Benemérita Universidad

Autónoma de Puebla.

Jesús Tomás Bello González.

El futuro de internet: como le irá a la WWW.

14-11-11

Índice:

Introducción: antes de iniciar con el tema.------------------------------------------------2 1 Internet y su futuro tecnológico.---------------------------------------------------------4

1.1 Que se ha hecho para mejorar a internet.-----------------------------------4 1.2 La brecha digital y sus aliados.-------------------------------------------------6

2 Internet y su futuro tecnológico.--------------------------------------------------------7

2.1 El nuevo mercado electrónico.-------------------------------------------------7 2.2 Los nuevos problemas del mercado electrónico, retos a vencer.-----9

3 Internet y su futuro social.----------------------------------------------------------------10

3.1 ¿Qué cosas buenas y malas traerá internet en el futuro?--------------10

3.1.1 Derecho al honor vs libertad de expresión.------------------10 3.1.2 Ciber-delitos en la red.--------------------------------------------12 3.1.3 El nuevo concepto del derecho al olvido.--------------------14 3.1.4 Protección de datos.-----------------------------------------------15 3.1.5 Apoyo social on-line.----------------------------------------------15 3.1.6 Campañas electorales en línea.--------------------------------16

4 Para concluir.--------------------------------------------------------------------------------17 Referencias.--------------------------------------------------------------------------------------18

El futuro de internet: como le irá a la WWW.

Introducción, antes de iniciar con el tema: A pesar de ser joven su historia, internet ha hecho surgir a muchas empresas y devastado a varias más, pero solo le ha dado poder y prestigio a unas cuantas, ya que en la historia de la humanidad después de una lucha por el poder este es tomado por aquellos que supieron adaptarse a los cambios y vencer los obstáculos; sin embargo, eso no asegura su dominio por largo tiempo, muy por el contrario algunas empresas e inventos sólo dilataron en la cima por menos de unos cuantos días y después desaparecieron por completo. ¿Acaso en el futuro se mantendrá esa constante? Lo más probable no se sabe, a la mejor haya nuevas alianzas empresariales, y Microsoft compre a Wikipedia o Yahoo! a Twitter, por mencionar un ejemplo; pero a la mejor todas estas empresas y otras sean destruidas por Google; e incluso puede ser que Google junto con los ya mencionados sean derrocados por una empresa desconocida actualmente pero que en futuro sea “el invento del momento”. Nada es cierto, lo que sí se sabe es que cada vez internet toma más importancia en la cultura mundial; siendo optimistas, puede ser que los canales televisivos ya no se capten por un televisor sino por una computadora, o que internet, tal y como la señal abierta de televisión, ofrezca acceso a si mismo

desde casi cualquier lugar del mundo a las personas, incluso es posible que todos tengamos conexión a la red mundial con la ayuda de una microcomputadora hecha como un reloj. No obstante, también es probable que nuevamente una amenaza fantasma surja: un nuevo medio de comunicación más innovador que el internet convencional, el cual haga que la red que conocemos sea desplazada, incluso desaparezca. A la mejor nadie crea que esto sea posible, pero hace 100 años nadie tampoco se creía que se pudiera ver a un pariente o amigo desde larga distancia, e incluso platicar con él, con la ayuda de una maquina portátil (laptop). Hay algo que ya le debe quedar claro al ser humano: no hay fronteras, nada es imposible cuando se tiene fe y voluntad, y esto se manifestará en internet. Es por ello que en la actualidad, la integración a gran escala de tecnologías múltiples, como las plataformas informáticas distribuidas, la web 2.0, los servicios P2P, las diversas redes de acceso de banda ancha, los dispositivos móviles y los sensores («objetos»), obliga a replantearse la arquitectura de internet, diseñada hace más de treinta años tal y como la conocemos. El concepto de Internet del Futuro emerge como resultado de una combinación de necesidades técnicas, económicas y sociales(1), por ello, desde diversos foros e iniciativas se ofrecen diversas alternativas como modelo de desarrollo, pero en todos ellos se percibe un enfoque global en cuanto a las bases sobre las que hay que asentar el diseño de la Internet del Futuro: tecnología, economía y aspectos sociales; cada una será tratada por separado a lo largo del desarrollo de tema, además se citaran algunas de las más importantes leyes y normativas de Servicios de la Sociedad de la Información y Comercio Electrónico (LSSICE) creadas en la reforma europea de las comunicaciones electrónicas de la UE de 2009, una de las pocos casos de grupos de naciones que regulan los servicios otorgados a sus ciudadanos. El presente documento fue creado con la finalidad de dar a conocer a jóvenes el tema del futuro de internet, con la intención de que se sientan interesados en el tema para que, con el tiempo, hagan aportaciones a mundo de la tecnología web, con previo conocimiento de causa.

1 Internet y su futuro tecnológico. 1.1 Que se ha hecho para mejorar a internet. Internet ha posibilitado múltiples oleadas de innovación: en primer lugar, con la introducción de la web, luego, con la integración de los servicios de comunicación y audiovisuales (por ejemplo, VoIP e IPTV) y, más recientemente, con la multiplicación de los servicios y aplicaciones en línea (1).

Tras un proceso de selección tecnológico, en la actualidad nos encontramos en la cima de productividad de un conjunto de tecnologías y servicios que posibilitan hacer negocio con Internet de manera efectiva y aparentemente sostenible. Esta madurez parece conllevar un cierto estancamiento actual en la creación y explotación de nuevos servicios telemáticos, actividades que se ven limitadas por múltiples factores estructurales, tecnológicos y económicos (2). Por mencionar un ejemplo: servicios públicos como la salud, la movilidad (mudanzas), el control del medio ambiente o la gestión energética se basan hoy en día en infraestructuras complejas que tradicionalmente no se gestionan a través de internet (1). Sin embargo, ha llegado la hora de afrontar este y otros retos más por parte de quienes se hacen cargo de crear y distribuir el servicio de la red mundial a todo el mundo. Actualmente, diversas naciones han visto con seriedad esta situación y generado diversas iniciativas en torno a ella:

La Unión Europea, dentro de sus políticas de I+D (innovación más desempeño), ha planteado como una de sus principales prioridades el diseño de la Internet del Futuro en FP6 y actualmente se ha identificado como un eje clave dentro de la iniciativa llamada “Challenge 1” en FP7 en el cual se incluyen 141 proyectos (2). Es una de las prioridades del programa de investigación sobre las TIC del 7º Programa Marco: alrededor de un 20 % del presupuesto TIC se destina a la I+D en este ámbito (1). Dentro de España se producen movimientos similares a los realizados a nivel europeo. Empresas e

instituciones españolas, a través de las Plataformas Tecnológicas (eNEM, eMOV, eSEC, eISI, eVIA, PROMETEO e INES), han creado una nueva Plataforma Tecnológica Española, sobre Internet del Fututo, que aúna esfuerzos y reúne a los agentes más relevantes del sector (2). Para abordar los problemas de la Internet actual y los retos de la Internet del Futuro, dentro de Estado Unidos se han financiado diversas iniciativas dentro del marco de la NSF (National Science Foundation), dentro de la NeTS (Networking Research Cluster) y del Cyber Trust Program. Además de otras iniciativas de menor calado, la NSF ha promovido la creación de GENI para rediseñar la Internet desde cero. GENI está formado por dos componentes principales: un conjunto de facilidades experimentales, y un programa de investigación llamado FIND (2). En Japón la principal iniciativa sobre la Internet del Futuro es AKARI que pretende implementar una red de nueva generación para 2015 (2). Dentro de los esfuerzos de Corea, podemos encontrar diferentes iniciativas como KOREN2 o TEIN2 (2).

Como podemos ver muchas naciones desarrolladas o e incluso grupos de ellas están creando proyectos referentes a nuevos modelos tecnológicos para distribuir internet al mundo, a largo plazo se puede generar un conflicto entre ellos cuando el modelo que nos rige desde hace 30 años ya no sea suficiente para satisfacer las demandas de los usuarios en el futuro, del cual surgirá el nuevo modo de distribuir el servicio de la red mundial.

1.2 La brecha digital y sus aliados.

En la actualidad pareciera ser que internet ha llegado a su máximo desarrollo, sin embargo, esta es solo una falsa idea que ha surgido debido a que la mayoría de sus actuales usuarios se sienten satisfechos con el servicio tal y como está, sin tomar en cuenta que la sociedad evoluciona; es decir, si la tecnología actual nos parece algo sorprendente, en unas cuantas décadas a la sociedad futura le parecerá inservible e incluso anticuada. Esta situación hace que se detenga el desarrollo de internet debido a la falta de entusiasmo por parte de las empresas que trabajan para crear productos de uso común en el mundo de internet; estas al ver que sus clientes están felices con lo que consumen siguen generando las mismas cosas una y otra vez, con cambios ligeros de vez en cuanto para no perder la ventaja que da la innovación, pero sin que estos últimos representen algo que signifique una revolución total y benéfica para los usuarios; si a caso las grandes transformaciones que llegan a surgir únicamente se mantienen en beneficio de unos cuantos científicos y académicos, tal y como eran las cosas antes de que se conociera lo que era la red mundial.

Pero aun más importante que este y otros problemas, está el hecho de que no en todas las naciones se pone el servicio de World Wide Web (red mundial) a disposición de la población, bien sea por problemas políticos, económicos, sociales, etc. Esta es la llamada brecha digital, que impide que un gran número de personas sepan lo que es navegar por la red.

La iniciativa de acabar con la brecha digital por parte de naciones desarrolladas se basa en los siguientes puntos: ● Es necesario adoptar un enfoque global en relación con la sociedad y la economía digitales, que

incluya a la Internet del Futuro entre sus componentes (1). ● Se percibe como necesario un rediseño para abordar las limitaciones de Internet en su distribución

global (2).

Con esta iniciativa, se desea que el precio del servicio de internet disminuya y que haya mayor cantidad de distribuidores de este en todos los países del mundo, sin embargo, con esto se hacen aparte problemas más graves: que persona en un país con pobreza extrema se preocupa por tener acceso a la red mundial si su principal problema es conseguir alimento para él (ella) y su familia. Es desde esta perspectiva que se puede concluir lo siguiente: para que un país aspire al servicio a internet, primero debe de resolver sus problemas internos. Esto es lo que hace de la brecha digital el verdadero rival de la distribución total de internet en los países del mundo. Este, junto con otros problemas como falta de iniciativa, conformismo por parte de usuarios y distribuidores de servicios, apatía al cambio, etc., hacen que el desarrollo tecnológico de internet y su ampliación adecuada dentro de la sociedad global se vea como un enorme problema y reto a futuro, ambas cosas a la vez.

2 Internet y su futuro económico. 2.1 El nuevo mercado electrónico. En general, se ha visto como paulatinamente internet se ha introducido como una herramienta para hacer negocios e intercambio de bienes y servicios, todo hasta llegar a consolidarse como uno de los medios más eficaces para vender productos por medio de anuncios. Primero conviene ver cómo funciona la dinámica del comercio en la red dentro del nuevo “mercado electrónico” y luego tratar de deducir cómo puede desarrollarse esta en el futuro.

Primero, haciendo cita a una tesis doctoral titulada ¿Es realmente gratis el futuro de los negocios por Internet? Un análisis económico de la visión de Chris Anderson, del autor Fernando Herrera González: “El análisis realizado a partir de la teoría económica austriaca de Anderson nos lleva a concluir que no existe el “mercado gratis” en Internet a que se refiere cuando sostiene que “cero es un mercado, y cualquier otro precio es otro” ” (4). Aquí el autor, estudiando la teoría económica de Anderson, concluye que internet realmente no ofrece ningún producto gratuito en su totalidad.

Continuando la lectura, se menciona que: “Si en un mercado de la red el precio es cero, y ese “mercado” se sostiene en el tiempo, lo que ocurre es que en el mismo se está dando un intercambio no monetario; se están intercambiando servicios sin ayuda de dinero” (4). Con esto queda claro que el mercado abierto en internet está basado en algo muy diferente del dinero convencional, ya que el éxito de toda empresa en la red se fundamenta en los servicios que ofrece y cuantas personas acceden a ellos, es por ello que siguen existiendo después del paso del tiempo. Más adelante, se dice lo siguiente: “Observemos, por ejemplo, la búsqueda de información gratuita, en términos monetarios, que nos ofrece Google. Nos está dando gratis tanto su capacidad de proceso como la información almacenada. ¿Por qué? Porque de esa forma puede atraer nuestra atención sobre su publicidad, y vender audiencia a sus verdaderos clientes, los anunciantes” (4). ¿Pero entonces, que rol desempeñan las personas que emplean los recursos de internet a diario? Siguiendo con el análisis de Google hecho por el autor: “en realidad, no somos clientes de Google: somos sus proveedores de audiencia, que Google adquiere a cambio de información. Como ya se ha dicho, nuestro tiempo es un recurso escaso. Por nuestro tiempo de ocio compiten numerosos medios, y no solo de Internet” (4). De aquí se puede deducir que sitios en línea que ofrecen servicios al público en general buscan generar “un mercado en línea”, formado por las personas que los emplean, para que diferentes empresas luchen por venderles sus productos con anuncios publicitarios. Aunque esta dinámica no solo se da en internet, de hecho, medios de comunicación rivales están inmersos en ella con tal de quitarle fama e incluso derrocarlo. A continuación dice: “conforme aumenta la demanda por nuestro tiempo, crece su precio, medido en términos de servicios. Por ello, a Google le cuesta cada vez más caro conseguir esta audiencia, en términos de capacidad de proceso, almacenamiento y ancho de banda. Esto se traduce, en términos prácticos, en que cada vez incluye más servicios en su página web, o incrementa la capacidad de las cuentas de correo electrónico” (4). Así queda claro que en realidad los sitios en internet no buscan tener mayor cantidad de visitantes para ser más famosos o ayudar a la mayor cantidad de gente posible, sino convertirse en el medio más rentable para que cualquier gran corporativa venda sus productos en línea por medio de publicaciones. Más simple, mientras más personas entren a un sitio, mas empresarios querrán pagar el derecho por anunciar sus productos. Y para evitar que la gente se aburra con los servicios que ofrecen y vayan a buscar nuevas opciones, los innovan graduales y crean nuevos.

Con lo anterior es predecible la conducta que a futuro tendrá el mercado electrónico: las grandes empresas buscarán hacer publicidad en las páginas y sitios de internet más visitados, por lo tanto los últimos tratarán de hacer hasta lo imposible para capturar la atención de todo aquel que navegue por la red buscando información u otro tipo de servicios.

2.2 Los nuevos problemas del mercado electrónico, retos a vencer. Ya hemos hablado acerca del concepto del nuevo mercado electrónico y su funcionamiento en la actualidad, así como su tendencia a futuro. Pero no se han mencionado los problemas que tendrá que enfrentar como retos a vencer. En este apartado haremos hincapié en este aspecto. Actualmente, hay muchos sitios en la red que son visitados por millones de personas en todo el mundo; sin embargo, la competencia y otros factores cada vez dificultan en mayor medida el mantener la cantidad de visitantes estable. “La intuición de Anderson no le engaña cuando se refiere a la “nueva escasez”, la de atención y de reputación, suministrada por los usuarios de los servicios Web. Como se acaba de explicar, es la lucha por este recurso escaso la que parece explicar la tendencia a lo gratis en determinados modelos de negocio en Internet, y no la existencia de costos monetarios marginales tendentes a cero. (…).Con la llegada y posibilidades de Internet, la demanda de tiempo de atención ha crecido considerablemente con el tiempo, por lo que también lo ha hecho el valor del mismo” (4). Por esta y muchas causas más, en el futuro “es posible que el modelo de negocio en la Red evolucione hasta ofrecernos dinero por nuestro tiempo” (4). Aunque, está abierta otra posibilidad, y con ella tal vez no sea necesario que los propietarios y creadores de sitios famosos en internet no tengan que darle dinero a quienes los visitan: innovación radical; su aplicación al mundo web se resume con la siguiente frase: “se requieren nuevas funcionalidades con niveles de rendimiento cada vez más elevados para satisfacer los requisitos de tiempo real de las nuevas aplicaciones” (1). Ahora, hay que ver que tan en serio se ha tomado este tema del mercado electrónico en el futuro: “se percibe como necesaria la reestructuración de los procesos empresariales y de interacción social que permite la infraestructura de la Internet del Futuro. En otras partes del mundo, por ejemplo en los EE.UU., Japón, Corea y China, la «Internet del Futuro» se ha convertido en una prioridad estratégica” (1). Como se puede observar, las grandes potencias mundiales ven, en la solución de los problemas del mercado electrónico a futuro, la oportunidad de mantener su dominio, buscando ideas novedosas y proyectos sostenibles y llamativos: “los nuevos niveles de eficiencia y de productividad en servicios público solamente podrán alcanzarse si se superan las barreras tecnológicas con enfoques multidisciplinares y abiertos en materia de innovación” (1). Aunque es en este proceso donde deben de tener mayor cautela a la hora de decidir apoyar un proyecto o idea, ya que a la larga este(a) pueden ser una fuente de riqueza y poder global o llevar a la crisis financiera total.

Al final queda una duda: ¿qué papel jugaremos los usuarios de la red en ese mercado electrónico del futuro? Sin duda uno muy importante, de nosotros dependerá la forma que adquiera el comercio en internet; sin embargo, seremos los que menos beneficios obtengamos de él; a menos que tengamos una idea o invento innovador y atractivo, y después logremos obtener el suficiente capital para su desarrollo y triunfo. Veremos qué pasa con el tiempo, y esperemos que la lucha entre empresas futuras por el poder no deje de lado el tener cuidado con lo que crean o difunden para evitar daños a nivel social.

3 Internet y su futuro social. 3.1 ¿Qué cosas buenas y malas traerá internet en el futuro? Al concluir el anterior apartado se empezó a tomar en cuenta el lado social de internet, el cual no debe ser olvidado por todo aquel que se dedica a hacer dinero con él, ya que su producto a corto o largo plazo puede tener una determinada influencia en nuestra forma de vida como sociedad. Sin embargo, el asunto no nada más, depende de ellos; de hecho, todo aquel que hace uso de “la red de redes” puede causar un impacto social con el tiempo si se lo dispone. He aquí donde surgen muchas cosas buenas de internet a largo plazo, pero también otras perjudiciales, tanto para organizaciones como para usuarios. Es por ello que el hablar del futuro social de internet implica tratar diferentes aspectos por separado y luego unirlo todo en una visión más general. 3.1.1 Derecho al honor vs libertad de expresión.

Es muy difícil que una persona que tiene acceso a internet no se sienta ofendida con algún material editado en una página por lo menos una vez, como si fuera un atentado a su dignidad o a sus aportaciones en las red, a su “derecho al honor”; y más cuando tiene una cuenta de correo o se está en una red social, de hecho, “los comentarios que atentan contra el derecho al honor tienen una repercusión mayor y el daño que se puede provocar es considerable. A esto hemos de añadir que muchas de estas conductas se esconden en el anonimato de la persona que vulnera dichos derechos” (3).

En la Unión Europea, lo que se ha dicho en congresos internacionales de internet recientes sobre el tema es lo siguiente: “La adecuada interpretación del “conocimiento efectivo” de la ilicitud de la información o de su carácter perjudicial para bienes o derechos de un tercero susceptibles de indemnización a que se refieren los artículos 16 y 17 de la Ley 34/2002 de Servicios de la Sociedad de la Información y Comercio Electrónico (LSSICE) es la realizada por el Tribunal Supremo, pues es la única que resulta acorde con la Directiva 2000/31/CE, creada en la reforma europea de las comunicaciones electrónicas de la UE de 2009: El titular de los bienes o derechos lesionados podrá probar por cualquier medio, incluso indiciario, el conocimiento de la ilicitud o de la lesión. (…). La anterior regulación genera un claro riesgo de restricción de las libertades de expresión e información. Podría llevar a imponer a los prestadores de servicios una obligación de control y valoración de la licitud de los contenidos que editen los usuarios que necesariamente ha de plantearse en términos jurídicos, algo que los prestadores pueden no estar en disposición de hacer” (3).

Como podemos ver, la UE ha tomado tan en serio el tema que ha decidido sancionar cualquier tipo de agresión a un individuo o grupo social, siempre y cuando el último pruebe la agresión. Sin embargo, se dice que esto podría atentar contra otro derecho: el de la libertad de expresión, obligando a dueños de sitios, sociales o de edición de material informático, de la red a obligar a sus usuarios a tener cuidado con lo que editan, comentan y publican,; vigilando y revisando página por página. Aplicar esto a nivel mundial es algo ridículo, a pesar de que ha funcionado en la Unión Europea, ya que a diario se publican millones de páginas en un blog, foro u otro en su género, aparte muchas demandas no tienen fundamento y sólo harían perder el tiempo a la agencia de gobierno que se dedicara a dicha labor; además no en todos los países del mundo hay el capital para crear una; vaya, ni siquiera su población tiene acceso a internet.

Aparte, “si bien es cierto que en una pequeña parte del mundo está avanzando mucho en intentar erradicar conductas que atentan en contra del derecho al honor, existe una zona difusa donde han

de ser los tribunales los que han de determinar si lo que importa es el derecho al honor o la libertad de expresión” (3). Este es un debate tremendo, pues solo se puede amparar uno de ambos derechos, y el que no lo sea será considerado como un crimen en contra de aquel que haya sido amparado. Aunque hay que resaltar que el derecho al honor es poco apoyado, ya que implica una forma de atentar, en algunas ocasiones, con la tolerancia hacia materiales editados en la red: un comentario o texto electrónico que tenga una postura contraria a la que podamos tener sobre un tema no debería de ser considerado como una ofensa al derecho al honor. Un atentado contra el derecho al honor solo debería ser considerado como tal cuando se trata de una ofensa grave, constante o personal, es por ello que “algunas redes sociales y páginas web conscientes de esta situación exigen un registro previo del usuario, el cual deberá otorgar sus datos personales para poder opinar en los foros, blogs o similares. Además, en la mayoría de ellas se reservan la posibilidad de eliminar los comentarios ofensivos, aunque siempre haciendo énfasis en que no son responsables de los contenidos de las páginas en cuestión” (3).

Pero lo que sí es cierto, es que, en caso de que se apoye el derecho al honor, la labor no será nada fácil, ya que “siguen existiendo muchas páginas donde los comentarios ofensivos no son eliminados. No se trata de limitar la libertad de expresión, pero determinadas conductas no deben quedar amparadas bajo dicha libertad” (3).

En resumen, ambos derechos deben de ser tomados en cuenta, pero cuando en realidad esto tenga sentido: cuando la agresión del “derecho al honor” por vía electrónica en verdad sea en verdad un atentado a la dignidad de una persona o grupo social, y cuando el “derecho a la libertad de expresión” no sea tomado como un “derecho al libertinaje de la expresión”.

3.1.2 Ciber-delitos en la red.

Como internet fue creado y estructurado por la humanidad, en él se van a manifestar los avances que tiene pero también sus problemas y males sociales, un ejemplo son los delitos cometidos a diario en su nueva forma de “ciber-delitos”. “En los últimos años la preocupación por los delitos cometidos contra o con la utilización de estructuras informáticas ha ido creciendo en el mundo al mismo ritmo que se han multiplicado los casos relacionados, de un modo u otro, con las nuevas tecnologías de la información y la comunicación” (3).

Un ejemplo, en Europa “el reciente informe presentado por Europol acerca del crimen organizado en la UE (OCTA 2011) señala Internet como un medio clave para la mayor parte de las actividades del crimen organizado” (3).

Es prácticamente imposible disimular que una nación está en orden cuando en ella está presente el servicio de internet al público, la realidad es que “además de los ciber-delitos relacionados con la alta tecnología informática, el fraude de tarjetas de crédito, la distribución de pornografía infantil a través de la red, la piratería audio-visual, la extensión del uso de Internet y muchas otras cosas; respaldan la elaboración, obtención y distribución de drogas de diseño, la trata de seres humanos, la inmigración ilegal, el mercado de las falsificaciones, el tráfico con especies en vías de extinción y otras muchas actividades criminales” (3).

Volviendo al caso de Europa, “los instrumentos europeos más operativos para prevenir y castigar los actos relacionados con el fenómeno de la ciber-criminalidad en la UE, abocan a la unión adecuada de las normas sustantivas, de procedimientos nacionales y a la cooperación internacional en dicho ámbito. (…). La normativa administrativa en materia de telecomunicaciones, que ha sido la vía paralela utilizada por la legislación europea para la modernización de esta materia, ha suscitado ciertas dudas de constitucionalidad en cuanto puede incidir, al menos indirectamente, sobre el derecho al secreto de las comunicaciones” (3). Con esto queda claro que para atacar al ciber-crimen, se necesita de la integración adecuada de las leyes penales referentes al tema, de la formación de organismos en cada nación y de la colaboración de todas las naciones para acabar con los delitos cometidos en y con la ayuda de la red. Esta labor es muy difícil, aparte aquí no debe aplicar el derecho a la libertad de expresión, por lo que, al momento, lo más adecuado sería que se formara una organización que pudiera ver el contenido de todos los sitios web con permisos especiales, sin embargo, se debe de tener especial cuidado a la forma de elegir a sus miembros y estructura, así como al decidir hasta qué nivel pueden llegar a tener acceso a las páginas web en general: “nuestro Derecho positivo a la protección social está necesitado de una regulación completa y detallada de la restricción del derecho al secreto de las comunicaciones en el marco de la investigación criminal” (3).

En pocas palabras, en el futuro se puede llegar a formar una “ciber- policía” con software avanzado que le permita acceder a todas las páginas de internet para determinar cuales están hechas para fines criminales. Pero hay que tener especial cuidado al formarla, porque puede ser que como un “ciber-vigilante”, se introduzca a ella un “ciber-criminal”.

3.1.3 El nuevo concepto del derecho al olvido.

Algo que predomina en internet es la aparición y presencia frecuente de “información basura”, por ejemplo, noticias del mundo del espectáculo, del deporte, etc., que sólo tuvieron importancia en un tiempo y que ahora hasta pueden resultar contraproducentes para la(s) persona(s) involucradas en ella o que únicamente sobran como páginas de internet sin relevancia. Estas, si son eliminadas, no se generan problemas, y hasta eso serviría para que la red no se saturara de tanta información, aparte ayudaría a eliminar datos e imágenes comprometedoras de una persona hechos con o sin su permiso: “el derecho al olvido digital se erige como respuesta a un nuevo reto social -la permanencia prolongada de la información- que plantea Internet. Tal derecho se concreta en la pretensión legítima de oponerse, borrar o cancelar aquellos datos personales que circulan en la red, ya sean difundidos sin consentimiento previo o con él, o cuando los datos han dejado de ser útiles para la finalidad con la que se recabaron y hicieron públicos en la web” (3).

Como es un tema resiente, se dan pocos casos de naciones que ya hayan emprendido iniciáticas para acabar con la información basura de la red, pero por ejemplo, en Europa “la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD), tal y como también ha realizado la “Comisión Nacional de la Información Libre” (CNIL) en Francia, ha vinculado el nacimiento del derecho al olvido en el marco del derecho fundamental a la protección de datos de carácter personal, basándose esencialmente en los principios de consentimiento y finalidad de los datos, que recoge la Ley Orgánica de Protección de Datos (LOPD) de la UE en los artículos 6 y 4.5” (3). Es decir, estos países están de acuerdo en que eliminando ciertos sitios de la red que sean inútiles, se puede evitar incluso el empleo de datos personales para fines delictivos, como un medio de acabar con el ciber-crimen en parte.

De todo esto se puede concluir que tal vez en el futuro se creen programas en la red que utilicen el mismo mecanismo de Google para detectar páginas que ya no sirvan y eliminarlas, pero se deben de tomar precauciones en su funcionamiento, ya que puede que por error, acabe por eliminar un sitio con información útil a pesar de no ser casi visitado. El mismo peligro se corre si el trabajo es manual, es decir, si personas se hacen cargo de esta labor. Sin embargo al eliminar páginas sin empleo se puede crear la cultura social de hacer sitios web que sirvan, y es probable que dicha cuestión sea tomada en cuenta en el rediseño de la red mundial en el futuro, claro, si es que se lleva a cabo.

3.1.4 Protección de datos.

Cuando a diario vemos crímenes relacionados con el empleo ilegal de datos nos espantamos o por lo menos tomamos precauciones, pero por un momento, al ver el avance de internet en sus servicios, aunque sea en apariencia, creemos que nunca llegaran a usar los datos que damos para un fin perjudicial, pero no nos damos cuenta que hasta sitios de búsqueda populares los emplear para ponernos anuncios de productos dependiendo de nuestros gustos e intereses. Prueba de ello es “la nota informativa hecha pública por la Agencia Española de Protección de Datos sobre los acuerdos adoptados por las Autoridades Europeas de Protección de Datos que integran el Grupo de Trabajo del Artículo 29 (GT 29) relativa a la privacidad en la publicidad on-line basada en el comportamiento alertaba sobre los riesgos que para la privacidad suscitan las llamadas tracking cookies que se utilizan para recopilar información sobre el comportamiento de navegación de los individuos y, de esta forma, ofrecer a los/as usuarios/as anuncios dirigidos y personalizados. (…). Dicha nota también aborda la necesidad de sentar las bases constitucionales de la privacidad ubicándose la misma en el

art. 18” (3).

En apariencia el tema es simple, pero si se analiza a fondo resulta ser más complicado de lo que parece. Por un lado con la protección de datos se evita que se haga un uso ilícito de datos personales, pero por otro lado impiden que se logre dar con la identidad de un “ciber-criminal”. En el futuro, la protección de datos será quebrantada sólo cuando intervenga en un proceso penal en contra de un delincuente, con una profunda investigación previa desde luego.

3.1.5 Apoyo social on-line.

Es usual ver que en internet se multiplican anuncios que hablan acerca de apoyos monetarios a sitios web para que sigan otorgando el servicio o producto que ofrecen, pues bueno, esto a llevado a una minoría en el mundo, pero significativa, a formar un grupo social que recaude fondos para apoyar a sitios de uso común con fondos monetarios: “el muy novedoso Reglamento (UE) nº 211/2011, sobre la iniciativa ciudadana europea (ICE) proyecta esta institución por primera vez al ámbito supranacional y también es revolucionaria por estar pensada esencialmente para internet. Se analiza especialmente el sistema de recolección de apoyos ciudadanos a través de páginas web, que serán posibles gracias al software de código abierto que pondrá a disposición de la Comisión. (…). Se adelanta la futura práctica de que se busque acreditar las plataformas de recolección de firmas en los Estados miembros que menos exigencias impongan. Una solvencia similar para y a la hora de elegir el territorio de almacenamiento de los apoyos electrónicos, pues se buscará el Estado más flexible en materia de protección de datos” (3). Con ello en la UE se busca un beneficio mutuo.

Esto quiere decir que se busca que todo aquel que descarga un software o usa un servicio de un sito en la red done la cantidad de dinero que sea de forma constante, como una vez al año, en el futuro; de esa forma se asegura que se pueda estar innovando la red mundial para ofrecer una mejor atención a los que navegan en ella. Un proyecto llamativo, pero ¿cuánta gente estará dispuesta a apoyar? ¿Cuántas empresas de servicios de la red adoptarán este modelo económico? Con el tiempo se verá.

3.1.6 Campañas electorales en línea.

Hay un nuevo fenómeno político, “Las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones han transformado la forma como se realizan las campañas electorales en América latina. A partir de la gran experiencia exitosa de las ciber-campañas en los Estados Unidos de Norteamérica, en la elección presidencial del 2008, esta región ha revolucionado su forma de hacer política y de tratar de ganar el voto de los ciudadanos. (..).De acuerdo a la consultora ComScore, el uso de la red social Twitter en América Latina ha tenido aumentos sustanciales en los últimos años, ya que, por ejemplo, del 2009 al 2010 se tuvo un aumento de usuarios de un 305 por ciento. Algo similar ha pasado con Facebook, con los micro blogs, los wikis, Hi5, Myspace y las demás redes sociales” (3).

Este fenómeno ha empezado a expandirse a todo el mundo, ya que, de una forma u otra, “Las ciber-campañas posibilitan la transformación de las campañas tradicionales sustentadas en la acción unilateral de la clase política hacedora de campañas en amplios y verdaderos movimientos ciudadanos en la búsqueda de un mejor futuro” (3). Aparte, se evita la emisión de basura excesiva por la propaganda, se tiene la oportunidad de hablar más fácilmente con los candidatos, etc. Pero el punto importante es que “se debe considerar que la política es construcción y las nuevas tecnologías de la información y las telecomunicaciones son herramientas importantes e imprescindibles para poder edificar grandes proyectos de política, ya sea a nivel local, regional, nacional o internacional. En el futuro, el tiempo dedicado a Internet por parte de los electores en América latina será mayor al número de horas por semanas destinadas a la exposición en televisión” (3).

Pero bueno, ya estando en el poder los candidatos electos, ¿todo esto se termina desechando en la red o por lo menos parte del material se puede reutilizar? Es posible que lo referente a la propaganda se deseche, pero servicios útiles a la población como dirección de correo, sitios sociales, etc., que sirvan para tener contacto con el candidato electo deberían de conservarse. Es muy probable que las peticiones en el futuro por parte de personas a sus autoridades se hagan formalmente vía internet, y

que incluso por este medio se realicen consultas sobre proyectos, debates entre políticos, huelgas, etc., sin necesidad de presentarse físicamente en un lugar o vía pública.

En fin, después de todo este análisis queda claro que la única forma de que el futuro social de internet sea bueno es que mejoremos como sociedad, algo que no es nada sencillo, claro está.

5 Para concluir.

a) Internet está en un punto cúspide en su historia, y como servicio puede llegar a crecer más, pero hay que fijarse en la forma en la que se está dando su desarrollo: puede que resulte de mayor beneficio para los usuarios de internet que se descubra la forma de hacerlo más veloz que la creación y dispersión de botones de “no me gusta”, “me desagrada”, y demás del mismo tipo para comentar en Facebook u otras redes sociales.

b) Al hablar de “mercado en internet en el futuro” surgen muchas ideas futuristas de lo que

puede llegar a surgir: desde ver en el futuro que los cajeros automáticos tengan servicio a la red para vender productos de consumo diario dependiendo de las cotizaciones del día, algo que se puede considerado como una locura pero probable de manifestarse con el tiempo, hasta llegar al punto en el cual el servicio de internet se venda como producto necesario para que una casa tenga contacto a servicios de venta de productos a domicilio, atención médica, servicio de comida rápida, etc.; sin embargo, pueden surgir amenazas más peligrosas que un virus y hacer que toda una ciudad pase del orden al caos total, lo que llevaría a los prestadores del servicio a la quiebra. Al final queda claro que quien quiera hacer un negocio valiéndose de la red mundial, debe de tener mucho cuidado o si no puede perder todo el capital invertido.

c) Como internet es un producto de la humanidad, siempre reflejará que tan bien o mal estamos

como sociedad, aunque claro, sin generalizar, es decir: “para que internet mejore como servicio social es necesario que los que somos sus usuarios, quienes lo distribuyen y principalmente quienes se hacen millonarios con él luchemos por ser mejores humanos cada día. Por obvias razones, se ve difícil el hecho de que internet mejore en poco tiempo. Un ejemplo claro: a pesar de que internet llegue a avanzar mucho, es muy importante mencionar que una creación virtual puede ser todo menos una madre, un padre u otro ser querido: esta herramienta no debe ser considerada como un mundo alterno para huir de los problemas del mundo real.

La humanidad crea muchos inventos, pero en ocasiones pierde su control: un ejemplo es Internet. ¿Algún día nuestros hijos y futuras generaciones podrán controlar adecuadamente el increíble mundo de la red? Mejor no les dejemos problemas y empecemos a buscar la forma de hacer un buen uso de la red de redes para que la sociedad del futuro sepa cómo hacerlo con nuestro legado de experiencia.

Referencias.

1. (1) Comisión de las Comunidades Europeas.

Comunicación de la comisión al Parlamento Europeo, al Consejo, al Comité Económico y Social Europeo y al Comité de las Regiones, 2009. Bruselas: Bélgica. Oficina de imprenta de la unión europea. Recuperado de:

http://ec.europa.eu/information_society/activities/foi/library/docs/fi-communication_es.pdf

2. (2)

Círculo de Innovación en las Tecnologías de la

Información y las Comunicaciones (CITIC). Internet del futuro: visión y tecnologías implicadas; 2009. Madrid: España. Fundación madri+d para el Conocimiento. Recuperado de: http://www.madrimasd.org/informacionidi/biblioteca/publicacion/doc/VT/ VT20_internet_del_futuro_vision_y_tecnologias_implicadas.pdf

3. (3)

Martínez, A., Peguera, M., Peña, I., Vilasau, M. Neutralidad de la red y otros retos para el futuro de Internet.

Barcelona: Huygens Editorial. Recuperado de: http://openaccess.uoc.edu/webapps/o2/bitstream/10609/8341/7/IDP_7.pdf

4. (4) Fernando Herrera González. (2009) ¿Es realmente gratis el futuro de los negocios por Internet?: un análisis económico de la visión de Chris Anderson (Tesis de doctorado, Universidad Politécnica de Madrid). Madrid: España. Recuperado de: http://www.mundointernet.es/IMG/pdf/ponencia147.pdf