Escrituaria (Libro) Julián Amado

8/17/2019 Escrituaria (Libro) Julián Amado

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JULIÁN ANDRÉS AMADO

Escrituaria


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Poemas y prosa


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JULIÁN AMADO

Escrituaria


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Primera edición: Jaba

Manizales, 2016

Portada: diseño de Julián Andrés Amado

Derechos reservados: 2016, Julián Andrés Amado

Jaba

Manizales, ColombiaImpreso en Colombia


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CONTENIDO

PROLOGO

Comienzo. 13

Noche. 16

Reflexión estética. 18

¿queda algo? 20 Plagio poético. 22

Registro de nacimiento. 24

El analfabeto. 28

Prosa-poesía-relato-desagüe. 30

¿es anhelo? ¿melancolía? 32

Antología de poeta sin palabras. 34

Pasos de vos 36

En algo convertirme, convertirme en algo, 38

Lo ajeno, lo más nuestro. 41

Hoy que el día parece un simulacro de noche, 43

Algo 45


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Gentes del mundo, 48

Espejo, 50

Armario. 53 Ánimo. 56

Un hombre internado. 58

Verde. 61

Manos, 63

Edgardo. 65

Casiopea, hija de los dioses, 69

Angustia. 71

Camino, por bordes, camino, 73

Quiero escribir, 75

Un Ángel, 75

Silencio, 78

Una silla 80

J. Gabriel Ramírez 83

Le extraño 85

18 palabras 88

Un anciano 90

Valeriana 94

Despertar 96 Aura 99


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Espacio quieto 102

No quiero escribir 104

A través de mis ojos, 107

Silencio II 109

Tedio 110

Nunca 113

Una luna 116El amor 118

El valle rojo capital de todo lo olvidado 121

Una mesera 125

Astrónomos 127

Vehículos 129

Tú 134

El día ese 135

Miren 136

Hey Soledad 139

¿A dónde van? 140

Lluvia de espera 141

Una calle 144

Él dijo no 146

Rojo, línea blanca y cruzar 149


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ESCRITUARIA


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PROLOGO

La escrituaria se quiso manifestar así por la necesidad deexpresar y adquirir toda la riqueza pobre que se tieneadentro de la carne y el espíritu. La escrituaria además deser un acto escrito expresado por medio de poesía yprosa, también es un acto militante hacía la vida y lamuerte. Ya que como en la música, la poesía y el arte engeneral lo importante es el sentir manifiesto en la

intención. El sentir manifiesto transmitido a través desensaciones encontradas, así como lo pretende hacer estelibro. Transmitir sensaciones sentidas más allá de loterrenal, más allá del amor, más allá del para todaslas cosas cuyo nombre no lo alcanzan las letras.

J.A.


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Postales para la vida y de la vida misma.


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1COMIENZO

Posiblemente considerará usted que todo escrito debetener una introducción y más cuando se trata de la nueva

forma literaria llamada . Se preguntará usted¿Qué es la ? Yo le respondo. La es la forma literaria en la cual un hombresaca todas las palabras que tiene fluyendo como ríos vivosa través de él, cuando piensa en el personaje que rompióla válvula que sostenía el conjunto de palabras agolpadas

en la presa de su alma. En este sentido creo que ya ledefiní que era la .

Ahora, sé que usted se preguntará por un porqueseguramente, pero no se lo resolveré. Simplemente quieroescribirle el alma, el espíritu y el cuerpo de palabras ollanamente trascribir las palabras que me trasmitió através de sus ojos vueltos llama viva, refugio escondidodel mundo, caparazón abstraído de la luna, sol del frioescrito en la cuna de una estrella que brilla cada vez quese pronuncia algo que se refiera a usted y por supuestoalgo que se refiera a mí con usted.

Le parecerá extraño lo sé, en toda la madrugada le pensé,le afirme, le volví sustantivo propio, común, abstracto ycolectivo. Su figura se dibujaba de modo azaroso, a veces


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parecía que tenía un nombre que atrapaba la magnitud delamor, algunas veces simplemente aparecía sin nombrecruzando por mi sueño siendo yo invisible, ya en lasúltimas veces del tiempo de la madrugada la veíasimplemente como la abstracción más completa quelogrará hacer mi cerebro vuelto llama y viento. Oh mujer,sus palabras hacen retumbar todas las ruinas de misciudades internas, todos los conceptos, vidas, muertes,pensamientos y emociones tiemblan al escuchar su

taladrantes palabras, palabras que cruzan el mar delconsciente y pasan al océano del inconsciente.


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2NOCHE

Llega el tiempo más bello, la noche con su huequitostransparentes titilantes, con las luces de las casas queañoran tiempo para ellas. Llega el tiempo más extenso, sufigura con su piel envuelta en el aura que la caracteriza,con el sol puesto en sus ojos, con la luna puesta en surisa, con la tierra puesta en sus pies, y con sus ojos

vueltos cristal.Nubes de polvo pasaban al frente de nosotros cuandocruzábamos los ríos de gentes que pasaban al lado denuestra compañía envuelta de silencios hambrientos pordestrozar el vacío hecho por la falta de palabras.

No hay nada más adecuado para el momento en el cualpasa la noche que verle reír sin razón, como también verle mirar delicadamente las aves que tanto le apasionan, verle mirar los árboles y el cielo. Eso que hace ustedinspira, me inspira a mí curador de mi alma perdida, melleva a querer saber que piensa el ave que le mira

detenidamente a usted mientras hace su vuelo hecho defiligranas cortas y ancha para impresionarle y merecerle sumirada.


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¿No le incomoda que hable tanto de su mirada y sonrisa? Todo el tiempo hablo de su mirada y sonrisa. ¿Qué puedohacer? Esas dos me han hecho traer la substancia que noconocía, la duración que se escondía por los muros de laciudad y de las personas que caminan en ella. Es increíble, verle siempre es el camino para sacar lo poco bueno quetengo en mí, mi cuerpo salta de alegría al pensar que la vera, todo mi sistema nervioso se prepara para noprepararse, mi área del lenguaje se dispone a sacar

palabras de acuerdo a lo que sienta, mi oído activa todossus mecanismos para agudizar su función y escuchar cadacosa que usted haga. ¿Qué más queda por decirle en estanoche en la cual usted fue testigo de mi inocencia y vida?Queda mucho por decir,


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3REFLEXIÓN ESTÉTICA

Mire que la bossa nova y usted guardan una relaciónespecial de coimplicación, le parecerá extraño, pero tienenrelación. Su ritmo de 2/4 con el acento en el tiempo

débil, con el bajo puesto en los tiempos fuertes, y lasarmonías sofisticadas, con la melodía clara y apasionadahace que quiera bailarme sin querer en ella y en usted.

El tenerla cerca hace que miles de voces quieran salir atrepar sobre todas sus palabras que transitan la calledesordenadamente buscando un lugar para posarse ylevantarse hacia su persona en un retorno casi infinito.¿Sabe usted que le pasa a mis palabras cuando la sientencerca? Le diré, este espacio es para hacer eso. Mispalabras en primer lugar llegan fugadas de pensamientosexpresados en una emoción que no cabe en el gesto físico(no soy muy amigable con mis gestos físicos), después de

hallarse en fuga se agolpan en grupo sobre mi mente yhacen un plantón para exigir que les dé un pasaporte para


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salir de ahí de donde están conviviendodesordenadamente con otras igual que ellas. La represiónno sirve con ellas, se unen, forman frases y acaban contoda la violencia que se les quiere imponer para impedirque de fruto su exigencia. Ya por la presión de ellas, lesdoy el visto bueno y salen para decir simplemente . Imagínese, de lacantidad de palabras agolpadas, solo salen esas. No sécómo sería si le doy rienda suelta a todas y quito las leyes

de extranjería y aduanas de mi mente con respecto a loque dijo.


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4¿QUEDA ALGO?

¿Qué somos más allá del aire que llena nuestros pulmonesy nos pulimenta con brisa trunca y suave?

¿Que hay en este mundo más allá del suspiro suave de la voz de las aves buscando que el cielo baje a sus alas ensuaves filigranas de lana seca revoloteando por el sonidoclaro del picotear de hombre en su piel seca?

¿Qué queda más allá de lo azaroso de los encuentrosañorados por tiempos en los cuales la historiografía no

alcanza a meter sus técnicas manos porque es el espacioclaro de una palabra ilógica malograda por mí al escribiresto?

¿Qué hay del nombre que las palabras no alcanzan a tocarpor la sublimidad de su estancia terrenal y espiritual en elaura de un Adagio de siglos pasados en los cuales noexistía sino el plan universal de su llegada acá para estesiglo sin sentido que solo llena cuando le siento cerca?


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¿Qué hay de estas soflamas que utilizamos para hacernos vivir inmiscuidamente afuera de todos los paradigmassociales, religiosos, culturales y literarios?

¿Qué hay de las palabras que utilizamos para hacernos vida sin muerte, abrazo sin contacto, beso sin labios, risasin boca, nombre sin letra?

¿Que tengo yo en mí de soflama que usted tiene desilencio magnificador de obra de música contemporáneadel siglo en el cual no habrá nombre porque ya ocurrió alconocerle?

No tengo respuestas más allá del re menor, el sol menor,el do sostenido disminuido, el tensionado con sucontacto soslayado por el anhelo de volver el re menor en

el cual descansara esto y obtendrá la respuesta vueltapregunta, al igual que el contacto mío con cuyo nombreno alcanzan las palabras mundanas.


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5PLAGIO POÉTICO.

A la aurora usted se va,

Y zumban las miradas en la molienda interminable de supelo.

Se sabe que sus párpados cuidan la semilla de la quehacemos fortaleza en mitad de las calamidades esa insólitaflor en las gradas de la casa que suele llamar la atenciónde todo el mundo como su pelo y qué cosa enfurecida alsolo de los enjambres y los aludes,

Usted vuelve siempre al mediodía para que no malogre elalma.


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Sabe que no ha sido a usted a quién el sol encomendó elfestín y los estanques cuando hace calor dejando uncántaro inolvidable dispuesto a servir como su pecho.

Tarde, tarde, el techo ha fijado su cicatriz en el aire y laturbia lejanía en que usted se envolvía baja del bus y es elsuceso más importante pues justo antes del desconciertouna cierta nostalgia quiere reprocharle la ausencia y elenigma se le enreda como el pelo por ese viento lunar que

acostumbra guardar entre los párpados y que saca al finpara que arrulle y le dé sueño a la noche mientras laspreguntas gotean en las acequias.


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6REGISTRO DE NACIMIENTO

No sé por qué lloro tanto.

Cada vez que escribo lloro. Cada vez que recito lloro.

¿Será que las palabras salen tristes de mí?

¿Será que les duele salir a mis palabras y por eso micuerpo llora?

Cuénteme mujer abstracta por cuantos momentos mequerrá, urge.

Cuénteme mujer abstracta los números que faltan paracompletar el espacio que no nos une en este instante.


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Cuénteme mujer abstracta las hojas, las aves y los colibrísque tengo que reunir para que me quiera con ahíncocomo la quiere este hombre lleno de melancolías hechasde música y poesía hecha con hilos de un alma que nosabe nada.

Cuénteme, ¿por qué no viene a abrazarme y sacarme conbaldes estas lagrimas que me inundan?

Cuénteme, ¿por qué soy como soy?

Cuénteme, ¿por qué no parezco haber nacido aquí?

Cuénteme ¿por qué este mundo?

Cuénteme, ¿por qué yo lloro sin saberlo?

Ahora,

¿Será que soy un infante?

¿Será que ni siquiera sé que es el miedo ni el dolor?

¿Será que lloro por ignorar esas cosas que la gente dicetemerle y solo escribo para poder alcanzarlas?


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Dígame, no calle. Avance, este hombre es el frágil arbustodibujado en un fondo azul claro.

¿Quién soy yo mujer abstracta si no el nacimiento depoesías?

Soy el que se embaraza, el que engendra, el que quiere, ytrae a la vida sus poemas.

Ahora, ¿quién le parezco que soy?

Cuénteme ¿de dónde soy?

¿Donde nací?

Infórmeme, ¿qué es este lugar?

¿Por qué me recibió usted?Cuénteme, urge.

Le urge al mundo caminar, hablar, sonreír, violentar ycaminar.

Pero a mí no me urge eso.

Confiéseme el secreto que me han guardado.

¿De dónde soy?

¿Me lo podrá decir?

¿Sabrá que lo que profeso por usted solo usted puedeconsiderar?


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Me dirá, me dirá...

Me dirá cosas que no he sabido y quiero saber...

Me dirá que sus abrazos son rocíos de día de por medio.

¿Me dirá que ya sabe quién soy?

Dígalo, parece que urgiera pero no urge.

Tranquilícese mujer abstracta, el sueño es más cortocuando se duerme.

Y más vivo cuando se despierta...

Ah, pero ¿ya sabe de dónde soy?...>


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7EL ANALFABETO

Él :

Se borraron las letras escritas, ¿se borraron?, nada

de eso. No se borraron. Ahí están. ¿Dónde?, ahí,¿ahí? ¡Pero no veo!

Ellos :

¿Entienden?, este hombre no sabe qué es borrar,

Es un analfabeta de voces.

Él :

No sé qué es escribir,

A Veces me pregunto -¿qué es leer?- mientras leoel diario vital de mi día en los ojos de la joven que

quiero más allá de mi ignorancia; una ignoranciamanifiesta en círculos triangulares que sobrepasanla lógica clásica y simbólica.


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Me reclaman por no tener la capacidad de aplicar verbos, me reclaman por no saber que es elpasado, el presente y el futuro.

Me cuestionan por no saber utilizar pronombrespersonales, impersonales, comunales, eventuales,sileciables, apreciables, recordables, primerables,tercerables, secundables, alterables, sinfonables,melodables, recursables, amadables, abrazables,

besables, tactables, y amigables.

¿Porque me cuesta distinguir tanto el día de lanoche, la realidad y el pensamiento, la vida y lamuerte, el viento y la tierra, su amor y el mío, mipoesía y mi vida, mis sentimientos y mis lágrimas?¿Por qué?

Sí, soy un analfabeta de voces, preposiciones,adjetivos, adverbios, conjunciones y demásaluviones, diluvios-guerras.

Pero aparte de todo no soy analfabeta de su risa,tacto, brazo, mueca, mirada, nube, voz, vida,poesía, canción, verbo, sustantivo vivo hechocarne.

De eso, no cuestionen mi negación de lo anafablegente.


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8PROSA-POESÍA-RELATO-DESAGÜE

Epicuro, decía Pero, ahora es

muy bonito lo que dice él. Hay dosis de dolor en el serhumano, la imperturbabilidad no existe, completamenteestaremos atormentados continuamente por nuestrocuerpo doliente, por nuestros sentimientos que nosenferman, emociones que nos hacen conducta débil,infantil y revivida. ¿Huir del dolor? ¿Huir de la muerte?¿Huir de la vida? cuéntenme si se puede huir de eso, si asífuera díganmelo para poder llegar a la ataraxia añoradapor Epicuro.


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Naturaleza humana, no dotada de cosas humanas, ni denaturaleza, una simple cosa sin sentido pretendiendodistraerse del hecho que en cualquier momento llegar algoque le hará dejar de soplar vientos por la boca y pereceráal ritmo de las vacías palabras de Epicuro y toda latradición filosófica, musical y literal del mundo envueltoen vientos, tierras, fuegos, nadas, todos, mudos, mudas,tontos, tontas, risas, rezos, nudos, refugios y mundos,mundos que saltan a través de sus ojos color vida

envuelta en el vino tinto del afán de la azarosidad de mirisa, palabras y puntos-comas-pata.


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9¿ES ANHELO? ¿MELANCOLÍA?

Sabe, hoy me encuentro bien.

Pero siento que se me quiere ir y me duele, no sé quéhacer…

Que hacer sin usted, no imagino que hacer sin usted…

Usted se acercó a mi alma, se acerca a ella en estosmomentos, en mis sueños, en mis manos, en mis brazos,en mi boca y en mis labios…

Labios que me llenan de vida, vida, aunque usted no locrea me llenan de mágica vida…

Sus palabras, aprender a conocerle, todo me lleva haciausted…


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¡No quiere perderle, y no en el preciso momento en elcual estoy ¡

No es fácil para irme de usted, es más ni lo quiero…

Mis días sin usted no guardan ningún sentido, se esfumanmis esperanzas…

No tengo familia, amigos, perro, flor, o jardín al cualaferrarme, no tengo nada, no sé me vaya...

Por favor, no se me vaya...

¿Qué haré sin su risa?

¿Ah?

Sabe, no hay necesidad que quiera algo del siglo XIX,sino quiere eso está bien.

No está obligada a darse solo una persona, circule por la vida…

Pero no se me vaya, no lo quiero, no lo quiero…

No…


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10 ANTOLOGÍA DE POETA SIN PALABRAS

Descubro el amor en usted en cada momento, en el másmínimo…

En esta poesía,

En los cardos de la calle,

En las rosas de su risa,

En la vida sumergida en barco de su savia,

En la niebla ya quebrada por su pechos vueltos rima,

En los poetas sin recuerdos, sin letras ni momentos,

En mi vida recogida en el mar de sus mejillas,


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En el monte de Urano despidiendo dioses nuevos,

En la vida de Júpiter expandiendo el basto llano,

En Pessoa y sus rebaños,

Y

En Silvio y sus elegías y sus mujeres sin sombrillas.


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11PASOS DE VOS

Los pájaros murmuran, la gente chasquea comida, tomalíquidos, se pasa palabras escuchadas-embuchadas comoruido.

Los pasos se posan sobre el suelo mientras un ave quepronuncia un canto, crujido, espejo, final o embrión quesubyace en su naturaleza que nos es nada.

Aves que susurran ruidos.

Gentes que hacen ruidos pensando en que hacensusurros.

Aves que se mueven como el viento.

Hojas que se mueven como gentes.

Gentes que se mueven como hojas.

Hojas que se mueven como viento.

Viento que se mueve como una madre en pos de suorigen y final arrogado a la esperanza de hacer feliz a sufruto interno


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Y tú, ¿te mueves como el viento o las hojas?

No, no lo haces.

Simplemente tus pasos no se escuchan, no se escuchantus pasos…

Solo es susurrar quieto y taciturno de tu risa imaginadainconscientemente-consciente por mí, hombre que nodistingue entre,

Lo que piensa y ve…

Siente y escucha…

Escucha y siente…

Quiere y ve… Pierde y gana…

Muere y muere…

Carcome y vive…

V e y siente….

Hay un sentido que nunca se me ira así ya planees tu plande ida o ya lo estés ejecutando, así pase eso…

Guardaré un sentido irrevocable y serán estos pasos de vos…


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12EN ALGO CONVERTIRME, CONVERTIRME EN

ALGO,

En algo convertirme, convertirme en algo...

En algo que sea una cosa,

Ya sea,

Con forma o sin forma,

Corpórea o incorpórea,

Extensa o corta,

Corta o insospechada.

Convertirme en algo nunca visto, oído y palpado...

Algo que ni tus labios pudieran tocarlo.

Uno, dos, tres...


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Ni angustia, que neurotiza...

Simplemente, sería mejor,

Convertirme en algo, en algo convertirme...


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13LO AJENO, LO MÁS NUESTRO.

No es nada bueno comenzar el día pensando en algoajeno al cuerpo, ni al alma sola y taciturna. Pero, dígame¿que de lo que pensamos no es ajeno a nosotros?

La imagen, el brazo, la mano, el ojo, el oído y el dolor denuestro cuerpo; ajeno es todo eso.

Todas cosas externas.

Como casi todos los días, me preocupo generalmente porusted en la mañana en donde la gente despierta al ritmoquieto de sus obligaciones y deseos…

Yo, como todos los soñadores falsos, poetas, músicos sinmúsica y madres sin hijos imagino que lo real es mi mássincera obra de arte y mi más complicado sueño.


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Tanto los soñadores, poetas, músicos sin música y madressin hijos; piensan cosas ajenas y externas a ellos, pedazosde cosas que son o no son, y, les inquieta como a mí elespíritu.

Yo, siempre al despertar pienso en algo ajeno a mí que semanifiesta en una intuición que traspasa el arte al puntode volverlo vida.

Todos los días al despertar me veo pensando en el saboramargo de en la boca, en la vida enredada en sucabello disuelto y absuelto del devenir contingente de surisa que se escapa a las categorías de lo estético para volverse categoría definitoria del enigma completo quesoslaya el arte, la vida, su figura, mis deseos y los suyosmujer que no aparece físicamente arrojada en mis días,

Pero,

Si arrojada mental y audiblemente en mis noches y en elsimulacro de luz,

Llamado …


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14HOY QUE EL DÍA PARECE UN SIMULACRO DE

NOCHE,

Hoy que el día parece un simulacro de noche, de unanoche fría, taciturna y quieta entre la envoltura de unaniebla que obnubila mi pensamiento que se arroja a ustedsin piedad alguna.

Me cuenta usted mujer abstracta,

Que está lejos,

Cerca, y un poco sin ánimos de estar,

Me cuenta que no puede conciliar el sueño y que el sueñono puede conciliar con usted.


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Que la tranquilidad y su persona no son amigas en este

instante, que el arte y la poesía no soy sus cercanas en estemomento, que la soledad y su preocupación es lo únicoque le acompañan.

Eso me cuenta usted.

También me dice, me habla del día en cortas palabrastímidas, tímidas tan tímidas que provocan abrazarlas.

Sin embargo, usted no desea sino una sola cosa.

Desea la vida, la energía recreadora que dota a loscuerpos de una alegría inmensa que traspasa a los que

están cerca. Eso, eso desea usted con ahínco.

Pero, yo…

Desearía ser la vida para poderla pasar y que ustedestuviera de una vez por todas bien, bien, bien para vertodo lo que queda alrededor.


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Sé que como este día que parece noche por las nubes que

obnubilan la vista, usted ve en estos momentos la vida así,su vida así.

Un completo día simulando ser noche taciturna, sola ytriste. En realidad si observa bien el reloj, los calendarios,los mecanismos y métodos para averiguar el clima y elestado de la vida, se dará cuenta que estamos de díasoleado, pero simplemente por un precipitación del climao de la vida, las condiciones se manifiestan así.

Como usted ya sabrá señorita abstracta,

El clima seguirá cambiando, esta estación de simulacro de

noche nubada no durara mucho, no durara.La vida hará su abrazo al pie de su mano que sostiene mimundo, el nuestro, el suyo, y, el suyo… al tiempo que vendrá en el momento en que todo lo malo pasará y la vida comenzará con los frutos que le ha otorgado austed…


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Historias cortas de vida y de vidas

cortas.


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15 ALGO

Las nubes,Los astros,

Los sirios,

Los cosmos,

Y, el mundo desértico no me dicen nada sobre estacuestión que me inquieta y nadie me resuelve.

-¿Qué es vivir?... ¿es algo?...-

-¿Una nube?

-¿Un astro?

-¿Un sirio?

¿Un cosmos?

No, es simplemente – me respondí-. Algo…


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16GENTES DEL MUNDO,

Gentes del mundo le escribo al vivo, al muerto, al señordespierto, al viejo que pasa la calle queriendo pasarse encompañía de su nieto viejo por las máquinas.

Yo veo siempre que camino, personas cruzándose sindarse cuenta que llevan al mundo en su espalda. Sin darse

cuenta de eso, se miran, se cruzan, se denuncian, seabalanzan sobre todo lo que les falta.

Tesoros esconden las gentes que cargan el mundo en susanchas, cortas, bajas, deformes y recalcitrantes espaldas.Muros, escarpados sin escalera o ladrillos deformes quepuede posibilitar una subida al cielo de sus mundos.


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Gentes del mundo, le escribo a ustedes que no son ni másni menos que el reflejo silencioso de las soledades queocultan tras jardines de risas-rosas cultivadas por otrosque los animan hacía el camino que no conocen, elcamino llamado por algunos como vida, bebida, poesía,mujer, hombre, dinero, falsedad, ambición, riqueza, saludy sentido.

Gentes del mundo, mundo de gentes sin dueños, ni

mando alguno, las palabras dichas por mí son solo unclamor silencioso lanzado desde la timidez de la coraza demi alma queriendo subir muros, escaleras, ladrillos salidosy mundos entrados en mí como monadas que me hace vivir, porque sí....


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17ESPEJO,

Le pregunto muchas cosas a la gente,

Cosas sobre ellas que son ni más ni menos cosas quequiero saber de mí...

-de pronto ellos tengan la respuesta-.

Bajo una palabra o un gesto siempre adivino que querrádecir el otro,

¿Habrá espacio para sorprenderme?

¿El otro me dará espacio para sorprenderme y no poderadivinar lo que dice su mano al bajar a su antebrazo o asu pierna?

Sospecho que no,


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Bajo la excusa de una palabra se tejen intencionesexpresivas que necesitamos,

Expresiones que nos sobrepasan ya que no podemosadivinar la palabra precisa en la que podemos encontrar elgesto perdido del otro ansioso; vuelto huracán de vidaante la muerte de la mirada perdida del otro (yo) en eltriángulo que se forma alrededor de los ojos móvilescósmicos del otro que quiere acceder a mí.

¿Para qué quiere acceder?

No tengo nada,

Nada tuve,

O,

Si,

Si tuve un vago sueño que camino un día por la acerainocentemente y miles de hombres se lanzaron sobre élpara llevarlo a un altar, y, sacrificar su corazón al ritmobrusco de una música hecha para sordos sonrientes.

No tengo nada,

Ni cosas, pues las cosas no son más que palabras, y notengo palabras puesto que las palabras son ajenas hijas deun rayo que pasa en el vacío del universo y da vida. Laspalabras, son algo que deja de ser en elmismo momento que hablo y exploto con mi miradaquieta y ensordecedora.


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Creo que tengo algo,

Tengo algo que se traspone todos los días, en mí,

Algo que nadie sospecha,

Que todos ven y no prestan atención.

Tengo un espejo en el que todos los días me miro y losmiro,

¿Saben cuál es?

Este simulacro de vida llamado rostro, sonido y columnahorizontal de la desesperanza que nos deja dehabitar cuando lloramos en silencio tímido y cuando nosperdemos en el abrazo de un niño o un desconocido-

querido...


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18 ARMARIO

20 personas miran hacia un frente común ubicado en laparte superior de sus cabezas embadurnadas de un colorgris tipo ceniza de papel quemado, sentadas en unasnaves de madera sin ningún tipo de movimiento con soloun timón rodeando el torso en forma diagonal y abusiva.

Un sujeto se arroja en ese frente común a hablar de algoajeno a él, de un espacio del que ni siquiera él se percata.

Habla como si estuviera con los mismos dioses delpanteón de los pobres, habla del entorno mundano comosi…puras figuras geométricas, dice que somos hijos delentorno, hijos de la vida, hijos de todo menos de símismos.


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Todo parece tan oscuro y frío,

El sujeto arrojado sigue hablando del entorno mientras

mi entorno se cae a pedazos pequeños con un frescotizne gris que me empuja hacia atrás_ dándome lasensación de estar en un algún lugar sin entornogeométrico, y, todo se dibuja en un sentido especial, lasparedes hechas para un jardín delincuente, el piso hechopara una clínica de reposo y un surco blanco hecho para

un mortuorio que hacen ver lo que ninguno de los 19habitantes de este espacio se percatan.

! Hay un armario ¡

¿De dónde será?

¿Quién lo trajo?

¿Me lo trajeron a mí?

¿Algún dios me lo regalo?

¿Sólo lo veo yo?

! Lo quiero para mí ¡


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Un armario, que ni dueño tendrá...

Perdido y sin lugar...

Desnudo y sin ropas...

Desnudo y sin llaves...

Vacío y sin secretos...

Un armario solo, solo... tan solo que ni el polvo lo roza...

Un armario, que quizás lo equivocaron de lugar....

Un armario, con nombre y sin madera...

Lleno de historias con sueños...

Amante silencioso de la belleza...

Un armario, sin sueños, ambiciones o posesiones, sinesperanzas violentas de venganza o bienhechuría...

Un armario que más allá de ser armario...

Era mi hermano.


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19 ÁNIMO

Ánimo, ese mísero que a veces me llega como suave brisafría que recorre sin piedad mi cara, y todo lo que mequeda abajo del alma y corazón,

Ese que así como llega se va... el muy mísero...,

No sé en pos de que se va,

No sé en pos de qué palabra se va,

No sé de dónde sacó energía para irse.

Solo, solo va el mísero ánimo,

Yo le digo que no se vaya,

Que se quede,Él ni me escucha....


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Solo se va, va y vuelve cuando menos lo espero...

Ojalá se quede un rato y si se va... Que no demoré porque

le espero con frío y temblor...


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20UN HOMBRE INTERNADO.

(De Repente y por accidente se escucha en el recinto de Piazzolla a eso de las 6: 30 am.)

! Qué bonito ¡

Dijo al despertar cuando aún la luna lo acompañabaenvuelta en nubes...

! Que sublime ¡

Dijo al mirarse reflejado en el frío de la madrugada apunto de irse pues llegaría el día con su simulacro de luz...


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! Que menor ¡

Dijo al no saber qué fecha lo estaba, qué hora lo habitaba,

que segundo lo inquietaba y no sé qué futuro lorondaba...

! Que mayor ¡

Dijo él al ver que no podía sentir todo, qué pesadez sintióal no poder sentir todo lo que se necesitaba para

transmitir un verso de un poeta queriéndose hacermundo.... le faltaban 6 sentidos más y un cuerpo adicionalpara sentir lo de algún modo adecuado...

! Qué alegría ¡

Confesó él, al escuchar sonidos....,

Hace mucho no escuchaba sonidos; los sonidos de unanimal nocturno, del polvo quieto, de recuerdos infantes,de Piazzolla y sus manos gigantes, de Chopin con susmelancólicas cuerdas al aire cual alma inocente en manosde la noche, de él, en su pasado cuando tuvo el tiempo

para detenerse, sentir y esperar.Él, él se mueve aún...

Él, él camina por ahí buscando algo que no sabe lo quees, pero aun así lo busca...

Él, él marca los lugares y sentidos con palabras en subitácora de viaje a la profundidad de una frecuencia quesolo él escucha y ve..., y ve...


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Él, él tan él...

Tan indescifrable, tan medicable, tan inestable, tan abierto

a la posibilidad, tan noble, tan corazón, tan alma desiertacon oasis en la voz, tan él, tan yo, tan mi hermano, tanél..., tan tantos juntos... tan él...


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Mis ojos solo pueden mirar la cercanía,mis ojos solo pueden mirar lo externo y ajeno,mis ojos son meros simulacros de un color indefinible,mis ojos no expresan la más mínima angustia, son tanpequeños que si acaso logran pasar el límite de altura parasubirse a un mecanismo de diversión de un parquetemático... sería un acontecimiento,mis ojos no expresan alegría ni tristeza,mis ojos son lo que no tengo cuando quiero mirarme y

saber que me habita al momento que no pienso....

Entre tanto...,

Mi oído, mi oído derecho falla cuando escucha el silencio,solo puede escuchar lo lejano con sumo cuidado,él escucha el horizonte como sonidos llenos de un ordenque sobrepasa el orden.Él escucha música, palabras, gestos, vida, rostros, floresy... ausencias que van yaciendo en sus años saludables....

¿Qué hacer?

Sufro de la vista y del oído,no puedo mirar, ni oír de algún modo bien ni siquiera lospájaros de mi soñar-jardín...

¿Me queda solo oler y sentir este verde dibujado solo enmi mente?


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22MANOS,

Manos, con piel hecha de un pálido tizne azul,

Manos, con yemas tiernas, suaves, cálidas y distraídas,Manos, con uñas sucias, limpias, mugrientas, y bellas,

Manos, tan independientes con ellas mismas,

Manos, que desde siempre han deseado tocarse juntasmutuamente cuando el triste termómetro les indicatemperaturas bajas,

Manos, que se extienden más allá de lo recuerdos,

Manos, que desearon, sufrieron, trabajaron, cambiaron yañoraron otras manos para tomar un baño,

Manos, manos que hicieron falta para no dejar ir al serdueño de esas manos que adoramos,


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Manos, juntas-llenas de recuerdos,

Manos, juntas, fuertes, pegadas como un refugio de

guerra en paz,

Manos, manos que nos faltan para tocar todo lo querido,añorado, silenciado, y atravesado por el sin sabor de laausencia presente,

Manos que como a este anciano, y, a mí les cuesta

lágrimas abrirlas al futuro tan, tan lejano de las suyas...


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23EDGARDO

(Hombre vivido en un bosque de algún país donde ninguna latitud

lo alcanzó…, En un bosque sin árboles, sin hojas y solo con imágenes vueltasrealidad para él.)

Edgardo se levantaba todas las mañana y construía con su

bostezo un palacio de aire en el suelo para seguirdormitando al ritmo del destiempo. Él no sospechaba quela noche lo observaba mientras el caminaba en sus sueñossin miradas externas (solo propias).

El día era siempre para él un pedazo de cielo huérfano, supie era el destructor de castillos y sus manos las

moldeadoras de auroras bellas.


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Nada le bastaba a Edgardo para bastarse; ni su desayunohecho de aire frió, ni el agua vuelta vapor imponte,nada…, y, bueno ni hablar de su pensar hecho añicos.

Todos los días él caminaba por el bosque sin árboles,hojas y flores.

Él caminaba sin pensar en nada, ni en el mañana, ni en elpasado, ni en el charco de lodo que siempre pisaba delado. Andaba así más, solo transitaba.

Sin pensar en nada siempre.

Edgardo era continuamente observado por algo sinnombre algo que ni él lograba sospechar…, un hada sintiempo, ni espacio, magnífica tanto que ninguna palabra

humana podía alcanzarla.Se dice que ella miró a Edgardo en un día lejano delpasado cuando él tomaba tragos enteros de música-vidacon sus cercanos de otro bosque lejano muerto por elolvido; lo miró antes de que él se dedicará con su hacha acortar tiempo para venderlo en el mercado a minutos,

para dejarse envejecer.

Ella lo observó durante mucho tiempo, (pensando estetiempo como eternidad), pero sin embargo…, él nunca

sospecho, y, si lo hizo de eso no guardó recuerdo alguno.


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Pero, un día distinto desde su inicio; inició cuandocaminando se encontró con un arbusto físico ya no enimágenes irreales como antes, el arbusto era físico. Élsiguió caminando y algunas cosas muertas-irreales deantes comenzaron a tomar vida…,

Busco, busco emocionado Edgardo la razón de esto portodas partes hasta que observo a lo lejos una luzmisteriosa que bañaba de colores el bosque. Sin previo

aviso él se acercó para mirar de cerca la luz de coloresmisteriosa que bañaba el bosque y su alma, se siguióacercando y divisó en el origen de la luz misteriosa unafigura nunca conocida en sus parámetros estéticos, ojoscombinados con el éter del universo no imaginado y conla pasión de lo más humano.

Desde esa ocasión Edgardo no fue el mismo, desde esemomento-acontecimiento, se puede decir que Edgardoenvejeció tanto que se volvió infante.

Ya Edgardo dejo de hacer las aburridas actividades de supasado joven, ahora él salía todos los días a buscarla a

ella, hada sin tiempo ni espacio, la buscaba, buscaba y nola encontraba. Solo lograba divisar que todo lo que antesno tenía vida y no era real en el bosque ahora se volvía vida y existente en el borde de lo real.

Edgardo se maravilló tanto que comenzó a inventariarcon poemas todas las cosas que tomaron vida en el

bosque, lo real e irreal, a ella que sin verla la sentía en la vida donada a el bosque por ella.


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Él ya estaba maravillado por completo. Pero, quería verlapara verle simplemente y agradecerle en persona físicapor darle vida a su bosque y él, preguntarle porque lohabía hecho y además de eso, porque no había vuelto.

En eso de dormitar apareció ella, el hada sin tiempo ni

espacio y lo habito sin palabras, lo invadió en plenosilencio al ritmo de un sueño. Al ritmo lento de un sueñoella se acercó al tosco, noble y bello Edgardo; lo beso enel rostro, lo despertó y al despertarlo él la beso muyquieto y sin tiempo solo con ternura. Una ternura que porsí solo sin palabras le agradecía a ella lo que hacía con el

bosque y con él. Ella, lo beso sin espacio y sin afán, tantoque llegó a decirle sin palabras que se quedaría hasta queterminará de inventariar-poetizar el mundo entero queella dotaría de vida y existencia real.

(Edgardo y ella se perdieron en el mundo en un viaje sintiempo ni espacio, algo tan sentido que ya la gente común

no pudo seguir contando pues las palabras mundanas noalcanzaron).


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24CASIOPEA, HIJA DE LOS DIOSES,

Casiopea, vuelta constelación,

Casiopea, hija de los dioses,

Casiopea, mujer bella y vanidosa,


Casiopea, tu rostro vuelve entera la vida inquieta,


Casiopea, mujer sin miedos,


Casiopea, tronar de guitarra,


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Casiopea, amante de las galaxias,


Casiopea, poeta de la tortura,


Casiopea, sin suerte, culpa u depresión,


Casiopea, me voy aunque te siga viendo en la noche,

Casiopea hija de los dioses....


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25 ANGUSTIA

(Un anciano con días llenos de espera y noches en vela)

Ante la tibia sombra que se traspone inquieta siempre enla cabecera de mi cama, antepongo los mejores recuerdosde mi infancia, los organizo por colores, fechas y olvidos.

Siempre recuerdo el ocaso que se dibujaba en el rostro de

mí padre cada vez que me miraba. Mi padre se dedicaba ala alfarería, eran épocas buenas donde el barro crecía porel campo en abundancia, en los árboles, flores y minasaéreas; las gentes lo recogían en canastos, bolsas ycarretas para venderlo en las plazas centrales de la ciudad,para pagar los impuesto del ayuntamiento y para dar

limosna en la iglesia siempre quieta ante mi inquietud porla vida.


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Mi madre siempre hablaba de mi padre como unaausencia que crecía en el jardín aunque lo viera siemprecruzar con sus manos embarradas de barro y vida,

Ah...,Eran tiempos buenos, quizás mis únicos tiemposrecordados...

No guardo más recuerdos de los anteriormentenombrados..., todos se fueron por un espejo roto por míal pretender tomar algo que no me pertenecía...En este momento de mi vida soy lo que recuerdo -uninfante sin voz-. Solo llanto, olvido, amor y diversión mellevan a donde no voy.

A Veces, confieso, que la sombra que se traspone

inquieta siempre en la cabecera de mi cama, da imágenesdesconocidas para mí. Como un caballo con un hombreen hombros, una mujer con un poemario en sus manosque me mira sin parar y una imagen blanca que me diceque pronto voy a nacer en un hogar de barro y tierracomo el de mi infancia el cual..., no importa ya...


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26CAMINO, POR BORDES, CAMINO,

(Confesión de un silencio sin piernas)

Camino, por bordes, camino,a veces sin fijarme por donde camino, solo con los ojosbrotados por todos los caminos,

Camino, y siempre que lo hago junto mis 8 manos paracaminar no menos que un centímetro.

Adivino por la cara del musgo que continuamente memira, que no camino.

Pero a pesar de esto junto mis manos, y mi voz para decirque voy caminando pero..., no camino...


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Sigo viendo el mismo arbusto quieto sin un respiroaparente.¿Será que el arbusto me sigue a dónde camino? (- si esque camino -).

No lo sé, me confundo mucho...

Cuando junto mis 8 manos y alzo mi voz para decir quecamino, dejó de mirar al arbusto que siempre me sigue ydecido sorpresivamente romper mi rutina y mirar el cielopara ver si él se queda quieto mientras camino (- si es quecamino -).

El cielo parece perseguirme mientras camino..., (- no sé sicamino -)...

A veces duermo para mirar si aún me sigue el arbusto ycielo mientras sueño con mis 8 manos juntas alzadas alruido. (Me siguen siguiendo los condenados arbusto ycielo)

No sé qué me pasa, me atormenta tanta cuestión...

Si es que camino, por los bordes, camino...,quisiera que alguien me mintiera y me dijera que nocamino... (Aunque yo sepa que camino...)

Pero, nadie parece interesarle mentirme o hacerme unsimulacro de verdades.

Todos cruzan por mi frente mientras les grito...

- ! CAMINO, POR LOS BORDES, CAMINO ¡- ...


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27QUIERO ESCRIBIR,

Quiero escribir, saber qué escribo,

Quiero escribir y que me digan que no escribo,

Quiero escribir y confesar al final de mis libros que noescribo,

Quiero escribir para sacar una excusa y no salir a las feriasdel ortigo, del limón ni del vino,

Quiero escribir, y, saber todos los días que nunca escribo,

Quiero escribir para dotarme de la inocencia del saberque me sigo creyendo algo inocente cuando abuso de laspalabras que recorren como homúnculos mi psique,

Quiero escribir, y, posarme en un refugio solitario con la

excusa de escribir un verso sucio y oscuro,


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Quiero escribir para que en los círculos de la academiame digan cuando muera que aunque yo consideré quenunca escribí me digan que escribí tan bien que merecíser inspiración de trabajos de grado, ser baño de palomasen medio de la plaza mayor con algunas de mis palabrasjunto a la fecha abusiva de cuando supuestamente (nacía todos los días -ignorantes-) y del cuando (moría cuando decía que no escribía y no amaba).

Quiero, quiero escribir para pasarme los días sin cicloscircadianos de sueño,

Quiero escribir, escribir para alcanzar medianamente laaltura ancha de mi cuerpo sin metas, brújula, ni sueño...


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28UN ANGEL,

(Un ciego contando la historia que escuchó en de Arve Henriksen cuando se apareció en su media noche a plenaluz de luna)

Una vez escuche un ángel, y esa vez no existió porque nola vi. Solo recuerdo cantos como de saxofón de climahúmedo por la brisa entre caliente y fría….

Brotes de flores suaves surgían de mi recuerdo lleno de

caricias externas que recorrían mi cuerpo cuando alcaminar yo lo hacía con los ojos cerrados. Solo sintiendoel pasar del tiempo y las melodías que surgían de laapariencia cercana.

Era maravilloso,

Había una selva oscura,Negra espesa y tranquila con algunas luces azarosas quesurgían cuando yo dejaba mi mente atrás. Un espectáculo


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de circo que solo los monos blancos podrían describirpor mí.

Susurros de violines sordos se manifestaban en unaconstante casi infinita, a la vez siempre cada 5 horassurgía un sonido agudo que atravesaba mi carnedejándola en el suelo con sangre de mis dedos; mis dedosque eran recogidos por un elefante-trompeta para hacerunos cuantos sonidos improvisados que ningún humano

terrenal había podido hacer así tuviera 3000 horas depráctica docta.

Los efectos de esta selva fueron tan variados que mimente no fue capaz de captarlos…, no pude convertirtodo ni en pentagrama para alcanzar esas maravillosas

notas, figuras y montes musicales.

Solo algunos animales me dejaron recoger algo de todoeso…, Personajes blancos de la selva me dejaron recoger algúnsonido del elefante-trompeta y de los monos blancos con

voz de infantes.

Dentro de lo poco que recogí, guardo el clamor de unaballena jorobada del Japón que paso por la selva oscuraalzada por un personaje desconocido para todos los visitantes y originales del lugar….


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Un ser con 12 alas hechas de plumas incrustadas con 24nubes de miles de millones de años y 48 joyas deuniversos desconocidos. El rostro de él – personaje sinnombre-, no era rostro…, era espejo y silencio pulcroinsoslayable…, vida y muerte sin previo puenteremembrable…

No encuentro palabras para describir el preciso-precioso

instante en el cual pasa la ballena jorobada japonesa consu flauta tradicional shakuhachi tocando los más bellossegundos de música para decir que, …

(Todos volvimos a morir para vivir con esa ballena que se ibahiendo…)

Mientras el ser con sus 12 alas de plumas incrustadas con24 nubes de miles de millones de años y 48 joyas de

universos desconocidos llevaba alzada en sus brazoshechos de arena blanca a la ballena joroba japonesa, nadiepronuncio una palabra, ni un silencio; es más todas lascélulas y el mismo fundamento del tiempo se detuvierona escuchar eso,Que ya…,

Ni yo…, Muy bien recuerdo…


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29SILENCIO,

Harpócrates el dios del silencio,

Amo de la tristeza, soledad, melancolía, y desilusión

vuelta ..., Trascendental él es,

Él dice que lo es y lo que está; y hace tan táctil eso que esy que está,

Qué llega a estar con tanta fuerza que ni la fuerza carnalpueda sacar de lugar el alma del pozo en el cual sesumerge lo más querido, herido, perdido y diluido.

Ya no queda nada en el silencio, solo palabras sordas...,

Él santuario de Harpócrates es la lágrima...,


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Sus leyes están escritas en el viento quieto....,

Su templo está en las cuerdas vocales quemadas...,

Su cielo ubicado en el rincón más claro de la esperanzarecordada por el futuro...,

Todos, mortales sucios dejados al abandono en manos deotros dioses...,

Pero,¿Qué sería del mundo y de los destinos del mismo sinHarpócrates?

¿Qué sería del arte sin Harpócrates?

¿Qué sería de los que curan sus tristezas conHarpócrates?

Ay, a nuestro mundo pequeño le falta hacerle másofrendas de silencio a Harpócrates...

Lo creó así - silencio -....


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30UNA SILLA,

(Un hombre sentado en medio de un debate sobre la memoria

histórica y política de un país cuya latitud se perdió entre tanta palabra)

Se movían las personas al ritmo quieto de sus psiquesadormecidas escuchando algo que no era más queabstracciones silábicas que no traspasaban ni las paredesdel sitio físico donde se encontraban,

Cuando pronunciaban una palabra, llegaba el olvido y selas comía sin piedad. La historia de las palabras olvidadas,podría tener un posgrado en ese género de historia tan vacuo e inútil.

¿Dónde están las palabras escritas que conmueven las

fibras fuertes del corazón penitente?


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En este sitio no estaban, no lo estaban...

En este lugar todo moría...

Las manos de las personas al botar palabras al aire,

Las bocas hablando de abstracciones de poder en vez dededicarse a erotizar a su cercano y lanzarse al beso delamado desconocido.

Me canso...,

Todo a mí alrededor se cae a trozos enteros,

Mi carne, mi dicha, mi amor, mi tranquilidad, missueños...,

Todo cae y se desvanece en mi nombre seco y sinsímbolo.

Si esto me pasa a mí,

¿Qué le pasará a esa silla solitaria que está en frente mío?

Está esta silla sola, taciturna, rayada, subyugada a ;dañada por otros que no vacilaron al hacerlo...,


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Ay,

Ay silla, si supieras cuantos familiares tienes en el mundo

en tu condición ya habrías dejado de existir...


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31 J. GABRIEL RAMÍREZ

(Nota de olvido dicha por un bolígrafo a su )

No soy nada, no he sido nada, nunca seré algo,

Ya no soy esto que estoy diciendo,

No más,

No quiero más esto de .

! Ya ¡

! Grito ¡

! Ya ¡las palabras de las personas son como carne podridasin digerir, mis palabras son las moscas que exploran esta

carne.


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Este que habla no soy yo, es otro que se apoderó de mí alsentir dolor profundo con la única manifestaciónexpresiva del amor de reflejarlo todo en palabras.

Palabras que no sé si le interesarán al fuego que quemaráesto ya sea por accidente, tropiezo, bomba nuclear opreferiblemente llanto o lluvia de lo mismo.

Este que escribe no es, no tiene pseudónimo, no es otropersonaje, es estas palabras reducidas en su mínimaexpresión tierna.

No me importa nada, no me importa el todo, no meinteresa el simulacro del presente llamado futuro.

Recuerdo fríos, días y noches donde he estado tirado

debajo de ésta banca, negándome lo que soy , olvidado por alguien que no vio ningún valor en mí...,

Un simple bolígrafo brillante de plata...,

Sin tinta, hecho en UK.


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32LE EXTRAÑO

(Un hombre hablando con su cordura)

Le extraño,

A sorbos de existencia, le extraño,

Así este hombre que está parado al frente mío se digahumanista cuando no sabe cuan humano me sientocuando preocupo por su risa, sufrimiento y felicidad…

ahí es cuando verdaderamente accedo a mi humanidad.

Le extraño, le extraño cada vez que despierto y memiento a mí diciendo – estoy bien-.

Le extraño, cuando no digo que le extraño…

Le extraño así usted no sepa cuánto, ni como le

extraño…


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Le extraño cada vez que veo a través de la ventana de micuarto y siento en las luces de la ciudad su presenciadibujándose cuando me llevó al lugar donde usted decíaencontrar la paz.

¿Cuándo? ¿Cuánto? ¿Qué? ¿Dónde?

¿Cuándo vendrá y me dirá – le quiero-?

¿Cuánto tiempo le falta a su tiempo para venir y venderme como esclavo a su sombra?

¿Qué falta para que reconozca lo que dije al ser lo que hesido ante usted siempre recargado como un parasitoabsorbiendo vida y poemas?

¿Dónde está el lugar que tiene usted ahora para guardarsu tranquilidad y si queda el amor por mí?


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3318 PALABRAS

(Carta de un joven papel de poeta a 18 palabras abandonadas)

En 18 palabras, viví,

En 18 palabras, vivió todo un mar de espejos reflejando

un desierto quieto,

En 18 palabras, morí sabiendo que nunca llegue ni alborde de su pie izquierdo,

En 18 palabras, espero que vuelva ya sea en la noche o en

el día..., solo que vuelva sin ningún misterio o miedo,


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En 18 palabras, añoro que su risa se dibuje como antes sedibujaba en cualquier momento de un febrero,

En 18 palabras, no quiero pensar en su ida porque sehace un nudo en mi garganta que no me deja pronunciarni un silencio,

En 18 palabras, dibujo cada instante; rememorando loúnico que ha sido todo esto que queda en el recuerdo

más dulce-agrio del mundo, su voz vuelta refugioescondido del mundo. Refugio de mi cariño nacido en elsuburbio de todo lo que yo no espero…


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Pronto y poco a poco la rutina se fue volviendo un pocodistinta. Dejo de sentir el niño que siempre recorría ellugar de su garaje gritando – eo, eo, eo, eo-, pensando, -sehabrá mudado el fastidioso muchachito con sus padresamargos-. Dejo de sentir también el goteo de la duchadañada hace más de 5 años, pensando para sus adentros, – se arregló sola, que bueno eso-, no sentía tampoco elrayar de las ratas en su pared, y decía – las ha matado el veneno que deje en la lámpara la vez pasada- (ósea hace 5

años), ya no surgían las terribles serenatas de los gatos a lamedia noche, y, pensaba él – los vecinos han matado a losgatos, que triste. Ah, pero qué paz siento-.

Todo fue cambiando sin el permiso de él, ni por enteradose dio que la paz le estaba llegando sin avisar, que el

descanso fino le recorría el borde de su pecho magulladopor el tiempo....

Él nunca se enteró de forma directa que había perdido laaudición. Pero, si él se hubiera llegado a enterar, hubieracolapsado por incertidumbre patológica.

Los familiares de él, cuando se enteraron que habíadejado de oír le trajeron dibujos de la señora y del niñohechos por un artista en la pared de las ventanas rotas delmismo hombre sordo. También sugirieron que ya que élno podía oír, se debería hacer algo para que siguiera

escuchando de otro modo; de una manera cualquiera queni él se diera cuenta que estaba escuchando. Inundaron lacasa con avisos llenos de versos ajenos al mundo físico,


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crearon paredes con cientos de páginas al azar, pusieronlos diálogos de personajes azarosos de muchas obrasliterarias desconocidas para él, mientras dormíasilenciosamente.

Él al despertar a las 9 de la mañana de nuevo, comenzó aescuchar sin oídos, empezó a escuchar con los ojos ybueno, al hacer esto entro a un mundo en el cual ni lamás mínima caricia hacía su entrada. Formó mundos más

allá de lo imaginado, mundos para él, para él, él gentilhombre.

Dicen que este hombre,

Al perder su oído ganó unos ojos.

Y, al ganar unos ojos, ganó un olfato,

Al ganar un olfato, recordó un tacto,

Al recordar un tacto, recordó la vida,

Al recordar la vida, recordó su infancia,

Al recordar su infancia, recordó sus libros,

Al recordar sus libros, recordó unas palabras,

Al recordar palabras, recordó su tristeza,


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Al recordar su tristeza, recordó su libro escrito,

Al recordar su libro escrito, le recordó a ella,

Al recordarla a ella se acostó,

Y,

Al acostarse durmió como si el silencio y la paz fueran lasmás bellas primaveras eternas…


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35 VALERIANA

Dos gotas para despertar una neurona,

Cuatro gotas para despertar otra al borde del sistemaneuronal,

Seis gotas para unirlas en una charla casual,

Ocho gotas para que comiencen a beber dopamina y se

miren sigilosamente,

Diez gotas para que los dos se vayan a un sitio lejano dela corteza cerebral y emigren al tallo del mismo,

Doce gotas para que reproduzcan su libido en todo el

sistema neuronal y empiecen una orgía de conexionesemocionales,


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Catorce gotas para que comiencen a mover los músculosfaciales,Quince gotas para que todo se vuelva una confusión ysalga del movimiento algo conocido como sonrisa,

Sonrisa falsa, quieta, taciturna, vagabunda, que se irárepentinamente al chasquear los dedos y dirá,

! VUELVE EN UNAS HORAS VALERIANA ¡


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36DESPERTAR

Hoy desperté distinto,

Con los ojos distintos, un poco más desencajados de lonormal,

Con los labios secos, muy secos por la arena del reloj demi almohada,

Con la brisa en el cuello,

Con el llanto en el espejo,

Con la vida en las manos,

Con la viola en un trasto ya no usado,


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Pero, ante todo desperté.

Ya siento yo, o no siendo, yo.

Simplemente desperté,

Con ánimos desconocidos,

Con palabras distintas,

Con ojos distintos,

Cambie en el momento menos esperado,

¿Será que soy otro el que despertó?

¿Será hubo uno que se quedó durmiendo para siempredebajo de mi colchón?

¿Será que ya no estoy para seguir pensando en por qué

despierto?

A partir de esto,

Solo sé con certeza,

Que a lo más bello, no hay que pensarlo,

Que a la felicidad hay que dejarla circular por qué sí,


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Porque si se comienza a pensar,

Créame,

Ya se dejó de des-felicitar de la felicidad.


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37 AURA

Un niño blanco, descamisado, con el pantalón roto y losojos medio verdes-mojados caminaba solo a la mitad deldía con su balón en medio del antebrazo; antebrazolastimado por el golpe dado al caer de costado sobre supadre que andaba tumbado en medio de la cancha porqué lo había sorprendido el sueño como siempre en

mitad de la nada.

Eran muy pocos los momentos en los cuales el niñopodía compartir con su padre momentos largos, ya que elpadre no permanecía mucho en la ciudad y mucho menospermanecía despierto cuando estaba en la ciudad. Debido

a un problema psicológico y neuronal, el papá del niñosufría de una narcolepsia que se agudizaba con el pasardel tiempo y las preocupaciones de un adulto promedio.


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Preocupaciones comunes como el trabajo que nunca sehizo, el libro que nunca terminó de escribir, el beso quenunca pudo recibir, el amor que ya era muy tarde paraextrañar, la madre que nunca abrazó, las veces que nodurmió por esperar días enteros el periódico y demásasuntos vitales que se escaparan de esta descripción.

La vida del niño transcurría muy diáfana y serena, eranpocas las veces en las que se veía al niño en la calle

debido a las experiencias ya tenidas con su padreridiculizado por las personas conocidas del arrabal.

El niño empezó a acostumbrarse con el pasar del tiempoa ver a su padre en la casa, en la sala, en la cocina y en elcuarto donde se sentaban a dialogar mientras a alguno de

los dos naturalmente los invadía el sueño, ya fuera a unopor Morfeo y a otro por su desequilibrio neuronal.

Las visitas dejaron de trascurrir en varios sitios con elpaso de los momentos, ya no podía el padre ni llegar a lapuerta de la casa porque ya tenía un pie en el territorio de

los sueños. Este niño afrontaba todo esto con unatranquilidad bella, pero inquietante. ¿Qué pensaba él?¿Qué lo habitaba? ¿Qué quería hacer?, nadie losospechaba… No hablaba palabras sino con su padre el

narcoléptico, mientras residía despierto en el mundo.Cuando el padre caía en su estado de sueño, el niño daba

vueltas por su casa buscando elementos del padre paraconversar con ellos. Paso mucho tiempo haciendo lomismo el padre y el niño.


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Llegó el tiempo en el cual el padre solo despertaba unminuto al día, en ese minuto el niño hacía lo imposiblepara decirle todo lo pensado por él al padre, le decía, -acáestoy papá, mírame soy real. Déjame meterme en tussueños, ya que allá estaré más tiempo contigo que del queestoy acá, déjame por favor- Después que pasaba elminuto; el niño dejaba de tararear el mensaje el padre y sedormía. Ya, la situación fue cada vez menos grata, el

padre despertaba por solo 2 segundos al día… El niño secansó y se puso a mirar a su padre mientras dormía pordías y días. Dentro de ese tiempo observó que de supadre salía una luz misteriosa y bella que le decía que aún vivía; y que aún era tiempo de dormir, que lo acompañaraen ese viaje sin fin.

El niño después de este mensaje observado, dado por elaura del padre, decidió acercarse a él. Se posó sobre elotro lado de la cama, con suavidad se acurruco con lasábana rota que quedaba y durmió. Durmió durante eltiempo que Morfeo y su aura de bello querer le

permitieron por su finísimo vuelo de amar más allá delacierto de lo vivo o más acá del desacierto de lo muertocon un lugar en lo ameno, de la compañía desinteresadade un padre con su hijo envuelto en un vuelo inmenso, yaenmarcado en lo eterno de una cama, de una casa ya, sindueño…

Solo un aura que recorrerá por siempre sus tiernosrecuerdos tiesos ya tiesos...


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38UN ESPACIO QUIETO,

-El espacio siempre está en movimiento-, le dijo el

geógrafo al pintor.

El pintor le respondió, -El espacio quieto es el mássincero, es el que yo siempre quiero-.

-Señor pintor, usted se ve muy inteligente pero creo saber

que no sabe que es el espacio. Yo he estudiado, viajado,tomado, ensuciado con libros de otros ajenos a mí. Y,con todo esto ya experimentado, supe saber que es elespacio. Y, el espacio es algo que yo siempre veo enmovimiento, ya sea de lejos o de cerca, siempre lo veo enmovimiento; en el mundo lo veo-, le dijo el geógrafo.


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El pintor muy tranquilo, pensó por unos segundos. Sacoun lápiz, un pedazo de papel viejo de su bolsillo; ycomenzó a dibujar la cara del geógrafo mirándose alespejo desde su casa, solo, triste, amargo, lleno de muerte,tristeza, orgullo, dinero, canas, arrugas y anhelos.

Le mostró el dibujo al geógrafo conocido y le dijo, -mireusted, he aquí nuestro único, sincero y siempre, espacioquieto-.

El geógrafo sin palabras inclino sus hombros, ojos, y almay se fue.


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39NO QUIERO ESCRIBIR

-Qué día más pesado-, le confesé al vacío, mientras seperdía mi mirada en el horizonte llano y sin sentido.

Vi tanta sangre correr hoy, vi tantas cabezas de animales,mujeres, niños, hombres y ancianos recogidas en uncamino con sal para ser llevadas al frigorífico para

después comerciarlas en el vertedero más cercano decosas inútiles llamado, comercio central o centrocomercial. Ah, mierda, que día más pesado le confesé al viento, mientras me sacaba la camisa y observaba comomis huesos se comían mi carne ya quieta de tantomovimiento vacuo, vacío, tirado, extenso y muerto.


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Dije al viento, -todo es una cruel agonía-. Me entere queen algunas partes del azul llamado tierra humana laspersonas se matan a espadazos para mirar la sangre correrpor la tierra mientras fuman tabaco para sanarse lasheridas vivas. Me entere que en un sitio y en un tiempodel mundo violaban a mujeres en la plaza mientras loshombres cargaban sus crucifijos en el cuello e introducíansus pedazos de lujurias en las mismas mientras pensabanque les iba a cocinar la esposa para merendar y dormir

con ellas mientras cavilaban en la mujer que habían violado en la plaza.

Estas cosas le confesé al viento, al vacío, y a mí mismo. Amí mismo ya cansado, rendido de tanto vacilar, de tantamuerte en vida, de tanta vida muerta en el océano de la

tristeza.

Me entero de muchas cosas, siempre de tantas…, y…,.todo sigue tan igual.

Hombres y mujeres ancladas al pasado triste, cavernario y

requilorio para excusar su miedo al presente con garras,amor y cariño envuelto en llamas.

Ah, hombres y mujeres con las manos atadas en laespalda por temor a tocar la suciedad quieta de su ciudadenvuelta en carnalidad parlante.


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40 A TRAVÉS DE MIS OJOS,

Más allá de todo lo visto en el mundo y en usted hay algo

incomprensible.

¿Qué será?

-Me pregunto-,

¿De dónde sacará tanta vida la vida misma y usted?-¿será del fondo de todo lo que se añora?-

¿De dónde le saldrán tantas sonrisas a la tierra y a ustedcuando todo está plagado de tiznes oscuros yenajenantes?

-¿será de lo que le falta o tiene sin darse cuenta?-

¿Cuál es el secreto de la fortaleza de la vida y de la suya?


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Ah, el enigma más bello e indefinible del mundo vividopor mí lo plasma en papel tapiz su nombre y la estela queél mismo subraya en lo indecible con palabras; el silencioruidoso que apacienta su sufrir y el del mundo...

Más allá de todo, de todos y del todo.Hay tanto en usted como en la vida misma, que ni ustedalcanza a imaginarlo conscientemente oinconscientemente en sus grandiosas divagaciones

nocturnas.

Eso de lo cual hablo está enmarcado en la vida misma yen usted. Se podría decir que es un horizonte ancho yprofundo en el cual solo podría acceder a través de misojos ciegos, perezosos y faltos de expresión.

Usted, ya sabrá que como la vida; todo toma sentido através los ojos que miran más allá y el tacto que mira másallá de lo escuchado y dicho por usted en el momentoque termina de leer este texto escrito.Dejado en el rincón más corto de un cuarto estrecho para

ser tomado en el párpado y dejarlo caer como una gota derocío, en el silencio..., de un, campo.


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41SILENCIO II

Era un pico alto en la montaña. También una nube, unanoche, una hora, una sonrisa, una cornisa deprimida, y unhombre escuchando la brisa a punto de cruzar la

avenida…,

-shhh, todo se volviósilencio-

Cuando en el medio sin ninguna prisa todo se volvió el

pico alto en la montaña pues ante el choque con elcarruaje de metal su nube, noche, hora, sonrisa y cornisadeprimida quedaron enmarcadas en el marco sucio delsilencio, de un, parabrisas….


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42 TEDIO

Yo decía en las calles a la gente,

La gente no me escuchaba, y si lo hacía me miraba conrecelo y compasión. Era todo un extenso espacio ajenoque construía a través de mis palabras desojadas al vientoque era el único que me escuchaba. Anhelaba que la genteescuchará a este hombre perdido en sí mismo, perdido enla plenitud del vacío que se pronunciaba al final de la

jornada diciendo – Es otro día sin final, ya mañana no vendrá el comienzo…, termínate en la cama, en tu camade cemento sucio-.


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Yo, al otro día decía,

Increíblemente, la gente me escucho.

Me escucho la gente porque hablaba de otro que negaba

con mis azarosas palabras.

Ah, pero la gente además de escucharme, me miro sucio yme puso ropas encima para no parecerlo tanto, meperfumo sobre mi mal olor para pasar cerca de ellos sinque produjera asco estético, ellos me sacaron de la

superficie de cemento donde recostaba mi cabeza y meelevaron a lo inacabado de lo que se puede llamar tedio.

Volví a la misma cuestión.

Al otro día en medio de todos en un recinto cerrado dije

para sacarme de mi lugar artificial,


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Todos abandonaron el lugar después de que pronunciemis palabras.

Volví a mi suelo sucio, concreto, frio e incierto…


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43NUNCA

Dijo él,


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Después de preguntarse esto el pobre hombre oscuro conrayas blancas, pies cansados, espalda encorvada, ojosdesviados y cintura curva. Observo el horizonte limitadoen la mitad de paredes llenas de libros con colorespasteles uniformes y temas mixtos. Y en medio de estoescuchó como lo observaba un tacto desconocido y comolo escuchaba un segundo sin ganas de pasar.

Dijo tímidamente él,

Esto lo dijo cuándo un aura, alma, carne, ojos o como sele quiera llamar lo miro durante aproximadamente 5momentos (5 segundos) y le mostró cuán desconocido seaparentaba él en medio de sus pomposas palabras.

El hombre bajo esta circunstancia, dijo


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Al final, conmovido él se fue y le obsequio lo que nunca,nunca la iba a faltar. Palabras y más palabras que nollegan ni al borde de lo que dibuja la inmensidad de lamirada profunda del desconocido que sonríe, sin más…


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44UNA LUNA

Dijo él sol a la luna,


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Ven claro de la luna, sé que te cuesta entregarte amí, hombre corto de brazos y piernas sin musculoalguno en la garganta articuladora de veneno ytrago grato de pasión.

Ven, ven claro de luna que sería capaz de volverme noche para habitarme contigo y poderser al fin algo...

Ya sea como una estrella o constelación-casiopeica,

Ya sea como un Simbad dueño de los siete maresnocturnos,

O ya sea como un vagabundo nocturno que paseaen la niebla con su perro en pleno simulacro dedefunción.

Solo quiero, eso...

¿Es mucho pedir claro de luna?

Lo sé, es mucho...

Dame un pedazo de tu luz para dormitar, hazlo,hazlo...

Que tiemblo de oscuridad profunda llena de luzamada claro de luna…>


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45EL AMOR

Un circulo navegaba en el corto suspiro de un silencioenvuelto en tiznes grises pintados por un carpintero quepulía su máquina para cortar la madera marcada queemprendería el camino de volverse algún elemento inútil-útil para alguien sin nombre ni tiempo.

Ese carpintero, no era carpintero. Era simplemente elreflejo vacío de un recuerdo dibujado en el letreroabandonado en una vieja calle azotada por las balas de unseñor envuelto en petróleo cuyo hijo abandonó en eldormitorio de un colegio que abría sus puertas siempre en

enero.


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El carpintero, ese que se decía ser carpintero. Siemprecortaba la madera con sumo cuidado para no pareceralguien que no manejara muy bien el asunto de losmaderos. Recuerdo muy bien que se demoraba más de undía para cortar una pieza de madera y acoplarla a laestructura que deseaba hacer lo más cercana a laperfección sublime.

Por esta forma de estetizar su mundo y trabajar sin paga.

Criticaron mucho los otros carpinteros su gran fervor porignorar el tiempo, el hambre, la relación con los otros ycon su vida.

Sus clientes no fueron muchos; solo un albañil sin paga,un extranjero sin casa, una mujer sin hijo y un cura sin

capilla o crucifijo.

Ya que afortunadamente estos clientes se demorabanmucho en pagar.

Favorecían al carpintero por qué podía

demorarse mucho tiempo en entregar sus pedidos tanperfectos como lo eterno.

Mucho tiempo..., mucho tiempo.... Tanto que cuandollegó el señor envuelto en petróleo con sus balas suciasdisparadas azarosamente por la calle vieja donde

trabajaba.


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Los pedidos, esos tan esperados los cuales habían duradouna eternidad. Justamente ya estaban listos para serentregados al albañil sin paga, al extranjero sin casa, a lamujer sin hijo y al cura sin capilla o crucifijo.

No obtuvo nada el carpintero...,

Solo un tieso disparo en el borde de su cuello.

Y, el agradecimiento vacío de los clientes al borde suespejo, aura, y cuerpo ya muerto...

En mi epitafio escribí para recordarlo a él,


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46EL VALLE ROJO CAPITAL DE TODO LO

OLVIDADO,

Se decía en el valle rojo capital de todo lo olvidado queexistió en una época muy próspera un hombre alto, joven

y delgado que caminaba constantemente por las calleslimpias del valle para intentar recordar algo que se leolvidaba. Siempre salía a buscarlo con una lupa rotautilizando sus manos untadas de algo verde sucio quesometía a su consciente a la angustia más persecutoriapuesto que nada se relacionaba con lo que

intentaba buscar.


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Algunos dijeron que él poseía la maravillosa cualidad deidentificar olvidos en las frases de las personas comunesdel valle rojo. Además de esto, también podía identificarafirmaciones de mentiras que se mostraban como verdades y afirmaciones de verdades que se mostrabancomo mentiras.

Se cuenta que un día mientras escuchaba la confesión deuna joven enamorada de un hombre que admiraba basada

en sus idealizaciones poco terrenales. Le surgió a él, elsilencio en medio de la nada. Y, mientras ella le hablabacontinuamente del hombre que decía querer con todo elahínco. Él pensaba en ese instante sin escucharleatentamente. Que, de nuevo estas palabras que ella yotros le habían dicho ya sobre el amor y la pasión; tenían

el olvido marcado en la punta más aguda de los labios.

Toda promesa que él escuchó tuvo hasta el final de susdías un toque de olvido permanente que hacía de supresencia una verdad temporalmente presente y un olvidosignificativamente escondido en el marco de los labios de

todas las gentes del valle rojo capital de todo lo olvidado.


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47UNA MESERA

Él, quería seguir saboreando ese cacao negro por 5minutos más. Lo quería hacer mientras se sumergía en lastres luces que iluminaban los menús dispersos del sitiodonde surgía la música francesa con la melancolía en la

espalda como un escapulario de monje ateo.

Las luces blancas eran meros etruscos sordos que seesparcían por el suelo, por los rostros, por las pielestocadas con sudor de piel, petróleo y mineralessumergidos en la tierra como paisajes imaginados

en cuento de niño sin dinero en los pies y las manos.


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¿En qué pensaba mientras se comía ese cacao negro?

Él, no pensaba en nada.

Por un momento se habitó en el cacao, el cacao lo hábitocon el sudor de los que lo extrajeron del árbol caminadopor la tierra pisada por tatarabuelos orgánicos ya muertospor un ataque de lluvia, viento, tristeza o balas perdidasqueriéndose encontrar. El cacao era un recuerdo histórico

que pasaba desde el África hasta la América sur con suhistoria enmarcada en lo ya dicho en el saciar más tediosodel rencor originario.

Él termino el cacao en los 5 minutos.

Miro de nuevo sin mucho interés las luces, el menú y elcuadro de tiza que se dibujaba sobre el costado de él. Y,descubrió que el precio del cacao era como un peso deoro en manos de un animal-humano ya muerto,; Gratis como la sonrisa que le regalo el cacao ala mujer y la que él le regalo al cacao y a los negros ojos

de la mesera de aquel café que sonreía no por simpatía oagrado sino por el dinero que obtendría al terminar eldía.


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48 ASTRONOMOS

Él tenía las mangas de su abrigo en el borde de sus dedos fríos,tiesos y sucios con los cuales tejía recuerdos lejanos…

Alguna vez se lo llegó a nombrar en los cafés literarios

donde se bebía más de lo escrito. Rara vez se escuchaban versos en el café literario, y, dentro de esos pocos versospronunciados por los clientes del café estaban las estrofasde él hombre aquel que cada vez que era pronunciado en verso no sentido era enviado junto a sus palabras al lugardonde las letras descansan tranquilamente para ser

olvidadas y después recordadas.


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Ese lugar decía él, estaba ubicado en las pequeñasconstelaciones que forman las manchas de café dibujadasen los rostros de las musas debajo de su nariz, en la mitadmás geométrica de sus labios, en las mejillas derechaspronunciadas arriba de lo que queda a la mitad del rostro,diagonal donde se dibujan las sucesiones de puntosimaginarios que forman una invisible línea abstracta quese concibe como constelación que adoran los poetasastrólogos de las astros dibujados en los rostros de las

musas.

Musas medianas de ojos cansados por no dormir, decabellos de fuego anciano por tanto quemarse al sol, deabrigos con flores oscuras vueltas estampa quieta dondese asoman trozos de piel que guardan sentidos no

sentidos, emociones no emocionadas, lagrimas nolloradas, tactos no palpados y vidas no vividas en susalmas, voces y escuchas más allá de lo transitado en latierra.

Al final, los poetas dicen sus palabras sobre las

constelaciones de los rostros angélicos de las musas paraluego ser olvidados cuando las entregan y ser recordadoscuando ya se pierdan entre tanta niebla.


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49 VEHICULOS

Son las diez de la noche según el sistema occidental de

medición arbitraria del tiempo. Todo es frio y el frio estodo; un todo que forma momentos sin rima que hacenun uní-verso; un uní-verso formado por dos silabas ; una nada vuelta noche quieta sin vehículos, quieta ysin animales, quieta y sin estrellas, quieta y oscura a lamitad del espacio sordo corto de este, mi silencio.

No es el uní-verso que describo aquí lo real; lo real paramí es una mera apariencia que apacienta mi concienciaque espera un vehículo para volver a un no-lugar que daráalgo de momentánea paz intranquila.


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Curiosamente en la mitad de esta noche, de este uní- verso, de esta calle sombría-alegre aparece Alguien con unabrigo sucio diagonal a mi costado; un Alguien decabellos largos medio tiznados de un claro rubor rubio-negro que dibuja en sus labios un tanto angustiados algode lo cual no logro sospechar.

Ese alguien tenía en sí mismo un soplo de vidaangustiante, también poseía de algún modo poco preciso

mi misma espera de un vehículo. Yo para irmesimplemente a dormitar en mi paz intranquila y él parairse a buscar a otro alguien que lo atormentara un poco.Él Alguien se acercó a mí y me pregunto si tenía algúnmedio de comunicación para hablar su multi-verso dueñode los rescates imaginarios de su alma, sonrisas y

alicientes.

Le hice el favor a ese alguien y luego me fui a mihipotético sitio de paz intranquila en el vehículo máscercano. Él Alguien según pude observar se encajó en su vehículo propio inservible por un motor dañado y llantas

rotas a esperar inútilmente una eternidad ofrecida por un vehículo ajeno perfecto que lo condujera a la verdadera-ideal-inexistente-eternidad…. Que solo podría encontraren el vehículo más cercano a su angustia.


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50 ANGEL II

¿Cuándo vendrá la muerte a visitarme en mi refugioplanetario extenso?

– Nunca-(Escuche en el susurro del vacío).

A veces ante la negatividad quisiera que viniera ella asaludar como lo acostumbraba hacer cuando yo era unjoven anciano invisible para lo que se consideraba ser.

¿Seré algo? ¿Aún soy?

-Aún puedes pensar que sos algo- (Escuche en el susurro del vacío).


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Ahora recordando épocas puedo decir ante el viento quehe visto miles y millones de rostros dibujarse suavementeen los charcos de hierba, agua y sangre. Los he vistosonriendo, llorando, quebrándose los cuellos por lasaceras de las calles, por el humo de los cigarros, por losárboles de los bosques y las orillas sucias de los caminososcuros.

Los veía siempre juntos-solitarios sintiendo lo que yo nopodía sentir. El apreciar de un dolor físico, anímico,amoroso y de apego; de apego y odio; de odio y muerte;de muerte y vida en si misma vacía.

Siempre me he dicho que he sido la expresión más inerte

del mundo contingente. No me he movido ni parasostener algo en el aire con la intención de que no caiga ala tierra y muera. No he podido ver la muerte con odiocomo lo hacen las gentes. Solo la miro sin ningunaexpresión total marcada en alguna concepción estética delo bueno, feo y hermoso. Considero que ella es (la

muerte) la vida más amiga de la gente que veo por ahísintiendo algo que no soy, ni he sido capaz de sentir. Latristeza de una partida, la culpa de una persecución, ladepresión, la psicosis, la manía, y, el amor.

No, no he podido sentir porque yo he sido; y, yo seré

hasta el tedio de la eternidad un án

Escrituaria (Libro) Julián Amado

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