marca su nivel de desarrollo humano: alto por encima de 0,8, medio entre 0,5 y 0,8, y bajo por debajo de 0,5. España en 2007 ocupaba el 13º puesto a nivel mundial, con un índice de 0,949.

El IGEI (Índice de Gobierno de la Economía Internacional) mide la legitimidad y capacidad de cada país para participar en el gobierno de la economía mundial; cada país recibe una puntuación de 1 a 10 en cuatro ámbitos: calidad institucional, factores socioculturales, peso e integración en la economía mundial y presencia política en el mundo. En 2008 se calculó el IGEI para 61 países que reunían el 80% de la población y más del 87% del PIB mundial; España, con un índice global de 7,07, ocupó la 9ª posición mundial, por detrás de EE.UU., Reino Unido, Francia, Alemania, Canadá, Italia, Holanda y Japón.