El Enfoque Biblico de Los Dones Espirituales

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Descubra y desarrolle sus dones espirituales.Emprenda un emocionante estudio de la verdad más práctica de la vida cristiana.Conozca las verdades bíblicas de los dones que da el Espíritu y sienta el gozo supremo de servir al Rey de Reyes y Señor de señores “Jesucristo”.

John Morales El Enfoque Bíblico De Los Dones Espirituales.

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John MoralesJohn Morales

El Enfoque Bíblico de los Dones Espirituales.El Enfoque Bíblico de los Dones Espirituales.

La enseñanza de los dones espirituales fue, es y será una de las doctrinas más controversiales dentro la cristiandad. No tener un conocimiento apropiado de esta doctrina generará muchas

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divisiones y disputas necias que conducirán más y más a la impiedad y abrirá nuevas puertas para que Satanás tome ventaja dentro de la iglesia de Cristo. Satanás es el gran imitador y desde el principio imitó los dones espirituales e introdujo en el seno de la iglesia falsa doctrinas y blasfemias contra la persona de nuestro Señor Jesucristo y del Espíritu Santo. Por esta causa es menester estudiar a la luz de la Biblia el enfoque bíblico de los dones espirituales.

En este libro se presentará el aspecto teológico y practico de la verdad de los dones espirituales. Les invito a disponer su corazón despojándose de toda presunción y predisposición hacia la verdad de los dones espirituales para recibir con mansedumbre la palabra implantada y crezcamos en nuestro desarrollo espiritual y ministerial.

No es extraño encontrar en nuestras iglesias, personas que tienen muchos años de convertidos y que no tienen conocimiento de los dones espirituales que poseen, incurriendo así en:

1. Vidas infructuosas: Dios nos ha capacitado con habilidades especiales para cumplir una función esencial dentro de su cuerpo, que es la iglesia. Cuando no conocemos nuestro don espiritual caemos en desanimo o en inactividad por no saber la función que debemos cumplir en el cuerpo de Cristo. Todo cristiano tiene la necesidad de descubrir el propósito de Dios para sí. Esto se descubre y se alcanza conociendo nuestro don espiritual.

2. Vidas frustradas: No hay nada más frustrante que emprender un ministerio y ver que somos poco eficiente. Esto se debe, en la mayoría de los casos, en que no estamos cumpliendo nuestra función. Cada miembro de nuestro cuerpo cumple una función vital y diferente de los demás. Imagínese al pie cumpliendo la función de las manos. Aunque puede suplir la función de las manos esto traerá como consecuencias dolencias en otras partes del cuerpo. Así también es en el desarrollo de los dones espirituales en la iglesia.

Para comprender todo lo relacionado con los dones espirituales debemos tomar en cuenta los siguientes puntos:

I. Definición de los dones espirituales.

A. Jarismata: La expresión “dones espirituales” es una interpretación en castellano del sustantivo neutro plural gr. Jarismata, que se forma del vocablo jarizethai (mostrar favor, o dar deliberadamente), que está relacionada con el sustantivo jaris (gracia); son la expresión concreta de jaris, el efecto visible de la gracia en palabras o en hechos. Indudablemente es algo que se debe a la gracia de Dios. De manera que un don espiritual es una capacidad dada por Dios al creyente en Cristo para realizar un servicio especial dentro del cuerpo de Cristo. 1

B. En griego jarı́�smata, derivado de járis que significa gracia; así «dones de gracia»; cf. el término técnico carismas). En el Nuevo Testamento, aparte de 1 Pedro 4.10, el uso de la palabra se encuentra principalmente en las epístolas paulinas. La aplicación de esta palabra a las diversas funciones que contribuyen a la edificación de la comunidad cristiana y al cumplimiento de su misión es una

1 Nuevo Diccionario Bíblico Certeza.

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contribución original del apóstol Pablo. Al considerar una función específica dentro de la vida de la comunidad («el cuerpo») como un «don» o un «carisma», Pablo nos enseña en primer lugar que tal función se desempeña por gracia de Dios y no por derecho ni por mérito propio. Tanto la autoridad como las capacidades para el ejercicio de la función proceden del Espíritu. En segundo lugar, nos enseña que cada función se justifica en la medida en que presta un servicio a la edificación del cuerpo (1 Co 12.7; 14.3–12; Ef 4.12). La función, en cuanto a don del → ESPÍRITU, se recibe con el fin de compartirla y así contribuir al desarrollo de la comunidad.2

II. Derivo de los dones Espirituales: 1 Co. 12:4-11; Ro. 12:3-10; Ef. 4:7-16.

El origen de los dones espirituales se encuentra en el Dios Trino. Aunque hay diversidad de dones sólo hay una fuente común: “El Dios Trino”.

A. El Padre:

La Biblia describe con frecuencia a la Trinidad en el acto de dar. A Dios le agrada dar. Fue el Padre quien dio a su Hijo amado en sacrificio por nosotros (Jn 3:16) y decretó los dones espirituales profetizándolos en el A.T por medio de sus profetas Sal. 68:18; Joel 2:28-29. 1 Co. 12:6 dice: “y hay diversidad de operaciones (energuematón), pero Dios (El Padre), que hace (gr. energón) todas las cosas en todos, es el mismo. El vocablo griego enérgueia es el poder (dúnamis) en acción. Las actividades concretas (mejor que operaciones), actualizadas en cada situación, se expresa en griego con el vocablo enérguema, pues el sufijo “ma” indica el objeto. Las actividades a las que Pablo se refiere aquí son sobrenaturales, en virtud de los dones espirituales. En ellas actúa directamente el Padre, quien obra (gr. Energueí) en nosotros tanto el querer como el hacer para nuestra salvación (Fil. 2:12-13). A El se debe el efectuar milagros (1Co. 12:10, comp. Con Jn. 14:10-11).

B. El Hijo:

“Y Hay diversidad de ministerios (gr. Diakonión), pero el Señor (Jesucristo) es el mismo”. En la voz dikonía se puede ver que el ministerio es un servicio. Los ministerios se atribuyen a Cristo por ser El la Cabeza de la Iglesia, y con ello se recuerda a los que ocupan puestos de liderato y responsabilidad en las congregaciones que no son señores de la grey (1 Pe.5:3), sino servidores, a ejemplo de Aquel que no vino para ser servido, sino para servir y para dar su vida (Mt. 20:28). La designación “ministerios o servicios” (señala a los dones espirituales como productores de beneficios para otros. Lo máximo en el derramamiento de dones

2Nelson, Wilton M. ; Mayo, Juan Rojas: Nelson Nuevo Diccionario Ilustrado De La Biblia. electronic ed. Nashville : Editorial Caribe, 2000, c1998

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por parte de Cristo, es el servicio que se realiza por medio del ejercicio adecuado de ellos. Este hilo de énfasis se extiende a través de los capítulos 12-14 de primera a los Corintios, y es bien resumido por la naturaleza del amor que es “benigno” (o útil) y “no busca lo suyo”. En Efesios 4:11 Expresa claramente que Jesús como Señor dio dones a su iglesia para su fundación y continuación. Hay dos dones (en estos casos los dones son personas capacitadas por el Espíritu Santo para realizar estos oficios) que fueron de fundación: El apostolado, profeta, y dos de continuación: Evangelista y pastor-maestro.

C. El Espíritu Santo:

“Hay diferencia de carismas, pero el Espíritu es el mismo”. Como se está refiriendo a los dones comienza por el Espíritu como el dispensador de todo don. El Espíritu Santo comenzó a dar dones desde el día de Pentecostés y lo seguirá haciendo hasta el arrebatamiento. Son distribuidos por el Espíritu de acuerdo a su voluntad soberana “como El quiere” 1Co 12:11. Son dados por el Espíritu para provecho al creyente ya que son una manifestación del Espíritu de Dios 1Co. 12:7

III. Distinciones generales de los dones espirituales:

A. La distinción entre el don del Espíritu y los dones del Espíritu:

El E.S es prometido a todos los creyentes (Hch 2:32), a los que se lo pidan (Lc 11:13), y a los que obedezcan a Dios (Hch 5:32), es un don (Hch 2:32; 5:32; 8:20; 10:45; 11:17; 15:18), que se recibe por fe (Jn 7:39; Gá 3:2, 5,14-14; 4:4-7; Ef 1:13; 3:16-17). Antes de Pentecostés, los discípulos tuvieron que esperar el descenso del Espíritu (Hch 1:4) lo que ahora ya no es necesario (Hch 2:17-18). Los samaritanos que eran medio paganos, tuvieron la necesidad de una intervención especial de los apóstoles para recibir al Espíritu (Hch 8:12, 15-17), sin embargo Cornelio y sus amigos (que eran gentiles al igual que Ud. y yo) recibieron el Espíritu por la sola fe, al oír lo que Pedro decía, sin la imposición de manos ni un previo bautismo en agua. Así que la presencia del Espíritu Santo en la vida del creyente es el don del Espíritu Santo, mientras que, los dones del Espíritu Santo son las capacidades sobrenaturales dadas por Cristo al creyente por medio del Espíritu Santo en el momento que cree en Cristo.El don del Espíritu Santo fue otorgado en Pentecostés (Hch 2), cuando el E.S vino en respuesta a la promesa de Cristo, y fue un evento único. Los dones del E.S son otorgados continuamente cada vez que una persona cree en Cristo.

B. La distinción entre los dones del Espíritu y los talentos:

Los talentos son habilidades humanas con las cuales se nace, pueden darse en el campo de la música, de la oratoria, la mecánica mientras que los dones son habilidades sobrenaturales recibidas en el nuevo nacimiento y para el servicio de la iglesia.

C. La distinción entre los dones del Espíritu y un lugar de servicio:

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El don es la habilidad no donde se ejerce el mismo. Se puede enseñar en un aula formal, y en cualquier país del mundo. Es posible ayudar en la iglesia o en el vecindario.

D. La distinción entre los dones del Espíritu y un oficio:

El don es la habilidad y se puede ejercer tenga uno o no un oficio en la iglesia local. Por ejemplo el don ministerial de pastor lo puede ejercer una persona que ocupa el oficio de pastor en la iglesia local o también un superintendente de escuela dominical o un líder de jóvenes.

E.- La distinción entre los dones del Espíritu y un ministerio a una edad especifica:

No existe un don para ministrar a jóvenes o a niños. Todas las edades necesitan el servicio de los pastores, administradores, ayudadores.

IV. División de los dones espirituales:Los dones son diversos y se dividen en:

A. Temporales: B. Permanentes:Palabra de Sabiduría FePalabra de Ciencia Servicio o AyudaSanidades Enseñanza Hacer milagros ExhortaciónProfecía Repartir o dar

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Hablar en lenguas MisericordiaInterpretación de lenguas EvangelistaApóstoles Pastores-Maestros.

Presidir o administrar. Discernimiento de espíritu.

¿Por qué la designación de dones temporales?

La respuesta está en la naturaleza milagrosa del don en sí. En la antigüedad el profeta era quien llevaba el mensaje de Dios al pueblo. Pero, ¿cómo sabían los oyentes que tal profeta venía de parte de Dios? Una indicación de su autoridad y autenticidad sería la de realizar señales milagrosas. Nótese los siguientes versículos al respecto: Jn 3:2; 20:30; Ro. 15:18; 2 Co. 12:12; He. 2:4.Los dones como señales se dieron principalmente para validar la autoridad de los apóstoles y validar la verdad antes de que se escribiera el Nuevo Testamento. Después de escrito el Nuevo Testamento ya no hacía falta estas pruebas milagrosas porque las Escrituras revelan lo verdadero y lo falso. Los dones temporales también se les llaman dones de fundación porque a través de ellos se establecieron las bases doctrinales de la iglesia hasta completar el N.T. A los dones permanentes se les llama dones de Continuación debido a que a través de ellos la iglesia es edificada, consolada y exhortada.

VI. Descripción de los dones espirituales:

A. El Don de Servicio o de Ayuda:

1. Definición: El don de “ayudar” o de “servicio” se mencionan en Ro. 12:7; 1Co. 12:28. En primera a los corintios el vocablo se deriva de la palabra s, que significa “llevar una carga sobre uno mismo en lugar de ponerla en otro”, “Socorrer” (Hch 20:35), “ayuda” (Ro. 8:26).Este término significa ayuda de todas clases administradas a quienes están en necesidades. De manera más especializada se refiere a diferentes clases de ayuda física o alivio dado a quienes están en necesidad. La naturaleza de la necesidad en Hch. 6:1-3, era un arreglo parejo para el servicio de las mesas y el repartimiento de las comidas. Otras clases de necesidades suplidas por este servicio incluían la atención de las viudas, huérfanos, enfermos, extranjeros, viajeros y cualquier otro caso en el que existiera un problema temporal o físico. El don de ayudar tiene que ver más con áreas externas y practicas. De modo que “ayudar” es un requisito para los “diáconos” 1 Ti. 3:8-13. Las personas que poseían ese don jugaron un papel importante en llenar las necesidades personales del apóstol Pablo (Epáfrodito, Fil. 2:25-30; Onesíforo, 2 Ti 1:16-18; Onésimo y Filemón 10-13). Dorcas tenía este don Hch. 9:36-39; Febe tenía este don Ro. 16.1-2.

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Este don no es el que más llame la atención, pero las Escrituras lo colocan al mismo nivel que las manifestaciones más sobresalientes, como un recordatorio de que esas operaciones realizadas tras el telón son tan indispensables como las demás.La ausencia de ayuda ha colocado una barrera importante en la efectividad espiritual. Podemos decir que la efectividad de los dones tanto orales y prácticos dependían mucho de este don, ya que este creaba el ambiente para la predicación del evangelio. Ayudar está más directamente relacionado con el amor. Solo el amor puede motivar las actuaciones menos visibles. El reconocimiento público no proporciona ningún incentivo para estos. Solo una preocupación desinteresada puede mover a un cristiano a ofrecer tal ayuda (1 Co. 12:25-26). Como regla general donde el amor no esta presente, tampoco estarán presentes las acciones menos visibles. Pero donde el amor es la fuerza primordial, los servicios efectuados serán la regla y no la excepción. Servicio, diakonia. Diakonia aparece unas treinta y cuatro veces en el Nuevo Testamento. Su significado básico es «brindar ayuda, auxilio o asistencia personal a otros». En el griego secular se usaba para la actividad de servir las mesas, ocuparse de las necesidades de la familia o para servicios en general. Proviene de la misma raíz griega de la palabra «diácono» (1 Ti 3.8). Por lo tanto, los que tienen el don del servicio son agraciados de una manera especial para demostrar el amor de Dios, al solucionar necesidades prácticas y brindar asistencia. A veces son llamados «servidores» y encuentran gran satisfacción en hacer cosas por otros. Son «las manos y los pies» del cuerpo de Cristo de una manera especial, y a menudo prefieren hacer algo con sus manos antes que hablar. Se ocupan de que las necesidades prácticas del cuerpo de Cristo sean cubiertas y que las tareas dentro de la Iglesia se hagan de manera eficiente. Aunque este don no está vinculado a ningún cargo específico en la Iglesia, la persona que lo posee puede ser un excelente diácono o diaconisa (En el sentido Bíblico).

2. Características del Don de Servicio:

2.1 Capacidad de hacer frente a necesidades y suplirla de manera práctica.2.2 Capacidad para ver necesidades prácticas antes que otros la noten.2.3 Motivación para satisfacer necesidades inmediatamente.2.4 Vigor físico para cumplir tareas sin cuidado del cansancio. 2.5 Voluntad de usar fondos personales para evitar demoras y suplir necesidades físicas y

materiales.2.6 Un gozo mayor en alcanzar metas a corto plazo.2.7 Capacidad de recordar gustos y aversiones de la gente.2.8 Deseo de ser hospedador.2.9 Gusto por proyectos manuales.2.10 Deseo de ayudar mas que ser ayudado.2.11 Preocupación por las necesidades materiales y físicas de la gente.

3. Abusos del don de Servicio:

3.1 Descuido de las responsabilidades de su hogar por ayudar a otros.3.2 Incapacidad de decir “no” a otros, aceptando demasiadas tareas a la vez.

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3.3 Evadir autoridades correctas para cumplir una tarea. Los conductos regulares y trámites, les parecen innecesario, pues ellos quieren cumplir sus tareas lo más pronto posible. Aún gastaran sus fondos personales para evitar demoras.

3.4 Excluir a otros de una tarea. En contraste con los administradores, les es muy difícil comisionar tareas a otros.

3.5 Pensar que nadie puede hacer las cosas mejor que ellos.3.6 Servir para ser visto de los hombres.3.7 Trabajar para la aprobación de la gente y no por la aprobación de Dios. Los

servidores generalmente no desean reconocimiento público. Pero si desean el aprecio de aquellos a quienes sirven. Por eso pueden llegar a trabajar por la aprobación de la gente.

3.8 Interferir en la disciplina de Dios con su ayuda prematura.3.9 Dejar tareas a medias por suplir otra necesidad.3.10 Servir solo a los que son de nuestro agrado.3.11 Juzgar a las personas por no discernir las necesidades de los demás.3.12 Quejarse porque otros no hacen el trabajo con ellos, en vez de motivar.3.13 Persistir en ayudar y en no recibir ayuda.3.14 Descuidar su salud por trabajar en exceso supliendo necesidades de otros.3.15 Enfatizar demasiado necesidades prácticas descuidar las necesidades básicas

espirituales.3.16 Reaccionar negativamente hacia quienes no descubren y satisfacen necesidades

obvias de otros.4. Ejemplo del don de Servicio:

En la Escritura encontramos ejemplos de personas que tuvieron este precioso don y que apoyaron el ministerio del Señor Jesucristo y de grande hombres de Dios. Aquí presentamos los siguientes casos.

4.1 Estéfanas1 Cor 16.15 • • • Hermanos, ya sabéis que la familia de Estéfanas es las primicias de

Acaya, y que ellos se han dedicado al servicio de los santos. 4.2 Gayo

3 Jn 5 Amado, fielmente te conduces cuando prestas algún servicio a los hermanos, especialmente a los desconocidos,

4.3 Epafrodito

Fil 2.30 ... porque por la obra de Cristo estuvo próximo a la muerte, exponiendo su vida para suplir lo que faltaba en vuestro servicio por mí.

4.4 Colaboradores de Pablo.

Ro. 16.1-4. 1Os recomiendo además nuestra hermana Febe, la cual es diaconisa de la iglesia en Cencrea; 2que la recibáis en el Señor, como es digno de los santos, y que la ayudéis en cualquier cosa en que necesite de vosotros; porque ella ha ayudado a muchos, y a mí mismo.

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3Saludad a Priscila y a Aquila,a mis colaboradores en Cristo Jesús, 4que expusieron su vida por mí; a los cuales no sólo yo doy gracias, sino también todas las iglesias de los gentiles.3 4.5 Colaboradores del Señor Jesús

Juan 12.2 Y le hicieron allí una cena; • Marta servía, y Lázaro era uno de los que estaban sentados a la mesa con él. Luc. 10.40-42 40Pero Marta se preocupaba con muchos quehaceres, y acercándose, dijo: Señor, ¿no te da cuidado que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude. 41Respondiendo Jesús, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas. 42Pero sólo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada.4 Mar 15.40-41 40También había algunas mujeres mirando de lejos, entre las cuales estaban María Magdalena, María la madre de Jacobo el menor y de José, y Salomé, 41quienes, cuando él estaba en Galilea, le seguían y le servían;i y otras muchas que habían subido con él a Jerusalén.5

5. Lugares de ministerios del don de servicio:5.1 Equipos de mantenimiento: Campamentos, vigilias, retiros espirituales, conferencias, ...5.2 Equipos de decoración.5.3 Equipos de cocina.5.4 Equipos de Fundación de iglesias.

C. El Don de Enseñanza o Maestro.

a a 16.3: Hch. 18.2.3 Reina Valera Revisada (1960). Miami : Sociedades Bı́Ublicas Unidas, 1998, S. Ro 16.1-54 Reina Valera Revisada (1960). Miami : Sociedades Bı́Ublicas Unidas, 1998, S. Lc 10.40-42i i 15.40–41: Lc. 8.2–3.5 Reina Valera Revisada (1960). Miami : Sociedades Bı́Ublicas Unidas, 1998, S. Mr 15.40-41

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1. Definición: Es la capacidad dada por el Espíritu Santo de exponer, clarificar y aplicar la revelación ya establecida. Probablemente su ministerio se limitaba a la iglesia local. Pablo consideraba que una comprensión intelectual de las verdades de la fe era un requisito vital para una vida y servicio cristiano saludable. Pablo enseño constantemente Hch. 18:11-19:10. Este don fue dado a Pablo Hch. 20:27; a Apolo Hch. 18:24-25; a Aquila y Priscila Hch. 18:26. Enseña, didasko. En el griego clásico el significado elemental de didasko sugiere la idea de hacer que alguien acepte algo. Se puede traducir como «enseñar, informar, instruir, demostrar o prescribir». Tiene como meta comunicar conocimientos y habilidades de manera sistemática, para lograr el desarrollo de las personas. Los maestros se entregan a los hechos y a la instrucción sistemática. En el Nuevo Testamento el enfoque de la enseñanza es cómo llevar a cabo la voluntad de Dios. Las personas que tienen este don mencionado en Romanos 12.7 son las que, independientemente de su cargo o ministerio particular dentro del cuerpo de Cristo, están motivadas por el deseo de clarificar y exponer la verdad. Disfrutan de los retos de la mente y del aprendizaje. Por lo general, son capaces de transmitir bien, y siempre sentirán la necesidad de que la verdad bíblica sea expuesta con precisión, con pruebas bien documentadas de las conclusiones a que lleguen.

Características del Don de Enseñanza:

2.1 Tendencia de validar la verdad por sistema de verdad ya establecidas. Lucas utilizó las profecías del A.T y relatos de otros evangelios. (Cuando enseña)

2.2 Deleite en investigar a fondo y relatar todo lo posible en relación a un tema bíblico. Lc. 1:3; Hch.1:1. Lucas es el evangelio más largo con muchos detalles. El dijo que su obra era completa.

2.3 Necesidad de validar la verdad y aprobar afirmaciones que otros han hecho Lc. 1:4. (Cuando es enseñado por otros).

2.4 Deseo de presentar la verdad en una secuencia sistemática. “En orden” Lc. 1:1-3. 2.5 Deseo de aportar ideas, conocimiento, con el fin de enriquecer la enseñanza.2.6 Deseo ferviente por enseñar, ya que allí se encuentra su pasión.2.7 Capacidad de descubrir detalles importantes en la palabra de Dios que otros no lo

han notado.2.8 Se manifiesta el poder de Dios en las enseñanzas de los que poseen este don. Hay

frutos en la instrucción y amonestación.

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2.9 Capacidad de discernir cual seria el tema acorde para el nivel de crecimiento en que la iglesia se encuentra.

2.10 Conocimiento amplio de la Escritura.2.11 Capacidad de explicar las Escrituras de manera entendible para los oyentes.

3. Abuso del Don de Enseñanza.

3.1 Jactándose de su conocimiento. 1 Co. 8:1. Es muy fácil para los maestros desarrollar orgullo a causa de todo su conocimiento.

3.2 Despreciando la sabiduría práctica de otros hermanos.3.3 Comunicando incredulidad hacia sus maestros. La actitud de un maestro fácilmente

puede ser: “No es correcto hasta que yo lo averigüe y compruebe que es correcto”. Un maestro puede dar la impresión de que él es la única fuente de verdad.

3.4 Criticando severamente enseñanzas confiables a causa de fallas en detalles de la presentación.

3.5 Dependiendo del razonamiento humano más que de la enseñanza del E.S.“La verdad de Dios se discierne espiritualmente”. 1 Co. 2:1-16.

3.6 Dando información que carece de aplicación práctica. El propósito de la enseñanza es exaltar a Cristo, promoviendo que sea imitado en todo. Muchos maestros invierten la totalidad de su tiempo en dar información y se olvidan de enseñar el aspecto práctico del mensaje. Pablo enseñaba y aplicaba.

3.7 No viviendo lo que predica.3.8 Sintiendo celo de otros maestros por sus éxitos.3.9 No preparándose lo suficiente para enseñar (por negligencia).3.10 No aceptando corrección de otros hermanos y endureciendo su rostro.

“No me venga con eso, eso ya me lo se”3.11 Utilizando las oportunidades de enseñanza en la iglesia local para descargar a un

creyente en particular. La enseñanza en la iglesia local debe ser para la edificación del cuerpo de Cristo en general. Aspectos individuales debe tratarse personalmente. Mt 18:15-22; Gá 6:1-10.

3.12 Tomando el tiempo de enseñanza de otro maestro, cuando intervenimos.El maestro oyente debe entender que el maestro tiene su tiempo limitado y su bosquejo. Nuestras intervenciones deben ser hechas con sabiduría, podemos aportar para enriquecer la enseñanza expuesta y debemos utilizar bien el tiempo concedido de manera que el maestro pueda terminar su lección.

3.13 Usando un léxico demasiado avanzado no acorde a la audiencia.

C. El Don de Exhortación.Referencia Bíblica: Ro. 12:8; Pr 25:11.

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1. Definición: Varias personas del N.T tenían este don: Bernabé Hch. 11:22-24; Judas (no Iscariote) y Silas Hch. 145:32; Pablo 2 Co. 9:5; Hch. 14:22; 1 Ts. 2:11; 4:1; 5:14; Pedro 1P. 5:1; Judas v.3. Exhorta, parakaleo. Un llamado a acercarse y ayudar, confortar, ofrecer consuelo o ánimo, apelar a, urgir o alegrar; el que exhorta ofrece un estímulo de apoyo, y sostiene a los que requieren asistencia a la vez que los urge a seguir un determinado modo de conducta. La parakiesis («exhortación») puede llegarnos por el Espíritu Santo, por las Escrituras o por otras personas que poseen este don (2 Co 5.20). El que posee este don particular de Romanos 12 está motivado a alentar a las personas a crecer en el Señor. Son equipados con la gracia especial de estimular o guiar a la gente (cf. Hch 8.31) a seguir una conducta digna y a progresar en lo personal; hacen de la doctrina algo práctico. Suelen ser personas muy positivas, con una visión de la vida básicamente optimista. Siempre demuestran interés en ver cómo convertir la tribulación o la adversidad en vida de éxito y en madurez en el Señor.

2. Características del Don de Exhortación:

2.1 Motivación a instar a la gente a alcanzar su plena madurez espiritual en Cristo. 2.2 La meta de Pablo fue presentar a cada hombre Perfecto en Cristo Jesús. Col 1:28-29.2.3 Capacidad de discernir dónde está una persona en su crecimiento espiritual y hablarle

a ese nivel.2.4 Pablo supo que los corintios eran niños en Cristo. 1 Co. 3:1.2.5 Deseo de dar pasos precisos de acción en instar a la gente hacia la madurez espiritual.2.6 Capacidad para explicar la verdad con razonamiento lógico para hacerlo aceptable. 1

Co. 15 es clásica en pensamiento lógico. 2.7 El razonamiento fue su método básico en su trato con los judíos y griegos. Hch 18:4;

26:28.2.8 Deseo de confrontar cara a cara para determinar y asegurar una reacción positiva.2.9 Pablo anhelaba siempre ver el rostro de sus hermanos para exhortarlos y completar lo

que faltaba a su fe. 1 Ts 2:17-3: 13. 2.10 Capacidad de identificarse con la gente de diferentes clases y ambientes, para ganar

una audiencia mayor. 1 Co. 9:19-23.2.11 Capacidad de animar con eficacia a la gente para lograr cambios espirituales o a

participar en proyectos de la iglesia. Pasión por la consejería.2.12 Facilidad para hacer de la doctrina algo práctico.Son personas muy positivas. Ven

la adversidad como una oportunidad de crecer en una vida de éxito y madurez espiritual.

3. Abusos del Don de Exhortación:

3.1 Motivar a la gente a participar en proyectos sin explicarles todos los pasos.Los exhortadores pueden ver proyectos de largo plazo y metas para la gente. Muchas veces estas son explicadas sin hacer referencia a la cantidad de tiempo que se necesita para los lograr los resultados. La gente piensa que alcanzarán esos proyectos mucho antes del tiempo que en verdad va a ser necesario.

3.2 Tomar el tiempo de la familia para aconsejar a otros. La delicia de los exhortadores es ayudar a otros en sus problemas. Darían cualquier tiempo necesario para lograr

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resultados. En varias oportunidades toman este tiempo de sus responsabilidades familiares. Los exhortadores presumen que la familia entenderá, hasta que aprenden lo contrario.

3.3 Compartir ilustraciones privadas sin permiso. La importancia y eficacia de las ilustraciones personales son bien conocidas por los exhortadores. Las ilustraciones muestran pasos de acción y motivan al oyente a tomarlos. Los exhortadores tienden a usar ilustraciones, anécdotas recientes que son prematuras o sin permisión.

3.4 Dar consejos sin escuchar todos los datos y sin discernir la fuente, tipo, alcance del problema. Los exhortadores tienden a clasificar en su mente el problema, antes de oír todos los datos importantes. Esto resulta en la vergüenza de dar un consejo antes de escuchar el problema completamente.

3.5 Aconsejar a otros sin el permiso de sus pastores. En el ministerio debemos aplicar la ética. No debemos aconsejar a una oveja de otro pastor sin el consentimiento de su pastor. Muchos creyentes buscan consejos que apoyen sus pecados.

3.6 Decirle a la persona lo que ella quiere escuchar con el propósito de simpatizar.3.7 Aconsejar sin utilizar la Palabra de Dios. El exhortador debe recordar que solo la

Palabra de Dios es la que convierte el alma, Ella es la herramienta que el Espíritu Santo usa para transformarnos a la imagen de Cristo Jesús.

3.8 Animar a otros a depender de ellos más que de Dios y sus autoridades.

4. Evaluación general.

4.1 Según 1 Tesalonicenses 2.11, 12 y 4.9, 10, ¿en qué áreas específicas están interesados los que exhortan en ver crecimiento y éxito?

4.2 Según Hechos 14.22, ¿cuál es otra de esas áreas?

4.3 Se nos habla en Hechos 4.36 de un tal «José, a quien los apóstoles pusieron por sobrenombre Bernabé (que traducido es, hijo de consolación)» ¿Qué nos dice su vida acerca de aquellos que tienen el don de la exhortación?

4.4 Hechos 9.27

4.5 Hechos 15.39 con Colosenses 4.10

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Los exhortadores suelen ser muy buenos predicadores; pero, por otra parte, estos dones son independientes de los cargos eclesiásticos.

5. Observación: Los que tienen el don de enseñanza y los que tienen el don de Exhortación deben procurar que el creyente en Cristo de un paso firme en su crecimiento espiritual conformándose a la imagen de Cristo Jesús en las siguientes áreas:

5.1 Conducta: Porte o manera en que los hombres dirigen sus vidas y sus acciones5.2 Compasión: Sentimiento de lastima hacia el mal o desgracia que sufre la gente.

Lastima, piedad, conmiseración, duelo, enternecimiento. Mt 9:36; Mt 14:14; Mt 15:32; Lc. 7:13; Mr 1:41.

5.3 Coraje: Decisión y esfuerzo del ánimo, energía, valor. Lc. 4:16-30; Mr 5:1-9; Mr 10:32-34.

5.4 Celo: Cuidado esmero que se pone en el cumplimiento del deber. Gran actividad inspirada por la fe. Su celo lo obligó a permanecer en Jerusalén de niño. Lc. 2:49; Lc 4:42-44, 8:1; Mr. 3:21; Jn 2:15-17.

5.5 Comunión: Participación en lo común. Trato familiar, comunicación de unas personas con otras.

5.6 Carácter: Natural modo de ser, temperamento, naturalidad, índole, condición, modales, originalidad, cualidad, facultad, tendencia, temple, humor, inclinación, Firmeza, inflexibilidad.

5.7 Consagración: Dedicación, ofrecimiento, aplicación, destinación, finalidad. Dedicar con suma eficacia una cosa o persona para un determinado fin.

D. El Don de Dar o Repartir.«El que reparte, con liberalidad» (Ro 12.8)

1. Definición: Reparte, metadidomi. Dar, compartir, impartir, distribuir, otorgar. Esta palabra denota liberalidad o generosidad. Se usa para exhortar a aquellos que tienen dos túnicas a dar una a quien que no tiene ninguna (Lc 3.11); para estimular a la gente a dar con alegre efusión (Ro 12.8); y para instar a los trabajadores a que laboren con diligencia para poder dar a quien padece necesidad (Ef 4.28). También implica la idea de sostener a otros, o de sacrificarse por otros.

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Los que reparten, entonces, se preocupan porque tengamos acceso a bienes suficientes, que recibamos, además, aliento y apoyo para hacer cosas para Cristo. Se les exhorta a dar «con liberalidad». Esta palabra tiene el sentido de ser liberal, generoso, sin restricciones. En otras palabras, aquellos que tienen este don deben cuidarse de la tentación de repartir con mezquindad, o de dar esperando recibir algo en recompensa, o esperando que otros hagan lo mismo.

2. Características del Don de Repartir o Dar:

2.1 Capacidad de comprar e invertir con sabiduría.2.2 Deseo de dar sin ostentación a proyectos o ministerios efectivos. (Evitando la

presión o publicidad).2.3 Intento de usar su acción de dar para motivar a otros a dar.2.4 Delicia de satisfacer necesidades sin la presión de súplicas.2.5 Gozo cuando su regalo es una respuesta a una oración específica.2.6 Deseo de que su donación sea de alta calidad y abundante. Dar con liberalidad.2.7 Deseo de sentirse parte de la obra o persona a quien está dando.2.8 Capacidad de discernir inversiones sabias, para tener más dinero disponible para

regalar.2.9 Capacidad de estar contento en las necesidades básicas de la vida.2.10 Capacidad de desprenderse de algo con el fin de enriquecer a otros.

3. Abusos del Don de Dar o Repartir:

3.1 Dando muy escasamente a su propia familia. Los dadores saben muy bien que el potencial de dinero puede corromper a la gente. Pero también pueden reconocer la necesidad para su propia familia de trabajar por dinero y apreciar su valor. Buscando balancear esto, los dadores pueden ser muy parco co su propia familia.

3.2 Causar resentimiento en su familia, por sus regalos a otros. Si son muy frugales con sus propias familias, y dan regalos grandes a otros, pueden causar en sus familias resentimiento hacia ellos y hacia quienes reciben sus donaciones.

3.3 No consultar a su cónyuge acerca del cuando y cuanto del donativo. No debemos olvidar que en una familia el presupuesto se maneja entre los cónyuges. Y que tanto el dinero que uno gana como el ofrendado se deben manejar entre los dos.

3.4 Presionar a otros para que ofrenden.3.5 Utilizar métodos no bíblicos para recolectar dinero y para motivar a los creyentes

a ofrendar.3.6 Invertir en proyectos que no benefician a otros. Tienden a ser atraídos por proyectos

más que a necesidades de los cristianos. A veces estos proyectos edifican a una organización, pero no a la gente que esta en la organización o a los alcanzados por la organización.

3.7 Prometer una ayuda económica y no cumplir con nuestros compromisos.3.8 Ofrendar lo que no es nuestro.3.9 Tomar dinero que esta determinado para otro fin y utilizarlo para un fin distinto.3.10 Controlar a las personas o ministerios por los donativos que hace. 3.11 Creerse indispensable en la vida de los hermanos y en la obra de Dios. Muchos son

los que piensan que la obra de Dios les pertenece por las grandes cantidades de

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ofrendas que dan. Otros piensan que la obra no podrá sostenerse sin ellos. Dios es el dueño absoluto de su obra y quien la sustenta y la fructifica.

3.12 Dar a quien no es debido. Muchos son los amigos del rico. Muchas personas se acercan al dador para recibir de él algún beneficio.

E. EL QUE PRESIDE.«El que preside, con solicitud» (Ro 12.8).

1. Definición: Preside, prohistemi. Prohistemi significa estar a la cabeza de, gobernar, dirigir, administrar o brindar liderazgo. Se usaba a menudo para las personas en posiciones de superintendencia, líderes en algún ejército, estado o en algún partido político. Otra palabra podría ser «facilitadores». Las personas de Romanos 12.8 tienen el don de coordinar a la gente para que lleve a cabo actividades y metas. Están particularmente dotadas para presentir problemas generales, estudiar necesidades, reclutar a otros para realizar trabajos, evaluar el tiempo que requiere completar una tarea, organizar recursos, proseguir a pesar de la oposición y las presiones, y delegar autoridad. Proporcionan el ingrediente necesario para que el pueblo de Dios se organice eficientemente y lleve a cabo sus metas.

2. Características del don de Presidir o Administración:2.1 Una desarrollada capacidad de ver el cuadro completo y aclarar metas de largo

plazo.2.2 Deseo de organizar aquello en que tiene responsabilidad.2.3 Deseo de cumplir obras lo más pronto posible.2.4 Conciencia de los recursos disponibles para cumplir la tarea.2.5 Capacidad de saber cuales cosas se puede comisionar.2.6 Tendencia de quedarse a un lado hasta que los que tienen el control le entreguen la

responsabilidad.2.7 Disposición de soportar reacciones negativas de los trabajadores, a fin de cumplir

la obra mayor.2.8 Satisfacción de ver todas las partes unirse y a otros disfrutando del producto.

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2.9 Deseo de impulsar a un nuevo desafío cuando la tarea anterior sea cumplida.2.10 Sabiduría en delegar tomando en cuenta los recursos, talentos, dones, dispocisión de

los obreros, personal, espacio y tiempo.2.11 Tendencia de asumir responsabilidad si no hay liderazgo oficial.2.12 Gracia divina para que las personas se sientan cómodos bajo su liderazgo.

3. Abusos del don de Presidir o Administración.

3.1 Orgullosos de su poder.3.2 Usar a la gente para cumplir metas más que suplir necesidades.3.3 Pasar por alto fallas del carácter en los que son útiles para alcanzar metas.3.4 Mirar a la gente como “recursos” más que seres humanos. Los administradores deben

saber que gente y materia son disponibles para realizar una tarea. Es fácil pasar por alto las necesidades individuales y verles como recursos para el trabajo.

3.5 Usar a la gente para ambiciones personales. Cuando los administradores tienen gentes, materiales, dinero a su disposición para realizar metas del grupo, es muy fácil desviar estos recursos para realizar metas o ambiciones personales.

3.6 Mostrar favoritismo a los que parecen ser más fieles y leales. Para los administradores la cualidad más importante es la lealtad. Necesita saber en quienes puede confiar para realizar tareas. Quieren saber su posición con cada persona que trabaja con ellos. A la misma vez los administradores tienen que ser sabios e imparciales. Recompensar la lealtad sin favoritismo es un reto especial para los administradores.

3.7 Encargarse de proyectos que no están dirigidos por Dios.3.8 Comisionar a otros mucho trabajos. El talento principal de un administrador es saber

cómo comisionar tareas. Esto les deja tiempo libre para enfocar proyectos y ver como las partes encajan. Si embargo si los administradores delegan muchas tareas a otros y no son sensibles a sus necesidades y horarios personales, habrá resentimiento en los trabajadores que pensaran que están haciendo todo el trabajo.

3.9 Desinterés a sugerencias y suplicas. Los administradores tienen la capacidad de resistir la oposición, sin embargo pueden hacerlo en extremo y cerrarse a sugerencias y quejas válidas de los que trabajan con ellos.

3.10 Fallar en no dar suficiente explicación y elogio a los trabajadores. Los trabajadores quieren sentir que son parte del proyecto completo para comprender como su trabajo cabe en la meta final.

F. EL QUE HACE MISERICORDIA«El que hace misericordia, con alegría» (Ro 12.8).

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INTRODUCCIÓN:

Un hombre que padecía una enfermedad terminal se convirtió al cristianismo por la intervención de un visitador hospitalario que llevaba su luz a todas las habitaciones en las cuales entraba. Luego de escuchar al difunto doctor Donald Grey Barnhouse por radio, el nuevo converso expresó el deseo de encontrarse personalmente con el predicador radial. Ya que el visitador era un amigo cercano del doctor Barnhouse, le trasmitió el mensaje. Los dos hombres fueron juntos al hospital. El paciente sufría de un cáncer avanzado, que había afectado uno de sus perfiles faciales horriblemente. El hedor de muerte hizo que el doctor Barnhouse retrocediera cuando entraba acompañando a su amigo. Luego el visitador dijo riendo y con gozo: ¡Hola Juan he venido a verte!

El doctor Barnhouse supuso primeramente que el paciente estaba inconsciente; luego se dio cuenta de que éste esbozaba una sonrisa que parecía casi una mueca. Su amigo cayó sobre sus rodillas junto a la cama, puso su brazo abajo de la almohada, acunando al moribundo. Sonriente, dijo: "¡He estado orando por usted, le aseguro que estará en la Presencia del Señor en gozo!"Luego le presentó al doctor Barnhouse quien comentó después: «Traté de hablar con él, pero recibí más de lo que jamás podría haber dado. Vi cómo a través del Espíritu Santo de Dios, le comunicaba la contagiosa alegría del Señor, que el enfermo necesitaba más allá de la simple retórica. A medida que él le hablaba, sus palabras fluían con alabanzas al Señor. Testificó acerca de las maravillas de Dios, de cuán magnífico es aquél que nunca se equivoca, de cómo hace bien todas las cosas, y que en breve llevaría a Juan hasta Su Presencia, de regreso al Hogar y ¡cuán maravilloso sería ver al Señor Jesucristo!".

El doctor Barnhouse llegó a la conclusión de que aquél día había visto por primera vez al don del Espíritu Santo operar en la vida del visitador hospitalario, su amigo, capacitándolo para realizar semejante obra de misericordia con tanta alegría.

1. Definición: El don de misericordia es la capacidad, guiada por el Espíritu de Dios, para manifestarse prácticamente, con compasión y amor jovial a los miembros sufridos del cuerpo de Cristo. (Epístola a los Romanos 12:8) Pablo menciona el don en esta cita de la siguiente forma: EL QUE HACE MISERICORDIA, CON ALEGRÍA.

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Tener misericordia de, se puede traducir como: tener conmiseración; tener compasión de; favorecer a. Cuando nos toca experimentar circunstancias adversas, invariablemente la gente se apiada. Pero muy a menudo, esta emoción muere rápidamente a la espera de la próxima noticia trágica. Pero la piedad que involucra este don, no se moviliza con las emociones; más bien se origina en un sentimiento sobrenatural de compasión profunda. No se trata únicamente de la bondad nacida del corazón del hombre, sino que es parte del Amor Divino, con la guía del Espíritu, que actúa en el Nombre de Cristo con el objetivo de glorificar al Padre. Quien recibe este don no es inflexible ante el padecimiento ajeno. Se conduele del sufrimiento de su hermano en la fe, viéndose obligado a socorrerlo. El don de misericordia implica algo más que un simple sentimiento de lástima; necesita de la acción. Misericordia, eleeo. Eleeo significa tener misericordia o piedad por alguien, ser misericordioso o compasivo, o ayudar a alguien por piedad. En el griego clásico a menudo se describían las emociones que se sienten con la aflicción que alguien padecía injustamente. Estas personas de Romanos 12 son las que Dios ha dotado de una medida especial de fe para identificarse emocionalmente con otros con el fin de mostrarles compasión. Son personas de gran «sensibilidad», con una marcada habilidad para percibir dónde están emocionalmente las personas, y para identificarse con lo que están sintiendo o padeciendo. Se proponen hacer el bien y ayudar a otros mediante una motivación desde lo más profundo. Rehuyen la dureza de alma; vienen a ser, de un modo especial, el «corazón» de la Iglesia.

2. Características del Don de Misericordia:

2.1 Capacidad de sentir amor genuino, con mayor sensibilidad a heridas más profundas.2.2 Capacidad de sentir un ambiente de gozo o angustia con un individuo o grupo.2.3 Atracción y entendimiento de gente que está en angustia.2.4 Mayor preocupación por el estado mental que el físico.2.5 Evasión de la firmeza a menos que vea que traerá beneficio.2.6 Sensibilidad por palabras y acciones que herirían a otros.2.7 Capacidad de discernir motivos sinceros en otros.2.8 Placer y unidad con aquellos que son sensibles a las necesidades y sentimientos de

otros.2.9 Capacidad de identificarse con el sufrimiento ajeno y la alegría de otros.2.10 Usan la palabra amor y misericordia más que cualquier otro creyente.

3. Abusos del Don Misericordia:

3.1 Fallar cuando es necesario ser firme y decisivo. Para quienes tienen el don de misericordia es difícil ser firme y decisivo, porque no quieren herir a otros. Pero muchas veces la falta de firmeza y desición causa en otros tristeza y gran desilusión.

3.2 Tomar para sí las ofensas de otros que han sido heridos. Cuando quienes tienen el don de misericordia oyen o ven a otros herir a alguien pueden sentir en sí mismos aquella herida, pueden tomar ofensas, especialmente si es a un amigo a quien se hiere.

3.3 Basar sus decisiones en emociones más que en razones. En quienes tienen el don de misericordia, sus emociones y sentimientos son tan fuertes que sirven de base a las decisiones que toman. En vez de basarlas en la lógica objetiva y bíblica.

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3.4 Promover afectos impropios en los del sexo opuesto. Una persona del sexo opuesto puede ser atraída a quienes tienen el don de misericordia. Porque estos tienen la capacidad de ser oyentes sensitivos, comprensivos y respondedor. Hay que tener cuidado en la consejería y establecer precauciones para evitar afectos personales impropios.

3.5 Cortar comunicaciones con quienes son insensibles con otros. Las palabras y hechos que reflejan insensibilidad a los sentimientos de otros, pueden ser reconocidos por los que tienen el don de misericordia. Entonces tienden a reaccionar y cerrar su espíritu a los insensibles.

3.6 Reaccionar contra los propósitos de Dios cuando el permite a la gente sufrir. En contraste con los exhortadores que ven al sufrimiento como una manera de crecer espiritualmente, los misericordiosos tienden a reaccionar ante la idea de que Dios permitiría a la gente sufrir para un buen propósito. Su interés es quitar lo más pronto posible la causa del sufrimiento.

3.7 Simpatizar con los que violas las reglas de Dios. Si los misericordiosos no disciernen porque sufre alguien, pueden dar simpatía a quienes están sufriendo como resultado directo de violar los mandamientos de Dios.

3.8 Establecer amistades posesivas con otros. En las amistades de los misericordiosos hay la necesidad de confianza y proximidad. Esto fácilmente puede resultar en celo posesivo de amistades con otros y la tendencia de ser profundamente herido cuando no hay confianza mutua en la amistad. Desilusiones en una amistad tienden a crear expectaciones mayores y celo posesivo en una nueva amistad. Y esto es un desequilibrio emocional, todos tenemos derecho a tener amistades, pero no dominar las amistades.

4. Observaciones:

4.1 INVOLUCRA ACCION

En oportunidad de fallecer siete miembros de una familia a raíz de emanaciones de gas en Chicago, Estados Unidos, una madre desconsolada tuvo que afrontar enormes gastos en concepto de hospital, funeral y sepulturas. Una pequeña iglesia hizo una colecta que se extendió a la comunidad vecina. Pero un hombre envió un sobre sin nada de plata, pero con un tratado mal impreso titulado: "Cómo ser salvo". No había aún aprendido la lección de que la verdadera misericordia supera las palabras.Siempre que Jesús se conmovía ante el sufrimiento, hacía algo al respecto - su espíritu compasivo, más allá de cualquier abstracción - se plasmó en hechos concretos de misericordia. SANÓ A LOS CIEGOS, A LOS ENFERMOS Y A LOS LEPROSOS; ALIMENTÓ A LAS MULTITUDES. Durante su estada en esta tierra nos reveló su compasión. El sufrimiento elocuente de la Cruz fue la evidencia más elevada de este don. La misma palabra que significa don en la Epístola a los Romanos 12:8; aparece varias veces en los Evangelios cuando la gente clama: ¡TEN MISERICORDIA DE MI! Este clamor fue usado por dos ciegos, una madre que intercedió por su hijo endemoniado, Bartimeo y los diez leprosos. Querían ver hechos y Jesús hizo algo al respecto en cada uno de estos casos.

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Una casa se incendió en una aldea de Nueva Inglaterra. Apenas se pudieron rescatar cuatro vacas y algunos muebles. Los damnificados necesitaban de todo. Apareció un vecino que mirando estupefacto las humeantes ruinas, removió el casco chamuscado. Sacudió su cabeza descreído y le dijo a su vecino de años: "Si hay algo que pueda hacer por usted, sólo dígalo" Y después se alejó del lugar, dejando la estela de esas rituales palabras. También se acercaron otros vecinos, quienes en lugar de hablar - ya que las necesidades eran obvias - salieron en la búsqueda de ayuda como camas, colchones, papas, verduras, ollas, ropas y heno para las vacas. La persona que posee el don de misericordia, no necesita preguntar a nadie ¿cómo puedo ayudar? No se trata de hallar la frase más adecuada para aliviar la conciencia sino de plasmar hechos que beneficien al necesitado. Como dijo Santiago en el capítulo dos, versículos 15 y 16: "SI TU HERMANO O UNA HERMANA ESTAN DESNUDOS Y TIENEN NECESIDAD DEL MANTENIMIENTO DIARIO Y ALGUNOS DE VOSOTROS LES DICE: ID EN PAZ, CALENTAOS Y SACIAOS, PERO NO LES DAIS LAS COSAS QUE SON NECESARIAS PARA EL CUERPO, ¿DE QUÉ APROVECHA?" El don de misericordia no debe ser solamente sinónimo de preocupación sino también de integración. Por supuesto, se pueden expresar palabras de aliento genuino. El hecho de decir palabras de aliento en un hogar donde alguien está enfermo, evidencia el don de exhortación; pero si en cambio alguien se dirige a la cocina y prepara la comida, demostrará el de misericordia. Los creyentes primitivos dieron prueba de misericordia vendiendo sus propiedades y bienes para ayudar a todos. (Hechos 2:44-45.) Dorcas, a quién Pedro levantó de entre los muertos en Jope (Hechos 9:36) fue santificada por coser ropa y abrigos para las viudas pobres. Se la describe llena de limosnas y buenas obras. Ella poseyó realmente el don de misericordia. El carcelero filipense recién convertido, demostró su misericordia a pocos minutos de acaecida la conversión. Lavó las heridas coaguladas de las espaldas de Pablo y Silas; los llevó a su casa y les dio de comer. (Hechos 16: 33-34.)Un ejemplo gráfico de este don se puede hallar en Onesíforo quién en un viaje a Roma, buscó solícitamente a Pablo, que estaba prisionero, no en una casa alquilada, sino en un calabozo bajo nivel, húmedo y oscuro, tal vez en la prisión mamertina. Aunque el encarcelamiento era muy severo, el acceso al mundo exterior no estaba prohibido. Pablo parece insinuar que el temor a la persecución o bien a la idea de la proximidad de su persona, hizo que los cristianos en Roma se abstuvieran de brindarle la ayuda correspondiente. Pero Onesíforo fue la excepción y Pablo testifica: "ME CONFORTÓ Y NO SE AVERGONZÓ DE MIS CADENAS: SINO CUANDO ESTUVO EN ROMA ME BUSCÓ SOLÍCITAMENTE Y ME HALLÓ". (2 Timoteo 1: 16-17.)Imaginen al pobre Pablo cuyo espíritu expansivo amaba deambular por el mundo y ahora estaba encadenado. Piensen en ese hombre gregario, quien teniendo una multitud de amigos, estaba aislado sin que nadie lo visitara, con la excepción de Onesíforo, cuyo nombre significa ayudador o en términos más amplios hacedor de misericordia. Este don capacita a quien lo posee para brindar ayuda de manera directa o indirecta.- A veces es más piadoso no dar a una persona ayuda directa. Uno puede ofrecer a un hombre un trabajo, enseñar a coser a una mujer o cómo desempeñarse en el servicio doméstico. Este mismo don puede señalar a una

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enfermera cuando abstenerse de alimentar a un accidentado automovilístico que está seriamente herido y cuando dejar de ayudarlo a caminar por el pasillo, ayudándolo piadosamente a aprender cómo cuidarse a sí mismo.

4.2 REQUIERE ALEGRIAUn evangelista muy renombrado estuvo dos semanas en cama por causa de una neumonía. Algunos conocidos del ministerio vinieron a visitarlo de lugares distantes y a pesar de su alta temperatura, estuvieron con el paciente en la habitación más de una hora, exudando una melancolía opresiva. Después abandonaron el lugar con el recordatorio de que si no se volvían a reunir en la tierra, lo harían nuevamente en la gloria del Señor. El referido evangelista afirmó: "Me sentí mucho peor cuando se fueron que cuando llegaron". A menudo demostramos piedad por nuestro sentido del deber y frunciendo el ceño o de mala gana decimos: "Estoy dispuesto a ayudarlo esta vez, pero...”El apóstol San Pablo declara que el don de misericordia debe practicarse con alegría. (Epístola a los Romanos 12:8.) Quien tiene el ministerio de visitar a las personas enfermas, y a aquellos que están en confinamiento debe brillar como el sol, y no como hizo un hombre que su esposa sufría de una enfermedad incurable y al entrar a la habitación sostuvo en alto la escritura de la sepultura del cementerio, diciendo: "no te aflijas querida, ya está todo en orden".Hacer algo por misericordia y gruñendo, anula el poder manifiesto del servicio. El don de misericordia, a través del estímulo interior del Espíritu Santo, convierte a su portador en un rayo de sol que penetra hasta el corazón afligido del paciente. Cuando la mística francesa, Madame Guyon, fue encarcelada en la Bastilla en 1699, su criada devota decidió compartir con ella la prisión porque estaba convencida de que su ama no iba a poder sobrevivir en soledad, esa espantosa circunstancia y de que iba a necesitar de alguien que la ministrara constantemente. La criada cumplió con su deber alegremente hasta su propia muerte acontecida en el año 1700, justo antes de que Madame Guyon fuera liberada.

4.3 FORTALECIENDO A MUCHOS¿Cómo podremos ilustrar más claramente la diferencia entre el don de misericordia y el de colaboración o ayuda?El don de ayuda está dirigido a los cristianos obreros para aliviarlos de un servicio temporal para que puedan realizar su tarea principal de Ministerio tanto sea en la predicación de la palabra como en la oración. En cambio, el de misericordia, se orienta al santo que está en aflicción, al pobre, al desamparado, al enfermo, a quien sufre de alguna carencia, a quien está en desventaja, al minusválido, al malquerido, al autista, al hambriento, y al alcohólico.Los geriátricos están llenos de gente que alguna vez fueron miembros activos de iglesias evangélicas. Permanecen allí por meses, en la nostálgica espera de alguna visita que les acerque un poquito de luz. Existe un grupo de damas de una iglesia que se dedica a patrocinar cumpleaños una vez por mes para personas ancianas en sus casas.Una viuda que regresó de una internación hospitalaria que duró dos meses encontró su hogar hecho un primor, limpio de arriba a abajo por la amorosa dedicación de las damas jóvenes de la iglesia.Cuántas veces solamente el hecho de llevar comida caliente a un hogar donde la madre está hospitalizada ha fortalecido a los miembros de esa familia.

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En oportunidad de incendiarse la casa de un miembro casi por completo, los demás se afanaron toda una tarde, trabajando algunas horas del día sábado inclusive hasta lograr construir un resguardo de lo más apropiado para que toda la familia pudiera albergarse hasta que su hogar fuera restaurado por completo.Debemos cubrir las necesidades del pueblo de Dios (Romanos 12:13) "compartiendo para las necesidades de los santos; practicando la hospitalidad". (También Hechos 13:16). La Epístola a Efeso 4: 28 nos recuerda... "El que hurtaba no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga qué compartir con el que padece necesidad". Estamos para alentar a los de poco ánimo y sostener al débil (1 Epístola a Tesalónica 5:14). Algunas personas necesitan que las controlen emocionalmente; otras necesitan de misericordia y también de medicamentos. En 1 Timoteo 5:4 se aconseja a los niños recompensar a sus padres. Algunos traductores dicen que los niños deben recompensar a sus padres financieramente por todo lo que le concedieron los progenitores. El don de misericordia incluye la imparcialidad hacia terceros y grupos minoritarios. Los hechos de misericordia no deben trascender por su magnificencia. Marcos 9:41 "cualquiera que os diere un vaso de agua en mi nombre, porque sois de Cristo, de cierto os digo que no perderá su recompensa".Cuando toca a la iglesia el espíritu de conveniencia y apatía, pondremos en acción el don de misericordia con sólo recordar un hecho de la vida de John Wesley, cuando ya contaba con ochenta y dos años.Escribió lo siguiente en su diario personal con fecha 4 de enero de 1785: "En la víspera de Fin de Año, generalmente distribuimos carbón y pan entre los pobres de la Sociedad. Pero ahora pienso que también quieren ropa y alimentos. Por lo tanto a partir de este día, y durante los cuatro días siguientes, caminé por el pueblo y reuní doscientas libras a fin de poder vestirlos que es lo que más les hacía falta. Pero resultó para mí un trabajo tedioso ya que a causa de que la nieve se iba derritiendo, las calles estaban muy resbaladizas y mis pies se hundían en el agua helada hasta los tobillos, y tuve que estar con los pies húmedos de la mañana a la noche. Pude resistirlo muy bien hasta el día sábado por la tarde que caí en cama con un terrible resfriado que empeoraba hora tras hora, hasta que a la seis de la mañana tuvo que atenderme el doctor White-head." En la localidad de Jacksonville en Florida, Estados Unidos la Iglesia Bautista Dinsmore mantiene un ministerio poco común para cuarenta y cinco personas minusválidas. Lo fundó el Pastor J. W. Wynn luego de visitar en varias ocasiones a un joven que había quedado paralítico del cuello hacia abajo en un accidente automovilístico. Este ministerio se llama Club Dinsmore, y manda dos ómnibus para alcanzar a sus miembros hasta las reuniones de todos los martes que duran cuatro horas y media. Estos ómnibus están provistos de ascensores hidráulicos para facilitar el manejo de las sillas ortopédicas que deben usar para su traslado la mayoría de los miembros de este club. Los ómnibus se alejan hasta cincuenta millas de distancia para recoger y devolver a los miembros. Aunque no se trate de un programa de rehabilitación física este sistema ha mejorado mucho el estado de salud de esta gente. Uno de ellos dudó si valía la pena seguir viviendo en ese estado; sin embargo halló fortaleza y una motivación de vida enseñando a otro miembro de igual condición a usar la cuchara y llevársela a la boca, cosa que no había podido lograr por casi ocho años. Aquél día se derramaron muchas lágrimas

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de gozo. Una y otra vez, los corazones son conmovidos a causa del amor que se prodigan los miembros del Cuerpo de Cristo.Nuestras buenas obras, inspiradas en el don de misericordia, pueden llegar a ser el máximo testimonio para el mundo exterior de nuestra fe en el Señor Jesucristo. Un catedrático de Ciencias Políticas de la Universidad de Miami, en la localidad de Oxford, estado estadounidense de Ohio, escribió recientemente que "la contribución más importante que nosotros podemos hacer en este mundo reside en las personas de nuestro conocimiento. Nuestras obras de misericordia y dedicación tienen cien veces más impacto en la vida del prójimo que nuestra vocación por las ideas sociales."Por ejemplo, los profesores de educación terciaria pueden hablar interminablemente y con profundo conocimiento sobre las reformas sociales. Yo creo que lo que verdaderamente marca una diferencia real entre ellos y los demás seres humanos, se fundamenta en la forma en que tratan a sus esposas, esposos, hijos y vecinos, y a los estudiantes dentro y fuera de los claustros y por último, la conducta moral que son capaces de demostrar.El mundo no empeoraría demasiado si el 95 % de los libros existentes no se hubiera escrito. Pero cada vez que una persona hace una obra bien, la vida de alguien se ilumina inevitablemente. "Wordsworth, hablando con entendimiento, expresó que la mejor parte de la vida de un hombre se basa en las anónimas y olvidadas obras de bien y de amor que ha hecho." Durante la ocupación de Etiopía por las fuerzas italianas, los evangélicos tuvieron que sufrir una persecución grave. Ya que las cárceles carecían de aprovisionamiento para los prisioneros, la única forma de poder alimentarse era gracias a la visitación de conocidos y familiares. Los prisioneros cristianos fueron tan bien cuidados por los hermanos creyentes y los grupos de las iglesias que el sobrante de alimento pasó a manos de los no creyentes, quienes con frecuencia fueron olvidados por conocidos y amigos. Este espontáneo y silencioso testimonio de amor profundo, desconocido en muchos círculos de no-cristianos, hizo que muchos inconversos buscaran a los cristianos para saber más sobre este nuevo camino. En consecuencia, también algunos prisioneros que aceptaron al Señor Jesucristo, luego de ser puestos en libertad, volvieron a sus hogares para buscar la iglesia evangélica más cercana.Actualmente cada hijo de Dios necesita manifestar su amor compasivo prácticamente a los demás miembros del Cuerpo de Cristo. Descubrir cuál es su don (o dones) según Romanos 12 es de vital importancia. Ore fervorosamente por este material a fin de evaluar su posición.

5. Evaluación general:

5.1 Según Marcos 5.19, ¿por qué fue liberado el endemoniado gadareno?

5.2 Según Mateo 23.23, ¿a qué se compara la misericordia?

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5.3 De acuerdo a Santiago 3.17, ¿de qué es signo la misericordia?

5.4 Según Romanos 12.8, ¿cómo ha de ser brindada la misericordia?

«Alegría» equivale a placer o gracia; es ser un rayo de luz en una sala de enfermos. Es probable que la exhortación a la alegría acompañe al don de la misericordia porque la base fuertemente emocional de este último lo hace propenso a la melancolía o a la depresión emocional.

5.5 EL BUEN SAMARITANO

Lea Lucas 10.29–37 y observe lo siguiente acerca del don de la misericordia en acción.

¿Cómo respondió el samaritano a la desgracia de la víctima? (v. 33)

¿Cómo lo ayudó? (v. 34)

¿De qué manera estuvo dispuesto a comprometerse? (v. 35)

G. EL DON DE FE

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1. DEFINICIÓN Fe, pistis. Convicción, confianza, creencia, dependencia, integridad y persuasión. En el marco del NT, pistis es el principio divinamente implantado de confianza interior, seguridad y dependencia en Dios y en todo lo que Él dice. Puede referirse al cuerpo de verdades en las que creemos (1 Ti 1.19), a la confianza básica que depositamos en Dios para nuestra salvación (Ef 2.8) o al poder dinámico que pone en marcha la energía contenida en las promesas de Dios. Como poder dinámico, la fe es agente de acción; es este aspecto el que mejor describe la manifestación de 1 Corintios.

2. Características del Don de Fe:

2.1 Convicción real de que Dios todo lo puede.2.2 Confianza plena en las promesas de Dios. Fe es aceptar la palabra de otro,

entendiéndola y confiando que es honesto y por lo tanto que su palabra es veraz. El motivo básico de toda fe es la autoridad (el derecho de ser creído) de aquel a quien se cree. Este reconocimiento de autoridad ocurre cuando se acepta que el o ella tiene conocimiento sobre lo que dice y posee integridad de manera que no engaña.

2.3 Paciencia en esperar la respuesta de Dios al cumplimiento de sus promesas.2.4 Perseverancia en la labor emprendida aun cuando haya oposición.

La fe Soporta la esperanza. Las pruebas y las penas son inevitables en nuestra vida. En los minutos difíciles de nuestra vida sólo la fe puede dar al hombre las necesarias fuerzas espirituales.Mientras el hombre con una fe débil a la hora de una desgracia pierde el ánimo, se siente abatido, se queja, y se enfurece, el hombre creyente se dirige más fuertemente a Dios en busca de ayuda. A los sentimientos tristes el creyente los rechaza con la esperanza en Dios, sabiendo que "el que creyere en Él, no será avergonzado" (Rom. 9:33).Las penas y las aflicciones en nuestra vida son tormentos, períodos de prueba de nuestra fe. Durante épocas de buen tiempo cada marinero puede tener un muy buen concepto de sus conocimientos del mar, pero solamente en tiempos de tormenta se manifiesta el navegante diestro. Al leer los libros de las Sagradas Escrituras o de la vida de los Santos, nos convencemos de que estos siervos de Dios hallaron la

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http://www.monografias.com/trabajos/epistemologia2/epistemologia2.shtml

http://www.monografias.com/trabajos2/rhempresa/rhempresa.shtml

http://www.monografias.com/trabajos2/rhempresa/rhempresa.shtml


solidez de su fe más en los tiempos de persecución y sufrimientos que cuando su vida transcurría tranquilamente. El apóstol Pablo menciona ejemplos de la fe de los hombres justos del Antiguo Testamento y se detiene precisamente en aquellos momentos de sus vidas cuando sufrían persecuciones. Al final de los ejemplos presentados, el Apóstol llega a la siguiente conclusión.”Otros fueron atormentados, no aceptando el rescate, a fin de obtener mejor resurrección. Otros experimentaron vituperios y azotes, y a más de esto prisiones y cárceles. Fueron apedreados, aserrados, puestos a prueba, muertos a filo de espada; anduvieron de acá para allá cubiertos de pieles de ovejas y de cabras, pobres, angustiados, maltratados; de los cuales el mundo no era digno; errando por los desiertos, por los montes, por las cuevas y por las cavernas de la tierra" (Heb. 11:35-38). El Apóstol Pablo enseña seguidamente: "Por tanto nosotros también teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante" (Heb. 12:1).Probablemente al lector no le es difícil concordar con que la fe ayuda al hombre a soportar valientemente las penas. Pero queda la pregunta: ¿Por qué el Señor permite que los creyentes y los hombres justos sufran? A esta pregunta no es fácil contestar: "¿Quien ha medido el Espíritu del Señor, que consejero lo ha instruido?" (Is. 40:13). El apóstol Pablo escribe que "a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien" (Rom. 8:28). "Todas las cosas," incluyendo también las penas y las aflicciones. En efecto, el apóstol Pablo mismo, al verse sometido a grandes pruebas, iba tomando experiencia: "Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, ¡entonces soy fuerte! Porque la fuerza de Dios se realiza en la debilidad" (2 Co. 12:10).Los sufrimientos convencen al ser humano de la inestabilidad de los bienes terrenales, nos recuerdan a un Dios liberador, a la vida eterna; nos enseñan mansedumbre, desarrollan la valentía, y la constancia en el bien. Cuando el ser humano no tiene de dónde esperar ayuda, siente más vivamente a Dios. Y al mismo tiempo, mientras exteriormente padece estrechez y sufrimientos, en el corazón recibe consuelo. Este sentimiento inmediato de Dios tiene influencia benefactora en la fe del ser humano. Así pues, por misericordia de Dios, resulta que, en síntesis, por un lado, la fe ayuda al ser humano a sobrellevar los sufrimientos, y por otro lado los sufrimientos mismos ayudan en el fortalecimiento de la fe. Por eso los apóstoles enseñaban a los cristianos: "Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia" (Stg. 1:2-3). Las Sagradas Escrituras comparan los sufrimientos con una llama que limpia el oro de las impurezas y lo hace más valioso (1 Pedro 1:70).

2.5 Da pasos de acción sin saber el futuro, esperando la provisión de Dios.2.6 Un Andar por fe y no por vista. La fe, más que creer en algo que no vemos es creer

en alguien que nos ha hablado. A Dios le debemos fe absoluta porque Él tiene absoluto conocimiento y es absolutamente veraz.

2.7 Quien tiene el don de fe sabe que por encima de toda duda y preocupaciones de este mundo las enseñanzas de la fe son las enseñanzas de Dios y por lo tanto son ciertas y buenas.

2.8 El que tiene el don de Fe por lo general sus peticiones siempre son contestadas.2.9 Usa la palabra fe más que cualquier otro en la Biblia.

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2.10 Capacidad de echar fuera demonios con rapidez.

3. Abusos del Don de Fe:

3.1 Al cristiano nunca le es lícita la negación de la propia fe, ni directamente, por palabras, signos, gestos, escritos, ni indirectamente, por aquellas acciones que, sin indicar en sí mismas oposición a la fe, sin embargo, por las circunstancias en que se realizan, podrían interpretarse así; esto ocurre también cuando un creyente niega con su conducta práctica la verdad en la que cree, o cuando con sus acciones (indiferencia, pecados personales) está negando la fe que dice profesar. No confesar la fe (ocultación, negación de la fe), contra la obligación de acrecentarla (ignorancia religiosa) y de preservarla de los peligros. También puede pecarse por omisión (por no cumplir el deber de confesarla externamente, por ignorancia de las verdades que deben creerse) y por actos contrarios a esa virtud (pecados de comisión).

3.2 La credulidad temeraria o en la superstición, cuando se cree en falsas devociones, en lugares pseudos- milagrosos, horóscopos, etc.; también entran en este apartado la adivinación y el espiritismo.

3.3 Excluir el razonamiento lógico de la fe.Pero cuando decimos que la capacidad de creer es superior a los conocimientos físicos no queremos decir que la fe excluya al pensamiento o al razonamiento lógico; por el contrario, según el plan de Dios, todas las capacidades espirituales deben interactuar entre sí. La verdadera fe no debe ser ciega, frívola y ligera. La ligereza en cuanto a la fe demuestra la pereza del alma, la ingenuidad de la mente. La inteligencia debe ayudar a diferenciar la verdad del engaño. El estudio detallado de las verdades religiosas hacen la fe más precisa y fundamentada. El Señor Jesucristo nunca exigía de sus seguidores una fe ciega, al contrario. Él dijo a los judíos: "Escudriñad las escrituras porque ellas dan testimonio de mí" (Jn. 5:39). Asimismo les proponía a los incrédulos ahondar en sus milagros, diciéndoles: "Aunque no me creáis a mí, creed a Mis obras." De la misma manera, los apóstoles aconsejaban a los cristianos usar la inteligencia, ser prudentes, cautos en cuestiones de fe: "No creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios. Especialmente, los apóstoles persuadían a sus seguidores y sucesores a seguir la sana doctrina y rechazando fábulas y fantasías humanas" (2 Tim. 1:13, 4:3).De esta manera vemos que no es correcto contraponer el razonamiento a la fe, ya que ambos son necesarios. La meta del razonamiento es investigar, probar, fundamentar. El razonamiento aleja a la fe del error y del engaño, y a la gente la aleja del fanatismo. La fe se puede comparar con el motor de un carro, y el razonamiento con el volante: sin motor, el carro no se mueve de su lugar, y sin volante se estrella.La fe lleva al ser humano a un encuentro vivo con Dios en la oración atenta y de corazón. Durante esta oración el ser humano se relaciona con la todopoderosa fuerza divina y entonces, según las palabras del Salvador, todo se hace posible para el creyente (Mt. 9:23). Por eso "Todo lo que pidieran en oración con fe, lo recibirán," y añadió: "Si tuvieran fe como un grano de mostaza y le digan a un monte: muévase de aquí para allá, y se moviera, y nada os será imposible" (Mat. 21:22 y 17:20). En otras palabras, incluso la más pequeña fe puede hacer milagros, con tal que sea íntegra y viva como una semilla.

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3.4 Tener la fe en las fuerzas de uno mismo. Están muy equivocados los representantes de las sectas que confunden la fe religiosa con simple autosugestión. Ellos enseñan que hay que convencerse a sí mismo acerca de lo que se quiera, por ejemplo su salud, la suerte, el bienestar, y que eso es suficiente para obtener todo bienestar. Una autosugestión así se parece a un juego de niños en el que los infantes imaginan que navegan por el mar estando sentados en el piso de su cuarto. Una fe así es un autoengaño y es contraria al cristianismo.La fe actúa no por la fuerza de la imaginación ni por auto-hipnosis, sino por medio de la unión del ser humano con el manantial de toda vida y fuerza, de la unión con Dios. La fe es el recipiente del cual se extrae el agua, pero es necesario llegar a esta agua y sumergir el recipiente en ella. Es necesario usar prudentemente la poderosa fuerza de la fe. Cuando oremos debemos preocuparnos no tanto en persistir obstinadamente en nuestra petición, sino en que Dios nos ilumine para comprender qué pedir. Pues la oración no es sólo nuestra palabra dirigida a Dios, sino especialmente nuestra conversación con Dios. Y en una conversación hay que saber escuchar.

3.5 Envanecerse por su “gran fe”. A la luz de los relatos del Evangelio, vemos que la gente que se distinguía por su gran fe, como por ejemplo los anteriormente mencionados: el soldado romano, la mujer cananea, los amigos del hombre postrado y otros, eran ajenos a cualquier exaltación o énfasis. Al contrario, ellos eran gente muy humilde (Mt. 8:10, 15:2, 9:2). La combinación de una fe fuerte con la humildad no es casualidad. El hombre que tiene una gran fe siente más que otro cualquiera la grandeza y el poder de Dios. Y cuanto más claramente siente esto, más va a reconocer su debilidad, su miseria. Por eso los grandes hombres de Dios, como por ejemplo los profetas Moisés y Elías, los apóstoles Pedro y Pablo y otros como ellos, siempre se distinguían por su gran humildad.

4. Observaciones:

Pregunta: ¿Qué diferencia hay entre don de fe, la fe salvadora y la fe como fruto del Espíritu?La fe inicial de la salvación se manifiesta en un corazón que cree que Dios levantó a Jesucristo de entre los muertos para nuestra justificación. Este inmediatamente se convierte en un corazón dispuesto a confesar fiel y constantemente que Jesús es el Señor (Romanos 4:25; 10:9, 10). Por otra parte, la fe como fruto del Espíritu es una demostración de fidelidad a Dios y su Palabra junto con una actitud de completa obediencia y sumisión a su voluntad. En cambio, el don de fe que imparte y administra el Espíritu Santo es una capacidad sobrenatural otorgada al creyente para satisfacer una necesidad o resolver una situación de emergencia. El don de fe sirve para elevar la fe de la iglesia. Hay ocasiones en que se hace urgente que la congregación haga uso de fe sobrenatural para resolver alguna necesidad de un creyente o de toda la asamblea. Quizás recuerde usted alguna ocasión en que el Espíritu Santo usó un testimonio, un canto, una oración un mensaje para impartir fe sobrenaturalSegún Jeremías 32.17, ¿qué se puede confesar con confianza tomando como base este don?Nada hay difícil para Dios. El hizo los cielos y la tierra.

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En la epístola a los Hebreos (cap. 11) se da lo que podemos llamar una definición de la fe, junto con una exégesis de cómo la vivían los protagonistas del Antiguo Testamento. "La fe (pistis) es la garantía (hypostasis) de lo que se espera, la prueba de las cosas que no se ven" (11, v.1). Literalmente la palabra griega hypostasis se traduce mejor por el término latino substancia. En este sentido la fe es lo que está debajo de (o subyace a) toda nuestra esperanza; se refiere fundamentalmente a lo que no se posee, pero que se espera. Siendo el principio de nuestra esperanza, nos capacita para saber que el mundo ha sido creado por la Palabra de Dios (11, v.3), y que Dios remunera a quienes le buscan (11, v.6). También se repite un tema implícito en todo el Antiguo Testamento, el cual fundamenta la misma justificación del hombre: sin la fe es imposible agradar a Dios (11, v.6). La manifestación de fe es la habilidad espiritual otorgada de manera espontánea a fin de liberar la energía divina para cualquier acción o necesidad concreta; se debe diferenciar de la fe que lleva a salvación, o de la fe cristiana en sentido general desarrollada mediante un diario andar con el Espíritu.

H. EL DON DE EVANGELISTA.

Efesios 4:11

Ref. Bib: Ef 4:11.1. Definición: EVANGELISTA El que pregona las buenas nuevas de salvación (®

EVANGELIO), guía a los incrédulos al conocimiento del Señor y establece nuevas congregaciones. Todos los cristianos deben ser testigos de su fe (Hch 8.4), pero Cristo otorga el don de evangelista particularmente a algunos miembros de su Cuerpo.Ser evangelista es un don bien distinto de los dones de apóstol, profeta, pastor y maestro, que puede ejercerse ante una multitud o individualmente (Ef 4.11). Pablo exhorta a Timoteo a «hacer obra de evangelista» (2 Ti 4.5).

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A ® FELIPE se le llama «el evangelista» (Hch 21.8) y se dan muestras de su trabajo en Hch 8.5, 12, 26–40. Después del siglo I, el término evangelista se aplicaba a los autores de los cuatro ® EVANGELIOS.EVANGELIO (transcripción del sustantivo griego euangelion, buenas nuevas). Gozosa proclamación de la actividad redentora de Dios en Cristo Jesús para salvar al hombre de la esclavitud del pecado. En el Nuevo Testamento (griego) no solo se expresa en forma de sustantivo, sino también en forma verbal euanggelizo (proclamar o anunciar el evangelio).En la LXX solo aparece el verbo y su sentido es secular: «traer buenas noticias» (2 S 4.10; 1 R 1.42; Jer 20.15). Más tarde su significado incluyó el sentido religioso de proclamar la victoria de Dios sobre sus enemigos (Sal 40.10; 68.11), y el reino eterno de Dios (Is 40.9; 41.27; 51.16; 52.7). Las buenas nuevas anuncian al pueblo la presencia de Dios (cf. Is 40.9) para juicio y restauración. Son tanto para judíos como para gentiles (Is 40.5; 45.23–25; 49.6; 51.4). Los mensajeros del evangelio son personas (Is 52.7; 61.1) y Dios actúa en la proclamación (55.11).Juan el Bautista comienza su ministerio proclamando las buenas nuevas (Lc 3.18; verbo) y, más tarde, Jesús predica el evangelio (Mr. 1.14; sustantivo). En ambos, el evangelio es la señal por excelencia de la llegada del Mesías (Mt 11.5 y Lc 4.18 que citan a Is 61.1). El Reino de Dios se hace presente en la tierra y Cristo predica y anuncia el evangelio (Lc 8.1).La iglesia primitiva hizo de la predicación del evangelio a toda persona su deber principal (Hch 5.42; 8.12; 11.20; 14.7; 1 Co 1.17; Gál. 1.16).En el Antiguo Testamento, junto con la proclamación del evangelio deben darse la justicia o justificación (Sal 40.9), la salvación y la paz (Is 52.7). En el Nuevo Testamento Cristo Jesús es el evangelio mismo, y su obra hace real la salvación, la justificación y la paz para el mundo (Hch 10.36; Ro 1.16ss; Ef 2.17; 1 P 1.23ss). El contenido del evangelio permanece inalterable y absoluto, pero se sella con la muerte propiciatoria de Cristo (1 Co 15.1–4). Es el mensaje de reconciliación con Dios y nosotros somos colaboradores en su proclamación (2 Co 5.20s). En el juicio final, los hombres se juzgarán según su respuesta al evangelio (2 Ts 1.8; 1 P 4.17).En la tradición posterior de la Iglesia, la palabra escrita acerca de Jesucristo también llegó a constituir el evangelio. (® EVANGELIOS.)

2. Características del Don de Evangelista.

2.1 Pasión consumidora por los perdidos.2.2 Capacidad para guiar a una persona a Cristo utilizando cualquier pasaje de la

Escritura.2.3 Capacidad de presentar el evangelio de manera clara y sencilla.2.4 Su mensaje es concreto basado en la persona y obra de Cristo.2.5 Poder en la exposición del mensaje.2.6 Capacidad para motivar a otros a evangelizar.2.7 Desarrollada conciencia de la responsabilidad de testificar.2.8 Deseo de predicar el evangelio en lugares donde nunca se ha oído antes de él.2.9 Coraje para predicar el evangelio en lugares hostiles.2.10 Su tema favorito en cada mensaje es el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo.

3. Abusos del Don de Evangelista.

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3.1 No dar la gloria a Dios en la conversión de las almas.3.2 No testificar cuando el E.S lo está guiando a predicar a una persona o a un lugar

particular.3.3 Predicar el evangelio por ganancia deshonesta.3.4 Predicar solo a aquellos que me simpatizan.3.5 Diluir el mensaje del evangelio haciéndolo tan sencillo que pierde su esencia.3.6 Dejarse dominar por el miedo para testificar.3.7 Juzgar a otros porque no ganan almas.3.8 Confiado de su habilidad de testificar.3.9 Arrancar decisiones en la evangelización.3.10 Compartir experiencias más que el mensaje del evangelio.3.11 Predicar solamente del evangelio y no de las doctrinas fundamentales.

I. DON DE PASTOR.Efesios 4.11-16.

1. Definición:(Del gr. poimen, el que apacienta).

a. El Pastor se ocupa de alimentar, confortar, guiar, acompañar y ungir (Sal. 23; Jn. 10.7–16) a la grey. La imagen es tomada del AT (Jer. 2.8, et al.) y adoptada por el cristianismo (Jn. 21.15–17). El vocablo poimén como título oficial del encargado de la iglesia local sólo aparece en Ef. 4.11. El Pastor es un líder religioso que comprende y cuida individualmente de su grey, y a quien ellos buscan para encontrar sanidad para sus almas. Los Pastores son ordenados a este ministerio cristiano con el fin de que traten con las necesidades espirituales de las personas, enseñen y fortalezcan a los miembros de la iglesia, aconsejen y animen al crecimiento de cada uno de ellos en amor y

gr. griego.AT Antiguo Testamento.

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servicio cristiano. El cuidado de las almas es el centro de la vocación del Pastor cristiano. Según Daniel D. Williams: «La tarea pastoral, como la de todo ministro cristiano, es la de corresponder al maravilloso cuidado de Dios por el alma humana y compartir con otros el conocimiento que él tiene del poder salvador de Dios.» Juan A. Mackay ha dicho: «Otras religiones tienen sus profetas y sacerdotes, y hasta sus evangelistas, pero solamente la religión cristiana ha producido un orden de Pastor . El Pastor cristiano, con su corazón de pastor de ovejas y su vocación pastoral, es único entre los funcionarios religiosos.»

b. Don del Espíritu Santo (Ef. 4.11). Según C. Peter Wagner, «el don de pastor es la habilidad especial que Dios da a ciertos miembros del cuerpo de Cristo para asumir una responsabilidad personal de largo plazo por el bienestar espiritual de un grupo de creyentes.» 6

2. Características del Don de Pastor:a. Capacidad para amar a las personas genuinamente.b. Habilidad para predicar con claridad y poder del Espíritu Santo.c. Capacidad para conocer el estado espiritual del creyente y motivarlo a dar el

siguiente paso de crecimiento espiritual.d. Capacidad de dirigir y ser seguido por la multitud.e.

Abusos del don de pastor:. aconsejar otras ovejas de otro redil sin el consentimiento de su pastor.Responsabilidades del pastor:

Responsabilidades t buscar pastos: 1 Cr 4:39–41; Sal 23:2; Eze 34:2, 13–14 t suplir agua: Ge 29:2–8; Ex 2:16; Sal 23:2 t protección: 1 S 17:34–36; Sal 23:4; Lc 2:8 t buscar lo perdido: Eze 34:16; Mt 18:12–13 t hacer descansar: Sal 23:2; Cnt 1:7; Je 33:12 t conocer las ovejas: Jn 10:3–5 t cuidar lo herido: Mt 12:11 t cuidado general: Ge 31:38–40; Sal 78:52–53; Is 40:11; Je 31:107

VII. Descubrimiento de sus dones espirituales:

6Deiros, Pablo Alberto: Diccionario Hispano-Americano De La Misión. Casilla, Argentina : COMIBAM Internacional, 19977 LBLA Indice De Topicos. electronic ed. La Habra, CA : Foundation Publications, Inc., 2000

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Referencia Bíblica: Ro 12:3-8; 1 Co. 12: 4-27.Introducción:Descubrir los dones que el Espíritu Santo nos ha dado al momento de creer en el Señor Jesús cómo Salvador personal requiere de nuestra parte mucha diligencia, disposición y oración. Sin embargo le presentare a continuación cuatro pasos que debes observar para descubrir tu don espiritual.Para descubrir tus dones espirituales debes observar las siguientes “F”:

1.- Función Ro. 12:4-5.

1.1 El Ejemplo de un recién nacido: Cuando un niño nace, no sabe coordinar sus miembros y desconoce la función de cada uno de ellos. Así también nosotros, con el ejercicio desarrollamos nuestras habilidades motrices. Para descubrir sus dones y desarrollar sus habilidades ud. Debe involucrarse en su iglesia local y probar en diferentes ministerios. Todos tenemos una función en el cuerpo de Cristo.

1.2 Ningún miembro del cuerpo se mueve si la cabeza no lo autoriza: Dios es la cabeza de la iglesia y el nos ha capacitado y nos manda a cumplir nuestra función en su cuerpo. Dios ha puesto lideres en la iglesia para organizar y guiar su cuerpo busque a su pastor y manifieste su deseo de descubrir su don espiritual. El con gusto le guiará para que Ud. Se desarrolle como un miembro sano.

2. Fervor:

2.1 El gozo en el servicio: Servir a Dios trae mucho gozo. Este es el resultado de una vida de obediencia.

2.2 El gozo en el Don: Este tipo de gozo se experimenta cuando funcionamos en el área del don que poseemos. Es un deseo ardiente de estar allí. Nada produce mayor deseo y gozo que ser utilizado por Dios en esa área.

3. Facilidad:

3.1 Es más fácil agarrar un objeto con las manos que con los pies. Son miembros diseñados y capacitados para realizar diferentes actividades. Cuando uno funciona en el don que se le ha otorgado realiza con naturalidad y destreza las habilidades que Dios le ha dado.

4. Frutos:

4.1 Dios nos usa y se ven resultados. Todos trabajamos en la obra del Señor y tendremos recompensa. Pero cuando uno ejerce su don espiritual hay poder de Dios edificando su iglesia a través de sus siervos.

4.2 Dios es quien merece toda la gloria.

VIII. Discutiendo los Dones Temporales:A. Don de Ciencia:

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CCUESTIONARIOUESTIONARIO PARAPARA D DESCUBRIRESCUBRIR MISMIS D DONESONES

Muy poco

Poco Regular MuchoMuchísi

mo

1.- Soy capaz de organizar ideas, tareas, personas y tiempo para el servicio cristiano

2.- El Espíritu Santo me ha ayudado a animar a la gente a vivir una verdadera vida cristiana.

3.- Me gusta hablar de Jesús a los que no le conocen

4.- Me da gusto proveer alojamiento y no me siento molesto por huéspedes inesperados

5.- Tomo seriamente las peticiones de oración de otros y sigo orando por ellos.

6.- Puedo motivar a grupos a alcanzar objetivos bíblicos Específicos

7.- Tengo la habilidad de mostrar compasión por medio de hechos que realizo con amor y bondad

8.- He rogado que la obra de Dios prospere tanto en la Iglesia como en el mundo.

9.- Me gusta hacer cosas que ayuden a otros a servir efectivamente.

10.- He tenido la responsabilidad de animar a otros creyentes en su vida espiritual, con buenos resultados.

11.- Entienden bien la lección los alumnos (sean adultos o niños) cuando yo la enseño

12.- Me gusta planear actividades en las cuales otras personas están involucradas

13.- Soy sensible a las personas que sufren y que tienen problemas, me gusta ayudarles a ver las respuestas de Dios a los problemas de la vida

14.- Me gustaría poder compartir el evangelio libre y eficazmente con personas no creyentes.

15.- Soy sensible a los actos de amabilidad que hacen sentir a huéspedes y a extranjeros.

16.- Soy sensible a las peticiones de otros y procuro apoyarlos en oración.

17.- Tengo el deseo de ayudar, dirigir y guiar a personas que desean tener un ministerio importante en la iglesia.

18.- Me gustaría ayudar a los que tienen debilidades mentales y físicas.

19.- Tengo un discernimiento espiritual de las

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escrituras y sé relacionarlas a personas y/o cosas, y por eso me gusta compartir o enseñar la Palabra de Dios

20.- Soy sensible a las necesidades de otros y estoy dispuesto a darles ayuda

21.- Estoy preocupado por ver si se llenan las necesidades espirituales de los creyentes y estoy dispuesto a involucrarme personalmente en tareas de discipulado y ministerio

22.- Me gusta ayudar a la gente a entender las cosas de Dios

23.- Soy capaz de hacer planes eficaces para alcanzar metas

24.- He animado a la gente de la comunidad cristiana a amar y hacer buenas obras

25.- Dios me ha usado para guiar a otros a crecer en Cristo como su Salvador

26 Tengo la habilidad de ayudar a extranjeros a sentirse como en casa tanto en mi propio hogar como en la Iglesia.

27.- Oro por otros porque reconozco que la eficacia de su ministerio depende de mis oraciones

28.- Me gusta ayudar a otros a alcanzas sus metas y guiarlos para que crezcan espiritualmente

29.- Me gusta trabajar con personas que sufren de problemas físicos, mentales y emocionales.

30.- He proclamado mensajes urgentes y prácticos de la Palabra de Dios a los perdidos

31.- Me gusta trabajar en cosas pequeñas para ayudar al desarrollo del Cuerpo de Cristo.

32.- Cuando veo una persona descarriada me siento responsable de su bienestar.

33.- Puedo enseñar de una manera sencilla, para que tanto los niños como los adultos entiendan la lección.

34.- Me gustaría supervisar un programa o ministerio en la Iglesia.

35.- Yo creo que las personas llegarán a la madurez espiritual por medio del Consejo e instrucción de la Palabra.

36.- Siento una carga por amigos y conocidos que no creen en Cristo.

37.- Soy más atento a las necesidades de otros que a las mías.

38.- Tengo la convicción de que Dios obra en respuesta a las oraciones, y quiero ser usado para ayudar a otros por medio de mis oraciones.

39.- Si tuviera la oportunidad, me gustaría guiar, dirigir y motivar a otros en algún aspecto de la obra de Dios.

40.- Cuando miro la miseria humana no me repugna sino más bien me estimula a encontrar la manera de expresar el amor de Dios a los que sufren.

41.- Si tuviera oportunidad, me gustaría ser un

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predicador de la Palabra de Dios.42.- Me gusta por naturaleza hacer trabajos que

ayudan a otros a realizar efectivamente sus propias tareas.

43.- Siento en mí una inquietud pastoral cuando me entero de cristianos que necesitan consejo espiritual.

44.- Reconozco en seguida cuando alguien (niño o adulto) no ha entendido claramente la lección.

45.- Poseo el sentido de delegar tareas importantes a las personas indicadas en el tiempo oportuno.

46.- Estoy feliz cuando las personas que necesitan consuelo, consolación, ánimo y consejo vienen a buscarme a mí.

47.-Soy capaz de compartir el evangelio, de tal manera que sea claro y significativo para personas no creyentes

48.- Mi casa siempre está disponible para los que necesita hospedaje.

49.- Son consciente de ministrar a otros mientras oro por ellos

50.- He aceptado las responsabilidades de un líder y he tenido éxito en guiar al grupo hacia su meta.

51.- Las visitas que hago son de ayuda espiritual a los enfermos, inválidos y reclusos.

52.- Dios me ha usado para desarrollar, animar y fortalecer a otros creyentes, hablándoles de la Biblia.

53.- Encuentro frecuentemente maneras prácticas de ayudar a otros y recibo satisfacción al hacerlo.

54.- El Señor me ha usado para cuidar, guiar e instruir a otros creyentes hacia la madurez espiritual.

55.- Puedo captar la atención y el interés de la gente a quien enseño.

56.- Soy capaz de saber cómo y cuándo los proyectos y trabajos deben estar mejor organizados.

57.- Estoy dispuesto a dedicar tiempo cada semana para aconsejar a otros.

58.- Puedo sentir cuando una persona no conoce a Cristo y eso me da dolor.

59.- Tengo un aprecio genuino para cada huésped en mi casa.

60.- Puedo sentir rápidamente cuando un grupo, del cual soy miembro, está perdiendo el tiempo, y quiero hacer algo para cambiarlo.

61.- Me sentiría gozosos si alguien me pidiera ser su compañero de oración para su ministerio.

62.- Tengo la habilidad de saber cuando las personas sufren de una manera u otra.

63.- Yo creo que más creyentes deben involucrarse en discusiones y acciones acerca de las cuestiones morales de hoy, como el aborto, el libertinaje sexual, el racismo, etc.

64.- Me gustaría tener más oportunidad de ayudar a

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otros en sus ministerios. 65.- Me gustaría poder capacitar a los creyentes para

la obra en sus ministerios.66.-Me emociona aumentar mis conocimientos de la

Palabra de Dios.

67. Me gusta enseñar de manera sistemática la palabra de Dios.

68. Me gusta trabajar sin que nadie más lo sepa y

encargarme de todos los detalles.

69. Normalmente, tomo control de cualquier situación y

me gusta asumir el papel de “líder.”

70. Cuando estoy en un grupo, trato de involucrar los

que están solos y ellos se involucran

gustosamente.

71. Tengo la habilidad de reconocer necesidades y

suplirlas de manera efectiva.

72. Tengo la habilidad de organizar ideas, gente, y

proyectos para lograr una meta.

73. Me gusta ayudar a los demás.

74. Me gusta donar dinero a los necesitan ayuda.

75. Me gusta visitar a la gente en los hospitales, los

que no pueden salir de sus casas, y los que viven

en hogares de ancianos.

76. Me gusta aconsejar a los demás.

77. Tengo la habilidad de estudiar bien la fe, y luego

compartirla con los demás.

78. Disfruto cada día de mi vida.

79. Otros me respetan en los asuntos espirituales.

80. Puedo manejar bien los asuntos financieros.

81. Me gusta pasar tiempo con los que no son

cristianos para así compartir la fe con ellos

82. Normalmente, tomo control de cualquier situación y

me gusta asumir el papel de “líder.”

83. Cuando estoy en un grupo, trato de involucrar los

que están solos y ellos se involucran

gustosamente.

84. Tengo la habilidad de reconocer necesidades y

suplirlas de manera efectiva.

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85. Tengo la habilidad de organizar ideas, gente, y

proyectos para lograr una meta.

86. Me gusta ayudar a los demás.

87. Me gusta donar dinero a los necesitan ayuda.

88. Me gusta visitar a la gente en los hospitales, los

que no pueden salir de sus casas, y los que viven

en hogares de ancianos.

89. Me gusta aconsejar a los demás.

90. Tengo la habilidad de estudiar bien la fe, y luego

compartirla con los demás.

91. Disfruto cada día de mi vida.

92. Otros me respetan en los asuntos espirituales.

93. Puedo manejar bien los asuntos financieros.

94. Me gusta pasar tiempo con los que no son

cristianos para así compartir la fe con ellos

95. Me gustaría ayudar al pastor u otros líderes de la

iglesia para que ellos puedan tener más tiempo

libre.

96. No me molesta pedir ayuda de los demás por el

bien de la iglesia.

97. Me gusta tener huéspedes en mi casa y hacerlos

sentir cómodos.

98. Me gusta servir a los demás, no importa que tan

pequeña la tarea.

99. Soy una persona muy organizada que logra sus

metas por medio de planes detallados.

100. Muchas veces me pongo a lograr los proyectos a

que los demás no se atreven, y normalmente todo

sale bien.

101. Me gusta orar por los que están enfermos, con la

esperanza que Dios les vaya a sanar.

102. Con gusto ofrendo dinero a la iglesia.

103. Siento compasión por los que están adoloridos y

solos, y me gusta pasar tiempo con ellos para

hacerles sentir mejor.

104. En cierta ocasión, creo que Dios me dio la

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fortaleza de escoger entre varias opciones

complejas cuando nadie más sabia que hacer.

105. Me gusta estudiar las preguntas más difíciles

sobre la Doctrina, y encuentro las respuestas más

rápido que los demás.

106. Mucha gente me cuenta sus problemas, y yo les

aconsejo.

107. Cuando una pregunta sobre la fe se sugiere, me

siento motivado de encontrar una respuesta.

108. Me gusta dedicar mis ratos libres para ayudar a

los demás.

109. Me gustaría encargarme de un proyecto especial

para la iglesia.

110. Puedo ver como las cosas van a salir al largo

plazo y me gusta organizar todo para poder lograr

un reto especial.

111. Me parece fácil compartir mi fe con los demás

112. Creo que orar es la actividad más importante para

la gente cristiana.

113. Me gusta aliviar los demás de tareas pequeñas

para que ellos se puedan dedicar a otras cosas

más difíciles.

114. Puedo guiar y manejar bien un grupo de gente

hacia el logro de una meta especial.

115. Me gusta conocer a los recién llegados de otros

países y presentarlos al grupo.

116. Puedo asignar tareas a los demás.

117. Mucha gente confía en mí y me hablan de sus

problemas personales.

118. A pesar de la gravidez de la situación, confío en

Dios.

119. Me gusta servir a los demás.

120. Me siento cómodo al estar frente de grupos en

público.

121. Me siento bien cuando puedo hacer algo para los

demás.

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122. No me molestaría hacer sacrificios por el bien de

la iglesia y de los pobres.

123. Quiero hacer todo lo posible para ayudar a los

demás, aunque sea necesario hacer sacrificios

(tiempo, dinero, cosas materiales, etc.).

124. Mucha gente me busca para que yo les dé

consejos cuando no saben que hacer.

125. Tengo la habilidad de buscar información de

varias fuentes y así obtener una respuesta

concreta a cualquier pregunta y aprender más

sobre el tema.

126. Siento que podía motivar a los demás a aceptar la

fe sin criticarlos.

127. Los demás me escuchan y me gusta enseñarles

de la fe.

128. Me gusta trabajar con los jóvenes y ayudarlos a

crecer bien como deberían.

129. Tengo la habilidad de manejar bien asuntos

financieros y establecer cuales son mis prioridades.

130. Me gusta compartir la fe e invitar a los demás a

asistir a los eventos de la iglesia.

131. Dios ha respondido a mis oraciones para los

demás.

132. Me gusta ayudar a los demás a lograr sus retos y

no necesito mucha atención pública.

133. Los demás respetan mi opinión y cuando decido

algo, me siguen.

134. Me gusta ofrecerles la bienvenida a los que visitan

la iglesia.

135. Me gusta ayudar a los demás con sus

necesidades y siento que he logrado algo cuando

las puedo solucionar.

136. Me siento cómodo haciendo decisiones a pesar

de situaciones estresantes.

137. Me gusta contribuir al futuro de la iglesia y trabajar

para lograr retos por su bien.

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138. Me llevo bien con los demás.

139. Me siento cómodo al hablar frente de grupos de

gente en lugares públicos.

140. La Biblia me parece importante.

141. Muchas veces prefiero donar dinero sin que nadie

más sepa y en cambio no espero nada.

142. Cuando alguien comenta de una persona que no

puede pagar las cuentas de luz o agua, hago todo

lo posible para ayudar.

143. Entiendo pasajes bíblicos complejos y se las

puedo explicar bien a los demás.

144. Mucha gente me cuenta cosas que no contarían a

nadie más y sé escuchar bien de una manera

comprensiva.

145. Me gusta pasar tiempo con grupos de gente.

146. Me gusta ayudar a los adolescentes que luchan

contra los vicios populares en la vida moderna, y

creo que les puedo guiar hacia una relación

espiritual con Dios.

147. Me encantaría tener la oportunidad de compartir la

fe con los demás.

148. Puedo motivar a los demás.

149. ¿Sientes la necesidad de llevar a todas las naciones y pueblos la palabra de Dios?

150. ¿Te agradan los grupos pequeños?

151. ¿Sientes que Dios quiere usarte en muchos lugares?

152. ¿Esta en tu animo siempre ayudar a aquellos que se encuentran en necesidad?

153. ¿Cuando hablas con una persona puedes detectar rápidamente la necesidad?

154. ¿Sientes alegría ayudando?

155. ¿Sin darte cuenta te ves involucrado ayudando sin pensarlo antes?

156. ¿Tienes facilidad para conocer a las personas rápidamente?

157. ¿Has experimentado alguna vez que puedes darte cuenta las intenciones de las personas?

158. ¿Es claro en tu vida que las personas actúan influenciada por espíritus malos, puedes darte cuenta en estos casos?

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159. ¿Frente a los que padecen enfermedades tienes el deseo de orar por ellos para que se sanen?

160. ¿Cuando oras por un enfermo tienes suficiente fe para esto?

161. ¿Al orar por los enfermos estas dispuesto/a a reconocer la voluntad de Dios, para que lo sane o no?

162. ¿Oraste por algún enfermo alguna vez?

163. ¿Frente a una persona que no conoces sientes el fuerte deseo de hablarle de Cristo?

164. ¿Te preocupa mucho la salvación de las personas?

165. ¿Tienes facilidad para entrar en temas religiosos?

166. ¿Conoces el plan de salvación claramente o te gustaría conocerlo?

167. ¿Puedes escuchar a las personas en sus necesidades con toda paciencia?

168 ¿Puedes decir las cosas de forma amorosa sin lastimar a quien te está oyendo?

169. ¿Cuando alguien se encuentra en pecado, te sientes capaz de exhortarlo y recordando que tu también eres pecador?

170. ¿Sientes amor extremo por los que están en pecado y el deseo de ayudarlos?

171. ¿Al leer Hebreos 11:1 Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. ¿Es la fe para ti un arma que puedes usar en todo momento?

172. ¿Luego de orar por alguien o por algo puedes descansar confiadamente, sabiendo que esto será?

173. ¿Si oras y no hay respuesta como esperabas, te desanimas rápidamente?

174. ¿Hay una gran responsabilidad de tu parte por las cosas, del reino de Dios?

175. ¿Piensas que todo lo relacionado a la iglesia debe hacerse eficazmente, o lo mejor que se pueda?

176. ¿Las finanzas de la Iglesia son tan importantes de atenderlas convenientemente como las tuyas propias?

177. ¿Crees que se debe invertir en las cosas del reino un poco?

178. ¿Te gusta enseñar a otros con toda paciencia?

179. ¿Te parece muy importante la capacitación en la Iglesia, tanto que siempre estas pensando que hacer al respecto?

180. ¿Puedes trabajar con niños y enseñarles?

181. ¿Cuando alguien esta en gran necesidad, puedes ayudarlo a pesar de que sea su culpa por lo que esta pasando?

182. ¿Sientes amor extremo por el que sufre?

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183. ¿Eres sensible frente al dolor ajeno?

184. ¿Estas dispuesto a orar por milagros, sabiendo que tendrás respuesta?

185. ¿Te interesa la investigación y dedicas tiempo a esto?

186. ¿Adquieres conocimientos fácilmente?

187. ¿Experimentas que tus palabras ayudan a los que en un momento las necesitan?

188. ¿A veces no puedes explicar como salió ese pensamiento de tu cabeza, con tanta sabiduría?

189. ¿Te preocupa cuando algún hermano no va a la Iglesia?

190. ¿Sientes responsabilidad por los que se alejan de los caminos del Señor?

191.¿Puedes notar cuando alguien esta con dificultades?

192. ¿Puedes intermediar frente al problema de dos hermanos?

193. ¿Te sientes bien cuando estas dirigiendo un grupo?

194. ¿Eres espontáneo y exteriorizas tus sentimientos ante las personas?

195. ¿Crees que la oración es un ministerio para ti?

196. ¿El servir a los hermanos y en el templo es algo en lo que encuentras alegría?

197. ¿Si alguien necesita ayuda es algo irresistible para ti?

198. ¿Puedes ayudar a otros incluso abandonando tus propias necesidades, sin sentirte mal por esto?

199. ¿Te gusta preparar las cosas en el templo antes que la reunión comience?

200. ¿El servicio implica alegría y gozo, crees que esto se aplica a tu vida?

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El Enfoque Biblico de Los Dones Espirituales

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