Entrega 3a Herbario

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Encuantra Hoy: - 2 hojas coleccionables. Entrega 3/12 de las páginas informativas que complementan al Herbario de Mi Tierra. Árboles sagrados y míticos Patrocinan: Recortar y coleccionar Entre todos los elementos de la natu- raleza, el hombre primitivo ha rendido especial culto a los árboles. Son símbolo de vida y aparecen en diferentes le- yendas mitológicas relacionadas con la creación del mundo. Una de las costum- bres más antiguas era la de sembrar un ár- bol cerca de la tumba de un ser querido, expresando con ello que éste tenía contacto con el espíritu del difunto y la longevidad del árbol indicaba lo poderoso del espíritu. Otra costumbre es la de colgar adornos y ofrendas en sus ra- mas, como si se tratara de una divini- dad o la reencarnación de un dios. El pino, por ejemplo, el cual se mantiene verde durante el invierno, simbolizaba la reencarnación de Attis, un semi dios de la mitología greco-romana. El bosque fue el templo más antiguo para muchos pueblos; el primer lugar destinado al culto de las divinidades. Luego se construyeron templos y a su alrededor se plantaron bosques. El carácter sagrado de los bosques permitía que los perseguidos por la justicia acudieran a refugiarse en ellos pidiendo asilo. Aunque es- taba permitido podar sus ramas, cortar los árboles era considerado un sacrilegio. En la mitología grecoromana se atribuye a cada dios un árbol espe- cífico, en estrecha relación con su personalidad. El roble para el dios Zeus (Júpiter), el fresno para Posei- dón (Neptuno), el mirto para Hades (Plutón), para Apolo el laurel, el olivo para Atenea (Minerva), el manzano o el pero para Hera (Juno) y el Sauce para Perséfone (Proserpina). La hi- guera o brevo (Ficus carica), estaba dedicada al dios Ares (Marte), quien procreó con Rea a los gemelos Ró- mulo y Remo, fundadores de Roma y que fueron amamantados por una loba y alimentados con los frutos de la higuera. Como esta, son muchas y muy divertidas las leyendas mitológicas que involucran árboles, como las de Éaco y sus hormigas, Faetonte y la conducción irresponsable, Melampo y las carcomas, el hijo del árbol de la Mirra, el búho Ascálafo, Osiris y el peligroso sarcófago, la metedura de pata de Aracne, Prometeo el espía, Hefesto y el detector de mentiras, el Centauro hijo del tilo y el Carnero volador. También en la mitología escandinava, Yggdrasil es un fresno enorme que extiende sus ramas para sostener el mundo, aunando “nueve mun- dos”. El árbol con su sistema radicular oculto pero esen- cial, constituye una poderosa metáfora de las interrelaciones vitales. Para la cultura Celta, los árboles te- nían un especial significado sagrado: el roble (Quercus robur), era símbolo de fortaleza, protección y sabiduría, y tenía la categoría de semi dios. El olivo (Olea europea), el ciprés (Cupressus sempervirens), el manzano (Malus do- mestica), el cedro (Cedrus atlantica), el tejo (Taxus baccata), la encina (Quercus ilex), el fresno (Fraxinus excelsior), el arce (Acer monspessulanum), el sauce llorón (Salix sp.), el avellano (Corylus avellana), el abedul (Betula pendula), el castaño (Castanea sativa), la haya (Fagus sylvatica) y el nogal (Ju- glans regia), entre otros, también se consideraron sagrados. Los hindúes adoraban el Bayán (Ficus benghalensis) pues creían que era la transformación de Brahma. Los sauces (Salix spp.) y el nogal (Juglans neo- tropica), recibían la veneración de los Muiscas. La tala de estos árboles por parte de los misioneros y conquistadores españoles sumó a las razones de guerra entre los indígenas y sus coloniza- dores. En la actualidad el nogal es un árbol en peligro de extinción: en Antioquia está repor- tado para los Altiplanos de Santa Rosa de Osos, Rionegro, Sonsón, Valle del Río Porce y parte de la Cordillera Occidental. Además de ma- derable es muy utilizado como leña y para la fabricación de carbón, debido a su lenta combustión y alto valor calóri- co. La nuez es consumida por el hombre y ciertos animales y sus hojas se emplean en la medicina tradicional. La jagua (Genipa americana) es un árbol sagrado para los Emberá. Conside- ran que les protege su cuerpo, por lo cual, la madera de este árbol se talla en forma de cruz o figura de bastón, se coloca en el cuello y aparta los malos espíritus. El zumo de la fruta verde se toma para limpiar el espíritu en el mo- mento de la muerte. En la cultura Tule (o Cuna) cuando nace una mujer le siembran un árbol de Jagua, el cual es utilizado en diferentes rituales a lo largo de su vida. En Colombia otras plantas han estado ligadas a prácticas chamánicas, como el tabaco, la coca, el yagé y el yopo, las cuales tienen propie- dades alucinógenas que combinadas con ayu- nos, sonidos, efectos lumínicos y movimientos corporales repetidos, inducen estados alterados de conciencia, que les permite a los chamanes conectarse con espíritus o divinidades. Diseño típico Celta Para algunas culturas, como la Griega, en los árboles reencarnaban deidades o a través de ellos sus fuer- zas y poderes se manifestaban. Roma estaba rodeada de bosques sagrados y eran nombrados “ar- bor sancta” algunos árboles consagrados que había al borde de los caminos. El fresno Yggdrasil En el mundo cristiano el árbol tiene un gran valor simbólico: Adán y Eva fueron expulsa- dos del Edén por haber comido del fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal, y Jesucristo murió en una cruz hecha de madera para redimir la humanidad. La abuela Sauce, en la película de Pocahontas (Walt Disney) simboliza la sabiduría. Corte del “Home Tree” (árbol hogar) de la película Avatar, de James Cameron. Cabeza de Buda incrustada en el tronco de un Ficus benghalen- sis, el árbol nacional de la India. Hoy circulan la hoja coleccionable del Tulipán africano y otra en blanco para que la llenes con un árbol que te guste. Espera el próximo miércoles 23 de marzo, las del Casco de Vaca y el Guayabo. El tinte de la fruta de la Jagua es usado por los Emberá para dibujar en su piel diferentes figuras o símbolos se- gún la posición de cada persona en la comunidad. Textos: Carolina Robles

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Entre todos los elementos de la natu-raleza, el hombre primitivo ha rendido especial culto a los árboles. Son símbolo de vida y aparecen en diferentes le-yendas mitológicas relacionadas con la creación del mundo. Una de las costum-

bres más antiguas era la de sembrar un ár-bol cerca de la tumba de un ser querido, expresando con ello que éste tenía contacto con el espíritu del difunto y la longevidad del árbol indicaba lo poderoso del espíritu. Otra costumbre es la de colgar adornos y ofrendas en sus ra-mas, como si se tratara de una divini-dad o la reencarnación de un dios. El pino, por ejemplo, el cual se mantiene verde durante el invierno, simbolizaba la reencarnación de Attis, un semi dios de la mitología greco-romana. El bosque fue el templo más antiguo para muchos pueblos; el primer lugar destinado al culto de las divinidades. Luego se construyeron templos y a su alrededor se plantaron bosques. El carácter sagrado de los bosques permitía que los perseguidos por la justicia acudieran a refugiarse en ellos pidiendo asilo. Aunque es-taba permitido podar sus ramas, cortar los árboles era considerado un sacrilegio.

En la mitología grecoromana se atribuye a cada dios un árbol espe-cífico, en estrecha relación con su personalidad. El roble para el dios Zeus (Júpiter), el fresno para Posei-dón (Neptuno), el mirto para Hades (Plutón), para Apolo el laurel, el olivo para Atenea (Minerva), el manzano o el pero para Hera (Juno) y el Sauce para Perséfone (Proserpina). La hi-guera o brevo (Ficus carica), estaba dedicada al dios Ares (Marte), quien procreó con Rea a los gemelos Ró-mulo y Remo, fundadores de Roma y que fueron amamantados por una loba y alimentados con los frutos de la higuera. Como esta, son muchas y muy divertidas las leyendas mitológicas que involucran árboles, como las de Éaco y

sus hormigas, Faetonte y la conducción irresponsable, Melampo y las carcomas, el hijo del árbol de la Mirra, el búho Ascálafo, Osiris y el peligroso sarcófago, la metedura de pata de Aracne, Prometeo el espía, Hefesto y el detector de mentiras, el Centauro hijo del tilo y el Carnero volador.

También en la mitología escandinava, Yggdrasil es un fresno enorme que extiende sus ramas para sostener el mundo, aunando “nueve mun-

dos”. El árbol con su sistema radicular oculto pero esen-cial, constituye una poderosa metáfora de las interrelaciones vitales.Para la cultura Celta, los árboles te-nían un especial significado sagrado: el roble (Quercus robur), era símbolo de fortaleza, protección y sabiduría, y tenía la categoría de semi dios. El olivo (Olea europea), el ciprés (Cupressus sempervirens), el manzano (Malus do-mestica), el cedro (Cedrus atlantica), el

tejo (Taxus baccata), la encina (Quercus ilex), el fresno (Fraxinus excelsior), el arce (Acer monspessulanum), el sauce llorón (Salix sp.), el avellano (Corylus avellana), el abedul (Betula pendula), el castaño (Castanea sativa), la haya (Fagus sylvatica) y el nogal (Ju-glans regia), entre otros, también se consideraron sagrados. Los hindúes adoraban el Bayán (Ficus benghalensis) pues creían que era la transformación de Brahma.

Los sauces (Salix spp.) y el nogal (Juglans neo-tropica), recibían la veneración de los Muiscas. La tala de estos árboles por parte de los misioneros y conquistadores españoles sumó a las razones de guerra entre los indígenas y sus coloniza-dores. En la actualidad el nogal es un árbol en peligro de extinción: en Antioquia está repor-tado para los Altiplanos de Santa Rosa de Osos, Rionegro,

Sonsón, Valle del Río Porce y parte de la Cordillera Occidental. Además de ma-derable es muy utilizado como leña y para la fabricación de carbón, debido a su lenta combustión y alto valor calóri-co. La nuez es consumida por el hombre y ciertos animales y sus hojas se emplean en la medicina tradicional.La jagua (Genipa americana) es un árbol sagrado para los Emberá. Conside-ran que les protege su cuerpo,

por lo cual, la madera de este árbol se talla en forma de cruz o figura de bastón, se coloca en el cuello y aparta los malos espíritus.

El zumo de la fruta verde se toma para limpiar el espíritu en el mo-mento de la muerte. En la cultura Tule (o Cuna) cuando nace una mujer le siembran un árbol de Jagua, el cual es utilizado en diferentes rituales a lo largo de su vida.En Colombia otras plantas han estado ligadas a prácticas chamánicas, como el tabaco, la coca, el yagé y el yopo, las cuales tienen propie-dades alucinógenas que combinadas con ayu-nos, sonidos, efectos lumínicos y movimientos corporales repetidos, inducen estados alterados de conciencia, que les permite a los chamanes conectarse con espíritus o divinidades.

Diseño típico Celta

Para algunas culturas, como la Griega, en los árboles reencarnaban deidades o a través de ellos sus fuer-zas y poderes se manifestaban.

Roma estaba rodeada de bosques sagrados y eran nombrados “ar-bor sancta” algunos árboles consagrados que había al borde de los caminos.

El fresno Yggdrasil

En el mundo cristiano el árbol tiene un gran valor simbólico: Adán y Eva fueron expulsa-

dos del Edén por haber comido del fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal, y Jesucristo murió en una cruz hecha de madera para redimir la

humanidad.La abuela Sauce, en la película de Pocahontas (Walt Disney) simboliza la sabiduría.

Corte del “Home Tree” (árbol hogar) de la película Avatar, de James Cameron.

Cabeza de Buda incrustada en el tronco de un Ficus benghalen-sis, el árbol nacional de la India.

Hoy circulan la hoja coleccionable del Tulipán africano y otra en blanco para que la llenes con un árbol que te guste. Espera el próximo miércoles 23 de marzo, las del Casco de Vaca y el Guayabo.

El tinte de la fruta de la Jagua es usado por los Emberá para dibujar en su piel diferentes figuras o símbolos se-gún la posición de cada persona en la comunidad.

Textos: Carolina Robles

Encuantra Hoy:- 2 hojas coleccionables.

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Árboles sagrados y míticos

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Entre todos los elementos de la natu-raleza, el hombre primitivo ha rendido especial culto a los árboles. Son símbolo de vida y aparecen en diferentes le-yendas mitológicas relacionadas con la creación del mundo. Una de las costum-

bres más antiguas era la de sembrar un ár-bol cerca de la tumba de un ser querido, expresando con ello que éste tenía contacto con el espíritu del difunto y la longevidad del árbol indicaba lo poderoso del espíritu. Otra costumbre es la de colgar adornos y ofrendas en sus ra-mas, como si se tratara de una divini-dad o la reencarnación de un dios. El pino, por ejemplo, el cual se mantiene verde durante el invierno, simbolizaba la reencarnación de Attis, un semi dios de la mitología greco-romana. El bosque fue el templo más antiguo para muchos pueblos; el primer lugar destinado al culto de las divinidades. Luego se construyeron templos y a su alrededor se plantaron bosques. El carácter sagrado de los bosques permitía que los perseguidos por la justicia acudieran a refugiarse en ellos pidiendo asilo. Aunque es-taba permitido podar sus ramas, cortar los árboles era considerado un sacrilegio.

En la mitología grecoromana se atribuye a cada dios un árbol espe-cífico, en estrecha relación con su personalidad. El roble para el dios Zeus (Júpiter), el fresno para Posei-dón (Neptuno), el mirto para Hades (Plutón), para Apolo el laurel, el olivo para Atenea (Minerva), el manzano o el pero para Hera (Juno) y el Sauce para Perséfone (Proserpina). La hi-guera o brevo (Ficus carica), estaba dedicada al dios Ares (Marte), quien procreó con Rea a los gemelos Ró-mulo y Remo, fundadores de Roma y que fueron amamantados por una loba y alimentados con los frutos de la higuera. Como esta, son muchas y muy divertidas las leyendas mitológicas que involucran árboles, como las de Éaco y

sus hormigas, Faetonte y la conducción irresponsable, Melampo y las carcomas, el hijo del árbol de la Mirra, el búho Ascálafo, Osiris y el peligroso sarcófago, la metedura de pata de Aracne, Prometeo el espía, Hefesto y el detector de mentiras, el Centauro hijo del tilo y el Carnero volador.

También en la mitología escandinava, Yggdrasil es un fresno enorme que extiende sus ramas para sostener el mundo, aunando “nueve mun-

dos”. El árbol con su sistema radicular oculto pero esen-cial, constituye una poderosa metáfora de las interrelaciones vitales.Para la cultura Celta, los árboles te-nían un especial significado sagrado: el roble (Quercus robur), era símbolo de fortaleza, protección y sabiduría, y tenía la categoría de semi dios. El olivo (Olea europea), el ciprés (Cupressus sempervirens), el manzano (Malus do-mestica), el cedro (Cedrus atlantica), el

tejo (Taxus baccata), la encina (Quercus ilex), el fresno (Fraxinus excelsior), el arce (Acer monspessulanum), el sauce llorón (Salix sp.), el avellano (Corylus avellana), el abedul (Betula pendula), el castaño (Castanea sativa), la haya (Fagus sylvatica) y el nogal (Ju-glans regia), entre otros, también se consideraron sagrados. Los hindúes adoraban el Bayán (Ficus benghalensis) pues creían que era la transformación de Brahma.

Los sauces (Salix spp.) y el nogal (Juglans neo-tropica), recibían la veneración de los Muiscas. La tala de estos árboles por parte de los misioneros y conquistadores españoles sumó a las razones de guerra entre los indígenas y sus coloniza-dores. En la actualidad el nogal es un árbol en peligro de extinción: en Antioquia está repor-tado para los Altiplanos de Santa Rosa de Osos, Rionegro,

Sonsón, Valle del Río Porce y parte de la Cordillera Occidental. Además de ma-derable es muy utilizado como leña y para la fabricación de carbón, debido a su lenta combustión y alto valor calóri-co. La nuez es consumida por el hombre y ciertos animales y sus hojas se emplean en la medicina tradicional.La jagua (Genipa americana) es un árbol sagrado para los Emberá. Conside-ran que les protege su cuerpo,

por lo cual, la madera de este árbol se talla en forma de cruz o figura de bastón, se coloca en el cuello y aparta los malos espíritus.

El zumo de la fruta verde se toma para limpiar el espíritu en el mo-mento de la muerte. En la cultura Tule (o Cuna) cuando nace una mujer le siembran un árbol de Jagua, el cual es utilizado en diferentes rituales a lo largo de su vida.En Colombia otras plantas han estado ligadas a prácticas chamánicas, como el tabaco, la coca, el yagé y el yopo, las cuales tienen propie-dades alucinógenas que combinadas con ayu-nos, sonidos, efectos lumínicos y movimientos corporales repetidos, inducen estados alterados de conciencia, que les permite a los chamanes conectarse con espíritus o divinidades.

Diseño típico Celta

Para algunas culturas, como la Griega, en los árboles reencarnaban deidades o a través de ellos sus fuer-zas y poderes se manifestaban.

Roma estaba rodeada de bosques sagrados y eran nombrados “ar-bor sancta” algunos árboles consagrados que había al borde de los caminos.

El fresno Yggdrasil

En el mundo cristiano el árbol tiene un gran valor simbólico: Adán y Eva fueron expulsa-

dos del Edén por haber comido del fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal, y Jesucristo murió en una cruz hecha de madera para redimir la

humanidad.La abuela Sauce, en la película de Pocahontas (Walt Disney) simboliza la sabiduría.

Corte del “Home Tree” (árbol hogar) de la película Avatar, de James Cameron.

Cabeza de Buda incrustada en el tronco de un Ficus benghalen-sis, el árbol nacional de la India.

Hoy circulan la hoja coleccionable del Tulipán africano y otra en blanco para que la llenes con un árbol que te guste. Espera el próximo miércoles 23 de marzo, las del Casco de Vaca y el Guayabo.

El tinte de la fruta de la Jagua es usado por los Emberá para dibujar en su piel diferentes figuras o símbolos se-gún la posición de cada persona en la comunidad.

Textos: Carolina Robles