UN PAÍS CUATRO IDEAS

EL NÍGERNavega en pinaza

y contemplalas puestas de sol.

MOPTIPiérdete en su

mercado y disfru-ta con su puerto.

Para entrarPasaporte y visado.

IdiomaEl francés es la len-

gua oficial, y el bam-

bara, el idioma

nacional.MonedaFranco CFA.

1 € = 650 CFA.

Para llamarA España: 00 34 + nº.

A Mali: 00 223 + nº.

Electricidad220 v.SanidadEs obligatoria la

vacuna de fiebre

amarilla y recomen-

dable la profilaxis de

la malaria. ClimaTropical. EmbajadaEn París: ☎ 00 33

1 45 48 58 43.

P A S A P O R T E

MALIMALI

Mali es uno de losgrandes descono-cidos del conti-nente africano.

Este país es dos veces Españay está situado al sur deldesierto del Sahara y el ríoNíger, que lo cruza de parte aparte, es el corazón que le dala vida al país. El mejormomento para visitarlo esdurante la estación seca, deoctubre a marzo. Los mosqui-tos han desaparecido y, aun-que las temperaturas sonaltas, no llegan a ser asfixian-tes. Además, el río sigue sien-do navegable en casi todo surecorrido. El país es muy tran-quilo, pero debido a su buro-cracia y los habituales contro-les aduaneros y policiales enlas carreteras, lo mejor es ircon un viaje organizado.Catai Tours (De venta enagencias. www.catai.es) dispo-ne de un programa completo(Bamako, Ségou, Mopti, Djen-né y País Dogón), de nuevedías desde 1.665 €.

MAR

RUEC

MAURITANIA

ARGELIA

NIGER

BURKINAFASO

GHANABENIN

N

0 400 km

BAMAKO

MoptiDjennéSégou

Koutiala

NampalaNioro

Kayes

Sikasso

Bougouni

Tombuctú

Taoudenni

Gao

Arcfis

TessalicMALI

RíoNí

ger

S a h a r a

Argelia

Marruecos

Niger

Nigeria

MaliMauritania

Costade

Marfil

Mezquitaen una aldea aorillas del Níger.

TEXTO Y FOTOS

Julián Dueñas

El encanto de ÁfricaEl encanto de ÁfricaAl otro lado del Sahara hay un país quedurante siglos atrapó la imaginación deaventureros. Descubre ciudades comoTombuctú, pasea por animados mercados,admira la falla de Bandiágara o surca lasaguas del río Níger.

Al otro lado del Sahara hay un país quedurante siglos atrapó la imaginación deaventureros. Descubre ciudades comoTombuctú, pasea por animados mercados,admira la falla de Bandiágara o surca lasaguas del río Níger. PAÍS DOGÓN

Contempla las mara-villas de un mundo

perdido.

DJENNÉ Una ciudadde barro con un

mercado tentador.

El Níger es uno de los ríosmás singulares y miste-riosos de toda África.

Tiene una longitud de 4.200km, de los cuales 1.700 perte-necen al territorio de Mali.Durante decenios se convirtióen la obsesión de los primerosexploradores europeos quie-nes, finalmente, dieron con susecreto. El río, al contrario delo que marcaba la lógica, dis-curría en dirección al desierto.Su escaso desnivel, apenas 2metros en 700 km, y su limita-da profundidad, unos 4 metrosen las zonas más profundas, lohace un río extremadamenteplácido para la navegación. Laspuestas de sol son únicas, aun-que, ojo, duran un suspiro.

Todas las rutas turísticas deMali siguen el trazado del Níger,ya sea por la única carreteraasfaltada del país o en barco.Bamako, la capital del país esel punto de partida. La ciudadestá rodeada por tres montañas,

la de la Sabiduría, pues en ellaestá ubicada la Universidad; ladel Poder, donde se encuentrael palacio Presidencial; y la de laSalud, que alberga el hospitalde la ciudad. Si te apetecemoverte, una buena forma detransporte son los autobusesurbanos. El paseo te costará0,19 €. Durante la visita nodejes de pasar por el museoNacional de Mali (Route deKoulouba. ☎ 223 222 34 86.4,61 € con guía y 3,84 € singuía) renovado y ampliado en2003, y el mercado de feti-ches, toda una experiencia.Olvida aquí las fotos si no quie-res tener problemas. Aunque elpaís practica el islam, el 100%de la población se declara, extra-oficialmente, animista.

Tu siguiente parada esSégou. En el camino podrás

disfrutar con la visión de lasabana africana y los impresio-nantes baobabs. Haz un alto enel camino y acércate a la aldea

de Segoukoro. Fue durantesiglos la residencia de los empe-radores bambara y en ella pue-des visitar, junto al río, la anti-gua mezquita de Ba SunuSacko, madre de uno de susreyes, de estilo sudanés. Antes,eso sí, deberás rendir pleitesíaal jefe del poblado y acostum-brarte a oir una y otra vez laincansable frase de los niños:“Tubabu, saba, le bic; saba, lecadeau” (Blanco, un boli, unregalo). Ségou, a 235 km deBamako, fue cuna y sede delimperio bambara durante elsiglo XVIII. Hoy es un destinotranquilo y poco turístico. En

Recorrido en pinaza

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El ríode la vidaAldeas depescadores yatardeceres

UN PAÍS, CUATRO IDEAS MALI

LLÉVATE UN BOGOLAN

Pélengana, junto a la carrete-ra, se encuentra la mejor tien-da de bogolanes, el tradicionaltejido de algodón teñido conbarro y plantas. Aquí no hayopción de regateo, pero la cali-dad está asegurada.

La última parada antes de lle-gar a Mopti es San, capital de laetnia bobo. Aunque está algoalejada del río, su mezquita es,salvando las distancias, muysimilar a la de Djenné y mere-ce la pena visitar su mercado.

El tradicional tejidode algodón teñido

con barro y plantas esel mejor regalo quepuedes llevar a casa.Los tienes de todas lasformas y colores, perodos de las mejoresopciones son los fula-res y los cobertores. El

mejor lugar para com-prarlos es Ségou. Aquíse encuentra el con-servatorio de técni-cas de tintura natural(☎ 232 17 25), dondepodrás ver todo elproceso. Puedes com-prarlos en la tiendacercana que ellos mis-

mos regentan (preciosfijos). Eso sí, la cali-dad, tanto del tejidocomo del color, esinsuperable. Tenlo pre-sente porque no sepueden lavar. Un pre-cio orientativo oscilaentre 10 € 40 €, aun-que los hay más caros.

En Bamako: hotel Salam(B.P. 104. ☎ 223 222 12 00.Desde 120 €). Un hotel de 4estrellas al más puro estilooccidental. En San: hotelTeriya. Muy sencillo.Habitación doble, desde 11 €.

En Bamako: restaurante SanToro (Route de Koulikoro.Desde 15 € sin bebidas).Precioso, de altos techos ycon un encantador airedecadente. Con música envivo; también tiene jardín yterraza. Echa un ojo a sugalería de regalos.

Com

erDo

rmir

En Mopti puedes navegar por el Níger(unos 300 € por pinaza para 10/15 perso-nas) y visitar unas aldeas peul y bobo.

Aunque no lo parezca,la ciudad de Djennées una isla en medio

del río Bani. Para llegar aella es por tanto necesariotomar primero un pequeñoferry. El tráfico de una orillaa otra es constante, por loque la espera no es muylarga. Aprovéchala y disfru-ta del espectáculo, porque esen lugares como este dondese aprecia la verdadera Áfri-ca. El pasaje es gratuito parapersonas y animales, mien-tras que los vehículos debenpagar. El barco es una meracubierta, sin asientos, por loque conviene coger un sitiocuanto antes, especialmentelos lunes, el día que se cele-bra el mercado.

Desde la orilla, 3 km teseparan de la ciudad. A unlado del camino podrás verla antigua Djenné-Jeno,considerada la primera ciu-dad de África y hoy bajo lapiqueta de los arqueólogos.Ya en tierra, dos son los pun-tos que acapararán tu aten-ción: la Gran Mezquita y elmercado. Ambos han sidodeclarados Patrimonio de laHumanidad por la Unesco.La ciudad carece de sistemade alcantarillado. Mentalíza-te pronto si no quieres lle-varte una desagradable sor-presa. La Gran Mezquita esel icono más conocido deMali. Es el edificio de barro

más grande del mundo y fueconstruido en 1905, aunquesu diseño data del siglo XI.Los no musulmanes no pue-den acceder al interior, aun-que si cuentas con un buenguía es posible que lo logres.La razón no es religiosa, sinouna medida adoptada des-pués de que una firma occi-dental filmara un anunciopara la televisión en su inte-rior. No te preocupes si noentras, las vistas exterioresson magníficas.

El espectáculo de Djennéestá fuera, en el mercado.Piérdete entre los puestos,mira y toca aquí y allá. Verásgente de todas las etnias del

país (peul, bozos, bambara,marka, malinké o rimaibe).Los vendedores agobianmenos que en otras partes,por lo que podrás movertetranquilo. Para conseguir lamejor vista, sube a uno delos tejados adyacentes, tetraerás de recuerdo unasfotos inigualables.

DjennéMezquitas y mercados

Sueños de barro

En Dejenné puedes comprar bogolan (tejidoartesano) en la Cooperativa de mujeres.Son más bastos y de peor calidad que los deSégou, pero también más baratos.

LA BIBLIOTECA DE TOMBUCTÚ

Más allá de susreminiscencias

históricas y literarias,Tombuctú no tienemucho que ofrecer.Sin embargo, en losúltimos años hay unedificio muy ligado ala historia de Españaque no debes perder-

te: la biblioteca FondoKatî. Es el único fondodocumental conocidosobre el exilio de losexpulsados por los

Reyes Católicos.También puedes ojearel libro Los otros espa-ñoles. Los manuscritosde Tombuctú: españo-les en el Níger, del exministro ManuelPimentel y de IsmaelDiadié (MR Ediciones. 17 €).

El hotel Le Campement(☎ 223 420 090) es unoasis de verdor y tranquili-dad, a un paso del merca-do y la mezquita. Modestopero con un agradablepatio cubierto. Desde 15€/habitación con baño.

La mejor opción es ChezBaba. Preparan comidalocal, especialmente bro-chetas de pollo con arroz(3 €, sin bebida). Encargalos platos con tiempo.

Com

erDo

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En aguas del ríoNíger, a su pasopor Mopti.

Mujer con lavestimentatradicional.

Mercado deDjenné. Al fondo,la mezquita.

Mezquita deBa Sunu Sacko,

en Ségou.

La falla Bandiágara es unamaravilla natural. En sus240 km de longitud convi-

ven hasta 33 dialectos diferentes.Está situada a tan sólo 130 km deMopti, pero una nueva carrete-ra permite llegar a ella en menosde una hora. Una vez aquí, el tra-yecto sólo es posible en 4x4. Estásen pleno País Dogón, el territo-rio de la tribu de los dogones, yentrar en la falla es como entraren otro mundo. No en vano laUnesco lo ha declarado Patrimo-nio de la Humanidad. Verás acan-tilados de más de 300 m, impre-sionantes cascadas, pueblosmimetizados con el paisaje, ycampos de mijo o cebollas llenosde gente cultivando. La imagende miseria visible en gran partede las márgenes del Níger desa-parece por completo en estemundo aislado y remoto.

CASAS COLGANTESLa aldea de Banani marca elinicio del recorrido. Por ser la

puerta de entrada está llena devendedores que intentaráncolocarte los más insospechadosrecuerdos. Lo mejor de Bananies su espectacular cascada y lascasas de los tellem, los hombre-cillos rojos, una especie de pig-

meos que eran los antiguoshabitantes de la zona. Sus casas,una especie de cuevas colgadasen los acantilados, son utiliza-das hoy a modo de sepulcros.Algo más alejado está Irely; esel pueblo más bonito de la falla.

COMIENZA LA AVENTURAPero será en Tireli donde vivi-rás tu mejor experiencia. Antestendrás que trepar por la mon-taña: no olvides llevar agua, lavas a necesitar. Una vez arriba,fíjate en sus tradicionales caba-ñas de barro y prepárate paracontemplar el espectáculo deuna danza de máscaras dogón.Tradicionalmente se realiza cada60 años, pero hoy es tal el recla-mo turístico que no dudan enrealizarlas en cualquier momen-to. Entre baile y baile, no pier-das de vista las caras de miedode los niños (estas danzas sonrituales funerarios).

Los ancianos dogón suelenreunirse en la toguná, o casa dela palabra. La identificarás rápi-damente por su bajísimo techo.La razón es que la altura impidea los hombres ponerse en piecuando las discusiones suben detono. Si quieres ganarte su gra-

titud y respeto, llévales unpuñado de nueces de cola, unaespecie de almendra rojiza conefectos alucinógenos. Las pue-des conseguir en cualquier mer-cado.

El recorrido por la falla termi-na en la aldea de Songo. Aquíconseguirás una de las mejoresvistas de la falla. Después de unapequeña caminata podrás con-

Un mundo feliz

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MÁSCARAS Y PUERTAS

El otro gran souvenir que ofre-ce Mali son las máscaras y las

puertas dogón. Entre tanta ofer-ta encontrar una que realmentemerezca la pena no es fácil.Están hechas de madera talladay se consideran símbolos deprotección. Antiguamente, estaspuertas se colocaban en los gra-neros y están talladas con imá-genes de mitos. Las máscarasdogón son enormes y evocanlos ancestros del hombre y lamujer. Los precios varían segúntu habilidad negociadora, eltamaño y la calidad. Puedes lle-varte una pieza decente desde24 €.

País DogónRecorrido en 4x4 porla falla Bandiágara

El país Dogón es perfecto para hacer rutas apie. Las hay de un día, dos, tres y seis. Elrecorrido te llevará de Sanga a Banani.

Hotel Kambary-Hotel ChavalBlanc (☎ 223 244 23 88. Desde40 €). Regentado por un suizo. Su

construcción externa e interna esuna maravilla. Entrar a la piscina tecostará 1,55 €.

Hotel Kambary (☎ 223 244 2388). Su restaurante está espe-cializado en cocina internacio-

nal y africana. El menú te cos-tará unos 8 €, y el plato deldía, alrededor de 5 €. Co

mer

Dorm

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LOS OLORESLA GENTE BEBER AGUA SIN EMBOTELLAR

templar sus pinturas rupestres.Los colores simbolizan aspectosde la vida. Así, el negro es lainfancia, el rojo el sufrimientoy el blanco la esperanza. Junto aellas se lleva a cabo cada tresaños la tradicional ceremonia decircuncisión de los niños.

Se la define en las guíascomo la Venecia Negrapero, salvo algún que otro

barrio inundado por la crecidade las aguas, las comparacionescon la ciudad italiana se acabanaquí. Está situada en la uniónde los ríos Níger y Bani, lo queconvierte a su puerto fluvial enuno de los más animados ybulliciosos de todo el país. Laciudad está dividida en la partevieja y la parte nueva, esta últi-ma es resultado de la presenciacolonial francesa. Entre ambas:campos de arroz y pantanosque se inundan según la épocadel año. Acércate al bar Bozo,junto a uno de los laterales delpuerto. Este es uno de los luga-res preferidos por los turistas.Desde su terraza podrás con-templar con tranquilidad elconstante ir y venir de las pina-zas (barcazas típicas). De aquíparten los barcos hacia Tom-buctú y Gao, y aquí llegancentenares de gentes cargadascon los productos que se ven-den en los mercados de la ciu-dad. El espectáculo es magní-fico. Prueba la especialidad dela casa, las brochetas de capi-tán, un pescado.

EMPÁPATE DEL AMBIENTEJunto al bar Bozo se encuentralos talleres de reparación de laspinazas. No es más que unpequeño cobertizo, pero el pro-ceso de producción en cadenaes digno de verse. A un paso

está el mercado más impor-tante de la ciudad. Prepárateporque el acoso de los vende-dores es continuo y el regateouna obligación. Un consejo:paga las consumiciones en elbar del hotel con billetes gran-des, así conseguirás billetespequeños con los que moverteen los mercados.

Algo más alejado, en un edi-ficio de dos pisos, está el llama-do mercado de las mujeres.Aquí podrás comprar desdefrutas y verduras, hasta tallasde madera. En el piso de arri-ba encontrarás el llamadomercado de Suguni, repletode pequeñas tiendas con pro-ductos en cuero y todo tipo de

baratijas. Como referencia, unbuen precio para un par decollares hechos a mano rondalos 6 €. No muy lejos de aquíestá el mercado de artesanía,donde te harán una camisa enun abrir y cerrar de ojos.

La otra gran atracción deMopti es el barrio antiguo deTaikiri. El barrio es un entra-mado de estrechas callejuelascon paredes de barro donde noexisten las canalizaciones ni elagua corriente. Sus habitantesson peul, una de las etnias queconviven en Mali.

La reina de África

MoptiUn granpuerto

Kanaga Hotel (B.P. 224Mopti. ☎ 223 430 500. Email:kanaga@bambara-com). Lomejor de la ciudad. Pequeño yacogedor, está situado juntoal río. Dispone de piscina, aire

acondicionado y sala de baile alaire libre. Las habitacionescuentan con televisión y baño.En su restaurante podrás pro-bar lo mejor de la cocinamaliense.

Restaurante Sigui. Está juntoa la las tiendas tuareg, cercadel puerto de Mopti.

Aquí puedes comer por unos 5 € (las bebidas aparte) bro-chetas y pescado de río.

Entre las numerosas sorpresasque esconde el barrio de

Taikiri destaca sin duda la de lospendientes fula. Antiguamentelos llevaban las mujeres máspudientes de la tribu como sím-bolo de riqueza. Eran de metalestan pesados que en ocasiones seataban a una cinta que los sujeta-ba por encima de la cabeza. Lavieja tradición es hoy un granespectáculo para los turistas.Haz todas las fotos que quieras y,aunque no es obligatorio, noolvides dejar algo de dinero.

PENDIENTES FULA

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El bar Bozo es ideal para descansar (un refresco, 1 €, y una botella de agua 1,5 €).

Aldea de Banani,a la entrada de la

falla de Bandiágara.Cascada de Banani, de 300 m.

Pinturas rupestressagradas de Songo.

Mujer del barriode Taikiri conpendientes fula.

Preparados para la danza de máscaras.