El Paseo de Crikú

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EL PASEO DE CRIKU Erase una vez un grillo llamado Criku que vivía en una casa en mitad del bosque, rodeado de árboles y plantas de todas clases... La casa de Criku no es como las nuestras: es una casita pequeñita, una casa de grillos. Al lado hay una charca cubierta de plantas acuáticas donde vive una familia de ranas. Criku es muy feliz en este bosque y le gusta cantar a todas horas. Una mañana soleada Criku decide salir a dar un paseo y coger algunas moras para hacer mermelada. Después de un buen rato caminando por el bosque pensando en lo rica que estará la merienda, se da cuenta de que se ha perdido. De pronto, oye cómo las hojas de los árboles comienzan a moverse..., es el viento que se ha despertado, y cada vez sopla más fuerte. Parece que se acerca una tormenta. Criku tiene que agarrarse a una flor para no salir volando. Al poco rato, empiezan a caer las primeras gotas de lluvia. Criku tiene que encontrar un lugar donde refugiarse lo antes posible o se empapará. A lo lejos ve un árbol seco que está hueco, así que, sin pensarlo dos veces, se mete en el agujero. Allí no se moja, y puede escuchar la lluvia que cae afuera. Ahora se siente a salvo, pero, de pronto, escucha un sonido extraño detrás de él. Se da la vuelta y ve cómo una gran serpiente de cascabel se le acerca con la boca muy abierta, quizá dispuesta a comérselo de un solo bocado. Criku sale del agujero de un brinco y empieza a correr lo más rápido que puede a través del bosque. Pero sigue lloviendo, y parece que cada vez hay más nubes oscuras en el cielo. Criku oye truenos aterradores y ve caer brillantes relámpagos. Tiene que encontrar rápidamente otro sitio donde refugiarse. Detrás de unos arbustos ve una pequeña cueva y corre a meterse dentro para no mojarse más. Ahora puede sentarse cómodamente y descansar de tantas emociones. Todo está muy oscuro y silencioso. Solo se escucha un sonido rítmico: es su corazón, que late muy fuerte después de tanto correr. Criku se siente ya más tranquilo cuando oye un ruido atronador que llega del exterior. No tiene ni idea de qué puede ser ese extraño ruido. Curioso, Criku sale de la cueva, y entonces, de repente, detrás de él aparece un enorme elefante. Criku tiene que salir corriendo otra vez, o el elefante le aplastará con sus enormes patas. De nuevo en mitad del bosque y perdido, piensa. Pero, al menos, las nubes van desapareciendo y poco a poco va saliendo el sol..., amarillo, enorme y resplandeciente cuando la tormenta acaba. Criku se pone muy contento al sentir de nuevo el calor del sol que brilla en el cielo, y el hermoso aroma de las flores, pero sigue perdido y no sabe volver a su casa. Entonces, el suelo empieza a temblar levemente..., y un precioso caballo aparece por la ladera. Viene trotando cada vez más rápido hasta que se detiene a su lado. Criku le dice que se ha perdido durante la tormenta y que no sabe volver a su casa, que está en mitad del bosque, justo al lado de la charca de las ranas. El caballo le responde que sabe dónde está la charca y que estará encantado de llevarle sobre su grupa. Al llegar a casa ya se ha hecho de noche, así que Criku y el caballo van a buscar leña para hacer una gran hoguera donde secarse. El fuego de la hoguera desprende tanta luz que un montón de animales se acercan a

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Cuento El Paseo de Crikú

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EL PASEO DE CRIKU

Erase una vez un grillo llamado Criku que viva en una casa en mitad del bosque, rodeado de rboles y plantas de todas clases...

La casa de Criku no es como las nuestras: es una casita pequeita, una casa de grillos. Al lado hay una charca cubierta de plantas acuticas donde vive una familia de ranas. Criku es muy feliz en este bosque y le gusta cantar a todas horas.

Una maana soleada Criku decide salir a dar un paseo y coger algunas moras para hacer mermelada. Despus de un buen rato caminando por el bosque pensando en lo rica que estar la merienda, se da cuenta de que se ha perdido.

De pronto, oye cmo las hojas de los rboles comienzan a moverse..., es el viento que se ha despertado, y cada vez sopla ms fuerte. Parece que se acerca una tormenta. Criku tiene que agarrarse a una flor para no salir volando. Al poco rato, empiezan a caer las primeras gotas de lluvia.

Criku tiene que encontrar un lugar donde refugiarse lo antes posible o se empapar. A lo lejos ve un rbol seco que est hueco, as que, sin pensarlo dos veces, se mete en el agujero. All no se moja, y puede escuchar la lluvia que cae afuera.

Ahora se siente a salvo, pero, de pronto, escucha un sonido extrao detrs de l. Se da la vuelta y ve cmo una gran serpiente de cascabel se le acerca con la boca muy abierta, quiz dispuesta a comrselo de un solo bocado. Criku sale del agujero de un brinco y empieza a correr lo ms rpido que puede a travs del bosque. Pero sigue lloviendo, y parece que cada vez hay ms nubes oscuras en el cielo.

Criku oye truenos aterradores y ve caer brillantes relmpagos. Tiene que encontrar rpidamente otro sitio donde refugiarse. Detrs de unos arbustos ve una pequea cueva y corre a meterse dentro para no mojarse ms. Ahora puede sentarse cmodamente y descansar de tantas emociones. Todo est muy oscuro y silencioso. Solo se escucha un sonido rtmico: es su corazn, que late muy fuerte despus de tanto correr.

Criku se siente ya ms tranquilo cuando oye un ruido atronador que llega del exterior. No tiene ni idea de qu puede ser ese extrao ruido. Curioso, Criku sale de la cueva, y entonces, de repente, detrs de l aparece un enorme elefante. Criku tiene que salir corriendo otra vez, o el elefante le aplastar con sus enormes patas.

De nuevo en mitad del bosque y perdido, piensa. Pero, al menos, las nubes van desapareciendo y poco a poco va saliendo el sol..., amarillo, enorme y resplandeciente cuando la tormenta acaba.

Criku se pone muy contento al sentir de nuevo el calor del sol que brilla en el cielo, y el hermoso aroma de las flores, pero sigue perdido y no sabe volver a su casa. Entonces, el suelo empieza a temblar levemente..., y un precioso caballo aparece por la ladera. Viene trotando cada vez ms rpido hasta que se detiene a su lado.

Criku le dice que se ha perdido durante la tormenta y que no sabe volver a su casa, que est en mitad del bosque, justo al lado de la charca de las ranas. El caballo le responde que sabe dnde est la charca y que estar encantado de llevarle sobre su grupa. Al llegar a casa ya se ha hecho de noche, as que Criku y el caballo van a buscar lea para hacer una gran hoguera donde secarse.

El fuego de la hoguera desprende tanta luz que un montn de animales se acercan a calentarse, incluso la serpiente y el elefante. Al verlos, Criku se asusta, pero le dicen que antes no queran hacerle dao, que solamente queran invitarle a jugar un rato. Al final, se organiza una gran fiesta alrededor del fuego, mientras comparten algo dulce todos comienzan a cantar.