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Las Bandas: semblanza de una gran historia Por Jesús Ignacio Pérez Perazzo Proemio Ante la gran importancia que las Bandas de Música han tenido y tienen en la vida cotidiana y artística de nuestros pueblos, nos hemos propuesto en este trabajo la tarea de presentar un Recuento histórico de las trayectorias y ejecutorias más relevantes en el desarrollo y evolución de las Bandas, así como también, analizar la vigencia, importancia y futuro de estas agrupaciones en el desarrollo musical. Por supuesto, resulta una dura y casi imposible labor, tratar de no olvidar detalles en semejante recuento, ya que para ello sería imprescindible el conocimiento minucioso de las historias regionales, nacionales y un buen conocimiento de la historia universal; sin embargo, es nuestro propósito que, al menos, los datos históricos más resaltantes relacionados con el desarrollo de la Música Bandística Mundial, puedan quedar consignados en esta modesta recopilación. Para comenzar, hemos querido hacer una apretada Síntesis Histórica de los orígenes y desarrollo de las Bandas dentro de la historia de la música; para ello nos hemos servido, parcialmente, de muchos datos contenidos en nuestro anterior trabajo que, con el título de EL MARAVILLOSO MUNDO DE LA BANDA, fue publicado por la Colección Cuadernos Lagoven de Venezuela, en Octubre de 1989 (ISBN-980-259-257-9) pero además, hemos querido agregar el fruto de investigaciones más recientes y completas, resultado de las experiencias vividas como Director Titular de la Banda Sinfónica Nacional de Colombia en Bogotá durante el año 1998; Director Titular de la Banda Marcial Caracas durante quince años (1978-1994) y, en general, Director de Bandas por más de veinte años; además, como promotor, luego vicepresidente y después, Presidente de la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Bandas y Ensambles, ALACBE, y miembro representante de la World Association for Symphonic Bands and Ensembles, WASBE, desde 1987 y, en la actualidad, como fundador y ahora, Director Artístico de la Banda Sinfónica Juvenil Simón Bolívar de Caracas, que funciona en el Conservatorio de Música Simón Bolívar y está adscrita a nuestro Sistema Nacional de Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela. Mucho se ha escrito acerca de los géneros instrumentales y uno de ellos, como el Cuarteto de Cuerdas, tiene ya toda una historia desde su nacimiento hasta su gran apogeo durante los siglos XIX y XX. En mi humilde opinión, creo que tanto el Op. 28 de Anton Webern como la Suite Lírica de Alban Berg son ya obras un tanto terminales en este género. ¿Qué decir de la Banda Sinfónica, como género instrumental?. Creo que lo que se ha escrito acerca de ella es muy poco en razón de que recién durante la segunda mitad del siglo XX se puede contar de un vasto repertorio auténticamente original que lo caracterice. Con ello quiero significar que este género instrumental -llámese también, Orquesta de Vientos o Ensamble de Vientos y Percusión- está prácticamente, en sus comienzos. Estoy convencido que LAS BANDAS: SEMBLANZA DE UNA GRAN HISTORIA, de Jesús Ignacio Pérez Perazzo, podrá darle mucha luz a la importancia y al concepto de este género instrumental, cuya ausencia en muchas Escuelas de Música y Conservatorios de nuestro Continente es notable. No quisiera terminar esta nota sin relatar una anécdota que me sucedió cuando encargué una obra para Violín y Banda a un importante y prestigioso compositor. Este me dijo…Pero la Banda no dejará escuchar al Violín…a lo que respondí, ¿y que hay acerca del concierto para Violín y Orquesta?... y luego de un breve silencio me contestó,…Ah! Claro, Tienes razón. Vicente Moncho Córdoba, Arg. 2002 --------------------------------------------

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Las Bandas: semblanza de una gran historia

Por Jesús Ignacio Pérez Perazzo

Proemio Ante la gran importancia que las Bandas de Música han tenido y tienen en la vida cotidiana y artística de

nuestros pueblos, nos hemos propuesto en este trabajo la tarea de presentar un Recuento histórico de las trayectorias y ejecutorias más relevantes en el desarrollo y evolución de las Bandas, así como también, analizar la vigencia, importancia y futuro de estas agrupaciones en el desarrollo musical. Por supuesto, resulta una dura y casi imposible labor, tratar de no olvidar detalles en semejante recuento, ya que para ello sería imprescindible el conocimiento minucioso de las historias regionales, nacionales y un buen conocimiento de la historia universal; sin embargo, es nuestro propósito que, al menos, los datos históricos más resaltantes relacionados con el desarrollo de la Música Bandística Mundial, puedan quedar consignados en esta modesta recopilación.

Para comenzar, hemos querido hacer una apretada Síntesis Histórica de los orígenes y desarrollo de las

Bandas dentro de la historia de la música; para ello nos hemos servido, parcialmente, de muchos datos contenidos en nuestro anterior trabajo que, con el título de

EL MARAVILLOSO MUNDO DE LA BANDA,

fue publicado por la Colección Cuadernos Lagoven de Venezuela, en Octubre de 1989 (ISBN-980-259-257-9) pero además, hemos querido agregar el fruto de investigaciones más recientes y completas, resultado de las experiencias vividas como Director Titular de la Banda Sinfónica Nacional de Colombia en Bogotá durante el año 1998; Director Titular de la Banda Marcial Caracas durante quince años (1978-1994) y, en general, Director de Bandas por más de veinte años; además, como promotor, luego vicepresidente y después, Presidente de la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Bandas y Ensambles, ALACBE, y miembro representante de la World Association for Symphonic Bands and Ensembles, WASBE, desde 1987 y, en la actualidad, como fundador y ahora, Director Artístico de la Banda Sinfónica Juvenil Simón Bolívar de Caracas, que funciona en el Conservatorio de Música Simón Bolívar y está adscrita a nuestro Sistema Nacional de Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela. Mucho se ha escrito acerca de los géneros instrumentales y uno de ellos, como el Cuarteto de Cuerdas, tiene ya toda una historia desde su nacimiento hasta su gran apogeo durante los siglos XIX y XX. En mi humilde opinión, creo que tanto el Op. 28 de Anton Webern como la Suite Lírica de Alban Berg son ya obras un tanto terminales en este género.

¿Qué decir de la Banda Sinfónica, como género instrumental?. Creo que lo que se ha escrito acerca de ella es muy poco en razón de que recién durante la segunda mitad del siglo XX se puede contar de un vasto repertorio auténticamente original que lo caracterice. Con ello quiero significar que este género instrumental -llámese también, Orquesta de Vientos o Ensamble de Vientos y Percusión- está prácticamente, en sus comienzos.

Estoy convencido que LAS BANDAS: SEMBLANZA DE UNA GRAN HISTORIA, de Jesús Ignacio Pérez Perazzo, podrá darle mucha luz a la importancia y al concepto de este género instrumental, cuya ausencia en muchas Escuelas de Música y Conservatorios de nuestro Continente es notable. No quisiera terminar esta nota sin relatar una anécdota que me sucedió cuando encargué una obra para Violín y Banda a un importante y prestigioso compositor. Este me dijo…Pero la Banda no dejará escuchar al Violín…a lo que respondí, ¿y que hay acerca del concierto para Violín y Orquesta?... y luego de un breve silencio me contestó,…Ah! Claro, Tienes razón.

Vicente Moncho Córdoba, Arg. 2002

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Prologue

Over the past fifty years the emergence of the wind band as a serious means of expression has stimulated music lovers as well as scholars to examine its place in the community, the university and as an international phenomenon. The Contemporary Band comes to us having evolved from the military parade field, the town band, European court ensembles, eighteen century Harmoniemusik, the school show band, the church ensemble, and a host of other manifestations. It has inherited a treasure trove of significant works by Stravinsky, Vaughan-Williams, Schoenberg, Gabrieli, Wagner, Holst, Tippet, Benson, Bruckner, Mozart, and a multitude of other great composers.

To provide the scholar as well as the novice a clear introduction to the history of Bands, JESÚS IGNACIO PÉREZ PERAZZO has written Las Bandas: Semblanza de una Gran Historia based on years of research and direct experience not only in his native South America but internationally. He has written an account that will entertain the casual music listener as well as satisfy even the most passionate scholar.

This beautiful volume will illuminate the chronicle of this incredible and fascinating object we call a Band and its magnificent music.

Dr. John Alden Stanley World Association for Symphonic Bands and Ensemble

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A los directores y músicos de las Bandas, pioneros de la cultura musical de los pueblos.

Al Cnl. John Bourgeois, MGySgt. Frank Byrne y a los maestros Eugene Corporon, Frank Battisti, Warren Benson y John A. Stanley quienes me introdujeron en la senda del movimiento mundial de la música de Bandas.

A mis colegas de la WASBE que diariamente, dedican su vida a las Bandas. JIPP.

NOTA DEL AUTOR: Agradezco al amable lector del presente trabajo, cualquier información adicional, complementaria, corrección o precisión con relación a los datos reseñados en el mismo. Así mismo, pido excusas anticipadas por cualquier error u omisión de mi parte.

e-mail: [email protected]

1. Razón de ser, finalidades y objetivos de esta obra:

Las dimensiones adquiridas por el Sistema Nacional de Orquestas Juveniles e Infantiles en Venezuela, a través de FESNOJIV; por los programas que adelantan la Coordinación del Programa Nacional de Bandas y también, las Fundaciones Batuta, Incolmotos Yamaha de Medellín, Amadeus de Medellín, Corbandas, Asobandas y la Universidad Javeriana, entre otras instituciones, en Colombia; por el proyecto desarrollado por la Orquesta Sinfónica Juvenil y por las Bandas Sinfónicas Municipal y Metropolitana de Quito en Ecuador; por el Conservatorio de Música de Lima, en el Perú; por iniciativas como el Festival Internacional de Bandas y Fanfarrias de Melipilla, Chile y por las Orquestas y Bandas Profesionales y Juveniles en Argentina, Costa Rica, Brasil, República Dominicana y Puerto Rico, por citar solamente algunos de los múltiples programas e iniciativas que se llevan a cabo en nuestra región Latinoamericana y del Caribe; han sido factores determinantes para la existencia de un gran número de niños y jóvenes capacitados en el aprendizaje, ejecución y dominio de todos los instrumentos musicales, incluidos por supuesto, los de viento y percusión.

Sabemos que el potencial infantil y juvenil que se aficiona a este último tipo de música es cada vez mayor y estamos en capacidad - y debemos brindarles - a estos niños y jóvenes, la oportunidad de conocer y dominar el repertorio, cada vez más extenso que a niveles nacional, regional y mundial, se produce para este tipo de instrumentos.

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En nuestros países, el Movimiento Bandístico musical tiene una larga, importante y hermosa historia de tradiciones que incluye a una vasta cantidad de hombres y mujeres, entre los cuales se cuentan compositores, instrumentistas, transcriptores y arreglistas de todas las regiones, estados, departamentos, provincias, municipios y poblaciones.

Hoy, en casi todo el mundo, existe un movimiento musical que propende al desarrollo, cultivo y difusión de la música para instrumentos de viento, a través de las Orquestas de Vientos, llamadas tradicionalmente: BANDAS.

El Movimiento Bandístico Mundial moderno, cuenta con el entusiasmo y el aporte de los más conocidos y grandes compositores contemporáneos, quienes han encontrado en estas agrupaciones un medio muy eficaz de llegar a mayores públicos y de expresar nuevas ideas musicales.

Para ello, y desde la creación en 1981 de la WORLD ASSOCIATION FOR SYMPHONIC BANDS AND ENSEMBLES, WASBE, han hallado un dinámico motor que impulsa, no sólo la creación, publicación y difusión de la música para vientos sino que, promueve y realiza Conferencias Mundiales bienales, foros, clínicas, seminarios, cursos, ediciones y grabaciones cuyo propósito final es dar apoyo técnico, brindar oportunidades y abrir caminos para todos los involucrados de alguna manera, en el magnífico y apasionante mundo de la música de Bandas.

Estas acciones, también se han visto reforzadas por las actividades emprendidas por diferentes asociaciones regionales y nacionales que, en muchos países, desarrollan su acción en dirección similar. También en nuestra región, ha sido la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Bandas y Ensambles, ALACBE, desde su creación en 1987, encargada de propiciar, respaldar y estimular estos programas e iniciativas.

Ante estas perspectivas, resulta imperativo necesario aclarar nuestros propios horizontes, unificar acciones y tratar de conocer a fondo, el Movimiento Bandístico Mundial para poder ilustrar acerca de las vías que conducen por las sendas verdaderas, efectivas y maravillosas de dicho movimiento, a los niños y jóvenes que desean cultivar este magnífico campo del arte musical en nuestra región.

Se trata pues, de una verdadera especialidad que complementará la personalidad, conocimientos y habilidades musicales de los niños y jóvenes que puedan involucrarse en este reto, los cuales compartirán la rigurosa disciplina metódica del aprendizaje musical con la alegría, vistosidad, versatilidad, técnicas y repertorio de las Bandas, Fanfarrias y Ensambles o Conjuntos de Cámara; lo cual, en ningún momento los desviará del camino sinfónico sino que, por el contrario, les aportará experiencias y destrezas que les permitirán un profundo y completo desarrollo musical y personal.

2. Aspectos históricos de importancia

En primer lugar, debo señalar algunos Antecedentes; luego, una muy Resumida Historia de las Bandas y algunos Aspectos Históricos de Importancia con relación al desarrollo de la música escrita para estas agrupaciones, es decir, su repertorio; por lo cual, tal como lo decía en el Proemio, citaré el trabajo que, con el título de: EL MARAVILLOSO MUNDO DE LA BANDA, me fue publicado el año 1989 en la Colección Cuadernos Lagoven. Afirmaba en aquella ocasión que:…Si algunos musicólogos, tales como Juan Vercher, opinaron que la aparición de las Bandas tenía sus orígenes en las ciudades medievales, esta tesis no corresponde a la verdad, ya que documentos ciertos, piezas arqueológicas y obras de arte de anteriores períodos, nos permiten asegurar que sus inicios se remontan a las más primitivas civilizaciones humanas…. En tal sentido, resultan mucho más aproximadas a la realidad las teorías de Alessandro Vessella (1860-1929) en su tradicional trabajo: La Banda dalle origini fino ai nostri giorno.

Tampoco compartimos la tesis de Vercher, de que el denominativo banda es de origen incierto y mucho menos, que procede probablemente del siglo XVI basándose para tal afirmación a priori, en el hecho de que en las cortes europeas denominaban Banda a un corto número de músicos que actuaban en fiestas y paradas militares de carácter popular, a fin de entretener a la gente.

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3. Antecedentes

Con respecto a la denominación que se les da, es indudable, si analizamos el nombre de estos grupos desde el punto de vista histórico y etimológico, que la palabra Banda (Band, en inglés; Bande, en francés) cuyo significado es: faja, fleje, lazo, unión; comenzó a aplicarse en todos estos idiomas para designar, a partir del S.XVII, al grupo de músicos o soldados que, con instrumentos musicales (de viento y percusión) debían cumplir la misión de enardecer y redoblar, con sus sonidos y ritmos, el ánimo de los combatientes y así, la Banda, venía a cumplir la función de enlace y coordinación de los movimientos de las tropas.

4. Los Orígenes de las Primitivas Bandas

Con relación a los Orígenes de estas Agrupaciones Musicales, los testimonios escritos, pinturas y grabados sobre el empleo de los músicos en las operaciones militares, tan viejo como el mismo arte de la guerra, nos demuestran que éstos desempeñaban honrosamente su papel en las batallas de las antiguas civilizaciones. Las excavaciones arqueológicas realizadas en el territorio de Sumeria (antigua Mesopotamia, cerca del golfo Pérsico, año 10.000 a.C.) permiten asegurar que los primitivos habitantes de dicha región, manejaban instrumentos de percusión y otros tales como el Esirtu; el gi-bu, tubo largo sin embocadura y sostenido en forma casi vertical; trompetas rectas y trompetas en forma de espiral, para sus usos militares y ceremoniales.

El Libro de Moisés (Génesis 4,21) cita a Jubal, descendiente de Caín, como padre de los que tocan Kinnôr (Lira portátil) y ûgabh (flauta vertical de varios tubos). Para esta época se conoce la existencia de grupos de músicos profesionales entre los hebreos (año 5.650 a.C.) que usaban para los fines del culto en el templo, una trompeta de plata denominada Jazozra (trompeta de plata, de uso en el Templo) y también una trompa o cuerno de carnero sin boquilla, llamada Shofar (cuerno de carnero sin boquilla, para usos rituales) e instrumentos de percusión como el Tof (antiguo tambor hebreo) y el Pa`amon, campanilla de los príncipes tribales. El Torá (La Biblia) nos ofrece numerosas menciones y referencias originales acerca de la importancia de la música y de los diferentes usos musicales ( p.e. Gén. 4, 21; Gén. 31, 27; Ex. 15, 1-20; I Sam. 18, 6-7; I Sam. 10, 5; Ecl. 2, 8; Job 21,12; Números 10; Jueces 7, 19; I Samuel 16, 23; II Samuel 1, 17; II Samuel 6, 5; Josué 6; Salmos 108,3; 149,3) y formas rituales de tocar y cantar.

También por la misma época, el Libro de los Números (Núm. 10) cita el uso de esa Trompeta de Plata por parte de los hebreos, antes de entrar en combate y para lograr la bendición de Dios: Locutusque est Dominus ad Moysen, dicens: Fac tibi duas tubas argenteas ductiles, quibus convocare possis multitudinem quando movenda sunt castra…(Vulgata, Nova Editio, 1955).

Y el Libro de Josué (Cap.6,4), relata las instrucciones precisas de Dios para Josué: Siete sacerdotes llevarán delante del Arca siete trompetas resonantes. Al séptimo día daréis siete vueltas en derredor de la ciudad, yendo los sacerdotes tocando sus trompetas...

Hacia el año 3.100 a.C., los egipcios dedican gran culto a la música militar. Utilizan la tuba, trompeta recta que precedía los desfiles seguida de tambores y sistros (sonajero para el culto de Isis), tal como lo señala Ptolomeo Filadelfo. También utilizaron flautas verticales: nay y uffata; dobles chirimías: zummarah y trompetas, las cuales eran utilizadas en el culto a los muertos. Así mismo, usaron gran variedad de instrumentos de percusión, timbales de mano, sonajeros, varillas entrechocadas, etc., De esta época nos ha llegado la referencia del nombre de uno de los antiguos músicos profesionales, Khufu-anch, cantor y flautista de la corte egipcia durante el tercer milenio antes de nuestra Era.

En la India (año 3.000 a.C.) se usan trompetas y dobles chirimías: shannai, timpani, panderos y tamburos en la música guerrera, como puede observarse en los tapices, grabados y pinturas de la época.

Los Chinos en 3.000 a.C., introducen en sus ceremonias y rituales el uso de largas trompetas cuya longitud era aproximadamente tres palmos, construidas de madera con incrustaciones de oro (Cfr. Francesco Gemelli, Viaggi t.3°). Además utilizaron el órgano de boca: shêng, una suerte de flauta de Pan: p`ai siao, las flautas verticales: Yo y Ti, la flauta travesera: Ch`ih, la flauta de vasija: hun.

Los Caldeos en el año 2.000 a.C., practican la música guerrera como lo demuestran los

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trabajos arqueológicos realizados en los Monumentos de Senaquerib y Nabucodonosor. Entre 1100 y 500 a.C., (Edad de Bronce) Se desarrollan los conjuntos instrumentales de

Luras vikingas en los Países Escandinavos; instrumentos de sonoridad fuerte y vigorosa, comparable a la del moderno trombón, para ser usados en las funciones cermoniales y rituales.

Asurbanipal, valga decir, Sardanapalo IV (668-625 a.C.), también utilizó grupos de músicos militares asirios, según consta en grabados y relieves que podemos apreciar en el Museo de Louvre en París.

Y en los relieves y vasos del Museo Arqueológico Nacional de Madrid, se pueden observar, claramente, Guerreros Ibéricos tocando instrumentos musicales de uso militar.

5. A partir de la Antigua Grecia

Jenofonte (Lac.Repl.,13,8) cita el uso del Aulos, instrumento musical, especie de doble oboe, utilizado para ejecutar, fundamentalmente, el modo frigio en la antigua Grecia y el cual había sido importado de Asia Menor.

Sirvió el Aulos para la glorificación del culto orgiástico de Dionisos y los lacedemonios lo usaban como clarín. Se atribuye a Licurgo su introducción en los ejércitos espartanos.

Los soldados marchaban al combate al son del aulos, con el fin de mantener un correcto orden en la formación y el mismo ritmo en la marcha. Antes de la batalla, los aulistas tocaban un preludio con el objeto de poner a los soldados en disposición de ánimo para la lucha, mientras que, el llamado Canto de Castor, constituía la señal para el ataque. Como instrumento de señales y órdenes militares, utilizaron el salpinx, o trompeta de metal; utilizaron además, otros instrumentos de viento, como la syrinx o siringa (flauta de Pan, en homenaje al dios pastoril de la Arcadia) y la flauta travesera.

Sobre estos hechos abundan los testimonios en Sófocles, Pitágoras, Aristóxenos, Dídimos, Platón, Aristóteles, Herodoto, Plutarco (Mus.26), Tucídides y Gelio.

También en Grecia (530 a.C.) se destacan Midas de Agrigento, hábil flautista y Herodoro de Mergara, trompetista ganador por diez veces del premio olímpico por su habilidad, según lo relata el poeta Píndaro (518-438? A.C) en sus Epinicios Olímpicos.

En Roma, durante el reinado de Servio Tulio (578-534 a.C), sexto rey de Roma, fueron instituidos formalmente los Grupos de músicos en las Milicias o Legiones Romanas con funciones específicas. Se establecieron así, los Cornicem (tocadores del Cornu) y los Tubicem (tocadores de la Tuba).

Posteriormente, hacia el año 400 a.C., estos grupos militares y ceremoniales romanos estarán integrados por flautas, cornos y trompetas de muy variadas formas y tamaños e instrumentos peculiares como la flauta Siringa (Syrinx) y el Lituo (Lituus) o trompeta curva.

Los romanos desarrollaron múltiples actos, ceremonias, usos y costumbres militares y rituales en los cuales, se hizo frecuente la utilización de diversos instrumentos musicales tales como la Bucina (Trompeta plegada con boquilla desmontable), la Tibia (Instrumento Nacional de los romanos, al principio era una flauta de hueso, luego pasó a ser transversal y finalmente, este términó designó al aulos y doble aulos), el Tympanum (Pandereta), el Scabillum (Sonajas para los pies), la Cymbala (Platillos), la Crótala (Sonajas), además de la Tuba (Trompeta recta), el Cornu (Trompa con vara transversal para sostenerla), la Syrinx (Flauta pastoril griega), el Lituus (Trompa etrusca de campana curva) y otros más.

Sabemos que en tiempos del Emperador César Augusto (63 a.C-14 d.C.), el Aulos, instrumento heredado de la cultura griega, aumentó sus dimensiones y llegó a ser un instrumento del tamaño similar al de las tubas.

Y el historiador Ammiano Marcelino (340-400 d.C.), nos ofrece documentación acerca del uso, por parte de los romanos, de grandes liras que debían transportarse en carros.

Pero los romanos, señala el musicólogo Paul Henry Láng, no sólo aumentaron el tamaño de sus instrumentos para aumentar la intensidad o volumen, sino que …reunieron gran número de ejecutantes hasta formar conjuntos de músicos verdaderamente impresionantes, tradición que ya existía en Egipto, tal como lo señalaba Ptolomeo Filadelfo (m. 340 a.C).

La investigadora y musicóloga norteamericana Helen L. Kaufmann, resume curiosamente, sus opiniones en este sentido, con la comparación descriptiva que citamos a continuación:

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…Banquets, religious festivals, and the famous Roman games featured musical programs on a Hollywood scale...

En refuerzo de tal afirmación y al mismo respecto, el famoso preceptor de Nerón, Lucio Anneo Séneca (4a.C-65d.C) en su obra Epistolæ 84,10, nos ofrece importantes datos acerca del gran número de cantores que se congregaban para actuar juntos y los cuales eran acompañados por …multitud de instrumentos de viento esparcidos entre el auditorio, mientras que los aulos, cornu y órganos (hydraulis) de todas clases y tamaños, se colocaban en el escenario.

Marco Tulio Cicerón (106-43 a.C), en su De Oratoria III, 98, comenta las habilidades musicales de …expertos capaces de identificar una composición luego de escuchar las primeras notas de la flauta y del público romano en su labor de ejercer estricta crítica de las dotes y cualidades de los artistas.

Los virtuosos de la música eran respetados y considerados en todo el Imperio. Estudiaban bajo la tutela de memorables maestros; debían llevar una vida metódica y sana; realizaban giras de conciertos por el Imperio y recibieron pagos importantes y numerosas familias patricias continuaron la práctica que se había iniciado con los famosos Gracos, Tiberio y Cayo Sempronio hacia el 110 a.C., de enviar a sus hijos a las escuelas de música y de danza. También las mujeres romanas, tanto aristócratas como cortesanas, practicaron el arte de la música como cantantes e instrumentistas.

Marco Terencio Varrón (116-26 a.C), célebre autor del libro DE MUSICA, séptimo volumen de su obra Disciplinarum Libri y cuyo título ha servido de inspiración a este trabajo; destaca la importancia de la música como una de las principales disciplinas de la educación.

La esclavitud, institución mantenida por los romanos, les permitió adiestrar músicos y cantores en grandes cantidades.

Lucio Cornelio Sila (138-80 a.C) tuvo entre sus servidores al rico liberto Crisógono, el cual contaba entre sus propios esclavos a un gran número de instrumentistas y cantantes que se encargaban diariamente de mantener un permanente ambiente musical en su residencia.

Y Cayo Clínio Mecenas (69-8 a.C), pudo curar su insomnio escuchando música suave ejecutada a distancia.

Marco Fabio Quintiliano (35-96 d.C), célebre cultor de la retórica, redactor de los doce libros de la Institutio Oratoria y protegido del severo emperador Servio Sulpicio Galba, aporta numerosas citas y datos acerca de las actuaciones de mimos, joculatores, tañedores de cítara, cantores, bailarines, tocadores de flauta con forbeia (fuelle) y liras. (Institutio Oratoria, Musica ratio numerorum IX, IV, 139 y XI, 3, 22).

El temido emperador Calígula (12-41d.C), como señala Paul Henry Láng, …se deleitaba con la música de coros e instrumentos de viento mientras su galera se mecía en las olas del Golfo de Nápoles…

Domicio Claudio Nerón (37-68d.C), además de exhibir sus propias cualidades de citarista, implantó en el año 60 los Festivales Sagrados, en ellos la música cumplía un importante papel.

Y más tarde, el emperador Tito Flavio Sabino Domiciano (54-97d.C), estableció los Juegos Capitolinos, en los cuales se premió la actuación de instrumentistas, músicos, cantores y poetas. A partir de estas fechas y acontecimientos, la música además era considerada como Espectáculo y los músicos gozaron de condiciones y tratos muy especiales.

Indudablemente, los tambores e instrumentos congéneres de pieles y madera; los caracoles, cuernos de animales, las flautas de hueso o de caña y más tarde, los instrumentos derivados de ellos, es decir, los instrumentos de viento y los de percusión, por su sonoridad y características, fueron desde muy remotos tiempos los más adecuados y preferidos para los usos ceremoniales, protocolares y militares.

Hacia el año 400 d.C., se sabe de la existencia de Cornos Olifantes, construidos de marfil, o también, fundidos en oro macizo, los cuales eran utilizados para ceremonias, ritos y usos militares. (Cfr.Royal Art Collection, Dinamarca; hallados en 1639 y 1734 respectivamente). Podemos afirmar entonces, que por lo general, estas Bandas militares solían estar integradas, básicamente, por diversos tipos de instrumentos de percusión, tambores y trompetas o cornos de muy variadas formas y materiales, los cuales utilizaban para dar ordenes y señales a apartadas distancias, además para batir la marcha de los combatientes y para usos protocolares en las ceremonias y ritos oficiales; y obviamente, los integrantes de las primitivas bandas eran los usuarios exclusivos de dichos instrumentos, los cuales tuvieron, en muchas ocasiones y civilizaciones, una connotación

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ceremonial, religiosa y hasta mágica y misteriosa.

6. Historia condensada de las Bandas y del desarrollo de su repertorio desde la Edad Media hasta el S.XVI

Coincidimos con Juan Vercher y otros historiadores y musicólogos, en el hecho de afirmar que

las primeras Organizaciones Musicales de carácter Municipal, Bandas Municipales o Hermandades (Brüderschaft), aparecen a partir de la Edad Media, hacia la mitad del siglo XIII.

De hecho, podemos hablar de Tres tipos de Bandas que corresponden a tres segmentos diferentes de la sociedad, según afirma David Whitwell en su libro: A Concise History of the Wind Band, son ellas, a saber:

1. Bandas de Iglesia 2. Bandas de Corte y 3. Bandas de Ciudades.

1. La primera Banda de Iglesia que nos aparece reseñada corresponde a la Iglesia Germana del Obispo de Passau en el año 1203. Las funciones de estas Bandas de Iglesia eran las de realzar la solemnidad del culto. 2. Sobre las Bandas de Corte, cuyas funciones eran evidentemente, el protocolo ceremonial; por las crónicas, tenemos noticias de la existencia de Spielmann o Grupos de Músicos de Viento en la corte germana del Conde de Kraiburg, hacia el año de 1050.

En 1212, el Conde de Chester promueve la Organización Corporativa (con diferentes nombres como: City Piper, Ratsmusikant, Stadtmusikant, Zinkenist o Stadtpfeiffer) de los músicos ejecutantes de instrumentos de viento, percusión, etc., en la región de Gran Bretaña.

La Corte germana del Kaiser Friedrich II, tenía en 1217 un cuerpo de Trompeteros Reales con funciones claramente definidas para el ceremonial y los usos militares, incluidos diferentes toques y señales musicales.

Heinrich W. Schwab en su obra: Die Anfaenge des weltlichen Berufsmusikertums in der mittelalterlichen Stadt, afirma que los primeros documentos sobre un Spielleute o grupo de músicos de viento, datan del 10 de octubre de 1265, cuando en Braunschweig, los Duques Albrecht y Johann, organizaron estos grupos y definieron la instrumentación que debían tener.

3. En lo que respecta a las Bandas de Ciudades (Municipales), sabemos que surgen y se desarrollan Bandas en Wismar (1272), en Luebeck (1280) y en Rostock (1285).

A fines de 1288, el Conde Pedro de Ebersdorff instituye, en la ciudad de Viena (Austria), la famosa Nicolaibrüderschaft (Hermandad de San Nicolás) una de las primeras confraternidades o hermandades profesionales de músicos municipales (Stadtpfeiffer) la cual estaba integrada por ejecutantes de pífanos, flautas, violas, tamburos, trompetas y un Director.

La idea se difundió y poco tiempo después comenzaron a aparecer Bandas en varias ciudades

de Europa. Surgen así, Bandas en Bruegge hacia 1297 y en Regensburg el año 1320.

El 23 de noviembre de 1321, Felipe V el Largo de Valois, decide dar el título de Ménétriers (Ministrellos, Ministriles ó Minnesänger, equivalente a profesores) a los músicos que tocaban al servicio de su Corte. También tenemos datos de Bandas de Ciudades en Lueneburg (1335), Hamburg (1387), Koenigsberg (1391), Aachen (1338), Kiel (1340) y Zwickau (1348).

De esta manera, la Confrérie de Saint-Julien des Ménétriers de París, llega a tener además, su propio Hospital (hospedaje-clínica, característico de la época). Estos grupos tocaban, además, en plazas y lugares públicos con el auspicio de reyes, duques y nobles para el esparcimiento de las comunidades.

En la Edad Media los Sarracenos –como genéricamente, se solía llamar a los musulmanes o

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muslims, durante las cruzadas- importan el Tambor (Tabour) a Europa, y es llamado con la palabra francesa –debido a que el francés era el idioma oficial de las cortes- naccaire, por deformación del vocablo árabe naggara. Una vez allí, es adoptado por los españoles, portugueses, alemanes e ingleses.

El uso de Bandas de viento y percusión por parte de las cortes europeas, viene documentado

desde muy remotos tiempos, incluso con argumentos tan interesantes como los que señalo a continuación: Pedro I de Portugal (1356-1367) …proibiu todos os instrumentos músicos, menos as trombas,

ou trombetas, porque o som estridente e rouco daquele instrumento de guerra era o único que deveria acender o ánimo guerreiro para as arremetidas dos combates, e sobretudo por ser aquele que deveria recordar o do instrumento fatídico que a tradição bíblica nos anuncia como sendo o sinal pavoroso do juizo final…

Y el cronista Fernão Lopes relata que cierta noche, estando ya en el Palacio, el mismo rey

D.Pedro I, de pronto exclamó: …Chamem os meus trombeteiros, os meus tocadores de longa. Acendam os cirios que quero ir dançar nas ruas da minha querida Lisboa...

Las crónicas de la época de D.João I Avis, de Portugal, hijo bastardo de D.Pedro I; se refieren

a las ceremonias del casamiento del rey con Dña.Felipa de Lancaster, hija de D.John de Gaunt, Duque de Lancaster. Estas ceremonias se realizaron en Portugal en el año 1387 y en ellas, la Banda tuvo especial actuación: …o pequeño espaço que vai desde o paço do bispo D.Rodrigo até à Sé estava coalhado de povo em gala. Uma orquestra de trombetas e flautas tocava…

El rey Eduardo I (rey 1272-1307) de Inglaterra, se sirve de los especiales efectos de los tambores para realzar la gran fiesta que ofrece en Westminster Hall en 1306. Su hijo y sucesor, Eduardo II (rey 1307-27), continúa esa tradición y en 1310, designa al oriental Janino el Tamborilero como su Drumer o tamborilero particular.

En el siglo XIV, llega el Tambor a Francia con las tropas inglesas, cuando se produce la invasión de Eduardo III (rey 1327-77) de Inglaterra a Calais en 1347. Quien hace su entrada triunfal con: ...a foison de trompettes, tabours, naccaires et buccines. Este monarca, que dio inicio a la Guerra de los Cien Años, hacía uso de los tambores y timbales para producir efectos de pánico y horror en el enemigo durante las batallas, como lo describe perfectamente, una crónica en verso de la época, alusiva a la batalla de Hallidown Hill contra los Escoceses, citada por Hugh Barty-King en su obra The Drum:

…with pipes, trumpets and tabers there to, And loud clariones thei blew also. Y otra crónica en prosa refiere los mismos hechos:

…then the Englische mynstrelles beaten their tabers and blewen their trumpets, and pipers pipedene loude, and made a great chowte upon the Skottes.

A partir del siglo XIV, el uso del Tambor Sarraceno se generaliza por las diferentes Cortes

europeas para sus usos y necesidades protocolares y militares.

Por esta época, en la ciudad de Lucca, surgió la Compañía de Trompeteros. En Alemania, el rey checo y Emperador Romano-Germánico, de dimensiones paneuropeas – quien se destacó todo por defender el continente europeo contra los turcos- Segismundo de Luxemburgo, (1368 a 1437); concedió a la ciudad de Augusta, en 1426, el privilegio de formar y mantener un cuerpo de trompetistas y timpanistas municipales (Cfr.R.Bonfadini., Le Origini del Comune di Milano. 1897).

Durante los siglos XIV y XV se desarrolló todo un sistema de señales tanto para instrumentos de viento como para tambores; el compositor Clément Jannequin (1475-1560) en su obra La Bataille (1500) recopila y transcribe para coro de voces esos toques militares.

En 1461 un grupo de militares húngaros que viajan a Francia en ocasión de solicitar la mano de

la princesa Madeleine, hija de Carlos VII (El Victorioso, rey de Francia 1422-1461), para su rey Ladislao VII, introduce en este país los Timbales usados para esa época a ambos lados de las cabalgaduras, hecho que causó gran impresión en la población parisina, al punto que el Rey Luis XI, quien asumió la corona ese mismo año, dispuso la inmediata organización de un Cuerpo de trompetistas, tambores y timbales.

Esta práctica se convierte pronto en moda; así vemos como el 24 de octubre de 1541, los

músicos de la Banda que acompañaron al Papa Alejandro Farnesio, gran amante y mecenas de las artes

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llamado Paulo III (1534-49), en la ciudad de Lucca para su encuentro con el emperador Carlos V, a fin de tratar la paz entre Francia y España: ...recibieron un aporte especial de 80 escudos cada uno, para que pudieran comprarse su respectivo caballo para el viaje. (Cfr. E.Rodocanaghi., Château Saint Ange & A.Bertolotti., Speserie segrete e pubbliche de Paolo Terzo.,vol. III).

Y el rey Enrique VIII de Inglaterra (rey 1509-47) envía emisarios a Viena para que adquieran pares de timbales para ser colocados en las cabalgaduras al estilo húngaro. En Portugal, cuentan las crónicas (Cfr.D.Gois.Crón.LXXIX, p.183) que durante la Batalla de Toro, el rey Alfonso V, El Africano (1438-1481): …mandou tocar as trombetas e romper o combate ao principe D.João. Y más adelante agrega: …do seu campo saia um clamor de gritos e trombetas e atabales, chamando os tremalhados a esse aprisco…

7. Organología de las Bandas desde el siglo XVI hasta los comienzos del siglo XVIII Es a partir del S. XVI, cuando podemos referirnos con certeza y precisión a unas Agrupaciones Bandísticas o Bandas que cuentan con una verdadera dotación coherente, bien planificada y bastante estable de familias instrumentales.

Los instrumentos más usados en tales agrupaciones eran:

Dulzaina

Instrumento muy citado en las viejas crónicas pero del cual poseemos poca información. Joannes de Tinctoris (¿1446-1511), ilustre prelado y erudito musical natural de Poperinghe, afirma en sus trabajos teóricos sobre los instrumentos de su época, que la Dulzaina pertenece al grupo de tibias, al igual que las Chirimías. Adicionalmente, dice que posee orificios delanteros y uno trasero, como las flautas de pico. Agrega que con dicho instrumento no se puede ejecutar toda clase de música. Flageolet Al igual que la Dulzaina, se parece a la Flauta de pico; prolifera en Francia durante el S. XVII. Tiene cuatro orificios delanteros y dos traseros, para cada uno de los pulgares. Marin Mersenne (1588-1648), refiere en su Harmonie Universelle de 1636, que este instrumento distaba mucho de ser perfecto; su extensión alcanza dos octavas y existen Flageolets de varios tamaños. Mersenne refiere la existencia de cuartetos de dichos instrumentos. En la literatura musical encontramos algunas obras tales como Vaudeville para Cuatro Flageolets de Arcangelo Corelli y Platée aria de los pájaros, para dos Flageolets de J. Ph. Rameau. Se solían utilizar en las Bandas francesas, acompañados de tambores.

Chirimía (Chalemie o Shawm) Familia de instrumentos de doble lengüeta, de sonido bastante chillón, precursores del oboe; Las Chirimías fueron muy utilizadas durante los siglos XI al XV. Tinctoris, en 1487, nos indica que pueden poseer tres tesituras o registros diferentes, según su tamaño: Dessus o Suprema; Tenor o Bombarda y Contratenor. Es interesante observar que, en los tratados de la época, aparecen nombrados también como Schalmein, Cialamella, chalemie, shawm.

En Inglaterra durante los siglos XV y XVI los Waits, nombre con el cual se llamaba a las Bandas de Músicos Pagados por las comunidades para tocar por las calles en las fiestas y ceremonias y sobre todo, durante la Navidad, solían tocar Chirimías, cornetas, Sacabuches y Flautas).

Las Chirimías tienen ocho orificios, al igual que las flautas de pico. La lengüeta se apoya directamente en un cuivret o tubo metálico que se introduce en la parte alta del instrumento.

Flauta de pico

Las flautas verticales existían desde la prehistoria, luego en la Antigüedad gozaron de gran prestigio y utilización; más tarde solía llamársele también, Flauta Dulce o Blockflöte; es un instrumento con pico y cuyo tubo posee un orificio en la parte trasera y ocho orificios mayores en la parte delantera. Conforma una familia de varios instrumentos señalados por Sebastian Virdung en su Musica Getutscht de 1511 y Silvestro Ganassi del Fontego en su obra La Fontegara de 1535. Los instrumentos integrantes de esta familia son: la Flauta Discante o Soprano en sol; la Contralto, que

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se afina un poco más alto que la flauta tenor, señalada por Johann Friedrich Agricola en su Musica Instrumentalis Deudsch de 1528; la Tenor en do y la Baja en fa. En el siglo XVI se le añaden otros tres instrumentos, Basset, Bajo y Gran Bajo, constituyendo así una familia muy completa de timbres homogéneos. Lully, Bach, Händel y Telemann, entre otros muchos compositores, utilizaron sobre todo la flauta Contralto pero con la aparición de las Flautas Traveseras en el S.XVI, estos instrumentos fueron muy utilizados en las Bandas Militares pero perdieron importancia y finalmente, quedaron en desuso a partir de la segunda mitad del S. XVIII, cuando fueron desplazados por las brillantes y más sonoras Flautas Traveseras,

Flauta de Dos Dedos

Instrumento de uso militar, aparece citado por Guillaume de Machault (¿1300-1377) con el nombre de Flûte à deux dois, posee dos orificios en la parte delantera y uno para el pulgar. Se solía tocar junto con el Tambor, una mano sostenía la flauta y la otra golpeaba con una baqueta el tambor que colgaba sostenido por un correaje.

Pífano

Llamado también, Fifre, Querpfeite, Flauta Suiza o Flauta Campesina. Desde el S. XVI hizo su aparición en las Bandas Militares. De tubo corto y de madera, hacia esa fecha fue modificado su diámetro para darle mayor sonoridad. Difiere de la Flaute d´Allemand, mencionada por Mersenne, en su sonoridad más potente, en su timbre más vivo y luminoso y en su tamaño, más corte y delgado. Junto a los tambores, era instrumento fundamental en las primitivas Bandas de Infantería. Courtaud (Dulcian, Fagot) Ancestral instrumento que hacia 1450, servía de base armónica a la melodía de la Musette, nombre francés de la zampoña. Se le considera como el antecesor del Fagot (italiano: fagotto, alemán: fagott, inglés: basson). En el segundo cuarto del siglo XVI se transforma en el Bajón (Dulcian), un instrumento bastante parecido al actual fagote y al comienzo del siglo XVIII se le dota de llaves suplementarias. Durante el siglo XIX, se le perfecciona notablemente, gracias a los aportes y modificaciones que le dan las familias Buffet en Francia y Wilhelm Heckel en Alemania. Cromorno Conocido también con el nombre de Krummhorn o Crumhorn, Cromorne u Orlo, su nombre significa Cuerno encorvado. Este instrumento que se fabricó en varios tamaños, constituyó una familia de timbres muy usuales a partir del siglo XIV y hasta el siglo XVI. Poseían una lengüeta doble encerrada dentro de una pequeña caja abierta por su extremo superior. De esta manera los labios del instrumentista no entraban en contacto directo con la lengüeta en el momento de la emisión del sonido. La familia completa fue muy utilizada y estaba integrada por cinco miembros, llamados: Exilent, el más agudo (con una tesitura de una octava desde do a re); Soprano (de sol grave a la); Contralto-Tenor (de do grave en clave de fa, a si); Bajo (de fa grave a mi) y Contrabajo (de Si bemol grave o re a do o mi).

Bombarda Desde la Edad Media existía la Chirimía delgada y grande de siete orificios. A partir del siglo XV y durante el XVII se construyó como Bombarda, en siete tamaños diferentes. Como vemos, es una especie de Chirimía a la cual se le agrega un pequeño tubo metálico o tudel al estilo del fagote, en el cual se inserta la lengüeta. La caña se solía introducir en la boca hasta el apoyo labial; su sonido resultaba rígido, será más tarde, a partir del nacimiento del oboe con la Bombarda Discanto de Jean Hotteterre († en 1678), cuando los labios comienzan a influir en la formación del sonido. Las Bombardas se usaron en las Bandas junto a los cromornos y como timbres complementarios. Michael Praetorius señala que la Gran Bombarda Bajo podía descender hasta un Fa3.

Gaita

Llamada también, Cornamusa o Bagpipe, instrumento de origen muy antiguo, aproximadamente, desde el siglo X tenemos noticias de su existencia. Consta de un odre, bolsa de cuero o fuelle que sirve de depósito de aire; una boquilla para inflarlo, un canal de aire y un tubo melódico taladrado con orificios llamado caramillo y dos bordones o roncones, que suelen suministrar un acompañamiento, uno con la fundamental en octava inferior y otro con la quinta o decimoquinta respectivamente. En ellos, la presión del aire se regula con el brazo del ejecutante. Suele usarse aún en nuestros días, en las Bandas Escocesas de Infantería y también en España y Portugal, entre otros países.

Cornetas

Instrumentos que funcionaban como Trompas Naturales en las cuales se perforaban orificios para lograr una mayor cantidad de sonidos. Durante los siglos XIII al XVII las más conocidas eran llamadas Cornets

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à Bouquin y representaban junto a los tambores, los más genuinos instrumentos de uso militar. Solían usarse: la Corneta Soprano sin llaves; la Corneta Contratenor y la Corneta Bajo. También existía un raro ejemplar llamado Corneta Recta o Muda. Las Cornetas Curvas negras, eran construidas inicialmente de madera y solían forrarse en cuero. Tenían una extensión de 2 a 3 octavas y su sonido era suave y algo impreciso en la afinación.

Serpentón

Marin Mersenne en 1636, añade un cuarto instrumento a la familia de las Cornetas, se trata de una Corneta Contrabajo que, por su forma que imitaba los repliegues de las serpientes, recibió el nombre de Serpentón. Su extensión era desde el Si bemol Grave en clave de fa, hasta el Si bemol 1.

Trompone (Sacabuche)

Para los sonidos más graves del Contratenor, se utilizaba la Tuba Ductilis, Pommer, Bombard o Bombart, llamada Trompone en Italia, Sacque-boute en Francia y Sacabuche en España. Llamado Trompone, en Italia; se le conocía también con el nombre de Sacabuche, Sackbut, Saqueboute, Posaune, o Trompeta Armónica. Cumplía la función de bajo en toda clase de conjuntos a partir de fines del siglo XIV y hasta el siglo XVII. Michael Praetorius en su Organographia de 1619, nos dice que existían cuatro tipos de diferentes tesituras: Alt Posaun en Si (si2, re5); Cememe Oderrechte Posaun en Mi (mi2, la4); Quart Posaun en La (la4, do4) y Octav Posaun en Mi (mi1.la3). De dicho instrumento derivó también, otro original Trompone llamado de Boca o Campana en forma de Serpiente.

Clarines y Trompetas

A partir de los Cuernos naturales y de las Luras de la Edad de Bronce se desarrollaron cuernos totalmente confeccionados de metal, según los modelos de los cuernos animales. En la Edad Media existía la Gran Tromba o Añafil y la Pequeña Trombetta, ambos instrumentos de forma recta. A dichos instrumentos se les plegó el tubo para facilitar su protección, ejecución y movilidad. A partir de allí, surgieron clarines (Clarini) y trompetas fabricadas en distintos modelos y metales para usos rituales y ceremoniales que están reseñados por las más antiguas y variadas crónicas. Posteriormente, se les perforaron orificios para producir más sonidos, luego se modificó la forma, longitud y grosor de los tubos para obtener una mayor variedad de timbres y sonidos.

Tambor

Deriva del tabor o tabur de la Edad Media, el cual a la vez, deriva de un instrumento oriental tabir, instrumento de dos membranas muy utilizado para la guerra y la danza. El Tambor Militar como tal, ya hemos visto como se populariza a partir de la llegada de Eduardo III a Calais. Se le fabricó de muy variadas formas y modelos; M. Mersenne, habla de tambores de caja cuadrada, triangular y otros. A partir del siglo XVII el Tambor presenta la forma actual: un tubo cilíndrico de madera o metal, cuyas bases se encierran con unas membranas de piel, adaptadas por medio de aros de metal o madera. Unas tiras de metal u otros materiales permiten modificar la tensión de las membranas alterando, de esta manera, su afinación. Se le fabrica en varios tamaños que permiten diferentes registros sonoros.

Timbal Llamados también, Atabales, que derivaban de las pequeñas nácaras militares orientales introducidos por los árabes en la Edad Media, durante el siglo XI. Los modelos más usados posteriormente, fueron introducidos en Francia por los húngaros en 1461. Originalmente, se usaban junto a los Clarines y Cornos Naturales en las Fanfarrias o Bandas de Caballería para facilitar su transporte y como instrumento caballeresco, ceremonial y cortesano. En el siglo XII se le adaptaron mecanismos de llaves para regular la tensión de las membranas o cueros; mecanismo que se perfeccionó hasta permitir una afinación bastante definida.

* * * * *

Muy pronto, las Bandas Reales fueron creciendo en número de integrantes y aparecieron las Bandas

Militares organizadas con el propósito específico de inspirar a los Soldados (combatientes profesionales a sueldo) en el campo de batalla e imprimirle mayor organización y majestad al despliegue de las tropas y cuerpos armados.

En 1543, el rey Francisco I de Francia (rey 1515-47), organiza la Grande Écurie, integrada por

trompetas, cornos de caza y oboes; además, establece que cada grupo o regimiento de mil hombres, debería estar precedido y tener su Pequeña Banda integrada por 4 tambores y pífanos (Cfr.Du Belley, Essai sur les instruments., París 1870).

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Instrumentos como Bombardas, Sacabuches o Trombones, Cornos o Trompas, Trompetas,

Cromornos, Discantos, Chirimías, Gaitas y Dulzainas; acompañados por Tamboriles y Tambores, aparecen frecuentemente reseñados en las crónicas, pinturas y grabados correspondientes a las diferentes bandas militares desde la Edad Media hasta el Siglo XV.

Si bien la música de estos instrumentos era suficiente para los efectos del servicio y la campaña, era también, demasiado simple y restringida.

Para la ejecución de obras y composiciones de mayor importancia desde el punto de

vista formal musical, aunque dentro del carácter épico y marcial, las nuevas y grandes marchas militares, himnos y otras obras del mismo género que se escribirán a partir del S. XVI y sobre todo, a mediados del S. XVII, se requerirá una agrupación musical más numerosa y completa, lo cual estimulará la investigación, desarrollo e incorporación de nuevos y mejores instrumentos.

Vale la pena mencionar como ejemplo, las obras: Almand y Gaillard del compositor inglés William Brade, nacido en 1560 y quien durante su carrera compuso música para diversas cortes europeas y desarrolló una importante labor en Copenhague y Hamburgo. Otros compositores como Aurelio Bonelli, contemporáneo de Brade, nacido en Parma, es autor de Athalanta, famosa Tocatta para Metales; y también, Giovanni Martino Cesare (c.1590-1667), Christian Erbach (c.1570-1635), Valentin Haussmann (c.1570-1614), Isaac Posch (m.1622), Paul Peuerl (1570-1613), Samuel Schaeidt (1587-1654) Johann Hermann Schein (1586-1630), Johann Vierdanck (1605-46) y Melchior Vulpius (c.1572-1615), compusieron interesantes obras para la ceremonias y el servicio, que aún se conservan y han sido grabadas por diferentes grupos.

También Johann Pezel, nacido en Glatz en 1639, es autor de una hermosa Suite para Instrumentos de Metal.

Y Roland de Lassus (1532-1594), más conocido como Orlando di Lasso, escribió en 1568 un

Motete con el nombre de Providebans Dominum para cinco cornetas y dos trombones, el cual se tocó especialmente, en la ceremonia de bodas del príncipe Guillermo de Bavaria con la princesa Renée de Lorraine.

Sabemos, con bases documentales, de la existencia de una Banda Militar en 1646, según el

modelo que había sido establecido en Francia por Francisco I en 1543, cuyo nombre era Brandenburgerischen Dragoner y consistía también, en un grupo de cuatro redoblantes y cuatro Schalmeipfeiffer, instrumento de viento, desarrollado a partir del Discant pero de cuerpo más delgado y sonido más refinado.

Gottfried Reiche, compositor que nació en Weissenfelsen en 1667, escribió también varias Sonatas para Grupo de Metales y Anthony Holborne, músico de la reina Isabel I de Inglaterra, publicó en 1699 una importante colección de Piezas para Grupo de Instrumentos de Metal. El pintor Horace Vernet, entre otros, nos ha dejado una interesante documentación gráfica en su cuadro de La Batalla de Fontaine (1645), obra en la cual podemos apreciar la muerte de un timbalero real.

En Francia, durante el reinado de Luis XIV (1643-1715), el célebre compositor Jean-Baptiste Lully (1632-1687) escribió sus primeras marchas militares, ceremoniales y obras para banda, utilizando pífanos, oboes, trompetas e introdujo una suerte de flauta transversal pero aún muy imperfecta.

Hacia 1650, el rey Luis XIV estableció Les Grands Hautbois, un ensamble de vientos integrado

por doce músicos ejecutantes de oboes soprano, alto y tenor; dos fagotes; dos cornetas y una especie de castañuelas (bones). Promovió además, otra Banda Montada llamada Les Trompes du Roi. Años más tarde Luis XIV, encarga de la dirección de la Grande Écurie ó Banda Real, al compositor André Philidor (c.1647-1730) quien recibe la tarea de revisar y confeccionar un nuevo repertorio musical ceremonial; como resultado de este trabajo, aún quedan en la Biblioteca de Versalles más de 300 Suites escritas para trompetas, cornos de caza y oboes. Esta agrupación, integrada por cornos de caza y timbales, aún existe como símbolo de tradición; viste uniformes de la época y suele presentarse en ocasiones muy solemnes. En su repertorio figuran: La Marche Royale de Jean-Baptiste Lully; Fanfares pour cors et timbales del Marqués de Dampierre; La Reine Marie-Antoinette (Anónimo); Le Menuet de laReine (Anónimo), entre otras muchas obras.

En 1685 Charles II de Inglaterra (rey 1660-1685), ordena contratar Doce Oboes para la Banda de la

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Compañía de King´s Regiment of Foot Guards. Se hizo famoso en 1688, John Shore (¿1670-1752), inventor del Diapasón (Tuning-fork), a quien Jacobo II -Estuardo (rey de Escocia 1437-60), había designado Trompetista del Rey.

8. Los Grandes cambios a partir del Siglo XVIII

Sin dudas, el proceso de transformación y mejoramiento de los instrumentos avanzaba a pasos decididos, en el año 1700, en Nüremberg, Alemania, el músico y constructor de instrumentos Johann C. Denner (1655-1707), da la forma conocida al Clarinete, al cual le añade el cuerpo cónico llamado Campana; lo cual incidirá en mejorar notablemente, su sonoridad.

A partir de la Revolución Industrial del S.XVIII, la industria de fabricación de instrumentos también tomará cuerpo y se producirán más y mejores instrumentos.

Este hecho dará lugar a la aparición de organizaciones musicales más complejas y completas que incorporan los nuevos y más efectivos instrumentos.

Surgen así, las Modernas Bandas Militares, a las cuales se les llamará también: Charangas, Fanfares, Military Bands, Harmoníes, Koninklijke Militaire Kapel, Königliche Militär Kapelle, Musique Militaire o simplemente, BANDAS.

Estos grupos, desde sus orígenes, fueron agrupaciones principalmente, funcionales, esto es, concebidas para el Servicio y el Entretenimiento.

Este íntimo nexo de las Bandas con las actividades epico-rituales y recreativas es sumamente importante, ya que ello va a permitir el desarrollo y mejoramiento consecutivo y permanente de estas agrupaciones, gracias al apoyo institucional y permanente de las Autoridades que requerirán de sus servicios.

El mismo fenómeno ocurrirá con los Wind Ensembles (Consorts) o Grupos de Instrumentos de Viento de Cámara, cuyos orígenes los encontramos en los primeros tiempos del Renacimiento y su desarrollo se realiza a partir del mismo esquema, esto es, de la producción de Música Funcional (Danzas diversas, Casaciones, Serenatas, Divertimentos, etc.) hasta lograr progresivamente, otros estamentos de altos valores artísticos y estéticos.

En 1724, bajo el reinado del emperador Federico Guillermo I de Prusia (el Rey Sargento 1713-40), se establece la primera Escuela de Música Militar en Berlín, bajo la dirección de Gottfried Pepusch; para esta época la instrumentación militar más usual era: oboes, fagotes y cornos; luego se añadirá la enseñanza de los clarinetes. (Cfr. David Whitwell, The History and Literature of the Wind Band and Wind Ensemble, 1984/ Mark Reimer, The Evokution of Wind Musik in Germany, 1994). Desde 1726, George F. Händel, quien se había trasladado y establecido en Inglaterra, escribe varias obras para las incipientes Bandas Militares Británicas, integradas con la participación de músicos ingleses y otros extranjeros que se importaban para tales fines. Entre estas obras destaca la famosa Marcha para el Regimiento Real de Granaderos, que luego incluyó en su ópera Scipio.

En 1737 se constituye la Banda del Reggimento di Piemonte y un poco más tarde, la del Reggimento di Saluzzo.

En 1742 se crea una Banda de Música para la Guardia de Coldstream, la cual es ampliada el 16 de mayo de 1785, cuando se le dota de los siguientes instrumentistas:

Dos oboes, Cuatro clarinetes, Dos fagotes, Dos cornos, Una trompeta y Un serpentón, instrumento de registro bajo con forma de ofidio.

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En 1749, G.F. Händel compone su famosa Suite: Music for a Royal Fireworks para 24 oboes, 12 fagotes, 3 trompetas, 3 cornos, timpani, percusión y bajos; obligando de esta manera, a que se constituyera una formación musical más numerosa y completa. La Banda del Reggimento di Monferrato se crea en 1752 y dos años después en 1754, la del Reggimento dei Fucilieri. Estas bandas estaban integradas básicamente por pífanos, tambores y trompetas. Luego se le agregarán oboes y cornos.

Las Bandas Turcas o Albanesas de esta época, estaban compuestas por un número promedio de 15 músicos que tocaban clarines, fagotes, trombones, triángulo, platillos y bombo.

Una de las más importantes transformaciones sucede en 1763, cuando el Emperador Federico El Grande de Prusia (rey 1740-86), organiza su Banda Imperial que marca las pautas para la Banda Moderna. Su orgánico será: 2 oboes, 2 clarinetes, 2 cornos, 2 fagotes, 1 flauta, una o dos trompetas, contrafagote y serpentón.

El Emperador además, encarga varias obras para su banda a los compositores: Franz Joseph Haydn, Wolfgang Amadeus Mozart, Carl Philipp Emanuel Bach, Carl Ditters von Dittersdorf, Luigi Cherubini, Ignace Pleyel y el joven Ludwig van Beethoven entre otros.

Carl Philipp Emanuel Bach, escribe en Berlín de 1775, tres Marchas; una en Fa (Wq. 187, N°1), otra en Re (Wq.185, N°1) y la última en Do (Wq.185, N°2), por encargo del Emperador Federico El Grande.

En 1780 las agrupaciones de instrumentos de viento están definidas y en esta fecha Wolfgang Amadeus Mozart escribe su famosa Serenata en Bb, K.361 conocida por nosotros como la Gran Partita para 2 oboes, 2 clarinetes, 2 cornos di bassetto, 4 cornos, 2 fagotes y contrafagote.

En esta segunda mitad del S.XVIII y como consecuencia además, del gran auge en la demanda y construcción de instrumentos musicales, se logran nuevos parámetros de calidad sonora, derivados de los materiales que se utilizan, de la tecnología en el perfeccionamiento de los mecanismos y llaves con los cuales se les dota para mejorar y facilitar su ejecución y consecuentemente, la calidad y precisión en la afinación de los mismos, los cuales se construirán cuidadosamente, poniéndolos en condiciones de responder a las nuevas exigencias técnicas y sonoras. Se cuenta pues, con una agrupación musical de instrumentos de viento bien conformada y equilibrada en sus timbres.

En líneas generales, las Bandas Militares para esta segunda mitad del Siglo XVIII solían integrarse así:

Flautines o piccolos, Flautas, Oboes, Clarinetes (de varios tipos), Fagotes y contrafagote, Cornos, Cornetas o trompetas, Serpentones, Trombones y oficleides,

Apoyados por tambores, chinescos, platillos de diversos tamaños, timbales, panderos y triángulos, instrumentos estos últimos, que representaban la Moda Turca.

En esta época comienzan a surgir también, los Grandes Transcriptores para grupos de instrumentos de viento, uno de los más famosos es Carlo Andrea Goepfert (1768-1818), quien además de muchas composiciones propias y de ser virtuoso del clarinete en la Orquesta de la Corte de Manheim, realiza importantes transcripciones de obras de otros compositores famosos. Es notable su versión de La Clemenza di Tito para 2 oboes, 2 clarinetes, 2 cornos, 1 trompeta y dos fagotes, el segundo de los cuales estaba reforzado por el contrafagote o el serpentón.

En 1785 el Duque de York autoriza la ampliación de la Gran Banda para la Guardia de Coldstream integrada por 12 ejecutantes de instrumentos de viento y un grupo de percusionistas negros ataviados con exóticos uniformes para tocar los instrumentos turcos de moda (platillos, chinescos, etc). Y designa como primer director de esta Banda al músico de ascendencia germana Christopher Eley, quien la dirigirá hasta 1800.

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En 1789 se crea la Musique de la Garde Nationale en París, Francia, con 45 músicos de instrumentos de viento y percusión bajo la dirección del músico Bernard Sarrette (1765-1858). Estos acontecimientos marcan el comienzo del movimiento de creación de Grandes Bandas Militares.

En 1790 el maestro francés François Gossec (1734-1829), compone su conocida Marcha Lúgubre pour Orchestre Militaire.

A partir del 9 de octubre de 1791, como consecuencia del conflicto con los austroprusianos, la Garde Nationale de París debe trasladarse a la frontera francesa. La Musique de la Garde continúa en París y la Municipalidad asume el pago de los soldados que la integran.

Franz Joseph Haydn (1732-1809), el gran Maestro del Clasicismo, escribe en 1792, durante su visita a Inglaterra, la marcha Príncipe de Gales y en 1793, F. Gossec su Sinfonía Militar en Fa. Tres años más tarde, F.J. Haydn compone March for the Derbyshire Cavalry Regiment. En 1794 se amplía la Banda Británica del Grenadier Guards, Regimiento Real de Granaderos, la cual pasa a tener: 1 Flauta, 6 clarinetes, 3 fagotes, 3 cornos, 1 trompeta, 2 serpentones y 4 Turkish Music (bombo, platillo, chinesco y pandereta).

Y en Francia, el 14 de julio de 1794 el número de músicos que se presentaron para tocar juntos fue de varios centenares. A partir de 1795 la Musique de la Garde definitivamente es sedentarizada en la Capital y le asigna como centro de operaciones el aún existente, Conservatorio de París, donde sus integrantes se formaban musicalmente.

Las Bandas de los Regimientos de Napoleón contaban con cuarenta y dos músicos: Un piccolo, Un clarinete piccolo en Mi b, Dieciséis (16) clarinetes en Si b, Cuatro (4) fagotes, Dos (2) serpentones, Tres (3) trompetas, Cuatro (4) cornos, Tres (3) trombones e Instrumentos de percusión.

En 1795, François Gossec compone para estas Bandas su Obertura Clásica en Do. Y, por su parte, Etienne Méhul (1763-1817) escribe sus Obertura en Do, en Fa y su Sinfonía Militar, obras todas concebidas originalmente, para Banda. Louis-Emmanuel Jadin (1768-1853) compone su Sinfonía para Vientos, además de varias obras para los festivales revolucionarios y H.Jadin, compone su Obertura en Fa.

El 11 de julio de 1798, en Norteamérica el presidente de los Estados Unidos, John Adams (1735-1826), crea The U.S.Marine Band, la más antigua de las organizaciones bandísticas norteamericanas que aún existen. Su primer director será William Farr. 1799 es el año de fundación de la más antigua Banda Civil de los Estados Unidos, se trata de la Temple Town Band (New Hampshire).

9. Nuevas transformaciones y repertorio a partir del Siglo XIX:

Hacia las grandes trascripciones

Pero será indudablemente, a partir del siglo XIX, cuando se produzcan los cambios y

transformaciones definitivas en la fabricación masiva de los instrumentos y la realización de importantes trascripciones que le darán a las Bandas su gran período de esplendor, tamaño y repertorio que hoy aún conservan y enriquecen.

En efecto, en 1800 designan en sustitución de Ch. Eley, como Director de la Banda de la Guardia de Coldstream, al músico John Weyranch, quien ocupará el cargo hasta 1814. Y en Estados Unidos, Charles S. Ashworth sustituye a W. Farr en la dirección de The U.S.Marine Band.

A partir de entonces la cadena de sucesiones se hace tradicional, habitual y no se interrumpe; las Instituciones Bandísticas comienzan a gozar de la estabilidad y continuidad que representará su progreso y mejoramiento constante.

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El mismo año 1800, Luigi Cherubini escribe Deux marches pour instruments à vent; en 1803 estrena su famosa composición épica Marche pour instruments à vent, pour la musique du Baron de Braun. Entre 1808 y 1810 escribe tres nuevas marchas de similares características; en 1814 compone Pas rédoublé pour la Musique de la Garde Nationale de París y también, varias Morceaux militaires pour instruments à vent pour les Régiments Prussiens, commandés par le Colonel Witzleben.

Napoleón Bonaparte (1769-1821), siendo Primer Cónsul, el 4 de octubre de 1802 decreta la creación de una Batterie Fanfare y más tarde, ordena la creación de un Escuadrón de Mamelucos. 150 turcos y sirios son reclutados para formar este cuerpo de guardias y es así, como el 25 de diciembre de 1803, los Mamelucos se presentan públicamente, dentro de la guardia imperial con su respectiva Banda de Trompetas y Timbales a caballo.

Por la misma época, en 1806 y siguientes, en Venezuela, sumida en plena guerra de Independencia, goza de mucho prestigio la Banda del Batallón de la Reina. Y la Banda del Batallón de Veteranos, hacia 1812, alcanza gran popularidad en Caracas; esta banda, a partir de la victoria republicana en la Batalla de Maturín se pliega a las tropas patriotas.

En 1809 y 1810 el gran maestro alemán Ludwig van Beethoven (1770-1827), compone sus Tres Marchas Militares para 32 ejecutantes, escritas para la Parada Militar del Ejército de Bohemia. También compone una Polonesa y una Escocesa para instrumentos de viento.

En estas obras, el autor utiliza:

Piccolo, Flautas en fa, Clarinete piccolo en fa, Clarinetes sopranos en do, Cornos y trompas en fa, Fagotes, contrafagote y Percusión.

En 1812, el constructor de instrumentos alemán Iwan Müller, introduce el Clarinete de 13 llaves. Y en 1815, Anton Weidinger y Joseph Riedl, comienzan a experimentar con el uso de válvulas rotatorias para los instrumentos de viento metal.

En 1815 inicia sus actividades en Medellín, Colombia, la Banda creada por el músico francés Joaquín Lamot ó Lamota, quien desde su llegada en 1811 se había dado a la labor de formar un grupo de jóvenes músicos para tales fines.

Durante el período de la Guerra de Independencia en nuestra América, destacarán algunas figuras de la música militar al servicio de la tropas Libertadoras, entre ellos, el Capitán Juan de Dios Agraz (nacido en Villa de Cura, Edo. Aragua, Venezuela en 1790) designado por el propio Libertador Simón Bolívar para ser su Corneta de Ordenes, después de la Batalla de San Mateo y luego durante casi todas sus campañas en el territorio nacional y en la Campaña del Sur. El Libertador, por cierto, le obsequió una boquilla de oro para su corneta. Agraz falleció el 17de marzo de 1888, a los 98 años.

Otros músicos militares que cumplieron funciones similares al lado de Bolívar fueron, el Cabo José Bernabé Dorantes, oriundo de Quibor, Edo. Lara, donde se encuentra su tumba y los también quiboreños, Celestino Castillo, Corneta de Ordenes y José de la Encarnación Soto, Tambor de Ordenes.

En el año, 1815, el violinista y compositor alemán Louis Spohr (1784-1859) publica su muy célebre y conocido Notturno für Harmonie und Janitscharenmusik, Op.34 (Nocturno para banda y MúsicaTurca). En 1816, Venerando Pulizzi es designado Director de The U.S.Marine Band. Y Thomas Willman, es designado en 1818, director de la Banda de la Guardia de Coldstream.

En 1817 Heinrich Stözel y Friedrich Bluhmel patentan el uso de las vávulas para los cornos, fliscornos y trompetas.

Hacia el año 1819, comienza sus actividades el Ateneo Musical y de Enseñanza Banda

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Primitiva de Lliria, España.

Durante estas primeras décadas del S.XIX, el músico alemán residenciado en Portugal, Eduardo Neuparth (1784-1871), destaca como clarinetista y director de varias bandas militares y años más tarde, como director de la Musica das Reais Cavalhariças en la Corte Portuguesa establecida en Rio de Janeiro, Brasil.

Desde el cierre de la Opera Sueca en 1818 y hasta su muerte en 1838, el compositor Bernard Crusell (1775-1838), destacado músico, director y virtuoso clarinetista sueco, asume la dirección de la Banda Militar en Linköping y escribe numerosas obras, arreglos y transcripciones para banda, con y sin solistas.

El 7 de agosto de 1819, bajo la dirección del coronel José María Cancino, la Banda Militar ejecuta la Contradanza La Vencedora en el propio Campo de la Batalla de Boyacá. A su entrada a Santa Fe de Bogotá, una gran Banda recibió al Libertador Simón Bolívar con esta Contradanza, la cual fue repetida numerosas veces, alternada con otra Contradanza llamada La Libertadora, durante el Baile de Gala que se ofreció a los héroes en el Palacio de San Carlos.

En 1820 el compositor italiano Gasparo Spontini (1774-1851) es llamado por el emperador Federico Guillermo III y designado Director General de Música de la Corte Prusiana para cuya banda escribe y transcribe numerosas obras propias y de otros compositores. En 1821 en Venezuela, la Banda de la Brigada de la Guardia, según reseñan las crónicas históricas, ensayaba en la casa del mayor Célis en Barinas, durante los meses previos a la Campaña de Carabobo. En marzo de ese año, en Córdoba, Argentina, se acuerda pagar al Capitán Cayetano Alvarez para que se desempeñe como maestro director de la Banda del Batallón de Cívicos. Ese mismo año, el maestro peruano discípulo de Fray Pascual de Nieves en Lima, José Bernardo Alcedo, compone el Himno Nacional del Perú, el cual es estrenado en el Teatro Principal el 24 de septiembre de 1821 con la presencia del Gral. José de San Martín.

En 1822, al año de haberse estrenado la ópera Der Freischütz de Carl Maria von Weber (1786-1826) el editor Hofmeister de Leipzig, Austria, presenta una trascripción para Harmoniemusik (Banda) de doce de los diecisiete números de la ópera. La instrumentación era: flauta, dos oboes, dos clarinetes, dos cornos, dos fagotes y contrabajo. Al año siguiente, en 1823, el editor Schlesinger de Berlín presenta una nueva trascripción para Banda Militar; esto ayuda a la gran difusión y popularidad de la ópera y su compositor.

El 9 de diciembre de 1824, en su marcha hacia el combate de Ayacucho, la Banda del Batallón Voltígeros acompañaba al general José María Córdoba, con el Bambuco La Guaneña, cuya partitura aún se conserva.

En el mismo año 1824, el compositor alemán Felix Mendelssohn-Bartholdy (1809-1847), estrena su Obertura Militar Op.24 y dos años más tarde, en 1826 C.H. Weber (1786-1826) maestro de Capilla de su Majestad el rey de Sajonia, escribe su Marcia N°8 (Obra póstuma), compuesta para la Sociedad Real de Músicos Ingleses.

Giuseppe Verdi (1813-1901) quien también había sido músico y director de Bandas además de gran compositor, estrena en 1828, su Obertura para Banda. Se destacan en Italia durante estos años, las múltiples e interesantes obras del compositor nacido en Baviera en 1763 y muerto en Bergamo en 1845, Johann Simon Mayr (1763-1845); así como también, las de Gaetano Donizetti (1797-1848), Saverio Mercadante (1795-1870) y Francesco Morlacchi (1784-1841), quienes aportarán a la Banda un importante y variado repertorio de mucha calidad.

Johann Moritz construye en 1829, la primera Tuba para Orquesta y la patenta en 1835.

Thomas Dodworth, Sr y sus cuatro hijos organizan a partir de 1830, la National Brass Band (New York´s Dodworth Band) la cual monopoliza todas las actividades derivadas de la banda: escriben música, la editan, la enseñan, imparten clases de danza, actúan en fiestas, bailes y

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celebraciones cívicas, etc.

Sandalio Callejo, destacado compositor y director, nace en Puerto Rico en 1833. Se desempeñará como Director de Bandas Militares hasta su muerte ocurrida en 1883. En 1833, es designado director de la Banda de Música de Córdoba, Argentina, el maestro teniente Camilo Argüello.

En 1834 Giuseppe Gabetti, escribe su Marcia d´ordinanza per banda e tamburi y dos años más tarde, en 1836, Felix Mendelssohn estrena su Marcha Funeral Op.103 para Banda. Ese año se le da nombre formal a la Musique de la Garde de París.

En 1835, Wilhelm Wieprecht y J.G.Moritz, patentan en Prusia un nuevo mecanismo de pistón denominado Pumpen valve. Ese año en los Estados Unidos, se funda la Boston Brass Band, bajo la dirección de Ned Kendall; muy pronto esta agrupación adquiere gran prestigio y la iniciativa es seguida por la Dodworth Band of New York y la American Band of Providence, Rhode Island. De estas agrupaciones, la más famosa del período anterior a la Guerra Civil fue la Dodworth Band, en ella se destacaron como director Theodore Thomas, el solista de corneta Alessandro Liberati, los bombardinistas Carlos Cappa y D.L. Downing. Esta Banda, formada por Thomas Dodworth Jr. y sus cuatro hijos, fue llamada originalmente, National Brass Band, nombre que le fue cambiado por el del apellido familiar. Los Dodworth tuvieron, como señalamos, un virtual monopolio sobre la actividad de la banda: las composiciones, los programas, las actuaciones en bailes, fiestas sociales y celebraciones cívicas y ejercieron gran influencia definitiva en el establecimiento de la New York Philarmonic Orchestra Society en 1842, con la incorporación de cuatro miembros de la familia en la orquesta y la de Allen Dodworth como su primer tesorero.

En 1836, es creado el Regimiento de Infantería Ligera del Ejército Italiano y en 1848 se funda la Banda Fanfara dei Bersaglieri, adscrita a dicho cuerpo armado. Desde su creación hasta nuestros días, esta agrupación se caracteriza por el uso de sus Sombreros de pluma Gallo centrote y por ejecutar la música sin perder su paso de carrera característica y con una inclinación de 45 grados en los integrantes de las secciones de 16 trompetas, 7 cornetas y 4 trombones; estos músicos además, están respaldados por 4 barítonos, 2 tubas y 3 bajos.

El 30 de mayo de 1837, Gioacchino Rossini (1792-1868) estrena en Fontainebleau sus Trois Morceaux Militaires en ocasión de la boda de S.A. Real el Duque de Orléans, primogénito del rey Luis Felipe I de Francia, con la princesa de Mecklemburg.

En 1839 el francés Auguste Buffet gana la Medalla de Oro en la Exhibición de París, al presentar su Clarinete reformado y mejorado. Por su parte Henri Brod presenta su Cor Anglée (llamado después Corno Inglés por repetición de una traducción errónea del nombre original). Se introduce además, la válvula de pistón Perinet, creada por el constructor francés, de instrumentos del mismo nombre.

Estos pasos son muy importantes dentro de la evolución y mejoramiento de los instrumentos de viento.

Al año siguiente en 1840, y por encargo del Ministro del Interior francés M. de Remusat, el compositor Louis-Héctor Berlioz (1803-1869) estrena su famosa Symphonie Funèbre et Triomphale, Op.15 para Banda (y cuerdas opcionales), como homenaje a las víctimas caídas en la Revolución de Julio de 1830, con motivo del Décimo Aniversario de dicho acontecimiento.

Vale la pena destacar el hecho de que la versión para orquesta sinfónica es posterior a la original para Banda y fue realizada para complacer solicitudes hechas por críticos y amigos al propio compositor. De hecho en la edición original podemos leer: Trauer-und-Triumph- Symphonie, für grosses Militar-Orchester mit Streichinstrumenten und einem Chor ad libitum componirt…

Esta obra marca el Inicio del Movimiento de Composición de Obras Mayores y Sinfonías para Banda, así como la utilización de grandes masas de instrumentistas de viento para la ejecución

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de partituras de características sinfónicas.

En ese año 1840, José María Osorio organiza una Banda en el Estado Mérida, Venezuela.

Dos años más tarde, en 1842, Auguste Buffet y Henry Klose, adaptan al Clarinete de Buffet, el mecanismo que Theobald Böhm (1793-1881) había diseñado para sus flautas, lo cual permitirá una mayor velocidad mecánica, precisión en la digitación y virtuosismo en la ejecución a los instrumentistas.

En 1844, el compositor alemán Richard Wagner (1813-1883) escribe su Trauersinfonie para vientos y Huldigungsmarsch; al año siguiente, en 1845, el belga Adolphe Sax (1814-1849) patenta sus famosos Saxhornos y define las características de los mismos.

Comienza a gestarse la Revolución Instrumental de Adolphe Sax, quien transformará la sonoridad de las bandas con sus novedosos instrumentos.

De inmediato se sienten y evidencian los resultados: Giovanni Longhi, escribe su Marcia Trionfale per i solenni Pontificali in S. Pietro (1846); Giuseppe Verdi, el mismo año, compone su Marcha del Rey Duncan para MacBeth.

Theobald Böhm presenta los nuevos y mejorados mecanismos de sus flautas. Y Adolphe Sax patenta su Familia de Saxofones, instrumentos muy homogéneos y completos que con su timbre revolucionarán definitivamente, la sonoridad de las bandas.

En 1845 el maestro de origen italiano residenciado en Bolivia, Benedetto Vincentti, compone la música del Himno Nacional de dicho país. Y el mismo año, el compositor húngaro residente en Montevideo, Francisco José Debali (1791-1859), compone la música del Himno Nacional del Uruguay.

10. La transformación del Orgánico Bandístico en el siglo XIX

Las consecuencias de la Revolución Industrial, con el invento de las grandes máquinas y la automatización del trabajo, se hicieron sentir de inmediato, en el diseño, creación y producción de los instrumentos musicales, especialmente, los de viento madera, metales y percusión. Tres, son los principales aspectos que marcan un rumbo diferente y peculiar en el Orgánico de las Bandas a partir del siglo XIX.

Son ellos: el desarrollo de los Fliscornos o Saxhornos; el Invento de los Saxofones y Sarrusofonos y el Desarrollo de los Instrumentos de Percusión.

10.1. Fliscornos o Saxhornos

Instrumentos derivados de la primitiva Corneta natural, estos instrumentos construidos de metal y con tubo fijo de forma cónica, fueron llamados también Bugles, Figles, Bügelhorn, Flügelhorn o Saxhornos (nombre que se aplica a los modelos construidos y patentados por el belga A. desarrollado como Bugle de Llaves inventado por Kent en 1820; fueron completados, perfeccionados y patentados por Adolphe Sax en 1845.

La familia completa de Fliscornos o Saxhornos abarca una gran extensión de sonidos y sobre el sonido grave de los instrumentos de registro bajo, reposa la solidez de la Banda, a partir del S. XIX.

El grupo de los Saxhornos es eminentemente, Bandístico, excepción hecha del Saxhorno Bajo (Bass Tuba) que en 1829, con el diseño de Johann Moritz, se convierte en la Tuba Orquestal a

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partir del año de 1835.

Por supuesto que deberán ser tomados en cuenta, los múltiples esfuerzos, investigaciones e inventos que preceden el desarrollo de las válvulas rotatorias, pistones y llaves, los cuales hemos reseñado en capítulos anteriores. Entre ellos destacan, Anton Weidinger y Joseph Riedl en 1815.

Desde 1835 y hasta 1890, esta familia constituía la esencia de casi todas las grandes Bandas en Europa y América. A partir de los modelos patentados originalmente, se construirán variantes de todos los tipos, modelos y tamaños; algunos inclusive, de exóticas formas e insólita cantidad de campanas, pistones y válvulas.

Los integrantes de esta Familia Instrumental, diseñada por Sax - y sus equivalentes, Fliscornos o Bugles- son:

• Fliscorno o Saxhorno Sobreagudo en Si bemol, llamado Piccolo en Si bemol. • Fliscorno o Saxhorno Sopranino en Mi bemol, llamado Piccolo Bugle Soprano en Mi bemol o

Piccolo en Mi bemol. • Fliscorno o Saxhorno Soprano en Si bemol, llamado Bugle contralto o simplemente, Flügelhorn. • Fliscorno o Saxhorno Contralto en fa o simplemente, Althorn en fa. • Fliscorno o Saxhorno Contralto en Mi bemol, es decir, Bugle Contralto en Mi bemol o Altflügelhorn

en Mi bemol (Genis u Onoven). • Fliscorno o Saxhorno Tenor en Si bemol; Bugle Tenor en Si bemol o Tenorhorn en Si bemol. • Fliscorno o Saxhorno Barítono en Si bemol; Bugle Barítono en Si bemol o Barytonhorn en Si

bemol. Fliscorno o Saxhorno Bajo en Si bemol; Tuba Bassa en Si bemol; llamada también Bass Tuba; Euphonium; Tenorbass Tuba o Bombardino.

• Fliscorno o Saxhorno Bajo Grave en fa; o Bombardón en Fa. • Fliscorno o Saxhorno Bajo Grave en Mi bemol o Bombardón en Mi bemol. • Fliscorno o Saxhorno Contrabajo en Do; Bombardón en Do grave; Tuba Contrabajo en Do;

Helicón, Pelicón o en Do. • Fliscorno o Saxhorno Contrabajo en Si bemol; Bombardón en Si bemol grave; Helicón o Tuba

Contrabajo en Si Bemol.

Es importante señalar que durante en 1899, John Philip Sousa rediseñó para su Banda los modelos de Helicones, haciéndolos más adecuados para la marcha militar y las paradas, lo cual logró proyectando su campana hacia adelante por encima de la cabeza del ejecutante. Esos modelos llevan su nombre: Sousafonos.

10.2. El Invento de los Saxofones y Sarrusofonos

Adolphe Sax (1814-1894), no sólo aporta el perfeccionamiento de los diferentes modelos de Fliscornos o Bugles, sino que, en Bruselas durante el año 1841, inventa el Saxofón; instrumento que revolucionará el rendimiento sonoro y el repertorio de las agrupaciones Bandísticas. Como señala, Jaap Kool (1931), en algo menos de cien años (1930), más de un millón de saxofones se producen para todo el mundo, de los cuales 820.000, estaban destinados a América.

El 1 de marzo de 1845, Sax propone al gobierno francés la reorganización de sus Bandas, reemplazando los instrumentos técnicamente imperfectos por sus nuevos modelos, lo cual además, le permitiría contar con Bandas algo más reducidas en personal y más rendidoras en sonoridad y afinación, es decir, económicamente más rentables.

Utiliza en sus instrumentos un principio sonoro bastante original, cual es poner en vibración una columna de aire contenida en un tubo cónico por medio de una lengüeta batiente semejante, sino idéntica, a la del clarinete; aunque la del Saxofón es más fuerte, más ancha y un poco más elevada en el centro.

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La familia de los Saxofones se presenta con una voz totalmente, nueva dotada de su propia expresión, rica y penetrante con un timbre algo velado que le da cierto parecido con el violoncelo de las cuerdas, el corno inglés de los oboes y el clarinete, pero con una sonoridad más intensa. Ocho miembros integran regularmente, esta familia, son ellos del agudo al grave:

• Saxofón Sobreagudo en Si bemol (muy raro) • Saxofón Sopranino en Mi bemol • Saxofón Soprano en Si bemol • Saxofón Alto en Mi bemol • Saxofón Tenor en Si bemol • Saxofón Barítono en Mi bemol • Saxofón Bajo en Si bemol • Saxofón Contrabajo en Mi bemol

Usualmente, de estos saxofones se utiliza más comúnmente, el pequeño coro integrado por un cuarteto de dos Saxofones Altos, un Saxofón Tenor y un Saxofón Barítono. En las Orquestas de Jazz (Stage o Big Band) y en las de Baile (Dance Band) se agrega otro Saxofón Tenor. Los Grandes Coros de Saxofones, se completan con los otros miembros de la familia y solo muy ocasionalmente, se conocieron: el Saxofón Sopranino en Fa, el Soprano en Do, el Alto en Do, el Tenor en Do, el Barítono en Fa y el Bajo en Do.

En la literatura bandística de fines de siglo XIX y comienzos del XX, era usual encontrar partes para Saxofón Soprano, Saxofón Bajo y Saxofón Contrabajo.

Sarrusofonos

Debemos mencionar otra familia de instrumentos, los Sarrusofones, construidos en cobre y que llevan el nombre de su inventor y diseñador, el músico francés y director de Bandas Militares, M. Sarrus, quien se desempeñó como director de la Banda del 13° Regimiento.

Estos instrumentos fueron patentados y cedidos los derechos de su construcción al fabricante francés P.L.Gautrot en París, el 9 de junio de 1856.

Su aspecto es en algo parecidos a los viejos Oficleides pero con la curvatura, disposión de llaves y digitación similar a los saxofones. Su sonido se produce por la vibración de la columna de aire a través de una lengüeta doble, como en el oboe y el fagot. Estos instrumentos cayeron pronto en desuso y olvido ante los prácticos y modernos saxofones, que les aventajaban en sonoridad y facilidad de ejecución.

Los integrantes más conocidos de esta familia, visiblemente calcados de los Saxofones, son: el Sopranino en Mi bemol, el Soprano en Si bemol, el Contralto en MI bemol, el Tenor en Si bemol, el Barítono en Mi bemol, el bajo en Si Bemol y el Contrabajo en Si bemol o Do.

Los Sarrusofones se usaban principalmente, en las Bandas francesas y españolas. Hacia 1915 la empresa S&G Conn, construye en los Estados Unidos 200 Sarrusofones para el Ejército estadounidense pero casi no se usaron ante la dificultad de conseguir músicos ejecutantes para dichos instrumentos. Sin embargo, vale la pena notar que algunas orquestas sinfónicas utilizaron Sarrusofonos Contrabajos en Do para reemplazar, con ventaja, a los primitivos modelos de Contrafagotes (Saint-Saens y Massenet). Adicionalmente, recuerdo que durante mi actuación como Director de la Banda Nacional de Colombia, tuve la ocasión de tomar contacto directo con un Sarrusofono ejecutado por el profesor Sergio Becerra.

10.3. El Desarrollo de los Instrumentos de Percusión

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Desde fines del siglo XVIII, se puso de moda la música turca y oriental y los usos turcos y orientales en la música. Su influencia llega a afectar la construcción de instrumentos de tecla a los cuales se agregan pedales especiales para lograr efectos de campanillas. Con las nuevas maquinarias, en el siglo XIX se trabaja cada vez más y mejor los metales; ello influye en el desarrollo de la tecnología para la fabricación de nuevos modelos e instrumentos musicales. La transformación es notoria a partir de los nuevos Tambores; Timbales, dotados desde 1872 (Pettrich & Queisser, Dresden) de mecanismos tensores, pedales y otros mecanismos afinadores; Platillos; Glockenspiel, Campanólogo o Juego de Campanas (desarrollado a fines del siglo XIX) y muchos otros instrumentos.

Así pues, en las Bandas de Marcha, se agregan también, delante de los demás músicos, unos instrumentos que estaban conformados por una especie de árbol o pagoda con travesaños, de los cuales penden láminas metálicas o pequeñas campanillas fijadas a un asta que terminaba en una suerte de sombrero, techo o sombrilla al estilo oriental.

Las láminas y campanillas llamados Chinescos, Carrillón Chinois, Jingling Jotinny o Turkish Crescent, sonaban cuando se sacudía el asta al ritmo de la música. Precedían al resto de la Banda, acompañados de Triángulos, Platillos y Panderos.

Además del Chinesco, se añadió la Lira, una armazón con la forma de ese clásico y tradicional instrumento en el cual se clavaban, horizontalmente, unas planchas o laminillas de acero de pequeño tamaño, templadas para producir sonidos de diferentes alturas o tonalidades. Mientras el músico, con la mano izquierda sostenía el palo que servía de base a la Lira, con la mano derecha golpeaba por medio de una maceta las planchas o laminillas metálicas.

11. Evolución de las Bandas y del repertorio Bandístico durante la segunda mitad del Siglo XIX ** Nota: Antes de continuar, quisiera recomendar al lector interesado en la historia particular de las Bandas en Venezuela, la lectura del espacio escrito bajo este título por el musicólogo José Peñín en la Enciclopedia de la Música en Venezuela, publicada en Caracas por la Fundación Bigott. Allí encontrará datos y detalles muy interesantes, así como una completa relación de fuentes bibliográficas y otros trabajos que pueden ser consultados en esa materia específica, razón por la cual he preferido remitirles a tan importante y especializado trabajo.

En el año de 1846, el director de la Prussian Military Band, el famoso músico, director y compositor Friedrich Wilhelm Wieprecht (1802-1872), selecciona un grupo escogido de compositores y transcriptores, quienes se dan a la tarea de preparar grandes adaptaciones de obras sinfónicas, fantasías de óperas famosas, marchas y nuevas composiciones para Banda, las cuales son incluidas en los siete volúmenes del

Köningliche Preussische Armee Märsche: …für die jetzige Stimmenbesetzung…(para la Instrumentación de la época).

Estas obras están contenidas y publicadas en el Booses Journal of Band Arrangements e

instrumentadas para una Banda integrada, casi siempre, por cuarenta y dos (42) ejecutantes, distribuidos según el siguiente orgánico:

· Flauta Píccolo en Re Bemol, · 2 Oboes, · 2 Fliscornos Sopranos en Si Bemol, · 2 Fliscornos Altos en Mi Bemol, · 2 Waldhorns en Mi Bemol, · 2 Tenorhorns en Si Bemol, · Euphonium (Tuba Barítono), · Clarinete Píccolo en La Bemol, · 2 Clarinetes en Mi Bemol, · 4 Clarinetes Sopranos en Si Bemol,

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· 2 Fagotes, Contrafagote, · Tritonikon, · Sarrusófonos, · Tubas Bajos (Bombardones y Helicones), · 2 Trompetas en Mi Bemol, · 2 Trompetas en Si Bemol, · 2 Trombones Tenores, · 2 Trombones Bajos, · Tambores Militares, Bombo y platos (cymbal).

Hacia la mitad del Siglo XIX, nos encontramos entonces, con una Banda integrada por familias de instrumentos realmente completas y complementarias, cuya sonoridad y características le permitían ya enfrentar partituras exigentes, aún ante los rigores y dificultades de presentarse al aire libre.

En 1848, la Banda de los Granaderos Británicos se expande a treinta y ocho (38) músicos. Se le

agregan Oficleides y Bombardones para sustituir a los viejos Serpentones que, para 1850, ya quedan totalmente relegados de la Banda y en desuso.

En Febrero de ese año 1848, el sargento Jean-Georges Paulus, Trompeta Mayor de las Doce

Trompetas de la Garde Républicaine; nacido en Hagenan el 5 de agosto de 1816 y quien se había formado como integrante y director durante cinco años, de la Banda del barco Hercules, es designado por el Coronel Raymond para fundar y dirigir la Bande de la Garde Civique de París (Guardia Civil), agrupación que luego se llamará Musique de la Garde Républicaine.

E. Mosell presenta en ese año, su Marciata d´Ordinanza per tutte le Bande Civiche della

Toscana. Ese mismo año F. Gossec estrena su Overtura Clásica en Fa para Banda. En 1849, el maestro Inocente Carcano (m.1904) nacido en Italia, se radica en la Argentina y

allí, funda la Sociedad Filarmónica y la Banda de la Universidad de Córdoba. El Período de Oro de las Brass Bands o Bandas de Metales en Gran Bretaña, y los Estados

Unidos se inicia a partir de 1850, cuando florecen las fábricas de nuevos instrumentos y la afición por tocarlos. En esta época numerosos maestros de Banda europeos, principalmente, italianos, se trasladan y establecen en ese país de Norteamérica. Estas Bandas de Metales solían estar integradas por 1ª y 2ª Corneta (o Saxhorno) en Mi bemol, 1ª y 2ª Corneta (o Saxhorno) en Si bemol, 1º y 2º Fliscorno (o Saxhorno) Alto en Mi bemol, 1° y 2° Fliscorno (o Saxhorno) Tenor en Si bemol, Fliscorno (o Saxhorno) Barítono en Si bemol, Bajo en Mi bemol, Bombo, Caja y Paltillos. Ocasionalmente, afirman Robert Garofalo y Mark Elrod (1985), solían agregar Bajo en Si bemol y posteriormente también, Píccolo en Re bemol, Flauta en Do, Clarinete Píccolo en Mi bemol y Clarinete Soprano en Si bemol.

Durante el período de la Guerra Civil Americana se forman muchas Bandas, algunas de ellas

ataviadas con muy exóticos uniformes. Importantes obras, básicamente marchas, son escritas por maestros tales como: Claudio Graffulla, director de la Banda del 7° Regimiento de New York; Gustavus Ingalls, Thomas Coates, George Ives y en especial, Patrick Gilmore (1829-1892).

El 18 de febrero de 1850, se funda la Banda Filarmónica dos Artistas Funchalenses en la Isla de Madeira, Portugal.

En el año 1852 el fagotista portugués de ascendencia alemana, Augusto Neuparth, introduce el Saxofón en Portugal. En París, Francia, el 10 de mayo, se realiza en el Campo de Marte el Acto de presentación de la Bandera; para ello, la Banda de la Garde de París reúne una gran masa de músicos ejecutantes para tocar la Misa de Adolphe Adam. Tal actuación resultó tan exitosa que mereció la felicitación pública del Mariscal Magnam, Gobernador de París; a partir de ese momento la Banda se convierte en un grupo artístico de gran reputación, gracias al trabajo del infatigable J.G. Paulus.

En 1853 nace, Francisco Calderón en Quillota, Chile; se destacará como Maestro de Banda de

los Guardias Nacionales y fecundo compositor. En ese año se radica en el Paraguay el músico francés Francisco Sauvegeod de Dupuis (n.1813), quien se dedica a reorganizar las bandas militares en ese país y compuso la música del Himno Nacional Paraguayo en 1858.

En 1854, Les Cent-Gardes del Segundo Imperio francés, tendrán su Banda Montada que luego

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se consolidará como la Fanfare de Cavalerie, aún existente y cuyos antecedentes los encontramos en la agrupación creada por Paulus en 1848. Ese año, en los Estados Unidos de Norteamérica es muy famosa la Banda que había sido fundada por Thomas Dodworth, se destacan en ella los hermanos Harvey B., virtuoso cornetista, líder de la Banda y Allen Dodworth, quien además, asume la gerencia de la agrupación. El músico español Jaime Nunó (1824-1908) residenciado en México, compone en 1854, el Himno Nacional Mexicano. Más tarde, en 1855, el destacado músico Francis Scala, napolitano que había llegado en 1840 a Estados Unidos contratado como virtuoso clarinetista por la Banda de la Marina, es designado 14° Director de The U.S. Marine Band. A partir de ese año, se estabiliza la Banda Sinfónica de la Provincia de Córdoba, Argentina y se cuenta como director al maestro Inocencio Cárcano.

El 12 de mayo de 1856, comienza sus actividades la Filarmónica Aveirense, más tarde se llamará, Banda Amizade de Aveiro, Portugal. En Francia, es creada oficialmente, mediante un decreto del 12 de marzo de 1856, la Bande de la Garde de París, bajo la dirección del sargento Paulus, ahora con el título de Chef de Musique. La agrupación estaba integrada por 54 músicos profesionales y 25 aprendices

Desde 1861, tenemos noticias de las actividades de la Banda Municipal de Albacete, España.

Harvey B. Dodworth asume en los Estados Unidos, la dirección de la Banda Dodworth, la cual prestará servicios como cuerpo musical de la 71st New York State Militia.

En el año 1863, regresa al Perú luego de su permanencia en Santiago de Chile donde se había

desempeñado como Maestro de Capilla de la Catedral, el maestro y compositor peruano José Bernardo Alcedo y es nombrado Director General de Bandas Militares. Ese mismo año, el compositor italiano Amilcare Ponchielli (1834-1886), escribe para la Banda della Guardia Nazionale di Piacenza, su Fantasia Militare per Banda.

En 1864, el compositor alemán Richard Wagner estrena su Hommage March; el mismo año, el madrileño Francisco Asenjo Barbieri (1823-1894) compone su marcha a paso doble, Marcha de las Manolerías, para su Zarzuela Pan y Toros. Por otra parte, se destacan en Cuba, las obras nacionalistas de los compositores Manuel Saumell (1817-70), Ignacio Cervantes (1847-1905), Laureano Fuentes (1824-98) y Nicolás Ruiz Espadero (1832-90), entre otros.

Ese año 1864 en Venezuela y mediante un Decreto Presidencial del Mariscal Juan Crisóstomo

Falcón, se crea la Banda Marcial Caracas y es designado el maestro italiano Albino Abiatti, nacido en Como el año 1819, como su primer director. Posteriormente, en 1871, Abiatti se traslada a Estados Unidos y en 1875 es designado director de la Army Band en Prescott, Arizona. El maestro permanecerá en Estados Unidos hasta su muerte, ocurrida en San Francisco, California en 1890.

Al año siguiente en 1865, el compositor Anton Bruckner (1824-1896), estrena en Austria Apollo

March y también su Marcha en Mi bemol y en 1866, se presenta al público la Trauermarch para Banda del compositor noruego Edwarg Grieg (1843-1907).

El violinista y compositor argentino Juan José Allende (1814-1880) se destaca como Maestro

de Bandas Militares en el Ecuador, donde en 1865 compone el primer Himno Nacional de dicho país. En 1866, Amilcare Ponchielli compone su Fantasia Originale I Saturnali, también estrena su

Concerto per Tromba e Banda y su Canto Greco: Variazioni per Banda. Entre 1860 y 1886 se destaca como Director de Bandas en el Ecuador, el compositor y maestro

Adolfo Almeida, alumno del compositor dominicano José Reyes, compositor del Himno Nacional de la República Dominicana. Otros directores y compositores dominicanos del mismo período, de Música para Banda son: José María Arredondo (1840-1924); Mariano Arredondo (1854-1908), quien se desempeñó como Director de la Banda Municipal de San Pedro de Macorís; Gabriel del Castillo (1874-1950); Rafael Ignacio (n.1897) y Esteban Peña Morell (1897-1938), autor del Poema Sinfónico Anacaona y de la Sinfonía Bárbara para Banda;

En 1867, durante la Feria Mundial de París, en el Concurso Internacional de Música Militar,

resulta ganadora la Banda de la Guardia de París, agrupación que recibe los elogios del Jurado integrado por Ambroise Thomas, Leo Delibes y Jean-George Kastner. En este Concurso la Banda francesa se impone ante la Banda de la Guardia Real y la Banda de la Guardia Prusiana de Granaderos dirigida por Wilhelm Wieprecht también, ante la Banda del Duque de Wurtemberg (Austria) y ante otras siete Bandas

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de Rusia, Bavaria, Holanda, Ducado de Baden, España y Bélgica, consolidando su calidad y prestigio.

Hacia 1868, es designado como director de la Banda Marcial Caracas, en Venezuela, el maestro bolivarense José Muñoz Mármol quien sustituye a Albino Abiatti. En ese año de 1868 y raíz de la Rebelión de Lares, el compositor catalán residenciado en Puerto Rico, Félix Astol escribe La Borinqueña, con letra de Lola Rodríguez de Tió, melodía que pronto, en 1879 es arreglada para Banda Militar por el músico militar Luis Miranda y se convierte en Himno de la Isla.

En 1871 el maestro venezolano José Angel Montero, compositor de la ópera Virginia, entre

otras obras, es designado 3° Director de la Banda Marcial Caracas, cargo que conservará hasta 1881. Ese mismo año en París, el 2 de julio, se reorganiza y consolida definitivamente, con el nombre que aún conserva Musique de la Garde Républicaine, la agrupación musical cuenta con más de 90 músicos; ese mismo año, viaja a Londres, donde hace sus primeras presentaciones internacionales.

El año 1872 asume la Presidencia de Bolivia, el político, poeta y músico Adolfo Baluivan

(1831-1874), quien se destaca además, como compositor de Marchas para Banda. Y en Italia, Ponchielli escribe su Seconda Sinfonia in Si bemolle minore per Banda, una de las mejores obras del compositor. Ese año también se estrena en Cremona, su obra Il Convegno per due clarinetti e Banda.

Nicolai Rimsky-Korsakov es designado en 1873, Inspector de las Bandas Navales en Rusia;

bajo su supervisión se inicia un importante trabajo de encargo de obras y transcripciones para banda. En mayo de ese año, A. Ponchielli estrena su Marcia Funebre per i funerali di Alessandro Manzoni.

En 1874, el compositor e historiador mexicano Francisco Alvarez (1838-1916) organiza y dirige

la Banda del Instituto Campechano. Ese mismo año, funda la Sociedad Filarmónica de Campeche. Y en Bogotá, Colombia, muere el músico y compositor venezolano Nicolás Quevedo Rachadell (1803-74), quien había llegado a Colombia como músico y director de la Banda Militar del Ejército de Bolívar y se radicó en Bogotá para dedicarse a la enseñanza musical.

Ese mismo año de 1874, se retira J.G. Paulus y es sucedido por Adolphe Sellenick, como

director de la Musique de la Garde Républicaine de París. Se funda, también, una de las más relevantes Bandas de Europa, se trata de la Koninklijke Harmonie Deurne de Holanda, originalmente llamada Fanfare Deurne y a partir de 1912, asumirá el nombre de Harmonie Deurne.

El 8 de abril de 1875, se inician las actividades de la Banda Oficial del Estado Táchira en

Venezuela. Al año siguiente, el 13 de mayo de 1876, Benigno Rodríguez Bruzual es designado primer director de la Banda Acosta en Cumaná, Estado Sucre, Venezuela. A dicha Banda se le cambiará el nombre por el actual de Banda Libertad, en 1935; esta agrupación, que aún existe, será años más tarde dirigida por los maestros Ricardo Rodríguez y Mariano Joubert.

Patrick Sarsfield Gilmore (1829-1892), Director de bandas natural de Irlanda y residenciado en Estados Unidos, incorpora en 1859, los instrumentos de Madera a las Bandas de Metales.

Entre 1876 y 1896, aparecen las primeras Bandas Profesionales en los Estados Unidos. Gilmore es uno de los primeros directores que acomete esta tarea

En 1878 el compositor checo Antonin Dvorak, compone su Serenata en re menor para vientos

Op.44. En el Teatro Colón de Buenos Aires, Argentina, se estrenan el poema sinfónico La Pampa y la Sinfonía Buenos Aires compuestas por Saturnino Angel Berón, destacado compositor argentino y Maestro de Bandas Militares, autor de la famosa marcha Paso de Los Andes, la cual fue enviada a la Exposición Mundial de París en 1878. Además es autor de un Método de Música premiado en la Exposición de Chicago en 1893.

También en 1878, en Villanueva de Castellón, España, bajo la dirección del maestro Vicente Llana, se funda la Banda Sociedad Musical Lira Castellonense.

A partir de 1880, el trombonista y compositor John Ph. Sousa, hijo de emigrante portugués y nacido en Washington D.C. (1854-1932) es designado director de The U.S.Marine Band.

Federico Villena (1835-99) es designado 4° Director de la Banda Marcial Caracas y dos años

más tarde, en 1880, recibe un Bastón de Mando obsequio del Cónsul Británico en Caracas, Venezuela, Sir Robert Thomas Charles Middleton.

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En Alemania, el 2 de Octubre de 1880, el destacado compositor Johannes Brahms (1833-

1897), estrena su Akademische Festouvertüre für Militärorchester.

Al año siguiente Richard Strauss compone su Serenata para Vientos Op.7. En Venezuela, en 1881, asume la dirección de la Banda Marcial Caracas, el compositor y director Federico Villena; y en 1883, a la edad de 18 años, el famoso músico danés Carl Nielsen, quien para la fecha se desempeñaba como Cornetista en Bandas Militares, se traslada de Odense a Copenhagen para profundizar su formación musical.

Ese año, muere el maestro Sandalio Callejo (n.1833) destacado músico nacido en San Juan

de Puerto Rico y quien se había desempeñado como director de Bandas Militares y compositor. Durante el año 1884, se produce en Venezuela, la creación de la Banda del Estado Lara,

siendo Ramón Mavare y Miguel Guerra sus primeros directores. En París, Francia, es designado director de la Musique de la Garde Républicaine el maestro Gustave Wettge.

En 1885, el compositor francés Charles Gounod escribe su Petite Sinfonie para vientos, dedicada A la Societé de Musique de Chambre pour Instruments a Vent, concebida para una flauta, dos oboes, dos clarinetes, dos cornos y dos fagotes.

Ese mismo año en Venezuela, el 9 de noviembre, se crea por decreto del Gral. Juan José

Canales, presidente del gobierno regional, la Banda Gral. José Antonio Páez, en el antiguo Estado Zamora, hoy Estado Portuguesa.

El Movimiento de Bandas Universitarias en los Estados Unidos de Norteamérica, ve nacer en 1886 a la Purdue University Band, la cual se hará famosa y reconocida por sus múltiples giras a varios países.

Además, en el año 1886, es creada la Banda Municipal de Barcelona, España. En 1887, el compositor Rafael Alvarez, nacido en Comalapa, Guatemala compone la música

del Himno Nacional de Guatemala. Había ingresado como músico en la Banda Marcial de Guatemala en 1879. En 1888, el compositor y director salvadoreño Ciriaco de Jesús Alas, nacido en Santa Tecla, Salvador, fue designado director de la Banda en La Unión, cargo que ocupa hasta 1890. Desde 1901 hasta 1944 fue director de la Banda Regimental de Sonsonate. Entre su producción musical para Banda se cuentan las Oberturas Porpocato y Quetzal; las fantasías Motivos de la Serenata de Schubert, Coral y Perlas; los valses Esperanza, Antiguos Recuerdos; la danza Oriental Fest; el minueto Plachet; la marcha Siempre Triunfando y una Misa de Campaña para Banda.

El año 1889 marca un hito en la historia de la pequeña forma musical tan familiar a las bandas,

conocida como Pasodoble, cuando ven la luz La Giralda de Eduardo López-Juarranz (1844-1897) marcha a paso doble escrita para la Exposición Industrial Internacional celebrada en París, Francia en mayo de ese año, cuando el ingeniero francés Gustave Eiffel construyó su famosa torre. También el pasodoble La Gracia de Dios, de Ramón Roig, fue escrito semanas después. El famoso músico norteamericano Victor Herbert crea y dirige su propia Banda en 1890. Ese mismo año, muere el notable compositor, flautista y director de bandas militares puertorriqueño Juan Morel Campos y hacia finales de esa misma década, el clarinetista y bombardinista puertorriqueño Angel Mislán (1862-1911) presenta sus famosas danzas Sara y Tu y Yo.

Es este también, el Período de Oro del Movimiento de Grandes Transcripciones para Banda. Los directores e instrumentistas sentirán gran satisfacción de superar, gracias a los mecanismos de los nuevos y mejorados instrumentos, las dificultades técnicas de partituras que estaban, hasta entonces, reservadas a las cuerdas.

A partir de este momento, se hace frecuente que los grandes compositores escriban obras para

las Bandas que cada vez son mayores en cantidad y mejores en calidad. Aumentan las ediciones de nuevas obras y transcripciones; y todos los países de Europa, además de los Estados Unidos y los países de la América del Sur, se incorporan al Movimiento de creación de Grandes Bandas, muchas de las cuales aún existen.

El año 1891, marca un verdadero hito histórico para el desarrollo, evolución e importancia de las bandas: John Philip Sousa realiza la primera gira nacional de conciertos con The U.S.Marine Band,

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totalmente renovada, con su moderna instrumentación, además de excelentes músicos y solistas. Luego, de una gira con conciertos diarios por el territorio de los Estados Unidos y parte del

Canadá, John Ph. Sousa y la Banda se convierten en noticia de primera página nacional y mundial.

En esta ocasión se dan a conocer muchas de las obras de Sousa, las cuales marcarán un estilo peculiar de marchas para banda, que lo convertirán en el Rey de las Marchas.

Al año siguiente, el 26 de Septiembre de 1892, dos días después de la muerte de Patrick Gilmore, Sousa inaugura su propia banda privada, The Sousa Band, y David Blakely se desempeña como Gerente de la misma. Se consolida así, el proceso de promoción y creación de bandas privadas.

En 1893 en Caracas, se designa al maestro Leopoldo Sucre (1838-1902) como 5° director de

la Banda Marcial Caracas hasta 1898, fecha en la cual es sustituido por Francisco de Paula Magdaleno (1852-1910) quien la dirigirá hasta 1903 cuando, años más tarde le sustituye en el cargo el famoso músico venezolano nacido en La Guaira, Estado. Vargas, Pedro Elías Gutiérrez (1870-1954), conocido autor de la Zarzuela Alma Llanera.

En París, ese mismo año de 1893, asume la dirección de la Musique de la Garde

Républicaine el maestro Gabriel Parès, bajo cuya dirección se realizarán las primeras grabaciones fonográficas en 78 rpm., de esta agrupación. (Foto)

En 1894, regresa a Honduras luego de completar su formación musical en los Estados Unidos,

el destacado compositor y director Manuel de Adalid y Gamero, nacido en la población de Danlí en 1872. A su regreso funda en su pueblo natal una Banda de Aficionados que actuó hasta 1903, año en que la población fue saqueada por tropas revolucionarias que destrozaron y robaron los instrumentos. A principios de 1915, el maestro es designado Director de la Banda Marcial de Tegucigalpa y en 1916, organizó por orden presidencial, la Banda de los Supremos Poderes, la cual dirigió hasta 1924. Fue también el fundador de la Escuela de Músicos Mayores de Tegucigalpa, donde enseñó Teoría, Armonía y Arte de Dirigir. Luego de un período de exilio, retornó a su país y reorganizó la Banda de los Supremos Poderes en 1929 y la dirigió hasta 1932. Casi toda su producción musical fue destruida por las fuerzas revolucionarias que saquearon la casa del compositor. Sin embargo se conservan algunas piezas para Banda compuestas en los Estados Unidos; entre ellas destacan el vals de concierto Remembranzas Hondureñas (escrito para The Army Band en 1925); Suite Tropical (United Service Orchestra, 1928); y la marcha pasodoble La Novia del Torero.

En 1895, se radica en Argentina el compositor y director de Bandas italiano José Arena (1869-

1954); allí produce varias marchas y obras para Banda. Y en Panamá, el año 1897 Jorge Santos, compositor español y director de bandas militares residenciado en ese país, compone el Himno Regional Panameño, el cual es declarado Himno Nacional en 1903 cuando Panamá se proclamó independiente.

Además de The U.S.Marine Band y de la propia banda bajo la dirección de Sousa, desde la

última década del S.XIX, también serán famosas por su alto nivel artístico y cualitativo, las múltiples presentaciones de otras bandas norteamericanas como la de Patrick Gilmore (22nd Regiment of New York) y la de Victor Herbert; así como las de muchas bandas europeas de gran tradición para la época (p.e. Alessandro Vessella). En Colombia se destacan como compositores de obras sinfónicas, de cámara y también de banda: el maestro Julio Quevedo Arvelo, nacido en Bogotá en 1829 y fallecido en 1896 entre sus obras para banda se cuentan Marcha Militar para la Banda de Chiquinquirá, Pasodoble para Banda y Marchas Fúnebres para Banda. Hijo del músico venezolano Nicolás Quevedo Rachadell, a quien nos hemos referido y quien había llegado a Colombia como edecán del Libertador Simón Bolívar, a principios del S. XIX.

También, el maestro José María Ponce de León (1846-1882), egresado del Conservatorio de

París y quien se desempeñó luego, como Director de la Banda de Bogotá; de su autoría es la obra La Mirla Blanca.

En 1896 inicia sus actividades el Ateneo Musical de Cullera, España, con el nombre de Unión Musical.

El 9 de Febrero de 1898, se crea en Maracaibo, Edo. Zulia, Venezuela, la Banda de Conciertos Simón Bolívar.

También en 1898, se integra la Camborne Town Band, agrupación de metales que al igual que

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Black Dyke Brass Band, va a convertirse en una de las múltiples agrupaciones emblemáticas de instrumentos de viento metales. Para la Black Dyke por cierto, el compositor Gustav Holst escribirá en 1928 su famosa Moorside Suite, obra con la cual la Banda obtendrá el premio en el Festival de Crystal Palace, instituido anualmente a partir de 1900, a instancias de Sir Arthur Sullivan. Es importante observar que, desde su creación, dicha banda ha ganado más de veintidós títulos en Concursos abiertos para Bandas de Metales, desde 1872 hasta nuestros días.

En 1899, se funda la Banda Nacional de Conciertos en La Habana, Cuba y su fundador y primer

director hasta 1908, es el maestro Guillermo M. Tomás Boufartigue. España y Portugal, como hemos visto, se ocuparon de desarrollar un amplio y vasto programa de promoción y creación de bandas tanto en el ámbito militar como en las diferentes poblaciones y freguesías de todas las regiones y poblaciones españolas y portuguesas.

12. Nuevas Obras, Concursos y perspectivas del Movimiento Bandístico a partir del Siglo XX

El año 1900 se establece la Irish Guards, y de inmediato se le dota de una magnífica Banda. En Venezuela, se consolida como Banda Filarmónica la Banda del Estado Táchira y se designa director al maestro colombiano Celso Pérez.

A partir del Certamen de Bandas de 1901, el concejal, periodista y notable crítico de arte valenciano don Vicente Avalos Ruiz, propone la creación de la Banda Municipal de Valencia, España. Su primer director será el distinguido compositor Santiago Lope, autor entre otras muchas obras, de los conocidos pasodobles Gallito, Vito y Dauder, prototipos del pasodoble torero, compuestos y estrenados en 1904.

En 1902, el pasodoble adquiere una nueva dimensión de concierto, enriquecido con sorprendentes modulaciones armónicas y revestido de una especial elegancia melódica, con la obra de Antonio Alvarez Alonso, conocida con el nombre de Suspiros de España.

El 8 de octubre de 1903, constituida bajo el nombre de Centro Instructivo Unión Musical, se funda la Unión Musical de Lliria, España, cuyo vínculo de unión lo representa la Banda.

El mismo año, se funda la Banda Municipal del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, Islas Canarias.

Albert Austin Harding (1880-1958) consolida en los Estados Unidos el movimiento de creación de Bandas Sinfónicas Universitarias, con la creación de la Banda Sinfónica de la Universidad de Illinois en 1905, ejemplo que será imitado y seguido por otras importantes universidades, como la Universidad de Michigan que organiza su banda bajo la dirección de William D. Revelli y Paul Spotts Emrick, mejor conocido como Spotts, es designado primer Director formal de las Bandas de Purdue University. Hacia 1907, se funda la Sociedad Musical Instructiva Santa Cecilia de Cullera, España, promovida por Antonio Chornet. En Venezuela, el maestro Jermán U. Lira, dirige la Banda del Estado Miranda.

Por su parte Karl King forma en 1909 la Municipal Band Circus (1891-1971); P.G. Lowrey´s Barnum & Bailey Circus Band, comienza sus actividades hacia 1906 y en 1911, Edwin F & Richard F.Goldman, conforman su Banda de New York.

En enero de 1909, el Alcalde don Nicolás Peñalver Zamora promueve la creación de la Banda Municipal de Madrid y se designa al maestro Ricardo Villa como su primer director. Esta Banda hace su debut en el Teatro Español el 2 de junio del mismo año, como lo confirma Bernardo Adam Ferrero en su obra.

Es tal el entusiasmo que despierta el movimiento musical bandístico que muy pronto envuelve a las damas y hacia 1910, en los Estados Unidos, Helen May Butler integra su Ladies Military Brass Band.

Nace en 1910, Domingo Calabro, compositor argentino de origen italiano, quien se desempeñará como Director de la Banda Sinfónica Municipal de Buenos Aires.

El 9 de noviembre de 1911 se funda la Banda Bolívar de la Policía de Caracas, Venezuela y se designa director al maestro Pedro Felice. También, en París, Francia, es nombrado director de la Musique de la Garde Républicaine, Guillaume Balay.

En 1912 nace en Santa Cruz Guanacaste, Costa Rica, Jesús Bonilla Chavarría, destacado instrumentista en Bandas Militares y Director de la Banda de Liberia. Ese año, es fundada en España la Banda Municipal Alicante, la cual con sus primeros 45 integrantes, realiza su

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presentación el 3 de agosto, bajo la batuta de su primer director, el maestro Luis Torregrosa García. El 17 de marzo de 1913, gracias a las gestiones del maestro italiano Manuel Conti Tamburini y del entonces director del Conservatorio Nacional, Guillermo Uribe Holguín, fue creada oficialmente la Banda Sinfónica Nacional de Colombia, con el nombre de Banda de Bogotá y mediante la fusión de dos bandas locales existentes para esa época: la del Regimiento de Infantería Bolívar N°1 y la del Grupo de Artillería de Bogotá.

En 1914, muere en Ecuador el maestro Virgilio F. Cháves, quien además de violinista y compositor se había destacado como director de Bandas Militares en su país.

El rey George V de Inglaterra, en 1915 decreta la creación de la Welsh Guards y se le dota de su respectiva Banda. Ese año en Caetanopolis, Estado de Minas Gerais, Brasil, el maestro Antonio Pinto Mascarenhas funda la Banda de Música Euterpe Santa Luzia, la cual funciona en nuestros días, financiada por la Companhia de Fiaçao e Tecidos Cedro Cachoeira.

En 1916 fallece el maestro Pablo Beruti (n.1866), quien se había desempeñado como Inspector de Bandas Militares en Argentina.

Durante los años 1914 a 1918, es designado Director de la Banda de Medellín, el maestro Gonzalo Vidal Pacheco (1863-1946), quien es autor de varias obras, entre ellas, Boyacá Marcha Triunfal (c.1919); Frutos de mi Tierra; Himno a la Paz; Himno Antioqueño; Homenaje a Beethoven; Hoy por mí, Mañana por ti; Huéspedes de Honor; Marcha Fúnebre; El Numero Uno; Obertura Juvenil para Banda; Preludio Fugado; Soledad; Villate; Salve del Soldado Colombiano, para Banda y Coro Masculino; Sinalco para Banda y Saxofón Barítono Solista.

Este cúmulo de hechos son fundamentales para seguir estimulando la creación de grandes partituras para las agrupaciones bandísticas; surgen así, las obras de:

Charles Ives (Variations on America, 1891; Country Band March, 1903; Overture and March 1776, 1904), Percy Grainger (Hill Song N°1, 1902; Lads of Wamphray, 1905), Gustav Mahler (Um Mitternacht for voice, 1902), Ottokar Novacek (Sinfonietta Op.48, 1905), Georges Enesco (Dixtuor Op.14, 1906), Charles Ives (Scherzo "Over the Pavements", 1906; Calcium Light Night, 1907), Percy Grainger (Hill Song N°2, 1907), Igor Stravinsky (Pastorale, 1907), El venezolano Reynaldo Hahn (Le Bal de Beatrice d`Este, 1909) Gustav Holst (Suites N° 1 en Mi bemol, 1909 y Suite N° 2 en Fa, 1911), Percy Grainger (Shepherds Hey, 1910; Colonial Song, 1914; Irish Tune from Country Derry, 1918; Childrens´s March Over the Hills and Far Away, 1919), Charles Ives (Decoration Day, 1912; The See´r, 1913), Florent Schmitt (Dionysiaques Op.62, 1913), Igor Stravinsky (Ragtime for Eleven Instruments, 1917; Tango, 1917; Symphonies d´instruments á vent, 1920), Gabriel Fauré (Chant Funeraire Op.117, 1921), Arthur Honegger (King David, 1921), Darius Milhaud (Dixtuor Little Symphony N°5, 1922; La Creation du Monde, 1923), Ralph Vaughan-Williams (English Folk Song Suite, 1923; Toccata Marziale, 1924; Sea Songs, 1924).

A estas obras, seguirán muchas otras: Circus Polka (1924) de Igor Stravinsky; William Byrd Suite (1924) de Gordon Jacob;

Symphonie N°4, Op.34 (1924) y Three Merry Marches Op.44(1926) de Ernst Krenek; Chamber Concerto for Violin, Piano and 13 Winds (1925) de Alban Berg; Concerto for Cello and Winds (1925) de Jacques Ibert, por sólo nombrar algunas de las más importantes producciones para instrumentos de viento.

En 1919, en los Estados Unidos se inicia el Movimiento de Grandes Concursos de Composición para Banda, dotados de jugosos premios que incentivarán, aún más, la creación de obras para banda por parte de los compositores.

Promovido por los hermanos Goldman, se realiza el primer Gran Concurso de Composiciones Originales para Banda; el jurado lo integran Víctor Herbert y Percy Grainger, la obra A Chant from the Great Plains del compositor Carl Busch, resulta ganadora.

En 1920 se funda la Banda Sinfónica Concert BandVooruit de Harelbeke, en Bélgica y al año siguiente, el 3 de mayo de 1921 por decisión del Conseil Municipal, nace la Harmonie Municipale du Havre bajo la dirección de Victor Laisney.

Fue en el año 1925 cuando el fagotista Antonio de Assis Republicano (n.1879), compositor y director brasileño, estrena su Opera O Bandeirante; también compone una Sinfonía das Multidoes para Orquesta, Coros y Banda.

En 1926, en Caracas, Venezuela, se contrata a una Banda bajo la dirección del maestro Carlos Bonnet Mendoza (1892-1983) para animar la programación en vivo de la primera emisora radial que se inaugura la Aire Broadcasting. En el Estado Carabobo, se funda la Banda 24 de Junio,

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con el nombre de Banda Gómez y se designa al maestro Echenique como su primer director; posteriormente, se le cambiará el nombre a dicha agrupación.

Por su parte, ese mismo año 1926, el famoso músico francés Paul Fauchet (1858-1936) escribe su Sinfonía en Si bemol para Banda y con ella, gana el National Band Contest en Fostoria, Ohio, USA, en el cual participan trescientas quince (315) bandas. Y Pierre Dupont en 1927, es designado director de la Musique de la Garde Républicaine de París, con la cual inicia importantes y reconocidas giras internacionales. A él le seguirán en la dirección, François-Julien Brun (1945-1993); Roger Boutry, quien ganara el Primer Grand Prix de Roma (1933-1997); y François Boulanger (1997).

A partir de 1926, los concursos que se organizan en diversos países, se convertirán en una fuente de nuevos aportes para el repertorio Bandístico: Gustav Holst, como ya señalamos, escribe en 1928 su Moorside Suite y con ella se acredita el premio del Palacio de Cristal, Londres.

Nuestra Latinoamérica, también en el año de 1930, brida un importante aporte: es el compositor cubano Amadeo Roldán quien estrena sus Rítmica V y Rítmica VI, dando inicio al Movimiento de Composiciones para grupo de Instrumentos de Percusión.

El venezolano Pedro Elías Gutiérrez estrena en ese año, su Sinfonía Militar Batalla de Carabobo para tres Bandas.

Por otra parte, la obra máxima de Gustav Holst para Banda, la constituye su Preludio y Scherzo: Hammersmith compuesta en 1931, la cual marca el inicio de una nueva visión de las bandas como verdadero medio de expresión de ideas musicales de profundo y altísimo contenido y valor estético-filosófico.

El mismo año (1931), Edgar Varese compone Ionisation, obra que, por su gran publicidad, da un impulso definitivo al movimiento de creación de grandes obras para grupo de percusión, iniciado por el compositor mulato cubano Amadeo Roldán. Por su parte, Ernst Krenek estrena su Music for Wind Orchestra.

Por su parte, Ottorino Respighi compone en 1932, Huntingtower Ballad, por encargo del famoso director de banda norteamericano Edwin Franco Goldman.

En 1933, mediante Concurso, es designado Director de la Banda Sinfónica Nacional en Bogotá, en Colombia, el maestro José Rozo Contreras, cargo que desempeñará durante cuarenta años y que acompañará con una vasta producción de composiciones, arreglos y transcripciones para la banda.

También, ese año, muere en Montevideo, Uruguay, el maestro de origen italiano, Benone Calcavecchia, quien se había desempeñado como Director de la Banda Sinfónica Municipal de Montevideo y además destacó como compositor de numerosas obras, entre ellas, Preludio (1928), Marcha del Centenario (1930), Leyenda Patria y otras. En Argentina, en sustitución del maestro portugués Joaquín Clemente (n. Lisboa en 1901), asume la dirección de la Banda Sinfónica Municipal de Buenos Aires, el compositor José María Castro (n.1892), cargo que ocupará hasta 1953, cuando es designado, el maestro Rafael Del Giudice (n. Rosario en 1911) y se desempeña como director hasta 1956. Se destaca en Argentina, el violinista, compositor y director de orquesta y bandas Gilardo Gilardi (n.1889), quien escribe su famosa Suite Argentina. En 1934, el compositor Dmitri Shostakovich estrena su Jazz Suite N°1.

Percy Grainger estrena en 1937 Lincolnshire Posy y en 1940, en Venezuela, es designado el maestro Carlos Bonnet Mendoza, director de la Escuela de Bandas Militares.

El año 1935, Las Fuerzas Armadas Soviéticas organizan la USSR Defense Ministry Band, bajo la dirección del Mayor General Semyon Aleksandrovich Chernetsky.

En 1936, por iniciativa del Capitán Clude Laty, se funda en Francia la Musique de l´Air de Paris con 90 músicos integrantes.

En 1940, se funda la Banda del Estado Yaracuy, en Venezuela. En 1941 se crea la College Band Directors National Association, CBDNA, en los Estados Unidos y cuyo primer presidente (1941-1945) será William D.Revelli.

En 1942, el norteamericano Aaron Copland presenta su conocida Fanfare for the Common Man. Dmitri Shostakovitch escribe su Marcha y Paul Creston estrena Legend and Festive para celebrar el vigesimo quinto aniversario (25) de la Banda de E.F.Goldman. El maestro Daniel Ayala (n.1908), es nombrado director de la Banda de Conciertos de Yucatán, México. Al año siguiente, Samuel Barber estrena Commando March y Sergei Prokofiev su Marcha Op.99.

Entre 1942 y 1944 se desempeña como Director de la Banda de Policía de La Habana,

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Cuba, el destacado músico Alberto Bolet (n.1905), quien también se desempeñó como Director de la Orquesta Sinfónica de la Habana.

En 1946, Igor Stravinsky estrena su Ebony Concerto (dedicado al clarinetista Woody Herman), Morton Gould presenta su Ballad for Band y Jean Francaix su Rhapsodie pour Alto Sax et Petite Orchestre.

A partir de 1947 se formalizan, en los Estados Unidos, los Encargos de obras (Commissions) para Banda a famosos compositores. Esto es posible por la conformación de la League of Composers LOC (Goldman), la ABA Ostwald Uniforms, IHS Ithaca H.S. en N.Y. (Frank Battisti) y otras instituciones que permiten el desarrollo de la literatura bandística.

Gracias a la acción de Leonard Smith en Detroit, USA, en 1948 se fortalece el movimiento de Creación de Bandas en las Escuelas, Colegios y Universidades; se inicia así, un movimiento que formará muchos músicos y generará grandes producciones para banda. En ese año, es designado director de la Banda Marcial Caracas, en Venezuela, el maestro Antonio Rafael Narváez Montaño (1907-85), quien sucede en el cargo a Pedro C. Feliche el cual, se venía desempeñando como director interino de la agrupación desde 1949, por enfermedad del maestro Pedro Elías Gutiérrez.

En 1949, el compositor Leonard Bernstein estrena Prelude, Fugue and Riffs, Owen H. Reed compone La Fiesta Mexicana y por encargo de la League of Composers (LOC), Virgil Thomson, escribe A Solemn Music.

Este proceso de incorporación de grandes maestros a la creación para banda, queda definitivamente consolidado a partir del año 1950, cuando se estrena la obra de Walter Piston Tunbridge Fair, obra encargada al compositor por la League of Composers (LOC).

En 1951 se estrenan Symphony for Band de Paul Hindemith (obra que había sido compuesta desde 1946), Canzona de Peter Mennin, Music for a Festival de Gordon Jacob, Lincoln Portrait de Aaron Copland, Divertimento para Banda y Psalm de Vincent Persichetti, George Washington Bridge de William Schuman, entre otras obras.

En 1952 Robert Russell Bennett escribe Suite of Old American Dances y Mademoiselle, Ballet para Banda; Darius Milhaud, West Point Suite y Morton Gould, Symphony for Band.

Ese mismo año, Frederick Fenell desarrolla el famoso Eastman Wind Ensemble. En 1956, por iniciativa de John Paynter y Barbara Buelhmal, se crea la Northshore

Concert Band, como una American Legion Band. Años más tarde, Paynter será un importante líder en la promoción y creación de la World Association for Symphonyc Bands and Ensembles, WASBE.

La Banda Tokyo Kosei Wind Orchestra, TOKWO, se establece en el año 1960; su fundador es Nikkyo Niwano, ganador del premio Templetown Foundation. A partir de 1984 el maestro Frederick Fennell asume su dirección y la hará popular por sus famosas actuaciones y múltiples grabaciones del repertorio bandístico universal.

En octubre de 1964 es designado Mariano Joubert, trombonista nacido en Cumaná, Venezuela el 5 de junio de 1916, como director interino de la Banda Libertad del Estado Sucre, hasta 1974, cuando se le designa director titular.

El año 1966, se funda la Banda Municipal de Palma de Mallorca, España, siendo su primer director el maestro Julio Ribelles Brunet.

El 18 de diciembre de 1969, se constituye formalmente, la Women Band Directors National Association, WBDNA, presidida por su fundadora la compositora y directora Gladys Wright. Esta Asociación instituye el premio de composición llamado The Golden Rose, para galardonar a la mejor obra presentada por una compositora. La primera ganadora de este premio fue la distinguida compositora francesa Ida Gotkovsky.

La Década de los 70´ se inicia con las primeras actividades de la nueva Banda de la República Federal de Rusia, bajo la dirección del profesor Ivan Pétrov y con el ingreso de la primera mujer: Ruth Johnson, ejecutante del corno, en 1973, a las filas de la U.S.Marine Band. Este recuento lo finalizaremos allí, dejando para futuras publicaciones los periodos siguientes.

A partir de este año, se produce anualmente, una interminable lista de Grandes Obras y Acontecimientos en el Mundo de la Música para Bandas, a los cuales debemos agregar la enorme cantidad de piezas: fantasías, rapsodias, oberturas, música ligera, marchas militares, música para revistas musicales, deportivas y teatrales, shows, comedias musicales, pasodobles, joropos, milongas, bambucos, pasillos, valses, polkas, mazurcas, tangos, música religiosa, ceremonial… y un sinnúmero de composiciones de todo género y de todos los países, con las más variadas características e instrumentaciones.

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Todo lo cual, nos hace pensar y concluir que la preparación de los jóvenes músicos para ingresar a las Bandas en la actualidad, debe abarcar un vasto naipe de conocimientos musicales y destrezas técnicas en el dominio de los instrumentos para poder enfrentar las complejidades de tan extenso repertorio, el cual en muchos casos, suele ser editado por prestigiosas casas editoriales, americanas y europeas y preparado de manera escalonada y gradual, para que pueda ser enfrentado por las diversas Bandas según las habilidades técnicas de los músicos que las integran y las dificultades específicas de cada obra.

A partir de la segunda mitad del siglo XX, la producción de un repertorio específico para las Bandas Sinfónicas, llamadas también Bandas de Concierto, convertirá este género en un verdadero semillero de grandes obras y compositores.

A través de las Bandas los grandes maestros de nuestros siglos se darán a conocer a los grandes públicos, sus obras serán tocadas por multitud de jóvenes integrantes de las Bandas de Colegios, Universidades y también, por las Bandas de las Comunidades, Municipalidades y Bandas Militares profesionales.

Surgen así y se dan a conocer los nombres y las obras de cantidades de compositores imposibles de nombrar en su totalidad, entre los cuales pasan por mi mente en este momento: Richard Rodney Bennett, William Schuman, Norman Dello Joio, Howard Hanson, Vincent Persichetti. Vaclav Nelhybel, David Bedford, Edward Gregson, Percy Grainger, Gordon Jacob, John Mc Cabe, Alan Bush, Samuel Adler, Timothy Reynish, William Grant Still, Halsey Stevens, Walter Skolnik, Warren Benson, Netty Simons, Marco Antonio Rivera Useche, Peter Schickele, Jerzy Sapieyevski.

William E. Rhoads, Manuel Penella Moreno, Eduard Montesinos Comas, Francesc Cuesta i Gómez, George Rochberg, Alfred Reed, William Presser, Laudelino Mejías, Ronald Lo Presti, Leopold Magenti, Newell H. Long, Trevor Ford, Serge Lance, Nelson Keyes, Karl Korte, Manuel Palau Boix, Eric Whitacre, Miquel Asins Arbó, Joseph Willcox Jenkins, Robert Jager, Ida Gotkowski, David Diamond, Ron Nelson, Frank Ticheli, Salvador Giner Videl, Maurice Faillenot.

Cindy McTee, Luis A. Noro Bastidas, Angel Mottola, Jacob Druckman, Lex van Delden, Jurriaan Andriessen, Pompeyo Camps, Joseph Horovitz, Alexandre Guilmant, Michael Colgrass, Juan Vicente Mas Quiles, Louis Marischal, Alan Hovhaness, Sydney Hodkinson, Walter Alan Finlayson, Fermina Casanova, Herman Ch. Snijders, Walter Hartley, Henry Cowell, Donald Erb, David Cohen, Robert Keys Clark, John Cacavas, Larry Austin, William Albright, Monte Tubb

Joaquín Rodrigo Vidre (1901-1999), Francisco Zumaqué, Rafael Taléns Pelló, Ulysses Kay, Peter Menin, Burrill Phillips, Michael Tippett, Alfredo Damiano, Walter Hartley, Lyn Murray, Dana Wilson, Robert Kurka, Francisco Tamarit Fayos, James Ployhar, Gary Langford, Robert Brown, Charles Carter, Joseph de Luca, Eidylia Mell, Désiré Dondeyne, Georgy Salnikov, Evzen Zámecník, Adil Bestybaev, Josef Pécsi, Andrés Valero Castells, Rudolf Sochor, Jef Penders, Bernat Adam Ferrero, Carle Santos, Jack Stamp, Nikos Skalhottas, José María Cervera Lloret, Rafael Talens Pello, Ulises Acosta, Ricardo Teruel, Magnus F. Andersson, Mats Larsson, Allan Nissilä, Amando Blanquer Ponsoda, Ferrer Ferran.

Sven-David Sandström, Catharina Palmér, Peter Bengtson, Joakim Sandgren, Olov Franzén, Philip Miller Ragne, Csaba Deak, Paula Malmborg, Siegfried Naumann, Peter Pontvik, Daniel Börtz, José Vicent Egea,Bengt Hambraeus, Julius Jacobsen, Kurt Atterberg, Teodoro Aparicio, Gunnar Bucht, Hugo Alfvén, Eyvind Hallnäs, Anthony Iannaccone, Ernst Toch, Ira Paul Schwarz, Lukas Haug, Johannes W. Hautvast.

Henk van Lijnschooten, Ingvar Karkoff, Lennart Wenström-Lekare, Apostolos Dimitrakopoulos, Peter Lindroth, Nicholas Maw, Robert Saxton, Hudson Nogueira, Stig Nordhagen, Per Nørgård, Rok Golob, Fumio Tamura, Masamicz Amano, Yngve Slettholm y una interminable lista de otros nombres importantes, muchos de los cuales figuran a diario en los programas de la enorme cantidad de Bandas diseminadas por nuestro mundo.

13. Organología, conformación y proyección de las Bandas de acuerdo al Orgánico Moderno

Como hemos visto, hablar de un Orgánico Único en lo que a la conformación instrumental de las Bandas se refiere, sobre todo desde los inicios y hasta la segunda mitad del S.XX, no sólo es

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imposible sino falaz, ya que la multiplicidad y variedad de los instrumentos de viento y percusión que aparecen desde la Antigüed hasta los siglos XVI, XVII, XVIII y XIX, llega a adquirir proporciones muy notables.

Basta recordar que, Michael Praetorius en su famoso tratado Syntagma Musicum de 1618, nos habla ya, de que se requiere la cooperación de ochenta y seis (86) instrumentos diferentes para lograr un conjunto de vientos cuyo resultado sea una resonancia magnífica y grandiosa de modo que casi todos estén aturdidos a causa de la sonoridad de dicho conjunto.

Sin embargo, y con relación al desarrollo y variaciones en la Organología de la Banda durante el período que comprende, desde sus inicios hasta nuestros tiempos, se han publicado interesantes trabajos que pueden ser consultados por el lector; citamos como ejemplos, además de los tradicionales tratados de instrumentación:

Fabbricatori di strumenti armonici, L.F.Valdrighi; Studi di strumentazione per banda, A.Vessella; Les harmonies du son et l´histoire des instruments de musique, J. Rambosson; Instrumentations Lehre für militair musik, E.J.Saro; The Riser and development of military music, H.G.Farmer; Essai sur les instruments, Du Belley; A pictorical history of Civil War Era, Musical Instruments & Military Bands, R.Garofalo & M.Elrod; Gli Strumenti d´Órchestra, C.Jachino; Las Bandas de Música en el Mundo, B.A.Ferrero; El Maravilloso Mundo de la Banda, J.I.Pérez-Perazzo; Organografia, ossia descrizione degli strumenti musicali antichi, L.Arrigoni; Encyclopedie van de Muziek, L.M.G. Arntzenius; Woodwind Instruments and Their History, A.Baines; Rapport sur les instruments de musique, fait à la Commission franVaise du jury international de l´Exposition universelle de Londres, H. Berlioz; Manuel général de musique militaire à l´usage des armées franVaises, G. Kastner; Musical Instruments, a Comprehensive Dictionary, S. Marcuse, (Ver, Bibliografía recomendada al respecto)

Por mencionar tan sólo, algunos de los muchos estudios que ofrecen importantes consideraciones al respecto.

Hemos visto, como el Desarrollo del Repertorio también, ha experimentado sucesivas influencias y transformaciones. De la misma manera, el orgánico o plantilla instrumental de las bandas ha venido evolucionando y adaptándose a nuevos parámetros que responden a variadas Causas que, aunque de manera superficial, me gustaría analizar.

La Primera causa, obedece al proceso de transformación y desarrollo de los instrumentos de viento y percusión ya mencionado.

Al consultar cualquiera de los Tratados de Instrumentación citados, vemos cómo algunos instrumentos que fueron utilizados en alguna época, posteriormente resultaron desechados o substituidos por nuevos y mejores instrumentos. Es el caso, por ejemplo, del Serpentón, el cual es sustituido hacia 1848 por los Oficleides y Bombardones, los cuales a la vez, años más tarde, serán también sustituidos por los modernos Barítonos, Bombardinos (Euphonium) y Tubas.

Lo mismo sucede con los Sarrusofonos, los cuales cayeron en desuso al aparecer y difundirse la familia de los Saxofones, creada y patentada por el belga Adolphe Sax, cuyas características mecánicas, facilitaron la ejecución y lograron una magnífica, completa y coherente gama de timbres sonoros.

También ocurrió lo mismo, con varios miembros de la familia de los Fliscornos; cuyos modelos fueron modificados y construidos con variadas y exóticas formas y diseños para experimentar nuevas posibilidades sonoras, por diferentes constructores, entre ellos también A. Sax, quien dio a su serie de instrumentos el nombre de Saxhornos.

Este proceso culminó, cuando se agotaron y sintetizaron las búsquedas ante la aparición de instrumentos muy bien diseñados y perfeccionados.

La Segunda causa, es fácilmente comprensible, si tenemos en cuenta que, no en todos los países se introdujeron y conocieron los nuevos instrumentos al mismo tiempo. Es más, muchos Directores de banda se mostraban resistentes para aceptar los cambios y transformaciones. Lo cual

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influyó, no sólo en la conformación de las plantillas de músicos sino también, en la realización de las composiciones, transcripciones y arreglos.

Esto explica por qué entre las viejas partituras italianas, alemanas, inglesas, españolas, francesas y norteamericanas para Banda, pueden apreciarse notables diferencias en las instrumentaciones; las cuales, en casos, incluyen instrumentos de fabricación regional o local poco usuales, a veces desconocidos en otros países y hasta difíciles, sino imposibles, de encontrar en los mercados.

Nuestros Países Iberoamericanos, como lo hemos visto antes, conformaron sus Grandes Bandas durante el siglo XIX, bajo la influencia y mezcla de corrientes italianas y peninsulares (España y Portugal).

Posteriormente, se hicieron sentir otras influencias: holandesa, francesa, alemana e inglesa.

Este hecho peculiar, tuvo notable importancia a la hora de decidir, en cada ocasión, qué instrumentos o cuál modelo de plantilla u Orgánico, debía adoptarse para integrar las grandes bandas de nuestros países y qué material musical debía tocarse en ellas.

Una Tercera causa responde, por otra parte, a la ocasional escasez de instrumentistas en muchas bandas y/o de instrumentos, los cuales debían importarse, obligó a los directores y compositores a adaptarse a los recursos musicales existentes. De allí deriva también, la heterogeneidad histórica de nuestros repertorios bandísticos.

La música y en especial, la actividad de las bandas no ha podido escapar de la exagerada injerencia del factor y las decisiones políticas en todos los aspectos relacionados con el desarrollo y planificación de nuestros países, en los cuales, todas las principales decisiones reflejan la influencia del autoritarismo gubernamental especialmente, dentro del ámbito militar, donde se desenvuelven la mayoría de nuestras Bandas.

Convertida en tradición, se vino repitiendo -observo yo - de manera algo poco analítica e irreflexiva y sin atender a mayores consideraciones de carácter técnico, el hecho de llenar las plazas vacantes, renovar los cargos y las dotaciones instrumentales en las bandas, casi todas auspiciadas o mantenidas por la tutela del Estado.

El resultado ha sido y sigue siendo evidente:

• Muchos de los instrumentos requeridos por aquellas partituras ya no se conseguían o resultaba complejo y difícil obtenerlos, así como también, a los instrumentistas que los ejecutaran con la calidad y destreza requeridas.

• Partituras que no se tocan o que suenan incompletas o a medias. • Multitud de obras que no se han editado, en su mayoría, las cuales constituyen

un valioso tesoro, representativo de la expresión y el sentir musical tradicional de nuestros pueblos y que corren el riesgo de perderse.

• Plantillas de músicos y Orgánicos u Organigramas que no responden a las realidades y exigencias de nuestros tiempos.

Estos fenómenos también han sucedido en muchos países de otros Continentes. Para presentar soluciones e ideas que pudieran corregir estos y otros problemas, surge en 1981 en Manchester, Inglaterra, la World Association for Symphonyc Bands and Ensembles, WASBE, cuya Primera Conferencia Bienal se realizó en la ciudad de Skien, Noruega en 1983.

Para una mejor comprensión de cómo se inició el proceso de integración de nuestras Bandas al Movimiento Internacional formalmente organizado, tal vez, resulte ilustrativo recordar que, en 1979, fui escogido unánimemente, por todos los integrantes de la ancestral Banda Marcial Caracas en Venezuela, para asumir la dirección de dicha institución, hecho que fue aceptado y ratificado por el entonces Gobernador de Caracas, Dr. Enrique Pérez Olivares.

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A raíz de este acontecimiento, una de mis metas inmediatas fue la de darle a la Banda un nivel y proyección de organización bandística moderna que, además, renovara sus repertorios y abordara las grandes obras que se estaban y continúan produciendo para dichas agrupaciones; para ello, era fundamental también, encargar nuevas obras a los compositores venezolanos de mayor jerarquía y establecer vínculos con otras Bandas internacionales, a los fines de acordar intercambios.

Procedimos entonces, a encomendar la obra Preámbulo para Banda, al distinguido compositor venezolano, varias veces laureado con Premios Nacionales de Composición e inclusive poseedor de varios Premios Internacionales, maestro Gonzalo Castellanos Yumar, quien a mediados de 1983 finalizó la obra, la cual fue estrenada a principios de 1987, después de su revisión.

El siguiente paso era, dar a conocer dichas obras, para lo cual procedimos a hacer entrega de copias de las mismas a la Biblioteca del Congreso en Washington, D.C. Así mismo, iniciamos el contacto de intercambio con otras Bandas y en 1987 visitamos The U.S. Marine Band, en ese entonces, bajo la dirección del Coronel John Bourgeois, quien por cierto, también había asumido el cargo en 1979 y formaba parte del Consejo Directivo de WASBE.

Se inició así, una amistad cordial y muy productiva entre nosotros, que se concretó en una invitación para participar en la Conferencia que se realizaría ese año en Boston, momento propicio para pasar a ser integrante de dicha Asociación.

Nuestra América Latina se incorpora de manera formal a dicha Asociación, durante la Tercera Conferencia Bienal realizada en Boston, USA ese año 1987.

En aquella ocasión y por iniciativa personal, como consta en las Actas de Boston 87, se creó el Capítulo Latinoamericano y del Caribe, inicialmente con el nombre de ALABE y posteriormente, con el de Asociación Latinoamericana y del Caribe de Bandas y Ensambles, ALACBE.

Pocos países latinoamericanos nos encontrábamos presentes en aquella WASBE 1987; Argentina estuvo representada por los maestros Miguel Angel Gilardi y Daniel Schapiro, quienes se desempeñaban como directores de la Banda Sinfónica Municipal de Buenos Aires y de la Banda Sinfónica de la Provincia de Córdoba, respectivamente; y además por Alberto Emilio Sobrino. A Brasil lo representó el maestro Antonio Domingos Sacco y Venezuela estuvo representada por mí, como director de la Banda Marcial Caracas, para ese entonces; al Consejo Directivo de la WASBE lo representó, el Presidente, Jan Molenaar, quien con su firma ratificó el Acta Constitutiva. Más tarde se integraron el maestro Gerald Brown en representación de Costa Rica; el compositor Herman Snijders por Suriname, autor de numerosas obras para Banda entre las cuales se incluye, una Misa en Fa para Solistas, Coro y Banda; Cirandinha; Danza Gitana, Tango para un Toreador y muchas otras, y el compositor argentino Vicente Moncho, conocido y prolífero autor de muchas obras para solistas, orquesta y un extenso repertorio de obras para Banda entre las cuales destacan: Acontecer para Violín, Ensamble de Vientos y Percusión; El Don del Aguila; …De Tango; I Heard you Solemn-Sweet pipes of the Organ; Ondas para Soprano y Banda, etc; en calidad de Asesor Permanente de la Asociación.

Más adelante, también encargamos obras a otros compositores, entre ellos el Tríptico para Banda, al maestro Federico Ruíz ganador de varios premios y Cuentas Claras (Keep Count), al maestro Ricardo Teruel, igualmente, ganador de premios de composición. Y estrenamos en Venezuela, Argentina y Colombia, obras de Norman Dello Joio, Coby Lankester, Warren Benson, Vicente Moncho, Herman Snijders, Alfonso Tenrreiro Vidal, Daniel Milano Mayora y muchos otros compositores.

Todo esto, viene a resumir un poco lo que fue el Proceso Inicial de Renovación e Integración de nuestras Bandas a los parámetros internacionales en lo referente al establecimiento de Orgánico, o Plantilla, nuevos repertorios, organización y muchos otros aspectos profesionales.

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* Sin embargo, hechas estas explicaciones anecdóticas, en el presente capítulo de este nuevo trabajo, me limitaré a considerar los Aspectos referentes a la Organología y Conformación de las Bandas de acuerdo al Orgánico Moderno, es decir, al utilizado más frecuentemente por la mayoría de las Bandas Sinfónicas en casi todos los países, sobre todo, a partir del año 1981 cuando, como hemos dicho, se constituyó la WASBE.

Pero antes, y como antecedente muy inmediato, considero conveniente y útil recordar la Tabla de Instrumentos de Viento que podemos encontrar en el capítulo intitulado: De l´orchestration militaire de la Encyclopédie de la Musique Lavignac, citada por el eminente tratadista Jaap Kool en su obra publicada en Alemania en 1931 con el título de Das Saxophon; allí podemos leer la siguiente lista de instrumentos, la cual nos da una idea exacta de cómo se presentaba el panorama organológico de las Bandas, durante las dos primeras décadas del S.XX:

Instrumentos de Timbre Cristalino

Flautas: Flauta en Mi Bemol Flauta en Do Píccolo en Re Bemol y en Do Flauta Bajo en Sol

Instrumentos de Timbre Vibrante

Oboes: Oboe Pastoral en La Bemol y en Sol Oboe d´amore en La Corno Inglés en Fa Oboe Barítono (Heckelphone) en Do Fagote en Mi Bemol y en Do, Contrafagote en Do

Sarrusófonos: Sopranino en Mi Bemol Soprano en Si Bemol Alto en Mi Bemol Tenor en Si Bemol Barítono en Mi Bemol Bajo en Si Bemol Contrabajo en Mi Bemol

Instrumentos de Timbre Oscuro

Clarinetes: Píccolo en Mi Bemol y en La Soprano en Si Bemol y en Do Alto en Mi Bemol Contralto en Fa (Corno di Basseto) Bajo en Si Bemol Contrabajo en Si Bemol

Saxofones: Sopranino en Mi Bemol Soprano en Si Bemol Alto en Mi Bemol Tenor en Si Bemol Barítono en Mi Bemol Bajo en Si Bemol Contrabajo en Mi Bemol

Instrumentos de Timbre Brillante

Cornetas: Corneta Sopranino Píccolo en Si Bemol Sobreagudo Corneta Sopranino en Mi Bemol Corneta Soprano en Si Bemol

Trompetas: Sopranino en Mi Bemol; Re y en Fa Soprano en Si Bemol; Do; Mi Bemol y en Fa Bajo en Si Bemol y en Do

Trombones: Sopranino en Si Bemol (supuesto a ser en Do pero actualmente en Si Bemol) Soprano en Fa (incorrectamente denominado en Sol) Alto en Mi Bemol (incorrectamente denominado en Re Bemol) Tenor en Si Bemol (incorrectamente denominado en Do) Bajo en Fa (incorrectamente denominado en Sol) Contrabajo en Si Bemol (incorrectamente denominado en Do)

Instrumentos de Timbre Sonoro

Cornos: En Mi Bemol, en Si Bemol y en Fa

Cornófonos: Alto en Mi Bemol Barítono en Si Bemol Bajo en Si Bemol Contrabajo en Mi Bemol y en Si Bemol

Fliscornos: Pequeño Fliscorno (Bugle) en Mi Bemol

Instrumentos de Timbre Sentimental

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Fliscornos y Saxhornos: Fliscorno Soprano en Si Bemol Alto en Mi Bemol (altflügelhorn / saxhorno alto o tenor bugle) Barítono en Si Bemol Bajo en Si Bemol (saxhorno bajo en Si Bemol) Contrabajo en Mi Bemol y en Si Bemol (saxhorno contrabajo en Mi Bemol y en Si Bemol)

Como podemos ver, para la época referida, el panorama era bastante amplio y bien surtido en variedad de timbres. Si a ello agregamos la enorme gama de instrumentos autóctonos de cada región que suelen incluirse en muchas obras para Banda, el abanico se abriría, aún más.

Por ello, y especialmente, desde 1981, ha sido necesario poner un especial empeño para lograr parámetros comunes en lo que se refiere al orgánico o plantilla de músicos que integran una banda, con el objeto de propiciar que todas las obras, o buena parte de ellas, puedan ser ejecutadas por todas las bandas de todos los países. Esto ha facilitado y estimulado además, la edición de partituras por parte de las grandes casas editoras. Por supuesto, dicho trabajo ha debido ser enfrentado con mucha cautela y sentido común, ya que lo que se pretende es unificar sin automatizar ni sacrificar las expresiones autóctonas de cada país o región. Para lograr tal objetivo, siempre se insiste en la conveniencia de que cada compositor o arreglista escriba para un orgánico básico común y sugiera, dentro de lo posible, instrumentos opcionales, alternos y/o equivalentes que puedan suplir a los instrumentos regionales o exóticos, cuando las partituras así lo exijan.

Este movimiento ha facilitado también, los procesos de fabricación masiva de instrumentos de viento y percusión. Las grandes fábricas se han podido concretar al proceso de perfeccionamiento constante de los instrumentos de mayor demanda que producen y de los accesorios requeridos para su óptima utilización y rendimiento.

De la misma manera, el trabajo de los Directores y ejecutantes virtuosos solistas se ha podido convertir en una actividad con proyección y mercado internacional.

Hoy, y con el apoyo de la WASBE, BASBWE y muchas otras organizaciones similares, podemos contar con muchas y prestigiosas Casas Editoriales que realizan publicaciones de música muy variada, la cual comprende no sólo, las obras de los grandes y cotizados compositores tradicionales y contemporáneos sino también, piezas populares y también obras de carácter regional de los más variados países del mundo. Pero lo más importante, es que podemos tocarlas en cualquier país. Es importante señalar, que a pesar de sus limitaciones, varios países latinoamericanos también se han incorporado a la tarea de estimular, propiciar, promover concursos y realizar ediciones de obras para Banda con criterios similares.

Pasemos ahora, a analizar el Orgánico Universal aceptado comúnmente, en nuestros días, por la mayoría de las grandes bandas sinfónicas del mundo. Advirtiendo que no es erróneo denominarlas así, ya que son múltiples las Sinfonías y obras mayores que para ellas se han compuesto.

Cuando somos consultados al respecto, no nos cansamos de recomendar la adopción del orgánico propuesto, ya que a él responde la mayoría de obras publicadas en la actualidad; incluso, obras de períodos anteriores han sido revisadas cuidadosamente y adaptadas por verdaderos expertos y conocedores de la moderna instrumentación.

El Organico Moderno más usual en nuestros días es:

GRAN BANDA SINFONICA

Píccolo Flautas Oboes Corno Inglés Fagotes / Contrafagote Clarinete Píccolo en Mi Bemol Clarinetes Soprano en Si Bemol Clarinete Alto en Mi Bemol Clarinete Bajo en Si Bemol / Opcional: Clarinete Contrabajo en Si Bemol

Saxofones Alto en Mi Bemol Saxofón Tenor en Si Bemol Saxofón Barítono en Mi Bemol / Opcional: Saxofón Bajo en Si Bemol Cornos en Fa/Si Bemol y Mi Bemol

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Opcionales: Fliscorno Sopranino en Mi Bemol Fliscornos Soprano en Si Bemol Fliscornos Alto (Tenor) en Mi Bemol Fliscornos Barítonos / Euphomium, en Si Bemol

Cornetas en Si Bemol (Opcional: Corneta Píccolo en Mi Bemol) Trompetas en Si Bemol Trombones Tenores en Si Bemol Trombón Bajo en Fa Tubas / Bajos en Si Bemol / Mi Bemol

Contrabajos de Cuerda

Timpani Percusión Completa (incluida Celesta, Xilófono, Piano, etc.)

Opcional: Arpa.

Nota: Los instrumentos mencionados como opcionales, aparecen ocasionalmente y sobre todo, en las ediciones europeas, en especial, las italianas y españolas.

Este orgánico no representa la exclusión ni, mucho menos, la extinción de los viejos y curiosos instrumentos, a los cuales se les podrá ver como solistas invitados o como integrantes de ensambles o grupos especializados.

Dicha afirmación permite hablar de la existencia de agrupaciones menores y agrupaciones específicas de familias de instrumentos de viento y percusión, a las cuales nos referiremos en el siguiente capítulo.

14. Las Bandas y su relación con otras Agrupaciones de Instrumentos de Viento y Percusión

Como hemos visto a lo largo de este trabajo, las Grandes Bandas tuvieron su origen remoto en las pequeñas agrupaciones ceremoniales y de cámara de tiempos anteriores. Pero a su vez, han dado origen a la formación de novedosos grupos o Ensambles Instrumentales.

Para analizar este punto con mayor claridad y precisión, me basaré en la interesante TEORÍA DEL PARAGUAS, expuesta hace varios años por un colega de la WASBE, el conocido compositor y director norteamericano Donald Hunsberger.

En dicha teoría, se coloca el eje o varilla central del paraguas como límite entre las agrupaciones fijas y las agrupaciones flexibles.

De derecha a izquierda de dicho eje, se encuentran ubicadas las Agrupaciones Fijas, es decir, aquellas que cuentan con una instrumentación y un número de ejecutantes fijos o invariables. Son ellas:

· El Quinteto de Metales · El Quinteto de Maderas · El Octeto Clásico · Las Bandas de Metales (Brass Band) · Las Bandas Militares (Military Band) · Las Bandas de Concierto (Concert Band) · Las Bandas Sinfónicas

En el Eje o Varilla central encontramos a la Banda Sinfónica y de izquierda a derecha del eje o varilla, figuran las Agrupaciones Flexibles, o de conformación moldeable, tanto en instrumentación como en número de ejecutantes, a saber:

· Música armónica variable · Orquesta de Cámara de Instrumentos de Viento · Ensamble de Instrumentos de Percusión · Ensamble de Instrumentos de Madera · Ensamble de Instrumentos de Metal · Vientos/Percusiones Orquestales · Ensamble de Instrumentos de Viento

Gráfico ilustrativo de la Teoría del Paraguas

El Quinteto de Metales, una combinación de instrumentos muy de moda a partir de la primera mitad del siglo veinte, después del desarrollo de los instrumentos de viento-metal. Consta regularmente, de dos trompetas, corno, trombón y tuba.

El Quinteto de Maderas, es el cuarteto integrado por flauta, oboe, clarinete y fagot al cual se añade el corno, por su timbre noble. Se cultivó especialmente, en París a partir del año 1810. Sus principales cultores fueron Anton Reicha (1770-1836), autor de más de una veintena de quintetos de viento y varios trios para trompas; Johann Baptist Wanhal ó Vanhall (1739-1813), Leopold Hoffmann

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(1730-1793), Paul Wranitzky (1756-1808) y Franz Krommer (1760-1831), entre otros.

El Octeto Clásico, el sexteto, septiminio, octeto y noneto de vientos, fueron agrupaciones musicales muy usadas para las Serenatas, Divertimentos y otras formas de música que solía presentarse al aire libre o en lugares distintos a los teatros y salas de concierto. Regularmente integran al Octeto Clásico, dos oboes, dos clarinetes, dos cornos y dos fagotes, aunque a veces, suele estar presente la flauta.

Las Bandas de Metales (Brass Band),Tienen su origen en la antigua tradición y costumbre del uso de fanfarrias en ceremonias oficiales y rituales. Desde los más remotos tiempos, hemos visto como las distintas civilizaciones reservaban el uso de los cuernos, luras y posteriormente, clarines, trompetas y trompas de metal para usos estrictamente ceremoniales. Más adelante se hicieron famosas las fanfarrias de infantería y de caballería.

A partir del siglo XIX de allí, derivó un grupo musical integrado en su totalidad por instrumentos de viento-metal y percusión; sobre todo, desde 1853, fecha en que comenzaron a realizarse los famosos festivales de Bandas de Belle Vue en Manchester, Inglaterra. Grandes compositores como Sir Edward Elgar, Gustav Holst, Sir Granville Bantock, John Ireland, Eric Ball, John Carr, Gilbert Vinter y Roy Newsome, han escrito obras para estas Bandas, lo cual permite contar con un interesante, extenso y variado repertorio.

Por cierto, al hablar de estas Bandas, es imposible dejar de mencionar la labor musical y promotora que ha ocupado el músico británico Harry Mortimer, quien ha sembrado la semilla de ellas en múltiples países.

Hoy, encontramos Brass Bands en Australia, New Zealand, Japón, Bélgica, Holanda, Alemania, Dinamarca, Suecia, Noruega, Suiza y Estados Unidos.

La conformación más usada en un Brass Band, suele ser de 30 a 32 músicos distribuídos así:

1 Corneta en Mi Bemol 1 Saxhorno Soprano o Pequeño Bugle 1 Corneta Principal en Si Bemol 9 Cornetas en Si Bemol, distribuídas en 3 primeras, 3 segundas y 3 terceras 1 ó 2 Fliscornos ( Flügelhorn) en Si Bemol 3 Altohorn (Altflügelhorn) o saxhorno alto en Mi Bemol 2 Barítonos (Treble Cleff) 2 Euphonios (Bass Cleff) 3 Trombones incluyendo un Trombón bajo 4 Tubas 2 ó 3 Percusionistas 1 Director.

Las Bandas Militares (Military Band), Como hemos visto a lo largo de esta obra, el desarrollo y la conformación de las Bandas Militares ocurrió a lo largo de todo un proceso histórico en el cual jugaron papel importante además del natural desarrollo humano, las necesidades, usos costumbres, tradiciones y recursos de cada país y cada cuerpo armado.

Podemos distinguir dentro de este proceso, algunos tipos de Banda más frecuentes. El primero que nos sale al paso es La Batterie, Banda de Percusión o Banda Seca. Encargada de batir la marcha y motivar a los combatientes, estas agrupaciones cuyo fin específico es cumplir los usos y costumbres propios de los cuerpos armados, suelen estar integradas exclusivamente por diversos tipos de tambores (redoblantes o snare drum, granaderos o tenor drum y bombos, gran caja ó bass drum). Se les llama Bandas Secas, por carecer de otro tipo de instrumentos. No obstante, con el tiempo se les agregaron los Pífanos y luego los clarines, cornetines de órdenes y cornetas (sin pistones); más adelante, las modernas cornetas, trompetas, fliscornos y saxhornos de diferentes tipos, modalidades y variedad de formas de construcción.

El paso siguiente en este proceso, fueron las llamadas Bandas de Infanteria o Batterie Fanfare, consisten en un desarrollo de las anteriores. Ya el rey Luis XI, de Francia, había implantado el uso de grupos de oboistas y otros instrumentos de viento para resaltar las ceremonias reales. Francisco I, como vimos, constituyó un grupo de trompetas y oboes reales en lo que se llamó la "Grande écurie". Más tarde, Luis XIV consolidará esta agrupación encomendándola a diversos

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maestros tales como J.B. Lully, Anne Danican Philidor, y otros. Napoleón las integra con 20 tambores y luego les agrega 24 clarines.

Con el correr de los tiempos se agregarán otros instrumentos: trompetas y/o cornetas, bugles, pífanos y serpentones, además de los variados tambores; más adelante, se sustituyen por modernos instrumentos y se agregan saxofones, clarinetes, flautas, oboes, cornos, triángulos, panderos, platillos y muchos más.

Estas agrupaciones darán lugar a las que hoy llamamos Marching Bands o Bandas de Marcha, engalanadas en nuestros días con la presencia de Cheerleaders, es decir, bastoneras y pompones, cuando se trata de Bandas Universitarias o Bandas Show. Por cierto, como dato curioso recordaré que en mayo de 1992, una Banda de este tipo, la Showband Marum de Holanda, marchó tocando desde Assen hasta la población de Marum, una distancia de 72.2 kilómetros; completaron este trayecto 52 músicos de los 60 que lo habían iniciado y en un tiempo de 13 horas y 50 minutos.

Hoy, podemos contar y encontrar muchas Bandas de todas estas modalidades.

De la mayor complejidad de ellas, es decir de las más completamente dotadas en instrumentos y variedad de timbres, surgió el modelo de Banda Militar para la cual fueron compuestas las primeras grandes partituras de finales de siglo XIX y principios del XX, por Berlioz, Vaughan Williams, Holst, Piston, Grainger, entre otros.

Este modelo es la Banda de nuestros días, la Banda de hoy. Ella, aún cuando puede seguir cumpliendo aquellas funciones tradicionales de la marcha y el servicio, se presenta con una nueva misión: es la orquesta de vientos dinámica que permite a los compositores abordar un nuevo lenguaje y estilo musical, conocido co el Género Bandístico. A esta Banda, cuando se sienta frente al público la solemos llamar: Banda de Concierto (Concert Band) y cuando se amplía y complementa con todos los instrumentos de las familias: Banda Sinfónica (Symphonic Band); los franceses la denominan Harmonie o Musique.

Conviene en este momento recordar que reseñamos con satisfacción el hecho de que, además de otros grupos de tradición ancestral, cada día es más frecuente ver la aparición de Curiosos Ensambles Instrumentales, cuyos resultados sonoros consignados, muchos de ellos, en testimonios grabados, son verdaderamente sorprendentes y de gran calidad, tales como los Sextetos, Cuartetos y Orquestas de Saxofones (World Saxophone Orchestra); Cuartetos y Ensambles (Choir) de Clarinetes (Ionian Clarinets Choir); Ensambles y Orquestas de Flautas; Cornos; Tubas (Tuba-a-Six); además de curiosas combinaciones y mezclas.

Entre los pequeños grupos o Bandas de tradición ancestral, merecen mencionarse por ejemplo, las Bandas Escocesas, tradicionales en esa región del mundo. Sus músicos van ataviados con el típico tartán (falda de cuadros) y suelen integrarse con radoblantes, tambores militares y gaitas. Con mucha frecuencia les acompaña una mascota que usualmente, es un perro.

Bandas Típicas Irlandesas, agrupación tradicional en Irlanda, suele vérseles también en algunas ciudades norteamericanas. Sus músicos generalmente, se visten a la usanza irlandesa con el sombrero tricornio. La instrumentación más acostumbrada son los tambores y pífanos.

Bandas del Salvation Army; En los países de tradición anglosajona, suelen verse tocar por las calles y aunque no poseen una instrumentación fija, están generalmente, integrados por bombos, panderos, saxofón, clarinete, trompeta, trombón y tuba. Visten, además, curiosos uniformes con distintivos.

Bandas de Dixieland, o Bandas de New Orleans, son las tradicionales Bandas de los primeros tiempos de Jazz de Dixieland. Populares en los pueblos vecinos de New Orleans, Estado de Louisiana, participan por igual, en los funerales, fiestas y conmemoraciones comunitarias tradicionales. Por lo general se integran con un helicón (tuba) o Sousafón, Bombo, trombón, trompeta, saxofón, clarinete y redoblante; a veces se acompañan con banjo, o guitarra. Cuando

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actúan en bares o Cafés, suelen agregar el piano. Popularmente se les llama Dixie´s Bands.

Banda Tirolesa, es la típica banda de los pueblos alemanes, austríacos y suizos de la región del Tirol y los Alpes. Visten trajes tradicionales de cada pueblo; en Alemania y Austria no faltan en las fiestas populares, bodas y clásicos Festivales de la Cerveza (Oktoberfest); la integran una tuba, acordeón, clarinete, trompeta, trombón, tambor y bombo. En los Alpes suizos se les agregan los Cornos de los Alpes, largos instrumentos de sonido muy característico y peculiar.

Banda de Procesión, En los pueblos de Venezuela, al igual que en otros países de ascendencia hispana o lusitana, es frecuente y tradicional el uso de una pequeña agrupación bandística para tocar marchas religiosas en la Procesiones que se efectúan en Semana Santa o Semana Mayor y también, en las Festividades de algún Santo Patrono (Fiesta Patronal).

Estas Bandas suelen tocar también, música fúnebre en los sepelios de personas o personajes que por su carisma logran en vida ganarse el afecto colectivo. Suelen imprimir un aire típico a sus interpretaciones y regularmente se integran así: 2 trompetas, 2 ó 3 clarinetes, 1 Bombardino, 1 trombón, 1 saxofón alto, 1 saxofón tenor, 1 Tuba, 1 redoblante y Bombo.

En Venezuela, sin embargo, es muy popular la expresión de Vente tú para denominar así, el fenómeno que se da cuando algún músico sustituye con el instrumento que toca, a cualquiera de los antes mencionados, lográndose así las más variadas combinaciones de timbres. Es decir, se adapta la pieza musical a los recursos humanos y musicales que logran reunirse para cada ocasión.

Banda Cómica, o Banda de Circo, tienen mucha tradición especialmente, en Europa y también en los Estados Unidos de Norteamérica y en México. Sin embargo, las agrupaciones de Música Cómica, se remontan y tienen sus orígenes en los tiempos de los primeros ioculatores o juglares. En ellas se conjugan instrumentos tradicionales con los más divertidos artefactos sonoros. Podemos recordar a Bandas Cómicas de Circo muy famosas, tales como: Red Ingle, Splike Jones & his City Slickers, The Firehouse Five Plus Two, Sid Milwall´s Nitwits y en especial, Bob Kerr´s Whoopee Band. En Caracas, se organizan desde tiempo atrás, Bandas para la presentación de los Circos, como lo podemos apreciar en la fotografía del año 1945, en la cual vemos al recordado Carlos Hermoso con su bajo.

Banda de Jazz, o Jazz Band, o Jazz Band, la primera agrupación importante de este tipo data del año 1895, estaba dirigida por Buddy Bolden, llamado Rey de los músicos de New Orleans. Tocaba en salones y también en sesiones de baile que se organizaban en los parques. La integraban cuatro bajos helicones, cinco trombones, un bombardino, dos cornos, dos trompetas, un fliscorno, un saxofón, un clarinete (ambos intrumentos tocados por el mismo intérprete), un bombo o bass drum, un cimbalista y un redoblante. Luego surgieron otras Bandas, tales como la Banda Olympia, la Creole Band de Kid Ory y la Banda Eagle; todas ellas acostumbraban tocar improvisando la música.

Más adelante apareció la Jazz Band de Joe King Oliver, esta agrupación se dedicó al jazz y tenía ocho músicos. Estas Bandas evolucionan y se desarrollan hasta lograr una plantilla de mayores músicos en 1924, tales como las Bandas de Fletcher Henderson y Don Redman.

Dance Band, Stage Band o Big Band, conocidas entre nosotros simplemente, como Orquestas o Bandas de Baile, tuvo sus orígenes hacia fines de 1924 y se desarrolló en los años 30´, aunque su peculiar auge fue en la década de los 40´.

A partir de las Bandas de Henderson y Redman, innumerables salas de baile, palais-de-dance, hoteles y ballrooms que promovieron y estimularon la formación y desarrollo de estas agrupaciones musicales, las cuales aún hoy, conservan su conformación así:

Cuatro o cinco saxofones (versátiles que podían tocar clarinetes o flautas) Cuatro o cinco metales (dos o tres trompetas y dos trombones) Y Cuatro Bases Rítmicas (piano, guitarra, batería y bajo de cuerdas o contrabajo). Algunas veces se les agregaba el banjo.

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Fue así, como nacieron las Big Bands o Grandes Bandas de Baile, tales como la de Glenn Miller, Tommy y Jimmy Dorsey, Jack Hylton, Count Basie, Lionel Hampton, Artie Show, Duke Ellington y Sy Oliver, entre otras, cuyos discos conservamos. La Orquesta o Banda de Jazz que hoy utilizamos no es más que una ampliación de la banda de los años 30´. Usualmente, se conforman con:

Cinco saxofones (versátiles) Cuatro trompetas Tres trombones tenores y un trombón bajo, Piano, batería, bajo y guitarra. A veces se completa con instrumentos electrónicos como Teclados Sintetizadores, String Ensemble, etc. suele llamarse Stage Band o Banda de Show ó Escenario.

Quisiera dedicar unas líneas para referirme particularmente, a una agrupación ya nombrada, muy peculiar y de gran calidad musical que funciona en el Sweelinnck Conservatorium de Amsterdam, Holanda; se trata de la World Saxophone Orchestra, iniciativa del destacado profesor de saxofón Ed Bogaard (1943). Agrupa a más de una decena de saxofonistas que interpretan toda la familia de dichos instrumentos logrando así, un ensamble completo de mucha coherencia sonora y de gran extensión y variedad de timbres. Su plantilla es: 1 saxo sopranino, 2 saxo sopranos, 3 saxo altos, 3 saxo tenores, 2 saxo barítonos y 1 saxo bajo. Acerca de las agrupaciones que aparecen de Izquierda a Derecha del Eje o varilla central del Paraguas, no haré comentarios especiales ya que, como bien indican sus denominaciones, se trata de Agrupaciones de Conformación Variable y heterogénea. Son ellas,

Los Grupos de Música Armónica Variable (Bandas varias), Orquesta de Cámara de Instrumentos de Viento, Ensambles de Instrumentos de Percusión, Ensambles de Instrumentos de Madera, Ensambles de Instrumentos de Metal, Vientos/Percusiones Orquestales, Ensambles de Instrumentos de Viento.

15. Elementos fundamentales para la conformación de una Biblioteca de Repertorio Musical para las Bandas modernas en los países Latinoamericanos y del Caribe

Un aspecto muy importante dentro del proceso de modernización de nuestras bandas, es el relativo a la conformación de sus Bibliotecas de Repertorio.

Aquí, es fundamental tomar en cuenta seis (6) aspectos básicos que sintetizan las metas y objetivos principales que deben incluirse en ella; en otras palabras, una Biblioteca de Repertorio debe contener:

• Obras de estudio, métodos individuales y colectivos, obras didácticas, etc. • Repertorio bandístico nacional tradicional del propio país, el cual debe

seleccionarse y clasificarse por su calidad, valores, autores, títulos y grados de dificultad. Debe reunir las obras que conforman el patrimonio cultural y representan la identidad nacional respectiva.

• Repertorio bandístico nacional de cada país con obras de la nueva y moderna literatura musical para bandas. Deben incluirse las obras premiadas y las no premiadas en concursos nacionales; obras encargadas, editadas o no.

• Repertorio Latinoamericano e Iberoamericano y del Caribe, igualmente seleccionado y clasificado por su calidad, valores y grados de dificultad técnica.

• Repertorio Internacional para Bandas, el cual debe comprender obras de diferentes compositores de variados períodos, tendencias o corrientes de composición; y material de distintas editoriales. Pueden incluirse obras de intercambio con otras bandas, no editadas.

• Nuevas obras; esto es, nueva literatura para banda, obras que vayan apareciendo, con nuevas técnicas y tecnologías, música experimental, etc.

• Archivo Digital de obras tanto de cada Banda como de intercambio con otras agrupaciones.

Es importante mencionar, el interesante esfuerzo que, a pesar de las limitaciones y el poco interés y respaldo general, que tales iniciativas tienen.

Algunos de nuestros países vienen promocionando concursos de composición para

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banda, encargo de obras y ediciones. Así como también, organizan festivales periódicos en los cuales se estrenan composiciones y arreglos de nuestros músicos. Dentro de estas iniciativas merecen especial mención, entre otros, los programas que adelanta la Dirección de Artes del Ministerio de Cultura de Colombia, a través de la Coordinación del Programa Nacional de Bandas; también, los Premios Nacionales de Composición para Banda promovidos en algunas ocasiones -y que bien valdría la pena continuar- por el Consejo Nacional de la Cultura, CONAC, de Venezuela y los encargos y premios promovidos por la Banda Sinfónica Municipal de Quito, Ecuador y la Banda Sinfónica Municipal de Buenos Aires, Argentina, la Banda de Ortigueira, en Galicia; y varias Bandas españolas de Cataluña y Valencia, por tan sólo citar algunos ejemplos.

16. Posibilidades para el aprovechamiento y optimización de la acción llevada a cabo por las Organizaciones Internacionales para la música de Bandas

La vía más expedita para el máximo aprovechamiento y optimización de las ventajas que organizaciones como, la World Association for Symphonic Bands and Ensembles, WASBE; British Association for Symphonic Bands and Wind Ensembles, BASBWE; Asociación Latinoamericana y del Caribe de Bandas y Ensambles, ALACBE; Internationale Gesellschaft zur Erforschung der Blasmusik, IGEB; International Military Music Society, IMMS, y muchas otras más, ofrecen para el conocimiento, mejoramiento, organización y desarrollo de nuestras bandas, es sin duda, la participación en ellas.

Es necesario insistir hasta el cansancio que, la inscripción y presencia de nuestros países en los FOROS y CONFERENCIAS INTERNACIONALES de estas organizaciones, es de verdadera importancia y trascendencia. Participar en ellas nos permite además, disfrutar de la amistad de miles de colegas del mundo y poder disfrutar de las enormes ventajas tales como, cursos de perfeccionamiento para nuestros jóvenes, becas, seminarios, clínicas, publicaciones periódicas, archivos computarizados, repertorios, páginas Web, grabaciones y toda clase de informaciones actuales sobre lo que sucede, día a día, en el Maravilloso Mundo de la Banda. Hoy, resulta muy fácil vincularse a tales organizaciones, tan sólo basta consultar las Páginas de Internet (www. wasbe.org) y en un instante podremos asociarnos a cualquiera o a todas ellas, conocer con detalles, las ventajas que cada una nos ofrece y hacer un seguimiento permanente y cuotidiano de las actividades que llevan a cabo.

17. Futuro de las Bandas en el Desarrollo Musical Latinoamericano

Cuando nos hemos referido a la creación o aparición de varias Bandas a lo largo de este trabajo, no hemos pretendido hacer una historia cronológica ni mucho menos, un recuento total y global de la enorme, y cada vez creciente, cantidad de compositores, directores, músicos, personas y agrupaciones bandísticas que han desarrollado y desarrollan su actividad en todas las épocas y en todo el mundo.

La referencia la he presentado para reforzar la documentación acerca del Proceso de Consolidación y Desarrollo que la Banda, como agrupación musical con plantilla, repertorio y funciones propias y específicas, ha experimentado. Lo cual nos permite pensar que el futuro de las Bandas en el Desarrollo Musical Latinoamericano se deriva de su propia historia, a la cual nos hemos referido reiteradamente, en este trabajo.

En efecto, la importancia que estas agrupaciones han tenido y siguen teniendo en nuestra América, la podemos deducir de los usos, tradiciones y costumbres, en los cuales las Bandas continúan siendo imprescindibles para las comunidades y pueblos de nuestro Continente y del Mundo.

Nos referimos a los Actos Protocolares, celebraciones, fiestas populares y comunitarias, festividades religiosas y tradicionales, ceremonias militares, oficiales y todos aquellos actos que las Bandas realzan, con su majestuosa presencia, repertorios, brillo y lucidez. Otros ámbitos en los cuales la presencia de las Bandas, es siempre esperada por los públicos, son el medio escolar, universitario y deportivo. A esto, debemos añadir los numerosos Certámenes, Festivales y Concursos Nacionales, Regionales e Internacionales que cada año se repiten e incrementan en

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muchos países de los diversos Continentes. Por otra parte, el acceso y preparación de los jóvenes para integrar las Bandas, tiene el incentivo adicional de que el aprendizaje básico para la ejecución musical de los instrumentos de viento y percusión se realiza en lapsos de tiempo menos largos y con resultados bastante sorprendentes, dependiendo siempre, por supuesto, de la metodología y de los profesores.

Existe en la actualidad, gran cantidad de Recursos Auxiliares para facilitar dicho aprendizaje; numerosos editores han producido métodos impresos y audiovisuales que permiten un progreso evidente, aún con la ausencia de docentes, o con la supervisión esporádica de éstos.

Además, el uso de tales instrumentos dentro de la música popular, pop, salsa, folklore y grupos de baile, agregan al aprendizaje, un elemento de atracción comercial que permite al joven, percibir ingresos derivados de la práctica musical, a medida que progresa en el dominio técnico del respectivo instrumento.

A partir de estas consideraciones, podríamos establecer el siguiente gráfico que puede ilustrarnos acerca de los pasos que deben dar las bandas para mantenerse en la senda que va, desde el utilitarismo del servicio y el entretenimiento, hacia la estética o sea, lo que comúnmente, llamamos arte o música como arte.

Ambos extremos o Bases del puente, es decir el Sevicio y el Arte, constituyen los fundamentos esenciales para justifificar la presencia y proyectar hacia el futuro la importancia de la existencia de las bandas en nuestros pueblos y sociedades. Otro elemento que le da vigencia a la música de bandas; es el creciente interés de los compositores en producir música para tales grupos, basados en la demanda que tiene el repertorio para dichas agrupaciones, por parte de las Casas Editoriales, gracias al importante y cada vez más amplio, mercado de dicha música.

En efecto, la cantidad de Bandas diseminadas a lo largo y ancho de países como Estados Unidos, Canadá, Japón, Rusia, Gran Bretaña, Francia, España, Portugal, Alemania, Holanda, Colombia, Chile, Brasil, Costa Rica, Venezuela... y el mundo entero, exige un Mercado Organizado de Música Impresa que responda a variados intereses, que cubra diferentes expectativas, géneros, estilos y muy diferenciados Grados de Complejidad Técnica de Cada Obra (USA, de 1 a 7; Europa, de A a H) que permita a los integrantes de los grupos, enfrentar las partituras con resultados al menos satisfactorios y que al mismo tiempo, permita a los músicos el mutuo conocimiento de la música de otros países y regiones.

Como vemos, las funciones de las bandas siguen teniendo relación con el Servicio y el Entretenimiento -las cuales, les dieron su origen y razón de ser-, a ellas debemos agregar las funciones Educativas, tanto del propio músico integrante de las bandas que va desarrollando sus facultades y habilidades, como de formación del buen gusto y conocimientos por parte del público que se acerca a las bandas; y también, la Función Difusora de las grandes obras de la literatura bandística, concebidas casi siempre para lapsos de tiempo de atención por parte del público, bastante razonables en duración (desde 4 hasta 15 minutos, por regla general) y contenido.

Si a todo esto, agregamos el Espíritu de Competencia y el atractivo del Show o Revista, donde los uniformes, instrumentos, cantidad de ejecutantes, etc., tienen un papel de preponderante atractivo para los públicos; podemos afirmar sin temor a equivocarnos, que las Bandas tienen un futuro muy promisor dentro del desarrollo musical, adaptándose con gran facilidad a las exigencias de los públicos del tercer milenio, cuyo tiempo para el disfrute del arte se encontrará cada vez más comprometido.

Todo lo dicho, evidencia que las Bandas de nuestros días requieren de Directores sólidamente formados, no sólo como músicos sino también como verdaderos líderes, gerentes y promotores culturales.

El Director ha de ser una persona conocedora del repertorio y caracteristicas de la agrupación, capaz de afrontar con toda garantía cualquier problema que surja en su organización, tanto en el aspecto técnico y artístico musical como en el humano y social.

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Debe estar preparado para lograr que su agrupación alcance los niveles musicales más altos dentro de los límites de sus posibilidades en todas sus actuaciones y presentaciones.

Fomentar todos los aspectos que contribuyan a solidificar la personalidad de sus músicos.

Hacer comprender a los músicos que su profesión no sólo consiste en tocar un instrumento, sino que existen muchos otros aspectos que ellos deben cultivar para lograr un verdadero y completo desarrollo de sus facultades y condiciones personales y profesionales.

Debe saber planificar y distribuir el tiempo de los ensayos para lograr cubrir las exigencias de cada repertorio y además, tener la creatividad necesaria para sugerir programas y propuestas artísticas novedosas, que cautiven al público y que sean capaces de generar los recursos necesarios para poder llevar adelante mejores proyectos.

No quisiera concluir este trabajo sin dejar una recomendación a las comunidades y autoridades nacionales, municipales y regionales de nuestros países Latinoamericanos y del Caribe, para que renazca y se refuerce el interés por la conservación y exaltación del hermoso legado y patrimonio cultural que representan nuestras bandas y sus repertorios, dentro de cada pueblo o región, lo cual debe ser motivo de legitimo orgullo de identidad cultural.

También los Medios de Comunicación Social, prensa, radio y televisión deben asumir y realizar una política de difusión de actividades y criterios de opinión que favorezca y dignifique el significado cultural que las bandas tienen dentro del desarrollo y la vida de las comunidades.

Quiero finalizar, tomando una idea del destacado músico y musicólogo español Don Vicente Alonso Salvador, expresada con mucha vehemencia y énfasis en el año 1991, durante el Primer Congreso de las Sociedades Musicales de la Comunidad Valenciana; al prepararnos para ingresar en el Tercer Milenio, hagamos todo lo que esté en nuestras manos para conseguir, como decía Don Vicente,

…que los Quijotes de nuestras Bandas dejen de estrellarse contra los molinos.

18. Alguna bibliografía recomendada sobre el desarrollo de las Bandas en el Mundo • Fabbricatori di strumenti armonici, L.F.Valdrighi; • Studi di strumentazione per banda, A.Vessella; • Les harmonies du son et l´histoire des instruments de musique, J. Rambosson; • Instrumentations Lehre für militair musik, E.J.Saro; • The Riser and development of military music, H.G.Farmer; • Essai sur les instruments, Du Belley; • A pictorical history of Civil War Era, Musical Instruments & Military Bands, R.Garofalo & M.Elrod; • Gli Strumenti d´Órchestra, C.Jachino; • Las Bandas de Música en el Mundo, Bernardo Adam Ferrero; • El Maravilloso Mundo de la Banda, Jesús Ignacio Pérez-Perazzo; • Organografia, ossia descrizione degli strumenti musicali antichi, L.Arrigoni; • Encyclopedie van de Muziek, L.M.G. Arntzenius; • Woodwind Instruments and Their History, A.Baines; • Rapport sur les instruments de musique, fait à la Commission franVaise du jury international de l´Exposition

universelle de Londres, H. Berlioz; • Manuel général de musique militaire à l´usage des armées franVaises, G. Kastner; • Musical Instruments, a Comprehensive Dictionary, S. Marcuse • La Música Popular y los Músicos Célebres de la América Latina, L. Cortijo Alahija; • Ensayos sobre el Arte en Venezuela, Gral. Don Ramón de la Plaza; • Cartas Americanas, Reinaldo Conde de Carlí; • Música y Músicos de Latinoamérica, Otto Mayer-Serra; • Enciclopedia de la Música en Venezuela, Fundación Bigott; • March Music Notes, Norman E. Smith • Drums Corps Guide, Premier Drum Co.

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• Das Neue Lexikon des Blasmusikwesens, Wolfgang Suppan • The Drum, Hugh Barty-King • A History of the Drums and Fifes 1650 to 1700´, G. Derbridge • The World of Brass Bands, Violet & Geoffrey Brand • Documentos y Apuntes para la ubicación histórica de la creación de la Banda Marcial Caracas, Víctor

Salamanqués Guerra &Jesús Antonio Ponce Barreto • Das Saxophon, Jaap Kool • Nouveau Traité d´Instrumentation, François Auguste Geavaert • A History of Military Music in America, William Carter White La Música en el Tiempo Histórico de Cipriano Castro, Mario Milanca Guzmán

19. Algunas Revistas y publicaciones periódicas sobre el tema de las Bandas

(Cortesía de Liz Winter, BASBWE) Band News PO Box 18, Cambridge Park, NSW 2747, Australia Clarinet & Saxophone Scene Clarinews 91 Belleveu Parade, Hustville, Sidney 2220, Australia IGEB A-8010 Graz, Leonhardstrasse 15, Postfach 208, Austria Canadian Band Journal / Band Digest International PO Box 5005 Red Deer, Alberta T4N, 5H5 Canadá Le Saxophone 7 Rue de Toutes-Aides, 44600 Saint Nazaire, France The Magazine of IFYOB IFYOB, PO Box 207, K Bialik 2700, Israel Revue Musicale, Siege de l`VGDA 2 Rue Sothene-Weis, L-2722 Luxembourg-Grund, Luxemburg Die Musikhandel Eikbosserweg 181, 1213 RX Hilversum, Netherlands Musiek en Show Koopvaardijstraat 9, 5017 BE Tilburg, Netherlands De Dirigent Kievitsweg 58, 2983 Ridderwerk, Netherlands A.N.V.M. Klanken, Kastanjestraat 33, 1714 WK Schagen, Netherlands St.Caecilia, Schumanstraat 37, 6372 BP Landgraaf, Netherlands Christelike Musiekbode, Postbus 204, 7100 AE Winterswijk, Netherlands Brass Info, Postbus 42, 9230 AA Aurhuisterveen, Netherlands Het Blaasblad, Postbus 19, 1520 AA Wormeveer, Netherlands Bedre Korps, Postboks 130, 2260 Kirkenaer, Norway SAASBE News, Hugo Lambrecht Music Centre, PO Box 68, Parow 7500, South Africa Música y Pueblo, Sorni 22, 46006 Valencia, España Informúsica, Aptdo. de Correos 6232, 46070 Valencia, España Musikant, Box 3128, 58003 Linkoping, Sweden Blasmusikmagasinet, SMF Box 6302, 11381 Stockholm, Sweden Blasut, Presidentgatan 24, 552 65 Jonkoping, Sweden Risveglio Musicale, Corti Gian Battista, Fermo Posta, Boffalora, 6830 Chiasso 3-CH, Switzerland Winds, Egon Publishers Ltd, Royston Rd., Baldock, Herts, SG7 6NW, England Band International, 7 Pendred Rd., Reading Berks, RG2 8QL, England The Blue & The Gold, RAF School of Music, Uxbridge, UB10 0RZ, England The Blue Band, Royal Marines School of Music, Deal, Kent, CT14 7EH, England. Brass Band World, Caron Publications, Eccles Rd., Chapel-en-le-Frith, Stockport SK12 6HB, England British Bandsman Ltd, 64 London End, Beaconsfield, Bucks HP9 2JD, England British Horn Society Newsletter, Elmorem, Hugh Rd., Chipstead, Coulsdon Surrey CR3 3SB, England Clarinet and Saxophone, 8 The Square, DIRM School, Dover CT15 5DR, England Double Reed News, Flat 1, 21 Fitzjohns Ave., London NW3 5JY, England Fanfare, Royal Military School of Music, Kneller Hall, Twickenham TW2 7DV, England The Galpin Society, Ashdown Cottage, Chapel Lane, Forrest Row Sussex RH18 5BS, England PAN, 40 Portland Rd., London W11 4LG, England Allegro, The magazine of the Boosey & Hawkes Group, Deansbrook Rd. Edgware, Middlessex, HA8 9BB, England Salvationist, 101 Queen Victoria St., London EC4P 4EP, England The Trombonist, 4 Sutton Parade, Church Rd., Hendon, London NW4 1RR, England Advance, 3020 E Majestic Ridge, Las Cruces, NM 88001, USA Bandworld, 407 Terrace St., Ashland, Oregon 97520, USA BD Guide, Village Press, 2779 Aero Park Drive, Traverse City, MI 4968, USA Brass Players´Guide, Robert King Music Sales, Shovel Shop Sq., 28 Main St., Bldg 15 N, Easton, MA 02356, USA Brass Research Series, Brass Press, 136 Eighth Av., N. Nashville, TN 37203, USA CBDNA Journal, 136 Kingston Dr., Chapel Hill, NC 27514, USA The Clarinet, School of Music, North Texas State University, Denton, Texas 76203, USA

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Double Reed, 626 Lakeshore Dr., Monroe, LA 71203-4032, USA Drum Corps News, Tri Star Enterprises Inc, Box 108 Boston, MA 02199, USA Drum Corps Review, Drum Corps Sight & Sounds, Box 8052 Madison, WI 53708, USA Flute Talk, The Instrumentalist Co., 200 Northfield Rd., Northfield, IL 60093-3390, USA Flutist Quaterly, Myrna Brown, 805 Laguna Drive, Denton, TX 76201, USA International Trombone Association Journal, Music Dept., University of North Texas, Denton, TX 76203, USA The Instrumentalist, 200 Northfield Rd., Northfield, IL 60093, USA Journal of Band Research, Troy State University Press, Troy, AL 36082, USA Modern Drummer, Drummer Publications Inc., 870 Pompton Av., Cedar Grove, NJ 07009, USA Percussive Notes, Percussive Arts Society, 123 W Main St., Box 697 Urbana IL 61801-0697, USA Tuba Journal, 444 N County St. Waukegan, IL 60085, USA Windplayer, Windplayer Publications, Box 234 Northridge, CA 91328, USA

Apéndice I

Es indudable, que a partir del Preámbulo para Banda de Gonzalo Castellanos Yumar, se abre para Venezuela, una renovada visión de la importancia de las Bandas como medio de expresión de ideas musicales. Por tal razón, he querido consignar una copia de un breve análisis de la obra y una muy resumida noticia briográfica del compositor que me fueran encomendados por la Fundación Vicente Emilio Sojo, para enfatizar con ellos, la trascendencia de ese trabajo. Esta obra sirvió de Pionera para otros compositores venezolanos que se han sumado a la tarea de escribir composiciones para Bandas. Deseamos que tal tendencia continúe y se retomen iniciativas como la de los Premios Anuales de Composición para Banda que tanto favorecieron a este objetivo.

PREAMBULO PARA BANDA -Preamble for Concert Band- Información General acerca del Compositor Autor: Gonzalo Castellanos Yumar Nacionalidad: Venezolano Fecha de nacimiento: 3 de

junio de 1926 Lugar: Canoabo, Estado Carabobo, Venezuela Información General acerca de la Obra: Fecha de encargo: Diciembre de 1982 Comisionada por: Jesús Ignacio Pérez Perazzo

para la Banda Marcial Caracas Organismo Patrocinante: Asociación Civil Asoproband Fecha de conclusión: Marzo de 1983 Fecha de revisión final y entrega: Junio de 1987 Teatro de Estreno de la Obra: Sala José Félix Ribas Teatro Teresa Carreño Ciudad y país: Caracas, Venezuela Fecha del Estreno: 18 de Junio de 1987 Hora: 20,00 hrs.

Ficha Musical de la Obra: Forma Musical: Fuga monotemática, bipartita, con sujeto anómalo. Tonalidad: Si menor,

en el primer episodio Re mayor, en el segundo episodio Fa mayor, en el tercer episodio Instrumentos: Piccolo + Flauta, 2 Flautas; 2 Oboes + Corno Inglés; 2 Fagotes; Clarinete

Piccolo Eb. I, II y III Clarinetes Bb; Clarinete Bajo Bb; Saxofón Alto Eb; Saxofón Tenor Bb; Saxofón Barítono Eb; 4 Cornos en Fa; 3 Cornetas en Bb; 3 Trompetas en Bb; 3 Trombones Tenores; 1 Trombón Bajo; Tubas; Timpani; Campanelli (Glokenspiel); 2 Percusionistas: Redoblante Bombo, Platillo suspendido, Bloques de Madera (Wood blocks), Triángulo.

Duración aproximada: 12 minutos Grado de Dificultad: 6 - 7 América, F -H Europa Nivel: Avanzado Análisis Descriptivo y Otros Datos de la Obra:

El sujeto o tema de la fuga, es magistralmente presentado, desarrollado, invertido y repetido por el compositor a lo largo de la obra con una respuesta muy claramente definida al final de cada tema.

La obra está dividida en tres episodios, las cuales están separadas por dos puentes, el primero en compás ternario en tiempo de joropo, usado para conectar la primera Presentación del sujeto, en la tonalidad de Si menor, con el segundo episodio o Sección de Confrontación.

El otro puente, binario en tiempo de merengue criollo, sirve de conexión entre la restauración en la tonalidad de Re mayor y la reexposición del sujeto en el tercer episodio o Sección de Confirmación, esta vez en la tonalidad de Fa mayor.

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Además de utilizar recursos tales como la aumentación y disminución del tema, el compositor, haciendo gala de un excelente dominio se sirve de una colorida y brillante orquestación para resaltar así, las diferentes secciones y timbres del orgánico bandístico.

Gonzalo Castellanos, utiliza también, interesantes cambios métricos y compases amalgamados que aportan un efecto rítmico especial a la obra. A esto se une, un magistral uso de solistas y coros de las secciones instrumentales que integran la banda, los cuales alternados con impresionantes "Tutti" le aportan una fuerza extraordinaria a la obra.

En palabras del autor, esta obra: …representa la constante contraposición entre la expresión musical académica y la expresión musical popular y, finalmente, el resultado feliz de la síntesis armoniosa logrado, gracias a la conjunción de ambas expresiones…

Dentro del repertorio musical venezolano, esta obra representa el primer eslabón de la cadena de Obras compuestas para Banda por los grandes maestros académicos de las nuevas generaciones. A finales del año 1982, el entonces Director Titular de la Banda Marcial Caracas, maestro Jesús Ignacio Pérez Perazzo, propone al maestro Castellanos la creación de una Obra para Banda, a fin de incorporar las producciones de destacados compositores a la literatura musical bandística venezolana, así como también, poder difundir la vida y obra de los creadores musicales nacionales entre los sectores mayoritarios de la población y lograr, al mismo tiempo, un repertorio de alta factura cualitativa.

El compositor acepta la propuesta; la Asociación Civil Asoproband, presidida por el maestro Pérez Perazzo, asume la responsabilidad del encargo y a mediados de marzo de 1983, el maestro Castellanos finaliza la obra, la cual es copiada, revisada y entregada para su estreno durante el primer trimestre de 1987.

Luego, el día 18 de junio del mismo año 1987 y bajo la batuta del propio compositor, la Banda Marcial Caracas, en la Sala José Félix Ribas del Complejo Cultural Teresa Carreño de Caracas, estrena el Preámbulo para Banda de Gonzalo Castellanos Yumar. Se inicia así en Venezuela, un nuevo período de creaciones para este tradicional e interesante medio de difusión musical, como lo es la Banda.

Datos Biográficos del Compositor:

Nace en la población de Canoabo, Estado Carabobo, Venezuela. A la edad de seis años inicia su preparación musical, bajo la tutela de su padre Don Pablo Castellanos Almenar, quien se desempeñaba como Maestro de Capilla de la Catedral Metropolitana de Caracas y le introduce además, en el estudio del piano y del órgano. Pronto, continúa sus estudios en la Escuela Superior de Música de Caracas, bajo la dirección del maestro Vicente Emilio Sojo; allí obtiene su título de Maestro Compositor en el año 1947, cuando escribe y estrena su Suite Caraqueña para orquesta sinfónica, obra con la cual gana el Premio Nacional de Música 1947.

En el año 1952 obtiene el Premio Nacional de Música de Cámara con su Fantasía Cromática para Organo. Más tarde, el 25 de julio de 1954, recibe el premio Vicente Emilio Sojo con su Antelación e Imitación Fugaz, obra con la cual también obtiene el premio de Mejor Concierto en el Festival Reina Elizabeth de Bélgica, realizado en Bruselas en 1955. En el año 1958 recibe de nuevo, el Premio Nacional de Música por su Fantasía Sinfónica para Piano y Orquesta.

Se trasladó en 1959 a Siena, Italia, donde siguió estudios de Dirección Orquestal con el maestro Sergiu Celibidache. Así mismo, realizó estudios de instrumentación y orquestación con Pierre Wissmer y Daniel Lesür en la Schola Cantorum de París; el curso de nuevas técnicas de la música, en la Academia Chigiana de Siena y el curso de música de cámara en Bonn, Alemania.

En el año 1990 es galardonado con el Premio Nacional de Música otorgado por el Consejo Nacional de la Cultura, CONAC, de Venezuela por méritos acumulados en las actividades musicales.

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Su producción musical incluye varias obras para orquesta sinfónica y de cámara, Concierto para violín y orquesta, cuya grabación realizada en Londres, es nominada por la crítica europea para Disco del Año en 1984; Concierto para viola y orquesta, un importante número de obras vocales y corales y el Preámbulo para Banda.

Es autor de la recopilación, selección y grabación de una Antología de la Música Coral y Vocal de Venezuela. En diferentes ocasiones se ha desempeñado también, como pedagogo y profesor en las especialidades de fenomenología aplicada a la música y en dirección orquestal.

Apéndice II (Tomado del Libro Hitos de Nuestro Sistema Musical, J.I. Pérez Perazzo)

Los Instrumentos de Viento y Percusión en la Música Precolombina

Sobre la música de los pueblos latinoamericanos antes de la llegada de los españoles y otros pobladores europeos, las fuentes de información se reducen a crónicas y relatos de los primeros historiadores, tales como Juan de Castellanos, Pedro Simón, Fernández de Piedrahita, Juan Jara, Diego de Acosta, Juan Gabriel Lezcano, Rodrigo de Melgarejo, el padre Antonio Rodrígues, Sebastián de Salerno, Martín Cano, Jean de Léry y otros. Adicionalmente, se han agregado modernas investigaciones de etnomusicología y folklore que nos pueden brindar idea de tradiciones y usos musicales de nuestros primitivos pueblos.

Importantes trabajos, entre los cuales podemos citar las investigaciones de Isabel Aretz-Thiele de Ramón y Rivera, contenidas en su Manual de Folklore (Monte Avila Editores, Caracas, Venezuela 1988), Historia de la etnomusicología en América Latina: desde la época precolombina hasta nuestros días (Caracas, 1991) y otros libros, han aportado importantes datos sobre las tradiciones, usos y costumbres de los pueblos de Latinoamérica, en especial lo referente a la música. También Don L. Cortijo Alahija, publicó un interesante libro titulado La Música Popular y los Músicos Célebres de la América Latina (Edit. Maucci, Barcelona, España 1910) en el cual nos ofrece datos valiosos para ese estudio.

En líneas generales sabemos que los indios de nuestra América dividían sus instrumentos en dos grandes categorías:

1. Instrumentos Puros, que usaban solamente en sus actos, danzas y ceremonias rituales y religiosas, e

2. Instrumentos Impuros, los cuales eran utilizados en fiestas, danzas y celebraciones populares. En todos estos instrumentos el sistema tonal utilizado era el mismo. El general Don Ramón de la Plaza Manrique (Caracas 1831/ 1886) en sus Ensayos sobre el arte en Venezuela (1883), nos hace llegar informaciones interesantes sobre los instrumentos de viento y percusión utilizados por nuestros indígenas: …De las reliquias encontradas en México, se conservan aún algunos instrumentos grotescos en forma de cabezas humanas, animales y flores, con sólo un agujero en la parte superior, que producen dos sonidos y que han debido usarse probablemente como instrumentos de entonación para acentuar mayormente el canto de los otros, como acontece en muchos lugares de América, en que los indios se valen de una gaita de varios tubos con una sola entonación y que emplean a manera de acompañamiento…

Entre los instrumentos indígenas latinoamericanos de mayor antigüedad, encontramos una Flauta Mexicana de cinco agujeros y embocadura lateral como a dos centímetros del orificio superior. Esta flauta, según la tradición oral recogida en investigaciones, parece que estaba destinada a ser tocada únicamente en las grandes fiestas solemnes en honor de Tezcatlepoca, divinidad representada por un hermoso joven considerado como la segunda persona del Ser Supremo, a quien escogían para ser sacrificado y se le adiestraba en el arte de tocar la flauta. Veinte días antes de la muerte le acompañaban cuatro jóvenes sacerdotisas; y en el momento supremo del sacrificio, la víctima subía las gradas del templo y luego quebraba una flauta, según lo

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establecido en el rito simbólico. También la Flauta llamada Huayra-puhura, llevada a Inglaterra por el Barón Alexander von Humboldt, es uno de los instrumentos indígenas más conocidos, por el exámen hecho de la estructura de su escala. Sus sonidos parecidos a la Flauta de Pan, se logran gracias a sus ocho tubos sustentados por una estructura de piedra o madera. El diámetro de estos tubos es de 0,3 por 1,58 y hasta 4,90 de largo.

El Museo Británico posee también, otro tipo de Flauta Huayra-puhura compuesta de siete tubos dobles adheridos estrechamente por medio de hilos o cuerdas. Esta y otras variedades de Huayra-puhura, así como otros instrumentos autóctonos, podemos verlos en el Museo de Etnomusicología y Folklore de Caracas. La relación de Instrumentos de Viento utilizados por los indígenas latinoamericanos incluye, entre otros los siguientes:

· la Bocina Huanca, instrumento construido de caña de 0,60 de largo y 0,08 de diámetro, en cuya extremidad superior se adhiere un cuerno envuelto en piel de vicuña, por donde se transmite el aire, lográndose un sonido de intensidad considerable.

· Otras Bocinas de menores dimensiones: la Bocina de Cuerno con embocadura de madera, que mide 0,21 de largo por 0,06 de diámetro. La Bocina de Cuerno forrada con piel de vicuña, de 0,20 de largo por 0,05 de ancho.

· La Chirimía, especie de clarinete de madera con unaboquilla formada de dos cañuelas (lengüetas dobles). Dotada de agujeros, mide 0,23 de largo por 0,04 de diámetro.

· El Churru, especie de caracol que mide 0,19 de largo por 0,14 de ancho, utilizado para llamadas rituales.

· El Pingullo, instrumento de doble tubo, uno con seis agujeros y otro sin agujeros con las embocaduras al mismo nivel.

· El Carrizo o Mare, instrumento de sonido dulce y melancólico parecido en su forma a la Flauta Huayra-puhura, es usado para funerales y veladas. Se compone de dos juegos de tubos de caña (llamada Mare), unidos por ataduras de cuerdas u otra fibra. Los hay de variados tamaños y diversa cantidad de tubos.

· El Juruparis, instrumento ritual y misterioso de los indios del Río Jaupes, tributario del Río Negro; parecido a una larga trompeta hecha de un tubo forrado de tiras de palma Pajiaba. Estaba prohibido a las mujeres el mirarlo; la que violaba esta prohibición era condenada a muerte.

· El Ture, también especie de trompeta hecha de bambú y tiene una cañuela en la embocadura; emite sonidos parecidos al oboe y era utilizado como instrumento de connotación bélica para alentar e inspirar el ánimo de los combatientes.

· El Acocotl, trompeta o clarín de forma cilíndrica, construida con la planta del mismo nombre en México. Posee una boquilla y también una campana o pabellón.

· El Botuto, es uno de los instrumentos más antiguos de los indios del Río Orinoco (Venezuela), de grandes dimensiones, construido con arcilla cocida y con barrigas de trecho en trecho. Su sonido es grave y terrorífico. Utilizado en duelos, danzas fúnebres y funerales.

· La Flauta Guajira, descrita por el ilustre sabio, investigador y profesor venezolano, nacido en Prusia, Don Adolfo Ernst (1832-1899) en 1870, como un "instrumento que tiene dos pies y medio de largo y consta de varios trozos de caña de diferentes diámetros, metidos unos dentro de los otros, construída con una boquilla delgada que posee una hoja vibrante introducida en un tudel. El sonido tiene el carácter de un graznido y los tonos son poco diferentes"…

· La Quena, instrumento peculiar de los indios del Perú, a manera de flauta, hecha de caña especial que se produce en ciertos bosques. Los modelos más antiguos aparecen construidos

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en hueso. Según la tradición el primero de estos instrumentos fue construido con la tibia de una hermosa joven indígena muerta y su amante desesperado por el dolor, usó el hueso de la mujer amada para hacer su instrumento. Su sonido es tradicionalmente lastimero y melancólico. Suele construirse de varios tamaños.

· El Uilacapitzly, de México. Instrumento de viento de origen azteca, fabricado con barro cocido, que produce una serie pentafónica, es decir, de cinco sonidos a partir del Re (mi, fa #, la y do).

· El Pincullo, de Perú. Instrumento de caña que consta de siete agujeros; a los modelos más gruesos se les llama también Toccoros y constan de seis agujeros laterales.

· La Marimba, instrumento de percusión que produce sonidos de altura definida gracias a planchas o laminas de madera, afinadas en tonos diferentes.

Finalmente, debemos agregar que existen múltiples modelos y tipos de Flautas y Pitos construidos con las más variadas formas, diseños y materiales, además de una gran variedad de instrumentos de percusión: maracas, charrascas, güiros, arpas, charrascas, sonajeros de semillas, sonajeros de caracoles, arco musical, tambores de varios tipos, formas y tamaños e instrumentos de cuerdas pulsadas y frotadas, etc.

Muchos de estos instrumentos fueron originalmente, del período precolombino y otros aparecieron como la consecuencia lógica de las nuevas influencias culturales provenientes de los negros africanos esclavos y de las corrientes pobladoras europeas.

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Latina: desde la época precolombina hasta nuestros días