El intelecto y el acto de inteligir - Final Inves..pdf

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1 | Página El intelecto y el acto de inteligir Emilio Guachetá Gutiérrez Universidad Pedagógica Nacional El siguiente ensayo pretende hacer un recorrido por la obra De anima (DA) de Aristóteles, la finalidad de tal recorrido es dar cuenta del concepto de intelecto y de sus diferentes matices dados por Aristóteles, tomando como parte esencial la discusión sobre el intelecto pasivo y el intelecto activo que se desarrolla en el Libro III capitulo V. La primera parte, se dedica a estudiar la imaginación como facultad muy propia e independiente del intelecto; el segundo apartado, desarrollara el concepto general de intelecto; el tercero, el intelecto y su relación con los sentidos y el principio de movimiento, que llevará a una relación con la facultad nutritiva; y por último, se abarcara el problema del intelecto pasivo y activo. Palabras claves: Alma, intelecto, imaginación, movimiento, activo y pasivo. “El alma es en cierto modo todas las cosas” Aristóteles. De anima (431 b 21). Aristóteles en su obra De anima quiere dar cuenta de su teoría hilemórfica del hombre, de su noción de alma y de las diferentes facultades que se derivan de ella. Aristóteles es uno de los filósofos más importantes de la Antigua Grecia. Nació en Estagira (Macedonia) en el año 384 AC. Su padre era médico del rey Amintas II de Macedonia, es importante este dato de su padre, pues Aristóteles cultivo como si ciencia favorita a la biología. El sistema

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    El intelecto y el acto de inteligir

    Emilio Guachet Gutirrez

    Universidad Pedaggica Nacional

    El siguiente ensayo pretende hacer un recorrido por la obra De anima (DA) de Aristteles,

    la finalidad de tal recorrido es dar cuenta del concepto de intelecto y de sus diferentes

    matices dados por Aristteles, tomando como parte esencial la discusin sobre el intelecto

    pasivo y el intelecto activo que se desarrolla en el Libro III capitulo V. La primera parte, se

    dedica a estudiar la imaginacin como facultad muy propia e independiente del intelecto; el

    segundo apartado, desarrollara el concepto general de intelecto; el tercero, el intelecto y su

    relacin con los sentidos y el principio de movimiento, que llevar a una relacin con la

    facultad nutritiva; y por ltimo, se abarcara el problema del intelecto pasivo y activo.

    Palabras claves: Alma, intelecto, imaginacin, movimiento, activo y pasivo.

    El alma es en cierto modo todas las

    cosas

    Aristteles. De anima (431 b 21).

    Aristteles en su obra De anima quiere dar cuenta de su teora hilemrfica del hombre, de

    su nocin de alma y de las diferentes facultades que se derivan de ella. Aristteles es uno

    de los filsofos ms importantes de la Antigua Grecia. Naci en Estagira (Macedonia) en el

    ao 384 AC. Su padre era mdico del rey Amintas II de Macedonia, es importante este dato

    de su padre, pues Aristteles cultivo como si ciencia favorita a la biologa. El sistema

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    filosfico elaborado por Aristteles puede denominarse hilemorfismo. El trmino proviene

    de hyl (materia) y morph (forma). De modo que el hilemorfismo es la teora filosfica segn

    la cual todas las cosas estn compuestas de materia y forma.

    Aristteles denomina alma a la forma del cuerpo, aquello de lo cual se derivan un sin

    nmero de facultades necesarias para la finalidad y el telos aristotlico, como tal, el alma es el

    principio de vida y movimiento. Esta forma o alma, esta ntimamente ligada al cuerpo. La

    forma lo es de la materia, Aristteles rechaza la preexistencia del alma en su alejamiento

    con las teoras platnicas, el libro III del De anima ha sido muy discutido con este respecto

    y de ah el sustento de este escrito. Averroes opina que Aristteles no afirma la

    inmortalidad de cada alma individual, sino la separabilidad de un entendimiento universal,

    igual para todos los seres humanos. Tomas de Aquino entiende que s se habla de una

    inmortalidad del alma y que tal inmortalidad es la figura de Dios.

    I. Imaginacin

    El captulo tercero del libro III del tratado Acerca del alma constituye el primer testimonio de

    la facultad de la fantasa, palabra aristotlica que designa la imaginacin. La imaginacin es

    una de las facultades del alma distinta de la facultad sensitiva y del pensamiento, pero, a su

    vez, est necesita al menos de la facultad sensitiva para entrar en acto. Se deja ver por

    momentos, en ciertos pasajes aristotlicos que la imaginacin es siempre puesta como un

    residuo de la percepcin, como un movimiento engendrado por una sensacin en acto, que

    nada tiene que ver con la sensibilidad, en su funcionamiento, en su puesta en acto, pero que

    no puede ser sin ella.

    Es evidente, sin embargo, que la imaginacin no consiste ni en

    inteligir ni en enjuiciar. Y es que aquella depende de nosotros: podemos

    imaginar a voluntad es posible, en efecto, crear ficciones y contemplarlas

    como hacen los que ordenan las ideas mnemotcnicamente creando

    imgenes- mientras que opinar no depende exclusivamente de nosotros

    (DA 427 a 20).

    Si bien la facultad de imaginar necesita de la memoria y de algn acto de la sensibilidad, la

    imaginacin como tal puede ejercerse a voluntad propia sin intervencin de ningn objeto

    externo. Aristteles distingue a la imaginacin de otras facultades del intelecto, como por

    ejemplo: la ciencia, la opinin, la prudencia y sus contrarios. Segn el autor estos ejercicios

    de la inteleccin son la accin propia de enjuiciar. As mismo, la imaginacin no es un

    sentido porque carece de un rgano sensitivo del cual se derive directamente tal facultad, es

    una facultad intermedia entre los sentidos y lo racional, puesto que funciona gracias a los

    primero y es una facultad ramificada de lo segundo.

    La imaginacin presupone la sensacin, pero es diferente de ella, como poder verse

    especialmente por dos hechos presentados por Aristteles libro III-: primero, podemos

    imaginar algo sin estar en la accin de percibir en objeto, es decir, si estar percibiendo en

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    acto; segundo, la imaginacin es falible, mientras que la sensacin no lo es al menos si la

    sensacin es propia. Teniendo esto en cuenta puede hacerse la distincin entre memoria e

    imaginacin, la imaginacin crea imgenes, queda claro que a partir de sensaciones previas,

    de manera muy semejante a como lo hace la memoria, la diferencia radica es en que la

    memoria necesita de la imagen y se ubica su ejercicio siempre en cosas pasadas, mientras

    que la imaginacin puede fingir imgenes futuras, intemporales, hasta combinadas, puede

    generarse hasta con la imagen la facultad de desear.

    Otro punto interesante en que la imaginacin no tiene relacin alguna con la opinin, la

    ciencia o el entendimiento, pues de estas facultades puede promulgarse verdad. La opinin

    aunque puede ser verdadera o falsa, necesita del convencimiento y por lo tanto de la

    palabra hacer un juicio de opinin. El juicio del entendimiento ha de ser verdadero y falso,

    segn sea su acuerdo o no con la realidad a la que hace referencia y de la que, en ltimo

    trmino depende. Pero lo imaginado no representa a nada exterior, es algo ni verdadero ni

    falso, sino libremente creado por la fantasa.

    La imaginacin ser un movimiento producido por la sensacin en

    acto. Y como la vista es el sentido por excelencia, la palabra imaginacin

    (phantasa) deriva de la palabra luz (phos) puesto que no es posible ver sin

    luz. Y precisamente porque las imgenes perduran y son semejantes a las

    sensaciones, los animales realizan multitud de conductas gracias a ellas, unos

    animales por ejemplo, las bestias- porque carecen de intelecto y otros por

    ejemplo, los hombres- porque el intelecto se les nubla a veces tanto en la

    enfermedad como en el sueo (DA 429 a).

    Parece, pues, que Aristteles aproxima la imaginacin a los sentidos mucho ms que a la

    inteligencia, pero no debemos olvidar lo que dice en este mismo texto respecto a la

    conducta humana y que ya vimos al hablar de la imaginacin calculadora, que la

    imaginacin gua las acciones humanas, cuando el entendimiento, por enfermedad o por

    inactividad como en el sueo, pierde el control de la conducta.

    Sin embargo, en el captulo sptimo aparece la conexin y proximidad de la imaginacin

    con el intelecto:

    En vez de sensaciones el alama discursiva utiliza imgenes. Y

    cuando afirma o niega (de lo imaginado) que es bueno o malo, huye de ello o

    lo persigue. He ah como el alma jams intelige sin el concurso de una

    imagen (431 a 15).

    Aunque este problema ser profundizado en la seccin III, tanto la actividad intelectual,

    como la vida prctica, necesitan constantemente de la imaginacin, de manera que cabe

    entender, que excepto en la inactividad total, si ello fuera posible para un ser vivo, ya que la

    vida es movimiento, slo para un ser sin conocimiento ni accin sera posible prescindir de

    la imaginacin.

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    II. Intelecto

    El alma es el lugar de las

    formas

    Aristteles. De anima (429 a 25).

    Despus de la exposicin sobre la imaginacin, facultad intermedia entre los sentidos y el

    entendimiento, daremos paso a este ltimo capitulo IV libro III-. Para Aristteles, el alma

    conoce por medio de los sentidos y piensa gracias al intelecto. Desde el inicio Aristteles

    relaciona al intelecto con los sentidos, pues solo se intelige y se disciernen los objetos

    tangibles. Aunque es la facultad sensitiva la que percibe las formas de las cosas, de manera

    directa o indirecta, es el intelecto quien recibe las formas en el acto de la facultad

    intelectiva.

    El alma es potencia receptora de las formas de los objetos sin la necesidad de un rgano

    material que perciba los objetos, esto ltimo se logra por la facultad de los rganos

    sensitivos. Si bien, son los sentidos los que perciben lo caliente y lo fro, lo agradable y lo

    desagradable, es la facultad intelectiva la que discierne y selecciona lo que es bueno o es

    malo, lo que es peligro o es beneficioso para el animal. A partir del intelecto, es que el

    animal puede optar o rechazar tal alimento, pues es el intelecto quien conoce la esencia de

    las cosas, si forma en s.

    Aristteles comienza hacer una serie de distinciones entre la facultad sensitiva y el intelecto,

    en tanto separabilidad de la facultad intelectiva:

    (), el intelecto, por el contrario, tras haber inteligido un objeto

    fuertemente inteligible, no intelige menos sino ms, incluso, los objetos de

    rango inferior. Y es que la facultad sensible del cuerpo, mientras que el

    intelecto es separable (), el intelecto es capaz tambin entonces de

    inteligirse a s mismo (Da 429 b 5).

    As mismo, Aristteles distingue la impasibilidad de las dos facultades, la facultad sensitiva

    al percibir o se afectado por un objeto fuerte, es decir, al percibir un exceso la facultad

    sensitiva se daa de tal manera que sus funciones quedan intiles, cosa contrarias para con

    el intelecto pues entre ms fuerte sea la inteleccin ms veracidad tendrn sus juicios. As,

    puede distinguirse dos caractersticas o dos formas de conocer, a partir de las facultades

    sensitivas e intelectivas, por actividad intelectivas debemos entender, la capacidad y la

    potencia del alma, as, como la capacidad de comprender, calcular y discernir en acto.

    Para Aristteles, se puede distinguir el objeto tanto en abstracto como en concreto, El

    distinguir en abstracto es propio de los sentidos pues solo distingue los objetos, mientras

    que el intelecto conoce la esencia, lo concreto del objeto percibido. As, el acto por el que

    aprehender una forma pura es uno e indivisible como el intelecto y semejante a la recta,

    contrario, el acto por el que se piensa una forma con su materia implica pluralidad de

    elementos, unidos y distintos, como la lnea quebrada, as, el entendimiento, al separar la

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    forma de la materia piensa como dividido lo que es indivisible. En suma, el intelecto al

    recibir las formas de los objetos es como una tabilla en la que nada est escrito y donde

    goza de la capacidad en potencia de inteligir (DA 430 a), por tal motivo, la tablilla va

    registrando las diferentes forma, tal registro permite que aunque no se encuentre la

    sensibilidad en acto se pueda discernir frente a la esencia de la cosa, el intelecto se concibe

    como aquella faculta que unifica todo, que da unidad a la multiplicidad de sensacin que se

    perciben por la facultad.

    Lo inteligible ha de estar en l del mismo modo que en una tablilla

    en al que nada est escrito: esto es lo que sucede con el intelecto (). En

    efecto, tratndose de seres inmateriales, lo que intelige y lo inteligido se

    identifican toda vez el conocimiento terico y su objeto son idnticos ();

    pero tratndose de seres que tienen materia, cada uno de los objetos

    inteligibles est presente en ellos slo potencialmente. De donde resulta que

    en estos ltimos no hay intelecto () (DA 430 a 5).

    El proceso del conocimiento es el proceso del ejercicio de la abstraccin. El conocimiento

    principia en la realidad captada por los cinco sentidos; dgase: la realidad es ante todo

    realidad fsica, realidad como la naturaleza que nos rodea. El conocimiento es aplicacin y

    estudio a las cosas mismas y tal y como stas son y slo eso. En un acto secundario de la

    razn el conocimiento de las cosas se traduce en el conocimiento de las cosas pero en su

    dimensin categorial de la cantidad, de la numeracin; de esta forma la actividad

    cognoscitiva propone un paso ms all de la descripcin. El ltimo paso de la abstraccin

    aristotlica es la abstraccin de la forma en tanto que es en s, aqu el intelecto est ahora

    tratndose de estudiar ms all del ser fsico y del ser matemtico, del ser calculado del

    objeto.

    III. Intelecto pasivo y activo: Sentidos y principio de movimiento

    El alma es aquello por lo que

    vivimos, sentimos y pensamos.

    Aristteles.

    Despus de distinguir la facultad de intelecto y la imaginacin, nos adentraremos a la

    facultad de los sentidos y su relacin con los procesos del inteligir, tanto como para la

    unificacin de la multiplicidad de percepciones como para el principio del movimiento

    generado por el deseo, algo propio del imaginar como del inteligir.

    Al igual que el intelecto, el sentido cumple con las caractersticas de potencia y acto. La

    facultad sensitiva es paralela a la de or, oler, y ver. As mismo, de ella pueden converger

    tambin en un acto paralelo el tacto y el gusto. Nos dice Aristteles que en las plantas se da

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    solamente la facultad nutritiva, mi entras que en el resto de los vivientes, adems de esta

    facultad, se da tambin la sensitiva, y al darse esta ltima, se da tambin necesariamente la

    desiderativa. Ahora bien, el tacto para Aristteles, es el sentido primario para todo animal.

    Un animal puede carecer de otros sentidos, pero no del tacto. La idea parece ser que el

    tacto es la base de la vida sensitiva porque es a travs de l que el animal experimenta el

    dolor y el placer, del cual remite de modo directo el problema al plano del deseo en general,

    y del apetito en particular. Si se da la facultad sensitiva, tambin se da la desiderativa, pues

    son deseo o formas de manifestarse el deseo. El aspecto importante de toda esta

    explicacin es que los vivientes que tienen tacto, tambin tienen deseo. Esta observacin es

    importante para ver como introduce Aristteles el problema del deseo en el ser humano y

    cmo lo analiza en el contexto de la explicacin de la accin de movimiento.

    Los anteriores pargrafos se desarrollan adrede, otra intencin de este artculo es mostrar

    una cadena de sucesos ordenada que se desarrolla en la constitucin del cuerpo, como en el

    proceso del conocer. Iniciamos el texto con la actividad de imaginacin por ser una funcin

    intermedia entre los sentidos y el intelecto, aunque Aristteles es claro de la necesidad de

    estas dos facultades para el acto de imaginar. De la imaginacin se desprende el estudio del

    intelecto, pero en trminos ms generales y abstractos, son como presupuestos para la

    realizacin de este ltimo pargrafo. Recordando lo anterior tendramos una relacin:

    Sentidos imaginacin intelecto.

    Siendo as y estudiando anteriormente el intelecto faltara la exposicin de los sentidos.

    Exactamente la exposicin se har, pero con diferentes matices, la forma de exposicin

    conllevara a una relacin de causas y consecuencias entre las anteriores facultades del alma.

    A m parecer, en la exposicin de Aristteles se evidencia una clara secuencia de procesos

    que tiene como finalidad ltima la vida, tanto los sentidos, como la imaginacin y el

    intelecto hacen parte de una cadena de la vida; son componentes, algunos esenciales otros

    complementarios, de la funcin vital, dejando claro, segn la lectura aristotlica, que

    siempre la jerarqua y el orden son caractersticas propias de la naturaleza, un orden ya

    aceptado por Aristteles, un orden proveniente de la misma naturaleza material y formal de

    las cosas y no de entes exteriores a l.

    En los anteriores pargrafos se expuso, de manera simple la imaginacin y el intelecto.

    Todo esto para que el lector tenga presupuestos de relacin. Esta es la relacin causal que

    encuentro en Aristteles: los seres vivos son una construccin de alma y cuerpo; el alma

    como principio es causa de todo lo que le pasa al ser viviente. Ahora bien, el alma se

    caracteriza por tener varias facultades, entre ellas la del sentir que se hace a partir de los

    rganos, es decir, a travs del cuerpo. Una de las facultades del alma es el inteligir, la

    capacidad de recepcin y comprensin de la forma, as, como el lugar donde esa

    comprensin es capacidad productiva, esta capacidad de percepcin es posible por los

    sentidos y la comprensin, el pensamiento y el discernimiento es parte del intelecto, de aqu

    se desprenden, a m parecer, tanto la imaginacin, la capacidad creadora y el deseo.

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    Gracias a los sentidos se da la nutricin como parte fundamental y necesaria para la vida,

    pero esta nutricin no sera perfecta sin la intervencin de un intelecto que ayude al ser

    vivientes a seleccionar el alimento que le es saludable y rechazar aquel que le produce dao.

    Como puede verse el intelecto es parte esencial, dira que ms esencial que la nutricin,

    porque de nada servira tal facultad si no hay una inteleccin que pueda determinar lo que

    es saludable o lo que no lo es, una facultad que pueda determinar el objeto con el que

    entramos en contacto o del cual percibimos a distancia. El intelecto es aqul que establece

    que un conejo es un conejo y que por ser conejo es saludable y sirve para la nutricin. La

    imaginacin como facultad intermedia del intelecto y de los sentidos genera un deseo y, a

    su vez, un principio de movimiento y persecucin del conejo que me es saludable y que me

    es propio para la vida.

    No se propone establecer que el intelecto es el principio de todo porque ya dejamos claro

    que aquel principio es el alma, aunque no sera nada perjudicial llamar al intelecto alma

    intelectiva, as, estaramos reconociendo por igual los dos postulados. Pero lo que quiero

    establecer es que la inteleccin sea pasiva o activa -no es importante para m esta distincin

    ya que son dos funciones que se desprenden del mismo intelecto-, son parte importante de

    la cadena vital, la inteleccin es solo eso, una parte fundamental del proceso vital, no es

    principio, pues principio de todo es el alma. Quedara entonces por enunciar preguntas que

    no son parte de este texto pero que vale la pena distinguir, qu sera entonces el alma? Es

    el alma igual que el intelecto? El alma sera la unidad divisible en proceso pero indivisible

    en resultado vital de todo lo anterior? Es el alma la unin de todas las facultades y la

    inteleccin?

    Estas preguntas como se ha dicho no es el problema que queremos desenvolver, tan solo

    los nombramos porque han salido a la luz durante el lineamiento lgico que hemos

    propuesto, dentro de la relacin causal que se propone es imposible no preguntarse por lo

    que segn Aristteles es principio de todo, el alma. Es entonces el alma un componente

    que acta dentro de la naturaleza sabia y ordenada, el principio de toda esta relacin causal,

    intrnseca y bilateral que se da en los seres vivos. Al final del De anima, Aristteles propone

    la teleologa que no es ms que la concrecin de la vida, lo importante para m es que este

    telos se encuentra asumido por Aristteles bajo un presupuesto de orden sabio de la

    naturaleza, este orden sabio es la relacin casual que proponemos. Por tal motivo, no es

    raro que dentro de un orden sabiamente distribuido se encuentren jerarquas y facultades

    ms necesarias y ms importantes unas que otras, a nuestro parecer la inteleccin es una de

    las facultades ms necesaria e importantes y as lo hacer notar Aristteles:

    As pues, existe un intelecto que es capaz de llegar a ser todas las

    cosas y otro capaz de hacerlas todas; este ltimo es a manera de una

    disposicin habitual como, por ejemplo la luz: tambin la luz hace en cierto

    modo de los colores en potencia colores en acto. Y tal intelecto es

    separable, sin mezcla e impasible, siendo como es acto por su propia

    identidad. Y es que siempre es ms excelso el agente que el paciente, el

    principio que la materia (DA 430 a 15).

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    Si bien, no me parece importante la distincin activo y pasivo por ser una simple distincin

    del inteligir, distincin que se da por temporalidad, antes pasivo despus activo, -se

    abordara este tema dentro de poco en discusin con la teora de Alejandro de Afrodsio

    quien entiende por intelecto agente a Dios-. En la anterior cita de Aristteles hacemos

    nfasis en las palabras excelso y principio, a m parecer determinan la necesariedad del

    intelecto agente que a nuestra consideracin hace parte del mismo intelecto, tan solo que la

    distincin se hace por cuestiones temporales, el pasivo es la capacidad de recibir, de

    recepcin y de hacer criterios de reconocimiento mientras que el activo bajo esos criterios

    de reconocimiento genera criterios de produccin, de creacin, de prctica.

    El intelecto es en potencia, no a otro intelecto, sino en potencia

    para pensar. Esto mostrara que se tratara no de dos intelectos, sino de dos

    funciones del mismo intelecto que, en su aspecto material y formal en la

    relacin materia-forma da lugar al acto de pensar (Boeri, 2009, pg. 100).

    Aun as, y admitiendo la distincin activo y pasivo, vemos que para Aristteles es de gran

    importancia el intelecto activo, al parecer el intelecto activo o los criterios de produccin,

    creacin y prctica son esenciales y mucho ms relevantes que una simple inteleccin de

    recepcin. Creemos que tal importancia hace parte de toda una teora tica, o de una teora

    de la ciencia en accin. Pero lo que es importante resaltar es que aunque sea activo o

    pasivo, al final estaremos hablando del mismo intelecto pero con distincin en su relacin.

    Lo que puedo reprochar a Aristteles en esta parte del texto, es que no es claro y profundo

    en cuanto a las funciones que tiene el intelecto, si la idea de Aristteles era hacer un tratado

    sobre el alma como aquel principio de un todo orgnico que es el ser viviente, debi dar al

    intelecto el mismo estudio que dio a las otras facultades, porque a nuestro parecer el libro

    III que habla sobre el intelecto aborda el estudio en relacin con las otras facultades pero

    no tomando al intelecto como tema central.

    A partir de nuestra lectura no queda del todo claro aquella distincin, pues, si el intelecto

    pasivo es la recepcin y el activo la actividad, la prctica, dnde queda la parte intermedia

    del razonamiento, el discernimiento de todo aquello que se recibe, el criterio de

    reconocimiento es propio del activo o del pasivo? No puede ser del pasivo, pues el pasivo

    es solo potencia, es decir, es la capacidad de recibir informacin, al igual que el olfato es

    pasivo en potencia de recibir olores. Tendra entonces que ser parte del intelecto activo,

    por tal motivo entonces el activo tendra la funcin de discernimiento y la de prctica, igual

    a la tcnica que posee el artesano para crear sus objetos. El intelecto activo es, entonces,

    tcnica o discernimiento como tambin prctica, creacin, produccin de ciencia y creacin

    de la materia.

    Se parte del fin como en toda totalidad orgnica. La culminacin de la idea supone, en

    efecto, un esquema, una figura, una diversidad y un ordenamiento de las partes, que sea

    esencial al todo y determinable a priori segn el principio del fin. Se parte del fin, como en

    toda totalidad orgnica. Cuando ese esquema no procede del fin como fin capital del ser

    viviente, cuando ese esquema queda a merced de accidentes imprevisibles, no ofrece ms

    que una unidad tcnica y no arquitectnica. El problema que veo en Aristteles es que su

    De anima no parte del fin sino del principio, es decir, del principio de alma, si en realidad

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    Aristteles asuma el orden de la naturaleza como algo ya dado, su estudio sobre el alma

    debi partir de ese orden, luego adentrase en sus parte y descubrir que todo conjugaba

    hacia tal fin. Por el contrario, Aristteles parte del principio del alma, luego sus partes y al

    final adecua su finalidad, finalidad que no es profundizada, partes y principio que son

    moldeadas a la finalidad.

    Los procesos del alma en Aristteles han conducido a distinguir entre los rganos y las

    funciones que son el conjunto coordinado de las operaciones que esos rganos efectan

    para el mantenimiento de la vida. A cada sistema de rganos le corresponde una funcin

    que coopera en el equilibrio del organismo. Los aportes de diversas ciencias son el nico

    modo de dar cuenta de la totalidad orgnica. Al fin el estudio se completa al incorporar el

    conocimiento de las necesidades del organismo, ya que no es comprensible en su totalidad

    la funcin de un rgano si no sabemos que necesidades debe satisfacer. Tal finalidad dada

    por Aristteles no es profundizada de manera clara, pues, no se genera una ciencia del

    alma, una arquitectnica del alma sino un simple proceder o andamiaje de composicin del

    alma. Esta falta de precisin cientfica es, a nuestro parecer, la causante de

    malinterpretacin y de imposturas que alteran tal orden.

    Despus de haber demostrado la relacin causal y algunos problemas que encontramos en

    el tratado de Aristteles, procedemos a atacar algunas distinciones que hace Alejandro de

    Afrodsia, las disposiciones se harn a partir de interpretaciones activas y personales de la

    obra de Aristteles, en relacin con el texto Marcelo Boeri.

    Sin embargo, como veremos enseguida, esto no es lo que piensa

    Alejandro, quien no slo distingue dos, sino tres intelectos: (a) intelecto

    materia, el intelecto que todava no est inteligiendo pero que es capaz de

    llegar a estar inteligiendo; (b) el intelecto que ya est inteligiendo y tiene la

    disposicin de inteligir y es capaz de captar las formas de los inteligibles en

    la medida de sus propias posibilidades. ste sera, en la interpretacin de

    Alejandro, el intelecto paciente una vez que ha sido puesto en acto o

    activado, es decir, el intelecto humano cuanto est inteligiendo. En efecto,

    Alejandro aclara enseguida que este intelecto est ya en los seres ms

    perfectos, es decir, en los que inteligen. (c) Finalmente, el intelecto

    agente, aquel gracias al cual el intelecto en potencia y material llega a estar

    en acto cuando el intelecto agente le infunde una condicin o disposicin

    notica. ste es, segn Alejandro, el nico intelecto que constituye una

    verdadera forma inmaterial, que es inteligible por su propia naturaleza e

    intelecto en sentido estricto (Boeri, 2009, pg. 83 84).

    No sabemos de dnde Alejandro distingue tres formas de intelecto, pues, Aristteles es

    claro en el captulo 5 del libro III al distinguir solo dos intelectos, el activo y pasivo. As, el

    intelecto material sera el intelecto pasivo y el intelecto que ya est inteligiendo sera el

    activo. Pero cuando Alejandro distingue su tercer intelecto, el cual llama intelecto agente, le

    da una caracterstica de activacin, pues, Alejandro dice que gracias al intelecto agente el

    intelecto en potencia llega a una disposicin notica. La anterior cita resalta de manera

    explcita la tesis que atacaremos.

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    Al parecer Alejandro no tiene en cuenta la relacin temporal y estructural del tratado de

    Aristteles, no es el intelecto agente el que activa el intelecto pasivo sino que es el pasivo el

    que activa al intelecto activo o prctico. As mismo, lo que pone en actividad al intelecto

    pasivo son los sentidos y los criterios de reconocimiento que se hace por la facultad

    sensitiva; cuando la sensacin se encuentra en acto esta da la informacin al intelecto para

    que este pueda hacer su discernimiento. Como establecimos ms arriba la activacin tanto

    del intelecto como de los sentidos se da por una relacin causal de acontecimientos que se

    encuentran en el ordenamiento de la naturaleza, el intelecto agente de Alejandro no hace

    parte de este ordenamiento, pues, no se encuentra su lugar en la cadena, as, como tampoco

    se encuentra mencionado en la obra aristotlica.

    Otro punto que no compartimos con Alejandro es llamar al primer intelecto, intelecto

    material, a m parecer el intelecto no es material pues no posee rgano, no sabemos si

    Alejandro confunde este intelecto material con los objetos que entran en contacto o con

    los sentidos, en este punto compartimos la observacin de Boeri:

    No hay nada, sin embargo, en el argumento aristotlico de DA III

    5 que le permita inferir que el intelecto que est en nosotros (en su

    interpretacin el intelecto paciente que puede ser activado, los intelectos [a]

    y [b], respectivamente, de acuerdo con la distincin tradica del intelecto

    hecha por Alejandro) sea material: el intelecto paciente, en cuanto

    intelecto, es inmaterial. Alejandro explica la impasibilidad del intelecto y su

    no estar mezclado por el hecho de que no est mezclado con ninguna

    materia. Pero eso mismo es lo que explica la imposibilidad de que el

    intelecto sea material, pues el carcter de del intelecto activo y tambin

    del pasivo se deriva del hecho de que una mezcla en sentido estricto es,

    segn las premisas de la fsica aristotlica, una combinacin de cuerpos;

    pero, por definicin, el intelecto (pasivo o activo) no es un cuerpo. Por

    tanto, el intelecto en nosotros no puede ser material (Boeri, 2009, pg. 85).

    La lectura de Boeri es importante para entender la discusin sobre el intelecto, teniendo en

    cuenta tales postulados abordaremos las posibles causas de la interpretacin de Alejandro, a

    m parecer los postulados de separabilidad, inmortalidad y eternidad son los puntos

    cruciales que Alejandro designa al intelecto agente, es decir, Dios. Esta es la tesis

    aristotlica:

    As pues, existe un intelecto que es capaz de llegar hacer todas las

    cosas y otro capaz de hacerlas todas; este ltimo es a manera de una

    disposicin habitual como, por ejemplo, la luz: tambin la luz hace en cierto

    modo de los colores en potencia colores en acto. Y tal intelecto es

    separable, sin mezcla e impasible, siendo como es acto por su propia

    entidad. Y es que siempre es ms excelso el agente que el paciente, el

    principio que la materia. Por lo dems las mismas cosas son la ciencia en

    acto y su objeto. Desde el punto de vista de cada individuo, la ciencia en

    potencia en anterior en cuanto al tiempo, pero desde el punto de vista del

    universo en general no es anterior ni siquiera en cuanto al tiempo: no

  • 11 | P g i n a

    ocurre, desde luego, que el intelecto intelija a veces y a veces deje de

    inteligir. Una vez separado es slo aquello que en realidad es y nicamente

    esto es inmortal y eterno (DA 430 a 15 20).

    Partimos de que el texto de Aristteles es ambiguo y permite estas interpretaciones, pero

    nuestras conclusiones se harn con base en la estructura del texto. A m parecer cuando

    Aristteles habla de separabilidad del intelecto lo hace para distinguir que el intelecto no

    hace parte del cuerpo, pues, no es constituido por ningn rgano sensorial, si bien el

    intelecto recibe la alteracin de los sentidos esta hace un ejercicio diferente e independiente

    a la de los sentidos. Si el intelecto no hace parte del cuerpo y no se condiciona por las

    alteraciones de un rgano sensorial, entonces el intelecto no puede ser destruido por el

    exceso de alguna impresin, en esa medida podra ser inmortal.

    Otra opcin de lectura sera que cuando el ser vivo muera, con l morir el intelecto y las

    dems facultades, pero el intelecto solo morira en el sujeto concreto que muere ms no el

    intelecto en abstracto, es decir, el intelecto que an queda en los dems seres vivos. Pensar

    el intelecto en trminos ms abstracto no es nada impensado, Aristteles es claro cuando

    nombra que la ciencia en potencia desde el punto de vista en general no es anterior en

    cuanto al tiempo (DA 430 a 20), siendo as habra que preguntarse, el intelecto es igual a la

    naturaleza? Pues, entendemos que Aristteles habla de un intelecto que rige el universo en

    general y que siempre est en acto. Nosotros, no obstante, aseguramos que este intelecto

    universal, es decir, en abstracto es la misma naturaleza que ordena todo sabiamente.

    Si esto es as, el proceso de separabilidad sera que las leyes naturales gobiernan a los

    cuerpos sean simples o compuestos, segn lo anterior, el intelecto universal que sera la

    naturaleza no se condiciona a los seres vivos pues se encuentra separado de sus funciones

    vitales, y por lo contrario, los seres vitales s se encuentren condicionados al intelecto

    abstracto, el intelecto pasivo y activo solo seran participes de un ordenamiento sabio, este

    planteamiento no sera de nada errado teniendo en cuenta la anterior relacin causal.

    Fuimos claros al criticar la no profundidad de aquella finalidad y de aquel orden, solo

    creemos que puede ser una lectura interpretativa diferente y que contraviene la postura de

    Alejandro, pues su intelecto agente no sera Dios sino la naturaleza. Al concebir el intelecto

    universal al igual que la naturaleza esta ser inmortal y eterna, inmortal porque vivir en el

    sin nmero de especies y gneros; eterna porque siempre regir las actuacin de los seres

    vivos, siempre estar en acto.

    Finalmente, y aunque el intelecto necesite de la alteracin de los sentidos, los criterios de

    reconocimiento y prctica se separan de tal informacin, se separan del cuerpo. Sus

    discernimientos no se mezclan con el cuerpo para llegar a la verdad, segn Aristteles el

    cuerpo es corruptible y por tanto puede llevar al engao al intelecto, el ejercicio intelectivo

    va mucho ms all de las alteracin de los sentidos, porque de no ser as slo bastara con la

    informacin que nos dan los sentidos para poder vivir. Ya para terminar, creo que

    Aristteles debi profundizar el concepto de separabilidad que toma de Anaxgoras,

    porque tal concepto en Anaxgoras hace referencia a la unidad, algo muy similar a nuestra

    tesis de la naturaleza, as, como lo indeterminado cuando no ha recibido forma alguna. Y si

    algo se puede desprender de la teora de Anaxgoras es un contenido metafsico del cual

  • 12 | P g i n a

    Alejandro pudo basarse para tal teora del intelecto agente como Dios. Ante todo,

    queremos recalcar que Aristteles falla en profundidad cuando hace el tratamiento de los

    intelectos pero que tomando al tratado como un todo orgnico y partiendo de su finalidad

    es imposible concebir algo diferente a la naturaleza como aquel intelecto agente, que a

    nuestro parecer, es lo que gobierna todo lo dems. Si el alma en concreto y abstracto- es el

    principio de todas las cosas, la naturaleza es el fin y el orden de todas ellas.

    Bibliografa

    Aristteles. Acerca del alma. 1978. Traduccin de Toms Calvo Martnez. Madrid: Editorial

    Gredos.

    Boeri, Marcelo. Alejandro de Afrodsia como intrprete de la notica aristotlica. 2009. Instituto de

    Filosofa. Universidad de los Andes. Santiago de Chile. Publicado en: Estudios filosficos

    ISSN 0121-3628, n40, Diciembre de 2009. Universidad de Antioquia, pp. 79-107