EL LIBERALBogotá, D.C. Colombia, Año 2014, No 1, Publicación Gratuita, Prohibida Su Venta

Que dice?

La voz del hincha

El problema de las “barras bravas” llego a nuestro país hace algunos años del sur de nuestro continente exac-tamente de Argentina, este fenómeno llamo la atención de varios hinchas que que-rían tener un motor de vida, por el cual vivir y esto hizo que las personas tomaran el camino equivocado y se

enfocaran más en la vio-lencia hacia los demás que en ir a apoyar a su equipo favorito.

“El futbol se debería disfrutar en familia, para que no haya vio-lencia ni dentro ni fue-ra de las canchas”

Fundación que ayuda a salir adelante a los jó-venes que ingresan a este mundo de las “barras bravas”.

Continúa Pág. 3...

¿Porque nació el proyecto? ¿Cuáles eran las expectativas? ¿Aún sigue en pie este? Todas las respuestas las encontrara en ...

Continúa Pág 6...

Se realizaron unas encues-tas a hinchas pertenecientes a las mal llamadas “barras bravas” y nos contaron va-rias cosas interesantes de ¿Cómo llego el futbol a su vida? Hasta ¿ Cómo llega-ron a pertenecer a una de esas barras?Estas entrevistas fueron realizadas a hinchas de al-

gunos equipos de futbol de nuestro país como lo es Millonarios de Bogotá y su archirrival Independiente Santa fe. “Todo acto de violencia repercute en las genera-ciones de jóvenes”

Continúa Pág. 4 y 5...

En la foto se puede ver la “fiesta” que hacen los hinchas en las gradas de el estadio El Campín.

El Liberal - Febrero de 2014

2

Director:Jefferson Sanchez

Editor GeneralJefferson Sanchez

Editor En JefeHugo Santander

Coordinación GeneralJefferson Sanchez

DiseñoJefferson Sanchez

Director de ArteJefferson Sanchez

Director Creativo Jefferson Sanchez

Fotógrafo Jefferson Sanchez

Jefe de RedacciónJefferson Sanchez

Redactores Jefferson Sanchez

ImpresiónVision Center

Editorial

Jefferson Sanchez, Director

El problema de las barras bra-vas no es nuevo para nosotros, ya que desde hace muchos años hemos estado viviendo este fe-nómeno, que por allá en los años 90 llego aquí a Colombia desde un país ubicado muy al sur de nuestro continente llamado Ar-gentina, los argentinos estaban influenciados por los “Hooli-gans” que eran los “Barra bra-va” que existían en años anterio-res en Europa, ellos estaban en países como Inglaterra, Italia, Alemania, Grecia, etc. Ese movimiento que llego a Co-lombia en la década de los no-venta se convirtió para muchos jóvenes en un escape a la reali-dad que estábamos viviendo en nuestro país en ese tiempo y la realidad que estábamos vivien-do cuando llego este movimien-to no era la mejor, estábamos en la época de Pablo Escobar donde había muertos todos los días, había narcotráfico, había secuestros, mala educación, te-níamos un sistema de salud de-plorable, etc. Por esto a muchos se les convirtió esta corriente prácticamente en su vida, lle-vándolos a ser violentos hasta tal punto de llegar a matar a un rival porque insulto su equipo favorito. Este problema después de un tiempo se volvió incontrolable para el gobierno de nuestro país, ya que cada fin de semana había disturbios dentro y fuera del es-tadio, afectando tanto a los que iban al estadio a disfrutar de un buen partido, como a los que vi-ven alrededor de tal escenario deportivo, ya que les destruían las fachadas de las casas, hacían grafitis, les rompían vidrios, en los enfrentamientos con la poli-cía botaban gas lacrimógeno y eso hacía que se enfermaran mu-chos de los residentes y de los

“Si no estamos en paz con nosotros mismos, no podemos guiar a otros en la búsqueda de la paz”.

Confucio

espectadores que estaban cerca al Estadio Nemesio Camacho “El Campin”, todos estas casos hicieron que ese movimiento se convirtiera en un problema pú-blico y social, que necesitaba una intervención lo más rápida y eficaz posible, pero esa inter-vención no aparecería sino hasta unos años después; ya que para el gobierno la solución más fácil fue poner más seguridad y más policía en la entrada del esta-dio y en sus adentros, haciendo que estos hinchas violentos se indignaran más y pusieran más problemas de los que ya había anteriormente.Transcurrieron los años y los problemas entre hinchas de ba-rras bravas y la policía siguieron, y aun así todavía se ven casos en la actualidad, de este problema se comenzó a hablar en varias entidades del estado y entre al-gunas personas que querían que este fenómeno acabara lo más pronto posible, entre varias enti-dades del gobierno comenzaron a mirar cómo se podía acabar de raíz con este problema, así crea-ron un proyecto experimental llamado “Goles en Paz” , que tenía como función integrar a estas bravas realizando grupos de trabajo, recreaciones, ferias, para que por medio de estas se acabaran esas diferencias que tenían por medio del dialogo y aprendiendo a entender al otro y a vivir sin diferencia alguna. Este programa comenzó a dar ciertos frutos, después de que intervinieran varias barras de la ciudad de Bogotá e impidiendo que las barras bravas visitantes vinieran aquí a Bogotá sin se-guridad o algo por el estilo, ya se veía una organización por parte de la policía y de los hin-chas, mucha gente apoyaba el proyecto como había otros que

El Liberal

no, los que lo apoyaban comen-zaron a hacer otros proyectos y fundaciones para ayudar a estos muchachos, que buscaban una mano que los ayudara a salir de ese mundo que no les beneficia-ba en lo mas mínimo y de ahí aparecieron varias fundaciones que ayudaban a estos mucha-chos que se perdían cada vez más en este fenómeno que no solo los metía en la violencia sino también en el alcohol y las drogas. Muchas cosas buena se han lo-grado con todos los proyectos y fundaciones surgidas hasta el día de hoy, como por ejemplo que quitaran las vallas que sepa-raban el campo de juego con las gradas del estadio, para que se pudiera ver un mejor espectácu-lo sin que pase ningún acto de violencia dentro de él, también en un punto se logró carnetizar a todos los integrantes de las ba-rras del equipo bogotano Millo-narios para que cuando entraran a el estadio fueran identificados fácilmente por las cámaras y por los auxiliares de policía y demás personas de orden público, lás-tima que este proyecto allá sido un fracaso ya que no tuvo una constancia, ni un gran apoyo de las entidades de el gobierno de nuestro país.En consecuencia a todo esto, aun se pueden hacer muchas cosas para que este espectáculo deportivo, deje de ser mancha-do con sangre por hinchas des-adaptados que se ocultan detrás de una camiseta para poder rea-lizar actos de violencia contra las demás personas, pero para esto se necesita mucho apoyo de las entidades gubernamentales y también un granito de arena nuestro para vivir el futbol en paz y armonía con nuestros ami-gos, compañeros o familia.

El Liberal - Febrero de 2014

3

Fundación Juan Manuel Bermúdez Nieto

“Barrismo Social por el fútbol y la vida”La Fundación Juan Manuel Bermúdez Nieto reconoce la diversidad de barras, parches y sectores de barras existentes en todo el territorio nacional, por lo que no pretende dar recono-cimiento o prioridad a ninguna y, mucho menos, determinar la superioridad de una u otra bien sea su condición.Nuestros esfuerzos se basan en generar estrategias que nos permitan fortalecer las barras como organizaciones empode-radas generando escenarios de diálogo sin que éste sea trans-formado bajo una figura de con-ciliador para superar divisiones o promover alianzas. También, estrategias de atención a las problemáticas que caracterizan el fenómeno barrista para enca-minarlas en el marco de Barris-mo Social.Se le apuesta a potenciar las prácticas positivas y democrá-ticas de los y las jóvenes inte-grantes de las barras de fútbol y a redimensionar las formas de expresión violenta de los conflictos a nivel individual y colectivo. Esta se constituye en una propuesta alternativa y de iniciativa popular, funda-mentada en procesos forma-tivos capaces de reconfigurar las actuaciones y valores so-ciales, percepciones, ideales y sentimientos de los barristas, sin perder la esencia de la pa-sión por el fútbol y su equipo.

Se trata de transformar las rea-lidades que rodean a los y las jóvenes, mediante la construc-ción de redes que impliquen la articulación e intercambio de esfuerzos, voluntades, expe-riencias y conocimientos, y de asumirse como sujetos sociales y políticos. Esta es la jugada por hacer un país más democrático e incluyente y un fútbol sin vio-lencia que realiza o propone el Colectivo Barrista Colombiano.Dichos avances los dejamos a consideración de los represen-tantes de las respectivas barras ya que son estos quienes deter-minan su pertinencia por tanto respetamos totalmente la auto-nomía de cada uno de los gru-pos entendiendo sus formas de organización.

El surgir:El 19 de mayo de 2002, dos de nuestros amigos y compañeros (Juan Manuel Bermúdez Nieto y Alex Julián Gómez Ramírez) integrantes de una barra popular de fútbol, fueron asesinados por un grupo armado al margen de la ley en Cisneros - Antioquia, hecho ajeno a las expresiones de violencia presentes en ese mo-mento entre las Barras; suceso que evidenció el entrecruce del micro y el macro-conflicto, vi-gentes en el país.Los anteriores acontecimientos obligaron a buscar a los jóvenes cercanos al hecho, espacios de

reflexión que permitieran redi-mensionar las maneras de vi-venciar las naturales emociones que nos brinda el fútbol, pero además, a explorar nuevas for-mas de definir proyectos de vida constructivos, que aporten posi-tivamente al propio desarrollo, así como al de las comunidades en las que nos corresponde in-teractuar. Es así que como con-secuencia de las deliberaciones generadas en estas circunstan-cias, en septiembre de 2002, un grupo de jóvenes integrantes de algunas barras de fútbol, apoya-dos por los padres de Juan Ma-nuel y otras personas, constitui-mos La Fundación Juan Manuel Bermúdez Nieto.

Proyectos:La fundación Juan Manuel Ber-múdez Nieto ha creado algunos proyectos de fortalecimiento y acompañamiento para estos barristas, en el cual tiene un proyecto llamado Ocioteca que

está dirigida a niños, niñas, ado-lescentes y jóvenes, que se en-cuentren envueltos y envueltas en prácticas de violencia y ries-go de vulneración de derechos; para promover en ellos el buen uso de su tiempo libre disminu-yendo así la utilización de éste en el consumo de sustancias psi-coactivas y alcohol, principal-mente. Así pues, esta estrategia está orientada hacia: la preven-ción de los consumos, la reduc-ción de las prácticas violentas, la vivencia del ocio creativo y productivo, y la promoción de la movilización social.El segundo proyecto que ellos promueven es en la localidad de Suba llamado, La Escuela de Barrismo Social de la localidad de Suba, que tiene como obje-tivo principal aunar esfuerzos técnicos, financieros y adminis-trativos para la consolidación de procesos de formación diri-gidos a líderes del barrismo en la localidad, fortaleciendo así los procesos de participación y organización social y comu-nitaria; promoviendo la convi-vencia pacífica, la inclusión y la reconciliación positiva desde la concepción del Barrismo Social para la comunidad.Para saber sobre más proyectos o más información sobre esta gran fundación ingrese a la pá-gina web www.barrismosocial.com y ayúdelos a fortalecer más personas que sufran por este fe-nómeno social.

Logo de la Fundacion JMBN

El Liberal - Febrero de 2014

4

LA VOZ DEL HINCHA

Hablamos con los hinchas, para ver que piensan sobre los actos de violemcia relacionados con el futbol en nuestro país.

Este artículo está hecho para que usted como lector pueda en-tender que piensan los jóvenes que pertenecen a estas barras. Porque no todos los hinchas son vándalos o generan actos de violencia hacia los demás, a veces hay “hinchas” y lo pongo entre comillas porque a veces ni siquiera son los hinchas los que hacen tales actos vandálicos sino que hay verdaderos delin-cuentes disfrazados de hinchas realizando tales actos que hacen que los hinchas del futbol, los verdaderos hinchas los que van a disfrutar de un buen espec-táculo, queden estigmatizados por la sociedad como violen-tos, problemáticos o como algo malo para la sociedad en la que vivimos. Decidimos entrevistar 2 hinchas de diferentes equipos aquí en la capital, uno de Millonarios miembro de una de las primeras barras bravas en el país la cual fue Comandos Azules y el otro hincha del equipo Independiente Santa fe que no pertenece en si a ninguna barra brava pero va al estadio como un hincha común y corriente a ver a su equipo ju-gar en el estadio El Campín.Les realizamos a estos hin-chas una serie de preguntas de

“Si no hay paz en barrios por fútbol, no puede haber espectáculo en el estadio"dijó el alcalde en unas declaraciones sobre el tema de lasbarras.

¿Cómo llegaron ellos a ser hin-chas? Y ¿Cómo ven el futbol desde la perspectiva de cada uno? .Veamos la respuestas de cada uno de estos hinchas.

Usted, ¿Cómo ve el fútbol?Hincha Millonarios: Yo veo el fútbol como una gran

pasión, es algo que transmite un gran amor, sentimiento, emo-ción, cuando veo fútbol y más si es mi equipo favorito me da mucha energía y me da una gran alegría verlo.Hincha Santa fe: Yo veo el fútbol como un eje de mi vida, es mi gran pasión, el futbol lo llevo en las venas, el futbol es un deporte que mue-ve masas y no debería generar actos violentos en las personas,

solo debería generar felicidad.

¿Por qué es usted hincha de Mi-llonarios o Santa fe?Hincha Millonarios:Yo soy hincha de Millos porque como dice una canción de nues-tra barra, “es la herencia que me dejo Papá”, el me llevaba al

estadio desde pequeño a ver a su equipo del alma y desde ahí le cogí amor y pasión al club y prácticamente termino siendo para mí una de las cosas más grandes que tengo en la actua-lidad.Hincha Santa fe:Yo soy hincha de mi amado Santa fe porque desde pequeño en mi familia se reunían para ver los partidos de Santa fe en la casa de mis papás entonces me

fui creando con ese sentimiento, con esa pasión que desborda el equipo santafereño, hasta la ac-tualidad que sigo a mi equipo en el estadio con mis amigos.¿Qué opina usted acerca de los actos de violencia generados por el fútbol aquí en Colombia y en el resto del mundo?Hincha Millonarios:En mi opinión, esos actos no son causados por hinchas de verdad, todos los casos de violencia son causados por desadaptados que o están drogados o están borra-chos buscando con quien des-quitarse si su equipo perdió o hasta desquitarse de problemas familiares, también pienso que todos los problemas sociales que hay en nuestra humilde so-ciedad colombiana son proble-ma del gobierno por brindarnos malos recursos y por llevar a nuestra sociedad a un total fra-caso.Hincha Santa fe:Los actos de violencia genera-dos por el fútbol en el mundo, son un ejemplo o una imagen de la sociedad en la cual vivimos, países en guerra, países con hambre, países con déficit eco-nómico, países con sobrepobla-ción, etc. Todos estos ejemplos de cómo está la sociedad hacen

El Liberal - Febrero de 2014

5

Mural realizado por la barra Comandos Azules de el equipo Millonarios de Bogotá en la tribuna Norte de el estadio el Campín

que la gente busque un escape de su realidad la cual viven día a día y ahí encontraran las barra bravas y los equipos de futbol que desbordan pasión y locura que poco a poco a uno le hace olvidar los problemas y hasta hacernos pensar que no existe nada más que el estadio o el te-levisor de tu casa.¿Por qué las rivalidades y la violencia afuera del campo de juego, si la rivalidad debería ser solo dentro del campo de juego y entre los jugadores?Hincha Millonarios:Las rivalidades que se presentan en el fútbol se dan por muchas cosas, pero principalmente por-que cuando se juega un partido hay demasiada pasión y fuer-za, por lo tanto los hinchas que están tan compaginados con su equipo se decaen si llega a per-der y se enfurecen si la hinchada rival empieza a hacer canticos acerca de tan desastrosa derrota.Pero también hay otros motivos como la represión de la policía, la poca vigilancia, que dejen en-trar hinchadas de otras ciudades a Bogotá con su incultura y vio-lencia, etc.Hincha Santa fe:En mi opinión las rivalidades en el fútbol se presentan porque no hay apoyo de ninguna entidad del estado, aunque en un tiempo

hubo un proyecto llamado Go-les en Paz que hizo varias cosas buenas, como quitar las baran-das que dividen el campo de los hinchas para que sea más con-fortable y que haya una mejor vista del cotejo.También las rivalidades regio-nales influyen mucho en esto de

Hincha Millonarios:Yo le pediría al Estado que me-jore la seguridad en los estadios, que hagan ciertos proyectos para ayudar a gente que está perdida en las drogas y en el alcohol y que hagan parte de las barras, carnetizar a todos los que ingre-sen al estadio, ubicar cámaras

la violencia en el fútbol, somos un país muy regionalista y eso influye mucho a que haya riva-lidades, pero aun así la policía y el Estado sigue dejando entrar hinchadas visitantes a la capital con pocos controles y dejando que ellos hagan lo que se les an-toja.¿Qué le pediría usted al Estado o que haría usted para mejorar estas dificultades que hay entre las barras?

dentro y fuera de él, educaría desde el principio a las nuevas generaciones a que no tengan diferencias con los demás y que sean personas integras y en pro de la sociedad.Lo que yo haría y hare es que seguiré apoyando a mi equipo pero sin denigrar ni criticar a mi rival, educar a mis futuros hijos a que sean indiferentes cuando los provoquen a practicar la vio-lencia con los demás.

Hincha Santa fe:Yo le pediría al Estado que eduque a los hinchas y que se castigue fuertemente a los que agredan a hinchas de ciudades diferentes y equipos diferentes, también que le hagan un segui-miento a los que asisten a los es-tadios que tengan antecedentes penales para que no manchen con mala fama a este gran de-porte que es el fútbol, también que prohíban la entrada de hin-chadas visitantes a la ciudad de Bogotá para evitar actos violen-tos.Por mi parte, fomentare el buen comportamiento den-tro y fuera de las canchas, ayudar si es posible a los que vivan con la indife-rencia y el irrespeto hacia el rival y hacerles caer en cuenta a las nuevas gene-raciones que todos somos humanos y nuestro deber es cuidar nuestra vida y la de los demás por un futbol en paz y en armonía.Entrevista realizada por nuestro periodista y direc-tor de el periódico El Libe-ral:

Jefferson Sanchez

“El fútbol fue la herencia que me dejo papá” dijó el hin-cha de Millonarios Wilmer Salgado

“Al León me lo enseño a querer mi familia” dijó el hin-cha de Santafe Diego Felipe Guatame

El Liberal - Febrero de 2014

6

Goles en paz, El precursor de grandes cambios

En la foto el Monseñor Alirio López uno de los colaboradores de este porgrama llamado “Goles en Paz”.

El programa Goles en Paz fue un programa creado por La Secre-taria de Gobierno de la Alcaldía Mayor de Bogotá, el programa para la Vida Sagrada, El Institu-to Distrital para la Recreación y el Deporte y la Policía Metropo-litana, los clubes Deportivos y un grupo de 20 personas en las que se encontraba el Monseñor Alirio López con el propósito de reducir los grandes índices de violencia que hay en la ciudad de Bogotá por culpa de las mal llamadas “Barras Bravas”.

Buscan reducir estos índices, fomentando buena educación desde muy temprana edad, mos-trándoles el valor que tiene la vida de otros y el sentido de per-tenencia hacia los demás, tam-bién realizando ciertos torneos de fútbol con algunos hinchas que pertenecen a barras bravas de equipos bogotanos y tam-bién de todo el país, tales como integrantes de los Comandos Azules hinchas del equipo azul Millonarios de Bogotá, hinchas de la Guardia Roja del equipo Independiente Santa fe de Bo-gotá e hinchas de Los del sur de el equipo antioqueño Atlético Nacional. También por medio de este programa, otros se inspi-raron a seguir con esta obra que está en nuestra realidad y que no podemos negarla, ni ignorarla.

A continuación veremos las res-puestas que dio el Monseñor Alirio a unas preguntas que le hicieron en la revista Semana sobre ¿Cuáles fueron los moti-vos de haberse salido de el pro-grama? y muchas cosas mas. Semana.com: ¿Cuál es la cau-sa de los últimos episodios de violencia relacionados con el fútbol? Monseñor Alirio López: Eso es producto de la intolerancia, de la crisis e inversión de valores. Estamos acabando con el fútbol. Son unos pocos, desafortunada-mente, que se camuflan en unas camisetas y que van destruyen-do y acabando los sueños y las esperanzas de buenos hinchas, de muchachos, quienes son en-frentados por llevar una camise-ta.Semana.com: ¿Qué cree que se puede hacer ante la actual pro-blemática? Monseñor: Creo que hay que generar espacios para trabajar en programas de convivencia, de liderazgo, de música, de en-cuentros deportivos entre los líderes o entre las barras, como se hizo en el pasado. No sé qué pasó con el programa semille-ro ‘Goles en paz’ que llegamos a tener durante ocho años en el que participaron casi 9.000 ni-ños para ir creando una cultura diferente del barrismo, y ya aca-

bar con eso de barras bravas y comenzar a trabajar por ‘barras futboleras’ o ‘barras populares’.Semana.com: ¿Y por qué dejó su dirección?Monseñor:Yo en diciembre del 2008 entregué la dirección de ‘Goles en paz’ porque la iglesia me puso otro trabajo pastoral. No significa que haya descuida-do esto, pero ya, externamente, sin ningún compromiso con la

Alcaldía Mayor. Desafortunada-mente, cada alcalde llega con un estilo diferente, y cada uno tiene su estilo para matar pulgas. Semana.com: ¿Qué cambió en el programa?Monseñor: Yo creo que se dejó a un lado todos esos torneos de fútbol de salón, la copa ‘Go-les en paz’ en la cual hubo una participación de más de 2.239 muchachos. En el 2001 hubo un torneo maravilloso: 598 mucha-chos participaron. En el 2002 fueron 537, en el 2003 estuvie-ron 384, en 2005 pasaron a 360. Además de los pactos de convi-

vencia celebrados en localida-des, los talleres de música con barras de Millonarios, Santa Fe y América, talleres de liderazgo y convivencia.Recuerdo tanto ese bellísimo clásico de la amistad y de la paz que fue con 18.000 espectado-res en El Campín, en octubre de 2001. Todos con camiseta blan-ca. Hubo problemas, ciertamen-te. Se logró pacificar antes, du-rante y después de partir hacia el estadio. Se fue la violencia a las localidades, pero había gestores en las localidades. Desafortu-nadamente, todo eso se acabó. No sé qué ha pasado. Pero el problema de lo que está pasan-do hoy es que se perdió todo un espacio de cultura, de reconci-liación, de autorregulación, de hospitalidad, de creatividad, y creo profundamente que hay que retomar eso con otras per-sonas.Semana.com: ¿Cómo ve el tra-bajo actual frente a la labor de ‘Goles en paz’?Monseñor: No sé si en este m mento exista ‘Goles en paz’. En mi época cuando estábamos te-níamos un comité de seguridad muy interesante donde todos nos integrábamos y los mucha-chos de los líderes de las barras participaban del comité y prepa-rábamos el partido, y luego se evaluaba también el partido.

“Si no hay paz en ba-rrios por fútbol, no puede haber espectá-culo en el estadio”

El Liberal - Febrero de 2014

7

‘Barras bravas’, entre el fanatismo y la muerte

La erradicación de la violencia estaría en manos del Estado que posee las herramientas para ha-cerlo.El fútbol en sí mismo no gene-ra violencia, sino alegría, emo-ción. Hay una violencia social, sobre todo urbana, que encuen-tra en la popularidad del fútbol un canal ideal para expresar su agresividad. Subirse al fútbol es sencillo. No hay demasiados re-quisitos, se compra una entrada (o se la consigue de otra forma menos decente) y luego es cues-tión de tomar una puntita de la bandera y empezar a fabricar fervor. Cuanto más empeño se muestra en el asunto, más apto se es. Y si arma broncas, ya puede calificar como miembro de la barra.Hay que crear un registro de hinchas violentos. Estos sujetos que el lunes mataron a dos jó-venes (¿eran barras bravas tam-bién...?) y antes habían asesina-do a un señor de 66 años van al fútbol, seguro han protagoni-zado incidentes, disturbios, pe-leas y demás. Ingresarlos en el registro es sacarles tarjeta roja. Para empezar, no deben entrar más a los estadios. A partir de la identificación se les aplica el derecho de admisión.En derredor de la pasión que despierta este juego, y del dine-ro que moviliza, se han creado la industria del apriete, el nego-

cio del matonismo. ¿A cuánto cotiza hoy la amenaza...? Bien, bien, va en alza... Cuanto más duro nos ponemos, más nos dan. Es la lógica de los violen-tos. Los dividendos los obtienen cuando los llaman “a dialogar”.La erradicación de la violencia no está en manos de la dirigen-cia del fútbol. Error. Es el Esta-do quien posee las herramientas

periodista no puede ir a enfren-tar a estos salvajes, reducirlos y arrestarlos. Tampoco sancionar-los. Son los estamentos del Es-tado los encargados.Colombia está todavía en una fase de violencia futbolera que, si bien no es inicial, es menos grave que en la Argentina. Está a tiempo de eliminarla. Aún atraviesan el estadio en que se trenzan a cuchilladas y tiros en-tre hinchas de clubes rivales. En la Argentina ya vivimos la era de las ‘Barras bravas Sociedad Anónima’; es decir, la comer-cialización plena del matonis-mo. Mucho peor, porque nadie quiere dejar el negocio. No soy partidario de confra-ternizar con los violentos. Ni de “integrarlos” (una inocenta-da que puede costar carísima). Tampoco de pedirles nada. Y muchísimo menos de darles co-sas a cambio; esto es legalizar la industria del apriete. Hacer con-cesiones con esta gente no sólo es peligroso, es institucionali-zarla. La mejor receta es aplicar la ley para todos los ciudadanos por igual. Si algunos grupos se sitúan fuera de ella, es su res-ponsabilidad y deberán asumir-la. Nadie les pide que vayan a alentar. El fútbol no los necesita para nada.Hasta fines de los 80, Inglate-rra era futbolísticamente el país más despreciable de Europa.

Nadie lo quería. Hubo naciones que impidieron el ingreso de los fans británicos a su territo-rio para evitar desgracias. Ahora que está libre de ‘hooliganis-mo’, el fútbol inglés es el más apetecido del mundo; un pro-ducto excelente que se vende a precio de oro. Y no hay barras ni banderas. El que quiera ir de Li-verpool a Manchester a apoyar a su equipo, que vaya, pero sin el patrocinio del club.Inglaterra endureció las penas para los hooligans, creó un re-gistro de ellos, un grupo de élite para seguirlos y apresarlos, un cuerpo de fiscales para actuar en el momento, comodidades en los estadios, etcéteras varios.Sí estamos a favor de crear una conciencia de paz en los esta-dios, en sus alrededores. Una gran idea es lo de declararlos “territorios de paz”. Es un sim-bolismo fuerte que haría más condenables los actos violentos.Los dueños del fútbol somos los hinchas pacíficos que vamos a disfrutar del juego con nuestros hijos y a alentar a nuestro equi-po, no estos delincuentes. Todos tenemos la obligación de con-tribuir en la medida en que sea para expulsarlos de las canchas. La gente sana ya les dijo basta a los violentos; ahora tienen la pelota los poderes del Estado, nadie más.www.eltiempo.com

“Pero mientras el Es-tado mire hacia otro lado, asolarán el fút-bol, se servirán de él.”

para hacerlo: las fuerzas de se-guridad, el Congreso, que san-ciona las leyes, y la justicia. A la Nación le corresponde velar por la seguridad interior.Los dirigentes de la federación y de los clubes sí pueden cola-borar. Y deben hacerlo, natural-mente. Pero sus posibilidades de éxito son ínfimas. En Inglaterra, el ‘hooliganismo’ fue combati-do por el Gobierno. La asocia-ción del fútbol tuvo que acatar sus dictados y cooperar, pero no enfrentarse a los malvivientes.Algo similar ocurre con los periodistas. Debemos compro-meternos informando sobre los hechos de violencia relaciona-dos con el fútbol, si acaso inves-tigando, pero hay un límite: el

Esta fue la despedida en El Campín, en Bogotá, de Óscar Eduardo Sandino, un hincha de Millonarios asesinado en Cali.

El Liberal - Febrero de 2014

8

Fiestas inigualables en los estadios de la ciudad de Bogotá desde que se comenzarón a hacer controles en los estadios para impedir actos de vio-lencia.

La unión con los de-más, sea de nuestro mismo equipo o del equipo rival, siempre llevándonos con respe-to y tolerancia, enten-diendo el pensamien-to del otro para crear buenos sitios de debate así generando una me-jor convivencia.

Recuperar los espacios en los que ya se ha avan-zado y abrir nuevos proyectos que sean de inspi-ración para otros, generando buenos proyectos

como lo es “Goles en Paz”.

Escuchar que es lo que quieren los hinchas y tratar de que se beneficien las dos partes para brindar un mejor espectáculo y que se pueda lograr el

objetivo de un futbol en paz.

Aspectos buenos y a mejorar de estos grandes proyectos