El Rosario Meditado (Con Imágenes)

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  • EL SANTO ROSARIOMEDITADO

    MATILDE EUGENIA PREZ TAMAYO

  • "En la piedad popular secontiene y expresa

    un intenso sentido de latrascendencia,

    una capacidad espontnea deapoyarse en Dios,

    y una verdadera experienciade amor teologal"

    (Aparecida N. 263).

  • PRESENTACIN

    Desde su origen, en el siglo IX, elRosario - cuyo nombre significa"corona de rosas" -, ha sido para laIglesia una oracin importante y muysignificativa. A lo largo de sus 11 siglos de historia,han sido muchos los Santos y losPapas que lo han recomendado coninsistencia, al pueblo cristiano, comofuente inagotable de graciasespirituales y materiales. En octubre del ao 2002, Su SantidadJuan Pablo II, promulg la Carta

  • Apostlica "Rosarium VirginisMariae"- Rosario de la Virgen Mara -,y proclam el tiempo comprendidoentre los meses de octubre de 2002 yoctubre de 2003, como Ao delRosario. De esta manera quiso llamarla atencin de todo el pueblo catlico,pastores y fieles, sobre las inmensasposibilidades que esta oracinmariana nos presenta, no slo parahonrar a Mara como nuestra madre yprotectora, sino tambin, parapenetrar con la mente y el corazn, enel conocimiento y alabanza delMisterio de Cristo, que es para todosnosotros, historia de salvacin. Aeste propsito, dice el Papa, en eldocumento ya citado:

  • "El Rosario, aunque se distinguepor su carcter mariano, es unaoracin centrada en lacristologa. En la sobriedad desus partes, concentra en s laprofundidad de todo el mensajeevanglico, del cual es como uncompendio. En l resuena laoracin de Mara, su perenneMagnificat por la obra de laEncarnacin redentora en suseno virginal. Con l, el pueblocristiano aprende de Mara acontemplar la belleza delrostro de Cristo y aexperimentar la profundidad desu amor. Mediante el Rosario, el

  • creyente obtiene abundantesgracias, como recibindolas delas mismas manos de la Madredel Redentor" (Rosario de laVirgen Mara N. 1).

    Y ms adelante aade:

    "El Rosario, comprendido en supleno significado, conduce alcorazn mismo de la vidacristiana y ofrece unaoportunidad ordinaria yfecunda, espiritual ypedaggica, para lacontemplacin personal, laformacin del Pueblo de Dios yla nueva evangelizacin"

  • (Rosario de la Virgen MaraN.3).

    En Amrica Latina el Rosario ocupa unlugar especial en el corazn de loscreyentes, a tal punto que se podradecir, que es la oracin a la que lagran mayora de las personas acudecuando quiere elevar su corazn aDios, y muy especialmente, en losmomentos de necesidad, cuando buscaapoyo y ayuda en sus dificultadesespirituales y materiales. Esta circunstancia particular denuestros pueblos, hace claramenteposible que el Rosario pueda seraprovechado como un elemento

  • privilegiado en la tarea urgente ysiempre constante de laevangelizacin, teniendo en cuenta por supuesto -, las indicaciones de losObispos, en el Documento deAparecida, sobre las manifestacionesde la piedad popular en general. Nosdicen los Obispos:

    "La piedad popular es unamanera legtima de vivir la fe,un modo de sentirse parte de laIglesia... Es parte de unaoriginalidad histrica culturalde los pobres de estecontinente, y fruto de una"sntesis entre las culturas y lafe cristiana"... En el ambiente

  • de secularizacin que vivennuestros pueblos, sigue siendouna poderosa confesin delDios vivo que acta en lahistoria y un canal detransmisin de la fe"(Aparecida N. 264).

    Y ms adelante:

    "La piedad popular es unimprescindible punto de partidapara conseguir que la fe delpueblo madure... Cuandoafirmamos que hay queevangelizarla o purificarla, noqueremos decir que estprivada de riqueza evanglica.

  • Simplemente deseamos quetodos los miembros del pueblofiel, reconociendo eltestimonio de Mara y tambinde los santos, traten deimitarles cada da ms. Asprocurarn un contacto msdirecto con la Biblia, y unamayor participacin en lossacramentos, llegarn adisfrutar de la celebracindominical de la Eucarista, yvivirn mejor todava el serviciodel amor solidario" (Aparecida262).

    Luego especifican sobre la piedadpopular mariana:

  • "Para este crecimiento en la fetambin es convenienteaprovechar pedaggicamente elpotencial educativo queencierra la piedad popularmariana. Se trata de un caminoeducativo que, cultivando elamor personal a la Virgen,verdadera "educadora de lafe", que nos lleva aasemejarnos cada vez ms aJesucristo, provoque laapropiacin progresiva de susactitudes" (Aparecida N. 300).

    Es, pues, urgente, que todos losagentes de pastoral, nos pongamos en

  • la tarea de buscar con diligencia ytesn, elementos que contribuyan demanera eficiente a hacer del Rosariouna oracin que supere la merarepeticin, y la conduzcan por caminosnuevos, de tal modo, que llegue a serverdaderamente para todos los queacuden a ella, y de manera especial,para el pueblo sencillo, una oracinque nos conduzca con claridad yfirmeza, a penetrar con la mente ycon el corazn, en la verdad denuestra fe cristiana y catlica. Esto es preciasmente, lo que busca con afn, el presente folleto.

    Que la Virgen Mara, Estrella

  • fulgurante de la evangelizacin, nosayude a realizar lo que deseamosalcanzar, para bien de toda la Iglesia,pueblo amado de Dios, y para bien delmundo entero.

  • MISTERIOS GOZOSOS

    (Lunes y Sbado)

    El Rosario es un recorrido orante porlos acontecimientos ms importantesy significativos de la vida de Jess,que es para nosotros, sin duda alguna,historia de salvacin.

    Los Misterios Gozos, los primeros queconsideramos, nos invitan acontemplar los hechos que tuvieronlugar al comienzo, desde laencarnacin de Jess en el senovirginal de Mara, hasta que cumpli12 aos y particip con sus padresMara y Jos, en la Fiesta de Pascua

  • en Jerusaln, tal y como era mandadopor la ley de Moiss.

    Contemplamos, meditamos yveneramos estos sucesos, que paramuchas personas pasarondesapercibidos, pero que paranosotros, 2.000 aos despus, tienenun valor inigualable, y tratamos desacar de ellos, enseanzas muyconcretas para nuestra vida.

  • PRIMER MISTERIO GOZOSO:

    EL ANUNCIO DEL NGEL A MARA

    Y LA ENCARNACIN DEL HIJO DE DIOS

    EN SU SENO VIRGINAL

  • Del Evangelio segn san Lucas: (1, 26-38) A los seis meses Dios mand al ngelGabriel a un pueblo de Galilea llamadoNazaret, donde viva una joven virgenllamada Mara... El ngel entr en el lugar donde ellaestaba y le dijo: - Salve, llena degracia! El Seor est contigo... Notengas miedo, pues t gozas del favorde Dios. Ahora vas a quedar encinta,tendrs un hijo, y le pondrs pornombre Jess. Ser un gran hombreal que llamarn Hijo del Dios Altsimo,y Dios, el Seor, lo har rey, como asu antepasado David, para que reinepor siempre sobre el pueblo de

  • Jacob. Su reinado no tendr fin... El Espritu Santo vendr sobre ti, y elpoder del Dios altsimo se posarsobre ti. Por eso , el nio que va anacer ser llamado Santo e Hijo deDios... Mara respondi al ngel: - Yo soyesclava del Seor. Que Dios hagaconmigo como me has dicho.

    REFLEXIN:

    La encarnacin de Jess en el senovirginal de Mara es el acontecimientocentral de la Historia de nuestraSalvacin, la plenitud de los tiemposde la que habla san Pablo en su carta alos cristianos de Galacia: "Cuando se

  • cumpli el tiempo, Dios envi a suHijo, que naci de una mujer,sometido a la ley de Moiss, pararescatarnos a los que estbamos bajoesta ley y concedernos gozar de losderechos de hijos de Dios" (Glatas4,4-5). Jess, el hijo de Mara, es Dios mismoen medio de nosotros. Dios que tomanuestra carne humana, con todo lo queello implica, para vivir a nuestro lado,para compartir nuestras penas ynuestras alegras, para llenar nuestravida de amor, de alegra, deesperanza y de paz, para ensearnos aser hermanos los unos de los otros,porque todos somos hijos del mismo

  • Padre, que nos ama intensamente. Mientras rezamos las diez Avemarasde este Primer Misterio del Rosario,tratemos de pensar en lossentimientos que este acontecimientonico en la historia, suscit en elcorazn de Mara. En su fe, en suentrega generosa y confiada a laVoluntad salvadora de Dios; en suamor de creyente, de mujer y demadre; y en lo que su "S" generosossignific y significa para la humanidadde todos los tiempos y lugares.

    INTENCIN:

    Elevemos una oracin a Dios por todas

  • las madres del mundo, que estnesperando un hijo, particularmentepor aquellas que enfrentandificultades de salud, y por quienesestn siendo tentadas de acudir alaborto, como un medio para solucionarsus problemas de pobreza, su miedo aencarar con responsabilidad lasconsecuencias de sus actos, o sudebilidad para enfrentar losproblemas que un hijo no planeado ono deseado, por diferentescircunstancias, puede traer consigo.

    PadrenuestroDiez AvemarasGloria

  • SEGUNDO MISTERIO GOZOSO:

    LA VISITA DE MARA A SU PRIMA ISABEL, Y LA SANTIFICACIN DE JUAN BAUTISTA

    EN EL SENO DE SU MADRE.

  • Del Evangelio segn san Lucas: (1, 39-56)

    Por aquellos das, Mara se fue deprisa a un pueblo, de la reginmontaosa de Judea, y entr en lacasa de Zacaras y salud a Isabel.Cuando Isabel oy el saludo de Mara,la criatura se le estremeci en elvientre, y ella qued llena del EsprituSanto. Entonces con voz muy fuerte,dijo:- Dios te ha bendecido ms que atodas las mujeres, y ha bendecido atu Hijo!... Dichosa t por habercredo que se cumplirn las cosas queel Seor te ha dicho!

  • Mara respondi:- Mi alma alaba la grandeza delSeor; mi espritu se alegra en Diosmi Salvador.Porque Dios ha puesto sus ojos en m,su humilde esclava, y desde ahorasiempre me llamarn dichosa; porqueel Todopoderoso ha hecho en mgrandes cosas. Santo es su nombre!...Mara se qued con Isabel unos tresmeses, y luego regres a la casa. REFLEXIN:

    Mara recibi con inmensa alegra lanoticia que el ngel Gabriel le dio,sobre la prxima maternidad de suparienta Isabel, y quiso compartir con

  • ella el gozo de su propia fecundidad.Por eso emprendi el largo viaje hastaAin Karim, en la regin de Judea. El Espritu Santo, luz de Dios, iluminel corazn y la mente de Isabel, quetan pronto vio a Mara comprendi elmilagro que Dios haba realizado enella, y la grandeza del Hijo que suprima esperaba, y la proclam coninmensa alegra y profunda fe,bienaventurada, bendecida de Dios, lamujer por excelencia. En el encuentro con su prima Isabel,la fe de Mara creci y se desborden el gozo de la Oracin delMagnificat, oracin de Accin de

  • gracias, que pone ante nuestros ojosel amor infinito de Dios por todos losseres humanos, y su misericordia paracon aquellos que sufren pobreza einjusticia.

    INTENCIN: Recemos las diez Avemaras de estasegunda decena del Rosario, dandogracias a Dios por todo lo que nos hadado: los bienes materiales y losbienes espirituales, particularmente,por el don inmenso de la fe, que nospermite descubrir su presencia en losacontecimientos de nuestra vida decada da.

  • Y oremos tambin, de un modoespecial, por todas las personas delmundo, hombres y mujeres, nios yancianos, jvenes y adultos, quepadecen a causa de nuestrasactitudes y acciones egostas einjustas, de nuestra incapacidad decompartir con amor lo que somos y loque tenemos.

    PadrenuestroDiez AvemarasGloria

  • TERCER MISTERIO GOZOSO:

    JESS NACE EN EL PESEBRE DE BELN

  • Del Evangelio segn san Lucas: (2,1-7) Por aquellos das, el emperadorAugusto orden que se hiciera uncenso de todo el mundo... Todostenan que ir a inscribirse en supropio pueblo.Por esto, Jos sali del pueblo deNazaret, de la regin de Galilea, y sefue a Beln, en Judea, donde habanacido el rey David, porque Jos eradescendiente de David... Y sucedi que mientras estaban enBeln, le lleg a Mara el tiempo dedar a luz. Y all naci su hijoprimognito, y lo envolvi en paales,y lo acost en el establo...

  • REFLEXIN:

    Siendo el dueo de todo, el seor detodo, el Hijo nico de Dios, Jessnaci en la pobreza y en la soledad deun establo, un lugar propio para losanimales. Quiso darnos con ello unaleccin de humildad y dedesprendimiento absolutos. Los sereshumanos no valemos por lo quetenemos, sino por lo que somos ennuestro interior, por lo queatesoramos en nuestro corazn, por larectitud de nuestros pensamientos,por la bondad de nuestras acciones,por la sencillez de nuestras palabras ynuestros gestos.

  • Jess en el pesebre de Beln, es laimagen de un Dios que quiere reinarentre nosotros no por su poder sinopor su amor; no por la magnitud desus acciones, sino por la fuerza de susgestos sencillos pero llenos designificado; no por querer colocarseen el primer lugar, al lado de los ricosy los poderosos, sino en el ltimo, allado de los pobres, de los que notienen nada, de los queaparentemente no son nada. Recemos las diez Avemaras de estetercer misterio del Rosario,meditando en esta maravillosarealidad de Dios que se viene a vivircon nosotros, en nuestro mundo y en

  • nuestra historia, en la personaadorable de Jess: un nio recinnacido, que en su pequea y dbilhumanidad, nos hace presente todo elamor y toda la ternura que Diossiente por sus hijos; por todos y porcada uno, particularmente por los queson ms dbiles y por lo tanto, msnecesitados de ayuda y proteccin.

    INTENCIN:

    Encomendemos de manera especial,las necesidades de todos los nios delmundo, particularmente de aquellosque viven en la pobreza y lamarginalidad. Los hurfanos, enespecial, los hurfanos a causa de la

  • violencia; los que estn enfermos, losque padecen incapacidades mentales yfsicas, los que no pueden crecer ydesarrollarse con normalidad. QueJess recin nacido los acompae ylos proteja siempre.

    PadrenuestroDiez AvemarasGloria

  • CUARTO MISTERIO GOZOSO:

    JESS ES PRESENTADO A DIOS, EN EL TEMPLO DE JERUSALN,

    Y MARA HACE LA OFRENDAPARA SU PURIFICACIN

  • Del Evangelio segn san Lucas: (2,21-24)

    A los ocho das circuncidaron al nio yle pusieron por nombre Jess, elmismo nombre que el ngel le habadicho a Mara, antes de que estuvieraencinta.Cuando se cumplieron los das en queMara deba purificarse segn la leyde Moiss, llevaron el nio aJerusaln para presentrselo alSeor. Lo hicieron as porque en la leydel Seor est escrito: "Todo primerhijo varn ser consagrado al Seor".Fueron pues a ofrecer en sacrificio loque manda la ley del Seor: dostrtolas o dos pichones.

  • REFLEXIN:

    Dios Padre no quiso excluir a su Hijode nada, ni hacerlo distinto de ningnser humano. Jess es verdadero Dioscomo su Padre, y verdadero hombrecomo nosotros. Nos lo dice la Carta alos Hebreos: "... probado en todo igualque nosotros, excepto en el pecado(Hebreos 4,15). Por eso, Jos y Maracumplieron con l todas las leyes ycostumbres relativas al nacimiento deun nio en Israel. En la circuncisin Jess fue admitidoen el pueblo de Dios, y derram susprimeras gotas de sangre por lasalvacin de la humanidad. El mismo

  • nombre de Jess, que entonces le fueimpuesto, significa "Dios salva". Jess es Dios que nos salva, Dios quenos libera de las ataduras del pecadoy de la muerte eterna. Jess es Diosque sana nuestro corazn y nuestravida, Dios que con su amor compasivoy misericordioso se agacha hastanosotros y nos levanta. Dios querenueva nuestro ser entero con suamor y su gracia. En este cuarto misterio del Rosario,meditemos en lo que significa para lahumanidad entera que Jess, el hijode Dios se haya encarnado, y se hayahecho presente en medio de nosotros.

  • Qu sera de nosotros sin Jess?...Qu sera del mundo sin Jess?...Hasta dnde podramos llegar sin elamor de Dios manifestado en l?...Hasta dnde podramos llegar, con elpecado haciendo de las suyas ennuestra vida y en nuestra historia?... INTENCIN:

    Ofrezcamos esta decena del Rosario,por todas las familias del mundo. Paraque sean un lugar propicio para elcrecimiento y desarrollo adecuado delos nios y de los jvenes. Que lospadres y las madres comprendan quesu responsabilidad de dar amor a sushijos y educarlos en el respeto, es una

  • gran tarea en favor de ellos mismos yde toda la sociedad, y que en estonadie los puede sustituir nireemplazar. PadrenuestroDiez AvemarasGloria

  • QUINTO MISTERIO GOZOSO:

    JESS VA CON SUS PADRES A JERUSALN,

    PARA CELEBRAR SU PRIMERA FIESTA DE PASCUA,

    Y SE QUEDA EN EL TEMPLO HABLANDO

    CON LOS DOCTORES DE LA LEY

  • Del Evangelio segn san Lucas: (2,41-51) Los padre de Jess iban todos losaos a Jerusaln, para celebrar lafiesta de la Pascua. Y as, cuandoJess cumpli doce aos, fueron...como era costumbre en esa fiesta.Pero pasados aquellos das, cuandovolvan a casa, el nio Jess, se queden Jerusaln, sin que sus padres sedieran cuenta... Al cabo de tres das lo encontraronen el templo, sentado entre losmaestros de la Ley, escuchndolos yhacindoles preguntas... Su madre le dijo: - Hijo mo, por qunos has hecho esto? Tu padre y yo te

  • hemos estado buscando llenos deangustia.Jess les contest: - Por qu mebuscaban? No saban que tengo queestar en la casa de mi Padre?Pero ellos no entendieron lo que lesdeca.Entonces volvi con ellos a Nazaret,donde vivi obedecindoles en todo.Su madre guardaba todo esto en sucorazn. REFLEXIN:

    Este pasaje del Evangelio nos muestrala conciencia que Jess tena de smismo, y de su vinculacin profundacon Dios, a quien experimentaba en lo

  • ntimo de su corazn como suverdadero Padre, aquel a quien tenaque conocer, amar, buscar, entender yservir, por encima de todo y de todos. Jos y Mara no comprendieron lo queJess les dijo, pero con fe yhumildad, escucharon sus palabras,sin reproches, absolutamenteconvencidos de que para ellos comopara Jess, lo primero deba seraceptar y acoger en todo momento ycircunstancia, la Voluntad de Dios,que es siempre y para todos nosotros,una voluntad salvadora, una voluntadpara el bien. Jess se reconoce como el Hijo de

  • Dios, pero esta verdad no implica paral negar la paternidad legal de Jos,ni la maternidad de Mara, tansignificativas para su corazn dehombre. Al contrario. Tambin sesabe y se siente su hijo muy querido,y con humildad regresa con ellos alhogar de Nazaret, donde siguisiendo un hijo de familia, hasta quesupo con certeza que haba llegado suhora de llevar a cabo el pasodefinitivo en la misin que el Padre lehaba encomendado.

    INTENCIN: En esta decena del Rosario oremos demanera especial por todas las familias

  • del mundo, y en particular poraquellas que viven momentos dedificultad. Pidamos a Dios para todasellas, el regalo del amor verdadero yprofundo, que llena los corazones deesperanza y de paz, y permite superartodos los obstculos y desavenencias,todos los miedos y todas lasviolencias, todas las incapacidades ylas cobardas. PadrenuestroDiez AvemarasGloria Padrenuestro por las intenciones delSanto Padre y de la Iglesia.

  • MISTERIOS LUMINOSOS

    (Jueves)

    Los Misterios Luminosos, introducidosen el Rosario por el Papa Juan PabloII, nos invitan a contemplar cincomomentos de la vida pblica de Jess,de especial significacin tanto para lcomo para nosotros.

    Jess deja el hogar de Nazaret y sedirige al ro Jordn, donde ha odoque est predicando Juan, el hijo deZacaras y de Isabel.

    La predicacin de Juan en el desiertode Judea, fue para Jess la seal queDios le daba, para iniciar su propio

  • ministerio como predicador,anunciando con sus palabras y susacciones que el Reino de Dios,anunciado por los profetas, ya haballegado al mundo, e invitando a lagente a asumirlo en su vida.

  • PRIMER MISTERIO LUMINOSO:

    JESS RECIBE EL BAUTISMO DE JUAN,

    EN EL RO JORDN

  • Del Evangelio segn san Marcos: (1,9-11) Y sucedi que por aquellos das vinoJess desde Nazaret de Galilea, yfue bautizado por Juan en el Jordn.En cuanto sali del agua vio que loscielos se rasgaban y que el Espritu,en forma de paloma, bajaba a l. Y seoy una voz que vena de los cielos:"T eres mi Hijo amado, en ti mecomplazco". REFLEXIN:

    La predicacin de Juan Bautista en eldesierto de Judea, marc para Jessel comienzo de su vida pblica. Cuando

  • oy hablar de l, sali a su encuentro,se hizo bautizar por l, y luego se fueal desierto, donde permaneci 40 dasy 40 noches orando y haciendopenitencia, en una especie de retiroespiritual. De esta manera sepreparaba interiormente paraempezar a anunciar de viva voz, elmensaje de amor que Dios Padre lehaba confiado, y que l mismo ya vivaen su vida cotidiana en Nazaret. Dios Padre y el Espritu Santoconfirmaron a Jess en su decisin yen su misin, dejando escuchar su vozy manifestando su presencia en formasensible, como para que a nadie lequede ninguna duda.

  • Jess es el Hijo encarnado de Dios,su Mensajero, su Enviado, y est llenode su Espritu, que lo anima e impulsa;nosotros debemos escucharlo conatencin y hacer realidad en nuestravida sus palabras y su ejemplo, siqueremos complacer a Dios como lmismo hace.

    INTENCIN: Mientras rezamos las diez Avemarasde esta primera decena del Rosario,demos gracias a Dios por el Bautismoque un da recibimos, y que nos hacehijos suyos y miembros de su familiaque es la Iglesia, y pidmosle como

  • una gracia muy especial, vivir conconsciencia esta realidad de nuestravida, que es sin duda un don gratuitode su amor, un privilegio inmerecido. Oremos tambin por los millones depersonas en el mundo que no tienen ladicha de conocer a Jess y sumensaje de amor, de perdn, delibertad, de justicia y de paz, quenosotros conocemos, y que da sentidoy valor a nuestra vida. PadrenuestroDiez AvemarasGloria

  • SEGUNDO MISTERIO LUMINOSO:

    JESS REALIZA SU PRIMER MILAGRO,

    EN LAS BODAS DE CAN DE GALILEA

  • Del Evangelio segn san Juan: (2,1-11) Se celebraba una boda en Can deGalilea, y la madre de Jess estabaall. Tambin fue invitado Jess consus discpulos. Y sucedi que setermin el vino preparado para laboda... Entonces la madre de Jess ledijo: "No tienen vino". Jess lerespondi: "Qu quieres de m,mujer? An no ha llegado mi hora.Pero su madre dijo a los sirvientes:"Hagan lo que l les diga".Haba all seis recipientes de piedra...de unos cien litros de capacidad cadauno. Jess dijo: "Llenen de agua esosrecipientes". Y los llenaron hasta el

  • borde. "Saquen ahora, les dijo, yllvenlo al mayordomo". Y ellos se lollevaron.Despus de probar el agua convertidaen vino, el mayordomo llam al novio,pues no saba de dnde provena... Yle dijo: "Todo el mundo sirve alprincipio el vino mejor, y cuando yatodos han bebido bastante, les dan elde menos calidad; pero t has dejadoel mejor vino para el final".

    REFLEXIN: Es una gran alegra que la primeramanifestacin pblica de Jess, suprimer milagro, haya tenido lugar enuna fiesta de bodas.

  • Cuando se tiene verdadera fe, cuandose cree de verdad, es fcil entenderque Dios que nos ama, quiere siemprelo mejor para nosotros, y que suvoluntad salvadora no se opone nuncaa nuestra felicidad, como muchoscreen. Al contrario. La busca, deseadrnosla, hace todo lo que est a sualcance para que lleguemos a tenerlaen plenitud. Pero la verdaderafelicidad, no la aparente felicidad, lafelicidad momentnea que nos dan losplaceres del mundo, que tambinconducen al hasto. Ser cristiano de verdad, discpuloautntico de Jess, es para nosotros

  • una verdadera fiesta, una fiesta delamor y de la vida, una fiesta que llenanuestro corazn de alegra y deesperanza. Una fiesta que nospermite vislumbrar la eternidadbienaventurada y nos prepara para elencuentro cara a cara con el Dios quees Amor y Vida en plenitud. Unbanquete de bodas en el que el mejorvino es Jess mismo que se nos dacomo bebida de salvacin. INTENCIN:

    Ofrezcamos esta decena del Rosariopor las personas que viven tristes pordiversas circunstancias, y pidamospara ellas y tambin para nosotros,

  • los dones de la alegra y de la pazespiritual, an en medio de lasdificultades y problemas que a todosnos trae la vida.

    PadrenuestroDiez AvemarasGloria

  • TERCER MISTERIO LUMINOSO:

    JESS, EN SU PREDICACIN,ANUNCIA EL REINO DE DIOS

  • Del Evangelio segn San Marcos (1,14-15)

    Jess fue a Galilea y comenz aproclamar la Buena Nueva de Dios.Deca: "El tiempo se ha cumplido, elReino de Dios est cerca. Renuncien asu mal camino y crean en la BuenaNueva". REFLEXIN:

    Toda la vida de Jess, toda supredicacin, todos sus milagros,tuvieron un slo objetivo, anunciar yhacer presente en el mundo lo que lllam el Reino de Dios, el reinado deDios, que no es otra cosa que permitir

  • que Dios sea el soberano, el dueo yseor de nuestro corazn y denuestra vida, y del mundo entero.Teniendo la plena conviccin de quecuando buscamos y permitimos queesto ocurra, alcanzamos la plenitud denuestro ser y la felicidad que todosanhelamos y buscamos. Dios no es de ninguna manera unestorbo para nuestra dicha, comomuchos piensan y nos hacen creer.Dios es nuestra mayor alegra. Dios esnuestra nica y verdadera esperanza.Dios es nuestra paz. Dios es el amoren plenitud. Cuando abrimos nuestrocorazn a l y a lo que l desea paranosotros, somos verdaderamente

  • felices y nuestra vida logra su plenarealizacin. No importa que sucedancosas que aparentemente no soncompatibles con la felicidad, o queimplican un obstculo paraconseguirla, porque como deca santaTeresa: "Quien a Dios tiene, nada lefalta. Slo Dios basta". INTENCIN:

    Rezando este tercer Misterio delRosario, pidamos a Dios, porintercesin de Mara, que nos hagadciles a las enseanzas de Jess;capaces de abrir nuestro corazn a sumensaje y de vivir toda nuestra vidaen l y por l, seguros de que es lo

  • mejor que podemos hacer y desear.

    Pensemos tambin en todos loshombres y mujeres de la tierra aquienes no ha llegado la buena noticiadel Evangelio de Jess, y oremos paraque con la ayuda de los misionerospuedan recibirla y acogerla conprontitud.

    PadrenuestroDiez AvemarasGloria

  • CUARTO MISTERIO LUMINOSO:

    JESS SE TRANSFIGURA EN EL MONTE TABOR

  • Del Evangelio segn san Mateo (17,1-9) Jess tom consigo a Pedro, aSantiago, y a su hermano Juan, y losllev aparte a un monte alto. A lavista de ellos, su aspecto cambicompletamente: su cara brillaba comoel sol y su ropa se volvi blanca comola luz. En seguida vieron a Moiss yElas hablando con Jess.Pedro tom la palabra y dijo: "Seor,qu bueno es que estemos aqu! Siquieres levantar aqu tres tiendas:una para ti, otra para Moiss y otrapara Elas".Estaba Pedro todava hablando,cuando una nube luminosa los cubri

  • con su sombra y una voz que sala dela nube, dijo: "Este es mi Hijo, elAmado; ste es mi Elegido,escchenlo!". REFLEXIN:

    Este episodio de la vida de Jess tuvolugar, segn lo sealan los evangelios,unos das antes de su juicio y condenaen la ciudad santa de Jerusaln, y fuepara los tres discpulos que estabancon l, una verdadera visin de sugloria, destinada a darles paz en losmomentos de dolor que estabanprximos a ocurrir. De manera semejante a lo que sucedi

  • cuando fue bautizado por Juan en elro Jordn, Dios Padre se hizopresente y dej escuchar su vozreconociendo a Jess como su Hijomuy querido, pero esta vez sealadems a quienes estaban presentes,la necesidad de que escucharan su vozy su mensaje. Escuchar a Jess es, sin duda,escuchar a Dios; or su Palabra deverdad y de vida; permitir que suamor nos transforme, nostransfigure, haga de cada uno denosotros un verdadero hijo o hija deDios.

    INTENCIN:

  • Mientras rezamos las diez Avemarasde este Misterio del Rosario, pidamosa Jess, por intercesin de Mara, quela Iglesia, a la que pertenecemos pornuestro Bautismo, sea en el mundo,signo claro de su presencia, y quecada uno de los cristianos catlicos,sepamos dar testimonio de su bondady de su amor, en el lugar en el que nosha tocado vivir, con nuestras accionesy palabras. PadrenuestroDiez AvemarasGloria

  • QUINTO MISTERIO LUMINOSO:

    JESS INSTITUYE LA EUCARISTA Y EL SACERDOCIO

    EN SU LTIMA CENA CON LOS DISCPULOS

  • Del Evangelio segn san Lucas: (22,14-20)

    Llegada la hora, Jess se puso a lamesa con los apstoles y les dijo: "Yotena gran deseo de comer estaPascua con ustedes, antes depadecer. Porque les digo que ya no lavolver a comer, hasta que sea lanueva y perfecta Pascua en el Reinode Dios".Jess, aceptando una copa, diogracias y les dijo: "Tomen esto yreprtalo entre ustedes, porque lesaseguro que ya no volver a beber delfruto de la vid hasta que llegue elReino de Dios". Despus tom pan y,

  • dando gracias, lo parti y se lo diodiciendo: "Esto es mi cuerpo que esentregado por ustedes. Hagan estoen memoria ma". Hizo lo mismo con lacopa despus de cenar, diciendo:"Esta copa es la alianza nueva selladacon mi sangre, que es derramada porustedes". REFLEXIN:

    En la ltima Cena con sus discpulos,Jess instituy para nosotros elmaravilloso Sacramento de laEucarista, que lo hace eternamentepresente en el mundo, bajo lasespecies del pan y del vino,consagrado por la efusin del Espritu

  • Santo y las palabras del sacerdote. Recibir la Eucarista es alimentarnoscon el Cuerpo y la Sangre de Jess,es decir, con su vida, para empezar aser como l. Para amar a los demscomo l am a todas las personas queencontr en su camino. Para servir alos dems como l sirvi a quienessolicitaban su ayuda. Para perdonarcomo l perdon a los pecadores conquienes se encontr, incluyendo aquienes lo condenaron a muerte yquienes ejecutaron la pena. Paraanunciar la verdad de Dios, susantidad y su justicia, como l lo hizocon cada una de sus palabras y de susacciones.

  • Tenemos que tomar conciencia clarade esto. Acercarnos a recibir a Jessen la Eucarista tiene quetransformarnos poco a poco enpersonas humildes, sencillas,bondadosas y amorosas como l. Siesto no se realiza, es que todava nohemos comprendido lo que estamoshaciendo y no hemos abierto laspuertas de nuestro corazn a laverdad y al amor transformante deDios.

    INTENCIN: Ofrezcamos esta decena del Rosario,pidiendo al Seor por intercesin de

  • Mara, que nos d la gracia decomprender, cada vez con mayorprofundidad el Misterio de supresencia amorosa en la Eucarista, ylo que significa para nosotrosacercarnos a recibirla.

    Hagamos tambin una oracin especialpor los sacerdotes, que con susenseanzas nos acercan a Dios, y quehacen posible que con la celebracinde la Eucarista, Jess renueve cadada su presencia sacramental en elmundo.

    PadrenuestroDiez AvemarasGloria

  • Padrenuestro por las intenciones delSanto Padre y de la Iglesia.

  • MISTERIOS DOLOROSOS

    (Martes y Viernes)

    Los Misterios Dolorosos tienen comoobjetivo recordarnos los momentosms significativos de la Pasin y laMuerte de Jess, por nuestrasalvacin.

    Nos acercamos a contemplar estosMisterios, con profunda humildad ygran devocin, por lo que ellosrepresentan para cada uno denosotros y para el mundo entero,incluyendo, sin duda, a quienes nisiquiera saben de ello.

  • Intentemos penetrar en lossentimientos del corazn amoroso deJess, en esta circunstancia especialy definitiva de su vida en el mundo, ypidmosle que nos ayude a creer en ly en su sacrificio salvador, cada dacon mayor decisin y valenta.

  • PRIMER MISTERIO DOLOROSO:

    JESS ORA AL PADRE EN EL HUERTO DE GETSEMAN

  • Del Evangelio segn San Marcos: (14,26.32-36) Despus de cantar los himnos sedirigieron al monte de los Olivos.Llegaron a un lugar llamadoGetseman, y Jess dijo a susdiscpulos: "Sintense aqu mientrasvoy a orar". Y llev consigo a Pedro, aSantiago y a Juan. Comenz a llenarsede temor y angustia, y les dijo:"Siento en mi alma una tristeza demuerte. Qudense aqu ypermanezcan despiertos". Jess se adelant un poco, y cay entierra suplicando que si era posible notuviera que pasar por aquella hora.Deca: "Abb - Padre - para ti todo es

  • posible, aparta de mi esta copa. Perono se haga lo que yo quiero, sino loque quieres t".

    REFLEXIN: La oracin fue para Jess, a lo largode toda su vida, un elemento de vitalimportancia; los evangelios nos dantestimonio de ello. En la oracin,Jess encontr siempre la fuerza quenecesitaba para enfrentar losmomentos difciles, y para cumplir acabalidad la misin que el Padre lehaba encomendado, como su MesasSalvador. Por eso, en esta situacinparticularmente peligrosa ycomplicada para l, acudi a ella sin

  • vacilacin y con absoluta confianza.De ella, de la comunicacin con suPadre, sac la humildad, la paciencia,la entereza, el valor y el infinito amorque necesitaba para enfrentar a susenemigos, conforme a la Voluntadsalvadora de Dios que le peda amarhasta el extremo. La oracin hizo que su amor fuera msgrande que su temor; su fe en Diosms fuerte que su deseo legtimo deevitar el sufrimiento; su generosidadms poderosa que el odio de susenemigos; su humildad ms profunda yverdadera que la falsedad y lacobarda de quienes querandeshacerse de l, porque sus

  • enseanzas no les satisfacan y suobrar les incomodaba. INTENCIN:

    En esta primera decena del Rosario,pidamos a Jess que nos d uncorazn orante como el suyo, y quepor la fuerza y sinceridad de nuestraoracin, haga crecer nuestra fe enDios y nuestra capacidad de amar alos dems, con un amor compasivo ymisericordioso, sincero y servicial, entodas las circunstancias de nuestravida, y a pesar de ellas.

    PadrenuestroDiez Avemaras Gloria

  • SEGUNDO MISTERIO DOLOROSO:

    JESS ES FLAGELADO POR LOS SOLDADOS DE PILATO

  • Del Evangelio segn san Mateo:(27,24-26) Al darse cuenta Pilato de que noconsegua nada, sino que ms bienaumentaba el alboroto, pidi agua y selav las manos delante del pueblo. Yles dijo: "Ustedes respondern por susangre, yo no tengo la culpa". Y todoel pueblo contest: "Que su sangrecaiga sobre nosotros y sobrenuestros hijos!". Entonces Pilato les solt a Barrabs.Mand azotar a Jess y lo entreg alos que deban crucificarlo. REFLEXIN:

  • Impresiona sobre manera laincapacidad del gobernador romanopara defender a Jess y hacerprevalecer la justicia sobre el odio desus enemigos: sabiendo que erainocente lo entreg para que fueracrucificado no sin antes mandarlo aazotar. En contraposicin podemosapreciar la bondad y la valenta deJess que permaneci silencioso yacept con paz el castigo inmerecido,que frustraba de alguna manera susplanes, y pona aparentemente fin a sumisin en el mundo. Mientras rezamos las diez Avemarasde este segundo Misterio, pensemosen los horribles dolores fsicos que

  • Jess padeci durante la flagelacin,y tambin en sus dolores espirituales,vindose traicionado por Judas,negado por Pedro, abandonado por losdems discpulos, y acusadoinjustamente por las autoridadesreligiosas de su pueblo, que debieronhaberlo reconocido como el Mesasprometido por Dios y anunciado porlos profetas.

    INTENCIN: Ofrezcamos esta decena del Rosario,por todas las personas que a lo largoy ancho del mundo, padecen injusticiay violencia. Por quienes estnencarcelados por delitos que no han

  • cometidos. Por quienes en las crcelesde nuestro pas y del mundo, sonofendidos en su dignidad personal porel hacinamiento, los malos tratos, loscastigos injustos y exagerados, y porla carencia de defensores, que son underecho para todos, incluyendo aquienes son culpables PadrenuestroDiez Avemaras Gloria

  • TERCER MISTERIO DOLOROSO:

    JESS ES CORONADO DE ESPINAS

  • Del Evangelio segn san Mateo: (27,27-30) Los soldados romanos llevaron aJess al patio del palacio y reunierona toda la tropa en torno a l. Lequitaron sus vestidos y le pusieronuna capa de soldado de color rojo.Despus le colocaron en la cabeza unacorona que haban trenzado, conespinos; y en la mano derecha lepusieron una caa. Doblaban la rodillaante Jess, y se burlaban de ldiciendo: "Viva el rey de los judos!".Le escupan en la cara y con la caa legolpeaban en la cabeza. REFLEXIN:

  • La crueldad de los soldados se ensaen contra de Jess. A la condena amuerte aadieron las burlas yafrentas que su rudeza y suignorancia les inspir. Pero lpermaneci en silencio, dejando quesu crueldad se expresara con toda sucrudeza. Ni una queja sali de suslabios. Haba aceptado plenamente losacontecimientos que se estabansucediendo, con infinito amor yabsoluta paz; saba muy bien por qulo haca y a quin serva con ello, y esoera lo realmente importante. Este Misterio del Rosario debehacernos pensar en lo distinta que es

  • nuestra conducta cuando somosofendidos por alguien. Por ofensasinfinitamente menores a esta querecibi Jess de parte de susverdugos, reaccionamos en contra dequien sentimos que nos ha hecho dao,con notable brusquedad y en no pocoscasos con violencia de palabra y deobra, de tal manera que lo quecomenz siendo un simple malentendido, o una ofensa menor, sepuede llegar a convertir en unproblema de envergadura. INTENCIN:

    Pidamos a Jess doliente, en estadecena del Rosario, que nos haga

  • "mansos y humildes de corazn", comol lo fue siempre; hombres y mujeresde paz y no de guerra; personascapaces de perdonar y de pedirperdn, en todas las circunstancias denuestra vida.

    PadrenuestroDiez AvemarasGloria

  • CUARTO MISTERIO DOLOROSO:

    JESS ES CARGADO

    CON LA CRUZ Y EMPRENDE EL CAMINO

    DEL CALVARIO, DONDE SER CRUCIFICADO

  • Del Evangelio segn san Juan: (19, 17-19) Jess, cargando su propia cruz, salide la ciudad hacia el lugar llamadoCalvario, que en hebreo se diceGlgota. All lo crucificaron y con l aotros dos, uno a cada lado y en elmedio Jess. Pilato mand escribir un letrero yponerlo sobre la cruz. Estaba escrito:"Jess el Nazareno, Rey de losjudos". REFLEXIN:

    El proceso de Jess sigui el cursoprevisto, y lo contemplamos ahora

  • crucificado y levantado en alto, enmedio de dos ladrones. Sus enemigossiguen mofndose de l y retndolopara que deje la cruz. Es la ltimatentacin que padece Jess. Eldemonio que una vez le propuso que setirara de lo ms alto del templo, paraque Dios enviara a sus ngeles asocorrerlo, le pide ahora por boca dequienes estn en el Calvario, que hagaun milagro en favor de s mismo y sesalve de la muerte. Pero Jess no losescucha, y deja que las cosas sigan sucurso, y todo sea como tiene que ser.Est decidido a llegar hasta el final. En cada circunstancia de su vida,Jess nos ensea algo. En esta

  • oportunidad nos muestra que el amorcuando es verdadero no puede serderrotado por nada ni por nadie,porque es una fuerza que proviene deDios y es tan grande como l. Jessama por encima de todo a Dios Padrey a nosotros, y el amor le da la fuerzaque necesita para llevar su entregahasta el final, sin dejarse vencer pornada ni por nadie. INTENCIN:

    Mientras rezamos las diez Avemarasde este cuarto Misterio del Rosario,unmonos a Jess crucificado poramor a nosotros. Pensemos en susdolores fsicos y espirituales, y

  • dmosle gracias por su inmenso gestode amor y de perdn, realizadoenteramente en favor nuestro. Tengamos en cuenta tambin a todaslas personas del mundo que sufren acausa de la violencia, y pidamos paraellas y para sus familiares, la ayuda yla proteccin amorosa de Dios.

    PadrenuestroDiez AvemarasGloria

  • QUINTO MISTERIO DOLOROSO:

    JESS MUERE EN LA CRUZ

  • Del Evangelio segn san Juan: (19,28-30) Despus, sabiendo Jess que ya todoestaba cumplido, dijo: "Tengo sed", ycon esto tambin se cumpli laEscritura. Haba all un jarro lleno devinagre. Pusieron en una caa unaesponja empapada en aquella bebida yla acercaron a sus labios. Jess probel vino y dijo: "Todo est cumplido".Luego inclin la cabeza y entreg elespritu. REFLEXIN:

    Las profecas sobre el Mesas han

  • sido cumplidas. Jess ha muerto y hamuerto por amor. El amor ms grandedel mundo, que es el amor mismo deDios. El dolor ha llegado a su culmen, peroel amor lo super infinitamente. Jessest muerto, realmente muerto, peroan subsiste la esperanza. A pesar dela profunda oscuridad que rodea elCalvario, se vislumbra a lo lejos unapequea luz que puede iluminarlo todode nuevo. Una luz que sin dudacrecer y derrotar el miedo y lasoledad de la noche que envuelve almundo entero. Aunque parezca contradictorio y

  • difcil de creer, ya no tenemos nadaque temer, el mal ha sido vencidodefinitivamente por el bien. Slo hacefalta que transcurra un poco detiempo para que podamosexperimentarlo personalmente. INTENCIN:

    En esta quinta y ltima decena delRosario, demos gracias a Dios pornuestra salvacin y la salvacin delmundo entero, que Jess consiguipara nosotros con su muerte en lacruz, y entregumosle nuestra propiavida, como un acto decorrespondencia a su amor.

  • Oremos muy especialmente, para quetodos los hombres y mujeres delmundo abran su corazn al amorsalvador de Dios, que se nos da cadada de mil maneras distintas, aunquemuchas veces no sepamos reconocerloy aceptarlo. PadrenuestroDiez AvemarasGloria

    Padrenuestro por las intenciones delSanto Padre y de la Iglesia.

  • MISTERIOS GLORIOSOS

    (Mircoles y Domingo)

    Los Misterios Gloriosos nos invitan ameditar y contemplar losacontecimientos que tuvieron lugar enel mundo, despus de la muerte deJess en la cruz, e incluyen dosmomentos muy especiales en la vidade Mara. Son los Misterios de laesperanza.

    Nos acercamos a estos Misterios coninmensa alegra, y su meditacin ycontemplacin llenan nuestro coraznde amor y de paz. La vida de Jess ysu entrega por amor, han llegado a su

  • punto culminante, con excelentesresultados tanto para l como paranosotros.

    Ya podemos vislumbrar lo que, graciasa su sacrificio salvador, ser nuestrofuturo, si acogemos sus enseanzas ysu ejemplo de vida, como lo hizoMara, su primera y ms fiel discpula.

  • PRIMER MISTERIO GLORIOSO:

    JESS SALE TRIUNFANTE DE LA PRUEBA

    Y RESUCITA A UNA NUEVA VIDA

  • Del Evangelio segn san Lucas: (24,1-8) El primer da de la semana, muytemprano, fueron las mujeres alsepulcro, llevando los perfumes quehaban preparado. Pero seencontraron con una novedad: lapiedra que cerraba el sepulcro habasido removida, y al entrar no vieron elcuerpo del Seor Jess.No saban qu pensar, pero en esemomento vieron a su lado a doshombres con ropas fulgurantes.Estaban tan asustadas que no seatrevan a levantar los ojos del suelo.Pero ellos les dijeron: "Por qubuscan entre los muertos al que vive?

  • No est aqu. Resucit. Acurdensede lo que les dijo cuando todavaestaba en Galilea: "El Hijo del hombredebe ser entregado en manos de lospecadores y ser crucificado, y altercer da resucitar". Ellas, entonces, recordaron laspalabras de Jess. REFLEXIN:

    El domingo amaneci como todos losdas, para los discpulos y discpulasde Jess. Con las primeras luces delamanecer, las mujeres salieronpresurosas hacia la tumba delMaestro, para ungir su cuerpo con losaceites aromatizados, como un ltimo

  • signo de su amor por l. Pero lassorprendi el hecho de encontrar latumba de Seor abierta y vaca.

    Su desconcierto y su temorencontraron una respuesta en laspalabras del ngel, que les record loque Jess mismo les haba anunciadoantes de ir a Jerusaln. Entonces sellenaron de dicha, y emprendieron elcamino de regreso para llevar labuena noticia a los dems. La resurreccin de Jess de entre losmuertos es la gran noticia que loscristianos tenemos que llevar a todoslos rincones de la tierra, porque enella est nuestra esperanza y la

  • esperanza del mundo entero. Jess,con su muerte, venci de maneradefinitiva y total, al mal y al pecado, ysu resurreccin a una nueva vida, espara todos los hombres y mujeres delmundo, promesa de vida eterna yfeliz.

    INTENCIN:

    En esta primera decena del Rosario,demos gracias a Dios por laresurreccin de Jess, quefundamenta nuestra fe y nuestraesperanza en l, y pidmosle que nosayude a anunciar esta verdadmaravillosa que da un nuevosignificado y una nueva perspectiva a

  • nuestra vida humana, con nuestraspalabras y con nuestras accionescotidianas.

    PadrenuestroDiez AvemarasGloria

  • SEGUNDO MISTERIO GLORIOSO:

    JESS ASCIENDE A LOS CIELOS,Y VIVE A LA DERECHA DL PADRE

  • Del Evangelio segn san Lucas: (24,50-53) Jess los llev hasta cerca deBetania y, levantando las manos, losbendijo. Y mientras los bendeca sesepar de ellos y fue llevado al cielo.Ellos se postraron ante l. Despusvolvieron llenos de gozo a Jerusaln,y continuamente estaban en elTemplo alabando a Dios. REFLEXIN:

    Despus de la resurreccin, Jess seapareci a sus discpulos varias veces,en distintas circunstancias, pero sulugar ya no estaba en el mundo fsico,

  • sino en el cielo, a la derecha de suPadre. La ascensin seala esteacontecimiento especial de la historiade la salvacin, que no implica deninguna manera, que Jess nos hayaabandonado definitivamente. Alcontrario; desde el cielo, Jessintercede por nosotros ante el Padre;nos protege y nos gua, para queseamos capaces de hacer realidad ennuestra vida su mensaje de amor, deverdad, de libertad, de justicia y depaz, para la humanidad de todos lostiempos y lugares. INTENCIN:

  • En este segundo misterio del Rosario,pidamos a Jess, que la Iglesia quecamina por el mundo, bajo gua delPapa Francisco, permanezca fiel a suPalabra, y lleve su amor y su paz, atodos los hombres y mujeres de latierra, especialmente a los mspobres y desamparados. PadrenuestroDiez AvemarasGloria

  • TERCER MISTERIO GLORIOSO:

    EL ESPRITU SANTO, ESPRITU DE JESS

    RESUCITADO, DESCIENDE SOBRE LOS

    APSTOLES

  • Del libro de los Hechos de losapstoles: (2,1-4) Cuando lleg el da de Pentecosts,estaban todos reunidos en el mismolugar. De repente vino del cielo unruido como el de una violenta rfagade viento, que llen toda la casadonde estaban, y aparecieron unaslenguas como de fuego que serepartieron y fueron posndose sobrecada uno de ellos. Todos quedaronllenos del Espritu Santo ycomenzaron a hablar en otraslenguas, segn el Espritu les concedaque se expresaran.

  • REFLEXIN: Muchas veces y de diferentesmaneras, anunci Jess a losapstoles que despus de su muerteles enviara al Espritu Santo, elConsolador que les ayudara arecordar y entender todo lo que l leshaba enseado. Y cuando se cumpliel tiempo sealado, Jess realiz supromesa. El Espritu Santo es la presencia vivay actuante de Jess en la Iglesia y enel mundo, a lo largo de los tiempos. Elsoplo de Dios que nos comunica aquienes creemos en l, una nueva vida.

  • El Espritu Santo es nuestra luz ynuestra fuerza, nuestro Maestro ynuestro gua. Su presencia en nuestrocorazn nos permite conocer a Dios,recibir su amor y acogerlo, y ser en elmundo, mensajeros y testigos de lasalvacin que Jess consigui paratodos con su vida y su muerte. INTENCIN:

    Mientras rezamos las diez Avemarasde esta tercera decena del Rosario,demos gracias a Dios por habernosregalado el Espritu de su Hijo, ypidmosle que nos ayude a acogerlocon corazn abierto y bien dispuesto,a escuchar sus insinuaciones, y a

  • seguir sus inspiraciones, para biennuestro y de quienes viven a nuestrolado.

    PadrenuestroDiez AvemarasGloria

  • CUARTO MISTERIO GLORIOSO:

    MARA ES LLEVADA AL CIELO EN CUERPO Y ALMA

  • De la Constitucin Lumen Gentium delConcilio Vaticano II (n. 59): La Virgen Inmaculada, preservadainmune de toda mancha de culpaoriginal, terminado el curso de la vidaterrena, en alma y cuerpo fue asuntaa la gloria celestial y enaltecida por elSeor como Reina del Universo, paraque se asemejar ms plenamente asu Hijo, Seor de los que dominan (Ap19,16) y vencedor del pecado y de lamuerte.

    REFLEXIN: En este cuarto Misterio Glorioso, la

  • Iglesia quiere que pongamos nuestrosojos y nuestro corazn en Mara, lamadre de Jess y su primera y msfiel discpula.

    Mara que crey siempre, que fuehumilde y bondadosa, delicada yamorosa, fiel sierva de Dios y de loshombres, es la madre a cuyo cuidadodebemos acogernos, la maestra quepuede ensearnos todo lo quenecesitamos saber sobre Jess y sumensaje, y el modelo que tenemos queseguir si queremos hacer realidad ennuestra vida la Voluntad de Dios. Invoqumosla con fe y con esperanza.Pidmosle que nos ayude a ser las

  • personas que Dios espera que seamos.Coloquemos en sus manos de madrelas necesidades de nuestra familia,las necesidades de nuestro pas, lasnecesidades de la Iglesia y lasnecesidades del mundo, seguros deque en ella tenemos a nuestra mejorabogada.

    INTENCIN:

    Recordemos muy especialmente a lasmams que en el mundo y en nuestropas, sufren a causa de la violenciaque les arrebata a sus esposos y a sushijos, y tambin a las queexperimentan la tristeza de sentirsesolas y abandonadas en su vejez.

  • PadrenuestroDiez AvemarasGloria

  • QUINTO MISTERIO GLORIOSO:

    MARA ES CORONADA COMO REINA DEL UNIVERSO

  • Del libro del Apocalipsis: (12,1) Apareci en el cielo una sealgrandiosa: una mujer vestida de sol,con la luna bajo sus pies y una coronade doce estrellas sobre su cabeza.

    REFLEXIN: Dios mismo quiso exaltar a Mara, lamadre de Jess, como la mujer porexcelencia, la madre por excelencia,la creyente por excelencia, y nosotrosnos unimos a esta exaltacin connuestro cario y devocin. Entendemos perfectamente, que la

  • mejor manera de honrarla, esbuscando parecernos a ella, comohijos e hijas de Dios y comoseguidores y seguidoras de Jess.Queremos coronarla con nuestro amory nuestras buenas obras, y connuestra lucha constante contra el maly el pecado, que ella derrotaceptando ser la Madre del Salvador.

    INTENCIN: Ofrezcamos este ltimo Misterio delRosario como un tributo deveneracin a nuestra Madre del cielo,y pidmosle con fe que nos ayude avivir cada da de nuestra vida, con laconciencia de nuestra condicin de

  • discpulos y discpulas de Jess,misioneros y misioneras de su amorpor el mundo, cada uno en lascircunstancias particulares y muypropias de su vida. Oremos de una manera muy especialpor el Papa Francisco, para que Maralo gue y lo proteja siempre en elcumplimiento de su misin en laIglesia y en el mundo, como testigo dela verdad de Dios y de su amormisericordioso por todos los hombresy mujeres, particularmente por losque son ms dbiles y los que sufrenpobreza y marginacin, tristeza ysoledad, enfermedades y dolores.

  • PadrenuestroDiez AvemarasGloria

    Padrenuestro por las intenciones delSanto Padre y de la Iglesia.