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Yo... (¡Dios los bendiga!),... yo le amo (con todo mi corazón),

Porque Él a mí me amó... Dios lo bendiga, Hermano Neville.

EL SÉPTIMO SELLO

24 de marzo de 1963, servicio en la noche

Jeffersonville, Indiana, EE.UU. 1 Gracias, hermano. Mientras permanecemos de pie, oremos. 2 Dios Todopoderoso, autor de la Vida y dador de toda buena dádiva espiritual, estamos verdaderamente agradecidos ahora por este tiempo tan maravilloso y sobresaliente de compañerismo en Tu Presencia; marca un gran punto culminante en nuestras vidas, Señor, un tiempo que nunca olvidaremos, no importa cuánto tiempo deberíamos permanecer. Y pedimos, Dios, que en esta noche de clausura... Nos estamos fijando en la Escritura, que en el día de clausura de la fiesta, Jesús se puso en pie entre ellos y clamó: “¡Si alguno tiene sed, venga a Mí!”. Y pido, Padre Celestial, que eso se repita esta noche, que podamos oír la Voz de nuestro Señor llamándonos, y llamándonos a Su servicio, a caminatas más cercanas. Sentimos que ya hemos oído Su Voz en la apertura de estos Sellos, hablando que es el día postrero, y que el tiempo está cerca. Concede estas bendiciones que estamos pidiendo, Padre, en el Nombre de Jesucristo, y para Su gloria. Amén. Se pueden sentar. 3 Me gustaría añadir esto, que de todos los servicios que yo haya tenido en mi vida, yo creo que esta semana ha sido el tiempo más glorioso de toda mi vida en los servicios. No importa lo que yo he... Yo he visto grandes milagros realizados, por supuesto, antes, en servicios de sanidad, pero esto va más allá que eso. Ha sido uno de los grandes tiempos, puntos culminantes de mi vida, el estar aquí. Y viendo el pequeño tabernáculo tomar una apariencia diferente; no sólo eso, ¡sino también el interior tomar una apariencia diferente! 4 Y, ahora, le estaba preguntando a Billy... él se tardó tanto en venir y recogerme. Él dijo que había habido otro grupo que fue bautizado, lo cual ya son más de cien, esta semana, de personas siendo bautizadas en el Nombre de nuestro Señor Jesucristo. Así que, estamos–estamos agradecidos. ¡Y Dios los bendiga!

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5 Y, ahora, si no tienen una iglesia adonde asisten regularmente, los invitamos aquí, para que vengan y tengan compañerismo con nosotros. Sólo recuerden que la iglesia está abierta. Nosotros no somos una denominación, y espero y confío que nunca será una denominación. Sólo un compañerismo en donde hombres y mujeres, y jóvenes y jovencitas, se reúnen alrededor de la mesa de Dios, y tienen compañerismo alrededor de la Palabra, y tenemos todas las cosas en común. 6 Miren, y tenemos un pastor maravilloso, un verdadero hombre de Dios, y estoy tan agradecido por eso. Si Uds. recuerdan una visión hace un año, que Alimento fue almacenado en el lugar. Y así es exactamente. Y nosotros estamos... 7 Nosotros tenemos el lugar adecuado ahora para las clases de la escuela dominical, para todas las edades, y simplemente estamos muy agradecidos por esta oportunidad. Algunos han dicho, en el pasado, que si tan sólo tuvieran clases de escuela dominical adonde ellos pudieran enviar a sus niños. Ahora Uds.... ahora las tienen. Así que, ahora, así que sólo vengan y estén con nosotros si no tienen una iglesia adonde puedan asistir. 8 Por supuesto, si tienen una buena iglesia adonde Uds. asisten, y predican el Evangelio, y demás, pues, ese es–ese es simplemente otro grupo de nosotros, ¿ven Uds.?, en alguna otra parte. Pero si no tienen un hogar, y Uds. están... 9 Entiendo que varios se habían... se han mudado de otras partes del país, para hacer de esta su iglesia. Y ciertamente les damos a Uds. la bienvenida a la Palabra del Señor. Y recuerdo, supongo, cuando me fui les dije que–que los servicios, por lo que a mí respectaba, serían aquí en el tabernáculo. 10 No sé todavía todo lo que el Señor tenga para mí en el futuro. Yo dejo eso en Su mano, no en alguna superstición o algo. Sólo espero, día tras día, para que Él me dirija al lugar en el que pueda servirle mejor. Y cuando haya terminado conmigo, entonces confío que Él me recibirá en Casa, en paz. 11 Y, ahora, estoy muy agradecido por la cooperación de las personas del tabernáculo. Como Billy me estaba diciendo esta semana, que, creo que todo hogar que está representado aquí, en

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directamente hacia mí. Miren, ese es este Séptimo Sello. Todavía es una cosa notable. Y estamos... No sabemos lo que es, hasta ahora, porque no se permitió que fuera abierto. 408 Pero ahora, cada uno de Uds. en la reunión se ha fijado en eso: ¡qué reunión ha sido! Simplemente parecía que todos estaban en la orilla de sus asientos. Y todos parados aquí alrededor, a la una, dos de la tarde, esperando que las puertas se abrieran, y vinieran aquí al frente. Parados junto a las paredes, con las piernas entumecidas, y todo. 409 ¿Qué es eso? Ha sido el Espíritu Santo enviando estos mensajeros, y ellos nos lo han estado revelando. Y luego fíjense cómo ha encajado exactamente con la Palabra. 410 Y luego para hacerles saber que esta es la Verdad, Él lo predijo hace como–como dos meses, o más, antes que aun sucediera. Que, cuando fui al oeste, sin saberlo; regresé aquí con la interpretación como Él la ha dado. Recuerdan ahora, en la visión, Él nunca me dijo nada en la visión cuando Él me levantó. Tenía temor, temor de que iba a morir, ser matado en una explosión. ¿Ven Uds.?, ellos no lo podían hacer. 411 La interpretación vino justamente cuando yo tenía necesidad de ella; eso fue en el cuarto, y yo la di exactamente como Él la dio. 412 Ahora, ¿ven Uds.?, amigos, las visiones no fallan. Siempre son perfectas. Ellas son exactamente la verdad. 413 Miren, la visión más la Palabra, más la historia, más las Edades de la Iglesia, y todo, armonizó. Así que, yo verdaderamente puedo decir que a lo mejor de mi entendimiento, y según la Palabra de Dios, y la visión, y la revelación, la interpretación de Ello es ASÍ DICE EL SEÑOR. 414 Ahora que el Señor los bendiga a todos, a cada uno, muy ricamente, mientras nos ponemos de pie y cantamos este buen canto antiguo de la iglesia. Dios los bendiga a cada uno. Amén. 415 [El Hermano Branham añade las siguientes cuatro líneas tomadas del párrafo 374 de su Mensaje de la noche anterior, el 24 de marzo de 1963–Ed.].

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Hora Es? Bueno, miren, eso es exactamente lo que están viendo ahora. Los siete ángeles... yo estaba en el oeste. 403 Uds. recuerdan los mensajeros pequeñitos, cómo ellos se fueron al este. Los segundos mensajeros, las palomas, un ave un poquito más grande, ellas se fueron al este. Y luego miré... Estaban conmigo todo el tiempo. Ese fue ese Primer y Segundo Jalón. 404 Miren, el Tercero vino del oeste, pasando rápidamente con una gran velocidad tremenda, y me levantaron. Eso fue regresar al este con el misterio de estos Siete Sellos. Exactamente como fue dicho en–en el sueño de Junior Jackson que el Señor me permitió interpretarle allí: “En la parte interior de esa pirámide, había Piedra blanca que no había nada escrito en Ella”. Por esa razón tuve que ir al oeste para conectarme con el Mensaje de estos ángeles, para regresar aquí para revelárselo a la iglesia. Recuerdan que yo dije: “Las siguientes cosas que acontezcan serán aquí en la iglesia”. Eso es exactamente. 405 Otra cosa, quiero que se fijen en lo que aconteció. Y si están escuchando la cinta de Señor, ¿Qué Hora Es?, Uds. se fijan que un ángel era muy notable para mí. El resto de ellos sólo parecían ordinarios. Pero este ángel era un ángel notable. Él estaba a mi izquierda, en la constelación en la forma de una pirámide. 406 Y, Uds. recuerdan, que fue en la pirámide, en donde estaba la Piedra blanca misteriosa que no había nada escrito en Ella. Y los ángeles me metieron en esa pirámide de ellos mismos, los misterios de Dios dados a conocer sólo a ellos. Y, miren, esos eran los mensajeros que habían venido a interpretar esa pirámide, o ese Mensaje del secreto de estos Siete Sellos que están por dentro de la pirámide. 407 Miren, el ángel estaba a mi izquierda, realmente sería el último, o el séptimo ángel, si los contáramos de izquierda a derecha. Porque él estaba a mi izquierda; yo mirando hacia él, hacia el oeste, él viniendo hacia el este, estaría al lado izquierdo. Así que ese sería el Mensaje del último ángel: muy notable. Recuerdan cómo yo dije que él tenía su, tenía su rostro hacia atrás, y sus grandes alas puntiagudas, y cómo él voló

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este tabernáculo, están hospedando a alguien con ellos. Abrieron

sus hogares y lugares, y recibieron personas que no hubieran

tenido lugar adonde ir. Miren, esos son verdaderos actos

Cristianos. Y algunos hogares simplemente han acomodado a

todos en cada pequeño rincón que pudieron, para conseguirles a

las personas un lugar para hospedarse.

12 Porque este ha sido un tiempo muy difícil, por causa de

este... algún tipo de evento que había estado llevándose a cabo,

relativo al mundo deportivo, algún tipo de baloncesto

[básquetbol–Trad.], o algo, y–y las reservaciones habían sido

hechas. Además de un gran grupo de...

13 Creo que representados aquí en esta iglesita, hay cerca de

alrededor de veintiocho o treinta estados representados aquí

mismo en la iglesia, además de dos naciones extranjeras, así

que... y en este pequeño avivamiento. Así que, eso toma

bastante espacio, en sí mismo. Sé de...

14 Estaba preguntándoles hoy a algunas personas. Yo dije:

“Entiendo que no había muchas personas de Jeffersonville por

aquí en la reunión”.

15 Alguien expresó claro y dijo: “No podemos entrar”. Bueno,

eso–eso era todo. Esa fue la razón. Algunos de la policía, y

demás, querían venir a la reunión, pero dijeron, habían estado

hablando, dijeron, pero ellos vinieron y no pudieron entrar

porque ya estaba lleno, aun antes de la hora que podían entrar.

Así que ellos tuvieron su tiempo, tal vez, una vez, y no vinieron.

Así que, ahora las personas están viniendo de otros lugares. Así

que estamos muy agradecidos.

16 Ahora, yo no sé. Lo siguiente que seguiría a esto, serían las

Siete Trompetas, en otro mensaje. Pero en los Sellos,

prácticamente todo está incluido. Las Edades de la Iglesia

aparecieron, y las colocamos primero, que fue de suma–que fue

de suma importancia, pero las... de ese tiempo. Miren, la

apertura de los Sellos muestra adonde va la Iglesia, y cómo

termina. Y ahora, yo creo que el Padre Celestial ciertamente ha

sido bondadoso con nosotros por permitirnos ver lo que tenemos.

17 Y yo digo esto, repasando unas notas viejas de las cuales

prediqué hace muchos años, yo sólo venía y decía lo que yo

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pensaba que estaba correcto, y seguía adelante. Estaba muy fuera de línea. Y ahora, todos esos cuatro Sellos los traje como en un sermón de veinte minutos, todos ellos. Los cuatro jinetes de Apocalipsis, los agrupé todos y dije: “Un caballo blanco salió”, yo dije, “quizás esa es la–la–la edad primitiva. Y el siguiente caballo salió representando el hambre”, y así sucesivamente. Pero, oh, cuando la Palabra fue realmente abierta, estaba a cien de millas de eso. 18 Así que, nos conviene vigilar y esperar. Y quizás tenía que ser este tiempo para hacerlo. Puede que haya muchas cosas que han sido dichas, que pudieran ser desagradables para otras personas. Pero yo creo que cuando el gran tiempo del fin llegue y nos encontremos con nuestro Señor, se darán cuenta de que Eso estaba correcto. Realmente eso–eso–eso es así. 19 Ahora bien, personas que vienen de fuera de la ciudad, de varios lugares circunvecinos, que vienen de varios estados y naciones, ¡cuánto aprecio su sinceridad para viajar toda esa distancia, y tomar sus vacaciones! ¡Y algunos de ellos incluso sin lugares para hospedarse! Yo–yo sé, porque he podido ayudarles a algunos de ellos a conseguirles un lugar para hospedarse. Aun sin dinero para comer, ni algo más, y así que... y aun venir, de todos modos, con la expectativa de que algo suceda para que se encargue de eso. Y con una fe tan grande en eso, que no importa si tienen que estar sin comer, o aun un lugar para hospedarse, ellos quieren venir a oír esos... esas cosas suceder, de todos modos. Eso es verdaderamente valeroso, Uds. saben. ¡Y todos han estado en esto en un cien por ciento! 20 Me encontré con mi cuñado allá atrás, el que fue el–el... se encargó de la albañilería de la iglesia, y demás. Y yo estaba diciéndole acerca de cuánto apreciaba su trabajo. Yo no soy un–un albañil, ni sé nada al respecto. Pero sí sé lo que es una esquina en ángulo recto, y si está más o menos bien colocada. 21 Y él dijo: “Permíteme decirte”. Él dijo: “Casi nunca ha habido un tiempo, en que uno haya visto tal armonía entre hombres, cuando todos trabajaban juntos”. 22 El Hermano Woods, el Hermano Roberson, y todos simplemente estaban en su lugar, y todo. Y el hermano que–que instaló la acústica, la... quiero decir el equipo de sonido y todo,

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ellos le hicieron esa pregunta, Él llegó a eso. Él dijo acerca de Israel reuniéndose como una nación en el versículo 31, de Mateo 24:31. Pero luego Él comenzó con las parábolas, ¿ven? Entonces Uds. ven la... “De la higuera aprended la parábola. Cuando veáis que echan sus brotes, pues, sabéis que la primavera está cerca. Y luego cuando veáis esto acontecer, entonces conoced que el tiempo está cerca”. ¿Ven?, Israel reuniéndose en su propia tierra natal. Pero, si se fijan, Él omitió la revelación de este Séptimo Sello. 399 Y aquí cuando el Séptimo Sello, cuando Él lo abrió, Él también lo volvió a omitir, ¿ven? Así que vemos que es un misterio completo; por lo tanto, la hora todavía no es para que este misterio sea conocido. Por lo tanto, hemos llegado hasta aquí, y el resto de Ello será dado a conocer más o menos cerca del tiempo en que Jesús aparezca de nuevo sobre la Tierra, por Su Novia, o lo que acontezca en ese tiempo. Miren, hasta ese tiempo, sólo oremos todos, vivamos vidas Cristinas buenas y rectas, esperando con expectativa Su Venida. 400 Y ahora si acontece que esta cinta caiga en la mano de algunas personas en alguna parte, no traten de hacer algún ismo de ello. Lo único que tienen que hacer: sólo continúen sirviendo a Dios. Porque este gran secreto es tan grande que Dios ni siquiera le permitió a Juan escribirlo. Tronó, pero Él... sabiendo que... prometiéndonos que sería abierto. Pero, hasta este tiempo, no está abierto. 401 Y ahora estamos agradecidos con Dios por lo que Él nos ha mostrado. Yo he estado en el cuarto allá por ocho días. Y el Mensaje que acabo de explicarles, muchos de Uds. aquí entenderán. Y yo les afirmé que había algo espiritual aconteciendo todo el tiempo, que estaba seguro que estaban fallando en verlo. Y aquí está lo que es: es la vindicación absoluta de esta interpretación de las Escrituras siendo enviadas por Dios. 402 Porque antes que aun entráramos en Ello, y yo salí para ir al oeste, el Señor me mostró una visión un día, como a las diez, una mañana. Y yo vine y la expliqué aquí que la había visto; no sabía lo que era. Era una constelación de siete ángeles. Recordaremos eso. Lo hallarán en la cinta llamada, Señor, ¿Qué

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dijo: “Sólo Dios mismo sabía, ni siquiera los ángeles”. Con razón ni siquiera fue escrito. ¿Ven Uds.?, se callaron; nada aconteció en ese tiempo. Los ángeles no lo saben. Nadie sabe cuándo Él viene. 393 Pero habrá–habrá Siete Voces de estos Truenos que revelarán la gran revelación en ese tiempo. Así que, yo creo, para nosotros quienes... Si no lo sabemos, y si nosotros... No será conocido hasta ese tiempo. Pero será revelado en aquel día, en la hora en que debe ser revelado. Así que lo que tenemos que hacer es ser reverentes ante Dios y servirle, y hacer todo lo que sabemos hacer y vivir buenas vidas Cristianas. Aquí, ahora, nos damos cuenta de que el Sexto Sello ha sido abierto para nosotros; lo vemos. Y sabemos que este Séptimo Sello no puede ser abierto al público hasta que esa hora llegue. 394 Miren, había una razón por la que Dios permitió que estas Siete Voces tronaran. Porque esto debe venir, ¿ven? Porque la... Nos damos cuenta de que Cristo, el Cordero, tomó el–el Libro en Su mano, y abrió ese Séptimo Sello. Pero, ¿ven Uds.?, es un misterio escondido. Nadie lo sabe. Pero, Eso–Eso va junto con lo que Él dijo: “Nadie sabría Su Venida”. Ellos tampoco sabrían acerca de este misterio de los Siete Truenos. Así que, ¿ven Uds.?, está conectado. 395 Hasta allí tenemos el entendimiento de Ello hoy, porque todo el resto de Ello está revelado; pero esto no está revelado. Pero al estar en mi cuarto, y oí esto... o, no lo oí, mejor dicho, pero lo vi desenvolverse en estos Siete Truenos. Ahora, hasta allí es donde podemos llegar, hasta allí. 396 Y ahora confío en que todos y cada uno de Uds. le servirán a Dios y harán aquello que es correcto, y le amarán toda su vida, y le servirán. Y Dios se encargará del resto. 397 Miren, tenemos, en la consumación aquí ahora, por la gracia de Dios, todos los misterios de los seis Sellos que han estado sellados, y entendemos y sabemos aquí que el Séptimo Sello no se debe dar a conocer al público. 398 Miren, Su Venida, en la hora de Su Venida, cuando la destrucción de la Tierra, Uds. saben, Él dijo allí: “¿Qué señal habrá de la venida del fin del siglo?”. En Mateo 24, allí cuando

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en la iglesia. Ellos dijeron: “Todo simplemente funcionó bien”. Cuando ellos necesitaban algo, ahí estaba el hombre correcto para hacerlo. Así que es... Dios está en todo el programa. Estamos muy agradecidos por esto. 23 Hubo muchos grandes donadores en la iglesia, para ayudar a hacerlo, como nuestro Hermano Dauch y la Hermana Dauch sentados aquí, y muchos otros que han donado mucho para esta causa. Y creo que justo en ese momento... a ellos no les queda sino un poquito y todo será pagado. Así que estamos muy agradecidos por esto. 24 Recuerden, es su iglesia, porque Uds. son un siervo de Cristo. Y para eso ha sido construido aquí, una puerta abierta para hacer siervos, y para que siervos que ya son siervos de Cristo, entren y disfruten ellos mismos el estar alrededor del compañerismo de Jesucristo. Y queremos que sepan que todos son bienvenidos. 25 Y miren cuando Uds. me oyen a veces, bajo el tiempo de la Unción, más o menos reprender a la organización, yo–yo no quiero decir eso en contra de su pastor, o en contra de algún hermano, hermana, en la iglesia. Porque, después de todo, Dios tiene personas en toda organización que hay. Pero Él no acepta la organización; Él acepta al individuo en la organización. Y la... No se requiere una organización. 26 Por lo tanto, cuando la gente se envuelve tanto en la organización, entonces ellos no pueden ver nada más sino sólo lo que dice esa iglesia, ¿ven Uds.? Y eso causa que dejen de tener compañerismo con otros, y es un sistema del cual Dios no se agrada, y es un asunto mundano, nunca ordenado por Dios. 27 Así que, ahora, yo no me refiero a algún individuo. Católico, Judío, lo que pudiera ser, o–o Metodista, Bautista, Presbiteriano, alguna organización, ni organización, y–y los que no son denominacionales, y todos, Dios tiene Sus hijos situados allí. ¿Ven? Y muchas veces creo que están situados allí para un propósito, para dar Luz, sacando a esos predestinados de todas partes. Y–y en ese gran día veremos entonces, la Iglesia del Señor Jesucristo que será llamada a la–a la gran reunión en el aire, y todos subiremos a encontrarnos con Él. Y yo estoy–yo estoy buscando esa hora.

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Miren, ¡hay tanto que pudiera ser dicho!

28 Y esta noche, en la última noche de clausura, ya que por lo

general todos están... En un servicio de sanidad, me doy cuenta

de que están bajo expectaciones para que grandes cosas sean

hechas en el servicio de sanidad, lo cual les causa tensión,

nerviosismo. Y luego hallo la misma cosa esta noche, que todos

están bajo expectativa de ver cómo... Y cada noche ha sido de

esa manera para la apertura de esos Sellos.

29 Ahora yo quiero hacer esto muy claro. Cada vez, cada vez

que estos Sellos han llegado al punto, de todo lo que he creído

alguna vez de Ellos, y que he leído de otras personas, ha sido

contrario a lo que me vino en el cuarto.

30 Y mi mente, en este tiempo... La razón que yo tuve ese

servicio de sanidad esta mañana, es porque mi mente humana

está llegando a estar tan apartada de mi propia manera de

pensar. Yo he tratado de permanecer en un–en un cuarto con las

persianas cerradas, y con una luz encendida. Este es el octavo

día. Y ni siquiera me subí a mi automóvil, para–para ir a alguna

parte.

31 Tuve que ir con algunos hermanos, al banco, para firmar

algunos pagarés y tramites, sobre cosas y un dinero que se

había pedido prestado para esta iglesia. Pero yo–pero yo regresé

inmediatamente y me fui directamente a estudiar.

32 Y lo extraño es que no ha habido ni una sola persona que

haya dicho algo. O, por lo general, están llamando a la puerta e

insistiendo, y... por ahí. No ha habido ni una sola cosa. Ha sido

muy fenomenal.

33 En donde he estado comiendo, con el Hermano Woods, por lo

general, ese lugar está lleno de automóviles. Y había ocho o diez

personas diferentes que iban a venir a hospedarse con ellos

durante este tiempo, y ni una sola de ellas vino.

34 Entonces, esta mañana, nunca olvidaré esta mañana, la

gracia de nuestro Salvador para Su siervo cansado y agotado.

Cuando yo había contestado la pregunta de una pobre persona, y

según a lo mejor de mi entendimiento, pensando que había

hecho lo correcto. Y, de repente, como si yo le hubiera–si yo le

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387 Ahora nos damos cuenta, también en esto, que el Sexto Sello, ahora estando abierto, era con un propósito triple. Miren, aquí están los propósitos. 388 Lo primero fue que la virgen durmiente tenía que pasar por el período de la tribulación para purificación. Ella tenía que ser purificada de sus pecados de incredulidad y por rechazar el Mensaje. Esto, se hizo con ella en el período de la tribulación. Vemos que surgen aquí en Apocalipsis 7, entre el capítulo 6 y 7 aquí, que ella había sido purificada, y a ella se le habían dado sus ropas. Miren, ella no es la Novia. Pero es la iglesia, la gente pura que–que–que no tuvo la oportunidad, quizás, de recibir el Mensaje, o en alguna forma ellos fueron cegados por estos falsos profetas. Y ellos–ellos no tuvieron una oportunidad, y, sin embargo, ellos son verdaderamente sinceros de corazón. Y Dios conoce su corazón. Y aquí ellos son purificados durante este tiempo. 389 Uds. se fijan que hay otro tiempo de purificación: eso es para Israel, cuando ella se reúna. Esa es la segunda parte. Dios purifica a Israel en el período de la tribulación. De los millones que se reunirán allí, habrá ciento cuarenta y cuatro mil seleccionados, y ellos también serán purificados. Dios está purificando a Israel. 390 Fíjense, hay toda una Tierra que ha de ser purificada. Habrá tal cosa que la Luna, las estrellas, y toda la naturaleza serán purificadas. ¿Ven lo que es? La Tierra se está renovando a sí misma, siendo purificada, siendo preparada para el Milenio. El Milenio se está aproximando. Y, ¿ven?, todo lo que tenga algo inmundo en ello ha de ser purificado durante el Sexto Sello. 391 Ahora, miren, ¿se fijan? En la apertura de este Séptimo Sello, también es en un misterio triple. De este yo he... hablaré y he hablado, que es el misterio de los Siete Truenos. Los Siete Truenos en el Cielo revelarán este misterio. Será exactamente en la Venida de Cristo, por cuanto Cristo dijo que nadie sabe cuándo Él regresaría. 392 ¿Se fijaron cuando los judíos le preguntaron eso? “Sabed...”. Cuando comparamos la Escritura aquí con Mateo 24, con los seis Sellos, el Séptimo Sello fue omitido. Porque, ¿ven Uds.?, Cristo

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379 Ahora yo quiero que se fijen, esta noche, que en el Sexto Sello, hubo un–un propósito triple del Sexto Sello. Hubo un propósito triple de los jinetes. 380 Ha habido un propósito triple en todas estas cosas. Eso nos regresa a un tres y a un siete otra vez, ¿ven?, Siete Sellos, Siete Copas, y demás. Miren, tres y sietes son los números de Dios en Sus matemáticas para revelar Su Palabra. 381 Ahora fíjense, como en los–los–los jinetes, miren, había tres caballos que salieron. Uno de ellos era blanco, uno era rojo, uno era negro. Y luego en el cuarto caballo, pues, todos ellos fueron mezclados. ¿Ven?, un propósito triple. 382 Miren, Dios hizo la misma cosa. Dios hizo lo mismo cuando Él envió Su león, el cual era Su Palabra, para combatir al anticristo. 383 Luego nos dimos cuenta de que Él envió el buey durante el tiempo del–del período de la tribulación, el animal de sacrificio. Y en este período de tribulación, eso es todo lo que la gente podía hacer: era sólo laborar, ser esclavos, y ofrecerse a sí mismos como sacrificio. 384 Luego nos dimos cuenta de que en la siguiente edad, la cual era la edad de los reformadores, Dios envió la sabiduría de un hombre, un rostro como de hombre sobre el ser viviente, el cual era el poder que salió en los reformadores. 385 Ahora, ¿se fijaron? Cada... Con razón las personas de estos días todavía viven de lo que quedó del pasado, como fue en la edad de los reformadores, porque ellos sólo lo ven en la–la manera eclesiástica de mirarlo. Ellos lo ven en la manera que los seminarios lo han enseñado. Esa fue la manera de Dios en un tiempo, pero vivimos más allá que eso. 386 Ahora estamos en la edad del águila, la revelación para que sea revelada, la cosa entera. Comparen ahora esto con Apocalipsis el capítulo 10, del versículo 1 al 7. Y veremos aquí en este Apocalipsis... aquí en Apocalipsis 10: del 1 al 7, que: “En los días del sonido de la trompeta del mensaje del séptimo ángel, había de consumar todos los misterios de Dios”.

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hubiera quitado algo a un niño, estaba tan condenado, y no sabía qué era. Y yo pensé, quizás siendo que yo estaba presionado para llegar a ese servicio de sanidad, quizás alguien estaba tan desesperadamente enfermo, que se tenía que orar por él en ese momento. Y le pregunté a la audiencia. En unos momentos, fue revelado. Y alguien dijo: “¿No quisiera volver a leer su–leer su texto?”, o algo así. Y en ese momento, cogí el pedacito de papel y lo volví a leer, para ver lo que decía. Y miré hacia abajo en el Libro, y era completamente diferente, la pregunta que yo estaba contestando. ¿Ven? 35 Permítanme tan sólo compartirles esto. Cuando lo Sobrenatural entra, esa es la mente de Cristo. Uno llega a estar tan apartado de su propio pensamiento, al punto que en su propia mente, yo... Esto, Uds.... Yo no... No me permitan explicar eso, porque no puedo. ¿Ven? Yo no pudiera. No hay nadie que lo pudiera hacer. 36 ¿Cómo podía ese hombre, aquel Elías, pararse allá arriba en el monte, bajo la Presencia de Dios, y hacer descender fuego del cielo, y luego lluvia inmediatamente después del fuego? ¡Y luego cerrar los cielos, y no llovió por tres años y seis meses, y regresar enseguida y llamar la lluvia en ese mismo día! Y bajo esa unción, cómo... Y tomó a cuatrocientos sacerdotes y los mató; y luego huyó al desierto, clamando por su vida a causa de la amenaza de una mujer. ¿Ven? Jezabel, ella juró que ella le quitaría su vida. Cuando Acab y todos ellos estaban allí, para ver la Presencia de Dios y el gran milagro ser hecho. ¿Ven?, su... El Espíritu lo había dejado. En su manera natural de pensar, él no sabía cómo pensar, ¿ven? Él no podía pensar por sí mismo. 37 Y, recuerden, el ángel lo puso a él a dormir, y le dio descansó. Lo levantó, le dio unas tortas; luego lo volvió a dormir, y le dio descansó; y lo levantó, y le dio unas tortas otra vez. Y no sabemos qué le sucedió al hombre por cuarenta días. Luego fue llevado al fondo de una cueva en alguna parte, y Dios lo llamó. 38 No traten de explicar eso de lo Sobrenatural. Uno no lo puede hacer. ¿Ven? Lo único por hacer es sólo seguir adelante. Y trato de hacerlo tan claro como me sea posible, pero de aquí en adelante yo... Creo que nunca lo volveré a tratar. Uds. simple y

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absolutamente lo creerán, o no. Y yo estoy... Uds. verán, un poco después, por qué. Miren, he tratado de ser honesto. Dios sabe eso. 39 Y esa pregunta esta mañana, yo estaba tratando de contestarla tan honestamente como yo sabía. Yo sólo leí la primera parte del versículo, y era un... no hubiera estado correcto. Pero el Espíritu Santo, entendiendo que yo... Mi mente... ¿Ven?, miren, los últimos dos o tres días, lo que estaba sucediendo. ¿Ven?, yo–yo llamé a los setecientos... “los siete mil”, setecientos. Esta mañana estaba tratando... y fue captado por el pueblo, ¿ven?, y eso mostró que Uds. estaban observando. Ahora, otra, cuando yo estaba tratando de decir “la paloma”, y la llamé el cordero; pero yo capté eso inmediatamente. Y luego, aquí, una que yo no capté, el Espíritu Santo volvió de nuevo y me llamó la atención a eso. 40 Esa es una doble confirmación que estas cosas están correctas. Ellas son... Dios está vigilando para asegurarse que esté correcto. Eso es correcto. Él quiere hacer eso. Él quiere que Uds. sepan que Eso es la Verdad. 41 Él es el que lo está enviando, porque seguramente no fue... Simplemente fue un aprendizaje tanto para mí, como ha sido para Uds. Y así que estamos... Estoy muy agradecido por el–el–el conocimiento, el saber ahora de parte del Señor, en qué hora estamos viviendo; ¿ven?, viviendo justo en el tiempo del fin, antes de la partida de la Iglesia. Ahora, sólo... 42 Hemos estado hablando, así que sólo pidámosle Sus bendiciones sobre la Palabra otra vez. 43 Nuestro Padre Celestial, aquí viene esa gran noche, una gran hora en la cual una gran cosa ha sucedido. Ha estado todo alrededor del pueblo. Y, Padre, pido que esta noche será dado a conocer, más allá de una sombra de duda, a los corazones y a la mente del pueblo, para que ellos sepan que Dios todavía está sobre el Trono, y que Él todavía ama a Su pueblo. 44 Y es la hora, la hora que el mundo ha anhelado ver, está ahora acercándose, porque clama por redención. Vemos los elementos listos para volverlo a traer. Podemos ver los

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373 Entonces, Señor, pido que me ayudes a mí. Estoy–estoy–estoy empezando a desvanecer, Señor. Sé que mis días ya no pueden ser muchos. Y te pido que me ayudes, que me permitas ser verdadero, Señor, y honesto y sincero, para que pueda ser capaz de llevar el Mensaje tan lejos como ha sido ordenado que yo lo lleve. Y cuando llegue el momento que tenga que dejar el cargo, y llegue al río, y las olas comiencen a entrar, oh Dios, que yo pueda entregarle esta Espada a alguien más que será honesto con Ella, Señor, y llevará la Verdad. Concédelo, Señor. Y hasta entonces, ayúdame a ser fuerte y saludable, y valiente. 374 Ayuda a mi iglesia. Bendícenos a todos, Señor. Somos Tuyos. Sentimos ahora que Tu Espíritu está entre nosotros. Creemos que Tú contestarás nuestras oraciones. Porque nos encomendamos a Ti, con Tu Palabra, para servir el resto de nuestros días sobre esta Tierra, en el Nombre del Hijo de Dios, Jesucristo, nuestro amado Salvador, para Su gloria. Amén.

Yo... (¡Dios los bendiga!),... yo le amo (con todo mi corazón),

Porque Él a mí me amó...

Dios lo bendiga, Hermano Neville. 375 [La congregación continúa cantando Yo Le Amo. El Hermano Orman Neville los despide orando–Ed.].

EL SÉPTIMO SELLO CONTINÚA

376 [El Hermano Branham originalmente no hizo público el contenido anterior de los párrafos del 261 al 374, pero, en vez de eso, continuó y grabó los párrafos del 377 al 414 en un motel, el lunes 25 de marzo de 1963, como el final autorizado de la cinta del Séptimo Sello para que fuera distribuido en ese tiempo–Ed.]. 377 Será una buena cosa que él no sabe nada al respecto. Porque, si él supiera, entonces él imitaría Eso. Esos son sus trucos en hacer las cosas. 378 Así que, por lo tanto, Dios lo ha ocultado tanto del mundo entero, aun del Cielo, a tal punto que no hay manera alguna de entenderlo, sólo a medida que Dios mismo lo revele.

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365 Y pido por todos los que están aquí, todos los que han

asistido a las reuniones. Si hay algunos que no creen, permite

Señor, que ellos lleguen a ser creyentes.

366 Pido por todos los que oirán los Mensajes por medio de las

cintas. Y si llegan a caer, lo cual así será sin duda, en hogares y

lugares de muchos incrédulos que diferirán, pero, Padre, pido

por cada uno, que antes que digan cualquier palabra blasfema,

que puedan ellos primero sentarse y escudriñar las Escrituras

por lo que ha sido dicho, y luego que ellos te digan a Ti que

verdaderamente son sinceros y quieren saber si esto es verdad o

no. Y pido por ellos, Padre.

367 Y pido por éstos que han estado junto a estas paredes,

quienes se pararon afuera, que se sentaron en sus automóviles,

por los niñitos, y por todos los que han entrado. Y simplemente

por todos ellos, Señor, pido por ellos.

368 Y pido que mis oraciones sean contestadas, que Tú los

bendigas. Primero, Señor, dale a todos Vida Eterna. Pido que ni

uno de ellos se pierda, ni uno.

369 Y ahora, Padre, no sabemos cuándo será este gran evento.

Pero cuando vemos estas señales apareciendo, y acontecimientos

Escriturales, conmueve nuestro corazón sin medida. Y pido,

Padre Dios, que Tú nos ayudes.

370 Pido que Tú ayudes a nuestro amado pastor, el Hermano

Neville. Hazlo, Señor, lleno de gracia y lleno de poder, y con

entendimiento para que él pueda tomar este Alimento

almacenado y apacentar los corderos de Dios.

371 Señor, pido que Tú mantengas alejadas de nosotros las

enfermedades. Que suceda que cuando la gente se enferme, que

recuerden que la presente y toda-suficiente Sangre del Señor

Jesús está sobre el altar, para hacer expiación. Y pido que sean

sanados inmediatamente.

372 Y pido que Tú mantengas alejado de ellos el poder de

satanás, para desanimarlos o para tratar de hacerlos que

formen sectas. O, simplemente mantén alejados todos los

poderes del enemigo, Señor. Santifícanos para Tu Palabra.

Concédelo, Señor.

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elementos listos para traer a la Iglesia a la Presencia de Cristo. Podemos ver a la–la Novia tomar forma, poniéndose el vestido de boda, preparándose. Podemos ver las luces destellando. Sabemos que estamos en el fin. 45 Ahora, Padre Celestial, mientras esto procede hacia adelante ahora para predicar, o para enseñar sobre este gran poderoso evento que aconteció en la Gloria, hace unos dos mil años, y se le dio al gran amado apóstol Juan. Y esta noche vamos a hablar sobre Ello. Permite que el Espíritu Santo se presente ahora en Su gran Poder de revelación, para que nos pueda revelar esa cosa que Él quiere que sepamos, como Él lo ha hecho en las últimas noches. Nos entregamos a Ti, con la Palabra, en el Nombre de Jesús. Amén. 46 Ahora, mientras gustan abrir, quizás, en sus Biblias. Y este sólo es un pequeño versículo, un versículo de la Escritura. Pero es el último versículo, se halla... el último Sello, mejor dicho. Miren, anoche estábamos hablando sobre el Sexto Sello. 47 El Primer Sello, siendo el anticristo introducido. Su tiempo expiró, y vimos cómo salió él. 48 ¡Cómo el ser viviente que fue introducido, con el Poder de Dios que salió contra el poder del anticristo, para combatirlo! Yo no creo que pudiera haber una pregunta en la mente de alguien al respecto. 49 Entonces nos dimos cuenta, de que inmediatamente después de eso, de esa edad de la iglesia, esos seres vivientes salieron... Terminaron. 50 Nos dimos cuenta, cambiamos todo el cuadro allí: ya no salieron más seres vivientes. ¿Ven? Pero estaba introduciendo, presentando, hasta entrar en el período de la tribulación, después que la Iglesia se había ido. 51 ¡Cuán perfectamente cuadró con las Edades de la Iglesia! No veo ninguna jota, ni una cosa que no haya cuadrado perfectamente, aun hasta las edades y todo, y los tiempos. Piénsenlo. Eso muestra que tuvo que ser Dios el que lo hizo. La

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mente humana no pudiera imaginarse eso. Y ahora nos dimos cuenta de que eso también, nosotros... 52 El Señor nos permitió tomar la Escritura, la Santa Escritura, lo que Jesús dijo que acontecería. Y ¿cómo hubiéramos alguna vez encontrado eso? Y aquí viene y lo revela, y lo trae exactamente en Su sermón allí, contestando eso y lo trae exactamente al punto, seis de los Sellos, pero Él omitió el Séptimo. ¿Ven? 53 Luego cuando los Sellos fueron abiertos, Dios, fíjense aquí, Él omitió revelar aun cualquier símbolo del Séptimo. ¿Ven? Es un secreto perfecto con Dios. Fíjense. Ahora vamos a leer en la Biblia, en el–en el Séptimo Sello. Eso se encuentra en Apocalipsis, el capítulo 8.

Y cuando abrió el séptimo sello, se hizo silencio en el

cielo como por una media hora. 54 Y eso es todo lo que tenemos sobre ello. Ahora nos vamos a fijar. 55 Y trataré de no retenerlos mucho tiempo, porque muchos de Uds. estarán en la carretera, aún, esta noche, yendo a casa. Y pensé otra vez, de tener el servicio de sanidad esta mañana, lo cual les permitiría regresar en la mañana, no tendrían que quedarse a esperar. Y ahora nosotros... 56 Y yo también, tengo que viajar a–a Tucson, Arizona, donde vivo. Y ahora es mi hogar. Y luego yo–yo quiero regresar aquí, si es la voluntad del Señor, alrededor... La familia quiere regresar para unos días en junio. Y, miren, quizás podré encontrarme con todos Uds. aquí en una reunión en ese tiempo. 57 Mi siguiente servicio programado es en Albuquerque, Nuevo México. Creo que es el nueve, el diez, y el once. Estaré allí el jueves y el Viernes Santo. Así que me iba a tocar todo y tenía otros programados, donde no podía estar allí para ese tiempo, así que yo tendré la noche del jueves y la noche del viernes en Albuquerque, Nuevo México. 58 Y luego–y luego el–el próximo, que se sabe, cercano, es potencialmente, no sabemos de seguro, eso es estar con mis

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Porque Él a mí me amó.

Y me compró mi salvación

Allá en la cruz.

359 ¡Alabado sea Dios! ¿Entienden todos completamente? [La congregación dice: “Amén”–Ed.]. ¿Creen todos? [“Amén”]. Recuerdan cuando primero comencé: “¿Quién ha creído a nuestro anuncio? ¿Sobre quién se ha manifestado [revelado, Biblia en inglés–Trad.] el brazo de Jehová?”. ¿Les ha revelado Su misericordia, Su bondad? [“Amén”]. ¡Amén! Sólo recuerden, ámenlo con todo su corazón. 360 Voy a regresar a casa ahora. Estaré aquí de nuevo, si es la voluntad del Señor, como alrededor del primero de junio. 361 Quizás si el Señor lo pone en mi corazón, quizás algún día a principios de este verano, como en Junio o por ahí, quizás como a principios del otoño, si el Señor tarda, me gustaría regresar y programar otras siete noches para las últimas Siete Trompetas. ¿Les gustaría eso? ¿Les gustaría? [La congregación dice: “Amén”–Ed.] ¿Orarán por mí, para que Dios me ayude? [“Amén”]. Muy bien. 362 Hasta que los vuelva a ver, recuerden este buen canto antiguo:

Yo le amo, yo le amo,

Porque Él a mí me amó,

Y me compró mi salvación

Allá en la cruz. 363 Ahora quiero que inclinen sus rostros. Quiero orar por Uds. Antes que el pastor los despida, quiero orar por Uds. 364 Nuestro Padre Celestial, permite que las personas, Señor, entiendan, lo cual estoy seguro que hay algunos que no entienden. Pero, Padre, permite que ellos–ellos sepan el objetivo. Y permite que entiendan, Padre, que–que es Tu gracia a ellos que estas cosas son reveladas. Y te quiero dar gracias, Señor, por el conocimiento de saber estas cosas que Tú nos has revelado.

58

Yo me he aferrado a esa Palabra. Consideren toda visión, por todas partes. 354 El día que coloqué esa piedra angular allá, y puse eso allí, yo escribí allí lo que Él me mostró esa mañana en una visión. “Que instes a tiempo y fuera de tiempo; reprende con toda paciencia y Doctrina. Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana Doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán como maestros conforme a sus propias concupiscencias, y se apartarán de la Verdad a las fábulas”. Y yo he visto esos dos árboles, junto a los cuales me paré, hacer exactamente la misma cosa. Eso es correcto. Y ahí estamos. Y eso es verdad. Y, miren, Uds. no... 355 Recuerden. Permítanme volverlos a exhortar. No le digan: “Gracias” a nadie, en lo absoluto. No digan, o piensen que algún ministro o alguien, algún hombre mortal, que hay algo bueno acerca de él. Porque no lo hay. A mí no me importa quién sea él. No hay nada bueno en ningún hombre. Eso es correcto. 356 Si hay un montón de trompetas aquí mismo, y una de ellas tuviera que tocar una cierta música, es el hombre... Esas trompetas son completamente mudas. Es el hombre que puede tocar la trompeta, que sabe lo que él va a hacer, que toma la trompeta. La trompeta no tiene nada que ver con ello. El sonido proviene de una inteligencia detrás de ella. Eso es correcto. Así que todas las trompetas son iguales. 357 Todos los hombres son iguales. Todos los Cristianos son iguales. No hay hombres grandes entre nosotros. No somos grandes hombres, ni grandes mujeres. Todos somos hermanos y hermanas, todos iguales, en la misma categoría. No somos “grandes”. Uno no se hace más grande que el otro, no hay nada en lo absoluto qué hacer. No, señor. Pero todos somos simplemente seres humanos. 358 No traten de interpretar las cosas. No traten de hacer nada sino simplemente vivir una vida cercana, dándole alabanza y honor a Jesucristo. ¿Entienden todos eso ahora? [La congregación dice: “Amén”–Ed.]. ¡Amén! Ámenlo con todo su corazón. ¿Lo aman? [“Amén”].

Yo le amo (¡y lo haré!), yo le amo,

11

buenos amigos, el–el grupo del Clamor de Medianoche, en... allá en Southern Pines, Carolina del Norte. 59 Y ellos están en el teléfono ahora mismo, lo cual, han enviado telegramas, un mensaje, y todo, y siendo que ya se aproxima para ese otro grupo en Little Rock de los del Nombre de Jesús con los que tuve las reuniones allá en el Cow Palace el verano pasado. Están llevando a cabo su convención en Little Rock, Arkansas. Y ellos han estado, desde el año pasado, deseando por lo menos una noche. O, quieren toda la reunión, pero quisieran tan siquiera estar listos para una noche. Y así que yo les dije, no sabiendo exactamente qué hacer, yo dije que ellos podían anunciarla, “potencialmente”. Luego ellos lo harán saber un poco después. 60 ¿Acaba de llamar él? Ajá. Muy bien. ¿Qué dice? [Un hermano dice: “Hot Springs”–Ed.]. ¿Es Hot Springs? Yo estaba equivocado. [“El veinticuatro”–Ed.]. El veinticuatro de... [“Mayo”]. ¿Mayo? [Alguien dice: “Del veinticuatro al veintiocho de junio”]. Del veinticuatro al veintiocho de junio. Ya está anunciado, “potencialmente”, es decir, “si es la voluntad del Señor”. ¿Ven? Yo... 61 Aquí está la razón que a mí me gusta hacer esas cosas. Ahora, Uds. aprenderán un poco después, ¿ven? Cuando voy a un lugar, a mí me gusta poner mis pies allí, sabiendo que Dios dijo: “Ve allí”. Entonces si el enemigo se levanta en alguna parte, yo digo: “Estoy aquí en el Nombre del Señor Jesús. ¡Sólo retrocede!”. ¿Ven? ¿Ven? ¿Ven? Y uno está–uno está seguro de su terreno, ¿ven? Cuando Él lo envía a alguna parte, Él cuidará de uno. ¿Ven? Pero si uno va, presumiendo, entonces no sé; puede que Él no esté allí. Así que yo–yo quiero estar tan seguro como pueda. Yo he aceptado muchas que Él no me dijo que las aceptara, pero a mí–a mí me gusta estar tan seguro como sea posible. El Señor los bendiga a todos ahora. 62 Ahora–ahora nos fijamos, este siendo sólo un versículo aquí, nos gustaría hacer algo sólo un poco... un poquito antes de esto aquí. Si se fijan, omitimos el capítulo 7. El capítulo 6 termina el Sexto, el Sexto Sello. Pero entre el Sexto Sello y el Séptimo Sello, hay algo que acontece. ¿Ven? Y cuán–cuán hermoso eso es colocado exactamente en su lugar correcto, entre el capítulo 6 y el 7. Ahora Uds. se fijan en el capítulo 7, nos fijamos entre el

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Sexto y el Séptimo hay un intervalo. Un intervalo entre el

capítulo 6 y 7 del Libro de Apocalipsis, y es entre el Sexto y el

Séptimo Sello que este intervalo es dado. Ahora queremos

fijarnos en esto. Es muy importante que nos fijemos en este

pequeño tiempo.

63 Ahora recuerden, después del capítulo 4 de Apocalipsis, la

Iglesia se ha ido. Después que los–los cuatro jinetes han salido,

la Iglesia se ha ido. ¿Ven? Todo lo que le sucedió a la Iglesia,

sucedió hasta el capítulo 4 del Libro de Apocalipsis. Todo lo que

sucedió en el movimiento del anticristo, fue hasta el capítulo 4.

Y el Cuarto Sello de Apocalipsis, tanto para el anticristo como

para Cristo, llegó a su fin. Y el anticristo llega a su fin y con su

ejército; y Cristo viene con Su ejército.

64 Es una batalla antigua que comenzó muy allá en el pasado,

antes del tiempo. Y luego ellos estaban... satanás y sus ángeles

fueron arrojados, y luego vinieron a la Tierra. Y la batalla

comenzó otra vez, porque Eva derribó la barrera de donde ella

estaba aislada, detrás de la Palabra de Dios. Y desde esa

mismísima hora, satanás ganó la batalla contra la Palabra de

Dios, porque uno de Sus súbditos, el más frágil, bajó la guardia.

Y así es exactamente cómo él ha ganado la batalla cada vez, ha

sido porque uno de Sus súbditos bajó la guardia de la Palabra.

65 Y esto fue hecho en esta última edad de la iglesia, por medio

de un sistema organizacional. Lo cual, la verdadera iglesia

santa, genuina del Dios Viviente, con un jinete mentiroso, no

aceptaría la Palabra, y desvió a la iglesia de la Palabra a

dogma.

66 Ahora, ¿cuántos saben que es su dogma sobre el cual la

iglesia Católica romana está edificada? [La congregación dice:

“Amén”–Ed.]. ¿Lo admiten ellos? Absolutamente. Seguro.

Ciertamente que lo admiten. Eso no es todo... Los Católicos,

seguro, eso no les heriría sus sentimientos en lo más mínimo,

porque ellos saben eso. Acaban de añadir uno nuevo, aquí hace

poco, que María había resucitado. ¿Recuerdan Uds.?, aquí hace

unos cuantos años, como diez años. ¿Cuántos recuerdan eso?

[“Amén”]. El periódico y... Seguro. ¿Ven? Todo... El nuevo

“dogma”. ¿Ven?, todo es dogma, no la Palabra. ¿Ven?

57

Ellos vienen del este y del oeste,

Ellos vienen de tierra lejana,

Para festejar con el Rey, para comer como Sus invitados;

¡Cuán bienaventurados son estos peregrinos!

Contemplando Su rostro santificado,

Resplandeciendo con Luz Divina;

Bienaventurados participantes de Su gracia,

Como gemas brillando en Su Corona. 349 Que siempre tengan eso en mente: “El ser una gema en la Corona de Jesucristo”. Pablo le dijo a la Iglesia: “Uds. son–Uds. son las joyas, las gemas en Su Corona”. Queremos ser las gemas de la Corona de Jesucristo. 350 Nunca queremos poner un hombre en ello. Olvídense de cualquier cosa acerca de mí. Yo soy su hermano, un pecador salvo por gracia, no siendo digno de vivir. Eso es exactamente la verdad. No estoy diciendo eso para ser humilde; esos son hechos. No hay nada en mí, ni una sola cosa sana en lo absoluto. 351 Pero la gracia de Dios ha permitido a mis pobres ojos oscurecidos mirar más allá de la cortina del tiempo y ver esas cosas más allá, y regresar. 352 Cuando era un muchachito, yo amaba a la gente. Yo siempre quería que alguien me amara y hablara conmigo. Nadie lo hacía, debido al nombre de mi familia. Nadie hablaba conmigo. 353 Pero cuando me rendí a Dios, entonces... Nuestra familia, la ascendencia siendo irlandesa, yo pensé: “Quizás... Todos ellos eran Católicos, y quizás eso era todo”. Yo fui allí y Él era de una manera. Y yo fui allí a la Primera iglesia Bautista, y Él era de otra manera. Yo dije: “Señor, tiene que haber alguna manera que sea la verdad”. Y Algo dijo: “Es la Palabra”.

56

342 Entonces tomaba el resto del día, e iba y examinaba Esto, y

veía si todo se unía por todas las Escrituras. Por lo tanto:

“Examinadlo todo”. ¿Ven? Yo obtuve Esto aquí.

343 Y yo pienso: “Ahora, hay muchas personas que han tenido

visiones. Muchos han estado en revelaciones”. Si es contrario a

la Palabra, déjenlo en paz; eso es correcto, déjenlo en paz.

344 Ahora, miren, entonces yo aun investigaba Esto así, lo

investigaba así. Yo escribía cositas aquí. Yo pensaba: “Bueno,

ahora, la clase estará contenta en oír esto, porque se ata aquí y

se ata aquí. Miren, veamos, ¿qué dice esto aquí? Sí. Y, sí, aquí

está, aquí mismo”. ¿Ven?

345 Y lo repasaba por la Biblia, y ataba la cosa, durante la

semana. Allí está en las cintas. Uds. son bienvenidos a ellas. Y

lo he hecho a lo mejor de mi entendimiento, bajo el

compañerismo Cristiano, la gracia de Dios sea a todos los

hombres, por medio de Jesucristo. Yo he hecho lo mejor posible.

346 Uds. han sido una de las mejores clases. No hay nadie que

pudiera haber permanecido sentado tan amablemente. Todos

han venido aquí a la una del día, hasta las cinco, en cualquier

momento que abrieran la iglesia y traían la... le permitían a la

gente entrar. Uds. han permanecido en el frío; se han sentado

en la nieve; han hecho todo; se pararon junto a las paredes,

hasta dolerles las piernas. Veía a los hombres sentados que les

permitían a las mujeres sentarse. Y varios se paraban así,

estando sentados. Yo pensé: “Señor, todo...”.

347 Esta ha sido una semana misteriosa. Todo ha sido algo

extraño, cómo, cuando viene la gente, verlos parados afuera,

junto a las ventanas, junto a las puertas, atrás, allá en la parte

de atrás, por dondequiera escuchando. Y en cuanto a ser un

orador, estoy lejos de ser un orador. Yo–yo tengo la suficiente

inteligencia como para saber que no soy, que no soy un orador.

Pero ¿por qué la gente se sentaría y escucharía así? ¿Por qué lo

harían? Ellos no vienen a oír a una persona como yo. Pero han

venido porque hay Algo en ello, atrayendo a la gente. ¿Ven? Hay

Algo en ello, que los está atrayendo.

348 Como mi esposa se paró aquí en la plataforma y cantó,

cuando comencé:

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67 Un sacerdote recientemente en una entrevista dijo: “Sr. Branham”, dijo él, “Dios está en Su iglesia”. Yo dije: “Dios está en Su Palabra”. Él dijo: “No debemos discutir”. 68 Yo dije: “Yo no estoy discutiendo. Sólo estoy haciendo una declaración. Dios está en Su Palabra. Eso es correcto. ‘Cualquiera que le quite algo a Ella, o le añada algo a Ella’, dice la Palabra”. 69 Él dijo: “Bueno, Dios dio... Cristo le dio a Su Iglesia el poder, y les dijo lo que ataren en la Tierra, sería atado en el Cielo, y lo que...”. Yo dije: “Eso es exactamente la Verdad”. 70 Él dijo: “Tenemos en... sobre este principio, tenemos poder para desatar el pecado”. 71 Y yo dije: “Si lo hacen de la manera que se le fue dado a la Iglesia, y de la manera que ellos lo hicieron, yo lo aceptaré. Si lo hace, hay agua aquí para ser ‘bautizado en el Nombre de Jesucristo para perdón de sus pecados’, ¿ve?, no por medio de alguien diciéndole que sus pecados son perdonados”. ¿Ven? ¿Ven? Así es exactamente. 72 Observen a Pedro con las llaves en el Día de Pentecostés. Recuerden, él tiene las llaves de las cuales ellos están hablando. Y los–los hombres dijeron: “Varones hermanos, ¿qué podemos hacer para ser salvos?”. 73 Pedro dijo: “Arrepentíos cada uno de vosotros, bautícese en el Nombre de Jesucristo” (¿para qué?), “para perdón de los pecados, y luego recibiréis el don del Espíritu Santo. Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare”. Eso es correcto. Así que, eso lo concluye para siempre. Todo ha terminado. Eso bastó. 74 Miren, pero, ¿ven Uds.?, el anticristo entró, como lo hemos ilustrado y mostrado. ¡Qué revelación! ¡Oh, oh! Y el pensar que

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en todos estos años, lo hemos visto avanzando. Y aquí está absolutamente, directamente ASÍ DICE EL SEÑOR. 75 Ahora, y nos fijamos en este intervalo ahora entre el capítulo 6 y el capítulo 7. Miren, el capítulo 7 de Apocalipsis, aquí está un–un... revela un acontecimiento. No está aquí simplemente por nada. No está puesto aquí en medio de esto por nada. ¿Ven? Está aquí con un propósito, y es una revelación que revela algo. ¡Fíjense cuán misterioso y cómo matemáticamente cuadra perfectamente con la Escritura! ¿Ven? Exactamente. 76 ¿Creen Uds. en la matemática de Dios? [La congregación dice: “Amén”–Ed.]. Si no, Uds. seguramente están perdidos en la... Uds. seguramente se perderán en la Palabra; si comienzan a poner un cuatro o un seis, o–o algo aparte de los términos en la matemática simplemente siguiendo un orden, Uds. seguramente tendrán en su escena una vaca comiendo grama arriba de un árbol en alguna parte. Uds. ciertamente llegarán a un callejón sin salida. Porque Dios no hace... Toda Su Palabra sí fluye por completo en–en–en la matemática. Sí, señor. ¡Perfecta, la más perfecta! No hay ninguna otra literatura escrita como Ella–como Ella, tan perfecta en la matemá–matemática. 77 Ahora, el–el capítulo 8 sólo revela la escena del–la escena del Séptimo Sello, donde nada más es revelado, miren, nada. No es revelado en el Séptimo Sello... Ahora, no tiene nada que ver con el capítulo 7 de–de Apocalipsis. Su... La revelación del Séptimo Sello es perfectamente en silencio. 78 Y si tan sólo tuviera el tiempo... Trataré algunos lugares para mostrarles, desde allá en el principio, desde Génesis, este Séptimo cap–... O se–se–se habla de este Séptimo Sello. Desde el mismo principio en Génesis, este Séptimo Se–... 79 Estos Sellos siguieron avanzando. ¿Pudieran Uds. recordar esta mañana, haciendo mención de estas cosas? Y observen, esta noche, mencionarlas. Y uno se da cuenta de que cuando llega a ese Séptimo Sello, allí se corta. [El Hermano Branham truena sus dedos una vez–Ed.]. Sí. 80 Jesucristo mismo está hablando, habló del tiempo del fin. Y cuando Él llegó... Habló de los seis Sellos. Cuando Él llegó al Séptimo, Él se detuvo. Ahí está, ¿ven? Es una gran cosa.

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fue escrito. Así que estamos en el tiempo del fin. Estamos aquí. Le doy gracias a Dios por Su Palabra. 337 Le doy gracias por Jesucristo. Porque sin enviarlo para la–la propiciación de nuestros pecados, todos estaríamos en una gran inmundicia de pecado, sin esperanza. Pero, por Su gracia, Su–Su Sangre limpia todo pecado. Como la gota de tinta en un balde [cubo–Trad.] de cloro uno nunca volvería a encontrar la tinta. Cuando nuestros pecados son confesados, son puestos en la Sangre de Jesucristo, nunca más serán conocidos otra vez. Dios los olvida; nunca fueron cometidos. Y mientras ese Sacrificio esté allí en una expiación por nosotros, entonces eso es todo. Eso es todo, ¿ven? Nosotros–nosotros ya no somos pecadores. Somos Cristianos, por la gracia de Dios. Recuerden, en nosotros mismos estaríamos probablemente tan mal como siempre hemos estado. Pero, ¿ven?, la gracia de Dios nos ha aparecido, y eso es lo que nos ha hecho lo que somos hoy, hermanos y hermanas Cristianos. 338 Esta ha sido una semana tremenda para mí. Estoy agotado. Mi mente está agotada. Porque yo–yo hice... fue lo mejor que yo podía hacer. Y algo extraño sucediendo cada día. Me quedaba sorprendido al entrar en el cuarto, y estar allí por unos minutos, y ver Algo simplemente que me apartaba completamente. 339 Y, aquí, yo entraba allí y tomaba las notas. Yo tomaba los libros del Dr. Smith, Urías Smith, y, oh, todos los–los escritores y todo, y leía, leía sus libros. Yo decía: “Ahora aquí está el Sexto Sello. Aquí está el Cuarto Sello. Ahora bien, ¿qué dice este hombre? Él decía: “Bueno, fue esto, eso, o lo otro’”. Yo revisaba aquí y tomaba otro hombre. Él dijo que era tal y tal. Y simplemente parecía como... Simplemente no salía bien. ¿Ven? 340 Entonces yo pensaba: “Bueno, ¿qué es eso, Señor?”. Y yo caminaba de un lado al otro por un rato. Me arrodillaba y oraba. Regresaba y tomaba la Biblia; me sentaba, leía. Caminaba de aquí para allá. 341 Y entonces, de repente cuando me aquietaba, simplemente se revelaba allí de esa manera. Entonces tomaba una pluma rápidamente y lo escribía así, lo que estaba viendo y haciendo. Observándolo así hasta escribirlo.

54

328 Pero yo he tenido el privilegio, de parte de Dios, de mirar y ver lo que era, ¿ven?, verlo desenvolverse hasta cierto punto. Miren, esa es la verdad. 329 Y estoy seguro que Uds. se han fijado en las cosas que han estado sucediendo esta semana. Estoy seguro que se fijaron en ese muchachito Collins acostado ahí, muriéndose la otra noche; esa muchachita con leucemia. 330 El Reino de Dios viene. Y está llegando a ser más de lo negativo a lo positivo, como ha sido. Miren, eso no debería sofocar a la gente. De justificación, a santificación, al Bautismo del Espíritu Santo, y luego aquí, aquí. ¿Ven? Nosotros simplemente nos estamos acercando a Dios todo el tiempo. 331 ¿Qué no pueden ver, ministros Metodistas, cómo su mensaje de santificación era más elevado que lo que Lutero predicó? 332 Uds. Pentecostales, ¿qué no pueden ver que su mensaje del bautismo es más allá que lo que los Metodistas predicaron? ¿Saben Uds. lo que quiero decir? 333 ¡Oh, hemos tenido una cantidad de cosas que salieron! Y eso es correcto. Y si hay alguien que desprecia el mal, y la gente diciendo algo que realmente son mentiras y no la Verdad, yo aborrezco eso. 334 Pero yo–yo sí amo la Verdad sólida, no importa cuánto Esto interrumpe de esta manera o de esa manera. Si es la Verdad, Dios finalmente lo mostrará como la Verdad. Y si Él no hace eso pronto uno de estos días, entonces mi visión no estaba correcta. ¿Ven ahora en qué posición me he puesto? 335 “¿Cuándo será, Hermano Branham?”. No les puedo decir. Yo no sé. 336 Pero uno de estos días, si nunca nos volvemos a ver en esta tierra, nos encontraremos allá en el–en el tribunal de Cristo. Y se darán cuenta de que en ese cuarto, la revelación vino de parte de Dios, al igual que el resto de ellas, que ellas... Uno de los misterios de ese Sello, la razón que no fue revelado: fueron los Siete Truenos que emitieron Sus voces. Y ahí está, perfectamente. Porque nadie sabe nada al respecto. Ni siquiera

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81 Ahora, miren, vamos a hablar aquí ahora sobre este capítulo 7, sólo un momento, como para tender un puente, entre el Sexto y el Séptimo Sello. Porque, ese es el único material que tenemos para continuar, en este momento, es el Sexto... entre el Sexto y el Séptimo Sello, es el llamado a salir fuera para Israel. 82 Miren, yo tengo muchos finos amigos que son Testigos de Jehová sentados aquí, que todos son... o han sido. Quizás algunos de ellos sean todavía Testigos de Jehová. Pero ellos siempre han aplicado, el Sr. Russell lo hizo, que estos ciento cuarenta y cuatro mil era la Novia sobrenatural de Cristo. ¿Ven? Ellos... No son. 83 No tiene nada que ver con la edad de la iglesia, en lo absoluto. Son absolutamente Israel. Ahora, vamos a leer en unos momentos. Ahora, este intervalo, entre el Sexto... los Sellos, es un llamado y sellamiento de los ciento cuarenta y cuatro mil judíos, llamados en el período de la tribulación después que la Iglesia se ha ido. ¿Ven? No tiene nada que ver con la edad de la iglesia, en lo absoluto. Oh, son llamados en perfecta armonía con la Escritura. Las últimas tres semanas y media de Daniel, asignadas al “pueblo” de Daniel, ¿ven?, no a los gentiles, al “pueblo” de Daniel, ¡y Daniel era un judío! 84 Fíjense ahora, Israel–Israel sólo cree a sus profetas, y después que son vindicados. 85 Y en ninguna parte durante la edad de la iglesia, desde la Iglesia Apostólica primitiva, ha tenido la iglesia Protestante alguna vez un profeta. Díganme quién fue, y muéstrenmelo. ¡Nunca! Ellos tuvieron, en la edad apostólica primitiva, uno llamado Agabo, que fue un profeta vindicado. Pero en... Cuando los gentiles entraron, a la herencia de Dios, y Pablo se volvió a los gentiles, después que Pedro, como leímos anoche, había recibido de parte del Señor, que “Él estaba tomando un–un pueblo de los gentiles para Su Nombre, Su Novia”, entonces nunca ha habido en las páginas de la historia un profeta gentil. Ahora bien, simplemente vuelvan a repasar la historia y dense cuenta. ¿Por qué? Exactamente; sería contrario a la Palabra. Exactamente. 86 Cuando salió el primero, era un león, esa era la Palabra del profeta.

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El siguiente que salió, era la labor, el sacrificio. El siguiente que salió, era la astucia del–del hombre. 87 Pero se nos prometió, en el día postrero, que eso regresaría a la Iglesia otra vez, para el beneficio de corregir todo lo que ha estado erróneo, lo omitido, lo incompleto, lo dejado incompleto. Porque está predicho aquí que el Mensaje del séptimo ángel terminaría los misterios de Dios. Y, entonces hemos pasado por todo eso. Vemos que está perfectamente en armonía con la Escritura. Esa es la razón. 88 Miren, ¿se pudieran imaginar cuando esta persona venga a la escena? Cuando él venga, recuerden, será tan humilde y demás, al grado que las iglesias fallarán de más en verlo. Y ¿se podrían imaginar a las iglesias, todavía bajo la tradición de los reformadores, que recibirían alguna vez a un profeta de Dios, que estaría firmemente en contra de sus enseñanzas y organizaciones? 89 Ahora, sólo hay una persona que podría cumplir eso, sólo un Espíritu que haya estado alguna vez sobre la Tierra, del que yo sepa. O sería... Tendría que ser Elías en su tiempo. Y fue predicho que sería, lo cual no es nada sino el Espíritu de Cristo. 90 Cuando Cristo vino, Él era la plenitud. Él era el Profeta. Él era el–el Dios de los profetas. ¿Ven? ¿Ven? 91 Cristo, miren cómo lo aborrecieron a Él. Pero Él vino exactamente de la manera que la Palabra dijo que Él vendría. Pero siendo que Él era un Profeta, ellos mismos se separaron del Reino de Dios blasfemando, al llamar el Espíritu de Dios, que estaba discerniendo y demás “un espíritu inmundo”. Dijeron que: “Él era un–Él era un adivino, o un demonio”, eso es. 92 Un adivino es un demonio, ¿ven?, un espíritu del diablo. Ciertamente. ¿Sabían Uds. eso? [La congregación dice: “Amén”–Ed.]. Absolutamente. Un adivino es una imitación de un profeta, lo cual absolutamente es blasfemia delante de Dios. 93 Fíjense ahora. Llamados en perfecta armonía con las Escrituras de los últimos tres años y medio de Daniel.

53

322 Fíjense ahora. Bien lo sabe Dios, digo la verdad que Estas

me son discernidas espiritualmente, discernidas por el Espíritu

Santo. Y por... Cada una de Ellas ha identificado Su lugar en la

Biblia.

323 Miren, lo que es este gran secreto que está debajo de este

Sello, yo no sé. Yo no lo sé. No lo pude discernir. No lo pude

captar, exactamente lo que–exactamente lo que dijo, pero yo sé

que eran esos Siete Truenos emitiéndose uno en seguida del

otro, simplemente estallando siete veces diferentes. Y se

desenvolvió en algo más que vi. Luego, cuando vi Eso, yo busqué

la interpretación. Pasó por ahí de un extremo al otro, y no la

pude discernir. Eso es exactamente correcto. ¿Ven? Todavía no

es exactamente la hora para ello.

324 Pero está entrando en ese ciclo, ¿ven? Se está acercando. Así

que, la cosa que Uds. deben hacer es recordar que yo les hablo

en el Nombre del Señor. Estén preparados, porque Uds. no

saben en qué tiempo algo puede suceder.

325 Miren, cuando eso se ponga en cinta, lo cual harán, eso

probablemente alejará de mí a diez mil de mis amigos. Porque

ellos van a decir que: “El Hermano Branham está tratando de

ponerse él mismo, de hacerse él mismo un–un siervo o un

profeta, o algo, delante de Dios”. Permítanme decirles, mis

hermanos, eso es un error.

326 Sólo les estoy diciendo lo que yo vi y lo que se me ha dicho. Y

ahora Uds.–Uds. hagan lo que quieran. Yo no sé quién va ... qué

va a acontecer. Yo no sé. Yo sólo sé que esos Siete Truenos

contienen ese misterio, por lo que los Cielos callaron.

¿Entienden todos? [La congregación dice: “Amén”–Ed.]. Puede

que sea el tiempo, puede que sea la hora ahora, que esta gran

persona que estamos esperando que se levante en la escena,

pueda levantarse en la escena.

327 Quizás este ministerio, que yo he tratado de regresar a la

gente a la Palabra, ha puesto un fundamento; y si lo ha puesto,

de seguro los estaré dejando. No habrá dos de nosotros aquí a la

misma vez. ¿Ven? Si así es, él crecerá; yo menguaré. Yo no sé.

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316 Permítanme tan sólo mostrarles que esto es exactamente la

verdad, y confirmarlo.

317 Recuerden ahora: “Si hay uno que es espiritual o un profeta,

Yo Jehová hablaré con él en visiones, y le apareceré a él por

medio de sueños”. Eso es interpretar sueños. José, él podía

interpretar sueños, y hablar y–y ver visiones. ¿Es verdad eso?

[La congregación dice: “Amén”–Ed.].

318 Fíjense ahora en esto. Que cuando esto aconteció, Junior

estaba en un campo que tenía–tenía una gran pirámide en él,

así. Y había algo escrito en las piedras, y yo le estaba revelando

Eso a la gente. ¿Es correcto eso, Junior? [El Hermano Junior

Jackson dice: “Eso es correcto”–Ed.]. Como un año antes que

sucediera.

319 Y fíjense en lo siguiente ahora. Yo tomé un tipo de palanca y

la desprendí, y en el interior había piedra blanca que no tenía

nada escrito sobre ella. Y en ese momento, comencé a caminar

hacia el oeste. Y les dije a todos, yo dije: “No se vayan al oeste.

Quédense aquí y miren Esto hasta que regrese”. Me fui al oeste,

para el estruendo; regresé de nuevo al este con el Espíritu Santo

interpretando esta Palabra que no estaba escrita. Ahora, si eso

no es perfectamente el Dios Todopoderoso, yo quiero que sepan

lo que es.

320 ¿Para qué estoy tratando de decir esto, amigos? Es para

mostrarles que estamos en el tiempo del fin. Miren, ¡si esos

otros encajaron perfectamente con la Palabra, también Esto

encaja perfectamente con la Palabra! Estamos aquí. Estamos en

el fin, amigos.

321 Pronto será “el tiempo ha terminado”. Millones perderán sus

vidas. Millones serán... que ahora creen que son salvos, serán

contados como carne de cañón para la edad atómica. Estamos

viviendo en la última hora. ¡Por la gracia del Dios Todopoderoso,

por Su ayuda a Su pueblo, para que ellos puedan esperar con

expectativa para la pronta aparición de Cristo...! “¿Hasta

cuándo, Hermano Branham?”. Quizás veinte años; quizás en

cincuenta años; quizás en cien años. Yo no sé. Y quizás en la

mañana; quizás aún esta noche. Yo no sé. Y cualquiera que dice

que sabe, está equivocado. ¿Ven? Ellos no saben. Sólo Dios sabe.

17

94 Fíjense, a los creyentes–a los creyentes de Israel se les dijo, en el Antiguo Testamento, que crean a sus profetas después que el profeta ha sido vindicado. “Si hay uno entre vosotros que sea espiritual o profeta, Yo el Señor, Me... tu Dios, Yo mismo me daré a conocer a él y le hablaré en visiones, por medio de sueños, interpretar sueños”. Si alguien tiene un sueño, el profeta lo podrá interpretar. Y si–si él tiene una visión, él la habla. “Me daré a conocer a él por medio de visiones y sueños, Yo mismo me daré a conocer. Y si lo que él dice se cumple, entonces escuchen a ese profeta, porque Yo estoy con él. Si no, entonces no le teman en lo absoluto”. Sí. Eso es correcto. “Apártense, simplemente déjenlo solo, ¿ven?”. Ahora, eso es... 95 Miren, Israel siempre va a creer eso. Y ¿qué no ven? ¿Debido a qué? Ahora quiero que capten bien esta lección esta noche. 96 ¿Por qué? Porque ese es un orden de Dios para ellos. A mí no me importa cuántos folletos los gentiles puedan llevar allá y repartirlos. A mí no me importa cuánto pasen por Israel con una Biblia bajo su brazo, probando esto, eso, y lo otro; ellos nunca recibirán a nadie, sino sólo a un profeta. Eso es exactamente. Porque un profeta es el único que puede tomar la Palabra Divina y colocarla en Su lugar y ser un profeta vindicado. Ellos le creerán. Eso es correcto. 97 Como yo le estaba hablando a un judío aquí en Benton Harbor, cuando ese Juan Rhyn, habiendo estado ciego casi toda su vida, recibió su vista. Ellos me llevaron allí, a esa Casa de David. Y este rabí salió con su barba larga. Él dijo: “¿Con qué autoridad le dio a Juan Rhyn su vista?”. Yo dije: “En el Nombre de Jesucristo, el Hijo de Dios”. 98 Él dijo: “¡Lejos esté de Dios el tener un Hijo!”. ¿Ven? Y él dijo: “Uds. no pueden partir a Dios en tres pedazos y dárselo a un judío. Hacer de Él tres dioses; ¡Uds. son un montón de paganos!”.

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99 Yo dije: “Yo no lo parto a Él en tres pedazos”. Yo dije: “Rabí, ¿sería algo raro para Ud. el creer que uno de sus profetas dijo algo errado?”. Él dijo: “Nuestros profetas no dicen nada errado”. Yo dije: “¿De quién estaba hablando Isaías 9:6?”. Él dijo: “El Mesías”. 100 Yo dije: “Entonces el Mesías será un Hombre-Profeta. ¿Es correcto eso?”. Dijo: “Sí, señor. Eso es correcto”. 101 Yo dije: “Muéstreme en dónde Jesús falló en eso”. Él dijo... Yo dije: “¿Qué relación habrá entre el Mesías-Profeta, y Dios?”. Él dijo: “Él será Dios”. Yo dije: “Eso es correcto. Ahora Ud. le dio en el clavo”. 102 Bien lo sabe Dios, ese judío parado ahí con las lágrimas rodándole por sus mejillas, dijo: “Le oiré después en algún otro tiempo”. Yo dije: “Rabí, ¿cree Ud. eso?”. 103 Y él dijo: “Mire”, dijo él, “‘Dios puede levantar hijos a Abraham aun de estas piedras’”. Yo supe que él estaba en el Nuevo Testamento. Yo dije: “¡Correcto, Rabí! Ahora, ¿qué de eso?”. 104 Él dijo: “Si yo predicara eso, yo estaría allí abajo”, Uds. saben en dónde está el lugar de ellos allá arriba del cerro, “allí en la calle mendigando mi pan”. 105 Yo dije: “Yo preferiría estar allí abajo mendigando mi pan”. El judío todavía tiene su mirada en el dinero, Uds. saben. ¿Ven? ¿Ven? “Yo preferiría...”. Y su nombre en oro, en la... Yo dije: “Yo preferiría estar allí abajo comiendo galletas saladas y bebiendo

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segundo grupo, eran más resplandecientes, aves más grandes, parecían palomas, con alas puntiagudas. Ellos volaron hacia el este. El Primer Jalón, el Segundo Jalón, luego los siguientes eran ángeles. Y mientras... 310 Yo estaba ahí mismo, y terminó esta explosión. Y yo estaba mirando en esta dirección, hacia el oeste, y vinieron y simplemente me levantaron, allí. Me salí completamente de mi conocimiento. Y uno de ellos, que venía, era el que parecía extraño para mí, era el que estaba a mi... Sería a la izquierda, por donde entré a la constelación. Pero contando de la izquierda a la derecha, hubiera sido el séptimo ángel, ¿ven?, contándolos. Recuerden ahora los siete mensajeros. 311 ¿Recuerdan la pirámide de piedra blanca del sueño de Junior Jackson que yo les interpreté? [La congregación dice: “Amén”–Ed.]. ¿Ven? Fíjense, la noche que yo me fui, y yo... Hubo seis sueños que vinieron, y todos apuntando a la misma cosa. Entonces la visión comenzó, y me envió al oeste. Y, Junior, él estaba observando mientras... Fíjense. ¡Miren cuán perfecto! 312 Miren, yo estoy–yo estoy esperando y confiando que Uds. se den cuenta de que estoy tratando de poner esta gracia en Jesucristo, quien es el Autor de todo Esto. Y la única razón que Uds. nunca me han oído hablar así antes en su vida... Pero esta hora se está aproximando. ¿Lo ven? Fíjense. 313 Ahora, para asegurárselos a Uds., para que pueda quedar bien recalcado. Me estoy preparando para dejarlos otra vez. Yo no sé adónde iré. Debo predicar el Evangelio en otros lugares. Pero por ahora, eso... 314 Uds. pudieran decir: “Yo he oído todo ese tipo de fanatismo”. Yo no sé qué; no puedo juzgar a ningún otro hombre. 315 Yo sólo tengo que dar cuenta delante de Dios por lo que yo... por–por mí mismo. Pero ¿ha habido alguna ocasión que yo les dije algo en el Nombre del Señor que no era correcto, en todos estos años? [La congregación dice: “No”–Ed.]. Nadie más puede decir eso, porque yo siempre lo he dicho exactamente de la manera que Él lo dijo.

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304 Eso muestra que viene de Dios, porque, ¿ven?, concuerda exactamente con las promesas de Dios, con el fin del–del Mensaje. Fíjense. Fíjense ahora, para el Mensaje del tiempo del fin, este Sello. Después de todo, Él–Él ha revelado todos los seis Sellos, pero Él no dice nada acerca del Séptimo. Y el Sello del tiempo del fin, cuando comience, será absolutamente un secreto total, según la Biblia, antes de saber Eso. Y recuerden, Apocalipsis 10: del 1 al 7, del 1 al 7, el capítulo 10: del 1 al 7: “Al fin del Mensaje del séptimo ángel, todos los misterios de Dios serían dados a conocer”. Estamos en el tiempo del fin, la apertura del Séptimo Sello. 305 Miren, ¿cómo supe yo? El otro día, el domingo pasado (hoy hace una semana), cuando estaba predicando: “¡Sean humildes! ¡Sean humildes! Recuerden, Dios obra con cosas pequeñas”. No me di cuenta acerca de qué estaba realmente hablando. Y ahora lo veo. ¡Es de una manera tan humilde! Uds. pensarían que algo así sería revelado en el Vaticano o... Pero viene exactamente como Juan el Bautista. Viene como el nacimiento de nuestro Señor en un establo. ¡Gloria a Dios! ¡Bien lo sabe Dios: la hora está cerca! ¡Amén! Estamos aquí. ¡Oh, qué cosa! 306 ¿Lo ven ahora, la verdad de la visión de Dios, los siete ángeles trayéndome del oeste? Venían del oeste, regresando al este, trayéndome aquí para este Mensaje esta noche. [El Hermano Branham da dos golpecitos en el púlpito–Ed.]. ¡Oh, qué cosa! 307 Miren, la Voz de ese gran trueno y la misión que fue traída aquí, ha sido revelada, que ella... y demostrando que era de Dios. Sólo piensen ahora. Yo no sabía acerca de estos Sellos, y han sido revelados esta semana. ¿Pensó alguien acerca de eso, de esos siete ángeles siendo Esto, siendo el Mensaje que saldría, esos ángeles volviéndome a traer aquí para Eso? ¿Ven? 308 Recuerden, el séptimo mensajero era... Los siete mensajeros eran... El más notable para mí, el séptimo ángel, parecía ser más para mí que los demás. Miren, ¿ven?, ellos estaban parados así. Ahora, simplemente queremos que se fijen. Y yo estaba parado aquí, y estaba observando esos otros... 309 ¿Ven?, uno, el primer grupo de pajaritos, con las plumas estropeadas. ¿Los recuerdan? Y todos volaron hacia el este. Y el

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agua del río, y saber que yo estaba en armonía con Dios fielmente, que estar aquí con mi nombre en ese edificio en letras doradas como esas, y saber que yo estaba alejado de Dios. Yo sé eso”. Él ya no me quiso escuchar, así que él se metió. 106 Pero así es. Uno no puede partir a Dios en dos o tres pedazos, llamados “Padre, Hijo y Espíritu Santo”, y hacer tres dioses y dárselo a un judío. Su mismísimo mandamiento es: “No tendrás dioses ajenos delante de Mí. Yo soy Jehová tu Dios”. ¿Qué dijo Jesús? Jesús dijo: “Oye, Israel, Yo soy Jehová tu Dios, un Dios”. No tres; Uds. nunca les darán eso a ellos. No. Ningún profeta hablará alguna vez acerca de tres dioses. No. En ninguna parte. Uds. nunca oirán de eso. No, señor. Eso es tan idólatra y pagano como de donde provino. Sí, señor. 107 Fíjense. Pero estos profetas vendrán. No sólo eso... Los–los profetas, miren, está en Apocalipsis 11. Hemos leído algo de eso. Y yo quiero que Uds. lo lean mientras estudian las cintas y demás. Son absolutamente profetas vindicados, por la señal de los profetas. Entonces Israel va a oír eso. 108 Ahora, para Uds., mis amigos Testigos de Jehová, entiendan ahora que estos ciento cuarenta y cuatro mil no tienen nada que ver con la Novia. No hay ni una porcioncita de la Escritura para respaldar eso. No, señor. Ellos no son. Ellos son judíos, los elegidos que son llamados a salir durante el tiempo de los últimos tres años y medio de las setenta semanas de Daniel. Ahora, eso es... 109 Yo–yo sigo citando esto. No tanto para todos Uds. aquí, pero, ¿ven?, a gente... Estas cintas van a todas partes, ¿ven Uds.? Y Uds. entienden eso. Uds. me oyen citarlo de nuevo. Es con ese propósito. 110 Fíjense. Vean ahora cómo ellos tuvieron que cegar... ¿Ven cómo tuvieron... Jesús, o... Dios tuvo que cegar a los judíos para impedir que ellos reconocieran a Jesús? Si hubieran sabido, si ellos tan sólo hubieran sabido que eso... Viendo la señal que Él hizo, si hubieran estado en su estado correcto como estaban allá bajo la ley cuando Dios les dio el mandamiento acerca de un profeta, y ellos hubieran visto a Jesús hacer eso, ellos hubieran dicho: “Este es el Mesías”. ¿Por qué fue eso?

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111 Aquellos en esa edad, que tenían sus nombres escritos en el Libro de la Vida del Cordero, Sus apóstoles y demás, ellos lo vieron y lo reconocieron. 112 ¿Por qué no lo vieron el resto de ellos? ¿Ven?, ellos fueron cegados. Ellos no lo pudieron ver. Ellos no lo ven todavía. Y ellos no lo verán hasta que nazca como una nación de una vez. Esa... 113 La Palabra no puede fallar. Recuerden, la Palabra no puede fallar. No importa cuántas sensaciones tengan y todo lo que acontezca, sin embargo, esa Palabra no puede fallar. Va a ser exactamente de la manera que Dios dijo que sería. ¿Ven? Ahora, nos damos cuenta de que estas cosas deben suceder. 114 Y por esa razón ellos no reconocieron a Jesús cuando Él mismo fue perfectamente identificado ser el Profeta. 115 Aun la–la mujercita samaritana estando por ahí junto al pozo. Él nunca había estado en Samaria; Él sólo subió, dijo que le era necesario pasar por ese camino, y Él fue allá. Y allí estaba esa mujercita. Y ella, en su estado, estaba en mejor condición para recibir el Evangelio que aquellos sacerdotes religiosos y cosas de aquel día. Ella estaba. Ciertamente. 116 Miren, ¿ven?, pero a pesar de todo el rechazo de ellos, aún así uno de sus hombres más nobles admitió que ellos sabían que Él había sido enviado de Dios como maestro. 117 Yo estaba hablando con uno de los doctores más finos que hay en los estados sureños, en su oficina, hace poco. Un especialista muy fino en Louisville, un hombre muy valeroso. Y yo le dije, yo dije: “Doctor, le quiero hacer una pregunta”. Él dijo: “Muy bien”. 118 Yo dije: “Me fijé en su símbolo médico, el asta. Ud. tiene una serpiente envuelta en un asta. ¿Qué representa eso?”. Él dijo: “No sé”. 119 Y yo dije: “Representa esto: era un símbolo de sanidad Divina, en donde Moisés levantó la serpiente de bronce en el desierto, ¿ven?, lo cual era sólo un símbolo, sólo un símbolo del verdadero Cristo”.

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298 Una Voz vino y dijo: “Tú no puedes enseñarle a los bebés Pentecostales cosas sobrenaturales”. Dijo: “Ahora, ¡déjalos en paz!”. 299 Y precisamente en ese momento, Él me levantó. Él me elevó y me sentó muy en alto, en donde una reunión se estaba llevando a cabo. Parecía como una tienda o una catedral, de algún tipo. Y miré, y allí estaba una especie de cajita, como un lugarcito en el lado. Y vi que esa Luz le estaba hablando a alguien, por encima de mí, esa Luz que Uds. ven allí en la fotografía. Se apartó de mí girando, así, y se fue por encima de esa tienda. Y dijo: “Yo te encontraré allí”. Y dijo: “Este será el Tercer Jalón, y tú no se lo dirás a nadie”. Y en el Cañón Sabino, Él dijo: “Este es el Tercer Jalón”. 300 Y hay tres grandes cosas que van con Ello. Y una se desenvolvió hoy, o ayer; la otra se desenvolvió hoy; y hay una cosa que no puedo interpretar, porque está en un lenguaje desconocido. Pero estuve allí y lo miré directamente. Y este es el Tercer Jalón aproximándose. [El Hermano Branham da tres golpecitos en el púlpito–Ed.]. Y el Espíritu de Dios... ¡Oh, qué cosa! Por esa razón todo el Cielo se quedó en silencio. 301 Ahora, es–es mejor que me detenga aquí mismo, ¿ven? Yo simplemente–yo simplemente me siento impedido, a no decir más al respecto. ¿Ven? 302 Así que, recuerden, el Séptimo Sello, la razón que no fue abierto... [El Hermano Branham da seis golpecitos en el púlpito–Ed.]. ¿Ven?, la razón que no lo reveló, nadie debería saber al respecto. 303 Y quiero que sepan, antes que yo aun supiera una Palabra acerca de Eso, esa visión vino hace años. ¿Recuerdan Uds. eso? [La congregación dice: “Amén”–Ed.]. Y aquí está, al igual que esta otra, concuerda perfectamente con la Palabra exactamente en donde estaba. [El Hermano Branham da dos golpecitos en el púlpito]. Y Dios conoce mi corazón, yo ni una vez pensé una cosa semejante a Esa, y aquí estaba. Es más tarde de lo que pensamos. Ajá. ¡Oh, qué cosa!

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Jalón”, dijo, “porque sólo serán pececitos”. Él dijo: “Entonces el Tercer Jalón lo hará”. 292 Y todos esos ministros se juntaron alrededor de mí, dijeron: “Hermano Branham, ¡sabemos que Ud. lo puede hacer! ¡Aleluya! ¡Hermano Branham!”. Ahí es donde siempre me enredo, con un montón de predicadores. ¿Ven? Yo amo a la gente. Ellos quieren que uno explique todo, esto, eso. 293 Y yo dije: “Bueno, ah–ah–ah”, yo dije, “yo no sé”. Yo dije: “Yo entiendo la pesca”. Miren, yo dije: “Miren, lo primero que uno hace... Aquí está la manera que se hace. Uno ve los peces allí alrededor, uno tiene que tirar de la carnada”. Bueno, esas son exactamente las tácticas de la pesca. Así que yo dije: “Tiren de la carnada. Miren, ¿ven?, cuando yo tiré de la carnada, la primera vez, entonces los peces se fueron tras ella”. Pero eran pequeñitos. Y eran exactamente como los que ellos estaban pescando. 294 Así que entonces yo–yo dije: “Entonces Uds.–Uds. pondrán...”. Y lo saqué de un tirón a la orilla. Y tenía un pescado, pero parecía como pellejo por encima de la carnada, era sólo... era tan pequeño. 295 Y luego yo estaba allí, y Algo dijo: “¡Te dije que no hicieras eso!”. 296 Comencé a llorar. Todo el sedal estaba enredado en mí, así. Y yo tenía... estaba allí llorando con mi rostro inclinado así. Yo dije: “¡Dios! ¡Oh, yo...! ¡Perdóname! Yo–yo soy una persona torpe. Señor, no... Perdóname”. Y yo–yo tenía este sedal. 297 Y eso, lo que tenía en mi mano, era un zapatito de bebé, como así de largo. Y tenía ese cordón, era tan grueso como mi dedo, casi como de media pulgada [1.3 cm–Trad.]. Y el pequeño agujero en este zapato era sólo como del tamaño de un... más pequeño que un–un dieciseisavo, probablemente, de pulgada [1.6 mm], en el pequeño agujero. Y yo estaba tratando de atar este zapatito con este cordón muy grande de una pulgada [2.5 cm]. ¡Ah!

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120 Miren, hoy en día, la medicina es un símbolo de la sanidad Divina. Y aunque muchos de ellos no lo creen, los verdaderos buenos doctores sí lo creen. Pero algunos de ellos no lo creen. Pero el mismísimo emblema que ellos tienen testifica del Poder del Dios Todopoderoso, si lo quieren creer o no. ¿Ven? Eso es correcto. Allí está la serpiente de bronce colgando en un asta, en el emblema médico. 121 Fíjense ahora en estos judíos. Miren, las escamas de ceguera estaban en los ojos de estas personas. Ellos–ellos no podían evitarlo; estaban allí, y Dios las puso allí. Y ellos están allí hasta la edad que se les ha prometido, estos profetas que vienen. Uds. pueden enviar misioneros, Uds. pueden hacer lo que quieran; Israel nunca será convertido hasta que estos profetas vengan a la escena, y eso será después del Rapto de la Iglesia gentil. 122 No había manera que la edad del buey pudiera recibir el llamado de un león, porque Dios ha dicho en Su Palabra que un Espíritu del buey salió. Y en la edad de los reformadores, salió un hombre. ¿Ven? Uds. sólo... 123 Esa es la única cosa que Uds.... ellos pueden recibir. Eso es... Y, en eso ahora, ellos fueron cegados. Simplemente eso es todo lo que hay al respecto. Fíjense ahora. 124 Pero la edad viene cuando todo concluirá para los gentiles. Hay un árbol, y las raíces eran judías, y fue cortado; y los gentiles fueron injertados, el “olivo silvestre”, y está dando su fruto. Miren, cuando esa Novia gentil es cortada, (ese Árbol-Novia del cual hablé), y es llevada a la Presencia de Dios; Dios eliminará haciendo a un lado a esos gentiles incrédulos (la virgen durmiente), y volverá a injertar. Él lo prometió hacer. 125 Y hasta ese tiempo, Uds. sólo tienen que saber en dónde... Si Uds. saben adonde van, bueno, muy bien. Si no saben, pues, están tropezando en la oscuridad. 126 Ahora, eso es cuando los judíos serán convertidos, durante esa edad. Miren, como la edad de la iglesia, bajo el poder de la promesa ungida, ellos recibirán a Cristo; pero, ahora, no mientras los gentiles... Ahora podemos ver qué tipo de Mensaje estos dos profetas de Apocalipsis el capítulo 11 predicarán.

22

Ahora Uds. claramente pueden ver exactamente lo que ellos van

a hacer. Porque el remanente o los ciento cuarenta y cuatro mil

predestinados recibirán el Sello de Dios.

127 Sólo leamos. Miren escuchen ahora muy atentamente. Ahora

quiero que lean conmigo, si pueden, porque voy a volver a

referirme a esto sólo en un ratito. El capítulo 7, miren, esto es

entre el Sexto y el Séptimo Sello.

Después de esto–después de esto (estos Sellos)...

128 El Sexto Sello fue desatado, y ese es el período de la

tribulación. ¿Todos entienden eso ahora? [La congregación dice:

“Amén”–Ed.]. El Sexto Sello fue desatado, y la tribulación se

originó. Después de esto, ¿qué?

Después de esto vi a cuatro ángeles en pie sobre los

cuatro ángulos de la tierra, que detenían los cuatro

vientos de la tierra, para que no soplase... sobre la tierra,

ni sobre el mar, ni sobre ningún árbol. (¡Cuatro ángeles!).

Vi también a otro ángel que subía de donde sale el

sol, y tenía el sello del Dios vivo; y clamó a gran voz a los

cuatro ángeles, a quienes se les había dado el poder de

hacer daño... al mar... a la tierra y al mar,

diciendo: No hagáis daño a la tierra, ni al mar, ni a

los árboles, hasta que hayamos sellado... a los siervos...

129 No la Novia. “Los siervos”. No los hijos. “Los siervos”. Israel

siempre ha sido los siervos de Dios. La Iglesia son los hijos,

¿ven?, por medio del nacimiento. Israel es Su siervo. Observen,

en todo lugar, siempre es así. Abraham era Su siervo. Nosotros

no somos siervos. Somos hijos, hijos e hijas. Sí.

del... en su frente... de nuestro Dios.

130 Observen ahora.

... en su frente... de nuestro Dios.

Y oí el número de los sellados:...

131 Ahora quiero que escuchen atentamente a la lectura de ellos.

47

que les puedo decir es que yo... ¡Exactamente lo mismo como fue con esos ángeles! 286 Y me cayó en la mano. Y miré, y era una espada. Y tenía un mango de perla, muy bonito; y tenía una empuñadura de oro. Y la hoja parecía como cromada, como plata, sólo que era muy resplandeciente. Y era de un borde tan suave y agudo, ¡oh, qué cosa! Y yo pensé: “¡No es esa la cosa más bonita!”. ¡Simplemente me quedó muy bien en mi mano! Yo pensé: “Es muy bonita. Pero”, yo dije, “oye, yo siempre le he tenido temor a esas cosas, a una espada”. Yo pensé: “¿Qué haré yo con eso?”. 287 Y justo en ese momento una Voz vino estremeciendo por ahí, que sacudió las rocas. Dijo: “¡Es la Espada del Rey!”. Y luego salí de eso. 288 “La Espada del Rey”. Ahora, si hubiera dicho: “Una espada de un rey...”. Pero dijo: “La Espada del Rey”. Y sólo hay uno que es “el Rey”, y ese es Dios. Y Él tiene una Espada, y esa es Su Palabra, por la cual vivo. ¡Bien lo sabe Dios, estando aquí en Su púlpito sagrado, con esta Santa Palabra puesta aquí! ¡Es la Palabra! ¡Amén! ¡Oh, qué día en el que estamos viviendo! ¡Qué cosa tan grande! ¿Ven el misterio y el secreto? El Tercer... 289 Parado ahí cuando esto me dejó, Algo simplemente vino a mí y dijo: “No temas”. Miren, no escuché ninguna voz. Algo como por dentro de mí habló. Simplemente les tengo que decir la verdad, exactamente lo que sucedió. Algo me tocó, y dijo: “No temas. Este es ese Tercer Jalón”. 290 ¡El Tercer Jalón! ¿Lo recuerdan? [La congregación dice: “Amén”–Ed.]. Él dijo: “Tú has tenido tantos imitadores en cuanto a esto, lo que tú intentaste explicar. Pero”, dijo, “ni siquiera intentes Esto”. ¿Lo recuerdan? ¿Cuántos recuerdan esa visión? [“Amén”]. Pues, está por dondequiera. Está en cinta, y en todas partes. De eso hace como seis años, siete años. Hace siete años. Dijo: “No intentes explicar Eso”. Dijo: “Este es el Tercer Jalón, pero Yo te encontraré allí adentro”. ¿Es correcto eso? [“Amén”]. Él dijo: “No intentes...”. 291 Yo estaba parado con un–un zapatito de bebé, cuando Él me dijo: “Ahora haz tu Primer Jalón. Y cuando lo hagas, los peces se irán tras la carnada”. Dijo: “Entonces observa tu Segundo

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significa esta visión? Yo–yo estoy–yo estoy...”. Yo dije: “Señor,

¿significa mi muerte?”.

280 Uds. recuerdan que yo les dije que pensaba que pudiera

significar mi muerte, porque algo explotó al grado que

simplemente me estremeció en añicos. Uds. lo recuerdan.

¿Cuántos lo saben, han oído de ello? [La congregación dice:

“Amén”–Ed.]. Pues, seguro, ¿ven?, todos Uds. Y pensé que

significaría mi muerte.

281 Y luego en el cuarto, yo dije: “¿Fue...? ¿Qué–qué-qué fue eso,

Señor? ¿Qué–qué significa eso? ¿Significa que voy a morir? Si

así es, muy bien, no le diré a mi familia. Sólo permíteme partir

(¿ven?), si mi obra ya terminó”. Y yo dije...

282 Miren, ¿qué fue eso? Pero me envió una confirmación de

nuevo. Uds. recuerdan que les dije, que no era eso. Era el

progreso de mi obra. ¡Oh, oh, oh! ¿Lo captan? [La congregación

dice: “Amén”–Ed.]. ¿Ven? Y sentado en el Cañón Sabino...

283 El Padre Celestial sabe esto. Tan cierto como Uds. vieron eso

acontecer, esos ángeles descendieron y vindicaron que todo

Mensaje es el mismo. Entonces Uds. saben si viene de Dios o no.

Se les fue predicho por medio de una visión. No les podía decir

hasta que terminaran los servicios, porque se me fue prohibido.

284 En el Cañón Sabino, estando allá aquella mañana, yo tenía

mis manos levantadas. Y mi... El viento me había volado mi

viejo sombrero negro. Cuando... Yo estaba parado allí, con mis

manos levantadas, orando. Yo dije: “Señor Dios, ¿qué significa

esto? No lo puedo entender, Señor. ¿Qué debo yo hacer? Si es el

tiempo de mi partida al Hogar, permíteme subir allí arriba,

donde nunca me encontrarán. No quiero que nadie ande

lamentando, si voy a partir. Yo–yo quiero que mi familia sólo

piense que simplemente tomé una caminata. Y ellos no me

encontrarán. Escóndeme en alguna parte. Si voy a partir, pues,

permíteme partir. Quizás José encontrará mi Biblia aquí mismo,

algún día, y permítele usarla. ¿Ven?, si voy a partir, permíteme

partir, Señor”. Y tenía mis manos levantadas. Y, de repente,

algo cayó en mi mano.

285 Yo no sé. No puedo decir. ¿Me dormí? Yo no sé. ¿Entré en un

éxtasis? Yo no sé. ¿Fue una visión? No les puedo decir. Lo único

23

... ciento cuarenta y cuatro mil sellados de todas las

tribus de los hijos de Israel. 132 Él los nombra perfectamente. Ahora, si da la casualidad que esté aquí sentado un discernidor Británico israelita, escuche cómo esto le baja los humos, ¿ven?

De la tribu de Judá, doce mil sellados. (Llamada, “la tribu”). De la tribu de Rubén, doce mil sellados. De la

tribu de Gad, doce mil... 133 Observen sus–observen sus tribus ahora.

Y de la tribu de Aser, doce mil sellados... la tribu de

Neftalí, doce mil sellados... la tribu de–de Manasés, doce

mil...

Y de la tribu de Simeón, doce mil sellados. De la tribu

de–de Leví, doce mil sellados. De la tribu de Isacar, doce

mil... (Isacar, supongo que así pronuncian ese)... doce

mil...

... la tribu de Zabulón, doce mil... Y de la tribu de

José, doce mil sellados. De toda la... De la tribu de

Benjamín, doce mil sellados. 134 Miren, hay doce tribus, doce mil de cada tribu. Doce por doce es ¿qué? [La congregación dice: “Ciento cuarenta y cuatro mil”–Ed.]. Ciento cuarenta y cuatro mil. Observen ahora. Ellos eran todos de las tribus de Israel. 135 Observen ahora: “Después de esto...”. Ahora aquí viene otro grupo. Ahora, la Novia se ha ido, sabemos eso. Pero observen a este grupo aparecer.

Después de esto miré, y he aquí una gran multitud, la

cual nadie podía contar, de todas naciones... tribus y

pueblos y lengua, que estaban delante del trono y en la

presencia del Cordero, vestidos en ropas blancas, y con

palmas en la mano;

24

y clamaban a gran voz, diciendo: La salvación

pertenece a nuestro Dios que está sentado en el trono, y al

Cordero.

Y todas las naciones estaban en pie alrededor del

trono, y del anciano y de los cuatro seres vivientes, y se

postraron sobre sus rostros delante del trono, y adoraron

a Dios,

diciendo: Amén. Bendiciones... la gloria... la

sabiduría... la acción de gracias... la honra... el poder...

la fortaleza, sean a nuestro Dios por los siglos de los

siglos. Amén.

Entonces uno de los ancianos... 136 Miren, aquí él está delante de los ancianos, como lo hemos visto a él, por todos los Sellos.

Entonces uno de los ancianos habló, diciéndome:

Estos... ¿quiénes son...?

137 Ahora, Juan, siendo un judío, reconoció su propio pueblo. Él los vio en orden de tribu. ¿Es correcto eso? Él reconoció y nombró cada una de las tribus. 138 Pero ahora, cuando él ve a estos, como que está perplejo. Y el anciano lo sabe, así que él dice:

... Estos que están vestidos de ropas blancas, ¿quiénes

son, y de dónde han venido? 139 Juan, contestando ahora:

Yo le dije: Señor, tú lo sabes. 140 Juan no los conocía, ¿ven?; de todas las tribus, lenguas y nación.

... Y él me dijo: Estos son...

... él me dijo: Estos son los que han salido de la gran

tribulación [de gran tribulación, Biblia en inglés–Trad.]

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Esa es la verdad”–Ed.]. ¿Qué no me volví y me alejé de esa tienda, así? ¿Es correcto eso? [“Eso es correcto”]. 274 Porque esto es lo que era, exactamente lo que era, y sabiendo que no lo podía decir hasta que sucediera para ver si la gente lo entendería. 275 Y ¿se fijaron que un cierto ángel, dije yo, allí que era un ángel extraño? Así me parecía él más que cualquiera del resto de ellos. ¿Recuerdan Uds. eso? [La congregación dice: “Amén”–Ed.]. Ellos estaban en una constelación, tres de cada lado, y uno en la parte de arriba. Y el que estaba aquí junto a mí, contando de la izquierda a la derecha, hubiera sido el séptimo ángel. Él era más resplandeciente, significaba más para mí que el resto de ellos. ¿Recuerdan Uds. eso? Yo dije: “Él tenía su pecho erguido, así, y estaba volando hacia el este” (Uds. recuerdan), “así”. Yo dije: “Me levantó; me elevó”. ¿Recuerdan Uds. eso? [“Amén”]. 276 Aquí está, el que tenía el Séptimo Sello, lo que yo me he preguntado toda mi vida. ¡Amén! Esos otros Sellos significaron mucho para mí, por supuesto, pero, ¡oh, Uds. no saben cuánto ha significado Éste, por primera vez en la vida! [El Hermano Branham da varios golpecitos en el púlpito–Ed.]. 277 Oré, le clamé a Dios. Yo–yo–yo... Después de esa reunión en Phoenix... Cualquiera de las personas allí conmigo, saben. Yo me quedé postrado en los montes. 278 Una mañana, me levanté y fui al Cañón Sabino, esos enormes montes elevados escabrosos. Y yo fui allá arriba. Y hay una veredita para caminar, después que uno sigue caminando o sube hasta el Monte Lemmon, lo cual es una caminata de treinta millas [48.3 km–Trad.], casi treinta pies [9.1 m] de nieve allá arriba. Así que, allá arriba en el monte, muy temprano antes del amanecer, subiendo por esta veredita, haciendo rodar rocas mientras subía, me sentí guiado a dar vuelta en esta dirección. Y me di la vuelta, y subí a unas grandes rocas dentadas, ásperas, ¡oh, qué cosa! cientos de pies de alto. 279 Y me arrodillé entre esas rocas. Yo puse allí esta Biblia, y puse allí este libro, esta libretita. [El Hermano Branham muestra su Biblia y libreta–Ed.]. Yo dije: “Señor Dios, ¿qué

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267 Fíjense, un trueno, siete Mensajes que han estado sellados y no pueden ser revelados hasta el día postrero, de esta edad. ¿Ven lo que quiero decir? [La congregación dice: “Amén”–Ed.]. 268 Miren, ¿se han fijado en la parte misteriosa de esta semana? Eso es lo que es. Eso es lo que ha sido. No ha sido un ser humano, un–un hombre. Han sido los ángeles del Señor. 269 Fíjense. Hay testigos, tres sentados aquí, que hace una semana, hace poco más de una semana, yo estaba muy allá adentrado en los montes, cerca de México, con dos hermanos que están aquí sentados, quitándome cadillos, o erizos, de la pierna de mi pantalón, y hubo un estruendo que casi parecía que estremeció los montes. Ahora, eso es correcto. Yo nunca les dije a mis hermanos, pero ellos notaron algo diferente. 270 Y Él me dijo: “Prepárate ahora. Ve al este. Aquí está la interpretación de esa visión”. ¿Ven? Ahora, para hacerles saber, el Hermano Sothmann no obtuvo el animal de caza que él salió a buscar. Nosotros estábamos tratando de conseguírselo. Y Él dijo: “Ahora, esta noche, como una señal para ti, él no lo va a cazar. Tú debes consagrarte en este tiempo para la visitación de estos ángeles”. Y yo mismo me sentí fuera de sí, Uds. recuerdan. 271 Y yo estaba en el oeste. Los ángeles venían al este. Y mientras ellos venían, yo fui levantando con ellos (¿recuerdan Uds. eso?), venían al este. [La congregación dice: “Amén”–Ed.]. 272 Y el Hermano Fred, aquí esta noche, es un testigo, y el Hermano Norman. Mientras nos íbamos, yo casi persuadí a ese hombre que se quedara y consiguiera su animal de caza. ¿Es correcto eso, Hermano Sothmann? [El Hermano Fred Sothmann dice: “Amén”–Ed.]. Sí, allí, está allí mismo. Yo lo persuadí; pero, sin embargo, Él dijo: “Él no lo hará”. Yo nunca dije nada; seguí adelante. 273 Algo, estaba junto a la tienda el día que... ¿Recuerda Ud., Hermano Sothmann? Y yo, tan pronto como algunas cosas estaban siendo dichas, que lo puse a Ud. y al Hermano Norman... ¿En dónde está el Hermano Norman? Allá atrás. Los puse bajo juramento, que ellos no mencionarán lo que estaba aconteciendo. ¿Es correcto eso? [Los hermanos dicen: “Amén.

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(en otras palabras, la gran tribulación), y han lavado sus

ropas,... las han emblanquecido en la sangre del Cordero.

Por esto están delante del trono de Dios, y le sirven

día y noche en su templo; y los... el que estaba sentado

sobre el trono extenderá su tabernáculo sobre ellos.

Ya no tendrán hambre ni tendrán sed, y el sol no

caerá más sobre ellos... sol caerá más sobre ellos, ni calor

alguno;

porque el Cordero que está en medio del trono los

pastoreará, y los guiará a fuentes de aguas de vida; y

Dios enjugará toda lágrima de los ojos de ellos.

141 Ahora abrimos el... llegamos al Sello.

¿Se fijaron?, ellos eran... Primero comenzamos ahora, con

Israel.

142 Y luego vemos la iglesia purificada, no la Novia; la iglesia

purificada a través de tribulación, ¿ven?, ¿ven?, apareciendo

aquí, un gran número de corazones muy sinceros que salieron

de–de la gran tribulación. No la Iglesia; ya se ha ido, la Novia.

Ahí está la iglesia.

143 Ahora, nos damos cuenta de que un poco después, Jesús dijo

que el Trono fue establecido, y cómo los... estarían en el juicio,

cada uno.

144 Ahora, nos damos cuenta de que estas personas fueron

selladas con el Sello del Dios vivo (¿es correcto eso?), estos

judíos. ¿Cuál es el Sello del Dios vivo?

145 Miren, yo no voy a nombrar... herir ningunos sentimientos.

Yo sólo lo estoy diciendo, ¿ven? ¿Saben que leyendo lo de muchos

eruditos que escriben sobre esto, ellos afirman que este grupo

aquí, lavado en la Sangre, realmente es la Novia?

146 ¿Saben que muchos eruditos también afirman que los ciento

cuarenta y cuatro mil son la Novia? ¡Qué...! Algo tiene que

encajar aquí mal... aquí bien, porque hay algo mal ahora.

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147 Fíjense, nuestros hermanos Adventistas dicen que el Sello de Dios es guardar el día de reposo. Uds. saben eso. Pero yo quiero una pizca de Escritura sobre eso, para mostrar que el día de reposo [sábado–Trad.], o que el guardar el día de reposo, es el Sello de Dios. ¿Ven? Simplemente es alguien que formuló esa idea. 148 Pero si leen Efesios 4:30, dice: “No contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados hasta el día de vuestra–de vuestra redención”, sí, señor, cuando la obra de mediación se termina, y uno ha venido; Cristo viene para redimir a los Suyos. Uno está sellado, no hasta el próximo avivamiento. Cuando uno está sellado con el Espíritu Santo, es una obra terminada mostrando que Dios lo ha recibido, y no hay manera de apartarse de ello. 149 Uds. dicen: “Bueno, yo lo tenía y me aparté”. No, Uds.–Uds. no lo tenían. 150 Dios dice que sigue hasta el Día de Redención. Miren, ajá, Uds. sólo discutan con Él, y vean lo que quiere decir. “Hasta el día de vuestra redención”. 151 Fíjense. Como hubo... Como ellos fueron un remanente conforme a la elección, estos judíos ahora son el remanente conforme a la elección. En los días del primer ministerio de Elías a los judíos, cuando siete mil creyentes fueron guardados por la mano de Dios, ahora en este tiempo del remanente, llegando al tiempo de ellos hay ciento cuarenta y cuatro mil conforme a la elección. Que, el Mensaje en ese tiempo, quienes creerán el Mensaje, serán ciento cuarenta y cuatro mil. 152 Ahora, Uds. dicen: “Oh, espere sólo un momento, hermano, yo no estoy seguro de esta cosa de la elección. Bueno, yo nunca lo he leído allí”. 153 Muy bien, veamos ahora si está correcto o no. Regresemos a Mateo, y lleguemos aquí y démonos cuenta si no podemos hallar una cosita sobre esto en alguna parte. Creo ahora que estoy bien. No lo tengo escrito aquí, pero sólo vino a mi mente. Tomemos al final, el versículo 30 adonde fuimos anoche al final del Sexto Sello, en el versículo 30. Leamos ahora eso y veamos

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que él lo sepa. Es el Tercer Jalón. Él simplemente no sabe nada al respecto. ¿Ven? Él no lo entiende. 261 ¡Pero hay un secreto que está allí debajo de Eso! [El Hermano Branham da un golpecito en el púlpito–Ed.]. ¡Gloria a Dios en las Alturas! Nunca puedo pensar igual el resto de mi vida, cuando yo vi... Miren, yo no sé qué... Yo sé el siguiente paso allí, pero no sé qué... cómo interpretar eso. No tardará mucho. Yo tengo aquí escrito, cuando eso sucedió, si Uds. pueden ver aquí: “Detente. No sigas más adelante, además de esto aquí”. No soy propenso a ser un fanático. Sólo estoy diciendo la Verdad. 262 Pero ¿recuerdan el zapatito, que yo siempre traté de explicar cómo el alma estaba junto a esto y eso, y la consciencia interior, y todo ese tipo de cosas? Lo cual eso sólo produjo una gran cantidad de imitaciones que comenzaron después de eso. Cómo ellos tenían que tomar la mano y detener a las personas y sentir una vibración. Todos sentían una vibración en sus manos. 263 Pero ¿recuerdan cuando Él me llevó allá, y dijo: “Este es ese Tercer Jalón, y nadie lo sabrá”? ¿Recuerdan Uds. eso? [La congregación dice: “Amén”–Ed.]. Las visiones nunca fallan. Son perfectamente la Verdad. 264 Fíjense ahora. ¿Recuerdan la visión de la constelación? Charlie, yo... Allí estás. 265 Algo está sucediendo, les dije, esta semana, que Uds.... Ha estado todo alrededor de Uds., pero me pregunto si se fijaron en ello. 266 ¿Recuerdan la constelación de la visión de los ángeles, cuando me fui de aquí para ir a Arizona? [La congregación dice: “Amén”–Ed.]. ¿Recuerdan Señores, ¿Qué Hora Es? [“Amén”]. ¿Recuerdan Uds. eso? Fíjense, sólo hubo un gran estallido de trueno, y siete ángeles aparecieron. ¿Es correcto eso? [“Amén”]. Un estallido de trueno: siete ángeles aparecieron.

Vi al Cordero cuando Él había abierto el primer sello,

y... uno de los cuatro seres vivientes dijo como con voz de un trueno: Ven y mira.

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254 ¡Los ángeles, todo se calló! Si ellos hicieran un movimiento, pudiera revelar algo, así que sólo se callaron, dejaron de tocar el arpa; todo se detuvo. 255 Siete, el número perfecto de Dios. Siete [el Hermano Branham da siete golpecitos en el púlpito–Ed.] simplemente uno tras otro. Siete Truenos fueron emitidos consecutivamente, como si estuvieran deletreando algo. Fíjense, en ese tiempo, Juan lo comenzó a escribir. Él dijo: “No lo escribas”. 256 Jesús nunca habló de Ello. Juan no lo pudo escribir. Los ángeles no saben nada al respecto. ¿Qué es? Es la cosa que Jesús dijo: “Aun los ángeles del Cielo no sabían”, nada al respecto. ¿Ven? ¿Ven? Él mismo no lo sabía. Dijo: “Sólo Dios”, lo sabría. 257 Pero Él nos dijo: “Cuando comenzáramos a ver estas señales aparecer”. ¿Están llegando ahora a alguna parte? [La congregación dice: “Amén”–Ed.]. Muy bien. Fíjense, “comenzáramos a ver estas cosas aparecer”. ¿Ven? Si satanás pudiera apoderarse de Ello... 258 Si quieren que algo suceda... Ahora Uds. tendrán que tomar mi palabra en cuanto a esto. Si estoy planeando hacer algo, yo sé que es mejor no contarle a nadie sobre eso. No que esa persona lo diría, pero satanás lo oirá. ¿Ven? Él no puede obtenerlo, ahí en mi corazón, mientras Dios lo tenga sellado con el Espíritu Santo, así que eso es entre yo y Dios. ¿Ven? Él no sabe nada al respecto sino hasta que uno lo hable; entonces él lo oye. Y he tratado... Le digo a la gente que haré una cierta–cierta cosa, y observen al diablo poner todo estorbo en el camino que él pueda, para llegar allí, ¿ven?, para ganarme a llegar allí. Pero si obtengo la revelación de parte de Dios, y simplemente no digo nada al respecto, entonces es diferente. 259 Recuerden, satanás tratará de imitar. Él tratará de imitar todo lo que la Iglesia hará. Él lo ha tratado. Nos fijamos en eso, con el anticristo. 260 Pero esto es algo que él no puede imitar. No habrá imitaciones de esto, ¿ven?, porque no lo sabe. No hay manera

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ahora adonde llegaremos en el versículo 31. ¿Ven? “Verán al Hijo del Hombre viniendo en gloria”. Ahora el versículo 31.

Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y

juntarán a sus escogidos, de los cuatro vientos, desde un

extremo del cielo hasta el otro. 154 Los “escogidos” saldrán. ¿Qué es? Y el período de la tribulación. Dios llamará a Sus escogidos, y esos son los judíos durante ese tiempo, los escogidos. La Biblia habla de eso. Pablo habla de eso, “conforme a la elección”. Habrá ciento cuarenta y cuatro mil conforme a la elección, que creerán el Mensaje, de literalmente millones que estarán allí. 155 Había millones en Palestina en los días de la profecía de Elías, y siete mil fueron salvos de los millones. 156 Miren, “conforme a la elección” en donde millones de judíos se están reuniendo en la tierra natal. Ha llegado a ser una nación. Habrá millones allí, pero sólo ciento cuarenta y cuatro mil “escogidos” serán tomados. Ellos oirán el Mensaje. 157 Es lo mismo con la Iglesia gentil. Hay una Novia, y Ella es escogida. Y será llamada “conforme a la elección”. Fíjense, todo esto tipifica a la Iglesia perfectamente, los creyentes escogidos. 158 Los otros no creen. Uno simplemente lo puede detectar. Uno le dice una Verdad a un hombre, y que sea probada por la Palabra, y luego vindicada, él dice: “Yo no lo creo”. Uds. simplemente pueden... 159 No pierdan el tiempo con eso. Jesús dijo que no lo hicieran. Dijo: “Simplemente es como echar las perlas delante de los cerdos”. ¿Ven? Dijo: “Simplemente déjenlos solos. Ellos se volverán y las pisotearán”. Ellos se burlarán de Uds. Sólo aléjense y déjenlos. “Si el ciego guiare al ciego...”. 160 Yo fui a ver a un hombre, no hace mucho; mejor dicho, él me vino a ver. Él había estado discutiendo, por todas partes, dondequiera, contra la sanidad Divina. Y él vino y dijo: “Yo no creo en su sanidad Divina”.

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161 Yo dije: “La mía, supongo, no serviría para nada porque no tengo ninguna”. Y él... Yo dije: “Pero la de Dios es perfecta”. Él dijo: “No hay tal cosa”. 162 Yo dije: “Ud. ha llegado demasiado tarde para decir eso, amigo. Sí, Ud. se ha–Ud. se ha esperado demasiado tiempo para eso. Ud. pudiera haber discutido eso hace unos años, pero hay otra edad aconteciendo ahora. Hay millones que testifican, ¿ve?”. Yo dije: “Ud. ha llegado–Ud. ha llegado demasiado tarde ahora, amigo, para decir eso”. 163 Él dijo, él dijo: “Bueno, yo no lo creo, no importa qué haga Ud.”. Yo dije: “Ciertamente que no. Ud. no puede”. ¿Ven? 164 Él dijo: “¡Hiérame con ceguera!”. Dijo: “Si Ud. realmente tiene el Espíritu Santo, como Pablo”, dijo, “hiérame con ceguera”. 165 Yo dije: “¿Cómo lo puedo hacer cuando Ud. ya está ciego?”. Dije: “Su padre lo ha cegado a la Verdad”. Yo dije: “Ud.–Ud. ya está ciego”. 166 Y él dijo: “Yo no creería, a mí no me importa qué pudiera hacer Ud., cuánta evidencia puede mostrar, o cualquier cosa así. Todavía no lo creo”. 167 Yo dije: “Ciertamente. No era para incrédulos. Sólo era para creyentes. Eso es todo”. ¿Ven? 168 ¿Qué era eso? ¿Ven?, uno sabe en ese momento, que no hay elección. Simplemente no pierdan el tiempo con eso, en lo absoluto. Jesús hizo la misma cosa. Él dijo: “Dejadlos; si el ciego guiare al ciego, ¿qué no caerán ambos en el hoyo?”. 169 Pero cuando Él vino a una pequeña prostituta [el Hermano Branham truena sus dedos una vez–Ed.], ¡se encendió! ¿Qué era eso? Era una simiente elegida yaciendo allí, ¿ven?, que lo vio en ese mismo momento. Cuando vino a Pedro, había una simiente elegida yaciendo ahí, ¿ven?, y ellos lo vieron. “Y todos los que el Padre me ha dado, ha” (tiempo pasado), “me ha dado a Mí,

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248 Y miren, tan cierto como yo estoy parado en la plataforma

esta noche, tuve la revelación que reveló, es de una manera

triple. De eso les voy a hablar, con la ayuda de Dios, sobre una

parte de Ello. Y luego Uds.... Pasemos por eso primero. Aquí

está la revelación para comenzar a lo que les quiero decir que

es, lo que es. Lo que sucede, es que... Esos Siete Truenos que él

oyó tronar, y se le fue prohibido escribir, eso es lo que es el

misterio, que está detrás de esos Siete Truenos consecutivos

siendo emitidos. [El Hermano Branham da varios golpecitos en

el púlpito–Ed.].

249 Miren, ¿por qué? Probémoslo. ¿Por qué? Es el secreto que

nadie sabe al respecto. A Juan se le fue prohibido escribir al

respecto, aun–aun escribir un símbolo al respecto. ¿Por qué?

Este es el porqué no había activi–... actividad en el Cielo:

pudiera revelar el secreto. ¿Lo ven Uds. Ahora? [La

congregación dice: “Amen”–Ed.].

250 Si es tan grande, debe ser incluido, porque tiene que

suceder. Pero cuando los Siete Truenos...

251 Fíjense ahora. Cuando los siete ángeles salieron para tocar

sus Trompetas, hubo un trueno. [El Hermano Branham da un

golpecito en el púlpito–Ed.]. Cuando Israel fue reunido, hubo

una trompeta. “Cuando el tiempo no sería más”, la última

trompeta, hubo un trueno.

252 Pero aquí hay Siete Truenos consecutivos, exactamente uno

tras otro: uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ese número

perfecto. Siete Truenos uno tras otro no emitieron... emitiendo

sólo–sólo uno, dos tres, cuatro, cinco, seis, siete,

consecutivamente. [El Hermano Branham dio siete golpecitos en

el púlpito–Ed.]. Entonces los Cielos no podían escribir Eso. Los

Cielos no pueden saber al respecto, nada más, porque no hay

nada en qué dirigirse. Era un tiempo de reposo. Era tan grande,

al grado que fue un secreto que se ocultó de los ángeles.

253 Miren, ¿por qué? Si satanás se apoderaba de ello, él pudiera

hacer gran daño. Hay una cosa que él no sabe. Ahora, él puede

interpretar cualquier cosa que él quiere, e imitar cualquier tipo

de don (espero que estén aprendiendo), pero él no puede saber

Esto. Ni siquiera está escrito en la Palabra. Es totalmente un

secreto.

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240 Juan ni siquiera pudo escribir sobre Ello. No, a él se le prohibió escribir aquí. [El Hermano Branham le da dos palmaditas a su Biblia–Ed.]. ¿Ven?, sólo hay un... sólo... Él no lo escribió, pero sólo está en silencio. 241 Y los veinticuatro ancianos que estaban allí delante de Dios, tocando sus arpas, ellos dejaron de tocar sus arpas. Los ángeles dejaron de cantar en el Cielo. 242 ¡Piensen! Los santos querubines y serafines, que Isaías vio en el templo, con seis pares... o tres pares de alas. Tres... Dos sobre su rostro, y dos sobre sus pies, y volando. Y día y noche ellos están delante de Dios, cantando: “¡Santo, santo, santo, es el Señor Dios Todopoderoso!”. Y aun cuando entraron, o entraban en el templo, los postes del templo se estremecieron con la presencia de ellos–ellos. 243 Y estos santos serafines se callaron. Los ángeles dejaron de cantar. Ajá. ¡Fiuu! Volaban en la Presencia de Dios, cantando: “Santo, santo, santo”; ellos se callaron. Ningunos ángeles cantando. Ningunas alabanzas. Ningún–ningún servicio de altar. No, nada. Se hizo silencio; se callaron, un silencio absoluto en el Cielo por media hora. 244 Todo el ejército del Cielo estaba silente por esta media hora, cuando el misterio del Séptimo Sello en el Libro de Redención fue abierto. Piénsenlo. Pero está abierto. El Cordero lo abre. ¿Saben qué? Ellos estaban asombrados por Ello, creo yo. Ellos no sabían, ¡allí estaba! Sólo se detuvieron. 245 ¿Por qué? ¿Qué es? Ahora, ninguno de nosotros sabe. Pero, yo voy–yo voy a decirles, en mi–mi revelación de Ello. 246 Y, miren, yo no soy propenso a ser un fanático. Si lo soy, estoy ignorante de eso, ¿ven? Yo soy... Yo no me dejo llevar por tal comportamiento delirante y cosas imaginarias. 247 Yo he dicho algunas cosas, que pudieran ser algo raras para algunas personas. Pero cuando Dios viene, y lo respalda, y lo vindica y dice que es la Verdad, entonces esa es la Palabra de Dios. ¿Ven? Puede que parezca raro, de esa manera. ¿Ven?

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vendrán. Ellos vendrán a Mí”. ¡Oh, qué cosa! ¡Yo amo eso! Sí, señor. Fíjense, los creyentes sí lo creen. 170 Los incrédulos no lo pueden creer. Así que, miren, si alguien quiere discutir de la simiente de la serpiente y demás, y uno trata de mostrarles, ellos no quieren escucharlo; sólo aléjense. Sólo déjenlos en paz. ¿Ven?, Dios no discute, tampoco Sus hijos. 171 Fíjense, los ciento cuarenta y cuatro mil judíos escogidos de Dios no se inclinan a la bestia, su denominacionalismo, o estatutos, o alguna cosa, aunque la nación de ellos está en un pacto con ella en ese tiempo. Israel está en un pacto, pero aquí están ciento cuarenta y cuatro mil que no lo van a hacer. Esos son los escogidos. 172 Lo mismo está sucediendo aquí en la Iglesia gentil ahora; es un grupo escogido. Uds. no los pueden meter en ese tipo de cosas. Ellos no lo creerán. No, señor. Una vez que la Luz pegó en ellos, eso lo concluyó en ese mismo momento. Ellos ven la... lo ven suceder, luego la ven vindicada y probada de esa manera. Y ellos miran aquí en la Biblia, ven esa Palabra simplemente sigue avanzando. Bueno, simplemente es–simplemente más vale que dejen de perder el tiempo con ellos, porque ellos lo creen. Eso es todo. Eso es todo. Aunque ellos no lo pueden explicar, pero ellos saben que lo recibieron. Así que, como digo, hay muchas cosas que no puedo explicar, pero yo–yo sé que es real de todos modos. Ajá. Muy bien. 173 Este tiempo fue entre el Sexto y el Séptimo Sello que Él llama a estas personas, de las cuales habló Jesús en Mateo el capítulo 24, y el versículo 31 que acabamos de leer, ¿ven? Las trompetas aquí, los dos testigos de la... Cuando se toca la trompeta, es la trompeta de los dos testigos de la edad de la gracia para los judíos. Una voz [voz, Biblia en español–Trad.] de trompeta, ¿se fijaron?, una voz de trompeta. Él dijo: “Y toca la trompeta”. Fíjense ahora aquí, el 31.

Y enviará a sus ángeles (no uno, ¿ven?, hay dos de ellos) con gran voz de trompeta,...

174 ¿Qué es eso? Cuando Dios se prepara para hablar, hay un sonido de trompeta. Esa es siempre Su Voz; está llamando a la

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batalla, ¿ven? Dios habla. Estos ángeles vendrán con el toque de la trompeta. 175 Y ¿se fijaron?, en el Mensaje del último ángel, se toca la trompeta. El Mensaje del primer ángel, se toca una trompeta; el del segundo ángel, se tocó una trompeta cuando Él la envió. Fíjense, pero cuando los Sellos fueron anunciados, todos estaban en una sola gran cosa Divina para llamar a que salga un grupo de personas; hubo un toque de trompeta, y Siete Sellos fueron rotos. 176 Fíjense, “juntarán a Sus judíos escogidos de las cuatro partes de los cielos”. 177 Él mencionó los seis Sellos, como hemos visto, pero no el Séptimo Sello. Él nunca dijo nada aquí acerca del Séptimo Sello, en ninguna parte. 178 ¿Ven?, inmediatamente, en el versículo 32 se vuelve a las parábolas, del tiempo del llamado de los judíos escogidos. Observen aquí ahora, ¿ven? 179 “Y enviará a los ángeles con trompeta, y juntarán a los escogidos de los cuatro ángulos del cielo”. Ahora Él comienza... 180 ¿Ven?, Él no dice nada acerca del Séptimo Sello aquí. ¿Ven? Él habló del Sexto Sello; el Primero, el Segundo, el Tercero, el Cuarto, el Quinto y el Sexto. 181 Pero fíjense:

De la higuera aprended la parábola: Cuando ya sus ramas están tiernas, y brotan las hojas, sabéis que el

verano está cerca.

Así también vosotros, cuando veáis todas estas cosas,

conoced que está cerca, a la puerta. 182 Esa última, esa pregunta que ellos le hicieron a Él: “Y ¿qué señal habrá del fin del siglo?”. 183 “Cuando vean a estos judíos... Cuando vean estas otras cosas aconteciendo, Uds. saben lo que acontece. Miren, cuando vean a

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fin de las Copas. Es el fin de la Tierra. Es el... Aun es el fin del tiempo. 232 Se acaba el tiempo. La Biblia así lo dice. Mateo, el capítulo 7... Quiero decir, Apocalipsis, el cap–... 7, el capítulo 10 y el... y del versículo 1 al 7. El tiempo se acaba. El Ángel dijo: “El tiempo no será más”, cuando eso... en los días que suceda esta gran cosa. 233 Todo termina, en este tiempo, el fin del–del... al fin de este Séptimo Sello. Fíjense. Es el fin de la edad de la iglesia. Es el–el fin del Séptimo Sello. Es el fin de las Trompetas. Es el fin de las Copas, y aun el fin de la introducción del Milenio. Eso está en el Séptimo Sello. 234 Es como disparar un cohete en el aire. Y ese cohete explota aquí, y sube y vuelve a explotar. Lanza cinco estrellas. Una de esas estrellas explota y lanza cinco estrellas de esa; y luego una de esas estrellas explota y lanza cinco estrellas de esa. ¿Ven?, y desaparece gradualmente. 235 Eso es lo que es el Séptimo Sello. Simplemente termina el tiempo para el mundo. Termina el tiempo para esto. Termina el tiempo para eso. Termina el tiempo para esto. Termina el tiempo. Todo simplemente termina en el Séptimo Sello. 236 Miren, ¿cómo lo va Él a hacer? Eso es lo que nosotros no sabemos, ¿qué no? Nosotros no sabemos. 237 Aun es el tiempo para todas estas cosas, y la introducción del Milenio. 238 Fíjense, la apertura de este Sello fue tan grande que el Cielo se quedó en silencio por causa de Ello, “en silencio como por media hora”. Miren, ¡qué si es grande! ¿Qué es? Se quedó en silencio, los Cielos. Ni una sola cosa se movió por media hora. 239 Miren, una media hora puede que no sea mucho si están teniendo un buen tiempo. Pero en el suspenso entre la muerte y la vida, pareciera un Milenio. ¡Era tan grande que Jesús nunca lo mencionó; ninguno del resto de ellos!

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los llamó allá, los ciento cuarenta y cuatro mil, ellos faltaban. Eso es correcto. Ni siquiera estaban incluidos allí. Y José y Leví son puestos en el lugar de Dan y Efraín. Ahora Uds. pueden mirar eso. Allí está, ante Uds., ¿ven? Y aquí está la promesa de Dios, desde muy allá, cientos y cientos de años antes de eso. [El Hermano Branham da varios golpecitos en el púlpito–Ed.]. 226 Ahora, ¿qué sucedió? Fueron purificados durante el terrible tiempo del período de la tribulación. 227 Ahora, si Dios va a purificar a esa–esa virgen, que era una buena mujer, pero sólo falló en recibir aceite en su lámpara, y Él la va a purificar a través de la persecución allí. Él pone esas tribus ahí mismo, para la misma cosa, y las purifica durante el tiempo del período de la tribulación. Porque es una–una purificación. Es juicio. Pero, ¿ven Uds.?, ellos, después... Y, miren aquí, aquí aparecen los ciento cuarenta y cuatro mil después de la purificación de Israel. Y aquí aparece también la virgen durmiente, aparece purificada y tiene puesta ropas blancas. ¿Ven? ¡Cuán perfecto! ¡Cuán hermoso es eso! 228 Al igual que Jacob, en su tiempo de angustia, ¿ven? Ellos... Jacob, en el tiempo de angustia. Él había hecho mal. Pero él pasó por el tiempo de purificación porque él había engañado a su hermano Esaú. ¿Ven? Él engañó para obtener su primogenitura. Pero él pasó a través de una purificación antes que él pudiera tener su nombre cambiado de Jacob a Israel, lo cual es un tipo del orden de Dios tipificado hoy. 229 Ahora, vayamos ahora al versículo 8 del... o el primer versículo, quiero decir, del capítulo 8, de Apocalipsis 8:1. 230 Sé que están cansados. Pero, miren, sólo traten de escuchar sólo unos momentos ahora. Y que el Dios del Cielo nos ayude, es mi oración. 231 Debemos recordar que este Séptimo Sello es el fin del tiempo de todas las cosas. Eso es correcto. Las cosas escritas en el Libro sellado con Siete Sellos, del plan de redención sellado desde antes de la fundación del mundo, todito en sí termina. Es el fin; es el fin del mundo luchando. Es el fin de la naturaleza luchando. Es el fin de todo. Allí, es el fin de las Trompetas. Es el

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estos judíos...”. ¡Hablándole a los judíos! Observen ahora. ¿A qué grupo les está Él hablando, a los gentiles? ¡Judíos! ¡Judíos! ¿Ven? 184 Entonces dijo Él: “Seréis aborrecidos de todas las gentes por Mi Nombre”, y demás cosas así. 185 Miren, “cuando”, dijo Él, “cuando vean a estos judíos comenzar a dar sus brotes allá”, cuando ese Israel comience a regresar, entrando a su país. Cuando llegue allí (la Iglesia está lista para ser raptada), sólo quedan tres años y medio antes del fin del viejo mundo, y ella entra al caos y luego entra el Milenio a la nueva–nueva Tierra. Dijo: “¡Está cerca, a la puerta!”. Miren, mil años sobre la Tierra es sólo un día para con Dios. Y tres años y medio, ¿qué serían? Unos segundos en el tiempo de Dios. Por esa razón dijo Él: “Está a la puerta”.

De cierto os digo, que no será consumida, eliminada

esta generación, este pueblo, hasta que todo esto... 186 ¿Qué–qué no será eliminado? Ellos han tratado de matar al judío de la faz de la Tierra, todo el tiempo. Ellos nunca serán capaces de hacerlo. 187 Pero fíjense. La misma generación de judíos que vería ese regreso, el regreso a la Palestina, esa generación vería estas cosas suceder. Y sólo en los dos últimos años ella ha llegado a ser completamente una nación, con su propia moneda y demás. Allí está ella. 188 Miren, ¿en dónde estamos, amigo? Los Sellos y todo abriéndose; ahora estamos interponiendo esto aquí. Ahí está. ¿Ven en dónde estamos? [La congregación dice: “Amén”–Ed.]. 189 Espero que lo capten. Yo no tengo educación. Yo sé de lo que estoy hablando, pero quizás no lo pueda explicar–explicar, para que tenga sentido para Uds. Pero espero que Dios tome las Palabras que están enredadas, y se las distribuya a Uds., ¿ven?, y les permita saber lo que es. Porque es que estamos a la puerta. Estamos aquí en el tiempo. Fíjense ahora. 190 ¿Ven?, inmediatamente entonces, Él se vuelve a estos judíos, y en–en el tiempo del fin. Él dice lo que va a acontecer. Sabemos

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que aun... Ahora sabemos, estamos bien conscientes que las tribus están esparcidas. Han estado por dos mil quinientos años. Fue profetizado que serían esparcidas a los cuatro vientos. ¿Sabían eso? Sabemos eso. 191 Por supuesto, no tendremos que regresar y tomar, tomar eso de nuevo, porque yo tengo algo aquí muy importante que quiero que vean, antes que se cansen demasiado y yo me agote. 192 Fíjense. Sabemos, aun cada tribu, que la cronología de las tribus, o lo que Uds. quieran llamarlo, o geología, o las posiciones de las tribus, ya no están en orden. Están esparcidas por todas partes. 193 Los judíos se están reuniendo en Jerusalén, no es... Ellos ni siquiera conocen sus tribus. Ya no tienen las banderas de las tribus o nada. Todo lo que ellos saben, entonces, es que son judíos. Se profetizó que serían de esa manera por todo el mundo. Ahora, sus libros han sido destruidos. Ellos no saben. Uno dice: “¿De qué tribu es Ud.?”. “Yo no sé”. “¿De qué tribu?”. “Yo no sé”. 194 Uno de Benjamín, uno de esta, y uno de esa. No saben de dónde son. Sus libros han sido destruidos, por las guerras, y por dos mil quinientos años. Lo único que saben es que son judíos. Eso es todo. Así que ellos saben que están de nuevo en su tierra natal. Ellos, sin embargo... Fíjense, aunque ellos no conocen sus tribus, pero Dios sí. 195 ¡Yo Simplemente amo eso! Uds. saben, Él aun dijo que hay... “Todos vuestros cabellos están contados”. ¡Umm! Fíjense, Él no pierde nada. “Lo resucitaré en el día postrero”. 196 Aunque ellos han perdido las banderas de sus–sus–sus tribus, y quiénes son de cuál, y si son esto o eso; ellos no saben si

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218 Pero acá están en esta edad del Milenio que va entrar, cuando sus nombres y tribus son “borrados” de allí, porque ellos sirvieron ídolos que Dios maldijo. 219 ¿Qué no dijo Él que “aborrecía” a los nicolaítas y a esa Jezabel? Manténganse alejados de eso. ¿Qué no dijo que Él heriría de muerte a las hijas de Jezabel con la herida de “muerte”, lo cual es separación eterna de Su Presencia? No confíen en eso en lo absoluto. Aléjense de eso. Así que, Dios recuerda. Fíjense. 220 Pero ¿se fijaron allí?, debía ser “borrado”. ¿Por qué? Debajo del Cielo no había un Sacrificio inmediato que pudiera darle el Espíritu Santo, para permitirle a él ver estas cosas. Pero él lo hizo de todos modos en su propia mente egoísta. 221 Pero Ezequiel, en su visión, del Milenio, él los ve de nuevo en el orden perfecto. Ezequiel, si lo quisieran leer. Sólo apúntenlo y Uds. lo pueden leer, para ahorrar tiempo. Ezequiel 48: del 1 al 7, también lean del 23 al 29. Ezequiel vio a cada tribu exactamente en orden. Muy bien. 222 Y también en Apocalipsis 14, Juan los vuelve a ver en el orden de las tribus, eso es correcto, cada tribu en su lugar. ¿Qué sucedió? 223 Uds. recuerdan, Él dijo: “Debajo de los cielos, que su nombre sería borrado del asunto tribal”. Mientras estuviera debajo de los cielos, no existiría más. Y estos ciento cuarenta y cuatro mil están aquí todavía en la parte de las tribus. Correcto. Pero, ¿ven Uds.?, ellos habían sido cegados. Ellos sólo tenían los sacrificios de toros y machos cabríos. ¿Ven? Fíjense ahora, Él los borró, “debajo del cielo”. 224 Pero el gentil, en los días del Espíritu Santo, en contra de Eso: su nombre sería quitado completamente del Libro de la Vida, “y nunca pudiera obtener perdón en este mundo o el mundo venidero”. ¿Es correcto eso? Así que ahí es donde estamos parados. 225 Israel, bajo machos cabríos, ovejas, ellos–ellos sí tuvieron un lugar. Mientras ellos estaban aquí en la Tierra, sus tribus faltaban. Nunca podían ser incluidos. Ahora, todos... Cuando Él

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En Primera de Reyes, quiero ir al capítulo 12, del versículo 25 al 30.

Entonces... Jeroboam a Siquem en el monte de Efraín,

y habitó allí; y saliendo de allí a,... reedificó a Penuel. Y dijo entonces Jeroboam a... en–en su corazón

(¿ven?, la imaginación de su corazón): Ahora se volverá el

reino a la casa de David, 213 Él se estaba asustando, ¿ven Uds.?, porque el pueblo se podía ir.

si este pueblo subiere a... sacrificios en la casa de

Jehová en Jerusalén; porque el corazón de este pueblo se

volverá al señor Roboam rey de Judá y me matarán a mí,

y se volverán a Roboam–Roboam rey de Judá.

Y habiendo tenido consejo, hizo el rey dos becerros de

oro, y dijo al pueblo: Bastante habéis subido a Jerusalén;

he aquí tus dioses, oh Israel, los cuales te hicieron... de la

tierra de Egipto.

Y puso uno en Bet-el, y el otro en Dan.

Y esto fue causa de pecado; porque el pueblo iba a

adorar delante de uno hasta Dan. 214 ¿Ven?, Efraín en Bet-el y Dan, y ellos pusieron ídolos. Y éstos iban allá a adorar esto. 215 Y aquí estamos, aun casi llegando a la edad del Milenio, y Dios todavía recuerda ese pecado. Ni siquiera están incluidos allí. ¡Oigan! ¡Gloria! [El Hermano Branham aplaude una vez–Ed.]. Así como Él de seguro recuerda toda buena promesa, Él recuerda toda mala también. Sólo recuerden, cuando... 216 Por esa razón yo creo, amigos, yo siempre he tratado de permanecer con esa Palabra, sin importar qué tan raro parezca. 217 ¿Ven?, miren, ellos no hubieran pensado acerca de eso allí en ese entonces. Ellos no lo pensaron en ese entonces. Ellos pensaron: “Bueno, ellos se salieron con la suya”. Muy bien.

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son de Benjamín, o si son de Rubén, o–o Isacar, o de dónde son. Pero, de todos modos, Dios los llama aquí. 197 Fíjense ahora, en Apocalipsis 7, leemos esto. “Doce mil” de cada tribu, de los escogidos, de todos ellos. Hay doce mil de cada tribu que son escogidos, y están aquí mismo puestos en orden. ¡Oh, qué cosa! ¿Qué son ellos? Están en el orden de las tribus. Sin embargo, ahora no están, pero sí estarán. Están en el orden de las tribus. ¿Quiénes estarán en el orden de las tribus? No el judío regular, no. Pero los que son los escogidos, los ciento cuarenta y cuatro mil estarán en el orden de las tribus. ¡Oh, qué cosa! 198 ¡Cómo me gustaría mostrarles! No entraremos en eso. Pero así es exactamente donde la Iglesia tiene que estar, ajá, debidamente en orden. 199 Ahora, quiero que se fijen muy atentamente y lean conmigo por un momento. Ahora aquí hay algo que quizás Uds. nunca se fijaron en el–en el llamado de las tribus. Les dije hace un rato que leyeran Apocalipsis 7. Lean conmigo, y observen esas tribus. En Apocalipsis 7, Dan y Efraín no aparecen y no están contados entre ellos. ¿Se fijaron Uds. en eso? José y Leví fueron sustituidos en el lugar de ellos. ¿Se fijaron Uds. en eso? Dan y Efraín no están ahí. No, señor. Pero José y Leví fueron sustituidos en lugar de–de–de Dan y Efraín. 200 ¿Por qué? Ellos... El Dios que recuerda para siempre recuerda toda promesa de Su Palabra. ¡Oh, a mí me gustaría predicar sobre eso! ¿Ven? A Dios no se le olvida nada, aunque así pareciera. 201 Como Él le dijo a Moisés. Israel había estado por allá cuatrocientos años. Ellos tenían que salir en ese tiempo. Él le dijo a Abraham que su descendencia estaría morando en tierra ajena por cuatrocientos años, luego que Él los sacaría con mano poderosa. Pero luego Él le dijo a Moisés: “Yo me he acordado de Mi promesa, y he descendido para cumplir lo que Yo he dicho”. 202 Dios no se olvida. Él no se olvida de Sus maldiciones, tampoco se olvida de Sus bendiciones. Pero toda promesa que Él hizo, Él permanece con ella.

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203 Aquí está el porqué ellos no aparecen, ahora, si observan.

Ahora, lean. Quiero que lean conmigo ahora. Vayan a

Deuteronomio, el veinti–... el versículo 29 allí, o el capítulo 29,

mejor dicho. Hay una razón por la cual estas tribus no están

allí. Todo en sí tiene una razón. En Deuteronomio, queremos

tomar el–el capítulo 29 de Deuteronomio. Ahora, que el Señor

nos ayude, que podamos entender ahora. Ahora queremos

comenzar en Deuteronomio, el capítulo 29, en el versículo 16.

Escuchen ahora. Moisés hablando.

Porque vosotros sabéis cómo habitamos en la tierra de

Egipto, y cómo hemos pasado por en medio de las

naciones por las cuales hemos pasado;

y habéis visto las abominaciones y sus ídolos de

madera... piedra, de plata... oro, que tienen consigo.

204 Todos llevaban un poco de una cosa u otra, una pequeña

estatua de Santa Cecilia. Uds. saben, algo así, ¿ven? “No sea

que por lo tanto...”. Escuchen.

No sea que haya entre vosotros un varón... mujer, o

familia o una tribu, cuyo corazón se aparte hoy de Jehová

nuestro Dios, para ir a servir a los dioses de esas

naciones; no sea que haya en medio de vosotros raíz que

produzca hiel y ajenjo.

y suceda que al oír las palabras de esta maldición, él–

él se bendiga en su corazón, y diga: Tengo paz, aunque

ande en la dureza [imaginación, Biblia en inglés–Trad.]

de mi propio corazón,...

205 ¿Ven?, la gente dice: “¡Oh, él mismo se bendice!”. Uds. saben,

se persignan o algo, como lo hacen ahora, ¿ven Uds.?; la misma

cosa, ¿ven? Y, ¿ven?, es una característica pagana, ¿ven?, es

una... de los paganos.

... él se bendiga en su propio corazón,... su propia

dureza de su propia mente, a fin de que con la

embriaguez quite la sed.

206 “Sólo beban, no importa; mientras vayan a la iglesia, Uds.

están bien”.

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Entonces... No querrá Jehová perdonarlo, sino que

entonces humeará la ira de Jehová... su celo sobre el tal

hombre, y se asentará sobre él de toda maldición escrita

en este libro (“no le quiten una Palabra a Ella, ni le

añadan una a Ella”, ¿ven?), y Jehová borrará su–borrará

su nombre de debajo del cielo;

207 Eso es mientras él esté aquí sobre la Tierra, ¿ven?, “debajo

del cielo”.

y lo apartará Jehová de todas las tribus de Israel

para mal, conforme a toda la maldición del pacto que

está escrito en este libro de la ley.

208 Por lo tanto, “Si algún varón sirviere un ídolo, o guardare un

ídolo consigo, o se bendiga él mismo en la propia imaginación de

su mente, y sirviere ídolos”, Dios dijo, “varón, mujer, familia, o

tribu, su nombre será completamente borrado de entre el

pueblo”. Miren, ¿es correcto eso? [La congregación dice: “Amén”–

Ed.]. ¡Qué verdad!

209 La idolatría hizo lo mismo en la iglesia, hace años, y lo hace

hoy. Y me fijo... Observen cómo el anticristo trató de formar un

anti-movimiento. ¿Cuántos saben que el diablo tipifica–tipifica–

tipifica y copia de la misma manera a los–los santos de Dios?

210 ¿Qué es–qué es el pecado? Es la cosa correcta pervertida.

¿Qué es una mentira? Es la verdad mal representada. ¿Qué es el

adulterio? Es el acto correcto, el acto lícito, hecho

incorrectamente. ¿Ven?

211 Miren, al tratar de hacer esto, “borrar un nombre”, se fijaron

en la edad de la iglesia, la misma bestia que sirve a las

imágenes de los difuntos, y demás trataron de borrar el Nombre

del Señor Jesucristo, y dar títulos como Padre, Hijo, y Espíritu

Santo, la misma cosa, con esa maldición detrás de ello de esa

manera.

212 Dan y Efraín hicieron exactamente eso bajo un rey hipócrita

en Israel, un impostor, Jeroboam. Fíjense ahora en Primera de

Reyes el capítulo 12. Yo sé que estamos... Esto, para mí, pone

el–el–el fundamento del cual podemos depender, lo que vemos.