El Huecú

16

description

El Reclamo de la comunidad Manqui de sus territorios

Transcript of El Huecú

Empezó como un juego, como lanecesidad de hacer algo, de plas-mar diferentes pensamientos, demostrar las realidades para que al-guien construyera sus propias con-clusiones. Sabemos que la “objeti-vidad” no existe, pero sí la honesti-dad. Es por eso que en el video estálo que a nuestro juicio, es lo más re-presentativo de las dos culturas.

Podés estar o no de acuerdo. Loimportante es fijar una posición yestar convencido de que esa posi-ción no es la verdad absoluta y deque la conclusión siempre formaparte de lo inconcluso.

* Este trabajo se lo dedicamosa la utopía... y a vos.

Realización:RODOLFOCANINI- DIEGOVILAS

SOBRE EL TRABAJO, EL TRABAJO

Y EL TRABAJO

PARA EL DOCENTE

Este trabajo apunta a generar el debate entrenuestros adolescentes. No quisimos estructurar es-ta cartilla en base a preguntas y respuestas ordena-das, con el fin de que docentes del área de CienciasSociales, manejen el material con la mayor libertady creatividad posible. Si bien el video se puedeabordar desde distintas disciplinas, hay contenidoscurriculares que están relacionados estrechamen-te, como por ejemplo: Derechos humanos; racismo;segregación; discriminación; marginalidad; colo-nialismo; proceso de colonización; emergencia delos nacionalismos; ideologías totalitarias; pobla-ción; indigenismo; “conquista del desierto”; etc.

SUGERENCIAS DIDÁCTICAS

En base a algunas experiencias hechas en el Cole-gio Secundario de El Huecú, y que dieron muy bue-nos resultados, es que sugerimos que los alumnosvean el video y elaboren, en grupo, reflexiones ypreguntas. Luego sugerimos que se brinde a cadagrupo la información contenida en la cartilla, paraque los chicos valoren y/o resignifiquen, tomandouna posición en forma grupal o individual (en casode no acordar). Seguidamente harán un Plenario,en el cual cada grupo expondrá lo elaborado y seabrirá un nuevo ámbito de discusión para haceruna puesta en común. A esto se le podrán sumar di-ferentes materiales bibliográficos con posturas an-tagónicas, comparaciones de marginalidad, de ra-cismo con otras etnias, estratos sociales, incorpo-rando todo esto a la realidad social de los alumnosinvolucrados.

Empezó como un juego, como lanecesidad de hacer algo, de plas-mar diferentes pensamientos, demostrar las realidades para que al-guien construyera sus propias con-clusiones. Sabemos que la “objeti-vidad” no existe, pero sí la honesti-dad. Es por eso que en el video estálo que a nuestro juicio, es lo más re-presentativo de las dos culturas.

Podés estar o no de acuerdo. Loimportante es fijar una posición yestar convencido de que esa posi-ción no es la verdad absoluta y deque la conclusión siempre formaparte de lo inconcluso.

* Este trabajo se lo dedicamosa la utopía... y a vos.

Realización:RODOLFOCANINI- DIEGOVILAS

SOBRE EL TRABAJO, EL TRABAJO

Y EL TRABAJO

Cuando existen manos que aplauden el oro trabajado porlos imperios a través de la historia, es porque hay manos en-sangrentadas en las sombras de la esclavitud. La ostentacióndel poder, la vanidad, la frivolidad están íntimamente rela-cionadas con la estupidez humana. ¿Será la estupidez innatade nuestra especie?; ¿o se originará con algunas determina-das culturas?

“Los indígenas de Estados Unidos y los Mapuches no cons-truyeron pirámides, ciudades, ni trabajaron el oro..., pero sa-bían que asentarse en un lugar era matar un río, como lo ha-cen las alcantarillas de nuestra civilización. Sus valores hu-manos son tan grandes, que pese a la miseria casi generaliza-da, a la que los ha conducido la civilización actual, en ningúnasilo u hogar para ancianos, se encontrará a un viejo abuelomapuche; sus días siempre acabarán tranquilos junto a lossuyos y a su amada tierra. Para muchos ancianos no mapu-ches, los otros lugares son como la antesala de la muerte”.

(Sergio San Martín - Historiador chileno)

EL ORO,EL ORO

Y EL ORO

El Callín Payao (cerro ladeado) con sus 2000 metros de al-tura veía cómo los nietos de sus viejos pobladores volvían apisar su pie con la caída del verano de 1995. Se repetía el ri-to de cuidar la Mapu, madre de las madres; y se reiteraba, pe-ro esta vez a la inversa, el conflicto entre dos culturas, entredos colores sin mezclarse. ¿Será entre el bien y el mal?,¿Quién es quién? entre invadidos e invasores. Las tierrasneuquinas están minadas de conflictos y litigios, y por esto esAmérica. El Huinca le arranca la vida por metros a los Mapu-ches cuando alambra la tierra; pero el Huinca ¿Serán todoslos hombres blancos? ¿Será un problema de razas?

El Huecú, un pueblito de poco menos de 1500 habitantes,ubicado al noroeste de la provincia del Neuquén, se escondeentre la cordillera y la precordillera. Pero lo encontraron y leplantaron pies blancos hace más de 60 años para que doñaCarmen siga persistentemente diciendo con cara adusta: “ElHuecú siempre fue de la Comunidad”. No en vano El Huecútiene dos significados “lugar endiablado” y “lugar sagrado”; elprimero según los blancos y el segundo según algunos ma-puches, los que saben que fue el último lugar de resistencia.

LA TOMA

Cuando existen manos que aplauden el oro trabajado porlos imperios a través de la historia, es porque hay manos en-sangrentadas en las sombras de la esclavitud. La ostentacióndel poder, la vanidad, la frivolidad están íntimamente rela-cionadas con la estupidez humana. ¿Será la estupidez innatade nuestra especie?; ¿o se originará con algunas determina-das culturas?

“Los indígenas de Estados Unidos y los Mapuches no cons-truyeron pirámides, ciudades, ni trabajaron el oro..., pero sa-bían que asentarse en un lugar era matar un río, como lo ha-cen las alcantarillas de nuestra civilización. Sus valores hu-manos son tan grandes, que pese a la miseria casi generaliza-da, a la que los ha conducido la civilización actual, en ningúnasilo u hogar para ancianos, se encontrará a un viejo abuelomapuche; sus días siempre acabarán tranquilos junto a lossuyos y a su amada tierra. Para muchos ancianos no mapu-ches, los otros lugares son como la antesala de la muerte”.

(Sergio San Martín - Historiador chileno)

EL ORO,EL ORO

Y EL ORO

La Comunidad Manquihace posesión de la tierra,que según el señor Na-rambuena es de su pro-piedad, y redescubren alhuinca. Se dan cuenta deque algunos de ellos estána favor de la toma, queapoyan su accionar. Qui-zás algunos de ellos ten-gan conocimiento de queArgentina firmó el Conve-nio 169 de la Organiza-ción Internacional delTrabajo, por el cual secomprometió a respetarlos Derechos a la propie-dad y posesión de la tierra de los Pueblos Originarios. Tam-bién hubieron huincas que aprovecharon la oportunidad pa-ra reafirmar “aquí hay una sola Nación”; “somos todos argen-tinos y todos tenemos los mismos derechos y obligaciones”.

“El Huecú siempre fue de la Comunidad, además de lospapeles tenemos la historia mapuche, la conciencia mapu-che”. En realidad, ¿hay una historia mapuche y otra historiahuinca?; ¿cuál te toca a vos?.

En este baile con distintas músicas, los únicos beneficia-dos son los sordos. Distintas historias, formas de vida para-lelas, culturas que se chocan, leyes que se contradicen.

El señor Narambuena afirma: “las leyes ancestrales deellos (mapuches) se contraponen con las leyes de este país”.El primer artículo del Convenio 169 de la OIT expresa: “El

CUANDO LOS M APUCHES REDESCUBREN A LOS HUINCAS

EN EL BAILE DEL QUIÉN ES QUIÉN

derecho a ser reconocidos como pueblos dentro de un esta-do nacional, con identidad propia y con derechos que se de-rivan de su presencia histórica y contemporánea”... “La con-ciencia de su identidad indígena deberá ser considerada co-mo criterio fundamental.”

Es sabido que los mapuches tienen un sentido profundode la vida comunitaria, y es por este sentido que la tierrasiempre es de la Comunidad. Ahora bien, hay muchas perso-nas que piensan que “a cada individuo que esté en la reservaindígena, le den el título de propiedad”, como piensa el señor

Narambuena. Esto parece muy justo y loable, pero... ¿se res-petaría su identidad, su forma histórica de vida?.

¿Es posible que en un mismo país puedan convivir perso-nas con distintos derechos y leyes? El Derecho consuetudi-nario (por costumbre) del que nos habla el Convenio de laOIT (“Al aplicar la legislación nacional a los pueblos origina-rios deberán tomarse debidamente en consideración suscostumbres) afirma que los gobiernos deberán incorporarmedidas efectivas de administración de la justicia que asegu-ren un pluralismo legal necesario para garantizar los dere-chos humanos de los indígenas como individuos y comuni-dades. Casi espontáneamente podríamos opinar que es posi-ble que puedan convivir personas con distintos derechos ydistintas leyes. Pero inmediatamente surgen otras preguntas:¿No somos una Nación?; ¿No tenemos un Ser Nacional?

La Comunidad Manquihace posesión de la tierra,que según el señor Na-rambuena es de su pro-piedad, y redescubren alhuinca. Se dan cuenta deque algunos de ellos estána favor de la toma, queapoyan su accionar. Qui-zás algunos de ellos ten-gan conocimiento de queArgentina firmó el Conve-nio 169 de la Organiza-ción Internacional delTrabajo, por el cual secomprometió a respetarlos Derechos a la propie-dad y posesión de la tierra de los Pueblos Originarios. Tam-bién hubieron huincas que aprovecharon la oportunidad pa-ra reafirmar “aquí hay una sola Nación”; “somos todos argen-tinos y todos tenemos los mismos derechos y obligaciones”.

“El Huecú siempre fue de la Comunidad, además de lospapeles tenemos la historia mapuche, la conciencia mapu-che”. En realidad, ¿hay una historia mapuche y otra historiahuinca?; ¿cuál te toca a vos?.

En este baile con distintas músicas, los únicos beneficia-dos son los sordos. Distintas historias, formas de vida para-lelas, culturas que se chocan, leyes que se contradicen.

El señor Narambuena afirma: “las leyes ancestrales deellos (mapuches) se contraponen con las leyes de este país”.El primer artículo del Convenio 169 de la OIT expresa: “El

CUANDO LOS M APUCHES REDESCUBREN A LOS HUINCAS

EN EL BAILE DEL QUIÉN ES QUIÉN

El 17 de mayo de 1976 es reconocida la personería jurídi-ca de la Confederación Indígena Neuquina (CIN), cuandonuestro país era desangrado por la dictadura más feroz dela historia argentina. Con un léxico de estilo castrense ob-servamos en los incisos f) y g) del artículo 3 de este estatutodos frases que encierran mucho contenido detrás:... “her-mandad entre nuestros paisanos (mapuches) y quienes tie-nen la suerte de haber nacido, vivir y sentirse argentinos,como nosotros...”

¿UN SER NACIONAL?“En Chile no hay indios: sólo hay chilenos”

(Propaganda del Gobierno de Pinochet)

“...hasta lograr que nuestra raza nativa se inserte en el fuertetronco del Ser Nacional, aportando la invalorable savia de sucristiana raigambre telúrica”. Está claro que la redacción no fuehecha por un paisano mapuche. Pero esto es un “detalle”. Locierto es que la oficialidad de las Fuerzas Armadas de entoncesno se cansaban de propagandizar lo del Ser Nacional.

Deberíamos investigar qué es una nación. Hay básicamentedos concepciones acerca de Nación. Algunos creen que surge apartir de que un grupo social que comparte la misma lengua, et -nia, religión, costumbres, que habitan un mismo territorio, quetienen una misma cultura, como aspectos principales. Otros,hacen hincapié en elementos morales y psicológicos, comosentimientos patrióticos, decisión de vivir en común, concien -cia de pertenecer al mismo grupo humano. Si nos basamos enla primera idea de nación, podemos decir que los mapuches tie-nen una misma lengua: “el mapudugún”; un mismo dios: “ngen-che o Ngünechen”, las mismas costumbres, la misma historia,un mismo territorio; concluiríamos fácilmente que los mapu -ches constituyen una nación. Ahora si nos basamos en la segun-da concepción, es decir en elementos morales y psicológicos;¿Quién se anima a decir que compartimos la misma Nación conlos mapuches?. Este tema de Nación Mapuche eriza la piel amás de un argentino. No se entiende cómo puede existir más deuna nación en un mismo país. Deberíamos diferenciar Naciónde Estado. Han existido y existen naciones sin Estados, comopor ejemplo los judíos antes de la década del 40 en este siglo,hasta que conformó el Estado de Israel, o los gitanos que no tie -nen territorio, quizás por su cultura. O existieron más de unanación en un mismo Estado como las cuatro naciones que con -formaban el Estado de la ex Yugoslavia. Otro ejemplo sería la exAlemania Democrática y la ex República Federal Alemana; aquísería una misma nación dividida en dos Estados.

Sin embargo, a pesar de los numerosos ejemplos, es difícilaceptar que haya una nación dentro de la Nación Argentina.Habrá que debatir este tema y no ocultarlo, habrá que respetarlas diferencias culturales, porque la historia nos demuestra, quecuando se ocultan las diferencias y no se las respeta ni se deba-ten, las consecuencias son nefastas.

dimensión sagrada y colectiva de cosa “fuera del comer-cio”. No es cosa de nadie, sino cosa de y para todos: públi-ca y graciosa como el aire, el agua y el fuego.

Esta es la concepción no tan sólo mapuche sino tambiénde todos los pueblos originarios americanos. ¿Sería posiblealcanzar la tecnología que hoy tenemos con esta concep-ción de la propiedad?; ¿Es incompatible con el sistema eco-nómico de nuestro país?

“Tenemos alternativas económicas, que por lo menos enchiquitito, nos permiten una cierta liberación del Sistema ydel Mercado Mundial, para vivir; nosotros no queremosacumular, queremos vivir nada más”.

(7mo. Seminario de formación teológica. El Dorado/Mi-siones. Panel aborigen con participación de 7 etnias delnorte y la mapuche - Febrero de 1992)

La tierra madre (Ñuque-mapu), el elemento constitutivofundamental de la identidad y cultura indígenas tradiciona-les, es natura, principio y crisol de toda vida, vínculo sagra-do del Hombre con todo lo material y espiritual, con su pa-sado, presente y futuro, lazo entre los miembros de la co-munidad, aglutinante de vida social, cultural y económica.Esta concepción de la tierra excluye absolutamente y porprincipio la apropiación individual, como corresponde a su

LA TIERRA CENTRO DE LA VIDA

Seguramente, escuchaste más de una vez frases como és-tas; o “yo tengo un amigo judío” o “hay negros que son bue-nos”. Es interesante analizar este tipo de expresiones. ¿Hay

otro mensaje, además del explícito? ¿Qué significa “Hay ex-celentes personas entre los indígenas?”; ¿Por qué aclarar que“soy amigo de un judío?”; ¿por qué mencionar la etnia cuan-do se declara un afecto como la palabra “amigo” o una vir-tud como “excelentes personas”?

El racismo, ¿es irracional o es algo pensado?¿Por qué el sistema desprecia al indígena, al cabecita negra

y a tantos otros?¿Desprecia lo que ignora?Es obvio que los conquistadores del 1500 y aún del 1900 no

sintieron curiosidad alguna por las diferentes culturas de lospueblos aborígenes. ¿Por qué?; ¿Miedo de saber, qué?

PERO CLARO, TAMBIÉN HAY EXCELENTES PERSONAS

ENTRE LOS INDÍGENAS, ¿ME ENTIENDE?(Innumerables son las personas,pero identificable su ideología)

En la escuelitadel Cajón de ElHuecú, ubicadaen las tierras dela comunidadManqui, subíanjunto al sol mati-nal las banderasargentina y ma-puche. En un díanublado, amena-zante de desplo-marse con me-tros de nieve, lanueva y coloridabandera de lagente de la tierraera reemplazadapor una banderacon rayas celes-tes y blanca enforma vertical. A los coltros (niños) les habían cambiadonuevamente la historia. La provincia del Neuquén flamea-ba por sobre sus cabezas. Quizás, a algunos de ellos, le ha-ya dolido como al cacique Purrán la calle principal de ElHuecú: General Roca.

Lo que Argentina escribió con la mano en el Convenio dela OIT, en el artículo 2, es lo siguiente: “Los gobiernos debe-rán asumir, con la participación de los Pueblos Indígenas, laresponsabilidad de desarrollar acciones para proteger losderechos de estos pueblos y garantizar el respeto a su inte-gridad”.

DE LA LEGITIMIDAD Y LAS LEYES

“La integración es irreversible” dice el señor Narambue-na, y posiblemente sea cierto. Lo que deberíamos averiguares: ¿De qué forma se puede llevar a cabo la integración?;preguntarnos, ¿Compartimos la misma historia?; ¿A quéconclusión llegamos mapuches y no mapuches cuando re-visamos la historia?.

SOBRE LA INTEGRACIÓN

Gracias a:

Osvaldo Bayer, Nely Dastugue, Marcelo Franco, SilviaLazzarini, Laura Marsch, Estela Matus, Ugo Riverón,

Raimundo Rosales, Gabriela Vilas, Andrea Zeiger.

Participaciones

Muestras y festivales en: Quetzantenalgo (Guatemala),Rio de Janeiro (Brasil), Barcelona y Madrid (España),Mexico DF (Mexico), Cordoba, Rosario, Neuquen y Bue-nos Aires (Argentina).

Premios

Premio Lanza Amaru de la Nacion Cofan (tercer festivalde cine y video de las primeras naciones Abya Yala,(Ecuador)Mencion de Honor otorgada por el Instituto Nacional deAntropologia y Pensamiento Latinoamericano (PrimerFestival Argentino de cine y video Documental, Encuen-tro de documentalistas del IDAC).

Bacacay 4244 dto. 2 (C1407EDT).Capital Federal . Tel.: 4672-6979.

E-mail [email protected]