E N FA S I S D O C T R I N A L 2 0 2 0 A . D.

Regeneración

En Jesucristo, la vida antigua ha pasado: ¡una nueva vida ha comenzado!

Domingo 28 de junio de 2020 A. D. No. 2494

Pa s t o r e s

Fernando López Reyes, Pbro.

Benjamín D. Hernández Chávez, Pbro.

Los últimos versículos del capítulo 9, y durante todo el 10, el evangelista en-seña a la comunidad sobre la encomienda que Jesús da a sus discípulos. Y, la conclusión de este capítulo, habla sobre las bendiciones que recibirán los que escuchen la enseñanza compartida, bendiciones iguales para los discípulos fieles, pues son impulsados a dar de gracia, lo que han recibido de gracia.

Pero, el énfasis que le daremos hoy al pasaje, no radica en las ‘recompensas’ que habrán de recibir los apóstoles fieles y quienes los acojan, sino en el com-promiso que tiene toda la comunidad cristiana de compartir el men-saje de salvación, de salir a la mies del Señor donde el trabajo es abundante. Este mensaje cobra mucha importancia en este día del ministerio cristiano.

En ocasiones, más de las que nos gustaría, cuando hablamos del ministerio cristiano pensamos en los pastores, quienes no pueden eludir tal vocación, pe-ro con este pensamiento restrictivo, reducimos la importancia y las dimensio-nes de la misión del Maestro, y quitamos del panorama evangélico a los acto-res fundamentales de ésta: la iglesia toda.

El Evangelista nos informa, que la misión no es privilegio y deber de los após-toles, sino que la experiencia de fe y el compartir las Buenas Nuevas es com-promiso de todos los creyentes. Toda la iglesia está llamada a ejercer el minis-terio cristiano, por eso nos habla de los apóstoles, y también habla de los pro-fetas, los justos y los pequeños. No me atreveré hoy a descubrir si existe una función o jerarquía en estos párrafos, sino antes bien, sobre el mensaje que incluye a todos los sectores y miembros de la iglesia. Ser siervos (ministros) del Señor es tarea de todos.

Preparémonos para enfrentar esta misión que nuestro Maestro nos confiere, permitamos que la acción del Espíritu opere en nosotros intensamente y este-mos listos para proclamar las buenas nuevas de Dios que da salvación, salud y libertad a todo aquel que lo busca con sinceridad. FLR

11:00 horas

Cuarto Domingo Después de Pentecostés

INTRODUCCIÓN.

. (Salmo 103:8,9,13 NVI)

PRELUDIO MUSICAL (Oración personal en silencio)

LLAMADO PARA ADORAR A DIOS Salmo 13 (RVR-60)

1 ¿Hasta cuándo, Jehová? ¿Me olvidarás para siempre?

¿Hasta cuándo esconderás tu rostro de mí? 2 ¿Hasta cuándo pondré consejos en mi alma,

Con tristezas en mi corazón cada día?

¿Hasta cuándo será enaltecido mi enemigo sobre mí? 3 Mira, respóndeme, oh Jehová Dios mío;

Alumbra mis ojos, para que no duerma de muerte; 4 Para que no diga mi enemigo: Lo vencí.

Mis enemigos se alegrarían, si yo resbalara. 5 Mas yo en tu misericordia he confiado;

Mi corazón se alegrará en tu salvación. 6 Cantaré a Jehová,

Porque me ha hecho bien. Amén.

HIMNO “¡Santo!, ¡Santo!, ¡Santo!” Núm. 16 H. M.

¡Santo!, ¡Santo!, ¡Santo!, Señor omnipotente, siempre el labio mío loores te dará.

¡Santo!, ¡Santo!, ¡Santo!, te adoro reverente, Dios en tres personas, bendita Trinidad.

¡Santo!, ¡Santo!, ¡Santo!, en numeroso coro,

santos escogidos te adoran con fervor; de alegría llenos y sus coronas de oro, rinden ante el trono glorioso del Señor.

¡Santo!, ¡Santo!, ¡Santo!, la inmensa muchedumbre de ángeles que cumplen tu santa voluntad,

ante Ti se postra, bañada con tu lumbre, ante Ti, que has sido, que eres y serás.

¡Santo!, ¡Santo!, ¡Santo!, por más que estés velado

e imposible sea a tu gloria contemplar. Santo, Tú eres solo y nada hay a tu lado,

en poder perfecto, pureza y caridad.

¡Santo!, ¡Santo!, ¡Santo!, la gloria de tu Nombre vemos en tus obras: en cielo, tierra y mar.

¡Santo!, ¡Santo!, ¡Santo!, te adorará todo hombre: Dios en tres personas, bendita Trinidad.

Autor Reginald Heber (1862);

Tr. Juan Bautista Cabrera

Música: John B. Dykes (1861)

ORACIÓN DE PREPARACIÓN + Padre Nuestro

LECTURA BÍBLICA Génesis 22:1-18 (RVR60)

1 Aconteció después de estas cosas, que probó Dios a Abraham, y le dijo: Abraham. Y él respondió: Heme aquí. 2 Y dijo: Toma aho-ra tu hijo, tu único, Isaac, a quien amas, y vete a tierra de Moriah, y ofrécelo allí en holocausto sobre uno de los montes que yo te diré. 3 Y Abraham se levantó muy de mañana, y enalbardó su asno, y tomó consigo dos siervos suyos, y a Isaac su hijo; y cortó leña para el holocausto, y se levantó, y fue al lugar que Dios le dijo. 4 Al tercer día alzó Abraham sus ojos, y vio el lugar de lejos. 5 Entonces dijo Abraham a sus siervos: Esperad aquí con el asno, y yo y el muchacho iremos hasta allí y adoraremos, y volveremos a vosotros. 6 Y tomó Abraham la leña del holocausto, y la puso sobre Isaac su hijo, y él tomó en su mano el fuego y el cuchillo; y fueron ambos juntos. 7 Entonces habló Isaac a Abraham su padre, y dijo: Padre mío. Y él respondió: Heme aquí, mi hijo. Y él dijo: He aquí el fuego y la leña; mas ¿dónde está el cordero para el holocausto? 8 Y respon-dió Abraham: Dios se proveerá de cordero para el holocausto, hi-jo mío. E iban juntos. 9 Y cuando llegaron al lugar que Dios le había dicho, edificó allí Abraham un altar, y compuso la leña, y ató a Isaac su hijo, y lo puso en el altar sobre la leña. 10 Y extendió Abraham su mano y tomó el cuchillo para degollar a su hijo. 11 Entonces el ángel de Jehová le dio voces desde el cielo, y dijo: Abraham, Abraham. Y

él respondió: Heme aquí. 12 Y dijo: No extiendas tu mano sobre el muchacho, ni le hagas nada; porque ya conozco que temes a Dios, por cuanto no me rehusaste tu hijo, tu único. 13 Entonces alzó Abraham sus ojos y miró, y he aquí a sus espaldas un carne-ro trabado en un zarzal por sus cuernos; y fue Abraham y tomó el carnero, y lo ofreció en holocausto en lugar de su hijo. 14 Y llamó Abraham el nombre de aquel lugar, Jehová proveerá. Por tanto, se dice hoy: En el monte de Jehová será provisto. 15 Y llamó el ángel de Jehová a Abraham por segunda vez desde el cielo, 16 y dijo: Por mí mismo he jurado, dice Jehová, que por cuanto has hecho esto, y no me has rehusado tu hijo, tu único hi-jo; 17 de cierto te bendeciré, y multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena que está a la orilla del mar; y tu descendencia poseerá las puertas de sus enemigos. 18 En tu simiente serán benditas todas las naciones de la tierra, por cuanto obedeciste a mi voz.. Amén

CANTICOS DE ALABANZA

HIMNO “Señor, mi Dios” Núm. 113 H. M.

Señor, mi Dios, al contemplar los cielos,

el firmamento y las estrellas mil,

al oír tu voz en los potentes truenos

y ver brillar al sol en su cenit,

CORO

mi corazón se llena de emoción:

¡Cuán grande es Él! ¡Cuán grande es Él!

Mi corazón se llena de emoción:

¡Cuán grande es Él! ¡Cuán grande es Él!

Al recorrer los montes y los valles

y ver las bellas flores al pasar,

al escuchar el canto de las aves

y el murmurar del claro manantial,

CORO

Cuando recuerdo del Amor divino

que desde el cielo al Salvador envió,

aquel Jesús, que por salvarme vino,

y en una cruz sufrió, por mí murió,

CORO

Cuando el Señor me llame a su presencia,

al dulce hogar, al cielo de esplendor,

le adoraré, cantando la grandeza

de su poder y su infinito amor,

CORO

Autor: Stuart K. Hine (1953), Tr. A. W. Hotton

Musica: Stuart K. Hine (1953)

HIMNO “Voz de Gratitud” Núm. 314 H. M. “La Gloria de Cristo”

La gloria de Cristo el Señor cantaré,

pues llena mi vida de gozo y de paz;

callar los favores que de Él alcancé,

mi labio no puede jamás.

CORO

Es todo bondad para mí,

con Él nada puedo desear,

pues todos mis altos deseos aquí,

tan sólo Él los puede llenar.

En horas de angustia conmigo Él está,

y puede escuchar su dulcísima voz

que me habla, y su paz inefable me da,

la paz infinita de Dios.

CORO

Si a rudos conflictos me mira que voy,

me deja hasta el fin a mi solo luchar,

mas pronto, si ve que cediendo ya estoy,

socorro me viene a prestar.

CORO

También cuando gozo lo miro llegar,

y entonces mi dicha la aumenta el Señor,

ya llena mi copa, la veo rebosar,

con todos sus dones de amor.

CORO

Autor: Thomas O. Chisholm. (1923)

Musica:. William M Runyan (1923)

Tr. Honorato Reza

ORACIÓN PASTORAL DE INTERCESIÓN

— Acción de Gracias por el Ministerio Cristiano, el Pastoral y

XXXVII Aniversario Matrimonio Fabián Martínez—

HIMNO “Momento Nuevo” Núm. 290 H. M. V.

Dios hoy nos llama a un momento nuevo,

a caminar junto con su pueblo.

Es hora de transformar lo que no da más

y solo y aislado no hay nadie capaz. Por eso, …

CORO

¡Ven, entra a la rueda con todos!

¡También tú eres muy importante!

Por eso, ¡Ven entra a la rueda con todos!

¡También tú eres muy importante! ¡Ven!

Ya no es posible creer que todo es fácil,

hay muchas fuerzas que producen muerte;

nos causan pena, tristeza y desolación.

Es necesario afianzar nuestra unión. Por eso, …

CORO

La fuerza que hace hoy brotar la vida

obra en nosotros dándonos su gracia.

Es Dios quien hoy nos convida a trabajar,

su amor repartir y las fuerzas juntar. Por eso…

CORO

Autor: Creación Colectiva

Tr. Pablo Sosa, alt.

Música: Creación Colectiva

LECTURAS BÍBLICAS Mateo 10:40-42 Romanos 6:12-23.

40 El que a vosotros recibe, a mí me recibe; y el que me recibe a

mí, recibe al que me envió. 41 El que recibe a un profeta por cuan-

to es profeta, recompensa de profeta recibirá; y el que recibe a un

justo por cuanto es justo, recompensa de justo recibirá. 42 Y cual-

quiera que dé a uno de estos pequeñitos un vaso de agua fría sola-

mente, por cuanto es discípulo, de cierto os digo que no perderá

su recompensa. Mateo 10:40-42 (RVR 60)

“Gozo que se contagia” MENSAJE

11:00 hrs. Los Pastores

ORACIÓN DE AFIRMACIÓN

ADORACIÓN A DIOS CON DIEZMOS Y OFRENDAS

• Presentación (Todos): Tuya es, oh Señor, la magnificencia y

el poder, y la gloria, la victoria y el honor. Tuyas son todas

las cosas en los cielos y en la tierra; todo es tuyo, y de lo re-

cibido de tu mano te damos hoy. Amén.

• Oración de consagración

HIMNO DE CONFIRMACIÓN

“Jesús, Yo he Prometido” Núm. 66 H. M.

Jesús, yo he prometido, servirte con amor.

Concédeme tu gracia, mi Amigo y Salvador.

No temeré en la lucha, si Tú a mi lado estás,

ni perderé el camino, si Tú guiando vas.

El mundo está muy cerca y abunda tentación;

cuán suave es el engaño y es necia la pasión.

Ven Tú, Jesús más cerca, mostrando tu piedad

y escuda el alma mía de toda iniquidad.

Cuando mi mente vague, ya incierta, ya veloz,

concédeme que escuche, Jesús, tu clara voz:

Anímame si dudo; inspírame también;

repréndeme si temo en todo hacer el bien.

Jesús, Tú has prometido a todo aquel que va,

siguiendo tus pisadas, que al cielo llegará.

Sostenme en el camino, y al fin con dulce amor,

trasládame a tu gloria, mi Amigo y Salvador.

Autor John E. Bode (ca. 1866)

Tr. Juan Bautista Cabrera

Música: Arthur H. Mann (1881)

BENDICIÓN APOSTÓLICA

POSTLUDIO Organista: Hno. Gerardo Ríos Reséndiz.

Ministros de Canto: Hno. David Hernández Cárdenas Hno. Luis Gerson Ríos Ortiz, Hna. Yollitzin Cuateta Ortiz

SEGUIMOS EN ROJO. Al editar esta edición del boletín domi-nical el semáforo epidemiológico continuaba en rojo, por lo que todavía no tenemos fecha para la reapertura de nuestras activida-des de manera presencial en el santuario y sus anexos. Escucha-mos las voces a nuestro alrededor y sabemos de más contagios y más decesos, por lo que les animamos a presentarnos en oración intercediendo por nuestras familias, nuestra ciudad, nuestra patria

y por todo el mundo, para que Dios manifieste su gracia y nos de fortaleza para vencer a esta pandemia. Por lo pronto, no bajemos la guardia y sigamos atendien-do las recomendaciones sanitarias personal y de nuestros espacios. Tan pronto podamos regresar al culto público en este espacio, lo estaremos informando.

DÍA DEL PASTOR. Es una tradición en nuestra iglesia que el último domingo se cele-

bre el día del pastor. Nos unimos en oración de gratitud por todos los ministros pastores

que han servido al Señor en nuestra congregación desde 1873, el recuerdo de estos perso-

najes los atesoramos en nuestro congregación por su testimonio fiel, amistad sincera y

entrega desinteresada. ¡Gloria sea a Dios por los que ya descansan de sus trabajos! y re-

cibieron su galardón, intercedemos por los que están en activo y continúan sirviendo al

Señor en lnuestra Iglesia Metodista de México. En particular abrazamos a nuestros pasto-

res actuales Fernando López Reyes y a Benjamín David Hernández Chávez, Dios los

bendiga abundantemente, con salud, sabiduría y paz, junto con su respectiva familias.

INTERCEDAMOS POR NUESTROS HERMANOS: