El cajón de los poemas acrósticos

203

Transcript of El cajón de los poemas acrósticos

Page 1: El cajón de los poemas acrósticos
Page 2: El cajón de los poemas acrósticos

PRÓLOGO

Es muy difícil crear un acróstico. Me refiero no ya a un poema caprichoso de un rato de asueto a vuelapluma, sino a una edificación sólida y consistente, con palabras consecuentes, a un acróstico que además cuenta, que dice, que produce sensaciones o remueve sentimientos o pasiones; pero, si además, el poema rima, si es posible, o si lo enhebra el poeta con reflexiones fundamentadas sobre temas trascendentes, la cosa toma cuerpo y merece la pena, como se da en el caso de este poemario de Santiago, un autor que ya en 1989 fuera premio nacional de poesía.

He encontrado en este relicario de belleza y solemnidades formas presentes, actuales y cotidianas, que aluden a la televisión, a la droga, a la religión, a la cultura, en fin que es muy difícil leer este poemario tan original sin encontrarse con algo que no esté presente en nuestro devenir diario, en nuestra cultura, en nuestra ideología, en nuestro pensamiento.

Hay un apartado de homenajes que nuestro poeta dedica a ilustres trianeros, sevillanos, amigos y familiares, dejando en cada uno de ellos el canto amistoso, cordial, cálido, entre los que me han impresionado alguno como el ofrecido a Pepe Sabin, nuestro recordado guitarrista, y algún otro, incluyendo el que ofrece a mi persona, y el cual lo riza construyendo un soneto, o a Perejil, flamencos, poetas clásicos y contemporáneos o hasta al mismísimo Aníbal González.

Otros capitulo notables son, por ejemplo, el dedicado a Higuera de la Sierra, pueblo donde Santiago vela sus armas en estío, o a su siempre presente Triana, a las estaciones, a la institución literario Noches del Baratillo, o a la mismísima muerte.

Acompaña Santiago estas composiciones breves y concisas, con unas imágenes inherentes a cada tema, que sostienen la página antes de pasarla en la búsqueda de algún detalle que se nos haya podido escapar, y que nos hace volver la mirada hacia atrás en su búsqueda.

He hallado también lamentaciones y quejas; sobre la situación política, la sinrazón de las injusticias en la tierra, de situaciones límite, abundando en el capítulo dedicado a las lacras, un repaso analítico y acusador de los males del mundo, pero que transmiten a la vez la limpieza de ese cristal limpio y diáfano que es el alma del autor, santo y seña de los sentires y sentimientos de quien los escribe.

La generalidad es el verso rimado, abundando los octosílabos; hay poemas en este libro que rayan la perfección lírica, y otros que contienen bellas metáforas; la sorpresa se halla en el final, donde hace una invitación a rellenar un último acróstico

Page 3: El cajón de los poemas acrósticos

con su nombre, tentación que nunca dejaría pasar tratándose de quien se trata. Helo aquí.

S é que quizás el juglarA quien dedico este envío N unca me va a perdonar T an singular desafío: I ncluir en este míoA cróstico temerario: G racias por tu poderíoO talento literario.

José Luis Tirado Fernández

Diciembre 2015

Page 4: El cajón de los poemas acrósticos

L legó el momento ansiado,A yer y mañana unidos,

I ntrísecos, bienaventurados,N ecesidad de unos pactadosT extos muy bien definidos,R emembranzas aleatoriasO lvidadas por la historiaD e mil gozos conocidos,U rdimbre que enlazaríaC alor sin sombra de umbría,C onciencia en solfa de ungidos,I nicio del caminar más latente,O casión para que la genteN ote el sendero pulido.

Page 5: El cajón de los poemas acrósticos

T R I A N A

Archivo 1

T oda ella es tolerancia

Page 6: El cajón de los poemas acrósticos

R esignación y sacrificio,I ncluso cuando de oficioA tacan su ser con ansia,N unca es la beligeranciaA rma de su frontispicio.

Archivo 2

P eineta cuando las aguasU ngen tu cuerpo florido,E nredando en el sentidoN atural de tus enaguasT odo el calor de la fragua,E l color de lo encendido,

D e todo un tiempo vividoE n el amor de tu agua.

Page 7: El cajón de los poemas acrósticos

T acón cuando con tembloresR epicas por sevillanasI ncitando a los amores,A quellos que en tu TrianaN acen por entre las floresA biertas de tus mañanas.

Archivo 3L os rayos del sol le vistenA maneceres de ensueño.

C ollares de espumas blancasA lrededor de su cuelloP one un GuadalquivirI nspirador y bohemio;L a barandilla del puenteL ate junto a su cuerpo,I gual que los besosT iernos que le regala su genteA cercándose a su suelo.

D erecha, lado del río,E n donde Anibal González,L evantó su señorío.

C aché de Giralda mora.A rabe Torre del Oro.

Page 8: El cajón de los poemas acrósticos

R eflejos que así atesoranM orada catedraliciaE n donde está la SeñoraN uestra del Carmen Bendita.

Archivo 4

D iscurre el GuadalquivirO rillando sentimientosS evillanos y trianeros...

¿O acaso no es mensajeroR izando con su bravura:I lusión, duende, ternura,L atir de este pueblo sabio,L ocura cuando en los labiosA rden febril las tersuras,S anto y seña de este barrio?

Page 9: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 5E ntre Rocío, Fabié,L a Pureza y la calle Arfián

B arajadas entre otras,A l barrio le nació un barrio,R ótulo: San Sebastián,R ecordando aquella historiaI mposible de olvidar,O bligada en las memorias.

S iendo parte principalA quella zona alfarera,N aciole a ella la mar...

S e cambió para fabricar:E nsambles, lonas, arpilleras,B aufeles y gallardetes,A demás de que en su riberaS obre los recios mochetes,T rabajaban las maderas

Page 10: El cajón de los poemas acrósticos

I mponentes mozalbetesA los que alguna galeraN ecesitaría en un brete.

Archivo 6

E brio de sol y de sal;L úcido por la gracia y la luz.

J alón de aquel arrabalA l que la historia tendráR ecuerdos grandilocuentesD e cuando toda la genteI nclita del descubrimiento,N avegó llevando al vientoC ontribución y sentido...I nutil hoy, y herido;L agrimando entre basuras.L ástima de esa locuraO rexia de tanto olvido.

Page 11: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 7

E n esta margen derecha,L a luz del amanecer

P rende sobre el arrabalA lumbrando sus paredes,S eñal de que ahora puedeE n su empedrado mostrarO bras de su artesanía...

D icen que antaño allí habíaE lán de un pescar diferente

L iderando aquella orilla,A lquizares y barquillas,

O rgullo de toda su gente.

Page 12: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 8

E stá a la entrada del puente,L igado a la capillita...

M erece la pena verloE n san Jorge o en castilla;R azones no han de faltarC uando la misma SevillaA cude a él a comprarD iciéndole entre coplillas:¡O zú, que gusto me da!

D esde aquel tiempo pasado,E se tiempo inmemorial,

T odo su cuerpo ha cambiado;R ecuerdos vienen y vanI ncitando este mercadoA l decir de los demás:N unca imaginé soterradoA l castillo musulmán.

Page 13: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 9E l corazón en un puño...L egado de aquel momento

C on el que mil sufrimientosA cosaron a TrianaL os malditos esperpentos;L lenándola de pavor,E nsuciándole su almaJ amás vista en tanto horror,O también el corazónN ecesitando agripalma.

D estructores dominicos,E ndemoniados malditos,

L eviatanes que entre engaños,A fe que durante añosI nquisidores nocivos,N otorios y corrosivos,Q uitaron en los aledañosU nión de castillo y río,I nfinidad de quimeras.S anto Oficio que a la veraI nmediata de un bujíoC arente de humanidad,I ncordiaba a este arrabal

Page 14: El cajón de los poemas acrósticos

O freciéndolo a aquél tríoN acido de la maldad.

Archivo 10L ugar de separaciónA civiles y gitanos.

C uéntanos hoy la historia,R imando con la memoriaU bérrima de aquel aria,Z aguán de la antigua ermita

D e nombre La Candelaria.E n compás de San Jacinto,

S ímbolo de humilladero,A l fin de Santo Domingo,N ació de nuevo a la vida.

J aculatoria prendidaA l amor de aquella gente,C abal, sencilla y valiente,I nclita de un arrabalN atural de un sentimiento,T allo que brotó en el tiempoO rgullo de su verdad.

L a sin par Sacra Familia. Archivo 11A sí fue siempre nombrada.

Page 15: El cajón de los poemas acrósticos

P ara que en verdad se sepaL o que ella es para Triana,A unando aquellos recuerdos,Z arandearé mi memoria,U rdimbre que hiciera historiaE n este bendito arrabal,L eal tierra sevillanaA sí se debería recordar.

D e siempre fue corralera,E n el corazón de un barrio

S in ánimos de aquella grandezaA la que aludieron muchosN egando tan sutil naturaleza,T antos, que siempre pregunto:¿A dónde fue su realeza?

A l lado tiene a la Abuela,N aranjos sus guardianesA l par que cien callejuelas.

M ecida por la brisa de su río, Archivo 12I magen de una diosa arrabalera

T raspasa con su seña y señoríoO rgullo de la gente trianera,R ociándola, de aquella maneraR isueña, y ése bendito sentío,

Page 16: El cajón de los poemas acrósticos

E n el que todo son escalofríos

D esde los pies a la sesera.E ntonces, cuando en Primavera,

S uena el bronce, y al estío,A nuncia con ese bríoN acencia de su alma corralera,T anto se nos muestra entera,A briendo al barrio, un quejío,

A l que si le quitaran su ríoN atural, y la su hermosa ribera,A hí tenéis el desafío...

Archivo 13

P asarela sobre el río,U nión de Chapina y bandaE n la que la Puerta RealN egando ser de Triana,Trataba así de escaparE n cuanto subía la arriada.

¡Dios! Gritaban al Guadalquivir

Page 17: El cajón de los poemas acrósticos

E n cuanto se sentía subir.

T emiendo ser abordado,A quellas tiernas barandasB esadas en sus costadosL ocamente por las aguas,A lborotaban al barrioS egún nos dicen las marcas.

G itanos de yunque y fragüa, Archivo 14I lusionistas del baileT aconeado y festero.A rquitectos de los cantesN acido de aquellas cabas,E ntre dos Pagés del Corro,R azones de un arrabalI ndiscutible y doliente,A demás de quebradizoS ólo con ver a su gente.

D ecían los más enteradosE n las tabernas de siempre:

T oma y échate un cante;

Page 18: El cajón de los poemas acrósticos

R ealza con tu maestríaI nigualable y sobrada,A quellas letras de antesN acidas en los corralesA donde se creara el hambre.

Archivo 15

L lenos hasta rebosar,O lo que es lo mismo:S encillamente, sobrados.

C ada caso parecidoO, por concretar, igualado,R espetando con sentidoR azonable y razonadoA lgún momento vivido,L erdo o poco agraciado,E ntonces todos los partidosS iempre estarían aunados.

Page 19: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 16

L a antigua Vera del Río,A hora no se llama así.

C on el paso de los años,A llí, donde creció la VeláL igada por siempre al río,L uego que cambiara el pañoE ludiendo así la arriá,

B uscó tras cién desafíosE quilibrar paseo y baño,T an cierto como que ya,I do el embate bravíoS olaz es ahora su escaño.

Page 20: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 17

E l Monte PiroloL a Caba gitana...

A ñejas esencias,R eaños de cienciasT emplados al aireE n cantes y bailes

Page 21: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 18

L ínea de versos cantadosA tres o cuatro renglones

S aben a gloria en Triana,O en aquellos callejonesL eído Zurraque, el nombre;E l nombre de tantos hombresA mantes de aquellos dones.

D icen que fue un tal RamónE l que en el barrio creara

T an deliciosa canción.R izando el rizo vendrían,I nigualables, los cantesA ntiguos de aquél Abadía;

Page 22: El cajón de los poemas acrósticos

N o, no dejo atrás a OlivéA l que escucho cada día.

Archivo 19

A yer, hoy, mañana,R enovando su genioT riana es inmortal;E terna cantora, y cabalS embradora de letristas,A lfareros, ceramistas,N avegantes, escultores,O rfebres, y eso pintoresS ed de esta tierra de artistas.

Page 23: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 20

B arros de oro de cuecenA l amor del aznalcolleroR incón que en Triana sueña

E n ser del arte el primero;L iteratos, poetas y escultores,

A rtesanos, pintores y alfareros,N aturales del toro, cantaores,C omediantes de la vida y los sueños,L evad vuestras ánclas, ráudos,A ntes de que se echen los vientos.

Page 24: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 21

L a sirena está sonandoA l amanecer el día...

H a ce ya setenta años;I mposible de olvidarS u canto, llamada a entrarP or la calle San Jacinto,A llí, toda ya triunfalidad,N acería aquél SaetaO rgullo del arrabal.

A sus comienzos, el veinte,V ive Dios que tiempo ya,I luminarían el camino...A sí en aquellos almacenesC aducos y sin productividad,I niciarían su andadura,O rto de una idea madura

Page 25: El cajón de los poemas acrósticos

N ovedosa e internacional.

Archivo 22

L ucía la calle entoncesA la luz de aquella casa

C on médicos y enfermeras,A yuda a la que cualquieraS olicitaba asistencia,A únque entonces careciera

D e la elemental licencia;E n lo que a beneficencia,

S obraba bondad y amor,O bviamente eran manerasC uando allá se recurrieraO pinión, o aquella atención,R azón de demanda humana,R eclamo de aquella legiónO riunda, y pobre de Triana.

Page 26: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 23

E n el corazón convivenL onjas de toda ventura;

C ada época pasadaO presente, y futura,M edirán con sutil graciaE sta tierra, como duraR azón y conocimiento,C asta de una estructuraI ntrínseca del Arrabal,O rigen de su cultura.

Page 27: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 24

E n el corazón del barrioL atían mil corazones...

C ada domingo en la tardeI dentidad de infantil,N os trasladaba aquel sueñoE mbriagador y feliz.

R eino de llantos y risas,O cuando fueran misterios,C hillidos, allí daba igual,I ncluso te renían muy seriosO te mandaban callar, jaja.

Page 28: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 25

L aureola de coloresO rilla la fiel cinturaS eráfica de Triana;

B ella guirnalda de floresA rrullando los oloresR azón de su exuberancia;R ío que corre en fraganciasI nvitando a ser vividos,O acaso sólo sentidosS egún sean nuestras ansias.

Archivo 26

E ntre tejares y arenas,L a venta y los sembrados,

Page 29: El cajón de los poemas acrósticos

C ubriéronle durante añosH astíos de tercas riadas;A llí, las grandes barradasR azón de aquella TrianaC on su alma laboriosa,O só alcanzar la gloriosa

D eclaración de una fama,E n la que toda su gente

L a de aquí hasta la puenteA brazando sus destinos,

P ercharon duros caminosA l decir de sus memorias,V iviendo en sí sus vecinosA quella cruel protohistoria.

Archivo 27

E n lo que pudo haber sidoL o cierto es que nunca fue.

H abíase proyectado eso,O h, magnífico hotel,

Page 30: El cajón de los poemas acrósticos

T omando como refenciaE se de gran evidencia,L ujo en la Puerta Jerez.

T odo el proyecto se fueR odando hasta la ribera;I nclinado hacia que fueraA yuda que este arrabalN unca dejó de pensarA lcanzar en primavera.

Archivo 28L as hermanitas de los pobres.A sí fue llamada siempre...

F eliz en aquella naturalezaU nica de amoroso trato,N acería en el cuarenta y tresD el siglo pasado, el veinte;A quella fecha en la que el francésC edería todos sus derechos,I ncluso la primera construcción,O blación que resultó plenaN atural de su condición.

Page 31: El cajón de los poemas acrósticos

C on el transcurrir del tiempoA lcanza la meta soñada:R ecoger entre sus murosR educto de amor y pazE sa tan gravosa necesidadR azón de la cruel pobrezaE n que se haya la humanidad.

Archivo 29

E n las retinas del tiempoL ate aún aquel color

T ostado y amarillento,R ecreación de un limónA l que se le fuera el tiempo.N o, nunca podremos negarV ivencias sobre aquellas quimeras,I deales, para recordarA l “6” y su jardinera.

Page 32: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 30

L atían aquellos largos cincuenta,A la sombra de unas moreras

C on la frondosidad de un hambreA valado por mil noches;R azones de un mañana inciertoR aramente esclarecidoE ntre tinieblas de pobrezas...T ranvías entre empedradosE n lazaban mil alaridos sedientos,R everberando cantos de promesasA l clamor de sueños de esperanzas.

Page 33: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 31

L ozas, búcaros, vasijas,A zulejos y tejerías...

C on un corazón de pella,A lama de almagre y cocida,L leva su espíritu y vidaL atiendo cuando es ellaE sta calle tan querida,

A llá por Cuatro CantillosL ució siempre esa maneraF iel a su capacidadA rtística, devocional,R izando el rizo alfarero.E s Triana y su verdadR azón del saber estarI ndiscutible, y señeroA mor por su identidad.

Page 34: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 32L ejana y cercana a la vez,A mí siempre me reclama...

C alle de foso y enaguas,A la que el tiempo le dijo:L argo será tu entresijo,L oco el corral y la fragua,E l arte y tu regocijo.

P asan los años, y ya vesA dónde tendrá mañanaG anada toda la fama...E n el rol de su quererS iempre en su razón, Triana.

D oliente, a veces cansada,E sta calle sufrió siempreL a amargura desahuciada.

C ada vez que te recuerdo,O así tu nombre exagero,R ecuerdo a todos los hombres:R icos, pobres, niños, viejos,

Page 35: El cajón de los poemas acrósticos

O mejor, todos trianeros.

Archivo 33

E n el corazón grabadoL loran mil sentimientos,

R equiebros doradosO ndeando al vientoC on mi Simpecado;I nicio de un tiempoO rbal y entregado.

Page 36: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 34

E n este lado del ríoL abró Triana, en distancia,

C ustodia para demostrarO bediencia y devoción,R azones del corazónP ara poder enseñarU na forma de su amorS egún su forma de amar.

C on ello el arrabal quisoH abilmente así mostrarI dentidad categórica,C onciencia sutil e históricaO ráculo de su verdad.

Page 37: El cajón de los poemas acrósticos

S E V I L L A

Archivo 1

M ilenaria y bondadosaI lusión que sobreexcede.

S erena, dulce y graciosa,E legante, humilde y leve,

Page 38: El cajón de los poemas acrósticos

V iva como aquella diosaI ntempore que la precede;L argueza de sol, luminosa,L ozana, despierta y breve,A legre y sutil, maravillosa.

Archivo 2

L a miras y se desdoblaA l compás de los sublime.

G anan enteros sus sombrasI nvitándonos a seguirleR ociada de perfiles:A lmocárabes y canecillos,L amiendo aquel enladrilladoD esde un girasol aladoA fe que hasta Cuatro Cantillos.

Page 39: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 3

L anza sus rayos de solA la vez que los recibe...

T oda ella es proclive,Orgullosa y milenaria,R utilante y legendaria,R ielando sobre esa famaE n que unida a la Triana

D e aquella corte agarena,E nsamblaría cadenasL levadas de orilla a orilla...

O probio y sometimientoR esuelto por BonifázO gaño casi mil trescientos.

Page 40: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 4

E brio de aromas de solL o veo Sevilla cruzar,

G rande como su caudal,U rdimbre del mísmo Dios.A ndaluz llevando amorD esde Jaén hasta el marA tlántico, sentimental,L uz de embrujo, pasión,Q ue convertido en cordónU nge el hermoso arrabalI lustre, y a la ciudad;V igilante y seductor,I ntimo y renovadorR egalo a la humanidad.

Page 41: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 5

E n ese otro lado del ríoL atió el alma de Triana,

M as llegó aquella mañana,U nión de hambre y de sed,E n la que mil sentimientosL lenaron con sus lamentosL a larga despedida soezE n aras de aquel cerramiento.

D e la noche a la mañanaE l muelle quedó cerrado,

L os barcos ya descargadosA ligeraron amarras,

S intiendo las dos con penaA orillas de las dos bandaL a más amarga condena.

Page 42: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 6

J óvenes y tan entregadas,U na y otra sevillanas,S orores que aquí en TrianaT uvieron tan desgraciadaA frenta por las romanas.

Y así se contó la historia...

R odeada de martirios,U rdimbres calumniadorasF ecerunt que los dos liriosI nocentes, aquellas traidorasN ovelaran aquel delirioA fin de hacerla autoras.

Page 43: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 7

L a luz danzaba entre gasasA l otro lado del río

F antasías sevillanas;E n un momento de graciaR ecogió su señoríoI nstando bailar en TrianaA unque lo hiciera descalza.

Page 44: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 8

P alatino, que en el mundo eresL o más hermoso construído,A lma de aquella diosa CeresZ aleando generosa los sentidosA cabados finalmente los deberes.

D os torres en extremo, guardianas:E n una dice Sevilla, en la otra Triana.

E n medio de las dos con fuerza,S oberbia cual mudejar filigrana,P ensada para lucir su realezaA l amor de la luz de la mañana,Ñ udosa en su fiel naturalezaA lcanzada ya la gracia sevillana.

Page 45: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 9

A rquitecto y universalista,N acido en compas muy sevillano,I lusión del oficio, y arte sanoB aladi, jamás, sino un artistaA dmirable, y genial regionalistaL oado como grande ser humano.

G rande como el sol, como la luna,O belisco de la alta Arquitectura,N idal de la más sabia cultura,Z enit elegido ya desde la cuna,A lma creadora cual ninguna,L eal, sutil y verdadera criaturaE minente en su más leve dulzura,Z afiro para la gente sin fortuna.

Page 46: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 10

L ejos de los mil ruidos,A l pie de nuestra Giralda,

J unto a las viejas aristas,U na vez proteccionistas,D e aquellas viejas murallas,E l más bello barrio judíoR ezuma en escalofríos,I nsigne donde los hayaA unque no lo bañe el río.

Page 47: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 11

L ogró causar sensaciónA quel día en que Sevilla,

M irándose hacia sí mísma,A dvirtió que su carismaC entrado en la noble puerta,A mpliaba con su estadio,R azón de un hermoso barrioE n lindero tan amurallado,N ecesidad hacia un mercenarioA taque cruel y despiadado.

Page 48: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 12

L uce con todo esplendorO rgullosa y presumidaS u ensueño hecho verjel,

J oyeros donde las floresA legran con sus primoresR egalando sus aromas,D ecorando cien rincones,I ncitando a esas pasionesN unca mejor ensalzadasE n una ciudad de donesS iempre por todos cantada.

Page 49: El cajón de los poemas acrósticos

L A V E L Á

Page 50: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 1

M ás que arrabal un puebloI nmerso en toda su esencia;

T anto, que su genteR eina un vivir diferente,I ncansable en su sentirA ún a pesar de haber sidoN atural, humilde, y sentidoA ntaño tanto sufrir.

Page 51: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 2

L a calle del Betis viveA la derecha del río

V elando por sus pasiones,E videncias que describenL a sal de su señorío,A mén de sus tradiciones.

Archivo 3

Page 52: El cajón de los poemas acrósticos

E brio de aromas de solL o veo Sevilla cruzar,

G rande como su caudal,U rdimbre del mismo Dios.A daluz llevando amorD esde Jaén hasta el marA tlántico. Sentimental,L uz de embrujo, pasiónQ ué convertido en cordónU nge mi hermoso arrabal,I lustre, y a la ciudad;V igilante y seductor,I ntimo y renovadorR egalo a la humanidad.

Archivo 4L levada sobre una barquillaA lomos de rizadas brisas,

V a por el GuadalquivirI mpecable, hermosa y breve,

Page 53: El cajón de los poemas acrósticos

R ecordando a aquella leveG racia que en calle CastillaE s como aquella coplillaN acida al mar de su plebe.

D elante de aquella chiquillaE ngalanada y señeraL e acompañan cién barquillas.

C ién barquillas arrabalerasA las que el barrio les brindaR emos de recias palmeras,M ientras que las luminariasE ncendidas cual hoguerasN avegan como candelarias.

Archivo 5

E sa plaza que, de entrada,L o mismo es zaguán que atrio,

A ntaño fue la afamadaL lave que abriera o cerrara

Page 54: El cajón de los poemas acrósticos

T odo el entramado viario;O ra es el vecindarioZ aleando en su VeláA rriba de aquel escenario,N ecesidad de este barrioO acaso llamarlo arrabal.

Archivo 6

L entamente y sobre el seboA vanzan sin resbalarse...

C ada Julio y a su cita,U nión de Velá y estíoC onfluye así el desvarío

Page 55: El cajón de los poemas acrósticos

A lcanzado el meridiano,Ñ oño y sufrido veranoA únque nos salva este río.

Archivo 7

L a ves en la calle Betis,A ltozano, San Jacinto...

A llí está sobre la lona,V iviendo días de Velá,E ntre las aguas fresquitasL uciendo una facultadL a cual la hace bendita,A rrabalera y cabal,N oble, sencilla y bonitaA la vez que natural.

V iene aquí a despertar

Page 56: El cajón de los poemas acrósticos

E n medio de tantas cuitas,R azones para mitigarD iásporas infinitasE n las que no hubo piedad.

Archivo 8

E l más humilde de todosL lena la noche Trianera

H aciéndose protagonista,I ncitando y provocandoG estos de imagen fresquitaO rgullo de nuestra Velá,

C odeándose en la fiesta,H emos de reconocerlo,U nidos a los altramuces,M ediáticos que en verdadB atieron alas de hambreO presión y libertad.

Page 57: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 9

E n plena Velá trianeraS ant´Ana vio con agradoA ésta refrescante esfera.

S uele tomarse en la noche,A penas Triana acabaN ovena que aquí a su AbuelaD esde siempre celebrara.I del para la cenaA bordo de aquella barca.

V ira otra vez la barquillaE n pos de la gran gabarraR ecreándose en la orilla;A hora ya, y sin espera,N avaja en manos expertas,I nmisericorde penetraE n lo profundo del rojo,G anando así, en conciencia,A lmas de aguas inquietas.

Page 58: El cajón de los poemas acrósticos

LOS HOMENAJES

Page 59: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 1

M ientras el mundo girabaI nmerso en el siglo de oro,G anaba enteros éste escritorU niversal e ingeniosoE n el augusto arte del teatro,L lamado otro sí Dramaturgia.

D ramaturgo y gran novelista,E ste hombre llegó tan alto

C omo el sol que nos alumbraE n cada pauta sutil y literaria.R ecreándose en su Galatea,V emos como aquel pastoril deseoA lcanzó, aunque incompleta,N otoriedad extraordinaria,T otal, febril y absolutaE n cuanto dio a conocerS u primera parte del Quijote.

Archivo 2

Page 60: El cajón de los poemas acrósticos

J uventud preñada deU niversal Poesía;A lba de un pensamientoN ervioso e inquieto.

S iervo del versoI ngrávido e intensoE n la cuna de Triana,R ebelde y soñador,R egio y humilde

A l decir de los vientos.

Archivo 3

F ortaleza es el sonidoE n mil ondas sobre el ríoD arro. Sacromonte gitano.

Page 61: El cajón de los poemas acrósticos

E mbrujo, sentimiento, llantoR oto, y corazón deshecho,I nflamado por todoC uanto veías y sentíasO yendo el fondo de tu gente.

G eneralife, Alhambra de ensueños;A lbaicín, toda GranadaR ajándose las venas en la tarde,C uando las soledades te hicieronI gnorar la traición del hombre,A ti, imagen de pasión abierta.

L una veo de Pena negra,O diando el momentoR egado por tu sangre,C uando el luto por NijarA borreciendo cabalga.

Archivo 4

A ndador de caminosN acidos para ser cantados.T orturas y angustiasO ndeando como bandera

Page 62: El cajón de los poemas acrósticos

N oble y gloriosa, al amorI ntenso de la intensaO bsesión por regalar maneras.

M i corazón se rompe,A hora, cuando ando caminos;C uando siento tu vida,H acienda sin voz, sin aire, A nhelo el sutil y maravillosoD espertar que nos regrese delO caso la ternura de tus versos.

Archivo 5V ertiste al GuadalquivirI nmenso de la Poesía,C onceptos sobre el versoE xquisitos, maravillosos, yN utrientes para las almasT ristes, abandonadas, yE ncerradas en sí mismas.

A pasionada fiebre verbal;L icencia de tu corazón, y

Page 63: El cajón de los poemas acrósticos

E pocas de melancolíaI nfinita, y largas como elX ingu, hicieron posible tuA morosa entrega, tanN atural como el tiempo deD istanciamiento vivido,R eligiosidad; acentuado sentido, yE speranza como nueva perspectiva.

Archivo 6

A rquitecto y universalista,N acido en compás tan sevillano,I lusión del oficio y arte sanoB aladí, jamás, sino un artista,A dmirable y genial regionalistaL oado como grande ser humano.

G rande como el sol, como la luna,O belisco de la alta Arquitectura,N idal de la más sabia cultura,

Page 64: El cajón de los poemas acrósticos

Z enit elegido ya desde la cuna,A lma creadora cual ninguna,L eal, sutil y verdadera criaturaE minente en su más leve dulzura,Z afiro para la gente sin fortuna.

Archivo 7

R ío al MediterráneoA ncho de una PoesíaF értil de sentimientosA nclados en la arena,E spumas de transparenteL uz, de claridad sureña.

¡Ay, marinero en tierra!L amento nostálgico de mares;B arquillas de salE n el fondo de tu alma,R eloj del pensamiento...T aumaturgo del versoI ntenso como la brisa.

Page 65: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 8

A l escaparte silenteR apsoda del arrabal,M uda quedóse tu gente,A nquilosado el pensar,N egando que de repenteD esandaras el caminarO lvidando tu presente.

G uadalquivir, dime amigo...U n poeta de gran fama,T rianero y bien nacido,I lústrame esta mañana:E n ti, ¿cayó sin sentidoR ecordando a su Triana?R ecuerdo que vino herido,E stalló como la grama,Z aleó y quedó dormido.

Page 66: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 9

R apsoda de aquellas tierrasA las que el sol le dedicaM il horas en doce meses,O rienta su vida ahoraN ecesitando con creces,

M or de canto y PoesíaA rribar a ésta Triana,E ste barrio que en su díaS ólo con verlo llegar,T rocó su bullicio, empero,R epitiole sin cesar:E ste ya es trianero.

Page 67: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 10

M uere la tarde en TrianaA la sombra de la espaldaN atural de una parroquia,U bérrima, y sin igual,E sa a la que el hombre honraL lamándola catedral.

M erece un reconocimiento,A l que Triana se unaC on todo su potencial,I ncluso la Sevilla en peso,A ver si se quiere enterar

Page 68: El cajón de los poemas acrósticos

S ellando tan feliz suceso.

Archivo 11

J alonó su nacimientoO tra forma de existencia,S entires de aquella cienciaE ntregado al pensamiento.

L legado ese momentoU nico, vital y enfebrecido,I nequívocos latidosS onaron ahora contentos.

T odo el corral, de mayor,I nsuflóle su confianzaR edoblando sus esfuerzos,

A hora, sería aquel amorD onde anidó su templanzaO brando así su universo.

Page 69: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 12

J oven de un corazónU bérrimo en Poesía,L atidos que cada díaI lusionaron su vivir,A limento que él queríaN unca dejar de sentir.

G ranado su verbo fácilA la vez que sentimental,R izando verso tras verso,Z aga de aquella su edad,O caso que cayó en pesoN acido de la humildad.

Page 70: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 13

M ordió la parca una nocheA quella voz quebrada...N unca volveré a oír,U n grito tan desgarrador,E sa fiebre que entroncadaL astimaba con su ardor.

M ecido entre dos riberas,O rillas del Guadalquivir,L egaste a tu barrio un canto,I dea de un nuevo decirN atural de ese quebranto,A ires de una amor sin fin.

Page 71: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 14

A cróstico, bájate un tono

P ara poder armonizarE sta noche su recuerdo;P ellizcos de aquel amarE ntregado, y esos anhelos,

S entimientos que al sonarA l amor que, entre los dedos,B ellamente hizo soñarI lusionando mil versos...N unca habrá mejor trovar.

Page 72: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 15

G ana enteros cada díaA la par que amigos fieles,B rilla con la fotografíaR ielando entre mil papeles,I lusión, nunca a porfía,E n la que él siempre mueleL os granos de sus manías.

S iempre seguro de sí,A veces, duda en extremoN egando algunos consejos,C omo queriendo decir:H ola, ¡que no soy tan viejo!E ntonces se echa a reírZ aleando su pellejo.

Page 73: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 16

Macera con su serviciOAmor y Gracia sutiLNacida de ese deseO

Obvio de su condicióN;Lecciones que a la tertuliAObsequia por ciento y M.

Page 74: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 17S agitario, y temperamental;A mante por naturaleza,N avegador de cién ríosT an dulces como salados,I ncitando y excitandoA mores y desamoresG anados con el pálpitoO bligado de la ilusión...

F estivo y escrupulosoR ayando en lo inusualA dquiere el airecilloN atural de su poder;C onocedor de limitacionesI ntuitivas, como reflejos,S encillas, a veces soberbias,

Page 75: El cajón de los poemas acrósticos

C apaces de dar alcanceO de dejarse alcanzar...

Archivo 18

P ara conocer a un hombre,E l cual, y en la vidaP ase por ellaE nvuelto en su honradez,

R ecomendaría a más de uno,O bviamente, en su interés,M idiera a éste cañaveralenseE n el que ¿dime por qué?R evienta toda una forma...O rgullo de saber y entender.

Page 76: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 19

M ás que la vida misma,E n cualquier momento, un día,L imitan tus alegrías;I ncluso aquellos anhelosS e sobrecargarán de celos,A unque no, si eres bravía.

Page 77: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 20

J oven, entrañable y serio,U bérrimo en amistad,A nda siempre por derechoN egándose ante los demás.

R ocía con su buen talante:A mor, y comportamientoM ediático y sin interés,O rgullo del sentimientoN atural de su niñez.

P aciente donde los haya,O acaso amable sin más,

Page 78: El cajón de los poemas acrósticos

R iza con gracia serenaT oda esa sed que AracenaE ntiende que él calmaráR egalando el no va más,O rgullo de su gracia plena.

Archivo 21

L uz que el alma me llena.U nica luz que perdura.I ncluso tras la locuraS igue mi alma serenaA mor que mis penas cura.

P reso me tiene ese amorE n el que a gusto me encuentro,R eniego de aquel momentoE n que no estamos los dosZ aleando el pensamiento.

M ágicas son tus pupilasA l clavarse en mi mirada,R ecogiendo inmaculadasT odo el candor de lucilasI ntensamente soñadas,

Page 79: El cajón de los poemas acrósticos

N unca por nadie vividas.

Archivo 22

E n el fondo de su almaN ada esa entrega profunda,R azón que todo lo alumbraI lusionando enseñanzasQ ueriendo ser como tu,U n corazón de bonanzaE ntregado a la virtud.

Page 80: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 23

P arió la tierra una vozE ntre viñedos condales;P rofunda, cual cien metalesE n un crisol de amaranta.

P erfilaron su gargantaE n su máxima expresión;R equiebros de un pensamientoE n que todo un sentimientoJ alonado de cantares,I ncitó a mil alamaresL lenándolos con su portento.

Page 81: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 24

M ecido por brazos maternosO rquestó él mismo su vida,I ncitando a sus adentrosS er la persona escogida,E speranza del EternoS iempre entregada y sufrida.

Archivo 25

Page 82: El cajón de los poemas acrósticos

F uiste con tu nacimientoR edoblando voluntadesA l amor de aquella idea,T an pura y grandeE n la mente de tu padre;R azón de una vidaN acida para colmarI lusiones y sentidos,D onde el sentimientoA mará siempreD esde dentro sus latidos.

Archivo 26

Page 83: El cajón de los poemas acrósticos

M ejor padre no se encuentra,I ncluso cuando la vida

T ratándolo sin medida,I lusionó con su siembraO rgullosa amanecida.

P uso en aquellos momentosE l pundonor y el sacrificio,P ara tener como oficioE l más alto sentimiento.

Archivo 27

F ranqueza donde la hayaR ezuma este VillalveroA mante de aquella tierraN atural de sus ancestros.C olega siempre pendiente,I ncitador de favores

Page 84: El cajón de los poemas acrósticos

S ociales o en comuniónC on esa idea latente

O rgullo de su condición.

Archivo 28

C onfidentes del cariño halladoA la luz de la única ilusión,R enovar cada día esa alianzaL ograda por la fe del corazón,O rigen que sostiene la esperanzaS ellada con la fuerza del amor.

Y en la dócil, sublime confianza

M ediando con su candela el sol,

Page 85: El cajón de los poemas acrósticos

A lcanzarán la grávida templanzaR efugio del futuro ensoñador,I ncitando a la brisa de bonanzaS e venga por el río en alabanzasA cunando entre espumas su candor.

Archivo 29

C ada sentimientoO viva expresiónN acida de la pasiónC osturera y artesana,H ace crecer el corazón,I ncluso hasta la razónN etamente valenciana

Y entre levante y poniente,

P or encima de los vientosA letean siempre amables,C on tonos de insuperablesO rtos con comedimientos.

Page 86: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 30

J ubilados, aunque no viejos,O s vimos aquella mañanaS erena del mes de Junio,E sa que, tan sevillana,

Y unque y norte que Triana

M ezcló en tan sólo un momentoA legrando los sentimientos,R eflujo de aquella amistad,U rdimbre que en modo algunoJ amás pudiéramos pensarA lcanzáramos ninguno.

Page 87: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 31M uerde con rabia la vida.A tácala si miramientos;N o dejes que la partidaO bre en el pensamientoL abrando la no queridaI magen de tu sentimiento.

L a gracia del brazo de ellaA nda caminando siempre

P rimando tristes sonrisas,I ncluso aquellas cariciasC uando más las necesitaA caban siempre perdidas,N adie arreglará sus cuitasA unque les cuente la vida.

Page 88: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 32

M ás que un vecino, un amigo,I ndiscutible, capaz y entregado;G uardián de la paz y la amistad.U n compañero ideal, sacrificadoE n los casos de mayor dificultad.L o dicho, el colega más deseado.

Y en el fondo de esta historia...

M ecida entre cañaverales de sol,A mante de su tierra y de su gente,R ocía cada mañana ese esplendorI nquieto de un corazón efervescente,N atural de esa hermosa condiciónA l aire de mil amaneres diferentes.

Page 89: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 33

P arió la tierra una formaA mable y desenfadada,C abal, preñada de gracia,O acaso fue sentimiento...

Y esa apariencia que el tiempo

R ozó con labios de sol,O riginó su esplendor,S encillez de un pensamientoA l compás del corazón

Page 90: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 34

S alió de mañana el solE ntre pinos y jaralesR ociando con su amorG orriones y zarzales,I dentidad de la sierraO bligada en estos versos.

Y fue que llegado el día,

C uando estaba muy arribaE ntre las doce y la una,L atidos de sus entrañasI nundaron las montañasA lverse junto a la luna.

Page 91: El cajón de los poemas acrósticos

E N H I G U E R A

Page 92: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 1L ánzandole besos y coplillasA legramos la vida a Ésta Chiquilla.

V ive Dios, que sí es bonita,I deal para ese prado legendario,R eina que se mece en un breviarioG estado a la sombra de una ErmitaE ncalada y predispuesta a ese diarioN o más se hace presente la visita.

D ios la puso aquí en Higuera,E levando así a éste pueblo solidarioL lenándolo de fe y de quimeras.

P atrona que protege dulcemente;R edentora del hombre y su pecado,A madora de un Rosario permanenteD onde anidan corazones entregados,O rgullo de su tiempo y de su gente.

Archivo 2

Page 93: El cajón de los poemas acrósticos

L uciendo, cual paño Blanco, A quella estampa encalada,

E l lugar se vuelve cita R ecién llega la mañana, M omento que nos incita I lusiona y nos invita T ratar de una convivencia A legre, grata, expedita.

D elante de la fachada, E l pilar siempre trasmina

S entimiento tan serrano, A l que la gente del barrio N o se le va de las manos.

A l llegar el atardecer, N eófitos cigüeñuelos T ratan de encontrrear un aire O rma a sus primeros vuelos; N ada más oír el campanil, I lustran con su revuelo O bediencia a su perfil.

Archivo 3L ábaro de cal y ministerioA romado por la oración

E nhiesta de mil atardeceres.

Page 94: El cajón de los poemas acrósticos

R epicar del fiel golondrineo,M aitines de sombras y verdeos,I lusión de otros mil amaneceresT ocados por la gracia del deseoA moroso de hombres y mujeres.

D evoción a un Cristo cuya CruzE leva el alma más humanaL igada con la fuerza de su Luz.

C risto del Rosario conocido;R edentor del corazón atormentado,I lusión de un pueblo enfebrecido,S ufridor de la llaga en su costado.T res veces por el hombre cual caído,O belisco por él mismo levantado.

D el fondo de sus ojos lacerantes,E l viernes de semana nace el díaL atiendo de una forma delirante.

R esuenan por la calle del SeñorO sculos de entrega todos ellos,S olícitos en ruegos a porfías,A mantes que con miles de oracionesR uegan por su gente en letanía,I nefable necesidad en confesiones

O lvidándose de sí en cada día.Archivo 4

E n plena naturaleza,L a luz se asoma expectante;

P arece otra, y otro el caminar,A ún cuando no se ha llegadoS iguiendo el trazo marcadoE n aquel tablero oficial,Ó rden para algunos cuidados.

Page 95: El cajón de los poemas acrósticos

D ejado atrás lo asfaltado,E s cómodo y leve el descenso.

L a vista nos llama a emoción,A lcanzado el primer tramoS itial del primer pilón.

T rás recorrer unos metros,O frece este recorridoB alsámica relajaciónA la vista de una grutaS in igual, sin parangón.

Archivo 5

L ucen las crestas del TrancoA tardeceres de ensueño

C uando el paseo terminaA llás cerca en los pinares.L os canes, por los encinares,L adran al tiempo que jueganE n esas tardes festeras,J aleando en cien carrerasA sus relajados amos.

Page 96: El cajón de los poemas acrósticos

D ecorados por mil tales,E ncinas y alcornocales

A legran aquel angostilloR ociado de colores,A lcance de todas esas floresC on que se viste el caminoE n lo que el aroma fueraN atural don que vinieraA endulzarles el destino.

Archivo 6

L adera de Santa Bárbara,A dusta aunque sonriente.

C on el amanecer, el SolA penas besa su estampaL ozana y poco transitada,L o cual la hace agradableE n ese sin par senderismoJ alonado de zarzalesA mapolas y madroñeras.

D e muy escasa dificultad,E l ascenso se hace leve

L igando subidas y bajadasA la vez que entretenidas.

Page 97: El cajón de los poemas acrósticos

U na vez llegado arriba,M ás allá de aquellas crestas,B londas y encajes serranos,R ecrean nuestras retinasI nconmensurables vistasA lbur de luz y pantano.

Archivo 7

L uce esta sierra un encanto,A l que el águila culebrera

S igue sin poder sustraerse,I ndiscutible manera,E nvidiable por así verseR einando en la troposfera,R ecreación que se creceA lzada sobre éste Higuera.

D e siempre consideradaE legante y esplendente,

S itial y altura deseada,A l decir de aquella gente,N i que decir que pensadaT enían cual preferenteA quella Ermita soñada.

Page 98: El cajón de los poemas acrósticos

B esada así cada díaA l despuntar la mañana,R ecibe aromando el cieloB esos de acéite y retama,A demás del dulce sueloR eal de la luz que emana

A l amor de sus desvelos.

Archivo 8

L unes de fiesta en Higuera;A legrías por doquier

S intiendo como se cuela,A veces hasta sin querer,N o sólo aquel complementoG aseoso, dulce, y el fielR egusto del melocotón,I ngrávido en su embeber

A la par que respondón.

Page 99: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 9

L uce la noche estrelladaA l compás de villancicos.

C oros de campanillerosA menizando el desfileB rincan bajo el frío invierno;A l igual que en aquel tiempo,L as escenas navideñasG anan enteros y sueñanA lcanzar mozos y mozas,T oda la gloria que enseñanA bordo de sus carrozas.

Page 100: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 10

J oven de un corazónU bérrimo en Poesía,L atidos que cada díaI lusionaron su vivir,A limento que él queríaN unca dejar de sentir.

G ranado su verbo fácilA la vez que sentimental,R izando verso tras verso,Z aga de aquella su edad,O caso que cayó en pesoN acido de la humildad.

Page 101: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 11

E n la cima de ése ArteU bérrimo cual la Pintura,S obresale por fachadas,T ejados y barandales,A tacando sus metales,Q uitando la cal cumplida,U niendo fuerza, y el saberÍ nclito de aquel deberO rgullo de toda una vida.

Page 102: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 12

M ás que un vecino, un amigoI ndiscutible, capaz y entregado;G uardián de la paz y la amistad.U n compañero ideal, sacrificadoE n los casos de mayor dificultad.L o dicho, el colega más deseado.

Y en el fondo de esta historia...

M ecida entre cañaverales de sol,A mante de su tierra y de su gente,R ocía cada mañana ese esplendorI nquieto de un corazón esfervecente,N atural de esa hermosa condición

Page 103: El cajón de los poemas acrósticos

A l aire de mil amaneceres diferentes.

Archivo 13

N ada como una parejaI deal y bienavenida,C on sus altos y sus bajos...O lé, por esas dos vidas.

Y lo mejor por llegar...

M ecidos por las fantasías,A donde están los amoresN aturales y naturantes,O bviarán todo talante,L ocos porque sean sus floresI lusión en cada instante.

Page 104: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 14

E n ese afán de agradar,L a maja, maja que maja

G estionando la porción:A quí, ponle tu atenciónZ alamera, y algo de sal;P on esos tomates tiernos,A hora cógete esos cuernosC on el vinagre y el aceiteH asta que le des el puntoO te apliquen lo del veinte.

Page 105: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 15

L uciendo paños, y esbelta,A lada y filigranera,

T añen al gusto sus broncesO rgullo de su pueblo, Higuera,R edoblando a aquellas doce,R azón de unas quimerasE ngarzadas por mil voces.

Page 106: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 16

L a vida se torna aromaA penas ellas se abren...

F lorecen con el rocíoL lorado por la mañana,O freciendo sus colores,R eventando los sentidosE n ese breve estallidoS eñal de bellas, lozanas.

Page 107: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 17

L aceran y te martirizanA gijoneándote sin parar.

P uñeteras que complicanA quella hora de siestaR eventando la dormida,R egalo, costumbre éstaA l terminar la comida.

Y es la sombra, y su hamaca,

L a que te llamaA tan alto menester,S oláz que agradecerás,

A unque este parecer,V erdaderamente engaña,I luso, si no te apañasS obre tu cuerpo un ungüentoP rotector para tal fin,

Page 108: El cajón de los poemas acrósticos

A léjate de las uvas...S on para ellas un festín.

Archivo 18

L os nervios a flor de pielA veces, estos bichos ponen.

M alditas mil veces, joder;O dio tenerlas encima,S oportar su pesadezC on cada cena o comida,A unque el exterminadorS acuda su ingravidez.

Page 109: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 19

L legó la madre y el padre.O tros llegaron después;S iete ya fueron entonces

G ranjeándose el favorA sí, y el pienso poder comerT odos, y sin excepción,O lvidando, al parecer,S in duda que existe el ratón.

Page 110: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 20

L o vi detrás la macetaO bservando mi meriendaS obre un platillo pequeño;

R ápido como una saeta,A parece y se me escondeT al, que no me es posibleO rganizar un treta...N o hay manera de seguirle;E n el más tonto despisteS e largó con mi galleta.

Archivo 21

Page 111: El cajón de los poemas acrósticos

L enta, y astuta a la vezA mparada en su sigilo,

S urge con ingravidezA hacer sutil ese estiloL egendario, fiero y cruelA l hablar de la comanda.M al lo lleva si no andaA tenta y bien de reflejos,N o más refleja el espejoQ ue compone mi farol,U n cuerpo de medio solE n el que ella al acecho,S intiéndose en su derechoA llí busca su ración...

Page 112: El cajón de los poemas acrósticos

L A S L A C R A S

Archivo 1

E stuvo desde siempre escrito,L igado a aquél hecho inconsecuente,

P erseguido en conciencia, proscrito,E n el decir considerado de unas gentes

Page 113: El cajón de los poemas acrósticos

C apaces de esgrimir: que no es bonito,A la vez que, murmurando entre dientes,D an por hecho que según sea el delitoO rmarán las argucias de sus mentes.

Archivo 2

E scasez de un sentimientoL eo cuando se deshacen

D os vidas en un momento.E n horas de dificultadesS altan tan difíciles tientos:A mar, por decir, no vale,M as vale decir, lo lamento;

Page 114: El cajón de los poemas acrósticos

O bviamente no son talesR ecomiendas en este tiempo.

Archivo 3

E stá preso y lo sabemos,L o queremos siempre ahí...

E s como un seguro de vidaG ana y nos hace feliz.O rada otras sapienciasI ntentando confundirS iempre con la mala ciencia:M ordaz, nociva y ruin,O acaso mala conciencia.

Page 115: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 4

E s triste el comportamiento,L ógico, del ignorante...

M as, mucho más triste seráE n aquél que, intelectual,N acido en ámbito religioso,O supuestamente generoso,S iempre pensará igual...P ensamiento vil, rastrero,R eprochable, y hasta groseroE n el que mejor no pensar,C omo tampoco alentarI nnoble, y ruin consejero,O blato de la maldad.

Page 116: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 5

E ngendro de la maldadL eviatánica y cruel,

O bliga a la mente humanaD esde siempre a padecer,I ncluso a no reconocerO rgullos que de él emanan.

Page 117: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 6

E stuvo siempre vendidoL ibrando aquella verdad

P enosa, pero favorable,E n razón de un interésR uín en todo porqué,J usto porque no es loableU nir derecho y deber,R oto por ser lo que es:I ndiscutible y palpable,O bligación y honradez.

Page 118: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 7

E n su corazón humano,L o guarda con devoción

R enegando de su paz,E n tanto que quiere estarN adando en su negación,C on esa altiva presiónO rgullo de una verdadR ota por su condición.

Archivo 8

Page 119: El cajón de los poemas acrósticos

L lega a ser tan deleznableA la par que inconsecuente;

A bsoluta, y despreciable,M áxime en aquella genteB aja, de moral tan variable,I ndeorosa e indecente,C uyo final deseableI lusionado y candente,O bliga a lo inalcanzableN egando lo congruente.

Archivo 9

L ocura del ser humano

Page 120: El cajón de los poemas acrósticos

A la vez que bajo vicio

A lientan aires mundanos,V ertidos por ese resquicioA ntinatural e insano,R azón que algunos llevamosI ntrísecos en los interticiosC omo lapas y gusanos,I nseparables hermanosA los que renta éste oficio.

Archivo 10

L a pudo guardar, y no quiso,A l fin cedió ante la maldad

C itando que era verdadA la que le puso alas;L as puso para así obviar

Page 121: El cajón de los poemas acrósticos

U na verdadera y malaM oción de calamidad,N ecia, socarrona y rala,I nutil, corrupta e inmoral,A veces llevada a gala.

Archivo 11

L o siento dijo la pena,A unque yo no sé por qué

D ebería de sentirlo,E res tú el que me forzó,S iento tener que decirlo:H oy, eres el ejecutor,O bviamente yo el mirlo;N o, nunca será un errorR ecordar y repetirlo

Page 122: El cajón de los poemas acrósticos

A l decir de un violador.

Archivo 12

L erdo en el cumplimiento,A unque a veces parodiado,

D ícese del comportamientoE n verdad siempre estudiado.S obre todo en ese momentoO neroso y bien pensado,B anal, que, sin tratamiento,E mplean los más espabilados,D onde el más sutil intento,I ncluso el más complicado,E nlaza con el pensamientoN unca mejor organizado,C on tretas de sentimientosI nicialmente inventados,

Page 123: El cajón de los poemas acrósticos

A l decir del complemento.

Archivo 13

L imar las desavenenciasA veces cuesta trabajo.

D os, no son uno, y por eso,I mplicados desde siempreS e hallan muchos humanosC on sus cuitas y procesos,O en el peor de los casosR ecordándose unos hechosD urante toda una vida,I nutil y torpe medid

Page 124: El cajón de los poemas acrósticos

A valada por los despechos.

Archivo 14

L ey del más débil será,A demás de infructuosa

E n el campo del honor;N egación de una verdadV il, rastrera y voraz,I ncluso la perdiciónD olosa y sin salvación,I ncita al hombre a estarA tado a su condición.

Page 125: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 15

L amentos de la concienciaA rrastran a éste poema...

E s aquella sensaciónS altando de vena en venaC uando todo el corazónL atiendo una vida plena,A siste a aquella razónV alor de unas cadenas,I ndiscutible opiniónT ratada desde la pena,U nica de aquella unciónD e la más alta condena.

Archivo 16

Page 126: El cajón de los poemas acrósticos

L a veo venir desde lejos,A ndando, sin titubeos...

F eliz y tan confiada;A veces, como distraída,L lega sonriente, y rara,S eria si le va la vidaE n esa situación extrañaD onde la verdad escondidaA cecha las malas mañasD e su fuero ya perdida.

Archivo 17

L a voz despierta insaciable,A premiando sin cesar...

Page 127: El cajón de los poemas acrósticos

G rande en su quiere más,U n poco más, si es posible,L o importante es llenarA unque cueste lo indecible.

Archivo 18

L iada y siempre convulsa;A liada que en extremo

H oy, mañana y pasado,I lusos siempre seremosP orque nunca dejaremosO ír a quien a nuestro lado,C onsciente de ese pecado,

Page 128: El cajón de los poemas acrósticos

R ecordará el verdaderoE spectro de aquel primeroS egmento cruel y taimado,I nutil, falso y depravado,A mén de gran embustero.

Archivo 19

L entamente, agazapada,A byecta y hasta traidora

I mposible de reforma,G ana enteros cada díaN egada a la simpatíaO bligada de una norma,M ediática y que conformaI deales y amnistías,N udo llano y sin estríasI nquisidor que a las formasA veces, otras daría.

Page 129: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 20

L anguidece la actitudA mparada y enclaustrada,

I nequívoca y llevada,N egada, y hasta en cruz,D ebido a esa quietudO probio de la tan usada,L axa, sutil y viciada,E n que la pobre aptitudN unca saldrá a decir: tú,C oge la más señalada,I ntenta dejarla encajadaA hora que has visto la luz.

Page 130: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 21

L a oscuridad no es vitalA unque al parecer lo sea...

I njutificada acciónN efanda, cruel y felina,F avorece aquella inquinaI mpropia de quien dió palabraD e compromiso por siempre.E n estos tiempos que correnL o que parece esencial,I dóneo, y ser exaltado,D ebe de ser la traición,A unque quede el corazónD e barro todo enfangado.

Page 131: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 22

L a pobreza del amorA yer se tornó en maldad...

I mposible de aceptar,N egó por naturalezaT odo cuanto la belleza,O ro en un tiempo atrás,L e mimara ese caudalE brio de aquella cabeza,R echazando esa nobleza:A mar, y por siempre amar,N unca capaz de apreciarC uanto calor y ternezaI ntríseca de su grandeza,A demás de su integridad.

Page 132: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 23

L ate sin control la fuerzaA rrollando cuanto existe,

I nnoble y soez en su embiste,R amplona, cruel y perversa,A mén de villana y triste.

Page 133: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 24

L ocura desordenada,A esto yo me refiero...

L oco ese “amor” que ligeroU ne en su piel desatadaJ ugando al quiero, y no quiero,U na vez más y sin esmeroR etozar cual fiera acosada,I ndicio de una incontroladaA fición a un vicio huero.

Page 134: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 25

L ee hasta el pensamientoA legando sobriedad...

M anifiesta condiciónE n la que siempre estaráN adando para guardarT oda su dolosa acción,I deada, y en la opiniónR uin de siempre engañarA todos con su razón.

Archivo 26

Page 135: El cajón de los poemas acrósticos

L astrada por la maldadA umenta siempre de peso,

O probio de esa sin razón,F ebril en su conjugaciónE xacerbada y pueril,N acida de un término vil,S ádico, y de corazónA ciago, pérfido y ruin.

Archivo 27

L asos por naturaleza,A unque no por el cansancio,

Page 136: El cajón de los poemas acrósticos

P ecan el gusto y el deseo;E s así como los veo,R ozando como promesaE stática, y sin enterezaZ arandeada en función,A unada a sus mil flaquezas.

Archivo 28

L a mente si no se domina,A veces nos domina ella...

U na vez que nos abraza,

Page 137: El cajón de los poemas acrósticos

S i no le damos de lado,U tiliza aquellos méritosR uines, desmesurados,A fin de sacar más réditos.

Archivo 29

L o más nocivo que el hombreA llegado a practicar,

I nnoble y desafortunado,N egativo y con maldadD esde aquella Creación,I ndiscutiblemente, creo,F ue esta indiferencia.E n caso de querer lastimar,R ecurrió siempre a este fin,

Page 138: El cajón de los poemas acrósticos

E l más infausto de todos...N o hay cosa más despreciableC on la que se pueda ofender,I nsultar a un ser humano,A un amigo o hermano tal vez.

Archivo 30

L acra que lastima el almaA cabando por herirla...

S de de maldad es la que incitaO brar con bajas maneras,B landiendo garras de fieraE n la mejor de las citas,R esumen de aquel calaveraB estia ruín y malditaI nclinada hacia cualquieraA penas quede sin cuitas.

Page 139: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 31

L uciendo aquella sonrisaA bierta, y que en apariencia

T rata de mostrar tierna,R edoblará así su paternaA l tiempo que procaz idea,Indecencia cual ningunaC on tal de llegar a algunaI mplementada obra sucia,O simplemente, falsearN otoriamente su argucia.

Page 140: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 32

L enta, además de grave,A nda por nuestros sentidos;

A veces circula ligeraG anándole espacio al tiempo,O rgullo de unas quimerasN acidas para que el momentoI nicuo en cualquier manera,A lcance un final contento.

Page 141: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 33

E s el último eslabónL legado el fin del viaje...

J usto el complejo elemento,U nión del gran engranajeI niciado en aquel tiempoC adencioso y sin ambages,I ncentivado en momentos,O en otros sin homenaje.

F rente a tu espejo realI niciarás confesión;N i Dios te habrá de juzgar.A hora, sólo tú y tu contriciónL ograréis pasar el Astral.

Page 142: El cajón de los poemas acrósticos

L A S E S T A C I O N E S

Page 143: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 1

L oca se lanza a buscarA quella luz diferente...

P asó ese tiempo de fríoR amplón para los paseos,I ncluso para un garbeo,M ás si miramos el ríoA l que llegará el estíoV elá y cumplidos deseos,E n llegado el jubileoR egresará el desvaríoA bierto ya el cerveceo.

Page 144: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 2

E n esta nueva estación, y cual vecinasL iberadas de los fríos invernales,

V olverán las traviesas golondrinasE n mi ventana a descargar sus equipajes,R eescribiendo en los vidrios el viaje,A legrando con mil soles las esquinas,N ovias eternas que en las tardes trinanO rnando con sus acrobacias el paisaje.

Page 145: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 3

E n lo que fuera un pis pas,L os calores se esfumaron.

O trora el frescor ansiadoT oca repudiarlo ahora;O bertura de hojas caidas,Ñ ublados, cielos de moras

O tra vez ennegrecidas.

Page 146: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 4

E ntre los vientos del Norte,L evantinos, y ponientes,

I ncansables gotas frías,N evadas y crujir de dientes,V ibran las noches, los días,I ncluso el sol confidenteE ntregado a la utopía,R eivindica levementeN o neguemos su armoníaO sus besos más ardientes.

Page 147: El cajón de los poemas acrósticos

L O S M E S E S

Archivo 1

Page 148: El cajón de los poemas acrósticos

E mpieza con él el año...N o más se hace presenteE nfila ya el nuevo puente;R recorrerlo tendrá apaños,O bjecciones, y patentes.

Archivo 2

F iel a aquella sentencia,E l loco fue denominadoB ajo el signo de los peces,

Page 149: El cajón de los poemas acrósticos

R ecordatorio que, a veces,E n lo que quedó acordado,R eferirlo en esas precesO frendas por lo pasado.

Archivo 3

M uestra la nueva sonrisaA la vez que ya no llora,R ecomponiendo precisa,Z alamera, y que atesoraO lores de nueva brisa.

Page 150: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 4

A hora que ya se ha abiertoB rillando con su esplendor,R ecreánnos sus conciertos,I nnumerables momentosL lenos de luz y calor.

Page 151: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 5

M ientras la primaveraA lcanza para calentarnos,Y a se preparan las erasO pinión de los aldeanos.

Page 152: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 6

J untas las dos estaciones:U na saliente, y la otra entranteN os recuerdan aquel instante:I nocencia adolescente,O tal vez mayoría imperante.

Page 153: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 7

J oven y lleno de fuerza,U nida, eso sí, al calor,L lega la madre naturalezaI nvitándonos a esa unión

O bvia de nuestra nobleza.

Page 154: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 8

A quí llegó, bien empapado,G rasiento y tal que así repletitoO liendo a acéites bien frititos,S intiéndose como ahogadoT rás un Julio tan pesado,O primido, caluroso y ahito.

Page 155: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 9

S ereno se hace presente,E nvidiado y sorprendenteP unto y aparte en el año,T al que así para esa genteI nquieta y muy inteligente,E n ese afán de un peldañoM ediático y preferente,B ese su cuerpo ardiente,R azón para diferente bañoE n tiempo de mejor ambiente.

Page 156: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 10

O h, castaño que juegas al vientoC reando mil formas vitales,T inéndote de hermosos coloresU nicos, sutiles, ancestrales,B ravíos, a veces, adoradores,R azón de las idas estivalesE n un nuevo renacer de amores.

Page 157: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 11

N eto, grave y entristecido;O toñal, frío y lluviosoV iene éste mes dolorido,I nmerso en un mar de latidosE n los que tan quejumbrososM uerde la pena el sentidoB lanco de seres queridos,R ecordándoles gozososE n tantos pasos perdidos.

Page 158: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 12

D esde aquellos comienzos,I ncluso desde ManuelC on el primero de Enero,I niciamos nueva edadE n lo que se refiere a estar...M as con ella, y sus regaños,B ajando los últimos peldañosR elajémonos en esta NavidadE sperando el nuevo año.

Page 159: El cajón de los poemas acrósticos

L A S E M A N A

Page 160: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 1

E l amanecer del díaL entamente forma un arco,

L a línea no está derecha,U na terrible agoníaN atural de la flaqueza,E s la causa que daríaS entido a esta pereza.

Page 161: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 2

E n esta segunda etapaL o suyo es seguir vehemente,

M as quedóse un tanto atrásA quel paso negligente,R esiduo torpe y paciente,T ratado que, siempre igual,E n el que ir a trabajarS uele ser impertinente.

Page 162: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 3

E n este tercer estadioL as ruedas van encajando,

M idiendo ya ese otro tiempoI nclinado hacia el momentoE n que el cuerpo está pensandoR estar con entendimientoC ada minuto; Y a esa horaO ligárquica, y acreedoraL e llegará en cada día,E ntusiasmada alegríaS abiéndose sin demora.

Archivo 4

Page 163: El cajón de los poemas acrósticos

E l justo término medioL lega cuando en la semana

J uega una baza importante,U niendo principio y finalE n ese deseo constante,V ersión de aquel desearE xclusivo, y tan deliranteS entido de lo fenomenal.

Archivo 5

Page 164: El cajón de los poemas acrósticos

E n lo que va de semana,L eemos cómo se espera

V enir como PrimaveraI ncipiente, verde y grana,E sta etapa que, señera,R ecurso que nadie quisieraN egáranle en la mañana,E scuchando las campanasS azón de aquellas quimeras.

Archivo 6

E l fin por fin a llegado,L as etapas se quemaron

S in pena ni gloria aciaga,A l contario, toda vaga,B aladí, y buena pieza;A demás de guarnecida,

Page 165: El cajón de los poemas acrósticos

D obló la espina enseguidaO rnando así su grandeza.

Archivo 7

E legantemente hoyL uciendo su mejor gala,

D emuestra disposición,O bviando aquella razónM ediática en la que élI niciado en mil batallas,N egóse a sí, y se hayaG anándose aquél por qué,O ro es cuando se calla.

Page 166: El cajón de los poemas acrósticos

V A R I O S

Page 167: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 1

C larín que a fiesta llamaR edoblando melodíasU bérrimas de aquel tiempo,Z arpazos a la humanidad.

D ías llegados, estos son,E n que corrales y plazas

M ezclan gozo y bienestarA lrededor de una Cruz,Y así poder ver la luzO tro nuevo comenzar.

Page 168: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 2

E ntre ropas de AzaharL os nervios ya no lo dejan

N i tan siquiera pensar.A únque sí, sólo seis años,Z alea a toda la familiaA la que trae de cabezaR epitiendo con reaños:E nga que se hace tarde;N ació para su SaludI lusionando a su gente,T odo en él es diferenteO tal vez quiera ser su luz.

Page 169: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 3

L a magia está en el saberA la vez que en la ignorancia.

C on lo poco que se sabe,U nos se dan por contentosL legado el momento clave.T odos, en general, atentosU niendo cerradura y llave,R azón de ese pensamientoA veces doloroso y grave.

Page 170: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 4

L lamada la caja tonta,A certada acepción por cierto,

T iene aquellos ingredientesE n los que si nos detenemosL evemente a analizar,E n ellos se puede encontrarV ariedad de programacionesI nutiles en su mayoría...S obrecargas decadentes,I ncultura por doquier,O lo que es lo mismo, basuraN acida de un sólo interés.

Page 171: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 5

E ntra y sale como aquélL adrón que sabe

C uanto se puede tenerH oy por hoy, sin más llaveA la que trabas poner.Q uiere estar donde se puedanU rdir sus negras maneras,E s decir: ¿lugar? Cualquiera,T odo para que lo veanE ntregado a esa otra meta...R otar, ese es su lema,O bvio que también su jeta.

Page 172: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 6

F iel a esa indiosincraciaU bérrima y trabajada,L a actitud se manifiestaA lo largo de su vida,N o necesitando medidasO bviadas ni improvisadas.

E legante en su ademán,L ibra él sólo su batalla...

T aimado, fiel a su gran plán,R efinado y convincente,E nlaza de forma muy proverbial,P resunción, y un don de genteA usente de toda humildad.

Page 173: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 7

I magen de un éxodo obligadoN acido de una guerra sin sentido;M archa de un pueblo maltratado,I nocente al clamor de sus latidos.G olpe trás golpe, castigados,R epudiados, odiados, reprimidos.A ún por mucho suplicar, negadosN otoriamente en sus quejidos;T ratado cual peste, atormentadosE n el crudo afán de ser socorridos,S obre todo los más necesitados.

Page 174: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 8

L os rayos del sol se cuelanA través de ese agujero

C ada vez mayor, más grande,A demás de más mortífero,P ero, al parecer, no importaA esta humanidad nuestra.

D esde que el hueco se abrióE s cada vez más dañino...

O toño se nos echó encimaZ anjando así este verano;O jalá sin repercusión alguna,N inguna, porque de no ser así,O tro gallo habría cantado.

Page 175: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 9

N acida de la Poesía,O belisco literario,C aminas tú por la cienciaH aciendo nuevos estadios,E nseñando brotes frescosS obre cuartillas de ensueño,

D ejando fiel testimonioE n infinidad de versosL audales, concatenados,

B andera de un sentimientoA l que se acoge SevillaR izando un rizo en su textoA la luz de los poetas;T oma la noche ese cuerpoI lusión de los sentidosL lenos de pasión, despiertos,L lamando a nuevos latidosO rden de noveles aedos.

Page 176: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 10

E n el fondo del corralL lora la pena en silencio;

D ura, dolosa, cansada,E n tanto que castigadaS iempre por esa maldadA vara, ruin y podrida,H ermética para unas vidasU nidas siempre al pasado,C orazón de quiero y no puedoI mpedir que el más cruel dedoO rdene sean desterrados.

Page 177: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 11

L apidaria en su conjunto,A demás de triste y cruel,

P asa siempre por la vidaO ligárquica, y en su hacer,B atiendo, y dejando heridas,R ozando esa ingravidezE n que la fuerza queridaZ alea aquel no quererA lcance a mejor salida.

Page 178: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 12

L a entendemos cual así,A únque sólo es ignorancia;

E s verdad, y no es mentir...N egarlo tiene “importancia”,F ue, y es, no querer admitirE n lo que se entiende jactancia,R azón para no advertirM ala praxis en abundancia,E n no saber dicernirD ónde está aquella distancia,A la par que concluir:D os y dos, no es una mancia.

Archivo 13

Page 179: El cajón de los poemas acrósticos

L lora el mundo ese momentoA l que sin querer se llega...

M alditos remordimientos;U rdimbre de la madejaE n que su hilo y el tiempoR ecuérdanos aquella viejaT étrica alarma, y lamentoE n cuanto la raya es aneja.

Archivo 14

L a sangre en sus venas saltó,A penas aquella barbarieS embrara pánico y horror...

T ubo ésta España mujeresR eñidas con un fascísmoE nconado y putrefacto,

Page 180: El cajón de los poemas acrósticos

C obarde, ruin y asesino,E n el grado más de facto.

R ebeldes y luchadoras,O stigadas a negarS us profundos ideales,A cusarían aquellos malesS úmmun hasta fusilar.

Archivo 15

E léctrico y sin corazón,L ocalizadas sus huellas

F alsas en tan vil decisiónA las que si hubiera razón,S ólo serían aquellasC on las que toda querellaI nutil, y sin parangón,S ería la cosa más bella:M order toda condiciónO bjetivo vital de ella.

Page 181: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 16

L uce poder y se jactaA únque sea pasajero.

D eprimente situación;I nutil el engreimientoC arente de toda razón,T ocará sólo momentosA los que una decisiónD ébil, tal vez sin acierto,U ltimará aquella acción,R ara, por culpa de un vientoA dlátere de perdición.

Page 182: El cajón de los poemas acrósticos

Archivo 17

L amento tener que decir,O lo que es lo mismo,S in duda, sentenciar,

D ado que así es cómo,I ndiscutiblemente,E sto se debe entender:Z aleemos la razón...

M irad que reza el principio:A mar a Dios sobre todo...N ada más ya es necesario.D el resto ya ni me ocupo;A unque no sé quién lo hizo,M e da la leve impresión,I ntentando reflexionarE n aquél tiempo el inspirado,N o estaría muy concentradoT ratando los diez preceptos;

Page 183: El cajón de los poemas acrósticos

O bservando ya el primeroS obra de seguro el resto.

S

A

N

T

I

A

G

O

Querido lector/a. Cómo habrás podido comprobar, me introduje en estas páginas vestido con mis mejores galas poéticas. Y lo hice para ti. Ahora, con el último verso me deshice de mi postrera prenda por lo que, desnudo, te ruego intentes vestirme de nuevo con cuanto has podido llegar a entresacar de este “cajón”. Arriba tienes la percha. Vístela con tus deductivas mejores galas. Tus versos pasarán a enriquecer nuestro Universal patrimonio cultural.Desearía que le hicieras una foto a la página y me la enviaras a tu comodidad.Vía WhatsApp al 689.936.940

Page 184: El cajón de los poemas acrósticos

Vía E-mail a: [email protected]ía correo Postal a: Santiago Martín Moreno, calle Asturias, 11 d.p. 41010 Triana-Sevilla- España.

O P I N I O N E S

Page 185: El cajón de los poemas acrósticos

Sobre su pelo, la nieveAbrió su mágico veloNimbando en su cerebeloTodo aquello que contieneIlusionada belleza,Amor a las tradiciones,Generosas emocionesO la enjundia y la pureza;

Mas su corazón encierraAlfarería de arte,Rancio abolengo del cante,Todo el duende de su tierra,Imaginación cofradeNacida de fe verdadera.

Muere por su barrio amadoOrlando de poesíaRincones de su pasado;En su verso de ambrosía,Nadie como SantiagoOrnó la trianería.

Agustín Pérez

Page 186: El cajón de los poemas acrósticos

Sembrador de la amistad,Andaluz y trianeroNatural de un GuadalquivirTransparente como el cielo,Inexcusable amigo míoAdmirador de lo bello,Guardián de hermosos versos;Obsesión por lo perfecto.

Mujer, sólo la suya;Alhaja es su Giralda...Rumor, el de castañuelasTalladas en su Triana.Imagen la de su Cachorro,Naturales los de Paula.

Monumento, su Torre del Oro,Olores los de Santa Ana...Recuerdos los de su infancia;Esperanza, su Esperanza.No sé que decirle más...¡Ojú, se me fueron las palabras!

Diego López

Page 187: El cajón de los poemas acrósticos

Sevillano y trianero,Aunque del barrio LeónNatural por sentimientoTajantes, claros, concretos,Intrínsecos de un pensar,Al que se le ve tragarGuadalquivires de amoresOndeando en su verdad.

Mas aún de aquella ayudaA la que él llegaráRizando un rizo de entrega,Tanta, que hasta reventarIrán llevando sus aguasNaves con un sólo afán,

Morir si fuera precisoOtorgando su verdad,Reiterando unas ideas,Esas que sólo al finalNadie más que su concienciaOtorgará o rebatirá.

Marcos Cañada