El gato negro
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Esta leyenda ha pasado de generación en generación… Sin duda, es la mejor leyenda del estado donde proviene… Cuenta la leyenda que existía una joven pareja que, al casarse, se fueron a vivir a la casa de la novia, donde solo vivía su madre...
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Esta leyenda ha pasado de generación en
generación…
Sin duda, es la mejor leyenda del estado
donde proviene…
Cuenta la leyenda que existía una joven
pareja que, al casarse, se fueron a vivir a la
casa de la novia, donde solo vivía su
madre...
EL GATO NEGRO
LA OSCURIDAD DE LA NOCHE…
Dicen que la suegra y el muchacho no lograban congeniar;
esto causo la desgracia de su hija, que siendo joven aun, deseaba que en su hogar reinara la armonía que jamás llegaba… pues las peleas entre su esposo y su madre la dividían entre dos amores bien distintos, entre la espada y
la pared.
Cansada la pobre muchacha de los continuos pleitos en su hogar, decide pedirle a su
esposo que se muden a otra casa, pensándola el hecho de dejar sola a su madre
Se mudaron a una casita mas pequeña, pero
con un hermoso jardín,
y ahí fueron tan felices como solo los recién
casados pueden serlo. Entre caricias y
palabras dulces vivían llenos de paz entre
ellos.
|Una etapa muy tranquila y prodiga vivían en su
nuevo hogar, colmado de serenidad y calma...
Cuando el esposo salía a trabajar, la joven
pasaba los días haciendo las labores del
hogar, y mientras lo esperaba se ponía a
tejer bajo la sombra de un nogal.
Diariamente el esposo llegaba cansado y se
sentaba al lado de su esposa a contarle los
sucesos de su trabajo…
y aprovechaba la pareja para quedarse ahí,
un rato viendo la noche, apoderarse del
lugar...
Las tardes eran de ambos, deliciosa rutina
que un día se vio interrumpida por la
presencia de un nuevo acompañante:
un Gato Negro con ojos verdes que, sentado
sobre la reja del patio, observaba a la
mujer atentamente.
Cuando llegaba el esposo, el gato salía
corriendo asustado por su presencia.
La mujer le contó a su marido lo sucedido
desde días atrás, pero el muchacho no le dio
importancia y, abrazando a su esposa, le dijo
que ya cenaran...
Pasarían unas tres semanas mas con la visita
de aquel gato.
Nuevamente la esposo le contó al marido lo
que pasaba antes de el llegara.
El marido, un poco cansado de los ruegos de
su mujer decidió hacerle caso;
al día siguiente acordó con su mujer que
llegaría temprano y se disfrazaría de ella
para lograr verlo...
Así lo hicieron, al día siguiente llego el gato
puntualmente a sentarse sobre la reja del
jardín.
El esposo por fin dio crédito a la
preocupación de su mujer, pues era en verdad
un enorme gato negro cuya maldad se veía en
los ojos
le hizo sentir escalofríos cuando se le quedo
mirando fijamente con esos verdes y
profundos ojos, como si adivinara la farsa y
lo recriminara.
Pero lo que el esposos jamás pensó que
sucediera es que el gato fuera a hablar…
-¿Qué es lo que haces vestido de mujer?- le
dijo…
Recuperándose del susto, el hombre corrió a
la cocina, seguido velozmente por el gato,
que entro a la casa por una ventana.
Ya adentro, el hombre aterrorizado vació
una olla con caldo hirviendo que encontró en
la cocina sobre el gato negro…
maullando de dolor el gato negro salió
disparado hacia el jardín para perderse
entre las sombras...
Al día siguiente los despertó una
desagradable sorpresa:
la madre de su esposa se encontraba
grave de salud. Así que decidieron ir a
verla...
Acostada en la cama, la madre al verlos
entrar por la puerta, comienza a gritarle
al hombre que se vaya de su casa…
La hija agobiada le pregunta por que lo
echa de ahí, y ella le contesta que el es el
único culpable de sus quemaduras...
La bruja muere tiempo después de contarle a
su hija sobre lo sucedido…
Y los esposos callan la historia, hasta que
uno de ellos lo confiesa en un arrebato de
culpa a un amigo, lográndose extender como
una leyenda en todo el estado...
Y es que, ocurría frecuentemente que las
brujas, o como les decimos en el país, los
Nahuales, cambian de forma,
transformándose en animales para salir a
hacer sus maldades o para, simplemente
como este caso, para acechar a sus enemigos.
Así que si un día, ves por tu casa, a un
animal de extraña mirada que te visita
frecuentemente, quizá no sea solo un
animal: podría ser también un maligno
Nahual.
MAS ALLA DE LA IMAGINACION…
GARROBO
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